ASTROTAROT
Conexiones astrológicas para iluminar el enigma de los arcanos




Karen Díaz Ilustrado por Coni Curi
ÍNDICE
Introducción
Arcanos mayores
Arcanos menores y cartas de la corte
Práctica
Glosario de conexiones astrológicas
Bibliografía
Créditos



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Karen Díaz Ilustrado por Coni Curi
Introducción
Arcanos mayores
Arcanos menores y cartas de la corte
Práctica
Glosario de conexiones astrológicas
Bibliografía
Créditos



Recorrido histórico

Una de las teorías del origen del tarot dice que prov iene de los naipes orientales, que ingresaron a Europa a través de los pueblos árabes. La existencia de decretos que prohibían su uso confirma que, hacia fines del siglo XIV, las cartas ya eran utilizadas. Sin embargo, los primeros arcanos ilustrados, que influenciaron al tarot de Marsella, fueron realizados por encargo y pintados a mano en Milán, recién a mediados del siglo XV.
A partir del año 1450 proliferó el uso de naipes para el juego, debido al surgimiento y el auge de la imprenta. Pero fue en el siglo XVIII cuando el tarot tuvo un renacimiento y logró instalarse como una herramienta popular para la adivinación. Allí comenzó un camino que luego conectaría la cartomancia con los principios de la alquimia.
En el siglo XIX, en Francia, surgió un movimiento llamado ocultismo que se propuso recuperar el estudio de distintas disciplinas esotéricas. Una figura destacada fue Eliphas Lévi, investigador de las ciencias ocultas y del misticismo. Entre otras cosas, estableció la relación entre el tarot y la cábala, una corriente esotérica que proviene del judaísmo.
La Golden Dawn
En 1888 se fundó en Gran Bretaña una orden her mética llamada Golden Dawn (o Alba Dorada). Sus miembros se dedicaron al estudio y la práctica del hermetismo, el ocultismo y la metafísica. Profundizaron el vínculo entre cábala, astrología y tarot. De hecho,
establecieron un sistema de conexiones que, hasta el día de hoy, se utiliza como punto de partida para asociar a estas tres disciplinas.
Arthur Edward Waite y Pamela Colman Smith fueron parte de esta orden. Pasaron a la historia por ser los creadores del mazo que se popularizó como el Tarot Rider Waite o el Tarot Rider (llamado así por la editorial William Rider & Son). En la actualidad, es habitual llamarlo Rider Waite Smith ( RWS ) para reconocer el trabajo de su ilustradora.
Sobre este libro
Astrotarot es un homenaje a Pamela Colman Smith. El trabajo comenzó desde la ilustración, en la que Coni Curi reivindica la estética del art nouveau . Al mismo tiempo, respeta la numeración y los nombres que originalmente propuso la baraja RWS. Por ejemplo, lo que en Marsella se llama El Papa, acá es El Sumo Sacerdote y El Enamorado se convierte en Los Enamorados.
Esencialmente, Astrotarot busca recuperar la asociación entre arcanos y astrología que se estableció en el tarot de RWS. En el libro tomamos las asociaciones que propuso la Golden Dawn y también otras que han sido propuestas por diferentes


autores a lo largo del tiempo. Es importante destacar que se pueden encontrar más asociaciones posibles, como en toda disciplina social y espiritual, como por ejemplo las propuestas por Beatriz Leveratto y Alejandro Lodi en su libro Tarot y Astrología (Kier, 2016).
Existe un debate que cuestiona si las relaciones que se establecen entre el tarot y la astrología siguen una lógica o si son arbitrarias. Algunas asociaciones parecen evidentes, como El Mago con Mercurio, ambas energías ligadas al poder de la mente y la comunicación. No obstante, otras pueden resultar cuestionables. Por ejemplo, Aries con El Emperador. ¿No eran los arianos más espontáneos y poco estructurados, mientras que El Emperador nos ofrece la solidez para sostener una práctica? Puede ser, pero también podemos destacar que ambos comparten la idea de darle curso a un proyecto. Otras asociaciones son más bien complementarias, como Sagitario con La Templanza. Sagitario encuentra en La Templanza ese sosiego a su torbellino interior que le permite desplegar su sabiduría.
Es importante aclarar que este libro no busca adherir a una postura teórica ortodoxa. Al contrario, queremos plantear un punto de partida. Astrotarot es una invitación a complementar, contradecir o incluso complejizar estas conexiones que tienen un fundamento histórico. Creemos que esta flexibilidad es lo que permite que tanto el tarot como la astrología sigan creciendo y adaptándose a los nuevos contextos en que vivimos.



El tarot y la astrología son disciplinas simbólicas que comparten percepciones arquetípicas comunes. Eso habilita a que podamos establecer paralelismos nutritivos entre ellas. Sin embargo, no podemos perder de vista que tienen sistemas diferentes y que sus afinidades nunca van a ser absolutas ni exactas.
Una diferencia clave entre el Tarot de Marsella y el Rider Waite Smith radica en el orden de los arcanos mayores: en el RWS, La Justicia ocupa la posición XI y La Fuerza, la VIII, mientras que en el Marsella ocurre lo contrario. Recordemos que, en el Marsella, La Justicia es un VIII, caracterizada como una energía de maduración; mientras que La Fuerza es un XI, caracterizada como el nuevo inicio creativo, diez números después del I (que es El Mago). Esta modificación se debe a que, según la interpretación de la Golden Dawn, La Justicia se asocia al signo de Libra, con el símbolo de su balanza, y La Fuerza se asocia a Leo, con la presencia del león. El orden de los arcanos mayores en este libro respeta el propuesto por RWS.
En cuanto a las afinidades astrológicas establecidas por la Golden Dawn, los arcanos mayores se asocian con planetas, signos y elementos, mientras que los arcanos menores se vinculan con la posición de los planetas en los signos zodiacales. La Torre, por ejemplo, se asocia a Marte, mientras que el II de bastos es Marte en Aries.



Los arcanos mayores nos hablan de dinámicas trascendentales y colectivas; por lo tanto, las asociaciones astrológicas implican un despliegue variado de interpretaciones para una misma energía. Los menores, en cambio, se refieran a dinámicas más terrenales o particulares, por lo que la relación astrológica marca una experiencia más bien específica. Por ejemplo, se establece el Sol en Virgo para el VIII de oros. La asociación es orgánica porque ambos resaltan la maduración y el cuidado de los recursos, gracias a la dedicación y la concentración que ponemos en la tarea que realizamos.
Sin embargo, el II de bastos se vincula con Marte en Aries, y esto puede resultar un poco confuso, ya que esa posición tiene una impronta bastante aventurera y confrontativa en astrología, mientras que el II de bastos es una carta que no transmite tanta acción. Lo cierto es que esa adrenalina se está cultivando por dentro y lo que encontramos es una especie de huevo que condensa la energía a punto de estallar. El estallido llega en el III de bastos, carta mucho más explosiva y extrovertida, y que podemos vincular a La Emperatriz.



Cabe aclarar que la disposición de los palos en este libro sigue la tradición de la orden hermética. Es decir que va de la siguiente manera: bastos, copas, espadas y oros; a diferencia del tarot de Marsella que suele ordenarse como bastos, espadas, copas y oros.
Las cartas de la corte
Las cartas de la corte son la síntesis de las energías contenidas en las cartas del I al X de cada palo. En ellas se manifiestan tanto la responsabilidad como la libertad en la acción, lo que explica por qué, en una lectura, pueden encarnar personajes de nuestra vida real. En estas dieciséis cartas no se adjudicó una relación astrológica puntual. Se plantearon como abanderadas del elemento que representa a su palo. Es decir que la sota, la reina, el rey y el caballero de bastos son del elemento Fuego. Del mismo modo, los personajes de copa son elemento Agua; los de espada son Aire y los de oro son Tierra.
Aunque en Rider Waite Smith se establece una jerarquía en orden descendente para las cartas de la corte, que comenzaría con el rey, en Astrotarot las figuras son presentadas en orden ascendente:
• La sota, o paje, es el estado más inicial y sencillo del elemento. Es el primer contacto con su potencia; por eso implica sorpresa, juego y disfrute.
• El caballero, o caballo, muestra el elemento en movimiento y cómo se despliega en un contexto dado. Este rango nos habla de todo lo que se puede alcanzar cuando se exploran los límites de lo conocido.
• La Reina es la versión receptiva del elemento. Es la percepción más sentimental, íntima y profunda. Este rango también nos habla de la apreciación individual.
• El Rey simboliza el dominio y la sociabilidad del elemento; es su madurez. Este rango asume el compromiso del bienestar y se ocupa de decisiones que afectan a la comunidad.


Una de las premisas de este libro fue evitar caer en una postura reduccionista que limitara la interpretación de cada carta del tarot a un concepto astrológico. Lo cierto es que el uso de la astrología en el tarot es complementario. Nos ayuda a hacer el ejercicio de revelar nuevas capas de sentido y a pulir nuestro trabajo con el símbolo, pero sus contenidos no encajan a la perfección.
Las asociaciones astrológicas promovidas por la Golden Dawn fueron tomadas como un punto de partida. A lo largo del proceso de escribir el libro, algunas de ellas se fueron validando y otras suscitaron dudas. Astrotarot es una invitación a que cada persona explore estas correspondencias y descubra en ellas su propio enigma.
Por momentos será posible experimentar la certeza, pero lo mejor que podemos esperar de estas conexiones entre astrología y tarot es que nos generen dudas, levanten sospechas y, de este modo, activen nuestra intuición.




