6-3 El Cadete vuelve a respirar a base de goles

El mejor arbitraje en muchos años

Tristemente estamos acostumbrados a padecer malos arbitrajes. Más aún esta temporada, y sobre todo en las categorías Cadete y Femenino, aunque en Senior también los hemos padecido. No obstante, cuando un buen árbitro hace acto de presencia, es también muy justo el resaltarlo, y en este partido ante el Naeva Cantillana disfrutamos de uno de los mejores arbitrajes de esta temporada. El señor colegiado estuvo a la altura de la categoría. Se mostró explicativo y participativo en todo momento, e incluso tomo partido en la maniobra necesaria cuando uno de nuestros jugadores en un lance de partido se quedó sin aire. Es por ello que consideramos justo reconocer la labor de David Gómez Beltrán, el mejor árbitro que ha pasado por El Coso en mucho tiempo.

Redacción

Ya lo decíamos en la previa, si había un encuentro para tomar impulso, ese era, sin lugar a dudas, el de este sábado ante el Naeva Cantillana. Un equipo que, aunque ha realizado alguna que otra proeza esta temporada, era presa fácil en un campo como el nuestro y con un equipo ávido de victorias y alegrías esta temporada.

Con esta premisa no extrañó en absoluto que en el primer cuarto de hora ya mandásemos en el marcador y con una ventaja de dos goles, los que consiguieron Jorge Gallego y Roberto. Los dos siguientes fueron del Naeva Cantillana, aunque uno en cada portería. Primero en la nuestra, recortando diferencias, y luego en la suya misma, ampliando la brecha en tres a uno. Antes del descanso el Guadalcanal se iría tranquilo con el cuatro a uno obra de Luis Javier.

En el inicio del segundo tiempo, de nuevo el infortunio se cebó con los visitantes, que encajaron un nuevo tanto en su propia portería. Jorge remataría el set con su segundo gol en el minuto 58. Con media hora por delante y el partido ya resuelto el Guadalcanal se relajó y fue entonces cuando encajó dos nuevos tantos, en el 84 y el 87. Dos goles que nunca supusieron peligro alguno para la victoria. Una victoria merecida y necesaria para nuestros intereses y también para nuestra moral antes de viajar esta semana a Brenes.