Los Ángeles, Chile - Año 0 - Nº5 - Enero de 2012
Desde el Bío Bío hacia el mundo
La movida ranchera El encanto del lugar donde la greda se funde con la historia Norma Montoya, la artesana de Campón
Laguna El Barco Un paraíso perdido Visitamos la hermosa laguna ubicada en el sector alto de la cordillera de nuestra provincia. Aguas cristalinas y bosques autóctonos hacen de El Barco un lugar con una belleza que nada tiene que envidiar a la zona lacustre del sur del país.
Foto del mes Como cada año, miles de peregrinos llegaron hasta Yumbel para manifestar su devoción a San Sebastián. Es así que el pasado 20 de enero, se revivió, una vez más, la tradicional festividad católica que marca uno de los hitos de la identidad y cultura de Bío Bío.
Índice
3Presentación
10 El Espinazo 11 a 13 La movida ranchera
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Estuvimos en...
14 Remembranzas 15-16 El encanto de Rere
6 Mirada Ciudadana
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Bitácora del Bío Bío
Laguna El Barco, paraíso perdido
17 - 18 Norma Montoya, la artesana de Campón 19
Era Digital
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Visión Holística
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Nuestros Sabores
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Crianza
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Agenda
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Bitácora Artística www.bitacoradelbiobio.cl
Presentación
Un tórrido verano Verano: sinónimo de vacaciones, descanso, relajo. Un periodo en que la mayoría de las personas busca escapar de la rutina laboral y encontrar nuevos destinos o, a lo menos mentalmente, alejarse un poco de los quehaceres cotidianos. Se respira otro aire… o al menos eso es lo que se espera de un verano habitual. Sin embargo, las aguas no parecen haberse aquietado este verano. Parece que el alza en las temperaturas, en lugar de generar la languidez propia del calor, no ha logrado disminuir los ánimos confrontacionales, sobre todo en la esfera política. Lejos de ser una época estival lánguida, este ha sido un verano fruto del movilizado año que recién nos dejó. Es cosa de revisar un poco el acontecer político, tanto nacional como local. La inminente llegada de un año electoral en que se elegirán a las autoridades comunales –estrenándose de paso el nuevo padrón de electores- promete de inmediato un movimiento de grandes proporciones. Alianzas, acusaciones, inhabilidades y nuevos pactos cruzarán también la arena local, en busca de la definición de quiénes serán finalmente los candidatos que ofrecerán su “vocación de servicio público” para llegar a los municipios. Aunque en periodo de evaluación y de definiciones, los estudiantes tampoco dejaron de estar presentes en la agenda mediática del pasado mes de enero, tanto así que en Concepción realizaron ya su primera marcha del 2012. Nuevamente las banderas y las consignas se tomaron las principales calles de la capital regional, en lo que es el adelanto del año que pronto se nos avecina. En medio de un verano hasta aquí bastante tórrido, decidimos darles un respiro y presentarles –en nuestro nuevo formato- algunas crónicas pensadas más en vacaciones, que en continuar con la contingencia noticiosa. Ya habrá bastante tiempo para abordar los “grandes temas”; les dejamos aquí los otros, los temas más “livianos”, pero que –en este casomucho se relacionan con nuestra historia e identidad. Nos trasladamos hasta la laguna El Barco, para retratar parte de la belleza de este paraíso perdido que tenemos en nuestra provincia, donde leyendas y cultura ancestral se conjugan con las cristalinas aguas de este embalse natural. Un lugar de muy difícil acceso, pero el esfuerzo por llegar hasta allí se ve recompensado para quienes gustan de la vida al aire libre, de la cordillera, de los bosques de araucarias o piñalerías. Junto con este viaje, asistimos a la primera cumbre ranchera en Los Ángeles para relatarles cómo se disfruta de esta música tan propia de nuestros campos. Al ágil ritmo que surge de la mezcla entre rancheras y cumbias, detallamos la forma en que se vive la presentación en vivo de algunas de las agrupaciones más conocidas de esta zona: una verdadera fiesta. También recorrimos Rere, recordando algunos elementos de su historia y en la búsqueda de las artesanas en greda del sector de Campón. Finalmente logramos ubicar a una de ellas, Norma Montoya, quien con una enorme generosidad nos relató gran parte de su vida y de cómo la greda es parte constitutiva de su existencia. Tuvimos el privilegio de estar con una artesana que aprendió su oficio gracias a la transmisión de sus antepasadas y que se ha transformado en una maestra en la elaboración de delicadas piezas, gracias a su constante búsqueda por mejorar sus creaciones. Como en cada edición, nos acompañan aquí también nuestros colaboradores, quienes abordan diversos temas, enriqueciendo la mirada que como Bitácora buscamos entregarles a todos ustedes. Esperamos que este nuevo formato sea de su agrado, así como también los contenidos elaborados en la búsqueda por relatar parte de los elementos que configuran nuestra identidad como biobenses. Que la disfruten. www.bitacoradelbiobio.cl
Representante Legal: Ximena Lagos Sánchez Directora General: Pilar Zapata Coloma Subdirector: Fernando Castro Cid Edición periodística: Pilar Zapata Coloma Diseño gráfico: Romina Peña Chávez Fredy Muñoz Sandoval Fotografías: Fredy Muñoz Sandoval Área comercial: Ximena Lagos Sánchez Sebastián González Carrasco Colaboran en esta edición: Vicho, Javier Mora, Marlene Oliva, Renato Canales, Mamazzzitas, Pedro Torres, Sebastián González, Alfonso Lloveras y Paul Fiegehen Contacto: Prensa: 95051360 Área comercial: 97931468 Correo electrónico: prensa@bitacoradelbiobio.cl publicidad@bitacoradelbiobio.cl www.bitacoradelbiobio.cl Bitácora del Bío Bío Es una publicación mensual independiente, que nace de un proyecto financiado por el Capital Semilla de Sercotec. Los contenidos de esta publicación pueden ser reproducidos citando la fuente. Las opiniones publicadas en este periódico, son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente la opinión de la Bitácora del Bío Bío. Distribución gratuita.
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Estuvimos en...
La Composición
Teatro en Negrete
Una adaptación del relato para niños La Composición (Antonio Skármeta, 1998), es la que realiza la compañía de Teatro Plan que nuevamente presentó este montaje en Los Ángeles. El teatro municipal de esta ciudad fue el escenario en que este grupo de actores interpretó la historia en que el protagonista es un niño que intenta comprender las implicancias de la dictadura. La compañía está compuesta por Julián Hernández, Victoria Martínez, Cristian Beltrán y Néstor Carrasco.
Con la presentación de las obras El Ganso de la compañía teatral La otra zapatilla de Concepción; Nosferatu, de La Cachiporra de Valparaíso; Poetas y Borrachos, de Perfiles y Siluetas de Los Ángeles y Canción para Caminar sobra las Aguas, de la compañía La Concepción de Santiago, se realizó la Temporada Teatral Negrete 2012. Además de estos montajes, los jóvenes de la comuna pudieron participar de una escuela de teatro y circo. La actividad fue organizada por el municipio local, contó con financiamiento regional FNDR y la ejecución de la Agrupación Perfiles y Siluetas de Los Ángeles.
Acuarelas del Sur Una retrospectiva por parte de su vida pictórica es la selección de obras que presentó el artista Luis Guzmán Molina. Oriundo de Chillán, Guzmán expuso la fusión entre la luz y los paisajes, siempre desde la acuarela. La exposición se mantuvo en la sala de la Biblioteca Viva de Los Ángeles, durante la segunda quincena del mes de enero.
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Danza Oriental Danzas individuales y grupales, percusión, pop árabe, velos, alas de Isis, abanicos y candelabros se dieron cita en la Segunda Gala de Danza Oriental organizada por la profesora Carolina Medina. Al igual que en su primera versión, el teatro municipal de Los Ángeles fue el escenario en que las alumnas, principiantes y avezadas, mostraron a la comunidad su esfuerzo y dedicación en esta bella danza. La escuela de Carolina Medina se caracteriza por acercar este baile a mujeres de diversa condición, desde dueñas de casa a profesionales, niñas hasta adultas mayores, ya que parte de la base que cualquier mujer puede realizar este baile que se caracteriza por la sensualidad y femineidad de sus movimientos.
Nuevamente Poetas y Borrachos En el marco de la Escuela de Teatro y Circo de Los Ángeles se presentó la obra Poetas y Borrachos, de la Compañía Perfiles y Siluetas. El montaje fue dirigido por Oscar Quezada y contó con la actuación de Gabriela Ramos, Mariela Belmar, Claudio Contreras, Pablo Jara, Juan Pablo Seguel, Oscar Quezada y Sergio Muñoz. Junto con ellos estuvieron además los músicos Belén Ruiz (canto), Olivia Navarro (bajo), Marcelo Contreras (percusión), Arturo Burgos (guitarra) y Cristhian Espinoza (guitarra).
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Trilla a yegua suelta en Yumbel En el sector Cerro La Virgen se realizó la tradicional fiesta de trilla a yegua suelta. Con la realización de la emparva, procesión hacia la virgen, trilla y remolienda, los asistentes pudieron disfrutar de esta actividad clásica de la zona rural, además de una muestra de artesanía, comida típica y música folclórica. El evento fue organizado por el municipio local a principios del mes de enero.
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Mirada Ciudadana
Alcaldes a la reelección en tela de juicio Algunos comenzaron el 2012 un tanto asustados por un eventual “acabo de mundo”. No obstante, en materia política el miedo parece haber sido reemplazado por una carga de baterías para entrar en tierra derecha en lo que a campañas electorales se refiere. Para octubre de 2012 está prevista la elección municipal a lo largo de todo el país, instancia en que la ciudadanía elegirá alcaldes y concejales. Varios ya están en carrera; en la provincia de Bio Bío prácticamente la totalidad de los jefes comunales se presentará a la reelección. Sin embargo, cabe preguntarse si la gestión alcaldicia que terminan los avala para merecer por un nuevo período “la confianza del pueblo”. Sólo para mencionar, recordaremos algunos casos que podrían calificarse como “en tela de juicio”. Tucapel se quedará sin su actual jefe comunal Jaime Veloso, ex militante de Renovación Nacional y quien, contra viento y marea, sigue confirmando que será candidato a la alcaldía de Los Ángeles. Pero, hace pocas semanas el Tribunal Electoral Regional de Bio Bío inhabilitó a Veloso como edil de Tucapel, tras una acusación de un grupo de concejales de su comuna por irregularidades al tener un juicio pendiente en contra de su propia municipalidad. Pese a que se encuentra en proceso de apelación, y aún estando inhabilitado podría igualmente aspirar a un cargo en Los Ángeles, algunos se preguntan si es convenient e
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Por Vicho
una candidatura de Veloso en esta capital provincial. Los cuestionamientos como alcalde de Tucapel ¿se podrían repetir en Los Ángeles? Otro caso. El edil UDI de Santa Bárbara, Daniel Iraira, fue formalizado el pasado 18 de enero por el Ministerio Público, por el delito de divulgación ilegal de una conversación privada. En tres meses debería conocerse un dictamen final respecto a su situación, que podría liberarlo de todos los cargos judiciales en su contra, o bien confirmar una sentencia. ¿Quedará Iraira en condiciones de repostularse a un nuevo período por su comuna? ¿Es legítimo que su partido, la UDI, lo apoye contra viento y marea a pesar de la investigación que se lleva a cabo en su contra? Más casos involucran a ediles fuertemente cuestionados por sus respectivos concejos municipales, los que han solicitado a la Contraloría General de la República que los investigue por diferentes situaciones catalogadas como “irregulares”. En esta situación, por ejemplo, se encuentra el alcalde socialista en Negrete, Edwin Von Jentschyk, y en anteriores ocasiones se ha visto sometido al mismo escenario el edil UDI de Mulchén Francisco Jara. Si bien el órgano contralor no tiene la capacidad de dictar sentencias y sólo identifica los problemas y sugiere soluciones, lo cierto es que queda en el aire si es legítimo que estos jefes comunales deban ser una vez más considerados por sus respectivos partidos para postular a un nuevo período edilicio. En muchos casos, los cuestionamientos no provienen sólo de los concejos comunales; sino también de la ciudadanía que exige excelencia de sus autoridades.
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Mirada Local
LAGUNA EL BARCO
El paraíso perdido
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Bitácora del Bío Bío visitó la hermosa laguna ubicada en el sector alto de la cordillera de nuestra provincia. Aguas cristalinas y bosques autóctonos hacen de El Barco un lugar con una belleza que nada tiene que envidiar a la zona lacustre del sur del país. Belleza que también comparte la niña que de noche se pasea en una extraña embarcación, lo que –según cuentan- da origen al curioso nombre de este paraje.
s un destino poco apto para quienes buscan conocer gente y disfrutar de concurridos eventos durante sus vacaciones. Tampoco es adecuado para quienes tienen prisa por llegar a destino y no les es grato la aventura del trayecto. Asimismo, no es recomendable para quienes el descanso es sinónimo de comodidad. Si usted está entre estas alternativas, probablemente no le interese seguir leyendo esta crónica ni evaluar la posibilidad de conocer la laguna El Barco. Salvo quiera cautivarse con su belleza y sentir su cuerpo flotar en sus aguas cristalinas, nada de frías y con una banda sonora proporcionada por el viento encajonado, meciendo a su compás, las copas de los árboles autóctonos. Ubicada a 80 kilómetros de Ralco y a unos 170 al este de
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Los Ángeles, la laguna se emplaza en medio de la cordillera de nuestra provincia, por el Cajón del Bío Bío, en la ruta Pucón Mahuida. Es decir, que para llegar a ella, se pasa por el camino de las represas Ralco y Pangue, continuando por El Avellano –donde existe una piscina de aguas termales-, Ralco Lepoy –subiendo en lo que los lugareños llaman “La Z” por la forma peligrosa y en pendiente que tiene el camino- y Chenqueco. En este último lugar existe una especie de explanada, donde comienzan a visualizarse los bosques de araucarias que, al momento de redactar esta nota, lucían sus copas rojizas prometiendo los piñones de esta temporada. A esa altura del camino, es recurrente preguntarse cómo lugares tan apartados siguen estando poblados. Comunidades ancestrales residen aquí,
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en sus casas de maderas, a ratos apartadas, a ratos formando caseríos. Es común ver chivos y ovejas cruzándose por el camino, en esta ruta que a esta altura es especialmente compleja por sus constantes hoyos y desniveles. Algunos turistas y mochileros logran llegar en transporte público, en la única micro –que sale desde el terminal rural en Los Ángeles- que circula por estos parajes y que los deja a unos siete u ocho kilómetros de distancia, tras lo cual ubican a un lugareño para que los traslade en su camioneta. Si optan por un vehículo, un “4 x 4” es casi imprescindible si no se quiere poner en riesgo la llegada a destino, aunque es posible trasladarse en uno sin tracción, siempre a una mínima velocidad para hacer menos dolorosos los baches. No obstante, es necesario una buena dosis de humor si es primera vez que se adentra en esta zona cordillerana, porque es fácil tomar la ruta equivocada hacia Guallalí y luego tener que devolverse un par de kilómetros. En todo caso, no será tiempo perdido dado que la belleza del paisaje bien vale recorrerlo a cabalidad.
Umain Mulehue Che
Después de unas tres o cuatro horas de viaje desde Los Ángeles –dependiendo del vehículo- una casona de madera, con su correspondiente barrera de acceso, surge en medio de un bosque de araucarias. Desde el interior de la vivienda un joven sale a dar la bienvenida y a hacer algunas preguntas; una vez que se le ha pagado el valor de $1.500 por persona, registra en un libro los nombres de los visitantes, tras lo cual eleva la barrera permitiendo el ingreso al recinto. Un letrero con la leyenda “Umain Mulehue Che: Zona de Camping” indica que sólo unos metros distan para llegar hasta la ansiada laguna.
El camping es administrado por la comunidad pehuenche residente en la zona. En total son unas 54 familias las que habitan permanentemente el lugar; ellas cuentan con un dirigente, Carlos Córdova, quien se encarga de encabezar la organización que permite que esta área para acampar esté en condiciones de recibir turistas cada año. Es así que la temporada la iniciaron el 27 de octubre y estiman que permanecerá abierta hasta abril próximo, si el clima lo permite. Este año están a cargo del lugar Pedro Quipaillán y José Lipiman, quienes se quedan a residir en el campamento, con la finalidad de resguardar el lugar y ayudar a los visitantes durante las 24 horas. Cuentan con luz, agua y servicios higiénicos equipados, de manera que los turistas pueden llegar con sus carpas e instalarlas en el lugar. También tienen mesones, algunos juegos infantiles y
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Bitácora del Bío Bío
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José Lipiman espacios para hacer asados. El valor diario es de $1.500 por persona, recursos que van destinados netamente a la mantención del camping. La cantidad de veraneantes que llega cada temporada es relativa. Hay semanas completas en que sólo el viento se pasea por este lugar. Los fines de semana de pronto arriban más personas. El día que reporteamos para esta nota, un martes, los visitantes eran un par de jóvenes y una pequeña familia que disfrutaban sin generar bullicio alguno. “Quizás si tuviéramos cabañas o se mejorara el camino tal vez llegarían más personas” aventura José Lipiman. Con todo, el hecho que sea un destino poco conocido tiene una gran ventaja. La protección al medioambiente se palpa tanto en la playa como en los senderos cordilleranos, los que permanecen totalmente libres de cualquier tipo de basura o contaminación. Aquí sólo está permitida la pesca deportiva. La comunidad protege el lugar con esmero, razón por la que está absolutamente prohibido lanchas a motor; quienes han llegado con sus embarcaciones han debido renunciar a la idea de recorrer la gran extensión de agua. La navegación solamente se autoriza si es con remos. Y la medida vale la pena: las aguas de la laguna son absolutamente cristalinas.
La niña encantada La playa es pequeña, ya que está encajonada por los cerros. Una arena gris es la encargada de recibir el agua que, en este día de viento, cuenta con un pequeño e incansable oleaje. Sorprende la extensión de la laguna, ya que suele ser más grande de lo que los visitantes imaginan. La zona de baño está delimitada con bo-
yas, lo que permite resguardar la integridad de los turistas. En medio de la laguna es posible ver un pequeño islote. Es una reducida porción de tierra, cubierta de vegetación, que caprichosamente parece haberse instalado en el lugar, como si un trozo de cerro hubiera caído en el agua. La leyenda cuenta que, en realidad, se trata de un barco encantado que seguía a una hermosa niña. “Antes, hace muchos años atrás, la isla era un barco que salía a recorrer para todos lados. Dicen que aquí se encantó una niña, porque ella salía a recolectar huevos de los patos y vio un nidal en esta isla. Entonces fue a buscarlo y la isla comenzó a moverse a la siga de la niña, la isla se corrió y luego se encantó, así es que no pudo moverse más. La niña tenía una hermana, que lloraba y se lamentaba por no haberse ido con ella. Fue tanta su tristeza que también se encantó, así es que quedó convertida en una gran piedra que está allá, un poco más abajo”, narra Pedro Quipaillán. Algunos dicen que en las noches, el barco sale a recorrer la laguna, con el alma encantada de la niña en su regazo. Esta y otras leyendas dan el nombre a esta extensión de agua emplazada en una tierra fértil en cuentos y creencias, lo que es fácil de comprender en una zona aislada y con una geografía tan accidentada que da pie para que la imaginación germine sin demoras. En esta tierra la naturaleza habla y muestra su belleza sin más pudor y defensa que un camino mal habilitado, casi intransitable en invierno y que desgana fácil a los impacientes aún cuando el tiempo acompaña la travesía. El Barco, una zona poco explorada y que, si de cuentos se trata, bien recuerda el paraíso perdido del que, más de alguna vez, nos hablaron con nostalgia.
Pedro Quipaillán
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El Espinazo
Los festivales Por Javier Mora Beltrán
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Sería repetitivo malgastar el tiempo recordando que en un país de tradición festivalera, la ciudad de Los Ángeles aún no ha logrado cuajar un proyecto de esta envergadura que resulte atractivo para sus habitantes. Por suerte tenemos a pocos kilómetros de distancia una serie de interesantes festivales, en localidades que aunque tienen un cuarto de la población de nuestra ciudad, han sabido generar sus eventos, mantenerlos en el tiempo y dotarlos de una parrilla musical atractiva. Los festivales en nuestro país y en nuestra provincia, se han ido arraigando “como el musguito a la piedra”, y a pesar de que probablemente restan a los erarios municipales de importantes fondos para otros ámbitos de la gestión, de alguna forma compensan esto construyendo un patrimonio que, a pesar de ser inmaterial, no es menos importante. Pero existen más beneficios asociados a los festivales, además de publicitar a una comuna, fortalecer al turismo o generarles réditos electorales a los alcaldes. En una dimensión más comunitaria, los festivales permiten, en las localidades pequeñas, que la mayoría de los habitantes se reúnan ante un hecho artístico. Obviamente se puede discutir la calidad de las parrillas musicales, la calidad de los participantes de la competencia o el buen gusto de los humoristas; pero es innegable que en un país donde la oferta cultural es escasa, la tradición de los festivales contribuye a generar experiencias estéticas en las personas, enriqueciendo de alguna forma su bagaje cultural. A nivel país es sorprendente como los festivales siguen creciendo y potenciándose a pesar de que en el resto del mundo están pasados de moda y prácticamente ya no existen. Los hay de todos los tipos, la mayoría enquistados en su localidad de origen, pero también existen los temáticos como el Providencia Jazz, o el del cantar Mexicano de Chanco, o las Semanas Musicales de Frutillar. Sin embargo, son dos los más emblemáticos del país, el sempiterno Festival de Viña, cada vez más predecible y aburrido y el del Huaso de Olmué, un caso muy sorprendente, que pasó de ser un festival folclórico, a una especie de festival pop alternativo, en el cual se le da cabida a artistas relativamente populares, pero no pertenecientes maistreman nacional. La audacia que han tenido los productores de Olmué les ha permitido seguir creciendo, sin ese ahogo mediático del Festival de Viña, con una parrilla más variada y funcional al espectáculo televisivo. Para muestra un botón: el incluir a Los Miserables en el show, banda punk histórica de nuestro país, le permitió a Olmué reventar las redes sociales por la polémica actuación brindada por la agrupación posicionando, aun más, el evento. Al parecer nuestro país tiene festivales para rato, sería deseable eso sí, que tal como la parrilla de los artistas invitados se vuelve más variada e interesante, también los procesos de competencia, que varios mantienen todavía, fueran más audaces y abrieran los espacios para el desarrollo de nuevos talentos. Sin embargo, y a pesar de todo lo se pueda decir, se agradece el esfuerzo de las comunidades por mantener viva tradición festivalera, ya que las personas necesitan mantener un contacto, más allá del virtual o el mediatizado, con las expresiones artísticas, especialmente en esos rincones del país donde no pasa mucho y un festival es la gran oportunidad de construir el patrimonio cultural que nos falta.
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CHARROS A LA SUREÑA
En Profundidad
La movida ranchera
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n intenso olor a palomitas de maíz inunda el lugar. Y al igual que la boletería del cine, hay que hacer una fila para poder ingresar. No nos espera precisamente una cómoda sala en la que ver un nuevo estreno, sino un escampado en el que el sol cae con la crueldad de las cuatro de la tarde de un domingo de enero. Sin embargo, se respira el buen humor y el mote con huesillo ayuda a alivianar las cosas. Luego de una breve espera y con el persistente sonido del bajo y una batería, ingresamos al recinto en que se realiza la primera cumbre ranchera. ¿La parrilla de artistas? Los Rancheros Alegres, Los Machos de la Cumbia, Los Llaneros de la Frontera, Los Rancheros de Plata y el grupo Sueño, oriundo de Purranque. El evento promete hasta pasadas las diez de la noche. Será una jornada extensa y familiar. Estamos en el recinto estadio de Santa Fe, son las cuatro de la tarde y recién ha comenzado el show, pese a que hace casi dos horas partieron los primeros buses desde la plaza de armas de Los Ángeles hasta esta localidad. Pero nadie parece molesto con la espera, al contrario, disfrutan del espectáculo bajo la agradable sombra que entregan los grandes álamos y sauces. En el escenario, un trío anima la fiesta. Se trata de Los Rancheros Alegres, agrupación liderada por José Valdebenito, quien además trabaja en la radio Caramelo, emisora que
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Sombreros, botas en punta, letras de doloroso amor y ritmo ranchero-tropical se dieron cita en la Primera Cumbre Ranchera 2012, realizada en el sector de Santa Fe. El evento congregó masivamente a los fieles de esta música tan ligada a nuestra identidad rural.
ha organizado este evento. Aperados con camisas rojas y pantalones negros, el trío es el encargado de abrir los fuegos en este espectáculo. Llevan unos tres años juntos y José dice que no les falta donde ir a tocar, por estos días estarían en Santa Juana, Carrizal y Florida, además de animar algunos matrimonios. “Trabajamos callados, pero tenemos cualquier pega. Somos humildes, pero nos gusta hacer las cosas bien. Me gusta que la gente disfrute, porque viene a ver un espectáculo, pienso que merecen respeto y por eso hay que hacer bien las cosas, ser un poquito afinadito y si no se es afinado, tener gracia para gustarle al público”, explica una vez que ya ha terminado de fotografiarse con algunas admiradoras. José es vendedor durante el día. En la noche trabaja en la radio. Y cuando lo llaman para eventos, allá va; dependien
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José Valdebenito
Franco Ormeño
do de la magnitud de la actividad, lleva sólo un trío o bien, le agrega batería y acordeón. Es casado y tiene tres hijos. Dice que no le falta el trabajo y que la música le gusta, pero es algo con lo cual no podría sustentar a su familia, “estoy bien como ahora, trabajo tranquilo, tengo harta pega y me paro en cualquier escenario con los más grandes, no me tira hacer mucho más en esto, porque para vivir de la música es complicado y nadie es profeta en su tierra”. Angelino, de joven tocaba guitarra. Buscó los medios y logró comprar sus instrumentos y equipamiento necesario para formar una agrupación. ¿Opción musical? Rancheras, de todas maneras. Siempre le gustaron y dice que siempre han formado parte de nuestra cultura local. “La música ranchera siempre ha existido. Ahora suena más porque llegó una radio que da las 24 horas esta música y eso a la gente le gusta: una fiesta sin música ranchera, no es fiesta”, asegura.
cheros Alegres tocan sus últimos temas, esperando dar paso a Los Machos de la Cumbia, una agrupación conformada por seis jóvenes que hacen vibrar al público, sobre todo al femenino. Aunque llevan algo más de un mes tocando juntos, lo cierto es que la energía que despliegan en el escenario evidencia años de experiencia. Y es así, porque aunque estaban en diferentes grupos, en promedio llevan unos cinco años tocando música ranchera. Quisieron formar una nueva agrupación, así es que dieron inicio a Los Machos de la Cumbia, cuyos integrantes son de Los Ángeles, Monte Águila y Purén. “Queríamos formar algo diferente, hacer algo nuevo, que fuera más de renovación porque hay mucho grupo ranchero, entonces por eso quise tener un grupo que se llamara Los Machos de la Cumbia. Tocamos cumbia tropical ranchera”, precisa Franco Ormeño, creador del grupo. Ormeño es el encargado de animar el baile en el escenario: toca el huiro, invita a levantar las palmas y grita el clásico “¡así no más!”. Revienta el espectáculo cuando, junto con el vocalista, ejecutan unas simples coreografías en que el movimiento pélvico es el protagonista. Las mujeres no dudan en ir corriendo a fotografiarse con ellos, una vez que se han bajado del escenario.
RANCHEROS A LA SUREÑA Pese a que el término “ranchero” suele recordar los clásicos mariachis mexicanos, lo cierto es que nos encontramos acá con una adaptación más popular de esta música. Los enormes sombreros han sido cambiados por unos de estilo de vaqueros; los trajes ajustados y elegantes, por jeans y camisas llamativas. Las clásicas formaciones musicales también se han simplificado, incluso llegando al mínimo de un teclado y batería. Y las letras no son muy novedosas, varias de las canciones son movidas versiones de antiguas baladas, lo que no quita que el público disfrute escuchando y bailando animadamente. “La gente es muy entusiasta y se sabe todos los temas, porque al igual que hay personas que coleccionan éxitos de Luis Miguel, ellos coleccionan la música ranchera, es impresionante, pero es muy masiva, es la que más vende discos –originales y piratas- en Chile”, explica Andrés Rozas, director de la radio y del centro de eventos Caramelo. A las cinco de la tarde ya han llegado más de mil personas hasta este lugar. Los anticuchos, completos, empanadas y cervezas en lata contribuyen a que el show se convierta en fiesta. Los Ran-
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Andrés Rozas
Guitarrista de Los Machos de la Cumbia
CÓMO DEJAR DE AMARTE
“Creo que la idiosincrasia del chileno, especialmente la gente de trabajo y del sector rural, es ésta. No es que sea una moda, sino que los grupos musicales van cambiando: cuando chicos escuchabas Los Manantiales o Los Llaneros de la Frontera, entonces se han generado cambios con el tiempo porque ahora están los Súper Charros de Los Ángeles, Los Machos de la Cumbia, Los Rancheros de Plata…son generaciones que van pasando en la música ranchera; al igual que pasa en otros estilos como la balada, pasan los grupos, pero la música queda”, sostiene Rozas. De que la música queda no hay dudas. Y que las rancheras hacen la fiesta, tampoco. Es cosa de ver cómo, con el paso de los minutos y los acordes, se ha animado el baile en el evento en Santa Fe. Quienes mesuradamente bailaban en su puesto, ya han formado pareja y se han puesto a mover rápidamente los pies y las caderas, mientras de fondo el vocalista interpreta uno de los temas rancheros más conocidos por el público, lamentándose alegremente por no poder dejar de amarla, “si en cada pensamiento apareces…”
Son la nueva versión de una música que desde hace décadas se escucha en nuestros campos. Los tradicionales mensajes radiales entre los auditores de los programas de los “mexicanos” daban cuenta de la alta sintonía en el sector rural, caracterizado por el aislamiento en una época en que no había celulares ni teléfonos de red fija con qué comunicarse de manera instantánea. Pero no sólo se trataba de música, sino que también de películas que llegaron de la mano de Jorge Negrete o Pedro Infante, en la Época de Oro del cine mexicano, filmes caracterizados por los numerosos temas musicales que interpretaban los protagonistas. Caballos, sombreros, cantinas y amores hizo que la temática que representaban se hiciera popular y extrañamente cercana a quienes habitamos al sur del mundo. En la actualidad, el gran número de agrupaciones rancheras demuestra la adaptación de esta cultura a nuestra identidad.
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Remembranzas
Cicatrices del tiempo ¿Qué miramos cuando estamos frente al espejo de la memoria? Naturalmente cada segundo se transforma en ayer e inexplicablemente lo llamamos recuerdos, será porque en nuestra memoria va quedando registrado todo, todo cuanto hacemos y vemos, incluso aquello que no es visible a nuestros ojos. Existe algo muy importante en todo este proceso de vivencias y recuerdos: el tiempo. Un sin fin de definiciones podríamos encontrar para comprender que es una línea de avance y pese a querer retroceder en él, es imposible. En la medida que crecemos, el tiempo es mayormente valorado, aunque irónicamente pareciera avanzar más rápido, lo que es sólo una apreciación, pues el tiempo no se acelera ni espera. Ante nuestra mirada se encuentran estas cicatrices del tiempo a cada paso, pero como todo, pasa rápido y hay que aprovechar cada segundo sin desperdiciarlo en cosas antiguas. Generalmente esa es la reflexión a la que llegamos. Cada lugar y cada cosa son algo más que el envejecimiento y están allí en estos tiempos para que les conozcamos, no para que le ignoremos. Existe un lugar cercano a unos 45 kilómetros desde Los Ángeles hacia la cordillera, en la comuna de Quilaco. La localidad se llama: “Campo Lindo”, un área rural de pocas viviendas, entre éstas se encuentra una hermosa casona, a pasos del camino principal. Esta edificación tiene, sin dudas, muchas historias. Actualmente nadie la habita, sus dueños viven en la ciudad, siendo un cuidador quien la resguarda cada día; sus extensos jardines y los enormes árboles que le rodean entregan una
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Por: Marlene Oliva Zúñiga
tranquilidad absoluta, bajo el silencio interrumpido solamente por el cantar de los pájaros. A su paso, se observan animales que parecen inspeccionar el lugar, demostrando ser ellos quienes resguardan y habitan a su alrededor. Cada quien lleva en su memoria un recuerdo, y conoce algún sitio que fue importante y aún permanece en la actualidad, como esta casona. Nuestra mirada es el medio que mejor permite confirmar todo este proceso de historia y envejecimiento, sin olvidar que somos parte de él.
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Oficios / Identidad
RERE
El encanto del lugar donde la greda se funde con la historia
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Más allá de las leyendas y pese al terremoto de hace dos años, Rere continúa siendo un poblado con un atractivo peculiar. Caminar por sus silenciosas calles y observar su colorido, marcado por el tono rojizo de la tierra, de inmediato transporta al adobe y la greda, las que se funden en un relato histórico y mágico.
aminar por Rere es sentir que se da un paseo por la historia de nuestra zona. Sus construcciones de adobe, que aún permanecen en pie, desafían el paso del tiempo que parece no transcurrir en este poblado ubicado a 21 kilómetros de Yumbel. Famoso por su legendario campanario y por el estofado de San Juan, Rere –que en mapudungún quiere decir pájaro carpintero- es una antigua localidad que fue fundada como la villa San Luis Gonzaga de Rere en 1765, aunque sus orígenes se relacionan con la Estancia del Rey fundada en 1603, un lugar destinado a proteger los sembradíos y el ganado de los continuos robos y ataques indígenas. Con el pasar de los años, se transformó en una importante localidad que encabezaba la provincia, dependiente en ese entonces de la Intendencia de Concepción y denominada primero como Partido de Rere y posteriormente, Delegación. Comunas como Tucapel o Quilaco estaban dentro de su enorme jurisdicción, la que se extendía desde la cordillera de Los Andes hasta Florida y desde Chillán hasta Los Ángeles. Hoy es parte de la comuna de Yumbel y se accede a él luego de recorrer una veintena de kilómetros por un camino en que se mezclan el polvo y el ripio, en un paisaje en que pre-
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dominan los cerros plantados de pino y en que es frecuente encontrarse con grandes camiones forestales. En Rere, por estos días, diversas faenas se realizan para arreglar sus calles, las que rompen con el habitual silencio del poblado. Con los arreglos, la tradicional tierra rojiza del lugar salta a la vista, lo que hace que se relacione de inmediato con el adobe y la greda tan característicos de esta zona.
UNA VIEJA CASONA
Dicen que tiene más de 150 años. Aún en pie, la vieja casona ubicada en calle Pedro Aguirre Cerda guarda antiguos vestigios del poblado, los que van desde troncos petrificados y piedras con rastros de oro hasta copia de los billetes del banco que existió aquí; además de innumerables piezas de greda traídas desde la vecina localidad de Florida y variadas artesanías que rememoran esta localidad. Aunque pareciera un museo, lo cierto es que no es una iniciativa oficial, sino una idea de los propietarios de la vivienda. Luis Bermedo Guzmán ha recopilado los diversos objetos y piezas que hacen de este espacio de su casa, una sala en que se mezcla la venta de artesanía y recuerdos, con elementos propios de la historia del poblado. “Esta iniciativa surge el año 2000, aunque siempre me ha
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gustado la historia y las puertas han estado abiertas para quien quisiera saber. Ocurre que cuando la gente venía a visitar el pueblo, quería ser atendida y que alguien les contara la historia, les entregara información” precisa Luis Bermedo. Ataviado de un gorro y una polera que lo
Las campanas
identifica como rerino, es capaz de relatar sin problemas, fechas y personajes que fueron claves en la historia de la localidad. Dos de los eventos en los que se detiene son las legendarias campanas y el banco fundado en 1889. “Algunos dicen que el banco se fundó, pero que no fun-
cionó y hoy tenemos documentos que aseguran su funcionamiento por, a lo menos, seis años” explica refiriéndose a los antecedentes que entrega la Superintendencia de Banco e Instituciones Financieras de nuestro país. Respecto a las legendarias campanas, asegura que fueron fundidas y fabricadas en la misma localidad. Para ello se basa en la escritura que dice “Nuestra Señora de Buena Esperanza” el nombre católico del poblado, “con las campanas, siempre hay muchas dudas respecto a su estructura y donde fueron fundidas, pero yo creo que sus letras son parte de la misma estructura de la campana, así como los ojos o la cabeza son parte de nuestro
Aunque en la actualidad permanece cerrado el campanario para los visitantes, es posible apreciar desde abajo las enormes dimensiones de las tres campanas que conforman parte de la principal leyenda de Rere. Elaboradas en la primera mitad del siglo XVIII, se dice que fueron construidas gracias a los donativos en oro, plata y metales nobles que los vecinos entregaron a los misioneros jesuitas. Cuenta la leyenda que una vez quisieron trasladarlas hasta Concepción, debido a imponente su belleza, pero que con más de 40 yuntas de bueyes fueron incapaces de sacarlas fuera del poblado. Sin embargo, una sola yunta fue necesaria para regresarla a su lugar original.
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cuerpo” sostiene, descartando de plano que hayan sido elaboradas en España u otro lugar. A juicio de Luis Bermedo, uno de los desafíos que tiene Rere es lograr coordinar de mejor manera su actividad turística, considerando el enorme potencial que tiene como pueblo histórico y cultural. Por mientras, lo que más les interesa es que quienes visiten la localidad se motiven por escuchar su historia, aprendan de ella, se la cuenten a sus familias y luego regresen la siguiente temporada con más personas, dispuestos a aprender parte de la historia de Chile, a partir de una caminata por las viejas calles y casonas de Rere.
El banco
El Boletín de Las Leyes y Decretos del Gobierno, que data de 1889, da cuenta que el 15 de enero de ese año se formó la sociedad anónima denominada “Banco de Rere”. Su capital social inicial fue de cien mil pesos, representados en mil acciones de cien pesos cada una. El entonces Ministerio de Hacienda declaró el 20 de julio de 1889, legalmente instalada esta sociedad anónima, quedando esta fecha como la oficial respecto al inicio de sus operaciones. Existen registros de sus funciones durante seis años, tras lo cual se pierde su rastro en la documentación de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras de Chile. Es así que su último registro figura con fecha del 21 de marzo de 1895, en que un decreto del Ministerio de Hacienda indica que su capital es de dos millones de pesos, fijando un máximo para su emisión de billetes; documento que fue impartido también a la veintena de bancos existentes en nuestro país en esa época.
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Oficios / Identidad
Norma Montoya, la artesana de Campón Es heredera de una tradición en greda que se pierde en el tiempo. Su oficio fue heredado por su madre y su abuela, quienes trabajaban con soltura la greda que generosamente les regalaba los campos y cerros de Rere. Norma Montoya pertenece a las artesanas cuyo oficio ha sido desde siempre, parte de su vida.
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ive en las proximidades de Rere, en un lugar al que se le conoce como Los Chequenes y que queda a unos cinco kilómetros del poblado. Oriunda de Campón –un sector que se interna por los campos y cerros-, Norma Montoya ha habitado en esta zona de tierra rojiza y calurosa desde siempre, al igual que su familia. Y desde siempre ha trabajado también la greda, la que ha sido parte constitutiva de su vida.
Siendo la menor de cinco hermanos, eran su madre y sus hermanas las que le ayudaban a realizar sus trabajos mientras aprendía. Recuerda que a sus quince años ya pudo modelar por sí sola sus primeros artículos: pailas y platos pequeños. Eran los tiempos en que la greda era parte esencial de los utensilios de quienes habitaban los sectores rurales, ya que la loza no se masificaba aún. Es así que tinajas, ollas y floreros -para plantarlos-, tenían una gran demanda. “Estos trabajos siempre se han vendido. Anteriormente, la gente de los campos utilizaba pura greda: ollas para cocinar, fuentes para lavar loza o para comer en las trillas, sobre todo porque se comía en una misma fuente. También se hacía mucho el plato, la asadera y el cántaro, porque antes se servía el agua en él. Además antes era todo en fogón…algunas ollas para cocinar eran bien grandotas para poder hacer los pucheros para las trillas” recuerda. Su trayectoria ha sido reconocida. En la década del ’90 fue invitada durante tres años, a una feria que se realizaba en el parque Bustamante en Santiago, hasta allí llegaba a mostrar su tradicional trabajo. En 1987, para la venida de Juan Pablo II, Norma elaboró unos cálices y un hermoso Cristo que actualmente se encuentra en la iglesia de Rere.
LA GREDA, SU VIDA
Durante gran parte de su vida, su rutina diaria era estar casi todo el día en su taller de adobe, moldeando piezas. Madre de cinco hijos, tomaba desayuno y se iba a trabajar acompañada por el silencio del campo, mientras sus hijas se encargaban de los quehaceres domésticos. Interrumpía su rutina sólo para almorzar. A veces se extendía hasta largas horas de la noche. Al principio, trasladaba por extensos kilómetros, la greda en sacos, al hombro, hasta su hogar. Con el paso de los años descubrió un lugar más cercano y ahora se ayuda de una carretilla para buscar la materia prima con que trabajar. El tiempo le enseñó que el mejor método era almacenarla al principio del invierno, cuando está blanda para extraerla. Luego, debe esperar a que se vaya secando. “Hemos ido perfeccionándonos más. Cuando secamos la greda, luego se muele bien y la cierno. Los grumos que quedan los pongo en un balde y les echo agua. Lo remojo y esa agüita, la cuelo nuevamente y me sirve para ir mojando la greda. Así me queda más fino el trabajo, con menos piedrecilla. Es más esfuerzo, pero una se va perfeccionando por sí misma” detalla. Luego de cernirla, se va amasando y modelando. No hay moldes más que los que salen del propio ingenio y la experiencia de toda una vida. Norma se encomienda a Dios y deja a sus dedos moverse ágilmente entre la humedad y la flexibilidad de la materia.
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“Una se va imaginando cosas, aquí no hay maquinaria ni nada. Es todo hecho a mano…esto es pura imaginación. Hoy, por ejemplo, me estaba imaginando hacer unas ensaladeras. Cuando empiezo a trabajar le pido a mi Dios que me ayude a ingeniar qué es lo que debo hacer para vender y se me imaginó hacer estas ensaladeras, más ovaladas y extendidas y pienso que le va a gustar a la gente” confiesa. Después de moldear las piezas, Norma las deja endurecer un poco. Tras esto, les saca la madera que le ha servido de base y le pasa unos paletones hasta dejar el artículo totalmente liso. Lo orea, le pone una tierra rojiza y allí queda, esperando que ella retome el trabajo y lo pula hasta que logre un brillo particular. “Es un brillo natural, sin barniz. El Cristo que está en la iglesia de Rere, ese está barnizado. Pero lo de acá no lo barnizo, porque mi trabajo pierde, ya que la gente busca lo que es natural” detalla. El proceso no se ha acabado. Norma coloca las piezas en el horno donde cuece el pan, solamente para que terminen de secarse, ya que no es aquí el lugar en que realiza la cocción de sus piezas. Asegura que aunque las tuviera una semana, no terminan de cocerse. Así es que con bosta de animal, realiza un fogón en su patio –en invierno, al interior de una casucha- y en una hora y media, están listas, con su color característico de esta zona.
RECURSOS PROPIOS
Aunque ya los años le van pasando la cuenta y no puede estar por tantas horas trabajando, Norma está en constante búsqueda de cómo mejorar su trabajo. Junto con ello, ha transmitido su conocimiento a sus hijas, las que también trabajan la greda. Su trabajo se caracteriza por artículos finos de adorno, pero también por elaborar utensilios de cocina. Las personas que le compran llegan porque la conocen o bien, porque alguien les ha dado el dato de la calidad de su trabajo.
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“Vendo aquí no más (en su casa), la gente llega por dato. Otros, porque me conocen, vienen un año y vuelven en este tiempo de verano con otras amigas. O bien, los que me han visto por televisión -he salido un poquito-, eso también me ha ayudado mucho. Llegan preguntando y como en Rere me conocen, si alguien pregunta por la señora Norma o la señora que hace greda, lo manda de inmediato para acá” explica. A veces participa en las ferias o exposiciones, aunque cada vez menos. No le conviene económicamente, ya que el arriendo de stands y el pago de permisos de pronto le consumen buena parte de lo que podría haber sido ganancia. Hace una excepción para la fiesta de las Cármenes, cada 16 de julio, en que va a San Rosendo, porque la invitan a participar. “Me vienen a buscar y a dejar, no me cobran nada por el puesto, lo que gano es para mí, y eso es lo que necesitamos los artesanos, acá en Yumbel podría cobrársenos la mitad de lo que se pide a los comerciantes” argumenta. Desde el punto de vista económico, Norma sostiene que aunque no es un trabajo que le permita subsistir por sí sola, es una buena opción para ir en ayuda de los ingresos de la familia y tener recursos para poder solventar parte de sus gastos personales. “A veces soy medio pesada con la juventud. Porque hoy con eso de la delicadeza de las uñas largas, ya no les gusta este trabajo. Por ejemplo, cuando mis hijas estaban en el colegio, invitaba a sus compañeras, vinieron cinco y de ellas, aprendieron dos. Pero perdieron después, porque no les gusta. Es que es un trabajo realmente sucio. Pero yo les digo que si un día son dueñas de casa, si no tienen otro trabajo tienen que andar pidiéndole al marido para todo. Yo les digo que no, si acá se gana, aunque sea un poco, una sabe lo que hace con el dinero. Nada de andar pidiendo. Yo acá trabajo, lucho y tengo mis recursos” precisa.
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La era digital
Portabilidad digital “¿Por qué esta magnífica tecnología científica, que ahorra trabajo y nos hace la vida más fácil, nos aporta tan poca felicidad? La respuesta es esta, simplemente: porque aún no hemos aprendido a usarla con tino.” Albert Einstein. Señores lectores: Estamos viviendo tan sólo el principio de un siglo maravilloso, los avances tecnológicos nos sorprenden todos los días hasta deslumbrarnos cuando nos conectamos con el futuro, cada mañana, al encender nuestros múltiples televisores hogareños o al prender nuestros tablets, notebooks, netbooks y smarthphones. Sí, somos afortunados porque la accesibilidad a los servicios, junto con los bienes materiales a través del plástico, no son un impedimento para obtener TV, GPS, RADIO, MP3, MP4, CÁMARA FOTOGRÁFICA y de VIDEO e INTERNET en un sólo aparato electrónico portátil con batería; lo que ni en 20 años atrás se pensaba, es hoy un requisito social para ha blar
de tú a tú dentro de un status en el cual, no basta una pantalla plana familiar en el living, si podemos tener un plasma en cada pieza. Dichosos somos si podemos
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Sebastián González Publicista www.elbookdelseba.com ordenar desde la comodidad de nuestros hogares, de lo más básico hasta una esposa rusa que cubriría los cuatro siguientes escalones de la pirámide de Maslow. Correspondemos a una generación más próspera al ser espectadores y protagonistas en un escenario móvil que nos da la posibilidad, (libertad que va de la mano con responsabilidad), de poder llevar la tecnología donde queramos y encontrarla cada vez más en cualquier parte. Es el mundo globalizado el que nos llevó a esta portabilidad digital en la cual encontramos todo en un sólo aparato que nos divierte, informa o nos mantiene en contacto con todo el planeta y que cada vez se achica más. El “lado B” es que HOY QUEDÓ OBSOLETO y que nos esclavizamos sin darnos cuenta al estar disponibles 24/7. Para cuando termines de leer esta columna deberás apretar F5 y si quieres aportar con críticas constructivas o consultas lo puedes hacer a: sgonzalez@ publicistas.cl
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Visión Holística
¿Qué nos enseñaron de la felicidad?
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os sentimos gustosos por lograr nuestros objetivos en nuestra vida. Nos compramos el automóvil que queríamos, logramos el sueño de la casa propia, nos compramos el televisor que deseábamos y logramos una gran satisfacción. Pero a pesar de ello nos dimos cuenta que esa satisfacción no era permanente, luego comenzamos a acostumbrarnos y volvimos a la rutina. Por un motivo que desconocemos la satisfacción se presentó de forma temporal. Así es cuando escuchamos decir que la felicidad no es duradera y que tiene carácter de impermanente. El primer error que cometemos es confundir Satisfacción por Felicidad. La primera es temporal, la segunda es permanente. Si no hemos sido felices permanentemente es por este grave error conceptual. La satisfacción ocurre por la realización del apego a un objeto mental que deseamos materializar. La felicidad nace de un estado permanente de aceptación de las condiciones de la vida, evitando desear cambiar las realidades que se nos presentan. Esta diferencia puede cambiar tu vida radicalmente. Nuestra misión es evaluarnos y corregir esta visión de mundo impuesta por los medios y por la ignorancia de nuestra sociedad respecto al modelo de vida que se sigue. ¿Sabías que la felicidad está más cerca que tu propia respiración y no tienes que volcarte al sacrificio para lograrla? Pero no todo está perdido, muy por el contrario, lo que no nos enseñaron es justamente lo que podemos aprender a cualquier edad para ser felices. En este aprendizaje tenemos que simplemente aceptar. Aceptar no significa decir a todo que sí como una simple afirmación que provenga del intelecto; muy por el contrario, hace referencia a estar abierto a todos los escenarios que ocurran por nuestra vida, de esa forma evitamos generar resistencias mentales que nos puedan causar infelicidad.
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Por: Paul Fiegehen Bräuning Psicoterapeuta Transpersonal Holístico
Esto en un principio puede ser difícil de digerir, es cierto, pero ¿acaso la tristeza de un abandono no termina cuando aceptamos la realidad? Bien, ahora creo que podemos abrirnos un poco más y empezar a analizar esta situación acabadamente. Antes de abordar directamente en qué consiste la aceptación real, tal vez habría que considerar primero que cosa no es la aceptación. En ocasiones cuando alguien escucha que es necesario aceptar nuestra condición falible, nuestros errores, nuestra impotencia, nuestro límite, o aceptar los límites de otros, las fallas, los errores, el alcoholismo del marido, la drogodependencia de un familiar, la infidelidad del cónyuge, etc., cosas que no nos agradan, viene la tentación de entender que aceptar significa contemplar aquello como “aceptable”, es decir, como si fuera algo con lo que debo estar satisfecho o incluso sentirme contento, y evidentemente eso sería insensato. Por eso en la aceptación: «no se trata de un pasivo y débil padecer todo, sino que se trata de ver la verdad y de disponerse a considerarla, resueltos naturalmente a la fatiga y, si es necesario, a la lucha por ella» (Guardini, 2001) Aceptar no significa mediocridad o cinismo. Aceptar no significa tolerar el mal. Aceptar no significa que una mujer deba sentirse satisfecha porque su marido la golpea, o porque su hijo consume drogas, aunque le convenga aceptarlo. Aceptar no significa conformarse con ello, no significa actuar como si aquello no existiera o no tuviese importancia. No es someterse como esclavo. La aceptación no es indiferencia. De hecho hacer como que algo no existe, o “resignarse” (entendido como claudicar), en el sentido de cruzarse de brazos, no es aceptar. Porque puedo adoptar una actitud pasiva ante aquello que se me presenta a causa de una negación, y en esta negación va implícito el rechazo. Aceptar implica el acto contrario de coraje. Aceptar implica un
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acto más profundo que el simple hecho de constatar con los ojos o con el pensamiento “esto es así”. Este acto es necesario y le precede, pero no es suficiente para decir que hemos aceptado. Aceptar significa “comprender”. Y comprender significa abrazar aquella realidad, significa tomarla en nuestras manos para dar una respuesta a aquello que hemos contemplado como “esto es”. Entonces para aceptar en verdad es necesario un acto más profundo que el simple discurrir lógico que dice “esto es”... Abrazar la realidad tiene un tinte afectivo, no sólo cognitivo. Se acepta con el corazón, no con un silogismo, con una idea o con un discurso racional. Es un acto de conciencia afectiva que acoge este aspecto o trozo de lo real que se me presenta como un objeto ante lo cual he de responder. La aceptación genuina supone el hecho de aceptar aquello que es, y “aquello que es” pasa por el hecho de aceptar, en primera instancia, “aquello que es en mí”. Y aquello que es en mí conlleva también la aceptación de la experiencia afectiva que en mí se suscita ante la constatación de aquello que es. Decíamos que aceptar implica una respuesta, sin embargo no implica cualquier tipo de respuesta, sino sólo cierto tipo de respuesta. Porque no puedo no responder. Mi pasividad o mi conformismo ante aquello que se me presenta es ya un tipo de respuesta, una elección frente a ello. No “hacer nada” es ya hacer algo. Pero este no hacer nada implica que he elegido tratar aquello que existe como no existente. Porque mi postura de fondo es “querer no ver”. En la acogida de lo real como es, la aceptación capacita al hombre para mirar con otros ojos. Nos faculta para un movimiento de libertad que conlleva el adueñamiento de aquello que verdaderamente estamos acogiendo como lo real. Este acto permite que seamos un poco más libres para decidir como responder ante aquel aspecto de lo real. Por eso la «aceptación es más bien una forma de superación... la aceptación enaltece» (Peter, 2002). En un sentido más profundo, la aceptación de lo otro y del otro, supone la aceptación de sí mismo. En la aceptación de sí mismo se encuentra ya un acto ético que dispone a otros. Bien, ya sabes lo que es la aceptación, ahora ya estamos dispuestos y listos para ser felices y no ser esclavos de la satisfacción temporal.
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Sabores de la Zona
Pastel de choclo
a la chilena
Llegó el verano y compartimos aquí un clásico de la gastronomía chilena: el pastel de choclo y las humitas. ¿Quién no ha compartido una gran mesa familiar en torno a la fiesta que acarrea el deleite de estos dos platos? Les dejamos aquí las recetas a ver si se animan a prepararlas. El pastel de choclo resulta de una mezcla de diferentes carnes, verduras y aliños. Su elemento principal es el choclo o maíz, que llegó a nuestras tierras desde México, donde recibió el nombre de elote, durante el período de la conquista hispana.
Preparación: La cebolla picada fina se fríe en “la color” y se le agrega la carne; continúa al calor hasta que esté todo cocido y luego se sazona con sal y pimienta. Este pino se coloca en una fuente, agregándole las pasas, aceitunas, un huevo duro cortado en casquitos, y las presas de pollo. Posteriormente se cubre con el siguiente preparado: se ponen en una cacerola a cocer los choclos rallados (o el choclo en grano se muele en máquina o procesadora, pero ojo que no se les pase la mano en lo molido y les quede como agua), se les agrega la mantequilla, leche y sal, revolviendo constantemente hasta que se cuezan bien. Se retiran del fuego y se les añaden las yemas de los dos huevos restantes y luego, las claras batidas como para merengue, unir todo muy bien y vaciar al pino. Finalmente, se espolvorea por encima con azúcar y se pone al horno (150-200 grados) hasta que la parte superior se vea dorada (aproximadamente 20-25 minutos). Esta receta alcanza para 4 a 5 personas y se acompaña con una ensalada de tomates (aliñados con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta) con cebolla picada a la juliana y con un poco de pebre cuchareado.
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Por: Pedro Torres Torres Gastrónomo Internacional
Ingredientes (para 4-5 porciones): 6 choclos 1 cebolla 200 gramos de posta negra 5 tutos de pollo (cocidos) 3 huevos 1 taza de leche 50 gramos de aceitunas Pasas 1 cucharada de mantequilla 2 cucharadas de color Sal y pimienta
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Crianza
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Bienvenido 2012
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Al pensar en cómo vincular a @mamazzzitas con la llegada del nuevo año, comencé a investigar en la gran red del ciberespacio, como sería este 2012 en relación a la maternidad y los bebés. Grande fue mi sorpresa cuando encontré una noticia muy destacada, en un país muy muy lejano igual que en el cuento de hadas y con un final feliz, permítanme compartir un extracto. Varios miles de ciudadanos de Belgrado, pero también turistas, se reunieron este primero de enero en el centro de la ciudad, en la tradicional manifestación “Calle de Corazón Abierto”, en el marco de la cual se ha organizado la acción humanitaria “Marcha por los Bebés”. Numerosos artistas, músicos y actores participaron en esta manifestación, donde este año se vendían baberos de color rojo, y el dinero de la venta se usará para comprar todo lo que necesitan los bebés al momento de su nacimiento. En el marco del programa artístico participaron cantantes y actores, orquestas de viento y de cuerdas. También se organizó un teatro ambulante, una función de títeres, un circo, mientras que los magos divertían a los niños con sus trucos. En el restaurante serbio se organizó el tradicional almuerzo, y a los invitados les servían la comida, los actores del teatro “Atelje 212”. La acción “Calle de Corazón Abierto” que se organiza en la calle céntrica de Belgrado, Svetogorska, desde el año 1988, este año se ha transformado en “Ciudad de Corazón Abierto”, en la que participan 11 municipios de esa ciudad. El presidente de Serbia, Boris Tadic, ha declarado en Belgrado, con ocasión de la inauguración de esta manifestación, el 2012, el año de los bebés, y destacó que los recién nacidos son la cosa más importante en la vida. “Deseo que nazcan más bebés y que cada nuevo año sea año de bebés”, dijo Tadic en la “Marcha por los bebés” donde participaron miles de padres y niños. La “Marcha por los bebés” forma parte de la acción benefactora denominada “Lucha por los bebés”, en la cual se ha recolectado el año pasado un gran número de incubadoras para los niños que nacen prematuramente. A la manifestación asistie-
ron el suplente del primer ministro y ministro del Interior, Ivica Dacic, y los representantes del poder de la ciudad. Sin duda, es una noticia que deja varios puntos de reflexión, como por ejemplo, el compromiso de los gobiernos por la lucha contra el aborto, el apoyo de la clase política a la natalidad, la responsabilidad compartida de madres y padres en las sociedades emergentes y la obligación social de reforzar a la familia como pilar fundamental de la comunidad. Personalmente, me parece destacable en todo su contexto que en Belgrado la primera actividad pública y masiva de la ciudadanía sea ligada con el amor y los hijos, sentimiento y motivo que debiera ser el motor de nuestras vidas, cuya capacidad en perfecta armonía es más poderosa que cualquier creación humana del siglo XXI. De acuerdo a todo lo que leí antes de dar con la información de la marcha por los bebés, la astrología, los psíquicos y brujos buenos indican que este año será de muchos nacimientos, lo que sin duda es una bendición para la humanidad, pese a que en ocasiones el escenario de la dulce espera no parezca miel sobre hojuelas, el tesorito que crece en la pancita de la @mamazzzita será la razón de vivir de quien sea privilegiada con la gracia de ser madre. Por eso, más allá de la marcha de los corazones o de los bebés, queremos invitar a todas las @ mamazzzitas a hacer de su crianza, una constante manifestación pública de amor y aprendizaje, compartiendo todo lo que deseen con sus nenitos y demostrando la inmensa capacidad de amar que esos pequeños tesoritos nos imprimen a diario, con tan sólo observar la mirada más dulce que nos entregan en cada detalle. Que tengan un próspero 2012, lleno de buena salud, amor y desafíos laborales; ojalá se hagan el tiempo para lograr todo lo que se propongan y disfruten la máximo a sus bebés y familias. Nosotros, gracias a ustedes, nuestros lectores, comenzamos el año muy bien. Bienvenido 2012 !!!
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Agenda Febrero Trilla en Los Ángeles
Como ya es tradición en esta época estival, la fiesta de la trilla a yegua suelta no podía estar ausente de las actividades en la capital provincial. Es así que los próximos sábado 4 y domingo 5 de febrero, se realizará en el sector El Litre en los Saltos del Laja, esta tradicional actividad de los sectores campesinos. Música en vivo, venta de comidas típicas, feria de artesanía y juegos populares complementarán la trilla. La actividad es organizada por el municipio local.
Festival en Alto Bío Bío
Los días jueves 2 y viernes 3 de febrero se desarrollará la Octava Versión del Encuentro Intercultural Alkantún de Alto Bío Bío y la nueva versión de la Feria Costumbrista Artístico Artesanal. El evento se efectuará en las inmediaciones del Liceo Técnico Profesional e Intercultural Bilingüe de Ralco. La programación para el primer día de la actividad incluye a Andrés de León, Eduardo Gatti, Beatriz Pichimalén, Sol y Lluvia, Los Arrieros de Alto Bío Bío. Para el viernes se contempla la actuación de Schwenke y Nilo, Giolito y su Combo, Douglas, Charola Pizarro y Los Lobos del Sur.
Aguas del Bío Bío en Negrete
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Durante los días viernes 3 y sábado 4 de Febrero, se realizará en la comuna de Negrete, la XXI Versión del Festival “Aguas del Bío Bío”. Este evento es organizado por el municipio local con la finalidad de rescatar, promover e incentivar la interpretación artística, además de ofrecer a vecinos y turistas instancias de recreación y esparcimiento. Hasta el cierre de esta edición, no se confirmaba la parrilla de artistas que participarían.
SANACIONATURAL la otra medicina Paul Fiegehen Brauning Director Medicinas Sanacionatural, Terapeuta en Psiconeuroinmunología, Director del Centro de Meditación Buddha Dhamma, y Johanna Brito G. Presidenta de la Asociación Chilena de Reiki, Quiropráctica Holística del Colegio Profesional de Quiroprácticos de Chile, Maestra de Reiki Usui, Buddho, Jin Kei Do
Atenderán a contar del mes de Febrero en Los Ángeles. Contacto: (08) 150 06 41 (02) 871 13 36 info@sanacionatural.com 24
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Social
Inauguración Inalco Sur Los Ángeles El pasado jueves 19 de enero se inauguraron en nuestra ciudad, las nuevas dependencias de INALCO SUR. Actividad a la que asistió gran número de invitados, clientes y altos ejecutivos de General Motors Chile.
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En la ocasión se sorteó un vehículo 0 kms. entre sus clientes. Además, General Motors certificó bajo estándares premium y de calidad, al nuevo Servicio Técnico de la empresa.
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Bitácora Artística
Crónicas de viaje a la Laguna El Barco En esta edición comenzamos la publicación de unas crónicas elaboradas por el profesor Alfonso Lloveras Cuevas, quien desde Santa Bárbara, quiso compartir con los lectores de la Bitácora, lo que fue su viaje hasta la laguna El Barco, hace ya nueve años. En este periodo, el territorio de Alto Bío Bío todavía formaba parte de la comuna de Santa Bárbara.
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Bitácora del Bío Bío
artes 22 de Abril de 2003 Con ocasión de una visita del alcalde don René Correa, a mi colegio en donde soy director, entre otros temas que surgieron de una conversación informal, fue lo de la factibilidad de un paso fronterizo por Santa Bárbara hacia Argentina por Pucón Mahuida. Se coincidió en lo beneficioso que sería para la comuna lograr este objetivo y junto a ello alabamos la hermosura del paisaje de nuestro suelo que lo hace atractivo como posibilidad de desarrollo potencial. Ahí y en consideración al interés demostrado junto a mi colega Enedina, inspectora general, surgió la idea y la cuasi invitación en poco tiempo más para hacer una excursión al lugar señalado. Así fue como el martes 22 de abril estoy enfilando mis pasos hacia la Municipalidad, lugar en donde junto a otros colegas directores y jefes de UTP fundamentalmente, estamos invitados a participar de esta aventura por la geografía comunal hacia el sector cordillerano. Me encuentro que se están reuniendo, los que formarán parte de esta comitiva, que, finalmente son: el alcalde don René Correa Hermosilla; el director del Liceo Cardenal Antonio Samoré, Jorge Pinto Rodríguez y el profesor del mismo establecimiento, José Obreque Beroíza; por la Escuela Cacique Levián, su director Marco Candia Oliva y su profesora María Apolonia Cid Urra; a la Escuela Mañil la representa su profesora encargada, Marta Godoy; a la de Los Boldos, su profesora encargada, Claudia Azócar Cabrera; de Los Mayos, su director Alejandro Sepúlveda. También forma parte de la comitiva, el director comunal de Educación (DAEM) don Raúl Konwisch, acompañado por la señora Patricia Reyes y de mi colegio, la Escuela Enrique Bernstein Carabantes, la inspectora general, Enedina Vergara Vásquez, la jefe de la UTP, Mónica Valdebenito Soto y yo como director, Alfonso Lloveras Cuevas. Previamente en un grupo, la relacionadora pública de la Municipalidad de Santa Bárbara, Nadia Cam-
pos Ortiz -gran impulsora y difusora de los planes de turismo para la comuna-, nos señalaba el por qué del viaje y lo especial de quienes conformábamos este equipo explorador, la necesidad de que personas como nosotros, que tenemos la condición de educadores, podamos apreciar en terreno los recursos turísticos que posee nuestra comuna y seamos capaces de transmitírselo a los demás, de manera de generar un interés por acceder a estos lugares y lo más importante, ir contribuyendo a que los habitantes de Santa Bárbara, vayan asumiendo una cultura de acogida a los turistas, ofreciendo su pueblo en las mejores condiciones, como también la posibilidad de participar como agente promotores a través del ofrecimiento de servicios, hospedaje, información amable, etc. Todo esto acontecía mientras pasaba la hora que inicialmente había sido puesta como hora de salida, las 07.45. Yo asumo que llegué a la hora, no todos hicieron lo mismo, de manera que eso hizo que nos retrasáramos en la partida. Las cinco camionetas 4x4 dispuestas con sus respectivos choferes: Edgardo Gangas, José Gallegos, Rubén Oróstica, José Valdebenito y José Cuevas, correspondiéndome la conducida por don Rubén Oróstica; ocupaba el vehículo además el profesor del liceo, José Obreque, quien portaba una filmadora, de manera que este vehículo llevaba la posibilidad que este viaje no se esfumara en el tiempo: él atrapando las imágenes cordilleranas y yo con mi libreta de apuntes, tratando de plasmar todo lo que pudieran mis ojos mirar y admirar de este viaje. Debo decir que el Alto Bío Bío y sus cordilleras no necesariamente representan un misterio para mí. Sé de su atractivo, mas no me canso de redescubrir en Santa Bárbara como comuna esta acuarela que existe en su suelo. De manera que no es obstáculo para seguir reencantando mi mirada cada vez que surge el río, el bosque, la montaña tejiendo esa mixtura que le da carácter de postal a Santa Bárbara. En la cabina de la Toyota municipal, junto a don Rubén como conductor y en el asiento de atrás Pepito Obreque, iniciamos al final de la caravana nuestro viaje a las 8.35 hrs., no sin antes pasar a hacer bencina a la estación de Servicio Copec. Con
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45 litros más en su estanque, la camioneta enfiló hacia el Alto Bío Bío, en un día espléndido no imaginado hasta ayer en que el frío, la humedad y la amenaza de lluvia eran una posibilidad cierta. Bordeando el río Bío Bío a la derecha del camino asfaltado, con cordones montañosos a la izquierda, se hace muy serpenteado y la exuberante naturaleza parece que no nos abandonará. En cierto tramo, aunque no extenso, afortunadamente, algún bosque artificial, eucaliptus fundamentalmente, nos ve pasar. Las curvas del camino se acentúan, la Cordillera la Pepa aparece a nuestros ojos sin sombrero, como acostumbran a decir los lugareños cuando no hay amenaza de lluvia, referido a un anillo de nube que suele ponerse en esta montaña cuando se anuncia lluvia. Esto nos señala que estamos llegando al sector de Aguas Blancas, fundo agrícola y ganadero de propiedad de don Eleodoro Matte, empresario, Presidente de la CMPC, pudiendo observar un hermoso santuario en una loma verde levantado a Sor Teresa de Los Andes, que constituye un verdadero atractivo por la arquitectura de su capilla, que se ve enfrentada como figura al fondo montañoso. La neblina, cuando son las 9.10 de la mañana, está muy presente y entorpece al paisaje, aun cuando conforme a nuestro esfuerzo por escudriñar a través de ella, podemos observar suelos agrícolas y ganaderos bien cuidados, planos y animales sobre ellos. La combinación de cordones montañosos a ambos lados como terrenos agrícolas y la inseparable compañía del Bío Bío, forman una constante en este tramo de camino recorrido. La montaña en su afán de mirar el Bío Bío se estrecha y el hombre ha tenido que necesariamente hacer cortes en ella para ensanchar el camino, resistido por ésta que envía de vez en cuando derrumbes de piedras que dificultan el recorrido y lo hacen peligroso. Surgen los gaviones, enrejados con piedras en función de muro que protege de estos ataques de la montaña intervenida. Son las 9.12 hrs. atravesando el puente Pirquinco nos acercamos a Ralco o Alto Bío Bío. Llegamos al puente Queuco, en donde vemos a este río (el Queuco) cuyas aguas se entregan al río mayor (Bío Bío) que las llevará junto a las suyas hasta el mar distante, doscientos cuarenta kilómetros hacia la costa. Las montañas muestran abundante vegetación. A las 9.15 estamos en el balsadero Callaqui, así lo señala un letrero. A la derecha se hace visible una vegetación a nivel de arbustos por su altura de especies arbóreas autóctonas que parecen renuevos, corresponde a la primera comunidad indígena de las siete que agrupan al pueblo pehuenche, etnia que es característica en esta comuna. Una señal en el camino nos indica el kilómetro 80 cuando son las 9.18 hrs. Estamos ingresando a Ralco o Alto Bío Bío, denominación que es ampliamente conocida, incluso internacionalmente, por la relevancia que le ha dado ser zona en donde el río Bío Bío ha sido ocupado como generador de energía, a través de la construcción de dos represas hidroeléctricas a cargo de la empresa ENDESA, hoy de propiedad de un consorcio español. Una barrera nos desvía hasta la tenencia de Carabineros, trámite que todo conductor de vehículo que se interne más arriba debe necesariamente cumplir. Don Rubén se baja, mientras desde el vehículo observo esta especie de poblado con algún desorden y con cierta dosis de actividad, un cuadro abigarrado de casas, locales comerciales, que no son pocos, y vías que soportan un febril accionar de camiones, camionetas y gente con gesto de apresuramiento, en contraste con otra que al parecer espera que el tiempo pase para que las sombras de la noche le traguen su esperanza. A las 9.24, salimos de este espacio reducido de actividad, hacia nuestro destino, topándonos con camiones cementeros (Pol-
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paico) que de seguro están trabajando en la construcción de la segunda central hidroeléctrica, llamada Ralco. Tenemos la visión desde la camioneta del primer exponente de la etnia pehuenche, un niño con esos rasgos tan característicos y que se asemejan a la raza asiática, esperando al parecer que alguien los transporte quizás para qué lugar. Los camiones en esta parte de la ruta serán una constante que distraerá mi atención de mi verdadero objetivo de disfrutar del paisaje. De gran tamaño, cementeros o betoneros y de otros usos, buses, muchos buses que tanto vienen como van, trasladando personal de la construcción. La fuerte presencia de este ambiente asociado a hidroeléctricas, alcanzan a las montañas que muestran como hebras tejidas en su superficie cableado de alta tensión que transporta la energía para el sistema interconectado central, recordando que ésta es producto de la Represa Pangue, hoy en funcionamiento… (continuará).
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