El nivel de los afluentes en Macuspana han empezado a preocupar
Crecida del Usumacinta pone en riesgo a 7 mil 500 familias de Macuspana El anuncio del aumento del nivel del río Usumacinta, el cual ha empezado a desbordarse en las partes bajas, pone en alerta a 7 mil familias asentadas en las riberas de los ríos que cruzan la geografía municipal, pero principalmente a quienes viven en la zona pantanosa que cubren 6 mil hectáreas de la reserva de los pantanos de Centla.
locales, que los habitantes deben extremar precauciones para evitar desgracias humanas y proteger sus propiedades, dado que el desbordamiento temprano de los ríos, provocará que más de 30 mil personas sean afectadas por las crecientes de los afluentes
El desborde del río dios mono, provoca que la pared de agua que genera y sus fuertes corrientes, provoquen que los ríos Tepetitán, Chilapa y Puxcatán, eleven sus niveles e inicien el proceso de inundación en toda la zona baja, al chocar contra la pared de agua que arrastra el Usumacinta. El anuncio de precipitaciones pluviales constantes, que se suma al estado del río a más de 19 centímetros sobre su escala crítica, hace suponer a las autoridades
Las tormentas que aún faltan podrían agravar el problema de inundaciones tempranas
Fallan luminarias en calles de Macuspana y ciudadanos temen asaltos La falta de luminarias en las principales calles de la ciudad, hace temer a la ciudadanía, tobos y asaltos violentos, derivado de que además, la vigilancia es nula en sitios oscuros. Personal del departamento de Servicios Municipales, encargados de dar mantenimiento a las instalaciones del alumbrado público, señalaron que se requiere un cambio generalizado de los arbotantes o luminarias por focos de ahorro, pues es
evidente que se consume mucha energía. Y muchos están fundidos y ello hace que las calles se vean como boca de lobo. Por otra parte indican ciudadanos, que en la cabecera municipal adolece de alumbrado, debido a que no funcionan las luminarias, principalmente en las calles Hidalgo, paseo Carlos Pellicer, 20 de noviembre y una decena más que solo tienen de adorno los faros en las banquetas.
Muchas calles del centro de la ciudad, permanecen oscuras y por ende el peligro de atracos aumenta ante la falta de vigilancia policial
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