50 Abriles

50 Abriles Cabudare, 01 de junio de 2022

M i remembranza Empiezo mi autobiografía recordando algunos eventos que marcarían y guiarían mis primeros 50 años de vida llenos de dichas, alegrías, tristezas, miedos, fracasos, aciertos, aventuras, sueños, metas, objetivos, rodeado de gente maravillosa: Mis abuelos paternos: Amalia Rosa Suarez y Jesús María Vargas originarios de Humucaro Alto, Municipio Moran, Estado Lara. Mis abuelos maternos: Juana Elisita Torres y Sixto Julián Granado originarios de Cordero, Municipio Iribarren, Estado Lara amores infinitos, también tengo la gran dicha de haber conocido y disfrutado de mis bisabuela paterna María Etanisla Suarez, mis bisabuelos maternos Isabel Oviedo y Ramón Torres mis tías maternas y sus esposos: Belkis Alicia y Marcos Piñero, Leída Violeta y Mervin Álvarez, Mara y Manuel “Oto” Colmenarez y Haide Jaqueline, mi tía paterna Magdalena y el Catire todo un vendaval de pasiones y emociones que junto a mi madre serian ejemplos de vida, mis tíos paternos y sus esposas: Juan Vargas y Julia Mora, Ito “El Conde“ y Ana Meza, Raúl Vargas y América, Ángel Vargas y , Oswaldo Vargas, Rafael Vargas y Arnoldo Vargas, mis tíos maternos: José “El Chino” Rea, William Granado y Zaida Cadevilla, Julio Granado y Gloria Marchan, Asdrúbal y Hilda Pérez primera esposa, Carmen Pariacano segunda esposa, Éibar Granado y Olsi, y Rudy Granado y Vilma; de los que aprendí parte de lo que soy hoy día.

Mi madre Hilda Isabel Granado amor infinito que me acompaña hasta estos días, mi padre José Estanislao “ El Bachaco” Vargas amor infinito que me acompaño durante 40 años y 12 desde el olimpo, mi hermosa hermana Grexis Yurima Vargas Granado amor infinito disciplinada, estricta con sus cosas; también tuvimos nuestras peleas de hermanos sobre todo por aquel televisor de perilla que sonaba TA TA TA TA TA para ubicar el canal de preferencia; con ella se originaria una tormenta familiar que duro poco tiempo porque gracias a mi madre y unas tías pusieron orden para que mi hermana llevara su embarazo en paz y con tranquilidad necesaria, hasta aquel 15/08/1989, que nacería mi sobrino Richard Robert Rocha Vargas mi niño, mi carajito hoy día médico cirujano residenciado en Madrid, España dirigiendo su clínica estética junto a su mama.

Edilbert Vargas

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50 Abriles Mis amigos del barrio al final de la calle 3 ruesga norte, sector dos, vereda 24 nuestra casa es la #24 donde crecí jugando metras, loco escondió, pelotica e’goma, manejando bicicleta, patineta, jugando trompo (mi papa los hacía de palo de guayaba), nos reuníamos en la esquina del poste, en la vereda, en casa de fulano, sutano o perencejo, elevando papagayos ( mi papa también los hacia), pero el juego rey era jugar futbolito con aquella pelota o balón viejo sin casi aire algunos descalzos, otros con chancletas viejitas o con los zapatos de goma más viejitos que se podían tener éramos, las arquerías las hacíamos con cuatro piedras más o menos grandes y llegado el momento empezaba el partido, conducir el balón, pasar el balón a mis compañeros de equipo según las estrategias que armábamos y de pronto hago un tiro al arco y es gol salgo corriendo y gritando a los cuatro vientos GOOOOLLLL DE MARADONAAA GOOOLLL DE MARADONAA, era yo un niño feliz, fuimos niños felices con montones de carencias.

Mis amigos del liceo Ciclo Básico Industrial General Jacinto Lara, que era hasta el tercer año de bachillerato, luego pasábamos para Escuela Técnica Industrial General Pedro León Torres; con los que crecí, y hoy día somos una hermandad de 40 años “Fe Perdida”.

Mis Amigos del béisbol, del voleibol.

De los sitios donde trabaje en uno de ellos conocí a mi actual pareja-esposa Belkis Leonor García Mosquera con la que he vivido años y momentos extraordinarios algunos los llegue a imaginar otros nunca, como aquel 04/06/2011 cuando me llama por teléfono para decirme que había nacido Bárbara Sofía nuestra primera nieta(astra), yo me encontraba trabajando en el estado Amazonas, y en ese preciso momento de la llamada estaba frente a la inmensidad del Rio Orinoco y de una vez le pedí al padre rio que cuidara, orientara a mi niña en su vida.

De la universidad, Universidad Experimental Politécnica Antonio José de Sucre, Vice rectorado, Barquisimeto.Y también gente no tan “buena”; como aquel jefe que no me dio permiso para ir a un chequeo o tryout de béisbol tenía 22 años era pitcher con excelentes condiciones deportivas.

Edilbert Vargas

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50 Abriles Aquel profesor jefe del departamento de ingeniería mecánica en la universidad que no quiso renovar mi contrato de trabajo como auxiliar docente por razones políticas.

Espacios citados en la actualidad

Aquí mismo tuve otro profesor que desde el primer día de clases como se dice coloquialmente “ me la juro” públicamente; hasta el último día de clases no supe de mis notas en los parciales, trabajos de investigación etc., recuerdo estar con un grupo de compañeros de clases esperando las notas y yo no aparecía por ningún lado en ese momento me doy casi por vencido pasaron unas horas, y me encuentro al profesor caminando hacia el estacionamiento de la universidad, y lo enfrento y le pregunto por mis notas; el profesor sonriendo simplemente me dice te felicito amigo Vargas me aguantaste la guerra aprobaste con 11 puntos; en ese momento mi paciencia llego al límite, y diplomáticamente le exijo que me demuestre por que 11 puntos; también resulto ser parte de su estrategia el que yo le reclamara subiendo mi nota final a 14 puntos.

Otro “jefe” que tuve; que por razones personales; me saco de una lista de compañeros que viajaron al exterior por trabajo.

Todos ellos con sus virtudes y defectos me enseñaron lecciones de vida que me orientaron a tomar decisiones, a corregir mis aptitudes, mis actitudes a vivir en una mejora continua.

Edilbert Vargas

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50 Abriles Así llegue a este mundo tan convulsionado...

Mi partida de nacimiento reza: Marcelo Antonio Sánchez, Primera Autoridad Civil del Municipio Concepción, hago constar que hoy quince de mayo de mil novecientos setenta, me ha sido presentado en este despacho un niño varón por: Hilda Isabel Granado de Vargas, de veintidós años de edad, casada, de oficios del hogar, domiciliada en el bloque diez, apartamento número dos, Urbanización Terepaima, quien dice ser su madre legitima, y expresa que el niño que presenta nació en el Hospital Central Antonio María Pineda de esta ciudad, el día Tres de Abril de Mil Novecientos Setenta, a las cuatro y diez minutos de la mañana, que tiene por nombre: Edilbert José; y que es hijo legítimo de la presentante, y de su cónyuge: José Estanislao Vargas Suarez, de veintidós años de edad, casado, electricista, y con el mismo domicilio.

Signo de Aries forma parte de los signos cardinales y al mismo tiempo es un signo de fuego; también es el primer signo del zodíaco, precisamente por eso, simboliza el inicio, la creación. Se caracteriza por ser una persona rebosante de energía y entusiasmo; avanzada y aventurera, adora la libertad, los retos y las nuevas ideas.

Mi signo zodiacal

Permítanme explicarles, que los “oficios del hogar” han sido y siempre serán muy importantes para todos en este mundo, y todas las mujeres que lo ejercen se merecen el reconocimiento, respeto y valor justo, además de que mi madre, a parte que ejercía los oficios del hogar, para cuando me trajo a este mundo; ya tenía años trabajando como Secretaria Comercial egresada a sus 17 años de edad del Instituto Mosquera Suarez, que estuvo en la carrera 17, esquina calle 30, y asumía la responsabilidad en su casa con sus hermanos menores de apoyarlos en sus diferentes necesidades.

Edilbert Vargas

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50 Abriles El Comienzo de mi Existencia…

Mi bautizo y mi primer cumpleaños...

3 de Abril de 1971, hora: 7 pm, Barquisimeto Soy el mayor de dos hermanos.

Mi madre me ha contado lo difícil que fueron esos primeros años de matrimonio, con un hijo, y viviendo en casas de unos tíos por parte de mi papa; siempre ha estado el agradecimiento de corazón por todo aquel apoyo que recibieron, vivimos en las urbanizaciones: La Terepaima, La Estación y La Sucre aquí en Barquisimeto; esta situación llevo a mis padres a organizarse mucho mejor, a llevar un control en los gastos, llevar presupuestos, combinaron sus respectivas experiencias para la época y la comunicación constante, la felicidad seguiría en aumento porque para el Catorce de Abril de Mil Novecientos setenta y uno, nacería mi hermana Grexis Yurima Vargas Granado, y con ello las complicaciones, carencias propias que generan el llevar una familia por el buen camino; junto a la situación económica, social y política de aquella Venezuela Saudita, del ta barato dame dos, mis padres no podían comprar una casa siendo ambos trabajadores del sector privado.

La economía venezolana se aprovechó de los altos precios del petróleo durante la crisis petrolera de la década de 1970 y del superávit que esta le proveía; esto fue el detonante para que el Gobierno se endeudara con el exterior.

Edilbert Vargas

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50 Abriles Invocación de mi niñez….

Mis padres nos llevaban en el día por sus respectivos trabajos, para la casa de mis abuelos maternos que era gigantesca, tenía un porche con piso de mosaicos, cinco cuartos, una sala grande, una cocina grande, un área donde mi abuela Juana Elisita mujer humilde, delgada con cabello largo, liso de color negro, que siempre usaba vestidos por debajo de las rodillas de variados modelos, colores y estampados confeccionados por ella misma con sus sandalias caseras; nos recibía con una sonrisa única, un abraso y su bendición que por lo general estaba entre la cocina y área de costuras; porque a aparte de ser ama de casa, también era costurera, y tenía su máquina de coser “La Negrita” de la Singer de pedales, dos baños, la entrada estaba protegida por un portón muy grande, el patio frontal con árboles frutales limón, aguacates, cayenas, flores y rosas; que junto con mi abuela la regábamos frecuentemente, con un estacionamiento para 5 o más carros, el patio trasero era inmenso con un gallinero, árboles frutales de mamones y tamarindo, un tanque para agua muy grande arriba y abajo era un lavadero; donde recuerdo a ver tenido muchas aventuras y correteado un sinfín de veces. Sobre todo después de ver aquellas comiquitas que pasaban por la TV primero a blanco y negro, y luego a color que estuvo en la sala de la casa recuerdo a Galáctico y la Princesa Aurora, Zawuamura y la rodilla voladora, El Capitán Centella, El Zorro, El Llanero Solitario.

Tenía una parte techada que lo utilizaba mi abuelo Julián un hombre humilde muy dinámico; hoy día se diría que era hiperactivo, de estatura media, calvo, utilizaba lentes, usaba pantalones de gabardina de varios colores, sus camisas mangas cortas y franelilla blanca y zapatos de suela negro, para guardar sus enseres, herramientas y otros peroles que le servían para sus actividades; ejerció varios oficios albañil, barbero, cantinero, carpintero; recuerdo recibir mis primeras lecciones de trabajo (albañilería, pintura, orden y limpieza), porque cuando él se ponía a hacer algún trabajo en la casa me llamaba para que yo lo acompañara tendría yo 7 años, y a mis tíos para reparar sus carros, motos, bicicletas, etc. allá en San Jacinto barrio popular ubicado al norte de la ciudad al que se llega por la vía Intercomunal Barquisimeto-Duaca, pasando La Ruesga Sur, Ruesga Norte al llegar al puente del ferrocarril allí está la estación San Jacinto, cruce a mano izquierda y continua por la carrera uno, entre calles tres y cuatro.

Vale destacar, que yo como el nieto mayor del matrimonio de mi abuela Juana Elisita con mi abuelo Julián Granado. Vería como mi familia crecía.

Edilbert Vargas

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50 Abriles “La Varguera”.

Casa de mis abuelos paternos ubicada en la carrera 3ª entre calle 1B e intercomunal vía a Duaca, sector San Jacinto, también era, y es grandísima, su frente con una pared mediana con rejas negras con su portón, su entrada de los recuerdos más hermosos que me ha acompañado en mi vida; cuando llegábamos a visitar; una vez que mi papa estacionaba su carro Chevrolet Malibu 78, cuatro puertas, anaranjado; frente a la casa, me bajaba y corría para abrir aquella reja, y me recibía aquel pasillo con piso de cemento rustico, lleno de matas frondosas de lado y lado, rosas rojas, rosas blancas, flores de cayena, trinitarias con sus aromas, y a tierra mojada, a tierra fértil; allí en el porche estaba mi abuela Amalia Rosa mujer humilde con su vestido color ocre por debajo de las rodillas y sus sandalias caseras con su sonrisa infinita, para recibirnos darnos un beso, un abrazo, y su bendición, junto a mi abuelo Jesús María que era de alta estatura, vestido con su elegancia casera, su pantalón gris claro, camisa blanca manga larga ajustada, zapatos de suela negros siempre pulcros, y medias negras; también darnos un beso, un abrazo, y su bendición, la sala es grande llena de fotos familiares, cinco cuartos, una cocina, un baño y su lavadero, un patio trasero grande con un gallinero al final, con árboles frutales de aguacate, guayaba, su estacionamiento para tres carros, con dos árboles uno de nísperos y el otro de uvas playeras que siempre recuerdo. Por esos pasillos y patios también correteaba sin cansancio junto a mi prima Naida Vargas, que nació el 08/04/1970, y mi primo Juan José Vargas Mora que nació el 17/12/1970

Escudo de la familia Vargas Suarez

Edilbert Vargas

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50 Abriles La mudanza de San Jacinto..

Todavía me acompañan los recuerdos de la casa materna. Para mediados de 1980, mis abuelos maternos toman la decisión de mudarse para la carrera 32, entre calles 23 y 24, sector Andrés Bello, casa céntrica de cuatro cuartos, sala-comedor, cocina, dos baños, estacionamiento para dos carros pequeños, un patio trasero no tan grande con un árbol de mango, y matas ornamentales Caso contrario en la casa de mis abuelos paternos que todavía en estos tiempos nos seguimos reuniendo en familia y van por la tercera generación que visitan y disfrutan de “La Varguera”. De hecho hasta tenemos nuestro escudo familiar.

Empiezo mi educación formal…

Asistí al kínder de la Maestra Ferrer que estuvo en la carrera dos, con calle tres, en la subida hacia la casa de la familia Mesa, amiga de la mía, y al lado de la Bodega “Los Hermanos”, recuerdo los espacios del kínder con los demás niños y niñas como jugábamos, como correteábamos por aquellos patios bajo las sombras de los árboles de mango, las matas de cayena con sus flores rojas, aquellas rosas rojas y rosas amarillas, sus pisos siempre limpios y brillantes, mi lonchera que me preparaba mi mama, La hora de dormir con nuestras colchoneticas forradas con telas de colores porque telas con personajes de comiquitas como hoy día, no teníamos (risas), Llegábamos a casa, mi mama, mi hermana a quitarnos el uniforme de pantalón azul y franelita roja con cuidado si estaba limpio doblarlo y acomodarlo para el siguiente día si no ponerlo en la cesta o sitio de ropa para lavar, mi papa ya me enseñaba a vestirme con cuidado. Revisar las actividades que hacíamos, recuerdo con mucho alegría y sentimiento el “Día de la Madre” junto con las maestras les hicimos utilizando unas paleticas que llevan los helados unos adornos con una flor y ese día tan especial junto a mi mama, mi hermana, y yo. Aquí mismo funciono la Escuela Privada San Jacinto donde estudie primer grado y segundo grado.

Mi primer cambio de escuela…

Allí mismo pero en la calle 5, de San Jacinto parte alta, estudie tercer grado y cuarto grado en la Unidad Educativa Coronel Genaro Vesque, gigantesca escuela de amplios espacios para que los niños y niñas estudiaran con comodidad y hacer deportes, el trayecto desde la casa de mis abuelos maternos por aquellas calles con mi uniforme, ya era el de pantalón azul y franela blanca, atravesaba la plaza de san Jacinto, a veces acompañado con alguno de mis tíos. Aquí doy mis primero pasos como deportista recuerdo que jugábamos básquetbol, ya pisaba mis ocho años de edad.

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50 Abriles Nuestro propio hogar…

La casa más linda del mundo ubicada en la Ruesga Norte Sector dos, verda 24, casa #06, construida por aquellos desarrollos habitacionales de INAVI, me cuenta mi madre que para este momento tan importante contaron con el apoyo financiero de mi abuelo Julián quien les presto ciento cincuenta bolívares exactos para la inicial, y quince bolívares para la primera mensualidad, y así empezar a crear nuestros propios recuerdos, era pequeña dos cuartos, sala-comedor-cocina, un baño, un pequeño patio trasero, y el frente que tuvo una cerca de alambre púa, llegaríamos para 1978 siendo fundadores, y con él por venir de los años, mis padres invertirían en la ampliación y mejoras sustanciales quedando de tres cuartos, una sala, cocina comedor más amplia, un baño, patio trasero techado, y el frente techado, con una pared mediana con rejas, recuerdo que en una de las miles de ocasiones jugando en la veredad con mi patineta y alguno de mis amigos; Adolfredo Jiménez, Chichito Pastran, Fredy Salazar, Javier Vargas, Toño Vargas, Nelson Mendosa, Johnny mendosa, Elías Morles, algunos con las suyas, me tropecé con la cerca de púas y mi brazo derecho sufrió una raspaduras que todavía tengo la cicatriz. Siempre he imaginado la gran alegría que tuvieron mi mama y mi papa cuando pudieron comprar su propia casa, después de haber vivido varios años en casas ajenas con dos hijo, y todo lo que aquello les originaba.

La entrada tenía un pequeño pasillo con piso de cemento pulido en toda la casa, con un borde de ladrillos y una pequeña jardinera con algunas flores rojas, mata de cayena y unos helechos que mi mama regaba periódicamente, en la sala los muebles de madera con cojines de tela estampada, la cocina a gas y aquella nevera, cada ventana tenía su respectiva cortina, y el televisor con perilla que sonaba TA TA TA TA TA para sintonizar cualquier canal de la época recuerdo Venezolana de Televisión, Venevisión y Radio Caracas, que mi papa lo cambiaba con uno de sus pie, y aquello nos causaba risa, mi hermana y yo dormíamos, cada uno en su propia cama, que estuvieron en “L” varios años, con un pequeño espacio para nuestras ropas, zapatos, útiles escolares, y algunos juguetes, mis padres tenían su propio cuarto, La casa estuvo bajo la gerencia de mi mama, que siempre estaba pendiente de la limpieza, el orden, la pulcritud en todos los espacios, y nos enseñaba lo importante de mantener el orden dentro de la casa, conjuntamente con mi papa que me orientaba como vestirme de manera combinada; porque mi papa siempre fue un hombre bien vestido, pulcro, educado de buen hablar muy trabajador recuerdo que trabaja en la construcción como topógrafo, y llegaba en una camioneta Chevrolet de color beige Mis padres siempre tuvieron pendientes de que en casa no faltara lo básico para nuestra alimentación, vivienda, estudios

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El carro de mi papa

Mi escuela en el centro de la ciudad de Barquisimeto…

Por cambios en los trabajos de mis padres, especialmente mi mama

Edilbert Vargas

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