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VIERNES, 4 DE MARZO DE 2016
TRAYECTORIAS LITERARIAS
DOMINICANAS RAMÓN SABA
Max Henríquez Ureña Nació en Santo Domingo el 16 noviembre de 1885 y murió en esa misma ciudad el 23 de enero de 1968, a los 81 años de edad. Su nombre completo era Maximiliano Adolfo Henríquez Ureña, hijo del escritor y expresidente de la República Dominicana, Francisco Henríquez y Carvajal y de la educadora y poeta Salomé Ureña. Escritor, poeta menor de corriente modernista, músico, ensayista, orador, profesor y diplomático. Fue discípulo del poeta Emilio Prud’Homme, autor del Himno Nacional, quien le orientó para completar un bachillerato en Ciencias y Letras; luego concluyó un doctorado en Filosofía en Letras en Cuba. Fue profesor de literatura de la Escuela Normal para Maestros de Santiago de Cuba, director del Ateneo y de la Academia de Derecho González Lanuza, de Santiago de Cuba, miembro de número de la Academia Nacional Cubana de Artes y Letras, embajador en varios países, ministro plenipotenciario de la República Dominicana en Londres y en Washington, secretario de Estado de Relaciones Exteriores, superintendente general de Enseñanza, secretario de Estado de Interior y Policía, miembro de la Academia Dominicana de la Lengua, miembro correspondiente de la Academia Mexicana de la Lengua, conferencista de la Facultad de Filosofía de la Universidad Federal de Río de Janeiro y profesor de la Universidad Autónoma de Santo Domingo y de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña. La notoria versatilidad literaria y artística de Max Henríquez Ureña puede demostrarse en la cantidad de géneros que abordó y de los cuales nos legó una brillante bibliografía. En poesía: Ánforas, Fosforescencias y Garra de luz; en novela: La independencia efímera, La conspiración de los Alcarrizos y El Arzobispo Valera; en cuento: Cuentos insulares: cuadros de la vida cubana; en Ensayo: Tablas cronológicas de la literatura cubana, El retorno de los galeones (bocetos hispánicos, Les influences Francaises sur la poésie Hipano-Americaine, Poetas cubanos de expresión francesa y De Rimbaud a Pasternak y Quasimodo: ensayos sobre las literatu-
LITERATURA
ras contemporáneas; en historia literaria: Panorama histórico de la literatura dominicana, Panorama histórico de la literatura cubana y Breve historia del modernismo; además las antologías: Pedro Henríquez Ureña: antología, Episodios dominicanos (novelas) que contiene: La independencia efímera, La conspiración de los Alcarrizos, El Arzobispo Valera y El ideal de los trinitarios…. Entre otras obras más. Es simpático mencionar una anécdota no confirmada, que cuenta que en México, a su hermano Pedro Henríquez Ureña, el más notable intelectual dominicano, le llamaban El Menos, porque él era El Max. El historiador Bernardo Vega estima que haber colaborado con el régimen de Trujillo no invalida el que Max Henríquez Ureña haya merecido el reconocimiento póstumo Max Henríquez Ureña con la designación de una calle en su honor porque, ni en su función diplomática, que fue breve, ni en su obra literaria y educativa, el notable ensayista, crítico literario y narrador se vio involucrado en hechos de sangre. Tampoco aprovechó los cargos en el exterior para delatar las actividades del exilio antitrujillista, como era práctica de esos enviados. Si la razón para negarle esta distinción es haber sido diplomático al servicio de Trujillo, entonces también habría que estar en contra de que haya vías con los nombres de Héctor Incháustegui Cabral, Osvaldo Bazil, Tomás Hernández Franco, ente otros, porque lo fueron. El poeta y editor León Félix Batista: Es poco común, en nuestra historia cultural, encontrar que varios miembros de una misma familia se decanten por el ejercicio de las letras. Y ese ha sido el caso singular de los Henríquez Ureña, empezando por sus propios padres, Salomé y Francisco.
Max Henríquez Ureña obtiene por méritos propios la categoría de polígrafo, como su célebre hermano Pedro, puesto que su obra abarca la narrativa, la historia y la crítica y ha sido necesario publicarla en 28 tomos. Estudios, investigaciones y ficción salidos de su pluma convierten a Max Henríquez Ureña en uno de nuestros intelectuales más completos y modélicos de la práctica de la escritura y el pensamiento. Finalmente, el poeta y gestor cultural Juan Freddy Armando asegura que es indudable que Max Henríquez Ureña es un prosista elegante que supo unir lo ameno a lo profundo; articulista agudo, crítico fino y cultísimo que aportó a la literatura latinoamericana muchas observaciones de gran valía, como podemos ver en su Breve historia del modernismo, análisis del teatro europeo, estudios musicales. Todo esto sumado a su gran desempeño como diplomático, que fue tan valioso que aun siendo representante de la dictadura de Trujillo ante las Naciones Unidas, se ganó el respeto y admiración de todos los embajadores de otras naciones, incluyendo muchas comunistas. Concluyo esta entrega de TRAYECTORIAS LITERARIAS DOMINICANAS agradeciéndole al poeta Juan Freddy Armando (cuando él laboraba en el Ministerio de Cultura) haberme confiado ser uno de los correctores de estilo de Las Obras y Apuntes de Max Henríquez Ureña, que tuvo como base los documentos recuperados por el historiador Luis Felipe Céspedes, y que ordenara el entonces ministro de esa cartera, el escritor José Rafael Lantigua, la cual consta de 28 tomos.
René Rodríguez-Soriano presenta nueva obra l laureado poeta y escritor dominicano René Rodríguez-Soriano puso a circular anoche su nueva producción poética en el Centro Cultural de las Telecomunicaciones, en Santo Domingo. La obra lleva por título “Nave sorda” y es un compendio de poemas de reciente factura escritos por
E
Rodríguez-Soriano, quien reside en Estados Unidos desde hace varios años. El autor, quien ha recibido importantes reconocimientos y premios, tales como Seekers International Award 2009, Premio UCE de Poesía 2008, Premio UCE de Novela 2007 y Premio Nacional de Cuentos 1997, forma parte de
la denominada Generación de los 70, en la que compartió espacio con otras luminarias de las letras dominicanas como Juan Freddy Armando, Aquiles Julián, Raúl Bartolomé, Rafael Peralta Romero, Ramón Saba, Pedro Pablo Fernández y José Galván, entre otros. La presentación del libro
estuvo a cargo de la poeta y novelista Martha RiveraGarrido y tuvo como compañía la exposición de pinturas y dibujos de la artista plástica Venus Guerrero. Rodríguez-Soriano agotará una gira de presentaciones en otras comunidades del país, entre ellas su natal Constanza.
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René Rodríguez-Soriano