1898 : el sitio de Manila : memorias de un voluntario

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EL SITIO DE MANILA MEMORIAS DE UN VOLUNTARIO

SEGUNDA EDIC I ON

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DONATED By'AY.\lA CORPORATION TO F' nJ.~I~AS ~~UNDATION, INC.

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EDITORA NACIONAL MADRID 1

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Graficas Ibarra. - Bola, 9. Teter. 17249. -

Madrid


NOTA PRELIMINAR Tuvo noticiala Edifora N acional de la eX'I'stencia de esta obra de los Sres. Juan y Jose Toral, voluntarios en la guerra de 1898, y apreciando t3l interes que cobran sus emocionantes episodios en estos d'l'amfdicos momen,tos ;en q'/.le el Archipielago filipino inicia nuevos Ij'umbos en su :destino hi8torico, estimo conveniente la ree-dicion para revivir en la actualidad aql.lella ocasi6n dolorosa en /;a q'/.te injusta Cod1:cia extrana nos p'r ivo de los ultimos 1'estos de nuestro impe'J'io ult'ramarino, Los que mme'l'on aq'twl.los alte'rados dias en,contraram en estas pagina.s mot'i'vos para recO'1~dar 'un atropello inicuo en el que el legendario heroisnw espanol n..o f'ue ba.st·a nte para evitar el infarJ'lte despojo que sufrio el patrimonio nuestro j los q'u.e t'l.w ieron la fortuna de no gustar el amargo saba?' de aqueUa.s horas, aprenderan,repasando estas lin.eas, la c1.tantia de nu,estro sacrificio, la 1nagnitud ·de un esfuerzo 'l'ea:tizado con la ,conciencia de muestra i1WaTJ(J;.cidad para afrontar en tales momentos el poderio de quien taimadamente escogio la ' oportunidad y preparo e·l indigno p'l'etexto que p.ro'Voco nuestra catastrofe. Para que ni 1.lnOS ni otro olviden, pm'a que perviva siempre en e·l rec'lte'l·do espanol aqUJella epoca de nuestra Historia, se vuelve a publicar este libro.



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PROLOGO Lector amigo : Si par ackaques d,e la jortun.a, qu,e con frecuencia se entretiene en jugarnos malas pa:sadas, has sido actor, 0 por lo menos testigo, en los tristes sucesos desarrollados en Manilla aesae el dia 1 de mayo al 13 de agosto, no tie sera del t'odo desapacible la lect'U,ra de las Memoria'S de "TIn ¡voluntario" que hoy te ofrecemos; ellas te traeran el rec1J,erdo de los pasados sinsabores, y no tema,s que ese rec1terdo t,e moleste; place dJespues de la tormenta contemplar el cielo azul; place al coraz6n hum-ano recordar en las. horas de calma las de angustia, que biJen visto, el dolor es la piedra de toq'lte de,l plmc,er, ya que sin las amarguras del primero, no seriamos capaces de apreC'l:ar las exqu1:siteces del segundo. A tra.ves d'e los hechos contenidos en estas paginas, veras toscament,e dibujadas, pero con la srincer'idad p1'op'ia de 1tn aJma noble • y de una honrada intenci6n, personas y personajes con las que has vivido y aun vives en esta ciudad lundada por Legazpi, y q'lfe por raz6n de sus cargos tuvieron que poner sus manos mas o menos pecador.as en los negocios p{,tblicos durante los calamitosos dias de la gtt..erra hispanoamer'icana. Veras tambien censurados algunos actos de esas mismas l)ersonas; pero sabe, para descargo de la conciencia, que la pluma del Voluntario ha sido g1.(,~:CVda por honrada intenci6n y por

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generosos y tevantaao'S mo!Vit(9s; no le impuls6 a escribir esta.<J impresiones ni el des contento prodwcido 'por mereei1e'S pedidas y no otorgadas, ni @ll innobie ensaitamiento, ni la torpe cos tumbre de eriticOJr por cr~t~c(J;r; llev6le, por el eOrt;ltrario, el noble prop.osito que sus hermano'S de aquende y allen de los mares St(,pieran ce por he la 'l)erdad de lo sU0edi;d.o en FiZipinas. Por eso al eensurwr el autor de estas memorias los aetos. que aqui eensura, no ~(j) haee c@n el miserable gozo del que ve a su enemig@ (!J;p'8dreado, sino con ~ prpofurlJda pen(J; del que SB encuent'P'a (ibligado a reconocer desaciert@s de su ptrOpia familia. En igu{jJjles ideas, en iguales prorpositos, nos hemos inspriJrado al etderezar y co;m;p~eta,.r las Memori(jJjs del Voluntario. No ka'hlamos aqui de Pedro ni de Juan; nos referimo·s solo a junevon-arios de.l Estado c'wyos actos, como pwblic(}s, S(i)!n deJl comun .d@minio,. coda cW(})l puede aoolizarlos y i'u,zgarlos segun su leal sao·er y e11!liender, y e's te crit,erio poara estar equ'ivocfJr. ao, p·ero n'l('nca sera digno de vituperios, s,i 11)0 se ba.sa en mezquino objeto ni se tp'lNJPO'Ybe bastiard@s fines. N adJie, pIlU~'S, debe considerarse molestado por este librf!). Haeemos .e sta dec·laracion que no se n·(js exig.e, porqtte sri, de'8pu@s de hecha, alguno encuentra of emas en donde espontfineamenie nUl/l/,ife'stamos no haber semej-ant'e inte:n:cion, con su' pan se ~f!) coma, que a nosotros nit nos remuerde Za eonciencia ni tenemos p@r que desenojar/;.e. Y esto dicho) lector a,mig'o, queda co·n Dios y que El te proteja y no te deje de su salllta mano, q'lfie bien lo hemos de mertlesf}.er. todo'S en estos tristisimo-s tiempos que corren para la Ma,dre Patria.

LOS AUTORES Manila, 1 de ocfttbre &e 1898.

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CAPITUL'O PR IMERO

17 de abril.

La Escolta, esa gran arteria de Manila, por donde circulla su prin..cipal riqueza comercial, presenta hoy extraordinaria animaci6n. Se hace diHcil el trafi'sito por la acera de la Tabaquerfa Nacional, ¡establecimiento dpico, con algo de cafe y de taberna, de estanco y -de casino, donde se reunen los desocupados para arreglar el pais y la Patria con ayuda del conac 0 la ginebra. Llena esd. tambien la -cervec¡erfa y lleno el cafe de la' Alhambra, y en todas partes se habla ¡c on ca.ilor, se escucha con ansiedad. Una misma idea agita todos los .corros. Se diee: Lo se por buen conducto ; me consta; lo he visto. -iEl que?-preguntaran ustedes. -Pues nada menos que un cablegrama del Gobierno de la Me- tr6poli a'l Gobernador general, en el que se Ie anuncia haberse roto las relaciones diplomaticas entre Espana y los Estados Unidos, y ser 'inevitable la guerra. La noticia es reputada por casi todo el mundo de canard. Son muchos y muy sesudos los que sostienen que la guerra con los Esta<Clos Unidos, tantas veces inminente, es imposible por ahora, ya que .el relevo del general Weyler, que simbolizaba en Cuba la guerra cerrada, la guerra por la guerra, sin intervenci6n de reforma alguna poHtica, y la implantaci6n en las Antilla'S de ~a autonomla recientemente otorgada por el Gobierno de la Metr6poli, no s6lo ha restado numerosos y valioslsimos elementos a la insurrecci6n, sino que ha quitado pretextos al pueblo que se dioe libertador de los cubanos oprimidos por la tirania espanola para llevar a la practica sus filan.tr6picos fines. Esta opini6n optimista encuentra numerosos adverJ

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sarios; por 10 pronto, todos llcs que alardean de tener vara alta en. Malacanang y de estaF al tanto del t~jernalilej.e de la poHtica palpitante, illOS cuales no admiteH ni discusi6n siquieFa respecto a la eerteza del cablegrama ailudido; militan tambien en est as filas aqueHos; pesimista$ de oficio que, l1evados de su tetrico temperamento, .se complacen en ct:eer y. hacer creer a los demas toda clase de noticiones, y que a vin~d, sift duda, de los a;zaros~s tiempos en que vivimos y con la imaginaci6n aun oCUIpada por !les sangrientos cuadros ae la apenas dominada insurrecci6n, se 'les ant0jan hueSlpedes hasta. 10's propios aedos de la mano, y no ven mas 'qu@ alteraciones de orden publico, guerra. y exterminio por todas ,pa'Ctes. Hay, ademas, clerta cosa ea la sangre, cierto instinto guerrero en ell coraz6n de los espaiioles, que BO 05610 nos lanza con frecuencia:. a descabelladas aventuras, sino que ·nos hace OiF siempre eon agrado' cuantas noticias se reheran a Fo<mper:aos 1a crisma con el p~6jlimo. Yo, que por 10 que puciiera suceder, decide escribir estas Memo-· rias intimas, que tal vezalgun dfa yean la iuz publica; yo, que he' oldo a unos y a otros, a los <lIllie todlc 10 encuentran de color de rosa, y at los que, por e'1 contr:urio, presienteliil un porvenir Ueno de negruras y pdigros, n,o se r.ealmente a que carta quedarme. jEs un di£lcil formar juicio de estas cosas a tres mil leguas del' sitio .dl()nde el con£licto, en caso de ~xistir, se desarroUa! EI cahle eg.: parco en palcrbras, y e1 Gobierfto, mas parco de explicaciones, y tan tardfas las noticias postales, que todo ~o de Europa llega fiambre a· est as apartadas regiones. Por 10 que a mi toca, y sin que nunca me haya gustado ccharmelas de d61nin,e~ ni sentar plaza de profeta, creo esa anunciada y tem,ihle guerra tan veyoslmi1 com.o cuatqNiel!" suce-' so natural largo tiempo esperado. La Republica lilorteamericanal haee tiempoque tiene .formada suo composici6n de lugar acerca de la ish de Cuba, y hace tiempo tam": 'bien, a ralz casi de constituirse en nacionalidad imdef>enoiJi'Cnte de la:. vieja Inglaterra, que codicia, sin hipocreslao5 ni ocultaciones de nin-guna clase, la mas rica y la mas ingrata de las provincias ultrama·r i-· nas de Espana. Debilitada da insurrecci6n separatista por la concesi6n de reformas tan amplia's que casi equi.vale1'l a fa independencia de hecho, d pueb:lo nortemericano arrecia en su campana antiespanola. y no ceja en su innoble ' tactica de acumular eonflicto sobre con- ' flicto, con la idea de remover el caracter imd6mito de los espanoles, de inflamar la generosa sangre que ciJ:cula par sus venas y lanzarlosb como un s·olo hombre a la guerra! ma.s desigtla.Ique pueda sostene,l"se y en la que no es J6gico esperar otra cosa que morir noblemente, Javando con esa muerte ma1'lch:1's de 1a honra y acallando voces de' lla dignidad ultrajada. De aM la campana seguida por los jingoistas~

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· yanquis en la Prensa y en d gabinete de los Ministros, en la plazuela y en el Senado con motivo de la desgraciada voladura del" Ma~ne~' campana 1a mas infame y baja que pueden emprender los· homb~es, que a pesar de llamarse cultos y dem6cratas no han vaciladQ un mom en to, llevados por torpes nnes, en lanzar a la faz del~ Rlund:o entero, que Ja escuch6 indiferente, la m.as cn~el carl umnia. sQ\)l'\e el puebJo mas generos{) y noble que existe en la tierra. Todas estas reflexiones, que aqul apunto a vuela pluma, me las hacIa yo esta tarde en ell establecimiento del popular Roca, bien con-·v'encido de que la guerra era ya 0 serta en breve un hecho. Sf; no por pesimismos cerrados, productos de temperamentos·: sombdos, sino por el propio convencimiento de la triste realidad, me sumo a los que ados pasos de mf sostienen con la viveza y ver-· bosidad producida por el bumo Ide los tabacos y por los vapores del alcohol qale la guerra es inevitable. Ignoro si ha venido 0 no ese ctS'lebre cablegrama que anda · en boca de todo el mundo, por unos . admitido sin dudas de ningun genero y por otros neg ado sistematicamente. DiHcil es saber nada, con certeza, aquf en Filipinas, don-c;le nuestras autoridades tienen la invcterada costumbie de no decir· nunca esta boca es mfa, dejando que la fantasIa meridional de los espanoles corra desbocada, exagerando unas noticiase inventando · otras, creyendoque la reserva mas absoluta es indispensable en las graves crisis y forjandose a S1 mismas la orgullosa ilusi6n de que· solo a elIas import an lQS intereses de Espana en este Archipi61ago; ignoro, pues, 10 del cacareado telegram a, pero esa ignorancia no modifica mi opini6n, porque 10 considero un detalle; si no ha ve-· nido, vendra; si no ha estallado aun la guerra, estallara el dfa que menos 10 pensemos. SI, la guerra es inevitable-me digo a ml m"ismo con honda tristeza al recordar los beneficios de 'la paz, que empezaban a gozarse.en este ensangreritado pa~s y al entrever la posibilidad de un espantoso desastre-. Los Estados Bflidos son un pueblo practico; dignos hijos de sus padres .r ealizaran su objeto sin embarazos ni dudas; ' codician la isla de Cuba y se la l~ev:rran, pese a quien pese y sin im-pordrseles un ardite la injusticia de sus prop6sitos; fracasadas sus. antetiores tentativas, apeiaran a la guerra para apoderarse de ella sin Irespetos a la historia contra la cua:l cometen horrendo sacrilegio, . sin consideracioncs a los heroicos esfuerzos de Espana, que hubiesend3id0 ad. traste con la, mas inicua de las luchas separatistas 5i no hubiera 5rdo atizada )To mantenida por el OYO yanqui. Y 10 peor es que encubren sus verdaderos fines con palabras de relumbr6n., y enarbolan ante el rnundo entero 1a bandera de la humanidad, que debiera de avergonzarse de tener por mantenedores

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los perseguidores de los pieles rojas, a los que ham neg ado a los indios el sagr.ado dereeft'() a la civilizaci6n, y el derecho a la cil1-dadanfa en un territori.o de que SOB legltim 0's propietarios, mientras la tiranic(JJ Espana, los instrula, abriendoles de par en par las puertas ~de t,odas las carreras y de todas los cargos publicos. \ , No son estas reffexiones las unicas que me haleen pesimista, ni aqu~l telegliama la :primera noticia que de este con:flicto se tiene en -Pilipinas. Hace tiempo que corTen graves rnmores, propalados insiistentementie por tOGas partes y con referencia a noticias comer·ciales y oficiales, y aunque basta ahora no han sido confirmados pm.'blicamente p<'}r r]a autoridad, alg0 ha clicho la prensa y aigo se ha traslucido, 1'10 oaStai11l.te la Iprofuncla res'e rva gua':1"dada. De~de el mes ..de marzo vi.e1'}le ciiciJendose por tod0 el m1:lndo, y saoido es que vox populi, VOi r Dei, que el G([)·b ierno ha c'()ID.ul1icado noticias ' mas 0 -men@s c-@.ncretas referem.tes a un nuevo y grave conflieto mrgido -com Ametriea, y asegYI:a:se que nace pocos d£as el general Primo de Rivera recibi6 un despacmo cah~egra:fico de Madrid, concebicl:o aproximadamelilte en los siguientes term~n0s: "Dfcese que em easo de ['ompimiento eoOm. los Estados U nidos, escuaclra" americana ataead a Manila. Prepare V. E. 1ll. dCil£cmsa, utilizando cuantos medios tenga. J' Este ll~legraIFla fue .precedid-@. de otro del Ministro de Marina al Almirante Montojo, en ell qu@ le pnv~e11le tenga preparados I,oS .oarcos y dispuesto el personal :para cualquier evento. Consecueneia includable de ,esos y otros cablegramas son !las varias reunion€s ce:lehradas po,r los ,Generales residentles en Manila y por la Janta de Aut0ridades. lEn una de esas sesiones, verifi~ada 'en el m.e1'l!cionacio rnes de marzo, se aoord6, al parecer con fuerte oposici6lil de ,llOs Cuerpos de Artillerfa e Illlgenieros, entregar a h Marina C1llatro canones Ord6nez de qllilil~e centlliJ!l,etros de los seis ,que se guardaban en la Maestranza y que son los dnicos buenos con ,(!:ue ~-0ntamos; esas cuatro piezas s'e destinan a defender e1 pL1erto de Suhic. A juzgar por el tiem po transcuFrido debe ya estar terminado 0 pr6ximo a terminarse el emplazamiento, aSI como el de las otras ,dOll dedicadas a Punta Sang1ey. En esa y en sucesivas sesioFl!es se han tornado importantes acuerdos, algunos de ,lo.s eN ales se conocen, ott,ciosamente por sl:lpuesto, pues las a:utoridades nada ban reveladQ, reserva muy de aJplauciir, tratandose ct>mo se trata de planes estrategicos que deb€n ocuharse a los propios para: <'!ue no los ap'rovecheFl. los extraiios. Los acuerdos que han tras!lucido al publico son los siguientes: Construeci6n de ,quince fortines 0 hlockaus, 'que 19 uardando entre sl lil~a dis-uncia de mil metros y cruzando sus fu~gos a quinientos con.a

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vertintn a Manila en un campo atrincherado, defendiendola de un golpe de mano, si, com.o es probable, en caso de conflicto internacional, los indios se levantan de nuevo en armas contra la integridad 路de la Patria; emplazamiento de cuantos canones se guardan en el Ar'sena,l de Cavitre y en la Maestranza de Manila, en los sitios mas es- 路 t rategicos para defender la bahia del auque de una escuadra enemiga; reconcentraci6~ de los barcos de la EscuadriHa en el puerto de Manila; disoluci6n de los cuerpos de Voluntarios para darles una organizaci6n mas apropiada a las circunstancias, y, lp or ultimo, el nombramiento de una Comisi6n Civil de Defensa compuesta del Arzobispo, el Alcalde y el Gobernador civil de Manila y el conocido periodista D. Manuel M.a Rinc6n, en concepto de secretario. Todos estes trabajos se empezaron a ejecutar en el mes de marzo, pero con bastante lentitud, sin duda 'p or no creer nuestras autoridadesen la inminencia del peligro .0 por haber tenjdo noticias mas tranquilizadoFas de la Peninsula. A esta tranquilidad ebedeci6 sin duda el embarque del bata116n de Infanterfa de Marina, verm路cado con no poca sorpresa de 1a gente, asi como no haber interrumpido sus preparativos de marcha el bata1l6n mixto, Hamado popul armente sagrado, y que va a la Peninsula a rec.oger en las ovaciones del pueblo de Madrid l.oS laureles c.onquistados en la campania .. de Luz6n; creo, sin embargo, que se suspe:ndera la salida, pues serfa notoria imprudencia no hacerlo. Cuando tOGO el mundo confiaba en una soluci6n padfica, por las notic'ias telegrafiadas a1 Comercio de la intervenci6n del Papa y de las grandes pot(mcias, asi como la concesi6n de un armisticio a los insarrectos cwbanos, hoy, 19 de abril, se han vuelto a reproducir l.oS rum.oreS,como antes digo. ~Se des'Vaneceran, c.omo tantas etras notifias de la Escolta, .0 habra sonado la hera de esa guerra amen azadora y prevista desde Jos comienzos mismos de la insurrecci6n ,cahana? Si asi fuera serfa sefial indudable de que han fracasado 1.05 buenos oficios de las, naciones europeas .0 que eses buenos oficios no Jo son mis que en el nombre, como 1es puestos en practica en d conflicto turco-griege. El dia no da mas que consignar. Bl espiritu no ha decafdo, pues si las manifestaciones no son muy entusiastas no hay que perder 路d e vista que en Manila, como en el resto del Archipielago, falta el ,elemento genuinamente popular, que es el que imprime caracter a ~emejantes desahogos patri6ticos.

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de abril.

Nada de particular sucede si seexceptua que Jos rumores in icia.dos ayer han tornado cuerpo. Me parece que, pOl." esta vez, b cosa va de veras. Afortunada.mente los Mockaus, que constituyen una bueaa Hnea d.efensiva, estan cORduldos y con sus correspoodientes guarniciones, que se e1evan de quince a cincuenta liombres, segUn la importancia del faerte. Se entienden de dfa por rnedio de banderas y de noche por faro-les; el emplazamiento y construcci6n de Ja Hnea de fortines se debe a los Coman.dantes de E. M. e Ingenieros D. Enrique Toral y D. Juan Montero. Abrazan des de el estero de ' Vid:s hasta el polv,o rfn de Malate, y prestaran en su dfa eXic~lente ·servicio. Lbtima es que nQ se hiyan aun chapeado los; espesos hos<[ues y manglares que tienem enfrente y q1.Je nQ Cle hayan unido entre sf con faertes trincheras, cap aces de resistir moO s6lo el faego de fusi lerfa, sino tam bien el de can6n. Pero como los ame-· ricanos no llegaran y besaran el santo, y como es de suponer que los. encargados de las obras de defensa trabajaran activamente en ellas, creo :6.rmem~nte que ut~lizaremos cuantos elementos existan. Pocos y deficientes son, por culpas y ahandonos inexplicables del Gobierno de Madliid; pero empieandolos habilmente nos quedara por Jo menos, y suceda 10 que sl!l,ceda, la conciencia tranquila de haber cumplido nuestros deberes y de baber hecho cuanto este en flaestra. mano hacer. Paseando por el Malec6n he visto est a tarde que se estan emplazando rapidamente en el espig6n del Sur dos obuses y dos canones. Tambien se estan uniendo con telefonos todas las baterfas con ob-· jeto de que se les pueda comunicar 6rdenes desde la ·plaza. Esta noche he ido a la Alhambra; se hallaba llena de bote en bote, y entre el cho,c ar de copas y boteHas se percibfa el murmullo de mil conversaci0-nes referentes tloaas al mismo .asunto, aunque frl.:l!s, como son frias todas las cosas en este bendito pafs de -Fa nipa y lao cana, donde forman peregrino contraste el calor de su clima tro-· pical y una frialdad de marmol, que oprime todos los corazones," paraliza todas las energlas y apaga todos los entusiasmos. En una mesa cercana a la mIa, y clonde se hallaban varios ~:6.­ ciales del Ejercito y la Armada, he oido decir que anteayer se reunieron en Malacanang, bajo la p~esid.encia del Generall August!, todos Jos subinspectores de los Cuerpos para dar cuenra de los trabajos hechos. Parece ser, no respond0 de ello, que el Almirante" Montojo manifest6 haber trabajado activamente en ell plan aprobado por el General Primo de Rivera y que, en su vinud, seis ha-· 1

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1:erias clefendfan [as dos bocas de entrada a la bahla, halhtndose cO'm-puesta cada bateda de tres canones de los desmontados de los barcos en reparacion y emplazadas, respectivamente, en el i:slote del Fraile, Punta Restinga,' Pulo CabaUo, Punta Gorda y Corregidor. Dijo asi-mismo que se hallaban terminadas las obras que cierran la boca Este del. :puerto de Subic y que prepara una Hnea de torpedos para de-fender la entrada Oeste. En cuanto al Arsenal de Cavite, se encuentra protegido por ia artilleda de Punta Sangley y por los canones del ,crucero Do'1'l Anton.io de Ultoa, que esd. reparandose en el Varadero de Canacao. Para el probable combate naval s6lo cuenta el Almirante con cuatro barcos disponibles, y para eso viejos y en malas condicibnes. Bl General SegundO' Cabo tiene preparadas tr-opas para rechazar cualquier ataque en la Hnea de blocaos y cualquier des.embarque de fuerzas yanquis; pero cuenta con pocos hombres para atender a tanta cosa. En cuanto a lIos comandantes generales de Artilleda e Ingenieros parece ser que afirmaron era escaso y deficiente ,el artillado de las batedas. Estas noticias que aquf apunto, aunque revelan que contamos con 'pocos elementos de combate, reaniman mi espfritu y consuelan mi ailma contristada por negros presentimientO's, por'q ue demuestran ,que todo el muncio se halla dispuesto a O'Poner una vlgorosa re'sistencia a los ataques del enemigo. Tambien levanta el animo, abatido por tantas desgracias, Ja ap1:itud patriotica de IDS filipinos. Apenas ha circulado la noticia de la 'guerra, se han revelado las intenciones del Archipielago, en una explosion de entusiasmo, al parecer verdadero. Aunque la experiencia -de' los pasados sucesos nos tiene que hacer naturalmente desconfia.dos, creo que, por 'esta vez, los indios son sinceros; su propia con-v,eniencia les empuja a formar a nuestro lado' para rechazar el enemigo comlin, y si esto no es un sueno, si esto se realiza, si unidos peninsulares e insulares bajo los pliegues de una misma augusta ban,dera, si llevados de iguales sentimientos y en aras de unos mismos deberes luchamos denodadamente, el porvenir es nuestro y los or..: gullosos 'Yanquis no podran arrgbatarnos ni un palmo de esta rica tierra. Fuera pesimismos; fuera tristezas; adelante, pues, y jViva Espana!

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CAPITULO II

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de abril.

Acalh de descorrerse el velo; los que ayer eran graves rumoreS> son hoy tristes realidades; la Autoridad superior ha salido de su mutismo, 10 cual revela bien a l<J,s claras que la guerra es inevitable cuando se ha decidido a lanzar la noticia a los vientos de la pu-blicidad. E[ General August! ha llamado esta manana a su despacho de Malacanang a 10s directoi"es de ,los peri6dicos de Manila para marrifestarles que d Gobierno de la Metr6poli Ie ha comunicado ofi-cialrpente haberse roto las relaciones diplomaticas entre Espana ylos Estados U nidos del Norte de America. El cahlegrama, al parecer, no dice ni una palabra acerca de las causas del conflicto, pero p-ara_ todos, hasta para los mas optimistas, es indudable que ha llegado el casus belliy y que la cuesti6n entablada can America s6lo puede resolverse ya par las armas. La noticia corre por Manila como un reguero de p61vora; pero, flO obstante su sens acio.nal im;p ortancia, no produce sorpresa alguna: todo el mundo la esperaba. En cuanto la se, salgo de casa en busca de impresiDnes que reflejar en estas memorias. Apenas si se nota efervescencia en 1a pD-blaci6n, y salvo algunos c~rrillos mas 0 menos numerosos, en las puerta:s de las tiendas y en los establecimientos de bebidas, la Escolta _ ciene el aspecto de todos los dfas. No entrana esta frialdad ni ,fa,lta de patriotismiO ni sabras de amilanamiento; es, mas bien, que no vive aquf el pud:Ylc m~drilefio, con su frenetico entusiasmo, con sus arranques patrioteros y tambien que no suelen caracterizarse los sitios que han d.e ser teatro de la guerra por sus ruidosas manifes-

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-taciones; tedo el mundo sabe las fatigas y peligros que se Ie vienen encima, y esa'S fatigas y peligros, si no paralizan el coraz6n, sellan, por 1'0 menos, li0s iabios. Mani~a se prepara siienciosa, pero no aha-tida, para hloa lucna desigaal. Si po~ algunos se preve el desastre, oeste triste presentimiento no encoge su anim>o; les hace, S1, llorar en ¡el fondo del alma la falta de recur:sos para rechazar a un enemigo poderoso, pero no Horan las desgracias que presienten por 10 que a ..cada uno i1!ldividualmente se Je alcance de ellas, sino por 10 que "significan para ia Patria siempre am ada, que a- todos nos da vida y ;3, todos [lOS cohija bajo los pliegues de su gloriosa bandera.

Paseando esta tarde por la Escolta me he encontrado a un amigo -muy enteracl.iO de todas l<ifs cosas de 1a MariFla, y la conversaci6n que -con eI he tenido, y que transcribo aqu1 tal como la recuerdo, casi ha echado por tierra de un solo g.olpe Wd0S los casti110s de naipes -'que yo h abfa ido levantando, a ,pesar de no habeJi pecado nunca de iluso. Sus pesimismos, arraigados y negros, sin que obedezcan a desfaUecimientos personales, son capaces de dar a1 traste con el mejor -humor de la tierra y de _descorazonar al espafiOll mas animoso. -~Que opina listed de estas cosas?-le pregunt6, despues de sa. -ludarle-. ~Iremos a la guerra? -Es indudable-me contest6 con triste sonrisa-. Y sobre eso -no cabe f.orjarse ninguna ilusi6n; a Ja guerra vamos y, 1'0 mas triste ,del caso, es que ei resultado no puede ser agradahle para nosotros, por 10 me[lOS en Filipi1!las. -EFltonces, ~usted cree que nuestra escuadra ... ? -NO, la cdenomine usted escuaGra, que no mer:ece tan pomposo -titulo; lIamela usted escuadrilla y aun Ie hace favo-r; S1, fluestra es¡cuadrilla tiene qu~ ser aplastada, hecha polvo por los americancs. Tenemos en todo el Archipiâ‚Źlago bastantes harcos, pero unOs son pequefios y otros malos y algunos ambas cosas a la yez; no conta-mos con mas buques de combate que el Cuba y el Luz6n) dos cruceritos protegidos, muy mon'0S y may modernos, per'0 de escaso ton el aje y escasa artillerta; poco pueden hacer en lucha con h es-cuadra yanqui, m:b poderosa que 10 ,que de publico se dice. Es.t:l lormada por siete magnificos barcos, modernos y formidablemente artillados, pues la mayor parte de sus canones son de tiro rapido. Ademas, triste es confesarlo, las dotaciones de nuestros buques esdn incompletas y apenas s~ en ninguno hay eabos de mar ni condestahles. Poca confianza pueden inspirar na.estros <lrtilleros, no por culpas 'Suyas ni de sus jefes y oficiales, sino por no haber hecho naFlca


pdcticas navales de tiro al blanco, en parte por abandonoS dl:l Go'bierno y en parte por penurias del Tesoro; el material de guerra tampoco 'debe de andar muy bien, porque hace tiempo que no se 'ha repuc:;sto. -S1, pero las baterfas de las boeas algo pueden hacer. -Estoy conforme; algo pueden hacer, sobre todo si, como supongo, se han emplazado los caiiones en punteS estrategicos y se na hecho un buen montaje; 10 malo es que esos caiiones son pecos y no deben de tener mucho alcance. Sin embargo, si se han cons;trufdo torpedos ... - ' ~No los , habfa aqul? -No creo, porque en Espaiia no se han preocupado de enviarlos. Pero algo ha podido hacerse desde marzo ad., apelando a todos los medios del Arsenal, de la Maestranza y de la industria particular, :y digo desde el mes de marzo, porque en esa epoca fuf yo a Cavite :y vi que la secci6n de torpedistas era un camaranch6n, sin apenas ,entarimar y Ileno de trastos viejos; hay que reconocer que es muy 'poco 10 consignado en presupuesto para tan import ante materia~ -Y' de los proyectos de la escuadra, ~sabe usted algo? -Algo se: husmeandoaqu1 y alIa, cazando una palabra al vuelo y observando muchas cosas, he podido traslucir algo de 10 que en las Junta,s de jefes de la Armada ha pasado. No respondo en absoluto, pero alIa va 10 que se: Parece ser que se ha discutido mucho y que ha habido PQca unanimidad en los pareceres; dicen que el elemento joven es 'partidario de esperar al enemigo en las bocas, apeyando a las batedas y defendiendo hasta la muerte la entrada de la bahfa .. Creo que este plan no ha sido aceptado por el Almirante, -que piet:lsa situarse en Subic. Para ml, aunque no tengo conocimientos profesionalles, entiendo que el primer proyecto es el mas acep'table, teniendo en cuenta, ademas" que si no se realiza quedaran esteriles Ilos trabajos hechos, pues las baterfas sin' la Escuadra no haran mucho. Lo mejor hubiera sido desarmar los barcos y emplazar sus caiiones en tierra, y ya que esto no pueda hac~rse por falta de tiempo, 11 0 practico serfadesperdigar la escuadrilla, 10 cual traerfa las v-entajas de evitar la destrucci6n y de impedir, estando al acecho de ocasiones opOrtunas, que los norteaniericanos se hagan dueiios absoiutos de estos mares. -Ese plan es iinposible-le conteste-; si se realizara caerfa So~ 'bre los marinos [a infamante nota de cobardÂŁa, y no porque la the1-ezcan, sino porque los espaiioles somos muy romanticos y todo 10 ql!1e no sea salir al enCl!1entro del enemigo, aunque se cuente ' con fuerzas inferiores, y romperse la crisma con ei, no encaja en nuestros ' :gustos ni merece nuestros aplausos.

17 El Sitio de M anUa.-2


-De modo que, en sJntC!sis, ~usted cree ... ? . -Que no estamos ,preparados para la guerra. Se nos abandon.a.. a nuestra escasas f\:lerzas-anadi6, despidiendose de m'-~ y hemos.· de ver casas tristes~ muy trlstes ...

jAbandoRados! Sf, tiene raz6n mi amigo. Yo, aunque no par-· ticipo eft absoluto de sas pesimismos, comQ no panicipa de ellos la mayorfa del vecindario de Manila, qa.e conHa mucho en los canones de las bocas y eR las Hneas de torpedos y aun en los mismos barcos, com,premdo qae estamos eft malas condiciones para la 1ucha, y que el Gobierno de Madrid nos deja en triste e inexplica1ble des amparo; y no POl" descoBoeimicmtos de 10 que aqul hay, que el Gobenudor geR0ra.l Sr. Primod'e Rivera y el Almrrante Montojo Ie· han puesto en autos de la situaci6n, a pesar de 10 cual nada ha heeho. Se comprcmde: oeupados los Ministros en las intrigas de par-· . tido y ea la poritica de eampanario, minadas las ind6mitas energla-s de 1a naei6n por el caciquismo y .las inmora.llidades, nada h<llb£a dispuesto para el grave c?nflicto en que Espana se V'e envue1ta. La desidia gubernamenull'lega a su colmo si se recuerda que el trasarUn-· tico Isla de Mt1ulanao zarp6 de Barcelona cuando ya todo el mundo consider3!03 inevitahle la guerra y, sin embargo, no ha traido ni un torpedo, ni una granada, ni un canon, a pesar de que habd. tantos arrinconados ,por aquellos Arsena.1es y Maestranzas durmien-· do el suem.o de los justos y cuando tan poco se neeesitaba pua hacer de esta bahla una posicion inexpugnable. jComo ha de ser! Adellan. te, de todos modos; si nuestras autoriclades no se duermen en las pajas, si todos cumplen con su deber, si se utilizan i1abvlmeRte los' recurs()s, que tenemos, no digo yo que podamos obtener un triunfo,. pero sf, pqr 10 menos, cobra,r cara nuestra derrota.

23 de abril.

Nada importante ~urri6 ayer y, por coasigaiente, saIto la fech.a y paso a la de hoy para con.signar impresion.es que no son tan ag,radables como yo quisiera. Por 19 pronto ,ta Gaceta de .'I1anil-a . insena la~ p'r~~lamas y :Qeeretos de costumbre ,en esws peligrosos lances; estos docu~ent~s estaban preparados desde haee dfa$, pero el General no ha querido ,darlos a luz hasta redbir oficia1lmente la noticia de habe(se declarado la .guerra; lilO puede, paes, abrigarse esperanza allguna de soluciones padficas. Simultaneamen-te con la Gaeet(/; /

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han salido. suplementos a todos lo.S peri6dicos de la ca,pital con artÂŁcuio.s patri6tieos; el publico arl"ebata de las ,mamos estos suple-: mentos y se forman corrillos en los que se comentan las disposiciones de la Autoridad superior, que cada uno analiza, juzga y critica segun sus gustos y aficiones. Despues de una alocuci6n en la que, desgraciadamente, no palpita la energfa que fuera de des ear, el General en jefe declara en estado de guerra todas las provincias del Archipielago, ponierido en vigor cuantas disposiciones contiene el C6digo Penal para tan excepcionales casos. Por ,otro Decreto del Gobierno general de las islas se llama a empunar las armas a todos los funcionarios publicos, que formaran agrupaciones por Centros" poniendose a las 6rdenes de sus jefes naturales. Tambien se llama a las armas a todos los peninsula res e hijos de peninsulares que. hayan cumplido dieciocho anos y no ,excedan de cincuenta, siendo para los indios puramente voluntario este servicio. Por ultimo, tambien se dispone que . el batallon y escuadr6n de leales Voluntarios de Manila y las guerrillas de San Miguel, San Rafael y Casino EspanO'I se pong an sabre las armas coa todo el personal que .tuvieran anteriorrnente. Noto en estas dos disposiciones ,palpable con-fusi6n, pues mientras en h 'p rimera se ordena que los funcionarios se agrupen por Centros, en la segunda se determinaque los Cuerpos V OIluntarios, provisionalmente disueltos, se constituyan de nuevo. con su antigllo personal, y como ese personal esta. formado. en su mayoda por empleados, es diHcil que nadie sepa d6nde debe prestar sus servicios. Lo practico y conveniente hubiera :sido constituir dos unidades de voluntarios: caballeda e infanteda, agrupando ios primeros en escuadrones y los segundos en regimientos de ,dos mil plazas; pero ... todas las cosas tienen en Espana .un pero, y el pero es aqul el que todo el mundo. se des pepita por . ejercer mandos, por lucir ,galones, y esto ha llevado a la mala idea de constituir una porci6n de agrupaciones que, pese al patriotismo de' todas, s6lo servircln para estorbarse unas a otras. Confieso ingenuamente que estas disposiciones me han producido mal efecto, nopor la importancia que en sl tienen, sino porque revelan escaso dominio en materia de organizaci6n 0. Ipoca energla, y esto es un mal precedente, porque .,una y otra cosa seran muy necesarias en .los dlas azarosos que se avecman.

Tambien puplica el peri6dico oficial otros Decretos de menor importancia, dando atribuciones ejecutivas a la Comisi6n Civ;l de Defensa, creada por el General Primo de Rivera; ordenando que se

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aJpa-guen todos los faros del Archi~i~lago, para .que no gufen los barcos enemigos a estas costas; prohlblendo la salIda de buques nacionales de la babra y del do, etc., etc.; de todos estos dacumentos guaYQo copia (I), pues no dejaran de ser cU'riosos el dfa en que pueda escribiYse la historia de estos sucesos.

for la noche, avido siempre de recoger impresiones que reflejar en estos apuntes, he ido a pasar un rato a1 unico sitio en donde en esta aburrida dudad puede encontrarse gente y animaci6n. Estaba da Alhambra tan nena, que, como vulgarmente se dice, no podia echarse un alfiiler, y era tal el murmuUo de Jas mil oonversaciones entabladas, qa,e se hada preciso acostumbrar el oido a aqud runrun antes de peder pe.l1cihir algana pa!abra. En verdad, quisiera yo tener pluma de oro y galano estilo par:a tras1a:dar aqui todos los comentarios que en el afortunado cafe se hadan, con esa viveza, esa gracia, ese h>l.!lllicio de pajaros, signos del especial c.aracter de los espafioles, alegrfls en medio de las tristezas, serenos entre ll(}s peligros, prontos a COJlViertir el asunto mas grave en un chiste y prontos tamDien a vo<lar al combate sin dudas lili vacilaciones, sin calcular las fuerzas propias ni medir las ajenas, fiados en la justicia de su causa y en el esfue'r zo de sa brazo; halagada cd alma por ei recuerd(t} de sus gloriosas tradiciones ydeslumbrados los ojos por el brillo de su invicta bandera. Tantas cosas he visto am, tantos planes estrategicos se hicieroa, tantas opiniones se formularon, que imposible serfa consignarlas en estos recl!le(dios; solo se que planes y op~nionâ‚Źs se encaminaban derechamente a demostrar 10 inevitable de la derrota que ha de sufrir . el enemigo, cuyos poderosos baycos, hechos astillas por nuestros canones 0 vol ados por nuestros torpedos, se h~ndirafl en las profundidades de la baMa como se hundieron en pasados tiemp0s las orgullosas naves holandesas. Dejando aparte esws desahogos patri6ticos,que ,en un l:ibro literario darfan motivos a briUantes cuadros, pero en e1 fondo de los cuales hay mas de borrachera de entU'siClsmo que de sereno discurso, debo consignar como la mas agradable de mis impresiones, que en Manila no se noq.n ¡ desfallecimilentos ai tJemores; {rente a frente con la gravedad de las ' circunstancias, que todo el mundo reconoce, nadie desmaya, nadie se entristece; se sabe que la escuadra americana, fondeada en el vecino puerto de Hong-Kol'rg~ vendra a estas aguas (I)

Se insertan en el Ap.endice.


a librar terrihle combate; se reconoce 'p or muchos su superioridad, qqe serb insigne tonterfa y n:otoria ligereza poner en tela de juicio, : y, sin embargo, ~que se yo?, a todos los labios asoma y en todos los corazones brota ese sublime grito de "~o importa" que, repetido por valles y montanas alIa en la Peninsula, cuando Ja Guerra de la Independencia, di6 al traste con el mas poderoso ejercito de aque110s tiempos. Se tiene in's tintiva y casi ciega confianza en la posici6n geografica de la bahia, y en los pocos canones que la deficnden, y en las dos Hneas de torpedos que se dice han sido colocadas en las bocas, y en los mismos barcos, viejos, maIos, ,de madera, pero tripulados por marinos de gloriosas tradiciones y de reconocido valor. Y en ultimo caso, y poniendose en 10 peor y suponiendo destrozada la escuadrilla y aun hombardeada la ,poblaci6n, todo el mundo esta convencido que d americano no pisara el territorio filipino si la bizarrfa de todos es encauzada por el talento de los gobernantes. Manila, pues, representada esta noche en la Escolta, ofrece el mismo risueno aspecto desiempre y ni una nube empana el cielo azuJ de su tranquilidad. ~Quien sabe? Yo, que soy pesimista, tambien me siento esta noche eontaminado del generoso entusicitsmo que se nota en la Alhambra; oleadas de puras ilusiones inundan mi alma y, como tantos otros, entreveo dlas de gloria y de triunfo para mi Patria. Esta alegrIa, este entusiasmo, esta decisi6n firmisima de exponerlo todo, hacienda y vida, en defensa de nuestros sagrados derechos, es un buen sintoma: si todo el mundo creyera en la derrota, en el desastre, como unos cuantos que aSl 10 ¡declaran, no se si por temperamento 0 por conocer mejor la situaci6n, estarfamos derrotados moraJmente antes ,que el enemigo dispare el primer canonazo; serenos y decididos tal vez consigamos mucho, pero mucho mas de 10 que algunos, y entre ellos nuestros amigos los in~1-eses, piensan. Entre el rumor desentonado de las conversaciones he adquirido una porci6n de noticias referentes a adhesiones que se reciben de las provincias del Archipielago, especialmente de Bulacan, Pampanga, Nueva Vizcaya, Albay, Sorsog6n, Ilocos y Pangasinan, donde parece ser que el entusiasmo patri6tico explota potente y vigoroso y que sus hijos se alistan como voluntarios para poner sus vidas a..1 servicio de 1a Patria comun. Tatnbien he oido hablar que importantes casas, como las Companlas de Tabacos y Marftima, Inchausti, Banco Espanol Filipino, Casino, etc., estudian los medios de facilitar todo genero de recursos para la guerra. Los preparativos militares y navales siguen con febril actividad. Esta tarde he visto que 'estaban pintando¡ de gris, color de comb ate, los barcos de nuestra escuadrilla. Por cierto que esta operaci6n y los alegres cantares de los marineros que 1a hadan me han llenado el

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alma, sin saber por que, de infimita tristeza. Desechando ]'a misma ¡como se desecha el recuerdo de una pesadiUa, dire que desde la mesa dd cafe, ante la que estoy sentado, se oyen l!Qs primeros martillazos que nuestros ingenieros, a 131 luz de varias antorchas, dan en el puente provisional que se esta construyendo entre los de "Espana" y "Colgante" y en d mismo sitio que ha de oeupar el de la Quinta, si 311gun dfa se terminan las ohras. Otro 'Pl!1'ente ancHogo se piensa echar sabre el mismo rloPasig para unir Puerta de Almacenes con la Capitanla dd ptaerto y facilitrar de este modo, en mornent05 de peligro, el paso de ana a otra parte de la pohlaci6n. No quiero terminar las impresiones del dfa sin consignar aquf ta nota rna.s simpatica del mtismo y que viene a endulzar en cierto modo .las tristezas en que nos haHamas envueltos. La Pampanga, esa - heFoica provincia, plante1 de la lealtad filipina, nos da hoy en su patri6tico arranqlle dos resudtos paladines de fa causa espanola: don Eugenio Blanco, el que comandando a los valientes macabebe-s pelea'fal denodadam@nte contra las partidas insurrectas, ofrece Ulil bata1l6n de moviiizados para cooperar a la defensa del territorio, y el conocido abogado D. Felipe Buencamina, lleno del mismo ardoroso entasiasm9 y de los mtismos padsimos amor es poria Patria comun, constituye un Tercio de VOhllltarios pampangos y dirige al Pres idente de la Audiencia el siguiente expresivo telegrama, 'que copio a;qul como ~atente pi"uelDa de noble lealtad y de acendrado patriotismo. "San. Fernando-Pampaa-ga, 22 de <libril. "Excmo. Sr. Presidente de la Aud'iencia. "Magistrado Anda defendi6 Espa:na siglo pasado. CirCl:1tBtancias an:Hogas nos obligan ,f ormar batallones pampangos. El mfo, quinientos hombres, elijen a V. E. Coronel honorario en recuerdo gloria Magistratura.-Felipe Buencamino." A este conciso pero entusiasta telegrama ba contestado e1 senor Fernandez Victorio con otro no menos levantado y que tambien induyo en estras memoT~as, por ser d compleme.mtro del anterior: "Manila,

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de abril.

"Presidente Audien~ia a Felipe Buencamino, Comandante vo.luntarios pampangos. "Con patri6tico orgullo felicito a ustted y siempre leales voluntar ios pampangos por actitud noble y levantada, y man.ifiesto pro-fundO' reoonocimiento por inmerecida design.aci6n Coronel hon,(i).rari~ . Esten seguros procurare, si llegaren momentos supremO's, inspirarme

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I

inmarcesible ejemplo prec1aro patricio Sim6n de Anda, continuando -gloriosa tradici6n Magistratura este Archipielago, a la que voluntarios pampangos honran on mi persona. Entiendo designaci6n debe hacerse por conducto Ca.pitanla GenerCl'l, la que resolv~ra como convenga a la mejor honra y servicio de la Panria.-Servando F~rnan­ dez Victorio." jBien por la Pampanga! Si los filipinos siguen sus huellas, si conHan en el merecido premio que S'U lealtad en dificiHsimas circunstancias ha de obtener necesariamente de la madre Patria, si se unen a los peninsulares en sincero abrazo, y unos y otros, olvidando :mtiguas rencillas, forman a.pretado haz en dafensa de comunes derechos, aun veremos todos, y suceda 10 que suceda en el resto de las colonias es¡panolas, aun veremos todos, repito, abrirse para este rico ArchipieJago magallanico un risueno y esplendoroso porvenir. ASl sea. A ultima hora me entero que manana, a las siete, el Ayuntamiento, bajo mazas, ira a Malacanang a ofrecer sus respetos al genuino representante de la Patria; todos iremos: Manila entera' acom'panara manana a sus ediles, y con el imponente silencio propio de las graves circunstancias demostrara los ¡sentimientos que embargan su coraz6n, siempre abierto al generoso entusiasmo y a las grandes em'presas.


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CAPITULO III 24 de abril.

AnQche, cuandQ tuve nQtlcla de la manifestaci6n que se ha ve-r mcado en. las primeras noras de la manana de hoy, tern!, en el fuero internQ de mi conciencia, resultara menos grandiosa de 110 que podia esperarse, nQ porque el vecindariQ de Manila nQ debiera acudir como un. s{)lQ hombre a ofrecer, en aras de Sl!l patriotismo, hacienda y vida;. no porque el objet<:> a qllle el acto se encaminaba dejase de ser d mas -a prop6sito para hacer latir el coraz6n de todos los esp.1uoles, sino por la manera de organizarse 1a manifestaci6n, verdadero desacierto de la;s autoridades municipales. Siempre he crddo que estas; cosas no pod£aB hacerse oficialmente ,y como por invitaci6n, SinOI que tentan que dejarse que surgieran vigorosas y espond.neas del seno del rnismo pueblo. Ast, la manifestaci6n de Pioy, patrocinada y dirigida por el Ayuntamiento, sin tiempo para la conveniente vulga-¡ rizaci6n de la idea y celebrada a una hora tan intempestiva, qu e .estoy seguro que la mayor parte de los habitantes de Manila no se han enterado de ella, ha resultado un acto agradable, sl, pero ~in la animaci6n, sin la viveza, sin el colorido, sin la vida, en una palabra-, que caraeteriza las cosas populares, cuando del pueblo brotan naruralmente. ',' A las siete en punto de la manana, con una precisi6n mat em atica desesperante y perjudicial, por 10 que ha estorbado el crecimien-to de la manifestaci6n, salieron los ediles de las casas consi5toriales Hevando el alferez real el Pend6n de Castilla, recuerdo perenne de gloriQsos d{as. Tambienl llevaban bander as espanolas las Redacciones de los peri6dicos locales La OCe(mJil, La Voz y El Comercio. Al po-


nerse en marcha el Ayuntamiento se unieron a el un par de centenares de personas que habla desperdigadas por la plaza de Pahcio; en el Puente de Espana, el numero llego al de unas mil quinienta); en el Casino y Santa Cruz se dieron nutridos vivas a la Naci6n, a los Reyes, al Ejercito, a la Marina y a las Autoridades; estos vivas Sl: hicieron verdaderamente atronadores ail pasar los manifestal11tes por rlelantecle ia Comandancia General del Apostadero y al trasponer, en apifiado monton, las verjas de Malacanang. EI General Augusd, vestido de uniforme y rodeado de 115 Aut oJ;"idades, Generales y Estado Mayor, despues de ser vitoreado por los manifestantes que Ie divisaron em el balcon principal, esperaha a los mismos en el salon del Trono. Precipid"ronse todos en tropel, atropelH:ndose casi por las espaciosas escaleras, y llenaron cumplida'm ente .3!qu.el sal6n, asf como corredores y galerlas, quedando aun buen gQlpe de gente en los espaciosos jar:dines. Con acenro entreconado el Alcalde, Sr. Saz de Orozco, pronunci6 breves palabras, en nombre del pueblo de Manila, soHcito siempre en aCllrur a ofrecer al representante de la Patria todo cuan'to tiene, tooo cuanto espera: el dinero de sus arcas y la sangre de sus venas en ¡<llefensa de la integridad y de la honra de la Naci6n. El General Augusd, con voz tremula, con la emocion del hombre que ejerce un mando supremo en dificiHsima-s circunstancias, COlltest6 a los manifestantes con las siguientes frases, que copie pa:ra incluirlas en este diario: "Profundamente emocionado ante estasolemne y patriotica m:lnifestacion, a cuya cabeza viene el Sr. Alcalde representando al pueblo de Manila, agru pado a su ,laao sin distinci6n de corp-oraciones, categorlas ni entidades, me siento orguUoso, en primer lllgar, de ser espanol, y despues, de ser la primera autoridad en este rico y quer ido Archipielago. "Yo, seiiores, no puedo menos de lamentar la situaci6n en que se haUa nuestra pobre y querida Espana. S3!bCis pGr las alocuciones que he dirigido al pals que una na.cion, con procedimientos inicuos, hollando todas las reglas internacionales, usan.do de malas artes y ie1onfas, aprovechandose de nuestr1s desgracias y agotando la paciencia de todos los espanole,s con sus periidas maquinaciones, nos ha¡ provocado a una guerra. Espana entera, herida en su fibra mas sensible, cual es la integridad y el honor nacional, acepta !a lucha, .y esta Espana, al parecer tan decalda, va a patentrzar ante el mund'o ¡entero que aua tiene muchas energlas militares y mucho vigor econ6mico, y que lejos de decaer en StiS alientos sabra extremar su he1"Olsmo. "Estamos, pues, resueltos a ir a luchar hasta veneer omon r, y I

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cuento con todo el pueblo filipino, sin distincion de razas y condiciones, para que, agrupados como espaiioles, nada mas que como espanoles, ¡defendamos esa gloriosa ensena de la Patria. Cuento con todos y me halaga pensar que no hemos de consentir que un extranjero inicuo y procaz. huelle con su planta este hermoso suelo ,rnientras viva un solo espano!. "Ha llegadp, pues, la hora de luchar. Todos a las armas. 'fodos en sus puestos, confiando en que el Dios de las victorias nos la -c onceded. al grito de jViva Espana!" Aun no se habfa extinguido el eco de los vftores con que los manifestantes corearon el del Gobernador General, cuando, adelandnaose, saludado por generales aplausos, el filipino D. Herm6genes Yson Bautista leyo, en medio de un silencio sepulcral, el siguiente entusiasta discurso: "Dfa es hoy de patentizar nuestro agradecimiento a la sin par e invicta Espana, que tanto hizo y had a los humildes habitantes de este Archipielago filipino, siempre espanol, acogiendolos en su seno, para que al calor de las maximas cristianas y de la mas sana moral no sufran el rig1:lfOSO fdo del salvajismo en que antes yadan; hoy es ~l momento en que ella conoced. quienes son sus hijos y c6mo ia consolaran en la lamentable situacion en que se encuentra. Somos sus hijos y ella es nuestra madre. ~Quien podd. consolarla? 5610 estos hijos ingratos. Pero, Nui,en es el hijo, por ingrato que sea, que podd. sufrir los lastimosos quejidos de una madre tan carinosa, sin prestarle siqliliera ailgun auxilio 0 remedio que pueda alivia"la? Su voz tremula ofmos que desde alIa n9s llama y nos dice: Hijos mios, 1W seais ingrat(,)s. Por eso, llevados de amor patrio y agr3 jeddos a tan ,grandes benel1cios, venimos hoy a manifestar ante V. E., COmo su representarite en estas apartadas islas, nuestra fidelidad, amor y -carino, dispuestos a sacrificarnos y verter hasta, =la ultima gota de la sangre que corre por nuestras venas por defender la integridad nacional. "Venimos, repito, Excelentlsimo senor, a unir con vuestro valeroso corazon nuestra inutilidad y escaso conocimiento en el manejo de las armas, acompanado del grito de i Vt:'l1a, la sie'mlwe i n'lJicta. N aci6n espanola I" -"jPueblo de Filipinas!-gritaba momentos despues en el jardfn de Malacaiiang y cop soberbio arranque el Sr. Orozco-. jP!.leblo de Filipinas!: he salido garante por ti; en tu nombre he ofr~cido tu fideliaad, y tu mismo, por boca de uno de tus hijos, has becho tan -honrosa promesa; no espero, no temo que faltes a ella. " Asf sea, digo yo al resenar estos recuerdos. No se por que me siento Heno de nobles ilusiones. Sf, yo tambien creo que los filipinos

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no abrazaran 1a extranjera ensena, que 8610 les p!liomete desprecios, y opresiones; yo tambien conHo en que los hijos de este pals, que ahora io pueden esperar 'todlO de Espana, no haran traici6n a la bandera ql!le ~os cabija oajo Sl!lS pliegues desde hace cuatrocientos anos y a cuya gioriosa sombra murieron sus padres y han nacido sus hijos. Por eso, en este m-oment-o, parodiancio al Alcalde, grito con tocla mi. alma: "jPl!leblo de Filipinas! Si cumples como bueno, si cumples 10 jurado, obtendras el merecido premio; pero si cometes la mas negra. de las traici~mes, si tu mismo, fa~tandG a tu honor, pisoteas tus propias pala:bras, Dios y los hombres te juzgaran como melieces, que las manchas de 1a Historia no se lavan con cien siglos de arrepenti-m.iento." ~t.

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Esta manana, la Escolta of reda animado aspecto. Los manifestantes, agobiados por e~ calor y la caminata, l1enaba~ Jos establecimientos de bebidas, haciendo vivos comentarios sebre' es~os sucesos, <1]:l!le con su palpitante interes vienen a romper h da-' . monotoma , de este palS. ' SIca Fuerza es reconocer y c0ngratularse de eno, que la esperanza y el ardoroso entusiasmo brillan' en todos los rostros. Contribuye nopoco a tan levantada actitud el acto que acaba de realizarse, que, llenando todos l-os COFaZ0:Iles de l;J,oble emocion y de s~nto pauiotism{j)~. prepara al vecindario de Manila para la terrible lucha; sin embargo, penosa impresi6n caus0 en ~os animos la noticia de que esta noche probablemente 8aldd. 1a Escuadra espanola para d puerto de Subic, noticia dada ala puerta de la Tahaquerfa por un bizarro y simpatico mariflo, y que hi en pronto corre por toda la cipcl.ad, originand(£)¡ acalorados debates. Ha: preva[ecido, pues, el pian de aibandonar [as bocas, y con elias, la entrada de la bahIa. Buena parte de los espanoles cel1lsuran agriamente esta detelOminaci6n, que deja en triste" desamparo y a fmerced de los canones yanquis l~ capital del Archipielago, y que, segun de publico se asegulia, ha sido tomada pOl' el A.lmirante bajo su absoluta responsab~l[dad y en contra dd parecer d~ la mayor parte de los rriarino.s. Nada se sabe de cierto.; sea acuerdo de quien fuera, el caso es que 1a escuadrilla va a situarse en Subic. 'fambien ha conido esta manalla por la Escolta una nottcia que ha producido. buen efecto; se dice que lo.S americanos, especialmente¡ los c6nsules en Singapur y Hon-Kong, tratan por toda clase de meQios y halagadoras promesas de traer a FiHpinas a Emilio AguiNaldo y a otros cabecillas, residentes en dichos 'p untos desde 1a celebre paz. de Biac-na-bat6, y que uno y otros se han neg ado resueltamcnte, no sabemos si por temor de que lo.S a1iados se conviertan en domina--

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(dor~s 0 por .simpl~mentle

no tratar con protestantes, segun afirman los indios, 0 po rque, Durlam.,d o los presentimientos de t,odos los espanoles, quieren aquellos ex ca'hecillas cumplir eort sinceridad 10 que lieremente pactaron. Lo de las .promesas yanquis 10 ereo a pies juntillas, por eneajar en el earacter del humanitario pueblo de los Esta~0S Unidos tan inicuos procedimientos. En cuanto a 1a negativa, de ,desear seria que se confirmaran los rumores que con respecto a ella 路corren hoy por todas partes, 10 mismo entre los espanoles que entre los _indios . . Emilio Aguinaldo, parte por sus hechos, que h~n fanati'zado a no f>Ocos ilusos; ' parte por la bandera de independencia que -enar:bola, simp.itica a bastalltes indios, y parte por nuestra ingenita 'novelerfa, que ha cOontribufdo a hacerle persona: import ante, es un verdadero prestigio entre el pueblOo bajo de algimas provincils fi.1ipinas, nervios ,de la pas ada ,insurreeci6n; por eso, si de nuevo pis a <estas playas en son de guerra, puede proporcionarnOos un grave disgusto, amenazadOos comOoestamos por un poderoso enemigOo. En fin, -quien viva vera. Quiera DiOoS que no se turbe la paz interiOor de este Archipiela.gOo, reg ado por tanta sangre de pen'insulares e . insulares; .quiera D iOoS que los filipinos, .oyendo la voz de sus propias eOonve'nienciacs, ya que no se sientan atrafdos por los fuertes lazOos que a nQsotros ,los uacn por cuatrocientos anos de vida comun, y dejan<dose de fratricidas luchas que agotan todas las energfas, dividen las familias y forjan largas cadenas de s'insabores y de odios, marchen ,derechamente por el camino del prOogreso y de la evoluci6n poHtica, 'Sioempre unidos a Espana, a 1a conquista definitiva del lisonjerOo por'vemr que mereeen. T am!bien eontribuye a 路Ia publica alegrfa el apresamiento de .Ia ifragata norte americana Sara'11acif, en aguas de Visayas, por el eanOonerO Elca11"o ,~ tOodo el mundOo se abandona a lisOonjero ~ Ooptimismos; "Ia guerra no empieza' mal para Espana", se aseguta por todas par1:es, 'y yOo, aunque nOo Ie doy a este hecho tan excepcional importan路cia, eonsiderOo que, al fin y al cabo, es una noticia agradable, mas que por 10 ,que en sf representa, por 100 que ayuda a mantener levantado <el espfritu popular.

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Sabese ya en Manila que la eseuadra yanqui, fOondeada desde haee mes~s en Hong-Kong, ha abandonado este puertOo, dirigiendose al de Mirs, perteneciente a China, y situado en Kouang-TOoung, al Nordeste de Cl!qu~H y distante del mismo unas treinta millas marinas; pareee ~er que las autorida'des inglesas 1a han ob1igado a abandonar . sus . 路aguas jUlrisdioeionaLes en virtud de 1a neutralidad proc1amada por el Gobiern<> de :la Reina Victoria. Aun no ha salido con direeei6n al


Acchi piela>go; parel mI, esperan la llegada del EsmeiJ'alda, que zarparti de · este ptlerto esta tarde, llevando a su bordo a Mr. ·Wi'lliams, consul de los Estados Unidosen esta capital, y que seguramente habra aprovechado su residencia entre nosotros ·p ara llevarse cuantas: noticias y pIanos haya podido adquirir. La flota enemiga se comp'One, segun mis datos, de los siguientes. poderosos barcos: Olympia: buque insignia del Gomodoro; casco de acero, 5.800 toneladal5 de desplazamiento, 21 millas de velocidad, 17.5°0 caballos de vapor. Cubierta protegida con un espesor de 10 cm. en h barbeta y de doee a cinco en la cubierta. Artillerfa: cuatro e:triones de 20 em., lode 13 em., J 4 de seis libras, seis de una iibr.1, cua~ tro Gatling y seis tubos lanzatorpedos. Baltimore: casco de acero, 4. 500 t~neladas de desplazamiento, 20 millas de veloeidad, 10.064 eahallos de vapor. Cubierta protegida con un espesor de 10 a 6,4 em. Artillerla: cuatro canones de 20 centlmetros, seis de 15 em., cuatro de seis libras, dos de tres libras, do~ de una libra, cuatro rev61vers de una libra, dos Gatling y cuatro tubos lanzatorpedos. Raleig.h : casco de ;;teero, 3. 183 toneladas de desplazamiento, 19 millas de velocidad, 10.000 caba-Hos de vapor. Cubierta protegida con un €spesor de 6,4 a 2,5 em. ArtiHerfa: un canon' de 15 em., 10 de 13 em., ocho de sels libras, <matro de t:lna libra, dos Gatling y seis tubos lanza~orpedos. Boston.: casco de acero, 3.189 toneladas de desplazamiento, 16 millas de velocidad, 4.630 caballos de vapor. Cubierta pcotegida con. un espesor de 3,8 em. Artillerta: dos canones de 20 cm., seis de 15 centimetros, cuatro de seis libras, dos de tres libras, dos de una libra, dos rev6lvers de una libra y dos Gatling. Petrel: caiionero con casco de acero, 800 tondadas de desplazamiento, 14 millas de marcha y 1.500 caballos de vapor. Cubierta protegida con ~,94 a 0,78 centfmetros de espesor. Artillerta: cuatro -canones de 15 em., dos de tres libras, uno de una libra, dos rev6I-v;ers de una libra y dos -Gatling. Con/cord: canonero con casco de acero, 1.700 toneladas de desplazamiento, 17 millas de velocidad Y 3.404 caballos de vapor. Cubierta protegida con un espeS01" de 0,94 cm. Artilleda: seis cdnones de 15 em., dos de seis libras, des de echo libras, uno de una l~bra, dos rev6lvers de una libra, dos -Gatling y dos tubos lanzatorpedos. - En resumen: 19.172 toneladas de desplazamiento y 133 bocas de fuego; es una escuadra formidahle cornparada con .los debiles barcos qtl€, por desidias del Gobierno, podemos oponcrle. La manda el

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Cornodoro Mr. Dewey, irlandes de nacionalidad, pero al servicio de los Estados Unidos desde 1a celebre guerra de secesi6n. A ella hay que agregar al aviso J..{ac-CulJ,oc cuyas condiciones desconozco! y los vapores ¡ rnercantes Zafiro y Nasham,. el prirnero recientemente comprado a una casa inglesa, que 10 tenia destinado al tdtico mercwtil entre este puerto y el de Hong-Kong. J

26 de abril.

Ayer, 25, a las once y media de la noche, z:!.rp6 la Escuadra espanola del puerto de Manila con direcci6n al de Subic. Antes de salir., con el adi6s, quiza postrero, dado a la ciudad de Legazpi, el Almirante Montojo ha dirigido al Ministro de Ma.rina un cablegram a concebido, con espartana sencillez, en los siguientes terminos: "Salgo a tomar posiciones en espera del enemigo. " 'j-Cuantas ilusiones habra despertado ese despacho en el pueblo de Madrid, ignorante, por culpa de los Gobiernos, de nuestra debilidad! Y jcumtas esperanzas prenadas de tr,istes presentimientos dejan en el vecindario de Manila esos barcos que van en busca del enemigo, que van a la derrota acaso, al desastre total tal vez! jPobres naves-! Sostenedoras del mas justo de los derechos, representantes del POOer espanol en las aguas surcadas por Magallanes y por Elcano, Dios les de en suerte 10 que les falta en fortaleza, y Dios haga tambien que los heroicos marinos que las tripulan no obtengan como unico premio la triste satisfacci6n del de.ber cumplido y de haber pagado con su sangre la deuda de gratitud que todos tenemos contrafda con la Madre Patrici.. Hasta hoy por la manana no se ha sabido la salida de la Escuaclra para Subic, y al saberse la noticia, justo es re~oJlocerlo, ha producido en todo el mundo honda tristeza, tristeza que no se traduce en desfallecimiento, que nadie desmaya aqul ante el peligro; pero que, al fin y al cabo, es muy legItim a y natural. Aun resuenan en todos los oidos las alegres music as que atronaban las calles de la poblaci6n cuando las fiestas de la paz; au.n reverbera en todos los ojos -el 1ucir de las iluminaciones del campo de Bagumbayan, convertido' en real de feria, y el brillo de los saIones, cuando invisible mano borra todas estas cosas y sustituye las alegres escenas paIpitantes de vida y colorido con terribles cuadros Henos de sangre y de horroIes; la armonla de la.s music as con el tronar de los canones, la luz de los farolillos con la llama del incendio; en fin, las aIegres fiestas de la paz con los feroces pugilatos de la guerra, tromtba maldita que todo 10 quebranta, que todo 10 destruye. No es, pues) ~xtraiio que

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'Manila, la pel"ezosa ciudad, senor:a del Extremo Oriente, sorprendida ,en un. S1:1eno de felicidad, tenga el corazon firme y sereno y la frente nubiada; no es extraiio que ai mismo tiempo q1:le, sin vaci1ac~ones, 'se 'prepara a 1a lucha, anide en su alma e1 mas hondo de los pe~ares. Nuestra escuadrilla se haIla formada por los siguientes barcos: Reina Cristina: buque insign.ia del Almirante; casco de m.tdera; ' C<>mandantle, D. Luis Cadarso. CastiliaJ: casco de madera; Comamdante, D. Alonso Morgado, Ca'pita,R de fragata. Is/;a; de Cuba: cruce1'O protegido; Comandallte, D. Jose S~drach, .capitan de hagata. Isla de Luzon.: crucero protegido; Comandante, D. Miguel Perez Moreno, Teniente de navlo de prip:lera clase. D@n Juan de Austrw: casco de madera; Comandante, D. Juan de . 1a Coirlcha, ' Capitan de fragata. . Marques del Duero: canonero, casco de madera; Comandante, -0. Salvador Moreno Guerra, Teniente de navlo de primera clase. Generafl Leza: canoner<;>, casco de madera; Comandante, D. Rafarel Benavente, Tenlem.te de navlo de p'r imcra c1ase. Argos: cano-nero <ilestinado a1 servicio hidnDgrafic·o·, casco. do.'! ma·dera; Comandante, D. Rafael Cabezas, Capitan de navlo de 3(gun,da c1ase. A estos h:!trcos hay que agregar e1 crucero de madera Ulloa -y el -transporte Manila, que Sf! hallan en Cavite reparandose, y el trans-porte Cebu y el canonero Bulusan, que por sus escasas condiciones -para elcombate quc:;dan en el dQ. Husrneando por todas partes y pregllntando a U'nos y otros, be podido adquirir datos exactos acerca de las batedas que defienden 1a: bahla y plaza de Manila. Estas batedas son las siguientes: Bocas: Punta Restinga, Islote del Fraile, Pula Caballo, Corregidor, Punta Gonia y PU'1~ta Sisima111 (M~riveles); una bateda de tres 'canones en cada unQ de estos p1l1ntos. . Subic: cuatro canones Ord6nez de r 5 centtmetros Y 8.1000 metros de alcance. Cavite: Punta Sangley: aos canones Ord6nez de 15 cendmetros y 8.000 metros de alcance; Frente al mar: cuatro canones PaUisser .de 16 centfmetros .y 5.00G> metros dealcance; dos Wittvorth de 13 ·centfmetros y 7.000 metros de alcance. Plaza de Manila: Baluarte de San Diego: nueve canones B C de .16 centlmetros con un alcance de 3.600 metros; Plamo: cinco. ohuses <tie 21 centft;netros Y 4.200 metros de alcance; Fuerza' de Santiago: cinco canones B C de 16 centfmetros; Luneta: dos canones H R S <Ie 24 cent£~etros Y 7.000 metros .de alcance; San Pedro: un can61lr


H R S de 24 ccmtfmetros; Compu.erta: un cafi6n de 24 centimetros; EscoUera: clos obuses H de 15 cent!metros y 6.000 metros de ~lcan­ ce y dos canones B C de 12 centtmetros y de 5.000 metr05 de alI<€ance. Ademas, existtm algunos cano1;l!es antig\llos, de bronce, a cargar por la boca, ernplazaclos en varios puntas de las murallas. Dos importantes noticias da de sl el dla de hoy: Ja march a de 1a gene:rala August! al pueblo de Macabebe (Pampanga) y 1.1 protesta de adhesi6n y amor a Espana hecha espond.neamente por va'rios ex cabecillas de la pasada insurrecci6n. Me ocu p.o de uno y otra, pues por Sl!l .importancia, requieren detenido estudio. Ados m6viles s6lo J.i>uede obedecer la primera determinaci6n: al natural carino ,del padre, que desea evitar a su mujer y a sus hijos, pedazos de su ·coraz6n, l.oS riesgos de Un bombarde.o ·q ue puede ser terrible, 0 al 'tact.o poHtico del gobernante, que quiere demostrar omnlmoda confianza al pueblo filipino, depositando en ell.o que Ie es mas querido. En ano y otr.o cas.o, la medida es censurada por todo el mundo y ·calificada de desacierto poHtico; la march a a provincias de la distin~uida: fa,milia, huyend.o de un peligro real, aqul donde hay tantas mujeres y tantos ninos que no pueden hacer 10 mismo y cuya situaci6n no comparte, no puede merecer los aplausos ' de nadie, porque no hay qlile .olvidar que en ciertos puest05 don de van a reflejarse las "miradas de la- opini6n publica, no caben egolsmos; los altos cargos .imponen estrechos deberes y se traducen, en circunstancias como 1a.s a:ctuales, en grandes sacrHicios. Si la determinaci6n tomada hoy .por -el Gobernador General obedece al segundo m6vil, es tambiea desacertada, siquiera se haya: adoptado con notoria buena fe. Aunque ',esa familia ha siclo confiada a la del ilustre patrici.o D. Eugenio Blanco y al pueblo de Macabebe, flor: y nata de la lealtad filipina, ~lpue­ den responder URO y OtFO de que, sublevad.os los pueblos, si llega ·ese triste ca.so, no caigam prisioneros esa sen.ora y esos ninos, precio'S.oS rehenes para l.oS insurrectos? Y com.o a ninguil hombre se ie puede humanamente exigir que sea un Guzman el Buen.o, quien sabe -si entonces el General Augusd, herido en su fibra mas sensible, n.o .emprender£a un camino de debilidades y de concesiones perjudiciales :a los sagrad.os intereses que Ie estan confiados. Importante ha sido la pl"Otesta f.ormulada hoy, ante el Gobern~­ ·dor civil de la pr.ovincia,por varios ex cabecillas de la insurrecci6n ·tagala, y excepcionad trascendea.cia tendra ese acto para los destinos ,del pals si aquellos cumplen la promesa que nadie les ha exigido y ·que ellos voluntariamente han hecho. He aqul transcrita el acta levantada con tal motivo: ' "En la Casa-Gobiemo de la ciudad de M'anila, a 26 de abril ,de 1898. Reunidos los que suscriben, convocados previamente por

33 El SitiO ck M a.nila.-3


el Excmo. Sr. D. Pedro Alejandro Paterno, y bajo la pn~sidencia. del Ilmo. Sr. .Gobernador civil, acordaron espondneamente presen- · tar su incondi€ional adhesi6n al Gobierno de S. M. el Rey D. Alfonso XUI (q. D. g.), como hijos reconlOcidos de su clemencia y ge-nerosidad al otorgarles el perd6n de sus pasados extravf.os, ofreciendo en su virtud vidas y haciendas y tambien sus escasas influencias' ' en defensa de naestra comun madre Espana. Con 10 cual se di6 por terminado este acto con el grito de jViva Espana!, jViva el Rey!, jViva la Reima!, jViva: Filipinas siempre espanola!, jViva el exce1en-· tfsimo Gobernador genera!l!, jViva el Ilmo. Sr. Goberlilador civil!FirmaFldo todos los concurrentes despues del Gobernador civil.Jll1an Garda.-El arbitro P. A. Paterno, Mariano Juan, Mariano Ricarte, Mariano Alvarez, Emilio N. de Jesus, Santiago Alvarez, Plo. del Pilar, Licerio Ger6nimo, Urbano Lacuna, D. Fajardo, Atilano Santa Ana, Pant-ale6n Garda, Mariano Riego de Di6s, L. A. Miguel, Felix Ferrer Baunat, Teodoro Gonzalez, Maximo Alvarez, Andres. Ernesto, Cipriano Pacheco, Alipio Lorzo, Faustino de los Arias, Antonlo Pineda, Santos Nocon, B. Ignacio, Julian Montalan, Severino ' Ignacio, Vicente Viniegra, Daniel Trias, Pedro Trias, Pedro Reyes~ Estanislao Ortega y Ram6n Alpas." Esta protesta, este entusiasmo que en el pals se nota en favor de Espana, disipa no pocos pesimismos que toclos hablamos engendra-do, y, sin embal'go, nada paede asegurarse. Acostumhrados a las rraiciones, a la acechanza, a la mentida adhesion, a b refinada hipocre- · 51a, predicadas por el teneh-roso Katipunoo[JJ 16gico es que descon-fiemos, no obstantre nuestro earacter .gene1!"OSO y . siemp,r e abierto a todos los optimismos y a todas hs ilusiones. Preciso es reconocer quehasta aho,ra no hay motivos para dudat'" del pueblo filipino; brota. en todas partes el entusiasmo, p0tente y vigor()so; nacen en todos los: eorazones los espontineos off€~cimientos; ya es la Pampanga, convirtiendo a casi todos sus hijos en valiemtes voluntarios; -ya Cavite, cuna . de la anterior insurrecci6n, celebrando imponentes rnanifestaciones . y ofreciendo hombres para ernpuiiar las armas; despues, la Lagu"na,. iniciando 1a suscripci6n n2lcional y .FelilFtiendo en pocas no.ras mas del 5.000 pesos. Ante todo esto, el mas pesimista no puede menos de exclamar: "El pals responde." Sl, responde; pero ~responded. siempre? ~Responded. cuando, debilitad'CD 0 clestrufdo maestro PQder marItimo por los yanquis, si as! sucede,. sea preeiso apelar a todas sus . fuerzas vivas para rechazar a un extranjero, que declarara que no viene a hacer la guerra a los indios, sirlO a libeFtar},os de 1a supuesta. tiranfa espanola? No, 10 se. Filipinas no ha podido reponerse de la aguda enfermedad que 113, sufrido. Cal1tado el Te Deq,l.m de la paz d dfa 23 de enero, no ha habido tiempo material de que se serenen,. 34


las pasiones puestas en juego, de q1!le se extingan los odios nacidos al calor de fratricidas rruchas, de que se implanten las reformas oportunas, ni de que se recobre la calma indispensable despues de tan gnpdes conmociones. Por otra pane, el fin de la insurrecci6n no ha s,ido el mas a prop6sito para destruir iNmediatamente los Ideales y a.a~quilar las emerglas del sep..aratismo. Las impaciencias del Gobierno POF Vienaer a la ,o.pini6n publica un triunio definitivo, impacienCias traducidas en apremiantes cable~ramas ordenando al Generail senor Primo de Rivera la inmediata paz, con las condiciones propuestas por el arbitro D. Pedro A. Molo Paterno, llevaron a este General y a la Naci6n a transigir con los insurrectos, en vez de aniquilarlos en las asperezas de Biacnabat6, hallandose, como se hallaban, maltrechos, heridos de muerte y estando como estaban preparadas las columnas de ataque para esta final operaci6n. De aqul que los separa. tistas vieran en. e1 pacto, no la muerte, sino el¡ triunfo moral y la consumaci6n del movimiento revoluc10nario iniciado en las lomas de San Juan del Monte. De aqul que los indios insurrectos, traduciendo nuestra generosidad en debilidades, a1ocados por las nuevas ideas, no comprendidas y por eso mas hermosas a sus ojos, y roto el freno de los tradicionales respetos, considerasen la paz como una simple tregua, y faltando a 10 en esta prometido, promovieran levantamientos como los de Zambale3 y Cebu, que hubieran llegado a set" formidah1es si el General Primo de Rivera no los hubiese sofocado energica y rapidamente. Filipinas, pues, no ha tenido tiemp'0 de tranquilizarse. La paz de Biacnabat6, aun hecha a destiempo, hubiera traldo esa tranquilidad al sustituir la poHtica necesariamente dura de la guerra can una poHtica de olvido y de concordia, que cortara abusos e inmoralidades, que hiciera la debida selecci6n entre 10s indios y que Hamase a los buenos y a los aptos a participar de la direcci6n de los neg0cios publicos. El conflicto hispanoamericlno ha agostado los mas hermosos frutos de la paz; viene a perturbar de nuevo este pals, clonde .1"tlIl no ha sido posible serenar el revuelto oceano de las pasiones engendradas en la lucha. Por eso es muy de temer que, aun respondiendo, como responded, la parte sensata: y siempre fiel de Filipinas, los separatistas, ahmtados por los yanquis y faltando a las promesas espontaneamente hechas, se alcen de nuevo contra la soberanla espano!a en el Archipielago magallanico.

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CAPITULO IV 28 de abril.

' , ¡ esto.s d'las un marcad 0 caracter guerrero.; notase Po.r toT lenen das partes febril actividad; los jefes y oficiales del Ejercito o.cupan sus puesto.s; lo.S antiguos Cuerpos de Vo.luntario.s reorganizan sus cuadro.s y abren nuev<>s a!listamiento.s; se crean mas agrupacio.nes. El peligro. se aproxima cada vez mas, y todo. el mundo. se apercibe a 1a defensa, y bien puede decirse que Manila enter a se alza en :4rmas para rechazar a lo.S enemigos. Yo, que tambien quiero cumplir con mis deberes de espano.l, me alisto. hoy en la simpatica guerrilla de San, Miguel, de glorio.sas tradiciones en el vo.luntariado de Filipinas por los brill antes servicio.s que ptrest6 en 1a pasada campana, no s610 vigil an do el rlO Pasig y convoyando viveres, municiones y gab arrashospita1lt!s, sino dando una de sus secciones para que, en concepto de escolta de honor "del General Lachambre, asistiera a la import ante toma del pueblo. de Silang, primer formidahle golpe asestado a la insurreccion separatista. De provincias siguen recibiendo.se no.ticias altamente satisfactorias; tambien en ellas se advierte extrao.rdinaria y guerrera actividad. En la de la Pampanga estan ustos el Bata1l6n que manda D. Eugenio Blaflco y d Tercio "Anda y Salazar", a cuyo. frente se haUa don Felipe Buencamino; en Pangasinan, el capitan de Infanterla Sr. Acebedo., hijo. del pafs, o.rganiza una nueva agrupaci6n bajo el tftulo. de "Tercio de Bayambang"; en Cavite se alistan, en el pueblo. de San Francisco. de Malab6n, mas de mil individuos. No. cito. mas porque estas Memo.rias se harlan harto. pesadas; basta decir que en todas partes se revelan gran des ,entusiasmo.s no. crddos, y que energfas al parecer muertas, bro.tan virilmente al anuncio de la guerra.

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Ayer se tJ!:aslad6 _at Ayuntarnien-to el Capita~ general D. Basilio Augu.sd con sus ayudantes y la secci6n de camp'ana. Tambien se instal6 ayer en las casas consistoriales el Generall don Celestino Fer.nandez TejeirQ, Jefe de Estado Mayor General de este Ejercito. Considero pocc acertado este cambio de- residencia. D£Cese que se ha hecho en cumplimiento de 110 que para semejantes' cas.os disponen las Reales Ordenanzas; pero e~tiendo .que sobre las Reales Orden anzas, c.omo soh re cl!lC!\tquier otta ley, esta en estas circunstancias el tactx> poHtico del gcbernante, que acon~ejaba, a mi juicio, no tomar semejante medida. CIOn ella, y en el caSQ no s61c posible, sino prebable de un b(i)mbardeo de la p0bla:ci611, se expcne la primel"a autoridad a verdaderos peligros, que poddan sel" de .funestas consecuencias en el-Archapielago. Ademas, esparc,e la desconfianza en cl vecinaari0 y hasta: ahate sus energlas, p1iles aunque no 10 sea en realidad) se asemeja a una hufda de los arrabales en busca del seguro de las _mura1las. Acasc la mas prevlsora de las medidas adoptaclas 'Por .el Marques-de Estella, y la que mas ccnt;ribuy6 a devolver la calma al vecindario, sea la de haber fijado su residencia en el palacio de Malacaiiag, abandonadQ desde 10s ccmielilZOS mismQs de la pasada insuIt'recci6n por haberse trasladado ei General Blanco a Santa P.otenciana y nc halber salido mmca el General Pclavieja, que Ie sucedi6, de la Casa AYU1'l!tam.~ento. No constituyen, sin embargo, este y otros pequenos lunares que nan podido aclvertirse, suficiente base para jutgar de las dotes miIi-tares y polfticas del Generai Augustf; pe'ro, d.e to-das maneras, -c onsidero q,ue el relevo de D. Fe,r nando ,P rimo de Rivera, hecho d£as antes de declararse la guerra" es 1:1no de los muchos tropezones de los gobernantes de aU a, que en las C(i)sas ultramarinas obran siempre a tontas y a locas, dictando leyes a capricho y sin fijarse en las ccndiciones de l.os q1ile han de ser gobernados pOl" elIas. Ign6ro las aptitudes del nuevo Gobernado.r, ~ue fuerza es confesar ha llegado precedi-d.o de una envidiable aureola de honradez y entereza de cara.cter; pero reeonOZCG que por s'ohFlesa,lieates que sean esas aptitudes, ha de trQpezar con el grav£simo inconveniente de ser nuevc en un pals tan distinto en caracter y ccndiciones de la Peninsula, y que, para cclmo de males, va a atravesar p<><r ~as mas graves crisis pOl' que puede pasar pueh10 alguno. Repito, sin embargo, que todavla no. hay racional motivo para formar desfavorable juicio acerca del General Augusd; el tiempo y los sueeS0S q\!le sobrevengan ]e mostraran tal como es, que vivimos en d£as en que han de -aquilatarse meritos y defectos y en ,que sera imposihle que las figuras de relumbr6n sigan ofuscandQ a nadie con su faIso brillo. r

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Ancho campo se Ie ofrece al General para lucirse: a las atribuoeiones inherentes a los cargos del Gobernador ·General, Capitan General y General en Jefe, que se reunen en su persona, hay qrue agregar las extraordinarias de gobierno de la naci6n que Ie ha otorgado 1a Metr6poli en reciente telegrama. Por cierto que considero acer·t adfsima esta concesi6n, porque por azaves de Ia guerra podernos enc.ontrarnos sin cable, y sobreveriir t ales conflictos que sea necesario atajar con la ' fuerza de las armas y con reformas .poHticas, para cuya concesi6n no estarfa en circunstancias norm ales au torizado el Gob ernador general.

*** Nuestras autoridades no se descuidan en preparar 10 necesario p ara un ataque, que no pl!lede demorarse mucho tiempo. Hoy se han trasladado de Intramuros. varios estableeimientos reEgiosos y de beneficencia, quedando instalados el Hospital de San Juan de Dios y ·el Beaterio de Santa Rosa en el pueblo de Santa Ana; los Colegios de la. Asunci6n y Samta Isabel, en 1a cas41 del Arzobispado en Sama Ana y en 1a de D. Pedro P. Rojas de San Pedro Macati; la Congregaci6n -ae 1a Compaiifa en el Asilo de Mandaloyon, y las religiosas de Santa -Clara, en Sampaloc. Tambien por la Orden general del E jercito de hoy se establecen, ·tm previsi6n del -bombardeo, puestos de socorro en los cuarteles de 141 Luneta, Fortin y Meisic; en la Puerta antigua de la Aduana y en 'la Fuerza de Santiago; se establece asimismo una ambulancia en San Miguel y hospitales de sangre en los conventos de San Sebastian, ~Sampaloc, Paco, ,Concordia, Recreo de los Jesultas y finca de Ro'xas, en San Pedro Macati. La. Comisi6n Civil cde Defensa ha· ql1erido tambien echar su cuar,to a espadas, dirigiendo una largulsima circu1lar al vecindario, cuyo ·documento resulta, con toda la buena fe del mundo, insustancial y ·al'lodino. No s610 incurre en 10 que puede llamarse inocentada-tratandose de artillerfa de tiro dpido-de creer que pueden avisarse los disparos por medi? de campanadas, sino que, en resumidas cuen"tas, aconseja al publico que haga 10 que mas Ie guste: quedars'e en Jos arrabales 0 marcharse a los pueblos cercanos. ~'"

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En las oficinas, en ~41s calles, en todos los sitios donde se reunen .dos 0 mas espaiioles, es hoy objeto de vivlsimos comentarios 1a resueha actitud de Alemania _de no declarar su neutraiidad en el con-.flicto hispanoamericano, reservandose su completa libertad de ac-


d6n. A este p.r@p6sit-G se recUierdan aquellas palabras del Emperador' Guillermo d.e que mie.ntras cH cinera espada, los americanos no se apoderarfam de Cuba; y de una y otra cosa se deducen por muchos. oOptimistas conc1usiomes. Gran parte de los espanoles afirman r.otunaamente que no estamos soloOs, que 1a justicia de nuestra causa y el deseo de que America lilO se mezcIe en llOs aSl!lfltos eu'r.opeos haran que tres .0 cuatro graades potendas vengan a c.onsolarnos en nuestras cuitas y a ayudarnos moral y materialrnente. Yo no puedo par-· ticipar de semejafttes 0pt~mismos. iEstoy convcmcido de que Espana. es el unico puehlo que, desoyendo sus propias c.onveniencias y huyeadoO del prosa.{smo del siglo XIX, aun rinde culto a aqueUos purfsimos ideaks que se forjaron al caior de fas ideas cabaHetiescas de :Ia Edacl. Media, ideales que han pasado de moda en casi todo el mundo, em parte p@r la inveaci6n de las modernas ma€).ulmas de glilerra, que e:xcIuyea casi el valor personal, factor prindpaHsimo en las antiguas batallas, y en parte por el desarrollo de la filosoHa positivista, POCOI arraiigada: en Espa,na, ,ql!le enseFiando a los puebl:os como unico fin practico el lucro, 'arranca de su coraz6n, como si fuera una mala hierba, todQ sentimientQ de nobleza y justicia, de caballerosidad Y' clelicadeza. La f'l!l'erza hru tal ha sidoeTevacla por todas las naciones· a la categorfa de principiQ axiomatic@, y as£ Espana, aferrada 1 lQS antiguoOs ideales, s6Jo eacuentra 00 ep£tetos infamantes 0 estcril compasion. Europa, qu-e con liaa. sola palabra pod-rIa dirimir ~ste conflie-· tQ, amedrentada por el paVQr.oSO tantasma de la guerra universal, no prQmmciad esa palabra. Cont;lJmos, 51, cQn. la simp ada de tooos loOS ,puebIQs, exceptuado el ingles, rdlejada en los principales periGlllicos; perQ pareceme qu'e e'sa simp ada es puro incit;:nso, y se asemeja al clotiofor~o C.oll que se tratan de adormecer los dolores de ias amputaciones. '10 * * Esta noche, estando yQ en la Alhambra, corre 1a especie de ' que' la flota enem,iga ha salido ayer de 1a baMa Mirs CQn rumbo al Sur. La noticla pr,oduee algl!ll'la con1mod611; parte del pulJlicQ pide ,q ue 1a orquesta ejecute la naciQnal marcha de "Cadiz", que se corea con entusiastas vivas. Veo que todas las caras esd.n ategres y estQ me satisface. YQ no . esa al ' me ~c.ogen de nuevo se, po·r que, no pued.0 compartlr le gna; t~mores y presentim.ientos, y por eso, sin ducia, el sublime gritoO de"jViva Espana!" que lanzo, CQmQ tQdos, porque tambien br~ta vigoCOSQ en mi coraz6n, tiene en m! mas de ferviente plegaria que ~le himno de triunfo.


CAPITULO V 29 de abril.

Corre por la ciudad un rumor que no creo, y cuya confirmaci6n me disgustada: que la Escuadra espanola, al mando del Almirante Montojo, acaba de entrar en la bahia. Digo que no 10 creo, porque, como ya dije, el dia 25, a las once y media de la noche, sali6 para situarse en el puerto de Subic, determinaci6n tomada por el Almirallte despues de varias juntas de Jefes y Oficiales de la Armada, en las que, con todos los dat0s a la vista, debi6 discutirse ampliamente el grave asunto que se presentaba y acordarse que la Escuadra espanola esperase a la americana en el cit ado punto por razones que sedan buenas cuando fueron aceptadas, y que ignoro; y digo que la:o confirmaci6n de esta noticia me disgustada, porque siguiendo lascosas _en el mismo estado que estahan a1 acordarse la traslaci6n a Subic, este cambio implicada poca fijeza de opini6n en el Almiran-' te y poco dominio de la- situaci6n. Acaoo de confirmar la noticia: algunos .barcos de nuestra escuadrilla han vuelt0, y los demas entraran tambien. Han dejado en Su-¡ bic cuatro buenos canones Ord6nez de 15 centimetros, con sus correspondientes municiones, que fueron trasportados alH hace mas deun meso Estas cuatro piezas las cedi6 el Ejercito en tiempo del General Primo de Rivera a reiteradas instancias de 1a Marina, y eran, en uni6n de .otras dos de igual sistema y calibre, que se colocaron en Punta Sangley (Cavite), las unicas que aqui teniamos en disposici6n de hacer algo de importancia. Estos hechos agitan hoy a los vecinos de Manila, que Ins censuran con violencia.


Creo que riada sabe oficia1mente nuestra primera autoridad de ,est0s sucesos, con gran extraneza de todos los que conocen los reglamentos de campana y las atribuciones del Gobernador Gl.!neral y General en Jefe de Jas tropas en operaciones, calidades amhas que ponen bajo sas 6rdenes las fuerzas navales. Parece ser que a sa llegada a Subic supo el Almirante que los ,cuatlio canones Ord6fiez, que debtan emplazarse en Isla Grande, tardarfan aun mes y medio en montarse, pues las baterfas no estaban conc1ufdas, y, al propio tiempo, que s610 se habfan colocado cuatro ·0 ciRco torpedos. Estas noticias, unicamente como hechos consumados y ya in·cme.diables, dada la proximidad de un ataqae de la Escuedra americana, podfan explicar la vuelta de la espanola; habiendose tambien tenido en cuenta para ello el fOfldo del puerto de Su bic, que alcanza unos cuar€lnta metros, Cil"CUflstancia digna de que la tomaran en consideraci6n, pues tal profundidad seda. causa de que perecieran las tripulaciones de los barcos al ocurrir a estos cualquier pe·rcance; -p ero la .demora injustincada en el montaje de las cuatro piezas Otd6iiez y la falta de torpedos, extrafia a tooo el mundo. La Escuadra se ha dirigido a Cavite y va a situarse en las ense'nadas de Bacoor y Cafiacao, en los sitios donde hay menos agul. La ansiedad es grande; todos tiene £ija su atenci6n en nuestros .de~i1es barcos, que apenas se divisan desde aqul. Se presienten ya los horrores del combate. Como estas notas son las irnpresiones que recibo en toda su espontaneidad, he de confesaros que el Almirante y sus subol"dinados me inspiran verdadeFa simp ada en estos momeRtos, y que me apena profundamente pemsar en sus bmilias aqu£ residentes. jCon que in.descr~ptible angustia veran moverse los minuteros del reloj! Porque yo no me forjo ilusiones; van a la derrota, al sacrificio de -sus vidas en holocausto de la Patria. Todos los barcos son de mad.e,ra, viejfsim.os, sin protecci6n, con muy poca artiHeda, con las ma'q uinas descompuestas algunos de elIos; y en estas con.diciones, ante h enorme superioridad de las naves americanas, que Uegaran de un momento a otro, tienen que ser destrn!dos a las primeras andana<las de estas. No piensan as! todos, pues hay quien, aumentando las condiciones de nuestras naves y disminuyendo las de los enemigos, creen en la pFobahilidad de un triunfo; y otrosquier~n suplir con el valor .de los marinos es·pafi([)~es Las corazas de los bU€Jues y 01 numero de la artillerfa. Todos los faros han sido apagados para desorientar a los baques am~ricanos) y a las doce de la noche se hace 10 propio con el alum-


Drad.o e1ectrico de la ciudad, que queda sin mas luz q1!le la que envIa la ¡luna, mud.o testig.o de esta noche de inquietud y so,bresalt.o, ''iJue luoe esplendor.osa en e1 azul pudsimo de este cielo tropical.

,:En el momento en que, pr.ofundamente preocupado, iba a PQner nn a mis not as del dfa y a buscar descanso, impresiona agradable'mente m.is ofdos una music a algo lejana, cuyas duIces notas me traen melanc6lic.os recuerdos de mi desgraciada Patria. ~Suen.o acaso? ~Es ilusi6n de mis sentidos? Vale la pena averi,:.glllarlo. La noche esta hermosa; la ciudad, s'Olitaria; a veces., ~ntre los ponas de cana .0 las grandes h.ojas del anahao que plate a la luz de la luna, hrillan las bay.onetas de los centinelas apostad.os, que salen a :mi encuentro dand.ome el ql.tien vive. Al desembocar por la herm.os-a ,calzada ,de las Aguadas, que llega hasta el mar, y cuyos arcas vo[tci,i'C.oS estan apagad.os, .oig.o mas claramente la musica. ~Que es esto? ~En vez de l'OS can.onazos de las Escuadras se .oyen l.oS acordes de una dulce y triste malaguena? Sigo calzada abajo y yeo en el cuartel de la Luneta a ['Os voluntari'Os del Tercio de "Anda y Salazar", rec1utados, c.omo ya he dicho, por D. Felipe Buencami.no, que, pr.ocedente de 'A palit (Pampanga), acaban de llegar a Manila t.ocando aires andaluces. Vienen a compartir con l'OS demas soldad.os penalidades y pe, l igr.os. jBien par es.os valientes y leales filipin.os! J

30 de abril.

Avisan de Balinw que a las cinco de la madrugada han pasado, ,a la vista del semafor.o y con direcci6n al Sur, cuatro barc.os ~ie guerra american.os. N'O cabe ya: duda que se dirigen a Manila en busca ,de nuestra pequena armada. El telegrafista de Ol.ongap6 anuncia que a las tres de la tarde en¡tra 1a Escuadra norteamericana en el puerto de Subic, y que en su -vista, desmonta l'OS aparat.os y se interna. De Orimi comunican que t.od" la tarde se ha oldo gran can'Oneo. Es de suponer que 1.oS americanos se hayan apoderado del ma-teFial de guerra, canones y carb6n que dej6 alH nuestra Marina. (Que habra sid~ ad destacamento que guarneda a Olongap6,

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.compmesto de 250 hom.bres entre Artilleda, Ingenieros e Infanteda de Marina? A la h>ora en que escribo estas lfneas se ignora por completo. Estas noticias, lejos de abatiF los ~nimos, los enardece; la proximidad de mn combate eon IDs a-mericanos llenat de santo patriotismo todos los pechos. Quisieramos tenertos cerca, lucnar cuerpo a cuerpo y vengar con coraje toda 1a sangre derramada por nuestros hermanos en los campos de Cuba, de que son principalmente responsables ante Dios y ante la Historia. JSH, casi deseamQs el momento de 1a Inch-a. Otra: esrpecie corn por Manila que preocupa a todos y aumenta justamente 1a indignacdon contra los amerlcanos: que la escuadra enemiga trae . 25.000 rifles pau los msurrectos, notieia que dicell ha telegrafiado a Manila nuestro Consml en Hong-Kosg. Esto puede traernos complicaciones gravfsimas; pero ¢sercl pâ‚Ź>sib[e que el pals se subleve despl!les de tantas protestas de adhesion?' Ya Vieremos. Hago punto y me voy a descansar, pU'es manana se prepara Duena zambra.


I 1,

CAPITULO VI

I

d¡e mayo.

Un canoneo imponente, graneado, despert6 esta manana a todos los vecinos de Manila, que sa1ieron del1echo sobresa1tad'Os. Aunque no habfa que preguntar 10 que pasaba, porque se temla de un momento a otro, fue grande el asombro de 1'OS habitantes de Mami1a al ver 1a Escuadra americana en 1a bahia. ~Cuando y c6mo habla entrado? ~No dijo la Marina que habfa emp,lazado canones en el Corregidor, en las bocas y en l'OS islotes que defienden la entrada, y algunos, aunque pocos, torpedos? Y en este cas'O, Nue uso se habfa hecho de esas defensas? ~P'Or .que han pasado sin resistenc[a, sin obstaculos, como Pedro par su casat Yo crda' '0 estaba convencido, mejor dicho, que no podda .impedirse el paso a 1a bahla de 1a Escuadra enemiga; pero me figuraba tambien que l~s batedas que defendfan la entrada de aquella no estaban pa~a adorno, que reeibidan a canonazos -'-l'a.- visita americana, que sus defensores lucilarlan mientras pudieran y ,que el ' combate que se trabara en aquellos puntos avanzados nos anunciada la pre-sencia ~el enemigo. Era, pUles, natu:ral, el asombro del veeindario. . Avido de noticias, pedf inmediatamente el desayuno, que n'O acert6 a servirme mi criado por el estupor de que estaba posdd'O, y dejan- . ,dolo para me}or ocasi6n, saIl a la calle. Las gentes iban de prisa; los carruajes, al galope; mujeres y chiquillos, cargados con maletines' y ¡tctmpip~sJ abandonaban despavorid.os la ciudad murada y sus contOJ;n-os ante el peligro de un pr6ximo bombardeo y se dirig£an a los barrios extremos y pu~blos inmediatos a la capital.

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Uegue en p6Cos minutes a1 Matlec611. y a la murallas, lle1'las de' gente que preseRciaJha e] desigual combate de las Escuadras. La nuestta ocupaba la s~gairente situac~6n: el C,.;stVna, buque insignia, en la ensenacla de Canaca.o, acoderado con el costado de babor' fr:ente a Maniia; el Cestilfla, tambieJJl acoderado entre d C,.istVrto, y 'Punta Sangley; POl" deFltfo de estes, el D(,')11, Juan de· Aust'J(ia y et Vlloay y por la ammra y aieu de habor del Cristima, respectivamente, los crl'lceros Isla de Luzon e Isla de Cuba; por la: proa, el aviso Alarques deZ Duer,o, y en 1a ensen,ada de Baeoof, el M filfliZa y Vetas,co~ Leso' y canonero Mindan:(j[;@, qa,e se haUaban de repanciom,es. Poco podia yo apreciar desde d sitio en que me encontraba, maxime eSMnci0- casi sirempre las escuadus envudtas en espesa y blanca huma.lied.a; pen) de vez em cuand@, disipandose esta, se distiflgufan. las evo1tJJci(i)nes de }.o's barcos; 1eg@ en la rnatJeJ!ia, no puecio deseribirlas .con tecftic~smos y apnciaciones de .vdor; pero sf puecio decir, POt;" que 10 vi y conmigG 1.05 tes.tigos de a,qweUa tr:i:ste escen.a, que fttlestros barc~os estaba'n ap~.fiados, em disposicioll de que los ene-migos no desaprovechasen ningun proyectil, que no hadan evolullilclcmes, y que Sf alg-uno se rnovla pan~da que 10 hacia aisladJlmente, por ~nil c:iativa siR duda de su comamdante y no para obedecer a plan oeterminado. Me pan~da que en aquellas naves nuestras habra IDU-che> valor, mucho, porque en realidad -se necesitaha para aguantar mas de c~nco mimiltos h ve:f:'\daclera nube de proyectiles que eniviaba Ita :artiUeda de tiro rapido de los n0rteaIN€ricamos; pefO se me figuraba tambien que al propio tiempo Faltaba direccli6n, unidad d.~ mando, d~ movimi€i1ltos, qNe habia, en fin l una [amentabJ@ Gcmfusi6n qU€ favol1eela y aJUlnimtaha nuestra flerrOta. V;oo mucno fuegl@ por ambas partes, pero c.on enOFrne s1.iperiori-· dad por la Me los norteam~1iiCalilOS; la puro.teda no, se puede a'p~ecia:r. Las n.aves am,ericaro.as evolucionam con ligereza, se acercan y r,etiFa.FJ: suces[vament~; cada ancl!anada envuelve en humo a los c@rnbu!entes y arranca exdamaciofles cl:e dol>or a los que ;Pr€sel1le1amos, pa[pitag-· tes, el desigual y encarnizado combate. jClilantos habrap muerto ya! jAh, 'lue horrib1€desesperac~6Tl! iNo peder acudir en atlxilio de' nuestr-os hermanos, de fluestros pobres marines, que alH, a nuestra vista, 1ucnan y mlJeren por ia Patria! ~Por qwe, Di<9S mIlO, mo abres; esa Hquida su perfiic[e que de ellos nos separa y trazCl!S en ell<!l! firme senda para que, nuevos hehreos, pasernos ese l'Tlar, ya tamhi,en rojo por la sangre de los combatientes? .. Sedan las ocho pr6ximamente cuando ces6 el fuego de la Escuadra norteamericClna. ~Habdan a.cabado@ ya C-(1),fi nuestra cl6b[1 Ar-mada, 0 te1'ldrfan ellos averlaS 'de consideracion que les impeciia,1J, se-gUlf el combate? 46


UnoO de S1llS buques pareda, en dectoO, q1lle iba llevado a remol-que; pero, lay!, al volver la vista Haeia las ensenad<1!s de:Bacoor y Cafiacao vi espesas columnas de flumo que sallatl de tres de nuestros barcos. jLos tres al'dian! De otro, s6lo quedaba soObre el agua la chimenea, y mas cerca. lde Manila, embarrancado en 1a playa de Las Pifias, y tambien ardiendo, el hermoOso trasatlanticoO Mindanao) barco indefenso, que, l<;:jos del combate y sin toOmar parte en nada, fue objeto de la crueldad de los ~mericalilQs, que a mansalva Ie dispararon-jcobardes!-una lluvia de granadas. Heno de pena y rabia a1 mismo tiempo me retire de aquel sitio. T9do era en la ciudad comentarios sobre el combate; unos dedan que dos <> tres barcos americanos tenlan avedas, otros que al Balti-· more Ie hab£a destrozado las maquinas una granada que dispar6 la bated a de Punta Sangley; estos, que habiamos tenidoO tantas y cuan-tas ba jas; aqucHlos daban los nombres de las vlctimas, y a todo estoO la !gente segufa sacando ropas y muebles de 1a ciudad, que tiene un. aspecto coOnsolador. Nada se sabe con certeza de loOS resultados de la lucha, y a excepci6n de la muerte del Comandante del Cristina) Sr. Cadarso, y del Capellan Sr. NoOvo, se ignoran tambien las bajas que hemos tenido. A las oOnce y media la Escuadra americana, que habfa fondeado· detras de la Hnea de barcos mercantes extranjeros, se dirige otra vez a Cavite, y a las once y tres cuartos rempe nuevamente el fu-ego. Los barcos que nos quedan, refugiados en el sene de Bacoor, ne se mu even ni hacen disparo alguno en auxilio del Arsenal, que no puede contestar al enemigo pOl" carecer, segun me dicen, de defensas. A las dos de la tarde aparece en aquel handera de parlamento. ~Que habra ocurrido? Dios 100 sabe, porque nosetros no tenemes todavfa noticias de los sucesos de esta manana, aumentando esta. i,g norancia el disgustoO y la in.quietud de la poblaci6n. La fantasia popular funcioOna en toda su plenitud; unos dicen que Montojo ha capitulado el Arsenal y la plaza de Cavite y quemado los barcos que quedaban; etros, que la Escuadra americana se marchaba y habfa pactado coOn aquel para que las batedas del Co- · rregidor y de las aocas no Ie hicieran fuegoO a su salida; nada se sabe cierte, y 10 poor del casoO es que no tengo noOticia de EJ.ue el General Augustf haya enviado persona alguna qu'e :se entere m'inuciosamente de 100 que ocurre en Cavite, encerrandese en una p asividad queno se comprende en estas circunstancias.

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I

Esta tarde el C6nsal ingles ha estade a visitar al Gobernador General para entn~garle tres canas 0, mejor dicho, n.atas, suscritas por d Comodoro yanqui, en las que este invitab'a a patlamentar y pedia todas las embarcacienes de guerra, no apresadas, que tuvieramos, y que no hicieran ias batedas de la plaza ningun disparo sobre sus ·barc{k)s. EI GeneY<i:l Augustf, con digna entereza, ha contest.l.do al ·.enviaclo que no entregaba ni una lancha ni aceptaba el parlamento y que, respecto a las batedas, no harian fuego sabre la Escuadra americana mientras esta no rompiese la:s hostilidades, en cuyo easo la plaza se d~fendeda hasta 10' ultim.o. Si esto es verdad, creo que no haee bienel General August,{ dan,do tal orden; aho'r a esta la gente enardeeida, llena d.e eoraje, apenas si queda nadie en Intramuros, y los hospitales esta.n fuera del sector ,de fu'egos; ~por que, pues, esta muestra de dehilidad que ha de ¥erjuciicarnos? ~ipOE que este reparo en provocar un bombardeo, que Imas tarde 0 temprano sufriremos, quizas en peores condiciones? Si . los americanos vieran nuestro .prop6sino decidido de ddendernos a toda costa, de emplear eenstantement~ las pocas defemas -que tenemes, ~no pod.rfa esto determmar que saliesen de la bahia, ·dando por terminada su misi6n con la destrucei6n de nuestra Escua·dra? ~NO' pareda que asi era su intenci6n primera, euando pidieron .·a nuestrO' Almirante que no les hiciesen fuego a su salida de la bahia, ·<:;egun rumor i"ublico? Estas preguntas se hacen la mayor parte de la gente y me hago 'yo; pere quiza tenga el General August! motivos justos, que ignorames, para no pensar de la misma manera. . jDios quiera que nO' se equivoque! ·En una; de las notas entregadas por el C6nsul ingies, y como cosa ,de eseasa importancia, se declara establecidO' el bloqueo de \.lanila, con menosprecio del Derecho Internacronal. 'Esta manifestaci6n del Comodoro se coml!lnica a todos los C6nsules, llamandl0 su atenci6n :.sobre la forma empleada. N6tase en la mayor parte d~ la oolonia inglesa grandes simpatfas por los americanos, y nO' tendrfa nada de extrafio que hubiese algun ..eolilflicto entre eIlos y neSO'tros. Se cree que mafi~ma a Jas ocho bombardearan esta capital. Desde ,·esta mafiana, muy temprano, ocupan las trepas los puntos previa'mente sefialados. Ya nO' hay paisanes: to dos, a excepci6n de mujeres :y nifios, empunamos las armas. epeo que es una lamentable equivocacion tener 'las fuerzas en la ·calle; desde esta mafiana no se han movide de sus respectivos sitios "que estan todos dentrode la Hnea de fuego, y con esto s6lo se conseguira que aumenten el numero de enfermos y que se debiliten las I

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-euerglas de nuestros valientes soldados, energfas ya muy quebranLadas por el clima, las penalidades de la pasada insurrecci6n y por -otras causas, que Dios castigara severamente, ya que no 10 hace quien puede y debe. Por otra parte, no es de temer un desembarco americano, pues 'sus dotaciones s6lo ascenderan en total a unos 2.500 hombres, y con esas fuerzas tendrfan, si 10 intentaran, un fracaso seguro; en cambio para el bombarde-o no hacen falta las tropas; antes por el contrario, estorban, porque las "granadas de 1a. Escuadra haran en ellas -muchas bajas inutilmente. Con una linea de vigilancia apostada en la playa tras de trincheras y con los destacamentos de los blocaos y fortines que defienden a Manila por el interior, bastaba para el caso; pero el Gobernador militar se empena en 10 contra rio, y ... cartuehera en el can6n.

Ahora me entero, por un testigo que acaba de llegar, de todo 100currido hoy en el comb ate naval y en Cavite; me apresuro a escribirlo, pues aunque son las tres de la madrugada y el cansaneio me rinde, quiero que las impresiones sean frescas. A las tres de la madrugada avisaron del Corregidor que se velan reflectorc;s electricos que dirigfan sus focos hacia la isla y que se " habfan ofdo tres 0 cuatro canonazos por las oocas. Poco despues otro aviso telegrafico de Mariveles comunicaba que la Escuadra americana habfa pasado las hocas y entrado en la bahfa. Esto no 10 su po 1a poblaci6n hasta el dfa siguiente. A las cuatro nuestra Escuadra toea zafarrancho de comb ate, y poco antes de las cinco se avistan en el horizonte, a unos 7.000 me"tros de Cavite, nueve puntos negros que avanzan en Unea de eombate, envueltos en las brumas de la manana. Rompi6 el fuego la baterla de Punta Sangley, que manda el in¡trepido teniente Sr. Varela y compuesta de dos piezas iguales a las "que dej6 en Subic la Marina; poco despues disparaba tambien la ba"t~rfa de la Luneta, a la que contest6 con una andanada un barco americano, cuyos proyeetiles eayeron en el arrabal de la Ermita, originando los consiguientes sustos, e inmeruatamente rompfa el fuego ll1:lestra Escuadra, generalizandose ya el comb ate de una manera. encarnizada. Apenas comenzado el fuego una granada del enemigo. explota en ~l castillo del Cristt"na~ dejando fuera de combate a todos 1,,)5 sirvientes de los canones de tiro rapido y desgajando el palo trinquete, 'Cuyas astillas hieren a los timoneles que en el puente gobiernan;

El Smo de Ma'1lil.Q.,-4


toma la rueda el bizarro teniente de navlo D. Jose Nunez, y gracias a su serenidad, que levanta el espfritu de la tripulaci6n, sigue el barco . con gobierno; casi al 'mismo tiempo otr-a granada prende fuego en los maleteros de la marineda. El enemigo, viendo la impunidad con que obraba, acorta sus distanc1as y afina su punterfa; los proyectiles caen por todas panes; uno destroza el servo-motor; otro. explota a popa, dejando fuera decombate a nueve hombres; otro en e1 calces y palo mesana, que hace caer la bandera y la insignia; otro en la camara de oficiales, convertida en hospital de sangre, y otros que, explotando en los panoles .de municiones, incendian el barco, que es abandonado por su tripulaci6n y echado a pique. S6lo queda en el Cristina su Comandante D. Luis Cadarso, que quiso ser el {lltimo en abandonarlo, y cuando se dispone a ello, una granCl'da Ie destroza completamente,. haciendale desaparecer. jDios acoja en su seno el aLma de este valiente y pundonoroso marino! Mientras esto pasa en el Cristina, el Ulloa, agujereado por .su linea de flotaci6n, hace agua y se hunde rapidamente; al CastilL.~ se leo. inutilizan dos canones, y al poco tiempo se incendia, y el Don JUa11, de Austria, que intenta acudir en su auxilio, no puede realizlrlo porsus averfas y por tener tambien incendiadas sus carboneras. A las ocho cesa el fuego de la Es.cuad'ra americana; el AlmiranteespaÂŁiol desembarca en la plaza de Cavite; los buques que nos quedan buscan refugio en la ensenada de Bacoor, y aquella fondea detras de las Hneas de barcos mercantes extranjeros. Repuesta y municionada la Escuadra enemiga, avanz6 nueva- mente hacia Cavite y rompi6 el fuego a las once y tres cUJ.rtos; al verificarse esta operaci6n nuestro Almirante no estaba va en los . barcos que nos quedaban, y estos, entre ellos los crucer~s Isla. deC~I/ba e Isla de Lu,zon, no disparal"on un canonazo siquiera a. los. americanos ni auxiliaron nada al Arsenal, imposibiiitados de responder al enemigo por fa1ta de canones. Poco despues de comenzado el ataque apareci6 en el Arsenal . bandera de parlamento, y su Comandante general, Sr. Sostoa, pidi6 tregua al Comodoro para sailvar m'u jeres y ninos. Este Ie respondeque n-o teniendo otro objetivo que destruir la ESC1f.adra espanola y apoderarse del Arse11'wl, y habiendo ya conseguido 10 primero, renunciaba a 10 segundo y a la plaza a cambio de que se quemasen los barcos que nos quedaban y de que las batedas de boca grande, boca chica, Corregidor y demas islotes no hosti1izasen a los arne-ricanos a1 sa1ir de 1a bahia. -En este punto-me dijo el vecino de Cavite-hay bastante os-curidad 0 se quiere que la haya; pero yo prDcurare relatar a us ted 10-


sucedido de una manera clara y segun los informes que he poJido adquirir: Cuando el jefe del Arsenal puso en el bandera de parlament0 estaba en la plaza el Almirante Montojo, que desembarc6 al suspenderse el combate naval, y es de suponer .que para que el Sr. Sostoa adoptara Ulla disposici6n tan grave, como era pedir parlan:!ento contase previamente con la autorizaci6n de aquel, que se hallaba en la misma pohlaci6n, en el convent.o de Santo Domingo, pues 10 contrar],o hubiese sido antirreglamentario y hubiera constituido un ahuso de atribuciones, por aquello de que donde hay patr6¡n no manda 11wrin-ero.

El mismo razonamient.o hay que hacer para dar par supuesto que 10 eonvenido entre el Comodoro y el Comandante genera,l del Arsenal fue aprobado en todas sus partes por el .Almirante espano!. Lo pactado ha sido quemar los barcos que nos quedaban y dar orden a las baterfas de las bocas para que no hiciesen fuego a fa Escuadra americana a su salida de la bahia. La responsabilidad de esta segunda y ultima eondiei6n tratan 'de dudirla los dos Generales de Marina y el General en Jefe; pero todos pusieron en ella sus pecadoras manos. La exigeneia del Comodoro y el convenio celebrado can el por el jefe del Arsenal, previa autorizaei6n del Almirante (hay que suponerlo asi), fue comunieado telegdficamente al Capidn y Gobernador .general por ~l Gobernador de la plaza, Sr. Pena, a petiei6n del Sr. Montojo, que no tenia. clave, pero en nada se toea el asunto de las baterfas de las hoeas; a su vez nuestro Almirante telegrafi6 ¡ al Camandante de Marina de -Manila comunidnd.ole 10 sueedido y la otra petici6n hecha POr l.os americanos de que las baterlas de las bocas no les hostilizasen al salir, con encargo de que dijese csta ultima condici6n al Sr. Gobernador General y si mereda su aprobaei6n eniviase al Corregidor la orden de no hacer fuego a la Eseuadra norteamerieana. La orden sali6 llevada por un senor paisano, cuyo nombre ignoro, de modo que saque usted eonseeueneias. ,P ero no termin6 aqui el asunto, pues simuldneamente el jefe del Arsenal eomunic6 al semaforista de Mariveles, para que este la transmitiese al Corregidor, una orden para el Coronel jefe de aquelIas baterfas disponiendo que estas no hiciesen fuego a los americanos, orden que no pudo comuniear el semaforista y se mand6 desde Mariveles en el vapor V ig1.a. Esto es 10 que se respeeto a este punta. La primera condici6n se eumpli6 inmediatamente, y la'S bareos se quemar{}n ante los mismos ofieiales amencanos que envi6 el Co-

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modoro, y por c1Jerto que tuvim.os buena tronacia en Cavite, pues las municiones de aquel1os, que se dejaron defltro, explotaban con gran estrepito, siemdo espelnznante eI rt:lido cuando se lleg6 a 1a .quema dei Velasco, cl.onde babfan guardado los marinos la dinamita, euya exp10si6n pudo tener fatales oonsecuencias para la po1>laci61i1. Lleg6 el a,H,n destructoL" de los american{')s hasta el 'Punto de no ~atende[' los ruegos de nuestros marinos de que n'O se quemase el caifionero Argos, destinaclo a:l serv1eio de la Comisi6n hidrogd,fica y do-nde se guarclaban aparatoOs Y plan~s de general utiltidad. Para terminar dire a usted que ' durante el combate naval hubo gran vallOr con algunos toques d~ herofsmo por parte de 1.os Comandamtes de los barcos y sus tripulaciones, muy especia[mente del Cristina, D01~ Juan ,de Austria y Castilla:; pero, at mismo tiempo, oastante cOl1lfusi6n y poca mniclad, ,que obligaron a los Gomandantes a obraF por su cuenta y aisladamemte ante la falta de6rdenes del buque ahn[liante y de las contradiccLones que nabla en las pueas que se dabam. Tod0 el mate.rial de guet"ra estaba easi inservible y nQ hadan dano l0s po~os proyectiles qm'€ se dispui"aban; se careda, adem~s, de caoos de cam6n y gentle que supiera manejar las piezas, que pocas veces daban en el blafl(w; y no se pusieron torpedos ell los tubos, s@gun -of decir, sin 'Que responda de ello, porqu€ como n{) tenlan coraza los oarcos s~ corda d riesgo de que una granada diera en aquellos y ocasionara uma voladura. La plaza nada Plild:O hacel! en apoyo de la Escuadra, pues @sta se coioc6 delante de los dos canones de la baterfa de San Feli.pe, unicos que podfal1 dispaliar contra 1a americafta, inutilizando sus fuegos. -~y de bajas?. pregunte con mied(1) . . -jUm h0rror! La Marina ha prodigado su sa-n gre en defensa de . 1a Patria; -asciendcn a ciento uno los maertos y a di(')scientro~ setenta y ocho los heridos ... -jPobres ma.nires, v1ctimas de cincuenta afios de desaciertos e . l·d mm€>raJ 1 ades ,....

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CAPITULO ¡VII

2

de mayo.

jFecha memorable para la Historia patria! jDfa de glorioc;a recordaci6n, en que juramos morir antes que ser dominados por el co10so del sigl~! ... jQuiera Dios que su recuerdo nos inspire y aliente en estos momentos! " La gemt:e se echa a la calle temprano en espera del bombardeo que" se cree comenzara a las ocho. S6lo se ven las personas que han de tomar parte en la terrible operaci6n; ni una mujer ni un chiquillo; las tiendas estan cerradas. Se teme y s.e desea que los minuteros dell reloj sefialen las ocho; constantemente llegan noticias de los que se hallan en las murallas que dan al mar, las cuales no acusan movimiento a~guno de la Escuadra americana, que contimh fondeada en Cavite. Dam las ocho y ... ni un barco "siquiera se mueve de su sitio; avanza la manana y... 10 misrno. ~Que pasara.? Poco despues los americanos pi den al General en Jefe los barcos que nos quedan con sus ensenas y dotaciones, y no se accede a esta petici6n, por cuya negativa se cree que el bombardeo anunciado para las ocho comenzara. a las doc-e. Estas intermitencias tienen a la poblaei6n en una tensi6n nerviosa muy desagradable.

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¡Mientras tanto, graJves aconteelmlentos se desarrollan en Cavite. Los amerieanos quieren acabar aquel asunto, aunque para ello tengan que prescindir de sus compromisos. jBah, que importa esto a 1a Republica norteamericana, ni que sabe de esas cosas! £1 Comandante general del Arsenal ha comunicado al Come>doro Ja quema de los barcos que restaban de nuestra Escuadra, y este [e ha contestado que su Jefe de E. M. hajarfa a conferenciar con el. . Dije, por boca del amigo que anoche lleg6 de Cavite, que los americanos habfan pedido que no les hicieren fuego las baterfas de las bocas de la bahfa al sa:lir ellos, exigencia que tambien se cumpli6, con 10 cuai quedaban realizados lQS unicos deseos dd Cpmodoro, pues que clacramente manifest6 a'l Comandante de'l Arsenal de Cavite "que no teniendo otr(J objeto que destruir lOr Escoodra espanola y el Arsenal, renunciaba a 10 segundo si se q~tenw.ban los barcos espa.noles que quedasen y no disparaifiJrm a los suyos, al salir, las OBrterUts de las hocas". Decir esto equivaHa a declarar terminada su misi6n y a prometer S1l1 salida de 131 baMa. Era la parte q14e a la Escuadra americana tocaba cumplir, a cambio de las concesiones por nosotros hechas, porque S1 no fuera as! es ljndudabie no se hnbiese dado aquella orden a las baterfas. PNes bien, lejos de cumplir su pane, el Comodoro, cual corresponderfa a un hombre menos practico, pero mas caballero, contest6 al COrnlandante del Arsena~ de Cavite, por medic- de su Jefe de E. M., intimandole a que abandonase el Arsenal y 1a plaza de Cavite antes de las doce de la manana, saliendo 1a fuerza sin armas y clando los Jefes y Oficiales palabra de honQr de no hacerlas en 10 sucesivo contra los Estados Un.idos. El Comandante general del Arsenal reuni6 a los Jefes y Oficiales de la Armada que alH ha,bla, 'Y aunque .no se 10 que acord.lron me 10 supongo, pues al poco rato el Sr. Sostoa eom14nicaba al General Gobernador P. M.de la plaza, D. Leopoldo Garda Peiiia, que los americanos tomarfan posesi6n del Arsena1, cuya 'bandera estaba ya arriada, a las doee de la manana, y que ellos se retiraban en cuanto pudiera par1amentar con el Cornodoro un Jefe de la Armada, que al efecto iban a enviar, para que recabase de aquel mejores condiciones de capitulaci6n. Extraneza y disgusto produjeron en el Sr. Pena aquellas nuevas malas, que ya oorrfan por la ciudad mas 0 melilOS des;figuradas, aSI como la especie de que los americaRos podfan considerar a la guarla rendiei6n becha por el Sr. Sostoa, nici:6n de 1a plaza dentro aunque no di6 cnfd1to a esto ultimo, pueSlLO que para nada intervino en los c0nvenios qu~ la Marima babla: hecho. La situaci6n era seriamente comprornetida para el General Pena,

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-y aSI 10 comunico a Manila, reuniendo inmediatamente 1a Junta de Defensa, constitufda por cuatro Jefes, un Comisario y un primer Teniente, que acordaron por unanimidad evacuar la plaza en el caso ,de que los americanos exigiesen su rendici6n. Para la retirada, si era necesaria, habfa concedido autorizaci6n el General en J efe c.ontestando al telegrama que el General Perra Ie transmiti6 manifestandole la crftica situaci6n en que se encontraba. Algu¡ien del Arsenal dijo al Genera!l Pena que el Gomodoro alegaba que en una plaza no podia haber mas que una bandera, y que habiendo sido arriada la del Arsenal deb fan considerarse rendidas y prisioneras todas las tropas de h plaza. Era este un punto muy importante, que urgia poner en claro al General Pena, y al efecto, -comision6 al Coronel D. Diego de Pazos para que viese al Como doro y Ie explicara la diferencia de mandos y jurisdicci6n y Ie manifestase que ni el ni la fuerza a sus 6rdenes entraban en la rendici6n ¡del Arsenal, por cuyo motivo no arriaba la bandera espanola de la plaza. El Coronel Pazos, en uni6n del comisionado que enviaba el Jefe -del Arsenal para mejorar las condiciones de su rendici6n, fue aver a1 Comodoro y Ie expuso 10 que Ie orden6 el General Pena. Aquel reconoci6 h justicia de los razonamientosque Ie hizo el Sr. Pazos y <consider6 no comprendida en Ja rendici6n .del Arsenal la plaza de Cavite ni su guarnici6n, pero intim6 al General Pena, por conducto ~e su enviado, para que a las cinco de la tarde se la entregase 0 la evacuara, pues en caso contrario, y pas ada aquella hora, romperfa -el fuego. La plaza de Cavite, que no es fuerte como muchos creen, pues s6lo tiene murallas por un lado, esra unida al resto 'de la provincia por una lengueta 0 istmo llamado de Da1ahican, de modo que po"Han rodearla perfectamente los barcos enemigos cruzando sus fuegas, y esto hicieron, destruida nuestra Escuadra; duenos 1'Os enemi:gos del Arsenal, cuyas edificaciones de igual altura que la murall1 esran a ella adosadas, con uno de sus barcos 9ituado junto al di,que de a-quel, dominando con .otr.os toda 1a ensenada de Bacoor y ,el istm.o de Dalahican y no pudiendo Ifunci.onar las baterfas de San Felipe y Porta-Vaga, porque sus fuegos resultaban ineficaces y es"taban ademas batidas de reves y enfiladas por las posiciones de l.oS otros barcos, cuyos disparos se cruzaban sobre el istmo de Dalahican, cortanclo de este modo 1a unica retirada que tenIa l~ guarnici6n, era imposible toda defensa; quince minutos hubiesen basta.d.o para rendir la plaza en tales condiciones, y no se hubiera obtenido otro resultado que causar in{ltilme~te numerosas bajas en las tropas y tener que rendir con armas las que quedasen~ mermando

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aSl las escaslsimas de que podemos disponer para subsiguientes sucesos. For .estas poderosas razones se ba lIevado a cabo el acuerdo de. la Junta de Defensa de evacuar Cavite pOl" las tropas que la guarne-dan, que' eran solamente dos compaiHas del regimient-o de Hnea ndmero 74, una de Infantelifa de Marina y una seccion de Artilleda. compu,esta de cincuenta hombres, evacuaci6n Iqlil.e se telegrafi6 a1 General em. Jefe. ·E i Geaeral Peiia ha llevado consigo todos los confinados del Pre_ sidio, y comunic6 a1 jefe amera.can0, por medio del Coronel Pazos, que no pudiendo trasladar los heridos -y enfermos, los dejaba en la. plaza all amparo del Convenio -de Ginebra y del honor y ia fe de Jos americanos. Estos prometieron respetarlos. En la retirada se inutilizaron los ci€rres de los caiiones empla-zados 'Ci}l.l'e ni() podfan traslardarse _por falta de tiempo y de medios de: _tracci6n; se reeogieron los ton.dos y todo el armamento pord.til que nabla en el Parque, mas cuatro piezas de 8 cendmetros arrastradas a. brazo !}i'0.r los imfatigables al!'tiBeros. Las fuerzas del -General Peiia ascienden, poco mas 0 menos, a mil quinientos hombres; espaiioles peninsulares s610 habra unos 650. Con ellas quedan oeupado.s los pueblos de Bacoor, Naic, Santa. Cruz y San Francisco de Malabon, Rosario, Noveleta, Cavite Viejo e Imus, mas algunas fuerzas de vigilancia desde la playa de Bacool: hasta el Zapote 0 cerca de el; pero en todos esos puntos son muy debiles los des<tacamentO-s. _ Estas noticias que han llegado en seguida a Manila producen pe-nosa impresi6n en todos, pues 10 que la mayoda crey6 que se reduda a la destrucci6n de flUi€stra Escl1ladra y (}cl1lpaici6n de cualquier isla de poca importancia, como la Para:gua, Carolinas, ·Marianas 0 Jo16, va tomando proporciones alarmanljes y, a juzgar por 1a rapidez de los acontecimientos, pronto seran los americanos duerios de todo. La idea de que pisan tierra enfrente de nosotros, ados pasos de Manila, subleva todos los animas; de todas las bocas sale el grito de ja Cavite! Nadie comprende que nos estemos quietos. Se da. por seguro 1a formaci6n de una fuerte cohunna -€}ue auxilie al General Peiia y eche a los yanquis de Cavi~e. Yo me explico el disgusto y el entusiasmo de que al mismo tiempo esta posdda la opini6n, ' f>Orque en estos momentos de borrachera patri6tica todas las empresas parecen faciles, se siente mucho y se r·@'fiexiona poco; pero tan ccnvel1cido estoy de 1a necesidad que el General Peria tuvo de evacuar 1a plaza como de 1a imposibilidad que hay para ohligar a los americanos a desalojarla, si es que la han ocupado mat~rialmente.

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Cuantas tropas intentasen pasar desde N oveleta a 1a plaza serian: barriadas en el istmo de Dalahican por 1a numerosa artilleda de tiro rapido de los barcos enemigos y no conseguiriamos nada; pero como· es inutil hacer consideraciones en estos momentos al hervor de la sangre, m€ las reservo y Unicamente en estas Memorias las ap!lnto ~. No se sabe a estas horas' que ha sido del Almirante Montojo. En Cavite no esta, pues todas las noticias que de al11 se reciben las ' envfa el Comandante del Arsenal, y en Marnla es de suponer quetampoco, pues ya se hubiera presentado al Genera.J. en Jefe, aunque muchos aseguran que lIeg6 anoche. Si esto es cierto, ~por que no sc' ha presentado en seguida? ~Por que el General en Jefe no Ie ordena que se presente inmediatamente, ya que los graves sucesos de eaviteexigen urgente y minuciosa cuenta?

::- * * Todo se vuelven hoy malas noticias. La cosa va a escape. Esta.. tarde se presentaron dos barcos de la Escuadra enemiga en la isla del Corregidor, intimando su rendici6n. El Coronel jefe de aquellas baterias, D. Maximiano Garces, y eL Gobemador P. M. de la isla, D. Augusto Miranda, pidieron parlamento y han pactado con los amel'icanos evacuar inmediatamentecon las tropas a sus 6rdenes los puntos del Corregidor, Fraile y Pulo Caballo, quedando en el primero el Gobernador y cien soldados para sostener el orden en la isla, destruir todas 1:1s municiones de guerra. y entregar a las fuerzas de los Estados Unidos los cierres de los ca-nones, que estas ntlmdran hasta la terminaci6n de la guerra e inuti-lizaran si abandonasen las islas. Al pasar por el Malec6n he visto que se ha empezado a des-· montar la bateda que se hab£a emplazado en la punta de la escolIera y que se han retirado los 150 artilleros que la protegfan, por 1:1facilidad can que el enemigo podda apoderarse de ella. ~Pero porque no se estudi6 eso antes? ~Por que en los cincuenta dlas que tuvimos no se prepararon las casas bien y s~ hiro un plan definitivo? ~Es que vamos a pasar el tiempo, ahara precioso, .en anular hoy 10 que se acord6 ayer? La agitaci6n publica aumenta con estos desagradables acontecu-· mientos. Dios sabe 10 que puede pasar.

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CAPITULO VIII

3 d e m ayo.

Sigue Manila en expectaci6n ante la perspectiva de un bombar<leo. A las once estuvo por fin el Almirante M-ontojo a visitar al General en Jefe. Se ignora 10 que trataron. Los enemigos son duenos desde ayer de la plaza de Cavite. Al re1:irarse nuestras ftierzas tuvieron que dejar los heridos, como ya dije, bajo la salvaguardia y amparo del Convenio de Ginebra, que los -amed-canos dieron palabra de respetar, aunque en esto como en todo ba resultado un poco elastica y convencional la delicadeza de estos ~,.epresentantes de La mas alta civilizaci6.nJ pues segun noticias enviadas por el medico de Canacao, que qued6 con los heridos al capitular el Arsenal y ser evacuada la plaza, no han desembarcado -fuerza en esta y unicamente han puesto una guardia de cuatro hom- _ bres y un cabo en el embarcadero del Arsenal, y aprovechandose de -este abandono en que los americanos tienen 10 que con tanto ahinco -y premura pidieron, nuinerosas turbas de indios, con armas que han -cogido en el Arsenal, recorren las calles escandalizando y saqueando :.a mans alva ; han entrado en los hospitales; robando a los heridos y hermanas de 1a Caridad cuanto ten tan, amenazandoles de muerte y promoviendo el consiguiente pavor en aquellos pobres seres indefen$OS, que, postrados en el lecho del dolor, estaban a merced de aqueUa muchedumbre de salvajes. <Es esa la consideraci6n que merece a los americanos la C r uz Roja, respetada y defendida por todo hombre bien nacido ? <Es ese -el cumP1.imiento que hacen de su palabra de honor? <0 es que cr een ,cumplirla con no ser ellos mismos los que realicen tales fechorfas ?

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Sabre eIlos unicamente sobre eIlos puede caer esa vergiienza y esa responsabilidad, porque al intimar la entrega de la plaza, al obligar a nuestras tropas y autoridades a que la abandonasen, estaban en d deber de ocuparla y mucho mas quedando en ella, al amparo de la bandera americana, casi todas las pobres v1ctimas del combate naval; quedaban en el deber de mantener el orden en Ja poblaci6n para que no se diera el triste especd.culo que se ha dado en aquellos hospitales, y si no disponfan de fuerzas para ella, que hubieran esperado a tenerlas, que no hubieren intimado el abandono de una plaza de la que no podian posesionarse con realida~ y eficacia. Hasta ahora ningun caracter separatista tienen esas turbas que saquean a Cavite; son gentes de mal vivir, los metodeadores que siempre aprovechan taJles momentos para apoderarse de las poblaciones abandonadas por las tropas y las autoridades; pero Dios sabe las consecuencias que eso traera mas adelante; por 10 pronto, dis- ' ponen de una porci6n de armas del Arsenal, que no se tUViO la precauci6n de recoger. Se dice PQr todas partes que algunos botes de americanos han atracado a la playa de Bacoor y han hablado can la gente del pueblo. No respondo de 1a noticia. No se preparan aun refuerzos para el General Pena, aunque pareda natura.l que se hiciera, pues es de esperar que por esos sitios dande tienen una base comenzad.n sus operaciolles los amencanos cuando traigan trapas de desembarco. Han empezado a llegar los tnarineros de nuestros barcos. Da pena verlos; Began en gru pos, cada uno por su lado, desastrados, medio muertos de hambre. En los pueblos costeros a clonde arribaban los s(i)corrlan algo l'Os indios con comida y ropa; nnos vienen con gorra, otros con S(1;lacot, aqwmos con la cabeza descubierta, estos con trajes ~n que hay alg@ de militar, de marinero ÂĽ de paisano, y en esta forma, por eaminos diferentes y a distintas horas, cabizbajos, maltrechos, sin Oficiales ni Jefes, van Ilegando a esta capital. Se conoce que despues del combate los Jefes y Oficiales, con honrosas excepciones, no se ocuparon en organizar las tripulaciones debidamente y acompanarlas hasta Manila. Si el combate fue heroico, 1a retirada esta siendo desastrosa.

No .Ruedo sustraerme a las tristes reflexlones en que mi espfritli se abisma, a la penosa impresi6n que en mf han dejado los sucesos. que aeabo de consignar.


jCuctntas responsabilidades s·e pueden exigir! · que serta largo ocuparse de ello-Ias imDejando a un ladoprevisiones e inmoralidades de los Gobiernos que han regido los destinos de la Naci6n durante los cuarenta anos ultimos, causa originaria de nuestro actual estado; prescindiendo del estupido sueiio en que hemos estado sumidos des de que principi6 la insurrecci6n cubana y con ella la probabilidad del choque con America, tiempo .que, par el contrario, aprovecharon nuestros enernigos en prepararse para la guerra; tomando la cadena de culpas en sus ultimos eslabones, pueden y deben exigirse muchas y graves responsabilidades. La destrucci6n de nuestra Escuadra era inevitable, es verdad; pero ·no tan pronto ni en tal magnitud. Pocos, muy pocos elementos "tC.m£a la Marina, tambien es cierto; pero esos pocos han sido dispersados y anulados, no han sabido aprovecharse. Hago caso omiso del numeroso personal de la Armada que aquI hay y que no esd en justa proporci6n can la importancia y numero de los barcos que componlan la Escuadra de Filipinas, pues para una docena de barquichuelo·s de mala muerte y para un Arsenal, mansi6n de telaranas, tenemos dos Generales de Marina, cuando con un Capidn de navlode jefe estarta bien servido este Apostadero y Escua.<ira, ,que consume un presupuesto que podfa estar destinado a materiall y tendrtamos ahora buenos canones, municiones y torpedos. Paso par alto las inexactitudes del Anuario oficial de la Armada, en el que aparecen barcos que no estctn terminados, s610 para justificar los haberes de las dotaciones que a enos se destinan mucho antes de -que prest0n servicios, y voy a detenerme en el momenta en que surgi61a guerra con los Estados Unidos y en la part0 que a Filipinas se refiere. Pared a natural que inmediat.amente que se supo la tirantez de relaciones entre America y Espana el Comandante gene,ral de Marina hubiera pasado revista a todos los barcos, a su arti11ado, a sus tripulaciones, para poder corregir las deficiencias que hubiera en aquellos y ejercitar estas en el manejo de los canones y en todo 10 rlemcts necesario a la preparaci6n de un combate; pero no ocu., . , rno asl. Un distinguido Jefe de la Armada present6 al Comandante general un proyecto de defensa, que se apro.b6. Consistfa en artillar las bocas de la hahl.a de modo que se cruzasen los fuergos, colocar dos Hneas d~ torpedos y situar detrcts, a ·conveniente distancia, todos los 'barcos de rIa Escuadra. El proyecto era bastante buena y se aproh6, como ya digo, no s610 por el Comandante general, sino tambien par _el entonces Gobernador y Capitctn General D. Fernando Primo de Riven. En la reuni6n de Generales que se celebr6 el de Marina

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dijp que el se eneargaba de las ohras de fortificaci6n para emplazar eanones en 1a isla del Gorregidor y demas is10tes que const'ituyen las, bocas y que eoillOcada al,gunats pi~zas que hahfa en el Arsenal de Cavite y otras que desIDo-ntarla de lQS barcos en reparaci6n. Qued6, pues, a cargo de la Armada fonificar y artiUar las bocas, pues as! 10 pidi6 el Contraimirant@ iM ontojo, y tamhien se acord6 cederle cuatrQ canones Ord6fiez de 15 0entlmetros para emp!azarlos en ef puerto de Subic. Ignoro las Juntas que p05teriormente celebrarfa el Gomandante' general de Marina CQn sus Jefes y Oficiales; s610 se que, no con mucha -qrgencia p@r ciert0, se nomhr6 una ,Comisi6n para reaNzar ell' proyectoO en cuesti6n, que algun ·Q'ficial de Marina que habfa en el Corregidor dijo que no hahf3. tiempo ni pers-ona1 tecnioo para las ob>ras, y que, no haciendo caso de esta o-piFli6n, se c,o menzaron de eua1qui@r manera, sin que e1 Comandante general .girase siquiera una visita de inspecei6n a las bocas ni se ~nterase del estado de 105 canon~s que iban a emp1azarse ni de las mUll]Cl0nes. Las cuatro piezas Ord6iiez se mandal:on a Subie para CJ.U~ otra Comisi6n de marinos, e ingenien1>s las emp}azase en Isla Grande, a Ll entrada del puerto~ Es decir, que miemtras por un 1ado se aprobaha el exce1ente plan presentaclo POf el Sr. Benavente y se aoordaba, por 10 tanto, que' n"Llestra Esc'Uadra se sitwase detras d€ las bO'cas y alH sostuviera ef c(\)mbate, si 110 habfa, por otra se enviaban muestros cuatro mejorescanones ai puerto de Subic, donde no iban a prestar servicio de utilidad alguna, pues el Arsenal en construcci6n y l01J@C{) que alH hubiera era de escasls~mo valor e importancia en CDmpal:aci6n con Manila y Cavite, dividicndo y dispersando. de tan disparatado modo las 1'0surgida alga que fa evitara. Si €staba decldido que el combate se sosuuviera en las bocas, alIi era 16gicoque se acumuhsen todos los elemel'litos de guerra qae tenfamos y allf huhiesen dadQ un gran resultado aquellos canones; todo el mundo 10 pensaba asI, porque era natural e importantfsimo defen,d er las entradas de la bahfa de Malili!la. Y como esto no pudo ocu1tarsele a Montojo, hay. que supOller. que nlO form6 plan definitivo, aun-que apr-ob6 el presentado por Benavente, y que a-wn creta, a pesar de los cablegramas del Goibierno, que no fbamos a llegar a la lucha con America, que a ultima horet. surgida a.lga que la evitara. Cuando el cable anunci6 que la Escuadra americana habfa Zafpado de la bahla de Mirs con rumbo a Fi1lipinas, acottd6 Montojo,. contra e'l parecer de la mayor pane de 1QS Jefes y Oficiales de 131 .Armacla, que la Escuadra marchase a Subic y esperase al11 a la americana, dejando abandonadas y sin protecci6n Jas baterfas que dijeron 62


I se ha,blan emplazado en las bocas y casi franco el paso del

enemlgo~

p>Or estas. En Subic volvio a variar de opinion ei Almirante, y dejando alH los cuatro canones regreso nuevamente a la bahia de Manila, situand{)se en el sitio mas desfavorable para el comb ate, en las ensenadas de Bacoor y Canacao, donde al arnanecel' del dfa I Ie sorprel~di6\ Ia Esâ‚Źuadra americana, sin preparacion a:1guna y con los pocos elementos que tenIa dispers¡os y anulados. A las bocas se mandaron las fuerzas que hablan de proteger las: ba1iâ‚Źrlas en los ultimos dfas del mes de abril, y esas fuerzas supieron y vieron a su llegada que las obras de -fortifi.cacion no existfan, que la Armada no tenIa personal tecnico para elIas ni cabos de canon para las piezas, que estas se hallaban en lamentable estado de abandono, sin limpiar ni preparar, que merced a los montajes solo tenlan_ de a!cance los canones unos dieciseis cabLes a 10 sumo, que otras piezas estaban amarradas con cadenas, de tal modo, que se descentrarfan al primer disparo y, por ultimo, para c{)llmo de imprevision y descuido, que las espoletas no podfan atornillarse a las granadas POl" ser cortas y de menor diametro que las boquillas de estas, y quelas granadas no corrlan por las estrlas del canon y para alojarlas eran precisos nueve 0 diez hombres en el atacador y mucho tiempo. Tampoco hemos nota do la existencia de torpedos en las bocas 'ni en Subic; qutis~eron reparti::rse los que habia entre los dos sitios, como ocurri6 con los canones, y 10s dos se quedaron sin ellos. Una cosa pal"ecida sucedfa en el interior de los barcos, y aSI secomprende la fa,cilidad con que la Escuadra americana ha realizado sus propositos, sin un rasguno en sus barcos y sin ~ba jas en sus tripulaciones. Siguio despues ia confusion del combate, que fue la inmolacion inutil de mas de trescientos hombres; mas tarde la capitulaci6n del Arsenal, que bien pudo volarse antes de ql.le fuese aprovechado pord cmemigo; la rendici:on de las ba:tedas y posiciones de las bocas, co~ el extrano convenio de entregar los cierres de los canones al ene-migo y de que este los inutilizase si abandonaba las islas, y como coronacion de estos hechos, la triste y palillatina llegada a M:mila delas dotaciones de -los bareos en compI eta desorganizacion y abandono. lEI Gobernador General, por otra parte, desconociendo sin duda sus atribuciones y encerd.ndose en una pasividad inconcebible, dej$ que e1 Almirante hiciera y deshiciera a su antojo, sin pedirle cuenta de sus ClCtoS; el fantasma de La responsabil~dad turba sa reposo, todo 10 deja entre dos aguas y no sabe 0 no quiere sena:lar a cada uno el puesto que ie corresponde, 1a esfera de su accion y el sitio en que debe morir.


Por eso dudo, por eso tem.o, porque esta guerra empieza con ·desac:iert0s y debiridades y en los primeros re'¥eses estamos perdien'do 1a fNerza m.oral y pOlf'q'lle se nota en las altas esferas y en gran parte' de la opini6n mas deseos de capitular que de morir heroic a'mente entre los escombros de la ciudad.

El enemigo- .ha enc(5)ntrado y 1evantado el cable que n{)s ponia en han podido transmit.irse desespera.c.ornunicaci6n con Europa. ·d(}s tdegramas a Espana por v~a de Visayas para que desde aUf los conduzca un barco a 'la estaci6n que hay en Barfleo; pero este recurso se acabara pr.onto, pues com.o tenem.os entre n.osotros bastan·tes imgleses, que ponen en conocimiento del enemigo todo 1.0 que a 'este c(1)flviene, pr.onto se enteraran de eUo y levantaran tarn.bien este cable. E1 General, Monet 11a telegrafiado que en la parte- Sur d€ Zamba"les han aparecid.o tres numerosas partidas perfectamente uniformadas y armaolas. Esu gravlsima noticia es comentada vi~amente y 'preoc:upa bastante, pues si en estas circlllnstancias se nos insurrecciona el paIs estamos perdidos. ~Habran lleg~do ya a pader de 10s indios algunas armas arne" rica~as y algumas monedas de or0? El tiempo did. En cambio hay telegrarnas de casi todo el ArchipieIago que acu'san levantado espiritu a nuestro favor y un decidido prop6sito de luchar a nuestro lado. No hay, por 10 tant{)), motivo para desc:(!mfiar, pero el rar.o caracter del indio, la fuerza con que el enemigo se presenta y 1a debi'lidad que en nosotros ve pudieran determinar un cambio de actitud. iAquI) como en casi todos los pueblos superstici@sos e ign,(')rantes, la "fuerza material es 10 que mas se aprecia y respeta.

Aun


CAPITULO IX

4 de mayo .

.£1 dia de hoy, si escaso en acontecimientos de guerra, ha sido fe,.cundo para d J;illliehlo filipino. En ~l nace, entre las oscuras nubes ,de Ia tormenta disipada, el sol esplendoroso de su vida . poHtica y .. social bajo la sombra de la generosa bandera espanola. El Excmo. Sr. Gobernador General, de acuerdo con la Junta de Autoridades reunida para el caso, ha :firmado dos importandsimos ·Deaetos, usando de las facultades de Gobierno ·que el de la Me"" ·tr6poli ha conferido. Helos aqu'{:

Ie

GOB'IERNO GEN'ER~L DE

PI~J~INAS

MILICIAS VOlUNTARIAS

Con ei :fin de dar un caracter permanente a la organizaci6n de los Voluntarios locales de Filipinas, haciendo compatible el cumplimiento de Sll honrosa y noble misi6n con sus habituales ocu paciones y el cuidado de sus intereses, indemnizandoles en cierto modo -e~a.n,do las necesi.dades de una campana los separe de sus hog ares, y rccompensandbles a la vez los servicios pJiestados y los que de enos eSl'€ro en el porvenir, tuve el honor de propofler al Gobierno de SuMa jestad las bases para la creaci6n de estas Milicias permanentes ;en todas las .provincias del ·AJTchipicHago, cGFlsiderandolo dividido en zonas l\ocates pl1!ldeneialmente elegidas, segun la situaci6n de las .provi11lcias, la extensi6n de su territorio y el flu.mero de habitantes,

65 IE/. Sitio de Man#a.-'5


C1!lya orgafllzaei6n fwera en llln tod{)) analo.ga a 1a de, l~s Milicias ~e· las Islas Canal'ias, Pu,e t'to Rico y Cuba, que tantas .fagmas de glona han c@lil!ql!listad@. Mii pn)p6sitG era forINaJ!' :tIn organisrno que, reuniendo en su sen0 [os votu'o tuios iocates y mov~lizados, orglil'1lo de mi anteceSOf, por Sl!lS excepe110ftales servieios, diera por ~esultado Ulil nudeo de fuerzas que, aunando sus valiosos estuerzos aliOs det Ejercit{), co-· opense a1 mas r:a.pido r:estaMecimlento de ~a paz interlior, ;;tendo a la ¥ez bduarte segur<,> de la integriclad n acilOll ai, que a: ~odos igual-mente intel'-€sa conservar y defender aasta uitimo extremo. . llil¥€stidiO clespu'es eon ex:ce1'ctoFlales faeu1tades, es para mt una. ~Fandfsim~ satistacci6lil que al fuaGer uso de eUas pOl' primera vez sea pal1'a aJPf<l)bar este p,f oyecto qwe, qNiza deficien.te por el poco tiempo q\;lre nevo en Filipimas, enVlilelve en Sl una levantada idea de jl!lsticia, ltaciendo partfcipes a los leales filipinlOs de ftuestras gloriosas btigas, com.'0 de 1'l:UestF~S la1!lr~tes Y' re€ompensas. Eft sm vil't1!l!d, y elil 1.!SO de las facultades de Gobierno que mehan sidlo con¥fr~das po<r el de la Nac~6n, vemgo, en decretar 10 siguiemne: 0 'Ii. Desde la pub~icaci6n del pr,e sente lDecreto fq ueda autoriz:l-do en todas ~as p,r(j)'V~ftcias dd Alf1ch'ipielag'0 el a:listal1'il~ento d~ Mi1icias. , para formar lUl!,idacies tacticas de s€cci6n y compafiia, C1!lyas agrupa-ciones constituiran bs zenas, segmn 10 permita @ll numero de alistaclos en cada territorlo. 2. 0 S~ admit::iran c@mo- ta~es, por l'o s jefes de [as ZonClls~ a te>d'Os; ~s ttue il(} soliciten 0 s'e prestem al aIistamiento kasta comp~ftar [a [\;lerza reglam@l11taria en €ada unidad, s~empre ,que:, ardem~s de las C(i)n-diciol'rnes €Ie lealtad y honradez que deb(m COl11e1:1rf;ir (}n tan hfnemerita dase, cuen13en de dieciocno a c~ncueata ano:s <de edad, sea cua,l-· quiera Sl!l estado, FlO se haill en sujetos a proced~liDientos j,1.!ldieiaies y 1'10 tengan clefecto fis,i co que '[es iINl,p>0s~b~tite para ' ei servicio de las armas. 0 3. ' Estas Milicias, aun cuam:do S1;1 misi:6n :p'r incip.al es ei soste-l11~miento 'del ol"dem, p!1ote<;eion de lQS imtereses publieos y f'rivados, aS1 c.omo la defensa de la etudad 0- 110caridad donde tlengan 51:1 resi-cdencia, podd,n sel'" Mi@'Vlliza:clas para aC1.!ldir ea casos eXicepci0naLes adon,de eL Capidn General c0flsidere l1l€cesario su concurso, ya para. e! :restahlecillOie1ilto d~1 ' o~den 0 ya para la defensa de la ililllegridad de la Patria. 0 4. Dependera e! institllto del Capitan GeRera[ del AliChipitbg0, 0'1 eual podnt delegar sus funci~Fles de inspeetor en un OFiciaL g~nera'l cld E;'e rcito, que tomara d n'&mbre de SubsinslPector de Mi.-.. l,ie1as.


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Los Je£es y Ohciales de estas £1l!erzaJs procededn de ellas; S'1llS emptoos tendrafl ea,d cter permaDeRt1le, sin poder ser ,privad<>s de eUos smo POl' justas €.ausas, mediante ex.pecdien~e ell el qae habra de ofl'se al m1leresado. Tenddn los m~smos nOB0l1eS y oonsiaerae101'l'es' que 10s , de S,lll 0ml\)~OO en el Ejereito, usand'O iguales insignias, distinguiemdose s01ciimefllte en las iniciales "M. F.", MHicia Filipina, qu@ llevada en d ela'dio de l~ guerrera, as! como ell e1 s@mbrero. el nombre de b zena y e6mpam.la a que pertenezcan. 6. 0 La concesi6n de empleos de Jefes y Omciales queda r:eservada ai Ca'Pid,fl. General, siendo propuestos siempr.e en terna: l:Os Ca:p~tam;es por d primer jefe de la Zona, y los Ofieiates por el mismo jefe en union de }os Capitanes. La de ernpleos de clase de tropa se haFa por el primer jefe, a propuesta dei Capitan y Oficiales de la eompanla. Compfeta la organizaei6n, l'OS aseensos desde cabo a Capidn sedn PQr antigiiedad sin detect'O, y des de Capitan a Co,otHd obteniendo "'-un empleo por eada seis .anos de efeetividad en el amterior, y llQs Coremeles con la cruz del Merino Militar, ereada para premiar servieios espeeiales. 7. Los sueldos de estas Milieias euand'O presten serviciq -en su loeaNclad 0 S€ reunan para Asambleas 0 ejercieios seran: en los S'Oldados y elatses, el habel" eorrespondiente a tropa indlgena, y en los Jefes y Oficia1es, La rnitad del sueldo de su empleo en el Ejercito. Si las necesi,dades del servici'0 los a.lejan mas de 16 ki16metros del territorio -de sa provincia, ' percibiran los primeros el haber asignado hoy a las c{)mpafilas de Vohmtarios movilizados y los segundos el sue~do entero de su em,pleo, haeiendos-e por di<is esta liquidaci6n. en l!lno eom en Qtr0 easo. 8. Los Jefes de zona desempefia-Fan dentro de la jurisdieei6n de la misma 1as fUllCiQnes de Comandantes poHtieos militares, entendiendose en 10 gubernativo y militar con las respeetivas autortclades de [a provi1il~ia. 9·° Los Jefes y Oficiales de 1as Milicias estaran exceptuados- de cargos municipales, provinc~a~es y alojamientos, como- los Ofieiales, d~l Ejer:cito, si quisieran utilizar esta excmsa. Las' clases e individuQs de t.rapa cquedaran desde luego exentos del pago de la cedlilla perronal :mienttras pertenezean a estas Milieias, la cual deber:an obtener gra1tis de 110s Adlmimistradolies de Hacienda de las respectivas provimcias, previa rebci@:Il del ]ide 0 Capitan de la unidad a ql'le perMnezcan, qUle pasad a dieho funcionarie para que en vista de ella ies eXRlda aqt1el ·aoeume.nto. [0.. Ademas de euanto .q aeda expwesto, los Jefes, Ofieiales, clases e individuos de trapa tea:~ra:n iguates derechos a reeompensas t\)~e sus similares del Ejereito, mas las siguientes ventajas: 5. 0

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Exenci6n, para 51 y su hijo primogenito, del servicio m~li­ tar alllevar el pad]}e lm aiio de servicio en eualquiera situa:ci6n. 2." Exe,lHd6n a perpet1!1idad, para sf y para sus hijos, del servicdo de pn~5taci6R personal 0 su redenci6n a med.lioo a Los dos aiios de s'ervlcio. 3.a Teftdran derecho a: obtener de[ Estado terrenos realengos euya :prop~eda!d se>,liei~e[il, al ctJUnpliJl" tres anos de servieio en cua.lquiera situaci6n, s~empre que la petici6n de dichos terrenos no exceda de cinco hectareas. ' 4.a Al 'inutiliza:rse en servicios de campana, se Jes aplicaran cuantos benefiicios tienen eoncedidos los individuos del Ejercito, y ' las pensiones que, tanto por este concepto como pOl' cruces les '€0rrespomdan, seran abonadas por 1a Administraci6n de Hacienda ,.eel punto en q~, € residan. 1]. Estas fUlerzas seran clotaaas de anna blanca 0 de fuego, segmm dis'Ponga el Capitan General, en vista de las circunstancias de ta l{i)calidad y necesidades del serVieio. Para los detalles de regimen interior, armamento, municiones, vestuario, servicio, disciplina, ..obligaciones y contabilidad se ajustaran en un todo a los Reglamentos del'Ejercito, a cuyacS ordenanzas que dan sujetos en todos los actos del servicio. 12 y ultim.o. 'fodo 10 preceptuado en eI articulo antenor comeli1zara a regir desde 131 fecha de es,te Dec~e~o. Manib, 4 de mayo de 1298. La

AUGUST!.

Man,ila, 4 de mayo de 1898. Confi6m'e el Gobierno, a1 aceptar el mandio superior de este AFd1ipielalgo, la alta y trasoendental misl!on de acud~r <11 , 1as necesida<les del mismo con las medidas aclecyadas en todos los ramos de la publica Administraci6n de las Islas, dando parte en la gesti6n publica a los representantes de todos los intereses y agrupando en patri6tico conjunto todas las fuerzas sociales, dandoles la correspondiente y oportuna intervenci6n en los asulltos publicos. . Yael Gobierno de s. M.~ aceptaFldo las medidas adoptadas por ffil antecesor al tmtregar la defensa del 0Fden. publico a 10s vo:luntarios en armas haMa cOli1fi.ado al afecto de 110s filipinos h de£eli1sa de su hogar, de sus bienes y del comnn terrlterio, habiendo co~c1ufdo la eJ?oca ~e sangrientos sucesos em. un abr<1lzo de uni6n y cde concordIa baJo el amparo de la bandera espanola, a cuyo nombre se


constituy6 el fraternal carino de una comunidad de siglos en una misma vida, leyes, .religi6n e idioma. La nueva organizaci6n en proyecto tiene que apr~surarse por rapidos procedimientos y por medios adecuados a las actuales circunstancias, sin perjuicio de que llegada la normalidad sea perfec.:ionada. Por esto, al propio tiempo que por Decreto de esta fecha constituyo la organizaci6n militar del pals con sujeci6n a las necesidades de su defensa, he acordado constituir tambien una ÂŤAsamblea Consultiva Filipina", en la cual todos los elementos y representaci6n del pals, en todas sus tendencias y oponiones, tien'en cabida y aun 1:1 totalidad de las fuerzas vivas del pals dirigidas en unica direcci6n y un solo esfuerzo. En su consecuencia, y en virtud de las facultades extraordinarias que me estan conferidas por el Gobierno de S. M., vengo en decretar

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sigui~nte:

ArtIculo 1. 0 Con:la denominaci6n de Asamblea Consultiva de Filipinas se establece en la capital del Archipielago un cuerpo consultivo, que deliberara e informara al Gobernador General sobre los .asuntos de caracter poHtico, gubernativo 0 administrativo que dicha superior autondad estime oportuno consultarle. Art. 2. Esta Asamblea podra proponer al Gobernador General las conveniencias de resoluciones que afecten .a los intereses de los pueblos, siempre que no invada las funciones de otros organismos ni infrinja las leyes. Art~ 3. Hasta que nuevas disposiciones determinen y regulen la forma de constituirse y funcionar este nuevo organismo, la Asamblea consultiva de Filipinas sera presidida por- el Gobernador General 0 quien legftimamente Ie sustituya. Los miembros de la misma se denominaran Consejeros, tend ran las mismas categorfas y preeminencias que los Consejeros de Administraci6n y se di vidiran en Consejeros natos y de libre elecci6n. Art. 4. 0 Seran Consejeros natos 1a Junta de Auto~idades. El General Jefe de E. M. El Auditor general de Guerra. El Gobernador civil de Manih. ÂŁ1 Alcalde de Manila. Un caballero gran cruz en representaci6n de la clase. El Presidente de la Sociedad Econ6mica de AmigO.s del Pals. El Presidente de la Camara de Comercio. Art. 5. Seran Consejeros de libre elecci6n veinte personas de significaei6n en el pals, que el Gobierno generail juzgue conveniente nombrar. Art. 6. Una vez constitufda la Asamblea consultiva de Fili0

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pinas se redactara a la brevedad posible e1 Reglamento de gobierno interior p0,r que ha de regirse. AUGUST!.

:(. * * Si estos DecJ:7etos se cumplen, si l'0S organismos que. ell'0s crean no se empujan por sendas ' rutinarias y embarazosas, si han de C'0nstituir un adelanto positiv'0 en el orden de las legItim as aspiraclones del pals, y las personas que los form en se eligen entre l'0S honr;ldos y leales, no cabe duda que daran excelentes resultados . .con las Milicias filipinas se da cumplida satisfacci6n a llOs naturales que, por su ilustraci6n, honradez, lealtad y posici6n, les era debida: poniendolos a cubierto de abusos que eon ellos se comedan algunas veces-piieciso es confesar.lo-por las aut'0ridades civiles y militares del puebl'0 y de la provincia;. al amparo de su misma fuerza podran desarrol1ar y prosperar sus propios intereses, y el ejemplo de los bienes conseguidos y de las necesidades satisfechas servira de â‚Źstfrnulo par.a emprender otros nuev'0S; con el caracter permanenie de las Milicias se premian servicios ya prestados y puedea exigirse otros en 10 porvenir, pues no era ciertamente justo que durase el sueldo y las consideraci'0nes 10 que la guerra 0 la prestaci6n que se hada; las atribuciones de que gozaran los milicianos les serviran de garandas y respetos y â‚ŹI s\!leldo que disfruten de medios seguros para las necesidades de una vida honrada. La Asamblea Consultiva de Filipinas, en esfera mas elevada y ,~mplia, ha de contribuir tambien de mod'0 eficaz al progreso de su vida material y moral; aqueIla y esta se oomplernentan y forman un oonjunto arm6nico y perfecto; la una representa la fuerza, la otra el derecho, y el pueblo que tiene esferas en donde puede pedir sus derechos y fuerzas materiales con que apoyarlos, ha obtenido casi su felicidad si marcha por los caminos de la honradez y ~a justicia. La Asamblea Consultiva suplira deficiencias de la Administraci6n y c'0rregira sus defectos, despertara las fuerzas vivas del pals y podra legislar, sobre el terreno, con perfecto c'0nocimient'0 y am'0ldandose a las circunstancias y necesidades del Archipielag'0. De ese mod'0 pr'0speraran la industria y el c'0mercio; se desarrollara su base: la agricultura; se abriran buenas vIas de oomunicaci6n, de que \ tan necesitados estamos, y se haran Hneas de ferrocarriles que transporten I'0S productos eC'0n6mica y rapidamente a IJ()s centr'0S de contrataci6n y de consumo. Todo esto veo, todo esto traeran las reformas, si con ellas no se quiere cubrir una f6rmula, sino llenar una necesidad hace tiempo sentida y reclamada.

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1 Reciba aqul el Sr. Gobernador, General D. Basilio Augusd, ml 'm:b entusiasta aplauso por la promulgaci6n de estos Decret0s y re.;cibanlo tambien los que a ellos cooperasen. A eada cual 10 suyo.

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Ufla ~dea, eomo iigera sombra, empana el Hmpido cido que hoy rContempl-o. . ~L1egaran tarde estas reformas? No 10 creo; pero las circunstancias 'critlicas em que se dan, los sucesos de estos dfas, que nos colotan en situaci6n desesperada si el pais se nos pone enfrente 0 permanece indiferente sin oponer obstaculos a la marcha: de nuestros enemi'gos los americanos; la desconfianza, en fin, caracterfstica del indio, ~no ¡suscitaran en el pueblo filipino la idea de que abrimos esa puerta unicamente ,para que por ella salgan y nos presten ayuda en tan angusti.osa si.tuaci6n, vo'lviendola a cerr:ar tan pronto como quedase >conjurado el conflicto? Repito que no 10 espero, mas apunto la idea que ha pasado por mi imaginaci6n. Siempre serfa mejor, sin embargo, que se hubiese hecho antes, para que no pudiese aparecer como obligada necesidad _ y sf como espontanea c0ncesi6n. Pero en Espana no sabemos prevemr. Todo 10 hacemos a 1'11:tima hora. ::. * * Aunque de menos importancia que las que dejo consignadas, hay otras impre~iones que apuntar. . Seguimos a merced del enemigo en cuanto al bombardeo, pues 1>9r tierra, fuera de Cavite, creo que no tendrfan triunfos que celebrar si a ella vinieren. Los barcos yanquis recorren tran,quilamente 1a bahia, bajo ia pr0mesa hecha por los Consules, de acuerdo con el General en Jefe, de que la phtza no les hostilizara. mientras dlos no 10 hagan; sonciean por la bocana del rio y por otros sitios, buscan 'tal vez posiciones para un ataque, pero no emprenden nada, y nos :extrafia a todos que no hayan realizado aun los bombardeos que con tanto apremio y energfa anunciaron. Contando, como contamos hoy, con todo el pals, poco 0 nada J?ueden ya hacernos, aunque traigan tropas de desembarco; los pode,rOSO$ canones de su Escu~dra podran destruir Manila y sus arrabales, ya qlue lIas c0nstl"ucci:ones m,b s6~idas son en este pais de madera, con aIgana rara excepci6n; pero las murallas de Manila, cuando ya ..este quemada la ciuaad, ofreceran mas resistencia al invasor, y en ultimo tetmmo siempl"e nos quedara el recurso de seguir la conduc-

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ta de D. Simon de Anda en analogo caso, y estreehamente unido3peninsulares e insulares, disputarles palmo a palmo el terreno; bien es verdad que aquel era un hombre superior y no espero que ningun a de nuestras autoridades tenga arranques para imitarle. Est0s son los horizon~es que vislumbramos en estos momentos si las cosas sigueR por clonde van. Sapomgo que en la Pemmsula hahran produeido hond£slma impresi6n los cablegramas que de aquf se pusieron anunciando la des:trucci6n de la Escuadra, la capitulaci6n del Corregidor y del Arse-nal y la evacuaci6n de la plaza de Cavite. No se duda un momentoque nuestros hermanos de la Metr6p0ii nos mandaran coOn la' rapiaez posible los auxilios necesarios para ponernos en condiciones re',gulares de lucha y que los buques que no han salido ann para Cuba o los cque ya salieron recibinln crdeR de venir aqllf, eon la reserva! -consiguieate, pues <lsi conseguiremos oon relativa facilidad un triunfo sabre los americanos, y ademas de salvar nuestra erftiea situaci6n, tendremos eso adelantado para cuando lQegue la paz, ya que no sera • posible que la victoria corone nuestros esfuerzos en las aguas de Cuba, donde tiemen los Estados Unidos acumuJados todos sus poderosos elementos navales. Esta seguridad de que nos mandaran auxilios nos auenta y decide a una heroica resistemcia.

*** Los Consules han visitado varias veees al Comodoro para rogarIe que no bombardease la ciudad de Manila. EI de Alemania, conociendo sin duda -las tendencias de su Gobierno hacia Espana, estuvo bastante energico y Ie hab16 en terminos que mas paredan propios: de un espanol que de un extranjero; ' Ie dijo que s.obre el recaerfa Ia responsabilidad de un bombardoo que consideraba inneeesario ~ qu~ Ie pedirla una imdemnizaci6n de pfs. 25.000.000 a que pr6ldmamente ascendfan los imtereses alemanes en Man,i~a;que ya dominaba en los mares, y que si querfa haeerlo en tierra preparase tropas de desembareo, anadiendole que Manila tenla defensas y que no juzgara: tan Hcil el triunfo. Es verdaderamente caballerosa y noble ila eondueta de este diplom~hieo que, sin violar las Ieyes de la mmtra.lidad, protesta cuando se trata de cameter alguna iniquidad y haee cuanto pa'ede para evita~ las crueldades de la guerra. Hoy llta eomunicado d Capitan de la GUClndia Civil de 1a lInea.de Manila ,que en el p.uebio de San Pedro Macati habfa sido pr eSQ y rnaerto el cabeeilla insurreeto Santiago loeson, que trataba de soliviafltar los animos de la gente de esta provincia. EI promovi6 elt

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fo~miclah1e levantamiento de Zamba1es y era uno de los mas teml-ibles y sangl!linarios rnsurf'ectos. Las noticias que corren 'hoy por esta capital, y cuyo origen ignoro, confirman los rumores que ya haMa de que Aguinaldo no viene: a Fiiipinas. Entre los indies se dice que los americanos Ie han ofre, cido una millonada de pesos porque venga a suhlevaF d pais y quee1 no ha querido transigir con protestantes. As! sea, pues ya he dicho que Aguinaldo es un prestigio 'entre: ~ ( 1a gente del pl:leblo, que es la que se agita y pelea, y su lleg:lda seda fatal para lluestra situaci6n; no bastadan enton.ces reformas, halagos ni consej-os, porque la otra' parte del pals, 1a ilustrada y rica, sin arranques para tomar determinaciones en uno u otro sentido,. quedada indiferente-y anulada por las mas as que dispusieran de 1a fuerza. Esta tarde ha Hegado aqul el vaporcito Jsabel J, conduciendo parte de los heridos y enfermos que habIa en el ' hospital de Caiiac~o (Cavite) y qaequedar<;>n a11I bajo 1a protecci6n americana al ser' evacuada 1a plaza. Enarbola bandera de la Cruz Roja y vienen en 61 euatrQl oficiales arnericanos, que han hecho entrega de los heridos yenfermos en el muelle del Mura116n. Tambien han llegado, pero por tierra y custodiados por fuerzas:; de 1a Guardia Civil, los confinados del presidio de Cavite, que inspira:han hastante mquietud, pues huhie:an dado serios disgustos si en aquellos momentos de confusi6n y abandono hubiesen logrado escaparse. Va renaciendo la tranquilidad; ,hoy ya se han abierto los comer-dos de 1a Escolta, cerrados desde el dla I, Y algunas familias rc!;resan a Intramuros. Hay ~a creencia general de que no pueden ya bom~bardear la plaza sin anunciarlo con cuarenta y ocho horas de anticipaci6n. He proeurado enterarme de la cuesti6n de subsistencias, importandsima en estas circunstancias, y me ha dicho uno de les sefion.~s Vocales de 1a Comisi6n Civil de Defensa que esta,n aseguradas, pues: hay en Manila bastante arroz y unas mil reses vacum..s y otras dos o tres mil ea lasinmediaciones de la Urrea ferrea, para ser transportadas cuando sean necesarias; No desmiento estas noticias, que debe y tiene motivos para saber la persona que me las da, pero sI afirmo que no se ha notado ninguna .precauci6n en este sentido ni se sabe de ningun sitio don de el Ayuntamiento 0 la Comisi6n Civil de Defe:nsa haya almacenado grandes existencias de v!veres, y, por el contFario, empieza ya a 'escasear el petr61eo y la harina, que han acaparado unas cuantas casas, alzando un doble su precie. No me parece su.ficiente precauci6n tener las rf!lses junto a 1a 'VIa


-rerrea, porque si hubiera algun ' trastorno interior y esta se cortase, ,quedadamos burlados. DesconHo de In Comisi6n Civil de Defensa, y temo que todas sus previsiones consistan en haber acaparado arroz para catGrce 0 quince dlas y en eX'igir de los ~lmacenes relaciones , de sus existencias. , Si ahora ' no Qcurre nada que altere elordem interior, ~quien sabe 10 que podra suceder manana? ~Quien pblede asegurar que los ame;ricanos no han de sitiarnos por hambre, si consiguieran sublevar el pals y eRcerrarnos em. la ciudad murada? ~Quien se atreve a fijar duraci6n al bloqueo? 'Todo pued~ ser y nora es ya de que los pueblos espafioles mo. :di.fiq~en su caracter indolente y desprevenido. La mayor parte de los comercial'ltes, dando pruebas de su falta "de patriotismo, de sensatez y de generosidad, han subido extraordi'nariameFl!te tOGOS sus artlcuI:Os cuando s6lo '11evamos cuatro dlas de bloqueo. Por si esto no fuera bastante, han empezad-0 a recibir los 'biUetles del BanC0 Espanol Filip,ino COR d des,C'a~nto del I ~r ![ O@, ¡debiendo advertlr que esos biHetes son cambiades en su total importe portoaos los Bancos de la plaza; y es 110 peor del cas{) que no hay energfa en el Gobernador civil ni en el Alcalde para poner coto .a: esos r0bos e incautaFse ohcialmente de todas las mercandas. ~.

:{. *

Hoy s'e presento en la Capitaflla del puerto el Consul ingles ra'ga.nt!o se Ie facilitase un vaporcito y un pdctico para que entrase ~.en la balnlfa: t:lna corbe,t a de guecra inglesa ,q14e acabaha de llega,r 'a.l Corregidor. Accedi6 gustOSQ a ello el Capitan de! puerto, y Ie en'treg6, bajo la salvaguar'dia del pabe116n ingles, el vapor Vigia y ,el practico Sr. Goitia. Embarc6 con este el representante de Inglaterra, y despl!1es que el Sr. Goitia condujo diestrameIllte al fondea.dero la corbeta inglesa, el Comodoro Dewey pidi0 @l vapor V igfa ~y el pFclctico al C6nsul ingles, y este seiior, para pagar la galanteda <que con tH se habra tenido, entreg6 uno y otro a 10s americanos; ¡el pdctico y tripulantes fueron conducidos a Cavite y despues pu-es'tos en libertad, y el V igf,a fue 'luemado. Para calificar esta miserable acci6n faltan adjetivos en el Dic'cionario de la lengua castellana, y para castigada serfa preciso cru'zar y escupir el rostro del que la cometi6; ya se huhiera hechlO si nO -iuera por Ia prudencia de qae tenemos qate revestirnos para evitar rconfIicto3 a nuestras autoridades . Manila esta indigRadc:li con esa ruin violad6n de la neutralidad1 y ' 5610 se calmada su agitaci6n si el GobermadoF General, en uso de

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"todos sus derechos, pusiera inmediatamente los pasaportes en la mano al C6nsul ingles y Ie diera un corto plazo para salir del territori'o filipino. Esos arranques, esas ene.rglas son las que necesita ver el .pals, las que pueden retenerlo a nuestro lado. No habla de producirnos ese acto complicaci6n alguna con el -Gobierno de ia Gran Bretana, pues que habiendo este proclamado 5U neutralidad en la guerra hispanoamericana y habiendola violado su representante aquI, de una manera tan clara y publica, no tendda mas remedio que reconocer la justicia de nuestra determinaci6n re,cogiendo el Regi1,£m Exequat·l,f.Y a ese funcionario, que dej6 de cumplir sus deberes como C6nsul y como caballero. Pero aun suponiendo que Inglaterra se diere por ofendida, Nue nos importa en la situaci6n en que estamos una nueva guerra, que edeterminada seguramente la intervenci6n de toda Europa? Lo que no pl1ede seguir t01erandose por mas tiempo son esas vejaciones y menosprecio de nuestros derechos; 10 que no puede per,mitirse es 1a constante comunicaci6n entre la plaza y los barcos americanos por medio de los ing1eses, y muy especialmente del C6nslill y Vicec6nsu1, que facilitan a1 enemigo noticias y vlveres; 10 que no puede consentirse es que 1.oS 'Vaporcitos Lngleses entren y salgan por .eI do sin sufrir un minl:lcioso registro, para que se de el caso de -que el propio cocinero del Comodoro Dewey venga a la plaza para comprar vI'Veres frescos; porque tooas esas cos as nos estan perjudi-.cando gravemcmte ante los fi1i-pinos; porque esas pasividades del General en Jefe no pueden traducirse mas que en amiianamient05Y temores; porque nuestra dignidad, en fin, exige que no permitamos -esos insultos a n·uestra consideraci6n nacional. Pero es inutil que yo escriba aquIla indignaci6n que me a1lborota ]os nervi.os. Nada ha hecho el Gobernador General, ni siquiera ha .reunido a los C6nsules para protestar ante eUos, y en acta por todos 6rmada, del hecho realizado por el ingles, a cuya protesta hubieran ;unido la suya los representantes de las demas naci.ones. Se dice por Manila que el General August! consu1t6 sobre este .a.sunto con su auditor general y que ,este Ie aconsej6 que no protestase, por -no se que teodas acerca de la facultad representanva de los -C6nsules.

* * *e Son las dos' de la madrugada y en este momento sale- de Intra:1nuros un gran convoy de municiones, ignoro si para los puestos avanzados 0 para ponerlas a salvo en caso de bombardeo, que vuel·ve a ser temid.o para manana.

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Tan pronto empiece este, el Cuartel general se trasladad. al barrio de Santa Mesa, que est.l fuera de la Hnea de tiro, y por alH se' albergar,b mu jeres y ninos.

5 de mayo.

DOs hons escasamente he podido dormir, pues el anuncio dell hombardeo y el temor de no estar en mi puesto cuando empeza,r a' me h.an echado de la cama. Manila, envuelta aun por la luz suave de la luna que va lentamente amortiguandose en el horizonte, esta despierta y agitada; pero" DO les su movimiento el de las poblaeiones que se preparan al tra-· ba jo, a la et¢rna lucha de l:os negO€ios, a las operaciones del comercio' 0 de la industria; su agitaci6n es la del guerrero que limpia las armas; hi del campamento cuyas tropas se aprestan al combate; lcil del pueblo, en fin, que se dispone a vender cara su vida y a morir~ si es preciso, por el honor de la Patria. El espectaculo es hermoso y triste a un tiempo mismo; hermoso" porque todos los combatientes esperan tranquilos, llenos de entu:siasmo y de valor el m<i>mento de la luclla; triste, por las mujeres y por los ninas, ' que buscan refugiQ en lejanos arr:abales y se despiden con el alma dolorida de los pedazos de su coraz6n que aquf ~~~

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Pocas familias habla ya en Intramuros, pero esas y otras que volvieron salen otra vez precipitadamente, cargadas con Hos de ropa' yseguidas de chinos que transportan muebles. Por las puertas de la ciudad salem en tropel los cargadores, los carretones, los vehfculos; ya los' chinos son insuficientes-iY cuidado ·q ue hay!-para trans-portar Mnta cosa, y hasta los ninos de corta edad van carsados de objetos. Es la ciudad 'que se dispersa y huye antes de que empiecen a caer granotdas, que sera de un momento a otro, segun die en por todas partes. A las ocho de.1a manana aun no se ha roto el fuego, y poco despues se prop ala la noticia de que el ataque empezara a las once y media. En los arrabales se estan publicando bandillos en tagalog para que los vecinos tengan preparados cubos con. agua, escaleras y canas para los incendios. Los bomberos ocupan sus puestos. Esta vez parece que va de veras.

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Han dado las doce y no ha ocurrido ninguna novedad. Se ase'gura que 10 del bombardeo ha sido una alarma sin fundamento, quiza producida por haberse sacado de Intnmuros dUllnte la ma.drugada toda la cartucherfa :Maiiser. Los barcos americanos estan fondeados en el mismo sitio que ayer. El General en Jefe y su E. M. continu{ln instalados en el Ayunta- . micnto, y la Secretarfa del Gobierno General en el sitio de costumbre. Anoche se recibieron confidencias en el Gobierno Civil de que el pueblo de Santa Ana iba a ser asaltado por tulisanes, y para evitar ,cualquier acontecimiento desagradable se tomaron las precauciones necesarias y se enviaron algunas tropas que reforzasen aquel desta:mento. Nada ha sucedido afortunadamente, pero no serfa extrano que cualquier partida de malhechores, aprovechando la circunstancia de que esos pueblos inmediatos a la capital estan llenos de mue'bles y objetos de Manila y de mu jeres y ninos, tratase de hacer alguna de las suyas, que aun despojada de todo caracter poHtico, agravaria b~stante la situaci6n, pues 0 no tendrfamos sitios seguros don¡de llevar las personas no combatientes y los hospitales 0 necesi't arta:In1()S distraer en su cuswdia las fuerzas que nos hacen falta para -.comb atir. Se tiene pensado construir un campo atrincherado en San Juan del Monte, trasladando a e1 las mujeres y ninos y todas las muni.ciones de boca y guerra que tenemos. Hoy han llegado a esta capital el Comandante General del Arse:nal de Cavite y el Gobernador de la isla del Corregidor, pero nada >Clicen que haga luz en los hechos allf ocurridos. Tambien continuan viniendo marineros de nuestra Escuadra; -con todos eUos se ha formado un bataU6n de Marinerfa, cuyo man,do tendra el Capitan de fragata D. Juan de la Concha, que . sera :agregado al Ejercito de tierra. La actitud de algunos ingleses sigue siendo poco correcta y hoy 'ha dado su primer chispazo. En la cerveceda de San Miguel, situ a-da en la Escolta, se hallaban varios ingleses y en la mesa inmediata ,dos 0 tres espanoles, y como uno de aquellos, creyendo no ser en'tendido, hablase en terminos poco honrosos para Espana, se levant6 uno de estos y Ie pidi6 explicaciones de su conduct,a, originandose el ¡consiguiente altercado. Aunque no. fuera mas que por cortesfa y gratitud debieran ca1larse los ingleses: que en nuestra casa estan y en ella han hecho su capital, y tanto mas si recuerdan su mercenario y apocado p:oceder en el asunto de Venezuela y la hufda de sus tropas ante los indios .afridis. 5610 admiraci6n debieran tener hacia nuestro pueblo que, lesangrado y empobrecido por tres anos de guerra civil, ha ido a

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una Jucha tan desigual antes de Uegar a la desmoflra de vender partede S1:1 territorio. Los aiemanes en su mayor~a esd,n, porel eOllltrario, ::lisgustadoS': del proceder de los ing1eses. Afirman aqucHlos que ven.ddn en seguida v:arios barcos de guerra de Sy naci6n, y qae s,i las cosas empeo-rasen 110 hada toda la Escuadraque manda el Pdncipe Enrique dePrU'sia. Estas noticias y 1a dec1araci0n hecha por el Emperador de Alemania de reserrvarse su libertad de acci6n en 1a gaerra producen. eFl nos0tros eSpeF<lnZaS, que nlO podemos concretar, p@rc- aunque.~ vagas nos aJegran y nacen exclamar: "jQaietl sabel"

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CAPITULO X

7 de m ayo.

Ayer entro en 1a bahfa el acorazado frances B n~-i:., que tambien,., como es costumbre, pidio practico a 1a Capitanfa del puerto, negandose esta a faci1itarlo por 10 ocurrido el ilia 5 con el que entr6 a-la corbeta de guerra; inglesa. E1 Comandante del B ru.i% envi6 en un botedos de sus oficia1es a.la Capitania del puerto, y alli se 1es explic6, ante el Consul frances, que ¡tambien estaba presente, 10 ocurrido con el vapor V i gf.a y con el practico Sr. Goitia, por cuya razon no se podia cumplir â‚Źst~ servicio, d~clinando las responsabilidades en quien. terua la culpa de ello. Extranaronse los oncia1es franceses del suceso, y -juntamente con _ el Consul, vo1vieron a rogar a1 Capidn del puerto que les facilitase¡ un practico, en la seguridad de que con ellos no pasada 10 que paso. con los ingleses. Y, en efecto, el practico dio entrada a1 Bruix y a1. crucero aleman Ire'Tie, que a1 mismo tiempo fue avistado, y vo1vi6 sin que Ie ocurriese novedad alguna. Ya en tierra, el practico conto que al pasar junto a los barcos americanos la musica del J,'en.e lanzo aJ aire las patrioticas notas de la march a -real espanola. La noticia ha exa1tado muchas fantaSIas y ha despertado nuevas~ esperanzas; de todos modos, la llegada de estos buques nos ha pro6ucido bastante alegrfa, porque cuando se tiene enfrente un enemigo pod~roso del que se temen toda clase de iniquidades, infunde tran- quilidad y animos la presencia de testigos imparciales y dignos que cohiban 1a comision de ciertos acros. Tambien ha contribuldo a los optimismos de ayer 1a llegada deL


'bizarr'O General M'Onet, que tiene a su cargo el mando militar de las pl1'1ovincias del centro de Luz6n. Ha conferenciado extensamente c'On el Capitan General y en Jefe de este Ejercit'O, dandO'le seguridad ,.de la iealtad y adhesi6n de las pr'Ovincias de su mando y del entusiasmo que en eHas se ba despenado a fav'Or de ESlOana c'On motivo de .esta guerra. Pava esos leales nlipimos ha pectido al Capitan General 8.000 fusiles GIue, segum frase del General M'Onet, celiO pueden estar ,·en m:ejores manos". El Casino Espanolle invit6 anoene a oenar en sus salone'), y allf, ante lQS c'Omensales, repiti6 sus declaraciQnes respecto a la lealtad ·<ie los habitantes de las p\r'Ovincias centrales de Luz6n, elogiando como se merecen el valor y el amor patrio de que estan cland'O 'muestras l'OS filipinos. Y en efeeto, de las pr'Ovincias, de t'OdQS los puebl'Os del Archi'pielago, ]~egan c~>nstalltemente tdegramas al Gobernadolr y Capiram 'Gemeral CQn pr01testas de adhesi6n, con rnani£estaciones de entusiasmo, con Qfrecimientos de vidas y haciendas. El pueblo entero se levanta como un sol'O hombre para rechazar al enemig'O; todos deponen sus antiguas rencillas y ahora sf ' que pa>rece sincera la fusi6,n de insulares y peninsulares. '

*** Hoy ha salido para Hong-Kong e1 vapor Esmeralda, y supong'O 'que llevara a su berdo algun oficia,l americano para cQmunicar con Washing~on. jDios quiera que no traiga malas nuev;as y qy,e vayaIDOS tirando asf hasta que nos envfen refuerzos de la Pcmfnsula! Han saltado a tierra los Comandantes del ac'Orazado frances y -del crucerQ aleman y, a dis tint as horas, han cumplimentado atl Gobernador General y al Comandante general qe Marina, visitando . ,·despues les h'Ospitales donde estan los heridos del com.bate flavaL Ambos estuvieron sumamente expliesivos y .estrecharon la mane de algunQ de aquellos, manifestandoles el C'Omandante frances que sen"da nuestras desgracias comQ si fueran propias y que no olvidaba que 'Espana era hermana -de Francia; despues manifest6 que mandarfa su medico para que ayudase a 1'OS profesores espanoles en 1a cura',ci6n de l'Os heridos.

EI eara:cter impresi0nable y nervioso de los espanoles lQS ]leva ',con la misma facilidad a la exaltaci6n del entl:lsiasmo que a la ne'grura del abatimiento, y esto sucede con gran frecuencia aquf, donde a cada paso surgen nQticias, cUyQ origen se ignora, per'O cuya buena ~80


.'prodeldencia aseguran t0dos y sobre¡ las que muchos construyen un verdadero castillo de naipes, que a cada paso deshace y echa por tierra la fria mano de la realidad. Hoy corresponde el turno al optimismo, y a las noticias que .dejo apuntadas hay que aiiadir la de que los valores espaiioles han subido siete u ocho enteros. Ignoro por que cable 0 conducto hahd. 11legado esta nueva, y aunque yo Ie hago sufrir cuarent;ena, hay mu¡,chos que la comentan con gran viveza, considerandola como con:secuencia de a1guna gran victoria obtenida por nosotros en Cuba. E1 resultado es que el dfa de hoy se acaba dejando muy levantado .el esplritu publico.

81 .El Sitio de Manila.-6



CAPITULO XI

I2

de mayo.

Bien deda yo en mis ultimos apuntes que tan pronto se presenta el cido daro y limpiD como Ileno de nubarrones. En ilos dIas pasados llegaron dos huques mas a esta bahfa: uno im,gl€s, que fonde0 en Ca'vite, juntQ a let Escuadra americana, y otro aleman" que 10 ha hecho cerca de la plaza. En la poblaci6n renac€ la tranquilidad; se abren ya casi todas las tienda's; el alumhrado electrico v\Jelve a funcioflar, y alguna gente, a pie y. en carruaj~, reanuda los paseos por el Malec6n y observa f.onaeada, c~rca de Cavite, a la Escuadra americana, echando constantemente hurno e iluminando de vez en cuandocon sus potentes focos eIectricos pasco y paseantes. 'Per:o, a pesar de todo esto, t<mgo que apuntar hoy cosas muy desagradaJbles. Esta manama, proeedeIlte de laParagua, lleg6 a la bahla el canonero de nuestra Marina CaUao; etpenas fue divisado po'r la Escuadra, americana se destae6 un barco, que Ie intim6, y su eoniandante arri6 inmediatament e la bandera y se entreg6 sin resistencia al.guna. Siguen, como se ve ppr este suceso, las imprevisiones y los azoramientos, pues aunque flO supiera el Comandante del Callao Ia ·d edaraci6n de guerra sabIa por 10 memos que se esperaba de un .FFlomento a otro y debi6 decirle algo la circunstancia de estar apaga.dos tOGOS los faros; pero, adem~is, ~c6mo no hizo esc ala en algun punto y procur6 enterarse de la situacion? ~No eneontr6 nada anormal en ll() s is16tes de las bocas ni vi6 en el Oorregidor b. bandera la:meriean~ ? Y cuando entr6 en la bahla y divis6 fondeada en Ca-

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vit;e la Escaadra ameri.cana, ~c6mo no acudio a su pericia naval y a su serenidad para escapar por cualquier parte, ya que su barco podfa navegar por sitios de agua baja y los de 10.s enemigos no? E1l.o sabra.

El General G.obernador de Cavite ha oomunicado a Manila el rumor que por a11f corre de 1a llegada de Aguinaldo y otros cabecillas y de una expedicion de tropas de desembarc.o norteamericanas. Son ya tambien publicos los nombramientos de Consejeros de la Asamblea y de Comandantes de Milicias, jdes de zona. Al leer la lista de n.ombres piercl.'O mychas ilu.siones, pues en enos figuran muy poe as personas de ilustracion, posicion social y lealtad y en cambio aparecen como Consejeros y Comandantes de Milicias t.odos los cabecillas de la pasada insurrecci6n., algunos de los cuales apenas saben leer ni hablar 01 castellano. Y ahon pregunto yo: ~en que situaci6n dejamos a los filipinos que han estado con nosotros durante los dos arros de la insurrec.:i6n, que han perdido dinero, que se han enemistado con los revolucionaria'S? Ha sido una lamentable equivocaci6n, por n.o calificarla de otra manera, la designacion de estas personas, que parece hecha a prop6sito para que Emili.o Aguinaldo nalice sus planes si es cierto que Vlene. En el caso de que llegue este cahecilla supongo que el General no dara armas a ciertos elementos c(m el identificados, pues as! c.omo cree de huena Fe; aunque tengo ratos de duda, que el pafs esta a nuestro lado por su propia conveniencia, cree tambien que camhiada de actitud si Againaldo llegase.

24 de mayo.

Como. era natural, tan pront.o se corrio la especie de la llegada de Aguinaldo a Cavite comenzaron a practicarse averiglilaciones relativas al asunto. El Jefe del Tercio de Volufltarios ÂŤAnda SalaLar", destacado en la Hnea del Zapote, dijo el dfa 21 que no ocurria novedad en su Hnea ni se notaba movimiento alguno relacionado c.on aquel desembarco, pero ai dfa siguiente, Baldomero Aguinaldo, que .cs Comandante de Milicias, desaparecio de su cas a de Cavite Viejo" y hoy, por persona que Mariano Trias envi6 a la plaza de Cavite, se sabe ya la certeza de la noticia: Emilio Aguinaldo y otros cabe-


cillas han llegado a bordo del barco norteamericano M ac-Culloch, lqae fue expresamente por enos a H,ong-Kong, de cuyo puerto salieron sin el menor obsdculo por parte de .}as au toridades inglesas, que una vez mas, y en asunto de tanta importancia, han violado puIblicamente 1a neutralidad que decretaron. Los americanos han hecho tambien un desembarco de armas para los insurrectos. La noticia me causa mas impresi6n que si hubieran desembar'cado diez 0 doce mil yanquis, pues aunque los PP. Jesuftasque estos dfas recorrieron la provincia de Cavite han dado seguridades al Gobernador General del buen ' espfritu que en ella reina y de 5U inquehrantable decisi6n de pelear contra los americanos; aunque Mariano Tdas, Recarte y otros cabecil1;ls de la pasada insurrecci6n, que ahara son Comandantes de Milicias, han reiterado sus protestas de adhesi6n a Espana despues de saber la llegada de Aguinaldo y han asegurado que este no hara nada en cuanto sepa las reformas ya dadas y la promesa de plantear otras nuevas, a pesar de todo eso, repito, desconHo y temo, 10 mismo que desconHa y teme el General Gobernador de Cavite. Don Felipe Buencamino, Jefe del Tercio de Voluntarios "Anda Salazar", destacado en el puente del do Zapote, fue ayer en persona !l conferenciar con Emilio Aguinaldo. Tambien sali6 ayer para San Francisco de Malab6n el Auditor general del Ejercito, Sr. Pena, con la misi6n de enterarse de Ja actitud y estado de animo de TrIas, Recarte, Riego de Dios y otros ex cab~ci11as de la insurrecci6n, y dicho Auditor ha regresado con muy b\!lenas impresiones, convencido de la lealtad de estos, que Ie juraron no unirse a la causa de Aguinaldo y pelear solamente por Espana. En virtud de estos favor abies informes se han enviado fusiles para las Milicias que mandan Tdas y Recarte. Fuerza de Ingenieros sali6 ayer para el Zapote con objeto de ,atrincherar aquella Hnea, altamente estrategica y de gran import ancia; por esto creo que debiera mandarse allf la mejor tropa que tuvieramos y dejar para otros servicios el Tercio de Voluntarios que manda Buencamino, pues tanto este como los soldados que 10 constituyen no son gente de armas ni tienen estos mas relaci6n con aquel y con el segundo J efe Sr. Arnedo que la del colono con el principal; otra cosa seda si estuviese defendida por el Coronel Blanco y sus voluntarios de Macabebe, reclutados de distinta manera, g,e~te acostumbrada a guerrear, escogida por su valor y completamente sometida a su jefe, por la bravura de este, que los entusiasma y enardece. Como esa lInea es el paso obligado desde Cavite a ,M anih, sera I


laque sufra el primer empuj6n de los americanos y de Aguinaldo, si se subleva, y estando tan mal defendida como 10 esta actualmente no seda extraiio que tmv1.etamos un descahbro y <iJ.uedasen cortadas las fuerzas del General Pena. Estas son en la actualidad unos 2.500 hombres 1 ~umero exiguo para cubrir los puntos mas estrategicos y vigilar las costas. Se ha establecido una Imea desde Naic a Silang y ha sido preciso para ello retirar las tropas que habra extendidas desde Santa Cruz de Malab6n. La opini6i1 publica verla con gusto que se enviasen mas refuerzos al General Pen a y a la Hnea del Zapote.

La noticia agradable que tengo que consignar es la de que se ha recibido en Manila un cahlegra-ma del Gobierno de Madrid, manifestando que se proocupa seriamente de la situaci6n de Filipinas y que en seguida mandad. auxilios de todas clases. Esto levanta mucho el amimo, y puesto que la Patria aCllde en nuestro .socorro, nos disponemos a hacer cuanto humanamente sea posible para salvar Ja sitJuaci6n hasta la Uegada de aquellos refuerzos.

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CAPITULO XII

.. 27 de mayo.

Ya . empieza :1 cambiar de aspecto la situaci6n; el cielo va oscu"Ceciendose; pequeiias rachas de viento humedo y lejanas tronadas nos anuncian la tormenta. Sl, una atm6sfera pesimista nos rodea y hay motivos para la desconfianza. Felipe Buencamino, acquel Jefe del Tercio de Voluntarios «Andi 'Salazar", que jur6 cien veces, en discursQs y cartas, morir por la causa de Espana, el filipino mimado por todas las autoridades, se march6 el d£a 23 a con£erenciar con Aguinaldo y aun no ha vuelto; -gente llegada de Cavite asegl!lr6 que vivla con aquel, a cuya causa 'se ha unido incondicionalmente. Ha cometido Ulila traici6n baja y cobarde, y el delito de desfalco y , malversacion de rondos publicos, pues se asegura por todo el 'mundo que con el han. desaparecido 16 6 20.000 pesos que se Ie en'tregaron para la manutenci6n y haberes de sus voluntarios. Su historia poHtica no empieza mal; desprecia sus juramentos 'de ·'honor, traiciona a Espana y roba a sus soldados, a sus propios pai'sanes, los pampangos. Esos ,son los hombres que manana [evantaran bandera por la jus,tlcia y la libertaQ, por la moralidad y el bien del pals. De wdas partes empiezan a recibirse desagradables c·onfidencias tk:le nuevas conspiraciones, de desembarcos de armas y de un levantamiento general para el dfa 31, sirviendo para ello como seiial un .caiionoo que had. 1:1 Escuadra americana sobre las costas de Santa Cruz de Malab6n y de Naic, en cuyo ultimo punto parece que des.,e mbarcad Emilio Aguinaldo con 16.000 fusiles. 87


El General Gobernador de Cavite no puede hacer obras de atrin-cheramiento en Bacoor y Cavite Viejo, porque la gente no acude a. los trabajos a pesar de pagarseles puntualmente, y a la tropa no puede ocuparsela en esos servicios, pues tiene que estar C0nstante.rnente¡ sobre las armas vigilando numerosos puntos. Los parrtlcos de los pueblos de .la provincia de Cavite van lle-gando a Manila, llamados por sus provincia:Ies. A pesar de estas infaustas noticias, aun se tiene connanza en mu-cha parte del pals, que sigue haciendo ofrecimientos. Yo, por mi~ parte, creo que h cosa va mal; pero tampoco la considerada perdida si notara I1;las actividad y acierto en el General en Jefe¡ y en el segundo Cabo; mas si dejamos que los sucesos surjan, se-de'\arrollen y terminen con la unica mediaci6n de la Providencia 0 la suerte, no' es diHcil preyer un desenlace fatal antes de que lleguen los refuerzos.. de Espana. .

A ultima hora se han oido algunos canonazos hacia el interior' de Cavite.


C,APITULO XIII 28 de mayo.

to que temla, 10 q1i1e espcraba, esd. llegando; noticias venidas deCavite nlOs enteran que anoche fue atacada en el barrio de Malagasan (camino de Imus a Dasmarinas) una patrella, de la que ilo se ha vuelto a saber nada, y que esta manana una partida numerosa, perfectamente armada de fusiles, atac6 el pueblo de Imus. La Guardia'. Civil e lnhnteda de Marina ' que alH hay sostuvo fuego con ella cerca de una bora, n~chazandola y dispersandola. Ha salido una compania de Noveleta y otra de San Francisco de Malab6n, al mando, del Comandante de Infanterfa de Marina D. :Fulgencio Pazos, para' hacer un reconocimiento sobre Imus y Perez Dasmarinas; pero, segun me dicen, queda casi s,in fuerzas el General Pena, y se vera muy' apurado sa. hubiese, como se espera, un levantamiento respetable, aparte de que pueden Hegar de un momento a otro tropas americaRas de desembarco. En la Hnea del Zapote no CCUrFe novedad, y cuando alH se supo' el ataque a Imus, se reforzo con 50 cazadores el destacamento del' puente, dando oyden a su Jefe de acudir con esos hombres en auxi~io de ]3acoor, si {uese necesario. ~arece <que el Comandamte de Milicias D. Artemio Recarte ha deslstido de armar a sus miliciamos, qt:le son de lmus, por no tener c-onfiianza en eUos. Este es un rasgo de nobleza, que hay que agradeeel." en 10 que vale. to que"no se explica, 10 que a todo el mundo inquieta y exaspera,. es que, a pesar de estos acontecimientos y de los que se ;lnuncian


por con£dencias que a todas horas se reciben, no salga una fuerte -columna: para batir y dispersar a esas partidas, que todavfa son relativamente pequenas; la rapidez determina el triunfo en estos CilSOS, y si ahora se prepara una columna de 3.000 hombres, que caiga alH .aonde salte un chispazo y 10 apague antes de que prenda y se haga imponente hoguera, todavfa podremos resistir mucho tiempo; si 10 ·dejamos para mas tarde, sera ya imposible sofotar el incendio. .~Para -que necesitamos en esta capi1tal las tropas, si es de fuera de .uonde ha de venir el ataque, si los indios ..de aquf no esta.n armados? Pero ademas, y esto es mas grave, ~c61no no concentra el Gene'ral Pena sus fuerzas y cubre con ell as desde Imus hasta €l Zapote? ~Es acaso que tiene orden de sostener los puntos que ocupa? S610 as! 'pudiera explicarse su conducta, pues el, que desconbaba y temfa un 'potente levantamiento, segun dice h gente que llega de Cavite, no :iba a poher en desacuerdo sus dichos con sus hec~o.s.\ S:-~ep_ llegado lei caso de reconcentrar, no s6lo las fuerzas de Cavl1;e," SInO las del centro de Luz6n y Laguna-Batangas, en destacamentos de r.o.o~. 'hombres 10 menos y ea punt~s ~n ~.2e }es sea, fa~~J, Jlegado el ca~, 'Unirse entre sf y a esta provinc·I.CGrave y trascendental es la medi-' Ida, pero tambien es grave la situaci6n. Abandonar las provincias su'pondra quiza para luego el trabajo de reconquistarlas; pero dejar 'nuestras\ tropas fraccionadas en pequenos destacamenros, es entregarlas al enemigo, que los incomunicara y copan~ aisladamente uno despues de otro. En cambio, si se formaa cuatro a cinco columnas para que acu·dan al sitio donde aparezca Ulia partida, la bata y regrese otra veZj 'si se trazan tres 0 cuatro Hneas militares que de£endan la provincia ·de Manila y aseguren en 10 posible las subsistencias, y a esas Hneas se Manda la mayor parte de las tropas que tenemos en Luz6n, en·tonces no pondran su planta en esta provincia ni americanos ni re'beldes, y eso es 10 import ante y 10 trascendentcrl, porque mientras ' -en la capital del Archipielago, don de reside la represeritaci6n de Espana, siga ondeando la bandera roja y oro, filipinas sera espanola, y tal vez deje de serlo si sobre la fuerza de Santiago flotase el pabe1l6n estrellado. Se comprende, por 10 tanto, la efervescencia que hay €n la opini6n, que ya no se recata para ·dirigir duras censuras al Gobernador Generai y a cuantas autoridades intervienen en la direcci6n de los _negocios publicos. La Comisi6n Civil de Defensa permanece tambien inactiva, y el 'Gobernador civil y el Alcalde dejan a los comerciantes que realicen 'cuantos atropellos Ie viene en gana. Todos parecen contagiados de la misma pasividad e indiferen-


tismo y c(m~encidos, por 10 vis to, de la inutilidad de oponerse a los fi;e:siJgnio'S de la ProvitiJencia.

29 de mayo.

EJ temporal arrecia, pero los paraguas permanecen cerrados. Esta mamana se recibieron con.fidencias de que esta noche seda atacado por numerosas partidas el pueblo de lmus; por la tarde lleg6 la noticia de que los insurrectos estaban atacando el de Bacoor; que el General Pena estaba incomunicado con ambos pueblos, y que desde 1a t0rre del convento de lmus se vda mucha gente armada por los alrededol.Ces dtdl pueblo, el cual haMa sido abandonado por casi todos -sus vecino.s. El destacamenw de fuerzas regulares de lmus creo. que 'Solamente asciende a unos cien ho.mbres. Un munlcipe que viene de Las Pinas a traer un parte para el -G obierno Civil me dice que a la Hnea del Zapo.te han llegado gente y telegramas de Cavite, donde hay mucho jaleo) segun palabra del recien llegado. Parece ser que las do.S companfas que al mando del Comandante .de lnfanterfa de Marina D. Fulgenci0 Pazos salieron a practicar un reconocimiento hacia lmus y Perez Dasmarinas, han sido copadas, muriendo en la refriega el citado Sr. Pazos, do.s 0 tres o.ficiales mas y .bastantes soldados y siendo. los restantes desarmados y conducid05 al ¡ bosque. Tambien dice el alguacil del Tribunal de Las Pinas que esta 'tarde lleg6 alII un recado. del General Pena pidiendo con mucha urgencia refuerzo.s para el destacamento de San Nico.las y .para Ba'coo.r; -que po.CO despues se recibi6 otro de Cavite Viejo, diciendo que estahan atacando. aquel p~eblo, y que el Coronel Pintos dispUSo. 'salieran en su auxilio uno.s ochenta voluntarios pampangos del Ter.cio "Anda Salazar". Sin duda por estos hechos se prepara para s.alir con difl.~cci6.t1 al 'Zapote y San Nicolas una columna de 500 hom.bres, al mando. del Teniente Coronel D. Nicolas Soro. A juzgar por el incremento que ha tornado y;a 1a insurrecci6n, croo que son esas muy pocas tropas; enviadas anteayer 0. ayer, todavla hubieran po-dido. hacer alga, reco-ger al Generd Pena y algunas ¡ de sus fuerzas y establecer una fuerte l Inea en el Zapote. Ya veremos. :~

* ::.

9'1


Si graves son los hechos que dejo relatados, no 110 son menos las.. noticias que por diferentes y leales conductos Began a Manila. Unas. anuncian para manana la sublevaci6n de Imus y que la Escuadra americana canoneara 1a costa el dfa I como senal para un alzamiento en todas las provincias, y otra~, que los americanos han entregado a Agminaldo 8.000 fusiles, que se 11'eparnem por medio de vintas a. diferentes pro:vincias, y que a fa de Cavite Began constantemente barcazas Benas de gentes de Zambales. A pesar de todo esto, no se sabe que se haya dado orden de' concentraci6n al Genera:l Monet, que esta en la Pampanga, ni a1 Coronel Roddguez Navas, que se halla en Batangas, para que en. seguida vengan sobre 1a provincia de Manila. Se espera sin duda a que esto sea imposible, a que los insurrectos. incomUJni~l!1en unos destacamentos con otras, a que pmedan cerrarles el paso, y entonces, Cl:laun ao ya no sea tiernpo, ' se mandara que' vengan. ~t.

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Acaba de salir la columna del Teniente Coronel SoroO para eh pueblo de Las Pifias, desde donde marchara al Zapote. '

30

de mayo.

La ansiedad, ·la inquietud, el disgusto rein an en Manila. Toda la, mad rug ada hemos oldo vivo fuego de fusileria hacia Binacayan, Bacoor y San Nicolas. . La columna Soro sali6 anoche a la una de Las Pinas con direcci6n al Zapote. . Se sabe qwe en h madlrugada de n1@Y se pasaron al enem~g0 algu-· nos voluntarios del Terc[o «Anda Salazar", y que c~ando los que estaban destacados en el puente hadan 1a descubierta, fueron atacados porlos insurrectos; el Teniente Coronel Soro acudi6 y se entab16 combate, que dur6 hasta las siete ·de la manana, siendo rechazados los; insurrectos, que se retiraron hacia BacoOor. Se ignoran las bajas que' han tenido los ' nuestros. Poco despues volvimos a ofr nutridas descarg,as de fu~ilerfa yalgunos disparos de can6fl, cuya procedeneia no se sabe, pues nU'estras tropas del Zapote no tienen ninguna pieza de .artillerfa. Los insurrectos, en grandes mas as, reanudan el ataque al Zapote,. que dur6, con gran vigor por ambas partes, hasta las nueve de la manana, siguiendo desde est a hora un tiroteo debil, pero continuado~.


Los insurrectos ocupan !}as mismas posiciones que por d.a maiiana. :Itl C0>rone~ Pinws ha pedido municiones y mas tropas, con al-gun a artiHeda, para desalojarlos de aquellas. Al medi6 dla sali6 de aqul otra columna de 500 hombres, al mando del Teniente Coronel D. Manuel Hernandez, y dos piezas de artiHe!l!'£a de campana, en auxilio de la de Soro. Si estas dos columnas hubie"sen salido juntas ayer por la maiiana, ,Rab.lilan sufrido 11()s rebe1des un buen escarmiento y no estarfa la sit1Jlaci6n como esta; pero esta visto que tenemos la desgracia de se" g~1:liJj flicliccionando las tropas, de modo que a l'OS enemigos les sea tacil batirlas parcialmente. Ellos siguen la tactic a contraria y les dara huen resultado. Acumulan sobre un destacamento 0 columna toda la gente que tienen, y hasta que la baten y ' rinden no atacan otro 'sitio. ~ Poco despues de marchar el Teniente Coronel Hernandez sali6 par:a Las Piiias un gran convoy de municiones. H:stima que no se hiciera todo esto hace dos dfas, 0 al menos ' cuando sali6 5oro!

,Que

* ** A ultima bora de la tarde hemos sabido en Manila que el Teniente Coronel Hermtndez lleg6 a Paraiiaque a las tres y media, recil>ien:do orden del Co.r ond Pintos, desae Las \Piiias, de que permaneciera en aquel punto y Ie (mviara dos compaiifas mixtas y dos piezas ,de artiUerfa, qu,e se 11111idan a Soro para desalojar a lo~ insurrectos -de sus posiciones; pero que cuando llegaron estos refuerzos, el Teniente Coronel Soro habfa tenido que retirarse a las Piiias, pOl" ser llfUmeroslsimo el enemig'O y no poder s'Ostenerse en los puntos que ocupaoba. Estan en nuestro poder el puente y 13: margen derecha del rio Zapote; en aqutH se ha colocado la Artilleda. Los insurrectos han ocupado la orilla izquierda del "Zapote, d~ jando incomunicadas las fuerzas de Peiia con esta capital.

*** Esta: Boche se deda pOl" todas partes q1ue habfa llegado por la lInea de Silang un telegrama desesperad'O del Gel11eral Peiia, que el pure~lo de S·an Francisco de Malab6111 estaba "rodeado por los insue ello, se hab£a dado orden al General Peiia 'rrectos y que, en. vista dO de qlle C01Fl€entrase sus fuerzas en una columRa y se retirara por odonde pudieta; pero que ese telegrama no se habla podido transmitir POl" haberse cortado "todas las comunicaclones con la provincia de Cavite.

93


Las comunicaciones, segun me informan en T elegrafos, estan en efecto cortadas con toda la provincia de Cavite. En todo el dfa se ha estado oyendo fuego de fusilerta y de cafi6n por diferentes sitios de Cavite; pero como el telegrafo no funciona, ignoram.os 10 que pasa allf; sin duda !ion los destacamentos. de la brigada de Pefia, ql!le se baten a la desesperada.

94


CAPITULO XIV 3I de mayo.

Esta manana, el enemigo se corri6 por el camino de Bacoor COD. dipecci6n a San Nicola.s, tal vez para intentar vadear el Zapote pol Almansa y entra en esta provincia por el llamado BosqH.e de Aromahan. Las bajas que ayer tuvo la columna Soro ascienden a 42, entre~ ' muertos y h en'd' os. Las Milicias de PlO riel Pilar han recibido ayer su armamento yorden para marchar a OCllpar los pueblos de Pineda, Malibay y Paranaqee. Se muestran muy entusiasmadas y con deseos de combatir' a los iasurre€tos; pero las traiciones que ya hemos vasto nos hacen desconfiar de todo. La intranquilidad y el miedo vuelven a posesionarse de las mu-jeres, s610 que ahora la emigraci6n es a la 'inversa, de fuera para. adentra, de ids arrabales a la ciudad murada. En los hospitales, situa-dos 1Ioy en barrios extremos por los peligros del bombardeo, parece que hay tambien bastante agitaci6n, y se 'comprende, pues aquellos. pobres heridos y enfermos, que a todas horas oyen nutrido y 'pr6ximo fuego, se sobresaltan ante la idea de que los insurrectos puedan. entrar en Manila y cometan con ellos todo genero de crueldades.

*** Anteay,er lleg6 otro barco aleman, y por la correspondencia de queha sido portador sabemos que hasta el d£a 24 ·no pedo salir de San Francisco de California la expedici6n militar que a estas islas env£a


tel GobiernQ noneamencano Y cuya import an cia se descQnoce, pues mientras un,os aseguran que se CQmpone de 5.000 hQmbres, otrQS elevan este nO-metro a 15 .000. Tambicl'l hemQs sabido que 1,oS Fefuer-zoo ",que de la Metr6poli esperamos, y ql!le ya crefamos en camino, nQ han salido aan, y cQnsisten en dos acorazados, siete CFuceros y cuatr,o 'to!t"pedeFo,s, mas [2.000 hombres de desembar:cG. 5i: estos elementos "Uegan a tiempQ, es seguro n1i1estrQ irimnfo, y en el misrno sitio en que vimos destrulda nuestra debil Escuadra tendtem,os la 'satisfacci61'1 de ver hundirse los barcos americanos y que caigan prisioneras en nues'tro poder sus trQpas de desembarco. Todos, sin embargo, tenemos algun temor de que l,oS al!1xiIiQs de :Espana Heguen tarde. ' HoOY ila salido para hacerse €arg,o de los dest3!camentos de la mar:gen izquierda de la Laguna de Bay el Coronel Lasala, que fQrmara ,con enos una linea defensiva desde MUfltinlupa hasta ponerse en con'tacto con la del Coronel Pintos, que empieza en Las Pifias; pero esa ':Lfnea dene que ser sumamente dcbil, porque tenemos muy poca tropa 'por aquellos sitios.

*** Los ins·a rrectos han c0rtado la Hlilea del ferttocarri:l de Manila a 'Dagupan, y han salido de Caioocan £uerzas del bataU6n de Gufas 'Rurales, que manda el Coronel Carb6, para ver si puede componeda. La Hnea ferrea es samamente importal'lte en estos, rn,omento~, n,o s6lo :para que vengan las fuerzas del General Monet, si asf 1'0 dispusiera el -General en Jefe, sino para el transporte de subsistencias a esta plaza~ Al fin y 311 cabo, resultara 1,0 que ya dije: que tQdas las reses qu~ 'habfa preparadas en las inmediaci,ones de la vfa se quedaral'l anf. , ComQ ' se v€, la 1nsurrecci6n se ha pl1'opagad~ ya, al ,otro lado de ;iManila, que muy pronto se vera cercada por todos sus Hmites. Est,o va mal.

I

de junio.

Durante el dfa de hoy han continuado las maias notic.La:s del in-terior. El Capitan municipal de, TambobQng avis6 esta manana que -estaban atacandG la cabecera de Uuladn, y que d Comamdante -de la~ Milicias de Santa Marfa de Pandit habfa salido en su aU:lCilio. Al mis'mo ti~m~oque se supo esta mala nueva.se empez6 a Qfr nlj'trido fuego de fusllena por el Zap?te y bastantes dlsparos _de can6n. .


Despaes s1.ilp~mQs qUI: lQS msarr:ect0s, fuertemente atrincherados >en la orilla izquierda del Zapote, atacaF-on nuestras posicienes, auxiliados allParecer por les canoneros que nos apresaron l.os americanos; que al Zapo< te hablan Uegado noticias de que el fuego de cafi6n que ;se ,ola en el interior de Cavite pr,oced£a de las fuerzas del General Pena, que al mando de este venfan atacand,o por el fIanco izquierdo. Esto ha producidQ mucha alegrfa en MantIa, pero, desgraciadamen"'te, mo se ha c,omfirmado. Las Milicias de Ple del Pilar han ocu pado la Hnea avanzada del 2apote y se han compr,ometid,o a impedir el paso del enemigo a la provincia de Manila. Esd,n animadas de muy buen esplritu; per,o, a pesar de ese, c,onsi-der,o un disparate el que se les conHe la Hnea mas importante, la que ba de impedir una invasi6n en Manila·. Parece rnentira que de tanto desen,gan,o no resulte ninguna previsi6n para el General en Jefe. Aqui n,o cuaja el refran: "De los escarmentados nacen los avi:sados." 2

de junio.

Con gran s,orpresa su po esta manana la pob1aci6n de Manila el 'regreso de las dos columnas de l,oS Tenientes Cor,oneles S,oro y Hermlndez, con Jas dos piezas de ArtilLerla, y aunque la c,osa era incre£ble, tuvimos que rendirn,os a la evidencia al ver por las calles de Ma'nila a los citados jefes. Es decir, que anQra que el enemigo se presenta numer,oso y ataca ,c,onstantemente la Hnea del Zapo1Je, se deja esta sin artillerfa y enc,omendada casi por completo a l,oS voluntariQS pampang,os y a las Milicias de PlIO del Pilar. Ya no me extranad. pada que los insurrect,os invadan cualquier <t£a losarrabales de Malate y Pac,o.

El Cer,onel Lasala fue r,odeado por l,oS insurrectos en Muntinlupa, Y c,omo tiene poca fuerza, $e ha vist,o obligado a .replegarse hacia Ta- . ,guig, antes de que Ie c,ortasen la retirada. Hoy esta ya mc,omunicada Manila con todo el resto del Archi·pielago. jDios salve a tantos co~patriotas, miHtares y paisan,os, que quedan diseminados por las pr,ovincias.

97 13l SiNO dt Monila.-7


6 de juriio. Anoche fue atacado en Taguig, por gran numero de msurrectos" el Coronel Lasala que se vi6 obfigado a rep1egarse a Santa Ana. E1 Coronel Pintos se retir6 tambi,en ayer de 1a importantlsima.Hnea del Zapote, y parece ser que sin avisar a las fuerzas del c~ mandante PlO del Pilar, que quedaron cortadas y sin auxilio. Estas fuerzas, que sQstuvieron en los pasados dfas brillantes combates, se han pasado al enemigo. iQuien sabe si habra contribufdo a ello el incali,ficable olvido del Coronel Pintos!' ..

,

Con tan tristes antecedentes empieza el dla de hoy, que bien puede senalarse con piedra negra en ,la historia de nuestra domina-ci6n en Filipinas. Desde las primeras horas de la manana se sabe que los insurrectos, en en.0rmes masas y ya r.ebasado d Zapote, se dirigen sobre la Hnea de blocaos, que antes de las doce esd. atacada; es· nuestra ultima" defensa, y tan debil, que bien puede decirse que cons, tituye nn fragi1 ohstaculo. Nadie se ha 'preocupado de chapear los bosques y manglares del {rente de los fortines, ni apenas se han construldo trincheras de enlace entre 1!lflOS y otros. lEn estas ' condiciones, si los insurrectos atacan con arrojo, s6lo una heroica defensa de nuestras escasas tropas· podra detenerlos por mas 0 menos tiempo. La inquietud y 1a zozobra reinan en la ciudad, y la parte pad-fica de ella se halla poco menos que pose£da del panico; los arrabales extremos se desalojan rapidamente, y mu jeres y ninos, carretones ycargadores, se dirrgen a intramuros y franquean len trope! sus puer-tas, cuy<t guardia de voluntarios ' se ha reforzado . . Acabo de enterarme que la Hnea ha· sido dividida en tres sec-tores: izquierda, centro y derecha, al mando cada uno de los Generales D. Jose de Palacios, D. Francisco Rizzo y D. Vicente Arizmendi, que tienen, respectivamente, como Jefes de Estado Mayor al Capitan del Cuerpo D. Jorge Fernandez Heredia, a1 ComandanteD. Leopoldo Fuentes Bustillo y al Teniente Coronel D. Crist6bal Aguilar. S6Io quedan fuera de la Hnea en nuestro poder 10s pueblos de Caloocan, Santa Ana, San Jua:n del Monte y el dep'6sito de aguas. de SantoIan; el resto de Ia prQvincia esra oC1!lpado por lQS r1ebeldes, cuyas avamzadas se tocan casi con las nuestras. Se envfan refuerzos-< a los sectores y se ordena se construyan las trincheras que sea posi-ble y que se haga una resistencia desesperada.

9-8


Los minutos transcurren con ansiedad; en las puertas se hall2. todo preparado para levantar los puentes levadizos; las murallasestan tambien custodiadas, pero todo el frente se encuentra sin chapear.

. * *

~

Por la tarde se empeiia el comb ate en el sector de la derecha,. desde Meitubig hasta Santa Ana. La poblaci6n presenta extraordina-¡ ria actividad; con el tropel de gente que huye se mezc1 en las tropas que van a reforzar .las Hneas, los convoyes de municiones, los. Jefes y Oficiales que circulan de un lado para ' otro, camillas que van y vienen, voluntarios del Escuadr6n, que traen y Bevan 6rdenes; todo es guerrero, pero triste, porque 'se han cafdo todas las ilusiones, porque se presiente el desastre inmediato y sin apelaci6n. Y la Escuadra americana, ~que hace? Ya van algunos dfas que no me ocupo de ella, no porque haya estado inactiva, sino porque me han preocupado mas los suces-os de tierra. Los yanquis esdn hoy inm6viles, contemplando impasibles c6mo se realiza su propia obra, c6mo amenazan a la ciudad las turbas que contra ella han desencadenado. TDdos estos dlas han tenido en constante movimiento sus barcos mas pequeiios, trayendo y llevandG de unas a otras provincias cabecillas, armas, municiones, hombres, como si se propusieran que nG quede en Luz6n un palmo de terreno en que no arda 1a guerra civil, en que no broten como hierbas malditas rebeldfas y traiciDnes. Ahora se explica que no nos hayan vuelto a hacer intimacionâ‚Źs ni, amenazas. ~Para que? Sin disparar un tiro, sin tener una baja, hacen desde las cubiertas de sus acorazados buques que los insurrectos nos cerquen. ¡Cuando la lInea sea rGta y rebasada, cuando intramuros sea el obligado refugio de todos IDS espaiioles, exigid.n 1a entrega de la plaza, y si no se accede a sus pretensiones, bombardearan una ciudad llena de mu jeres y niiios, de heridos y enfermos, y cuando por esta unica causa la rindamo~, todavla seran capaces de alardear de su innoble victGria. Sin embargo, maltrechos, doloridos como estamos, no los envidiemos, que si nosotros llegamos ya a la cum:bre del G6lgota de nuestros martirios, ellos esdn escribiendo a la faz del mundo civilizado 1a pagina mas negra de su historia.

La noche aumenta con su manto de sombras los horrores del dll. Sin embargo, los insurrectos no han forzado la linea ni ganado un palmo de terreno; la Hnea, con sorpresa de todos, resiste. A las tres de la madrugada circula la horripilante noticia de que

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fluestras tropas, rechazadas en Meitubig, se retiran y que los rebeldes avanzan por Malate. Pero bi~lil prontoo se desvanece este rumor y se confirm a, por el contrario, que los insurrectos, rechazados coon enormes perdidas, se retugian en el bosque. Efectivamente, el tiroteo disminuye y aeaba 1'ÂŁ>r cesar. Aproveeflo esta calma y pongo en orden y consig1'l:o mis impresiones, que ererro con una notieia optimista: Qu'e pro del Pilar no se In slilbl~v.ado, si11l1{) que, ahfle1'l:dose paso pot entre las masas rebeldes, ba Hegado a Cavite, reunlelldosâ‚Ź a las fuerzas del General Pella y de Trias, qu~ se asegura sostienen aun en aquella provincia la bandera espanola.

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CAPITULO X V 7 de junio. Acong6jase ~l alma con los gq.ves sucesos ocurridos en esta isla de Luz6n des de los ultimos dlas de mayo, y que acabo de re1atar. Ya al consignar esos sucesos ruce tristes reflexiones sobre los mismos; hoy aprov¡~cho la relativa calma que se nota y 10 poco que el dfa da de sf para completar aquellas reflexiones, presentando como en ~lnusis todo el capItulo de cargos que, con razones <;obradas~ formula la opini6n publica, sin rebozo alguno contra el Capitan General de Filipinas. No hay que forjarse esperanzas; la descarnada realidad ' se impone; estamos cercados por todas partes. El movimiento insurreccional, temible y siempre temido, sobre todo desde que se supo el desembareo de Emilio Aguinaldo en la plaza de Cavit~, estaUa potente y vigoroso; es formidC\.ble incendio que amenaza consumir cuanto encuentre por delante; es reguero de p6lvora que amenaza hacer saltar de cuajo hasta las mismas piedras. Los lilipin.os estan al borde del precipicio y sufren la terrible fiebre del suicida. No quieren comprend~r, no quieren discurrir. Bast6 la presencia del cabecilla procaz, del cabe~illa que los vendi era dos veces comerciando con su sangre, para que, como un solo hombre, provincias enteras, de~oyendo su conveniencia, jugandose a una carta su porvenir, y faltando a palabras que los hombres que tienen hO.Q.or respetan hasta la muerte, sigan las band~ras de AgQinaldo y se echen en brazos de extranjeros, que si sahm triunfantes, en la para nosotros desigual luch-a, seran, sin duda alguna, dados sus caracterlsticos procedimientos, los vengadores de la generosa Espana en estas islas. EI desastre se presenta imponente; pero <es s610 porque gran

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parte del pals, faltando Llna vez mas a sus promesa:s, se desencadena y se reV:Ulelve tumUlltU'osa~ente contra !a so~eranfa espanola? No~ ya 10 he dicho; por aesgracla, a esta ternble epoca que ahora empleza y que nos promete larga reata de disgtlstos~ no nos ha Ilevado unica:mente la ingratitud y desleahad de los indios, sino, los desacienos de '11uestros gobernantes, que han venido a completar los aband.onos de los Gobiernos metropolitanos. EI General August!, encastillado en ·una pasividad desesperante, sin energfas para afrontar las responsabilidades, sin haberse indudablemente hecho cargo de la situaci6n, nada haee. Ocupado quiza en nimios deta.lles, fatalista como un mahome·tano, ·convencido de que 10 que ha pasado era 1.0 que naturalmente <leMa de pasali y de que ya es tarde para cualquier vigcFosa resohl-ci6n, ve, sin tratar siquiera de evitarla, c6mo la catastrofe se c~erne 'sobre su cabeza y sobre ia de todos los espanoles; ve c6mo las pro. ·vincias se revolucionan al grito separatista, c6mo las comunicadones 'se cortan y las columnas se pierde.t1~ e6mo se estrecha cada vez mas el drculo de hierro ,que rodea la capital del Archipielago. ~Que se ha .beeho en ese mes de mayo, funestlsimo mas que por 1«)S desastres de Cavite por las inactividades del Capitan General, tranqurlo sila duda porque los americanos no bombardeaban la ciudad? Nacia, ni aun chapear los campos que rodean la Hnea de fortines, que ya constituye nuestra ultima Hnea defensiva; no se han construfdo trincheras) capaces de resistir el fuego@> de can6n, ni se ha esta!bt~cido una segunda y hasta una tercer a Hnea mmtar que permitieran extremar hasta 10 ultimo el vigor de la resistencia, ya que es indudable que tendremos que <d efender la capital de las Islas de un ataque combinado de insurrectos y yanquis. Por otra parte, y pasando a otra materia, ~se ha hecho algo por asegurar las stlbsrstencras de la plaza, para cuando llegase el caso, ,que ya ha Hegado, de que esta sufra un asedio en toda regIa que venga a compieta:r ei blcqueoque esta sufriendo?; ~no tenia fa Comisi6n Civil de Defensa a su cuidado este y otros particulares de analoga importancia? , De las notas de estos ultimO's dfas que tengo a la vista se deduce que casi nada se ha hecho tampoco en ~ste punto; asf es que, incomunicados con todo el Archipielago, · aunque tratemos de resistir hasta el ultimo mom en to, pronto nos obligara a cap'itular la falta :de vfveres, siendo 10 mas triste que podfa haihrse 1a plaza abarroucla de los ar~fculos de primera necesidad pa~a la vida, pues tiempo ha habido para haceresa y otras muchas cosas. Lo mas grave en esta situaci6n, 10' que verdaderamente hace inex.t:licabie la conducta de nuestras auwridades militares, es que para ataJar el terrible golpe que hoy nos hiere teruamos tropas suficientes, y que teniendolos nos vemos, por .negligencia que nunca seran


bastante censuradas, inermes, viendo como se desmorQna nuestro plocler y e6m,e l!11O nos va qtiedandlo mas tetritoric ql:1e ~l que coOrnprende la plaza de M:nila y sus .a:lrededores, ,ultimo balaarte,. q~e . por ahora Ie resta a Espana en esta Isla de Luzon. Cerca de vemtlcmco mi~ seldlados} va~ientes, aguenrido8, hech.,as a b campana y al clima y, de levantado esp£ritu moral por lOos laureles recientemente coOn.,. qNistadlOs, tenia el General August! a sus ordenes para detener el :rn:ovirniento separatista y para rechazar al ejercito yanqui, ti:n su mayoda y por su viciesa erganizaci6n o~mpuesto de gente que apenas si ha saludado las cesas de milicia. ~Que ha heche el General en Jefe de Filipinas cIOn ese EjercitQ ,que la Naci6n Ie cQnfiara para defemder la int egridad de su territoriQ y dar brino a sas arrnas? La unica contestaci6n que puede darse a esta pregunta es la de que Su Exceleneia no ha hecho nada, absolutamente nada. Se encontro .el EJeFcite distribufde ¡en pequenos destacamentes, y sin estudiar el :eonflictQ y la clase de guerra que se venlan encima no mQdific6 en nada ese sistema vicioso e incenveniente ,hasta 1.0 sumo en guerras ,c omo la actual, por las f-acilidades que presta al enem~ge de batir Y Viencer ' en detalle 10 que mmca podrfa hacer si se encontrara cIOn -grandes nuc1eoOs. No se explica nadiie, ne me explice ye, pDr que ne se han re-concentrado las fuerzas espanolas en puntos estrategicoOs y cercanos :.a Manila, por que no se han fermado fuertes columnas que, dandose la ' mano, como vulgarmente se dice, huhieran pDdido Dperar d.pi,d amente y cIOn exito sebre las mas as insurrectas, rna.'! organizadas y en paruti: desmoraJizadas por, les recientes descalabros sufridoOs, ' y en ultimo "extremo, y en el case de que no hubieran podido resisttr el 'e mpu je de 108 insurrectos, recencentrarse SDbre Manila, dandela unas ¡condiciellleS de inexpugnahilidad que hoy no puede tener. CIOn veinte mil seldadQs en la ciudad hubiera po dido censtru~rse un fuerte campo atrincherado en San Juan del Monte, 10 en Otl~O cualquier 'siti0 a1ejado del fuego de llOs barcos, en donde se hubiera podido custodiar tOoda la impedimenta, sirviende al mismo tiempo de refugio a m.u jeres y nines, a heridos y enfermos, y aligerados ya de esa ,':carga, siempre gravesa y comprometida para una plaza sitiada, y -eon abundantes provisiones, sl se hubiera atendido como era debido a este asutlw, Manila, def~ndida PQr un Ejercito heroico y por un vecindario resuelto a tedo, quien sabe si se sostendrfa hasta el final .de ' la camiilana, escribitmdo la pagina mas hermosa, mas brillante -de la actual guerra. I . . Des~cierto sobre desacierto, puede decirse coOn henda pena que mCOlilSClentemente, cIOn 1a mejor buena fe del mundo quiz:l hem<>s esrtado haciencll() la causa de mlestros adversarios. '

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Por no se que temores a contraer responsabilidades, por no se. que venda que cubre sus ojos, e1 Capitan General no ordena,. ~ '!rdena tarde, la reconoentraci6n de fas oolumnas, y deja al EJerclto . espano! despe1"digado y disperso en pequenos destacamentos que, SItiados par enormes mas as de insurrectos, tendran poco a poco que irse rindiendo, como ya 10 han hecho algul'los y como 1.0 haran todos a medida que les vayan faltando Vlveres y munidiones. Este es el triste cuadro que con los tonos de la rea.lidad palpitante se presenta a mis ojos. <::uando las des gracias sobrevienen porque no. hubo numano medio de evitarla:s, es de hombres valerosos s1!1£1"irlas con serena resigRaci01'!l yesperar tiempos mejo-1"es, pero cuando ~sas desgracias son el matural producto de torpez,as, 16gico es que los damnificados darnen al cido, aunque sea damar en desierto, y pidan energico y pronto remedio. Yo. comprendo que la reconcentraci6n de las tropas era una medida grave, y me explico los titu--boos deL G~neral en Jefc en adoptarla, toda vez que con ella tenIa:_ tamhien que ret;,~rarse todo el elemento peninsular de las provincias abandonadas, pero tamhien entiendo 'que 'las circunstancias excep-cionales requ1ieren exoepcionales determinaci-ones y que en cienos; ca-rgos debe tenerse ancho pecho para adoptar ciertas medidas. No, comprendo, pues, c6mo la reconcentraci6n no se ha . hecho al saberse el desembar@o de Aguinaldo, al ser copadas las dos coOmpafi£as mandaths por el GeI'.l:er:al <B~.fi.a para: hacer un re~onocimien to sobre' Imll:s y Perez DasmariFias y al darse el grito de alarrHa pOl" dicho¡ -General, abandonado a Sl!lS escasas fuerzas efl una provincia levan.-tada totaImente en armas. Et .fa:ntasma de la respo1ilsabilidad aterra a nuestras pr:imeras autoridades desde el principio de esta desdichada campana, y cruzadas de hrazos, sin atreverse aadoptar resoluci6n alguna que se aparte-' un poco de 10 vNlgar y 10 corriente, inc'blrre11l en mayores responsabilidades, que podran por su naturaleza no ser exigidas ante ningun Consejo de Guerra, pero que seran siempre justamente censuradas; por el vot'9 unanime de todos los espafio1es y por el severo fallo de la Historia. Dadas yapor huenas todas estas torpezas, por su categorfa de' hechos consumados, ~por que no se hace a:lgo para realizar, en 1a parte que se pueda, esa recoflcentraci6n que a una demandan los in-tereses de 1a Patria y las voces de la opinli6n pu~lica? Has,t a ahor.a no se sabe que se hayan rendidQ mas que algunos destacamentos de' Ia provinci.a ded Ca,vite, y digo algunos por-qUe todos los alas s.eoy~ gran tlvoteo pOl" esa p~rte, 10 cual clemuestra que todavla hay a!h gente que se bate,que slgue firme en sa puesto y que aun mantlene en aquella des1e~1 provincia el pabe116n espaiioI. PoOr otra par-

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te, el General Mortet, que inspira hoy unanirne conbanza, debe de" baber reco-nt;entndo parte d~ sus fuerzas que, unidas alIOs va:lientes y siempre leales Macabebes, oonstituirfa un respetable refuerzo. No me explico por que no s@ ha formado ya una columna de dos 0 tres. mil hombres, con la artillerfa conveniente, que vaya en auxilio del cOmancla11l:tie general del Centro de Luz6n. No por eso quedadan. desguanilecidas las tnncheras; voluntarios hay de sobra que no vacilarfan un momento en llenar este honroso servicio si por quien debe y puede se apelara a su, patriotismo y se les ordenara hacerl<? Y 10 que digo del Centro de . Luz6n digo de la Laguna y de Morong. AM esta fondeado- jUflto al puente de Ayala y sin hacer nada, imagen de' nuestra voluntaria impotencia, el caiionero Bulasan. Con este ca-· iiO.Iil<crito y dos 0 tres lanchas artilladas podrfa intentarse con probabilidades de exito salvar la importante guarnici6n de Santa Cruz de: la Laguna y quien sabe si algunos destacamentos mas de esa provincia y de 1a de MQrong. ~Por que no se hace esto? No 10 se, como· tampoco si es cierto 10 que se susurra, por que no se mandan. espfas 'q ue se enteren de ·l a situaci6n de las columnas perdidas por' esas provincias y que lleven 6rdenes a sus Jefes para obrar todos de acuerdo. Dfcese de publico que los esp£as y emisarios cuestan mu-· cho dinero y que el General August! defiende los fondos del Te-· soro como si fueran suyos propios, y que esta defensa la hace porque: sin energfas para nada y aterrorizado c.on esa s.ombra de inmoralidad que acompaiia a todGS los Gobernadores Generales de las colonias, aunque sean honrad£ls, pOI' culpas de algunos de sus predecesons, no quiere que crean que se apr.ovecha de las circunstancias para .alzarse c.on 1.0 que no es suyo. Este, ·que en realidad y de ser cierto es un escrupu10 de mOl'lja, contribuye c.omo tantas otras cosas ala. mina de Fluestra causa. En sfntesis, esd. visto, triste es cOl'lfesarlo, que no se quiere hacer nada; que no hay en las altas esferas esos arranques que llevan a 1a gente a las mas grandes empresas, que los pesimismos ;lrrancan precisamente de quien por su cargo debiera disiparlos, y que sed. torpe disculpa el dfa de manana fundarse en abarimientos de la opini6n para justificar ciertas debilidades. Demasiadas pruebas de levanta do espfritu moral y de prudencia esta dando el pueblo de Manila, pero fuerza es reconocer que, por grande que sea su viril~dad, caed en perjudiciales decaimiefltos si siguen sin energfas, sin direccion, sin dotes de mando las personas encargadas de los negocios p4blicos.

se,

10./).


Dije al primcipio que el dfa de hoy no daba nada que consignar en estas Memorias intimas. Solarnente me hago cargo aqul de un ru-mor que ha coni do insistentemente por '13. Escolta, por todas par·tes, y . que de confirmarse serb una noticia tan buena que en algo nos indemnizada de tantas rnalas wmo venimos teniendo. Me re· fi.ero a la especie de ·que el General Monet, que se dijo se hallaba en Ca1umpit, ha sali-do de este punto y ilegado a Malolos cOon su columna fU€Tte de unos tres mil hombres, con toda La coLonia penin. ''Sular y con nnmerosa impedimenta. L0s optimistas, que dan por segl!lro todos estos rlamores, esperan ill:! Comandante general del Centro de Luz6n en todo el dfa de manana. Dios quiera, en hien de to dos, que no se eql!llvoquen.


CAPITULO XV I 8 de junio.

S6lo nOtlClas desagradables puedo consignar hoy en estas Me;morias. Quitando la no mala de que anoche fueron rechazados con gran des perdidas los insurrectos, que atacaron briosamente nuestras posiciones avanzadas de San Antonio Abad, mis impresiones personales no pueden ser m:b tristes. Tod05 los optimismos de los pa路sados dlas sobre supuestas fidelidades deP{o del Pilar y de Tdas y sobre su puestos triunfos de las tropas del General Pella han ven1.do hoy estrepit:osamente a1 suelo como fragiles castillos de naipes. Esta 'visto" que en esta desdichada guerra 5610 se confirman los rumores :pesimistas. Sabese ya positivamente que el General Pella se halla prisionero con todo su Cuartel General en la plaza de Cavite. Tambien 路se sabe que Trias, no obstante sus calurosas protestas de lealtad, sublev6se con los suyos, uniendose a las fuerzas rebeldes, y que identico ,camino sigui6 Plo del Pilar, el hombre que aun despues del desembarco de Emilio Aguinaldo inspiraba mas confianza, sin duda p0r 'Ser Ulla y carne de Paterno, a quien sus propias conveniencias, segun :dicen, Ie c-olocan decididamente de nuestro lado. Ya veremos; yo siempre he dudado del Sr. Paterno, porque he crddo firmemente que des de el principio de 1a primera insurrecci6n estaba jugando con 路dos barajas, halagando por igual a ambos partidos extremos, con la 'santa intenci6n de quedarse al sol que mas caliente. PlO del Pilar, intitulado ahora Teniente General del Ejerc'i to 1i.bertador, tan pronto como 路se retir6 el Coronel Pintos, sent6 sus reales en el pueblo de San Pedro Macati, desde donde hostiliza constantemente a nuestras avanzadas de Santa Ana. En este punto, y a

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ias ordenes dd Corond D. Camilo Lasala, hay tambien vohmtarios:, inolgeillas; el "Tercio de Bayarnbaag" que manda el Capita,n de 1nfanterfa Acebedo y otros voluntarios procedentes de Montalban y San Mateo, a las 6rdenes de D. Licerio Geronimo, bombr~ del que a ~esar de haber s[do cabeciUa co.rren las mejores referenclas y quees tambien grande amigo del Sr. Paterno. Hasta ahora se portan. y se baten bien. jOjaIa sigan cumpliendo como hasta aquf la palabra que empefiaron y no tengam1()S que sumar nuevas desdichas y nuevas deslealtades a las rnlIDcnas que ya venimos sufriendio! Hoy se na distinguido desde el semMoro. bandera insurrecta en_ la torre del convento de Cavite Viejo. Atacado vigorosamente, se ha rendido despues de uma heroica resistencia, y cuahdo lias 150 hombres que form,ahan su guarnicion no teolan mas renl'edio que SUClambir por falta de vlveres y de municiones. iHonor a estos valientes, yque su ejemplo nos inspi·re para cumplir basta 10 {lltimo nuestros deheres de espanoles! Como estamos incomunicados con todo el Archipielago, las pocas noticias que se tienen son tan inseguras que mantienen en ten~i6n nerviosa a !-OdiC} d mundo y dan motiv·o a que la fantasIa, tan rica en l'Os espanoles, se desboque y se marche c~n frecuencia al tejado. De aqwI esas alternativas que van haciendo imposible esta vida, pues tan pronto nos e1evamos a los mas francos optimismos como nos despefiames en los barrancos de 121. mas negra desesperacion. Pare-ce que se naHan tranquilas las provincias de Parnpanga, Pangasinafl. T Tadac, y que el ex cabecilla Macabulos, hoy Comandante de Milicias, enemigo personal de Aguinaldo., no ha querido secund:].!" el movimiemto ~epa£atista) permafl@ciencio bel a sus compromisos con Es-pafia. De Buladn hay noticias mal as" pues aunque se as@gura que 1a -cab@cera s@ mantitme por nosotros, ~e afirma ·q ue el Capitan Jose, de Santa Marta de Pand~t, mocieio de lealtad en la primera insurrec-ci6n, se ha pasado tambie-n con SlaS Miliclas a los :t1eheldes. En ca't n-biD, toman mas cuerpo los rurnores de que ~d Gene.ral M.onet se encuentra a 50 kilometros de Manila; tiene, sin embargo, que atravesar el do grande, ·que es invadeable, y Cl!lyas orilla'), segun se susu'r ra,. esdn formidalblemente atrincneradas Y c\lajadas de insurrectos. £'sta es 121. ocasion de auxiliar al Cornandante general de Luzon; aSI 10demanda 1a op;ini6n publica, cq,da ve~ mas sobrexcitada an~e las inercias de arriba; aSI 1Q e~ig€n los sagradQs ~ntenses qlle Espafia -nos confiara en estas latitudes. Pero ~piensa de igual modo el Ca,Pit~n General? Lo dudo, porqt!l€ no se nota movimiento alguno en este: sentido.

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Acaho de enterarme del m'Odo y manera c6m'O los yanquis han tra£dG a estas playas a Emilio Aguinaldo y demas oompinches, aSl 'COmo de l'Os paetos celebrados entre el emping'Orotado ;representante ·de 1a naci6n mas culta del mU11;do y el procaz Jefe de unas cuantas -turbas insurrectas. No respondo de 1a autenticidad de algunos detanes~ pero incluyo .aqul la historia de 10 sucedido, tal como me 1a ha contado persona -q ue me merece oastante credit'O. Al estaHar eI c'Onflicto hispanoamericano, el cabecilla Aguinaldo, pretextando que Espana no Ie hab£a cumplido las ref'Ormas pactadas .€n Biacnabat6, ref'Ormas que, dich'O sea de paso, -n'O figuran en nin-g una parte del pr'Otocolo de aquella paz, se c'Onsider6 desligado de sus compromisos, que por 1'0 visto nunca fueron sinceros, y ponien<lose a merced de l'Os american'Os, entr6 en negociaciones con mIster A. Spencer Pratt, C6nsul general de los Estados Unidos de N'Orteamerica en Singapur. Sirvi6 de intermediario en estas neg'Oci.ldones -el subdito ingles Mr. Howard U. Bray, de triste recordaci6n en Manila, de donde fue poco menos que expulsado por su deprava1a con-d ucta. Aguin~ldo, residente en Hong-Kong, c'On anuencia de 1a Junta filibustera de aquel puerto, se traslad6 a1 de Singapur, acompJ.naci-o de Pfo Hilario del Pilar y de Leiba. Nuestros C6nsules, inactivos y POC'O cuidadosos, perdieron 1a pista del cabecilla tagalo y comunicaron al Gobierno que habfa marchado a ParIs, rumor que pOT aquellos dfas circu16 tambiell en Manil'a. Asf las cos as, el dfa 24 de abril se reunier'On en "The Mansion R.iver, VaHay Road", Emilio Aguinaldo, en representaci6n de los indios, y el Dr. Marcelino de 10$1 Santos, en nombre de IDs m~-;tizos <Ie espanDl. En esta primera ·reuni6n l'OS delegados filipinos expusier.on a Mr. Spencer Pratt sus pr'OP6sitos y la clase de ayuda que habfan de prestar a las fuerzas de mar y tierra de los Estados Unid'O!> para cooperar al mejor exit'O de las operaciones que estas hab£an de emprender c'Ontra 1'05 espanoles. Comprometieronse a mante!ler h clisciplina entre las masas insurrectas y a guardar las leyes de 1a guerra, no ultrajando a los espanoles ni tomando represalia alguna. Exi-:. gieron, en cambio, el establecimiento de un Gobiern'O semejante a~ que se otorgase a Cuba, poniendo desde 1ueg'O el Archiplielago bajo el pr'Otectorado norteamericano. Consultado telegraficamente el Com'Odoro Dewey, por no atreverse Mr. Pratt a resolver por S1, reunier'Onse de nuev'O los comisionacdos al dfa siguiente en 1a Legaci6n norteamericana, y a11£ se ' redac-

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t6 y aprob6 el celebre Tratado, cuyas bases generales son las siguientes: r.8 Se prodamara la independencia de Filipinas. 8 2. Se establecera una Republica federal, con un Gobierno designado por los insurrectos, nombrando interinamente sus miembros; Emilio Aguinaldo. 3. a El Gobierno reconocera una intervenci6n temponl a las Comisiones americana y europeas, que por 10 pronto designe el AImirante Dewey. 4. Se reconocera el protectorado americano en las mismas condiciones que se fije,p. para Cuba. . 5. n Los puertos de las Filip-inas sera,n libres para el comercio, universal del mundo. 6. Se adoptaran medidas de precauci6n contra la inmigraci6n china para regular su competencia contra el traoaj·C} de los natural€s~ 7. a Se reformara el sistema judicial existente, enoomendando al principio la administraci6n de justicia a oficiales europeos de com-· petencia. 8. a Se dec1arara la libertad completa de la Prensa y de 1a Aso-ciaci6n. 9. Habra tolerancia general religiosa. ro. Se adoptadn medidas conducentes a la explotaci6n de' los: reCl!lrsos naturales dei pais. r r. Se facilitara el d@sarrollo de la riqueza publica con el desenvolvimient0 de los caminos y ferrocarriles. 12. Se su prim iran los obstaculos existentes para el fom.ento delas empresas y la imposici6n de capitales extranjeros. [3. EI nuevo Gobierno eonservara e1 orden publico, quedandoobligado a impedir toda represa:lia. Trasladados los cabecillas a Hong-Kong en el vapor 1Y1alac{};J yratincad0 el anterior ConY-enia por el Comodloro Dewey, sin nlaS salvedad qrue la de reservarse el derecho de deterrn:inar en Sl!l dfa quetropas hablan de ocupar la ciudad de Manila, Aguinaldo y los suyos embarcaron en el buque de guerra yanqui .11,11ac-CullochJ que los trajo a estas playas. Tal es, en sfntesis, la historia de 10 fraguade> en las col0~ias vecinas a ciencia y paciencia de las neutrales autoridades inglesas, en. contra de los derechos de Espana, y en contra, jpsto es decirIo, aunque los insurrectos nlO quieran convencerse de ello, de la .futura felicidad de Filipinas. Contubernio innoble entre un cahecilla que no hace mucho ven- · diera sus purisimos ideales de independencia por treinta dineros y una naci6n qUe! se dice grande, y que, a pesar de su grandeza, des8

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conHa de sus propias fuerzas para luchar con la pobre Espana, de-sangrada y empobrecida por tres anos de porfiadas luchas civiles; alianza inexplicable en que, rebajandose los Estados Unidos a tratar de potencia a potencia con quien no tenIa reconocido por nadie semejal1l.te caract€r, han humillado su dignidad nacional y han man--chad'O, con mancha eterna, las primer as paginas de su historia militar, perdiendo el derecho al respeto de las conciencias honradas que tienen que sublevarse ante semejantes procedimientos; alianza, por.· ultimo, que ha sentado peligroso precedente en el Derecho Intern a- . cional, precedente que tal vez se vuelva algun dfa contra los mismos_ que 10 establecen y contra los que, faltando a lis mas elementales leyes de 1a neutralidad que han proclamado, y llevados de sus tradicion ales egolsmos, protegen y amparan sus -planes.

Ya _que de este triste asunto hablo, no quiero dejar de refl ejar aqUIla impresi6n que me ha producido cierto papel que, con el pomposo concepto de altisollante proclama, dirige a los filiptnos la _ Junta filibustera de Hong-Kong, centro de negras conspir.lciones.contra Espana. Empieza ese documento par afirmar rotundamente que E:;pana: no ha cumplido las siguientes reformas prometidas en Bia:nabat6: "loa Expulsi6n 0, por 10 menos, exdaustraci6n de las Ordenes re-ligiosas. 2. a Representaci6n de Filipinas en las Cortes esp.lfiola~_ 3.a Aplicaci6n de la Justicia verdadera en Filipinas, igual para el indio que para el peninsular. Unidad de leyes entre Espana y Filipinas. Participaci6n de los indios en las Jefaturas de la Administra-ci6n ciVi'l. 4. a Arreglo de la propiedad de los curatos y de las contribuc10nes a favor de los indios. 5. a :proclamaci6n de los derechos de Ins indios, aSI como los de libertad de imprenta y asociaci6n; ya 6. Indemnizaci6n de 600.000 pesos- en pago de las armas, muni- _ciones, maestranzas y fuertes que se entregaban." Suponiendo por un moment€l, que es mucho suponer, que sea-_ cierta la pretendida promesa de las anteriores reformas, no es menos cierto que no se puede, sin cometer notoria injusticia, acusar a -_ Espana de incumplimientos u olvidos de sus palabras. Despojandome por un -momento de la verdad y admitiendo como dogmas de fe las gratuitas afirmaciones de los rebeldes, he de hacer notar que la paz de Biacnabat6 no se consider6 por nadie consu- mada hasta el dfa 23 de eneroen que se cant6 el Te Deum,o que posteriormente a esa paz, se produjeron levantamientos tan formidahies como los de Zambales y Cebu, y que las reformas, que por quie- ·

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nes les conviene se preten de fuero n prome tidas en aquella paz, eran de suma transcendencia y reque rian detenido estudio del Gobie rno, . maxim e cuand o alguna de ell as, par su especial natura1eza, tenIa que ser negociada con 1a Santa Sede. E1 confli cto hispanoamericano, que ya era €uesti6n pa1pitante que absorbfa todas las energfas nacion ales en los meses de febrer o y marzo , impos ibilita ba mater ialme nte al Gobie rno y a la Naci6 n entera para conce der tales reformas. Cuan do amenaza una guerr a formidable, todas las actividades de una na.ci6n se encamin.an a prepa rativo s guerreros, y las impaciencias de los filipinos no tendrf an raz6n 16gica de ser si no estuvi eran tun,<ladas, como 10 estan realmente, en las hipocreslas de siempre y en 'bastardas y no reprimidas ambiciones personales de esos que ahora se las dan de redentores del pueblo filipino y que han imped ido que 'este obtenga, como premi o a su lealtad, reform as mas amp lias que las que se preten de fuero n consignadas en el proto colo de la paz; no pueae racionalmente, a la faz de -las personas sensatas y honra ,Jas, acusarse a Espana de olvida diza y de falsa; quedense tales calificativos para los qu@, no hace much o, fuero n a Maiacanang a ofrec~ hip6c ritam ente hacienda y vida, que nadie les pedfa, en favor de Espana; para los que, sin coraz 6n bastante para presen tarse como enemigos declaraqos, obtuv ieron, valiendose de nuest ra "ingen ita generosidad, armas que prom etiero n esgrimi:r contr a los americanos; para los que, obten ida una Asamblea y fusiles para apoyar las innovaciones propuestas por esa Asamblea, pisote aron la palab ra de hono r ernpeiiada y volvie ron las armas contr a los mis:mos que se las dieron ; para los que desfalcaron los fondos que se 'les confiara; en una palabra, para easi todos los que milita n en la .r~beldfa, qU no es del nefan do crime n de traici 6n dell unico que 7 arse. -tienen que Slncer . V,ean to;Ios los filipinos honr~dos y sensatos que, ·a un suporriendo ·CIerto 10 mas favorable para los lnsurrectos, la prome s·a de reform as, -no l?ueden estos hacer hincapie en esa promesa para explic ar su in_exphca~le .co~d~cta. c;onfiemos en. que los homb ns y la Histo ria les haran JustlcIa; aquellos con la fuerza de las armas, esta con la --severidad de sus fallos.

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CAPITU LO XVII

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de junio.

Los suceSQS de este mes de junie, no. obstante su excepci~nal iml'ortancia y su reconQcida gravedad, tienen en sl taft menotenla que <decido no consignarios diariamente,lrecogiendo y reteniendo. mis impresio.nes para reflejarlas de vez en cuando. y come en s,lntesis -en estas Memorias. Efectivamente, des de el dfa 6, nefaste por mas . .de una raz6n, en que quedarnos ,reducidos a la Hnea de fo.rtines mandada construir por el General Prime de Rivera, y que tan utiles servicies esd prestando, puede decirse . que el fuego. de fusileda -y de cafi6n es oonstante en esas avanzad'as. Al principio. hubo per pane de tedo el munde vehemente temo.res de que l-a Hn,ea fuera rota per lQS numeresos y bien armadl()s asa'ltantes, que se desparramarlan por les' arrabales, obligando.nes a refugiarnes en la ciudad, ·cuyes murQS son inexpugnables pa'r a semejantes enemigos. De aqul ,que velvieran en tro.pel a Manila cuantos de ella sali:eren antes y :mucho.s que nqnca pensaron. vivi:r dentre; de aqu£ que un sello ·de -imponente tristeza fuera e1 caracterlstico :de esta poblaci6n, que por 'tantas y tan hondas erno.cienes viene pasando.. Hey 1es animo.s se nan serenade y la Hnea; que antes se co.1'lsideraba per todos fragil o.bstclcw[e, inspira ahora unaFlimes eenfianza~ Es verdad que, aprovechandose de la indecisi6n y de la falta de arroje que han carac'terizado. al enemigo. en sus primeros ataques, n1:lestros ingenierQs han referzade fas trincheras que enlazan los fo.rtiFles y que to.dos lo.S d£as gran tUlmero de trabajadores, facilitados por lo.S Tribunales de lo.S .distrito.s, se dedican a estes importaFldsbIDo.S trahajos. Tambien se hacen ebr,as de defensa en las baterfas que dan al mar y en las mu-

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rallas, que se atrinchen.n con sacos de arena y en las que se empl~­ zan los canones de bronce que se guar1daban en la Maestranza, de dlversos calibres, petiO todos ellos de antigllos sistemas. Tambien me aseguran que hay listas veinticuatro piezas, de las que cuatro soOn de tiro rapido. Constituyen todas ellas una especie de reserva, con objeto de enviarlas a los puntos que se consideren mas amenazados. La tranquilidad renace en Manila; a todo se acostumbra la gente, y ya el constante tiroteo apenas si nos causa .e moci6n alguna; la Escolta se halla siempre de bote en bote y en ella se comentan y juz-· gan, exagerandolos siempre y falseandolos no poe as veces, los sucesos del dia; puede decirse que de la Tabaqueria salen todos losnoticiones sensacionales, sean bu.enos 0 malos, de tal modo, que ya nadie concede importancia a 10 qae se ha dado en Hamar "noticias de la Escolta". Los arrabales de Maiate y Ermita estan poco menos que sin un alma y con raz6n suficiente, pues tOO as las casas se hall an he.::has una .p ura criba con tantos balazos. Igual sucede, por identico motivo, en. los otros distritos extremos como Paco) Tondo y Sampaloc, pero· 105 restantes no han perdido su acostumbrada animaci6n. EI paseo de la Luneta esta desierto desde el inolvidable dfa LO de mayc; en cambio en el Malec6n se da cita por las tardes lao sociedad madrileiia, y levanta el animo ver c6mo hombres y mujeres se dedic<ln a chic~leos y amorios, sin importarse1es un ardite las constantes descargas y caiionazos, que ya constltuyen el pan nuestro de cada d£a.

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If.

- EI d£a 9 atlcarom los insurrectos con brio el dep6sito de agua. de Santolan. Duro fue el combate, pero al fin y al cabo se les disperso, causandoles nuesnra artilleria, que solo disparaba cuando vda grandes mas as, enormes perdidas. AI dfa siguiente se publico en la Gaceta un bando conminandQ con severas penas a los espaiiO'les que aun no babian cumplido con el de 23 deabril. En virtud de esa disposici6n se han alistado unos, 15 0 rezagados. Yaque menciono este bando dire que ha sentado adm~rable~ente en .la opinion semejante acro de energfa, pues nO' era Justo ill convemente que mientras la mayor parte desempeiian penosos servicios huhiera quien., con unos U otros pretextos, eludiera el cump~~miento de los sagrados deberes que la Patria impone a todos sus hlJOS en estas excepcionales circunstancias. Inspira vivisimas inquietudes el Cuerpo de Carabineros. Profundamente minado por el separatismo, ya en tiempo del General Polavieja promovio en pleno dia y en plena capital un levantamiento

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dli:scaibdladi@. Hoy se asegura que esta comprometido para sUlblevarsli:; '3, pesar de estas noticias, nmguna determinaci6n se totila ni se desarma esa fuerza, que para nada import ante nos sir ve y que' puede efl cambio proporcionarnos un serio disgusto. D~os quiera que esta mdiiflrencia por todo que se nota en las alturas, y que no tiene racional explicaci6n, no produzca desagradables consecuencias. Elil los Cuerpos indlgenas menu dean las deserciones, siendo el que menor numel"o ,de hombres da en esta negra historia de desleal't ad la Guardia Civil Veterana, que bien puede poners,e, con levlsimas excepciones, como modelo de acrisolada fidelidad y de acendrado patriotismo.

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* ~. * Del General Monet, que es, hoy por hoy, la unica esperanza de Manila, COli'relil una porci6n de contradictorios rurno-res, ninguno de enos hasta ahora oficialmentfl comprobadQ. ,Parece, sin embargQ, e1 mas verosfmil el de que no pudiendo vadear el rio, por su muchQ cauce y por estar sus orillas atrincheradas, se ha retiradQ a Macahebe, donde se halla poco menos que sitiadQ por los rebeldes. En ese pueblo se tmcuentra, como ya dije, la familia del Gobernador General. Por ciertQ que eon respector a este asunto ha cirpulado por la ciudad un ifumor que ha causado mala impresi6n, que yQ no creo, pero que consignQ aquf, por'q ue quiero que estas MemQrias sean fie! reflejo de las impresiones dominantes. Dfcese que el General hallase negociando con el Consul. ing1es para que este, valiendosfl de su especial caracter de rflpresentante extranjero y de su influencia, prorure traer"a Manila a la familia Augusd. Como el vecindario de Manila nQ olvida las manifiestas simpadas del C6nsul brit-anico por los yanquis, simpadas que se han tFaducido en apoyo material, puede calcularse el pesimo efecto que ha causado la noticia propalada de que la primera autoridad piensa utilizar sus buenlOs oocios. Repito qu'e yo no doy vallOr alguno a estQs dichos, pero de todas maneras al"lora se tocan las consecuencias de la desacertada medida tomada por , el General al enviar su familia a Macabebe, y menos mal si a rumores mas 0 menlOs insistentes Sfl redl:lcen lQS disgustosque semejante ,aeterm11'laci6n puede proporcionarnos. Corli'ie el grato rumor de que, POl' fin, saliendo el General de sus 'inactividades, ka ordenado que se f.orme una columna que, mandada POl' el GeNeral D. Jose Palacios, tratara de abrirse paso y darse La mano con la del General Monet. Esta orden, que se da por clerta, infund@ mochas esperanzas y reanima grandemente el â‚Źspfritu publico. Comtriblilye asi,ml smo a que la gente este mas rehecha) las noticias

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A.U(j~, con el caracter de autenticas, corren por ahf. a~erca del Capitan Jose de Santa Marfa de Pandit. Parece que este fihpmo no se ha subleva do como se dijo en un principio, sino que, conservandose leal y considerandose impotente para detener el movimiento sepuati$ta de la provincia de Bulaean, se ha atrincherado fuertemente en su pueblo, pactando con los instlrrectos, que no los atacara si por eUos no es atacado. En esta actitud, el Capitan Jose y algunos cspafioles que con el se han reftlgiado en Santa Maria de Pandit, espe:-:tn mejores tiempos para salir de su forzada pasividad. Tambien ha eorf'iao esta manana la especie de que el bizarro Co,ronel D. Fernando Ca,rb6, uno de los mejores Jefes de este Ejhcito, habia sido batido y rechazado de Tinajeros POl' numeros-O gl~u­ po de insurrectos. La noticia no se c6mo se ha extendido pOl' ahL Dado 10 extenso de 1a !fnea que constituye e! sector de ]a izquierda , y la poea fuerza que ha.y para guarnecerla, el General en Jefe dispuso el dla n que la columna Carb6, compuesta de 430 hombres del Bata1l6n de GUlas rurales y de una compaiHa del 10 de Cazldores, que tenia sus avanzadas en el plJentâ‚Ź de Tinajeros, retrocediera para .acercarse mas a dicho sector. Ai retirarse el Coronel ocu parOl,} los insurrectas el paente de Tinajeros, camhiandose algunos tiros sin CQnsecuencias por nuestra parte. Apenas abandon6 la columna sus ava.FI.zadas de Tinajeros para tomar1~s en Calooean, numerosos insurcectos, atacando rabiosamente trataron de forzar el paso de la calzada que conduce a Manila; pero, a pesar de su empuje, fueron rechazados por los valientles GUlfl,s y Cazadores, convenJientemente apostados para la defensa de ese paso y auxiliados IWr una secci6.F1. de Artilleda de montana que envi6 en s~ apoyo el General Palacios. Esto es, en resumidas cuentas, 10 que hay de cierto en 10 q~le esta manana se juzg6 derrota del Coronel Carb6.

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H oy, 1 2 de junia, a la una y' media de la tarde, las salvas de artilleda hechas desde la Fuerza de Santiago anuncian a los vecinos de Ma!lila la llegada .de algun barco de guerra e~tranjero. Corro a • las murallas, repletas de gente, y me entero que el saludo ha ~ido hecho a un soberbia acorazado aleman, que distingo peFfectamente CON. los, a~t~jos, y que trae a su bordo, segun me aseguran y se ve por la InSIgma que enarbola, al Almirante de la Escuadra alemana del mar de la China. La notic1ia circula rapidamente por toda la ciudad, produciendo general a1bop:ozo y levantamdo el esplritu publico, sujeto a tan encontrados valvenes de esperanzas y desenganos desde el mes de abril.

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Much~s y halagiienos los comentarios que por todo e1 mundo

se haeen, y dgunos de ellos yo, que peeo de pesimista en cuanto se rdiere a intiefv·enciones europeas en 1a actual guerra, 1.os enCl!H'iltro O1luy atinados. Choca realmehte que Alemania ,envle tantO$ b<lircos de gue:rra (bay anunciados mas) para proteger los rdatJivamcnte escasas i.l1lteeeses que tiene creados en estas Islas, maxime cuando otras gramoles potencias, que tienen mas intereses en Manila, cuentan con escasa tepresentaci6n naval en estas aguas. Choca tambien que, a pretexto de esos inte'reses, venga personarlmente el Jefe de la Escuadra. De Cl!qul que, telacionando estos hechos tangibles con la actitud poco deinida de Aletnania en el con£licto hispanoamericano, tengamos [os espafioles motivos suficientes para dejarnos llevar de nuestro caractee y creer unanimemente que el Alrnirante aleman trae una misi6n ccncreta de su Gobierno, y que esta misi6n nQS es favorable, ya que toaas las simpadas de la poderosa Alemania estan con nQsotros. Apemas fonde6 el "acorazado Kaiserin-Augusta, el ComodorQ Dewey ha visitado al Aimirahte von Diederichs, que aSI se llama d aleman. Asegurase que la visita ha sioo corta y de pura cortesla. Tambien se afirma por aM que el Almirantt;~ ha pedido al Gobcrnaclot:' General Ie senale dia y hora para saludatle' y conferenciar C(\)<J!l el, y que la entFevista se verificara manana por la manana. Verem>0S si despues de ce1ebrada se ttas1uce algo de '10 que vienen a hacer por' acta! liOs alemanes. Ha conilrariado Un peco el contento del d'la un suceSQ d~sagra­ ,dabie, 0currido estcl. 'noche en el sectQr de 1a izquierda. HabLl.se con'fiado la trinchera de 1a Estaci6n de Meipajos a una s,ecci6n cOmpuesta de uiI Oficial, un cabo europeo y 27 vQluntarios p~rt€necientes a la segunda corrtpafifa de 1a Pampanga. Pues bien, a las nueve apro;ximadamente de esta floc-he, l'Os vQlantados, ganados por los reheldes, se sublevaron, hiriendo gravemente a1 Oficia1 y a1 cabo. Este hecho ha t(mido gran tesonanda: en 1a poblaci6n y todo e1 mund@ pide el desarme de 10.s voluntarios pampangQS que restan. ~Se had? No 10 s~, potq.ue ya vamos teniendo det@tho a dudar de todo. - -"- - 13 de lunio-. Esta manana se ha verificado la anunoiada conferencia entre el Alfiliralltie von Diederichs y el Gobernador General. Los que he'mos ida a curiosgar 10 que ma Oeurrido en el AyuntarriienfcO, nos hemos <1Iuedado in ,QJi/;iJis. 56io s~ que 1a visita ha sido afectuosa, durando 1!l,ftiQ'S t~ei,nta minut{)s, Y Clue hart esulio presentes el Almlirante alem.an C0m sus ayuda.tues r el C6nsul y Vicec6nsul de su naci6n, y llOs

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Generales August! y Montojo, halbiendO' servido este ultimo de interprete. Por 10' demas, nada se ha traslucido de 10 tratadi() en la conferencia. Esta tarde el Capitan General pagara. al Almira,nte la visita en el Consulado aleman, pues p3.'rece ser que, por ahora, el simpatico marino extranjero fija so residencia en tierra. Ya yeremOS ,q ue resulta de todo este tinglado.

*** Esta tarde se ha verificado en cas a de D. Pedro A. Paterno una r.euni6n magna de los ÂŁlipinos que se dicen panidarios de la causa espanola, con objeto de redactar un dO'cumento que, con el concepto' de plan de ref,ormas, sera sometido a la aprobaci6n de Su Exceaencia, como unico medio de que los insurrectos depongan las armas y de que el !pa.lS se F'aciJfique. El doeumen1to aun no ha salido a ~uz; pero creo firmemente que todo cuanto se haga en este sentido :resultara por ahora inutil por '10 tatr dio; con otra c1ase de medios ha de despejarse la nebulosa en que estamos. Hay malas noticias del Centr.o de L1dzon, pues parece ser que los linsurrectos han tornado e incendiado d leal paeblo de Macabebe, retirandose el General Monet a San FernandO'. ~Que habra sido de lO'S voluntarios de Blanco, de quienes a nadie se Ie iOcurre sO'spechar? ~Q1:le habra si~o de la Ji){:~bre .familia del Capitan General, que resiaia en el pueblo saqueado,? Estel visto que las noticias buenas, siempre confusas, son contrarrestadas por O'tras desagradatbles que tienen .cabal confirmaci6n. ComO' si est<> nO' bastal'a, una nueva sublevaci6n ha habido en el sectDor de 1a izquierda. Los carabineros que for-m.aban el puestO' de Vitels se han pasado a1 enemigO', dandO' muerte a un cabo e hiriendo gravemente a uo Oficial y dos sargentO's. PerseguidO's por fuerzas !eales, estas les han hecho dos muertos, recu perandO' las trincheras de Vitels. El General en Jefe, por fin, ha dado la orden para que se desarmen los voluntarios de la segunda compania de la Pampanga, que h an sidO' conducidos a un cuartel de la ciudad.

Esta tarde han quedado instalados en la c1udad murada los hospitales que salieron de ella en los ultimos di2:s de abril y algunos otros de sangre. Considero funestlsima esta medida, puestO' que con . .ella puede decirse que se ha lfirmado moralmente la capituhci6n de Manila. Me infO'rman que no la ha tornado directamente el General

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.Augustf, que no era partidario de ella, pero que no se ha atrevido Q. revocarla. Comprendo sus vacilaciones; los enfermos no estaban, no poclian estar seguros en los arrabales; verdad que tan poco 10 .estan en Intramuros, sopena de que pasemos por la verguenza de rendir la plaza a los primeros disparos del enemigo. Como 5'i: esto no fuera bastante, a ultima hora corre insistentemente el rumor de que el destacamento de Ca1umpit se ha rendido .a los rebeldes, y que ya no sale la columna Palacios, no se si porque nunca hubo pensamiento de que saliera 0 porque las graves noticias r ecibidas de Buladn han cambiado aquella primera resoluci6n. Tambien me dicen que, resultando todavla demasiado extensa la linea formada por el sector de la izquierda, las fuerzas del Coronel CarbO. :se han rep leg ado, abandonando el pueblo de Caloodn y estableciendo sus avanzadas en el puente de ¡Meipajos, 0 sea en el blocao nu'mero 1. Apenas sali6 la columna de Caloodn, arbo16se en la CasaTribunalla rebelde lensena tricolor, hostilizando los insurrectos ligell'amente la retirada. POl' ultimo, y para acabar de extinguir los optimismos con que :empez6 el dla, se sabe que el acorazado aleman ha traldo un telegrama en el cual el Gobierno manifiesta que se preocupa mucho de illuestra situaci6n y que no desiste de enviar refuerzos, pero que la escasez de elementos navales dificultan esos deseos. Esta notida pro.duce penosa impresi6n; muchos estiman que los refuerzos llegaran -tarde; los menos, que nos dejan abandonados a nuestra mlsera suerte; esta ultima -parte es un excero de irracional pesimismo; el Gobierno no puede olvidarse de norotros; si tal hiciere, el pueblo espanol, que no pU,ede ser ni culpable ni c6mplice de las desidias mimisteriales, pedirfa energica cuenta de tan criminal abandono. Y en ultimo caso, y hechos ya como estamos a todos los dolores, a!lnque nos ¡ dejen solos, no debemos dar entrada en nuestros corazones a femeniles desmayos; defendamos POl' honra propia este ultimo baluarte, aunque de la ciudad s6lo queden escombros y de sus habitantes nada mas que recuerdos, y demostremos al mundo entero que no se han extinguido ni degenerado en nosotros las proverbiales .energlas de la raza.

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CAPITULO XVIII

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de junio.

Un punado de sucesos de relativa importancia es 1'0 unico que-' hay en estos dlas. Cercados y bloqueados como estamos, n'O puede haber constantemente n'Oticia:s sensacionales; fuego y mas fuegQ de " fusiler.ta y caii6n en las avanzadas, alguna 'que otra n'Oticia que de~ Espana traen l'OS barcos de guerra extranjeros y alguna que otra confidenda del interior; eso es t'Odo. El d£a 14 los "americanos salieron de su aparente pasividad, y po_ . niendo en movimiento sus harcos, acercaron el Petrel, Mac-Cullonch y el CfiJlllao a unos setecientos metros de nuestras bater.tas, sin duda .para provocarnos a un bombardeo. Los que se dicen bien enterados ahrman que esta maniobra la hicieron para desafiar a los alemanes y demostra.rles 10 poco que les importa la protecci6n queparecen dispensarnos. Tambi-elil aseguran que los alemanes, al observar estos movimientos, hicieron zafarrancho de comhate en sus barcos. Ignor'O si sera verdad. El mism'O dfa 14 se deseubri6 una e'Onspiraci6n de voluntariQS.~ pampangos, que trataban de apoderarse de las armas ad cuartcl donde se hallaban, asesinando antes a todos los espanoles. Fueron pre" 90S Y encerrados en la cared de Bilibid. Tambien han sido pres'Os al- · gunos katipuneros que .ideaban promover un levantamiento en e1 element'O ind£gena de la poblaci6n. Entre l'OS aprehendidos figura el titulado Capitan del Pa,e rto Q·e la Republica filipina. Por cierto que ' esta incipiente Republica fue 'p roclamadasolemnemente hace dos ", d£as en Cav"ite. A la cerem'Onia, que fue seguida de un banquete, asis-·· tieron el Comodoro y algunos Oficiales de la Marina yanqui, que,,,. I

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'por 10 visto, no consideraro1'l rebajada su digflidad de repr~sentan­ tes de una glian naci6a al me~clarse oficialmente con una patulea de criminales y traidores. Un nuevo dato para la hisooria de esta guerra., ·t an dolorosa para nosotros y tan flegra para 'los Estados Unidos.

*** Ya se tienen no·ticias a~tenticas, y por cierto bien malas, del Ge_ueral Monet. El General no ha podiclo cumplir las 6rdenes de incorporaci6n que se le dieroPl en los primeros dlas de este mes y se en-cyentra en San Fernando de la Pampanga con unos 700 hombres, - a~guID:os heridos y bastantes familias europeas. Siu columna ha r~alizado varia's brillantes operaciones sobre los pyeblos de Bara'ioain y _Angeles; este ultimo fue tornado al as alto por el bravo TePli'!nte Coronel D. F~lipe Dyjiois, que asimismo tom6 a ltOs en~migos las trincheras de Malolos, arrasando el pUBblo. Monet trata de dejar toda ]a impedimenta en Maeabebe. Otra columna perdida. N ada se sabe del Coronel Roddgyez Navas, Jefe m'ilitar de las 'p rovincias de La Laguna, Batangas y Tayabas. Hay, sin embargo, confidencias de que aua. reSl>sten el pueblo de Lipa y las cab~ceras de 'Tayabas y La Laguna, asl como que el movimiento no se ha exten-dido a las provincias de Ambos Camarines, Albay, Sorsog6n y los Ilocos. Tambien hemos sabido hoy que el destacamento de Naic, formidablemente atacado, no se harendido hasta el ala 14, despues ·-de mas de veinte dfas de asedio y cuando sus vaUentes defensores no -t enfan ni un pyuado de arroz ni un cartucho. jCUanro herofsmo y cuantos sacrificios rnutiles registra esta desdichada epoca! Los vlveres escasean que es un disgusto, y encarecen de Ufl modo ·.,e xorbitante, en parte por inactividades de la Comisi6n Civil de De~ fensa, 'tque no na aImacenado mas que unes Olilantos miles de cavanes de arroz, ni tiene energlas para imponer una tarifa· racional, y en parte por excesos de muchos comerciantes, que, iBdiglilOS del nombre de espafioles, convierten la situaci6n mas apurada en un negocio 'nrlercantil, dando salida, a fabulosos precios, a toda h laterla vieja que guardabalil en sus almacenes y que hahlan recibidiO mu~ho antes 'de estab16cer e) bloqueo; fariseos que comercian con la guerra, con la 'sangre y las privaciones de sus compatriotas, algun dra encontra4rail el merecido pago. La carne de vaca escasea tanto, que muy pronto empezaremos :a comer la de carabao, que tampooo esta muy abundante.

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Ha emtrado en bahla el acorazad0 frances Baya1rd. Con este SDn ya: dos los barcos de guerra que deae Francia en estas aguas. Se i:anl!lncia la llegada de otros dos: el Pascal y el D escarfres, asi comO' 1a de varios alemanes, entre enos el acorazado Kaiser, buque insignia de la Escuadra del Pacifico. Por confidencias se sabe que los ememigos estan un poco escamados con tantos buques extranjeros, y .que e1 Comodoro ha telegrafiado en este sentido al Presidente :MacKinley. Los trabajos 'de atrincheramiento siguen en gran escala. Las trin·cheras de la Haea son reforzadas. El sector de la izquierda, que tenia puntos muy debiles, sobre todo por Balic-Balic, esta quedando en excelentes condiciones 'defensivas; esto se debe en no poca parte ·a los conocimientos y actividad del Jefe de Estado Mayor de dicha zona, el Capitan del Cuerpo D. Jose Fernandez Heredia. Se com·pletan asimismo· las defensas de las murallas, en cuyos parapetos se .estan colocando gruesos troncos y sacos de arena. Delante de 1a ba.terta del Pastel se ha abierto un f050, defendido por una eS'carpadita cubierta de ramas y puas. Tambien se ha construtdo con railes cu'biertos de tierra una ingen.iosa trinchera que, corriendose a volun'tad, cerrara en un momento dadoel paso al Malec6n, incomunican. do ese frente ' de la plaza con los arrabales. Lastima que quede fuera y sin apenas defensa la bateda de Ja Luneta, que puede Hci1.mente .ser tomada de reyeS si los insurrectos rompen la Hnea y avanzan por Malate. Tiempo ha habido de retirar esa baterIa 'a, sitio mas seguro. Por la parte que da al rio tambien se han hecho defensas, tap ian.dose la puerta ,de almacenes, arreglandose elcamino cubierto y empiazandose en el baluarte de San Gahriel canones de grueso calibre, aunque antiguos, que enfilando los puentes de Espana y Colgante. ,p odd:n destruirlos en caso necesario. Con satisfacci6n he visto que se estan ejecutando obras muy ne,cesarias, como son la limpieza de los parapetos y los foses y el chapeo de todo el frente de la plaza. Los paseos de Magallanes, A~ua­ das y Concepci6n, asi como el Jardin Botanico, van quedando libres .de estorbos, arrandndose. algunos arboles de cuajo y cortandose las ramas de otros. Tambien se estan demoliendo las verjas del BotaniC0, cuyos z6calos de piedra pod dan servir de excelentes trincheras avanzadas a los enemigos. . Se asegura por algunos que las tropas tienen orden, en el caso de 'q ue se yean precisadas a retirarse, de incendiar los arrabales, favo<reciendo de este modO' la retirada e impidiende el rapido avance de los msurrectos. No tengo noticias, y esto me descorazon'a, de qae se pieme cons-truir una segunda Hnea militar por si hubiera que abandonar la pri-

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mera, ni de que se construyan trincneras capaces de resistir el fuegoO> de anilleda. Se OOftoee tjlJue el Genetral se figara que s610 mos yan a. atacar con fusiles, y que considera que los barcoOs yanquis no dcsempeiian em la baJb~a oOtll>O papel que d de pasivos especta:dlOres de loOs, s"Ucesos que se desatrollan en tierra.

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de junilO, han entrado en la bahfa el crucero aleman_ PiJ'incess Wilhelm y el transporte DOIYmstfiUit c<:mduciendo est€ ultimo 1.300 hombres, que, segun dicen, vi en en a' relevar las dotaciones de los buq1.i1es. Muchos estiman que esto es un pretexto para.. 1i~ner mas fuerzas de desembatco. R@aimente, empieza ya a ser cho-cante la actitud 'de los alemanes. Han llegC!!dlo a Manila llOs heridos y enfermos que hab£a en los. hospitales de Cavite y Guadahlpe. Los insurrectos los han entregado oObedeciendo Sifl dada tSrden·es de los yanq1.i1is, ,que en esta ocasi6n hans. querido rnostrarse relativamente humanos y nobles. Se tienen m,ls noticias del General MCltlret; sin embargo, sOn incompletas y no dan esperanza alguna de que esC!! fuerza se salve. El 16 pu.dlO llegat a Macabebe, no sin librar antes varios y refiidos ,€ombates desde su salida de San Fernando. Tambien se sabe que el ComaadantJ€l Ceballos, que forma partg' de 1a brigada Monet, se na refugiado en Dagupan con poco ma,s de 200 hombres, y que por ahora tiene vivel~es y munidones. Hoy ha corrido un rumor optimista propalado por algunos tranj.eros, pero que hay -que aceger con muchas resetvas. Dicen. esOs. extranjeros que la expedici6n Illorteamericaaa aun no ha podido s:tlir de San Francisoo de CaH£ornia, y que se' ttopkz:an C01il tantas dificultades, que es HcilqU'e se desista. de enviarla. Hay quien asegu-·· ra. que 10 mismo dice el Ministto de la GUletra ea reciente te!egramao ·Gran noticia es, pero · no conviene hacer Cl:lentos de lecheraJi;}O sea G}'lie Sf flos tompa el dntaro. Hoy,

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de junio.

Cojo 1a pluma para consignar una notlcla que Bena de nattltal' alboroz0 a todos los espai,olles. Dign!0 es de marcarse con piedra_ blanca este dfa en la triste historia que tuvo su principio en el desa:stre ,ae Cavite. Desde las primeras horas de la ma:fiana se supo en Manila, sin duda por el d,diberado proposito de las autoridades de'

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.no gual"dar reserva, la llegada de un telegrama del Gobierno, fecha-

,.do en. Madrid el dia 10 del corriente, y en el cual se anuncia hab1l . marchado a Cadiz el Ministro de Marina, con objeto de activar la :salida df;! los refuerzos de mar y tierra q~e se mandan a estas islas. A juzgar por los dtas que han pas ado, ya deoen de hallarse en ·camino esos hermanos nuestros, que cruzan los mares para v~niren nuestro auxi1io; se asegura, y eso S1 que no creo que venga en el <despacho, que· 10s refuerzos consisten en los acorazados Pelayo, Carlos V. y Victoria,' cruceros protegidos Alfonso XII y Hl~'" bana,' tres destroyers; los cruceros auxiliares recientemente adquiri<tios ~n Alemania Patria y Rapido, y cinco trasathl.nticos artillados, que conducen a su bordo I 1.000 hombres. De ser exacta, es una bonita expedici6n, que ajustara a los soberbios americanos las cuentas· que conel1os tenemos pendientes. Puede caleular-se el efecto que esta noticia semioficial produce en la poblaci6n; todos los rostros esta.n alegres, todos 105 corazones serenos. Nadie habla ya de rendiciones ni de derrotas; todos hab1an ,de pdear y de vencer. Esos auxil~os borran de un golpe todos los pesimismos, disipa,n todos los temores, acallan todas las vacilaeiones. Raz6n tentan los que nunea abrigaron perjudi€iales des con £ianza.s. La Patria siempre querida, la Patria 1ejana, envuelta en las brumas ,del Oceano, y por la que suspiramos todos los espanoles que vivimos en. este ingrato ,suelo de , traiciones y deslealtades, no nos olvida, y en esos refuerzos nos manda ardiente prueba de su carino, gallarda muestra de sus f.ortalezas aun no abatidas al peso de tantas desgracias. Si alguno di6 entrada en su mente al pensamiento de la final .derrota, si alguno di6 abrigo en su debil coraz6n a1 oculto deseo de <capitular, Hoy rechaza desdenosamente lese pensamiento ,y ese deseo. Ya no podem<>s rendirnos. ~Que hay mujeres, ninos, enfermos? Tris~e es esa consideraci6n; pero la Pat ria impone duros deberes y exige ,cruentos sacrificios. Estamos obligados moral y materialmente a defender ha'sta la muerte esta plaza, porque nuestra defensa tiene un .objetivo, como nuestros sacrificios tendran un premio, y porque es ·preciso que esa expedici6n que ClIvanza, sedienta de desquite, vea, -como Lcibaro santo que Ie anime en el sangriento combate, ondear sobre la Fuerza de Santiago la bandera espanola. Ya no podemos 1"endirnos.



CAPITULO XIX 27 de junio.

Hoy he tenido ocasi6n de hablar con un prisionero fugiti vo de~ Cavite, que me ha dado algunos pormenores de ·10 que a111 sucedi6. Sus informes coinciden casi en absoluto con 10 que yo sabfa '! queda apuntado en anteriores eapftalos. Por este prisionero he confirmado 1a creencia que ya tenia de que las tropas indigenas y las Milicias·. que formaban parte de 1a columna del General Pena habfan coadyuvado activamente al movimiento separatista. La mayor plrte de ' estas fuerzas se sublevaron antes de combatir con los insurrectos; muchas hiciero.n traici6n durante 1a lucha, y el resto, ya en pequeiiisima proporci6n, la hizo despues de rendidas las trap as espanolas. Tambien se han pasado al enemigo. todos los Oficiales y clas.::s del pais, condndose entre los primeros el Capitan Sityar, que tan· bien se porto en Pasig durante la primer a insurrecci6n y que solo · beneficios y consideracio.nes ha recibido. de Espana. Asimismo. se rehelaro.n todas las milicias, C0n sus jefes a 1a cabeza, incluso Rec e y Trias, los ·que tantas promesas hicieron, ann despues de la lleg:1da de-Emilio Aguinaldo. No ha podido decirrne la persona que me ha dado estos detalles.: el numero de bajas que hemos tenido en 1a provincia. 5610 me ha . dado como ciertas la muerte de los Cepitanes Sres. Barba y G6mez, del Regimient& flum. 74 y de Infanterfa de Marina, respectiv.lmente, as! como 1a de lo.S Tenientes Martinez y Munoz, del 7 de Cazadores y del 74. Tambien me ha asegurado estin heridos los Capitanes Pu-jales dd ltfo, Casanova y Arroyo y loS Tenientes Cand6n, 1\1artfnez y Ristori. En cuanto a prisioneros, 'calcula que habra unos doscien- l ZT


-tos Oficiaies entre Santa Cruz de 11alab6n y Cavite, en donde tam'bien 10 esta. el Gen.eral Pcna. Cree que hay mas en otros punto s pro.eedentes de Bataan, Batangas y Mariveles, y tambi en algunos funcio narios civiles. Hoy se ha dicho que Su Excelencia habia recibido un cablegra:ma de la Peninsula en el que se Ie anunc iaque los refuerzos de mar y tierra han salido de Cadiz con direcci6n a estas islas el dfa. 16 del corriente. Con esta noticia la gente se anima mas y mas y la reac,ci6n es mucb o mayo r que los anterii()res decaimientos. Por todas partes se hacen dlcul os de 10 que aproximadamente tardar an en lle:gar esos refuerz.os, y en todos, hasta en los mas pesimistas, q'le por ahora se baten en retirada, es unanirne la idea de dcfenderse hasta morir , para que cuand o llegue la Escuadra este en poder nuestro la capital del Archipielago. En cuant o a los refuerzos que esperan los yanquis, corre insis""tentemente el rumo r de que el barco Cyte of Pekin } que condu da la prime ra expedici6n de 2.500 h<!)m.bres, ha tenido que arriba r al ~puerto de Yoko hama con averias de impor tancia , que Ie irnpideJ'l la continuaci6n del viaje. Parece ser qu'e el Gobie rno del Mika do -no se ha opues to a que el Cyte of Pekin se rep are en los an:nales japoneses, pero que guardando estricta meutralidad ha noci~ -ficado a1 de los Estados Unidos que s610 perm itid la salida de e~os ..refuerzos coOn direeci6n al puert o de donde proceden, pero nunca -com rumb a a Manila. Veremos si se connr ma esta agradable nueva . Dfcese tambieJ!l que insurrectos y yanquis estan mal avenidos, y que ha habid o algunas escaramuzas entre ellos, habiendo publicaclo Aguinaldo un bando otden ando se haga fuegQ sohre el americana ¡que tnte de cometer abusos. Consider-o t..odo esto pura in venci6 n, y no tomo en serio semeJantes rum<:>res.

::. . * * Los C6nsules se han presentado al General August! para pl!dir-Ie la concesi6n de una zona neutral, eJ,l!1e sera amparada por 1.1:5 banderas de las naciones y protegida con parte de las dotaciones de los .barcos de guerra, que al efecto ba jaran a tiern. En esta zona no s610 p6dd n establecerse las familias extranjeras resident;es en Manila, sino 'tambien las espanolas q~e 10 d@seen. El Ganeral se ha ne:gacdo a aceeder a scmejante pretensi6n, y aunque esa rnedida nos perjudica, cr-eo que ha hecho perfectamente Su Excelencia en adop~ tarla. Nuest:ra dignidad no ' nos permite que mientras ondee nl!1estl"O


pabe116n en I'OS maros de Malliia fuerzas extranjeras, con este 0 aquel .pretexto, tomeD posiciones en el territorio amparado por nuestras ·tropas. Las familias extranjeras que viven en esta ciudad s610 pueden ,--ser de mejor condici6n que las espanolas en cuanto que nadie les prohibe salir del territorio sitiado. Las espanolas, por dolol"QSO que sea, sufriran 1a s,uerte comun. L'O que sl podIa haherse hecho, si el ·Gencul Aag1!lstl tuviese mas habilidad diplom,h:ica, era negoc.iar , es~ zoma en otro punto, Mariveles,. por ejemplo, 0 en 1a misma _Mafulila, siempre que no bajaran las dotaciones de los barcos .

. Acaban de darse varias 6rdenes por la Comisi6n Civil de Defen~sa: por una se establecen una tarifa fijando precios racionales y obli,.gat0rios a los articulos de comer y beber y a los medicamentos; en ·o tn se mallda aeopiar len,g" par-a que no falte este combustible, y "en otra, por ultim'O, se prohibe la salida de vlveres de la phn, en "clonde se establece el dep6sito general de los mismos, habielldose ya -a'lmacenado en los conventos todas las raciones que habla en Santa.mesa y San Juan del Monte.

-'-----28 de junia.

Estaba yo es~a tarde procurando reponer con un as cuantas ho:ras de siesta los desvelos de la noche anteri'Or pasada de guardia en los puentes de Ayala, cuando un mi am.ig'O y companer'O cntr6 en mi cuarto como una tromba y me solt6 al 'Of do, a bocajarro, las si."guientes palabras: -Ha llegado el General Monet. -~Que diees?-repuse saltando de la cama de un brinco, como "si hubiera estado sobre un lech'O de Ci'seua;s-. ~Estas loco~ i'~ue el 'General Monet ha venido! -SI, hombre, sf, te hablo en serio; el General esta en !vlanfla. jHe visto a ~no de sus ayudantes en la Escolta! jAh!, y tambien ha -Uegado la familia del Capitan General y algunas senoras. Vamos, que no pod fa ser. ~C6mo el General M'Onet, perdido en esas provimcias del centro de Luz6n, replegand'Ose de un lado para ·otr'O y casi aC0rraiado por los insunectos en Macabebe, habfa pOdido Viencer tam ias1!lperables dbstacu-Ios y preseatarse en Manila cua.ndo ya por nadle se Ie esperaba?' Imposible; no queriendo creer los di,.chos de mt amigo y desoyendo sus eKplicaciones, que me parcdan

129 El Sitio de M anila.-9

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'p roductos de uno de tantos optimismos como se esparcen, toman ' "dam~nte y me' cuerpo y se desvaneeen en estos dlaS,me vest!, .rapt eche a 1a cane decidido a comprebar 10 que hublera de clerto en 1a. estupenda nueva. ' Desgraciadamente los dos teniamos raz6n: mi amigo, al asegurarme 1a llegada del Comandante general del centro de Luz6n, y yo al extranarme de ella. EI General Monet esta. en Manila, es cieno, con sus ayudantes, can su Jefe de E. M'., con la familia del General, pero· sin su columna, que deja alla, no se. d6nde, y acerca de la cual da . no se que confusas explicaciones, que a esta hora, doce de 1a noche,. aun no he podido poner en claro. ' . Voy a poner aqui 10 que he sacado en limpio de 195 comentarios de unos y otros en tln suceso que, can raz6n, preocupa vivamente a la opini6n publica, siendo objeto de acalorados debates, as! como 10 es de acerb as censuras el Coman dante general del centro de Lu~6n. Los expedicionarios, segun parece, salieron anoche, disfrazados, del rio grande de i}a Pampanga, en varias barcas, dirigiendo tecnicamente la operaci6n e1 alferez de navlo Sf. ,. Sostoa, Comandal1te del Arayat. Toda 1a noche, que por cierto fue endemoniada, se pasa-· ron 'los viajeros dando tumbos por la bahia, con gran zozobra de s~r reconocidos por alguien 0 de ser vistas por a1gun barco enemigo. Por tt1timo, orientandose como pudieron y 'despues de mil fatigas y mil angustias, arribaron a estas playas sin novedad, desembar=ando en el muelle de la Capitarua del puerto aproximadam(mte a las tres · de la tarde. tEsto, en cuanto al viaje. En cuanto a las razones que el Genera:! Monet haya tenido en cuenta para dejar abandonada su columna r eina una ahso.leta! oscuridad y, por Jo tanto, s610 pueclo poner-' aqul 10 que de publico se dice. Aseguran los defensores del General que este tiene en su poder un telegrama del General en Jefe ordenando1e qtle viniera a Manila,. y contesta a esto la mayor parte de la gente qU6-, aun siendo ex acto 10 del telegram a, este no absuelve a1 General Monet, puesto que 10que indudablemente mandaba venii el Capitan General era la columna Monet, y no al Sr. Monet solo, que sin S1.1 fuerza poco podIa. hacer en la apurada situaci6n en que nos encontramos. No falta quien agregue que el Comandante del centro de 1.u7.6n tenIa el compromiso de cahallero de entregar en Manila sana y salva. la familia Augustl; pero a esto tambien se replica que 10 de la fa.milia Augustl constituye un asunto privado que nunca debi6 de' anteponerse a los sagrados intereses de la Patria, y que aunque no· . fuese as! no era el Sr. Monet e1 que respondfa de ella, sino el iltlstre filipino D. Eugenio Blanco, al cual ·fue confiada. Y, en una palabrall,

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que ni.nguna de las dos razones justifican la conducta del G~neral ~<iHii):et de de1egar el mando de la columna en el Coronel Francia y de venirse solo a Marula. Sabese que el General Monet ha a4irmado que toda su columna viene detras, en cascos" remolcados por el Leyte y acompanada pOf' partie de los leaies macabebes. Esto, aun siendo verdad, deja siempre en pie el asunto. El General no ha debido venir~e e1 primero, sino que, por el contrario,' debi6 embarcar e1 ultimo y ser el 'Ultimo tambien en abandonar el terri~orio cuyo mando Ie estaba confiado. Sea como sea, el caso es que esto de Bulacan, como tantas otras cosas de la campana~ esta envuelto en espesas s-ombras, y que mientras estos puntos no se acl~ren y se exijan las debidas '.responsabilidades todos tendremos dereche a creer que por una serie de incomprensibles desaciertos vamos : a dar de bruces en inevitables desastres. A ultima hora corre el rumor de que se va a formar ~umaria en averiguaci6n d~ 1'0 ocurrido en la brigada :M onet. Me a1egrad a que se confirmara la noticia, y no por enconos personaIes, que afortunadamente no los abrigo . contra nadie, sino porque creo que a todos nos conviene y porque 'es tiempo ya de que se haga la luz y se cumpIa la ley. Deseo que se incoe el proceso y que de el r enazca, sin mancha alguna, con sus 'aptiguos prestigios, la figura del Gomllldante general del centro de Luz6n; 10 deseo por el, por mi, por Espana entera, para 1que nunca pueda decirse, ni por propios ni po¡r extranos, que un General espano1 abandon6 sus tropas. en medio del enemlgo. Hay en los sensaciona1es sucesos ' de hoy una not~ simpatica que llena de' aIegda a .todo el mundo. Me refiero a la llegada de ]a familia August!, despues de mil angustias y peligros que han puesto a prueha el coraz6n de 1a generala como mujer y como madr~. En todas partes ha producido sincera satisfacci6n el regreso de esa distinguida senora y de esos pobres niios, ' pues Manila entera. segula eon viv!simo intert!s su suerte y compadeda al General August! en su tremenda desgracia,acerca de la CUCl!I, y compenetrado sm duda de sus altos deberes, nunca hizo la mas ligera alusi6n.

* * :(, Tambien procedente del Rio Grande de la Pampanga ha' llegado esta tarde el ¡ caporcito Mindez-Nunez enarbolando bandera de 1a Cruz Roja y trayendo a su l:--ordo heridos, enfermos y alguna que otra senora eutopea. . Los optimistas esperan que llegue esta. noche la columna Monet. Yo .no la espero. Si hubiera salido cuando el General, aqul estada.n

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todo-s; pero no habiendolo hecho, la co-lumna se haUa perdid.'t. La venida de Mone t ha tenido que ser un .grito de alarma para 1!{); americanos, que estara,n. sobradamente entera dos. de ell~ por los. ingleses, por llOs :indios, por cualquiera de los mll mecilos que Slcmp re tiene a S1.!l alcanc;e un enemigo astuto y sagaz para enterarse de 10 que stlcede en el camp o contr ario. Por eso, aunque la noche lluviosa que hace fav,orece aVienturas de tal naturaleza, yo no creo que esJ.s fuerzas se salven. Los yanquis destacara.n barcos que vigilen las bocan as del RIO Grande y del Pasig, y las tropas cae.ra,n p1risioneras 0 ~edn ecbadas a pique, si es que se han dedcl,ido a COl"rer tan positivos riesgos. He aqul por que yo, apard ndom e del comu n sentir, cons iaero la birigada Mone t oomp[etamente perdida. Tal vez se salve si se connr ma la noticia que me han dado de que, aprovech.lndo 10 cerndio y nebuloso del tiempo, sale un remlOlcador con habiles prac. ticos en su auxilio. Ya veremos.

29 de juniQ.

Efectivamen.tet como me temla y espel'aba, no ha llegado la columna del General Monet; ila suerte de esos pobres soldados pr:eoc upa vivamente a tlodo el mumdo y desespera qlile no se les haya enviado recurso alguno, pues no se ha confirmado fa salida del remol cador a que m.e referta ayer. Sigue hoy la racha de mala'S noticias. Hay dras desesperantes que parece que se .proponel'l echar por tierra toda clase de ilusiones. Por el prontO' nos liemos quedado sin agua, por haber'Se hecho duefio s ,los insurrectos de las cercantas del deposito de Santolan y paralizado el funcionamiento de las maquinas elevadoras. Por cierto quees t:1n sitiada'S por l:os rebel-des las fuerzas que tenfamos en dicho dep6sito y en un blocao a el cercano, y q1.!le para salvar unas y otras so prepa ra una fuerte columna militar, cosa que me parece muy acertada, porqu e sin tal auxilio esos infelices tendd an que rendirse por hamb re a las puertas mismas de Manila. Esto del ag1.!la constit!l ye un gravfsimo contra tiemp o para n05'Otros, no porql!l,e nos falte para beber, que tal cosa no puede oC1.!lrrir en plena tempo rada de l1uvia s y estando el rIo eft puest ro poder, sino porqu e nos falta ese ptecio so elemento para comb atir los incendios y esto agravara las consecuencias del bombardeo. Debi6 defenderse con m.as ahinco el dep6,;:to :l~ Santolan por ser posici6n de excepcional impot tancia ; pero :omo ya no se ha hecho, las recriminaciones y cargos resultan seon6 n ,perdido. 132

•


Como consecuencia de la perdida de Santolan los bomber-os han llenado de agua todos los algibes de las casas de Intramuros, mandando el Ayuntamiento que se hagan en algunos solares pozos publicos que recojan el agua de lluvia y de los cuales podd surtirse el vecindario. 'rambien se ha ordenado, para economizar en 10 PQsible 1a poca agua -q}ue Festa _en los dep6sitos de la tralda, que las Fuentes pwblicas no se abran mas que de ocho a dace del dla.

*** Agolpabas@ esta tarde en el Ma lec6n del Sur y en otros puntos pr6ximos a la bocana del rIo ' gran nnmero de personas que, con la inquietud y 1a zozobra reflejadas en el rostro, vdan acercarse un vaporcito qae enarbolaba en 1a popa una bandera que la distancia bada oorr-osa y que remolcaba al parecer dos 0 mas grandes ca~cm . -Es el Leyte con la columna Monet-se oy6 decir en voz baja, como un susurro casi y como si todos aquellos espectadores temieran que sus palabras fueran a llevar 1a a1arma a los americanos. 51, era cd Leyte, era el canonerito espanol, que valiente, orgulloso, pateda desafiar el peligro y d'irigirse a la bocana :lel rIo conduciendo las reliquia-s de la brigada Monet. De pronto, aquella multitud imponentemente s,ilenciosa vi6 . una cosa rara. El Leyte pareci6 disminuir su velocid<lJd, se Ie vi6 soltar los cascos que remol..:. caba, y cuando estaba cerca de Ia oocana virar en redondo, en1fl>Dlar bandera blanca y dirigirse a 1a escuadra yanqui, de la que se destac6 .el Petrel. Poco despaes el canonero espanol, en el que ya ondeaba el pabellen estrellado, enderezaba el rumba hacia Cavite. ~Que ha sucedido? Ann 'n o ¡ se sabe. Algo de mucha gra vedad debe ser cuando el Comandante del Leyte, Sr. Per ai, que estaba muy bien reputado, ha tornado tan extrana determinaci6n. 1

30

de junio.

Lo del Leyte sigue siendo tema de palpitante interes en codas las conversaciones. Ya se sabe algo de 10 ocurrido, y que consigno a:}ul con t00das las salvedades propias en un asunto llWlo ann de oscuridad y puesto, POl" lQ taftt9, .en tela de juicio. E1 canonero Leyte, acompanado de una 1anchita de vapor, sali6 de los estJeros de iBulacan el dla 28, trayendo a remolque varios cascos con los l"cstos de 1a cohlmna Monet, unos 900 hombres aptoximadamente, viniendo los oficiales en las barcas con 1a tropa y los

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'Jefes a bordo del Leyte exceptuando el Teniente .CoroOnel DU;lols, que venfa en la ,lanchita. AI salir a bah£a, el Comandante del Leyte, Sr. Peral, vi6 que el cafioOneroO era impotente, dadoO 100 fuerte de la marejada, para seguir remolcandoO los cascos, y que de continuar asf el naufragio de todos era inevitable. En vista de esto se celebr6 breve junta, y aquf es clande nace la conflilsi6n, pues mientras algunos sostienen q1l1,e en la junta qued6 decidido venir a Manila en demaada de SOCoOrros, oOtras afirman ' que, habida cuenta de que 1a expedid6n iba necesariamente a perecer entre las alas 0 a tener que entregar'l~ a los insurrectos, se acord6 desde luego ,que el Leyte se dirigiera a la Escuadra americaaa y rindiendose prisione1:"oO y rindiencfo tambien prisionera 'la columna, demandara de la hidalgufa de los yanquis la sal:vaci6n de l.oS infelices naufragos. Sea eual Iuera el acuerdo que se I3.doptase, es el casoO, y esto sf que es inexplicable, que los Jefes de la coOlum'na decidieroaque lila sortoo designara quien habfa de quedarse con la tropa, a cuya oOperaci6n se opuso resueltamente e1 T cnient~ Coronel Du jioOls, en noble arranque que da inmarcesibles prestigios a su figura, el eual, alegandoO que la mayor parte de la tropa perteneda a su columna, qued6se con ella voOluntariamente, mien.tras e\ Leyte soltaba el remoOlque y apenas separado de los cascos enarbolaba bandera blanca y se dirigfa a la Escuadra enemiga, que 10 apres6. IgnoOro 100 que allf pa~arfa; 10 que se es que los americanos no han mandadoauxiHo alguno a los cascos y que 'ta desgraciada columna Monet 'qued6 abandonada a su mfsera suerte en media de las enfurecidas ' oOlas. J

* * *' Esta tarde ha desembarcado en la playa de Vitas el Teniente CoroOnel Dujiols. Tambien viene solo; tampoco trae la columna. De publico se afirma que toda la floOdile estuvierol'l esos infelices luchando casi con la muerte y espel"alldo en vano, en medio de inenarrabies angustias, un a1l1xilio que de ninguna 'Parte les iba. La guerra tiene cosas muy duras; esoOS pobres soldados y oficiales, pr6ximos a perecer, distinguidan desde las mfseras barcas, como ·;fmbolo de la vida, mas placentera cuanto mas se esta a pique de perderla, ' las luces de Manila, las luces de loOS barcos. AlH habla hombres, hombres CoOmoO ellos que no acudfan en su SOCoOrro: 100S uno~, por falta de medioOs; 105 otros, por soObras de egofsmo. '. Des~sperado. Dujiols, viendoO que nadie acudfa y que los cascos ;than a lrse a pique necesariamente, coOmeti6 la, debilidad, dchiiidad , que algo empafia los meritos coOntraldGs el dfa anterio·e, de venine solo a Manila, en la lanchita en que se hallaba, a. exponer per sonalmente la situaci6n y a recabar algun auxilio parasu gente.

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AsegUras~ por todo el mumdo que el Sr. Dujiols ~sta tar:de a reunirse con sus soldados, come es

queda m.lrchar16gicG que haga :se 'un jete pundono.roso, que con ellos debe salvarse 0 entre ellos debe morir; pero que el General en Jefe Ie ha orden ado qJ~ permanezca ,en Manila. Tambien se dice que han salido varios remolcadores en blilsca de los naufragos. Tiempo perdido; es tarde, muy tarde para ~salvados.

135



CAPIT U LO XX

2

de julio.-

Anteayer lleg6 la primera expedici6n americana, compuc')ta de tns barcos mercantes, por 10 que se calcula que las tropas llegadas, ascenderan a 2.500 hombres. Tambien ha llegado, escoltando la expedici6n, el crucet:o de guerra americano Charleston} que S ,~ queda. a"lul para reforzar la Escuadra del Almirante Dewey. Vudven los temores de bombardoo, fundados en que con la llegada de esas tropas los Comandantes de los barcos extranjeros y los : C6nsules no pueden ya impedirlo, apoyandose como antes ~ ,1 que cL Jef~ de ' la Escuadra americana ,no disponta decolumnas de asalto , ,p ara tomar la ciudad; pero yo creo que Dewey no intentara nada hasta que Ie manden mas refuerzos, pues no pudiendo contra,rrestar ' con las tropas que ahora tien~ las fuerzas de los insurrectos que' eercan toda la peblaei6n, s610 cons~guir1a que estos se apoderasen de Manila y la saquearan, sobrevil'liendo grav<es conflictos internacio- , nales, de que S0 haria responsable. Lo que se me ocurr~ son tristes comparaciones entre la actividad' de Jiluestros enemigos y nuestra desidia y abandono. Dos meses han;, transcurride- des-de que nuestra Escuadra fu~ destrufda y la plaza de Cavite evacuada; dos m.~ses desde que se comunicaron esas infaustas noncias al Gobierno de Madrid y la desesperada situa~i6n en queestabamos; dos meses en que todos nuestros pensamientos e~d.n ÂŁijos en la Escuadra y refuerzos q,ue de Espana nos envian y en cuya~ dulce esperanza redinamos la cabeza abrumada por, untas desdichas, y esta es la f~cha (m que todavla no han llegado. T6das las l'locnes pensamos que al siguiente dla han dl2 lleg1r; to--

131'


das fas mananas subimos a tas torres, a los observat'Orios, y aIH, palpillantes de em€>cion, mrigimos l'OS gemeloOs a~ no lejano horizOl1.te de .Ia bahfa para ser ~IOS primeros en vedos aparecer, y ... n.a:da. En todas las c~Ues, en oodas las casas, en d'Ondeq1:liera que se rellnen dos personas, ya se sabe cual es el tema obligadoO de c'Onversaci6n: 1a venida de 131 Escuadra; se hacen d.lculos de singladuras, ·de dtas que pueden perderse en apr'Ovisionamientos y en ligera, aveFlas y de la velocidad de cada barcoO, para dedllcir 1a fecha en q1l1e pueda ~~ega1'" a esM bah£a, sa[vandlO11l0S de tam. pel1l:Qsa situadon. Unos asegllran que esta para aJiribar, otros qae aun tardara quin,,ce dlas, y no faltan personas que, sabiendo l'OS altos secret os iJe Estado afirman con tono misterioso que la Escuadra que viene por el Me~diterdneo no es La que ha de sacarnos del apuro, dando a entender que etra, mas poder'Osa, navega por d'istint'O derrotero--que noO pue,de sel' otrr'O que el Cabo de Buena EsperaDza '0 el de HoOrnos-y dentroO de 'Ocho 00 diez ~Has ]31 te.mdrem.os pOl'" estas aguas. Como en el cablegrama llegacto el dla 25 dd pasado mes el Go'bierno se Iimita a decir que ya han salido refllerzos de mar y tierra ·para este Archipielage, s~n explicar en que coOnsisten ni por d6nde · v ienen, queda extenso campo a b imaginaci6n para hacer d.lculOs 'sobre las o:F'iliiliones que apuntadas deja, · quedaadose cada uno c'On 'Ia que mas le coBviene '0 se amoida mejor a su CaraCtier. Tenem'Os aquf 131 n0ticia~ tralda pOor pe,ri@dicos y cartas, de que ·el dfa. 29 de mayoO sali6 de Cadiz una escuadl7a con rumbo desconocido, y h'Oy se ha sabido por nuev'O cablegrama del Gobierno que ~el 16 de juni'O saHeroOn refuerzos de mar y tierra para Filipinas, de 'm odo 'l'ue no tiene nada deabsurda [a versi6a de que por el Cabo "de Buema Esperanza 0 d:~ Hornos .vieme um.a Escuaclra, cuyo derrote:ro ha de ser iglllorado POl' los n(\)rteamerie~n.€)s hasta ultbma halra, por no tener que hacer escala en ningun punto que tenga: c<>munrcacion telegrafica con ·Europa ni America, y que 1a Otfa que sa1itS .. el dfa 16 de junio venga por el Canal para ir atrayendo sobre sf 1a. atel1'c i6n del eFl!emigo, y que este base en ella sus d.lculos, 'Olvidando <lEa otra que hasta los u1timos dias J!'uede considerarse con rumbo igualmente dirigid'O a Cuba que a Filipiaas .. Yo me inclino a esta ulti.ma opini6n, q\ile seld a de hrilhntes r~ · sultados, y creo que el Gobierno puede y debe bacerlo, pues segup la lista de barcos de guerra espafioles, pablicada en El N acUinal y en el Blanco y Negro, y que figuran en el Anuari'O de la Arma.cia, mo.s quedam s~ficientes elementos navales en la Penlnsl;lla, toda vez que n'O han ~a1idl() para Cuba mas que IlOs cuatro cruceros y los 't res destroyel"s que manda Cervera. ' . Sea como quiera, poco tardara y~ la £scuadra, y es preci>o que 1

1.38


ttooos trabajemos para que cuaado Uegue ondee todavfa la o.tndera .;espaiiola en La capital de Filipmas. .

4 de julio.

Se sl1surraba desde haee dos 0 tres dlas que el Alrnirante Dewey ~habIa prometido a su Gobierno que hoy, aniversario de la tndl?pen.,aeacia de los Estados U nidos, ondeada en los muros de :Manila el pabe110n americano, y por eso amaneci6 el dia bajo los temores -de '11m. bombardeo, que tampoco ha llegado a realizarse. Por la maiiaRa nicieron los barcos enemigos las correspondientes salvas, que fueron comtestadas por los Gtros extranjeros fondeados actualmente en la baMa. Despues celebraron los americanos un banquete en la plaza ,de Cavite, y sentaron a su mesa a Emilio Aguinaldo y campa-li fa. Sin duda, los vapores de las bebidas, los mutuos ofrecimientos de _amistad y protecci6n, los calurosos brindis a la nueva R epublica fili_pina y las e~citacion,es heehas al amor propio de los eabecillas insu->rrectos, trastOl"naron las debiles cabezas de estos desgraciados) e1l,Cargados de s(J;Car del fu-ego la castana que han de C01ne'rse los (1;m erica-<nos) y decidieron tomar a Manila sin pet:'dida de momento. A las tres y media empez6 el fuego por Singalong y San Antonio Abad, gener:aiizandose d@spues en toda la Hnea y oyendose con bas-t ante freeaemcia disparos de caii6n prooedentes de nuestra Artilleda. El desttacamento del puente-de Paco pidi6 refuerzos, y se envi6 um-a compaiiÂŁa que nabla preparada para el caw en (,':1 parque de bom"beros ded mism0 distrito; esto y :las eorridas de unos euantos por la 'calle de Nozaleda produjeron alguna alarma en los vecinos de aquel -;arr albal; pero, afort1.uradamente, no pas6 del -susto consiguiente en las -muj(m~s q~e po-li aHt viVIan. Cuando. la compania de refuerzo lleg6. a1 puente de Paco, ya se habfa retirado el enemigo con grandes perdidas, y aqu~Ua reerbi6 orden de regresar. EI fuego. ha durado hasta las seis de 1:1 tarde, y en toda la linea 'ita sido rechazado. d elilemig0. Esta nocne hemos of do tambi~n algu-nos _d~s:p.arQs.

* ::- * Como ya dije, hace algunos dias que se supo que el destacamenque guar-neda el bloeao de Santolafl estaba roeiea:.d o por los im.su',cJrect>Os, que 10 hablan ineomuflieado eon San Juan del .M onte. Este Macao se oonstruy6 fu,era de la Hnea defensiva con el exclu~

J:39


sivo objeto de proteger las maquinas elevatorias que surten de agua. a Manila, las, ct:lales han cafdo ya en poder del enemigo. Para salvar aquel destacamento y ver si . podian componerse las maquin41s, saHeron tropas nuestras, que han conseguido su objeto, recogiendo la fuerza del blocao y batiendo al enemigo, que sufri6 un castigo. La-s maquinas taeron examinada!s por el ingemero Sr. Las; Heras, que acompanaba a 141 columna, y en vista de la imposibilidad de componerlas, se ha evacuado hoy aquella posici6n y 1.13 de San Juan y San Francisco del Monte, que la 41poyaban, retirando tam-· bien el dep6sito de p6lvora que allf habta. Esos puntos estaban toRla!dos para asegurar el sum,inistro de agua potable, y descompuestas las maquinas, no tenfa objeto el conservarlos, siendo, por el contrario, un peligro por 10 avanzados que estan de la linea y 141 faci!idaa con que podfan caer en poder de los msurrectos.

*** Ayer vino a Manila el bravo Co,ronel de VOhllltarios de Maca-bebe D. Eugenio Bbnco, que iba a bordo del Leyte cuande> este fue" apresaao por los americanos. El Almirante Dewey ha entregado todos los pr~sioneros del Leyte a Emilio Aguinaldo para que los custodie, y a D. Eugtmio Blaneo Ie han concedido permiso parer que ven-· ga aver su familia bajo palabra de honor de que volved. a con.s-tituirse prisionero. Se dice con insisteneia que Blanco ha trafdo una misi6n especial, pero nada se sabe en concreto. Conferenci6 largamente con el Ge-neral Augusd. Al bajar de un vehfculo en la Escolta aquel ilustre y noble filipino fue objeto de una sincera manifestaci6n de simpada y admiraci6n·. por parte de los espanoles peninsulares que .alli hahfa. EI Sr. BI<Inco se descu'hri6 y di6 un "iViva Espana!" profandamente emocionado ..

* * ". Hoy lleg6 un. barco aleman, que traia eorrespondencia de la_ PenInsula; nuestra ansiedad por saber noticias ha sido budada por el A,lmirante americano, que intercept6 aquell a. Tambien venia aquel barco con carg41 de carb6n para la Escua~­ dra alemana, del que ha querido mcautarse igualmente Mr. Dewey,. pre1Jextando que 10 necesita. El Coasui ha hecho la correspondiente rec1amaci6n, a la que ha contestado aquel diciendo que indemnizaria el combustible; pero est a soluci6n no tia satisfecho a 165 alemanes y eI carb6n continua sin descargar. Ha salido un barco ale-

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,oma.n patraJ Hong-Kongo, y esto se relaciona aquÂŁ con el asumto del .car:b6lilJ.

*** Esta noche se acuestan muchos vecinos de Manila con la seguri,dad de que los despertad. el estrepitoso canoneo de un nuevo combate .Fl'a'V'al, pues dan por supuesto que en toda la madrugada llegara flIuestJia Escuadra de auxilio, que hemos bautizado ya con el califica°tivo de Deseada. , PerO', SiD ~mJ1,argo, y segun el dlculo de los mas sosegados, no podra arribar a estas aguas hasta el dla 10 6 12.

141



CAPITULO X XI 6 de julio. ÂŁ1 dfa de ayer fue relativamente tranquilo ) pues el ataque a nuestlias ~siciones 5610 dur6 desde las siete y media hasta poco despues. de las .ocho, sintiendose durante toda Ia noche algunos disparos SUdto5.

Hoy tampoco hemos tenido novedad hasta ahora en las Hneas de . aefelitsa, pere hemos sufr'i do una desilusi6n mas, pues se ha sabido'<que e1 d'fa: 1.7 del mes pasado sali6 de Port-Said n~estra Escuadra, clilando- machos crefan que Hegarfa dentro de ,seis 00 siete dfas ... Nuevamentf: se han hecho dlculos, y de eUos resulta que hasta â‚Ź~ 24 6 25 no podra estar a,qui; pero como tambien han llegado no-¡ ticias d~ ,que el db 17 de junio sa.1,i,6 de Sal)- Francisco de CalifQrnia la: segunda exped~ci6til de tropas americanas para Filipinas, llegara esta: a>ntes ti}'l!le aql!1eHa, y entonces nos atacaran, y quien sabe si los. auxitios Hegaran tarde para evitar una desgracia. La opini6n ,se mnestra rnuy indignada cOon el Gobierno de Madrid, y hay motlvos para ell:o; pere, aun<iJ.tJe malhumorados por tan punihle panimoma, FlO desalentamos. ni decae el valor del soldado ..

E~~ es~e mom,entQ, di.ez de la noche, empieza un nutridfsimo fuege h.aeia Santa Ana; se oyen potemtes y precis as descargas de fnsilep.{a y bastam"tes dispar<>s de cafi6n. EI fuego se corre hasta el fuerte' de Saa Ant<)nio' Abaci y va en aumento; parece que el ataque e1 m ,do.


7 de juliD. Toda la noclie la pa-se en vela, y otro tanto creo que Ie habra ''Sucedido al vecin.dario de Manila, pues era imposible conciliar el sueno. Desde las diez que empez6 el fuego, no ha cesado en toda la madrugada. A eso de las tres saE6 un gran convoy de municiones 'para las trincheras. El ataque fue prolflovido por los insurrectos para facilitar y auxiliar la desercion de unos cuantos voluntari(i)s de las Milicias de Montalban, destaeados en las trincheras de Santa Ana. Casi todos ,ellos pagaron con S11 vida la traicion; eran. unos 250, Y la mayor parte quedaron tumbados en tierra; los disparos de fa artilleda hi'cieron tambien muchos estragos en los grandes grupos que intentaban acercarse a nuestras posiciones. Ha sido un buen castigo para l.os insurrectos. El Capitan de esas Milicias de Montalban, D. Licerio Jeronimo, -ha permanecido leal con otros pocos y se porto brillanternente du~ '-cante el combate.

*

1(0 1(0

Esta manana entro en el puerto 11n crucero austriaGo, y esta 10 hicieron dos: 1:lno ingIes y otro japones.

~,urde


CAPITULO XXII La verdad es que los que hayan estado en MantIa no la conoceTlan si por arte diab6lico fuesen transportados a ella en estos mo:mentos. La frondosa vegetaci6n que caracterizaba sus calzadas ha desaparecido. Los altos y espesos caiiaverales de las Aguadas, que un ian sus .copas por encima de los focos electricos para formar verde b6veda a todo 10 largo del hermoso paseo, han venido abajo a los golpes del hacha; las pompOsas hojas de los £rooles seculares han sufrido igual ·suerte. jPobres p£jaros, cuyos gorjeos llenaban e1 follaje de misteriosa 'vida! Se encontraron una tarde sin nidos, y han tenido que emigrar . .a otras reglones .... jYa no se alboroza el esp{ritu de los paseantes con las encanta·doras armonlas de las aves que despedlan 1a tarde, ni con el fresco perfume que exhalaban las hojas! S610 se ve, a uno y otro lado de los paseos de Magallanes, Arro·ceros, la Concepci6n, San Marcelino y las Aguadas, larga hi1era de troncos despojados de todo verdor, como funebre procesi6n de fan·tasmas petrificados, con las escuetas ramas extendidas en el espacio ·semejando brazos que imploran clemencia. jNi el jardm botanico' ha ;p odido salvarse, y hoy no es mas que £rido solar Ileno de los es-combros de la derruida verja! Todo 10 que rodeaba ala ciudad murada ha sido talado, para que desde las murallas pueda dominarse una gran extensi6n y prevenir una emooscada del enemigo. . Per las tar des no .hay casi nadie en 1a Luneta, donde llegan las balas insurre€tas; pero esd bastante animado el malec6n, pues a pe-sar de tanta desgracia, no decae nuestro cl£sico car£cter; al llegar la

,

145 El Sitio de Manila.-Io


noche varfa- bastante el aspecto de estos paseos y de toda Manila,. porque a las siete se mont a el servicio y ya queda 路todo en pie de guerra. S610 se ve emtonces a l!os sileneiosos solcl:ados, que vigilan junto a la playa; alguna pareja de cabaUerfa, que a todo galope lleva. un parte; ra columna velante encargada de municionar las fuerzas. de las tri111cheras; los carros de la brigada de tra.flisportes, euyas rue-路 das rechinan en medio del silencio de la noehe con- un ruido desagradable y triste, y el <c alerta" y"qaien viVie" de los centinelas. Domina este cuadro de guerrero silencio el tiroteo en los ~ blo-路 caos, que todas las noches, mas temprano 0 mas tarde, avisa a los vecinos la pr:esencia del enemigo. Muchas veces he visto 0, mejor dicho, oido el ataque desde la Luneta 0 el malec6n; alH se vislurribran los fogonazos de los disparos de cai6a, el resplandor de las nu tridas Idescargas de fusilerfa y se oye cierto ruido, que sera ilusi6n, peroque parece el movimiento, los gritos, el fragor de la lucha. Mientras-, dura el fuego, todos esperan con in.quietud, no porque se dude del resultado, que ha de ser siempre rechazar al enemigo, como ha de-mostrado la: experiencia en dos meses de ;tuques diarios; se espera, . con sobresalto porque todos .tienen algun miembr? de su familia en las trincheras, porque t'Odos son nuestr'Os hermanos, Y jay!, algunos. han de scr victim a de las contrarias balas, que no' son de alg-od6n ni de cera. N'O son estas eontl!'ariedades mi disgustos las que s0lamente tenemos que vencer y dominar; hay que salvar dificultades mas graves" .p orque .se refieren aI sostenimiento material de la vida, como es la cuesti6n de las subsistencias. Cad a dia va en aumento el abus'O de los comerciantes, y n'O se cOmo se las arreglaran las muchas familias que aquf hay con pocos recursos para no morirse de hambre. Estan ya casi agotadJ.s las existencias que tenlan los almacenes de vlveres de Europa, los cuales han dado salida a !Odos los generos antiguos y averia-dos; los pocos queqaedan se ocultan cuidadosamente, y s61'O se vendem al que los paga en cinco 0 seis veces su valor. EI mercado de vlveres frescos estatambien exhausto, porque los msurrect'Os impiden a 103 naturales. que pasen de nuestra's Hneas c'On ningun comestibte, y si por casuaH-路 dad se encuentra algo, s610 pueden comprarlo 110s que tienen bastantes recurs'Os. Un huevo, cuando 10 hay, cuesta I2 centimos de peso,.. y un polIo '0 pescado, dos '0 tres pesos; se careee de harina, y estamos comiendo ya carne de carabao. Estas privaci'Ones suben de punto en 1'05 hospitales, completamente Hen'Os de enfermos y herid'Os; estos desgraciados no podran resistir mucho tiempo, y eso que se reserva para en'Os 110 mejor que hay' e? la plaza.

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Pero, en fin, todD puede sufrirse cuando se trata de la Patria, de esa hermosa idea que une todos los corazones en un solo latido y todos los pensamientos en una sola aspiraci6n; todo puede y debe sufrirse cuando las naves espaiiolas vienen anhelantes, ganando millas al mar y el triunfo nos sonde desde lejos ... Nuestro honor y nuestra Patria exigen que la bandera espanola de la plaza 5610 tenga una rumba: la del ultimo espaiiol que mu ~ra en la pelea.

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CAPITU LO XX :I I i

I I

de julio.

Anoche, a las siete, empezaron a ofrse bastantes canonazos y disparos de fusilerfa por la parte de Hnea comprendida entre el fortin de Sam Antonio Abad y el barrio de Singalong; el fuego durarfa una hora pr6ximamente, con bastante mtensidad y frecuente interven- ¡ ci6n de los canones, por 10 que se supon{a que la acometida era m;b recia que otras veces; pero quedaron 'chasqueados los insurrectos despues de lIevar un buen alegr6n. Fue el caso que nuestras tropas habfan hecho nuevas trincheras 300 metros a retaguardia de las que ocupaban desde el principio, que remllan mejores condiciones de defensa que las primitivas, tanto por su construcci6n como por la situaci6n del terreno y porque aSl habla ante elIas una buena zona de terreno desclilbierto qlile impedirfa al enemigo aproximarse sin ser visto. Acordado que anoche se abandonaran las primitivas posiciones y se oeupasen las nuevas, pusieronlo en practica nuestras tropas, y apenas vieron los msurrectos que 'se retiraban de elIas los soldados, creyendo sin duda que hulan, empezaron a salir del bosque en grandes mas as, que a jazgar por sus gritos inarticulados paredan manadas de hambrientos lobos, y se avalanzaron a ocupar las trincheras desalojadas. AqUl fue Troya; porque en aquel momento empezarort a¡ vomitar metralla tudos los morteres-mata, qae alli se llevaron en previsi6n del case, dando 'precise y feliz resultado, pues en poco tiempo quedaron destruldas las trincheras que se hab£an abandonado y limpio de caserto todo el barrio de Meitubig. Naestros soldados se enmsiasmaron .ante el buen exito de la operaci6n, y hay que ofrles hablar ,de ella; a cada ca.fionazo segufa in-

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mediatamente un grito agl1do, y todos los insurrectos se tiraban a1 suelo; despues v()lv~a et cabeciUa a gritar para que se levantasen; una de las veces note aqua que se levantaban may pooos, y se desganit6 increpando a los miedosos que permanedan tumbados; pero nada: se aproxim6 a elIas y ... estahan muertos 0 mal heridos. Tambien dioen ]05 soldados -que vieran descender de los arboles precipitadamente a mucoOs . .No se pueden precisar las bajas que t11vieron. los insurrectos, por ia espesura de los matorraies y arboles y porque no era cosa de arriesgarse a practicar un reconocimiem,t o para averiguarlQ; pero .debieron seli machas a juzgar por el fa ego que se les hiw y por los gritos de dolor que exhalaban.

Memos sahido que las fuerzas nuestras que pudieron concentrarse en Subic se han rendido a los americanos, y que estos, siguiendo . ¡su humanitaria c0stumbre, las han entregado a los insurrectos. Esto dama al ciel~, y pa~eceda increfble si Ill() s'e viera qae 1105 C6nsules y Comandantes de barcGs extranjeros permitan esta burla de todas las leyes divinas y humanas que el ejercito libertador de los . p-u.eblos oprimidos. comete con la mayor frescara. Es verdad que e1 General Augusd no se QCupa de Hamar 1a 'atend6n de los extran..; jeros cada vez que se repiteJil estos hechos, de ponerlos de relieve y de hacer protestas en regia. Pero hay mas atropellos 'qu~ ese: el vapor Compaiiia de Filipinas sali6 del puerto de Aparri, y eJil! la travesla la tripNlaci6n indigena asesin6 al Capitan y demas Oficiales espafioles del barco, y hoy entr6 en la bahla con bandera msu:rrecta, dirigiendose dinctamente adonde estan 1'0s buques americanos, a cuyo ladQ fonde6. Caalquiera otra nacion hubiese considerado aqud baroo como pirata, puesto que la bandera insur~ecta no esta reeonoOcida por nadie, y hubiera enviado a las autoridades espaiiolas la tripuhci6n para que sufriera el castigo consiguiente a tan horribles asesinatos . Pero (c6mo van lioS americanos a. indisponerse con lo.S indio.s, a los que se uniJeron en practica alianza? (C6mo han de disgustarles si les auxilian de modo tan eficaz, que el dfa en que los americanos se decidan a atacarnos sera sabiendo ya que no tienen que combatir ni exponerse a nada? POl:"q'ue Ia verdad es que no. sale de esta guerra Oluy 3!creditado el valor de los yanquis, pues a pesar de la decadencia de Espana, de 5U falta de recursos, de barcos, de canones y de su agotamiento. por tres ano.s de guerra civil, elIos, que son tan ricos, tan poderosos y 1'50


,tan vaUintesJ necesitan para veneer promovemos nuevas insurrec,ciones que' nos imposibiliten la defensa, necesitan que otros reciban :muestras balas, y â‚Źuando ya nos vean agotados, sin municiones, sin 'vlveres y sin hombres, y puedan disparar sus canones sin temor de -que les contestemos por falta de elIos, entonces abren la boca y reciben el plaml que en forma de victoria les envlan sus aliados. jBuena pagina estan escribiendo para su historia militar y p0l itical

:{- :(. *

Muchas cosas se hablan estos dias por Manila; y hay para vol'verse loco con tantas versiones y tantas novedades. EI dueno de La. Estrella del Norte ha dicho al General que sabra por su c-orres'ponsal en Colombo que la Escuadra espanola habla pasado ayer a la ,altura de aquel puerto sin detenerse, y otros aseguran que la de Cervera esta ya en aguas de Filipinas, al acecho de la segunda expedi-c i6n norteamericana que sali6¡ de San Francisco de California. Se habla tambien con mucha insistencia de una alianza entre Francia, Rusia y... Espana, y hay quien asegura que la plaza de Ma'nila, si llegase el caso, se entregarfa a los extranjeros, excepci6n he-c ha del ingles, y no a los americanos. Ni acepto ni niego estas noticias, que en un momento llevan a la poblaci6n el desaliento 0 el entusiasmo. 1..0 unico positivo es que del 20 al 25 de este mes lIegara nues'tra Escuadra, y si no se precipitan los acontecimientos 0 surge alguno inesperado,- tendrem<)s la satisfacci6n de arreglar las cuentas a "todos nuestros enem.1gos.



•

CAPITULO XXIV 15 de julio.

En todo el dÂŁa de ayer no dieron senales de vida los fusiles insurr,ectos, y la noche se presentaba tainbien sin novedades, por 10 que se acostaron la mayor parte de los vecinos en la seguridad de qu e dormirlan tranquilos; pero a la una pr6ximamente de la madrugada comenz6 uno de los mas rudos ataques que hasta ahora hemos' sufrido en toda la llnea defensiva, des de el fortin de San Antonio Abad ,hasta la playa de Tondo. Todos los vecinos que no tenfan obligaciones militares que cumpliF, y especialm.ente las mujeres, salieron a los balcoJ}es y ventanas ~ El fuego dur6 hasta las si1ete de la manana, con pequenas interrupcl0nes, y en este ataque hicieron uso los insurrectos de artillerla, pues cayeron algunos proyectiles de a nueve centimetros en diferentes sitios del radio municipal. ' , La noche estaba Os'curlsima; cala copiosa lIuvia, que no permitia. ver a dos metros de distancia, y amparados por la oscuridad y el aguaoero, llegaron los insurrectos a 20 metros de las trincheras qu e hay por la parte de San Juan del Monte, en el sector del centro, siendo, como siempre, rechazados en toda la Hnea y con grandes perdidas en las citadas trincheras. Se conoce que, como se aproxima nuestra Escuadra, quieren romper la Hnea y apoderarse de Manila antes de que lIegue. Se me clvid6 decir en anteriores dlas que tan pronto como empieza el fuego por las noches, los barcos americanos iluminan perfectamente nuestras posiciones, dirigiendo a elIas sus potentes focos electricos, para que los insurrectos no equivoquen la punteda.

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A las dos y media de esta tarde se re~nud6 ~l fuego desde San :Antonio Abad hasta Santa Ana, que continu6 muy graneado hasta 'las cuatro y media. Se espera que Uegue boy la segunda ex,~dici6n de tropas ricanas, y se tienem. noticias de que ya ha salida una tercera expedici6n, con la que viene el General Merritt, electo 'Cober'lfl}ador gâ‚Źne,ral de FiUpinas.

3m:-

* * )'. . Esta manana sali6 el Cliucero de guerra austrfaco, y se S1l1Surra GJ:ueha ido en busca de nue.stra Escuadra, con pliegos para el Alminnte Camara. 16 de julio. Esta mafiana, al amanecer, se repiti6 el fuego en toda la linea ,c on basta,n te intensidad. Han ca>ldo en diferentes puntos de Manila proyectiles de cafi6n de 16 centfmetros, 10 cual demuestra que los insurrectos disponen ya de artilleda de grueso calibre, tal vez proce¡n ente de la plaza de eavite. De modo que ya nos dan alga a cuenta ,d el bombardeo de los americanos.

* * *' A ultima hora de la tarde entr6 en la bahla el crucero americana Boston" que ayer sali6 en busca de la segunda expedici6n, a la que viene escoltando. Esta se compane de cuatro trasatlanticos. Ignora'm os el numero de hombres que vendran; pero creemos que la expedici6n ha de ser un nuevo embarazo pari la situaci6n de Mr. Dewey, que no se atrevera a desembarcarla, pues estanda paq llegar nuestra Escuadra corre el riesgo de quedarse abandonada en tierra, 'y si la deja embarcada, tendra el peligto de que las gr anadas del .pelayo 0 del Carlos V echen a pique los trasatlanticos; de modo que supanemos que saldra de la bahla y se estara por alta nilar, cludiendo el encuentro con nuestra Escuadra, hasta saber el resultado del 'combate de esta con la americana.

17 de julio.

A las cinco de la manana empez6 el ataque de los inslllrrectos a 'nuestra Hnea defensiva, siguiendo, con pequefias interrupciones, du-

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"ante todo el dfa. Han ocurrido a.lgunos accidentes desagradables. En la capilla del cementerio de Paco se deda un responso de cuerpo presente y penetr6 una bala en el recinto, produciendo la natural alarma; un proyectil de caii6n de los insurrectos rompi6 la rueda de la curefia de otro nuestro, emplazado en Tondo, y a su vez, los artilleros que allf tenemos desmontaron un caii6n de aquellos. Se ve que los rebeldes estan haciendo en los ataques de estos dias un verdadero tour de force para romper la Hnea, pero nada consiguen. Tengo noticias de que algun:ts fuerzas americanas han tornado parte en los ultimos conibates, sin duda para foguearse. Se calculan en mas de 600 las bajas que ha tenido el enemigo desde el dfa 14; por nuestra parte tuvimos I I muertos Y 39 her!dos. El drama creo que¡ toea a su fin. Sera cosa de cinco 0 seis dias mas, que podra tardar nuestra Escuadra.

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CAPITULO XXV 17 de julio. - Esta maiana muy temprano monte a caballo decidide a vi5itar nuestra Hnea defensiva, para satisfacer la curiesidad qUI! senda de ver los blocaes, las trincheras y, sebre to do, la gente que hereica-mente defiende aquellas posiciones hace cerca de dos meses. Conf0rme me alejaba de la ciudad murada se iba extinguiendo la 10breguez y la tristeza y apareda mayor animaci6n y vida. El trayecto que es preciso reconer tiene alge de romerla, y su aspecte ¡es guerrero, sl, pere el que mira al triunfo y a la gloria, 0.0- el que <contempla el abisme y la muerte. Y es que acerdn.dese a las trincheras, nos alejamos de las mujeres y de les niiios, de 1es lamentes y de las higrimas. Yo, que ne ,comprend£ nunca los actes humanos que no tengan come fin u objew la mujer '0 algo cen ella l"elacienade, comprende ahora que nes estorba esta bella mitad, porque ejerciende gran presi6n sobre el animo, 1'0 preocupa tristemente y resta y deb.ilita energlas necesarias para estes casos. Per ese va renaciendo la alegda a medida que 'Os aproximais a las posiciones avanzadas; alH todo es valer y desprecio de la vida; alH no hay mas que Patria. Per el camino me epcontre a cada paso artilleros y soldados in,dfgen{)'s, cazadores y marineros, conversando alegremente '0 canturreando; unos iban hac.ia Manila a comprar vlveres, y otros velvlan ya con ellos; a veces pasaban junto a mf, rapidamente, carretelas y -c'a rromatas, curos ocupantes, tambien soldados, tocaban la guitarra y entenaban coplas de la regi6n donde nacieron; carros y caballerfas cargados cen pipas de vina y sacos de arroz, indios de ambos sexos

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con bilaos de frutas y cigarrillos; asistentes llevando en tarteras la comida de sus amos; algun ordenanza con una carta del seii1;wito para la esposa 0 la novia, y convoyes de municiones; pero, lay!, tamhien tuve el triste encuentro de los que eran bajas para la lucha y altas para el hospital, de los pobres ya agotados por la fatiga de tantes dÂŁas y tantas noches, paJidos, demacl!'ados, extenuados por la disenterfa. L.\I!gue, por fin, a las posiciones avanzadas. iQue original y hermoso cuadro se present6 a mi vista! Delante, las trincheras, hechas con sacos de tierra hasta una altura de metro y medio pr6ximamente; a1 pie, los heroicos soldados que lasdefienden, unos vigilando atentamente las espesuras donde se esconde el enemigo, y los otros tumbados sobre el charcoso terreno, dormitClndo abrazados a su fusil como a reiiquia santa; los !pundonorosos artilleros, al pie de sus viejos canones, deseando que aparezcan gropos insurrectos para deshacerlos a metrallazos; mas a retaguardia, cajas de municiones, barriles de p6lvora, sacos de arroz, pipas de vino; a un lado, soldados que lavan su ropa; a otro, los que confeccionan el rancho, y todo esto presididQ por un huen humor, una chachara y un bullicio que encanta y anima. En ninguna trinchera falta guitarra ni cantador, y hay muchos que entonan admirahlemente las coplas de so tierra; todas las provincias de Espana tienen, representaci6n; se oyen tras de las energicas y viriles notas de la jota, 1a triste y dulce cadencia de una petenera 0 los soberbios arranqu~s del "Guernicaco Arbola" . AlIi me encontre, conversando con algunos sargentos, a mi querido amigo y companero de casa Pepe Primo de Rivera, que misteriosamente se me adelant6 en el viaje, y estaba reparti~do tabaco para los soldados; Ie acompafiaba el simpatico sargento-brigada de la guerrilla ~el Gobierno civil D. Pedro Alvarez, cuya voluminosa figura constitula un peligro para la seguridad personal de 1>05 que con el tbamos, pues presentaba magnifico b1anco. -Mire usted, mire usted, que soldado-me deda Pepe Primo Ileno de entusiasmo-; esta Hnea no 1a pasan aunque 5e est en atacando un ano. -jQue han de 'pasar, hombre!-replic6 Alvarez. -Estoy conforme, comp1etamente de acuerdo con ustedes, mientras no se arrimen aquellos puntos obscuros-'les con teste seiialando los barces americanos-. En cuanto aquellos caballeros 'se acerquen, cogen de enfilada y de reves todas estas trincheras y no duran ' una h~ra. Y asi 10 creo, porque nuestras trincheras tienen bastante cons ist encia para e1 fuego de fusileria, pero son insuficienteS' para sufrir

100


iel de una arti~~eda de regalar calibre, macho mas cuando los barcos. amer-icaAes JPueden arrimar-se a la playa impun,emente porque no te-· Jilemos can.GDes que puedan dispararles con em.cacia. Sihbaron alg·anas balas-no se si atrafdas por el blanco de mi. aMigo Alv3!F{!Z-, y quedamos mar-avillados de la rapidez con que aquellt@s sold adios que dormfan se levantaron y ocupa1,"on las trincheras, apereibiendose a la defensa; pared:i que habfan tocado un resorte que los mov£a a todos. jPebres heroes an6nimos! Cerca de dos meses llevan ya sin moverse de las trincheras y blocaos, porque no hay fuerza que los reIeve; batiendos€ todas las noches y sufriendo constantemente las indem.encias del tiempo, las torrenciales lluvias 0 los tropicales ra-·· yos del sol. Los pobres hanprocurado r,esguardarse con 10 que mas a mano · encontraban, y as! se yen unas trincheras con techumbres de nipa 0 ·, de hojarasca y otras con pedazos de cine 0 puertas y ventanas de las casas inmediatas; pero todo es inutil cuando el chaparr6n aprieta, encharca d suelo e inunda los fosos de las trincheras, cubriendo, de agU'a hasta la rodilla del soldado. Algunos he visto con los pies y las piernas hinchadas extraordil'lanamente. Toa:os ,esdn disentericos, consecuencia de aquella horrrble hume- · dad que pemetra ·h astasus huesos. Veis un soldado con los ojos hun- · didos, v,erdoso el cutis, extremadamente £laco; preguntadle por que no va al hospital, yos contJestara. "que aun puede tirar algun tiempo". Suogran esp1r.itu mantiene y anima sus desmadejados cuerpos. No · S€ oye una protesta ni una queja. iC6mo agradecen cualquier palabra. de consue[o que se les dirija! ... iEsta es la fecha en qlle el General en Jefe no ha visitado las trincheras para pagar, con una sonrisa tantos sacrificios, para reanimarlos con su preseneia y su palabr.a, para conocer las posiciones que·· OCllpafl nuestras tropas y examinar sus condiciones y situaci6n; para . c1!lmp~ir, en una palabra, 10s deberes que Ie impone su cargo. Aun: no conoce el General August! la Unea militar ,que defiende a Manila, y sus soldados esperan en vano uno y otro dfa. Pa(ece mcrdble, pero es cierto. . Destacada em las trincheras de Meypajos vi a la compania naval d@ 1a GQlel'riUa de San 11iguel, que manda el bravo aleman D. Guillermo paJrtier. Esos vohmtarios pidieron ser destinados a las trin- · cheras, y d~i estaa animados de un gran esp£ritu militar, que sostiene e~ emtusiasmo belico de ' Partier. Contestan con brIo y serenidad. . a los ataqtaes dd -enem,igo, y cuando este no hostiliza se dedican a coRStfuir trincheras y a mejorar las obras de defensa.

Ie


iQl!le bermosa iil.0,ta est1 dando ese

extr~jero, que, ind!gnado

p,rececdimicmtt0s de~ pweblo american'O, abandona su bmilia y S1ilS oegoci~s y empufi,a las af1JliliaS ea defeiilsa de un pabeU6n que no <es el SUY(i), pero lDajQ â‚Źuya so.mb.ra y leyes ha vivido y rea:lizad~ SlitS megoci0s! jQtl1 acabada leoci6n 1a qtl1e ha dado , PartieI' a (l)tros extramjeros <q,'l!le, (Como ef, hicllâ‚Ź-ro,B aql!lI sus capitales y hoy nos pagan ~on traiciofles y menosprecios! ... mate

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CAPITULO XXVI 18 de julio.

-Desde esta..noche se la J?uede esperar a cualquier hora, porque 'han de tener ustedes en cuenta que la Escuadra viene a salvar una situaci6n desesperada, a resolver un import ante problema, y vendd., .por 10 tanto, a gran velocidad. -Pues yo no la espero hasta el dfa 24 6 25. -Pero ajuste usted las singladuras; el dfa 10 sali6 de Colombo, :segun ha dicho el corliesponsal de La Estrella del Norte, y segun otras notlcias, que son verdaderas y estan de acuerdo con las oficiales, de que el dfa ~8 de junio sali6 de Port-Said; en ocho dfas puede ponerse en ,estas agua,s, si trae una velocidad :tpropiada a las circuns',tanclas. Esta conversaci6n se sostenfa en un grupo de diez 0 doce ptrso'nas, entre las que me contaba yo. Cuando mas animada era la cliscusi6n, lleg6 otra persona, que ,con cara funebre dijo: -jNoticia y mala! -~Que pasa?-preguntamos con ansiedad. -jEstamos perdidos! Ya no viene la Escuadra de Camara, por-que han destrufdo la de Cervera y ha capitulado Santiago de Cuba ... Aquello fue una descarga electrica; toaos nos estremecimos; pero .inmediatamente vino la reacci6n ante la misma magnitud de tan disparatada noticia, que tenia el sello de nuestros enemigos. Indudablemente, por elLos se h~bla lanzado la terrorHica especie para deprimir n uesuo animo. -jBah!-contest6 alguno de los presentes-, . Eso es un canard,

161 EJ Sitio <1.: M anila.-I I


y n~sotrQs 1.os espaiio1es nQ debemQs a~oger.lQ ni mencionarlQ siquiera sin. CQID₏ter un deli.to de lesa patna. . -Le digo a usted que 1a nQticia es cierta, y parece incrdble qu~, despues de la's CQsas que hem.os visto, tenga usted ilusi.ones en nada. En Espana no se preocu pan de nOSQtros, porque alH ven l.os tQrps. desde la barrera, y es muy Hcil y muy bonito. alardear de patriotismo clesde la mesa de un cafe y trazar planes, imaginar victorias y' prQdigar censuras des de e1 sa16n del Cfrcu1o; pero que llevemos nosotros mas de dos meses sufriendQ privaciones, aguantando diaria-' mente el fuego del enernigo, haciend:o penosos serviclos, en c.ons-tante inquietud y aiarma por nuestras fami1ias, sin tener apenas que comer; que estemos defendiendo con tanta cQnstancia este territ.orio por una Pauia que nos abandQna cobardemente ante la idea de que1.oS barcGS american.os puedan ir a bombardear los puertQS de la, Penfnsula; que paguen CQn tal egQlsmo nuestros constantes sacrifi. . Clo.S, eso ... , jeso es un crunen ... . -No se Qfusque usted; piense en las graves pa1abras que ha dicho y eQnsidere que pueden acarreade serios disgustos si llegan ~ ofdQS del Gobernador Gtmeral. • -jQue lleguen! Me tiene ya tQdo sin cuidado. Es preciso habhtr claro y que no se tap en con las generosidades de 1QS de abajQ 1o.S egQfsmos de los de arriba. -~Pero() usted C1i1ee en esa notida? ~Que tiene que ver 1a des-trucci6n de la Escuadra de Cervera, suponiendo que esto sea cierto,. CQn la vuelta de lade Camara? Si s61Q Ie hubiesen dadQ a usted la primera parte de la noticia, serfa verosfmil; pero la afiadidura de' que se han vuelto l.os auxilios que esperamos, es burda y la 'hace in-crefbie en tQdas sus partes. Desengafiese usted; ese amasijQ se ha hechQ entre lQS insurrectos y lQS americanos, secundados por l.oS ingle-s~s, para debilitar las energfas que nQS quedan y favQrecer y precipltar 1a t.om'3. de 1a plaza. Me separe del grupo, ncrviosQ y preoeupadQ, deseando indagarel origen y veracidad de 1a estupenda nueva, que yQ n.o podia creer, y hablando CQn unQS y otrQS, me convend que habia much.os, 1a mayor parte, que nQ la dahan credito. En .1as' esferas .oficia1es no s610 s'e ha negado aquel infaustc rumQr, smo que se ha afirmadQ, por e1 contrario, que hQy lleg6 un! cahlegrama del GobiernQ, fechado el dia 3, manifestandQ que la Es- , cuadra estaba pasando el canal. Es clar.o. NQ podia s'er de otra manera.

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:- * * 162'


Los viglas han. avis ado hoy que los americanos nos estan transportan do tropas y pertrechos de guerra a La's Pinas y Paranaque, entre cuyos puntos parece que fijan su campamento, pu~s se distinguen las tiendas de campana. Este es el principi.o del :fin; pasaran dos 0 tres dfa.s mas en preparativos, y despues entraremos en faena. jDi.oS mfo, dad pGderosas alas a nuestra Escuadra para que llegue a tiempo de evitar una catastrofe! ...

19 de julio.

Con el ¡estupor del h.ombre que siente desgajarse la rama que le suspende sobre el abismo, con .el abatimiento y profundo desmayo del que oye su sentencia de muerte, hemos sabido hoy la certeza de la noticia que ayer califidbamos de criminal embuste. . SI; la Escuadra de auxilio ha regresado a la Peninsula para. favorecer negociaciones de paz, por imposici6n seguramente del Gobierno de los Estados U nidos, no obstante 10 cual, la tercera expedici6n que este envla a Filipinas sigue su camino yaquI la tendremos dentro de pOce>s dlas; pero n.o es es.o s6lo: esa Escuadra que con tanta impaciencia y necesidad espedbamos se componla unicamente del Pelayo) del Carlos V y de los transportes Patria y RftPido) sin los canones de grueso calibre, y excusado es decir que si llega a Manila sufrimos un segundo desastre. 'Esta circunstancia nos abre los <i>jos, des'c orre el velo y pliesenta en toda su criminal verdad 1a inca.Iificable mascarada de nuestro Gobiern.o: la Escuadra de Camara sali6 para no llegar a Filipmas, para acallar exigencias de 1a opini6n y no para salvar de angustioso trance a unos miles de espaiioles que a largulsima di'stancia sostienen el sagrado pabe1l6n de la Patria. ~Que se ha hecho de 1a Victoria) N~tmancia, L epanto, Alfonso XIII) Haban,a, Cardenal Cisneros) Princ.esa de Asturias) Cataluna y .otros barcos que figuran en los Anuarios de la Marina, y cuyos n.ombres y condiciones se publica-ron por los peri6dicos de Madrid? ~Es posible que despues de tres aiios de a~unciada :esta guerra esten todavla en los arsenales y astilleros, durmiendo el suen.o del 01vido? EI Gobierno y todos l.oS que han tenido fa direcci6n de esta guerra respondedn ante 1a Naci6n, y jDios quiera que el pueblo, vilmente engaiiiad.o, se levante oomo un solo hombre para pedir l,a cabeza de los autores de tantas desgracias! Todas nuestras energlas, sostenidas artmcialmente por la excitaci6n nerviosa, se han paralizado; nuestr.o cuerpo estaba muerto 16.3


por tanta privaci6n material, por tan continuos combates; movtase s610 a impulsos de un esptritu grande que nos exig£a el cumplimiento de patrios deberes, porque la Patri~ a su vez, cumpHa los suyos para con nosotros enviandonos auxilios; el desengafio ha sido hor ible; ha matado todas nuestl"as esper,anzas, ha cortado la corriente • electrica que nos animaba aflojando m!lestro~ miembros, y la p05traci6n nos invade. El silencio mas absoluto reina en las esferas oficiales: ni una proclama que levante el esp£ritu publico, ni un arranque para reaccionar a la opini6n; nada. ·Todavta no saben muchos la fatal noticia; todavla no ha llegado a los heroicos defensores que hace tres meses se baten en la Hnea exterior. euando llegue alIi, ,q1:le vamos a decir al solda-do? Yo no quiero dar a nadie Ia noticia, por si acaso la ignora, y al mismo tiemPQ me causa profunda pena encontrarme todavia con alguna persona que confiadamente slgue haciendo c:Hculos sobre la liegada de la Escuadra.

Hasta lo.S enemigos parece que toman parte en nuestra desolacion y que tarnbien nos olvidan: d0S dfas hace que nos atacan Ia lfue-a de blocaos; pero, jay!, esta es la calma que precede a la tormenta, el descanso a que el gladiador se entrega para arrerneter con energfa, los preparativos ql!le el enem.igo haee para el auque decisivo. No espero que se acabe nuestro valor, ni que deje de luchar el soldado; pero de hoy en adelante faltara el entusia'smo y sera tibio el arnor patrio, porque la Patria nos abandona. El regreso de las naves espaiiolas supone la entrega de Manila. Hoy ha capitulado rnoralrnente la plaza.

mas

164


CAPITULO XXVII

22

de julio.

El dla de ayer nQ dierQn tampQCO senales de vida lQS enemigQs. La plaza disparo los canonaZQS de ordenanza coon motivo· del aniversario dd natalicio de la Reina Regente de Espana, a cUyQ saludo oontestaron los barc.os · extranjeros surtQS en la bahfa. Coon este motivo se dice por Manila que lQS barCQs am'ericanQs han enarbolaao bandera espanola para .saludar de la unica manera que podfan el cumpleafios de l~ Reina de Espana. Esta' n>0ticia la ha tra:i<ilo el Consul belga, que ayer almorzo coon el Almirante americano-, PU0S, comQ ya he dichQ, hay una constante cQmunicacion entre la plaza y 1a Escuadra que la bloquea y que . permite a nuestros enemigQs estar al corriente de tQdQ 100 que pueda interesarles, sirD que nosotros S<l!quemos ventaja alguna, pues solo sabemos 100 que a ellQs les conviene, para tenernos en continua alarrna y en continuas cQntradicciones. Pues bien, el Consul helga ha anadido tambien que el Almirante Dewey Ie r.og6 hiciera present·e al Gobernador General fa imposibilidad en que el estado de guerra Ie colocaba para hacer saJvct>s .por el cump}eanQs de la Reina Regente de Espana, pero que suponfa ql!le m.uy en breve cesarfan las h.ostilidades por el estado a que habfan llegado la<s cos as, que esperaba de un momento a otro la notific:lcion de l!llll armisticio yque de tQdos modos nada intentarfa c.ontra los espanoles ha.sfta .,que llegase el Mayor General Merrit con fa tercera expedi'ci6n de tropas. --.

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Esta tarde volvieron los insurreetos a hostilizar nuestra Hnea por Ia parte de Santa An.a. £1 ataque Eue arreciando a medida que entraba la noche y ha sido rucHsimo a eso de las once. Pas6 aqul.una cosa ancl.ioga a la que ya dije de lars trincheras de San Antomo: Abad: qlle ' nuestras tr-opas tJenlan una trinchera avanzada ,en el .camIno q~e va al pueblo de San Pedro Macati, Y co.mo ca.-reCIa de Importancla estrategica y s610 -servia f'ara que nos hiciesen oajas cualldo a ella se Ilevaban provisiGlnes de boca y guerra, pues los msurrectos la dominaban desde el montfeulo donde esta el Cementerio de protestantes, decidi6se que esta noche se abandonara, y apenas se inici6 el repliegue de la fuerza se echaron encima los insurreet6s y nuestrlOs slOlclados tuvieron que rechazarlos con un brioso ataque a la bayoneta. A las once y media ha cesado el fuego., y como. hay relativa tranquilidad, me voy a descansar, que buena" £alta me hace.

26 de julio. El crucero C(:)rrmoran lleg6 ayer y h:i! traido alguna correspond:mcia, pero ninguna noticia que ahere la triste situa€i6n en que es:tamos; antes, par el contra rio, de los telegram as avanzados que publican los peri6dicos de Hong-Kong se deduce que no es t~n fa.cil conseguir la sllspension de hostilidades, pu@s a ello se niega el GobiernQ de Washington si previamente no abdiea Espana de su soberania en las Islas de Cuba y Puerto Rico y cede alIOs EstadQs Unidos una de las Marianas, y como estas exig@ncias son exeesivamente fuertes, ha de costar mucho trabajo que las admit a la Naei6n espanola. En reSllmen, que el armisticio Hegara tambien tarde para fa ' salvaci6n de Manila. ~..

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Hoy a las doce, con mOl':lVO de la fiesta onomastica de nuestra Soberana, ha saludado la plaza con las--correspondientes salvas de ar;.. tilleda, contestando todos los barcos surtQS en la bahla, que prQdujeron un canoneo irnponente, no se si por la direcci6n del vtento. El ruido recordaba el aesgraciado dia del combate naval, y para que la ilusi6n fuese cornpleta. han empezado a caer proyectiies de caii6n en los arrabales y en la ciudad marada, com gran sorpresa de todo el mundo, que nQ podia suponer que los barclOs extranjeros hicieran la:s salvas con ' bala. Dos 0 tres granadas cay'€ron en Li Ermita, una en Paco v Cuatro en Intramuros, y de estas una de elIas penetr6 en el Colegi~ 0. Bea1&6


"'teno de Santa Isabel, causando desperfeetos en el techo e hiriendo, .aunque no de gravedad, a una niiia. -jHoy est:1n oombardeando desde la bahfa!-exc1amaban algunos con el estupor de la sorpresa. Pero no era eso: IDS proyectiles pr-ocedian del campo rebelde. Los insurrectos han querido tomar parte en la fiesta y han saludado con bala el sant.o de la Reina de Espana.

3 I de julio.

Hoy lleg6 la tercera expedici6n de tropas american as y hace dos .() tres dlas el General Merrit, que asume el mando supremo de las fuerzas de mal" y tierra. Parece rnentira que los arnericanos acurnulen tantos elementDs para batir a IDS que CDn tan pocO's cuentan. Seguramente que as.cienden a quince 0' diez y seis mil hDmbres los que ya tienen aquf, -con bastantes baterlas de tirO' rapido. Las tropas americanas siguen tOmandD posiciones a los dos ex"trernO's de la plaza, 0 sea en Pineda y Caloocan, pueblDs ocu padDs por IDS insurrectos tag aIDs. En lO'S pasadDs ruas hubo at~ques muy fuertes de IDS rebeldes. Durante la noche del 26 se reanud6 el ataque tres veces y en IDS ·dfas 27 y 28 llegarO'n a poca distancia de las trincheras, pero siempFe han , sido rechazados, y deben estar ya cDnvencidDs de que las Imeas espanolas no se pasan tan Heilmente. Los vIveres escasean cada vez mcts y ya han 1fegadD al soldadD las privaciones en este surtidO'. Una gran parte de 1a poblaci6n, 10' mismD civil que militar, O'pina que debe capitularse a la prirnera intimaci6n que los americanDs hagan, pues consideran irnposible la defensa, que ocaSiDnarla milla·res d~ vlctimas inutilrnente; por O'tra parte-anaden-la incalifica'hIe condueta de la Patria nO's releva de todD cO'mpromiso cO'n ella.

*** Un fuegO' graneacio, espantosD, empieza a oIrse con igual inten·sidad por IDS dos sectDres extremos de la Hnea; lO'S que dormlan se levantan sobresaltados, se visten de prisa y cogen el fusil 0' el $able; lDs focos electricos -de IDS barcos americanos alumbran a cada momento la ciudad murada.

167


-Este es ya er ataque de los americanos-dicen algunos. Y, en efecto, el fuego pareee distinto que otras veces y, sobre todo, mucho mas fuerte. A vanza 1a noche y nti. cesa ni decae en vigor; por fin a eso de: las tres de la madntgada va amortiguandose, pero tooa 1a poblaci6n sigue ya i[olquieta.

16i8


CAPITULO XXVIII 3 de agosto.

As! como en aquellos dfas de mediados del mes de jul~o) al le-.. · vantarnos nos hadamos unos a otms la' pregunta "Nue hay de h Escuadra?" y luego ibamos al Malec6n y registrabamos con ansiosas. miradas la bahia, en la Ioca ilusi6n de ver aparecer las naves es- · panolas, motivo de tod3!s nuestras conversaciones, cifra de boda£.. nuestras esperanzas y objeto de nuestros legftimos orgullos, aS1 tam- · bien n>oy, at saltar dellecho nos interrogamos: "~Que hay de la paz? ~', y como ante~ acudimos al Malec6n y esparcimos tristes miradas ha-· cia las Bocas con la esperal'lza' de ver entrar algun barco extranjero. que nos traiga el ansi ado ramo de oliva. jTriste suerte la nuestra. en esta desdichada guerra, en la que no hemos tenido un triunfo, una compensaci6n que nos abra el alma a purfsimos ideales y nos hubiera hecho mcls llevaderos los posteriores reveses! jTriste suerte ' la nuestn, que n<DS ohliga a desear la paz como el mayor de los bienes pos~bles) cuando la paz no es otra cosa que la triste confirmaci6n de ' nuestra desgracia, la inapelahle perdida del territorio que-' con tanto ahinco lhemos defendido . durante tres anos! Ahora sl que nos parece lejana la Patria y envuelta en las brumas del oceano, ahora sl que nos parece inmensa .1a distancia de 9.000 millas que de' por el peso de inmerecido'i deella nos separa. La Patria, abrumada . sastres, no se acuerd3!, no ·puede acordarse de estos hijos suyos, que sin espenn.za alguna en. ingrato suelo luchan con el ultimo resto de · energh em defensa de su sacrosanta bandera. Paede d6cirse que el dfa que se supo el regrew a la Peninsula de la Escuadra de Camara qued6 mora:lmente capitulada la ciudad de

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] 69\1


·Manila, y si la paz no Hega pronto esa ~apitulaci6n sed:. u.n triste hecno. Nuestras energ~as se a'caban, los Vlveres y las mUnlCIOoneS se lagoOUlil; tlooa res,istencia es imhiill. CGa de biles trincher.as, ju guetes de n.iii0S para la potente al1'tillerla eBlemiga; cOon cadaveres, qae el sentimiento de la Patria galvaRiza, en vez de hombres, para su defensa; atestada la ciudad de gente, segurOo blanco para 10s canones americanos, con 10s edifu.cios de madera, sin agna para apagar l~s incen,dios, sin una palahra de consuelo 1 sin 1111a esperanza de auxilio, ~qne 'hemOis de barcer sino relJl;<iir la plaza cuando l'Os yanq"lls, rota y rebasaaa la HFlIea, iBicien un. homhalfdeo? ~Que hemo·s de hacer ·sino salvar las vidas de tanta mujer, de tanto nino y de tantos enfermos, a quienes no podemos c('mdenar al fuego enemigo? Negra, ·muy negra es esta parte de mis Memorias, como negra, muy negra ,es la situaci6n en que nos encontramos y que ni aun descrita, rnojandG la pluma en sangre del allm a en vez de en tinta, podra ser "bien oOlllprelldida por l,os es~afiO'les de aUa, que predieaD imhiles resistencias cuando no sabeJJ.l de la guerra mas que lo que leen en l os peri6dicos, entre un sorbo de cafe y una chupada al tabaco.

Se ha confirm ado 10 que ya dije de que el dh F de julio bah<> 'un terrib~e ataque combinado de yanquis e insurreet<>s a las trincheras del sector de la derecha. No tom6 parte la Escl!ladra, pero ' las ·.d.escargas cerradas eran tan nutrida's y 100s canonazos tan constantes, 'que todos 10s vecinos de ManiFa se pasaron 1a noche en veh, temeroses que de un momento a otro tuvieramos al enemigo al pie de ~los muros. Los americanos han emplazado una baterIa de 16 cm. a UROS t.cuat11l0cientos metros de nuestras posiciones avanzadas. Los p~oyec­ ·tiles llegan ya a 1a ciudad murada, habiendo cafdo a1gl!lnas granadas ·-dentro de su recinto y pasado otras par encima de la Fuerza de 'Samtiago. Una granada explot6 en el clune1 del 73, situad'o en las Aguadas, matando a un cabo y €los soldados e hirielldo a varios; varias cayeron en 1a Remonta de Ani1leli'fa y 1:lna cerca del pabe116n del Coronel de E. M., situado tambien en las Aguadas y actua1menrte ocupado por la Compania de Voluntarios de la Tabaca1era Esta Compania ha sido trasladada hoy a1 convento de Santo Domingo. . Noelle tJerrib~e fue la del 3 I de jmHo; nl!lestfas tropas, que nunca seran bastante ponderadas por 10 m,u.cho que se meneen, resistieron va1erosamente y los enemigos fueron rechazadbs a las. cuatro 0 cinco ·horas de fuego. Hoy hemos sabido que los americanos tuvieron en 'esa intentona ocho 0 diez muertos y treinta y tanto'S heridos; las ::i. 70


bajas d~ los rebeldes no se conocen, pero han debido ser muy numerosas por la mucha gente que tom6 parte en el combate y por -el ahinco y osadfa con que se aproximaron a nuestras trincheras. Un "buen escarmiento que, sin embargo, no mejora en nada nuestra simaClOn. Todas estas noches han oontinuado los ataques a la Hnea, mas formidab1es que los anteriores, pero no tanto como el del 3 I ; el 'enemigo ha sido batido y escarmentado en todos ellos. Los norteamericanos siguen ag1omerando gente en Paraiiaque y en otros puntos, acopiando municiones y pr.eparandose, en una palabra, para una terrihle embestida, que dadas nuestras oondiciones sed. la decisiva si en ella torna parte la Escuadra. Algllnos, entre los que no me cuento, se han hecho cargo de un rumor re1ativo a que el General Merrit ha acordado suspender las operaciones sobre Manila hasta que pase el pedodo de lluvias. Aunque sea cierta esa resoluci6n no nos salva, pues no teniendo Vlveres para mas de veinticinco dfas tendremos que capitular y los americanos entraran en Manila sin disparar un tiro y sin tener una baja. La paz, ° ,1;t -suspensi6n de hostilidades por 10 menos, es 10 unico que puede detenernos en la pendiente por la que rodamos al abismo. Dios quiera que el Zlkjiro, que llegara de Hong-Kong de un mo'm ento a otro, nos traiga tan agradab1e nueva~ pues esto toca rapi<lamente a su fin. • I

4 de agosto.

Lleg6 e1 Zafiro y con el Zafiro sensaciona1es, pero poco agra,dab1es noticias. Por el pronto ha trafdo un telegrama del Gobierno en que este destituye al General Augusd de todos sus cargos y Ie ordena entregue el mando a1 Segundo Cabo D. Fermm Jaudenes. Esta destituci6n, por 10 extemporanea e inesperada, ha cafdo en Manila como uiu bomba y es objeto de acerb~s censuras. No obstante los desaciertos del General Augustf, que han contribufdo en no poca 'p arte a llevarnos al actual estado, todo el mundo estima que su relevo al frente del enemigo es un desaire que a nada conduce, porque la situaci6n creada ya no tiene arreglo y porque todas las Autoridades estan daiiadas de la misma falta de dotes de mando. La figura ·del Capitan General se ha hecho hoy mas simpatica, sobre todo por ·el rumor que corre insistentemente de que su re1evo obedece a que :cuando supo el regreso de los refuerzos habl6 claro al Gobierno,

171


diâ‚Źiendole que aqul se Ie creaba una situaci6n muy diffcil y quedeclinaba la responsabilidad de 10 que pudiera ocurrir. Esd. visto que eJ Gobierno sigue dando palos de ciego en las cuestiones ultramarinas y que a ultima nora s610 se acuerda de nos-¡ otros para introducir el desbarajuste en nuestras Autoridades. Hagase 1a vo1untad de los homhres, ya que serfa una blasfemia suponer' que aquf interviene la vol un tad de Dios. _

Otra noticia, mas desagradab1e attn que 1a primera, nos ha traldo el Zafiro: la de que no se ha firmado 1a paz ni pactaclo la suspensi6n de hostilidades, Es mas, se dice por todas partes que 1a gue-: rra continua porque 1QS EstadQs Unidos han impuesto condiciones tan duras que Espafia no ha querido aceptarlas. Corren tambien ru" a os por no se' " qUlen, d e gra VlSunOS trastornos en mores, propald 1a Peninsula, hahiendo quien afirma que se ha prodamado 1a Re-publica bajo la presiderrcia de Salmer6n y que el primer acto del nuevo Gobierno ha sido acordar 1a continuaci6n de 1a guerra. Supongo que esto sed. un infundio; 10 indudab1ementre cierto que hayes .que 1a paz no se ha hecho y que mo habiendose hecho Ie. paz vamoOs irremisiblemente a 1a ruifla. Los viveres estan agotandose, los restaU1!'antes y a1mac@oes pr6ximos . a cerrarse, y hast a 1a carne de caballo, -anica que hay, va @s ...¡ caseande. . Se habla estos dias de "t aligbnos cahildeos -que traen entre sf 110s jefes insurrectos, y hasta se dice que hay ciertas tendencias a venir' a un arreglo con nosotros, arreglo patrocinado por PlO del Pilar, que parece set que ha dicho que los rebeldes no han tomadD parte en los ultimos ataques y que las tropas espafiolas deben procurar' a toda costa sostenerse em las Hneas. Tambiefl aseguran que aquel cabecilla se ha comprometido a faci1itarnos carabaos y vacas al precio de 100 pesos los primeros y 140 las segundas.

172


CAPITULO XXIX ... 6 de agosto. Ayer y hOoY han sid0 dfas de abso1uta tranquilidad, no habien-dose clispara:do ni un tiro en las llneas. Esta calma viene a robuste-eer 1a opinion sustentada por algunos ' de que los insurrectos y los americanos n6 aadan muy acordes y que los primeros se van in.dinan,do a1 partido ele La 1ega1idad mediante la concesi6n de 1a autlonornfa. ' . Anoche ~1 Gen~ral Augustf resign6 el mando en el General Jau,den~s. Con este motivo el Subinspectlor de Ingenieros Sr. Rizzo, que mandaba ,el sect&r del C~ntro, ha pasado a ser Gobernador Militar .de la p~aza. Para ~l sect0r vacante el nuevo. General en Jefe ha de,.. signado a1 Gel1leral D. Ricardo Monet, nombramiento que ha producido peswo efecto, pues el ex Comandante general del centro de Luz611 ~e ha podido 00 flO ha tenido tiempo de sincerarse de los graves carg-osque contra el formula la opini6n publica por los ' su,ceS6S de Bulacan. Esta noche un casco ha siiJo ecftado por el temporal a 1a playa de Malat~. EI casc-o estaba cargado de nuevos, cebollas ypatatas, que 'ham sido recogidos POI" nuestres soldad~s. Se dice ¡ flue 1'05 C6nsules 0 a1guno de elIos estan trabajando para 'q we ~~ Oomodoro permita at General Al:lgustl y a su familia embarcarse para 1a PenInsula en atenci6n a no tener mando alguno. e rro, si esto es eierto, que e1 General August! hace mal en lrse, :pu~s come espaii01 debiera quedarse a correr les mismos peligros .que tOO9s ccrnmos.

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7 de agosto . . Esta cama, esta extraJfla suspensi6n 'de hostilidades eran engafiosas. Siem.pre 10 'pense aS1, pues acostumbFado aver desmoronarse· todas las ilusi-ones no podIa 16gicamente admitir que cuando cstames casi 'inermes fueran a r~alizarse nuestras locas esperanzas. En las prim eras horas de la tarde de hoy el enemigo ha dirigido. al General J aydenes un. mensa je 0 carta, que (h a trafdo un oficial del Cli'1ilcero lng16s Inmartalite, y que se halla eoncehi:do en 10C) S1-' gUHmtes termmos: "Cuartel general de las fyerzas te'r restr,es y navales de los Es-· tados Unidos, ba:h£a de Manila, Islas Filipin·as. •

I '

"7 de agosto de 18 9 8. "AI General en Jefe, Coman dante de tas t1:lerzas espafiolas en. Manila. "Sefior: "Tenemes el honor de comunicar a V. E. que las operaciones de· las fuerzas ternstres y navales de los Estados Unidos contra las defensa-s de Manila pyeden empezar en cua,lquier momento despues. de espirar el plazo de cuarenta y echo horas desde el reciho de esta comunlcaci-6n por V. E. 0 ma:s profltO, si fuera necesario, a consecuencia de un ataque pO'1~ vuestra parte. "Este aviso es dado c·o n objeto de conceder a V. E. oca3i6a d~· desa'lojar de la ciudad 'la gente que no sea combatiente. ))·M uy respetuosamente, M errit, Mayor General del Ejercito de los Est ados Unidos, Comandante de las fuerzas terrestres de los. Estados Unidos.-George Derwey, Contral'rnirante de la Armad.l de los Estados Unidos.-Comandante de lats fuerzas navales de liOs Estados Unidos de estaci6n en Asia." Al recibirse en el Ayuntamiento el anterior rnensaje, al cual .11;0 puede darsele el caracter de intimaci6n, porque realmente en 61 no se pi de la entrega de la plaza ni se hace siquiera una amenaZ:l categ6rica, se convoc6 por el Generall la Junta de Autoridades, ala· que llan concurrido todos los Generales residentes en Manila. Ignoro 10 que en dicha Junta se habra tratado, s610 se que el General Jau-denes ha dirigido esta tarde a los Jefes americanos la sig,ai.ente (;.ontestaci6n: "Manila, 7 de agosto de 1898. "AI Mayor General del E jercito y al Contralmirante de la Armada, Comandantes, respectivamente, de las fuerzas de mar y tierra'! de los Bstados Unidos. .

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"Senores: "Tengo el honor de participar aSS. EE. que a las doce y media del d£a de kOY he ,reeibido la notificaci6n que se sirven hacerme de.' 'fie pasado e1 pbzo de cuarenta y ocho horas pueden comenzar las , operaciones contra esta plaza, 0 mas pronto si las fuerzas de su mando faesen atacadas por las mias. ' "Como su aviso es dado con objeto de poner en salvo las personas no combatientes, doy aSS. EE. las gracias por los sentimientos hu-manitarios que han demostrado y que no puedo utilizar, porque, hallandome cercado por fuerzas insurrectas carezco de puntes dec' evacuaci6n donde refugiar el crecido numero de heridos, enfermos, mu jeres y ninos que se hallan alb erg ados dentro de las murallas. "Muy respetuosamente b. 1. m. de SS. EE., Fermin Jaztdenes Gobernador General y Capitan General de Filipinas." Ya sabemos 'a que atenernos; el enemigo se dispone a atacarnos, empezando 'las operaciones el dfa 9 a las doce del dfa. La plaza no>' se rinde sin combatir. La suerte estet echada y s6lo nos resta cumplir hasta 10 ultimo nuestr0s deberes y morir como buenos en defensa de~ territorio patrio y en defensa de nuestra propia honra. EI Capitan General ha publicado un bando (1). En este bando se di!ct<lin disposiciones generales limitando la circulaci6n de vehkulos, que q"eda prohibida por la ciudad murada; dividiendo la ciudad (m cuatro zonas; disponiendo que los conventos y las b6vedas de la plaza esten abiertos para que sirvan de refugio al vecindario no com--batiente y dictando feglas para la conducci6n de heridos. Esta tarde ,han empezado , a embarcarse muchas senoras y nin~s ' en ,los buques mercaJntes que con pabe116n extran_jero se hallan en la bahIa. Los que no tienen medios para hacer esto se disponen a refugiarse en los conventos. La ciudad esta desolada. S6lo se ven uni-,¡ formes, que Ie dan un aspecto de campamento. Las tropas estan en sU's sitios; los v01untarios que no tienen puestos en las Hneas avanzadas quedan acuartelados. Los bamberos se distribuyen en distintos: puntos y la bomba de vapor es colocada en la Puerta del Parian, tanto para resguardarla e 10 posible de las granadas enemigas, como>para que se surta de agua del foso. Todo el mundo espera, arma ~l h~az(), 1lOs terribles acontecimientos que van a desarroillarse en , Manila. J

(1)

Vease el Apendice.

175,"


8 de agosto. Nada nuevo ha ocnrrido. En las trincheras silencie absoluto, pues :no se dispara un tiro; pero oomo ya sabemos 1a causa de esa calma, ,-ni nos a1egra ni nos reanima. Los conVientos se hallan atestados de gentre, que busca entre sus paredes un problem.itico refugio; 1a ciudad esta triste, muy triste; -no sen los peligros de una terrible 1ucha 10 que contrista y abate nuestro animo; es el convencimiento de nuestra impotenoia y de nuestro abandono; es ei espectacu10 de lets mujeres que huyen des.-pavoridas, de IGS nines que juegan inecenternente, ajenos a los peligros que los amenazan; de los enfermos y heridos c1avados en el lecho del dolor y que sentiran aumentarse su fiebre y sus sufrimien' tos al pensar en el dla de manana. En l~s condiciones en que esta:mos,si la resistencia se extrema, habd en Manila una verdadera hecatombe, y ... no podemos rendirnos, estamos obligados a cerrar -el coraz6n a todos les afectos para qb1e en el se alee potente y SQberano el 'a mor a la Patria. Sig\le asegurand0se que Pf'O dei Pilar esta resueltamente a nues'-tro lado y que ha prometido caer sobre les , americanos por reta-guardia cuando ata'q uen nuestros Hneas: no Ie cree>. A las doce de 1a noche quedan temadas las u,1timas disposiciones -para d combate de manana. ÂŁ1 General Ja1;1denes con su cuartel ge:neral se ha trasladade a las boÂĽedas de San Agustfn; se hart Uevado ffianiciones a las Hneas avanzadas y a las ba't edas de la plaza. S\! han sefialado a los Jefes de los tres sectores los puntas por donde deben 'retirarse en el caso extrema de q'Lle no puedan s,ostenerse en 'las posiciones que -hoy ocupan. Se ha dispuesto tambien que, al rayar el dfa, esten en las murallas las fuerzas que han de atender a su de'Jensa. Estas fuerzas son las siguientes: Guerrilla de 'Voluntarios de '1a Audienoia, Voluntarios de Mindanao, Caballeda, Artilleda de 'plaza, Marinerfa, Cazadores, Regimiento num. 70, Secci6n de Voluntarios del Gobierno Civil, I,a companfa de la Guerrilla de San ~Miguel y Guerrilla de la Intendencia. Manana sera un dfa de horrores. jDios salV'e a Manila!

9 de agosto. A las once de la manana los buques americanos no se han mo"vido aun del fondeadero de Cavite. Se espera que el ataque empiece


,de una a dos de la tarde. La gente que no ha po dido refugiarse ni en los barcos mercantes ni en los conventos se dirige a las b6vedas .de las murallas, que por cierto estan encharcadas con las grandes Uu vias de estos elias.

*** Son las dos de la tarde; los bar-cos enemigos no han hecho mOvimiento alguno que indique un pr6ximo ataque; en las avanzadas no se dispara un tiro. Decididamenu, hoy no es la embestida. Acaba de llegar un nl:levo mensaje del enemigo; los que hasta -aqul han inf ringido todas las leyes de la guerra se deshacen a ultima hora en corteslas. El mensaje dice as!: "Cuartel general ,de las fuerzas Je mar y tlerra de los Estados Unidos. ~'Bah!a de Manila, Islas Filipinas, 9 de agosto de 1898. "AI Gobernador General y Capitan General de las Filipinas. "Sefior: "Los inevitables sufrimientos que aguardan a los heridos, enfer¡mos, mu jeres y nifios, caso de que llegue a ser nuestro deber el atacar las defensas de la ciudad murada, en donde se encuentran reunidos, constituiran, estamos seguros de ello, un llamamiento que -encontrara simpadas en un General capaz de ofrecer una resistencia ¡determinada y prolongada como la que V. E. ha desplegado des'pues de la perdida de sus fuerzas navales y sin tener esperanza de auxilio. "Por consiguiente, sometell1os ante V. E., sin perjuicio de los elevados sentimientos del honor y del deber que abriga V. E., que ra-cieado por tod~s partes como 10 esta V. E. por una fuerza que constantemente acrecenta, con una poderosa Escuadra ante <;u frente y 'p rivado de toda perspectiva de refuerzos y ayuda en caso de un ata.que, resultara un innecesario sacrificio de vidas, y todas las conside,raciones de humanidad hacen que sea de una necesidad imperiosa el que V. E. no someta a su ciudad a los horrores de un bombardeo. En su consecuencia, pedimos la rendici6n de la ciudad de Manila y de las fuerzas espafiolas a su man do. "De V. E. respetuosamente, M errit, Mayor General del Ejercito Ele los estados Unidos, Comandante de las fuerzas de tierra.-George Dewey, Contralmirante de la Marina de los Estados Unidos, Comandante de sus fuerzas navales en Asia." Se ha reunido la Junta de Defensa. Hay gran ansiedad en el pu-

177 El Sitio

de.

Manila.-u


blico por conocer sus resoluciones; la creencia general es que se rechazad . la intimaci6n americana.

Ha terminado la sesi6n celehrada pOl' -las Autoridades militares y civiles. Como nodo eI mundo esperaba la Junta de Defensa ha resuelto no rendir la 'Plaza, pidiendo, sin embargo, al enemigo un plazo de seis dlas para consultar al Gobierno y exponerle la situ~ci6n excepcionaHsima de ia ciudad. En virtu-d de este acuerdo el General J audenes ha dirigido a l.oS Jefes americanos la siguiente carta, qu~ croo llevada el C6nsul beJga, a bordo del crucero olym.pia.

na

"Manila, 9 de agosto de

I

89 8.

"AI :Mayor General del Ejercito y al Contralmirante de la Ar- · mada, Comanaantes, respectivamente, d.e las £uerzas de tierra Y', mar de los Estados Unido'S. . . "Sefiores: "Recibida intimaci6n de 5S. EE. para que obedeciendo a sentimientos humanitarios que invQcan, y de [os que yo participo, rinda esta.. plaza y las fuerzas a mis 6rdenes, he r€unid0 la Junta de Defensa, la que maniflesta flO poder acceder a su petici6n, pero que teniendo en cucnta las eircunstamcias excepcio-maHsimas que ,en esta phza COR-curren, 5S. EE. eXpO-nen, y yo, p0r desg,acia, tengo que reconocer, podrfa consultar a rei Gobierno si S5. 'EE. ot!.orgasen el plazo estrictamente necesaFio para hacerlo por 1a via de Hong-Kong. "Muy re'spettlosamente b. 1. tn. a 5S. EE., Fer-m1fn. Ja~ulenesJ Go- · bernador General y Capitan G~Reral de IMil'inas." Por hoy, pues, no hay ataque, ni manama probablement.e tampa-co, pues los americaflos no puedert emp~enderlO' sin contestar previain'ente a la petici6n que se les lilace. La gent!:e que se habfa refugiado en las b6vedas vuelve a sucasa, pero la tranquilidad no renace, pues-. esto no es mas " que un d cornpas 'e espera.

IO

de agosto.

I Ya se supo anoche 'p0r las mani.festacio,?-es verba)es d@ algvnos, Consules que los am€Plcanos' no est<l!ban dlspuestos a conceder eI 'plazo' que' el Gertenl Jaudenes les ' ha .pedido. La confirm<l!ci6n de'

178 '. !

. ~ ..


esta notlcla ofici6sa ha venido esta manana con una nueva carta de l!(!)s ]efes enemlgos, que diCe as!: "Cuartel general de las fuerzas de tierra y mar de los Estados Unidos. l' Bahia de Manila, 10 de agosto de 1898. "AI Gobernador General y Capitan General de las Islas Filipinas. "Senor: "Tenemos el honor de acusarle recibo de la comunicaci6n de V. E. de 9 de! cotriente, en la eual se indica su deseo de consultar COn su Gohierno con respecto a las excepcionales circunstancias en que se encucmtra la ciudad, siempre y cuando que el tiempo para ella Ie sea concedido por nosotros. "Como cOfltestaci6n a ella, rqspetuosamente informamos a V. E. que nos negamos a c.onceder el plazo pedido. "Suyos respetuosamem:e, 11,11 errit Mayor General del Ejercito de los Estados Unidos, Coman dante General de las fuerzas de tierra. Ge@rge ae-z.veYJ Gontralmirante de la Armada de los Estados Unidos, Comandante de las fuerzas navales en Asia." A pesar de esta negativa, el enemigo no ha atacado hoy ni salido de su inmovilidad, aun<que la calma no renace; hay ya quien afirrna que Mr. Dewey, sabiendo que esd. para pactarse un armisticio de un momento a otro, no se decide a echar sobre su concienci~. la responsabilidad de un inutil derramamiento de sangre. Ya verernos . J

12

de agosto.

Ni ayer ni hoy los americanos han emprendido las operaciones anunciadas a bombo y platillo. La rosa va ya picando en historia. Em. l.os Cl!lerpos de guardia, nuestros soldados y voluntarios, que de nada se preocupan, cantan al son de guitarras, que han salido de no se d6nde, capias alusivas a los yanquis que amagan y no dan. Realmente las intimaciones del enemigo son muy vag as y su actitud rnuy extrafia.

. **

~:

A las doce de la noche se sabe en San Agustfn que manana es

el ataque. Uno de los C6nsules, creo que el belga, que ha venido esta noche de eavite, ha dicho al General Jaudenes que el enemigo estaba ultimando los preparativos para el comb ate y que romperfa el fuego al rayar el dfa.

179


Po,r el Gobierno Mi1i.ttar se han dado 6rdenes para que las ÂŁu:er~as encargadas de la deiemsa de Las murallas estero. en sus puestos an-

tes de amanecet'; clos ca:f.iones de tiro rapido tmfilan el ca.mino cuhierto que conduce a [a Puerta del Parian y orros dos, del mismo sisuema, el de 1a Puerta Real. Yo, que quiero ver 10 que sucede manan,a pOF m.is propios ojos, tomp,r endiendo que el sectolF de ia derecha es el que ha 'de sufrir el primer formi.dable empMje del enemigo, pido perrniso a mis Jefes de la Guerrilla de San Miguel para agregarme a las fuerzas que gl!larnecen clicno sectrGlF. Me 10 conceden, y a las dos de 1a madrugada, 'despl\les de ccmtestar a muchos "quien vive", que :nterrum. pen de extuna mall era el sileneio de la noche, llego a la HIlC:i que 1'l1anda el bizarro Genera! de Brigada Vicente Arizmendi. En el seâ‚Źtor me e.lilter~ . ele que las obras de la segunda Hnea, empezadas en los ultimos dfas de rnando del General August! e interrullilpidas no se por que, no estaban terminadas; no se han hecho las mesetas de las trincneras y, pOl' consigu,i ente, 10S soldados no pueden tirar; tampoco se ha chapeado el flieD!1:ie de las mismas. Como siempre. . .

.0:

180

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CAPITULO XXX 13 de agosto. Mentirfa si dijera que todos los que nos haHamos en las posiciones avanzadas del sector de la derecha ve1amos sin zozobra c6mo la aun incierta clari-dad del dla iba poco a poco disipando las sombras de la noche. EIso1, que alln no se habta levant ado en e1 lejano horizonte, no iba por est a vez a iluminar risuenas ni tranquil as escenas, sino terribles combates. Todos esd.bamos silenciosos; en esos instantes de calma en que todavla no se ha disparado un' tiro, pero . en que wdos presienten los horrores que van a s,o brevenir, el hombre se reconcentra sobre S1 mismo y los recuerdos alegres de un hogar, que acaso no vuelva aver, vienen en oleadas a su coraz6n, confundiendose câ‚Ź>n la instintiva inquietud de la carne, que no tarda mucho tiempo en ser subyugada por el soberano dominio del esplritu. A las seis y media de la manana los numerosos canones revolver y los de grueso calibre que el enemigo tenIa emplazados a tresdentos . 0 cuatroeientos metros de nuestras posiciones, aprovechandose de 10 enmaranado del bosque, rompieron formidable canoneo contra mtestras trincheras avanzadas desde el Polvorln de San Antonio Abad hasta Santa Ana y especialmente contra el bloc:l.o llUmere 14 y los fortines 13 Y 15. Al mismo tiempo -roinplan las tropas americall<l:s y rebeld~s nutrido fuego de fusilerÂŁa contra la Hnea, siendo mas rudo el ataque en el grupo de Singalong. Contestado el ~1iego por nuestros soldados, generaliz6se el . combate en todo e1 sector. Las granadas calan y explotaban por todas partes; pero a pesar de las numerosas fuerzas que atacaban nuestras Hneas, defend idas escasamente ppr '!:lnos tres mil hombres, los enemigos no pujie- ,

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ron avanzar un pa:lmo €Ie terreno, siendo apagados sus fuegos a las OCh.o de la maiana. Durante toda es~a primer a parte del combate, fdizrnente terminado sin .que yanqais mi insurre.ctl{}s consigaieran ventaja alguna~ la Escl!ladFa americana ha permanecido inm6vil, pel"O esta inmov iiidad no engaiia a na:die: todos sabemos ql!le 'IDs baqa€s de guerra han de ayudar eficazmente a las fuerzas de tierra:, que sin €se p.oderoso auxili.o [>l:O tomarlaIil nunca nuestras posiciones, como no las han tornado hasta ahora, 11,0 .obstante su debilidad y no .obstante d · cam.sancio de las escasas tropas que las defienden. P.oreso el exito que a>cabamos de .obtener rechazando a un enemigo diez vec€s rnaYOF 1110 nos tmtus]asma; ese exiw estaba previsto y descontado, como previsto esd. que la derrota s.ohlie¥endd. cuand!(i} los barcDS enemigos, aproximandose a la playa, irnpul1lemente, pues con nada podemos ofendertos, pongan en juego sa formidable ar tilleda. Apenas terminad.os IDs p'lieliminares de la lucha dirigimo s waos ansiD£as miradas a 1a bahfa para ver si la Escuadra yanqui sigue en el f.ondeadero de Cavite 0. si, por d. cOFltrario, avanza hacia 1a c0sta; pero la copi.osa lluvia qUle cae en este momentl{} y que Dscurece €I horizonte no nos permite distinguir nada y, por consiguient~, sin saber Ie que pasa esperamos ac-ontecimientos arm a al brazD, ya qUi\: IDS enemigos n~ dan pGr aho,ra senales de vida. Aprovecho esta calma para> conslgnar m~s impresiones, que IgnorD SI podre cOliltinuar.

* ::. * Son las nueve de la manana; a esta hera, despejado el horizo.nt.e de las hrumars que lo. envolvlan, se nota en la bah£a mucho movimiento de bareo-s. PDr el pronto distr1nguese fondeado frente a Paranaque el cruc~r.o Charleston y en la bahfa los camoneros fetrel y Concord. £.1 l"esto de la Escua>d1i'a n.o se ve aun; debe de continuar en el f<0ndeadero de Cavite. Apenas. babfa aJ:i>untado este d@talle, un oficial m.e llama y me con rumbo a Parana:aue ,' enseiia la Escuadra enemiga, que naveO'a • 0 Vl€nen con ella el vapor Zafire> y otro de ruedas~ al paa;ecer cargadGS de. tr'0pas; IDS dos canoneros fondeadQs en. la bahfa levan anclas dirigiendose uno de ~nos aI grueso de la Escuadra y tomando el ctr~ ~a direcci6n de Tondo. Los barcos extranjeros esd.n tam1bien en m.ovimiento; IDS ingleses en la bah£a y l.os alemanes y franceses fren~e a TOfldo. A las nueve y veinticinco la Escuadra americana esd. frente a la cDsta de Par~iiaque, en ' Hnea de batalIa, marcha1'1do en cabeza el Olympia; wdos los barcos enarbolan banderas de cDmbate. Esto es ya CDsa decidida; de un momento a otro empezad. e<l bombar~

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¡deo de la linea. Lo que el Ejercito americano y las turbas katipuneras no han podido haeer 10 had. 1a Escuadra impunemente, sin tener una baja, pues los barcos se ha:llan fuera del angulo de tiro -ae las baterfas de la plaza y en la Hnea no tenemos mas que canones de montana y de bronce comprimido, con los cuales no podemos hacer nada a los cruceros enemigos. Vamos, pues, a ser aplastados por las granadas enemigas sin tener siquiera el consuelo de .-c-ontestarlas. !!.

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~.

Voy aver si puedo consignar aquf los tristes sucesos de esta ma.nana. Aunque son las doce de h noche, aun me dura la emoci6n producida por las terribles peripecias de un dia aciago para no sotros y temo que se me olvide algun detalle de 10 que yo mismo he visto y de 10 que he oido referir a otros testigos presenciales. A las nuevâ‚Ź! y treinta y cinco minutos (tuve la curiosidad de ver la hora) los barcos americanos Olympia, Raleigh, Petrel, CaUao y -el monitor M onth?r ey empezaron un energico bombardeo sobre San Antonio Abad y trincheras de la Hnea, arrimandose el Cmllao mucho en 1a complet~ -seguridad de que a nada se exponia, no pudiendo ser ofendido por ningun can6n nuestro. T an desamparado:; est.<\bamos de medios defensivos, tan imposibilitados de mandar ni una ba1a siquiera a los barcos enemigos, que estos disparaban con la misrna tranquilidad que si estuvieran en un ejercicio de tiro al blanco. jGloriosa hazafia digna de esculpirse con letras de oro en la historia de esta guerra! AI principio, sea por efecto de la lluvia, que aun cafa abup.dante, sea por no conocer bien el enemigo nuestras posiciones, casi ninguna granada hada dano por venir desenfiladas, pero rectificada bien pronto Ja punterfa, con la tranquilidad de quien nada teme, la formidable artjlleria de grueso calibre y de tiro d.pido de los barcos nos empez6 a enviar un verdadero diluvio de proyectiles, mientras que los canones de 16 cm. que los americanos tenfan emplazados en tierra enfrente de nuestras posiciones vomitaban tambien una llu"Via de metralla. Era preciso estar allf para darse cuenta del terrible especdculo. Se necesitaba mucho valor, pero mucho, para que soldados inermes casi, sin mas elementos defensivos que canones de mOntana y fusiles, resistieran en trincheras de sacos de arena, materialm-ente barriaas por la artilleria americana que las cogfa de enfilada y de reves. Aquello era verdaderamente un infierno: las granadas que llegaban basta Santa Ana, calan y estallaban por todas partes, haciendo her-vir el agua de ]a playa y la de los charcos formados por la lluvia;

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c:rda proyectil de los caiiones del Otym~ia abda un boqu~te en S~n Anton,io Abad; cada CaFL011laJZQ del mOnitor y de las batenas de tlerlia se Uevaba dos metros de trinchera. Todos compreRdfamos queera imposible sostenerse aUf Fflu'c ho tiempo, que eEa imposibl~ ~on­ tinuar tan des[gual combate, si c(i)1mbate puede liamarse a Ia Imposibl'e lucna de infantes, cansados y casi hambrientos, contra canones. y barcos, pDFque la infanteda americana, annque hacla nutridas descargas, FlO se deeidfa a salir de su's trinche·ras, esperando sin duda ocu-· par las nuestras cuando l'luestfos sotdados, FlO pudi(mdo resistir el fuego de 10 barcos, se vieran obligados abandonarlas. A las diez y media el forda de San Antonio queda casi destruido; l'os esoombros imposibilitam el juego de los canones de montana y de hronce que habfa emplazaclos em el fuerte y con los (males ya. no se puede d'isparar. En est:1S condicioFles, clestrufdas gran numero de trincheras, eFlDJada la HFlea por los canones, que no cesan de disparar, el Tenie11lte CoF(me1 Herna,n dez o'rdena, acaS0 algo premamrame11lte, la re'tiraaa: de todas las fuerzas de su mando, que constituyen el primer grupo del sector. La rettrada se hace com. alglilna precipitaci6n, pero no sin reti6rar hajo mtt:rido fuego de! enemigo y a brazo de artil1erQs y soldados del 73 las piezas de mQlltana, Ue.van dose tambien. la columl\l:l l'os cierres d@ los canones de bronoe comprimido, que por no p0€lerlos haja,r por la escalera hubo que abandonar en el fuerte. El ultimo que sali6 de este fue e! tel.egrafista T peninsular, q1ue 10 hizo desmontando y Uevandose los aparatos. Entetado el GeFleraI Arizmendi, que con su euartel general se' hallaba en el puente de Paco, de que las tropas del T (}nie1'lte Corond Hernandez emprenden la retiracla, rebasando la segunda I£nea sin ocupar sus posiciones, emr!a: al Coman dante de E. M. don juanViHarreal COFl orden termin ante de Qcupar dichas posiciones y de deFenderlas como sea posible para detener el avance de los enemigos. AI mismG tiempo el Gemeral Arizmendi eFlv£a' al Teniente Coronel de E. M. Sr. Aguilar, que l1eva an,Hoga orden ·de retirarse ocupando la segunda Hnea, a las fuerzas eh~l segundo grupo, q1lle manda el Teniemte CoroJllel SF. Martinez Alcobendas. Tambien manda al Comctndante de Artillerfa Sr.. Aguado a Santa Ana a eomunicar 12 orden a aquellas tropas de replegarse sobre Ja Concordia. Por -Ultimo, el General dispone que el batallon de Marineda, que a las oraenes del Teniente de navfo de primera dase D. Juan Riquelme ccupa el puente de Paco y el cru,ce de las ealzadas de Nozaleda y Herdn,.. se manteng~an en este puesto con la pieza de desembarco para proteger 1a retlrada de las fuerzas de Ia Concordia y Santa Ana y Ia de Jas d,d segundo gmpo, que deben coincidir en el referido puente d€" Paco.

a

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El Coman dante Villarreal detiene la retixada de las tropas del: primer grupo, y eon dos eompafifas ocupa las posiciones de la segunda lfn.ea hasta e1 puente de Ligeros, correspondiendo sostenerlas que hay desde este puente hasta Paco a las fuerzas del segundo grupo, a las que, como he clicho antes, se di6 orden de retirarse, oâ‚Źupa.ndolas. En este momento se oye una griteda desentol'lada; s..on los ameFicaftos y los insurrectos que han ocupado las abandonadas. posiciones de 1a primera Hnea y que celeb ran con estrepitosos h U1 ras su tacil triunfo, y digo Heil porq1lle rea]mente no tiene mucho me-rito oeupar posiciones abandonadas y ocuparlas sin dar un as alto,. sin tener una baja, sin haeer otra cosa que seguir el cami110 que la, Escliladra, ~in esfueJ.i'zo ni exposici6n alguna, les abriera con la boc<!, <de sus can:ones; pero esto no impedid. que manana alardeen de sa, victoria y aseguren haber tornado a la bayoneta las formidables posici(mes espaiiolas~ cosa despaes de todo muy natural en pueblos que careeen de historia militar y a los que cualquier escaramuza insignimcante emborracha y enloquece. Sa'd ronse dos companfas de Cazadores de la reserva establccida, en e1 euartel de Malate, que fueron colocadas en las posiciones de la-linea, consiguiendose con descargas eerradas detener el avance de los enemigos. Hecho esto se enarbo16 en la torre del convento de Malate la bandera convenida con la plaza para anunciar que la linea ~ haMa sido rota y rebasada. EI General Arizmendi, que con su cuarte1 general habÂŁa 11egadomomentos antes, sereno en medio del peligro, se situa en e1 puenteci-110 de Ligeros, -con gran exposici6n de su persona, pues se hallaba rucho punta perfecta mente batido por el fuego enemigo. Ya que nopoeHa 11evar a sus sold ados a la victoria por culpas que no son suyas, los anima con su energica y tranquila actitud y sostiene la situaci6n," en medio de nntridas descargas de fusi1erta y de incesante canoneo de la Escuadra, hasta cerca de las once. A est a .hora se advierte qUf~ e1 ememigo, rebas-a ndo sin duda las posiciones de la segunda !fnea por mas alIa del puente de Ligercs, aprovechmdose del bosque, ame-naza seriamente el flanco izquierdo del primer grupo. ~Que ha sucedido?, nos preguntarpos todos. ~No se habÂŁa dado orden al Teniente Coronel MartInez Alcobendas para que con sus fuerzas ocu-para esas posiciones que enlazarn con el puente de Ligeros? ~Habfa sido rechazado de la segunda Hnea por el enemigo? Bien pronto, sabemos 10 ocurrido en ese segundo grupo del sector, que no ocupando a tiempo las trmcheras de Ila segunda linea ha dejado un va dopor el qae se han desbordado amerieanos e insarrectos, que cubier-tos por el bosque que, como ya dije, no ha habido tiempo de chapear, rebasan ya nuestra ultima !fnea. Desde 'las seis y media de la'" ] 8!;


-manana las tropas del Teniente Coronel Sr. Martinez Alcobendas hah£an sido rudamente atacadas POF la artillerfa de tierra de l'Os .americanos y por numerosas fuerzas. americanas y rebeldes, que ha.dan nutrido fuego de fusi1erfa desde sus trincheras, a1 paso que nuestras posic~oliles eran tambien enfi1adas por los canones de la 'Escuadra. Sostuyose, sin embarg'O, el Teniente Coronel en sus posi.dones, conteniendo a l'OS asa1tantes hasta qu.e, viendo que en el pri.., mer gru po se iza'ba la sena1 de retirada e incendiados los b10caDs 13 "y 14, orden6 esta misma operaci6n a sus tr'Opas, haciendol,o primero la Artillerfa, despues de repetidas descargas sobre el enemlgo, y protegiendo1a 61 persona1mente con las fuerzas destacadas en la er, mita de Singa1ong; cometiendo, sin embargo, la imprevisi6n de reba'sar 1a segunda H1H~a sin ocupar sus po.siciones hasta e1 puente de Li'geros para enbzar con las defendidas por el primer grupo, como era natural y 16gico que 1'0 hiciera. Perdi6se con esto un tiempo precioS'O, y cuando lleg6 1a orden del General Arizmendi de sostener a todD trance 1a segunda Hnea, aunque las tropas, dando briosos at a'ques a 1a bay'Oneta, se apoderaron de a1gunas trincheras desalojando a los enemig'Os, ya no pudieron establecer ei oontacto ni impedir; por consiguiente, que americanos e msurrectos se desbordasen por las -espesuras del bosque, rebasando la ultima Hnea y a.menazando envolver el flanco izquierdo del primer gropo y el derecho del segundG. EntJerado €I General Arizmendi de todo 10 que suced£a, vicndo 'la comprometida situaci6n de sus tropas, amenazadas por los flancos, atacadas de frente por poderosa artillerfa y numer'Osas fuerzas ame:,ricanas .e insurrectas y bombardeadas incesantemente por l'OS bar cos, 'iba acas'O, a pesar de su reconocido valor y probada pericia, a disponer el repliegue general de tod'O el sector sobre Manila, cuando l1eg6 1a orden del Genera.1 en Jefe de que fuera a conferenciar a San Agastfn y de que todas las fuerzas emprendieran 1a retirada, por hallarse 'parlamentando 1a plaza. En este m'Omento la Escuadra enemiga suspende el fuego, suspen'7 ·si6n que nos evita d'Olorosas p6rdidas, pues a1 retirarnos esdbamos ·completamente a1 descubierto, y que ohedece sin duda 301 parlamcnto ·entablado. No imitan esta conducta las fuerzas americanas de tierra ni los rebeldes, que a mucha distancia aun de nos'Otros avanzan len·tamente, haciendo descargas cerradas. Esta actitud obliga a los Te'nientes Coroneles Dujiols y Hernandez a proteger la retirada" to.,... -man do cada uno el mando de una companfa y replegandose por €scalones, haciend'O tambien descargas cerradas, que detienen el avan·'ce del enemigo. En esta forma llegamos a la Luneta; en la baterb. del Pastel ondea la bandera blanca; suspendese el fuego de la columna y suspendenl'O tambien las tropas americanas, que ya, sin ser hosti~86


1i.zadas ni det~nidas por n9-die, en virtud del parlamento, avanzan d-p idamente POf Malate coOn handeras desplegadas. Error funesdsimo, que s6lo se explica por h coOnfusi6n en que se hallaban nuestras autoridades, es el cometidoO por el General Jau,denes al mandar Ique se enarbole en la plaza la bandera de parlamento en -vez de izarla en la Hnea de fuego, que era el siti0 oponuno. 'Si as! se hubiera hecho, las tropas enemigas y las nuestras ocup2.dan sus respectivas posiciones y no se darla el triste caso que se di6 de hallarse aquellas roOdeando J.a plaza antes de saberse el resultado del parlamento. 1..0 que mal empieza, mal acaba, y eso nos ha pasado a nosotros en esta guerra. En este instante aparece por 1a calle de NoOzaleda la cabeza de las columnas que se retiran por Paco; CoOrro alH y me informan que la retirada ha sido muy cliffcil, por hostilizar el enemigo el flanco derecho coOn bastante ahinco. En cuanto a las de Santa Ana, han teni, ,a o que sostener varios combates. El Teniente Coronel Sr. Victoria, que estaba en la Conc.ordia, repleg6se sobre el puente de Paro sin -que se Ie reuniese el resto de las fuerzas de Santa Ana, que al fin emprenclieron la retirada, siendo protegida por el Tercio de Bayambang, .al mando del Comandante Acevedo. A pesar de su valor admirable, no ha podido este digno Jefe impedir que los rebeldes, que se desbordaban por todas partes, coparan euatro secciones del Tercio de Bayambang y una de marineda al mando del Alferez de nav1.o sefior Sostoa, fuerzas que, halIandose en trincheras muy avanndas, no pudieroOn reunirse al grues.o de 1a columna. En el instante en que iba a entrar en la plaza oigo un ligero tiroteo encima de mi cabeza. Son los voluntarios de las murallas, que, ignor antes sin duda del parlamento, rompen el fuego contra las fuerzas americanas, que ya aparecen por las Aguadas. En seguida se restablâ‚Źce la tranquilidad y s61Q se oye ya alguno que otro tiro suelto y mas nutridos hacia Paco. . El combate, segun dlculos de momento, n.o5' ha c05tado unas 270 hajas, entre muertos, heridos y desaparecidos. Nada teng.o ya que hacer fuera, donde cada vez- acuden mas tropas enemigas. Con honda pena en el alma y Iagrimas contenidas en los ojos, penetro en la ciudad murada para presenclar el triste epllQgo de esta terrible tragedia. ~.

**

~Que

habfa sucedido en Manila? A las .once de la manana, vien-,do el Almirante Dewey lo¡s destrozos que su artillerla habll causado y que nuestras tr6pas abandonaban la 'Primera Hnea, iz6 en el cruce-

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roO Olympia la seiiaI de rendirse a discreci6n. A esta seiial contest6 la plaza enarbolando en 1a Fuirza de Santiago bandera de parlamento. No d~scutire yo a,quf si el Genera~ Jaudenes obr6 bien .0 mal al ped~r tan 'Pl1C),1llto la capitUllaci6n; indadablemente la resistencia podia haberse prolongado mucho; encerrados dentro de la plaza, el tomar' est-a a viva fuerza costarfa ar1:oyos de sangre a los enemig.os; pero no hay que perder de vista que tenlamos la ciudad llena de mu jeres, de nines, de enrermos ; que no podtamos esperar auxilio alguno, que' .._ 10s americanos habfan tornado ya posiciones 'Para un bombardeo y -'~ue, por c01'lsiguiente, la resistencia nos Uevada a UR4 hecatombe, y mas .0 menes pronto, pero pronto siempre, all'l'lismo triste resultado~ Pedido el parlamento, se erdena que el Coronel de Estado Mayor D. Jose Olaguer-Feliu, acompaiiado del interprete del Gobierno, General D. Carles Casademunt, salga al Malec6n a recibir alIOS parbmentarios nerteamericarios que desde el Zafiro~ en cuyo buque ha estado durante todo el comb ate el General Merrit, vienen a tierra en el vaporcito Trueno, flet3!00 p0r el C61!lsul belga, Me Andre... Desembarcaron aquellos en el espig6n d(d .puerto, donde fueJion recibidos por el Jefe de URa de las baterias, que los acompafi6 hasta que, sali6ndoles al encuentro €I Coronel Olaguer, este les condu jo. en coche a Santa Petenciana. Forman la Comisi6n americana el Teniente Coronel de E. M. de Voluntal''ios Mr. Charles Whittier y el Teniente de Havto Mr. :BJiumhy, ayudante del Almirant~ Dewey,. que traen en concepto de esco1ta dos mariner.@s de guerra armados, de rev6lveres. En Santa Potenciana esperaban a 1.os parlamentaries los Generales Jau denes, T ejeiro, Arizmendi, Almirante Montojo, y Au :litor Ge-· nenl Peiia. Todo aquelio estaba 11eno de Jefes, Oficiales y pai'ianos, que poco a poco fueron , iflvadiendo el despacho clonde se cdebraba. Ia co.nferencia; circunstancia que aproveehe para enterarme cit! to do. El Auditor general di6 al interprete Sr. Casademunt las bJises de· la capitulaci6n para que las tradu jera a lo.s Oficiales ameri:anos, que, eflterados de ellas, manif~staron que tentan que ser sometidas alai apr@baci6n de los Generales Merrit y· Dewey. Trasladaro.nse en seguida al Ayumtamiento, acompanados del General Jaudenes. A poco. lleg6 a las Casas Co.nsistoFia~es el General de' Brigada Mr. Green, que empez6 a dictar 6rdenes para la ocupaci6n de la c.iudad y a pedir cuarteles, que seiialaba ell un plano que tenta . extendldo sobre la mesa de despacho, y ql!le es igual al nuestro, aun·que co.n el membFete del MinisteriQ de la Guerra de los Estados Unidos. Al llegar aqu! no puedo menos de dirigir amargas censuras al Gen~ral Jaudenes: q?,e, d6bil hast.a el extrem.o, atUlFdido, no. sapo. re- ' vestlrse de esa dlgmdad oficial 'que mmca debe de ser abandonada

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por el vencido. La ciudad estaba parlamentando, y sin embargo, las tropas americanas campaban por tadas partes, faltando a las leyes de la guerra; hici@ron bien, ya que el General- Jaudenes no tuvo arran-q ue para pedir a los Jefes americanos que las retirasen, b:ljo !a amenaza de que las nuestras rompedan el fuego. Entre tanto iban llegando a la plaza de Palacio nuestras cclumnas; aquellos no eran hombres, sino cadaveres que se movfan por un milagro. En todos los rostros se pintaba la tristeza, la desesperaci6n; unos golpeaban las culatas de los fusiles contra las piedras de la ca'lie; otros quitaban los cerrojos de los mausers; poco a poco, voluntarios y soldados fueron des:filando hacia la Maestranza, en cuyo patio tiraron en informe mont6n sus armas. Las fuerzas que guarne>cen los sectores del centro y de la izquierda se retiraran manana tan pronto como las releven las americanas. Hoy, por las noticias que llegan) estan sosteniendo fuego con los rebeldes. A las cinco y media, despues de una inutil discusi6n entre los . Generales Merrit, Jaudenes y Tejeiro, en la que no hubo mas reme- .. dio que pasar por cuanto quiso el primero, pues nuestras tropas _estaban ya desarmadas y un Regimiento americano ocupaba la plaza -de Palacio, el interprete Sr. Casademunt ley6 en el sal6n de aetas del Ayuntamiento, ante mlmeroso publico y en medio de un silencil!> imponentemente triste, ~l siguiente Tratado preliminar, que apenas si se parece al propuesto por nosotros: "Tratado preliminar hecho en este dfa, con relaci6n a la capitu1aci6n del Ejercito espanol en las Filipinas, cuyos detalles seran arreglados por una Comisi6n mixta. "La capitulaci6n sera bajo los siguientes ttrminos: "Primero. Las fuerzas militares de los Estados Unidos ocuparan 1a ciudad y las defensas de Manila, hasta que en el Tratado dl! paz <entre las dos potencias beligerantes se convenga el destino final de la .ciudad. "Segundo. Siendo imposible para las fuerzas espanolas de la guarnici6n evacuar la plaza ni por mar, por falta de vapores, ni por tierra, a causa de los insurrectos, se conviene que toda~ las fuerzas en -pi~ de guerra capitulen can los honores de la guerra, conservando l.os Oficiales sus espadas, armas y caballos, y depositando las tropas las suyas en el lugar convenidol "Tercero. Todas las personas inclufdas en la capitulaci6n estaran .en libertad, siendoles permitido continuar vivierido en sus domicilios, los cuales seran respetados. "Cuarto. Las tropas espafiolas permaneceran en sus cuarteles a 'las 6rdenes de sus J efes. "Quinto. Las autoridades y las fuerzas de Norteamerica respeta-

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ran

cuidaodosamente [as personas, StlS viviendas y 1a propiedad de los. hahitar;ltjes de Manila y sus suburbios. "Sexto. ios Bancos, Sociedadtes de eredito, establecimientos industria.les y aquetlos otf-oS de fineclucativo 0 cayo 6bjeto $ea la hu-, manidad y civilizaci6n, contim.:taran ahiertos, de acuerdo COfl sus reglamentos, a menos que sean modifieados por 1a auto-ridad de los. Estados U nietos, segun las circunstanc1as 10 requieran. "Septimo. Los s1!Jeldos de los miliuff:ts y marinos seran pagados con los ,fomd0s del Tesoro espaiiol, SI hay basta.nte, y en el caso con1!:raF10, seran auxiEados eon 10 que les correspo~da a los prisi.oneros. ..t , . , ue gu~rra, segun su Jerarqmta. "Oetavo. La: repatriaci6n ole IlQs o:ficiales y soidados y sus familias sed a @xpensas de 1iQs Estados U nidos, asi e00mo tarnbien 1a de' los oficiales indfgenas que deseen volver a Espana. " Nov:eno. -Las nropas indfgenas sed.n licenciadas. " Decim<:>. Las auttH~idades de los Estados Unidos haran tod-o 10 posible por garantlzar y asegurar las vidas y propiedades de 1'Os habitantes de Manila.

"El artIculo 7.° se enten,dera que es s·olamei'lM para cubrir las raciones y recur'$os necesar.ios, los cuaies seran determinados por 11Os' Estados Unidos. "Relaciones compietas de los soldaGil(t)s por Cuerpos seran entregaelas a las autoridades de los Estados Unidos, aSI como tambien fistas. completas de 1a propiedad p-4hlica y almacenes del Estado. "La cuesti6n de 1a vuelta de 'las tr~9as a Espana: y los gastos que por el~a se ocasio1il:en, seran aeterininardos pOl.' d Go-bierRo de los Estacl.~s lJnidos en Washington. "Las armas seran devue1tas a los solclados cuando deterrninen las al:ltoridades de los Estados Unidos,. y 10S Ofieiales ,J:;onservarall las sl:lyas. " Wesley 111errit, "MaY0r GenelTa!l U. S. A.

" F ennin ] a·u.4enes. "

Sa:H del Ayuntamiento, y sin saber por que me dirigf a 1a Fuerza de Santiago, llegando en td preciso momento en 'lIue la bandera espanola era arriada, enarboIa.ndose en sm ·sitio el pahe116n estrellado. Yo no' puedo exp1ic·a r 10 que sentI; se me doblaron las pier-nas ; .un.a ~ub~ de fuego me pas6 por 1'Os o;os; contuve mis la,gliimas, reprIml mIS soUozos; para que no se mezclaran a Jas carcajadas y hu-

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rras de los aF.f).ericanos, y hut precipitadamente de aquel sitio maldi-toO. EI sa:crincie esta cOflSumado; la augusta ens~na que clavara en la.. ciudad de Manila el robusto brazo de Legazpi, ha cafdo al suelo desde las debiles manos de nuestras autoridades. Ya no contengo mi. llanta. ~Para que? Lagrimas de dolor quisiera yo que brotaran de. los ojos de tcclos los espanoles; ligrimas de sangre, que al correr por las mejillas 'las enrojecieran, como las enrojece una bofetacla; HgrimaS de vergiienza que despierten las al parecer dormidas energfas de la naci6n espanola y que hagan que este pueblo, que ha dado sin regateos la sangre de sus venas y el dinero de sus arcas, tire al suelo de una vez esos fdoll()s de barro que Ie han llevado a toclos los desastres, a todas las vergiienzas. jPobre Espana! Pero no; Âąuera debilidades; que h generaci6n que ahora empieza . a vivir y que ha visto c6mo las que Ie precedieron han llevado la. nad6n a la ruina, se una como un solo hombre, y con el recuerdo de la derrota ,en el alma y la vista fija en el porvenir, tenga una sola.. aspira'c i6n a,l solo grito de jPatria, adelante!

119:1



A .PENDICE

El Sitio de

Ma,~ila.-I3


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ORD,E N GENERAL DEL "D IA 29 DE MAYO DE 1898, EN MANILA

Jefes de linea

Jefes subordinados

PUERZAS

ITotales

Observaciones

300 ~ Para la Ifnea y frente at': 600 1.000 I tillado de la plaza. 100 100 ~ 100 500 ~ Para el resto de la ciu~ 100 ~ dad murada. 200 I

I

hombres

de

.. Niimero

Tres companfas Cazadores n~m. 4. , . . . Remonta, A~!. de P!a~a y Ma!"ma . . . .. .. Una ~ompanIa Reg'I mIe~to num. 73 . . .. Una Idem Cazadores num. 10.. . . . . . . . . Un a fdem Reg'imiento num. 70... . . . . . . . Una idem Regimiento num. 69... ..... I Dos idem LeaIes voIuntarios ...... " .. .

I

CIUDAD MURADA Y LINEA DE SAN ANTONIO ABAD AL MALECON DBL SUR

Distribuci6n de fuerzas y mandos para atender a la defensa de esta Capital en el caso de ser atacada por mar y tierra.

II I

I

Ii Ttr.. C. Golo~ GeneralAriz~ bardas,. .. d' Tte. C. Bomen 1. •• ,. net.. . . . . .. Cte. del 4.°..

.

100 200 200

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I

500 1 Para el,servicio de dos batenas.

LINEA DBL MALEC6N DEL NORTE A VITAS . Una compania de Carabineros ....... . I . General Pa~~ Tte. C. San Una fd em Voluntarios pampangos ... . . lados ..... ( Martin ... . Una idem Marinerfa .. ............... . Artillerfa de plaza . . .................. .

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Jefes de I,i nea Jefes subordinados

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P U B eR Z A S

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':1 400

LI~NBA DE MUNTINLUPA A TAOUIC

- -j T.te. C. I'erez{ Ter~~o Bayarn,ban ..•. : •... "

Cte. Ca,l cedo Ouard..la Clvd..

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Cte. ,p'r i'e't:o,! . { 'B a,t a'H 6n de Quia's .... .. ••........... . ..', 300 150 ,

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480

LINEA o.E TAM'BO:RONG, MiONTALBAN Y MA,Rl,QUINA

uua,vdl,a CIvIL ...........•............,

~O's' e t<e ..•. .: ~ata' II'I' ~lil ~~~ad.o'res Ru.m. 10 . .. . .....• . I lOO

900

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Numero .

de-

2(i)C),

2(!)(!) }

I 509 ••• \

t :I NEA 'OlE M ildN TIN LlH!>A A .L AS P,lN!AS

i

LINEA DiE F'ORTINEB Y BLOCAOS

______~______~~____________~__________ Ihombres

j

C. Rosale S "' li,te. C. Ca'l- CiO'€oeo'Rl,pa,f,i,fils C&zadores nlu m. ij,. ... GraI. Rizo.. • der6n ..... : Dos 11 .. .. ; .... : ...•. Tte. C. MaFl'- , Dos ideAiJ I~egl'mllent:o Rum .. 70 ...... . . :' . ZaRares... ,

1 . ' II

Tte. C. AMa, V I lillr +a.rl1 'o e. I'azar. ' 65{\ +f 'I r -!, T res- COAiJ,AS. ,.s A · 'A d','a ua: '.- \!I }, Clfl·~t 0, VicI I lilez . eo--''''' -'(}J'u1 .Dos i~em Calza,dO,f(i~S g"U'litl,. 2 ••...•. i • • • 2())O . belild-as Tte. C. B~~R~ C(lz&o,?1fes. lil;NIJilil. 10 ••... , .•.....• , •.. ', 1 S(!) » O . Ouarcll,a CIVI l: ....•............... , , . . . C(1,'""I'lil' •• ,t oria lil 0 Pintos., .•... ,

,

Cnel. Lasa,I,a.

Cnel.. Carb6. {

Qb.$erV(icio!'le8


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Jefes de lfnea

Jefes subordinados

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I

FUERZAS

Nuiilero

d.e

hombres

Tota,··r

1

1

i

100

200

1

-

1

-

,

Observ~ciones

LINEA DE ENLACE ENTRE SANTA MESA Y SAN JUAN DEL MONTE

ZONA. DE SAN JUAN DEL MONTE

Tte. C. Alberdi . . ........ . . 1 Bata1l6n de IngenietJos ; ..... . ......... 1 100

,

COLUMNAS VOLANTES

ARRABALES DE MANILA

100

100

100

i

100

5 . . .. .

Una idem del Regim iento num. 70 . . .. .

200

I Un a compa'fiia Cazadores num.

Dos idem Cazadores nurn. 6 - . . . .. . .. . 200

1

I

En Puente de Paco En el Puente de Espafia y paseo Magallanes. En el Puen te Colgante, Estado Mayor y Hospital Central.

i

500 500 ~ Se alojara en el Cuartel 200 de la Luneta. 400 ~ 500 ~ Idem id. en el de Ma~ 100 late. 600 1 600 1 Idem id. en el de Meisic .

Tte. Coronel Colorado ..... 1 Bata1l6n Cazadores num . 10 . . ........ - I 200

-

Tre. Coronel Hernandez .... ~ Tres ,Compafiias ~e .Cazad~res num . 4. , .Dos Idem del Regimiento num. 75... . .. Tte. Coronel Soro . . . . .. . . . ~ Cua)ro idem Ca~a~ores n~m. 11 . . . . . 1 Un Idem del Regimiento num. 70 . ... .. . \ Tte. Coronel Iglesias . .. . .. 1 Batall6n Cazadores num. 5 .• . . .. . . . - . .

1

I


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00 I

,

, ,

-

Jefes de Hnea

Jefes supord,f.nados

, -

FllBRZAS "

I nl ' S an M' , Tte. pO'1lC •• ._, ,Ri~~ . . V O'U 's-rIOS , l'gl!leI' . . . . . . . . '. . . . . . •

ua -

~

Tres cOliJil,p,afri fras 'B afall(m Provisiolilg,I', .

.

'

I

d,e

Numero'

250-

hombres I

.

500

I ,

-

Tota1les ,1

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.

Ay~la, .

-

Observac'i ones

.

25(!) , En eI Paenfe de

' 500

"

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" , }i>:r isio lil:es M:rI':i'1&Fe~.

a

,

:

, 150 { Eo, I,a ,Es, c olta y C&sa , de fra,", ~ d 1' C asulO " Cuel.O. Fran-- Ctan, gata CO'nCRa. . 'e rn''1\'1 ae .............. .. .. ta(i) , CO'rreos. ,, ciSCO' Pi n ~ CaU,e del Rosari,o y pIa.. tos ... . .. . . _ I !';! , _.-'" a Zil Ciidderon, , Tte. Vi.ct0-~ c· , I'u nt'a ri'o s ... . .. 560 5(;)'0 ' Santa Cruz. riaC. .... ,., . l'Iil'CO co,m , p(l"I'l fta~s d:e VO'1 , Quiapo. Sa,m,paI.oc. TO:1do. I , Presidi·o y Circel. . . 'Ret.~n en et TecUro Zo~ .


...... ~

I

CUARTBLBS

Numero

d.

homer!!.

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.. . ... I 400

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100

100 100 750

I

Totales

I

I

{

.

Ob servaciones

-

~

. Prestando sus servicios.

a

I

II

Para fracci o nar entre las columnas de ataque si 400 { se juzga conveniente. Idem fd. fd. Y esiablecer ' » servicio de comunicaciones .

750

100 200 } 400 100 600 100 200 100 1.300

I

CUARNICI6NES DB LOS CUARTELES Y RESERVA FUERZAS

RegJmiento Artillerfa Montana .... . ..

Regimiento Lanceros num. 51 . ....... . ... . . . } Escuadr6n de Voluntarios • . .• . . . t • • • • •• • • • • Regimiento num. 72 .... . ........ . ... ....... 'I. Melalc .... . .. .. { Voluntarios pampangos . . . . . . . . ..... .... . .. Gufas y transeuntes ....•.... ... . . ... . .. . .. , I Batllll6n de Marinerfa . ... . .. .. . . . .. . . . ... . . Del Cuerpo .... . •..... . ....... ....' . " . ... . . Regimi,e nto num. 70 .... . .. . ...... .. . .. . .. . . Regimiento nllm. 73 ••. . .. . .. .... . ... .. . . , . , Bata1l6n Cllzadores nums. 4 y j 1 . . .. . . . .. . . . Reglmiento ArtilIerfa ........... . ..... ... . .. BataIl6n Cazadores ntim. 1 . .. . .. . .. . . . .... . Guardia civil Veteran a ..... , ... . . . .. ..... .... Galler~ ... ..... Carabmel'os . .. Fortfn ..•. . • . . . Luneta .. . ... . . Malate ... . .. .. ' Espana ........ Tabacalera .. . .

~



BANDO ,Don 'FERMIN JAUDENES y JAUREGUI, General de Division, Gobernador y Capitan General de Filipinas y General en Jefe de su Ejercito~ en prevision de la alarma que pudiera causar en este vccindario las operaciones que a partir de las doce y media del dIa 9 del actual puede comenzar el enemigo sobre esta plaza, y para garantir todo 10 posible y en lugares a cubierto a los habi'tantes de la ciudad, ORDENO Y MANDO: LO

Queda dividida la ciudad murada en las cuatro Zonae; si-

gUlentes: Primer a Zona.-La limitada por las aceras izquierdas de las calIes ' de Hospital y Cabildo, hasta la casa flum. 23, que hace esquina con la calle Real; acera derecha de dicha calle Real, desde Puerta Parian hasta la cas a num. 32, y recinto murado desde Puerta Parian a Maestranza de Artillerfa. Comprende esta Zona, ademas de las aceras de Jas calles ya marcadas, los trozos de las de Anda, Beaterio, Santo Tomas, Aduana, Magallanes, Solana, Legazpi y San Juan de Letdn, comprendidos entre los Hmites fijados. Segunda Zona.~La limitada por la acera izquierda de la calle Real hasta su encuentro con la de Cabildo, en la Casa-Comandancia de Ii Veteran a, acera izquierda de la calle de Cabildo, desde la casa nlimero 25 hasta su terminacion en la muraHa, y esta desde clicho punto a Puerta Parian. Comprende las calles de San Francisco, San Juan de Dios y trozos de las de Solana, Magallanes, Santa Potenciana y Victoria, comprendidos dentro de los lfmites fijados :l. esta Zona. Tercera Zona.-Se halla limitada POr la acera izquierda de la.

201


calle Real, comprendida desde la de Cabildo y la Puerta de Santa Luda, recmto desde Ia misma puena ya cit ada hasta el baluarte de Santa LacIa, y acera derecha de la calle de Cabildo desde la calle Real basta su terminaci6n. Com.prende lIas calles de U rdaneta, San Agustin, San Jose, Basco, Santa Luda y los trozos de las de Santa. Pot~ndana, Victoria y Palacio, desde la de Cabil<!o hasta su termmac16n las clos prirneras y desde la cane Real hasta '1:1 muralla la ultima. Cuarta Zona.-Tiene por Hmites las aceras derechas de las calles .de Hospital y Cabi1do hasta la casa numero 18 esquina a la calle Real, acera derech:1; de est a desde dicho punto, cas a nUm. 34, hasta su terminaci6n en Puerta de Santa LucIa, y muralla ,de la misma 'hasta su origen en 1a Real Fuerza de Santiago. Comprende las calles de General Moriones, Santa Clara, Claveda, Postigo, Arzobispo y partes 'de las de Beaterio, Anda y Palacio, dentro de los limites antes :fi.jados. 2.° Los ancianos, enfermos, mujeres y ninos, habitantes de 1a primera Zona, caso de un bombardeo, as! como los que entren por las puertas de Santo Domingo eIsabel II, podnln guarecerse en los ,s6tanos y poterna'S de 1a m1:1ralla comprendidas entre 131 Puerta del Parian y la Maestranza de Artilleda. Los de la segunda Zona y los 'que entren por la Puerta del Parian, en el frente de la muralla eomprendido desde esta puel!'ta a1 ba1uartle de Santa Luda inclusive. Los de la tercera Zona y los <!J.ue entren :par P1:lerta Real, en el espacio .comprendido en 1a mura:lla des de dicha puerta a la de Santa Lucia y b6vedas del Convento e iglesia de San Agusdn. Los de la euarta Zona y ,los que entren por la Puerta de Santa Luda y el Postigo, en ellienzo de murailla desde dicha Santa L1:1da hasta la M~estranza ,de Artilleda y ruinas del antiguo pabcio de Capitan£a General. 3.° Desde las ocho de 1a manana del martes 9 queda prohibido en absoluto el transito de toda dase de earruajes y tranv£as en el interior de 1a ciudad murada, aSl como en la de extramuros, desde la margen derecha del do y el espacio comprendido por el camino de las Aguadas, hasta e1 paseo de la Luneta, sirviendo esta lfnea de ciraInvalaci6n como Hmite del transito. Quedan exclu£dos de esta probibici6n las autoridades militares, el Gdbernador civil, el Alcalde, el Arzobispo, el Juez de primera instancia de guardia, Medicos y Sacerdotes que conduzcan 5u Divina .Majestad. . La Guardia Civil Veteran a y la Secci6nmontada de ella queda encargada del ex acto cumplimiento de 10 dispuesto en este artleulo. 4·° Hasta dieho d£a .y hora, la entrada de carruajes sera desde el toque de diana a1 de silencio, por las Puertas de Isabel II, Real y Santa LucIa, siendo la salida por las del Postigo, Santo Domingo y


Parian. Fuera del tiempo indica do, s610 estaran abiertas para el servieio publico las Puertas del Parian, Real y el 'Postigo de 130 Puerta de Santa Luda. Este ultimo para el servicio de las fuerzas de la linea del frente de mar. Desde el dfa 9 s610 estaran abiertas para el transito las Puenas Parian y Real, sin permitir, sin embargo, la salida de la plaza. S El derre de las puertas de la plaza, en el easo extremo de tener que levantar todos los puentes, se anuneiara al vecindario por el toque de rebato de _la Catedral, que sera repetido por las demas parroqulas. 6.° Las iglesias y eonventos de intramuros y extramuros estaran abiertas dfa y noehe y admitiran en su reeinto a euantos se l'efugien en eRos. 7.° Los heridos seran reeogidos con la mayor rapidez posible por eamilleros de la c1ase de paisanos, que facilitara la Administraci6n,. Militar a cada compania 0 unidad, a las que acompafiara una dase 0 individuo de la misma pa~a cuidar de que sean conducidos acto continuo al punto mas pr6ximo, volviendo sin detenerse a sus puestos, despues de recoger una camilla vada a cambio de la que dejan can el herido. 8.° Para atender a este excesivo numero de camillas que pueden ser necesarias, el Parque de Sanidad distribuira todas las que tiene entre las diversas unidades, puestos de socorro y hospitales, en numero proporcional a las necesidades de cada una. 9.° De los puestos de socorro pasaran los heridos al hospital m~s pr6ximo que ordene el medico que haya practicado la primera cura. 10. El transporte de heridos aesde los puestos de socorro al hospital se verificara por medio de los furgones para enfermos que a intervalos convenientes saldran de los puestos de socorro, ademas de un numero prudeneial de camilleros para el transporte a hombro de los que por la delicadeza de su estado exigiesen este cuidade. Los puestos de socorro estaran situados en Puerta del Pari an. Puerta Antigua de la Aduana y Real Fuerza de Santiago, y los hospitale,s en los edifieios siguientes: Seminario Viejo, San Juan de L~­ tran, Escuela 1vlunicipal, Santo Tomas, San Juan de Dios y Beaterio de la Companfa de Jesw. II. Como medio mas seguro para evitar los efectos del bombardeo en el caso que este tuviera lugar, se invita a los habitantes no combatientes de esta ciudad a que se refagien en los barrios extremos bajo la proteeci6n de las fuerzas que guarnecen las Hneas de defensa, pudiendo retomar terminado el bombardeo 0 cuando dichas fuerzas reeibiesen orden de eoneentraei6n. .0


u. Todas las aut<>&.ridades permamecerll,n en sus PUest0S, aSl como los 'feniemtes de Alcaldes en sus respectiv<>s d~stri1ios, at;endiendo c(),~ b mayor eficacia al 3ililXililo de herid0s, extil1lcion de incendi.tvs y coaserv~~i6n del orden. Las flllerza:s de V o ]uRtaJl"iiOS so,b re las al'mas y el ~omple1i0 ~de tlcdG su persoFlal se ·mantenddn en ll:>s puest<>s (}ue tjenem des~gIliados por 1a al!lt<?>.ridad militar, esperamdo 6rdenes. . 13. U>s Alcaldes de harl"io y 1a Guardia Civil Vetera:na sentn los encaJl!"gados de exigil' el cumplimiento de cuanto se orde.lil:a. 14 y ultimo,. Las clepe:lil!deneias y Ouerpos militares, civiles 0 .particulares que tengan efect~s, muebJes, cajas, Qocmmentaci6n, e1::cetlera, etc., depositados en las bovedas y P'O'ternas de laoplaza 0 en l~s convcmtos, lQS evacuaran en tocl:o-el dta de manana lunes, sin excusa ni p.r etexto algl!lFlo. to ·cque se mace ;publico POl' el presente para cumplimiento de 10 que a cada uno corresponda sin di·s~inci6n de dases ni categodas. Manila, 7 de agosto, de 189·8 .-Jaudemes.

NOTA.· Desde la nacRe del 9 todo:s los ve~11lOS de · 1a ciudad murada dispondran se celoquefl laces eFl la 'part~ extlerior de S1il!l easas, a la altura de los visas ba jos, para poder alumbrar la v£a pubiica en prevlsiJ6n de 1a falta de otra dase de ahlrntibradQ.

.




Este libro se termin6 de imprimir en los T aIleres de Artes Gra:6.cas IBARRA, Madrid, calle de la Bola, 9, el dia 20 de marzo del ano 1942


A\-.\LA fOUNDATION, iNC.

H E It I TAG E 1898: el sitio de Manila: memorias de un valuntario I Juan y

Jose Toral


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