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ATENDIENDO LA INVASIÓN DEL PEZ LEÓN EN VENEZUELA: PLAN DE ACCIÓN REGIONAL EN LAS COSTAS DE CARABOBO
by FUNDATUN

Julia Álvarez Barco – AKEHE / BioMaC-UC - 15 de julio de 2025
INVASIÓN DEL MEDIO MARINO
Los ecosistemas marinos son complejos y altamente sensibles a la presencia de elementos antropogénicos, derivados de acciones voluntarias e involuntarias, que actúan como contaminantes químicos, físicos o biológicos; los cuales se convierten en las principales causas de enfermedades y afecciones que deterioran la salud de estos ecosistemas. Entre los ejemplos de contaminación biológica está la presencia de organismos (plantas, animales, hongos, microorganismos) que son introducidos fuera de su área de distribución natural; los cuales, al establecerse y propagarse, causan impactos negativos en el ecosistema, alterando su estructura, su funcionamiento, su biodiversidad y la economía de poblaciones humanas costeras dependientes de sus servicios ecosistémicos (pesca, turismo, etc.). Estos organismos exóticos que, por acción humana intencional o accidental llegan a donde naturalmente no habitaban, logran adaptarse y reproducirse con éxito, en la nueva localidad o región, pasan a ser denominadas invasoras. Aunque es bien sabido que la introducción de especies en todo el mundo se ha observado durante siglos, en las últimas décadas este fenómeno se ha intensificado, aumentando el interés y estudio para tratar de comprender los factores de éxito, e impulsar políticas y medidas para evitar o reducir sus impactos.
Los ecosistemas marinos son altamente vulnerables a la introducción de especies exóticas capaces de convertirse en invasoras, pues en ausencia de competidores naturales y/o por ausencia de especies controladoras (depredadoras), se dispersan de manera rápida y descontrolada en la nueva región, abarcando grandes extensiones y generando el desplazamiento de la fauna local; con lo cual generan fuertes impactos negativos a diferentes niveles. Dos de las causas más conocidas de estas invasiones de organismos exóticos en el medio marino son su llegada en las aguas de lastre de buques mercantes y la liberación de organismos exóticos que son exportados por las industrias de acuarios o de acuicultura.
PROBLEMÁTICA DEL PEZ LEÓN

La invasión se relaciona a la introducción de un organismo popular en la acuariofilia, muy voraz, originario de las aguas del Indo-Pacífico y conocido de forma genérica como Pez León; el cual se ha extendido rápidamente por todo el océano Atlántico Occidental y el Caribe desde finales del siglo XX. Es evidente que a pesar de las diversas teorías que sugiere la comunidad científica abocada a su estudio, la más acertada es la relacionada con la acción antropogénica; que ha favorecido su dispersión, ya sea de forma voluntaria o casual, contribuyendo al transporte e introducción de estos organismos a los nuevos hábitats. Según un estudio del 2007, la población invasora está compuesta principalmente de dos especies taxonómicas difíciles de identificar por características visuales; siendo estos organismos mayoritariamente pertenecientes a la especie Pterois volitans, con una pequeña cantidad de Pterois miles.
Venezuela, con su extensa costa caribeña y rica biodiversidad marina, se ve afectada con esta invasión del Pez León (complejo Pterois volitans/miles) desde el año 2009, cuando fue su primer reporte oficial. Dada la rápida dispersión y la voracidad de estos organismos, se han convertido en un peligro para los ecosistemas marinos y la economía pesquera del país.
La carencia de investigaciones en materia de invasiones biológicas es un factor limitante para poder generar e implementar políticas que prevean, mitiguen o controlen la introducción de especies marinas exóticas; generando riesgos significativos para la bioseguridad. Se espera contribuir con la difusión del problema, así como con una consecuente multiplicación de esfuerzos y apoyos para atacar la problemática derivada de la presencia de estor organismos invasores.
CONOCIENDO AL EXÓTICO INVASOR
En Venezuela aún no se tiene claro a la fecha si ambas especies están presentes, por lo que se generalizará al uso del término “Pez León (complejo Pterois volitans/miles)” cuando no haya una discriminación especifica de la especie; siendo éstos organismos que pertenece a la familia Scorpaenidae y que llevan glándulas de veneno en la base de algunas de sus espinas, donde radica una peligrosidad añadida a la invasión. Como se mencionó anteriormente, ambas especies son originarias del Indo-Pacífico y no solo han invadido los ecosistemas costeros en el Atlántico occidental, sino que se han penetrado a las aguas del Mediterráneo.

Al principio de la invasión se reportó una distribución vertical de unos pocos metros de profundidad; sin embargo, su capacidad de adaptación le ha permitido ocupar zonas más profundas. Frecuentemente se encuentra entre los intervalos de 10 a 20 metros de profundidad; no obstante, ha llegado a ser reportado en el rango de los 200 a 300 m de profundidad (zona batial) en el atlántico occidental.

Sus características externas (morfología): El color del cuerpo es rojo pálido a blanquecino, con aproximadamente ocho anchas barras marrones a negruzcas, cada una separada por barras oscuras delgadas. Posee una cabeza grande y espinosa con barras de colores similares a las del cuerpo y barbillas ramificadas por debajo de la mandíbula inferior, una frente pronunciada con un largo tentáculo sobre el ojo. Su cuerpo esta conformado por escamas ovaladas o elípticas con borde liso y es moderadamente comprimido en su plano lateral. Su aleta dorsal posee una primera porción de espinas largas (radios duros) con membranas plumosa y una segunda porción de radios blandos detrás de ella. Sus aletas pectorales son de gran tamaño, su largo alcanza fácilmente el final de la base de la aleta anal, y con radios no ramificados; la aleta anal posee tres espinas. Los bordes terminales de las aletas son blancos a traslúcidas (puntas blancas). La confusión en la identificación de las dos especies es porque comparten características morfológicas, ciclos de vida, hábitos y potencial de dispersión similar; aunque genéticamente se distinguen.
La literatura propone coincidencias morfológica en relación a que poseen el mismo número de espinas en las porciones duras de sus aletas (dorsal, pélvica y anal). En Pterois volitans se pueden contabilizar de 9 a 12 radios en la porción blanda de su aleta dorsal, con usualmente un número de 11 radios, y de 6 a 8 en la aleta anal, siendo usual 7 radios; mientras que por el lado de Pterois miles suelen contabilizarse de 9 a 11 radios en la porción blanda de su aleta dorsal, con usualmente un número de 10 radios, y de 6 a 7 radios en la porción blanda de la aleta anal, con usualmente 10 radios. Ambas especies presentan los mismos números de espinas (radios duros) en sus aletas y glándulas con toxina en la base de las aletas dorsal, pélvica y anal; siendo que las picaduras no suelen ser fatales pero causan dolor intenso, dependiendo de la sensibilidad del afectado. Tanto las tallas máximas como los pesos máximas alcanzados por ambas especies son bastante similares, oscilando entre los 40 a 50 cm; siendo P. volitans el que tiene el reporte de mayor peso (diferencia cercana al 40%) y longitud total (diferencia cercana al 5%). Esta última especie tiene aletas pectorales más largas y los puntos, sobre la aleta dorsal blanda, son más grandes en que en P. miles.

Hábitos y ciclo de vida: Originariamente su hábitat natural en el Indopacífico son primordialmente los arrecifes en las aguas marinas cálidas de las zonas tropicales, pero en el Caribe ha llegado a ocupar otros ecosistemas; como son: lagunas costeras, manglares y refugios artificiales de concreto. Suelen ser organismos solitarios, lentos y que tienden a buscar permanecer disimulados con su entorno (crípticos), pese a su coloración y patrones llamativos que advierten de su peligrosidad (coloración aposemática). Son depredadores generalista, activos y voraces que se alimenta principalmente de alevines y adultos de tallas pequeñas; incluyendo presas que poseen una talla mayor que la mitad de su propio tamaño. Los análisis genéticos de contenidos estomacales han revelado una gran diversidad de especies y clases de tamaño; lo cuales incluyen importantes grupos de interés comercial y ecológico, así como crustáceos, moluscos, equinodermos y hasta ejemplares de su misma especies (canibalismo).
Respecto a la reproducción, el Pez León mantiene sexos separados; siendo que las hembras llegan a la etapa reproductiva cuando alcanzan los 15 cm de longitud (aprox. al año de vida) y los machos cuando tienen entre 9 y 16 cm. Al llegar el momento de reproducción los machos se agregan con varias hembras y forman agrupaciones de 3 a 8 individuos. La reproducción es externa; siendo que la hembra suelta los huevos, el macho los fertiliza y se forma una masa gelatinosa que puede durar tres días en la superficie. Se estima que depositan entre 2.000 y 15.000 huevos cada cuatro días durante todo el año. La eclosión ocurre 36 horas después de la fecundación y 2 a 3 días después las larvas son capaces de nadar y alimentarse del plancton durante un promedio de 26 días. Llegan a ser juveniles después de 30 a 45 días. La etapa juvenil es de un año alcanzando 100 mm de longitud. Hay registros de que pueden vivir 10 años en cautiverio.
EL ÉXITO DE SU INVASIÓN EN EL GRAN CARIBE

El éxito de la invasión del Pez León (complejo Pterois volitans/miles) se apoya en su capacidad de adaptación a los nuevos ambientes, un rápido crecimiento, una reproducción durante todo el año y una elevada cantidad de crías en cada reproducción; lo que ha contribuido al rápido establecimiento y dispersión. La ausencia de depredadores naturales en esta nueva área de distribución es también un causal de su abundante proliferación; adicional a que una dieta variada y oportunista, así como un comportamiento "ingenuo" de las presa en el Caribe en comparación con las de su área de distribución original, explica una alta eficiencia en proveerse de ingentes cantidades de alimento necesarias para su rápido desarrollo.
IMPORTANCIA DE UN PLAN DE ACCIÓN
La Convención sobre la Diversidad Biológica define especies invasoras a aquellas especies, subespecies u otros taxones (esto incluye a los gametos, semillas, huevos, propágulos), que se introducen fuera de su distribución natural, pasada o presente, que pueda sobrevivir y subsecuentemente reproducirse; es bajo esa premisa que el Pez León (complejo Pterois volitans/miles) está catalogado como una especie invasora.
Está claro que la consecuencia principal es la pérdida de la biodiversidad y hasta daños irreversibles en el ecosistema. Su presencia está causando mucha presión en la ruta natural evolutiva en especies nativas claves por la competencia por los recursos; por ejemplo exclusión, desplazamiento, depredación y, por último, extinción de las especies nativas o sus presas. En una investigación, del año 2012 en Bahamas y citada por Morris (2013), determinaron que el Pez León redujo la cantidad en peso (biomasa) de las presas arrecifales autóctonas disponibles en un promedio del 65% en el lapso de dos años.

Su invasión también plantea una importante amenaza socioeconómica para la región; ya que genera importantes pérdidas para las comunidades costeras que aprovechan los servicios ecosistémicos que le provee el ambiente. El primero de ellos, la pesca, que observa un declive de especies marinas de importancia comercial; entre ellas algunas variedades de peces que se consumen y que constituyen una fuente importante de proteína para las comunidades costeras localmente o que se comercializan y son fuentes de ingresos para las mismas. Por otro lado el turismo y las propias poblaciones costeras, que no solo se ven afectadas por la disminución de la biodiversidad en áreas de buceo, sino que se exponen a afecciones a la salud humana, causando alergia o daños físicos; por ejemplo la toxina del Pez León que entre en contacto con un buzo, bañista.
Adicionalmente se deben considerar muchos otros daños a futuro, pues pueden tender a exacerbar otros factores presentes como el cambio climático, la contaminación y la pérdida de hábitats por efectos de la actividad humana.
En la actualidad se estima altamente improbable la erradicación del Pez León con las más recientes tecnologías disponibles; es por lo que la mejor manera de abordar el problema parece ser la promoción del control de sus poblaciones por parte de los usuarios de cada lugar. El establecimiento de medidas de control viables han dado buenos resultados en determinadas zonas en las que se ejerce una supervisión estricta del manejo del problema; tales como los parques naturales marinos.
ACCIONES INICIALES ACOMETIDAS DE CARA A UN PLAN DE ACCIÓN

A través de la colaboración de una multiplicidad de instituciones como el Instituto Nacional de los Espacios Acuáticos (INEA), a través de la Capitanía de Puerto Cabello, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, el Departamento de Biología de la Facultad Experimental de Ciencias y Tecnología de la Universidad de Carabobo, el Instituto Socialista de la Pesca y Acuicultura (INSOPESCA) y el Centro Nacional de Investigación de Pesca y Acuicultura (CENIPA) del Ministerio de Pesca y Acuicultura (MinPESCA), el Instituto Nacional de Parques (INPARQUES), el Ministerio de Ecosocialismo (MinEC), Empresas de Buceo Comercial y Recreativo, pescadores y lancheros de la zona, agrupaciones de posaderos y restaurantes, Alcaldía Bolivariana del Municipio Puerto Cabello y la comunidad de GASTRO encuentro, se realizaron las tres primeras jornadas de captura y degustación del Pez León. La primera jornada, correspondiente al “Torneo de Pesca y Captura del Pez León para Degustación y Generación de Conciencia” se realizó los días 21 y 22 de enero de 2023; la segunda, “II Torneo de Pesca y Captura del Pez León 2023”, se realizó los días 21 y 22 de julio 2023; y la tercera, asociada a la “III Jornada de Captura Científico Gastronómica del Pez León 2024” abarcó del 28 al 30 de junio 2024 (tres días). Todas se realizaron en el municipio Puerto Cabello (edo. Carabobo), abarcando las aguas del Parque Nacional San Esteban y sus adyacencias.
Estas jornadas tuvieron un enfoque no solo de promocionar el consumo del pez invasor, sino que sirvió para realizar un levantamiento de información científica orientada a brindar conocimiento de las actividades del pez invasor en el área. Cada jornada tuvo una duración de dos días de actividad y durante las mismas se lograron capturar un promedio de 400 individuos; a los cuales se les tomaron las medidas, fueron pesados y se les extrajo el estómagos para evaluar el contenido y analizar de que se alimenta (su dieta) en el área. El levantamiento de información de los puntos específicos de captura se vio dificultado por las características de las jornadas; que al ser un torneo de pesca, los equipos participantes se centraron en ganar y extraer la mayor cantidad de ejemplares de la especie invasora.


Posteriormente, se dio paso a la competencia gastronómica y todos los ejemplares capturados fueron repartidos equitativamente en restaurantes locales que participaron; las propuestas culinarias presentadas fueron evaluadas por prestigiosos chef del estado Carabobo y de la capital del país.
Las dos primeras jornadas sirvieron para estandarizar el método de recolecta de información y atraer la atención del público y las instituciones; ya con la tercera jornada se logró la aprobación de un proyecto de tesis de pregrado, en el Departamento de Biología de la Facultad Experimental de Ciencias y Tecnología de la Universidad de Carabobo, que actualmente está en desarrollo, con la información recabada en las jornadas realizadas. A futuro, se espera poder realizar una cuarta jornada, hacia noviembre del presente año, y replicar las experiencias en las zonas costeras del Parque Nacional Henry Pittier y Parque Nacional Morrocoy para el próximo año 2026.

Un primer análisis rápido de los resultados muestra que, a pesar de que una disminución de las captura entre las dos jornadas del año 2024 podría apuntar a una reducción del tamaño poblacional de esta especie en el área, los esfuerzos de captura no fueron iguales en ambos eventos; siendo el número de grupos de buceo mayor en la jornada de enero (12 equipos) que en el de julio (8 equipos). Al analizar los datos de captura obtenidos a la luz del esfuerzo realizado, los resultados se muestran similares en ambos eventos de captura; lo que puede dar indicios de que las poblaciones del Pez León lograron recuperarse en los 6 meses transcurridos entre esos dos eventos de 2024. Estos resultados preliminares sugieren hacer los eventos de captura más frecuentes (mensual o bimensualmente), a fin de regular las poblaciones de esta especie invasora en las aguas costeras. Datos más detallados y analizados están en proceso; por lo que sólo estarán disponibles hasta que sean publicados por la tesis de grado actualmente en desarrollo.
Los resultados iniciales del contenido estomacal en las diferentes jornadas de captura científico-gastronómica realizadas concuerdan con los resultados observados en la literatura; donde se encuentra una gran variedad de especies de peces, así como invertebrados de importancia comercial como crustáceos y moluscos; siendo que la mayoría de las especies encontradas en este caso son peces de importancia ecológica en los ecosistemas arrecifales, principalmente herbívoros. Esto reafirma la importancia del control de la especie invasora, pues los herbívoros encontrados en su dieta tienen como objetivo ecológico principal mantener el control de las macroalgas en la zona arrecifal; contribuyendo con el desarrollo de las especies formadoras de arrecife.
PROPUESTA DE UN PLAN DE ACCIÓN REGIONAL
El equipo de investigadores y estudiantes abocados a la realización de las jornadas y la adquisición de los datos de interés, en conjunto con el Laboratorio de Biología Marino Costera (BioMaC) de la Universidad de Carabobo y la Red Venezolana de Profesionales por la Naturaleza “Akehe” proponen continuar con el estudio exhaustivo para:
· Cuantificar la distribución y abundancia del Pez León (complejo Pterois volitans/miles).
· Evaluar los impactos ecológicos y socioeconómicos de este invasor.
· Diseñar estrategias de manejo y control, basadas en la evidencia científica, para este invasor; tomando como ejemplo las campañas de captura científico gastronómica.
· Promover el potencial gastronómico del invasor a los efectos de elevar su demanda comercial como mecanismo de control.
· Generar mesas de trabajo para analizar, proponer y mejorar las políticas públicas para el control, captura y manejo del invasor.

Sin duda que la propuesta puede y debe ser escalable a toda la región costera del país sujeta a la presencia del invasor. En tal sentido se considera que avanzar hacia un Plan Nacional de Acción se debe contar con el apoyo y las coordinaciones de: los organismos públicos, relacionados al área marina costera, como MinPESCA y MinEC (incluidos los entes adscritos competentes en la materia), el INEA y sus Capitanías de Puerto, alcaldías y gobernaciones con zonas costeras, entre otras; las organizaciones e instituciones científicas y ambientales, públicas y privadas, como universidades, centros de investigación, Organizaciones No Gubernamentales (ONG’s), entre otras; así como los actores de las comunidades costeras (pescadores, lancheros, etc.) y prestadores de servicios (buzos, operadores turísticos, etc.) afectados. Esto ayudará a generar y divulgar información, realizar investigaciones y fomentar la participación ciudadana en la conservación de nuestros ecosistemas marinos; lo cual es de gran relevancia para el país, ya que permitirá:
· Generar información científica fundamental para la toma de decisiones y elaboración de políticas públicas en materia de conservación.
· Fortalecer la colaboración entre la academia, el sector productivo y las comunidades locales.
· Contribuir a la protección de la biodiversidad marina y los servicios ecosistémicos que estos proporcionan.
BASES LEGALES DE PARA UNA PROPUESTA DE UN PLAN DE ACCIÓN REGIONAL

El marco normativo del Plan de Acción Regional para las Costas Marinas del Estado Carabobo está en concordancia con lo contemplado en las siguientes leyes de la República:
· Ley de Gestión de la Diversidad Biológica (Gaceta Oficial Nº 39.070 del 1 de diciembre de 2008):
- Establece el marco para la gestión de la diversidad biológica en Venezuela.
- Define especies autóctonas y especies exóticas invasoras. (Capítulo II, Artículo 12).
- Autoriza el exterminio de especies exóticas invasoras para proteger los ecosistemas (Articulo 80)
- Requiere el seguimiento del estado de la diversidad biológica y la evaluación de impactos ambientales (Artículo 108)
· Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley de Pesca y Acuicultura (Gaceta Oficial Nº 6.150 extraordinario del 18 de noviembre de 2014): dada las injerencias del Ministerio de Pesca y Acuicultura (MinPESCA) y sus órganos subsidiarios en la atención del problema, desde la normativa pesquera para el aprovechamiento hasta el control para la captura y comercialización de este tipo de especies invasoras acuáticas.
· Resolución Conjunta de los Ministerios del Poder Popular para el Ecosocialismo y de Pesca y Acuicultura mediante la cual se dictan las Normas para el manejo, control y erradicación de la especie exótica invasora Pez León (Pterois ssp), en todo el Territorio Nacional (Gaceta Oficial Nº 42.787 de fecha 28 de diciembre de 2023). Establece normas para el manejo, control y erradicación del Pez León en todo el territorio nacional.
- Promueve la investigación científica en colaboración con universidades e institutos (Articulo 13);
- Autoriza la pesca del pez león por buzos certificados con equipos autorizados (Articulo 9 y 10);
- Permite el uso de los individuos capturados para fines científicos y académicos (Articulo 6).
· Ley del Instituto Nacional de Parques (Gaceta Oficial Nº 2.290 extraordinario del 21 de julio de 1978), es importante dar participación a este instituto, porque en las costas del estado Carabobo se encuentra el Parque Nacional San Esteban y sus áreas marinas.
- Otorga a INPARQUES la responsabilidad de administrar y conservar los parques nacionales.
- Prohíbe actividades que dañen los objetivos de los parques.
- Permite acciones de manejo de recursos, incluyendo la erradicación de especies exóticas invasoras, como el pez león, dentro de los parques nacionales.
· Ley Orgánica para la Planificación y Gestión del Territorio (Gaceta Oficial Nº 38.264 de fecha 2 de septiembre de 2005): establece los principios y normas para la planificación y gestión del territorio nacional, incluyendo los parques nacionales, junto a los instrumentos aplicables; específicamente en lo contemplado en desde el Capítulo IX, donde se establece lo relativo a las “Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Uso Especial”, hasta el Capítulo XII, que enmarca lo relativo a “Los Planes de Ordenación del Territorio de las Áreas Naturales Protegidas y de Uso Especial”.
· Reglamento Parcial de la Ley Orgánica para la Ordenación del Territorio sobre Administración y Manejo de Parques Nacionales y Monumentos Naturales (Gaceta Oficial N° 4106 de fecha 9 junio de 1989): define los objetivos y lineamientos para la conservación, investigación, educación, recreación y turismo dentro de los parques nacionales y monumentos naturales.
· Plan de Ordenamiento y Reglamento de Uso del Parque Nacional San Esteban (Proyecto): La propuesta, establecida en base a la Ley y el Reglamento indicado previamente, tiene como objetivo primordial la protección y conservación de los recursos naturales y el equilibrio ecológico para las generaciones presentes y futuras. Entendiendo que el parque se encuentra enclavado en las costas carabobeñas, sus directrices principales establece:
- La preservación y conservación de los ecosistemas marinos e insulares del parque como objetivo fundamental.
- Implementar acciones que conlleven al manejo integral de los recursos naturales del Parque Nacional, los cuales pueden estar afectados por la introducción de especies exóticas con un programa de prevención y control de plagas y especies exóticas, invasoras e introducidas; en donde se enmarca la erradicación del Pez León (complejo Pterois volitans/miles).
- Promover la celebración de acuerdos de carácter interinstitucional y comunitario que favorezcan la protección y conservación de los recursos naturales.
Estas leyes y resoluciones proporcionan el marco legal para las acciones de control de la invasión del Pez León (complejo Pteroisvolitans/miles), respaldando la investigación científica, la participación de buzos certificados y la utilización de los individuos capturados para fines educativos y de investigación. Sin embargo, se insta a las instituciones a generar leyes para contribuir y facilitar a la comercialización de estas especies invasoras.
CONCLUSIÓN Y RECOMENDACIONES EN EL CONTROL REGIONAL DEL PEZ LEÓN
Como ya se ha detallado con anterioridad, Venezuela es un país megadiverso con una vasta extensión marino costera caribeña; donde posee ecosistemas marinos emblemáticos y una arraigada cultura pesquera que dependen directamente de la salud de sus aguas. La invasión de estos organismos voraces, depredadores y de rápida reproducción está amenazando el delicado equilibrio marino de los ecosistemas naturales presentes, impactando negativamente a las poblaciones de especies nativas de importancia comercial y ecológica. La proliferación del Pez León (complejo Pterois volitans/miles) en las costas venezolanas, específicamente en el estado Carabobo, representa un desafío significativo para esa biodiversidad marina y las comunidades costeras aledañas.
Las jornadas realizadas, que apuntalan un Plan de Acción Regional para las Costas Marinas del Estado Carabobo, se llevaron a cabo en la colaboración de múltiples instituciones públicas y privadas y demostraron ser una herramienta efectiva para abordar esta problemática. Las actividades de captura y degustación no solo han permitido extraer un número considerable de ejemplares, sino que también han servido para sensibilizar al público y a las instituciones sobre la urgencia de la situación. Los datos preliminares de los análisis de las capturas y de la dieta de los ejemplares capturados confirman al Pez León como un invasor depredador, oportunista y voraz; cuyo consumo de peces, crustáceos y moluscos, incluyendo especies clave para el ecosistema arrecifal y el interés pesquero, subraya la necesidad imperante de su control. Si bien las jornadas muestran un camino prometedor, la capacidad de recuperación de la población del Pez León en periodos cortos resalta la persistencia del desafío. La estandarización de métodos y la colaboración con instituciones académicas y científicas, como la Universidad de Carabobo y la Red Venezolana de Profesionales por la Naturaleza “Akehe”, son pasos cruciales para consolidar y aumentar la base del conocimiento científico de este plan y asegurar su sostenibilidad a largo plazo. En definitiva, el control del Pez León no es solo una cuestión ambiental, sino también social y económica; el cual requiere un compromiso continuo y la participación activa de todos los sectores y personas involucradas.

Es necesario sumar más voluntades y ayudas, por lo que se ha vuelto necesario difundir las metas y logros que se persiguen, tanto en la realización de jornadas y actividades como de los resultados que están arrojan; así como de incorporar a todos los actores que puedan tener injerencias en la salud de los océanos. En este último sentido, se presentaron algunos de los resultados obtenidos y el Plan de Acción Regional para las Costas Marinas del Estado Carabobo en el marco del X Congreso Internacional de Derecho Marítimo realizado en la Isla de Margarita (Nueva Esparta - Venezuela); el cual se realizó del 27 al 29 de noviembre del año 2024.


REQUISITOS PARA EL ÉXITO DEL PLAN REGIONAL PARA EL CONTROL DEL PEZ LEÓN
Para consolidar los avances logrados y garantizar la efectividad del Plan de Acción Regional para las Costas Marinas del Estado Carabobo en el control del Pez León (complejo Pterois volitans/miles), se proponen las siguientes recomendaciones:
· Intensificar la frecuencia de las Jornadas de Captura: Los resultados sugieren que las poblaciones de pez león se recuperan rápidamente; por lo que es fundamental aumentar la frecuencia de las jornadas de captura a una base mensual o bimensual. Esto permitirá ejercer una presión mayor y constante sobre la población invasora, evitando su resurgimiento y reduciendo su impacto en los ecosistemas locales.
· Estandarizar y optimizar los Esfuerzos de Muestreo: Para obtener datos más precisos y comparables, es crucial que en futuras jornadas se estandaricen los protocolos de muestreo. Esto incluye asegurar esfuerzos de captura similares, así como mejorar el levantamiento de información sobre los puntos de captura; a los efectos de obtener una caracterización más exhaustiva del hábitat usados y el alcance de la distribución de la invasión.
· Fomentar la Participación Comunitaria y la Concienciación: Continuar y expandir las iniciativas de sensibilización dirigidas a las comunidades pesqueras y turísticas. Es vital educar sobre la importancia del control del invasor, las técnicas de captura segura y el valor culinario de la especie; así como promover su consumo, generando un incentivo económico para su captura continua y control de la población.
· Expandir la Investigación Científica: En el país persisten lagunas de información importantes, que son necesarias cubrir con conocimiento científico sólido; por lo que se requiere:
· Monitoreo genético: es esencial incorporar estudios genéticos que permitan identificar con certeza qué especie(s) de Pez León está(n) presente(s); lo cual contribuirá a una mejor comprensión de su biología y patrones de invasión.
· Estudios de depredadores nativos: es importante continuar la investigación para identificar posibles especies nativas que puedan desarrollar un comportamiento depredador hacia el Pez León, o investigar el potencial de depredadores claves, como meros; que podrían ayudar a controlar sus poblaciones.
· Impacto económico detallado: Realizar estudios más profundos sobre el impacto económico directo e indirecto de la invasión del Pez León en las pesquerías artesanales y el turismo local; lo que ayudaría a justificará aún más la inversión y los esfuerzos de control.
· Fortalecer la Colaboración Interinstitucional: Continuar y ampliar los esfuerzos divulgativos y el establecimiento de alianzas con instituciones gubernamentales, universidades, organizaciones no gubernamentales y el sector privado; dado que la cooperación multidisciplinaria es clave para acceder a recursos, conocimientos especializados y para implementar políticas de manejo y control a mayor escala.
· Desarrollar Políticas Públicas: Impulsar la creación y aplicación de políticas ambientales que contemplen la prevención, mitigación y control de especies marinas exóticas invasoras; incluyendo regulaciones para el transporte marítimo y la acuicultura (incluidas las practicas del acuarismo), que suelen ser vectores de introducción de especies exóticas.
Al implementar estas recomendaciones, no solo el Plan de Acción Regional para las Costas Marinas del Estado Carabobo avanzará en el control de esta especie invasora, sino que también sentará un precedente para la gestión de la biodiversidad marina en Venezuela y el Caribe.

FUENTES DE INFORMACIÓN PARA CONSULTAR:
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