Premios narrativa Categoría 6° -7° Jacob Nicolás Patiño Ladino (Grado 6°) Liceo Santa Bernardita
La vida de una caricatura Cuando se habla de caricaturas, pensarán que se está hablando de caricaturas muy famosas, como Gaturro, Mafalda, etc., pero nunca se imaginarían que voy a hablar de una pobre caricatura, muy sufrida y desconocida por muchos. Mucho menos han de saber lo que le sucedió y que el único error que cometió fue el de ser creada. Esta es la triste historia de “Carcelotti”, un dibujo animado que nació, se crió y vivió detrás e las rejas de una cárcel, siempre viviendo desmotivado, con un tradicional overol a rayas en blanco y negro. Y lo más cruel, con su corazón vacío y relleno de tristeza.
Tenía muchas ganas de salir a conocer el mundo y vivir aunque fuera una sola aventura, sin esa terrible barrera de las rejas.
Este personaje fue creado por una de las más grandes compañías de cómics que, con su solo nombre, vendía lo que fuera, y de cuyo nombre no me quiero ni acordar.
Carcelotti comenzó a ver la luz un triste día de febrero de hace más o menos seis años. En el primer momento, y por la emoción de su publicación, que –suponía- le daría mucha fama, ya se sentía feliz. Pero, ¡oh sorpresa!, en vez de felicidad vivió tristezas, se sintió menospreciado, muy solo y cada día más triste.
Tenía solo una amiga, que era muy especial con él. Era la policía encargada de vigilarlo permanentemente pues se lo consideraba muy peligroso.
Con el pasar del tiempo, su historia fue desapareciendo, le quitaron a la policía que lo cuidaba y que se había convertido en su inseparable compañera. Carcelotti quedó solo, triste y vacío, nadie más existía en su cómic.