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Informe. Labores del auxiliar
from Ateuves 52
by Grupo Asís
v6 Informe ateuves Labores del auxiliar
Tareas habituales
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Tareas habituales Figura 1
Ayuda al veterinario
Atención al cliente
Peluquería
Administración
Suplente en determinadas actuaciones del veterinario
Venta
Otras
Tareas principales realizadas por los ATV
10 % 10 % 8% 5 % 5 % 8 % 54 %
ATV (%)
Figura 2
Curas
Revelado de radiografías
Análisis de orina
Análisis de sangre
Toma de radiografías
Extracciones de sangre
Limpiezas de boca
Otras
73 % 65 % 48 % 40 % 35 % 28 % 18 % 40 %
ATV (%)
Nota: los porcentajes no suman 100 ya que se trata de una pregunta de respuesta múltiple. El 48 % de los asistentes considera que el trabajo que realiza en la clínica se ajusta a sus expectativas laborales, para un 32 % solo se ajustan parte de sus tareas y para un 20 % son muy pocas las tareas que coinciden con sus expectativas laborales. Veamos cuáles son sus principales funciones.
Ayudar al veterinario
Las funciones de un auxiliar de clínica veterinaria no están del todo definidas y pueden ser muy variadas. Por esta razón planteamos en la encuesta del pasado año cuáles son las que suelen realizar con mayor frecuencia. Más de la mitad de los asistentes, un 54 %, se dedica principalmente a ayudar al veterinario en la consulta, tal como indican los resultados de la figura 1. La atención al cliente y la peluquería, con un 10 % de respuestas cada una, también son dos tareas destacadas. Un 8 % realiza tareas de administración y el 5 % tareas de suplencia en determinadas actuaciones del veterinario, así como de ventas. Un 8 % ha indicado que se dedica a “otras tareas”.
Realizan curas sin supervisión
Como complemento a la pregunta anterior hemos querido saber qué tareas realiza el auxiliar sin supervisión directa del veterinario. Una gran mayoría de los asistentes encuestados, un 73 %, se ocupa habitualmente de las curas; el 65 % se encarga del revelado de radiografías. Un 48 % y un 40 % realizan análisis de orina y de sangre respectivamente; un 35 % toma las radiografías, un 28 % se encarga de las extracciones de sangre y un 18 % se ocupa de las limpiezas de boca. Los porcentajes no suman 100, ya que se trata de una pregunta de respuesta múltiple.
Ficha técnica Este trabajo ha sido elaborado con los datos de la encuesta realizada por Grupo Asís en la página web www.encuestas.grupoasis. net y en Portal Veterinaria Argos durante los meses de junio, julio y agosto de 2013.

¿Quién es nuestro cliente?
Evidentemente es el protagonista de la clínica veterinaria, de la tienda especializada y de cualquier negocio que venda productos y servicios. Debemos prestarle toda nuestra atención y satisfacer sus necesidades.
Natalia Sagarra Ateuves@grupoasis.com Parece una pregunta sencilla, pero ¿conocemos realmente a nuestro cliente? En la clínica veterinaria podemos encontrarnos con tres tipos de clientes según desde donde lo miremos. En esta ocasión nos interesa la perspectiva del auxiliar. Por un lado tenemos a los clientes animales, que pueden ser perros, gatos, conejos, aves… con sus peculiaridades. Por otro tenemos a sus propietarios, que acuden a la clínica movidos por la preocupación por su animal de compañía. Además, ambos pueden acudir por un motivo de prevención (vacunaciones, revisiones, extracción de sangre…), o bien por un problema manifiesto de salud. Su actitud y comportamiento serán muy diferentes según las circunstancias por las que acudan a la clínica. Finalmente tenemos al jefe, el veterinario, que también puede ser considerado nuestro cliente, puesto que queremos venderle nuestras habilidades para desarrollar nuestro trabajo diario
Cuida la comunicación
El 85 % del éxito de nuestros proyectos personales y profesionales reside en la habilidad que tengamos para relacionarnos con los demás. La comunicación tiene la función principal de crear y mantener relaciones; si consideramos que el 70 % de nuestro tiempo nos lo pasamos comunicándonos -ideas y emociones-, la comunicación adquiere una especial importancia para lograr una vida más completa.
Por ejemplo, a la hora informar en casos de urgencias debes tener en cuenta que: • Al dar información debemos utilizar palabras claras y sencillas, de uso corriente. • La capacidad de procesar información en un momento de crisis es limitada, por lo tanto la información que se dé será la justa. • Se irá dando la información en sucesivas etapas, es decir, en dosis.

Evidente, pero no tanto
Según los resultados del X Informe sobre Mejores Prácticas Comerciales de Miller Heiman presentado en EUDE Business School, solo un 33 % de las empresas tiene puesto su interés en el cliente y sabe que es la causa del éxito en sus procesos de venta. Este estudio concluye que los negocios que mejor lo hacen tienen al cliente en el centro de su motivación y que son capaces de comprender sus problemas antes de ofrecer soluciones, y además siempre revisan los resultados posventa. Las empresas que triunfan actualmente son aquellas que se preocupan por conocer al cliente, averiguar porqué permanece fiel y lo colocan en el centro de la organización. Pese a las dificultades, hay quienes logran mantener y aumentar sus cifras de negocio.
y permanecer en la clínica. En esta ocasión no hablaremos de él, puesto que ya lo hicimos en artículos anteriores. Todos los esfuerzos deben estar orientados hacia el cliente, porque él es el verdadero protagonista de todas las actividades de la empresa. No sirve de nada tener un producto o servicio sea de buena calidad, a precio competitivo o bien presentado, si no existen compradores.
Cliente animal
Nuestros clientes animales se caracterizan por su forma de comunicarse, a través de sonidos, gestos y movimientos. Normalmente acuden asustados porque perciben a través de los olores y sonidos que algo les van a hacer; y además están fuera de su entorno habitual. Pueden mostrarse huidizos o bien agresivos. Otros pueden estar tranquilos o nerviosos, y los cachorros, en general, juguetones. Debemos interactuar con ellos, pero hay que saber cómo. Si conocemos su nombre o son clientes con ficha, debemos dirigirnos siempre por su nombre, y es recomendable comprobar la última visita para valorar porqué acudió y si sucedió algo reseñable. Conviene acercarnos a ellos y hablarles con calma para transmitirles que no pasa nada, que allí todos son amigos. Cuanto más contento acuda un animal de compañía al centro veterinario con mayor alegría acudirá su propietario, y más predispuesto estará para recibir la información que queramos transmitirle. Si está herido o dolorido hay que actuar con máxima precaución, ya que puede actuar de forma violenta. Recuerda que son como niños, y si van a ser hospitalizados esto implica la separación de su entorno familiar y la entrada a un ambiente desconocido con personas extrañas que les tocan y realizan procedimientos que en muchas ocasiones les provocan malestar y/o dolor. Todo ello les genera temor y, en consecuencia, su comportamiento es poco previsible. Incluso la mascota más dócil y obediente puede llegar a morder de forma involuntaria e impulsiva ante una manipulación dolorosa.
Ante un cliente-paciente herido no realices movimientos bruscos que puedan asustarlo, mantente calmado y tranquilo y muévete suavemente.
Cliente humano
Este ser que acude a la clínica con su animal de compañía es concretamente quien nos permitirá pagar nuestras facturas de la luz, entre otras. Los clientes “humanos” son las personas más importantes para el centro veterinario. Son quienes generan los ingresos, por lo que es imprescindible ofrecerles un trato exquisito
desde el momento en que entran en la consulta. No dependen de nosotros, sino nosotros de ellos. Cuando un cliente entra en el centro veterinario debe percibir una atmósfera de confianza que le permita sentirse a gusto.
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pasos para conocer el
PERFIL DE LOS CLIENTES
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Establecer un objetivo: debemos preguntarnos qué quiero saber y para qué.
Establecer un método de obtención de datos: existen distintos métodos, el más frecuente es la encuesta cerrada tras el uso del producto o servicio que, aun a pesar de sus limitaciones en la obtención de información, permite un tratamiento de los datos de forma más rigurosa que otras formas menos objetivas.
Elemento motivador para el usuario: muchos clientes no quieren perder el tiempo en rellenar una encuesta, por lo que es muy importante diseñar cuándo ésta se va a realizar y qué elemento puede ofrecer como gratitud por cumplimentarla.
Calcular una muestra para el estudio: saber hacerlo de manera que sea lo suficientemente representativa para contestar al cuestionario es uno de los elementos más complicados. Sin embargo, la idea es escoger un porcentaje en función del número de clientes y buscar que lo rellenen clientes tanto nuevos, como antiguos.
Analizar los datos obtenidos: una vez recogida la información, se debe analizar a través de un sistema estadístico.
Desarrollar un perfil orientativo a raíz de los datos obtenidos.
Blog de Sonia Rujas Hay que darle a entender que le estamos escuchando y comprendiendo, asintiendo de vez en cuando mientras habla con nosotros, por ejemplo. Necesita sentirse bien atendido. Si un cliente se aleja de nosotros, es posible que hayamos invadido su espacio íntimo; en ese caso, daremos un paso atrás para evitar que se sienta incómodo. Puede acudir de forma programada y, por lo tanto, más o menos relajada, o bien con alguna urgencia o problema que requiera una intervención u hospitalización. La información correcta sobre estos aspectos ayuda a atenuar el estrés y promueve expectativas más adecuadas. Debemos tener presente que es alguien a quien debemos complacer y no alguien con quien discutir. Si surge cualquier motivo de discordia debemos remitirlo al veterinario.
Tener un concepto claro de a quién nos dirigimos nos permitirá llegar a sus necesidades con éxito.
¿Lo conoces bien?
¿Para qué necesito conocer a los clientes? ¿Por qué mejorar la atención? ¿Cómo hacerlo? ¿Con quién? ¿Me traerán ventajas o desventajas esos cambios? Estos interrogantes encuentran respuesta en el comportamiento de los consumidores, que reciben influencia de los medios de comunicación para modificar sus hábitos de compra con mucha rapidez. Debemos ser flexibles y adaptarnos a los cambios. Ahora ya no basta con tener conocimientos sobre atención y cuidado de los animales; es preciso saber quién es el cliente, cuáles son sus características y qué espera de la clínica y de nosotros. Solo así el centro podrá adaptar su oferta a las exigencias cambiantes del momento. Él es quien decide y exige libremente qué, cómo, cuándo y dónde adquirir los productos y servicios. Es interesante saber algo más que el nombre de la mascota y su propietario:
¿Por qué se va un cliente?
Veamos los principales motivos por los que algunos clientes no vuelven: • No hay empatía con el personal. • Es muy caro. • Su grado de decepción es bastante alto (esperaban más de lo que se han encontrado). • La clínica no posee el equipamiento a la altura de su mascota. • Percibe una imagen mala. • Es bueno pero ha venido un veterinario a su zona que es mejor. • No le gusta lo que le ha dicho el profesional y se busca otro que le diga lo que quiere oír. • No está conforme con el trato a su mascota.

• Nivel de estudios, tipo de profesión, edad, dónde vive… • La capacidad adquisitiva: en función de esto se mostrará más o menos abierto a adquirir determinados servicios y productos. Podemos aplicar la regla 80/20, el 80 % de los clientes suponen un porcentaje de facturación inferior al 20 %, mientras que el 80 % de los ingresos se concentran en apenas el 20 % de los clientes. • Situación familiar: soltero, casado, con hijos pequeños o mayores, etc. De este modo podrás ofrecer accesorios que resulten atractivos a los niños o a los adultos, o incluso adaptar horarios en el momento de programar las citas.
• Intereses personales: saber si practica deporte de forma habitual con el perro, si viaja a menudo o si apenas sale a dar un paseo alrededor de su casa también nos da una idea de qué artículos pueden interesarle. • Tipo de servicios que solicita, frecuencia de visitas, qué canales de comunicación utiliza…
Un cliente es una persona que nos trae sus necesidades y deseos y es nuestra misión satisfacerlos.

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Cuanto más sepamos de los clientes mejor podremos ajustar nuestra oferta. Necesitamos descubrir sus gustos y necesidades; esto nos permitirá anticiparnos a sus deseos. Para recoger toda esta información es fundamental el papel del auxiliar de la clínica, ya que es la primera persona que entra en contacto con el cliente. Si el centro dispone de una buena base de datos, el auxiliar debe encargarse de actualizarla a diario con toda la información que recoge a lo largo del día, incluyendo hasta el más mínimo detalle, y, por supuesto, cualquier queja o incidente. Es fundamental para prevenir problemas futuros.
¿Para qué tanta información?
La idea es elaborar un perfil del promedio de clientes que acuden a la clínica de modo que seamos conscientes de cuál es el público objetivo y nuestra realidad. De este modo podremos trabajar en equipo en las campañas de marketing, cuya finalidad es incrementar los ingresos en periodos concretos, fidelizar determinados segmentos de clientes, presentar nuevos servicios, etc. Conocer al cliente es preguntarse desde cómo llegó a ponerse en contacto con nosotros hasta averiguar cuál es su grado de satisfacción; es mantener una vía de comunicación siempre abierta y receptiva, a través de la cual tenga la confianza para exponernos hasta la menor duda y donde el equipo de la clínica sepa interpretar los mensajes que le lleguen como confirmaciones de un trabajo bien hecho o excelentes oportunidades para mejorarlo.
Saber quién cruza las puertas de la clínica supone tener una información extra que nos ayudará a poner en práctica la estrategia de marketing y comunicación diseñada por el propietario del negocio y a utilizar los canales adecuados para llegar hasta nuestro cliente. Un cliente bien atendido y satisfecho por nuestro trabajo es quien mejor propaganda hará ante nuestro jefe sobre nuestra persona.
Recopilar información sobre el cliente nos facilita ajustar la oferta. Descubrir sus gustos y necesidades nos permitirá anticiparnos a sus deseos.

Conocer al cliente nos permitirá cuidarle y mimarle.

Requerimientos nutricionales
en cachorros
Las necesidades nutricionales en el cachorro son diferentes a las del adulto, por lo que hay que conocerlas para darles lo más adecuado y conseguir así un crecimiento correcto.
Cristina Castillo y José Miguel Chapel Departamento de Patología Animal, Facultad de Veterinaria de Lugo, Universidad de Santiago de Compostela El primer alimento que ingieren los cachorros es la leche materna que consumen hasta el destete. En estado salvaje la adaptación a la dieta sólida es gradual, ayudados por la madre, que les proporciona la comida parcialmente procesada por ella, pues tras ingerirla es regurgitada en presencia de las crías, las cuales se prestan a comer. Más tarde hacen pequeñas incursiones, acompañados de los adultos, en cacerías. Finalmente se disponen a cazar, junto a otros miembros de la manada.

Introducción al alimento sólido
En mascotas domésticas la introducción del alimento sólido se realiza entre las 3 y 4 semanas de edad, siguiendo un procedimiento marcado por el veterinario en función de que estemos ante un perro o un gato. Lo importante es proporcionar una comida fácil de masticar y de gran palatabilidad (ver cuadro). Hay momentos en los que puede ser necesario un destete precoz: no hay problema, ya que los cachorros se adaptan muy fácilmente a las tetinas de los biberones con leches maternizadas, que contienen todos los nutrientes indispensables para cubrir las necesidades de esta edad. En cualquier caso, natural o artificial, tras el destete comienza la etapa de crecimiento, periodo comprendido entre las 8 semanas y los 12-18 meses de vida, dependiendo de la raza de los animales. Se trata de una fase compleja donde interaccionan nutrientes, genotipo, medioambiente y sistema endocrino. En esta etapa, la nutrición tendrá efectos directos sobre el propio crecimiento, desarrollo y composición corporal, y reduce la probabilidad de padecer patologías ortopédicas y/o prevenir la obesidad.
Diferencias de tamaño No hay que olvidar que si bien entre las distintas razas de gatos las diferencias de peso son poco relevantes, en el caso de los perros tenemos un abanico de pesos muy amplio (desde los 800 g de un Chihuahua hasta los 70 kg de un Mastín).
Consejos prácticos para introducir al cachorro en la dieta sólida
• Darle al cachorro una pasta de la dieta de crecimiento mezclada con agua (en caso de perros) o leche (para gatos). • Colocar la pasta así formada en un plato llano. • Alimentar a los cachorros varias veces al día.
El animal alternará esta comida con la leche materna. • Comenzar a darle alimento seco a las 6 semanas de edad.
Para establecer un buen programa nutricional es necesario que el clínico obtenga la máxima colaboración del propietario, con el fin de conocer el entorno del paciente y así establecer una correcta anamnesis y exploración física. Uno de los parámetros más fiables en este sentido, más que el peso, es la determinación de la condición corporal. Como norma general, puede decirse que los gatos y los perros que de adultos tienen un peso inferior a 25 kg alcanzan el 50 % de su peso a las 16 semanas; por otro lado, las razas de perros que de adultos tienen un peso superior a 25 kg alcanzan el 50 % de su peso a las 20 semanas. En cualquier caso, la ración que reciban en esta fase los cachorros ha de cubrir el valor medio de las necesidades para su raza y no el máximo. Un régimen alimenticio encaminado a cubrir las máximas necesidades incrementa el riesgo de padecer enfermedades osteoarticulares. Por otro lado la subnutrición es otro problema derivado de un programa incorrecto, con efectos negativos en el crecimiento.

Requerimientos energéticos
Las necesidades de energía (E) en los cachorros son la suma de las correspondientes al mantenimiento (M) y el crecimiento. Tras el destete, el peso corporal de los animales es bajo mientras que la velocidad de crecimiento es rápida. A medida que transcurre el tiempo, la proporción de energía destinada al crecimiento disminuye. Teniendo en cuenta este parámetro, la evolución del peso corporal en los cachorros (perros y gatos) se divide en tres fases: • En una primera fase, el peso y la velocidad de crecimiento son muy bajos. • En una segunda fase aumenta la velocidad de crecimiento; el reparto de la energía es al 50 %. • En la tercera y última fase aumenta el peso corporal (próximo al 80 % del peso adulto); en esta etapa el reparto de energía es de un 10 % para crecimiento y el 90 % para mantenimiento. La peculiaridad en gatos es que hay diferencias entre sexos: a las cuatro semanas de edad la velocidad de crecimiento es más lenta en las hembras que en los machos. De acuerdo a todo ello, el consumo de E en los cachorros está condicionado por estos dos parámetros y se recomienda: • 3 veces EM desde el destete hasta los 4 meses. • 2,5-2 x EM desde los 4 a los 6 meses. • 1,8-2 x EM desde los 6 hasta los 14 meses. Las recomendaciones de E proporcionada por una dieta para cachorros oscila entre 3,2 y 3,8 Mcal EM/kg de materia seca (MS); en el caso de los gatitos los valores son superiores: 4-5 Mcal EM/kg MS.
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Requerimientos nutricionales para perros y gatos en crecimiento
Perros
Adultos < 25 kg Adultos > 25 kg Gatos
Energía (kcal EM/g) 3,5-4,5 3,2-3,8 4,0-5,0
PB (%)
14,6-18,8 13,6-15,7 35-50
Digestibilidad PB
GB (%)
Calcio (%)
Fósforo (%)
Relación Ca/P
Potasio (%)
Taurina (ppm)
85
10-25 85 > 85
8-12 18-35
0,7-1,7 0,7-1,2 0,8-1,6
0,6-1,3 0,6-1,1 0,6-1,4
1:1-1,8:1 1:1-1,5:1 1:1-1,5:1
--- --- 0,6-1,2
--- --- 1.000

Requerimientos de proteína
Las necesidades de este elemento en los cachorros son diferentes a las de los adultos: son más elevadas y además se precisan aminoácidos esenciales para el crecimiento (arginina en perros; metionina y taurina en gatos). La calidad de la proteína para una ración de 3,5 Mcal/kg MS debería de ser superior al 22 %, y con una digestibilidad del 80 %. Para los gatos, con una densidad energética mayor, los requerimientos de proteínas se elevan hasta el 35 %.
Requerimientos de grasa
Las grasas aportan energía, vitaminas liposolubles y son fuente de ácidos grasos esenciales (AGE), especialmente ácido linoleico y araquidónico. Los cachorros necesitan unos 250 mg de ácido linoleico/kg de peso corporal/día. Esto se consigue con valores de grasa en la ración que oscilan entre el 5-10 % (sobre MS). Los felinos tienen unas necesidades más estrictas respecto a los AGE –no pueden sintetizar acido araquidónico– cuando se los compara con los perros. Y es que los AGE de la serie n-3 son imprescindibles para el desarrollo normal del sistema nervioso. De acuerdo con esto, se recomienda unos niveles de grasa en torno al 9 % (sobre MS); de ácido linoleico en torno al 0,05 % (sobre MS) y de araquidónico de 0,02 % (sobre MS).
La fibra
La fibra ha ido adquiriendo en los últimos años un mayor peso específico. No obstante, no hay que guiarse por las pautas seguidas en nutrición humana, ya que por ejemplo, los perros no disponen en el colon de la microflora que degrada parte de la fibra en ácidos grasos volátiles. Sin embargo, los efectos positivos de su adición en la dieta son varios, entre los que destaca su capacidad saciante y que favorece la defecación.
Requerimientos de minerales
Calcio y fósforo La ingestión diaria de calcio (Ca) y fósforo (P) es de gran importancia en esta fase. Mantener una relación Ca/P de 1,25/1 (para perros) y de 1,5/1 (para gatos) es de vital importancia. No obstante, es importante establecer unos valores mínimos en los niveles de Ca/P (expresado en MS) y relacionarlos con el contenido energético de la ración. Para razas pequeñas los valores de calcio y fósforo aportados con la dieta (expresados como g/ Mcal EM) son de 1,4 y 1,2 respectivamente; para razas medianas o grandes se estiman que valores de Ca de 2-2,4 g/Mcal EM son satisfactorias.
Potasio Los gatos presentan unas necesidades de potasio (K) que varían en función del contenido en proteína y otros electrolitos de la ración. Así, hay una mayor pérdida de K cuando se les aporta dietas acidificadas, ricas en proteína y cloruros. Para prevenir efectos negativos sobre la mineralización ósea se recomienda en la dieta un nivel de K del 0,6 % (sobre MS), y que la ración no cause pH urinarios inferiores a 6,2.
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Requerimientos vitamínicos
En este apartado hay que tener en cuenta varios aspectos: • Los gatos no pueden sintetizar vitamina A a partir de los carotenos de la ración. • Estos animales son ineficientes en la conversión de la vitamina D en su forma activa por acción de la luz solar. • Son muy sensibles a la intoxicación por vitaminas A y D, generando exóstosis vertebrales y calcificación de los tejidos blandos. • No pueden sintetizar niacina a partir de triptófano. • Las necesidades en vitamina E han de aumentarse cuando la base de la ración son productos derivados de la pesca.
¿Cómo debemos manejar esta etapa?
A la hora de incorporar la nueva dieta a nuestra mascota es interesante tener en cuenta algunos problemas asociados: • El empleo de premios, raciones caseras y alimentos comerciales de baja calidad modifican el contenido total de nutrientes de la ración diaria, de manera que en caso de administrar estos elementos hay que compensar (o disminuir) el resto de la ración diaria. No obstante, el exceso de comida casera o premios contribuyen al desarrollo de la obesidad así como de trastornos ortopédicos. La aparición de vómitos, diarrea, flatulencia y vientre en tonel se asocia a la administración de dietas de baja calidad, dada su escasa digestibilidad. • En los gatos, el premio habitual (leche de vaca) debe ofrecerse en cantidades limita-
das, ya que los niveles de lactosa intestinal en estos animales se reduce tras el destete. • La introducción en perros de la nueva dieta tras el destete es a través de un sistema controlado, repartiéndola en tres o cuatro tomas a lo largo del día. Normalmente, casi todos los alimentos comerciales traen una guía con la cantidad diaria que se debe administrar de acuerdo a la edad y peso adulto previsto. • En gatos, sin embargo, el método ad libitum es el preferido hasta el momento de la castración; a partir de entonces es recomendable repartir la ración en dos tomas diarias. • En caso de emplear alimentos húmedos (muy frecuente en gatos) hay que prestar atención a su composición, ya que puede contener propilenglicol, que induce la formación de cuadros de anemia o metahemoglobinemia.
Glosario
AD LIBITUM. Locución latina que significa a voluntad, libremente. ANAMNESIS. Conjunto de datos e información que recoge el veterinario del paciente sobre su estado con anterioridad a la enfermedad. EXÓSTOSIS. Es un crecimiento óseo anormal, pero benigno, que se desarrolla generalmente en la zona de inserción de tendones y ligamentos en el hueso. MATERIA SECA. Se refiere a la cantidad de alimento menos el agua contenida en dicho alimento. TAURINA. Es un aminoácido esencial para el buen funcionamiento del organismo que el gato no puede sintetizar, por lo que debe tomarlo con la dieta.
Bibliografía
• Case L.P., Carey D.P., Hirakawa D.A. (1995). Canine and Feline nutrition. A resource for companion animal professionals. Ed. Mosby, St. Louis. • Arija Martin I. (2006). Nutrición aplicada a la clínica de perros. Canis et Felis nº 79. Ed. Acalanthis,
Madrid.