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Luciana Torretta, pág 11

Luciana Torretta, madre, docente y artista escribe, pinta y dibuja este libro creando “cuentos-poesías” para cantar y narrar, un juego poético, inspirada en las palabras “Almas” tomando con mucho respeto y admiración la cosmovisión ancestral de la comunidad Mapuce, en la Patagonia chilena y argentina, transmitidas oralmente en Mapudungun o MAPUZUGUN (hablar de la tierra), grafemario unificado y ragileo, habitando ella, la autora y su familia, hace más de una década este suelo del fin del mundo, como forma de agradecimiento y de algún modo intentar hacer visible lo invisible… un lazo que une y recrea, un llamado a la Resistencia de nuestros pueblos Originarios y por su Maravillosa sabiduría ancestral, por una interculturalidad para todes.

PECHEKECHE SE QUEDO EN SU RUKA

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Este es un cuento de otoño/rimv: Había una vez un niñe/ Pechekeche que vivía en un lugar de la Patagonia, en un lugar alto… alto…alto…Mawida le decían… en la montaña. Allí en su Ruka/casa vivía con su Ñuke/madre, pero un día Pechekeche estaba muy extrañado... Porque no podía salir a jugar, ni ir a la escuela, no podía ir al bosque, tampoco podía invitar a sus amigos, ni podía ir de visita a sus casas. Entonces se le ocurrió mirar por su ventana: oía las ramas de los árboles, el viento/kurvf, miraba las piedras y podía ver a las hormigas que pasaban entre las hojitas y un escarabajo que caminaba detrás de una piedra. ¿De repente, cuando levanto la mirada pudo observar a dos conejos que corrían y corrían hacia su madriguera, pero Pechekeche ya estaba muy impaciente y que significado tiene quedarse adentro de su casa...? Y mientras tanto… oyó una voz lejana que le decía _”Las cosas no son como deberían ser... confía” Ella era la Madre tierra/ Ñuke Mapu… ella decidió acercarle unos amigos… Pechekeche podía sentir desde la ventana de su casa, el sonido del agua los Genko/guardianes del agua: cantaban - ¡Es hora de despertar! Y por ahí se podían oír otros amigos: los Genkurvf/guardianes del viento… y se volvió a oír una voz que le decía _”Las cosas no son como deberían ser... confía” entonces Pechekeche se dio cuenta que estando dentro de su Ruka/casa podía Bailar, cantar y jugar…hasta podía dibujar, cocinar y limpiar, también se dio cuenta que podía acurrucarse con una mantita y su Ñuke/madre le podía leer cuentos. Ahora para terminar este cuento pueden cerrar los ojos e imagínense una luz muy fuerte que los está iluminando saben quién se hizo presente para terminar esta historia: Antv/Sol y ustedes… ¿me pueden contar que más puede hacer Pechekeche en su Ruka/casa? Adaptación de narración oral para primera infancia. Pedagogía Waldorf, historias en tiempos de Pandemia. Incorporación de palabras en Mapuzugun, idioma ancestral de la Patagonia. Otoño 2020.

WANELEN LA MANZANA QUE SOLO QUERIA SER UNA ESTRELLA

Este es un cuento de invierno/pukem Eran finales del otoño… casi casi… invierno/pukem, en el alto valle de Rio Negro y Neuquen, en la Patagonia argentina. En el lugar de las chacras se encontraba Wanelen, la última manzana de ese invierno/pukem que estaba comenzando. Sola en el árbol, ya las ramas sin hojas…y ella lo único que pensaba era en ser una estrella. Piren se hacía presente… ¡la nieve caia! Siempre, siempre, siempre pensaba en las estrellas, de repente vio al cielo y vio: un pájaro pasaba por arriba del árbol y le pregunto: -- ¡Pajarito…! ¡Pajarito…! Porque las estrellas/wanelen no se pueden ver durante el día y si se dejan ver durante la noche?¿Las estrellas se van de día y vuelven durante la noche? El Pajarito miro a la manzana y le contesto: --no…! Las estrellas/wanelen no se dejan ver, porque durante el día nos ilumina el sol/antv… por eso las estrellas no se ven,ellas siempre, siempre están en el cielo/wenu. Entonces la manzana que había aprendido más sobre las estrellas/wanelen, más ganas le daban de ser una estrella y de no ser una manzana. Más tarde se quedó pensando… y siguió mirando al cielo. Y pudo observar que saltando se acercaba a su árbol una mara, una liebre patagónica y la llamo: --¡Mara, mara…! ¿Me puedes decir si las estrellas/wanelen están fijas en el firmamento? La Mara miro a la manzana y le contesto: --No las estrellas no están fijas, las estrellas navegan por todo el universo, por toda la wenumapu/tierra del cielo. Y la manzana que tanto había aprendido sobre las estrellas/wanelen… más deseaba ser como ellas. Un día, entre los manzanares tres hermanas se acercaron al árbol donde la manzana estaba solita…la hermana menor Catalina, le señalo la manzana a la hermana mayor Delfina: y le pidió --¡sacude la rama del árbol! y así cayo la manzana. La hermana del medio, Angelina la agarro y la corto justo…justo a la mitad exacta…la manzana quedo en dos partes iguales divididas.Para poder compartir entre ellas, porque era la última manzana de ese invierno/pukem. Cuando las tres hermanas fueron a saborear las partes de la manzana, pudieron observar que dentro había una estrella/wanelen de cinco puntas… --¡Wanelen! Exclamaron al unísono. Adaptación de narración oral para primera infancia. Pedagogía Waldorf, historias en tiempos de Pandemia. Incorporación de palabras en Mapuzugun, idioma ancestral de la Patagonia. Invierno 2020.

LA ORUGA VERDE KURV IMPERMANENTE

Este es un cuento de primavera/pewv Desde aquí, desde la Patagonia norte, desde Cinco Saltos y el rio Neuquen. A pocos días que comience la primavera/pewv. Faltaban pocos días para comenzar esa estación del año y las flores/rayen ya estaban apareciendo, las hierbas estaban creciendo… Antv el sol ya estaba más cerca de la tierra/mapu. Porque el sol/antv nos comenzaba a dar más calor… En esa mañana templada, nuestro personaje la oruga verde kurv impermanente, no paraba de comer, comía y comía hierbas que estaban muy cerquita de las flores/rayen. Ella estaba muy ocupada comiendo…pero de repente vio a una mariposa que pasaba cerca de ella volando… y le pregunto: --Mariposa… Mariposa… ¿quieres jugar conmigo? La Mariposa la miro y le contesto: --no puedo jugar con vos, me tengo que ir con todas las mariposas que me avisaron que el bosque está lleno de flores con muchos aromas para disfrutar. Entonces la oruga verde kurv se quedó medio triste y siguió comiendo…hasta que oyó un zumbido muy fuerte que pasaba cerca de ella. Era una abeja y le pregunto: -- ¿Abeja, abeja quieres jugar conmigo? No puedo, le contesto…--Estoy por irme con mis compañeras, las abejas obreras. Ellas me están esperando para ir a trabajar, tenemos que ir a buscar todo el polen, las pequeñas semillitas para luego volver a nuestro panal. Mientras tanto la oruga verde/kurv ya estaba tan impaciente… porque ella quería ser como un flor/rayen y adorar al sol/antv…pero tampoco podía jugar, ni con las mariposas, ni con las abejas. Ya cansada, se puso a comer nuevamente, y pudo ver que un pájaro venia volando: ¡era un colibrí! Y la oruga le pregunto: ¿Colibrí quieres jugar conmigo? Y le contesto: --No puedo me están esperando en el bosque los demás colibríes, porque tenemos que ir a saborear el dulce néctar de las flores/rayen. Y es así que la oruga verde/kurv impermanente, se quedó muy triste. Tan triste… tan triste estaba, que comenzó a poner su cuerpo para adentro. Y comenzó a tejer, con sus hilos de seda…tejio y tejio su capullito: --teje teje la oruga, teje sin parar –teje teje la oruga que su capullo está por terminar! y la oruga verde kurv quedo adentro, tan adentro de su capullito, quw no podía ver el cielo/wenu, no podía oler las hojas ni las flores/rayen. No podía sentir el viento/kuruf. Solo podía sentir el movimiento dentro de su capullo…y de repente comenzó a caer un rocío…gotas de agua de rocío sobre su capullo. Eran las genko/guardianas del agua y se podía escuchar que cantaban: --es hora de despertar…--es hora de despertar! Más tarde…el capullo comenzó a romperse, y la oruga verde kurv se dio cuenta que tenía alas en su cuerpo y podía comenzar a volar… ¡Vuela, vuela volar con tus alas de mariposa…! Vuela, vuela libre por toda la Nuke Mapu. Adaptación de narración oral para primera infancia. Pedagogía Waldorf, historias en tiempos de Pandemia. Incorporación de palabras en Mapuzugun, idioma ancestral de la Patagonia. Primavera 2020.

YENV KALFV LA BALLENA AZUL, LA PERLA Y LA SIRENA

Este es un cuento de verano/walung Esta historia comienza con olor a mar/lafken, una brisa de agua fresca desde el fondo del océano llegaba Yenv Kalfv nadando por los mares del sur de la Patagonia. La gran ballena azul, Yanv Kalfv, nadaba, nadaba mientras abría su gran boca entraba el krill, crustáceosy demás algas marinas…como le gustaba comer como disfrutaba de los pecheke, pecheke ¡pequeños animalitos del mar!. Un día mientras llegaba a lo más profundo del mar/lafken. Ese lugar donde existe mucho silencio y casi casi no llega la luz del sol/antv. Observo una ostra… y con el movimiento del agua/ko dentro de ella entro un granito de arena… tanto le molesto a la ostra el granito de arena que comenzó a envolverlo envolverlo…dentro de su pequeña casita, hizo una capa de nácar… saquito tras saquito lo iba envolviendo para soportar el dolor. Yenv Kalfv siguió observando la ostra tan pequeña, que volvía arealizar otra capa de nácar y otra capa, y otra más. El dolor del grano de arena dentro de la ostra le permitía realizar una capa y otra más. Y otra vez lo envolvía con su nácar…saquito, tras saquito, saquito tras saquito. De repente en el mar/lafken comenzaron a ver grandes olas, olas que vienen olas que van… hasta que una ola a la ostra llevo a la orilla y allí la dejo. Y con la luz del sol/antv, con la luz del día una sirena la encontró, las genko/guardianas del mar/lafken. La sirena levanto con sus manos y a la ostra, la pequeña casita abrió y dentro de ella una Perla encontró. El grano de arena se había transformado en una Perla. Una Perla brillante como la luz del sol/antv. Que alegría le dio a la Ballena Azul Yenv Kalfv, que alegría ledio a Genko/guardiana del agua, a la Sirena. Ya que el grano de arena se había convertido en una hermosa Perla brillante. Adaptación de narración oral para primera infancia. Pedagogía Waldorf, historias en tiempos de Pandemia. Incorporación de palabras en Mapuzugun, idioma ancestral de la Patagonia. Verano 2020.

RIMV

Érase una vez, en el lugar de las chacras, en la cachaba del Huecu, una pradera verde en lo alto de la montaña, Mahuida le decían. Allí se encontraba Cuchu, la abuela materna, en su chocita, la pava en el fuego, y mientras se escuchaba el Chutun, ella se resguardaba de la lluvia. Esa tarde sentadita en su hamaca, Nguikun en su mecedora, ella tejía y tejía ysu Duwen crecía. Entre Chaivin y Chaivin los canastillos nacieron, cuando el sol Antv salía… Mientras tanto la lluvia se sentía, y en sus recuerdos de Rimv, guardabaLican, flor de roca, Fvn, semillas de los frutos y Folilco, agua de las raíces. Cuando de repente un Huepil apareció: _ ¡Relmv! Dijo… Rimv, las hojas comenzaron a caer…ella anunciaba el otoño, Rimv comenzaba. Porque cuando el arcoíris se deja ver es señal de un buen augurio, entre la armonía de la luz solar y el agua nieve, el otoño nacía en ese lugar de la tierra, el ciclo de la vida comienza nuevamente en la Ñuke Mapu… ¡Wiñol Xipantv! Rimv-otoño. Cachaba-lugar de las chacras. Huecu-lugar del pasto. Mahuida-montaña. Chuchu-abuela materna. Chutun-resguardarse debajo de la lluvia. Nguikun-mecer. Duwen-tejido. Chaivin-tejer canastillos. Lican-piedra sagrada, cuarzo blanco. Fvn-semilla del fruto. Folilco-agua de las raíces. Huepil o Relmv-arcoiris. Ñuke-madre. Mapu-tierra. Wiñol Xipantv-nuevo ciclo anual en la naturaleza. Cuentacuentos que escribí para la televisión Pública Argentina,Talleres de arte en vivo con niñes y jóvenes en el programa “Desde la Vida”. Otoño 2018.

PUKEM

Dicen… allí en los bosques de la Araucanía, en el sur de la Patagonia, un Kudewe soplo. Era un Kuruf, viento de invierno que el Pukem abrazo. Parece que en ese juego al azar…una Llanka nacía, era la magia de Piren, la nieve cayendo agradecida. Su sueño, un Pewma despierta…aquella metáfora en la Ñuke Mapu sembraba… Era entre Weke y Weke, la nieve encontraba Llankas, objetos preciados como perlas, que ella guardaba. Son los suspiros del bosque…la llamaban: ¡Lilen! Anunciaban los guardianes de los árboles, los Gen Mapu cantaban… Está despertando Lihuel, le estaba avisando que una niña crecía, era una nueva Llanka, una perla que llegaba del oriente, una Kokeshi Llekn con Piren, nacía. Pukem-invierno. Kudewe-juego al azar. Kuruf-viento. Llanka- objeto preciado, perla. Piren-nieve. Pewma-sueño. Ñuke-madre. Mapu-tierra. Weke- vellón de oveja. Lilen-suspiro del bosque. Gen-guardianes. Lihuel-vida. Llekn-brotar, nacer. Kokeshi-muñeca de origen oriental. Cuentacuentos que escribí para la televisión pública Argentina, Talleres de arte en vivo con niñes y jóvenes, en el programa “Desde la vida” Invierno 2018.

PEWV

En otros tiempos de los tiempos, Rukapillan se decía, eran Rayen Mapu En el valle de Rio Negro, entre los canales y el Cuncumen, la Patagonia norte. Desde el dique en Barda, Cordero y La Picassa, eran los Cinco Saltos, que el rio Neuquen rego. Llenk Rayen floreció, al cuidado de un Tregel Kume hasta Cipolletti… Entre la Wenu Mapu, Ayun en mi sentir, el amor por este suelo, el murmullo del agua, porque Ñawe es nuestro vivir. Parece que le decía…al Trawun donde Epewtun, cuento que te cuento una historia que se escuchan y llegan Trayeng Ko… ¡los sonidos del agua! ¡Y Pewv vuelve a nacer! Pewv-primavera. Rucapillan-casa de los espíritus ancestrales. Rayen-flores. Mapu-tierra. Cuncumen-murmullo del agua. Neuquen-torrentoso. Llenk-nacer. Tregel-jardinero. Kume-bueno. Wenu-cielo. Ayun-amar. Ñawe-hija del padre. Trawun-reunirse. Epewtun-contar cuentos. Trayeng-cascada. Ko-agua. Cuentacuentos que escribí para la televisión pública Argentina, Talleres de arte en vivo con niñes y jóvenes, en el programa “Desde la vida” Primavera 2018.

WALUNG TUKUM

Érase una vez un Pechekeche, que vivía en una Ruka rodeada de un gran Rayen Mapu. Los Arboles y las flores del Rayen Mapu eran Weney. Un día su Ñuke le dio un puñado de Tukum y le dijo: -vamos al jardín a sembrar estas semillas en la tierra. Si las cuidamos mucho y con la ayuda de todos los Weney, veremos cómo crecen. Los primeros ayudantes serán los Gen Ko, guardianes del agua, de la lluvia, cantarán: ¡Ya es hora de despertar! Luego vendrán los Gen Mapu, guardianes de la tierra y ayudarán a las raíces para que crezcan y se arraiguen con fuerza. Luego vendrán los guardianes del viento, los Gen Kuruf, y cantaran: -¡Viento, viento tráenos la lluvia! Ellas jugaran con las hojas y las ayudaran a crecer hacia Antv, el sol. Y al fin un día las plantas notarán que algo brilla en sus capullos, abrirán sus pétalos y ¿a quién verán?¡Antv! Entonces, Pechekeche llevo las semillas al jardín y las planto en la Mapu, las cuido, con mucho cariño, juntos las plantas y el niñe, rectos y fuertes crecieron. Walung-verano. Tukum-semillas. Pechekeche-niñe. Ruka-casa. Rayen Mapu- jardín de flores. Amigos-Weney. Ñuke-madre. Gen-guardianas. Kuruf-viento. Antv-sol. Adaptación de la narración oral para primera infancia. Pedagogía Waldorf, historias de la Patagonia. Incorporación de palabras en Mapuzugun, idioma ancestral Mapuce. Este texto cuenta con la particularidad que se puede adaptar al momento estacional. Fue narrado durante las giras de ferias del libro de la región en todas las estaciones del año, realizando sus cambios para cada momento, recolección de semillas en otoño, cuidado y guardado del frio en invierno, siembra en primavera y recolección de frutos en verano. Durante Las cuatro estaciones del ciclo anual en el año 2019 y verano 2020.

LANVN LA CIUDAD ENCANTADA DEL VOLCAN

Esta historia comienza en un lugar sagrado Rewe, en la base del volcán Lanvn. Una historia que me contaron porque yo no lo vi. En las historias que se cuentan y se transmiten de boca en boca en nuestro territorio…generalmente como la historia de la humanidad, fue contada por hombres, yo elijo hoy cambiar el personaje al género femenino. Ella es su protagonista, y le habían avisado que no suba sola al volcán, ella no era de esta tierra, le habían dicho que podía ser peligroso, pero a la mujer no le importo. Era tan fuerte su deseo de subir que comenzó a ascender el volcán… en la Mawida, un sendero por acá, otro camino por allí,y otro hacia otro lado. Y de repente un viento fuerte se hizo presente en el lugar, Kuruf Rimv, un viento de otoño, y así ese vendaval la llevo nuevamente a la base del cerro. Pero ella sentía tanto deseo de volver a subir, que sin miedo a perderse volvió a subir por los senderos de ese cerro, iba caminando, caminando, caminando…y de repente vio: ¡un puente! Un puente colgante que no había visto antes… lo comenzó a cruzar, y pudo observar que al fondo se veían luces, un resplandor de una ciudad. Allí ella se fue adentrando, escucho ladridos de perros…y hasta sintió el aroma a pan recién horneado. Se podían oír niños jugando y hasta voces lejanas… Paso el tiempo y la mujer nunca más apareció… dicen que en esa ciudad sin tiempo…las personas que eran del lugar la buscaron y buscaron…pero nunca apareció… dicen que ese sitio está encantado…y que a veces se deja ver: la niebla de marzo se abre y esa mujer se la llevo… Dicen y me cuentan, porque en realidad yo nunca lo vi, que ese lugar es un lugar que quedo sin tiempo, la gente no puede nacer, ni morir…que la ciudad quedo encantada en otro tiempo de los tiempos… RIMV LANVN. Este texto es una adaptación de la leyenda “La ciudad encantada” del libro Del amor nacen los ríos de Maria Cristina Ramos. Fue creado para participar en el Festival internacional de historias para cambiar el mundo, de la Red internacional de cuentacuentos y la Red de narradoras de México. En el mes de junio, en otoño del año 2020.

PIREN EL TRONCO DE ORO

Allí en lo alto de la montaña, Mawida le dicen comenzaba el Pukem, el invierno…Piren se hace presente en esta historia que nos cuentan las abuelitas cuentacuentos…historias de nuestra tierra, historias de la Patagonia. Estaba llegando una tormenta de viento, Kuruf y en ese frio caminaba la criancera, un oficio muy antiguo y vivo por estos tiempos…con sus ovejas, subían y subían los senderos entre el frio y la nieve. Ella tenía un recuerdo muy guardado, un secreto…maduro y me lo pudo contar. Ella recordaba claramente que había visto allí en lo alto, montaña adentro, un tronco de oro. Y entre mate y mate, quedamos en ir a verlo…subir a la montaña, paso a paso y se dieron cuenta que se les hacía de noche…entonces rápidamente bajaron, corriendo y con los animales no podían quedarse en el medio de la montaña y de noche. Así la criancera se acordó: ¡voy atar un pañuelo con una estaca! En el lugar donde vi el tronco para poder volver al día siguiente y recordar el sitio, pensó. Y así dejar marcado el camino que nos lleva al tronco de oro. Y luego de un tiempo quisieron volver y nada, buscaron y buscaron y no encontraron nada, su vecina del otro paraje ya sabía sobre esta historia…y se imaginaba que existía la posibilidad de encontrar oro en esos troncos, en el Pewen en los arboles de los Araucanos. Un día, de ese invierno, la familia de la criancera estaba frente al fuego, dentro de su Ruka, en la casa. Tenían tres hijas y la más pequeña volvió de jugar afuera, cansada se quedó dormida muy cerca a la chimenea… el calor del fuego la dejo descansando y de repente de su mano rodo una piedra de barro, que golpeo y se abrió: ¡Brilla! ¡brilla! Dijeron sus dos hermanas. Ese es el tronco de oro, dijo su padre. Dicen, que venía gente que no era de esta tierra subían pobres la montaña y bajaban ricos… También dicen que un hombre para casarse con una mujer, busco un tronco, lo rompió y dentro tenia oro, lo uso como ofrenda para casarse con su enamorada. Y cuentan que una mujer subió sola atraída y encandilada por la nieve, el tronco de oro encontró. Dicen que la sabia le conto otro secreto…y que para poder cumplir los deseos o ver el tronco de oro tenemos que esperar un invierno que no sea nevador. Este texto es una adaptación de la leyenda “El tronco de oro” del libro Del amor nacen los ríos de Maria Cristina Ramos. Fue creado para participar en el Festival internacional de Cuentos, en la ciudad de Lima, Perú. En el mes de julio, invierno del año 2020.

POYEN DEL AMOR NACEN LOS RIOS

Hace mucho, mucho tiempo me contaron esta historia, que le contaron a mi abuelita, que conto a otra abuelita. La palabra sigue viva en los que contamos historias es por eso te lo cuento este cuento. En este lugar de la Patagonia, hace mucho tiempo, vivían dos personas. Una llamada Limay y otra Neuquen. Desde que eran muy pequeños les gustaba jugar, jugaban y jugaban, con las piedras… a lanzarlas al agua y el sonido se podía escuchar. También les gustaba jugar con los piñones del Pewen, el árbol sagrado de esta tierra. A las semillas las acomodaban y ellas les marcaban el camino. Así jugaban Neuquen y Limay, Limay y Neuquen. Ese camino que hacían jugando los guiaba hacia la Ruka, su casita. Y de repente pudieron escuchar una canción: -- Teje, teje, capullito, teje sin cesar, teje, teje sin parar… eran sus madres que estaban hilando la lana de oveja y cantando realizaban la tarea. Y las lanitas se convertían en pequeños capullitos de todos los colores, el viento los dejaba volar… ¡kuruf! A Limay y Neuquen les encantaba jugar con los capullitos de lana, jugaban y corriendo se fueron a regalar su creación a la gran amiga de ambos: Raihue, quien también disfrutaba de ese juego juntos. Luego de un tiempo, por esas cosas del destino, no vieron más a su amiga. Limay y Neuquen se pusieron muy tristes, porque no sabían que había pasado con ella. Así fue, como Limay y Neuquen se pusieron espalada contra espalda, cabeza sobre cabeza y decidieron agarrarse bien fuerte las manos, tan fuerte que de repente vino un viento… y como estaban juntos…como signo de hermandad infinita, el viento los guio a Neuquen hacia el norte y Limay se fue hacia el sur. Luego con la fuerza de los vientos patagónicos hizo que el Limay y Neuquen se junten, unidos viajen hacia el este, juntos hacia el mar Atlántico. Dicen los antiguos de la Patagonia que Neuquen y Limay se convirtieron en ríos. Desde el Norte, desde la cordillera el rio Neuquen y desde el sur el rio Limay se juntan y van juntos a saludar al mar, Lafken. Raihue, se transformó en una flor, Rayen, de color roja que crece siempre al lado de un caracol. Este texto es una adaptación de la leyenda “Del amor nacen los rios” del libro Del amor nacen los ríos de Maria Cristina Ramos. Fue creado para participar en el Festival internacional de Narradoras orales el mar de las palabras, Chedamy es Aluna, evento apoyado por el Ministerio de Cultura, en el programa nacional de concertación cultural, Santa Marta, Colombia, año 2020.

GEN LAFKEN POYEN

Esta historia que les cuento, es de misterio, misterios del mar, los Gen Lafken son seres los guardianes del mar, de esta tierra, la Patagonia en el punto más austral de américa del sur. Este territorio, ubicado entre el mar pacifico al este y el mar atlántico al oeste. En un lugar sobre el mar llamado Valdivia, la neblina siempre presente sobre ese paisaje. Un hombre muy sabio estaba buscando un remedio, y él estaba caminando por la costa del mar… caminaba entre las conchillas, se podían oír sus pisadas y las olas del mar. En esos mares del sur, durante la noche se dejaba ver la luna, Kuyen. El pescador seguía buscando su remedio y en medio de la caminata, le dio mucha sed, tanta sed tenia y deseo de tomar agua… comenzó a buscar una vertiente de agua que pudiera saciar su sed. Hasta que la encontró, y sin saber que estaban presentes los guardianes del agua, los Gen Ko, tomo y tomo agua…hasta poder zacear toda su sed. Grito con gratitud: ¡Gracias! ¡gracias! ¡gracias! De la alegría… pero cuando quiso sacar el pie que tenía apoyado sobre una piedra, no pudo… y se dio cuenta que su pie estaba atrapado en una piedra. Y quiso sacar el otro pie…y también quedó atrapado en la otra piedra. Lo estaban cubriendo y él no podía salir. El pescador quedo atrapado en la vertiente, no se podía ir… y así se dieron cuenta que el no volvía…lo comenzaron a buscar… por las diferentes costas…por la comunidad…pero el hombre no aparecía…era un gran misterio. Dicen que un ser invisible, Gen Lafken, le había hecho un hechizo…parece que cuando el pescador había sentido tanto placer al tomar el agua queuna Sirena se habría enamorado de él, y en castigo el duendecillo del agua…que estaba enamorado de esa Sirena, hizo que él se quedara atrapado en esa piedra. Cuentan que al tiempo el hombre mando a decir que no lo busquen más, que él era feliz. La Sirena lo hizo parte de su vida en el Lafken, y que al lado de la gran piedra salió otra más pequeña, producto de ese amor, Poyen. Este texto es una adaptación de la leyenda “Gen Lafken” del libro “Cuentos de duendes de la Patagonia” del autor Néstor Barrón. Fue creado para participar en el Festival internacional de narración oral de cuentos y leyendas por la vida, “Fogata de cuentos” en la ciudad de México, año 2020.

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