Desvío de las torres de alta tensión

DESVÍO DE LAS TORRES DE ALTA TENSIÓN

ARROYOMOLINOS NO PUEDE ESPERAR

PARA EL GOBIERNO DE ARROYOMOLINOS, LAS TORRES DE ALTA TENSIÓN OCUPAN UN LUGAR PRIORITARIO. PARA CONOCER DE PRIMERA MANO EL ESTADO DEL PROYECTO, HABLAMOS CON EL REGIDOR Y RESPONSABLE DE URBANISMO, ANDRÉS MARTÍNEZ.

Desde hace 20 años, si preguntamos a los arroyomolinenses qué proyecto anhelan o que actuación consideran imprescindible para la ciudad, en la lista de prioridades se encuentra el desvío de las torres de alta tensión. Y es que Arroyomolinos lleva conviviendo con estos gigantes de acero demasiado tiempo.

En el despacho del alcalde de Arroyomolinos, Andrés Martínez, las torres de alta tensión ocupan un lugar prioritario. El regidor atendía a Arroyomolinos HOY con la intención de trasladar a los vecinos cómo se encuentra el proyecto.

Para muchos vecinos de la localidad, las torres de alta tensión parecen casi una condena. La ciudad lleva 20 años tratando de eliminarlas.

Así es. Entiendo perfectamente esa sensación de desasosiego porque yo llegué a vivir a Arroyomolinos hace 23 años y ya se oía que las torres se iban a quitar. Sin embargo, eso nunca llegaba. Por eso desde que tuve la oportunidad de formar parte del equipo de Gobierno ha sido siempre una prioridad. El proyecto, al ser supramunicipal, es muy complejo y, además, la situación que nos encontramos no ha sido nada sencilla. El desvío de las torres estaba encallado. Estos próximos 11 meses van a ser decisivos. Si perdemos está oportunidad el desvío de las torres podría ser irresoluble.

Arroyomolinos tiene no una, sino dos líneas de alta tensión...

Exactamente. Arroyomolinos es uno de los pocos lugares de Europa que está atravesado por dos líneas de alta tensión de 400000 voltios. Como saben todos los vecinos, una es exterior o perimetral y de circuito simple, y otra interior, de doble circuito.

Si tuviéramos que hacer una lista de las claves para la consecución del proyecto ¿cuáles serían?

Una prioritaria sería precisamente que es un proyecto de desvío supramunicipal que involucra a tres ciudades: Móstoles, Moraleja de Enmedio y Arroyomolinos. Y, también, a otras instituciones y empresas como la Comunidad de Madrid o REDESA. Pero no es la única disyuntiva que afecta al éxito del mismo. Las claves para alcanzar el desvío pasan por la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), la Declaración de Utilidad Pública (DUP), el convenio firmado por los tres municipios, la financiación y el proyecto de REDESA.

Muchos ciudadanos no comprenden cómo es posible que llevemos 20 años con esta situación.

Como arroyomolinense, creo que la no consecución del proyecto durante años ha sido una muestra de fracaso y dejadez institucional. Es cierto que es un proyecto complejo, pero también es cierto que lo dejaron estancarse, que pasara el tiempo. No lo impulsaron. Cuando se aprobaron las normas subsidiarias en 2001, ya se incluía la modificación del trazado de las líneas dentro de los límites de Arroyomolinos. En aquel momento, por tanto, no se dependía de otros municipios. Sin embargo, poco después, la Comunidad de Madrid invitaba a que dicho proyecto fuera de ámbito supramunicipal e incluyera a Móstoles y Moraleja de Enmedio. Los tres municipios accedieron y no pusieron objeciones. Todas las instituciones citadas estaban gobernadas por las mismas siglas.

Cuando usted llega a la Concejalía de Urbanismo, ¿qué se encuentra en relación con el desvío de las torres?

En el año 2015, el actual Gobierno Municipal se encuentra con una situación deplorable. La Declaración de Impacto Ambiental (DIA) está caducada. Primer obstáculo importante. La Declaración de Utilidad Pública, que es necesaria para las expropiaciones del nuevo trazado, pendiente de la definitiva aprobación del PGOU de Moraleja de Enmedio. Por lo tanto, paralizada. Estas dos circunstancias suponían dos muros altos que saltar. Pero la mayor sorpresa nos la llevamos con la cuenta de Sistemas Generales.

¿La cuenta de Sistemas Generales?

Es cierto, muchos vecinos no sabrán a que me refiero. En esa cuenta se ingresaba el dinero que los promotores de suelo aportaban para sufragar los gastos de esos Sistemas Generales del Municipio, entre los que se incluía este desvío de las torres de alta tensión. Es decir, era un dinero cuyo objetivo era mejorar infraestructuras o proyectos de ciudad como el desvío de las torres. Donde debía de haber casi 5 millones de euros, encontramos solo 172 euros de saldo. El dinero que faltaba se había destinado a otros proyectos como la promoción fallida de 61 viviendas en la calle San Fernando. Por si todo esto fuera poco, en enero de 2018 el PGOU de Moraleja de Enmedio quedó anulado definitivamente por parte del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

¿Cuáles han sido los ámbitos de actuación en el transcurso de estos tres años y medio?

El proyecto, que estaba encallado, ha ido dando, poco a poco, pequeños pasos hacia delante con mucho esfuerzo.

Se han recuperado, en primer lugar, 4,5 millones de euros en la cuenta de Sistemas Generales gracias a la venta de las estructuras de las 61 viviendas y recuperando activos económicos. Se ha logrado reactivar la Declaración de Impacto Ambiental y se ha conseguido que continúe vigente hasta noviembre de 2019. Esto es fundamental. Es el latido del corazón del proyecto. En diferentes reuniones he propuesto actualizar el convenio firmado por los tres municipios a las nuevas circunstancias, actualizando el presupuesto del que, en su momento, ya se había aportado el 50% por parte de las tres ciudades. Dicha actualización impulsaría el desvío de la línea de doble sentido que parte el municipio por el medio, ya que es la más preocupante. La perimetral la modificará, más adelante, el Ministerio de Industria para cerrar el anillo eléctrico de la Comunidad de Madrid.

La DIA vuelve a estar vigente, pero otra de las claves imprescindibles es la DUP ¿no es así?

Exacto, por eso decía que han sido varias líneas de actuación. Se ha logrado un compromiso verbal con el Ministerio de Energía y Minas y con Red Eléctrica de que, si se presenta el proyecto de REDESA, el Ministerio otorgaría la DUP, que es imprescindible para el desvío de las líneas y que supondría un paso de gigante para desbloquear el proceso. REDESA ha trasladado recientemente al Ayuntamiento que tardaría unos tres meses en tener el proyecto definitivo de desvío. La falta de la DUP ha sido una de las principales causas para que el proceso se paralizase. Antes no nos la podían dar, pero ahora sí, por una reciente sentencia que así lo indica.

¿Y qué hay del convenio supramunicipal?

Otro aspecto muy importante. Pues paralelamente se está trabajando en su redacción. Teniendo en cuenta que el trazado en Móstoles y Moraleja es mucho menor, he propuesto que Arroyomolinos asuma los costes que queden por abonar con el fin de agilizar el inicio del desvío. Quiero recordar de nuevo que los tres Ayuntamientos ya habían aportado el 50% del coste del desvío según el convenio firmado hace años. La colaboración e implicación de REDESA y del Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio ha sido muy buena y positiva. Muy distinto es el caso de Móstoles. Durante 13 meses se ha escrito y llamado de forma insistente y sin éxito al anterior regidor para tratar este asunto, que también beneficia a Móstoles. Con la actual alcaldesa, Noelia Posse, ya se han hecho 7 llamadas y una petición verbal por mi parte de reunión para avanzar en este proyecto que beneficia a las tres ciudades. Hasta ahora no se ha podido cerrar dicho encuentro para tratar el asunto.

Lo que se pregunta todo el mundo es si estas torres afectan, y cuánto, a la salud.

Es verdad que no hay estudios concretos que así lo indiquen. Con el fin de tener datos fiables y rigurosos, el Ayuntamiento de Arroyomolinos lleva meses trabajando con el objetivo de realizar las mediciones apropiadas y se nos dé a conocer la cantidad de micro teslas con los que vivimos y sus posibles repercusiones en la salud. De este modo, estamos cerrando un acuerdo con una empresa para comenzar dichos trabajos en el primer trimestre del año.

¿Estamos ante las circunstancias más favorables de los últimos años para conseguir el desvío?

Lo que no va a cambiar es que dependemos de terceros para lograrlo. Por así decirlo, tenemos 11 meses para lograrlo. Conseguir la viabilidad de la DIA era básico y lo hemos hecho. Pero en noviembre caduca. Si caduca la DIA sin sacar adelante el proyecto, podemos entrar en una vía muerta que haga el proyecto irrealizable. Tenemos 11 meses para conseguir la DUP y firmar un nuevo convenio que beneficia a los vecinos de las tres ciudades. Creo que no debemos perder la perspectiva de esto último. Ni colores, ni enconamientos, ni nada. Lo importante es mejorar la calidad de vida de los vecinos de Móstoles, Moraleja de Enmedio y Arroyomolinos. No podemos seguir esperando. No quiero decir que es un ahora o nunca pero sí que es cierto que si esta vez no lo conseguimos, sería como nadar un océano y morir en la orilla. No podemos esperar más.