"Hay varios proyectos en carpeta", reconoció el ministro de Energía, Jaime Álvarez. Santa Cruz Produce pudo confirmar que hay convenios concretos con superficiarios en la zona de Deseado: se deben dar las condiciones para que las inversiones se concreten.
Si hay un marco regulatorio, la in S talación de una planta de hidrógeno e S tá cerca.
PROYECCIÓN
Hidrógeno: varias son las empresas que dan sus primeros pasos en Santa Cruz
Ya sea con la firma de acuerdos con los propietarios de las tierras o avanzando en los estudios de impacto ambiental, la posibilidad de avanzar en la producción de hidrógeno es concreta en la provincia. ¿Qué hace falta para concretarla?
El hidrógeno forma parte de ca‑ da rincón del universo, es el com‑ bustible con la máxima eficiencia energética por masa y cuando se utiliza no emite CO2. Pero no está presente “en soledad”, sino que de‑ be ser “extraído” de los otros ele‑ mentos con los que está enlazado, como, por ejemplo, del oxígeno en la molécula del agua. Para ello se requiere una fuente energética. El origen de la misma es la que da la calidad, en términos de transición energética.
Es que no todos los métodos de extracción son “limpios” y con emisiones “casi nulas” de CO2 Cuanto más limpia sea extracción, mejor calidad ambiental presenta‑ rá dicho hidrógeno. Santa Cruz tie‑ ne un enorme potencial en el más buscado del mundo: el hidrógeno verde, pero también está bien posi‑ cionada en lo que hace a hidróge‑ no azul (a base del gas).
A partir de la calidad ambiental, según la AIE (Agencia Internacio‑ nal de la Energía), el único método de extracción con un bajo impacto es producir la electrólisis del agua con la energía obtenida de fuentes renovables, como la eólica y la so‑ lar. Así se obtiene el denominado hidrógeno low carbon o “verde”. El mundo camina hacia la tran‑ sición energética, a partir de los compromisos globales que la ma‑ yoría de los países firmaron ante el cambio climático. Sin embargo, si bien Europa y algunos países de Latinoamérica han dado pasos agi‑ gantados, la producción de hidró‑ geno verde, por ahora, representa un porcentaje mínimo de la pro‑ ducción mundial
Interés
Ya en 2022, el interés en la Patagonia como líder de la tran‑ sición energética era claro. Des‑ de la definición del golfo San Jor‑ ge como la “Vaca Muerta del viento” hasta los primeros inver‑ sores con propuestas concretas en varias provincias, esa apuesta quedó clara. Sin embargo, pasó el tiempo y los proyectos aún no se han concretado.
En el caso de Santa Cruz, pro‑ vincia reconocida por la calidad de sus vientos, al igual que Chu‑ but, “proyectos hay muchos, hay muchas empresas y consultoras que están trabajando, que están haciendo estudios de impacto ambiental, estudios de instala‑ ción de torres de medición de vientos”, indicó a Santa Cruz Pro‑
duce el ministro de Energía de la provincia, Jaime Álvarez Reveló que “también hay con‑ sultoras que han trabajado con los propietarios de los estableci‑ mientos agropecuarios y ya han realizado acuerdos para la reser‑ va de superficie, con el fin de la instalación de parques eólicos”, señaló el funcionario. Marcó que toda la zona centro “tiene pro‑ yectos en carpeta” para la insta‑ lación de parques, ya sea para “la generación de energía eléctrica o para la producción de hidrógeno verde”.
En particular, Santa Cruz Pro‑ duce pudo confirmar que una empresa, tal como lo dijo el mi‑ nistro, se encuentra en la etapa de acuerdos con superficiarios, donde a futuro pretende instalar molinos eólicos y desarrollar una planta de producción de hidró‑ geno
Condiciones
¿De qué depende que los pro‑ yectos se transformen en inver‑ siones terminadas? En primer lu‑
gar, de que exista un marco regu‑ latorio adecuado. Hace dos años está pendiente que el Congreso avance en la llamada Ley de Hi‑ drógeno.
En el reciente Foro de Transi‑ ción Energético e Hidrógeno Ver‑ de, que se realizó en Comodoro Rivadavia, la diputada por Chu‑ but, Ana Clara Romero, admitió que en la actualidad hay tres pro‑ yectos que fijan un régimen de promoción para el hidrógeno ver‑ de, de tres partidos distintos. “A‑ demás está la Ley 26.123 de 2006, pero que está próxima a vencerse sin haber logrado su objetivo”. Y reconoció que aprobar el marco regulatorio es determi‑ nante.
De hecho, en dicho foro la sub‑ secretaria de Transición y Planea‑ miento Energético de la Nación, Mariela Beljansky, destacó el compromiso del Gobierno nacio‑ nal con establecer un marco nor‑ mativo que estimule la inversión y el desarrollo del hidrógeno ver‑ de que sea “claro y flexible”, aun‑ que no fijó fecha para el mismo.
Las zonas centro y norte son las más atractivas para la producción de hidrógeno.
Potencialidad
Además de los proyectos que buscan producir hidrógeno, San‑ ta Cruz puede liderar la genera‑ ción de energía limpia y atraer inversiones en ese sentido. “Hay posibilidad de generación con parques eólicos, de generación de macromoléculas fotovoltaicas, de generación solar, etc.”, detalló Jaime Álvarez sobre el escenario energético nacional.
Y remarcó que más allá de que en su momento se indicó que la capacidad de transporte (interco‑ nectado) está al borde del colap‑ so, para Álvarez “todavía hay ca‑ pacidad de transporte en el in‑ terconectado, si bien no es infinita, existe”.
Escenario global
En el mundo, hay más de 350 proyectos de hidrógeno que es‑ tán en marcha actualmente. De ellos unos 120 fueron anuncia‑ dos en 2021. Esto implica que miles de millones de dólares es‑ tán siendo invertidos en hidróge‑ no verde a nivel global.
De ahí las chances que se abren para Argentina, la Patago‑ nia y Santa Cruz en particular. El mundo camina hacia la transi‑ ción energética. El país tiene po‑ sibilidades de diversificar su ma‑ triz energética. El hidrógeno será una pieza fundamental en la transición energética y un impe‑ rativo frente al cambio climático, pero para ello debe sancionarse un marco de regulación y promo‑ ción del hidrógeno verde, de lo contrario, todo quedará en el pa‑ pel de las proyecciones
El hidrógeno verde, producido a partir del agua y el viento, es el más buscado en el mundo.
Por Irene Stur
INNOVACIÓN AGROPECUARIA
Advierten que el impacto de las sequías en pastizales es mayor al estimado
Un estudio mundial busca gestionar mejor los ecosistemas en un mundo que estará sometido a sequías más extremas. “Los impactos de las sequías extremas sobre los pastizales y arbustales a nivel mundial se han subestimado”, se afirma.
Por Juan I. Martínez Dodda jumartinezdodda@gmail.com
Según un artículo publicado en la norteamericana Procee‑ dings of the National Academy of Sciences (PNAS), al que tuvo acceso Santa Cruz Produce, las sequías cortas, pero extremas que se han venido dando en los últimos años, y las que vendrán, están afectando más de lo que se había cuantificado a los pastiza‑ les naturales.
La conclusión es el resultado final de más de 100 ensayos que se hicieron en distintos sitios del mundo (todos los continentes), uno de ellos Santa Cruz. Esta merma del alimento natural que tienen ovejas y vacas (al menos en nuestra región) también es un llamado de atención porque afecta las reservas de carbono mundial.
Los pastizales y arbustales se caracterizan por una alta varia‑ bilidad y frecuentes déficits de
La pérdida por sequía extrema corta excede con creces las reportadas anteriormente.
La sequía tiene consecuencias sociales y económicas bien documentadas.
precipitación y, por lo tanto, se espera que sean los más vulnera‑ bles al cambio climático. Además, los pastizales y matorrales alma‑ cenan más del 30% de las reser‑ vas mundiales de carbono y con‑ tribuyen significativamente a la variabilidad de los sumideros de carbono terrestres mundiales y de las concentraciones atmosfé‑ ricas de CO2. Por lo tanto, se pue‑ de esperar que los ecosistemas de pastizales y arbustales causen una mayor variación en el ciclo global del carbono, con sequías cada vez más intensas en el futu‑ ro.
Proyección
“La sequía tiene consecuen‑ cias sociales y económicas bien
documentadas, se espera que el cambio climático intensifique la sequía a niveles aún más extre‑ mos, pero debido a que tales se‑ quías han sido históricamente ra‑ ras, su impacto en el funciona‑ miento de los ecosistemas no se conoce bien”, indican en el traba‑ jo.
A modo de ejemplo, revelan en el estudio: “Impusimos experi‑ mentalmente el tipo más fre‑ cuente de sequía intensificada (una que dura aproximadamente 1 año) en 100 sitios de pastizales y matorrales distribuidos en seis continentes y descubrimos que la pérdida de crecimiento de las plantas aéreas, una medida clave de la función del ecosistema, era un 60% mayor cuando la sequía
a corto plazo era extrema”. Esta pérdida de función indu‑ cida por la sequía excede con creces las pérdidas reportadas anteriormente para pastizales y matorrales, lo que sugiere que los impactos globales de los au‑ mentos proyectados en la grave‑ dad de la sequía “se han subesti‑ mado sustancialmente”.
Cambio climático
El cambio climático está au‑ mentando la frecuencia y grave‑ dad de las sequías de corta dura‑ ción (1 año), la duración más co‑ mún de las sequías a nivel mundial. “Sin embargo, el impac‑ to de esta intensificación de la sequía en el funcionamiento de los ecosistemas sigue estando
Los sitios más secos y menos diversos, probablemente, son los más vulnerables.
mal resuelto. Esto se debe en parte a los enfoques muy dispa‑ res que los ecólogos han emplea‑ do para estudiar la sequía, la va‑ riación en la gravedad y duración de la sequía estudiada y las dife‑ rencias entre los ecosistemas en cuanto a vegetación, atributos edáficos y climáticos que pueden mediar los impactos de la esca‑ sez hídrica”, explican en el artícu‑ lo.
Para superar estos problemas e identificar mejor los factores que modulan las respuestas a la sequía, estandarizaron simular un solo año de sequía en 100 si‑ tios en todo el mundo
El trabajo
El trabajo de investigación de‑ mostró que la pérdida de la pro‑ ducción primaria neta aérea se redujo en promedio en un 35% en todos los sitios, con una dis‑ minución aún mayor en sitios que experimentaron sequías es‑ tadísticamente extremas.
“Nuestro experimento global demuestra, con un rigor sin pre‑ cedentes, que los impactos glo‑ bales de los aumentos proyecta‑ dos en la gravedad de la sequía
se han subestimado significati‑ vamente y que los sitios más se‑ cos y menos diversos probable‑ mente sean los más vulnerables a la sequía extrema”, enfatizan en el escrito final.
El conocimiento de cómo una sequía extrema de corto plazo puede alterar el funcionamiento de los ecosistemas es particular‑ mente importante para los pasti‑ zales y matorrales. “Estos ecosis‑ temas cubren más del 40% de la superficie terrestre libre de hielo y se encuentran en todas las regiones del mundo, se carac‑ terizan por una alta variabilidad y frecuentes déficits de precipita‑ ción y, por lo tanto, se espera que sean los más vulnerables al cam‑ bio climático”, explican en el tra‑ bajo.
“Además, los pastizales y ma‑ torrales almacenan más del 30% de las reservas mundiales de carbono y contribuyen signifi‑ cativamente a la variabilidad de los sumideros de carbono terres‑ tres y a las concentraciones at‑ mosféricas de CO2. Por lo tanto, se puede esperar que los ecosis‑ temas de pastizales y matorrales causen una mayor variación en el ciclo global del carbono con se‑ quías cada vez más intensas en el futuro”, concluyen.
De este trabajo internacional participó la EEA Santa Cruz con personal, pero también con su campo experimental Potrok Aike “El trabajo es relevante para los productores, ya que conocer el impacto de los eventos de se‑ quías sobre la producción de los pastizales permite diseñar accio‑
Los pastizales representan más de dos tercios del área continental del país.
nes de adaptación al cambio cli‑ mático”, explicó Pablo Peri, del Grupo Forestal Agrícola y Manejo del Agua (FAMA) del INTA. En cada sitio evaluado en el mundo se utilizó una infraestruc‑ tura de techos parcialmente cu‑ biertos con tiras transparentes para simular esa sequía extrema “Las precipitaciones medias anuales históricas registradas en el área de estudio permitieron es‑ timar que aproximadamente el 54% de las lluvias debería ser
interceptado, dado que este valor simula una sequía extrema, equi‑ valente a la lluvia que ocurre en 1 a 10 años en una serie de 100 años”, contaron desde INTA.
“Además de los factores abió‑ ticos enumerados anteriormente, se ha demostrado que la riqueza de especies de plantas influye en la magnitud de la respuesta del ecosistema a la sequía, siendo las comunidades más ricas en es‑ pecies más resistentes a la se‑ quía que las comunidades con
menor riqueza de especies”, expli‑ caron.
La mirada en Patagonia
Este estudio advierte sobre “la urgencia de abordar los efectos de las sequías extremas en los pastizales y arbustales y subraya la necesidad de políticas y accio‑ nes que mitiguen los impactos del cambio climático en estos ecosistemas críticos”, adelantaron desde INTA.
Este, el de la sequía y su evo‑
El cambio climático está aumentando la frecuencia y la gravedad de las sequías.
lución a lo largo de los años, es un tema que ocupa a organismos e instituciones como INTA, CO‑ NICET y la UBA, quienes durante tres años consecutivos evaluaron la sequía en 9 sitios específicos de Chubut Santa Cruz La Rioja Río Negro y Buenos Aires “En la Argentina, los pastiza‑ les representan más de dos ter‑ cios del área continental del país, se distribuyen desde climas ári‑ dos a mésicos y sostienen una de las actividades económicas más importantes, como la cría de ga‑ nado bovino y ovino”, expusieron en 2022.
Peri también referente en ese trabajo explicó que “en siete de los nueve sitios evaluados en‑ contramos efectos perjudiciales sobre la productividad del forraje durante el primer año experimen‑ tal de la sequía y en cinco de ellos se acentuó aún más el im‑ pacto hasta el final del experi‑ mento, lo que muestra qué tan graves pueden ser estos eventos”. En los más afectados, la produc‑ tividad forrajera disminuyó, en promedio, 50%.
“La alta reducción en la provi‑ sión de forraje que encontramos en estos pastizales, bajo sequías severas, sugiere que la presión del pastoreo debe reducirse sus‑ tancialmente durante y después de los periodos de falta de agua, ya que la combinación de aridez y perturbación del pastoreo ge‑ nera un efecto sinérgico que pue‑ de colapsar las poblaciones de plantas de especies forrajeras”, fi‑ nalizó Peri.
Se evaluó la sequía en 9 sitios específicos de Chubut, Santa Cruz, La Rioja, Río Negro y Buenos Aires.
Se utilizó una infraestructura de techos parcialmente cubiertos para simular sequía extrema.
La minería, más allá del RIGI: qué va a pasar con las minas en producción
El sector minero reclama incentivos especiales a la exploración para aquellos proyectos que no sean alcanzados por el RIGI. Para el Estado nacional, una medida así puede implicar un costo sin garantías, pero también contribuiría a reconstruir confianza inversora.
Dos escenarios diferentes describen a la minería metalífe‑ ra hoy: uno, que tiene un inmen‑ so potencial y rebalsa de expec‑ tativa, está demarcado por los grandes proyectos de cobre que el sector tiene en carpeta y tam‑ bién por los de litio, aunque en este caso se advierten otras aris‑ tas que lo condicionan por la baja del precio del mineral en diciem‑ bre.
En tanto, el otro escenario apenas se menciona y es donde se enlistan las minas de oro y de plata que están en producción en una etapa madura; casi todas es‑ tán en una fase muy cerca del cierre, pero son, en definitiva, las que sostienen hoy el grueso de los ingresos de divisas por ex‑ portaciones de la minería del país.
El primer escenario se plasmó la semana pasada en la Expo San Juan Minera, organizada por Pa‑ norama Minero, que convocó a más de 13.000 personas y a unas 300 empresas, durante dos jornadas colmadas de activida‑ des diversas. Con ese marco, el vicepresidente de la Cámara Ar‑ gentina de Empresas Mineras (CAEM), Franco Mignacco, enu‑ meró los principales proyectos de cobre y de litio, que demandan in‑ versiones por más de 25.000 millones de dólares, y aseguró, en referencia al polémico Régimen de Incentivo para Grandes In‑ versiones (RIGI) que se incluye en la propuesta de Ley Bases, que: “Estamos convencidos de que va a traer mucho más desa‑ rrollo”.
Los proyectos en producción se rigieron por la Ley de Inversiones Mineras.
Leyes necesarias
De acuerdo con el diagnóstico de Mignacco, Argentina ha vul‑ nerado la Ley de Inversiones Mi‑ neras, la 24.196, en reiteradas oportunidades. “Lo que ha causa‑ do que hoy tengamos un pipeline de proyectos muy buenos en esta nueva etapa de la electromovili‑ dad y la transición energética, pero no podemos ir hacia adelan‑ te porque no tenemos reglas cla‑ ras”, señaló y remarcó en repre‑ sentación de la CAEM: “Creemos que el país está sumergido en una crisis de confianza y clara‑ mente el régimen de incentivo a las grandes inversiones contri‑ buiría a poder reconstruir esa confianza que hemos perdido en
“Se requiere un incentivo especial para la exploración”.
FRANCO MIGNACCO, VICEPRESIDENTE CAEM
el mundo”.
El secretario de Minería de la Nación, Luis Lucero, también ha‑ bló del RIGI. “Es una Ley de In‑ versiones Mineras mejorada, ampliada e incluso protegida de erróneas interpretaciones como las que sufrió en nuestro sistema judicial el verdadero sentido de la
estabilidad fiscal”, declaró el abo‑ gado especializado, exsocio del estudio Marval O’Farrell Mairal, y remarcó: “Creo que el RIGI es una expresión de lo que el mun‑ do inversor está acostumbrado a ver y experimentar en países en que se logró acumular el capital que nos falta”.
¿Es suficiente con el RIGI? Des‑ de la CAEM, las empresas recla‑ man además algún mecanismo o “incentivo especial a la explora‑ ción para aquellos proyectos que no queden alcanzados por la RIGI”, es decir, para las minas de oro y plata que están en producción, que son las que con el impulso de la Ley de Inversiones Mineras han to‑ mado la iniciativa y tienen un ca‑
En Santa Cruz, la mayoría de las minas está bastante cerca de su etapa de cierre.
mino ya recorrido en el país. Aquí aparece el segundo esce‑ nario descrito. Y en este caso es Santa Cruz la que lo ilustra muy bien, sin proyectos cerca de la línea de la construcción y con la mayoría de las minas cerca de su etapa de cierre. Si bien la provincia fue men‑ cionada en ocasiones y la secreta‑ ria de Minería local, Nadia Ricci, recorrió los pasillos y stands, la principal productora de minerales del país no tuvo participación ofi‑ cial en la agenda de la megaexposi‑ ción de San Juan, como sí la tuvie‑ ron Salta, Jujuy, Catamarca e inclu‑ so Mendoza, por ejemplo.
Al respecto, sobre las minas de oro y de plata Mignacco señaló que representan “el 70% de las expor‑ taciones nacionales con precios internacionales muy buenos” y es‑ tán atravesando una “situación compleja” donde los proyectos es‑ tán en etapa de casi llegar al final de su vida útil. “Es imprescindible seguir incentivando la explora‑ ción para poder extender la vida de estos proyectos”, aseveró en su discurso.
Por su parte, Lucero demostró conocer la situación y compartir el diagnóstico, pero no adelantó aún ningún tipo de medida que pueda revertir ese escenario de declino previsible.
Si bien una medida de incentivo en estos casos, que implica una ba‑ ja de retenciones, es vista como un costo para el Estado nacional sin garantías de éxito, es un gesto que contribuiría a reconstruir, en pala‑ bras de Mignacco, “esa confianza que hemos perdido” y revertir el daño que, según Lucero, hicieron “erróneas interpretaciones”. En defi‑ nitiva, atender las demandas de las empresas que sí han apostado por la minería argentina y vieron vul‑ neradas las reglas establecidas “en reiteradas oportunidades”, es un complemento necesario para que funcione el tan ansiado RIGI.
Por Sabrina Pont
El vicepresidente de la CAEM, Franco Mignacco, planteó la necesidad de apoyar la exploración metalífera.
Para la industria, más allá del RIGI, es necesario un programa de incentivo a minas maduras.