Sonrisas de jean

Sonrisas de jean

FavianaHerrera

Un autobús. Una cámara. Una luna nueva. Una casaca de jean.

Dos sonrisas. Dos jóvenes Un amor de aquellos, en el que ellos fueron los protagonistas.

"Mi mente no eligió esperarte, pero mi corazón sí, quizá porque solo tu tienes esas sonrisas de jean."

Última hora de clase terminada. El joven cogió sus cosas y se despidió rápido de sus amigos, se abrió paso rápidamente entre todos y salió del salón. Su profesor terminó la clase más de veinte minutos después del fin de hora programada.Elchicocorríahaciaelparaderoconlaesperanzadequeelbusno se hubiera ido ya. Para su suerte, la parada de autobuses estaba cerca de su universidad, aunque igual tuvo que correr al ver que la fila de personas que entraban al bus se estaba acortando. Logró entrar al vehículo y fue ahí cuando recién tomó un respiro. Su corazón latía acelerado; Alexis necesitaba llegar a casarápidoparapoderentregaruntrabajo.

Cuando el joven se dispuso a buscar un asiento libre, reconoció a una de sus compañeras de su clase de Matemática Básica La vio intercalando la vista entre un libro y la ventana del vehículo. Maia, la chica que siempre llegaba corriendo a su clase de Matemática, aquella que una vez vio bailar y saltar en un salón festejando algo. La luz de la luna se colaba por la ventana iluminando el rostro de la chica que usaba una casaca de jean y a la que un asiento vacío le hacía compañía. Pero fue algo diferente lo que captó la atención del chico, la razón por la cual, cuando el bus se puso en movimiento, Alexis decidió dirigirseaella.

Hola. ¿Qué tal? La voz del chico sacó de sus pensamientos a Maia, asustándolaunpoco

Hey.

Hoynonostocóclasejuntos,¿no?

No,mañanatocaMate.

Cierto, aún no he aprendido mi horario, sigo teniendo en mi mente el del ciclo pasado. Alexis dejó salir un suspiro, se pasó una mano por el cabello y se lo despeinóunpoco Sequitósuslentesyserecostóensuasiento.

¿Díaagotador?

Sí Me toca Filosofía a última hora Mi mente no pudo con mucha info y creo que colapsó. La suave risa de la chica se dejó escuchar un instante para que luegosuvozaparecieradeformacálida

Filosofíasíesuntantotediosoparaalgunos.

¿Para ti no? Alexis dirigió una mirada curiosa hacia su compañera Filosofía resultabaelcursomáscansadoparaél.Lecturasqueerandemasiado.

Sí,tambiéncreoqueescansado,perointeresante.Reflexionarsobreelactuar

ypensamientodelserhumanoes,sí,interesante.

El frío viento se colaba por la ventana. Ya estaban en los últimos días de agosto, el invierno se estaba despidiendo, sin embargo, para el chico esa noche se sentía como una de abril, en particular, como una en la que esos dos mismos universitarios coincidieron en el autobús, en una circunstancia diferente y en la que solo uno de ellos se dio cuenta. Los jóvenes habían sido compañeros de clase el ciclo pasado No obstante, realmente no habían tenido la oportunidad de conocerse. Ellos no pasaban de reconocerse a la distancia y en ocasiones saludarseamablemente

Supongo que sí es interesante ¿Qué otro curso te gusta? La chica pensó su respuestaporunmomento.

Matemática

¿En serio? A mí también. Me gusta participar en clase. Cierto, tú también eres de las personas que participa Alexis recordó que en clase Maia y él son quienesmáslevantanlamanoenclaseparaintervenir.

Sí,mellevobienconlosnúmeroscreo Yaveo.Yoigual.Creoqueentreletrasynúmeros,mevabienenlosegundo.

¿Quéestudias?

Economía.¿Tú? Comunicaciones

Cool. Es una carrera muy genial, creativa. Hay muchos proyectos y trabajos parahacer Sercomunicadortienesucomplejidad.

¿Túdeverdadlocrees?Lamayoríadepersonascreequeesunacarrerafácil. Eh, no creo que ninguna carrera lo sea Cada una es diferente Y también dependedequienlaestudie,¿no?

Ajá Estoy de acuerdo No creo que se deba rebajar a ninguna carrera o profesión. Alexis asintió dándole la razón a su compañera mientras se ajustabaloslentes Entonces,¿Economía?

Sí. Alexisdecidiónoahondareneltemaycambiódetema.-¿Quélees?

¿Ah?

Vi que tienes un libro contigo. La chica bajó su mirada hacia el libro que llevabasosteniendodesdequehabíatomadoasiento.

Ah,sí.paraleerlodecaminoacasayevitarquedarmedormidaenelbus.

¿Tequedasdormida? Alexisemitióunaligeracarcajada

Oye, es normal Digo, por alguna extraña razón me da sueño mientras voy en elautobus.

Ya, eh, yo creo que eso tiene una explicación. Maia se acomodó en su asiento y lo miró esperando que continuara hablando. Quizá estás cansada, ya sabes,noduermesmuybien

Sí, bueno. El punto es que intento mantenerme despierta en el bus para no pasarme de paradero Una sonrisa divertida estaba adornando el rostro de Alexis. No te rías. ¿Alguna vez te has pasado de paradero? Créeme que no es unabuenaexperiencia,menoscuandoeresnuevaenlaciudad.

Esta vez las risas de ambos se escucharon juntas formando un ambiente cálido alrededor de ellos. La conversación fluyó, bromearon y rieron más de lo que imaginaron Descubrieron que tenían cosas en común y que no eran diferentes a como ellos tal vez se imaginaron cuando se veían a la distancia: él transmitía buenas vibras con su sonrisa brillante, la cual usualmente podías apreciar si prestabas un poco de atención, y Maia se sentía como un mundo tranquilo, diferente, con rastros de rebeldía blanca por salir Ambos risueños y con sus miradastorpementechocandobajolaluzdelalunaesanochedeinvierno.

Enlasemanaluegodesuencuentroenelautobús,losdosjóvenessesaludaban en clases o fuera de estas. Y fue exactamente una semana después de su primer encuentro que volvieron a coincidir en el autobús, solo que a diferencia de la primera vez, Alexis no llegó corriendo, sino a paso tranquilo, feliz y agradecidodequesuclasenosehubieraextendidomásdelahora.Esasícomo coincidieron durante varias semanas en la parada, todos los jueves y casi a la misma hora: el destino hacía que su día universitario terminara con ellos encontrándose para tomar el mismo carro mientras se sumergían en un mundo queerasolodeellosdos.

Las primeras semanas, no hablaron mucho en la universidad, simplemente se saludaban y miraban a lo lejos, pues guardaban sus conversaciones para los autobusesquelosllevabanderegresoasuscasas.

No obstante, un día, el chico de lentes iba caminando relajado hacia el edificio donde tenía clase, cuando de lejos vió a Maia saliendo del departamento de enfermería. Aquello le pareció un poco extraño, por lo que optó por dirigirse haciaella

Maia, ¿qué tal tu día? Dejó salir aquel comentario antes de ver bien el rostro de su compañera. Lágrimas adornaban su mirada y sus pómulos estaban un poco rojos por la emoción Mei, De pronto, vio como las lágrimas volvíanaapareceryquelachicalorodeoconsusbrazosmientrasqueescondía surostroensucuello

No puedo. Tengo miedo. La chica dijo con una voz finita. Alexis rompió delicadamente el abrazo y le regaló una mirada de preocupación. Tomó de la mano a la joven y la guió hasta una banca cercana, sitio en el que esperaba no pasara mucha gente, pues sospechaba que la chica no iba a querer que alguien la viera llorar. Allí, él se dispuso a escuchar empática y atentamente a la chica cuandoellaestuvolistaparacomenzaradesahogarse

Nomelopidendirectamenteperomispadresesperanmuchodemí.Yoespero mucho de mí ¿Qué pasa si no lo logro mantener altas notas? Llevo años esforzándome por tener altas calificaciones, pero ya no quiero presionarme a hacerlo

¿Quépasasinosoylosuficientementebuenadenuevo,sinologrolasmismas notas? Luego de una pausa fue la chica quien siguió hablando. Yo No puedo,tengomiedo.Noquieroquesalgamal.Yonopuedobajardenota.

Hey Mei, escúchame, ¿sí? Mencionó mientras buscaba en su mochila su botella con agua, y se la extendía a la chica. Bebe un poco de agua. Ahora, ¿quisierascontarmequépasó?

Pasóqueotravezmelodijeron.Medijeronquepuedodivertirme,peroqueno puedo salir del décimo superior Que debo centrarme en eso. Yo solo quiero relajarme y dejar de auto presionarme. Quiero que las notas me dejen de importar un maldito momento ¿Sabes qué es ver que otros depositen tanta fe en ti, en que confían en que saldrás excelente, que tus notas son destacables, pero que tú no confíes en ti? Las lágrimas volvieron a amenazar con volver a caer por el rostro de la chica a la que Alexis le había tomado cariño. Él sabía la presión a la que ella misma se sometía y de la cual quería ser libre El chico la abrazó y le acarició la cabeza un momento hasta que sintió que las lágrimas de lajovenpararonyquesurespiraciónvolvíaasermásestable

Creo que pocas personas me han visto tan vulnerable. Gracias por escucharme ylamentoquehayastenidoquevermeasí.-Luegodetomarunpocodelíquido lachicaseatrevióadecirmástranquila.

Hey, no tienes que pedir disculpas Eres humana, y en este tiempo que te conozco sé que tiendes a exigirte demasiado. Alexis se animó a acercarse a Maia y volver a pasar su mano suavemente por la cabeza de la chica en un intento de consolarla, mientras la miraba con ternura. No me imagino cómo debe estar esa cabecita Quizá está exhausta y es comprensible Mei, eres fenomenal, y una nota no va a cambiar eso. Tú siempre das lo mejor de ti en tus estudios No conozco a nadie más dedicada que tú. Pero recuerda no dejar quelasnotasdeterminentuvida.Notehacebien.

¿Cómo es que siempre coincido contigo, eh? Ay, perdón. Te vi y te abracé, lloré y, uf - El rostro de Maia hacía notar lo avergonzada que ella se encontraba. Anteestecomentario,Alexissoltóunapequeñacarcajada.

-Bueno, el destino nos junta. Ah de ser por algo. - El chico intentó sonar divertido para animar a su compañera. Quizá él no conocía mucho de ella, pero sindudaqueríahacerlo.

¿Tienesclasesahora?

-Sí,tengo,bueno,tenemosMatemática.

Cierto. Y por lo que veo, vamos llegando tarde. ¿Te sientes bien para ir a clase?Creoquenoesloquemásnecesitasahora.

Quiero desconectar un rato de las clases. Aquello no tomó por sorpresa a Alexis, Creoquepasohoydeclase.

Bueno, si no te molesta, ¿qué hacemos? La chica lo miró sorprendida. O si prefieres,tedejosola,notepreocupes.

No, no, no es eso. Me tomó de sorpresa que hayas decidido faltar, digo nunca lohaces.Noquieroincentivarteafaltar,enserio.

No te preocupes por eso, yo soy libre de decidir. Una sonrisa alumbró el rostro de la joven. Entonces, ¿faltamos? Cuando la chica estaba por responder,éldijoalgo. Tengounaidea.Séadondepodemosir.¿Vamos?

Sentados en una esquina del techo de uno de los edificios de su universidad, admirando la belleza de las estrellas, los jóvenes se encontraban descansando luego de haber saltado, bailado y liberado energía al ritmo de distintas canciones, pero principalmente, de BTS, el grupo musical favorito de la chica. Alexisnohabíapuestoresistenciaaqueseaellaquienelijalagranpartedelas

canciones, pues, lo único que él quería lograr era que ella sea feliz, aunque sea eneseinstante.Amboschicosdesconectadosdelmundo.Alexishabíatenidola idea de bailar un rato para hacer que su amiga se relaje, pues en una de las ocasiones que coincidieron en el autobús conversaron sobre aquellas cosas que los hacían sentir mejor, relajados y libres, y bailar era la actividad que más disfrutabaMaia.

Túsíquenotecansas. Lachicalomiróyempezóareír.

Bueno, bailar para mí es liberarme de todo y ser solo yo, sin pensamientos negativos, sin estrés, solo la música y yo. Es como una terapia, ¿sabes? Como un momento en que la tranquilidad me invade y me potencia de energía Sí que cansa,peroelgozoestantoquenomeimportaríabailarporhoras.

Pues bailas muy bien ¡¿En qué momento aprendiste tantas coreografías de K pop?!Sondifícilesyrápidas.Eresimpresionante,García.

Lo sé, Valverde Cuando no estoy estudiando ni ayudando en casa, veo tutoriales y aprendo los pasos. Hay algunas coreos más complicadas que toman mástiempoyesfuerzo,peronoimporta,mediviertoaprendiéndolas Algúndíamedeberíasenseñaruna.

Cuandogustes

Prontotetomarélapalabra.

Allí, bajo la luz de la luna, dos jóvenes graban un recuerdo más y la promesa de una clase de baile que, semanas después, se multiplicó por un baile eterno desuscorazones.

Un jueves, ya en el autobús, luego de una semana agotadora de exámenes, los dos jóvenes se encontraban hablando de cómo creían que les había ido en las evaluaciones, mientras admiraban el resplandor de la luna por la ventana del vehículodetenidoqueesperabanqueelsemáforocambiedecolor.

¿Tienesplanesparahoy? Alec

-Depende.Siemprehayalgoporhacer.¿Porquépreguntas?

Talvezestabapensandoenquemeacompañesaunlugar.Séqueteencantará

y prometo que no llegarás demasiado tarde a tu casa. La chica dudó, pero terminóporaceptar

-Meacompañasamicasaantesdelas10pm. Trato.

Alexistomórápidamentedelamanoalachicaylallevóhastalapuerta,donde tocó el timbre para que el conductor pudiera abrirla. Un momento después, dos jóvenes bajaron de autobús corriendo tomados de la mano con sonrisas en sus rostros bajo la luz de la luna creciente, que al igual que cuando se encontraron por primera vez en la parada de autobús, brillaba radiante alumbrando todo bajoella.

¿Entoncesnomedirásadóndevamos? Porsupuestoqueno,serásorpresa

Permanecieron caminando por las calles hasta que llegaron a un parque, el cual tenía un mirador del que se podía apreciar el mar. Las olas eran bajas y suaves, laespumalucíatanblancabajolaluna.

Creo que nunca había visto el mar tan bonito. El brillo de la luna le da un toque especial. Hay días en los que esta se ve tan hermosa, a pesar de no ser lunallena.

A veces la luna se ve mejor un día inesperado. El chico volteó a mirar a su amiga antes de volver a hablar. Ven, corre, aún no te he mostrado lo más genial.

Hey,espera.¿Adóndevamos?Alec.¡Alec!

Yaloverás. Élleguiñóunojoalachica,sacándoleunasonrisa.

Escuchar que ella lo llamara por un apodo en lugar de su nombre, además de hacerlo sonreír, le dio la confianza necesaria para darle un guiño. Si bien Alec no era tímido en esas cuestiones, no le nacía ser pícaro con Mei, con ella eso era distinto. La emoción del chico se sentía en el ambiente, animado mientras su cabello se movía al compás del viento. Alexis se detuvo delante de la entradadeunfaro,esahídondelachicaentendióadóndequeríairsuamigo.

Unfaro. Unfaro Repitióelchicomientrasabríalapuertaydejabapasarasu

acompañantedeaventura.

¿Estápermitidoentraracá?

Sí, no te preocupes por eso. Conseguí que me dejaran entrar al faro hoy de forma legal. Vamos, tenemos que subir. No hay que desaprovechar el tiempo. Maia rió y siguió a su amigo. Al llegar a lo más alto, ella se dispuso a ver el mardesdeallí,mientrasAlecsedirigíahaciaelcuartodecontrol.

Prepárate. Cierra los ojos y cuenta hasta tres. Uno, dos, tres. Los segundos pasaronyelcieloseiluminóporunafuertetemblanteluzprovenientedelfaro.

La joven abrió los ojos cuando Alec terminó la cuenta, y se encontró con una de las escenas más bellas: El cielo estaba iluminado por una radiante luz al igual que parte del mar. El frío se podía sentir, pero la adrenalina del momento impedía quejarse o ver más allá del paisaje. Alec, por su parte, se acercó a donde estaba la chica y también se dedicó a apreciar la belleza que se encontrabadelantesuyo.Cuandolelanzóunamiradaaella,vioquelosojosde Mei estaban muy abiertos, como si quisieran grabarse todo en la memoria, imagen que le pareció muy tierna. Antes de centrarse en apreciar toda la vista sequitósucasacaylacolocódespaciosobreloshombrosdeMaia.

Estodotanhermoso. Seaventuróadecirellamientrasvolteabaaverlo.

Sí lo es Ambos chicos chocaron miradas y adornaron sus rostros con más sonrisas.Alecsevolvióaalejarparabuscaralgoensucelular.

Ten Busca una canción La que quieras Maia le lanzó una mirada sorprendidayaccedió.Rápidamente,ellapensóenunaylareprodujo.

Butterfly Lareconozco Bonitacanción -EljovensesentóyMeiseleunió.

BTS tiene las mejores canciones. Respondió al último comentario de su compañerodeLenguajeconunasonrisaorgullosa -Tengo una idea. - La canción había terminado y esta vez fue él quien eligió la siguiente canción. Le extendió una mano a la chica antes de hablar Parece la ocasión perfecta para gozar de este paisaje con música y desestresarnos de esta semanadeexámenes. Maiatomólamanodeesteyselevantó.-¡Abailar!

Los dos se pusieron a cantar a viva voz canciones de k pop, pop, baladas, cumbia mientras la luz del faro les hacía compañía, saltando, bailando y riendo por los gestos y el cálido y divertido ambiente que se había formado hasta que quedarontotalmenteexhaustos.Enunmomentodelanoche,Alecaprovechóla

ocasión para volver a utilizar su cámara luego de varios años mientras en su rostro se dibujaba la sonrisa más sincera y plena El chico capturó el paisaje con el lente de su cámara y, en ocasiones, este también fotografió a una distraídaMaia,quienlucíatanrelajada,risueñaybonita

Gracias Lo dicho por la chica tomó de sorpresa a Alec, quién ocultó su cámarayllevósumiradahaciaella.

¿Aquéterefieres?

Creoquesínecesitábamosdesconectarunratodetodoydisfrutar.

Denada Mealegroquetehayaagradado.

Ygracias...por...graciasporlacasaca.Síhacefríoaquí. Alecalescucharla solo le sonrió y agachó la cabeza avergonzado con un ligero sonrojo en sus mejillas.

No fue nada, García El hoyuelo del chico se notó al reír junto a la chica, luegodequeestaempezaraahacerloalescucharlo.

Entre ambos surgió un silencio que no resultó incómodo para ninguno. Sus ojos se perdieron en el brillo de la luna mientras oían el sonido de los carros transitarmezcladoconeldelasolasmoviéndoselentamente.

¿Entonces, te gusta la fotografía? La chica fue quien retomó la palabra. Ella miróaAlexisconcuriosidadeinterés Viqueestabastomandofotos

Ah, sí. De hecho, es la primera vez que uso la cámara luego de casi dos años. Fuebueno;volveramanejarunacámarasesintióbien.

Sí, digo, es que pude ver la sonrisa que se te formó mientras sostenías la cámaraquenotéqueeraalgoquetegustaba

Sí,haceuntiempotomarfotoseramiformaderelajarme,deliberarmimente. Buscar fotografiar algo diferente, algo que podía ser común pero que se sentía nuevo. En la voz de Alec se notaba la nostalgia que le causaba hablar de lo quealgunavezhabíasidosupasión

¿Por qué fue que dejaste la fotografía? La chica inmediatamente se dio cuenta que tal vez sonaba indiscreta, así que agregó algo más Perdón, no tienesquehablardeesosinoquieres.

Simplemente,lafotografíanoeralomío,oalmenosesoeraloquemispadres pensaban. Mi mamá insistió mucho en que no perdiera mi tiempo en la fotografíayquemeenfoqueenlosestudios

Ya, pero si te gustaba, entonces no era una pérdida de tiempo. Alec, ¿Sí lo sabes,no?

Eso ya no importa Tenían razón, logré entrar a la universidad que quería, porque empecé a estudiar. No sabes cuánto subí mis calificaciones. La voz de Alexissefuehaciendomásamarga

La fotografía era lo que él había descubierto que le apasionaba Cuando tenía 16 años, siendo un chico ilusionado le fue a decir a su madre que quería ser fotógrafo, pero esta no se encontraba de acuerdo y le quitó la cámara Aquello fueungolpeduroparaél.

Hey, no tienes que abandonar la fotografía, menos aún si es algo que en verdadteencanta.

Noestanfácil,Maia.

Seguroquenoloes,peroapuestoaqueeresmuytalentoso,Alec,nodejesque tusueñosevaya. Meideimprovistorodeóaljovenconsusbrazos.-Estuviste ahí para mí en un momento vulnerable y te agradezco por ello. Me agradas, Alexis, y quiero que sepas que si me necesitas, estaré allí apoyándote. Las miradas de ambos se conectaron a la vez que se iban separando del abrazo. De formafugaz,Alexis,acomodóunmechódetrásdelaorejadelachicayasintió.

Después de apagar la luz del faro y de salir de allí, los chicos se retiraron exhaustos a sus casas. En el taxi, ambos fueron callados, cuando Alec iba a iniciar una conversación se dio cuenta que su compañera se había quedado dormida. Con delicadeza acomodó la cabeza de Maia para que esté en una posición que luego no le genere dolor en el cuello. Una vez que llegaron a la casa de la chica ella se despidió del joven y se bajó del vehículo. Alexis siguió conlamiradaasuamigahastaqueellacruzólapuertadesudomicilio.

Tambiénmeagradas,Jean

Tiempo después de la salida al faro y a varios meses de su primer encuentro casual en el autobús, había compartido varios momentos juntos, meses en los que ambos se dejaron ver vulnerables, felices y tristes ante el otro. Pese a ser bastante cercanos, los primeros meses de conocerse, cuando estaba en la universidad realmente no actuaban como tal, aún no se animaban a hablarse muchoenclase,sentarsejuntosocompartirelalmuerzo,perosíseadmirabana la distancia, por lo que sus mirabas se conectaban seguido cada vez que se encontraban en la misma aula. Sin embargo, eso con el pasar de las semanas fue cambiando, y sus interacciones en la universidad eran más frecuentes y dejabannotarsucercaníaylaconfianzaentreellos.

Una tarde, ambos coincidieron al momento de entrar al salón en que tendrían clase de Matemática, por lo que Alec aprovechó para bromear un poco con su amiga sobre quién lograría primero realizar 20 participaciones en Matemática, ya que a los dos les gustaba ese curso y eran buenos en él, es así como los dos entraron al salón entre risas suaves La clase iba a ser normal, como cualquier otra. No obstante, cuando Alec participó, el profesor preguntó por su apellido para anotar su intervención en clase La voz de una chica como respuesta se pudoescucharenelambiente.

Valverde El apellido de Alexis dejó la boca de Maia tan rápido, y está no se diocuentaquenolohabíadichosinemitirsonido.

Gracias, Maia, por su colaboración, pero dejemos que cada uno responder por su propio nombre. Al escuchar a su profesor, la chica se dio que había cometido un error, entonces se sintió avergonzada y agachó la cabeza tratando de ocultar su rostro de los demás mientras evitaba ver cómo todas las miradas se dirigían a ella. Por otro lado, Alexis miraba divertido la situación al igual que gran parte del salón, entre quienes empezaron a escucharse susurros y risas.

Hey El chico trató de llamar la atención de la chica Gracias por decir mi apellido,aunquemeparecequeyomismolopuedodecir.

Tonto Qué vergüenza No fue hasta que el profe habló que me di cuenta que no sólo había pensado en tu apellido sino que lo dije. Alec se rió frente a la chica,porloqueestahizounademándequerergolpearloconsumochila Tranquila,tranquila.Solobromeo.

ConsideraréfaltaralapróximaclasedeMatemática

Perfecto.Entoncestendrémásintervencionesquetú.

Hoysíqueestásmolesto,Valverde

Relájate, solo que no se te olvide quien va a ganar. Alec la seguía mirando divertido, disfrutando de ese momento Pero, no sólo se leía diversión en sus ojos,sinoquehabíanrastrosdecariñoensumirada.

¿Hoysalesalas8pm?

Sí, ahora me toca clase de Economía Solo espero que la clase termine rápido. Medueleunpocolacabezayprefieroiradescansartemprano. Teacompañoatusalón

¿En serio? Mei, quien estaba tomando agua, casi derrama un poco de esta porelasombroanteelcomentariodesuamigo.

Sí,creoquenuncateheacompañadoaclase. Bueno,siemprehayunaprimeravezdicen,asíqueestábien.

Ambos estaban nerviosos Aquel era el primer día en el que se dejaron ver tan cercanoscomorealmenteloeranfrentealasdemáspersonasenlauniversidad.

Entonces,¿vistelalunaayer?Estababrillandomuybonita. Sí,lavimientrasestabaenlaparadadeautobús. ¿Cómovasconelsueño?¿Siguesquedándotedormidaenelbus?

Oye, sabes que no me agrada quedarme dormida, pero por alguna razón lo hago. Es bastante vergonzoso saber que otros puedan mirarme dormir. Alec comenzó a reír por la forma en la que había hablado la chica. No te burles, sí esalgovergonzoso.

Claro, Mei, lo es. Ten cuidado, no te vayas a pasar de paradero por quedarte dormida.

Nilodigas.Esperoquenopaseeso.

Al término de la clase de Economía, Maia se disponía a salir de la universidad e ir hacia el paradero a esperar el autobús junto a una amiga, pero al revisar su celular,sediocuentaqueteníaunmensajesdeAlexis.

"VenaledificioHluegodetuclase."

Maia se despidió de su amiga y fue a buscar a su amigo al edificio que le había indicado. Grande fue su sorpresa cuando lo encontró dormido en uno de los sillones,sosteniendosulibrodeLiteratura.Cuandolajovenseacercópara

retirar el libro, el celular de Alec cayó al piso. La pantalla del celular estaba prendida, lo que le permitió ver la tierna foto que el chico había puesto como fondo de pantalla. Si bien antes ya lo había visto, al parecer este había sido cambiado. Ahora dejaba ver un sobre un fondo negro una foto que ella le había tomado en una de sus salidas con la cámara del chico. Y es que él, desde que fueron al faro, volvió a usar su cámara, y Maia como forma de motivarlo a seguirenlafotografía,lepidióqueledéclasesparasabermanejarunacámara. Fue en una de sus salidas de clase de fotografía que ella le tomó una foto a Alec mientras este jugaba con su perrito, una foto en la que en el rostro de él relucía tiernamente su hoyuelo; foto que ahora él tenía de fondo en su celular. Aquelloprovocóqueenelrostrodelachicaseformeunasonrisa.

Te ves linda cuando sonríes y no me estás amenazando con golpearme con tu mochila. Alec habló y asustó a la chica, quien retrocedió un poco y luego le quitó el libro de encima para ofrecerle una mano al joven y hacer que se levante.

Vamos,yaestarde. ¡Atusordenes,Jean! Insistesconponermeeseapodo.¿Algunavezmedirásporqué?

Talvezalgúndía. Algúndía. Loremedó.

Ambos fueron hasta el paradero conversando. Maia no entendía por qué la había esperado cuando claramente él también estaba cansado. Si se hubiera ido temprano, el chico habría podido descansar cómodamente en su cama y no en unsillónintentandoleeralgoqueseguronoentendió.

Notepreocupes,solofueunapequeñasiesta,enverdadnoestabatancansado. Bueno,noteníasqueesperarme

Dijiste que te sentías un poco mal y quería asegurarme de que no había empeorado tu dolor de cabeza o para que haya alguien que te acompañe a casa encasodequequierassalirantesdeclase.

Gracias,Alec Puedesseruntonto,perotepreocupaspormí ¿Paraesoestamos,no?Noscuidamos.

Los minutos pasaron y la conversación se mantuvo sin volver a empezar Alexis quiso decir algo, pero se dio cuenta que Maia se había quedado dormida con la cabeza apoyada a la ventana Él se quitó la casaca y la colocó sobre la chica, como si la prenda fuera una clase de manta. Al hacer esto, la chica se removió en el asiento y pasó a poner su cabeza en el hombro del chico. Eso alegróaAlec,alavezqueunrojoclaroseibaapoderandodesusmejillas.

Ojaláytúmismavieraslohermosaqueeres,Jean.

Él chico vio que su paradero ya estaba cerca, entonces un poco dudoso se animó a despertar a la chica. Esta abrió lentamente los ojos, para volver a cerrarlos,yfinalmenteabrirloscontotalrapidez.

Nomedigasquemequedédormida.

-Eh,¿esunapreguntaounaafirmación?

Ambas. Alecsoltóunacarcajadaantelaexpresióndelachica. Tranquila, he visto a cientas de personas quedarse dormidas en el autobús. Además, siempre te quedas dormida según lo que me dices, ya resultaba raro que no te durmieras cuando ibas conmigo. Alec usaba un tono divertido para hablar y fastidiar a su amiga. Antes de que ella pudiera decirle algo, se dispuso a volver a hablar. Ya me tengo que bajar. Te desperté para que no te vayas a pasardelparaderoporestardormida.

Gracias,Alec. Cuídate, ¿si? Me avisas cuando llegues a casa. Y descansa, Jean, lo necesitas. Alec se acercó a Maia y dejó un cálido beso en la frente de la chica, quien cerrólosojosalsentircercaasuamigo.

Alec,...tequiero. Yoigual,Jean,yoigual. Sequedaronviendofijamentealosojoshastaquela puertadelautobúsabrióyeljovensalióporella.

Los gritos de las personas se mezclaban con el sonido del rebote de la pelota en la cancha y el ruido de las zapatillas al deslizarse de un lado al otro. Era el últimopartidodelatemporada,Alexisamabaelbásquetyaunquenoestuvoen susplanes,terminójugandoparaelequipodelauniversidad.Ladestrezadelos movimientos del chico cautivaba a todos los que se encontraban viendo el partido. Maia alentaba junto a algunas de sus amigas, todas disfrutando el partidofinaldelacompetenciainteruniversitaria

La cámara de Alec lo estaba enfocando a él. Jean había sido la encargada de tomarle fotos. En ese momento, el celular de la chica vibró en su mano, revisó la notificación y se percató que era el correo que tanto había esperado. Decidió no leer el mensaje y volvió a mirar hacia la cancha, ubicó rápidamente al joven por el cual se encontraba ahí. Alec estaba esperando que le pasaran la pelota para poder hacer un tiro. Una vez que tuvo el control del balón, corrió hacia el aro en el que tenía que encestar y lo hizo. Sus amigos lo abrazaron; él miró hacia las gradas y se encontró con una imagen que alegraba su corazón: Jean sonriéndole con la que era la casaca de jean de sus recuerdos y la gorra de la selección de la universidad qué él le había regalado. Minutos después, el partidoterminó,yparafelicidaddelchicoydesuuniversidad,suequipofueel ganador.

Nosabíaqueerastanbuendeportista. Losaludólachicabromeando. Quizá hoy me esforcé un poco más. De forma descarada, él le guiñó un ojo Tevesmuybienhoy.

Gracias. Felicitaciones, Alec. Aunque no quieras reconocerlo, sé que disfrutas mucho de jugar para el equipo de la universidad. El chico sonrió, la atrajo para abrazarla y se perdió en el olor de sus cabellos. Luego de un instante, la jovenrompiólacálidaburbujaenlaquesehabíasumergido.

Al cabo de un rato, los dos universitarios salieron del lugar posterior a haberse despedidodesusamigosydelosdirectivosquefelicitabanaAlec.Fueron a la universidad,yaqueesedíaigualteníaclases.Maia,alverqueteníanuntiempo libreantesdequetuvieraqueiraclase,decidiótomarleunascuantasfotosasu amigo.

Ven Aprovecharéquetengoposesióndetucámaraytetomaréfotos ¿Qué?No,no.Nisiquieraestoytanarreglado. Sí, hoy te toca ser modelo Además, quiero que se vea al Alec de siempre Una sonrisa escapó del rostro de la chica mientras veía como su amigo se poníannerviosoytímidoporlasituación

Aproximadamente,unahoradespuésterminaronlasesióndefotos Lachicade casacadejeanhabíainsistidoentomarlefotosendistintoslugares.Claramente, dichas fotografías dejaban ver lo nervioso que estaba el chico, al igual que lo lindo de su sonrisa. Luego de más de media hora decidió detenerse; sonrió satisfechayapagólacámara

Heterminado.Graciasportueficientecolaboración. ¿Quédices?¿Seguraquesalieronbienlasfotos?Déjameverlas. No. Las verás, pero hoy no. Confía en mí. Eres muy fotogénico, ya te lo he dicho. Saliste muy bien en las fotos. Además esa sonrisa tuya vale oro. Alec se sonrojó notoriamente, por lo que se volteó de modo que su amiga, la chica quelegustaba,nosedieracuentadeaquello.

Lomismopodría decirdetusonrisa,Jean.

Después de haber asistido a todas sus clases, y en ellas ir recordando la "sesión de fotos" de Alexis, se volvió encontrar con este para regresarse juntos en el autobús. El chico se había quedado dos horas más esperando que ella salga de clase mientras tomaba algunas fotos por la universidad. El año universitario se estabaacabando,ypeseanoestudiarloqueélquería,estabaseguroqueestaba en la universidad que él quería estudiar. Fue una noche tranquila, un buen día para ambos. La joven recordó que aún no había revisado el correo que le había enviadolauniversidadalaqueaplicócincomesesatrás.Eldíaenqueéllavio, peroellano.Rápidamente,revisósucorreoyloencontró.

Antes de salir de la universidad, la chica le había dicho que tenía algo importante que contarle. Él ya sabía del sueño anhelado de la chica de estudiar en el extranjero, y meses antes se había enterado que ya había aplicado a una universidad fuera del país. Cerca a la entrada de su institución, ella abrió el mensaje y lo leyó. Alec esperó que un gesto le indique que había sido aceptada yasífue.Lachica,alaqueéltiernamentellamaba"Jean",gritódealegría.

¡Lo logré! ¡Lo logré! ¡Ingresé a la Universidad de Utah! La chica corrió hacia Alec. Él recibió entre sus brazos a la chica que se había robado su corazón y la cargó para hacerla dar una vuelta mientras la abrazaba Aquel gesto tomó por sorpresa a Jean, quien tuvo que apoyarse en los hombros de su amigo para no caerse, mientras veía como él la miraba con total adoración, admiración y orgullo. La felicidad de ella no podía ser más compartida por él. Luegodetantotrabajoyesfuerzo,ellairíaacumplirsusueño.

¡Felicidades, Jean! ¡Lo lograste! Estás cumpliendo tu sueño. Estoy muy orgullosodeti,Mei

Maia estuvo intentando decirse a sí misma que aquello era real, que tenía una beca completa para irse a estudiar al extranjero a la ciudad y a la universidad queelladeseaba

Luego de ese memorable momento para ella, ambos tomaron el autobús. Alec podía ver la ilusión de la chica en el brillo de sus ojos, justo como meses atrás. Ellaaprovechóparaescribirleasuspadresyasusamigosycontarlesquetenía buenas noticias. Era irreal. Un correo esperado por meses al fin había llegado para traer de vuelta al juego los sueños de la chica y el fin de una historia de amorpuraysincera.

Con el pasar de las semanas, el tiempo de Maia en Perú se iba acortando. Luego de enterarse que cumpliría su sueño, habló con sus padres y confirmó quetomaríalaplazadeestudioalauniversidadquelahabíaaceptado.Lafecha de viaje estaba cerca. Fue después de la emoción y felicidad como consecuencia de la gran noticia que cayó en cuenta que cumplir su sueño significaba despedirse de algunas cosas y personas importantes para ella. Dejaría a su mejor amiga y al chico que le robó el lugar en la fila del autobús meses atrás. Dejaría a su familia, a la universidad a la que le tenía mucho cariño,alosamigosquehabíahechodurantetodasuvida.Enrealidad,eraeso. Dejaría un capítulo de su vida para empezar uno nuevo a cientos de kilómetros dedistanciaenunaciudadypaísdiferente.

El día de su viaje decidió pasarlo con sus personas favoritas Maia estuvo llena de risas, bailes, abrazos, lágrimas y deseos de buena suerte con promesas de volverse a reunir y encontrar con aquellas personas con las que compartió grandesrecuerdos.Porotrolado,Alec intentó mantenerse alegre todo el día, lo que menos quería era que Mei empezara a vivir su sueño con un sabor amargo, así que él le regaló todas las sonrisas que pudo y se dedicó a grabar en su mente aquella sonrisa, la de la chica de casaca de jean que lo había enamorado desdequelavio.

Los dos jóvenes se encontraron por la tarde al fin solos, fueron al mar y estuvieron arrojando piedras mientras dejaban pasar los minutos Se tomaron fotos y jugaron con el agua salada, gozaron y por supuesto que bailaron con la caída del sol detrás de ellos Ambos habían intentado llevar ese día como cualquier otro. Hasta que llegó el momento en el que tuvieron que volver a la realidad y despedirse Se envolvieron en un abrazo, las lágrimas en los ojos de la chica cayeron lentamente a la par que se rompía su abrazo. Alexis limpió suavemente las gotas del rostro de la joven, depositó un cálido beso en su frente y las unió dulcemente. Ambos cerraron los ojos y se aferraron en ese instante a sentir que se tenían el uno al otro. Días antes, los jóvenes quedaron en no hablar luego de que ella se fuera del país como forma de dejarse ir. Alec no quería ser parte de la tristeza de la chica cuando ella esté lejos Un nuevo mundo se abriría ante ella. Lo mejor que ambos podían hacer era recordarse comoeseagridulceprimeramor

Yo...

Tú, tú tienes un sueño que cumplir. Que nada te detenga. Ha sido un placer conocerte,Jean.

Alexis,graciasporhabermehabladoenunautobúsunanochedeagosto. Graciasatiporsonreír

Los jóvenes nunca se dijeron lo que sentían, y quizá fue lo mejor en su momento. Tal vez nunca lo expresaron en palabras, pero ellos lo sabían, lo vieronenelbrillardesusojosalcruzarseyenlassonrisasqueensusrostrosse mostraban cada que se trataba del otro. Se quisieron y sus lágrimas fueron testigodeello

...51mesesdespués

Una noche fría, bajo la luz de la luna creciente y el revolotear de mariposas de un naranja brillante, su mirada se posó en una figura que él anheló ver por más de cuatro años. Ese brillo escondido de su mirada volvió a parecer, y su corazón comenzó a latir por todo el tiempo que estuvo dormido. Era ella, era Jean.

Luegodelapartidadelachicaalpaísalqueiríaacumplirsusmetas,Alexisse refugió completamente en la fotografía, intentó plasmar sus sentimientos y emociones en cada toma, y finalmente se convirtió en lo que el siempre quiso: unfotógrafo

Esa noche estrellada, Maia miraba hacia el mar oscuro con una brillante sonrisa. Respiró y se acomodó su casaca de jean favorita haciendo relucir aquellos pins de caritas felices que el chico de lentes le regaló el día que ella dejóPerúparairseenbuscadesusueño.

Allí, cerca una parada de autobús, cerca al faro al que fueron años atrás, en el país donde se albergaban todos sus recuerdos, bajo la calidez de la luz de la luna, sus miradas se volvieron a cruzar. Sus ojos expresaban lo que sentían. Un reencuentro deseado por ambos. Las sonrisas aparecieron inmediatamente en los rostros de ambos, quienes en algún momento no pudieron plenamente escribir su historia de amor. Eran Jean y Alec. Eran Maia y Alexis. Dos jóvenes que aún, a pesar del tiempo, se seguían amando, pues, sus corazones decidieronesperarse.

05 de abril

Una chica caminaba hacia el paradero del autobús de forma tranquila con una sonrisa en su rostro Había dado el examen universitario para el cual se había preparado durante mucho tiempo y en el que creía que le iría muy bien y que la llevaría cumplir su sueño, y luego del cual había celebrado en un salón de la universidad antes de que empezara su clase. Esa noche, ella llevaba una casaca de jean, con el cabello despeinado por el viento, pero alegre No era una noche fría, al contrario, era el fin de una cálida tarde que ya se oscurecía para dar paso al astro que iluminaba con luz blanca el cielo Llevaba pocos días desde que había iniciado la universidad, pero los había estado disfrutando y estaba segura que lo seguiría haciendo

Al ver que apareció un bus apresuró un poco el paso La joven estaba en una burbuja que no se dio cuenta que había una fila de personas, en su mayoría estudiantes, esperando su turno para ingresar al vehículo Ella pasó su tarjeta universitaria e ignoró, inconscientemente, los murmullos refunfuñantes del chico que se disponía a subir al autobús cuando ella lo hizo Fue hasta el fondo del bus y se sentó en el asiento que estaba a la izquierda cerca de la puerta trasera Rápidamente buscó algo en su bolso y extrajo de él un libro que lucía grueso, guardó su celular antes de cerrar su mochila y la abrazó mientras colocaba el libro sobre esta Un llavero con un pequeño adorno en forma de libro que colgaba de su mochila fue alumbrado por la luz de la luna, la misma que iluminaba a la chica de casaca de jean

El chico de cabello negro que subió detrás de ella no se animó a reclamarle a la joven, ver cómo sonreía y que ni siquiera notaba su pequeño error, porque estaba envuelta en su propio mundo, lo hizo sonreír y negar con la cabeza mientras se acomodaba sus lentes azules.

11 de mayo

Un joven llegaba tarde para su examen de Matemáticas, pese a que sabía que había perdido casi diez minutos, decidió no correr hacia su salón Mientras caminaba del paradero a la universidad, vio que una chica pasaba a gran velocidad abriéndose paso entre las personas que caminaban a ritmo lento Con una sonrisa ella pedía disculpas y pasaba entre todos mientras hacía sonar al compás de sus pasos el llavero que colgaba de su mochila Un llavero conocido para los ojos del estudiante. El joven intentó alcanzarla, pero la perdió de vista entre todas las personas que transitaban Un recuerdo vago vino a su mente Ese llavero lo había visto antes, el mismo libro pequeño que acompañaba a unas llaves. Era ella. La chica de la casaca de jean.

Trabajode

Fotografía

MaiaGarcía

Yoursmiletell

¿Por qué hay tantas lágrimas cayendo? Hey, quédate junto a mí y ríamos Un futuro sin ti es un mundo sin color Observo esa monócroma frialdad Hasta la oscuridad es bella

Quiero que confíes en mí No hago más que observarte Para que así no te vayas a ningún lugar

Lo que sea que estés esperando Algo que esté muy lejos de aquí El lugar que tú me diste sigue siendo Aquel lugar seguro para mi corazón

Las sombras del pasado me persiguen una y otr Pero mientras más intento escapar y luchar, más me Mas no dejo de desearlo, donde sea que estés te enc Caminaré junto a ti

Incluso si esto pareciera ser el principio del fi Pronunciaré tu nombre Esos ojos que observan están tan llenos de co Incluso si no se volviese realidad, haré todo lo que A pesar de no ser aún capaz de poner en palabras el sueño difícil

Para enfrentar el pasado y el futuro Es en noches como estas en que no dejo de pens Cuánta fe se necesita para llegar hasta donde tú estás En la ciudad a mitad del crepúsculo

Para ser amado, para amar a alguien, me convertiré en tus ojos Con miras a la aventura que nos espera

Hasta la oscuridad que observamos es bella Quiero que confíes en mí No hago más que observarte Para que así no te vayas a ningún lugar Esos ojos que observan son tan bellos Tú me enseñaste que ún día, la tristeza habrá de cambiar nuestro destino

Ah ah ah Tus ojos me lo dicen Ah ah

Hey, quédate junto a mí y ríamos

TÚ

El lugar que Aquellugarseguro paramicorazón

me diste sigue siendo

Caminaré junto a ti

Donde sea que estés te encontraré

Inclusosiestopareciera

serelprincipiodelfinal

Pronunciaré tu nombre

Incluso si no se volviese realidad, haré todo lo que pueda

Esos ojos que observan son tan bellos

Quieroque confíes enmí

Túmeenseñasteque

Algún día, la tristeza habrá de cambiar nuestro destino

Un autobús.

Una cámara.

Una luna radiante. Una casaca de jean.

Dos sonrisas.