Facetas 02 de febrero de 2014

Page 7

DOMINGO 2 DE FEBRERO DE 2014 - IBAGUE

EL CUENTO

Él no es él José Hilario Yepes* Jamás en la vida pensó Óscar que una aventura pasional pudiera cambiar de un tajo la vida. En una flota viaja de regreso a las playas del caribe. Piensa y cavila. Continúa confundido. Hace pocos días regresó a su hogar ubicado en la Comuna Oriental de la ciudad en donde se divisan los perfiles de la urbe y el transporte elevado del Metro. Era de noche, y extrañó que dentro de la vivienda pronunciaran letanías para fallecidos. En la puerta de entrada se detuvo. Una mujer de negro se desmayó, luego fueron cayendo fulminados por un rayo de pánico varios concurrentes. Óscar seguía confundido. Los que estaban próximos empezaron a tocarlo y dijeron: Pero a vos ya te enterramos-. Con esfuerzo levantaron a los desmayados que tajantes afirmaron que él, ya estaba muerto. La viuda se apoyaba del brazo del nuevo esposo, quien vivía con nueva familia gracias a un jugoso cheque extendido por la factoría en donde laboraba el difunto. Los hijos: cinco del matrimonio y uno adicional dijeron sin titubear: Te va mejor que sigás muerto-. Óscar no fue padre afortunado y como bohemio dio gran importancia a la bebida y a la pernicia. Así, el hombre optó por retirarse y luego visitó al párroco de la iglesia del barrio, el cual reafirmó la sentencia pública. Dijo, que él había sido reconocido como fallecido en un accidente de transito, y borrado de la lista de parroquianos vivos. Visitó la empresa y después del susto de los compañeros al ver la aparición de un fantasma, le comentaron que ya habían cancelado todos los gastos funerarios y extendido un cheque por las prestaciones de ley, y dijo el jefe de personal: Para todos es más conveniente que sigás muerto.Informaron a la EPS del deceso. Lo eliminaron como cotizante y comunicaron el evento a la Registraduría Nacional, hecho por el cual convirtió a Óscar en un indocumentado. El hombre seguía confundido, ya que lo malo del evento fue que él

en un arrebato de aventura, convido a una rubia teñida a un paseo al mar, y allí se alargó la fiesta y ahora al regreso le decían por todas partes que estaba fallecido, y que ya él no era él, sino un demiurgo. Fue a buscar a la amiga del paseo y luego de golpear insistente una puerta rústica de madera, un vecino a través de una ventana le informó que allí no vivía nadie y hacia mucho tiempo había fallecido una anciana y desde ese día el lugar permanece solo. Óscar escudriñó de un lado a otro. Estaba seguro que allí había recogido a una mujer joven y agraciada y por varios días se divirtieron en las playas del mar caribe. Un hombre indocumentado y confundido se bajó de un bus a la orilla del mar y visitó la casa que permanecía anclada con palos, nadando en la orilla del agua azulosa y un pescador untado de arena, dijo que ese bar hacía mucho tiempo permanecía cerrado. Óscar preguntó al pescador: Usted, me vio en estos días por acá con una mujer rubia?-. No, no puede ser. Estás equivocado. La marea alta corretea a los bañistas-. El confundido varón permaneció varios días en la playa, tal vez buscando explicación del evento. Un ribereño halando una carreta de madera le dijo: No joda, cachaco, hace días que tú estás tumbado en la arena mamando ron. Vente a trabajar-. Desde ese día el hombre que parloteaba con el mar, observando las ecuaciones trazadas por el vuelo de los pelícanos al amanecer y los barcos transatlánticos cargados de sueños en el horizonte, trata de sacar a flote la verdad. Sin identificación. Un muerto vivo, grita por las calles: ¡Pescado!, ¡pescado fresco!-. Ahí viene el cachaco- dice una mujer. Se escucha en la radio una canción: No estaba muerto, estaba de parranda Un hombre curtido de sol y arena, arrastra una carreta goteando agua salina. Sigue confundido. Vive otra vida… *Escritor colombiano

FACETAS

PALABRA DEL DIA

Anaconda Aparece primero en inglés como nombre de una enorme serpiente pitón de Ceilán, llamada en cingalés henandakaya, que significa ‘tronco luminoso’, transcrito al inglés por el naturalista británico John Ray en 1693. En 1802, el zoólogo francés François-Marie Daudin usó ese nombre para designar una enorme boa sudamericana, conocida como «anaconda verde» y clasificada zoológicamente como Eunectes murinus. La Real Academia Española registra el vocablo anaconda desde 1927, referido apenas a una «serpiente americana de más de diez metros de largo». Pocos años antes de su aparición en el diccionario, el cuentista uruguayo Horacio Quiroga describía así el enorme ofidio en su cuento Anaconda (1921): La Anaconda es la reina de todas las serpientes habidas y por haber, sin exceptuar al pitón malayo. Su fuerza es extraordinaria, y no hay animal de carne y hueso capaz de resistir un abrazo suyo. Otra etimología que se ha propuesto es la palabra tamil anakkkonda, que significa “el que mató un elefante”. *Elcastellano.org

7


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.