Una de las necesidades más presentes alrededor del tema de la vivienda, es el de resolver el déficit de oferta barata y de calidad existente en el mercado. No obstante, cuando planteamos las soluciones a dicho problema, la perspectiva que adoptamos es la de estudiarla como un recurso material de necesidad social, asociado a un derecho positivo, mi intención con este trabajo es demostrar que es necesario cambiar esta visión porque es errónea, plantearla no como lo que debería ser sino como lo que realmente es, es decir, un recurso económico con potencial de creación de riqueza en el proceso de desarrollo de calidad de vida del individuo, tanto desde su lucro en la concepción, como su aprovechamiento en el uso.
Así pues, la pregunta más inmediata es, cómo puede un arquitecto tomar partido de este proceso, en este trabajo, encontraremos una aproximación a algunas de las estrategias de diseño que necesitamos para afrontar el problema.