Nicaragua: “Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido” La comunión de Ernesto Cardenal, los intelectuales y los curas doctrineros de la Teología de la Liberación con los “nueve apóstoles del sandinismo” Por Humberto Gómez Sequeira-HuGóS 29 de febrero de 2020
De izquierda a derecha: El encomendero, José Daniel Ortega Saavedra, el tal Danielito, y el cura doctrinero, Ernesto Cardenal.
“Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido”, proclama Ernesto Cardenal (el pueta Cardenal) en su poema, “Salmo I”. No obstante, el intelectual y cura doctrinero de la Teología de la Liberación1 (TL) se contradijo comulgando con los “nueve apóstoles del sandinismo” durante su membresía en el Frente Sandinista de Liberación (de la Corrupción) Nacional (FSLN) y cargo en la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional (JGRN) que el FSLN organizó como un “derivado democrático” de su constitución en el nuevo poder del Estado. El Gobierno FSLNJGRN fue el primer ejercicio de “dictadura parlamentaria” del soldado, José Daniel Ortega Saavedra, el tal Danielito, con el apoyo de la Dirección Nacional (DN) del FSLN y sus acólitos: los intelectuales2 y piadosos.
El pueta Cardenal creó su contradicción con su decisión de seguir las consignas de un partido político que conoció en la juventud de su corrupción: en su etapa de ejército guerrillero. Entonces, en 1974, Los Comandantes del FSLN (Los Comandantes) prendieron el fuego de la 1
“La teología de la liberación es una corriente teológica cristiana que se caracteriza por considerar que el Evangelio exige la opción preferencial por los pobres1 y por recurrir a las ciencias humanas y sociales para definir las formas en que debe realizarse aquella opción”. Wikipedia 2 La casta pequeña burguesa —conformada por académicos, escritores y poetas— que puso su birrete en la punta del fusil del FSLN durante su guerra contra la Dinastía Somocista y Católica (la Dinastía) e ignoró su represión como miembros del Gobierno FSLN-JGRN.