Anuario. Registro de acciones artísticas. Rosario, 2011

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Anuario 2011 : registro de acciones artísticas, Rosario 2011 / Lila Siegrist ; Georgina Ricci ; Pablo Montini. - 1a ed. - Rosario : Lila Siegrist, 2012. 246 p. ; 24x17 cm. ISBN 978-987-27972-0-1 1. Arte. I. Ricci, Georgina II. Lila, Siegrist III. Título CDD 708

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ANUARIO REGISTRO DE ACCIONES ARTÍSTICAS, ROSARIO 2011


EQUIPO EDITORIAL Concepto y producción Lila Siegrist Comité editorial Pablo Montini, Georgina Ricci y Lila Siegrist Correcciones Gilda Di Crosta Diseño Georgina Ricci


2011


ÍNDICE ENERO/FEBRERO

JUNIO

10 Ocho atajos para regresar a casa Patricio Pron 14 Rosario Uberales Residencia Internacional de Artistas Contemporáneos [En el día de la Virgen] 20 En el día de la Virgen. Residencia Internacional de Arte Contemporáneo. Jorge Sepúlpeva T. / Ilze Petroni

70 Cuando los links dibujan paisajes cartográficos Cecilia Lenardón 78 Aníbal Brizuela, el artista BIC sin conciencia de su fama Virginia Giacossa 82 Reflexiones en torno a “Abstracciones / un recorte en la colección del Castagnino+macro”. Genealogías e historiografía artística. María Amalia García 86 Muestras bajo la lupa. Terceras jornadas sobre exposiciones de arte argentino y latinoamericano Isabel Plante

MARZO 26 Preguntas, performances, libros. Un recorrido arbitrario Irina Garbatzky 32 La memoria y el horror: la responsabilidad Juan Bautista Ritvo 38 Un museo, dos sedes; un quiebre, dos gestiones en el terreno del tiempo Javier I. Hernández

JULIO 90 Dos monstruos Beatriz Vignoli 96 Marcia Schvartz: Pasionaria. Notas sobre una exposición Guillermo Fantoni 100 Folios Laura Escobar y Fabián Muggeri

ABRIL 44 La costurerita que dio el mal paso Pablo Makovsky 50 Soy Mutante y Ale Siniestro: postpunks surrealistas Diego Giordano

AGOSTO 104 Amor de diseño Ana Martínez Quijano 108 Del Paraná al Gran Canal. Artistas rosarinos en la Bienal de Venecia Silvia Dolinko 116 Notas a propósito de 37738. Gastón Miranda Julia Expósito 120 Desmantelan una capilla de valor patrimonial Eugenia Langone

MAYO 56 Se escribe sobre arena como si se tratase de cemento fresco, pero se borra con el codo de un bostezo David Nahón 61 ¡Fijémosnos qué pasa en Rosario! Mauro Herlitzka 62 El autorretrato de tus pasos. Ezequiel Alemian 66 El Pibe Efervescente


SEPTIEMBRE

DICIEMBRE

126 Irradiaciones de un momento cultural determinado por el flujo electoral Nancy Rojas 136 Una pequeña reflexión preliminar sobre la libertad (¡Libertad, libertad, libertad!) Aurelio García 138 La filosofía de los límites Sebastián Villar Rojas 142 Tres artistas, tres estéticas Gilda Di Crosta 146 Gestión Cultural en las orillas Ulises Moset 149 Giros sobre el Puerto de la Música Alejandro Gelfuso

188 ANUARIO diciembre 2011 María Laura Carrascal 194 ¿Se puede hablar sobre salones de arte hoy? Roberto Echen 199 La mala del arte Mauro Guzmán 202 Los salones que pasan y las instituciones que quedan Gabriela Gabelich, Aurelio García, Inne Martino 206 Elogio al bazar Aurelio García 208 La Asamblea de los Huertos [24/09/11 - 10/12/11] Franco Ingrassia 210 Ivan Rosado, ¿lo recuerdan? Ana Wandzik y Maxi Masuelli 214 Max Cachimba

OCTUBRE 152 De regreso a octubre (desde oktubre) Dardo Ceballos 160 Recitales de artistas Silvina Dezorzi 163 Una mirada interdisciplinaria hacia la escritura de una nueva historia del arte colonial Agustina Rodríguez Romero y Gabriela Siracusano 166 La diversidad de lo moderno Cristina Rossi

LIBROS 217 El intrincado recorrido de los objetos María Isabel Baldasarre 220 Rosario es un lugar en la mente. Lo contemporáneo también. Echen, las dos cosas multiplicadas Rafael Cippolini 223 Contratiempos. Trayectos y tensiones en la fotografía argentina y latinoamericana contemporánea Elizabeth Martínez de Aguirre 225 Sobre la digestión del arte actual Viviana Usubiaga 228 Residencia en el mundo Tamara Stuby 229 Separata 16 Lucio Piccoli 232 Anuario Eduardo Stupía 234 La muerte miró la escena por el rápido agujero D. G. Helder 256 Lanas

NOVIEMBRE 172 Tres días de novimbre de 2011 Osvaldo Aguirre 178 Arte y comunicación: los nuevos espacios alternativos Ulises Moset 184 Volver y no haberse ido Pablo Franza


ENERO FEBRERO



eneRO / febRERO · crónica visual remota madrid - rosario

FOTO ARCHIVO ANUARIO

OCHO ATAJOS PARA REGRESAR A CASA

río, que individualmente son transparentes, y las apiña y las deposita sobre el fondo del río para que éste parezca marrón y el barco

Patricio Pron

parezca estar surcando un camino rural, allí, unos mil metros más abajo del sitio desde donde uno lo mira. Dos La serie se compone de ocho fotografías, pero quizás no sea realmente una serie sino

Uno

apenas imágenes inconexas a las que una

No hay nada más difícil de calcular que las

suma de gestos conviertan en una: esos

distancias; y, sin embargo, son lo único

gestos –hechos un instante atrás– son abrir

realmente importante, aquí y allá. Un barco

el sobre que contiene las fotografías, exten-

recorre un río, y sólo importan ellas; la

derlas sobre una mesa en un pequeño de-

fotografía ha sido hecha desde una altura

partamento en el centro de Madrid y calcular

de entre mil y mil doscientos metros en

las distancias, todas ellas: las que separan al

dirección noreste a suroeste. El barco está

fotógrafo de su objetivo, las que me separan

a unos cuatro kilómetros del extremo en el

del fotógrafo, las que nos separan y nos

que la ciudad penetra más en el río; si la

vinculan a ambos a la ciudad.

distancia fuese inferior, podría verse a los habitantes de la ciudad, al menos a algunos

Tres

de ellos, caminando o leyendo o haciendo

Aquí la distancia es inferior, y la fotografía

cualquiera de las otras cosas que uno puede

fue tomada desde un avión o un helicóptero

recordar que los habitantes de la ciudad

y desde unos quinientos o cuatrocientos

hacían. Naturalmente, sin embargo, puede

metros de altura, en dirección noreste a

que ahora hagan otras cosas; el barco sigue

suroeste. Tampoco aquí puede verse a los

surcando el río, y eso lo hacía entonces y lo

habitantes de la ciudad, que parecen haberla

hace ahora –aunque, desde luego, era otro

abandonado, pero que, en realidad, simple-

barco y navegaba otro río, lo que también es

mente son invisibles a esta altura. Alguien ha

un asunto que concierne a las distancias– y

dejado arrojado sus casas sobre el suelo y

esa continuidad permite imaginar, precisa-

ahora conforman un puñado desordenado de

mente, que la distancia entre aquí y allá es

cubos y de formas que podría individualizar

menor. A pesar de ello, la imagen sólo es po-

si no fuera, precisamente, por la distancia,

sible gracias a esa distancia, que convierte a

que las uniformiza y las desordena.

la ciudad en una acumulación insensata de estructuras verticales que parecen los nudos

Cuatro

progresivamente más densos de una red

Mil metros de altura, dirección sureste a no-

antigua, y que junta las gotas de agua del

roeste, algo con vida: una lancha que parte 10


11


el río. Las casas desordenadas de la imagen

Seis

anterior adquieren formas comprensibles y

De suroeste a noroeste, desde un edificio

un orden, y la ciudad se acerca a la lengua

existente a unos quinientos metros de una

enferma de un edificio feo y lo cerca. No hay

de las cabeceras del puente, con teleobje-

progresión alguna.

tivo. Una forma de ampliar la distancia o de reducirla; lo importante es que el fotógrafo

Cinco

ya no observa la ciudad desde la distancia

No hay progresión alguna, o si la hay, se

sino que está en ella y que, de algún modo,

trata de un alejamiento caprichoso. Unos

yo estoy con él allí.

veleros surcan una laguna o un riacho en una de las islas que están frente a la ciudad. La

Siete

imagen ha sido hecha desde cierta altura,

Una de las novelas más extraordinarias de

posiblemente desde lo alto de una de las

César Aira tiene como escenario el edificio

construcciones de la isla, tal vez la escuela

donde se encuentran las mujeres del margen

que recuerdo –y aquí hay una reducción de

izquierdo del montaje, que adquieren vida en

la distancia– que estaba allí. Muy posible-

el libro, si no lo recuerdo mal. A su lado está

mente los veleros estén a unos mil metros

la cúpula de una iglesia, pero una afirmación

de la costa, si tomamos en cuenta que en

así no es completamente correcta, o no es

ese lugar el río tiene un ancho de unos ocho-

lógica; puesto que el lenguaje es espacio,

cientos metros. Notablemente, la fotografía

lo lógico sería decir que la cúpula de la

ha sido hecha con un teleobjetivo, de modo

iglesia se encuentra entre las mujeres y la

que la distancia entre el fotógrafo y su obje-

de otra iglesia, la que a su vez está entre

to no puede ser establecida con precisión.

la primera de las cúpulas y la cúpula de la

Entre el fotógrafo y yo la distancia también

que creo recordar que era una estación de

es imprecisa, pero es mayor; es imposible

trenes, que se encuentra por su parte entre

decir cuál es la distancia entre la ciudad que

la de la segunda iglesia y la de la estación

recorta su perfil contra un cielo sucio en la

de autobuses. Claro que esto, si bien es

imagen y la ciudad donde escribo esto, ex-

lógico, no es necesariamente comprensi-

cepto que esa distancia sea establecida en

ble, y puede ser dicho de otra forma, que

torno a la capacidad o a la incapacidad de la

es ésta: el edificio de Avenida Pellegrini

memoria de nombrar el árbol que se recorta

1563 está entre el de Córdoba 1452 y el

en el centro de la imagen, ponerle nombre al

de la esquina de Avenida Alberdi y French,

brazo de río por el que navegan los veleros

éste se encuentra entre Avenida Pellegrini

–uno tiene las velas recogidas, como si

y la esquina de Wheelwright y Paraguay, el

hubiera renunciado a seguir avanzando, acer-

que, a su vez, está entre Avenida Alberdi y

cándose hacia el fotógrafo y, por añadidura,

French y la esquina de Santa Fe y Sarmiento.

hacia mí– o decir algo de los edificios que

Naturalmente, todas las distancias varían, y

se recortan contra el cielo. En ese caso, si

es indudable que se ha utilizado un teleob-

la distancia puede ser establecida de ese

jetivo.

modo, lo único que puede afirmarse sobre ella es que es enorme, absoluta: mi memoria

Ocho

siempre ha sido mala, y en los últimos años

¿Qué clase de mapa conformaría esa suce-

es peor. 12


sión de calles? ¿Cómo habría que reescribir

ciado “un mural”, lo que, a condición de for-

la ciudad para que las distancias entre las

zar la sintaxis, sólo puede ser dicho de esta

cúpulas fotografiadas fuesen equivalentes

forma: “hay un mural y enfrente del mural

y permitiesen un recorrido lineal y lógico?

está una niña y hay otra niña”, de modo que

Aquí, un nuevo mapa de la ciudad, soñado

“una niña y otra niña” esté en la fila que se

frente a una fotografía y tal vez un día de

encuentra “delante” de la línea en la que está

fiebre por algún enfermo: Avenida Pellegrini

el enunciado “hay un mural”– leen un libro

1563 está entre Córdoba 1452 y la esqui-

que se titula “Azul y amarillo”, y la referencia

na de Avenida Alberdi y French, que está

desbarata la última distancia que existe entre

entre Avenida Pellegrini y la esquina de

el sitio donde me encuentro y escribo esto

Wheelwright y Paraguay, la que, a su vez, se

y las niñas de la fotografía, el mural frente

encuentra entre Avenida Alberdi y French y la

al cual se encuentran y que he visto tantas

esquina de Santa Fe y Sarmiento.

veces y la ciudad que acoge a todos.

Nueve

Diez

Ahora la distancia es menor. El fotógrafo

Me marché de la ciudad hace unos once

está a pie de calle, apenas a unos metros

años; he regresado en un par de ocasiones,

del local que fotografía. Por primera vez en

pero esos regresos nunca han sido comple-

la serie, se puede ver a algunos habitantes,

tos, en el sentido de que no puedes regresar

que están más o menos vestidos como los

a algo que ha continuado extendiéndose

recuerdo y más o menos haciendo lo que

en el tiempo –que ha seguido vivo, puede

recuerdo que hacían. A raíz precisamente de

decirse–, y, desde luego, tampoco he sido

que la distancia es ya tan reducida, puedo

yo mismo el que he regresado, al menos no

recordar personas a las que vi en ese bar

el que yo era cuando vivía en la ciudad. Muy

y cosas que hice allí, en un tiempo del que

posiblemente sólo las fotografías puedan

media una distancia larga que es acortada

ofrecer algo parecido a ese regreso, en el

por las fotografías, que funcionan –y de

sentido de que inmovilizan el tiempo para

esto trata toda la serie– como atajos de la

que sólo medie la distancia espacial entre

distancia temporal y física que me separa

quien observa y aquello que es observado. A

de la ciudad y del tiempo que viví en ella. Un

esa magia menor de la fotografía se le debe

atajo más: la fotografía está tomada a unos

sumar otra: la de la aparente desaparición

treinta pasos del mural, en una plaza que, a

del fotógrafo, que media entre observador

su vez, está a unos cientos de metros de la

y objeto observado. Yo estoy allí, de todas

casa donde se alojó la madre del personaje

formas, y ese es el sentido de las fotografías

retratado cuando lo parió; el fotógrafo está

y de la serie: de aquí a allá, de lo más lejano

a unos treinta pasos de distancia y segura-

a lo más cercano, del presente al pasado, de

mente utiliza un gran angular, mientras foto-

lo que era a lo que es y tal vez a lo que será

grafía en dirección noroeste a sureste. Dos

y alimentará otras páginas y será retenido

niñas en la fotografía –para que el enunciado

en otras fotografías. A estas las reúno y

fuera lógico, la frase debería ser “dos niñas

las meto una vez más en el sobre que las

que están delante del mural”, y el enunciado

contenía y luego salgo a la calle y las pierdo

“dos niñas” debería estar delante del enun-

de vista.

13


eneRO · febRERO

Rosario Uberales Residencia Internacional de Artistas Contemporáneos [EN EL DÍA DE LA VIRGEN]

Anticipando los más audaces postulados de

“El nihilismo de la risa sirve a los dioses. Su función no es distinta a la del sacrificio: restablecer la divinidad de la naturaleza, su inhumanidad radical.”

la postmodernidad gaseosa, Rosario creía firmemente –y también nosotros– en la importancia del hacer sin objetivo prefijado, la

Octavio Paz

experimentación más allá del éxito o el fracaso, y la risa como instancia liberadora del ser. Y es que la risa, decía Freud, es la

Rosario Uberales dejó una extensa biblio-

respuesta humana al terror. La risa nos pone

grafía inédita, desde papeles sueltos hasta

a prueba y pone a prueba nuestras convic-

manifiestos estético-políticos y ensayos

ciones y acuerdos tácitos o explícitos, aque-

filosóficos, algunos de los cuales fueron

llo que hemos naturalizado aún sin quererlo

publicados póstumamente, claro que firma-

o advertirlo. El acto de la carcajada –gesto

dos por otros en homenaje a la tendencia

propio de dioses, villanos de película, niños

fantasmática que en vida caracterizara su

y locos– nos inyecta el poder y la capacidad

carrera.

de sostenerlas o desecharlas, y ello con-

En uno de ellos, y muchos años antes de

vierte a la risa en la fuente última de todo

que Zygmunt Bauman fijara los parámetros

impulso verdaderamente revolucionario.

de la modernidad líquida y los artistas con-

Es, quizás, el ejercicio crítico por excelencia.

ceptuales de los años sesenta demostraran que la existencia material de la obra no es

ROSARIO UBERALES

imprescindible para que haya arte, Rosario

Rosario Uberales (Figueras, España, 19

reflexionaba intensamente en torno a la

de febrero de 1900 - Rosario de Santa Fe,

futilidad del trabajo. Como nosotros, ella

Argentina, 2 de agosto de 2006) es una ar-

creía firmemente en la importancia de quitar

tista visual, performer, militante anarquista y

al trabajo –tanto artístico como al trabajo

asesina serial catalana.

en general, desde la concepción marxista de agregado de valor– el lastre de la solem-

Biografía. Orígenes e infancia

nidad que suele imponérselo hoy en día

Nacida Contxa Rosario Uberalls i Puig,

como un velo.

Rosario creció en el seno de una tradicional 14


familia de anarquistas catalanes. Su padre,

Dr. Joseph Goebbels entre sus profesores;

Santiago Sebastián Uberalls, fue un activo

una vez en la Argentina le fue asignada

militante de este movimiento y participó

la cátedra de Filosofía del Lenguaje en

junto a Gustavo Cochet en la defensa de la

la Universidad Nacional de Rosario. Pero

República durante la Guerra Civil Española.

lo limitado de su salario llevó a su esposa,

Perseguido por la Falange, SS (así llamaban

Manuela Puig Carbonell, a regentear, bajo el

sus amigos a Santiago Sebastián) optó por

seudónimo de Madame Safo, una célebre

salvar su vida y la de su familia emigran-

“casa de tolerancia” (también llamada ca-

do, por sugerencia del propio Cochet, a

barute, prostíbulo, puterío, whiskería, casa

la Argentina, por entonces tierra de libertad y

de citas, sauna, salón de masajes, puticlub,

amplios horizontes.

quilombo, gaterío, etc.) en el mítico barrio

El grupo anarquista consiguió los documen-

portuario de Pichincha.

tos necesarios para que la familia pudiera

Las tres hijas del matrimonio: Rosario,

llegar sana y salva a Sudamérica. Es preciso

Amalita y Adriana, fueron educadas en la tra-

destacar que antes de pasar a la Argentina

dición de la Nueva Escuela Rosarina de Ol-

los Uberalls fueron alojados unos días por

ga Cossettini, formación que alternaron con

Elisabeth Förster, por entonces presidenta

las clases de dibujo de Claude de la Rivière

del Mengele Yacht Club, en Asunción del

y las lecciones de clavicordio de Oscar

Paraguay.

“Pájaro” Gómez. Amalita y Adriana descolla-

Camino a Buenos Aires, quiso el destino que

rían con el tiempo en el ámbito empresarial

por la rotura de un micro los Uberales (así

aunque, como es sabido, manteniendo

fueron inscriptos en el departamento de Mi-

una fuerte inclinación hacia el coleccionismo

graciones argentino) decidieran finalmente

de arte. Más bohemia y desinhibida que sus

radicarse en Rosario, cuna de la bandera

hermanas, Rosario se entregó en cuerpo y

argentina y –paradójicamente– de una rica

alma a la práctica artística, lo cual no fue por

tradición anarquista en la que la Uberales

otra parte menos lucrativo.

tendría un papel no menor. El historiador cristiano rosarino Rogelio von Wernich se-

Carrera artística

ñala –más allá de sus profundas diferencias

Enrique Munné fue su primer maestro, y fue

ideológicas con la artista– la interesante

precisamente en su taller del Centre Catalá

coincidencia entre este hecho fortuito y el

Rosarino que Uberales conoció al legenda-

milagro que diera origen a la propia ciudad

rio Antonio Berni, con quien vivió un tórrido

de Rosario en 1725, cuando –se dice– la

romance entre bastidores, pinceles y lluvias

carreta que transportaba una imagen de la

de aguarrás. Dícese que tras cada mete-y-

virgen se negó a continuar hasta que ésta

ponga, Rosario gustaba especialmente de

fue depositada en el pago de los Arroyos, re-

recitar ante el futuro muralista siqueiriano

bautizado luego como Rosario de Santa Fe.

extensos pasajes del Dieciocho Brumario de

El Padre de Rosario, sociólogo formado

Napoleón Bonaparte, lo que sería decisivo en

en la Universidad de Friburgo, fue con-

la afiliación de Berni al Partido Comunista del

discípulo de Martin Heidegger y tuvo al

que sería expulsado muchos años más tarde, quizás justamente debido a su pasado

Rogelio von Wernich, Anales del país que los zurdos apátridas hicieron mierda. Rosario, Claridad, 1970.

con esta anarquista. 15


FOTO LAURA ESCOBAR Colores

En relación con esta etapa de la obra de

alcance decisivo en la política, la literatura

Berni, prestigiosos historiadores del arte

y la gestión cultural, entre otros campos.

como Wilhelm von Fanton afirman que el

Una tradición oral afirma que, de no ser

cuadro Manifestación de 1934 es, ni más

por la discusión que Rosario sostuvo con

ni menos, obra de ella. Hipótesis que ha

Ernesto Guevara después de una noche de

generado no pocas controversias, aunque es

sexo desenfrenado sobre si la posición ideo-

verdad que de una minuciosa comparación

lógica a adoptar para la revolución en Latino-

con los bocetos de Uberales que se han con-

américa era la freudo-leninista o la lacano-

servado se desprende un fuerte parentesco

trotskista, el “Che” jamás hubiera tomado la

con la pincelada, el dibujo y la paleta del

motocicleta que lo condujo a su destino.

maestro posteriormente atragantado.

Pero no todo era pinceles, fusiles y mate-

De hecho, y según investigaciones más

rialismo dialéctico en la vida de Rosario,

recientes [agregar cita] Rosario fue –segu-

de quien se cuenta que también gozaba

ramente a su pesar– una precursora en el

de un frecuente sentido del humor. A su

terreno del arte de lo que décadas más tarde

autoría pertenece el primer texto escrito

se conocería, en el ámbito literario, como

en rosarigasino: La revolucigasión es un

“escritor fantasma”. Trabajos académicos

suegaseño etegaserno, cuyo primer capítulo

publicados en los últimos años [ver qué

señala que: “Lo primegasero que degasebe

onda] se atreven a sostener que alrede-

defendegaser un autegaséntico marxigasista

dor de un 80 por ciento de las obras emble-

es el camigasino a la revolucigasión, pero

máticas de la plástica rosarina serían de su

sin descuidasigar la priorigasidad absoluta

exclusiva autoría, desde el Monumento a

del degasarrollo espirigasitual: si no puedo

la Bandera hasta el núcleo inicial de Tucu-

bailasigar, no me integaseresa tu revoluciga-

mán Arde, pasando por La chola de Alfre-

sió”.

do Guido y los Tagli de Lucio Fontana.

También era habitual encontrarla en las ani-

De más está decir que estas hipótesis

madas tertulias sobre fútbol, libros y culos

han dividido las aguas en el ámbito de la

en el mítico bar El Cairo, donde formaba

crítica de arte local, generando detractores

rueda con el maestro Roberto Fontanarro-

y partidarios igualmente apasionados. Éstos

sa y las larvas que gozarían de una efímera

últimos, de hecho, fueron por décadas mar-

fama tras la muerte de éste, amenizando

ginados cuando no directamente amenaza-

aquellas veladas de bohemia con un extenso

dos en su integridad física y psicológica, no

repertorio de términos gruesos y chistes de

faltando episodios concretos de violencia.

vestuario.

La influencia de Uberales en la cultura del

De su filiación futbolística –tema caro a

Rosario profundo, sin embargo, no se limitó

los habitantes de Rosario– poco y nada se sabe, aunque todos coinciden en su acen-

en absoluto a las artes visuales, y tuvo un

drada pasión al respecto, que la llevó a

La crítica Eva Greenberg sufrió vejaciones cuya descripción excede los límites del buen gusto. Muchos de los afectados por el denominado “pogrom rosarino” acabaron sus días en la Colonia Psiquiátrica de Oliveros, donde resolvieron parte de sus problemas en el taller de artes plásticas.

Rosario Uberales, La revolucigasión es un suegaseño etegaserno. Rosario, Kraft, 1938.

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17


FOTO LUCAS CASATTI “Cochet Utópico” Centro Cultural Parque de España / AECID

tener legendarios encuentros sexuales con

delirio fue recogido por su más cercano in-

jugadores, tanto de Newell’s Old Boys como

terlocutor, su enfermero Fernán Farináceo.

de Rosario Central, en ocasiones en una

Sobre esta misma idea, años después, se

misma sesión. Puede decirse que su viru-

fundó el macro. La estructura edilicia de este

lenta inclinación a los pecados de la carne la

museo es sólo uno de los rasgos del mismo

convirtió en una precursora de la unidad del

que honran las circunstancias en que fuera

pueblo rosarino sin distinción de banderías.

concebido.

Las teorías que afirman que Rosario Uberales fue la encargada de la inicia-

Enfermedad y muerte

ción sexual y artística del querido “Ne-

En marzo de 2005, durante un homenaje

gro” Olmedo, e incluso la autora intelectual

en el Fondo Nacional de las Artes, Uberales

de personajes entrañables como el Capitán

sufrió una descompensación por la que

Piluso, han sido recientemente desestima-

el evento debió cancelarse. Tras algunos

das.

episodios similares, a finales de ese año le

En el ámbito de la gestión cultural, por

fue detectado un tumor maligno en el recto,

último, la actuación de Uberales fue decisiva

sin que los médicos pudieran hacer nada al

para la constitución del extenso campo ins-

respecto. En mayo de 2006 fue internada

titucional rosarino. Es bien conocida su in-

en el Sanatorio Plaza, donde expiró el 2 de

fluencia en la creación de museos emblemá-

agosto.

ticos como el Histórico Provincial Julio Marc,

Rosario murió en un avanzado estado de

el Municipal Juan B. Castagnino y otros

deshidratación y sosteniendo un ejem-

fundados por conspicuos coleccionistas a

plar del Kamasutra entre sus manos; sus

los que Rosario –quien, como anarco-marxis-

últimas palabras fueron “Rosario por sobre

ta de la línea tardoleninista del V Congreso

todo”, lo que fue interpretado por algunos

nunca dejó de valorar el rol del Estado en

como una proclama expansionista y por

la educación artística del pueblo– persua-

otros como la descripción de una posición

dió por todos los medios posibles, inclusive

sexual, aunque algunos grupos neonazis no

carnales, de donar sus colecciones com-

descartan un sencillo pero revelador jue-

pletas al Estado creando sendos museos

go de palabras entre su propio nombre y la

públicos y gratuitos.

traducción al español de un memorable slo-

Un eco de esta actitud se produjo en sus

gan del Führer. Rosario murió asistida por los

últimos años, cuando, ya postrada y afecta-

consuelos de la religión católica y rodeada

da de frecuentes ataques de Alzheimer, Ro-

de sus seres queridos: sus ocho hijos, sus

sario –sorprendentemente al tanto de las

diecinueve nietos y los siete bisnietos

últimas manifestaciones del arte– expresó

que llegó a conocer antes de convertirse

un confuso deseo de fundar el primer museo

en un ente babeante y desconectado de

de arte contemporáneo de la región en

la realidad. Su cuerpo fue velado en el Cen-

alguna de las estructuras abandonadas del

tro Cultural Parque España, cuyo director

puerto rosarino. Este genial producto de su

pronunció un sencillo pero emotivo discurso. 18


Al día siguiente fue sepultada en el mauso-

ción por la posición sexual denominada “en

leo de la familia Uberalls Puig Contxa del

cuatro”.

Cementer Catalá El Salvador de la ciudad

Entre su amplia descendencia se encuentran

de Rosario, donde cada 2 de agosto manos

varias de las personalidades que dinamizan

anónimas depositan una camelia roja sobre

actualmente la escena de arte rosarina.

su lápida.

Si bien no se cuenta con confirmación de fuentes, ha trascendido que entre ellos

Otros datos de interés

se cuentan integrantes de los colectivos

En los años cuarenta, Rosario alquiló un

Compartiendo Capital, Herrmana Favorita y

atelier en el Pasaje Pam, donde funcio-

Atypica.

nan actualmente los sanitarios. Recientes

Era tan intelectual que en vez de escuchar

investigaciones afirman que la galería

música se leía las partituras. Esto le ha-

independiente Cultura Pasajera eligió su

bría generado algunas confusiones entre

actual emplazamiento como un silencioso

géneros, pues como todo el mundo sabe, la

homenaje a la artista.

línea que separa el reggaetón del pasodoble

De sus excursiones dominicales a la isla,

es muy delgada.

se sabe que Uberales dialogaba –mientras

Además de sus autorías fantasmas, el talen-

encendía un churro que hubiera asombrado

to de Uberales fue transmitido a unos pocos

al mismísimo Bob Marley– con el pintor

y estrictamente seleccionados alumnos,

muralista Raúl Domínguez y que fue ella,

entre los cuales descollaría la estadouni-

de hecho, quien despechada con Berni,

dense Grace Jackket, figura destacada del

realizó insistentes gestiones para que

arte político local y una formación de la que

Domínguez ornamentara la estación fluvial.

Uberales se arrepintió hasta sus últimos

Uno de sus apodos marginales fue “Rosario

días.

numerales” y se relacionaría con su afec19


eneRO · febRERO

EN EL DÍA DE LA VIRGEN

previo con los gestores locales que colabo-

Residencia Internacional de Arte Contemporáneo

ran en la realización de la residencia para la identificación cartográfica del lugar que nos recibe, de sus principales agentes culturales

Jorge Sepúlveda T.

y de las problemáticas que la constituyen

Ilze Petroni

como una escena de arte contemporáneo. Sabemos, además, que la única forma de tener la razón es estar solo. Y ésta es la premisa básica que nos impulsó a realizar las residencias de arte contemporáneo en el

En septiembre de 2010, terminamos el

formato summer camp.

[Procrastination Tour] de Rosario con una

Pero basta de preámbulos.

conversación de bar junto al río Paraná y,

En Rosario, reunimos a 19 personas dispues-

sobre todo, con ganas de más. Aún sonaban

tas a revisar la historia del arte contempo-

los acordes del video Enchufa y esa mezcla

ráneo argentino que había pasado por allí;

de cultura pop y arte contemporáneo, que

la ciudad que no tiene fecha de fundación.

recorrió los días anteriores, nos trajo más

Mejor dicho: que sí tiene, pero que fue im-

deseos y nuevas intrigas.

puesta ex-post, luego de los hechos.

A esa altura ya sabíamos cómo redoblar la

Esto –un detalle casi trivial– puede servir

apuesta: ¿Gab, te animás a que hagamos

como hipótesis de investigación sobre el

una residencia de arte acá en Rosario? No

arte contemporáneo de los alrededores.

hubo que argumentar mucho: las noticias de [Amor de Verano] y de [Social Summer

[EN EL DÍA DE LA VIRGEN] fue eso: visitar

Camp] ya habían cruzado la cordillera junto

y revisar instituciones formales y gestiones

con los artistas que participaron.

autónomas para averiguar de qué se trata

Fuimos explícitos. El formato que maneja-

aquello que llamamos “arte contemporáneo”

mos es meternos en problemas: juntar a 15

después de haber sido nominado.

o 20 artistas contemporáneos y sus servicios

Así, entre el 31 de enero al 12 de febrero

asociados e implementar esa idea –que

de 2011, nos alojamos en la residencia

andamos trayendo en la valija– de formar el

Los Soles –proyecto de la Cooperativa

ART Qaeda.

Encuentro, que trabaja bajo los principios

Lo que buscamos, entonces, es ver qué

de la economía solidaria– y nuestro lugar

pasa cuando renunciamos a las eficiencias

de trabajo fue el Centro de Expresiones

individuales para enfocarnos en las capaci-

Contemporáneas (CEC).

dades de grupo y terminar de una vez con la

Desde allí, iniciamos un calendario de activi-

idea de la residencia como taller desplazado.

dades que nos tuvo recorriendo las calles y

A esto unimos la realización de un trabajo

hogares como una jauría que observa, anota y organiza datos, emociones y coartadas.

Del cómico ítalo-chileno Benny Wisin.   Investigadores, historiadores, curadores, galeristas, etc.

En el CEC conversamos y almorzamos junto 20


a Héctor “Pichi” De Benedictis –su director–

que conformaban la muestra “Ecosistema

quien nos contó –entre otros temas– del pro-

Oroño” y también vimos –en la planta

yecto de intervención de billetes por artistas

alta– las obras seleccionadas del LXIV Salón

como un señalamiento del valor simbólico y

Nacional de Rosario 2010 y los premios del

financiero que realiza el arte contemporáneo

Salón exhibidos en el hall central del museo.

y las implicancias legales que tuvieron que

Luego, nos encontramos con Marcela Römer

enfrentar.

–directora del Museo Castagnino+macro–

Al día siguiente, en ese mismo primer piso

en los silos que albergan al museo de arte

del CEC, recibimos a Claudia del Río. Ella

contemporáneo y, tras visitar las instalacio-

nos relató la historia de su Club del Dibujo,

nes, nos contó de la nueva gestión y de los

sobre los colaboradores invitados y las activi-

proyectos para el museo.

dades de índole social que realiza.

Un picnic con vista al río y luego el recorrido

Tercer día: por la mañana –de calor inten-

por los espacios autónomos del Pasaje Pam:

so– salimos hacia El Levante, para charlar

Cultura Pasajera, junto a Gab Gabelich y

con Lorena Cardona y Graciela Carnevale,

Román Rivoire –sus directores– y las colabo-

quienes –junto a Mauro Machado– han

radoras Florencia Laorden y Catalina Grecco;

sostenido este proyecto de intercambios de

Oficina 26 de la mano de Pauline Fondevila

producción artística y discursiva. Y como no

y el espacio de la revista Atypica junto a

podíamos parar de conversar regresamos a

Guillermina Ygelman.

Los Soles para almorzar juntos: empanadas

Luchas constantes contra la gentrificación y

y cervezas muy bien dialogadas.

la subordinación que ocasiona. Y de nuestro

Siesta breve para luego recorrer la muestra

paso por el Pasaje, Pablo Saavedra sugirió la

“Cochet Utópico” junto a su curadora María

idea de Galería Llavero y ahora es su curador.

Eugenia Prece. Las discusiones de pasillo

Anteúltima actividad del día: partimos al

hervían, pintura y acción política, archivo e

Centro Cultural Lavardén, donde nos junta-

inscripción.

mos con Ángeles Ascúa, Florencia Caterina

Al finalizar la visita, nos recibió Martín Prieto

y Matías Pepe, miembros del colectivo La

–director del Centro Cultural Parque España–

herrmana favorita y responsables de las

que nos habló de las líneas de acción de

exhibiciones de la antesala.

CCPE y su relación con la AECID y la escena

De ahí, a la Biblioteca Popular Alfonsina

local.

Storni –que dirige Marcela Römer– a comer

Terminamos la jornada –otra vez, cerveza en

un asado de las manos de Andrés Waissman

mano– en la terraza de Lila Siegrist, artista

y continuar con el diálogo comenzado por la

y agitadora cultural, donde vimos sus obras

mañana. Le siguió el encuentro, en el Café

y tuvimos la primicia del Anuario 2010. Esa

de la Flor, con José Pablo Buzzo, Victoria

noche también hubo improvisación musical

Ciaffone y Julio Quinteros, responsables del

entre Buenisssimo, Tino y los amigos de la

Espacio WIP que funciona en el mismo bar y

casa.

quienes nos propusieron intervenir colectiva-

Nos levantamos temprano para reunirnos en

mente el espacio. Tres días para un “hagan

el Museo Castagnino con Roberto Echen, su

lo que quieran”.

director artístico. Allí recorrimos los núcleos

El domingo fuimos a la isla, esa que perte21


FOTO LUCAS CASATTI “Cochet Utópico” Centro Cultural Parque de España / AECID

nece a otra provincia pero que es la cabeza

Beatriz) eran como la resurrección de los

de playa de los rosarinos. Las metáforas son

muertos vivos: poco a poco, uno a uno, iban

un flash.

apareciendo los restos recién despertados

El plan era dibujar, pero finalmente grabamos

de los residentes. Pocas horas de dormir,

el video “Der blaue Unicorn” de Kraftwerk

muchas de conversación, baile y ver insis-

Rodríguez, insigne representante de la

tentemente los videos de Youtube –cada

Nueva Trova Alemana y primo de Bombita. Y

vez más bizarros– que iban construyendo la

retozamos al sol. ¿Qué otra cosa hacer para

confianza y la impunidad donde el humor fue

homenajear el ritual dominguero?

una herramienta de investigación, análisis y

Un lunes lluvioso, por la mañana, visitamos

construcción de valor.

a Pablo Montini (investigador y editor de

De allí surgieron Rosario Uberales y el

Anuario) en el Museo Histórico Provincial

Macccro está Buenisssimo.

Julio Marc: relato sobre la colección y reco-

Del segundo, podemos decir que fue una

rrido guiado privilegiado.

intervención directa sobre el espacio museal

Por la tarde, volvimos a reunirnos en el CEC

(las escaleras y el ascensor) propuesta por

con Graciela Carnevale para que nos contara

el colectivo Buenisssimo integrado por

sobre el Archivo Tucumán Arde.

Valeria Caamaño, Agustín Genoud y Josefina

En el CEC, también, tuvimos una mañana

Zuain y en la que participaron –en el triple

de diálogo con Fabricio Caiazza (Faca) e Inne

rol de documentadores, curadores y público

Martino, quienes nos hablaron del proyecto

durante el vernissage con la caña de los dos

Compartiendo Capital, Vodkamiel y sus pro-

caballos– todos los residentes.

puestas de derechos compartidos y trabajo

Rosario Uberales, por otra parte, es la articu-

colaborativo.

lación de todo lo que escuchamos sobre la

Last but not least, desayunamos en el local

historia del arte rosarino y la forma en que

de Nuria –auspiciante de la residencia– con

los locales tienen de posicionarse discursi-

Beatriz Vignoli, crítica de arte: como vati-

va y prácticamente frente a un observador

cinaba en la nota de prensa que escribió

externo: Rosario está por sobre todo. Por

antes del comienzo de la residencia. Profecía

sobre las disidencias político-ideológicas,

felizmente autocumplida.

por sobre los modos de producción estética,

También recorrimos los bares y boliches, el

por sobre toda diferencia hacia el adentro.

cabaret La Rosa y la casa de un coleccionista

Podría leerse como una actitud corporativa,

rosarino. El panorama completo de doce

pero no. Es la defensa en bloque de lo que

intensos días sumergidos en el sistema de

supieron conseguir; una forma de acción

arte contemporáneo rosarino, en los intere-

o intervención política en el presente y el

ses que la cruzan y la illusio que la convier-

modo de proyectarse hacia el futuro siempre

ten en un campo en disputa, escenas como

incierto.

un cuadro de Cándido López.

Ese fue el diagnóstico de [En el día de la

Los desayunos cotidianos (las “ideas y

Virgen], esto fue lo que los residentes advir-

medialunas frente al Paraná” como tituló

tieron y –tras largas horas de discusión entre 22


los intersticios de las actividades programa-

Información adicional sobre [EN

das– decidieron abordar en el Espacio WIP.

EL DÍA DE LA VIRGEN]

Durante tres tardes, pintaron sin cesar sobre

Participaron en la residencia artistas contem-

los dos paneles sabiendo que la capa final

poráneos, gestores independientes e investi-

sería blanca y que no habría imagen alguna

gadores de arte de Argentina (Buenos Aires,

sino la afirmación en el gesto de la futilidad

Córdoba, Tucumán, Rosario), Chile (Santiago,

del trabajo y un personaje que todo hizo por

Valparaíso), Brasil (Porto Alegre) y Venezuela

y para el arte rosarino: Rosario Uberales.

(Caracas). Ellos son: Agustín Genoud, Ana

Hubo malentendidos, como afirmar el

Moreno, Andrés Waissman, Bruno Juliano,

carácter nacionalsocialista de la exposición.

Carina Mercado, Cecilia Flores, Claudia Paim,

Optamos entonces por reír. Porque como es-

Diego Guerra, Josefina Zuain, Juan Manuel

cribimos –junto a Diego Guerra– en el texto

Ipiña, Leonardo Cavalcante, Loreto Riveros,

de la muestra: “La risa nos pone a prueba

Luciano Burba, Macarena Abarca, María

y pone a prueba nuestras convicciones y

José Bustamante, Natalia Saenz Valiente,

acuerdos tácitos o explícitos, aquello que

Pablo Saavedra, Valeria Caamaño y Valeria

hemos naturalizado aún sin quererlo o adver-

Stang. El equipo de trabajo estuvo coordina-

tirlo. El acto de la carcajada (...) nos inyecta

do por Jorge Sepúlveda T. (curador indepen-

el poder y la capacidad de sostenerlas o

diente), Ilze Petroni (investigadora de arte) y

desecharlas, y ello convierte a la risa en la

Gabriela Gabelich (artista y co-directora de

fuente última de todo impulso verdadera-

Cultura Pasajera).

mente revolucionario. Es, quizás, el ejercicio crítico por excelencia”. 23


MARZO

24


25


marzo

FOTO GASTÓN MIRANDA Juliana Iriart, Olor a Bosque Salón Asociación Empresaria de Rosario, Museo Castagnino

Preguntas, performances, libros. Un recorrido arbitrario Irina Garbatzky

Las reglas del arte

los mecanismos del arte, y su plasmación en

Algunas de las obras expuestas en Rosario

frases que pueden convertirse en problemas

durante marzo de 2011 despertaron la impre-

o en mandatos. Se trata de una secuencia de

sión de que el tiempo de cierta afirmatividad

hojas blancas pintadas con fibras de distin-

se abría entre lo autobiográfico, lo maquinal

tos colores, con oraciones: “Pensar mucho

y los mundos alternativos, hacia produccio-

es peligroso”, “La forma en que se cuenta es

nes que, si bien no buscaban una desestabi-

determinante”, “Vulgarizar el archivo, saberlo

lización o un retorno, sostenían, sin estriden-

de memoria”. El trabajo de Lionti, apelando a

cias, varias inquietudes. Como las consignas

elementos propios de lo escolar y lo infantil,

de Guarda decorativa de Lucrecia Lionti, una

repite la pregunta sobre “qué es lo contem-

artista tucumana de la que tuve noticia por

poráneo”, no sin cierta ironía, al incorporar

una polémica de finales de 2010, publicada

conceptos de teóricos actuales, que en otras

en el suplemento Radar del Página/12, entre

ocasiones cita, como Hal Foster o Jacques

Claudio Iglesias y Rafael Cippolini, a propó-

Rancière.

sito de una exposición en Currículum Cero,

El ejercicio no deja de ser arriesgado e

la muestra de la galería Ruth Benzacar. Al

interesante, porque, de hecho, ¿qué archivo

escribir su comentario, Iglesias preguntaba

“olvidan” productivamente estos artistas? En

cómo se configuraba lo “joven” en el arte, al

el caso de Luciana Ponte, que durante marzo

cabo de un año en el cual el signo de la ju-

mostró su proyecto Punto de venta en el

ventud parecía tener que ver con una vuelta

espacio El Cubo del Pasaje Pam, se encuen-

a la política. La obra de Lionti, expuesta en

tran algunas herencias del conceptualismo

Benzacar entonces, y ahora en Rosario, no

y un humor irreverente. Al igual que Lionti,

parece hacerse cargo directamente de cues-

Ponte lanza sus dardos sobre el sistema de

tiones políticas, pero sí de otras que regulan

las artes y su mercado, haciendo una redun-

dancia entre las condiciones de producción artística con las de la obra. Un programa:

Iglesias, Claudio: “Cero negativo”, Página/12, Suplemento Radar, 5 de diciembre de 2010 [en línea] http://www.pagina12.com.ar/ diario/suplementos/radar/9-6664-2010-12-05.html. Cippolini, Rafael: “El club de los hematófogos”, Página/12, Suplemento Radar, 15 de diciembre de 2010 [en línea] http://www.pagina12.com.ar/diario/ suplementos/radar/9-6672-2010-12-15.html.

hacer objetos o dibujos en simple blanco y negro compuestos por puntos, donde cada uno vale diez centavos. Entonces el título 26


27


de un “cuadro” puede variar: 1315 o 1514…

travestismo el sitio ambiguo entre la risa y

todo depende de la cantidad de puntitos. O

el dolor, corriéndolo de cualquier acepción

los “inutensillos”: una taza de té con plato

cómica y festiva. ¿“Un chongo de cloaca”,

con “8660 puntos que [la] inutilizan”. Una

como diría Urdapilleta? ¿Una loca de la po-

estrategia consabida del pop (nuevamente,

bla, como se escucharía en Pedro Lemebel?

aprendida y olvidada) cuya forma de juego

No se trata exactamente de un reedición del

inocente visibiliza las reglas del arte. Dice

travestismo; Nadia es una mujer que vive en

Ponte: “Me convierto en una máquina de di-

un barrio, y para ella hablar de violencia es

bujar, y de facturar, a partir de este ejercicio

tan natural como colgar bombachas. Este

artístico obsesivo con un orden serial y velo-

punto de vista, endulzado con los tics del

cidad de producción como parte de estrate-

massmedia, no busca defender una minoría

gia de movilidad económica. Me autoexploto

ni reponer un tipo de vinculación festiva,

y me vendo barato”. Durante los días que

sino que conjuga el morbo de los cronistas,

duró la muestra, además, la artista estuvo en

los crímenes familiares y la corrupción disfra-

contacto con el público que transitaba por

zada. El archivo travesti, en todo caso, tiene,

el Pasaje en un “espacio de trabajo”, donde

para Ares, un precedente más cercano: las

producía sus cuadros plagados de puntitos.

performances de Mauro Guzmán y la serie

En un exhibidor, que estaba dispuesto desde

de videos de Studio Brócoli (Nadia Soler

el principio, colocaba las obras-artículos de

hizo una aparición hacia el final del Trailer

venta. La performance residía en una conver-

para amantes de Studio Brocoli, entre otros

sión de los espectadores en compradores y

trabajos). Sin embargo, el montaje de citas

de la artista en trabajadora compulsiva.

inequívocas que aparece en esta película

Si el cuestionamiento sobre la prostitución

(Anita Ekberg, Eva Perón-a-lo-Lloyd Weber,

del artista es un tópico que remite directa-

los boleros), no se reitera en el Docudrama,

mente al siglo XIX, es interesante observar

que está centrado en el monólogo del perso-

el giro “prosti” hecho por Darío Ares con la

naje y sus historias.

construcción de Nadia Soler hacia comien-

De hecho, Nadia es un personaje casi litera-

zos de 2000. Vi la muestra del Salón AER

rio, que desde su cuenta en facebook hace

dos veces: una vez que volví me senté en

uso de una voz, completamente singular y

el recodo silencioso que hacía contrastar el

alterna a la de su creador. “Nadia tiene vidas

museo más moderno de nuestra ciudad, con

pasadas”, dice Ares, “estas podrían ser los

un pequeño televisor que mostraba a Nadia

microrrelatos que aparecían en mi blog”. Se

Soler, una mujer que se hace ver en Villa

trataba de relatos escritos desde el “con-

Gobernador Gálvez, Villa Constitución y en la

fesionario”, armados sobre las anécdotas

cárcel, según el Docudrama.

y los secretos de los amigos. El deseo de

Soler es un personaje armado por Ares, una

charlar, esta vez sobre la propia investigación

encarnación femenina del archivo de cróni-

de policiales, se encaramó con la figura de

cas policiales con el que viene trabajando

Nadia durante una “tarde performática” de

desde hace varios años. Ares recoloca en el

una residencia para artistas en Córdoba. A diferencia de otros performers –pienso en Batato Barea, por ejemplo–, Ares no se foca-

En su sitio web: http://puntodeventa.lalulula.com

28


liza en la indistinción entre obra y vida, sino,

plasmó en un manifiesto de 1982: La desfo-

por el contrario, aprovecha las distancias

calización en función del espacio.

entre él mismo y su personaje: “Digo quién

Uno de los elementos más interesantes de

es Nadia, no digo quién soy yo”, me dice en

la exposición –además de las pinturas en sí

la entrevista, “y su propia impunidad permite

mismas– fue un video que la acompañaba,

la impunidad de los otros, que comentan en

de quince minutos, llamado Hacia un cubis-

las fotos del facebook cosas que a mí no me

mo cinematográfico, realizado en 1978 entre

dirían”.

Scheimberg y Mario Piazza. El video cubría

Es posible observar en estas propuestas tan

varios aspectos pertinentes a la muestra: por

disímiles una inquietud por la representa-

una parte ensancha y explicita las búsquedas

ción y el circuito del arte. Ponte denuncia la

teóricas abiertas por la exposición; por otra,

puesta en venta del trabajo del artista hasta

funciona como testimonio de una época de

el absurdo de ofertar “puntitos” acumulados

producción de arte en Rosario, los comien-

(es ciertamente irónico el diseño comer-

zos de los años ochenta, en donde ciertas

cial de su web, donde expone y vende sus

cuestiones en torno a la vanguardia aún

obras con banderitas de “oferta”, “vendido”

estaban vigentes; incluir el manifiesto y el

o “inversión asegurada” sobre la imagen

video ampliaba el conocimiento de este pe-

de cada “producto”). Lionti dispara sobre sí

ríodo histórico. Las pinturas de Scheimberg

misma las reflexiones de la crítica, las modas

recuperan “dos convencimientos del artista

intelectuales y su influencia. Y Nadia Soler

que inmediatamente la época iría a poner

propone la obra de un artista desdoblada en

en cuestión: su fe en las vanguardias como

otra “vida” que no tiene ninguna relación ni

motor de cambio en la historia del arte y

ningún vínculo con las artes, y que se valida

la certeza de que perspectiva y teoría del

con la misma banalidad con la que se valida

color no habían agotado su posibilidad de

cualquier persona en televisión.

movimiento en la historia de la pintura”, tal comenta Martín Prieto, el director del Centro,

La desfocalización del espacio

en su blog (http://blogdeldirector.blogspot.

Otra muestra con una fuerte carga de

com). Aquello que los artistas muestran en

autorreflexividad, fue Pinturas de Daniel

el video es la comprobación de una serie de

Scheimberg en las galerías del Centro

hipótesis ópticas, pero su punto de engar-

Cultural Parque de España. En un sentido

ce con el presente emerge al tomar una

completamente diverso al de las obras que

imagen del Paraná y mostrar que sus bordes,

ya mencioné –no de la representación a la

desde el horizonte, se deshacen. Nuestra

acción sino de la representación hacia el

visión organiza los objetos de acuerdo a

pasaje entre la figuración y la abstracción–,

una convención conceptual. De este modo,

el trabajo del pintor reside en la desmate-

internarse en un cuadro de Scheimberg

rialización de los límites de los objetos en

posee algo de un ataque perceptivo; la

el cuadro. Aquí vuelven ciertas variantes

vista duele e incomoda, las coordenadas

vanguardistas; se trata de un programa con

espaciales se pierden, estamos al borde de

el que Scheimberg viene trabajando desde

un ataque lumínico. Uno de sus tempranos

los años ochenta, que tempranamente lo

descubrimientos residía en que la técnica 29


del esfumado multiplica la luz que arrojan los

apertura. Mi visita fue virtual, a través de las

cuerpos, o, más precisamente, “al desenfo-

fotos que Negri colgó en su página (http://

car o desfocalizar la vista, los colores de las

www.flickr.com/photos/virginianegri) y que

superficies opacas comienzan a comportar-

me mostró más tarde. Chicos pintados con

se como si fueran color luz”, explica Beatriz

azul, plateado y fucsia, refulgían en la oscuri-

Vignoli, curadora de la exposición.

dad. Bailaban con la música improvisada de Jeremy Flajelo y Alejandro Minesi (llamados,

Muestras que son poemas

esa noche, “Maral 9000”), noises hechos con

El día que fui a visitar la muestra de Virginia

objetos similares a los usados por la artista.

Negri en Oficina 26, el local estaba cerra-

Manuel Brandazza fabricó prendas utilizando

do. Me guiaron unos gatitos pintados con

para ello la tela grafiteada con la que Negri

colores “fluo”, que señalaban con el brazo

cubrió el Pasaje Pam en 2007 en otra perfor-

como saludan los fetiches chinos. Lo kitsch,

mance que se llamó Mi cielo sobre vos. Ese

lo cursi, lo infantil, lo femenino en Negri va

“cielo” tenía versos, colores y cotillón y en

de las artes plásticas a la poesía. No me

verdad su archivo –la tela conservada, los

sorprendo cuando más tarde me cuenta que

objetos, sus fotografías– funcionaba como

trabajó como asistente de Fernanda Laguna;

puntapié de esta nueva obra. La performan-

al preguntarle si existen cercanías entre

ce-ambientación-body-art-poesía de 2011

ambas obras, asintió con admiración.

se armó en relación a esa puesta anterior,

¿Qué vínculos tienen estos artistas con la

no sólo en la ropa, sino en los accesorios

poesía? El nombre de la muestra es este

que llevaban los performers, diseñados por

poema, titula Negri, y a continuación escribe

Renata Minoldo con objetos similares. El

a mano un poema que ocupa toda la página:

modus operandi, dice Negri, era “rápido y

“mi poesía es mala / sucia / mal escrita / tie-

furioso”, esto es, con la creatividad justa y

ne errores / ni yo misma sé / si son poemas /

los materiales necesarios como para generar

pero siento que / la poesía me hace compa-

funcionalidad y eficacia. Así se vieron maxi-

ñía / odio esa rima / […] / mis poemas son

uñas hechas con broches para el pelo o un

muy malos / porque no los dejo ser buenos

sombrero con cartones de pastillas. Mucha

/ no quiero buenos poemas / quiero que la

purpurina, cintas, colores y “los chicos”, me

poesía / me regale su compañía / el día que

dice la artista, “que salían de la pintura y se

escriba el mejor poema / si eso jamás su-

transformaban en obra viviente”.

cediera / si alguna vez pasara que justo yo /

La noche del cierre quedaban sólo sus

amante de la mala poesía / escribiera la poe-

huellas, los trajes en perchas y “la pintura”:

sía más increíble de todas / si eso pasara… /

un mural pintado que reproducía una foto

vos / poesía / ¿me abandonarías por alcanzar

tomada del Cielo… Mientras lo miraba, me

la perfección?”.

di cuenta que no iba a poder escribir sobre la

El nombre de la muestra era un poema y su

fiesta anterior, ni sobre los abanicos o las jo-

soporte era una performance. Aún encanta-

yitas de tela. En cuestiones de performance

da con esa rima anacrónica, no llegué a su

uno siempre llega más que tarde. Ahora se 30


trataba de una ronda de amigos, tocando la

Libros

guitarra y leyendo poesía. Entonces Virginia

Pero si de “tecnologías de la amistad” se

leyó, con una alegría inusitada, el “poema

trata, pocas tan productivas como las que

malo”; lo leía como si por dentro estuviera

promueve Ivan Rosado, el espacio que

saltando. Era una discordancia agradable,

el último día de marzo abrió la Biblioteca

al igual que “Lloraría”, el poema de Sergio

Popular D.G. Ponti Lagarde. Aunque el

Bizzio leído entre los amigos, con una estro-

nombre suena a prócer barrial, Ponti Lagarde

fa por cabeza.

es el cantante de Mal momento, una banda

Una muestra que abre con una fiesta y

punk. “La idea era pensar un nombre distinto

que cierra con música y lecturas de textos.

al de Biblioteca Julio Cortázar”, me dijo Ana

¿Dónde estaba la obra? Claro que uno podría

Wandzik, quien coordina el espacio junto a

responder con nociones como la de “estéti-

Maximiliano Masuelli. La propuesta entonces

ca relacional” de Nicolás Bourriaud, la idea

fue armar una biblioteca con libros propios

de obras des-objetivadas, focalizadas en la

y otros que estaban circulando por el lugar,

producción de lazos y de acciones sociales.

que ya disponía de un espacio para su venta

Negri viene trabajando desde 2006 en obras

de libros al público. Quien quiera, puede

que involucran a personas, producidas en lo

leerlos gratis ahí mismo.

contingente y lo proliferante (ella menciona,

Claro, Ivan Rosado antes que una galería de

en la entrevista, el concepto de “tecnologías

arte o centro cultural se proyecta en la vía

de la amistad” de Roberto Jacoby). Lo que

de otras experiencias colectivas y autoges-

me parece singular no es lo “afectivo”, sino

tivas de la ciudad, cuya emergencia podría

la presencia de la escritura, que insiste casi

ser Planeta X. Es decir, un espacio que

como una demanda de la propia obra, como

puede atravesar el enclave entre la produc-

una objetualidad intermedia entre la acción y

ción grupal, el posicionamiento político y la

los materiales. En El nombre de esta muestra

apertura hacia la comunidad. El armado de

es este poema, la escritura funciona como

una biblioteca –compuesta tanto por libros

un marco para las acciones propuestas.

y revistas específicas sobre arte o política,

En otros proyectos, la escritura es casi la ex-

ediciones argentinas y extrajeras, como por

cusa de la producción. La tarea de visibilizar

libros de literatura contemporánea– apunta a

una forma de vida a través de las palabras

esta dirección y ciertamente hacia una idea

rápidas, o mejor, de escrutar los modos en

de cultura que conjuga más la de vida en

que las frases nos atraviesan, se reitera con

común que el cultivo de sí. El volante de su

obsesión en el proyecto de los mensajes de

promoción reza: “Permitimos y alentamos

texto (2008), o en las frases grafiteadas que

con el corazón la copia de libros. ¡Vivan los

adornan los muros o las rutas: “te pienso”,

libros!”.

“no quiero participar en esta temporada de tu vida”, “hoy vos sos mi plan”, “qué lindo tener a alguien en quien pensar un domingo a la tarde”. La obra es el mensaje. 31


marzo

La memoria y el horror: la responsabilidad Juan Bautista Ritvo

de un pueblo montonero de poncho y lanza

“Pero de lo que es infernal no debería ser posible hablar más que discretamente, sin depresión y sin bravata.”

como podría haberlo imaginado un Abelardo Ramos, o de una clase obrera siempre con el puño en alto, como en un film de Eisenstein.

Texto perteneciente al número 5, junio de 1939, de la revista Acéphale

Antes de llamar a elecciones, el gobierno militar había perdido el apoyo, pero más por la humillante derrota de las Malvinas que por el terror, la política neoliberal y el consiguiente

¿Qué más decir sobre el terrorismo de

debilitamiento del mercado interno; más por

Estado, la memoria, el horror?

el explosivo y recién renacido y rápidamente

Desde luego: si la crueldad y la devastación

hollado nacionalismo, brote que sorprendió

se sostuvieron durante tanto tiempo y con

incluso a los mismos militares, que por la

un costo tan inmenso, no podrían haberlo

ofensa de los valores democráticos, los cua-

hecho sin la complicidad pasiva de vastos

les, ¿cómo dejar de decirlo?, hacía muchas

sectores de la población, que incluye no sólo

décadas que buena parte de la población

ni predominantemente a las clases altas.

había dejado de apreciar, si es que alguna

Claro: se persiguió y masacró a militantes

vez los apreció.

obreros con la connivencia de burócratas

Y además ese trasfondo que difícilmente

sindicales, pero también hubo clase obrera

pueda eludirse: sin la aventura malvinense,

que atemorizada y desconcertada, dejó de

es casi seguro que Argentina habría tenido

hacer y dejó hacer.

un presidente de “transición” apoyado por un

La militancia armada se levantó contra la

amplio espectro político, radical y también

dictadura, pero lo hizo en condiciones tales

peronista. Me refiero, claro está, al “almiran-

que terminó por colaborar, de un modo ciego

te cero”, el célebre chacal: Massera.

y suicida, en la gestación del vórtice de la

Trasfondo del trasfondo: la situación del

violencia, apoyada en una idea en el fondo

peronismo que explotó a la muerte de Perón,

candorosa, aunque soberbia y deletérea en

por lo insostenible de una conducción que

su ilusión vanguardista, tan nutrida por el

había reunido extremos incompatibles e in-

mesianismo negro propio de la época, idea

gobernables para un viejo y cansado estadis32


ta que cerca del fin cedió a lo peor. Extremos

¿Diremos, al modo de Rousseau, que el

que van desde Gelbard y su proyecto de

hombre es bueno por naturaleza o apela-

burguesía nacional, la poco antes denomina-

remos a los teólogos del Mal radical de

da “juventud maravillosa”, el sindicalismo de

la naturaleza humana? Ambas posiciones

Rucci, tradicional arma de conciliación hacia

son fácilmente refutables y por ello mismo

la derecha y devota del militarismo, hasta

retornan una y otra vez, irrefutables. Las dos

el anticipo del horror, horroroso él también:

carecen de fundamento, pero lo que carece

la Triple A fundada, armada y convertida en

de fundamento siempre es interrogado

metralla y tósigo por López Rega, la cara

obsesivamente en discursos sin salida que

más oscura, despreciada y despreciable, del

postulan algún fundamento último, todavía

propio Perón.

inalcanzado.

¿Qué más?

La verdad es que ambas posiciones son

Quizá no hemos llegado –recién empeza-

cómplices de lo mismo: terminan por

mos, en verdad–, a El corazón de las tinie-

distraernos de una evidencia fenomenoló-

blas, título de una muy conocida novela de

gica irresistible: en los momentos en que el

Joseph Conrad y emblema de un artículo de

terrorismo de Estado monopoliza las fuerzas

Marc Richir publicado hace años, que al me-

sociales, lo que duplica el horror es el deleite

ditar sobre dicho relato, esboza la socialidad

ante este mismo horror. Un deleite que,

humana de una manera tan certera como

al contrario del pensamiento progresista,

ominosa: “La socialidad –dice– es como un

no puede ser distribuido según una lógica

gran cuerpo anónimo y adormecido, transi-

elemental por la cual la complacencia le in-

do por estremecimientos, terrores oscuros,

cumbe sólo al opresor, sobre el cual pueden

imaginaciones delirantes y, esto que puede

acumularse y con razón todos los dicterios, y

ser lo peor, por solapados placeres, extáticos

no sobre el oprimido. Es como si se hubiese

arrebatos, fascinaciones sin nombre ante

formado otra masa –diversa de las masas

esto que sus sueños le proyectaban como

artificiales de que habla Freud, pero no sin

espectáculo. Todo indica que este monstruo

relación con ellas, en particular en lo que

–la socialidad humana– se deleita devorán-

respecta a la jerarquía y a la disciplina–, una

dose a sí misma, engullendo a los hombres

suerte de cuerpo-Leviatán estremecido por

para renacer reforzada por estos lúgubres

un ciego apetito de destrucción. ¿Qué otra

ágapes”.

cosa son las guerras modernas?

Quisiera evitar, antes que nada, la por   Esta lógica tiene, como es sabido, su chivo expiatorio, el famoso “pequeño burgués”, que más que una categoría social es una figura moral, bastante lata en su contenido que abarca desde el “resentimiento” de la clase media baja –como si el fenómeno no se registrara en la clase obrera donde hay tantos que juzgan charlatán al intelectual, o consideran, que viene a ser lo mismo, alguien que “vive en las nubes” al tiempo que sueñan en convertirse en patrones–, hasta la clase media alta que delira con campos o ladrillos. La división entre puros e impuros, siempre presenta fallas abismales…   No pienso sólo en lo que habitualmente se menciona. Me basta agregar un nombre que condensa lo peor: Sarajevo.

momentos inevitable polémica que palabras como éstas suele acarrear: ¿los males del hombre provienen de la sociedad o de la naturaleza?

Richir, Marc, “Au coeur des ténèbres”, Esprit Nº 5, Paris, mai 1984.

33


No es por casualidad que reflexiones como

digo en este contexto cristianismo– la que sí

éstas surjen en épocas que son terribles o

apunta a la trascendencia, especialmente en

en las cuales lo terrible se ha tornado inmi-

su faz teológica dogmática, especialmente

nente. Así, el llamado Colegio de Sociología

en todo su equilibrio aristotélico entre las

Sagrada que se fundó en París y en 1937.

causas eficientes y las causas finales. Lo

Los nombres –Caillois, Bataille, Klossowski–

sagrado es lo inmanente; es aquello en lo

y la fecha vuelven innecesario todo comen-

que estoy inmerso como si se tratara de un

tario. Baste sí decir que ellos alertaban sobre

sueño del cual es imposible despertar, todo

los límites de los cautos, tímidos conceptos

lo cual evoca Richir.

de las ciencias sociales para captar la viru-

En un libro que suelo citar, Roger Caillois

lencia de una actualidad que el nombre del

habla de los tóxicos que invaden a las es-

nazismo revelaba sin remedio. Se intere-

tructuras e instituciones sociales cuando la

saban no solamente por la contaminación

propia sociedad no halla medios de evacuar-

entre lo indigno y lo sagrado, la exaltación de

los, cuando no puede poner afuera lo que

la guerra, la exhibición de la crueldad, sino

envenena al cuerpo social. Cuando es este el

también por acciones en principio contrarias

caso, terminan por destruir el tejido social.

pero cuyo veneno no es menor: las mez-

No obstante, los tóxicos –un nombre módico

quindades cotidianas hechas de renuncias

para denominar al Mal en lo que tiene de

apenas perceptibles que se acumulan, las

situable y determinable–, pierden su espe-

acciones culpables que quieren pasar inad-

sor o se tornan un museo impresionista del

vertidas, la pasión por sustraerse a cualquier

esperpento cuando no son encuadrados en

iniciativa, de la clase que fuera. ¿Cómo no

una cierta morfología social.

subrayar que los actores de estas últimas

Pero al revés: las descripciones morfológi-

acciones u omisiones, al formar masa suelen

cas ya incluyen en su misma articulación el

exaltarse como si los dioses los hubieran

elemento tóxico que nunca terminamos de

parido?

explicar porque reúne propiedades contra-

Ahora bien, y éste es un mérito indudable

dictorias y al mismo tiempo continuas, su-

de los que formaban esa institución de vida

midas en la inmediatez y en la indivisibilidad,

tan breve, lo sagrado no es lo trascendente,

de las cuales es tan difícil hacerlas brotar en

no coincide con la religión –y si digo religión

términos discretos o casi discretos. Es por ello que hay que recurrir incesantemente a metáforas y alegorías dramáticas y míticas

Bataille, G., Caillois, R., Klossowski, P., Masson, A., Monnnerot, J., Rollin, J., Wahl, J., Acéphale, Religión/Filosofía/Sociología, 1936/1939, Caja Negra, Buenos Aires, 2005. Este grupo es revelador de cómo en ciertas épocas un pensamiento indudablemente renovador –y los nombres de Caillois, de Klossowski, entre otros bastan para certificarlo, porque asoma en ellos la asociación del exceso con la insuficiencia–, está contaminado por aquellas fuerzas epocales a las que declara la guerra. El fervor loco, la virulencia sectaria, el desorden y la promiscuidad (Caillois intentó comprender estos aspectos pero tomando por completo distancia con ellos) forman parte esencial de la atmósfera, de la forma de sensibilidad propia de una época que salida de una guerra total estaba por enfrentarse con otra que era su hipérbole y llevaba angustiosamente los cuerpos al borde del abismo.   Es Bataille quien ha dado forma a este concepto de una sacralidad inmanente.

–de golpe a mí se me ocurrió algo nada original, por cierto: el cuerpo-Leviatán– y es asimismo la razón más evidente de la eficacia soberana de la literatura en este plano. (Una ventaja adicional de la literatura: no tiene que adoptar precauciones oratorias como las que yo mismo tomo como para que,   Caillois, R., Instintos y sociedad, Seix Barral, Barcelona, 1964.

34


pongo por caso y no se trata de un caso

que el intento de acoger todas las deman-

cualquiera, no se me juzgue un partidario de

das, por más contradictorias que sean entre

la doctrina de los dos demonios. Entonces

sí, intentando apaciguarlas, moderarlas y al

digo, sin pausa: no se puede poner en el

mismo tiempo controlarlas por medio de una

mismo plano al que tortura a un ser inerme

mezcla de aguda percepción y de realismo

con el que mata invocando un ideal, lo cual

cínico, en momentos de extrema tensión,

me habilita a preguntar: ¿qué pasa cuando

cuando las ideologías más feroces impera-

el fanatismo y el culto a la muerte aparece,

ban, abrumadoras y abrumadas por el fan-

por momentos, en ambos bandos? Véase

tasma del comunismo, semejante intento,

al respecto la entrevista a Héctor Jouvé “La

digo, llevaba directamente al abismo.

guerrilla del Che en Salta, cuarenta años des-

(Barthes decía que el lenguaje en acción

pués”, que aparece por segunda vez en el

implica guerra y fragmentación y que los len-

volumen colectivo Sobre la responsabilidad

guajes más serios son los más violentos. Se

(No matar). Polémica de la revista La intem-

refería, creo, tanto a los códigos cotidianos

perie, Ediciones de El Cíclope/editorial de la

como a los intentos teóricos por descifrar-

Universidad de Córdoba, Córdoba, 2007.

los. Estos últimos encubren cuando quieren

Todo el volumen es valioso, pero quiero

controlar y hasta eliminar las connotaciones

destacar uno de los exergos al testimonio

angustiosas, que no necesitan de estriden-

de Jouvé: “Lo primero que nos dijo fue:

cias para manifestarse.)

«Bueno, aquí están. Ustedes aceptaron

Después de la hecatombe, ni el peronismo

unirse a esto y ahora tenemos que preparar

ni el país son los mismos. No obstante, bajo

todo, pero a partir de ahora consideren que

el palio de la democracia, se ha ido gestando

están muertos.

un lenguaje cada vez más pulcro y vacío, el

Aquí la única certeza es la muerte; tal vez

que termina por invadir incluso las zonas de

algunos sobrevivan, pero consideren que a

pensamiento aparentemente más alejadas

partir de ahora viven de prestado»”. Palabras

del espectáculo mediático y de las torpezas

de recepción del Che Guevara al grupo inicial

de un humanismo que se desconcierta cuan-

del EGP.)

do la prédica antidiscriminatoria se enfrenta a la realidad cotidiana –esta vez más sorda

En cuanto a las referencias morfológicas es-

e insidiosa, pero no menos efectiva–, de los

tán muy dolorosamente a la mano. En primer

grupos sociales que practican, como siem-

lugar la descomposición del peronismo, ya

pre, discriminación y segregación.

anticipada e incluso realizada con la matanza

La segunda referencia morfológica está

en los bosques de Ezeiza, consumada por

también a la mano.

la derecha peronista. Los que invocan esa

¿Soñaremos con un nuevo reverdecer de los ganados y las mieses ahora que los países centrales sufren el efecto de la medicina que implacablemente nos recomendaron e impusieron?   Debería quizá agregar a la enumeración “exterminio”. Pienso en la multiplicación en las villas miserias de las pymes del paco, pequeñas familias que luchan ardorosamente por pequeñas ganancias y se disputan a tiros el predominio de sus pequeños territorios. También en las bandas de adolescentes pobrísimos que no tienen otro medio de afirmarse que el coraje criminal y suicida que los lleva a matarse entre sí. No todas son delicias en la Jauja sojera y automotriz…

categoría-araña denominada “populismo”, suelen echar un manto de asepsia sobre los aspectos miserables (¿cómo llamarlos, si no?) de un movimiento que ha llegado no diré a expresar sino a constituir al país. Es

35


Es el espíritu más militarista que militar

(Un conocido bar de la ciudad, “Londres”, lo

preludiado en sus líneas fundamentales, in-

cambió por “Malvinas” y a los pocos meses

cluso definitivas, por aquel célebre discurso

recuperó su antiguo nombre. Cuántos hay

de Lugones en Ayacucho el 9 de diciembre

que celebraron el advenimiento de los

de 1924 y que vale la pena citar, porque

militares y ahora se han vuelto custodios

transmite lo que es el huevo de la serpiente

de los valores republicanos. ¿Dónde quedó

fascista:

la vorágine nacionalista que alcanzó una

“Ha sonado otra vez, para bien del mundo, la

rarísima unanimidad durante la guerra de

hora de la espada… Pacifismo, colectivismo,

las Malvinas? Lo cierto es que en esos días,

democracia, son sinónimos de la misma

solía escucharse una opinión que a la postre

vacante que el destino ofrece al jefe predes-

fue tan falsa como reveladora del estado de

tinado, es decir, al hombre que manda por su

ánimo colectivo: que los militares podrían

derecho de mejor, con o sin ley, porque ésta,

ganar o perder la guerra, pero que pelea-

como expresión de potencia, confúndese

rían sin tregua para hacerse perdonar sus

con su voluntad.”

crímenes.)

Desde 1930, con alternativas complejas de

La aserción que dice que la memoria es una

idas y vueltas, este espíritu ha ido creciendo

función del olvido, precisa de pormenores y

y generando más identificaciones que con-

fundamentalmente de modalizaciones. Hay

sentimientos y más aquiescencia que repul-

memorias y memorias y olvidos y olvidos.

sas, hasta alcanzar su acta de defunción con

Hay olvidos deletéreos y olvidos protectores.

la supresión del servicio militar obligatorio.

Y si memoria y olvido son términos distintos es porque la memoria es lo olvidado que re-

II

torna del olvido bajo formas intempestivas:

Finalmente, algunas notas sobre el estatuto

el olvido de algo tan corriente que escanda-

de la memoria.

losamente remite a otra cosa más grave, ya

Ninguna memoria es individual pero tampo-

olvidada y que está allí nomás, asomando; el

co hay memoria propia de un sujeto colecti-

furcio; el fragmento insólito de algo entera-

vo, que no existe. La memoria de cada cual

mente enigmático.

le viene literalmente de afuera, aunque se

Mas ese movimiento de retorno –llego aquí a

modalice internamente de forma absoluta-

lo que en este momento me interesa– puede

mente singular. No obstante, lo que llama-

ser de clases enteramente diversas y hasta

mos “memoria colectiva” es un discurso que

contradictorias.

se transmite de actor en actor, de red en red,

Llegamos así a aspectos del ser humano que

en el olvido de sí y que por ello, podemos

las circunstancias extremas del terrorismo

captarlo en los intersticios y fragmentos de

de Estado nos han hecho de nuevo saber y

acciones singulares, encriptamiento ingrá-

que, francamente, muchas veces desearía-

vido y no obstante persistente y, sobre todo,

mos no saber, en absoluto.

potencialmente traumático.

Cuando un cuerpo ha sido profundamen-

10

te humillado y herido sin tregua, el sujeto

Para existir todos los miembros del grupo deberían participar de las mismas y transparentes y recíprocas convicciones sin separación de ninguna clase entre unos y otros. En suma, un dios encarnado… 10  Es una desdicha que se confunda de continuo individuo –etimológicamente indiviso– con singularidad.

que sobrevive adopta (cuando puede) una actitud de rechazo hacia lo sufrido. No es 36


que no conserve la memoria de lo ocurrido;

que en ciertos días sentían olores a densa

al contrario, ésta es intensísima, pero opera

materia quemada y veían surgir humo por

como si se tratase de una división radical

las chimeneas que se suponía pertenecían a

del psiquismo y del cuerpo; de un lado el

curtiembres.

horror, encriptado, encapsulado, aguardando allí para retornar como retorna lo rechazado; del otro, una vida que aspira a la cotidiana normalidad y a mantenerse en una economía del placer –términos estos últimos que hay que tomar en su acepción psicoanalítica, no en la vulgar. ¿Es necesario ahondar más? Creo que es suficiente para el objetivo que me propongo: ir hacia las tinieblas para no enviar a la trastienda los aspectos más sombríos de la existencia. (Alguien podría invocar que la humanidad reúne los extremos de la gracia y del horror, o, para decirlo con un lenguaje más tonto y obvio, lo más positivo con lo más negativo. Nada tengo que decir al respecto, salvo que uno y otro aspecto poseen la misma raíz.) Esta experiencia de extrema esquizofrenia –uso el vocablo en su acepción etimológica, no psiquiátrica–, nos compete incluso y sobre todo a quienes jamás acordamos de ningún modo con la dictadura. ¿Cómo leer, divertirse, pasear con amigos, contemplar la calma del horizonte marino, si uno tiene constantemente presente que en esos momentos se tortura, se masacra, se humilla, centenares de personas queman sus libros ante el temor de que se les impute una actitud “subversiva”? En otros, esa separación extrema y feroz, ese desmentido que niega perfectamente lo que se admite perfectamente, podemos decir acudiendo al preciso vocablo psicoanalítico, bordea la canallada, como en los habitantes de algunas aldeas alemanas cercanas a los campos de concentración nazis, los 37


marzo

Un museo, dos sedes; un quiebre, dos gestiones. En el terreno del tiempo Javier I. Hernández

Quizá este artículo no llegue nunca a

se define de acuerdo a su estructura interna

ajustarse completamente a lo que debería

desde donde se mueve acorde a reglas que,

presentar o representar una nota de anuario

en la mayoría de las veces, se disponen con

que –en la mayoría de los casos– tiene por

arreglo a una repartición de tareas que divide

finalidad dar cuenta de un cúmulo de accio-

y subdivide las funciones en jerarquías. Y

nes que llevaron a configurar, de tal o cual

esta división, desde su cuna, no busca más

forma, la propia vida de lo que se considera

que lograr la cooperación colectiva para

meritorio de pasar a la posteridad, “persis-

obtener los resultados que se desean.

tir en el tiempo”. Y esto será así porque lo

A lo largo de su historia el Museo

que aquí se trata de fijar no es más que la

Castagnino+macro se rigió por una estruc-

consecuencia directa de una medida que

tura que favoreció la formación lineal basada

no termina de enseñar todo su alcance y

en jerarquías, con órganos superiores, líneas

que, al día de “hoy”, sigue funcionando y

formales de comunicación, centralización de

manifestándose materialmente como una

decisiones y por supuesto una configuración

“transición” dentro del campo artístico-cul-

piramidal en la cabeza de un director, segui-

tural local. No obstante –para ser justos– es

do por subdirectores y responsables de área.

necesario expresar que, en cierta medida,

Luego de la renuncia a la Dirección General

ese hecho se desencadenará en el periodo

de Fernando Farina a fines de 2007, el

que este libro expresa y por ende debe su

organigrama del Museo cambió y la figura

inclusión en este apartado.

central del director se disolvió y se transfirió

En concreto, la desafectación de Roberto

a un triunvirato formado por autoridades en

Echen (Subdirector Artístico) del Museo

igualdad de jerarquía: Un Director Ejecutivo

Castagnino+macro, será un hecho ineludible

(Carlos Herrera), uno Administrativo y uno

de 2011 que marcará un quiebre en el seno

Artístico (Roberto Echen) –quizá el más

más íntimo de la institución dejando aletar-

visible por el carácter de la institución y por

gadas secuelas hacia dentro de la propia

su peso histórico en la gestión cultural del

comunidad artística.

Castagnino y la formación del macro–. Pero

Se sabe que cada organismo o institución,

esta forma de entender la gestión cultural no

no importa su condición, ni su razón social,

duraría para siempre y en el transcurso de 38


un año se diluiría, producto de la dimisión de

encadenará en la destitución impensada de

Herrera, cargo que nunca más sería suplido

Roberto Echen de la jefatura artística del

y que llevará al Museo a gobernarse, hasta

Museo Castagnino+macro.

2010, por los otros dos directores.

Desde este momento el Museo dejará

En ese mapa de categorización, la Secretaría

vacante ese espacio y la tarea será asumida

de Cultura municipal concebirá ese año

por un “Comité de crisis” que se irá diluyen-

un llamado a concurso público solicitando

do en el tiempo y que supieron conformar a

un Director General para encabezar las

lo largo de 2011 cinco miembros de la propia

decisiones del Museo relegando a las,

institución entre los que se encontraron las

hasta por entonces, direcciones Artística y

curadoras Nancy Rojas y María de la Paz

Administrativa, a una segunda gradación que

López Carvajal, los diseñadores de montaje

desde ese momento pasarían a ser reconoci-

Leandro Comba y Marcelo Villegas, y la pro-

das como Subdirecciones.

pia Marcela Römer.

Será en ese marco que, por primera vez, el

Roberto Echen por su parte, ya lejos del

Museo de Bellas Artes “Juan B. Castagnino”

Museo, se hará cargo de coordinar –hacia

y de Arte Contemporáneo de Rosario

mediados de 2011– el área de artes visuales

(macro) tendrá un director designado

del Centro de Expresiones Contemporáneas.

mediante concurso. Y ese puesto quedará

Desde ese espacio cultural de la ciudad

para Marcela Römer tras ser elegida como

buscará fundar las bases de su nueva

Directora General en un concurso de antece-

gestión con asiento en lo que supo ser

dentes y oposición donde obtendrá una alta

una de sus máximas por once años en el

calificación por sus rendimientos puestos a

Castagnino+macro: la intervención del

prueba.

espacio urbano con miras a erigir una nueva

No obstante, –piramidal, lineal, funcional

forma de acercar la producción contemporá-

o mixto–, la experiencia indica que ningún

nea a la ciudadanía. En este sentido seguirá

esquema organizacional es inequívoco a

organizando la Semana del Arte y, al mismo

una ineficaz comunicación con arreglo a

tiempo, se hará cargo del Programa de

fines. Y esto es lo que ocurrirá en la cavidad

Residencias para artistas que busca poner

más profunda de la institución que llevarán

en comunión a creadores argentinos para

a la desestabilización de los cimientos de

favorecer una experiencia productiva basada

reciprocidad entre Römer y Echen, éste

en el intercambio.

último puntal, hasta ese momento, de la vida

¿Y por qué hablamos de “transición” a esta

artística del Museo. Con este escenario, su-

altura de la gestión? ¿Cuál será el hecho

mado a diferencias de procederes respecto

que motive esta revisión cronológica por

a la manera de pensar el arte, el ambiente

los entresijos organizacionales de una de

derivará en un proceso de desgaste interno

las instituciones más importante del arte

en la búsqueda por pulir nuevos esquemas

argentino? A primera vista solo uno: el de

intrínsecos a la flamante gestión, que –tras

señalar el por ahora supuesto punto de

un año de experiencias insatisfechas– des-

inflexión que procederá a la desafectación 39


de Roberto Echen del lugar que forjó dentro

otras grandes instituciones culturales, ya

del Castagnino+macro. Aunque también irá

tenía diagramado su calendario de compro-

más allá e intentará pensar el 2011 como

misos con dos años de antelación, hasta

un intervalo entre dos modelos de gestión

finales de 2011.

presuntamente diferentes.

Con más expectativas que hechos con-

Pero antes de continuar vale la pena dete-

cretos, será durante el Salón Nacional de

nerse y repasar el Anuario10 sobre todo en

noviembre donde la gestión actual estará fi-

uno de los primeros artículos del año donde

nalizando el largo proceso de transición que

la periodista Irene Ocampo destacaba entre

marcó el legado de Roberto Echen dentro

otros hechos trascendentes de abril de

de la institución. A partir de este importante

2010 la elección de Marcela Römer como

evento que algunos consideran iniciático y

Directora del Museo Castagnino+macro. En

fundador será desde donde la gestión de

ese artículo, sobre el plan de Römer para la

Römer podrá empezar a enseñar sus linea-

nueva gestión que comenzaba a transitarse,

mientos genuinos.

la escritora refería: “Al asumir su función, ya

Desde este presente no servirá de nada

comenzado el año, no se hicieron anuncios

hacer elucubraciones diversas sobre el

en cuanto a la agenda de los museos”.

devenir histórico del Museo pero tal vez,

Pero uno de los motivos se debería a que

analizando este Salón, podremos intentar

el Castagnino+macro, al igual que lo hacen

acercarnos a esa clave que tanta expectativa 40


FOTO GASTÓN MIRANDA Entrega de premios del Salón de la Asociación Empresaria de Rosario en el Museo Castagnino. Elías Soso, Marcela Romer, Juliana Iriart y Roberto Echen.

provoca en el mundo del arte local y que se

de gestión que supo producir en este trans-

empieza a hacer sentir a fin de 2011 bajo

curso histórico una institución que en 2012

algunas pautas específicas. Quizá una de las

festejará sus 75 años de existencia con la

más notorias sea la decisión de elevar los

no menor gloria de haber contado entre sus

presupuestos económicos para los premios

filas con destacadas personalidades que,

adquisición, lo que aparenta ser una bús-

desde el propio Hilarión Hernández Larguía,

queda por atraer a artistas de mayor reco-

la llevaron a ser ponderada hoy como mode-

nocimiento nacional, con la expectativa de

lo y referencia en su tipo.

lograr, al mismo tiempo, suministrar mayor

Quedará para el próximo balance indagar

visibilidad a las obras seleccionadas y a la

con mayor precisión algunos atisbos de

colección en sí.

cambio que hoy son apresurados asentar.

Con este evento que cumplió 65 años

Por lo pronto muchas preguntas nacen, se

comenzará un proceso revisionista sobre

reproducen y se aprestan a encontrar su fin

los fundamentos de los concursos de arte

en el tiempo… ¿Habrá un categórico cambio

contemporáneo y los Salones Nacionales

de mirada curatorial en relación a la visibili-

que apostarán a jerarquizar el certamen

dad de la colección? ¿Podrá una institución

tanto en términos de premiación como de

de estas características seguir prescindiendo

curaduría y debate sobre la escena artística

de la figura de un superior artístico? ¿Qué rol

en la actualidad.

tomará el macro en la persistencia por seguir

Sin embargo no hay que perder de vista un

incentivando a los artistas jóvenes? ¿Cómo

dato que a esta altura no es cosa menor: el

sus obras serán nuevamente amalgamadas

Castagnino+macro no es un museo privado

con los consagrados a partir de la vasta

sino del Estado, y eso requiere diagramar su

colección que se guarda en los depósitos?

programación sobre cánones de expansión

¿Cómo deberán financiarse los proyectos

y promoción del arte fijados por el propio

artísticos a futuro? Este ingreso de privados

Estado con centro en la diversidad de ofer-

¿marca la antesala de una futura ley de me-

tas para beneficio cultural y educativo de la

cenazgo cultural para el territorio provincial?

ciudadanía toda.

Será en el terreno de lo inmaterial, en el inte-

En los últimos meses del año también se vio

rior de esa variable que llamamos “tiempo”

una mayor coparticipación público-privada

donde esta información se irá transformando

con un primer premio del Salón Nacional

y tendrá –con cada futura lectura– su nueva

compartido entre el gobierno de la Provincia

interpretación, su verdadera función de

de Santa Fe y la Asociación Empresaria de

ser. Como decía Julio Cortázar, “todo se da

Rosario quien aparenta haber llegado a la

simultáneamente en ese momento –que to-

gestión cultural del Castagnino –Museo

davía no existe para mí–, y sin embargo es el

que nació de un coleccionista privado– con

momento en que usted escucha estas pala-

ánimo de mantenerse en el tiempo.

bras (lee estas líneas) que yo grabé (escribí)

Con algo de suerte, estas líneas solo subsis-

en el pasado, en un tiempo que –para mí,

tirán como un mero recuerdo de los vaivenes

ahora– es el futuro”. La tarea es del lector. 41


ABRIL

42


43


ABRIL

FOTO LUCIANO OMINETTI Retrato de Benito Laren, “Berni to Laren” Darkhaus

La costurerita que dio el mal paso Pablo Makovsky

Incluso hay dos o tres cámaras de televisión.

sabemos”. Por eso me causan una discreta

Es el último jueves de marzo y se inaugura

gracia las cámaras de la tevé, ese medio tan

en Darkhaus su espacio de arte con una

ubicuo y absurdo, gran difusor de fantocha-

muestra de Benito Laren, “Berni to Laren”,

das y también el que nos ha enseñado que

y Darkhaus es, con sus hermosos objetos

no hay verdad que no pueda bastardearse.

de decoración mezclados, camuflados a

Sí, la mera idea de describir la operatoria

veces, con obras de arte contemporáneo y

kitsch de Laren agota. Pero es que lo que

vernáculo, el centro gravitacional de lo que

podríamos convenir en llamar la estetiza-

llamaremos la estética burguesa local: las

ción de su vida no es tal: ni las fotos que

cosas son lindas y hasta podemos sentarnos

lo muestran en un panel doméstico, ahí en

en ellas.

Darkhaus, en la secundaria que compartimos en San Nicolás, ni las de su llegada a Nueva

Pop porn

York, a la Gran Manzana, son imágenes o

Y Benito Laren está ahí, nuevamente, como

procedimientos del kitsch, sino del camp.

alguna vez lo pensó un amigo que quería

Me recuerda la frase de Dexter, el personaje

filmar con él una suerte de manifiesto por-

de la serie que protagoniza el genial Michael

nográfico, para facilitar cierto goce, o para

C. Hall, cuando lleva a los hijos de su novia a

espejarlo, como si se tratara de un anfitrión,

probarse disfraces para la Noche de Brujas:

o un guía, nos muestra que en la gran con-

“En Halloween todos pretenden que al

figuración de los deseos de la vida actual,

disfrazarse se convierten en monstruos, toda

el anhelo de almorzar con Mirtha Legrand

mi vida me he disfrazado para pretender que

(sobre todo ahora, que ya nadie volverá a

no lo soy”.

almorzar con Chiquita) cabe en Primeros

Pese a que en esta muestra los objetos

pasos, el cuadro de Berni del 37, que en la

son feos (en el sentido de que no atraen la

“copia” de Laren protagoniza Marcela Römer,

mirada, la mía al menos: raquetas de tenis,

actual directora del Museo Castagnino, en el

ruedas de triciclos, que son las cosas con

rol de la hija que baila la danza del ascen-

las que Laren “coloniza” –el concepto es

so social mientras un Laren-madre, con el

de Cippolini– el ocio burgués y sus anhelos

rostro fotocopiado, ensaya un rictus de “ya

infantiles, del mismo modo que “colonizó” 44


45


a Berni), hay algo de lo monstruoso, de la im-

que yo podría decir sobre el asunto.

postación casi absoluta de todas las formas,

La muestra reunió a unos 52 artistas de

que hace pensar en el monstruo, cuya meta

todos los rincones provinciales y de ge-

es mostrarse (monstrare) o, mejor, según la

neraciones distintas y, tal como enlistan

interpretación clásica, mostrarnos.

las curadoras (Cecilia Fiel, Adriana Lauría y

La muestra duró todo abril. Quedé en volver,

Florencia Battiti) en el catálogo, requirió la

quedé en llamarlo a Benito y no hice ninguna

visita a unos cuarenta talleres repartidos en-

de las dos cosas. No sé cómo se verá esa

tre Rosario, Reconquista, Santa Fe, Buenos

muestra sin Laren de cuerpo presente, con

Aires, etcétera.

su traje blanco y su peluca, y dudo que haya

Y aquí un pequeño escollo para alguien que

mucho por saber al respecto. Un amigo pin-

no capta con facilidad estas cuestiones: es

tor –es decir, pintor en serio, que hace unas

demasiado, se mezclan las “producciones”

obras “anacrónicas” y maravillosas, como

(entre comillas porque algunas son eso,

le cabe al arte– me decía que Laren acaso

producciones, mientras que otras cosas,

se repite. Creo lo mismo, pero agregaría,

pinturas, esculturas, fotos, etcétera, son es-

volviendo a la idea de aquél otro amigo que

tadios de una obra) de un modo que, quiero

tenía ese proyecto con Laren, que esas

entender, señala la amplia constelación de

repeticiones son como las de la operatoria

las creaciones santafesinas y, asimismo, al

pornográfica.

ubicarlas en un mismo espacio, las uniforma. Claro, no podría ser de otra forma.

Telarañas

Bueno, me digo, mientras le sugiero al niño

A la gran muestra de artistas santafesinos

que haga de cuenta que está en una gran

“Arte de Santa Fe” (del programa Argentina

juguetería (se puede imaginar el uso de

Pinta Bien) que ocupó el Museo Castagnino

todo eso, pero sólo podemos llevarnos los

desde abril llegué con mi hijo de cuatro

globos), no entender o, mejor, dejar al espec-

años la mañana de mayo en que la estaban

tador sin entender es una forma de plantear

desarmando. El niño estuvo de parabienes

un más allá propio del arte. Cecilia Fiel,

cuando una de las chicas que desmontaba

por ejemplo, dice que lo de Gonzalo Gatto

la obra El clásico, de Elisa Strada, le regaló

(fotografías de una suerte de santoral criollo

unos globos que componían esta incursión

en cuyas estampitas los personajes posan

alegórica en el terreno del balompié. Mi hijo

con cabezas de chancho, sábalos o corazo-

me acompañó por las agitadas salas con

nes de vaca) construye “una interpretación

dos globos color azul y amarillo y me ofreció

sarcástica de los santos en un contexto de

algunas interpretaciones sobre este mosaico

puro consumo”. Ta, no es eso, o no es sólo

de lo que ha hecho mi generación, la anterior

eso: ¿cuánto del subtexto litoraleño circula

y las más recientes en materia de arte.

en esas imágenes? Battiti es mucho más

Por ejemplo, al llegar a la obra de Fabián

sutil, lo mismo que Lauría, pero la dirección

Marcaccio Paintant Grounder (1997) dijo que

es esa: mostrar en esta obra (la de todos, no

se parecía al Big Bang (de dónde sacó lo del

sólo la de Gatto) un panorama de qué se ha

Big Bang, lo ignoro): “Porque es un planeta

hecho en la materia en el territorio provincial

lleno de colores”, que es mucho más de lo

y también cómo eso que se hizo actualiza, 46


updates, esta escena social y conceptual que

Nicola Costurera (2008), una imagen que,

es el arte contemporáneo. Recuerdo aquello

volviendo a aquello de Castellani, teje una

del instant classic del rosarino Reinaldo

telaraña de alusiones: Costantino diseñadora

Laddaga junior (porque hay un R.L. padre, no

de modas en el taller familiar, diseñadora de

sé si saben) en Estética de la emergencia:

un arte invertido, en el que el underwear en-

“El presente de las artes está definido por la

seña el downthere (bah, prendas que ense-

inquietante proliferación de un cierto tipo de

ñan la desnudez más elemental), Costantino

proyectos”.

se sueña en el sueño soñado por Berni que

A mí me gusta Daniel García, Max Cachimba

jugó a soñar el sueño del ascenso social…

o Aurelio García, entre muchos otros que

y así. Obras en las que el artista no sólo nos

están presentes en la exposición. Llego has-

muestra su “proyecto”, su pequeño sueño,

ta Telaraña (2011), de Luján Castellani, justo

su contraseña tribal, sino que ha pensado en

enfrente de las flores tipo Made in China

la mirada anacrónica, fuera de catálogo, y ha

de Román Vitali (2004, sin título), y quedo

puesto un particular esmero en cifrar para el

fascinado por esa cosa pop (por la canción

espectador un sistema de alusiones que, al

pop, antes que por el arte: algo que, hubiese

señalar un lugar de pertenencia, de inme-

jurado, vi en otra parte; algo cuya novedad

diato se expulsan de él para ser nuestros

reside en hacernos creer que asistimos a

anfitriones en el brutal terreno del arte.

una suerte de déjá vu) del montaje: con gan-

En el otro extremo están las “intervenciones”

chos metálicos Castellani armó una enorme

que rozan el cinismo, como el cartel “Me

red de tiras de papel fotográfico que, según

pregunto si realmente estoy diciendo algo”,

nos acercamos o alejamos, enseñan otra

o las remakes del graffiti quinceañero de

red, la de los rostros atrapados en esas imá-

Virginia Negri o, peor, las celebradas obras

genes pequeñas. Me recuerda el póster de

de carpintería inútil de Dolores Zinny y Juan

The Truman Show, sólo que este tiene tres

Maidagan: unos armatostes que festejan la

dimensiones y, me temo, una cuarta.

degradación de un oficio casi sagrado.

Bien, pero volviendo a García-Cachimba-

La experiencia del artista, su identidad, el

García (tríada a la que agregaré de ahora

contexto: ese parece ser el leit motiv cura-

en más a Castellani): soy de la idea de que

torial. Yo quisiera distinguir, a mi humilde

quien cita debe estar a la altura de la cita o,

entender o no entender, la diferencia entre

mejor, como en el caso de Daniel García,

cierta obra y las meras piezas de comunica-

debe convertir la cita en un original (¿o al-

ción, por lo general metodológicas.

guien duda de que los cientos de pelotudos

“Piezas de comunicación”: piezas que

que invertimos pequeñas fortunas familiares

comunican un estado de conceptualización

en el Pacman durante los 80 estábamos

del arte, que enseñan su metodología al

haciendo una contribución a la serie de los

desplegar en su trama los usos de ciertas

fantasmitas de García?), lo demás oscila

herramientas y mano de obra calificada

entre la parodia y el proyecto (sin el adjetivo

(desde el photoshop hasta el encargo en la

“inquietante” del amigo Laddaga). O Nicola

carpintería). Por ejemplo, Sin título (ampelop-

Costantino y su cita a Primeros pasos de

sis), de Andrea Ostera (2010: ampelopsis es

Berni (otra vez, pero muy distinto a Laren):

enredadera, basically), cuya descripción reza 47


FOTO LUCIANO OMINETTI Santa Fe Pinta bien + Binner

“impresión sobre gelatina de plata”: es tan

pies. Pero no. No conozco ni los boliches.

interesante lo que vemos como el microrre-

Luis Vignoli ha dicho que se empezó a fasci-

lato de su proceso. Es decir, es tan intenso

nar con esa cultura under, bolichera, al tiem-

el título como el subtexto: la metodología,

po que trabajaba para revistas sociales y que

que es precisamente lo que viene a enseñar-

las imágenes de esos lugares queda a partir

nos por qué niveles del metatexto de la pro-

de cierto momento fuera del registro de ese

ducción artística contemporánea andamos.

trabajo, es decir: hay algo del trabajo y, a la

A mí se me hace que ese subtexto, siempre

vez, algo que no es el trabajo y es, en sí, una

presente y, muchas veces, presente en lugar

tarea. Esa doble cara es la que enseñan las

del título, viene a ocupar justamente el lugar

fotos: es una muestra de fotos sociales que

del título, lo que convertiría a varias de estas

no es una muestra de fotos sociales.

obras, según la ya conocida definición de

La gente que está en la inauguración se bus-

Arturo Schopenhauer en El mundo como

ca en las fotografías. Y se encuentra, claro. Y

voluntad y representación, en alegorías de

hay quienes alzan una criatura para que vea

su propia técnica. De ahí lo de piezas de co-

a mamá en una mesa, rodeada de chicas,

municación, que mi hijo entiende del mismo

con dos galanes parados atrás, sosteniendo

modo que cuando está en la juguetería.

unas latas de cerveza con el viejo diseño de Quilmes.

Las luces del under

La gente también es invitada a dejar comen-

Es la noche en que murió Ernesto Sabato y

tarios escritos que luego se recopilarán y

estoy en Curando a Alfonsina, el espacio de

exhibirán en el cierre de la muestra, a fines

arte de la Biblioteca Popular Alfonsina Storni

de mayo. Y los comentarios que me envía

(Ovidio Lagos 367), donde Luis Vignoli pre-

Luis por correo electrónico son, en su ma-

senta la muestra fotográfica “Archivo Vignoli,

yoría, la ancestral y bíblica afición por filiar a

Under Dance”.

las personas: “¿Este no es el Fede? Y está

La muerte de Sabato, el escritor que quiso

con su novia de Buenos Aires. Pero esa otra

terminar sus días como un pintor “terrible”

noche no estaba con ella, se fue con… Te

(cosa que a su modo consiguió, según la

acordás?”. Y las chicas lucen el ombligo al

crónica de José Tono Martínez) hizo que en

aire y, cuando la foto es más personal, cuan-

esta inauguración se repartieran libros. Así,

do sólo hay dos o una persona en el cuadro,

un amigo se hizo de un ejemplar de Ulyses

no ríen, y adoptan un poco la mueca de

Petit de Murat que le envidio.

aquellos videoclips intrigantes de la época,

Under Dance es una parte de todas las

cuando ya había terminado el barroco de los

fotos que Luis sacó en los boliches, discos

80 y habíamos comprendido que la Era del

y locales bailables alternativos de la larga

Placer (el concepto es de Cordwainer Smith)

noche de los 90 en Rosario. Mi fantasía era

era cosa seria.

encontrarme con algunos de los funcionarios

Alguien dejó anotado: “…hay otras perso-

actuales en su juventud, todavía con pelo y

nas, protagonistas, factores… hay otra cosa

con aquellos tractorcitos Timberland en los

por ahí… es cultural, no es despreciable, al 48


contrario, es valorable”. Suena a que la mira-

“El objetivo del proyecto es pensar a aque-

da retrospectiva, en ese lugar, precisamente,

llas imágenes como generadoras de relatos.

una biblioteca y un espacio de arte, dieran

Ya sea por recuerdos de los mismos prota-

pie para revisar el recuerdo de esas escenas.

gonistas, como así también ficciones, ima-

Pero mis declaraciones favoritas son “Tafeta,

ginadas por quienes no estuvieron”, ponía

modal, lycra, raso… era lo que se usaba…

Luis en la gacetilla de apertura. Y no, no veo,

ahora hay como una vuelta a eso”. Y: “Los

no leo entre los textos recopilados al final,

noventas me dan mucho miedo”, a lo que

nada de ficción, salvo esa declaración: “Los

alguien agregó la pregunta: “¿Por qué?”. A

noventas me dan miedo”, que es de algún

mí me gustaría responder esa pregunta, y

modo una ficción (incluso aparte, como me

pensar que en esa respuesta está también

hace notar Luis en un correo electrónico, de

esta muestra de Luis Vignoli.

que muchas de esas declaraciones, recogi-

Aquí, en estas fotos, también está la hija de

das con un grabador y transcriptas, tenían

la costurera de Primeros pasos (Berni, 1937),

cierto tono irónico). Una ficción no porque

o acaso la hija de la hija, que ya ascendie-

lo que dice sea ficticio, sino porque abre

ron de clase, que va a la boite, a L’Inferno,

un interrogante sobre quien habla, al que

a Garage, Station, El Chacal; también aquí

atribuimos cierta pertenencia a la escena

hay pasos de baile y madres que miran un

de las fotos. Y ese que habla se corre de la

más allá encendido, rutilante bajo las luces

imagen, de lo que las imágenes muestran,

de la pista. Me impresiona la cercanía, pero

y enseña otra orilla: habla de un pasado y

también la lejanía, lo ajeno, como si asistiera

actualiza el presente de una identidad que

a una intimidad hecha de tiempo.

está suspendida. 49


ABRIL · Sinestesia

ALE SINIESTRO (Pág. 51) La torre de Babel, collage (Pág. 53) Del trabajador, collage

Soy Mutante y Ale Siniestro: postpunks surrealistas

rock en un museo y decretaron una vuelta, intuitiva y visceral, al minuto cero del género. En un abrir y cerrar de ojos dijeron “no hay

Diego Giordano

futuro”, editaron su único álbum y desaparecieron del mapa, dejando a sus contemporáneos el problema de desarrollar una idea musical que, en teoría, era pura negatividad. Esa condena inicial ofreció a las bandas formadas al calor del fuego punk la libertad helada de una hoja en blanco. De ahí que el

A veces un nombre realiza, de modo delibe-

crítico Simon Reynolds llame al postpunk “la

rado y contundente, el sentido de aquello

segunda edad de oro del rock”. Una edad,

que nombra, mezcla identidad y destino en

puede agregarse, que comienza también con

una sola entidad. Ejemplos: Joyce bautizó

la irresistible inestabilidad formal, los cam-

su gran novela con el nombre del primer

bios abruptos y las sorpresas sonoras de

viajero de la literatura occidental, el futbolista

Low, un álbum premonitorio y fragmentario:

Cristiano Ronaldo se llama así porque su pa-

la idea general que lo articula sólo se aprecia

dre es un hombre de fe que admira a Ronald

en la astilla del espejo roto.

Reagan, Kurt Cobain necesitaba volver al

Lo mejor del postpunk está en los catálogos

calor del vientre materno y por eso el último

de los sellos independientes norteamerica-

disco de Nirvana se tituló In Utero…

nos y británicos (SST, Rough Trade y Factory

En 2007, Ignacio Espumado fundó un sello

Records, entre otros), que combatieron la

discográfico con el objetivo de volver audible

falta de dinero con una lógica de trabajo gue-

y visible una música que estaba a su alrede-

rrilla. Los simples de siete o doce pulgadas,

dor y que, de otro modo, habría terminado

integrados por dos o tres canciones, tienen,

en un bolso de CDs grabables perdido en

en este contexto, una significación especial.

alguna mudanza. El nombre del proyecto,

Y sigue siendo una práctica corriente incluir

Soy Mutante, presupone una idea del cam-

en los lados B de esos simples canciones

bio como objetivo permanente, un impulso

extrañas o una versión insólita de algún clá-

por abrazar la deformidad y el desvío como

sico, eso que la industria llama “rarezas”. Por

único camino posible. No es extraño que

eso no sorprende que el origen del sello de

a Espumado le guste el postpunk, nombre

Espumado sea un compilado de lados B de

otorgado por el periodismo al desconcertan-

Los Daylight, banda que integró entre 2004

te mapa del rock inglés de 1979, resultado

y 2010: “Yo había juntado varias grabaciones

del desplazamiento tectónico que habían

de Los Daylight y me decidí a hacer un disco

provocado los Sex Pistols y el álbum Low de

de lados B y remixes en 2007. Al mismo

David Bowie dos años antes.

tiempo conocí a los Daddy Rocks y les ofrecí

Los Sex Pistols fueron una patada en el men-

grabar un disco. Yo ya tenía experiencia

tón de todo aquello que había convertido al

en estudios porque había hecho de forma 50


51


casera los discos de Matilda, mi otra banda.

tapa del primer EP de estos últimos es una

Y me cebé, me parecía que había hecho algo

obra original de Ale Siniestro titulada La niña

piola y realmente me reconfortaba participar

voladora. Al igual que su amigo Espumado,

en los discos de ese modo. Quise hacer un

Siniestro propone, a su manera, un arte de la

sello en el que los discos tuvieran una inter-

mutación. Basta con observar su Elvis cabe-

vención casera, artesanal. Ofrecí mi trabajo

za de jirafa o, en el mencionado disco de los

de onda y grabé un montón de discos en mi

Sistema Sonido Descontrol, la niña bailarina

casa. Soy un fanático de las editoriales, de la

y voladora con alas filosas como rayos y

idea de lo que es una línea editorial”.

cabeza de tentáculos redondeados.

El catálogo de Soy Mutante conjuga una estética entre marginal y desprolija y un en-

El rock en los ojos

foque avant garde. La raíz de esta música es,

Ale Siniestro también tiene un origen punk.

como dice Espumado, casera y artesanal; el

Nació en Capital Federal en 1982 y recibió su

modo en que es interpretada y grabada fun-

primera guitarra eléctrica a los 11 años, “casi

ciona, en un punto, como su posterior análi-

de la mano de las primeras birras”, aclara.

sis. Primitiva y sofisticada al mismo tiempo,

Si bien su destreza y habilidad con la pelota

la producción de Soy Mutante revela la clave

anunciaban un destino en el fútbol profesio-

del sello, la raíz de su nombre: el objetivo

nal, Ale Siniestro dejó todo por el rock y se

no es encontrar la novedad sino producirla.

sumó a Los Culpables de Todo, una banda

Si la repetición congela y prolonga modelos

de principios de los años noventa que tuvo

hasta llevarlos a su caricatura, Soy Mutante

un efímero éxito de la mano de la canción

propone una huida hacia el desequilibrio.

“Acosado sexual”. Fue en aquel momento

Espumado lo explica mejor: “La mayoría de

que se hizo cargo de la faceta gráfica del

los músicos que grabamos en el sello, en

grupo.

algún momento, tocamos música punk y

En 2004, después de una gira europea junto

después le agregamos ciertas pretensiones

a Los Argies, banda en la que Espumado

artísticas, experimentales. Los Daddy Rocks

tocaba el bajo, Ale Siniestro se instaló en

tocan con pistas pero tienen una onda punk

Berlín, donde, cuenta, “viví en un squat,

muy marcada. El sello persigue un audio

el street art estaba explotando, el arte y la

desprolijo, no me interesa que todo suene

música te inundaban los sentidos”. Antes

perfecto sino que los discos transmitan otra

de mudarse a Barcelona en 2008, hizo base

cosa, cierta cuestión más picante y bardera,

por un tiempo en Rosario y grabó su disco

oscuridad y diversión al mismo tiempo. En

Colirios, editado, sin sorpresa, por Soy

nuestros discos se permiten las desafinacio-

Mutante. Es llamativo el contraste entre

nes, los errores como arreglos estéticos”.

el clima acústico y relajado de Colirios y el

Los discos de Soy Mutante oscilan en-

carácter inhumano y fracturado de la obra

tre el punk sangrante de Los Del Fin y

plástica de Siniestro. Él dice que el álbum

Desesperanza, el garage deconstruccionista

“fue la calma que necesitó el caos para

de los Ready Made, la música indescriptible

prosperar”.

de Los Daylight y el collage de espejos de-

Si el rock fue el gatillo del caos visual, hay

formantes de Sistema Sonido Descontrol. La

que preguntarle al artista por la banda 52


sonora de su vida: “El rock es un afluente

inspirado en los Pixies, con un grupo de

inagotable de discrepancia y rebeldía que

artistas increíbles. Sergio Mora es uno de

me influye en cada movimiento y mi trabajo

ellos, lo recomiendo con fervor”, dice Ale.

intenta ser rock que entra por los ojos. Toqué

No sorprende, para conectar los puntos res-

en muchas bandas, como Los Dísckolos

tantes, que, al igual que Ignacio Espumado,

y Mojarras. Las bandas que me parten la

Ale Siniestro suelte la palabra “experimenta-

cabeza son Bauhaus, Neu!, T-Rex y New

ción” en alguna respuesta: “En mi caso, todo

Order. También escucho música disco italia-

parte de la experimentación. Mi naturaleza

na y death metal. Actualmente toco en tres

es supercaótica, tiro todo a mi licuadora

proyectos: Los Vértigos, Black Cat Lullaby y

mental y a la hora de volcar mi creatividad

Club Nocturno”.

busco y revuelvo en una mezcla en la que

En las obras de Ale Siniestro chocan diferen-

puede aparecer cualquier cosa. Se me apare-

tes códigos visuales. Pero lejos de acumular

ce un personaje principal, alguien con quien

yuxtaposiciones, su arte parece centrarse en

podés sentirte identificado, e intento crear a

el equilibrado desequilibrio de tres o cuatro

su alrededor una escena irracional, que para

elementos que se conjugan de manera

mí puede tener un sentido y para vos, otro,

inesperada. ¿Surrealismo? Sí: “El dadaísmo y

como un sueño. Intento evocar una imagen

el surrealismo son el lenguaje que uso. Dalí,

onírica. Mi arte nació de la necesidad de

Pierre Moliner y Paul Delvaux son algunos de

ilustrar el rock. Luego creció y se puso en el

mis artistas preferidos. Hace poco participé

mismo escalón; y ahí andan, prestándose

de una expo colectiva en Los Ángeles, arte

favores”. 53


MAYO

54


55


MAYO

FOTO BÁRBARA SANDOZ Arno Piroud, “Burn out in Rosario” Oficina 26

Contemplación ante determinados sucedidos del mes de mayo de 2011

Se escribe sobre arena como si se tratase de cemento fresco, pero se borra con el codo de un bostezo David Nahón

En el estudio de la economía clásica,

son válidos para la circulación pero constru-

Robinson Crusoe es utilizado para instruir

ye colecciones, no mercados.

acerca de la producción y la elección del

Hay un trabajo de ser artista. Una labor que

consumidor en ausencia de comercio y de

tiene que ver con mirar el mundo. Otros

mercado. En ese entorno, Crusoe administra

también, ser médico, por ejemplo. Distintos

el tiempo entre producción y ocio. Su ejem-

modos de mirar al mundo a partir de resolver

plo ilustra la pregunta ¿cómo determinar un

necesidades ajenas y propias en un mismo

valor en aquello que tiene precio pero no

acto. De alguna manera todos los trabajos

quien lo compre?

lo son, exceptuado que un artista no tiene

En una ciudad mediana, apática hacia inquie-

vacaciones: lleva puesto permanentemente

tudes tan burguesas y snob como otras pero

los anteojos de ver a través del oficio.

sin mercado para el arte, las obras tampoco

Hay carteles, uno que dice “cuidado ten-

tienen precio. Se aprecian sí, pero entre un

sión”, eso es en la calle. También hay pelícu-

reducido conjunto que casi es el mismo que

las para ver, hay muchas cosas para hacer y

las produce.

sentirse bien. Por eso:

Esta es la greda en la que se modela el

Aviso a todos:

ánimo creador –fijando su destino de

Hacer piezas de arte no es lo más entreteni-

indigencia– no de contenido, sí por su

do del mundo, ni siquiera es entretenido.

destino infortunado. Una obra depreciada

La mayoría de las veces el proceso es

se empequeñece porque el fin no justifica

amargo y solitario. Nunca sabés cómo va a

los medios pero los construye. Producir un

funcionar aquello en el mundo fuera de vos.

automóvil, una fornitura o una pieza de arte

Aun siendo saludable que así sea. El arte es

cuesta dinero, en billetes, tiempo o cualquier

un puente que podés cruzar mientras creés

otra transformación que se le parezca. El

que el puente existe, en el preciso instante

medio no está a la mitad sino al principio de

que la duda es más grande que la certeza,

cualquier haber prosaico o retórico. Una idea

el puente desaparece y te encontrás en el

también cuesta dinero y vale en lo mismo, y

medio del agua, empapado, preguntándote

ésta es una noticia hasta para la mayoría de

cómo llegaste hasta ahí si lo único que esta-

los peritos artistas. El trueque y el obsequio

bas haciendo era tratar de ser vos mismo. 56


57


Para nosotros los artistas, el único camino

Celebrar parece una buena idea en el ánimo

posible es el de la invención: poder ficcio-

caprichoso de la juventud. Hay guitarras,

nar sin necesidad de atravesarlo todo. Sin

papeles de color, serpentinas y aerosoles.

embargo, hace un tiempo que los diarios

Las personas se disfrazan y desfilan. Todo

adolescentes vencieron sus candorosos can-

es decorosamente incorrecto o al revés.

dados y se transformaron en algo parecido a

Da igual: cada torsión exuda poco trabajo

una manera de hacer, a un modo de repre-

intelectual y muchas horas frente al espejo.

sentar esa hiperestesia que lo invadió todo.

Lo impensado es corriente y no esperamos

Y eso que se –siente–, esa vibración, aturde

menos que traten de sorprendernos y no a

en alguna pieza de arte. Un modo reality

cualquier precio, sino al de librerías de artícu-

de transmitir cada parte del transcurso sin

los escolares y casas de cotillón.

evitarnos nada.

¡Qué divertido que no podamos distinguir entre el garabato espontáneo y el incorrecto

Me celebro y me canto a mí mismo

manierismo de los nonatos del arte! Y que

Mayo es regido por Tauro, signo creativo

pertinente parece todo bajo la fluorescen-

que a su vez reconoce el gobierno de Venus:

cia de lo que se lleva. Tengo miedo de ver

voluptuosa y sensual. En su constelación,

caer a alguien y que todos sepamos cuál

galerías y artistas se aquerencian en la hip-

va a ser la trayectoria exacta de esa caída.

nótica arteBA a razón de cierta fantasía de

Afortunadamente está la obra social familiar

concomitancia. Proyectos, galerías, art

para resolver los perjuicios del accidente.

dealers, artistas, obras, premios, celos y

Se desarrolla un sentido a la vez, pero se

tirrias fundan un consorcio que subsistirá

manifiestan todos al mismo tiempo. Se

algunos días bajo la misma proporción de luz

piensa en crisis y se actúa con esa emoción.

artificial que proyecta la mayoría de su con-

Pero una crisis se puede leer en un espacio

tenido. El mismo humo que desde la costa

de tiempo poético, casi como en el que los

avisa del naufragio, dificulta ver si se trata de

dinosaurios se extinguieron, pero también es

un poderoso incendio o una impalpable nube

posible percibir que el escenario de esa an-

de polvo que se sacude por tanta marcha.

gustia es ahora, que es perenne, ineludible y

Tres estudiantes de la carrera de Bellas

común a todos.

Artes de la UNR aplican para un espacio

Leo: “Crisis significa al mismo tiempo peli-

en la geografía joven de la feria arteBA. Sin

gro y oportunidad”.

formulárselo, encarnan en su proyecto la

La crisis es uno de los estados de tensión

figura de los artistas emergentes de Rosario

más puro entre posibilidades: si se decide

que parecen vivir en un sempiterno viaje de

por el movimiento, es duelo en tanto salud.

estudios a Bariloche: del amor a la conster-

Si triunfa la inmovilidad se tornara enferme-

nación existencial.

dad, por consiguiente, trauma y parálisis.

¿Por qué todo parece una fiesta de gra-

La crisis no es la pregunta, es la respuesta.

duación si nadie parece estar camino a la

Como el náufrago de Defoe, un artista es la

adultez?

persona que durante su ejercicio se encuen-

En ese clima de inmediatez adolescente se

tra lejos –o cerca– de la civilización, en un

sucede velozmente del sinsabor al regocijo.

aislamiento consentido que permite reflejar 58


con identidad lo que del mundo llega a sus

La obra insiste en tópicos visitados pero

orillas. Cierta desdicha prorrumpe de saber

presenta la voluntad de burlarse de su propia

que el mundo continúa actuando pero él fue

fatuidad. La puesta en acto misma de la obra

relegado, por lo cual intuye que debe recrear

componía distintas escenas, como el inau-

lo más parecido al recuerdo de donde fue

dito temple de la pasante designada para

expulsado. Como Adán del bienaventurado

indicar a los concurrentes el sentido de la

edén. Pero el artista cuenta con una ventaja:

pieza de Herrera en medio del hedor a putre-

ante la dificultad de coexistir en el mundo tal

facción que –como la reflexión de la obra lo

cual es, puede transformarlo o convertirlo a

indicaba– se extendía en el predio semejante

nuevo en el espacio de sus invenciones.

a la fetidez de un cadáver. Como los que saltan en garrocha y desarro-

. . . _ _ _ . . . (s.o.s.)

llan metros de altura con apenas una vara

En el contexto de la Feria arteBA, se

y gran envión, el artista se torna diestro en

presenta entre otras la obra de Joaquín

administrar el esfuerzo en favor del resulta-

Boz (1987, Rojas, Buenos Aires) y David

do. Hace falta mucha dedicación y disciplina

Maggione (1988, Rosario), muy jóvenes

para lograr el salto deseado y conocer la

artistas que además realizan el postgrado

contingencia ante la eventual caída.

de la Universidad Di Tella y tienen una obra

Hace un tiempo una artista me dijo que no

sólida con muchísima identidad. Maggione

quería pintar siempre lo mismo, que hace fal-

es ganador de la versión 2010 de Curriculum

ta poner en riesgo la obra para no estancar-

Cero, el premio estímulo de la Galería Ruth

se. Le contesté que un poco sí, pero que el

Benzacar, pronto a cumplir con su primera

arte no es nada más que un acto de acroba-

individual en la galería.

cia. Y que tampoco es sano vivir en zozobra.

David construye una obra que responde

Una vez más, la economía reduce todo al

a enormes globos aerostáticos y Joaquín,

costo/beneficio, jeroglífico de la vida adulta.

pinturas, a veces monumentales también. Joaquín gira de pueblo en pueblo hasta la

Ni el arte ni el amor

ciudad donde encuentra de trabajo a un

son ortopedia de nada

maestro y aprende a sacrificarse aún más.

Cuando Defoe escribió Robinson Crusoe, es-

Porque en los lugares chicos las personas

taba en la ruina económica. Fue su novela la

hacen mucho con poco. También dicen que

que le dio fortuna y trascendencia. Robinson

la inteligencia es la capacidad de adaptarse

no estaba solo, pero Viernes era amigo y

a las contingencias. Y el instrumento es la

no tenía poder adquisitivo. Apenas podía

ocurrencia.

darle una palmadita en la espalda y alentarlo

En el mismo escenario de la Feria, Carlos

a seguir. Los colegas también nos damos

Fernando Herrera (1976, Rosario) gana un

aliento. Asistimos en Facebook a eventos y

premio por sobresalir en estas aptitudes.

en muchísimo menor número acudimos a

Con un par de zapatos, dos calamares y

inauguraciones.

una bolsa de nylon, conquista el Premio

Me resulta cordial citar a Picasso para

Fundación Petrobras en el nombre de su

argumentar una idea: “cuando se empieza

obra Autorretrato de mi muerte.

un cuadro, a menudo se realizan algunos 59


hermosos descubrimientos, y es preciso

involucrada en relatar paisajes emocionales

ponerse en guardia contra ellos. Incluso

de una puesta asombrosa. Liga sensible-

destruirlos y rehacerlos”. Dice Picasso que

mente experiencias plásticas contemporá-

cada vez que se destruye un bello descubri-

neas con una posición casi académica en el

miento, el artista no lo suprime realmente: lo

empleo del grafito, instalando una naturaleza

transforma, lo condensa y le confiere mayor

de cuño personal que convierte su trabajo en

sustancialidad. Finalmente señala que el

códigos absolutamente propios de la artista.

producto terminado es el resultado de los

Sissia también es representada por la Galería

hallazgos que fueron dejados de lado. Una

Baro de San Pablo, que desplegó en su

vez más entendemos que el arte no necesita

stand un dibujo monumental de asombrosa

formular una respuesta, pero sí proyectar

factura (400 x 150 cm).

una pregunta o un espacio de afonía. Pintar

En igual clave donde lo que se oye es la

un cuadro también es saber cuándo dete-

valiosa marcha de sus proyectos, durante el

nerse.

mes de mayo celebra su segundo aniversa-

Bueno sería ceder todas las defensas a la

rio el espacio Ivan Rosado. Conducido por el

contemplación del mundo, vivir el mundo

matrimonio de Maximiliano Masuelli y Ana

como una superficie sobre la cual no necesa-

Wandzik, quienes generosamente convidan

riamente hay que escribir, sino limitarnos a

su casa a experimentar alrededor de la músi-

leer y eventualmente reproducir algo de lo

ca y las ediciones alternativas en el entorno

que vemos. Producir callados más silencios.

de las artes plásticas. Para la oportunidad

Una muestra de este modelo introspectivo

del festejo exhibieron “A capite ad calcem”,

de compromiso podemos advertirlo en las

una delicada edición de pinturas de Daniel

artistas Carolina Grimblat y Mariana Sissia,

García en conjunto con la presentación de

en el espacio de Galerías de la Feria arteBA.

la edición Virus Tropical, libro de comics e

Ambas produciendo íntimamente y con

ilustraciones de la colombiana Paola Gaviria.

muchísima laboriosidad piezas delicadas y preciosas.

Grimblat (1975, Rosario) interviene el papel

Veo un futuro de artistas de una obra. Veo

fotográfico casi quirúrgicamente, practican-

artistas como médicos forenses. Veo una

do cisuras, extrapolando situaciones o entra-

implosión, un “big rip” del pensamiento y al

ñando otros contextos sobre la superficie de

final la palabra “amor” en letras pequeñas.

la imagen fotografiada, obteniendo panora-

En un futuro vamos a poder tocar las pala-

mas pulcros dotados de belleza y sentido.

bras y a observarlas como un objeto. Nos

Mariana Sissia (1980, Ramallo, Provincia de

reuniremos alrededor de una idea para tener

Buenos Aires) acredita su formación tem-

todos los puntos de vista posible.

prana en Rosario y actualmente también

El arte –finalmente­– va a ser reemplazado

participa del programa Di Tella. Mariana ex-

por cualquier otra forma de demanda de

pande su universo simbólico en superficies

cariño menos imprecisa.

dibujadas a lápiz con pericia y vehemencia, 60


MAYO

¡Fijémosnos qué pasa en Rosario!

el rosarino Carlos Herrera, además de artista gestor cultural. Su obra atrayente y repulsiva Autorretrato sobre mi muerte se componía

Mauro Herlitzka

de un par de viejos zapatos en una bolsa de polietileno, donde en su interior unos calamares estaban en un fétido proceso de putrefacción, obra de claro contenido conceptual, señalando lo efímero de la existen-

Es una frase recurrente, no sólo de los porte-

cia y el proceso de una muerte, cargada de

ños, sino de todos los que estamos vincula-

simbolismo.

dos al campo cultural y de las artes visuales

En ese premio destacó la instalación del bo-

en nuestro país.

naerense Santiago Villanueva, Adquisición,

Rosario es un centro, desde hace ya cien

como una reflexión del mercado, apropián-

años, donde las actividades artísticas tienen

dose de una obra del rosarino, y muy buen

un desarrollo activo, donde las vanguardias

artista de hecho, Anselmo Piccoli. También

artísticas se manifestaron a lo largo del siglo

Mariana Telleria presentó, dentro del premio,

XX y un alto nivel de institucionalidad, por la

su Somos el límite de las cosas.

importancia de sus museos, centros cultu-

Artistas como Daniel García en Zabaleta

rales, universidades y escuelas de arte, pero

LAB, Antonio Berni en su esplendor en SUR,

precario en el sistema galerístico.

Nicola Costantino en la española Sicart, la

Citamos siempre a Berni, a Fontana, a los

excelente Graciela Sacco en Gachi Prieto,

grupos de fines de los 60 y más reciente-

Leo Battistelli con sus lindísimas obras

mente a numerosos artistas desde Nicola

hechas en cerámica en GC, y otro destaca-

Costantino, con una importante carrera

do grupo en Del Infinito exhibiendo a Ennio

internacional, a Mauro Guzman, irreverente y

Iommi, Lila Siegrist, una interesante joven

transgresor, que hace su residencia artística

artista que trabaja en fotografía, así también

en la prestigiosa Gasworks londinense.

Fabiana Imola con sus perfiles de metal

Muchos de estos artistas han sido exhibidos

esmaltado.

en arteBA, nuestra feria de arte por exce-

Tan solo había un espacio rosarino en el

lencia, donde anualmente nos convoca en

Barrio Joven: La Herrmana Favorita, así con

pleno otoño a todos los interesados en el

doble r, donde sus directores Ángeles Ascúa,

quehacer artístico.

Florencia Caterina y Matías Pepe mostraron

Recorriendo la feria este año, siempre el

artistas como Joaquín Boz, Juan Hernández,

espacio destinado al Premio Petrobras de-

Federico Leites, entre otros.

para interesantes sorpresas. Es un espacio

La producción artística de los rosarinos es

privilegiado donde los organizadores de

excelente y renovadora, sus espacios de

arteBA, gracias al patrocinio de esa empre-

exhibición como el macro y su colección de

sa, seleccionan y financian la creación de di-

arte contemporáneo son destacables, pero

versos artistas a través de un jurado también

el desarrollo de su mercado y la creación de

interesante.

galerías que lo puedan sostener es una tarea

El primer premio, y bien merecido lo obtuvo

pendiente que Rosario merece tener. 61


MAYO · repin

El autorretrato de tus pasos Ezequiel Alemian

Ñ Revista de Cultura, 13.06.2011

Una peculiar coincidencia se dio durante

el centro de la muestra), una caja de zapatos

estos días en la ciudad de Buenos Aires;

con un par de zapatos adentro.

fue que a pocas cuadras de diferencia dos

Caja de zapatos vacía llena de zapatos vacíos,

muestras de arte se organizaron alrededor

es el título de este último objeto.

de un mismo objeto: un par de zapatos.

Autorretrato de mi muerte es bastante más

Una fue Autorretrato de mi muerte, de

conocida: una bolsa de nylon blanca tirada

Carlos Herrera, la obra que ganó el Premio

en el piso, dentro de la cual se adivina una

Petrobras, que tuvo la enorme virtud de

remera y algún otro objeto, y de la que

reavivar el debate sobre los fundamentos del

emerge un par de zapatos, cada uno con un

valor de lo que se hace, y de lo que se con-

calamar hediondo adentro.

sume; la otra fue Humo, de Gastón Pérsico,

En ambos casos, los zapatos funcionan de

que estuvo expuesta en la galería Nora Fisch,

modo similar: son lo que queda de alguien

y con la cual el trabajo de Herrera, aunque

que se ha ido. Alguien que se ha hecho

más no sea a partir de la coincidencia, enta-

humo, en el primer caso; alguien que ha

bla un diálogo de semejanzas y diferencias.

muerto, en el segundo. Al mismo tiempo

La muestra de Pérsico incluye cinco objetos:

que señalan la ausencia, esos zapatos cons-

una manija adherida a una de las paredes

tituyen el último registro de la presencia del

de la galería, un troquelado sobre vinilo (del

ausente. Autorretrato, dice Herrera.

que se han recortado siluetas de libros,

Es la parte por el todo. Desde la elección

máquinas de escribir y personajes en traje,

del modelo (unas botitas cortas, de cuero,

sombrero y paraguas), una tarjeta que remite

muy british y atemporales en Pérsico; y unos

a otra galería (donde se exhibe una obra de

zapatos de goma para verano, muy ventila-

neón), la alfombra que cubre la sala y, en el

dos y actuales, casi diríamos: de moda, en

centro de la alfombra (como quien dice, en

el caso de Herrera), hasta su estado de uso, 62


los zapatos llevan las marcas de quienes

poder hacerse en los hechos, está habilitado

se los han puesto. Llevan las marcas de los

por la obra. A diferencia de Pérsico, Herrera

cuerpos y de los trabajos de quienes los han

parece habilitar el relato de vida: trabaja a

usado. En esas marcas los zapatos conser-

favor de la vinculación de los objetos (los

van el relato de la vida de quienes los han

zapatos) con una experiencia personal.

calzado. En la figura de los zapatos está la

“Autorretrato”. Por otra parte, el olor de los

narración de la vida de quienes los usaron.

calamares pudriéndose lo que reconstruye

O por lo menos, la potencialidad de narrar

es una instancia más de la presencia: no

esa vida. En este punto los dos trabajos

está el cuerpo, pero está su olor.

difieren; no demasiado en lo formal, pero la

El drama, en Herrera, podríamos decir, está

diferencia es importante.

en la aparición/desaparición del cuerpo, en

“Caja de zapatos vacía llena de zapatos

la historia del cuerpo. Haciendo un juego

vacíos”, dice Pérsico. La frase es un modelo.

de palabras: sin cuerpos, sin historias de

Uno podría continuar con el juego de llenos

cuerpos, no hay drama. Drama entendido

y vacíos y agregarle otro eslabón: “caja

como retórica. Pérsico, podría pensarse, es

de zapatos vacía, llena de zapatos vacíos,

la anti-retórica por excelencia. Los zapatos

llenos de una persona vacía”. A Pérsico no le

de Humo se niegan a asumirse como depo-

interesa utilizar los zapatos para indagar en

sitarios de un relato. Casi como si se dijera:

la vida de quien pudo haberlos utilizado. Es

cualquier cosa que se cuente sobre alguien,

más: a Pérsico parece interesarle subrayar

es retórica. No es la desaparición del autor:

que no utilizará los zapatos para indagar en

es la desaparición de la literatura.

la vida de quien pudo haberlos utilizado. Los

¿Escribir (Herrera) o no escribir (Pérsico)?

zapatos de Pérsico, casi sin uso, rodeados

¿Para qué sirve hoy la literatura? ¿Es posi-

por objetos casi absolutamente impersona-

ble que algo de esa pregunta haya estado

les (esas siluetas que resaltan la ausencia

planteado en esos dos pares de zapatos que

del cuerpo), no brindan pistas de interpreta-

aparecieron, inesperadamente y al mismo

ción, indicios narrativos. Están ahí como si

tiempo, por el suelo de Buenos Aires?

fueran indicios, pero no lo son. En un libro

En principio tiendo a pensar el desvane-

interesantísimo que acompaña la muestra,

cimiento de los cuerpos, de las historias,

Mariano Mayer dice algo así como que

de los dramas, como un trabajo a favor de

Pérsico trabaja contra la demanda de crear

ciertas tendencias de interpretación domi-

contenido.

nantes. Es esa descomposición del presente

En el caso de Herrera, el hecho de que junto

cuya expresión en el arte explícitamente

a los zapatos haya algunos objetos persona-

decidieron exhibir y premiar los jurados del

les le da a la obra un cierto dramatismo. Uno

Petrobras. El presente se deshace tan instan-

puede, a partir de esos elementos, avanzar,

táneamente que lo mejor es no quedar pega-

aunque sea mínimamente, en la reconstruc-

do a nada. Estar todo el tiempo transformán-

ción de un relato de vida. En cualquier caso,

dose. Quiero decir: lo primero que pienso

ese avance, por menor que sea, más que

sobre estas obras es que se trata de conva63


64


FOTO BÁRBARA SANDOZ Carlos Herrera, Autoretrato sobre mi muerte Premio Petrobras-ArteBA

lidaciones del estado de las cosas. ¿No es la narración, la anécdota, la historia del cuerpo, lo que el poder siempre tiende a minimizar? Pero después pienso: ¿no es la minimización de lo anecdótico, de la historia de un cuerpo, del relato de una vida, el último gesto de resistencia al carácter apropiador de nuestra subjetividad por parte de un sistema político comunicacional que continuamente nos narra, nos retrata, nos hace hacer y decir? Y si fuese así ¿cuál sería ese grado de mayor resistencia, de mayor minimización, sino el relato, reducido a una cuestión apenas indicial, de la propia desaparición? Cuando uno entra a la galería y ve esos pocos objetos de Pérsico distribuidos como si en la sala no hubiese nada, le dan ganas de reírse. Es que el humor está lleno de humo, y tiene un componente anárquico reconstitutivo. Desvanecernos es la última libertad que nos queda. 65


EL PIBE efervescente Homenaje a los 20 a単os de vida de Pecatta Minuta

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JUNIO

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JUNIO

Cuando los links dibujan paisajes cartográficos Cecilia Lenardón

Es como pensar en los mapas estelares, los

que se trata de un “Trabajo de Registro e

puntos están allí, a nosotros sólo nos toca

Investigación sobre Paisaje Argentino”, pero

trazar las más inconsistentes líneas con el

también el todo es más que la suma de las

pensamiento.

partes. Y desde las tripas se dice lo más

El paisaje nos observa, lo viene haciendo

sincero.

imperturbable desde los primeros tiempos.

Con un montaje que no deja dudas, Masuelli

Alguien acomodado en un trono bien mulli-

elabora un interesante ejercicio de desolem-

do. Si hacemos que no lo vemos es para que

nización. Ha rastreado y encontrado una pre-

no esté tanto, pero él persiste con la segu-

ciosa colección de paisajes que pertenecen

ridad de quien sabe que ha estado y estará,

a un tiempo, como él dice “caprichosamente

antes y después que nosotros.* Cuando lo

recortado”, que va desde principios de siglo

vemos mirarnos, sentimos que tenemos que

XX hasta 1985. En su Caja de joyas* encon-

contestarle algo.

tramos una sucesión de versiones de lo mis-

Garry Winogrand se preguntó “¿qué no es

mo, un paisaje sin estridencias, una llanura

una naturaleza muerta?”. Podemos aseve-

sin pretensiones. Y él replica ese tono en el

rar lo mismo del paisaje. La gracia no está

montaje, sin temerle a la tautología.

en hablar de él –porque él nos hace hablar

Los originales que pudo encontrar bien, y los

indefectiblemente– sino en lo que podemos

que no, pelean en igualdad de condiciones

decirle.

desde su formato en fotocopia y/o postal, y

T.R.I.P.A* es una respuesta en clave. Es

este mix –que pone no en segundo, sino en

como un código morse. T punto R punto I

tercer plano las cuestiones acerca de la po-

punto P punto A. Maximiliano Masuelli dice

sesión del original y sus derivados de autoría y fidelidad– reivindica una democratización del coleccionismo (en su vertiente curatorial)

*  “Este bosque o paisaje de esculturas me permite reflexionar sobre cómo la desaparición de la especie humana implica un vacío de sentidos fuertes. Sentirme como si yo no fuera más parte de la cultura humana, de nuestra especie”, Adrián Villar Rojas, en “El rosarino Villar Rojas, artista clave en la Bienal de Venecia”, Diario País24 [en línea] http://www.pais24.com/index.php?go=n&id=1301 40&x=Cultura%20y%20Espectaculos. *  t.r.i.p.a fest, exposición ideada por Maximiliano Masuelli, Espacio Ivan Rosado, junio 2011, http://www.flickr.com/photos/ t_r_i_p_a/5809754988/in/photostream.

*  Excelente cúmulo estelar, de una amplia variedad de estrellas denominado “Caja de Joyas” o “NGC 4755”. Se encuentra en el cielo a menos de un grado a la izquierda de la estrella Beta Crucis o Mimosa, de la sureña constelación de Cruz del Sur. Ante el telescopio se pueden observar unas 100 estrellas, la gran mayoría muy jóvenes, con edades que no alcanzan los 10 millones de años.

70


que pone decididamente el énfasis en el

Que a nadie se le ocurra nombrar la palabra

afán de divulgación más que en el regocijo

coherencia en estos encuentros cumbres de

de la pertenencia. Y esto lo reafirma en su

representantes desfasados. Con una estética

construcción del flickr en la red (http://flickr.

(poner este término es casi un atentado)

com/t_r_i_p_a).

que festeja lo inconexo, las páginas de Un

Tratándose de obras de Minturn Zerva,

Faulduo disparan con una escopeta bien

Musto, los hermanos Schiavoni, Ouvrard,

cargada a cualquier intención de un guión

Pedrotti, Gambartes, Berni, Spilimbergo,

legible.

Grela, Elizalde y Lacamera, entre otros, ésta

Porque uno podría hacerse una casita con

fue sin duda la exposición más contemporá-

esas hojas y meterse adentro y arrancarlas

nea de todas.

de a una para contarse siempre historias dis-

Pero, cada tanto, de tan llano el paisaje se

tintas. Podría pegar un pequeño grito y que

adormece. Boga amigo* invierte su horizonte

quede estampado deshojándose.*

y nos trae su selección de paisajes verticales,

Y afuera sopla el viento y llueven hojas

una colección de postales pasadas de moda.

también, hojas blancas que al caer consi-

Un perro irlandés tomando té en un jarro de

guen hacer un sonido tan singular como sólo

cerveza, con paquete moño y sombrerín a

podía ocurrírsele a Adriana Calcanhotto con

tono, unos cuantos cerdos haciendo trencito

un secador de pelo.*

hacia ninguna parte, tres hermanos tirole-

Entonces el paisaje se enrarece, se arre-

ses sonriendo para la cámara. Encontrar el

molina y se pone de otro humor. Aparece

absurdo en el pasado, total podemos reírnos

desobediente en manos de Fabiana Imola,*

tranquilos de lo que ya no tiene riesgo de

cubriendo de liquen, carbonilla y troncos las

retornar, estamos a salvo.

paredes tan blancas. Ella deja que entre para

Salvo para La dimensión descocada* que

apresarlo, quitarle la sombra a las cosas es

apunta con un arma de juguete los límites

una operación que requiere sigilo. Y sobre

del ridículo. Provocar al auditorio hasta la

todo una toma de posición, elegir quedarse

vergüenza ajena, Cachimba y Marusich se

con lo brumoso e inestable de las cosas,

postulan como kamikazes del amor propio.

con aquello que sería algo así como su

Sus peripecias pasean por todas las estacio-

reverso, un reverso siempre oscuro. Darle

nes posibles del idiotismo más estudiado.

materialidad al lado b y convertir lo oscuro

Un idiotismo ilustre, dignos de una ovación

en brillante, tan brillante que se vuelve es-

machucada.

pejo. La sombra ahora nos refleja, toda una

Esta presentación del dúo vino a ameni-

venganza.

zar al no menos cuerdo Faulduo,* fanzine * Un Faulduo, presentación de una muestra-acción en Oficina 26, Pasaje Pam, junio 2011, http://www.youtube.com/ watch?v=rmM4ZQWvhss. * “El verde abrazo de innumerables brazos”, exposición de Mimi Laquidara, Espacio -30, sala del Museo Diario La Capital. * O microbio do samba, presentación del disco de Adriana Calcanhotto, Teatro El Círculo, junio 2011, http://www. adrianacalcanhotto.com/sec_textos. * Sombra de Toro, exposición de Fabiana Imola en la sala del Museo Diario La Capital, junio 2011, http://www.fundacionlacapital. org.ar/cultural/Museo/350_Muestra_de_fotograf%C3%ADas_e_ instalaciones.html.

extraterrestre que aterrizó en Oficina 26.

*  Paisajes verticales, Boga amigo, espacio parásito en Ivan Rosado, coordinado por Michele Siquot y Ángeles Ascúa junto a Agustín González, junio 2011, http://galeriadebolsillo.blogspot. com/2011/06/paisajes-verticales-espacio-boga-amigo.html. *  La dimensión descocada, una invención de Max Cachimba y Rodolfo Marusich, http://www.facebook.com/group. php?gid=57069761599.

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FOTO LUIS VIGNOLI Demasiado Ego San Lorenzo al 700, grafitti “Rod Bomb”

Pero la presencia del referente ensombre-

artista que insiste en pervivir en ella a toda

ce de más, como el piano en la muestra

costa?). Con fondos de niebla espesa se dan

de Hugo Aveta,* que mantiene el misterio

el pésame mutuamente. Ninguno sabe a

intachable hasta el último túnel. Las foto-

ciencia cierta a quién de todos están despi-

grafías de Aveta vuelven a tensar la cuerda

diendo.

sobre la nomenclatura siempre odiosa de la

Y es que los muertos y las sombras saben

técnica. Aquí la fotografía, como disciplina

cómo escabullirse con la rapidez de los

que conlleva en sus espaldas el contar de

niños. Como la virgen negra de Montserrat,

por sí con una suposición de verdad, pone

conocida popularmente como La Moreneta,

su mejor as sobre la mesa. Porque la primera

patrona de Cataluña, descubierta por unos

tendencia es la de la creencia, la segunda la

niños pastores en el año 880. Dicen que per-

de la desconfianza. La artificialidad, como

siguiendo una luz en la montaña se encon-

uno de los ejes de la muestra, juega a dos

traron con su imagen en el interior de una

puntas. “¿Qué significa decir que podemos

cueva. Al enterarse de la noticia, el obispo in-

ver que algo no está?”* Lo que no está es lo

tentó trasladar la imagen hasta la ciudad de

que más presencia tiene. Porque la ausencia

Manresa, pero el traslado fue imposible ya

lo corroe todo y se vuelve insoportablemen-

que la estatua pesaba demasiado. El obispo

te presente. Lo copa todo. A la ausencia hay

lo interpretó como el deseo de la Virgen de

que hacerle lugar, porque lo que no tiene

permanecer en el lugar en el que se la había

sitio itinera. Comienza a invadir, se vuelve

encontrado y ordenó la construcción de la

parasitario, carcome.

ermita de Santa María, origen del actual mo-

Hugo Aveta construye, con mucho disimu-

nasterio. Podemos ver una increíble réplica

lo –para que ella no sospeche– pequeños

en miniatura si subimos al primer piso del

escenarios para la ausencia. Y lo hace con

Centre Catalá* sin hacer ruido. Recomiendo

una destreza propia de relojero, porque es

detenerse sobre el decorado de fondo. Otra

el tiempo y su paso, lleno de ruido a polvo,

vez el paisaje.

lo que retumba hasta en los lugares que no

Porque el paisaje sostiene, y arma sende-

existen.

ros para que caminemos por él. Esa es la

Es que el paisaje conoce bien a los fantas-

razón de las procesiones. La Musto lo sabe,

mas, a los que no han podido encontrar su

por eso organiza una todos los años. Pero

sitio y deambulan. Se camuflan en la parte

la procesión de La Musto tiene una sin-

oscura de las cosas, y se congregan en los

gularidad, es de por sí un hecho estético,

funerales. Hacen fila para recibir al difunto.

un hecho estético mutable, una escultura

Pero ¿a quién velan los distintos lutos de

horizontal en movimiento.

Flavia Da Rin?* (¿será que la obra mata al * “El misterio del niño muerto”, exposición de Flavia Da Rin, Museo Diario La Capital, junio 2011, http://www.fundacionlacapital. org.ar/cultural/Museo/350_Muestra_de_fotograf%C3%ADas_e_ instalaciones.html. * Cripta en miniatura para la Virgen de Montserrat, Centre Catalá, Entre Ríos 761, 1er piso, Rosario. http://www.corazones.org/lugares/ espana/montserrat/a_montserrat_monasterio.htm.

* “La humanidad de los objetos”, exposición de Hugo Aveta, Centro Cultural Parque de España, junio 2011, http://www.ccpe.org. ar/nota.php?idx=342. * Texto extraído de la fotografía La Última Cena, 2 x 1,5 m, 2009, Hugo Aveta, “La humanidad de los objetos”, CCPE, junio 2011.

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FOTO LUIS VIGNOLI Celeste sobre Rosado Ivan Rosado

Las antorchas y candelas enfrentan la

de a una las antorchas encendidas. Porque

noche*, le piden que ese día se vuelva más

lo que asusta también fascina.

negra, más densa, y que por un rato pase a

Digo un aprendizaje porque presenciar lo

segundo plano. Las farolas destacan, logran

doloroso y saber que pasa, que también

un túnel destellante. Confundidos entre el

lo doloroso es un tiempo, es llevarse algo

tumulto están los muñecos, los sostienen

valioso, aunque transitorio.

entre varios. Los niños gritan de felicidad, los

Distinto, muy distinto es el efecto del fuego

siguen. Y los van eligiendo, los marcan, los

cuando emboba. Porque quién sabe dón-

identifican por sus atributos más destaca-

de nos lleva ese aletargamiento, ese mirar

bles. Ahí va el de las manchas rojas, mamá,

extraviado cuando las llamas crujen.

ahí va la jirafa grande, mirá, el cabezudo con

Ejerce parecidos efectos la fascinación por

las patas largas, mirá mirá mamá, vamos,

la técnica. Como si uno dejase de ver el todo

cerca del barco iluminado.

por ver la parte. Javier Carricajo* seduce con

La procesión de La Musto es un aprendizaje.

su pincelada hipnótica. “El trecho que separa

Los niños y los que hacemos de la niñez un

el enamoramiento de la hipnosis no es, evi-

altarcito que mantenemos con flores artifi-

dentemente, muy grande. Las coincidencias

ciales, nos inquietamos. Porque hacemos un

son llamativas. La misma sumisión humilla-

trayecto largo para acompañar las barcas,

da, igual obediencia y falta de crítica hacia el

los monigotes, los amorfos y los inentendi-

hipnotizador como hacia el objeto amado”.*

bles hasta la hoguera. Tenemos que elaborar

La hipnosis plantea el escenario predilecto

durante la caminata la despedida.

de la manipulación. Carricajo arrincona a la

Nada se vuelve tan hermoso como lo que

pintura hasta lograr pervertirla. Travestido de

está a punto de desaparecer. Y el desafío

un Rubens inofensivo, la convence de apa-

está en quedarse, en afrontar esa ambiva-

recer actuando todas las posiciones como

lencia entre tristeza y regocijo que aparece

nena boba. Y ella se deja.

cuando las llamas incendian los muñecos

“Entre el agua y mi cuerpo no hay distin-

preferidos. Y ¡qué hoguera! La hoguera más

ción”, canta Marta y los ceroestrés* en uno

enorme y maravillosa.

de los túneles del Parque España, mientras

Contemplar la desaparición de a secuencias,

se va desvistiendo entre tema y tema.

porque las llamas van tomando las ramas y

Quitarse la vergüenza. Porque la vergüenza

los colores de a poco, con cautela. Y todos

existe para que nos quedemos con algo.

presenciamos las bajas con congoja. Ahí se quemó el de la cara amarilla, cuál, ahí, ahí, todos alentamos al sobreviviente. Y el fuego

* Javier Carricajo, exposición en el Museo Castagnino, junio 2011, http://www.javiercarricajo.com.ar. * Freud, Sigmund, “Enamoramiento e hipnosis”, en Más allá del principio de placer, Psicología de las masas y análisis del yo y otras obras (1920-1922), Obras Completas, Tomo XVIII, Buenos Aires, Amorrortu editores, 1984, p. 108. * Marta y los Ceroestrés, recital en el marco del ciclo Joven y efímero, Centro Cultural Parque de España, junio 2011, http://www.youtube.com/watch?v=FUIO8FWYTRE&feature=rela ted.

atroz, que cuando por fin se decide arrasa sin poesía. Y los niños forman fila para tirar

*  Taller de antorchas realizado por Coco Bedoya en la Escuela Municipal de Artes Plásticas Manuel Musto.

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FOTO LUIS VIGNOLI Sueños Calcinados Fogata San Juan de la Escuela Musto

Nos cuida para que no nos despojemos por

desvían nunca la presa de su mira. Marcia se

completo.

mira sin mariconeos. Nosotros, en el medio

Sin embargo, la imperdible muestra de tres

de la sala, apareceremos muertos por esos

pisos de Marcia Schvartz* no se reserva

ojos que son balas.

nada. Confirma la regla de que las lecciones

En cambio, el segundo piso de la exposición

no sirven. Esta vez, la prudencia hace bien

es casi decepcionante a no ser por las mara-

en quedarse en casa.

villosas cerámicas de cactus, bananos, flores

Con tres pisos disímiles, la producción de

y pecan. Unas cerámicas que responden

Marcia nos da un cachetazo bien puesto.

al ritmo de una mano sin sutilezas, que en-

Una pincelada que no titubea.

cuentran en esa tosquedad toda su belleza

Nada es tímido en Marcia. Con un formato

en bruto. Pero el resto abunda en influencias

no apto para pequeñeces, el primer piso

de un sopor indigenista, regionalista, re-

presenta una serie de retratos masculinos

sueltos con superposiciones, fundidos, y un

que no esconden nada. Ella no los preser-

uso del color para ahuyentar. Sin embargo,

va de cierta mirada precaria, torsos poco

resulta interesante cómo el tercer piso obliga

vistosos, escenarios poco altruistas, puestos

a resignificar los anteriores.

en situaciones que no los enaltecen. Ahí los

En el último piso Marcia no se priva de nada,

vemos, lavándose las axilas en la pileta de

con producciones que van desde los 80

un patio olvidado, desnudo, tomando mate

hasta la actualidad, cada cuadro, a excep-

en la reposera, de espaldas, revisándose mi-

ción de un precioso retrato mamarracheado

nuciosamente los agujeros de la nariz frente

de Brunito con un camión, es un tour por

al espejo.

lo descalibrado, composiciones de lo más

“Estas cuatro maderas las hice en dos horas,

ridículas, asociaciones inverosímiles, propias

cuando corto para ir a comer / por eso son

de una mirada que ríe a carcajadas del

tan feas / Tengo que aprender a pintar /

mejunje que ve. Engendros logrados como

El hombre busca caras y pitos en todos

Mandinga y Salsa comunista compiten con

lados.”*

zafarranchos como Misterio Oriental, donde

Y aún así, los retratos de Marcia son tan bru-

una bandeja laqueada oriental pintarrajeada

talmente francos –y esto sostenido de igual

convive con una sirena posando sobre un

modo en la técnica– que no se les puede

pedestal borroneado. Y otra mención para

reprochar nada. Más aún la sala de autorre-

Coco, el subcomandante Marcos y yo, una

tratos, aturde.

estatuilla del Alto Perú, junto a una oveja y

Porque pienso en Marcia mirándose a sí

un subcomandantecito Marcos en miniatura,

misma, y en esos ojos penetrantes que no

cosido. Brindis se llama el último cuadro, ¡salud!, brindamos por Marcia y su perspectiva coja,

* “Pasionaria”, exposición de pinturas de Marcia Schvartz en Fundación OSDE, con curaduría de María Laura Carrascal, junio 2011, http://www.jackemate.com/index.php?option=com_content &view=article&id=1343:obras-de-marcia-schvartz-se-exponen-enfundacion-osde-rosario. * Feli, Tienda Atypica, Pasaje Pam, junio 2011.

por la excelencia de sus pastiches y por hacer del paisaje su propio monigote.

77


JUNIO

Aníbal Brizuela, el artista BIC sin conciencia de su fama Virginia Giacossa

Aníbal Brizuela es un hombre sin pasado.

ente ellos Guillermo Kuitca, que coincidieron

Poco se sabe de este señor lánguido y des-

en su carácter de obras de arte. Que expuso

garbado que en invierno sabe andar con un

sus dibujos en espacios como ArteBA, el

gorro de lana –que a lo lejos parece un som-

Museo de Arte Contemporáneo de Rosario

brero otomano–, jeans con botamangas arre-

y las galerías Del Infinito, Pasaje PAM y

mangadas y una incipiente joroba que hace

Belleza y Felicidad. Que hasta en Francia se

todavía más corto su saco color marrón. Casi

interesaron por su obra y que un director de

nada se conoce del origen de este hombre

cine lo siguió largo tiempo con una cámara

de piel morena al que suele verse deambular

para contar su historia. Y diría también, que

con un bolso repleto de biromes de colores,

todo eso le ocurrió a Brizuela por ser una

un rollo de papel bajo el brazo y que dibuja

criatura extraordinaria. Un hombre que cruzó

compulsivamente, desde las sombras, trazos

el abismo de la locura y llegó al mundo del

que encierran enigmas.

arte. Una especie de artista BIC que vive

Un resumen diría que Brizuela es uno de

tranquilo, sin conciencia de su fama.

los cuatrocientos pacientes de la Colonia

La silueta de Brizuela se perfila fantasmagó-

Psiquiátrica de Oliveros, que vive allí hace

rica ante la cámara. Encorvado en el interior

unos cuarenta años y que se supone que

del largo pabellón dormitorio y mientras

tiene alrededor de 70. Que padece una

una delicada luz le ilumina la espalda, dibuja

psicosis paranoica, que ningún familiar lo

solitario, metódico y ceremonioso sus obras,

reclamó nunca. Que no le gusta hablar de

que no son sólo eso, también son una cues-

su vida y que sólo contó, a unos pocos, que

tión de Estado. Asesinatos, ataques represi-

vivía en Lanús, enfrente de un cuartel militar

vos, contaminación, intoxicaciones, radia-

de donde salían muchos aviones. Que su pa-

ciones atómicas y espionaje se mezclan con

dre era policía, y además tenía un hermano.

elementos de la simbología egipcia y lo más

Diría, también, que empezó dibujando en ca-

ultramoderno del armamento militar. Detrás

jas abiertas de remedios hasta que Fabiana

de cada una de ellas un viejo niño espantado

Imola –coordinadora del taller de plástica

parece alertar de los males que amenazan a

de la Colonia– lo descubrió y mostró sus

la humanidad necesitada de cuidados.

trabajos a renombrados artistas plásticos,

Entre los mensajes del FBI y la CIA se reco78


nocen signos como cruces, balas, corazo-

opiniones acerca del arte y hasta aparece la

nes, armas, los nombres de Kennedy, Eva

visión de una plástica que en él es ejemplo

Perón y una figura recurrente: Tanke P.A.P.I.

de art brut, según Jean Dubuffet. Pero no

La sigla, que a primera vista propone una

es en estos debates donde Plataneo decide

connotación filial, nada tiene que ver con una

ubicarse.

alusión de tipo familiar. Al menos en la no-

“Mire la distancia que hay de la Colonia

menclatura de Brizuela, el acrónimo significa

hasta acá, y todavía lo escucho. Siento esa

“Proyectil Antitanque Para Infantería”. Ese

percepción”, dice Brizuela con gesto extra-

juego de palabras para nada casual entre

ñado parado en medio del campo debajo

“papi”, “papá” y “padre” es también, tampo-

de unos enormes cables de alta tensión.

co por azar, el nombre del documental del

Esa voz fugaz pero que siente a menudo, lo

director Rubén Plataneo. La película indaga

conmociona, lo hace transpirar, le advierte

en la identidad de este extraño ser que pe-

de graves peligros para el mundo o le cuenta

netró en el mundo del arte, pero sobre todo

secretos de complejas conspiraciones que

en las tensiones de la soledad, la creación y

luego dibuja compulsivamente.

la locura.

Pero no es la única voz que en la película

Cuando conoció los dibujos de Brizuela,

lo acompaña. Martín, coordinador del Área

Plataneo quedó impactado. Primero pensó

Cultural y bibliotecario de la Colonia, es el off

que detrás de esas líneas hechas entera-

que reflexiona acerca del choque contracul-

mente con biromes de colores y sin trazo

tural que provocan sus singulares dibujos

había un joven loco de estilo dadaísta. Luego

y visiones sobre el mundo. Una especie de

supo que se trataba de un señor mayor, casi

voz interior que más que respuestas aporta

un anciano, recluido desde hacía años en

preguntas.

un psiquiátrico. Atraído por el humor trágico

Sin idealizar la locura, el director se hace un

de ese artista BIC (que sólo usa birones,

lugar en los márgenes para indagar acerca

se resiste a las pinturas y lápices y modela

de quién es este hombre, pero también para

formas con la ayuda de bajalenguas, algunas

tratar de develar las ranuras de la necesidad

reglas y frasquitos plásticos) quiso conocer-

expresiva. ¿Qué somos los humanos, cómo

lo. Y al encontrar a un ser tan especial detrás

nos representamos? ¿Comunicarnos es una

de esos dibujos decidió comenzar a filmar.

necesidad verdadera? ¿Es lo mismo que

Brizuela fue un artista toda su vida, pero

entender y entendernos? Y el motor de la

recién en ese momento lo suyo empezaba a

película parece coincidir casi sin grietas con

ser considerado obra y para el director había

el impulso desbocado de Brizuela. A él no le

que registrarlo.

interesa la sobreexposición, ni el dinero que

Fue así que la cámara viajó en 2005 con

gana por la venta de sus obras. No lo des-

Brizuela como invitado a la exposición de

lumbran su éxito ni los artistas o coleccionis-

ArteBA. Lo acompañó desde la oscuridad de

tas interesados en hablar de su trabajo. Lo

su soledad a las luces de la capital, desde el

único que le preocupa es si “la gente podrá

interior fantasmal de la Colonia de Oliveros

descifrar los enigmas que traza en el papel”.

al exterior ruidoso de la gran vidriera artística

Por eso al regreso de la feria de arte más

nacional. En el camino se escuchan ciertas

importante del país, no duda en disparar 79


FOTO GASTÓN MIRANDA Tanke Papi Arteón-Espacio INCAA

que se sintió participar de “una gran reunión

obra. Un mapa colorido de signos enigmáti-

de espiritistas” o al ingresar a una galería

cos y caóticos. Brizuela lo mira y se interro-

porteña es capaz de soltar “esto parece la

ga una y otra vez: “¿Podrán descifrarlo?”.

cueva de Alí Babá” y al ver una intervención

Porque, por más extraño que resulte, siem-

donde tres esculturas se desparraman por

pre vivimos entre la necesidad de comuni-

el suelo las mira y deduce: “Están haciendo

carnos y la dificultad de lograrlo.

yoga”. Y es la cámara de Plataneo, casi una extensión de su propio cuerpo, la que tiene

TANKE P.A.P.I., la película

la agudeza necesaria para no dejar escapar

El director Rubén Plataneo entiende a los

esos gestos desopilantes. Tanto que hasta

protagonistas de sus documentales como

por momentos Brizuela parece burlar al

“materia viva en permanente cambio”. Por

mismo realizador que aunque elige esquivar

eso dedica gran parte de su tiempo a seguir-

lo autorreferencial a lo largo del documen-

los con su cámara para registrar tanto las

tal, es empujado por el protagonista hasta

modificaciones excepcionales del transcurso

el centro. Brizuela saluda a la cámara, mira

de su vida como los detalles más mínimos y

directo al objetivo y si el director se tira al

cotidianos. Como lo ha hecho en sus demás

piso para encuadrarlo él también se agacha

trabajos Muertes indebidas, Dante en la

espontáneo, sin prejuicios ni impostaciones.

casa grande y El gran río, en Tanke P.A.P.I.

Es más, cuando un médico de la Colonia le

Plataneo cuenta una historia que invita a ver

pregunta si no lo incomodó que lo siguie-

la vida misma atravesándolo todo. El filme

ran con micrófonos y cámara, él vuelve a

obtuvo el premio para Documentales en so-

sorprender con sus respuestas disparatadas.

porte digital del Instituto Nacional de Cine y

“¿Los muchachos de la cámara? No, ellos

Artes Audiovisuales, la Beca de la Secretaría

me cuidan, son mi servicio secreto”, le con-

de Cultura de la provincia de Santa Fe y el

testó tranquilo. Lo absurdo no pide permiso

fondo a la producción audiovisual del Centro

en Brizuela y cuando ve a una mujer rubia de

Audiovisual Rosario. Se estrenó en junio de

pelo largo sentarse en un bar, mira a la cá-

2011 en el cine Arteón de Rosario y otros

mara y dice: “Susana Giménez”. Y al salir de

espacios INCAA de Capital Federal.

un encuentro con un verborrágico corredor de cereales fascinado con su obra no escatima en sentenciar: “Éste no me dejó hablar”. En la oficina de ese coleccionista los dibujos de Brizuela se ven ante la cámara expuestos como más le gusta a su creador: uno al lado del otro. Así suele pedirle a Fabiana Imola, su curadora, que los exhiba cuando lo invitan a exponer. Uno al lado del otro en la pared, desde el zócalo al techo, los dibujos forman una sola 80


81


JUNIO

FOTO LUCÍA BARTOLINI “Abstracciones / un recorte en la colección del Castagnino+macro” Museo Castagnino

Genealogías e historiografía artística

Reflexiones en torno a “Abstracciones / un recorte en la colección del Castagnino+macro” María Amalia García

La exposición “Abstracciones/un recorte

mericana desde los años 90 en el sistema

en la colección del Castagnino+macro”

artístico internacional ofrece una clave para

inaugurada en Rosario en junio de 2011 en

pensar la identificación del continente con

el Museo Castagnino se suma a un conjunto

una imagen organizada y predecible, lo

de exhibiciones nacionales, regionales e in-

cual comporta significaciones importantes

ternacionales que revisitan el desarrollo de la

para nuestra contemporaneidad. Estas

abstracción constructiva en América Latina

selecciones proponen una representación

durante la entreguerra y la segunda posgue-

del arte latinoamericano que se ubica en

rra. Desde los años 90 las producciones de

las antípodas de los estereotipos marcados

arte constructivo han recibido una notable

por un arte político, primitivista o fantásti-

atención por parte de las instituciones

co, tópicos otrora clave y todavía vigentes

culturales latinoamericanas, norteameri-

en algunos circuitos.

canas y también europeas. Además de

En este sentido, es interesante notar que

la realización de exhibiciones, museos y

esta tendencia y deseo del circuito por la

fundaciones han adquirido estas produc-

abstracción geométrica no se escenifica

ciones para sus colecciones. Asimismo,

exclusivamente en la selección histórica

en las ferias de galerías, el arte geométrico

de la tradición constructiva latinoamerica-

latinoamericano es uno de los puntos de

na (entre los años 30 y principios de los

mayor promoción y ventas.

60) sino que se ha extendido abarcando

Evidentemente, estas configuraciones

producciones contemporáneas. Es posible

readquirieron actualidad en esta primera

distinguir dos líneas principales. Por un

década del siglo XXI. Considerar el auge

lado, el recorte canónico incluye tanto la

que ha alcanzado la abstracción latinoa-

producción uruguaya de Joaquín Torres

García y su taller, las producciones concre-

Me refiero al MNBA, el Malba y Fundación Proa en Buenos Aires, al Museu de Arte Moderna de São Paulo y de Rio de Janeiro y la Pinacoteca do Estado de São Paulo en Brasil, al Blanton Museum Austin, Museum of Fine Arts Houston y al Newart Museum entre las instituciones norteamericanas y a la Fundación Juan March en Madrid, sólo por mencionar las exposiciones más recientes.   En este sentido es importante resaltar la compra por parte del Museum of Fine Arts de Houston de la colección paulista de Adolpho Leirner en 2007.

tas argentinas y brasileñas y el cinetismo venezolano. Por otro lado, existe una fuerte circulación de producciones abstractas contemporáneas que, si bien plantean proximidades formales con las obras histó82


83


ricas, se distinguen, entre otras cosas, por

exposiciones recuperaron su propuesta cura-

el cambio de materialidad y la ausencia de

torial: establecer una relación de anteceden-

programas y de justificación terminológica.

te, genealógica y, por ende, legitimadora de

Esta continuidad de las tradiciones cons-

ciertas obras de los 90 y el arte concreto.

tructivas es verificable en la producción

Ahora bien, ¿por qué Basualdo decidió

artística contemporánea argentina, brasile-

retomar el título del conocido ensayo

ña y venezolana, tres países en los cuales

“Ornamento y delito” de Adolf Loos, apareci-

la modernización cultural durante los 50

do en 1908, para titular estas exposiciones?

fue entendida en clave abstraccionista. En

Leer algunas ideas de Loos (“El ornamento

estos casos, la producción actual se pre-

es fuerza de trabajo malgastada y por ello

senta como una visión complementaria del

salud malgastada.”) junto a las obras de

primer recorte aunque también se destacan

Jorge Gumier Maier y Omar Schiliro genera

las acciones de retroalimentación entre am-

tensiones: se propone una relectura de la

bos enfoques poéticos.

modernidad que enfatiza la ironía sobre las

En el caso argentino, es posible establecer

programáticas utopías. En los textos de los

una genealogía que enlaza el concretismo

catálogos de las tres exposiciones, Basualdo

porteño de los años 40 y 50 con un conjunto

denuncia el desconocimiento general de las

de obras de artistas activos a mediados de

vanguardias latinoamericanas a la par que

los 90. El inicio son las tres exposiciones

enlaza este conjunto de obras de artistas de

organizadas por Carlos Basualdo a mediados

los 90 con el concretismo y neoconcretismo.

de los años 90: “Crimen es Ornamento” en

Nos propone un ejercicio doble: “recrear

el Centro Cultural Parque España de Rosario

de un modo crítico un pasado de aparien-

en septiembre de 1994, en la cual participa-

cia irreal al tiempo que se lo piensa desde

ron Fabián Burgos, Nicolás Guagnini, Fabio

un presente igualmente lejano y distante”.

Kacero, Jorge Gumier Maier y Pablo Siquier.

Encuentra en las obras expuestas de estos

Esta muestra se presentó un mes después,

artistas “referencias a un uso del saber

en octubre de 1994, en la galería del Centro

artístico que puede ser rastreado en el con-

Cultural Ricardo Rojas de Buenos Aires; a los

cretismo argentino. Pero se habla, se callan,

artistas ya mencionados se agregaban allí

otros secretos. Se escenifican restos, ruinas,

Graciela Hasper y Omar Schiliro. La tercera

ornamentos”.

exposición –“The Rational Twist”– realizada

Me interesa analizar la idea de un “uso del

en la Galería Apex Art en New York en 1995,

saber artístico” como un modo de establecer

estaba integrada por todos estos artistas e

vinculaciones cruzadas, dislocadas y traves-

incluía la Pintura 316 (1950) del artista con-

tidas. Gumier Maier realiza una cita directa al

creto-perceptista Raúl Lozza.

más consagrado procedimiento invencionis-

El dispositivo de exhibición propuesto por

ta: el marco recortado. Asimismo, asistimos

Basualdo en las muestras citadas marcó una

a la reactualización de algunas ideas centra-

línea expositiva fecunda. Con el correr de los

Carlos Basualdo, “Crimen es ornamento”, Crimen & Ornamento, Buenos Aires, Centro Cultural Ricardo Rojas, 1994.

90 y de la siguiente década de 2000, varias 84


les del programa concretista: las artes plásti-

articula tanto las líneas planteadas en torno

cas en colaboración con el universo científi-

a abstracción histórica como la abstracción

co y la transformación del entorno humano

contemporánea. Están presentes nombres

entendido desde las posibilidades emancipa-

pioneros como Emilio Pettoruti, Pablo

doras de la arquitectura y el diseño.

Curatella Manes, líderes del invencionismo

Están presentes en muchos de estos artistas

como Gyula Kosice y Carmelo Arden Quin,

(Siquier­, Schiliro, Kacero, Hasper) destellos

Raúl Lozza y Alfredo Hlito, entre otros. Hay

de esa sensibilidad proyectual modernista

obras excepcionales como las pinturas

que escenifica los años 50. En la producción

de Juan del Prete y la de Kasuya Sakai

de Burgos es visible la reactualización de

(tapa del número 1 de la revista Boa de

aspectos representacionales de la ciencia

1958), ambos procedentes de la colección

que se enlazan con las filiaciones episte-

Domingo Minetti. El rosarino Eduardo

mológicas que explotó el arte abstracto.

Serón está representado con valiosas

Estos destellos de identidad trasmutados e

piezas y completa el conjunto, la selección

invertidos (como el negativo y la fotografía)

mencionada de artistas activos en los años

construyen una relectura posmoderna del

90 que ingresan a la colección de Museo

pasado vanguardista.

Castagnino+macro por donación propia y

Me extiendo en el análisis del planteo de

de Fundación Antorchas.

Basualdo porque entiendo que la exposición

La relectura historiográfica a la que he refe-

del Museo Castagnino+macro realiza una

rido queda enmarcada en la primera vista de

operación fundamental en esta línea; no

“Abstracciones/un recorte en la colección del

sólo recupera esta lectura sino que la hace

Castagnino+macro”. Al entrar a la expo-

explícita. En las otras exposiciones en que

sición pueden verse hacia la derecha dos

se siguió dicho modelo no se hizo evidente

obras: Señoras Formas X de Eduardo Serón y

la trama de construcción histórica. Explicitar

una obra de vinilo y goma espuma de Fabio

los discursos que surcan estas producciones

Kacero. Un representante de la tradición y

habilita una mirada que repone la compleji-

otro de los 90 operan como síntesis de las

dad historiográfica que el tema tiene en la

cuestiones anteriormente mencionadas.

práctica artística argentina. En este sentido,

Siguiendo el recorrido en la primera sala se

entiendo que la muestra del Castagnino es

encuentra la producción de Siquier, Gumier

singular ya que asume estas lecturas como

Maier, Jitrik, Guagnini y Schiliro. El final,

parte de la propuesta de exhibición. Si a

esta vez, es el comienzo. En este recorrido

partir de la colección no era posible recons-

queda expuesto metonímicamente no sólo

truir la historia “oficial” de la abstracción en

la historia de la abstracción argentina sino

la Argentina, la relectura de los discursos

también las construcciones de su historio-

en torno al tema da la clave para relanzar el

grafía artística.

problema. “Abstracciones/un recorte en la colección del Castagnino+macro” es una exposición que 85


JUNIO

Muestras bajo la lupa

Terceras jornadas sobre exposiciones de arte argentino y latinoamericano Isabel Plante

Cada vez más las exposiciones forman parte

res y personal especializado de museos, se

de las reflexiones sobre el arte y los museos.

reunieron a intercambiar ideas y experiencias

Estos análisis exceden el abordaje exclusivo

en el Centro Cultural Parque de España, que

de la historia institucional o la obra artística

dirige Martín Prieto. Esta tercera edición de

para poner en foco la instancia de su exhi-

las Jornadas estuvo centrada en el rol de los

bición y puesta en circulación. Dispositivo

museos y los espacios culturales como lu-

diseñado y fenómeno comunicacional

gares clave en la interpretación y la difusión

complejo, la exposición resulta clave en la

del arte. Luego de dos ediciones realizadas

construcción de los relatos sobre el arte y su

respectivamente en Buenos Aires y Córdoba,

historia. En este sentido, su incorporación en

el Grupo de Estudios sobre Exposiciones de

el estudio de la historia del arte repone una

Arte Argentino que desde hace diez años

inscripción y una circulación específica de

dirige María José Herrera e integran Mariana

las obras, y ofrece elementos para reflexio-

Marchesi, Cecilia Rabossi, Fabiana Serviddio

nar acerca de las prácticas museográficas

y Viviana Usubiaga, contó en esta ocasión

actuales. En el ámbito nacional, desde hace

con Pablo Montini como aliado rosarino.

unos quince años a esta parte el proceso de

También sumó los auspicios del Ministerio

profesionalización en el área de la curaduría

de Innovación y Cultura de la provincia

y la museografía, y la diversificación de las

de Santa Fe, la Fundación Castagnino,

investigaciones en historia del arte traen apa-

Asociación Amigos del Museo Histórico, la

rejada una reflexión crítica sobre las exhibi-

Fundación Proa y la Maestría en Curaduría de

ciones de arte en tanto dispositivos, relatos,

Artes Visuales de la Universidad Nacional de

montajes o espectáculos.

Tres de Febrero. Aquí, es oportuno destacar

De este fenómeno dieron cuenta las

la productividad del diálogo entre institu-

Terceras Jornadas sobre Exposiciones de

ciones privadas y públicas rosarinas y la

Arte Argentino y Latinoamericano, que esta

voluntad de motorizar proyectos.

vez se realizaron en la ciudad de Rosario.

La virtud del encuadre de estas jornadas,

Entre el 15 y el 17 de junio de 2011, una

frente a los congresos de historia del arte o

serie de gestores culturales, curadores, his-

los seminarios de conservación de patrimo-

toriadores del arte, educadores, restaurado-

nio artístico, por ejemplo, es que ponen en 86


diálogo a especialistas de diversas áreas.

el Parque Independencia, que presenta una

Así, convergen desde relatos sobre la

museografía renovada para contar historias

experiencia de gestión de obras y museos

urbanas locales a partir de su patrimonio he-

o la concepción y armado de exposiciones,

terogéneo; por último, el Museo Municipal

hasta la reflexión teórica y la reconstrucción

de Bellas Artes “Juan B. Castagnino” algo

histórica de exhibiciones de arte. Si bien

deslucido por la falta de buena cantidad de

estos actores diversos no siempre hablan el

bombitas de luz en sus salas.

mismo idioma, se trata de un intercambio

Durante esos tres días, fueron varios los

que es necesario propiciar pues supone el

ejes temáticos que organizaron las partici-

enriquecimiento tanto de los saberes prácti-

paciones: exposiciones en la construcción

cos como teóricos. La discusión y confron-

del campo artístico; proyectos curatoriales

tación de sus respectivos aportes y puntos

en museos y espacios educativo-culturales;

de vista redundan tanto en el ajuste de los

museos y proyectos de extensión y difusión

problemas y preguntas a plantear por parte

del arte; exhibiciones y estrategias consagra-

de la historia del arte, como de la inscripción

torias o contraculturales; políticas culturales

del trabajo curatorial y museográfico en

en museos y espacios del arte; estrategias

ciertas tradiciones locales o internacionales,

curatoriales y de difusión del arte; y otros

y en este sentido en el ajuste de la pers-

proyectos de colección y exhibición del arte.

pectiva o los supuestos desde los cuales

Este abanico abrió el debate tanto acerca de

se siguen produciendo exposiciones. A su

ciertas propuestas curatoriales realizadas en

vez, estos encuentros también promueven

instituciones centrales y muy promociona-

proyectos nuevos que vinculan instituciones,

das por la prensa nacional, como de museos

en algunos casos, o suman la producción

de menor visibilidad y proyectos de inscrip-

académica al armado de relatos curatoriales.

ción bien local o barrial; y también de exposi-

Combinaciones que en los últimos años se

ciones clave en la historia del arte argentino

han probado muy productivas.

y latinoamericano.

Por otra parte, este tipo de eventos tras-

Es de descatar el esfuerzo realizado por el

humantes por un lado activan el debate

equipo organizador para producir una publi-

sobre casos locales y por otro ofrecen a

cación de las Jornadas desde su primera edi-

los visitantes la oportunidad de conocer

ción. Así, en esta ocasión Guillermo Fantoni

lugares e instituciones de la ciudad que los

estuvo a cargo de presentar las Actas de las

aloja. En este sentido, en mayor medida

Segundas Jornadas, editadas por la Escuela

que las ediciones anteriores, estas Terceras

Superior de Bellas Artes “Dr. José Figueroa

Jornadas incluyeron una agenda de visitas a

Alcorta” de la ciudad de Córdoba y anfitrio-

museos rosarinos: las muy bien organizadas

nadas en 2010 por Tomás Bondone. Los dos

reservas del Museo Histórico Provincial “Dr.

volúmenes publicados hasta el momento se

Julio Marc” (no cualquier museo abre sus

consolidan como bibliografía de consulta,

reservas: dada la poca visibilidad pública que

de modo que esperamos la continuidad del

tienen los depósitos, a pesar de ser clave

proyecto editorial y, con ella, un tercer libro

suelen ser el lugar más abandonado); el

de la colección que registre los trabajos

lindísimo Museo de la Ciudad de Rosario en

presentados en este encuentro. 87


JULIO

88


89


JULIO

FOTO ANDREA OSTERA Sombra de toro, Fabiana Imola Museo Diario La Capital

Dos monstruos Beatriz Vignoli

De entre las excelentes muestras que se vie-

refería concretamente a dos pinturas de su

ron en julio en la ciudad de Rosario, esta cró-

exposición: Desde el blanco (2010 a 2011) y

nica subjetiva, sesgada y en primera persona

Esquizo (2000 a 2010). Me referí en mi rese-

se centrará sólo en dos exposiciones de dos

ña de Rosario/12 del martes 12 de julio “a la

artistas rosarinos: “Transformaciones”, de

idea de la obra posmodernista como un dis-

Rodolfo Perassi, pinturas sobre soporte 3D

positivo de captura proteico y lábil, abierto y

en la sala Trillas del Teatro El Círculo (Laprida

mutante, mercurial e insaciable: un bricolage

1235), con curaduría de Rosa María Ravera, y

salvaje que absorbe, fagocita y refracta toda

“Sombra de Toro”, instalación multimedia de

una personalidad múltiple de intertextos a la

Fabiana Imola, en el Museo Diario La Capital

velocidad de un sueño surrealista” para dar

(Sarmiento 763, subsuelo), con curaduría de

una idea de estos “gigantescos collages que

Fernando Farina.

parecen devorar sistemas solares completos

Es singular el modo en que Rodolfo Perassi

de citas literales”.

construye en madera los soportes de sus

Tanto en el email como en la nota reescribo

pinturas, dándoles contornos de formas irre-

un pasaje de un texto inédito, que fue el ori-

gulares que evocan amebas o islotes, y unas

gen de mi novela Reality: “Y me doy cuenta

ondulaciones como de crestas, cuchillas o

de que extrañaré el sentido del humor de

colinas que hacen fluctuar su espesor. En

mi hermano médico cuando contemplo, por

esto se inscribe en la tradición modernista

última vez, el fragmento de hiedra artificial

tardía del shaped canvas (lienzo con forma).

de alambre y plástico, barata, importada de

“Los cuadros de Perassi son como un capítu-

China, que mi hermano ha colgado de la

lo de Los Magníficos Justicieros que le gusta-

mirilla de su puerta, dando al palier. Es un

ba mucho a mi hermana, donde unas plantas

buen efecto: la hiedra emerge por la mirilla

malignas del espacio se comen a la gente y

como si adentro todo estuviera invadido

los pedazos de gente devorada se traslucen

por un gigantesco ejemplar del vegetal. Me

a través de los tallos. Digo: la sci-fi como

imagino los titulares: Atopia. Vegetal invade

dispositivo de lectura sesgada estéticamen-

vivienda.

Pienso en plantas invasoras del

te del arte en Rosario en julio 2011”, escribí en un mail del 28 de junio de ese año. Me

Editorial Municipal de Rosario, 2004.

90


91


espacio, creciendo a gran velocidad y devo-

así como la clave de un sistema morfológico

rando a la gente hasta que no quede nadie.

de generación de formas) sino que se deja

Me acuerdo que eso pasaba en un capítulo

asociar libremente con la monumental obse-

de nuestra serie favorita, MJ: Los Magníficos

sión de Brizuela por la ciencia ficción.

Justicieros”. Esta ficción reescribe a su vez

Dos monstruos de ciencia ficción, conden-

otro texto, un relato autobiográfico que es-

sados en uno, son claves cifradas que me

cribí en Buenos Aires en 1995, titulado “Los

han permitido leer el arte contemporáneo

amigos del dueño del cielo” (sigue inédito

local: uno es la planta devoradora de aquel

pero publiqué una versión en un blog con el

capítulo de MJ (era, recuerdo, una serie con

título de Lebensraum).

muñecos animados o marionetas) y otro

Curiosamente, el fragmento de novela

es el que protagoniza, desde la conciencia

inédita citado podría funcionar como una

misma de la criatura, al cuento “La sangui-

aproximación a la obra de Fabiana Imola. Allí

juela”, de Robert Sheckley. “La sanguijuela

también lo vegetal está presente “fantasma-

esperaba alimento. Durante milenios había

góricamente en su conjunción de videos que

estado yendo a la deriva por la vacía in-

fluyen y esculturas que dan sombra, creando

mensidad del espacio”, comienza. Ya no

un ambiente de formas biomórficas semi-

recuerdo dónde lo leí, en qué antología,

abstractas que semejan una escritura furiosa

en qué traducción; me lo encuentro en su

e inagotable, aludiendo a lo pulsional de la

versión original en el Online Reader del

vida como lo hicieran sus precursores, los

Project Gutemberg y traduzco de nuevo las

primeros expresionistas” (Rosario/12, martes

dos primeras frases. El cuento se llama “The

16 de agosto de 2011).

Leech”. Se lo puede leer en línea. Estas dos

En esta presentación de “Sombra de Toro”,

figuras de monstruos devoradores son un

a diferencia de la que se mostró en 2009 en

concepto operativo en mi propia producción

la galería Del Infinito, no estaban presentes

literaria y visual. En 1998 (cuando yo estaba

los dibujos de Aníbal Brizuela; sin embargo,

anotando a mano los primeros borradores

creí verlos en los de Imola, en esas furiosas

de lo que después sería Reality) fue la 24ª

abstracciones rojas, verdes y azules que

Bienal de San Pablo, que tuvo como curador

evocan plantas descontroladas en papeles

en jefe a Paulo Herkenhoff, cuyo proyecto

que caen hasta el piso. Estamos en una sala

curatorial estaba centrado en el concepto

subterránea del MDLC, y en pleno invierno.

orientador de Antropofagia, inspirado en el

Lo vegetal insiste, reiterado, en una rama

Manifiesto antropófago (1928) de Oswald de

de verdad; en un video lleno de verdor que

Andrade. Allí el mito del banquete caníbal

es como un río que fluye detrás de la rama;

que desarrolla Sigmund Freud en Tótem y

en los monumentales trazos ásperos como

tabú (1913) fue aplicado libremente por el

ramajes que se abren en rizoma por todas

modernismo brasileño, junto a los relatos

las paredes de la sala. Como si fuera poco,

de la Conquista de América, para pensar un

ahí está esa rama en el centro, cruda.

arte americano que se nutre y vigoriza de

Esta escena obsesiva no sólo contrasta con

las fuentes europeas a las que devora. En

la elegancia de la escultura abstracta de me-

el tercer pabellón de la 24ª Bienal de 1998,

tal en la sala central (esa obra más conocida

el de las Representaciones Nacionales, se

de Imola, donde lo vegetal es más bien algo

encontraba la obra Peletería con piel humana 92


de la escultora rosarina Nicola Costantino,

la más reciente: Desde el blanco.

con curaduría de Edward Shaw. Cuando

Perassi se inscribe en un linaje de moder-

cuatro años después volví de un breve viaje

nismo latinoamericano, que responde a la

al Paraguay con el arte de las misiones

ideología de antropofagia de los brasileños

jesuíticas y franciscanas y las raíces de los

Tarsila de Amaral y Oswald de Andrade.

árboles selváticos en la memoria, y me senté

Para definir la genealogía que vincula al arte

a escribir, mis personajes cobraron vida

de Perassi con el de sus maestros se me

propia como artistas salvajes, parricidas y

ocurrió (tarde, cuando ya había entregado al

fratricidas, que ejerciendo el asesinato como

diario la reseña de su muestra) la categoría

una de las bellas artes descuartizaban a los

de constructivismo rioplatense. Esta catego-

críticos o devoraban al propio padre. Ya en

ría se incluye de lleno en la de modernidad

el arte indígena de las misiones alienta esa

periférica, desde donde Beatriz Sarlo analiza

violencia.

la vanguardia rioplatense y que yo apliqué

De las pinturas-collage de Perassi siempre

en una reseña publicada en Rosario/12 el

me asombró su poética de obra en colabora-

16 de octubre de 2007 a lo que Guillermo

ción: para él no se trata de copiar o reescri-

Fantoni, en Instantáneas sobre el arte de la

bir con el propio trazo la imagen del otro sino

Ciudad de Santa Fe (Fundación OSDE, 2007)

de tomar prestado literalmente, es decir:

llama la “escuela del Litoral”. El crítico de

pedir al colega artista un fragmento (o más

arte Alberto Giudici citó en un libro catálogo

bien un resto o residuo) de su obra e incrus-

de 2008 sobre la obra de Graciela Borthwick

tarlo en la obra propia. Ella después lo rodea,

esta reseña, donde yo decía (muy breve-

un poco al modo en que las células de un

mente y a las apuradas, ya que después de

cuerpo rodean a un invasor extraño. O al

todo es un diario, pero bueno, lo decía) que

modo en que las frases de un texto rodean a

el horizonte común a toda esta “escuela del

una cita entrecomillada. Como estas: “­—No

Litoral” es la obra teórica y plástica del artis-

es una piedra –dijo Michaels. Dio un paso

ta uruguayo Joaquín Torres García. ¿Y qué

atrás. —Una sanguijuela chupa sangre. Esta

tiene que ver esto con Perassi? Pues bien: el

cosa parece que chupara tierra. Y palas”.

Universalismo Constructivo de Torres García

(Robert Sheckley, “The Leech”).

fue el libro que le cambió la vida a Juan

“Esquirlas estalladas de pinturas de Adolfo

Grela, maestro de Perassi. Con un discípulo

Nigro, o de obras gráficas de Mauro

de Torres, el pintor uruguayo José Gurvich

Machado, Norberto Puzzolo, Graciela Sacco,

(1927-1974) se formó Adolfo Nigro, según él

Pedro Sinópoli y Liliana Gastón (por nom-

mismo siempre recuerda. Y no es casualidad

brar sólo los más reconocibles)” es lo que

que el fragmento de Nigro encastre tan bien

contienen Desde el blanco (2010 a 2011) y

en esta red de cazar infinitudes ajenas que

Esquizo (2000 a 2010), según mi reseña de

son Esquizo y Desde el blanco (no recuer-

Rosario/12 del 12 de julio. En una conversa-

do bien en cuál de las dos). El canibalismo

ción telefónica el sábado 12 de noviembre

queda en familia, como diría papá Freud; ya

de 2011, Perassi agrega los nombres (que

que si se sigue el árbol genealógico, cabe

no agotan la lista) de María Suardi, Yuyo Noé

inferir que la obra de Perassi se desayunó a

y Alfonso Castillo, y confirma que Guido

la de su primo.

Martínez Carbonell compró una de las obras,

Me gusta esto del constructivismo rio93


FOTO ANDREA OSTERA Rodolfo Perassi Sala Trillas, Teatro El Círculo

platense porque permite contrastar este

cohesiva de la lógica formal del estilo al que

constructivismo con otros: muy a grandes

denominé constructivismo rioplatense), la de

rasgos se podría decir que a diferencia del

Fabiana Imola es una obra contemporánea,

constructivismo soviético que era racional,

que se sitúa en un lugar radicalmente distin-

propagandista y de formas geométricas más

to frente al paisaje. El paisaje de Imola ya no

bien puras, este es lírico, poético, capricho-

es “post” moderno sino que se encuentra

so, organicista y mucho más divertido. Sobre

más bien en un “después de” lo moderno,

esta heterodoxia da una vuelta de tuerca la

del modo neo regionalista moderno de

obra de Perassi, que a la geometría sensible

pensar el paisaje. En Perassi todavía hay

de un Grela le suma intuitivamente morfo-

continuidades con la obra del Grupo Litoral,

logías dinámicas fractales, biológicas, de

el cual a su vez no rompe totalmente con el

sistemas. Tenemos así la familia sentada a la

regionalismo más tradicional y romántico.

mesa: tres generaciones que conversan.

Hay en Perassi tics formalistas, modos de

Fiel al adagio “no aclares que oscurece”,

construcción del plano a partir del punto y

debo aclarar que “escuela del Litoral” y

la línea que nos hablan de por lo menos tres

constructivismo rioplatense son dos catego-

cosas: que hay un plano, donde se están

rías cuya mutua relación habría que explorar.

generando formas, y que esas formas planas

En primer lugar, se refieren a dos regiones

construyen volumen virtual. En Perassi esto

distintas. Pero –y esto es muy interesan-

se complejiza porque además hay espacio

te– se podría empezar a pensar a Rosario

real. Pero la composición es plana. El con-

como bisagra, zona de cruce o confluencia,

torno del cuadro es el borde de la obra; si

por un lado, de esa modernidad “Litoral”

bien parece a punto de estallar por la tensión

que expresaron los artistas rosarinos del

superficial que lo abruma, es algo así como

grupo Litoral, al que perteneció Grela antes

el último cuadro, todavía un cuadro.

de descubrir a Torres, y por otro lado con la

A diferencia de sus esculturas, que aún son

modernidad “Río de la Plata” que tiene entre

“piezas”, en la instalación de Imola Sombra

sus representantes a Xul Solar, el más origi-

de toro, que es bien contemporánea, el cua-

nal (precisamente a quien analizaba Sarlo en

dro como continente autónomo ha estallado.

esa fotocopia que ahora no encuentro) y por

Se trata de una pintura de campo expandido,

supuesto al más influyente: Torres García, ya

que se desliza hacia el género de la instala-

que el Río de la Plata tiene dos orillas y siem-

ción y entra de lleno en su territorio. El borde

pre es bueno recordarlo, pero sobre todo en

del cuadro no es el borde de la obra sino

esta época veraniega del año.

que el dibujo es un objeto-signo más puesto

Y acá llegamos a Imola. Fabiana Imola y su

en el espacio, y es en este espacio teatral

relación con el paisaje. Si la pintura-collage

donde irradian su sentido estos signos al

3D de Perassi es una obra posmodernista

vincularse entre sí por mera coexistencia.

que se dedica al remix, mestizaje, caniba-

Lo mismo sucede con el video. Es sólo un

lización y apropiación literal de diversos

detalle más de la obra el modo en que el

modernismos (siempre bajo la estructura

video se articula con el ramaje real central, 94


que parece ser el punto donde se anudan

de algo donde sentarse (a mirar la calle los

todos estos objetos-signos: dibujo, video y

espectadores, invirtiendo además la estruc-

rama, los tres con una imagen en común. La

tura funcional del cubo blanco). La obra de

rama real es algo traído desde el lugar al que

Kosuth es una de su serie de pre-investiga-

se hace referencia, una reificación de aquello

ciones, donde reúne un objeto, su foto y su

que se representa y por lo tanto una redun-

definición. Imola reemplaza la foto por un

dancia deliberada.

video y la definición por dibujos. De hecho,

Conceptualmente, la rama señala en direc-

el título de la instalación es el nombre del

ción del problema de la representación.

objeto: la sombra de toro es una planta me-

A una obra pionera del conceptualismo,

dicinal. Pero si la pieza de Kosuth es didácti-

Una y tres sillas (1965) de Joseph Kosuth,

ca y su propósito es elaborar un ensayo “en

remite claramente Sombra de toro, por la

obra” sobre el arte como proposición y como

heterogeneidad de niveles de representa-

tautología, la de Imola es teatral, dramática

ción que insisten en un mismo significado

(la iluminación focalizada en ciertos puntos

explícito. Como se ve, el asunto no es nada

juega un rol fundamental) y parece armar

nuevo, pero lo original acá es (una vez más)

otra escena, que no es la del aula, sino un

el canibalismo que Sombra de toro efectúa

nuevo modo de presentar aquello que se

respecto de Una y tres sillas. Este canibalis-

re-presentaba en el género del paisaje. Hay

mo podría estar mediado por otras obras de

aquí una ruptura total con el paisaje, que re-

neovanguardia locales, como Las sillas (1968)

inventa su origen, desde la misma voluntad

de Norberto Puzzolo, que devuelve con in-

inicial de enunciar un lugar.

genio la silla de Kosuth a su función original 95


JULIO

FOTO ANDREA OSTERA Marcia Schvartz, “Pasionaria” Espacio de Arte Fundación OSDE

Marcia Schvartz: Pasionaria Notas sobre una exposición

Guillermo Fantoni

Su apasionamiento por la pintura y sus

sido señalado y a fuerza de interrogar su

firmes convicciones ideológicas, la intensi-

pintura descubrió vectores que –más allá de

dad que emana de su obra y la defensa de

los personajes extraños y los habitantes de

la libertad creadora, son razones lo sufi-

los márgenes, de las flores obsesionantes

cientemente valederas como para fijar la

y los estampados lujuriosos, de los paisajes

atención en Marcia Schvartz. En ese sentido,

tropicales y las aguas cargadas de historias–,

sus reiterados posicionamientos, donde las

conducen al corazón mismo de la biografía

variables estéticas resultan tan importantes

de la artista. Un recorrido de vida que es

como los componentes éticos constituyen

también la dura experiencia colectiva ancla-

uno de los tantos fundamentos que im-

da en un pasado reciente que abunda en

pulsan a frecuentar sus realizaciones y su

desapariciones y desplazamientos, olvidos

pensamiento. Desde hace cinco años, María

y violencias, pero que también concitó y

Laura Carrascal lleva adelante una investiga-

sigue concitando resistencias y solidarida-

ción sobre algunos aspectos de la obra de

des, valores indeclinables e impulsos vitales.

Marcia Schvartz, dándose como estrategia el

Esta saga de escritos –producto de una

análisis de los pequeños indicios y detalles

actividad investigativa sobre nuestra historia

para adentrarse en las diversas dimensiones

del arte con un fuerte sentido regional y una

que convoca su recorrido en el campo del

orientación latinoamericana, de una historia

arte. A través de estas exploraciones surgió

centrada en los artistas y sus obras dentro

una saga de escritos que ponen el acento

de la trama social, de una construcción

en cuestiones tales como la historia y las

hecha de fragmentos y señales a veces im-

perspectivas de género, la vida y la muerte,

perceptibles, de imágenes, voces y textos–,

la naturaleza y el artificio, la presencia de las

fue lo que inicialmente atrajo la atención

flores y las telas estampadas, los nexos con

de la artista, generando acercamientos con

los grandes modernistas y con las artistas

la investigadora y breves viajes a Rosario.

mujeres, entre ellas sus entrañables amigas,

También fue lo que posteriormente devino

Liliana Maresca e Hilda Fernández. Así, enla-

en “Marcia Schvartz: Pasionaria”, la mues-

zando estas variables, María Laura Carrascal

tra que la Fundación OSDE albergó en su

reparó sobre aquello que en la obra no había

Espacio de Arte de Rosario, entre el 29 de 96


97


junio y el 22 de agosto de 2011, y cuyo título

etnicidad y su geografía, al centro de la esce-

evoca simultáneamente la rara belleza de

na contemporánea.

una flor americana, la exaltación de los sen-

Pablo Suárez, uno de sus pares cuya trayec-

timientos religiosos y políticos y una singular

toria se remontaba a la mítica década del se-

imagen de artista.

senta, la consideraba junto a Raquel Forner

Desde su ingreso al campo del arte en los

como la gran pintora argentina. En un mundo

años setenta y desde su decisivo protagonis-

que hasta hace pocos años era escasamente

mo en la década del ochenta en el marco de

pródigo a la hora de reconocer méritos más

la Nueva Imagen –una versión de los desa-

allá del círculo de artistas varones, se trata

rrollos transvaguardistas y neoexpresionistas

de un gesto revelador. En los años noventa,

que en Europa y los Estados Unidos volvie-

Suárez veía a Marcia Schvartz como reali-

ron a recuperar la pintura y los fragmentos

zadora de una pintura que transgredía no

de la historia–, Marcia Schvartz no ha cesado

sólo la frialdad y contención de las nuevas

de gravitar en el horizonte del arte argentino

versiones del conceptualismo y el minimalis-

con una intensidad inusual, y, lejos de decre-

mo sino también el hedonismo y el carácter

cer como suele ocurrir, ha aumentado consi-

decorativo de las producciones más visibles

derablemente al punto de convertirse en una

y celebradas. Sin embargo, esa pintura

referencia ineludible en el arte del presente.

jugaba con una imagen y una temperatura

Si bien sus inicios estuvieron ligados a la

cromática que la posicionaban de otra mane-

pintura alemana de entreguerras y luego al

ra en el clima cultural deliberadamente pop

expresionismo vienés, paulatinamente su

de la época. En un momento donde la línea

obra se ha nutrido de las referencias más

divisoria entre arte alto y cultura de masas

diversas, incluso de aspectos tangenciales

se había vuelto poco relevante, ella realizaba

al mundo del arte. Una cuestión que como

obras que de manera ejemplar difuminaban

otros tantos aspectos y tensiones la tornan

esos límites. Las audacias cromáticas y

particularmente atractiva: la frecuentación

formales de Schvartz coincidían con las de

de la historia y el interés por el presente, la

Suárez, quien sostenía que el gran desafío

vinculación con las grandes tradiciones de

de la época era “producir el extrañamiento

la pintura y el gusto por la cultura popular,

desde la pintura y la escultura” y que en vez

la atención puesta en los géneros y proce-

de “pintar apasionadamente” había que “pin-

dimientos del arte y la incorporación de los

tar la pasión”. Como Suárez, Schvartz pinta-

materiales y las formas de la cultura masiva

ba y sigue pintando la pasión. Pero también

que impera en las grandes ciudades. Y es

apasionadamente, no en el sentido de un

justamente desde la cosmopolita y vertigino-

expresionismo y sus procedimientos, sino

sa Buenos Aires, una de las grandes urbes

por el entusiasmo y la pulsión que encuentra

de América Latina, desde donde la artista

en la práctica pictórica. De allí que el título

interpela un aspecto visceral de nuestra

elegido por María Laura Carrascal resulta

historia: la de los migrantes urbanos de las

preciso y verdaderamente certero respecto a

provincias del norte y de los países limítro-

la obra, la poética y la figura de la artista.

fes, trayendo sus mitos y sus misterios, su

Sobre el supuesto de un compromiso de 98


Schvartz con su origen y su entorno, de su

donde más allá de los desnudos y escenas

disposición a subvertir las jerarquías estéti-

en la intimidad siempre aparece la remisión

cas, de su permanente revalorización de las

a la condición de artista y al oficio de pintar a

manifestaciones y personajes populares,

través de la presencia de telas y caballetes,

de su atracción por las mezclas típicamente

de cuadros dentro de cuadros.

latinoamericana, María Laura Carrascal armó

En el segundo, hombres y mujeres, en ver-

un recorrido entre 1970 y 2011 que organizó

dad indios e indias, conviven armónicamente

a partir de tres núcleos: “Hombres y autorre-

con una naturaleza exuberante. Se trata a

tratos”, “Naturaleza salvaje” y “Recuerdos de

veces de una suerte de Edad de Oro anclada

Latinoamérica”. Unos y otros, comprendien-

en un pasado mítico y otras de un presente

do obras realizadas en diversos momentos,

que se pretende eternizar en su carácter pa-

con diferentes técnicas y materiales y con

radisíaco. Pero esa comunión con la natura-

múltiples formatos y soportes: grandes pin-

leza no está exenta de dramatismo como lo

turas de intenso cromatismo, sutiles dibujos

indican las sequías o la turbulencia del agua,

de color difuminado, arpilleras manchadas

los animales o la vegetación amenazantes.

con alquitrán, cerámicas orgánicas y volup-

Sin embargo cuando el viaje por el Paraná

tuosas. Del mismo modo, para dar cuenta

finaliza en el Río de la Plata las rebeliones de

de este vasto arco de tiempo, apeló a obras

la naturaleza ceden paso a las tragedias de

conocidas, otras que han sido poco difundi-

la historia: aquí las aguas bajan turbias y los

das y algunas que hasta el momento habían

fondos se pueblan de fantasmas.

permanecido inéditas. Pero sin duda una de

En el tercero, una serie de cuadros referidos

las estrategias más atractivas de la muestra

al universo de la infancia permite un enla-

ha sido la reunión dentro de cada núcleo,

ce con su última producción: naturalezas

de parejas o familias de obras según sus

muertas con pequeños objetos de las más

afinidades temáticas y formales, establecien-

diversas procedencias: toritos de Pucará y

do diálogos entre el plano y el volumen, la

figuritas del Perú, Ekekos y barcas de totoras

gráfica y la pintura, las grandes escalas y los

de Bolivia, cabezas de la Isla de Pascua, mu-

pequeños formatos.

ñequitas de Cuba, títeres de dedo de Jujuy,

En el primero de estos sectores, Schvartz

hipocampos y sirenitas de Mar del Plata. En

retrata personajes de su entorno familiar y

realidad, ficciones de escala reducida donde

social pero también otros que pertenecen

a través de juguetes y artesanías tradicio-

a un mundo de vinculaciones más amplias

nales, pero fundamentalmente a través de

que se sitúa en las periferias urbanas, en

recuerdos para turistas y objetos producidos

las provincias del norte argentino o en los

masivamente, Schvartz recrea sus propios

países limítrofes. Se trata siempre de figuras

viajes y nuevamente, desde las instantáneas

que interpelan las tradiciones históricas

de la propia biografía, la polifacética y dra-

del desnudo al invertir las relaciones entre

mática vida americana.

creadores preferentemente masculinos y modelos mayoritariamente femeninos. A esto se suman sus numerosos autorretratos 99


JULIO

FOTO LAURA ESCOBAR Presentación de Folios Museo de arte contemporáneo de Rosario

Folios, un archivo de gráfica cultural latinoamericana

medio ideal para la difusión de su archivo, cuya finalidad es profundizar en el área del diseño cultural, buscando los puntos de encuentro y desencuentro entre los diferen-

Laura Escobar y

tes países del continente iberoamericano.

Fabián Muggeri

La propuesta de Folios intenta correr el velo y develar aquello que constituye una parte esencial de la gráfica cultural latina. Cuatro preguntas guían la investigación y son entradas posibles para abrir el universo de los diseñadores: 1. ¿Cuál fue su rol como diseñador? ¿Qué decisiones tomó? 2.

En julio de 2011, Folios se presentó en el

¿Cuáles fueron las particularidades del caso?

Museo Castagnino+macro de la ciudad

3. ¿Qué catálogos tuvo como referentes? 4.

de Rosario, gracias a la colaboración de

¿Qué diseñadores influyeron en su trabajo?

Anuario. El encuentro estuvo dirigido a

¿Por qué?

artistas, profesionales del diseño gráfico,

Los registros abarcan distintas tipologías

curadores, editores de libros y público en

editoriales como el libro de arte, el catálogo,

general, y propuso una reflexión sobre las

el catálogo de catálogos y el libro de artista.

experiencias editoriales para instituciones

Las piezas que se analizan, van más allá de

culturales vinculadas a las artes visuales.

la obra y del artista en sí mismo, es decir,

Desde 2010, Folios se dedica a la recopila-

conforman una selección de ediciones cons-

ción y difusión de casos de diseño cultural

truidas a partir de una estructura narrativa

con epicentro en Latinoamérica. Su enfoque:

propia.

entiende al diseño como un verdadero gene-

Durante el encuentro en el Museo

rador de dispositivos editoriales, catálogos y

Castagnino+macro, se proyectaron entre-

libros de arte, que aportan a la comprensión

vistas de diseñadores de Buenos Aires y de

simbólica del lenguaje artístico. En este

Rosario, para generar el debate y establecer

sentido, el diseño se vuelve una herramienta

un acercamiento donde la audiencia pudiera

privilegiada de comunicación que facilita el

participar de “la cocina” del diseño editorial

acercamiento de los individuos –participan-

aplicado a publicaciones artísticas. Entre

tes de la sociedad–, a las distintas herme-

los casos recopilados, se proyectaron las si-

néuticas que integran el mundo del arte.

guientes entrevistas: Alejandro Ros (Buenos

Sobre esta perspectiva, el archivo amplía la

Aires), quien explicó el diseño de Cambre

comprensión del diseño gráfico y posibilita

(Buenos Aires, 2008), un libro retrospectivo

nuevos diálogos que articulen el trabajo

sobre la obra del artista plástico Juan José

artístico y el diseño: una síntesis que abre el

Cambre; Marina Naranjo (Rosario), introdujo

campo a un nuevo lenguaje.

la obra de Rubén Naranjo a través del libro

Folios opta por el formato del video como un

Santa Fe: el paisaje y los hombres, editado 100


por la Editorial Biblioteca Vigil en 1971;

arte argentino de la década del 90; y Estudio

Marta Almeida (Buenos Aires), comentó los

Abierto. Experiencias de Arte y Cultura

pormenores del diseño de La verdad inútil

contemporánea (GobBsAs, 2006), el libro-ca-

(La Marca Editora, 2006) que realizó junto

tálogo publicado por la Casa de la Cultura de

a Alejandra Bliffeld y Laura Escobar para el

la Ciudad de Buenos Aires; respectivamente.

artista Res; Diego Bianchi (Buenos Aires),

Por último, el destacado artista Juan Carlos

mostró el proceso de trabajo (concepto y

Distéfano (Buenos Aires), repasó su expe-

diseño) de Si yo fuera el invierno mismo, el

riencia al frente del equipo del Departamento

catálogo de Guillermo Kuitca para 52ª Bienal

de Diseño del Instituto Torcuato Di Tella.

de Venecia (Italia, 2008) que compartió con

En su entrevista, Distéfano contó detalles

los diseñadores Cecilia Szalkowicz y Gastón

sobre el diseño de catálogos de exhibiciones

Pérsico; Guillermina Ygelman (Buenos Aires),

publicados durante la década del 60 para los

del Estudio Atypica, presentó el diseño de 5

eventos del centro de la calle Florida.

años de Trimarchi (Atypica me edita, Rosario,

De este modo, Folios aspira a la construc-

2006), un libro que compila el trabajo de los

ción de un archivo cada vez mayor y amplia-

artistas y diseñadores gráficos integrantes

do de piezas editoriales del diseño latino-

del evento anual Trimarchi.

americano –que sume a la difusión, estudio,

Por su parte, Fabián Muggeri y Laura

desarrollo y crítica de la profesión– para dar

Escobar presentaron en vivo sus propios

cuenta de los más variados exponentes del

trabajos: Escuetismo (Malba, 2009), el

diseño cultural de América Latina.

catálogo de una exhibición que reunió el 101


AGOSTO

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AGOSTO

FOTO paulina scheitlin X Salón de Diseño Diario La Capital Museo Castagnino

amor de diseño Ana Martínez Quijano

El día 12 de agosto en el Museo Juan B.

y gracia a la existencia cotidiana. Allí está el

Castagnino y con un clima de genuina

Salvavidas, o el Rescate de vajilla deforme de

celebración, se inauguró el Salón de Diseño

Leo Battistelli premiado en 2010, y el primer

del Diario La Capital que cumple diez años

Premio Adquisición de este año otorgado

con esta edición. Ha pasado ya una déca-

a Romina Lampert, por Erre/Trude Objeto

da desde que la Fundación La Capital y el

Lumínico modular, unos portalámparas de

Museo Castagnino+macro organizaron un

gabardina con cremalleras que posibilitan

salón dedicado al diseño de objetos contem-

abrirlas o cerrarlas y también ampliarlas.

poráneos y este nuevo encuentro corrobora,

Cada categoría lleva su premio y el de Accesorios y Joyería lo ganó Tamara

una vez más, el parentesco del diseño con

Lisenberg con un collar de bambú; el de

el arte.

Escritorio fue para Sebastián Aulicio por su

No obstante, se trata de una disciplina –el di-

alcancía Gochu, un cerdito dado vuelta, y

seño– que no esconde sino que, por el con-

en la categoría Lúdico/Infantil, Gabriela Di

trario, pone de manifiesto su vocación social

Franco y su Gallina Rodante se llevaron el

y sus fines utilitarios. Fines materiales que si

galardón.

bien son un pecado para el arte considerado

Uno de los objetos más llamativos del Salón

autónomo, independiente, que no está al

fue el Sillón Kómodo de Mauro y Lisandro

servicio de nada ni de nadie, resultan ser en

Arévalo, realizado con los clásicos carritos

gran medida el motivo y la razón de ser del

de los supermercados y ganador del premio

diseño, más allá de la ambición común que

del área Experimental. Hubo menciones

ambas disciplinas podrían llegar a compartir:

para Eugenio Gomez Llambi, Iván López

estetizar y brindarle un placer especial a la

Prystajko, Alejandro Sarmiento y Marina

vida de la gente. En este sentido, el catá-

Massone; mientras algunos productos,

logo que se editó este año y que presenta

como las lámparas de Lampert, fueron

no sólo a los ganadores del Salón actual

designados por una firma para su posible

sino también a los anteriores, rinde debida

comercialización.

cuenta sobre el objetivo de aportar belleza

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FOTO WILLY DONZELLI Trulala (Claudia del Río y Carlos Herrera), “¿Cuánto pesa el amor?” Darkhaus

El jurado del salón estuvo integrado

a quienes creen que el alma pesa 21 gramos

por Mauro Guzmán, Dolores Navarro

y que desaparece del cuerpo con la muerte.

Ocampo (Puro Diseño), Marcela Römer

Lejos, no obstante, de cualquier especula-

(directora del Museo Castagnino+macro),

ción científica, la pregunta indaga cuestiones

Fernando Farina (director del Fondo Nacional

eminentemente poéticas. Las urnas de cris-

de las Artes), Anabella Rondina, (Centro

tal profusamente biselado contienen en su

Metropolitano de Diseño), Gerardo Glusman,

interior un puñado de arroz y así confirman

(Talleres Chicago e Interior) y Arturo Grimaldi

que su función es resguardar el hálito de una

(fundador de la tienda del Malba).

vida amorosa que se extinguió. Por su parte,

Además de los 29 diseños seleccionados

el arroz suscita el recuerdo lejano de esas

para este Salón, el Museo exhibe el resul-

lluvias de granos y los bulliciosos augurios

tado del programa Artistas e Industrias, el

de felicidad destinados a las parejas de

proyecto de residencias para artistas que

amantes. Con el máximo esplendor y su

lleva adelante el Museo Castagnino+macro

enigmática y silenciosa presencia, las obras

en colaboración con industrias como la

glorifican un amor que ya no está.

Cristalería San Carlos. Las obras de Mónica

La memoria tiende a tornar borroso el pasa-

Van Asperen que son el resultado de esta

do, pero en la oscuridad del salón, brilla níti-

experiencia. Luego, el amplio panorama del

do el cristal y resplandece el oro. Las copas

diseño concluye con una exposición de las

no sólo ostentan el fulgor de las decenas

alfombras, la cestería, los bordados, obje-

de pequeños diamantes engarzados en su

tos y tapices realizados en los Talleres de

superficie, sino también el de las pequeñas

Transferencia del Centro Cultural El Obrador,

calaveras grabadas en oro puro. Son símbo-

espacio de la zona Oeste rosarina donde el

los que, desde las vanitas (vanitatum omnia,

Museo y la Fundación trabajan conjuntamen-

vanidad de vanidades) del Barroco hasta las

te con la comunidad.

obras actuales del británico Damien Hirst,

¿ Cuánto pesa el amor?

destino inexorable de la muerte.

invitan a evocar la fugacidad de la vida y el El significativo título de la muestra de Trulala (el dueto artístico integrado por Claudia del Río y Carlos Herrera) remite de inmediato a la idea de la muerte. Unas urnas de cristal se yerguen majestuosas sobre sus altos pedestales en la galería Darkhaus, el nuevo espacio de exposiciones de una sofisticada casa de diseño de la calle Corrientes, que cuenta con el trabajo curatorial de Lila Siegrist y Pablo Montini. “¿Cuánto pesa el amor?”, cuestionan los artistas rosarinos, parodiando de este modo 107


AGOSTO

Del Paraná al Gran Canal. Artistas rosarinos en la Bienal de Venecia Silvia Dolinko

La participación de Adrián Villar Rojas en la

tiene gran impacto y el arte argentino gana

54ª Bienal de Venecia motiva una revisión

visibilidad en esos tiempos de fuerte impul-

de la presencia de artistas rosarinos en ese

so al internacionalismo que signaba a los

histórico certamen.

proyectos culturales. Para el artista maduro, esa instancia significa el relanzamiento de su

AB 1962

carrera.

Un artista rosarino expone en la Bienal de

La participación oficial argentina en la 31ª

Venecia. La inclusión de residuos de la

Bienal de Venecia tiene en Antonio Berni un

sociedad de consumo articula su explícita

representante consagrado.

propuesta narrativa que pone en relieve parte de la realidad de un presente que el

***

optimista discurso desarrollista prefiere omitir: las miserias cotidianas de sectores

A principios de junio de 1962, el envío argen-

marginalizados.

tino se encontraba privado de un espacio

El gran tamaño de esas pinturas y grabados

adecuado, ya que la sala asignada de 12 x

es impactante, pero a la vez sus dimensio-

8 metros resultaba claramente insuficiente;

nes resultan problemáticas para el poco

los oficios del “comisario” Gyula Kosice y de

espacio con el que cuenta la producción

Jorge Romero Brest lograron más metros

enviada desde la Argentina, integrada por

cuadrados y finalmente pudo ser presentado

obra de ocho artistas.

en forma correcta.

La histórica falta de un pabellón propio en la

Dentro de las obras expuestas se incluían

Biennale complica la presentación argen-

veinte pinturas-collage y cinco xilografías-

tina; gestiones de último momento logran

collage de Berni sobre Juanito Laguna. Entre

obtener más espacio de exhibición para el

las primeras se encontraban, por ejemplo,

envío nacional y el conjunto puede exhibirse

Retrato de Juanito Laguna, Incendio en el

finalmente sin problemas.

barrio de Juanito Laguna, Juanito Laguna

El Presidente de Italia asiste a la inaugu-

lleva comida a su padre peón metalúrgico

ración y entrega uno de los principales

(que luego pasó a formar parte del patrimo-

premios del certamen al rosarino. Su obra

nio del Museo de Arte Moderno de Buenos 108


Aires), La conspiración del mundo de Juanito

sultaba una novedad, ya que Berni no era en-

Laguna trastorna el sueño de los injustos y

tonces reconocido en el plano internacional;

Juanito Laguna aprende a leer (pertenecien-

se trataba, por cierto, de uno de los escasos

tes actualmente a la colección del Museo

latinoamericanos distinguidos hasta ese mo-

Nacional de Bellas Artes). Si las pinturas-

mento con un Gran Premio en Venecia. Así,

collage habían sido expuestas en la galería

el mayor logro del arte argentino en el certa-

Witcomb el año anterior, cuando Berni

men internacional más relevante implicaba

presentó al personaje de Juanito en Buenos

prestigio simbólico para el artista y convali-

Aires, la obra gráfica resultaba una novedad

dación de un proyecto cultural nacional. La

absoluta, y el foro veneciano fue el espacio

distinción también demarcó un parteaguas

elegido por el artista para su lanzamiento.

en la carrera de Berni: junto a su proyección

En tiempos en los que el grabado ganaba

internacional, la mención al Gran Premio

valoración y legitimidad como disciplina, la

pasó, a partir de ese momento, a formar par-

indagación de Berni con la antigua técnica

te obligada, casi inevitable, de las reseñas y

xilográfica en su combinación con materiales

de las señas particulares del rosarino.

de desecho –maderas, flejes, chapas en la matriz– y en gran tamaño resultaba atípica,

Rosario/Venecia

de alto grado de radicalidad experimental

No era esa la primera vez que un artista

respecto de los parámetros hasta entonces

de Rosario formaba parte de la delegación

conocidos para esta producción. Juanito con

argentina en la Biennale. Ya en 1930, Lucio

pescado, Juanito cazando pajaritos, Juanito

Fontana había llevado a cabo la primera de

bañándose, Juanito pescando con red y

sus múltiples presentaciones en ese ámbito,

Juanito Laguna pescando (estampas de esta

en el que participaría también en 1948, 1954,

edición ingresaron al Museo Municipal de

1958, 1966 y 1968… aunque nunca en re-

Bellas Artes Juan B. Castagnino en 1963,

presentación de su país natal; de hecho, en

por donación de Domingo Minetti y Gonzalo

1966 obtuvo el Gran Premio al mejor pintor

Martínez Carbonell) resultaban sorprenden-

italiano.

tes.

Diez años antes del premio a Berni, Alfredo

Fue llamativo el efecto de las imágenes so-

Guido había integrado el heterogéneo con-

bre el personaje de Juanito Laguna, tanto en

junto de más de veinte pintores y escultores

el público como sobre el jurado internacional

que se presentaba en el foro veneciano

que, en forma inesperada, decidió asignar

luego de tres décadas de ausencia del país

una de las principales recompensas que en-

en el evento. Ese envío de 1952, comandado

tonces se otorgaban en la Biennale: el Gran

por un funcionario de la embajada argen-

Premio en Grabado y Dibujo. La distinción

tina en Italia, también estaba compuesto

ponía el foco en su original planteo figurativo

por Pablo Curatella Manes, José Fioravanti,

y social en el marco de una bienal hegemo-

Eugenio Daneri, Ramón Gómez Cornet,

nizada por una abstracción gestual ya poco

Alfredo Gramajo Gutiérrez, Cesáreo Bernaldo

novedosa. “Lo mío rompía un poco con la

de Quirós, Antonio Sibellino, Raúl Soldi, Lino

rutina de esta muestra”, rememoraría Berni.

Enea Spilimbergo y Miguel Carlos Victorica,

También el nombre del artista premiado re-

entre otros. Aunque los artistas exponían su 109


FOTO NORBERTO PUZZOLO Juanito bañándose (1961) de la serie de Juanito Laguna Colección Castagnino+macro

producción reciente, ésta se asociaba a la

Luis Seoane, entre otros, se incluyeron pintu-

modernidad de los ya lejanos años veinte:

ras de Leónidas Gambartes, Oscar Herrero

obras de autores consagrados por la tradi-

Miranda y Carlos Enrique Uriarte (quien en

ción local que, en términos de las lecturas

1964 volvería a participar en la XXXIIª edición

modernistas contemporáneas, se podía

del evento). En el marco de un envío en el

considerar “anticuado”.

que predominaban las facetas de las tenden-

El texto oficial del catálogo realizaba un fuer-

cias abstractas, se puede leer la presencia

te enlace entre esta presentación artística

de los tres rosarinos miembros del Grupo

y la acción del gobierno peronista. No era

Litoral como una forma de reconocimiento

casual en ese sentido la inclusión de Guido

institucional a su toma de partido moder-

en esa primera representación argentina

nista en su elaboración de una iconografía

de posguerra: era un artista consagrado

localista, a la vez que a su posicionamiento

–responsable de la decoración de edificios

opositor durante los años del peronismo.

públicos, ganador de premios por su partici-

Una de las pocas notas en común entre los

pación en exposiciones internacionales– a la

envíos de 1952 y 1956 fue que en ambos se

vez que legitimado en términos instituciona-

presentaban numerosos artistas, particula-

les –por ejemplo, por su gestión desde fines

ridad también presente, aunque en menor

de 1931 al frente de la Escuela de Bellas

medida, en 1962. Junto a los más jóvenes

Artes Ernesto de la Cárcova, reafirmada por

Rómulo Macció, Mario Pucciarelli, Kazuya

los sucesivos gobiernos hasta 1955.

Sakai y Clorindo Testa en pintura y Federico

La contracara de ese envío lo constituyó la

Brook, Noemí Gerstein y Claudio Girola en

siguiente participación nacional; en 1956

escultura participaba Berni, quien presenta-

Jorge Romero Brest, interventor del MNBA

ba más cantidad de obras.

y jurado seleccionador en esa ocasión,

Romero Brest, nuevamente selecciona-

suscribía en el catálogo de esos tiempos de

dor del envío, tuvo luego actuación como

la autodenominada Revolución Libertadora

miembro del jurado internacional de premia-

un tajante alegato antiperonista. Apuntando

ción. Su programa de apoyo al arte joven y

a demostrar la existencia de un cambio de

modernista sufrió allí una torsión imprevista,

rumbo estético, la actualidad de las propues-

al tener que avalar la distinción a un artista

tas y la apertura del país a nuevas vinculacio-

social hacia el cual mantenía una implícita re-

nes internacionales, presentaba un conjunto

sistencia, pero que había logrado deslumbrar

de artistas de las recientes generaciones,

al resto del jurado (…y todo fuera por el éxito

pertenecientes a las filas liberales y a distin-

del arte argentino). “Berni impresionó sobre

tas tendencias modernistas.

todo por su pintura. No tanto, sin embargo,

Junto a las obras de Manuel Álvarez, Libero

como para darle el Gran Premio de la Bienal.

Badii, Martín Blaszko, Víctor Chab, Ernesto

De modo que cuando los miembros del

Farina, José Antonio Fernández Muro, Noemí

jurado ‘descubrieron’ los grabados encon-

Gerstein, Sarah Grilo, Gyula Kosice, Alfredo

traron que premiando a estos se premiaba

Hlito, Víctor Magariños, Miguel Ocampo y

también a la pintura”, ajustaba Romero Brest 110


111


su relato en posteriores declaraciones sobre

mente vendadas; este conjunto se encontra-

“el caso Berni”.

ba en correspondencia con el que el artista

Poco después de la obtención del Gran

presentara en la primera Bienal del Mercosur

Premio, el artista viajó a París. Allí continuó

realizada ese mismo año.

con la saga de su personaje: por ejem-

En la XLVIIª edición del certamen veneciano

plo, realizó El mundo prometido a Juanito

se podían ver Red Hood, Vendajes, Cabeza

Laguna en el que un lejano hongo atómico

en bulto, entre otras pinturas de García,

sobrevuela las cabezas de los niños en la

montadas en el muy provisional pabellón

villa miseria; la alusión a la amenaza nuclear

argentino. Ubicado estratégicamente en la

daba cuenta del extendido temor de enton-

transitada entrada de los Giardini, se trataba

ces por una eventual tercera y apocalíptica

de una pasarela estructurada en madera

guerra mundial. En la capital francesa, Berni

terciada y chapas de metal (los mismos

también comenzó a pergeñar al personaje de

materiales que habían constituido al entorno

Ramona Montiel; como una de las implícitas

de Juanito Laguna, empleados entonces

consecuencias del premio en Venecia, la

por Berni para dar cuenta de lo paupérrimo

imagen de la prostituta tendría en los si-

del contexto del personaje); las obras se en-

guientes años un particular desarrollo desde

contraban presentadas casi a la intemperie,

el grabado. Convertido en lo sucesivo en uno

expuestas a los efectos adversos del clima.

de los particulares “sellos” de su producción,

El precario, casi basto espacio resultaba

a lo largo de los sesenta el artista se dedicó

poco adecuado para la apreciación de estas

asiduamente a la experimentación con la

sutiles obras; si en términos de montaje le

xilografía, que tan relevante recompensa le

restaba parte de su clima de recogimiento,

había deparado.

misterio y hermetismo a la vez, desde un

Más cercanas en el tiempo, las presen-

sentido visual, la superficie de la madera

cias de artistas de Rosario en la Bienal

terciada de las paredes entraba en compe-

de Venecia siguieron estando sujetas al

tencia con la resolución plástica que particu-

problema de la falta de espacio propio y

lariza a estas pinturas de García, atravesadas

las resoluciones de emergencia. En 1997

por la relación entre la síntesis de las inquie-

Daniel García participó de un envío, curado

tantes formas de las cabezas y las veladuras

por Jorge Glusberg, afectado por la falta

y texturas que aluden a la violencia del paso

de presupuesto y, en varias instancias,

del tiempo y la corrupción de la materia.

del apoyo oficial correspondiente; en esa

La ausencia de espacio propio fue aprove-

ocasión, junto a los óleos sobre tela del

chada en otras instancias, al dar continuidad

rosarino también se incluyeron pinturas de

a la producción que los artistas seleccio-

Ana Eckell y Gustavo López Armentía, quien

nados ya desarrollaban en sus carreras. Tal

realizó además una instalación. El grupo de

el caso de Jorge Orta, también convocado

seis obras que García expuso en Venecia

por Glusberg, quien realizó en 1995 las

se inscribía dentro de su entonces reciente

efímeras y móviles intervenciones lumínicas

serie de dramáticas cabezas, parcial o total-

Light Messenger proyectando –a través de 112


un cañón de imágenes montado sobre una

carcomidas, desgastadas por la acción del

embarcación que surcaba las aguas venecia-

tiempo, se conjugaban distintas tempora-

nas– sus conocidos signos sobre fachadas

lidades a la vez que se ponía en tensión la

de palazzos y edificios emblemáticos de la

relación de la mirada individual y la colectiva

histórica ciudad. Continuaba así su “proyecto

como condensación de una posible historia

luminográfico” basado en un alfabeto de

urbana. Otra sería la tensión suscitada en la

signos de la cultura universal por él reco-

versión de Entre nosotros desplegada por

dificado y sustentado en el uso de nuevas

la artista la mañana del 20 de diciembre de

tecnologías, ya iniciado en 1992 y llevado a

2001, cuando inscribiera los ojos en Buenos

cabo en distintos sitios del mundo; en este

Aires: más precisamente, en la Plaza de

caso, las aguas del Gran Canal actuaban

Mayo y sus alrededores, escenario porteño

como superficies reflectantes de los signos

de manifestaciones y cacerolazos como

de Orta.

expresión del malestar colectivo; escenario

Graciela Sacco –seleccionada por Irma

también de represión y muerte. No se trata-

Arestizábal junto a Leandro Erlich para la 49ª

ba entonces de las “vísperas de un incendio”

edición de la Biennale– desarrolló en el año

sino su mismo acontecer. Los ojos de Sacco

2001 una intervención que prolongaba sus

–los mismos ojos, leídos aquí bajo otras

indagaciones sobre las relaciones entre ima-

miradas– actuaban como testigos y testi-

gen y espacio urbano. Junto a la instalación

monios, en otra temporalidad e historia bien

en el Fondaco dei Tedeschi, su propuesta

alejada de la veneciana de, apenas, cinco

de interferencia urbana ganaba las calles y

meses atrás.

espacios de circulación venecianos: Entre nosotros desplegaba diez mil pares de ojos a

AVR 2011

través de la ciudad, adheridos a las paredes

Un artista rosarino expone en la Bienal de

de edificios y espacios renombrados como

Venecia. La alusión a los restos de la so-

la Piazza de San Marco, pero también a

ciedad tecnológica protagoniza su implícita

puentes, tejados, pisos, anónimas casas

propuesta narrativa que proyecta un discurso

particulares y paredes de callejuelas.

dramático sobre el mundo del futuro: los

“Hablo en esta obra de los límites, de las

efectos de la destrucción de la civilización.

frágiles fronteras que separan lo ‘público’ y

El tamaño de esas esculturas es imponente,

‘lo privado’, del adentro y el afuera”, sostu-

y sus dimensiones resultan un componente

vo Sacco en relación con su propuesta. “Y

capital del proyecto; con meses de antici-

también: ¿Dónde se inscribe la memoria

pación a la inauguración de la muestra, el

de las ciudades? ¿Dónde queda inscripta la

artista –único representante nacional– desa-

mirada de sus habitantes, de sus viajeros,

rrolla junto con un grupo de colaboradores

de sus invasores, de sus expulsados?” En

este site-specific.

la superposición de las impresiones de ojos

La histórica letanía de la falta de un pabe-

sobre transparencias adheridas a la rugosa

llón propio en la Biennale aún incide en los

pintura de las paredes y otras superficies

hechos, ya que la instalación se concreta 113


en un ámbito cedido especialmente, pero

el engranaje del Universo, por no menos de

a partir de las gestiones llevadas adelante

un pequeño chispazo en el continuo espacio-

desde hace algunos años entre funcionarios

tiempo.

de Cancillería y el Ente de la Bienal, este pro-

¿Se cree, seriamente, mejor que el arte?

blema ha comenzado a tener resolución; en

Repiense su situación en el Cosmos.

este contexto, la Presidenta argentina rubrica

Reconsidere su posición.

el convenio de comodato que otorga al país

De humano.”

un pabellón propio de 500 m en la zona del

Degradación; continuum espacio-tempo-

Arsenale por los próximos veintidós años, a

ral; devenir existencial; el ser humano, la

la vez que recorre el conjunto de esculturas.

Tierra y el Cosmos; partículas, carne y arte;

La obra del rosarino produce gran impacto y

angustia. Una tensión entre escalas –física y

el arte argentino gana visibilidad en mo-

existencial– entre lo humano, lo colosal y lo

mentos de revisiones de los alcances de la

universal surca el texto del artista. Muchas

globalización que vienen signando nuestros

de estas proposiciones o provocaciones de

tiempos. Para el joven artista, resulta una

Villar Rojas podrían rastrearse y/o verse ma-

instancia consagratoria.

terializadas en su imponente propuesta para

La participación oficial argentina en la 54ª

Venecia, realizada a lo largo de varios meses

Bienal de Venencia tiene en Adrián Villar

junto con un equipo de asistentes.

Rojas un representante de gran proyección.

Situada en un espacio de 250 m2 dentro de

2

una ubicación destacada del Arsenale, El ***

asesino de tu herencia es una instalación compuesta por once esculturas monumen-

En noviembre de 2010, el Museo de arte

tales, de seis metros de alto y aproximada-

contemporáneo de Rosario publicó la última

mente dos toneladas cada una, “extraordi-

de sus Recetas. Ingredientes necesarios

narias en su realización técnica”, retomando

para mirar una obra de arte contemporáneo;

el testimonio de Eduardo Stupía. Grandes

pocas semanas antes del anuncio de su de-

moles grisáceas construidas en un opresivo,

signación como representante argentino en

casi escenográfico espacio cavernoso, se

la Bienal de Venecia, Villar Rojas suscribía el

yuxtaponen en ellas referencias a distintos

siguiente texto: “Últimamente pienso en el

estratos arquitectónicos, tecnológicos,

arte aburrido sin parar, me preocupa el arte

artísticos, orgánicos: una reedición de los

aburrido. Me angustia.

residuos de la cultura humana, según la de-

Y usted, una cantidad prolijamente ordenada

finición del propio Villar Rojas, que conjuga

de partículas elementales, ¿se cree mejor

ciencia ficción, animación japonesa, escultu-

que esto?

ra abstracta. El destino de la humanidad en

Una pieza de carne en constante estado de

distintos tiempos: ruina y devenir.

degradación que no permanecerá en este

Como un Golem del arte contemporáneo,

planeta, es decir: en este sencillo plano de

estas construcciones realizadas en arcilla y

existencia y en el simple lugar que ocupa en

cemento alternan superficies lisas surcadas 114


por rajaduras con otras zonas de texturas

sobrevolaba al mundo de Juanito Laguna –y

ásperas, ríspidas. Rudeza y suavidad, exceso

a la humanidad– ya hubiera efectivamente

y voluntad de creación radical aparecen

estallado. El mundo prometido como mundo

como características de la obra del artista en

del futuro en una nueva interpretación con-

el texto de presentación de Rodrigo Alonso,

temporánea.

curador del envío, quien también refiere a

La obra de Villar Rojas es impactante.

la teoría de los multiversos en la que abreva

Público general, investigadores, funciona-

Villar Rojas para elaborar “una ficción apo-

rios, curadores, artistas deambulan absortos

calíptica que tiene por protagonistas a los

y casi diminutos entre las esculturas colosa-

últimos seres humanos de la Tierra”.

les. La distinción otorgada por la Futukame

En este caso, las esculturas remiten a

Foundation de Japón –el noveno Benesse

despojos de la sociedad en el fin de la

Prize for Contemporary Art– la reafirma

civilización. Provocadoras respecto de la con-

desde otro reconocimiento institucional.

vención de perdurabilidad a la que aspiran

Se puede sospechar, casi asegurar, que la

ciertos monumentos –y a la pervivencia de

referencia a la participación de este “artista

la cultura que se celebra a través de ellos–,

emergente latinoamericano” en la Bienal de

éstas son obras que aluden a la destrucción

Venecia pasará a formar parte obligada del

y están realizadas a la vez para, finalmente,

resumen sobre sus logros, y estará asociada

ser destruidas al concluir el certamen. Una

indisolublemente con la consolidación de su

particular versión de la tradición del monu-

carrera. Villar Rojas, representante argentino

mento efímero en clave arqueológica como

en la Bienal de Venecia de 2011: jugando

recurso para el arte más contemporáneo;

con los tiempos, también el “caso Berni”

confluencia de mundos e instancias, la arcilla

bien puede servir aquí de testimonio anterior

y el videogame.

para esta futura proyección.

Pocas semanas antes de iniciar su obra en Venecia, Villar Rojas participó en el programa de residencias SAM Art Projects en París; desde ese momento alternó entre ambas ciudades a lo largo de todo el proceso de realización en el Arsenale: en estrecha vinculación con El asesino de tu herencia planificó para los Jardines de las Tullerías otro sitespecific, concretado en septiembre. Como una pieza escindida de la secuencia veneciana, Poemas para terrestres sería la doceava escultura que, desde París, completa esa serie a la distancia; a través de estas obras se pueden imaginar fragmentos de un escenario en el que la amenaza de bomba que 115


AGOSTO

Notas a propósito de 37738. Gastón Miranda Julia Expósito

El video de Gastón Miranda presenta al

la autoficción). En este sentido, el video es

espectador las tareas de una jornada laboral

parte de esta nueva forma que ha tomado el

en una multinacional. En 9:54 min, se resume

cine argentino, porque utiliza como proce-

un tiempo medido por el capital en 8 horas.

dimiento narrativo una combinación entre docu-

El video que a primera vista reviste un natura-

mental, ficción y autobiografía que supone una

lismo clásico signado por el plano/secuencia,

ruptura con las viejas formas, al mismo tiempo,

queriendo representar la jornada laboral en su

significa una acción política de protesta en

totalidad, es irrumpido por pequeños, pero no

tiempo presente, que destruye concretamente

por eso imperceptibles “arranques” de ira del

pertenencias de la empresa. Así el recurso na-

único trabajador que hay en escena, él mismo

rrativo de la autoficción documental le posibilita

Miranda, quien decide ser el protagonista de

realizar un acto político concreto, materializado

su obra.

en esta especie de venganza personal, bajo la

Dado el complejo conflicto laboral que

máscara de la creación artística. Pero a la vez,

atraviesa la situación de los trabajadores de

el mismo acto de violencia que lleva a cabo en

Blockbuster Argentina, Mirada, como emplea-

el lugar de trabajo es una ficción montada por

do (pero también como artista), resuelve llevar

Miranda que le confiere la ocasión para opinar,

a cabo el trabajo audiovisual 37738. Gastón

como artista, sobre las formas de hacer arte

Miranda. No obstante, el gesto no es el de

hoy.

realizar un documental que exhibe de modo

El trabajo de Miranda, al presionar sobre los

lógico los hechos acontecidos, sino que busca

límites de la distinción entre el documental

plasmar un autorretrato fílmico. Recurso que le

y la ficción, se afirma en ese mismo acto

permite, dada la coyuntura política económica,

como una postura de intervención política. No

entrar en la memoria colectiva de la historia

realiza una crónica del conflicto, por ejemplo

Argentina desde la puesta en escena de su

no muestra las “tomas de locales” de otros

experiencia personal.

empleados, sino que expone el conflicto a nivel

El procedimiento creativo que Miranda pone en

de lo privado, de lo personal, pero sin por eso

movimiento, se encuentra inmerso en el proce-

dejar de constituir la puesta en escena de un

so que atraviesa el cine argentino posterior a la

conflicto político. El nuevo cine político, al decir

década del 90, que se destaca por una estética

de Deleuze, elude la presencia del pueblo que

y unos procedimientos típicamente posmoder-

había caracterizado al cine clásico y desplaza la

nos (como el pastiche, la hibridación genérica,

representación épica hacia la representación de 116


los conflictos políticos a nivel de lo privado.

Para esta nueva generación de artistas, el tra-

Miranda consuma su trabajo artístico de modo

bajo significa una nueva forma de la espera. Al

clandestino dentro de su jornada laboral. Busca

igual que en el poema del artista Philip Levine,

el día exacto donde ninguno de sus compa-

“Lo que el trabajo es”, si bien el trabajo sigue

ñeros de trabajo esté presente, monta una

remitiendo a la espera, la forma misma de la

cámara de fotos sobre el “carrito repositor de

espera es lo que ha cambiado. Si en la “espera

películas”, prende las luces del local y comien-

fordista” había grandes filas, en la “espera

za a rodar. Como él mismo explica: “Al momen-

posfordista”, signada por el ritmo del silencio y

to de realizar el video no lo comenté, ya que

de la individualidad, ya no hay más “hermanos”

no quería comprometer a nadie. Busqué el mo-

en las filas a la espera de trabajo, simplemen-

mento justo en el que estaba solo en el local.

te ya no hay tales filas, hay más empresas.

Un domingo a las 9 de la mañana comenzó el

Empresas que se encargan de seleccionar

rodaje, para cerca de las 10.30, terminar la últi-

gente para otras empresas que contratan

ma toma y ponerse a ordenar y continuar como

trabajadores enviados por esas empresas. Hay

si nada hubiese pasado” (Entrevista a Gastón

espera por el despido, que nunca llega, como

Miranda, 2011). En la forma del rodaje propone

muestra Miranda. El silencio de la empresa que

el mismo ritmo que da fuerza a su video: hacer

hace hablar al trabajador que se siente despe-

“como si” él fuese a destruir el local, “como si”

dido. La espera de más silencio, que conduce

hubiera tomado el lugar de trabajo abiertamen-

a este artista a la ficción de la infinita rotación

te, cuando en realidad su apuesta es conspi-

por su espacio de trabajo, que ya se encuentra

rativa, clandestina, saboteadora. El artista y el

desmantelado por la empresa. Sin embargo,

empleado luchan dentro de Miranda, dando

esta espera posfordista es una espera que pro-

una sutileza en sus acciones que le devuelve al

duce violencia, pero es una violencia contenida,

espectador el lugar de lo siniestro y la risa.

solapada, tediosa, atravesada por el largo tiem-

Miranda se afirma a sí mismo como protago-

po de la espera: “Por parte de la empresa no

nista y director de la obra, como (des)empleado

hubo ninguna respuesta ante mi video, lo cual

y artista, como cámara, guionista y sonidista.

continúa con su lógica de desidia y abandono.

La utilización del nombre propio en todos los

Un mínimo llamado de atención por parte de

roles, incluido en el título de la obra (37738.

la empresa hubiese sido importantísimo para

Gastón Miranda), despliega la autoficción docu-

mí como artista y como trabajador” (ibídem).

mental, teatralizando así la misma ficcionalidad

Esta espera interminable conduce a Miranda a

de la identidad. Esta ficción de la identidad

realizar un grito desesperado por una “identi-

parece mostrarnos el carácter fragmentado de

dad” que no llega, porque simplemente el otro

la configuración actual de la subjetividad en el

(la empresa) al que se le reclama se vuelve

mundo del trabajo. Nos habla así de la historia

espectral. La espera silenciosa que presenta

de su país, de la historia de una generación que

el video supone la irrupción de la figura del

experimenta la flexibilización, tercerización y

tedio contemporáneo que se encuentra ligada

precarización laboral, no como deformaciones

a la experiencia del consumo como vedada.

producidas en el interior del mundo del trabajo,

Miranda no tiene posibilidad de consumir, la

sino como características propias de aquello

empresa se la ha negado en el acto de dejar un

que el trabajo es.

local a medio desinstalar, al mismo tiempo que 117


lo ha dejado con un saldo bancario que cuenta

que producía el carro” (ibídem). Asimismo, los

con “un peso con un centavo, y no posee saldo

otros recursos sonoros que aparecen, como el

en dólares”.

ruido de las películas cuando son repuestas en

El cuerpo cansado de Miranda, del trabajador,

las góndolas, y el ruido de películas y carteles

reproduce la acción del trabajo aún sabiendo

cuando Miranda los arroja al suelo, muestran

que el trabajo ha terminado. Sin embargo, a

este registro sonoro que quería conservar. El

ese cuerpo aún le restan fuerzas para producir

ruido cotidiano del local se agiganta frente a

pequeñas intervenciones destructivas que le

la ausencia de los empleados, de los clientes

otorgan la posibilidad de liberarse, para en el

que como producto de la quiebra dejaron de

mismo acto volver a quedar signado por la

concurrir al local. Ruido de objetos y suspiros

rutina laboral. El protagonista del video, aunque

del propio Miranda, son los sonidos que con-

encuentra pliegues y pequeñas fracturas no

forman el film. La voz, en un visible esfuerzo de

abandona jamás su secuencia de trabajo, y

economía, sólo se presenta bajo la reproduc-

completa su jornada laboral comenzando y

ción de una grabadora, y cuando Miranda repite

terminando su video con un primer plano de él

dos veces (a la entrada y a la salida del trabajo)

mismo, que en un intento de marcar tarjeta, le

su número de empleado, reproduciendo, así, la

dice a la cámara su número de empleado.

acción antes realizada por una computadora.

La apuesta es la de construir una totalidad, a

Como sostiene Miranda, su primera y última

la vez que romperla a través de pequeños pla-

intención es que la empresa, los compañeros

nos/secuencias e intervenciones que se alejan

y los clientes sean su gran público (ibídem).

de la jornada laboral, mostrando la dislocación

No obstante y pese al nombrado silencio de

del movimiento, del tiempo y del espacio. El

la empresa, el video tuvo una gran aceptación

video exhibe un uso del plano/secuencia, no ya

entre los ex empleados de Blockbuster y un

como una unidad temporal, espacial y narrativa

gran número de clientes. Además cuenta que

sino más bien como índice de la imposibilidad

“los ex empleados del país entero se mostraron

de pensar al cine sin cortes y rupturas, a pesar

orgullosos de esta realización que ‘denuncia y

de que la continuidad quede restablecida en

resignifica un momento doloroso para todos de

el resultado gracias al montaje. En efecto, el

una manera creativa’, como comentó Matías,

montaje que realiza Miranda es heredero de las

un compañero de Rosario, y una compañera

nuevas lógicas del mundo del trabajo que han

de Buenos Aires que me describió su alegría

subvertido los supuestos fordistas y taylorista:

diciéndome que era un ‘genio total’ y que se-

serialización y cálculo del tiempo y el movi-

guro que el video ‘iba a hacer que nos paguen

miento. El audio del video circula dentro de

todo lo que nos deben’ y que creía que yo era

esta misma disolución de los supuestos fordis-

el ‘vocero de todos’” (ibídem).

tas. El sonido es convertido en ruido maquínico

Junto con esta amplia aceptación del video

que surge del carro de reponer películas que en

por parte de sus compañeros de trabajo y de

ese momento funciona como trípode y carro de

algunos clientes, el trabajo tomó a fines del

travelling para la cámara. De este modo, sumer-

año pasado y a mediamos del corriente un giro

ge al espectador en el ruido que vivencia un tra-

impensado para el propio autor: 37738. Gastón

bajador de Blockbuster, como Miranda declara:

Miranda fue proyectado durante dos meses

“Quise que quedara algún archivo de ese ruido

en el Museo Castagnino, ganando el Cuarto 118


Premio Adquisición Fondo Nacional de las Artes

este sentido, Miranda penetra en el imaginario

($ 4.000), luego un mes en la Galería de Arte

colectivo en ese acto anárquico revulsivo

Darkhaus en la ciudad de Rosario y proyectado,

que produce la identificación del lugar del

a sala llena, en el 18° Festival Latinoamericano

trabajador común que un día decide salirse

de Video Rosario en el marco de la “Muestra

de su situación de oprimido. En este sentido,

competitiva” recibiendo una “mención especial:

creemos que el gesto de Miranda se inscribe

por la utilización del registro documental como

en el universo del director Alex de la Iglesia

manera de interpelar al espectador desde una

en su satírica película Muertos de risa, donde

problemática real”. Además fue convocado

sus dos personajes protagónicos se vuelven

por distintos medios locales y nacionales –en

famosos por darse cachetadas. Las “macanas”

formato diario, radio y televisión– para realizarle

de Miranda (como él mismo las denomina)

innumerables entrevistas por la realización de

y las cachetadas de De la Iglesia, a pesar de

su video. La “noticia” fue titulada en la mayoría

sus diferencias, comparten, de algún modo,

de los casos como “Filmó su propio despido

el impacto de un gesto que pretende mostrar

y ganó premio artístico” (De Moya, Diario El

al trabajador (Miranda) y al artista pobre (De la

Ciudadano, 29 de agosto de 2011). También se

Iglesia) corridos de los lugares aceptados so-

rescató el trabajo de Gastón porque “se jugó

cialmente como propios. La impunidad con que

el pellejo en un trabajo de campo, poniendo el

actúan estos antihéroes hace que el especta-

cuerpo para denunciar la explotación” (Vignoli,

dor en el mismo momento en que se “destripa

Diario Rosario/12, 28 de diciembre de 2010).

de la risa”, sienta el placer de llevar adelante

Este fenómeno tuvo como consecuencia,

ese acto liberador pero a la vez siniestro.

como cuenta Miranda, que “una vez que el vi-

Este video invita no sólo a reflexionar sobre

deo tomó notoriedad pública comencé a tener

el impacto de las transformaciones sociales a

caudal de solicitudes de amistad en Facebook,

nivel mundial en las formas de realización au-

tanto de ex empleados como público en

diovisual en la Argentina, sino que nos obliga,

general que estaba interesado en ponerse en

en ese mismo gesto, a preguntarnos por la na-

contacto conmigo. Se replicaban los comenta-

turaleza misma de tales cambios a nivel global.

rios en mi muro y en el post de youtube: ‘genio

A la vez que, al motivarnos a examinar las trans-

total’, ‘capo’, ‘sos un grande, te vimos con mi

formaciones actuales en el mundo del trabajo,

familia en la tele y te busque por facebook’,

conduce a preguntarnos por las mutaciones en

‘te entiendo, cuando dejás todo en un trabajo

las propias formas de la política. En este senti-

y un día no servís para nada, a mí también me

do, el trabajo es revelador a la hora de indagar

dieron ganas de romper todo, vos tuviste los

sobre las formas actuales del mundo del traba-

cojones para hacerlo’” (ibídem).

jo, del espacio artístico y de la acción política,

La gran aceptación del video por un público

como testimonio de una nueva generación no

masivo responde, por un lado, a que la acción

sólo de artistas sino de trabajadores argentinos

desarrollada en el film, de algún modo, sintetiza

que se han desarrollado en un mundo hegemo-

aquella mítica acción que todo trabajador qui-

nizado por las lógicas neoliberales.

siera consumar; y por otro lado, esa acción es llevada a cabo contra un emblema del capitalismo tan conocido como lo es Blockbuster. En 119


AGOSTO · Repin

FOTO ARCHIVO ANUARIO Demolición de la Capilla del Espíritu Santo del arquitecto Jorge Scrimaglio

Desmantelan una capilla de valor patrimonial Eugenia Langone

Diario La Capital, 22.08.2011

La original capilla del Espíritu Santo ya no

de arquitectura de la Universidad Nacional

ocupa la vieja casona de Buenos Aires 957.

del Litoral (UNL).

La obra había sido construida especialmen-

La capilla, que tenía acceso desde el hall

te para ese espacio, donde funcionaba un

central de la casona, se levantó en un

hogar universitario femenino. La venta del

espacio de apenas 5 metros de largo por 3

inmueble y el proyecto de levantar en ese

de ancho, y otros 5 de alto. Y fue construida

espacio un edificio de departamentos había

con varas de madera de 5 por 5 centímetros.

alertado a arquitectos, que realizaron una

“Tenía una entrada de apenas 50 centí-

cadena de correos, al propio Colegio de

metros, era como una cámara”, detalló

Arquitectos y al Programa de Preservación

Scrimaglio, quien, en función de las carac-

del Patrimonio municipal. Pese a las gestio-

terísticas específicas del lugar, consideró

nes para conservarla en el lugar o trasladarla

“poco probable poder replicar la capilla en

con la asesoría del autor dado su “valor

otro espacio ya que sería una caricatura de

patrimonial”, las varas de madera que con-

la obra”.

forman el oratorio fueron retiradas y llevadas a Pueblo Esther, donde la reconstruirán. El

Una torre

arquitecto Jorge Scrimaglio, su creador, dijo

Alberto Heredia, vicepresidente de la

que no lo consultaron y aseguró que “será

Asociación Obra Cardenal Ferrari, la entidad

una caricatura” de su obra.

civil que tenía el hogar femenino y propie-

La capilla formaba parte del hogar universi-

taria de la casa, confirmó a La Capital que

tario femenino de la Orden Cardenal Ferrari

durante la última semana de julio el oratorio

y había sido encargada al arquitecto rosarino

fue desarmado.

en 1960.

El proyecto para el predio que ocupa la

La obra se concretó dos años más tarde y

casona es una torre de departamentos (con

participaron también alumnos de la carrera

cochera), parte de los cuales serán viviendas 120


privadas y otros tantos quedarán como parte

traslado de la obra, Heredia afirmó: “El arqui-

del hogar femenino.

tecto cobró sus honorarios en su momento.

“Cuando se decidió la construcción del

Pasaron 50 años y no tiene derecho de

edificio, empezamos a evaluar qué hacer con

propiedad intelectual”.

este oratorio porque la intención siempre fue

Luego, Heredia consideró que “se trata de

conservarlo. Entonces, tuvimos comunica-

un capricho, porque el oratorio seguirá exis-

ciones con el Colegio de Arquitectos y con

tiendo en otro lugar”.

el Programa de Preservación del Patrimonio,

Scrimaglio, por su parte, mantiene su posi-

pero no recibimos la colaboración de nadie”,

ción y advirtió que el despiece de la obra se

explicó Heredia.

llevó adelante sin su presencia ni la consulta

Por ese motivo, según explicó, la asociación

a especialistas.

terminó aceptando la oferta realizada por

A su turno, voceros del Colegio de

“una familia de Pueblo Esther que quiso

Arquitectos sólo indicaron que intentarán

hacerse cargo del oratorio y lo reinstalará

contactar a los que ahora están a cargo de la

en un colegio privado que tiene el suyo en

obra “para que el rearmado se realice de la

remodelación”.

mejor manera posible, preservando el orato-

Consultado sobre la negativa del autor al

rio y la posición del profesional”. 121


FOTO WALTER SALCEDO Capilla del EspĂ­ritu Santo del arquitecto Jorge Scrimaglio, 2010.

122


123


SEPTIEMBRE

124


125


SEPTIEMBRE

FOTO LAURA GLUSMAN Ivan Rosado

Irradiaciones de un momento cultural determinado por el flujo electoral Nancy Rojas

Septiembre es, dentro de las agendas, un

En este contexto y con un gran interés en

mes que tiende a mostrar el corolario de los

la realización de acciones integradoras de

sucesos que decretan los lineamientos anua-

otros sectores, las ofertas ajenas al terreno

les de la escena. En este caso, forjando un

institucional manifestaron algunas nece-

clima en el que sobresalen las discusiones

sidades y confluencias marcando la fase

y los gestos catárticos antes que el impacto

preparatoria de futuras revueltas. Lo oficial

de nuevas tendencias o generaciones.

y lo alternativo pronto volverían a entrar

En el marco del desarrollo del calendario

en conflicto en este campo artístico que

electoral, las actividades de este mes en

opera dentro de circuitos debatidos entre

Rosario revelaron la fuerte presencia de un

las categorías de lo autonomizado (gestado

ámbito oficial dependiente de los alcances

en espacios independientes), lo oficializado

presupuestarios.

(concebido en museos y centros de arte) y

Entre el socialismo y el kirchnerismo, la

lo extremadamente localizado (producido

cultura se mostró susceptible a debates

principalmente en casas de artistas y en en-

que no se exteriorizaron por medio de las

cuentros nocturnos). Tres componentes de

expresiones artísticas, sino principalmente

la escena que generaron una atmósfera esté-

en la esfera social y política de los estableci-

tica a través de numerosos relatos, algunos

mientos municipales y estatales.

de ellos prometedores pero, en lo concreto,

Asimismo, el espíritu de la puesta en prácti-

desprovistos de sensibilidad, originalidad y

ca de la democracia que tuvo 2011 se trasla-

calidad conceptual y material. Paralelamente,

dó a ciertos organismos. Durante el período

se vislumbró el crecimiento de una genera-

que nos ocupa, el alumnado de la Facultad

ción joven intermedia que este año actuó

de Humanidades y Artes de las distintas

mayormente fuera de la ciudad.

carreras participó de una serie de jornadas de elecciones, establecidas para renovar

Perspectivas colaborativas

los cargos de dirección y las comisiones

Dentro de este escenario, vale destacar

asesoras. En la Escuela de Bellas Artes los

la importancia que en los últimos años ha

resultados divisaron a María Elena Lucero

tenido la clínica de obra. Un fenómeno que

como directora de la próxima gestión.

en Argentina ha crecido en sobreabundancia 126


127


a partir de este milenio, y que prescribe la

perdurado. Dirigido por Gabriela Gabelich y

necesidad de un lugar para el análisis de la

Román Rivoire, el histórico Pasaje Pam

propia práctica a partir del diálogo con profe-

reunió intervenciones en sus diferentes

sionales y pares.

zonas, invadidas desde el 29/09 por Bruno

Durante 2011, muchos de los espacios y

Guppalli, Juan Sebastián Bruno, Pande

agrupaciones han incorporado a la clínica de

Melón –Malena Cocca y Andrés Yeah–,

obra entre sus propuestas.

Evangelina Cipriani, Adriana Bustos y Juan

Bou, una iniciativa que surgió recientemente,

Barbieratti. A estos se sumaron Llavero,

es un ejemplo claro de estas búsquedas.

una galería itinerante de bolsillo que tuvo

Impulsado por Florencia Laorden, ofrece pro-

como protagonista a Leonardo Cavalcante,

gramas específicos dentro del rango de la

y Minilab, una galería virtual que presentó la

enseñanza de las artes, algunos de los cua-

página web de Lino Divas.

les se encuadran dentro de dicho formato.

Sujeto a otro tipo de perspectiva colabo-

En septiembre aquí se llevaron a cabo dos

rativa de trabajo se halla el colectivo auto-

talleres. Uno coordinado por David Nahón y

gestionado Cero. Poco conocido en ciertos

otro de pintura a cargo de Paola Vega. Este

sectores pero muy concurrido, el 10/09

último, como parte del proyecto “Grado

lanzó el proyecto “Portátil”. Con la ambición

siete”, fue lanzado en conjunto con Cultura

de promover situaciones de producción de

Pasajera con la idea de generar encuentros

participación grupal, Cero puso en circula-

con artistas y apostar al diálogo como fuente

ción objetos diseñados por sus integrantes

de conocimiento y disparador de otros es-

para ser intervenidos por artistas. Este

tímulos al momento de plantear un plan de

lanzamiento se hizo con un multitudinario

producción.

evento nocturno que, como es habitual en

En esta misma línea, Cultura Pasajera tam-

esta residencia, contó con invitados especia-

bién propuso el ciclo “Art talk”, que consistió

les, que coordinaron un set de improvisación

en una serie de charlas con los autores que

audiovisual, y con música en vivo, esta vez a

por entonces se encontraban exhibiendo en

cargo de Luko.

el Pasaje Pam. Florencia Laorden, Luciana

Las inauguraciones de Ivan Rosado también

Rondolini y Gise Cortese encabezaron una

tuvieron lugar en este período. En la misma

de estas conversaciones.

fecha que Cero, abrió sus puertas para otra

Considerando las variables del quehacer

de sus citas: “Unión y Amistad” con Lucas

creativo, estos talleres, clínicas y encuen-

Mercado, Nicolás Domínguez Bedini, Lucila

tros que promueven estas y otras entidades

Inés y Ediciones 22 Porrón. A pocos meses

independientes tienden a cubrir algunos de

de cerrar su temporada, esta casa conservó

los baches de las carreras de arte existentes.

su impronta amistosa y festiva con un perfil

Pero los múltiples intentos aún no llegan a

muy singular, semejante al de un club de

ser suficientes.

arte.

El fomento de la diversidad y el intercam-

En colaboración con los promotores de

bio que han instalado las clínicas es el eje

Triple X Acción mutante –Manuel Brandazza

principal de Cultura Pasajera. Hoy en día, una

y Virginia Negri–, la noche del 22 Ivan

de las estructuras autónomas que más han

Rosado recibió a Fernanda Laguna, que 128


deleitó a los asistentes con una serie de di-

Caterina y Matías Pepe) y Oficina 26, a cargo

bujos y con una performance en la trasnoche

de Pauline Fondevila y Ariel Costa.

en el marco del XIX Festival Internacional

Con propuestas que van desde la clínica de

de Poesía de Rosario. También recitaron

obra hasta la participación en ferias o en

entonces Damián Ríos, Lalo Barrubia, Marina

muestras, el común denominador de estos

Yuszczuk y C. Monti.

grupos y espacios es el interés por fomentar

Una semana después, Evangelina Cipriani,

un hábitat de hermandad e intercambio entre

Pepe Klatt, Magalí Piano, Pilar Almagro Paz,

autores. Algo que Beatriz Vignoli ha registra-

Alejandra Benz, Enzo Campos Córdoba, Irina

do y apoyado asiduamente desde el suple-

Garbatzky y Manuela Suárez también fueron

mento “Rosario 12” del diario Página/12,

huéspedes de esta vivienda que, al igual que

dedicando algunos artículos a sus itinerarios

Cero, se caracteriza por asumir la necesidad

y actividades.

de convertir un lugar doméstico en un paraje

El trabajo de esta profesional resulta

para el cruce relajado entre las artes visua-

indispensable para este contexto que,

les, la música y la poesía.

desde hace un tiempo largo, manifiesta

Con otro enfoque funciona Wip en el Café

enormes carencias con respecto al terreno

de la Flor, basándose en un proyecto cuya

de la crítica periodística. Pese al papel que

lógica integradora sobresalió este año

ha tenido Rosario en la decantación de la

dentro de las plataformas independien-

situación del arte argentino contemporáneo,

tes. Circunscriptos a la idea de promover

hoy en día las prácticas locales no tienen un

experiencias de arte mezcladas con noche,

lugar suficiente en los medios. Un periódico

sus gestores –José Pablo Buzzo, Julio César

de llegada multitudinaria como La Capital

Quinteros, María Luque y Victoria Ciaffone–

aún no cuenta con una página dedicada

convirtieron a este bar en un foco de pro-

semanalmente a las artes visuales desde

ducciones experimentales, implementando

que Fernando Farina dejó esta tarea. En las

el concepto de “trabajo en progreso” e in-

mismas circunstancias se halla el diario El

cluyendo a variados artistas de la ciudad. En

Ciudadano, que entre 1998 y 2000 ofreció

el día de la historieta (04/09), WIP hospedó

uno de los compendios culturales más

a Mosquil. Dibujante que se constituyó en

completos que tuvo esta localidad: el suple-

uno de los grandes animadores de aquella

mento “Grandes líneas” dirigido por Martín

movida underground rosarina que entre fines

Prieto.

de la dictadura y principios de la democracia

Esto da como resultado un panorama pobre

renovó la forma de hacer historieta en la

con respecto a la difusión y el análisis foca-

Argentina.

lizado en las problemáticas del arte actual.

A este complejo circuito, que más que

Más allá de las esperadas notas de Vignoli,

abogar por nuevas y riesgosas guerras de

las pocas publicaciones que circulan general-

imágenes se sostiene y construye a par-

mente deben atenerse a la tarea primaria de

tir de la creación de iniciativas para forjar

ofrecer un punto de vista condescendiente,

relaciones sociales entre artistas, se suman,

aportando una mirada necesariamente des-

entre otros, La Herrmana Favorita (colectivo

criptiva de los hechos. Algo que, salvando

conformado por Ángeles Ascúa, Florencia

las excepciones, ha desplazado el verdadero 129


130


FOTO LAURA GLUSMAN Robinson Savary, “Los Raros” Museo de arte contemporáneo de Rosario

espíritu de discusión y la riqueza conceptual

“Cuánto pesa el amor”, que pudo verse has-

en los textos escritos. Últimamente, el de-

ta el 10/09. Una serie de objetos escultóricos

bate parece haberse trasladado a Facebook

de cristal y oro elaborados en la Cristalería

pero de un modo banal e insustancial.

San Carlos por el dueto Trulalala, integrado

Otra de las grandes falencias de este entor-

por Claudia del Río y Carlos Herrera.

no es la carencia de instancias de comercia-

El lugar que Darkhaus le otorga al diseño

lización del arte, estimulada por el déficit en

en la ciudad es una clara prolongación del

materia de galerías, ferias y remates.

trabajo efectuado primero por el Salón Diario

En los años recientes, los esfuerzos por

La Capital, implementado desde el Museo

agitar una verdadera actividad mercantil

Castagnino+macro, y luego por el Centro

los ha concentrado, aunque sin tan buenos

de Diseño e Industrias Creativas (Cedic), de-

resultados, Cultura Pasajera. Es interesante

pendiente de la Secretaría de Producción de

el camino que ha hecho desde su primera

la Municipalidad de Rosario. Este último se

época en vigencia, cuando en 2005 impulsó

inauguró el 14/09, presentándose como una

el proyecto MIDA (Mercado Inexistente del

incubadora de diseño destinada a impulsar

Arte) planteando algunas acciones a partir de

un lugar de creatividad y labor compartida

la ilusión por recuperar una de los dispositi-

para emprendedores locales. Bajo la coordi-

vos faltantes del campo artístico: el mercado

nación de Mauro Guzmán, este nuevo centro

del arte.

opera como un eslabón indispensable dentro

Cabe destacar también la perdurabilidad de

de este medio, abarcando desde los proce-

la emblemática Krass Artes Plásticas, que

sos creativos iniciales hasta la transforma-

una y otra vez resistió a los embates de la

ción en empresas preparadas para instalarse

economía nacional. Luego de reabrir sus

en la economía y en la sociedad rosarina.

puertas en la calle Urquiza 2030, el 02/09 ha-

La creación del Cedic posicionó al diseño

bilitó una exhibición de pinturas de Norberto

en forma definitiva como un área prome-

Moretti. Un artista que además de concebir

tedora de un desarrollo substancial para

su lenguaje con relación a las tradiciones

la cultura de Rosario. Como una disciplina

pictóricas locales, en todos estos años ha

en vinculación directa y asociativa con las

hecho una gran labor de difusión con su pro-

artes visuales. Algo que se viene delineando

grama de cable El cuento de la buena pipa.

históricamente desde los remotos tiempos

A ambas iniciativas se suma Darkhaus. Una

de la Bauhaus, y que tanto Darkhaus como

galería de arte y diseño fundada en 2010 por

el Museo Castagnino+macro y el Cedic han

Cristian Fernández, Nerina Pizzarotti y Silvia

entendido como uno de los aspectos funda-

Cagnone. Su perfil responde a una búsque-

mentales de la naturaleza colaborativa de la

da ambientacionista para privilegiados que

producción contemporánea.

desean incorporar piezas de autor a sus contextos. Con una programación paralela dedi-

Acciones institucionales

cada al arte, curada por Lila Siegrist y Pablo

En los inicios de este siglo, la escena rosa-

Montini, en su repertorio incluyó la muestra

rina tenía como fuerte principal a las institu131


ciones públicas, que contaban con el apoyo

España y contó con la presencia de reco-

incondicional de la política gubernamental

nocidos profesionales, tales como Ángela

socialista. Situación destacada dentro del

García Blanco, Juan Carlos Rico Nieto y

ámbito nacional a partir de importantes

Américo Castilla, entre otros.

avances, entre los que se hallaba el naci-

En forma análoga, vale destacar las accio-

miento de un museo, el macro, con la mejor

nes que en este período llevaron a cabo

colección de arte argentino contemporáneo

organismos como el Museo de la Memoria,

del país.

el Museo Castagnino+macro, el Centro

El escenario hoy es distinto. El vínculo entre

Cultural Parque de España, la Escuela

lo público y lo privado, que en ese entonces

Municipal de Artes Plásticas Manuel Musto y

estaba levemente consolidado, se halla en

el Museo Diario La Capital.

crisis. Principalmente, porque los museos

Dirigido por Rubén Chababo, el primero

y centros de arte no forman parte de una

continuó con su política de trabajo en torno

industria cultural alentada desde la esfera

al tema de las memorias posgenocidas

estatal. El impulso y la excelencia en la labor

configurándose como un verdadero referen-

y el apoyo brindado por el Ministerio de

te en su tipo. Durante este tiempo, acogió

Innovación y Cultura de la provincia de Santa

al artista argentino Marcelo Brodsky, una

Fe no alcanzan para suplir las exigencias de

charla-debate de Fernando Martín Peña y el

unas artes que piden a gritos la participa-

taller “Arte, política y memoria” a cargo de

ción de fondos privados. En este sentido,

Juan Carlos Romero.

la inexistencia de una ley de mecenazgo en

Entre tanto, el museo Castagnino excedió

esta provincia agudiza las falencias de este

su capacidad de público con la exposición

entorno que en 2011 ha sido condicionado

de Salvador Dalí “Los ojos del surrealismo”,

por la influencia del calendario electoral en

inaugurada el jueves 8. Una muestra criti-

todas las actividades de alcance social.

cada por numerosos colegas, pero recibida

Por su parte, los artistas no tomaron parti-

favorablemente por la prensa local. Se podría

do con respecto a estos problemas. Y los

decir, un éxito de taquilla del que es posible

centros oficiales de arte desarrollaron sus

rescatar una secuencia de charlas, donde di-

programas pese a los déficits presupuesta-

sertaron psicoanalistas, filósofos, críticos, ar-

rios. Esto, sin embargo, no impidió que se

tistas y curadores. Entre ellos, Emilio Bellón,

continuara trabajando en proyectos, algu-

Claudia del Río, Roberto Echen, Carlos Kuri y

nos de los cuales trascendieron gracias a

Pablo Zöpke, que tomaron como puntapié la

alianzas e iniciativas de coparticipación. Este

relación entre subjetividad y arte a partir del

es el caso del VIII Congreso Internacional

surrealismo como movimiento revolucionario

de Museología, al que adhirieron estableci-

del siglo XX.

mientos de esta localidad y del país a partir

El Castagnino también exhibió cuadros de

de la necesidad de generar un espacio de

Jaime Rippa, curados por Marisa Gallo, y la

intercambio de opiniones y pareceres sobre

excelente tercera edición del Premio a las

diferentes perspectivas de la disciplina

Artes Visuales Fundación Andreani, donde

museológica. Se realizó en el Teatro Príncipe

fueron premiados Miguel Harte, Hernán

de Asturias del Centro Cultural Parque de

Marina y Marisa Rubio. 132


El macro, circunscripto a la variedad pero

les desarrollado en la sala “Dr. Juan J. Trillas”

de una forma muy horizontal, habilitó tres

incluyó una muestra de los reconocidos Luis

exposiciones el viernes 9: “Bicicleta de

Felipe Noé y Eduardo Stupía. Con un título

ciudad”, de Leandro Tartaglia, “Los raros”,

jocoso –“¡Me arruinaste el dibujo! Dibujos a

con fotografías de Robinson Savary curadas

cuatro manos”–, esta experiencia contó con

por Teo Wainfred y “Gore. El hombre es esta

la curaduría de Rosa María Ravera. Reunió

noche”. Esta última, una propuesta curatorial

así a tres importantes agentes del arte

de Magalí Pallero, donde se vieron obras de

argentino en un diálogo imprescindible para

Arturo Aguiar, Darío Ares, Marcelo Bordese,

reconocerlos como figuras representativas

Nicola Costantino, Mauro Guzmán, Marcos

de ciertas tendencias actuales.

López, Sebastián Pinciroli, Thaís Zumblick y

Con una oferta educativa acreditada e inicia-

Oligatega. Más allá de la sagacidad de la te-

tivas propias, la Escuela Musto merece ser

mática, el interés de la curadora aquí se cen-

incorporada en este recorrido. Desde 2008,

tró en indagar en la confluencia entre cine y

ha multiplicado sus responsabilidades opti-

artes visuales para hablar de la existencia de

mizando el funcionamiento de sus talleres

una estética gore que halla su definición en

y promoviendo distintas actividades como:

la representación violenta de la sangre y la

edición de material pedagógico, producción

muerte. El espíritu de estas pinturas y videos

de objetos de diseño propio, organización

se extendió a una proyección de cortometra-

de viajes, exhibiciones y encuentros. Dentro

jes en 16 mm pertenecientes a la colección

de estos últimos, se halla la presentación del

de Fabio Manes. Documentales que, con

rosarino Ismael Zuanigh en el hall de ingreso,

previas advertencias al público general,

basada en una instalación con collages.

revelaron el perfil perturbador y ambivalente

Si hay algo que caracterizó en años anterio-

del gore.

res a muchas de las entidades de Rosario,

El Centro Cultural Parque de España también

es el interés por incorporar a artistas emer-

tuvo protagonismo ya que realizó una gran

gentes en sus programas. La “emergencia”

individual de Aurelio García. Bajo el título

como género de las artes ha sido desplazada

de “Sonrisas y lágrimas”, este conjunto de

para dar curso a otros proyectos. La excep-

pinturas inéditas realizadas entre 2009 y

ción la constituyen el Centro Cultural Parque

2011 privilegió las iconografías religiosas y

de España y el Museo Diario La Capital. Sin

políticas, acentuando un rasgo habitual del

embargo, ninguno de los dos creó nuevas

discurso de este autor. “Son obras figurati-

apuestas con la “emergencia” como objeto y

vas, de un humor posmoderno, eruditas pero

sujeto, sino que cada uno continuó con sus

comprensibles para cualquiera con alguna

ciclos ya comenzados en años anteriores.

cultura general en imágenes”, señalaba

Así es como “Joven y Efímero” volvió a estar

Vignoli desde el suplemento Rosario 12.

en cartelera presentando a cinco de sus

Dentro de este itinerario, también se destacó

propuestas seleccionadas, pertenecientes

el Teatro El Círculo, cuyo ciclo de artes visua-

a Elisabet Veliscek, Gabriel Chaile, Azul

Ventura, Maraña Gestual y Towemalmi. Asimismo, el Museo Diario La Capital pro-

Beatriz Vignoli, “Revelaciones y revoluciones”, en Sección Cultura/Espectáculos del suplemento Rosario 12, Diario Página/12, Rosario, 20 de septiembre de 2011.

longó en 2011 el concurso “Menos Treinta”, 133


FOTO LAURA GLUSMAN Mariana Tellería, “La mujer serruchada” Museo Diario La Capital

dedicando una de sus salas a un artista

A estos creadores, Rosario como locación

menor de 30 años que, en esta instancia, fue

les ha propiciado una situación ambigua

tomada por Guillermo Carrasco.

respecto de la vieja condición periférica

El Centro de Expresiones Contemporáneas,

que tenía esta metrópoli. Sin embargo, a

que ahora tiene entre sus ideólogos a

expensas de la inexistencia de un mercado

Roberto Echen, se halla vinculado natural-

y en un medio reticente a la idea de avalar

mente con el rango de la emergencia. Los

producciones que cuesten un poco más que

días 21 de septiembre suelen convertirse en

lo acostumbrado a cuando se trabaja con

un lugar de encuentro preferido por ciertos

modos más tradicionales, hoy se destacan

“emergentes”. Con las actividades gene-

con discursos a veces solitarios pero marca-

radas en torno al evento “Primavera en los

damente consistentes.

galpones”, que abarca la Franja Joven del río

Sólo algunos casos de esta proyección

(Río Paraná desde La Fluvial hasta el Parque

hacia afuera tienen resonancia en el período

de España), formó parte de una zona que

que nos ocupa. Uno de ellos es el Club del

operó como escenario de una festiva jornada

Dibujo, que con la presencia de Claudia del

con espectáculos, recitales, ferias de diseño,

Río participó en el Encuentro Internacional

intervenciones urbanas, zonas para dibujar,

de Medellín 2011, en Colombia. Un proyec-

armar stickers y pintar murales.

to liderado y propulsado por el Museo de

Este paseo ribereño, que se extiende tam-

Antioquia que estuvo vigente entre septiem-

bién hasta el macro, concentra a aquellos

bre y diciembre. Asimismo, Carlos Herrera

transeúntes para los cuales el Paraná es el

y Mauro Guzmán, exponentes rosarinos de

principal testigo de las más diversas expe-

la Beca Kuitca/UTDT 2010-2011, han hecho

riencias al aire libre. Desde una activa pista

circular sus obras más allá del ámbito nacio-

de patinaje hasta un galpón para skaters,

nal. El primero participando en la 12ª Bienal

estos recorridos ofician como señalamien-

de Estambul, Turquía, inaugurada el 17/09,

tos de otras prácticas culturales de la vida

y el segundo en el marco de una residencia

urbana adoptadas por las generaciones más

en Gasworks, Londres, donde realizó varias

recientes.

presentaciones, entre ellas, la performance “Linda Bler: Possessed Artist” el 23/09.

Otras proyecciones de la escena

Mariana Tellería, que también tuvo un 2011

Cabe señalar en esta crónica a aquellos

con acciones concretadas más allá del pe-

artistas que a lo largo del año estuvieron

rímetro de esta ciudad, se destacó en este

trabajando dentro de este campo, pero con

tiempo por llevar a cabo una de las indivi-

otro tipo de proyección. Comenzando con

duales más sólidas del año. Emplazada en el

la presencia de Adrián Villar Rojas en la 54ª

Museo Diario La Capital desde el 21/09 bajo

Bienal de Venecia, varios rosarinos de la ge-

el título “La mujer serruchada”, esta exhibi-

neración que empezó a irrumpir al principio

ción, curada por Fernando Farina, ahondó

de este milenio se anunciaron más allá del

sobre la imagen del ilusionismo. Con gran

contexto local.

desparpajo de su sensibilidad, Tellería jugó 134


con la estructura espacial del museo hacien-

deseo de engañar.

do uso de los supuestos de la magia.

Por este juego con la alucinación y el de-

Poéticas y discutidas entre sí, las piezas de

sarrollo de una construcción transformista

esta gran instalación gravitaron en las salas

de su entorno, es imprescindible remarcar

transformando por completo al espacio en

a esta exposición, que proyecta una posi-

un sinfín idílico a través de signos escritos

ción autoral y decidida desde el arte. Una

exclusivamente para el ojo sensible. Su obra

muestra consistente pero silente, capaz de

habla de los sentimientos, de la posibili-

insertarse en los intersticios menos eviden-

dad y la imposibilidad, de los contrapuntos

tes de una escena que se debate mayor-

formales y materiales pero, sobre todo, de

mente entre la legitimación institucional y la

la intervención y de la ficción como soportes

auto-acreditación de un grupo variado pero

de un lenguaje que se sostiene desde el

hermanado de exponentes. 135


SEPTIEMBRE

Una pequeña reflexión preliminar sobre la libertad (¡Libertad, libertad, libertad!) Aurelio García

Estudié Bellas Artes en la UNR entre los

Mi amigo Homs, obró de curador. Las cir-

años 80 y 90 del siglo XX. La principal ense-

cunstancias obligaban a que hubiera uno y él

ñanza que saqué de esa academia fue que,

era el único terrícola facultado para la tarea:

más que mi derecho, mi obligación como ar-

conocedor del lugar y tolerante durante años

tista sería ejercer obstinadamente la libertad.

con mi obra.

Ser libre hasta las últimas consecuencias

Con los actores que le presenté, Homs

y en un sentido definitivo. Personalmente

produjo un libreto para que estos se lucie-

lo entendí como el mandato “harás lo que

ran. Escribió gags, escenas épicas, remates,

se te cante, pero de forma elegante”. Mis

oberturas y codas. Y no hablo de su esplén-

maestros y amigos han sido y son (los que

dido texto para el catálogo. Hablo del certero

aún viven) artistas libres. Seres libres que du-

ojo curador del poeta que dibuja. Dejó que

rante años han hecho su arte y explotado su

las telas le confesaran su artificio visual y

talento sin ocultarse bajo modas, tendencias

trascartón las puso en exquisita penitencia.

o estandartes ajenos.

A cada una su clavo y su pared. Consiguió

En la muestra “Sonrisas y lágrimas”, exhibida

con similares dosis de lógica y capricho que

durante septiembre y octubre de 2011 en

el coro de estrafalarias pinturas armonizara

las Galerías del Centro Cultural Parque de

en fino equilibrio sus acoples y cortocircui-

España de Rosario, la cuestión ha sido la

tos. Una comedia de enredos con trasfondo

misma. Trabajamos en libertad en un sentido

trágico o una tragedia con risas grabadas.

amplio y profundo. Sin interferencias, con un

El Carajo Sustentable fue su gallardo guión

soporte profesional y humano sin compara-

curatorial.

ción.

136


FOTO Claudio Lorusso Aurelio García, Sonrisas y lágrimas (2011)

La serie que logramos reunir, una vez colga-

ña sección de obra religiosa de mediados de

da en los tres túneles del CCPE, conformó

los noventa dispersa en variadas colecciones

una lista de canciones pictóricas unidas por

y de algún encantador exabrupto arrancado

una no muy consciente pero fuerte trama

de las entrañas de la Colección Homs.

conceptual. Las pinturas concebidas en dife-

Para destacar y agradecer fueron las obras

rente proporción para el ojo, el corazón y la

en colaboración con dos artistas barilo-

mente apuntan a conquistar retinas median-

chenses: la escultora Nadia Guthmann y la

te una enérgica emulsión entre imágenes y

polifacética orfebre del papel Valeria Fiala y

palabras.

sus respectivas versiones tridimensionales

Entre los cincuenta y cuatro trabajos que

de dos de mis pinturas. También aplaudo

conformaron la muestra hubo varios es-

con ardor a Andrea Boffo, la esperpéntica

trenos mundiales, entre ellos una nueva

performer del día de la inauguración, en

serie sobre Evita y Perón entendidos como

aquel rol dramático de novia abandonada

lisérgicos símbolos patrios de una patria

en el altar que imploraba por su amado: un

psicodélica. Hubo obras de los últimos cinco

Cristo Verde que dominaba el segundo túnel.

años, algunas exhibidas con anterioridad

Al parecer la muestra fue visitada por mucha

en Rosario en sendas muestras individua-

gente durante el tiempo que duró. Vaya mi

les en la Sala Trillas del Teatro El Círculo

agradecimiento al exigente público rosarino

(¡Aglutinante!, 2009) y en el Museo de Arte

y también a la crítica especializada por su

Contemporáneo-macro (Fantasía de Colores,

benevolencia al reseñar la muestra en los

2007). Me di el gusto de mostrar una peque-

medios de prensa locales.

137


SEPTIEMBRE

FOTO ARIEL TORTI Tubo entre grúas, montaje de Poemas para terrícolas (2011) Jardin des tuileries, París

La filosofía de los límites Sebastián Villar Rojas

Cuando un Villar Rojas habla con otro Villar

ma manera que un depredador tiene en su

Rojas sobre trabajo se produce algo así

antebrazo un dispositivo de auto-destrucción

como la duplicación de una energía que

por si las cosas van mal, o que los norte-

bien puede alcanzar para destrozar la cocina

americanos decidieron lanzar dos bombas

en la que estamos sentados. La cantidad

atómicas para evitar el exterminio de medio

de neura que se junta es como la calentura

millón de sus hombres. Es imposible que no

de Carrie con sus compañeros en la fiesta

se me aparezca, también, la imagen de Hitler

donde le pasan una filmación enorme de su

en La caída cuando uno de sus generales le

intimidad con el novio o la de ese pibito de

advierte que si Alemania no capitula el pue-

Akira que genera una explosión con la forma

blo alemán se extinguirá en pocas semanas:

de una semi-esfera que desintegra varias

“Si el pueblo alemán se extingue”, responde

manzanas –o a lo mejor la ciudad entera, no

él, “es por su propia debilidad, por lo tanto

me acuerdo. Lo cierto es que si uno habla

no merece vivir: que siga luchando”.

de Villar Rojas a Villar Rojas sobre trabajo los

Pero ¿a dónde va todo esto? La respuesta

hash-tags de la conversación son: límites,

es fácil: una fábrica de muebles. Si todo sale

extremo, sangre, sudor, toneladas, incerti-

bien, en dos años más AVR tiene planeado

dumbre, humanos, tensión, monumentos,

retirarse y montar una fábrica de muebles

moral, universo, fin, extenuación, big, bang,

–o sólo de sillas, no me acuerdo– con sus

forzamiento, de, todo. Forzamiento de todo.

muchachos más fieles, en Villa Gobernador

Cuando un Villar Rojas habla con otro Villar

Gálvez. “Tu modelo no es Godard”, me dijo

Rojas sobre trabajo la conclusión es: forza-

AVR hace poco, “tu modelo es el cine de

miento de todo, y el título de esa conclusión,

Hollywood, remasterizado”. Tiene razón,

La filosofía de los límites. Entre la conclusión

porque cuando escribí “con sus muchachos

y el título hay: materia prima, herramientas,

más fieles” se me vino automáticamente

galpones, dinero, ciudades, instituciones y

a la cabeza el personaje de Tom Hanks en

humanos sometidos a una presión desco-

Rescatando al soldado Ryan. AVR vendría a

munal, brutal, fronteriza, casi delirante, que

ser Tom Hanks y sus muchachos los solda-

a veces incluso amenaza con liquidar los

dos que lo siguen en esa expedición absurda

proyectos sobre la misma marcha, de la mis-

por la que matan y mueren y vuelven a matar 138


139


FOTO ADRIÁN VILLAR ROJAS Operario subido a escultura, montaje de El asesino de tu herencia (2011) 54º Bienal de Venecia, Pabellón argentino - Arsenale Artiglierie

y a morir hasta que, por último, muere el pro-

sí y solo sí porque el otro murió –la escena

pio Tom Hanks a manos del alemán al que él

final, en el cementerio, con Ryan arrodillado

mismo le había perdonado la vida. Paradojas

frente a la tumba, agradeciendo a su cama-

de un buen argumento. Pero lo que quiero

rada, uno más en un mar de cruces blancas,

resaltar es que, en algún punto de la ex-

representa el perdón final del sobreviviente

pedición, esos soldados ya no siguen a su

a sí mismo después de una vida entera de

teniente ni por deber ni por obligación ni

culpa y auto-castigo. Pero si AVR es clara-

por temor ni por interés, sino sólo por una

mente Tom Hanks y “sus muchachos más

extraña forma de amor y de fidelidad que

fieles” los soldados del pelotón de rescate,

surge entre los humanos cuando se some-

¿quién es el soldado Ryan? Las esculturas

ten en grupo a la posibilidad de la muerte, y

que se van desparramando por el mundo y

sobre todo en el extranjero. Las selecciones

cuyo homogéneo destino es la aniquilación,

(del deporte que sea) deben experimentar

de seguro, no.

un sentimiento similar, pero morir es menos

“Vos no hacés arte”, le dijo SVR a AVR en

cierto que en la guerra, la cual además es

una conversación por Skype mientras AVR

una ocasión más democrática –casi todos

se debatía en París con toneladas de arcilla

pueden ir a la guerra– de experimentar esa

y cemento, “vos hacés arte ontológico, cada

clase de amor, de fidelidad y de muerte.

pieza es la demostración de algo, un paso

Todos los que se entregan a la causa AVR

más en la ecuación. Vas camino a algo”. “¿A

saben que, de un momento a otro, pueden

qué?” “No tengo la menor idea.”

morir. A manos de una tonelada de arci-

O sí.

lla, del golpe de un caño estructural en la

Ryan es la ilusión, el objetivo momentánea-

cabeza, o del impacto contra el suelo al caer

mente absoluto que el pelotón necesita para

de un andamio a diez metros de altura. Y

experimentar una y otra vez ese sentimiento

sin embargo no ha habido un solo desertor.

de aventura y de juego con la muerte, pero

Habrá, en el futuro, alguno. Pero en la lógica

también con la vida, con lo más diáfano,

de los límites, el último de estos no es la

puro, remoto e inextinguible de la vida: la

deserción sino la muerte, y en particular

solidaridad, el altruismo, el amor propio y por

la muerte del líder. ¿Será por eso que Tom

el otro, la autoestima, la dignidad, el orgullo

Hanks debía morir para que Ryan sobrevi-

de ser un hombre, la devoción por una patria

viera? En la lógica de los límites, pero sobre

(suena un poco fascista, pero quién dice que

todo en la lógica argumental de la película,

el fascismo o, más bien, las notas que éste

la muerte de uno de los dos es condición

sabe tocar como ideología, no son parte

de posibilidad de la supervivencia del otro.

esencial de lo humano). Hegel dijo que todos

Ambos no pueden volver a casa vivos. Uno

los países deberían experimentar, cada cierto

debe morir y el otro debe narrar la historia.

tiempo, la guerra, la invasión, la conquista,

Ser la historia, encarnarla, vivir sin perdonar-

porque de no hacerlo sus habitantes se

se jamás, hasta el final, el haber sobrevivido   “Dios murió por ti”.

140


olvidan, se acostumbran, se debilitan. La

–su propia mirada. En el caso de AVR, quizás

desmesurada paz los vuelve flojos, avaros,

sea una fábrica de muebles, junto a los

egoístas. Un día, uno de los muchachos, de

más fieles de sus muchachos. En ambos

apellido Gauna, de profesión albañil, se am-

casos, el final del viaje parece ser un camino

polló y se insoló tanto que tuvo que retirarse

alternativo, no elegido, como el de Jesús de

varias horas antes del fin de la jornada de

La última tentación de Cristo, que baja de la

trabajo. Se fue llorando, contra su propia vo-

cruz para coger y criar. Hace poco leí en uno

luntad, obligado por sus compañeros. Eran

de los cuadernos de AVR: “¿Cómo mante-

días decisivos. Días de guerra. Maradona

ner a la familia después de que me retire?

también se fue de algún partido de la selec-

Tenemos que encontrar un oficio. ¿Qué

ción llorando, infiltrado hasta la médula. ¿O

podríamos hacer?”. Me lo imagino en el año

fue en la final de Italia 90, mientras veía a los

2042 revisando una carpeta de pedidos, con

alemanes levantar la copa?

una birome Bic en la oreja, mientras César le

En 2001 Odisea del espacio el final de la

ceba un mate y le da charla. La tarde cae, la

ecuación de Kubrick es una casona blanca,

luz se cuela por una ventana. Ojalá así sea.

con un viejo en bata roja, que agoniza en

Por ahora, en agosto de 2012, tiene un pro-

una cama ante la mirada de un astronauta

yecto en Afganistán. 141


SEPTIEMBRE

FOTO DANIEL GARCÍA Irene Banchero, “Ecuador” Galería Van Riel, Buenos Aires

Tres artistas, tres estéticas Gilda Di Crosta

aunque algunos sin base cierta, parecen sin

Irene Banchero: Ecuador

embargo suspendidos en el movimiento. Un continuum de colores estriados sigue el jue-

Las obras de arte nacen siempre de quien ha afrontado el peligro, de quien ha ido hasta el extremo de una experiencia, hasta el punto que ningún humano pudo rebasar.

go de ese efecto óptico que hace zozobrar a la visión: inmóviles en movimiento. Aquí los objetos operan en la visión no sólo

Rilke

por el modo constructivo de estos sólidos cuya particularidad es la rotación –modo que

Objetos que intentan deslogizar el espacio,

habla de un ejercicio de la paciencia para su

pretencioso e imperativo por su fuerza de

construcción– sino también en lo ilusorio de

gravedad que cifra el equilibrio y la posición.

dicha rotación, de su velocidad.

Objetos que desagregan los sistemas de

Fuera del sistema de la escultura, en sus

representación. Fijeza, densidad, espesor,

márgenes, más cercana tal vez a la artesanía

pesantez, movilidad, liviandad, verticalidad

o al diseño, o quizá desde ese devenir, esta

están dislocados en la pasión de esta volu-

composición de objetos interroga las certe-

metría que no olvida el lugar del vacío.

zas perezosas de las concepciones del arte,

Tornaditos o remolinos miniaturizados,

del espacio, de la geometría.

conos, trompos, cuasi-vasijas, mil-hojas

En la potencia de ese desvío, aparece

torneados constituyen una fenomenología

esta obra inasimilable, descentralizada de

de las cavidades y de la geometría –ejes,

cualquier canon genérico; ahí acontece lo

elipses, círculos, planos en sus diferentes

irreductible de la creación: la experiencia

manifestaciones. Los cuerpos apoyados,

estética. 142


143


FOTO LAURA GLUSMAN Mariana Tellería, “La mujer serruchada” Museo Diario La Capital

Adriana La Sala, Blocky House (2010)

No es un herbario, no son calados. Una fili-

Adriana La sala: Enraizamiento

grana verde, brillante, no es naturaleza muerLa pintura debe suscitar en quien la contempla el deseo de estar en ella.

ta, no es naturaleza viva. Ni jardín ni paisaje. Sin perspectiva, superpuesta una imagen

Guo Xi

sobre otra como un sueño de naturaleza. El cuadro es superficie que duplica superficie, sin grumos, sin espesor. La pincelada

Una porción de mosaicos –soporte del paso,

neta, plena, sólo representa la superficialidad

de lo pasado– hace el cuadro. Las figuras

de la superficie. El espacio interior de la casa

sobre las que se transita cotidianamente en

que se expone en la imagen de la tela es la

la casa son el fundamento.

figuración de la habitación.

Si sostener la vista en el cielo raso evoca

En estas obras, no hay mímesis de lo tridi-

pensamientos de los que resulta difícil salir,

mensional. La composición imaginaria del

detenerla en el piso construye imaginarios

anti-volumen opera como condición primaria

del paso, ensoñaciones de enraizamiento,

de la representación. Nueva infancia de la

diagramas de lo pasado. También cifrado allí,

pintura: pura exterioridad que evoca la intimi-

por qué no, un juego de infancia inventado

dad de lo habitable en la intimidad entre la

como propio pero que todos creen único:

tela y el pincel.

colocar un pie en el centro del mosaico, el

No hay imagen humana que se pueda repre-

otro suspendido para apoyarlo en el siguien-

sentar allí. La humanidad está en la memoria

te pero sin rozar las líneas de juntura. Una

de la mano que produce el cuadro: el trozo

y otra vez se repite el mecanismo hasta com-

de superficie expone a lo abierto el interior y

pletar un recorrido.

su posible habitación queda a la intemperie.

Otra imagen: algunas ramas, algunas hojas.

144


Ese muro falso es la frontera a cruzar para

Mariana Telleria: La mujer

ingresar a ese otro mundo en el que se acti-

serruchada

va la oscilación inquietante entre el deseo de

El primer museo en el sentido moderno de la palabra (es decir, la primera colección pública) habría sido fundado el 27 de julio de 1793 en Francia por la Convención. Entonces el origen del museo moderno estaría ligado al desarrollo de la guillotina.

ver y el miedo a ver. De algún modo, reactiva esa mezcla de miedo y curiosidad, propia de la infancia, que está en las primeras actuaciones sobre el mundo y es el origen de todo conocimiento.

Georges Bataille

Los artefactos instalados reduplican los prodigios de la destreza –o de la torpeza– cir-

Detrás de un muro recortado en un extremo,

cense pero son réplicas fantasmagóricas de

apenas inclinado, construido con cajas pe-

la ilusión que monta esos espectáculos.

queñas, vacías, minuciosamente montadas

Aquí los mecanismos están intensificados

en un solo bloque, que presentan repetiti-

en su cosificación disfuncional. Nadie se

vamente el truco de la mujer serruchada,

atrevería a probarlos, a ponerlos a prueba,

aparecen los artefactos “representativos”

porque se ha leído “La colonia penitenciaria”

del mundo del circo y de la feria. Si en ese

de Kafka. Uno está advertido de los efectos

mundo hay un fondo de tristeza, es porque

y de los principios del despedazamiento. “La

se enfrenta a los niños a su incapacidad de

mujer serruchada” no es una ilusión sino una

hacer magia y a su felicidad mediante el

penitencia posible: la repetición ilusoria de

ilusionismo.

un ilusionismo. 145


SEPTIEMBRE · repin

Gestión Cultural en las orillas Ulises Moset

altísima repercusión, que atraerá a grandes

Club de Fun [www.clubdefun.com], 21.09.2011

talentos musicales, derramando sobre el turismo y la actividad económica en general,

El catalán Mestres Vila nos hace su aporte

pero que al mismo tiempo responda a las

desde el campo de la gestión de organiza-

necesidades reales del tejido cultural. En

ciones.

esas encrucijadas, se les pide a las políticas

Ángel Mestres Vila viene de Barcelona, es

culturales que sean como los castillos huma-

el director de Trànsit Projectes, una orga-

nos, que tengan mucha participación y que

nización dedicada a facilitar el acceso al

tengan mucha visibilidad”, explica Mestres.

capital cultural. Es animador sociocultural,

“Por supuesto que un centro de esas carac-

especialista en planificación estratégica,

terísticas tendrá mucha visibilidad, eso es

gestión cultural y coordinador de políticas

necesario, pero sin el tejido cultural quedará

culturales.

vacío. Este entramado puede aprovechar

Nos encontramos en el marco de una capa

muy bien una estructura siempre y cuando

citación sobre “Gobernanza y participación

se tenga en claro que somos un ecosistema,

en el desarrollo de políticas culturales

y en los ecosistemas uno necesita del otro, y

locales”, organizada por la Secretaría de

ambos tienen un papel fundamental. Uno sin

Cultura y Educación de la Municipalidad de

el otro no podrá hacer nada, por lo tanto ne-

Rosario.

cesitaríamos tener esa capacidad de poder

Luego de una ajetreada jornada para Ángel y

crear una alianza o una complicidad entre el

de un buen pescado a la parrilla a orillas del

tejido cultural, en este caso musical, y lo que

río, café de por medio, nos pusimos a charlar

serán estos grandes equipamientos”.

sobre el universo que moviliza el caudal del

Esa pregunta clave, esa incógnita que tiene

Paraná, sus barcos y su gente. Fue inevitable

alguien que no vive, ni visita Rosario tan

conversar con él sobre una obra como la

frecuentemente empieza a rebotarme. Es

del Puerto de la Música.

real que no existen demasiados lugares

“Realmente, este tipo de obras suponen una

para tocar en la ciudad respecto a la gran

encrucijada complicada para las ciudades.

actividad que hay en la base, en la infinidad

Una encrucijada entre tener un ícono de

de grupos que deciden formar una banda, 146


cualquiera sea el género. Y pienso qué tipo

gestión de lo local respecto a la gestión de

de diagnóstico lleva a la realización del Puer-

lo global, y ejemplifica: “si tengo un buen

to de la Música y cuáles serán los nuevos

equipamiento con una repercusión clara en

desafíos no sólo para gestionar un espacio

el tejido cultural se pueden dar procesos

monumental, sino para construirlo.

interesantes. En una entrevista a Thomas

El gestor catalán piensa un momento y

Krens, quien fuera director de la Fundación

continúa: “Los procesos de construcción

Guggenheim de Bilbao, José Zulaika define

y de administración o gestión son dos

a la ‘krensificación’ de la cultura como una

complejos que tienen que ir absolutamente

política de alto impacto desarrollada a través

de la mano”. Ángel pone como referencia

de franquicias globales, que suelen sufrir

el Palais de Tokio: “cuando se construyó,

momentos de crisis cíclicas cuando tienen

la gente que lo quería gestionar hizo un

que recurrir a grandes eventos, muy costo-

mix muy interesante en el manejo de los

sos, por no haber cimentado un vínculo real

presupuestos de construcción y de gestión.

con el tejido cultural. Esto ha sucedido en

Es importante hacer un plan de usos y una

casos como los del Guggenheim o el Forum

revisión estratégica del costo de funciona-

de las Culturas, realizando grandes eventos a

miento en momentos de mucha actividad y

espaldas del tejido artístico local. Una buena

en instancias de menor intensidad –lógicas

inversión para el futuro del equipamiento y

en este tipo de equipamiento–. Por lo tanto,

para el tejido que se desarrolla sobre él, es

tener ese plan de usos nos lleva a un cálculo

realizar convenios y acuerdos que garan-

de costos que nos hace ver la vida de ese

ticen la participación del tejido musical en

equipamiento haciendo lo que sería tanto

la gestión y en la programación de esas

por un lado la amortización de esos costos

actividades”.

de construcción como lo que sería la gestión

Cuando miramos la maqueta y los folletos

del día a día del equipamiento”.

del proyecto es inevitable pensar en el Ópera

¿Será fácil lograr esa mixtura? Es cierto que

de Sidney, el megacomplejo cultural que se

esta región tiene otras realidades, pero van

alza sobre una bahía en la ciudad australiana,

más allá del grado de desarrollo de cada

pero claramente hay otros referentes en el

economía. Para comparar al Puerto de la

mundo que surgieron en los últimos años.

Música con el Palais de Tokio habría que

“Hay muchos elementos de referencia, algu-

pensar en cuáles fueron los motivos que

nos de éxito. Podemos hablar del ‘milagro

generaron una y otra obra y con qué capa-

del Guggenheim’, que ha sido generador de

cidades contaremos en Santa Fe para que

un movimiento económico y de una gran

el costo del equipamiento no se fagocite a

capacidad de atracción de artistas”, dice

la gestión. ¿Cómo se equilibrarán el monu-

Mestres.

mento arquitectónico y el contenido?, ¿en

“Este ha sido un proceso exitoso, de hecho

qué cosas habría que pensar para que este

muchos quieren imitarlo, pero dependerá

espacio realmente contribuya con la música

de cada caso en particular. No es lo mismo

local?

un museo de arte moderno que uno de arte

En relación a esto, Mestres define que

contemporáneo, ni es lo mismo un audi-

existen tensiones entre lo que sería la

torio, y más particular aún es un auditorio 147


especializado en música. En España se han

que cualquier persona que trabaje en esa

construido muchos auditorios que después

organización sea capaz de ver los 360 grados

no pueden gestionarse seriamente, hace

de lo que pasa en el entorno. Por lo tanto,

algunos años el periódico El País sacaba

como el entorno es cambiante, ahí debere-

un artículo donde daba cuenta que esos

mos ser capaces de identificar esos cambios

espacios terminaban haciendo exhibiciones

para poder anticiparnos y responder ante la

de Miss España. Eso es triste, ver que un

realidad cambiante del entorno”.

equipamiento que tiene que representar una

Por último, ¿cómo debe articularse un es-

posibilidad de crear, de producir espacios

pacio estatal con el resto de los actores de

simbólicos que tengan que ver con el arte

este tejido cultural?

se vean en esa situación. Por otro lado, si tú

“Estas organizaciones, ya sea porque son

te planteas hacer un centro que tenga que

agencias, consorcios o entidades públicas

ver más con las artes, podemos tomar como

sometidas al derecho privado, deberán ser

referencia el Centro Niemeyer de Asturias,

capaces de identificar cuál es el modelo

muy parecido al proyecto del Puerto de la

que las hace más autónomas en la toma de

Música, combinando alto equipamiento con

decisiones. En estos momentos en que los

una concepción más abierta a la accesibili-

tiempos cambian muy rápidamente cualquier

dad”.

organización que dependa de decisiones que

A esta altura, Mestres es una especie de

se tomen muy lentamente la hará menos

gurú. Creo que es fundamental indagar en

competitiva en el sentido más amplio del

cuáles son los aspectos clave que tiene que

término, y al mismo tiempo esas decisiones

tener una organización cultural para que sea

deben ser ejecutadas por un conjunto de

exitosa. “Si bien nunca se puede hablar de

personas que provengan de espacios diver-

recetas, hay tres elementos que hacen que

sos, es decir, sector público, sector privado

una organización sea exitosa y por desgracia

lucrativo, sector privado autogestionado. Allí

no son desconocidos. El primero tiene que

podríamos tener diferentes posibilidades

ver con la capacidad que tenga ese centro

para lograr estamentos de decisión con una

de tener el monopolio temporal de algo,

capacidad de visión muy rápida”.

que exista un aspecto que lo distinga del

La charla termina y Mestres parte a dormir la

resto. Esto puede ser en relación a la forma

siesta, pero el pensamiento no descansa.

para captar fondos, en los mecanismos

Encrucijada, autonomía, decisiones, veloci-

para diseñar una programación, en la forma

dad y diversidad son sólo algunas palabras

de relacionarse con el público, es decir, se

que quedan resonando en la brisa de los

debe construir un capital intelectual y social

últimos días del invierno.

para tener el monopolio temporal de algo.

Palabras que viajan desde España, que se

Por otro lado, otra característica vital es que

pueden subir a un barco y que pueden, tam-

las organizaciones sean heterárquicas, esto

bién, llegar a buen puerto.

requiere que sus estructuras jerárquicas no sean rígidas, ya que serán capaces de adaptarse a los cambios. La tercera es que tenga una estructura de funcionamiento circular, 148


SEPTIEMBRE · repin

Giros sobre el Puerto de la Música

todo proyecto que transforma sustancialmente a una ciudad, como es el caso, debe ser consultado ampliamente. La construc-

Alejandro Gelfuso

ción de una mega obra de este tipo no se puede presentar en el vacío, como aparen-

Club de Fun [www.clubdefun.com], 21.09.2011

temente ocurrió con el Puerto de la Música. Por lo cual, no es casual que surjan oposiciones de todo tipo: músicos locales que se

El movimiento que sigue de cerca las relacio-

sienten excluidos, la oposición cuestionando

nes entre poderes económicos y obra esta-

las prioridades del gasto en cultura en rela-

tal, aporta su mirada sobre la mega-obra.

ción a otras necesidades, y, lo más importan-

Hablar del Puerto de la Música significa, si

te, trabajadores que temen por su continui-

se quiere dar una discusión seria, abordar las

dad laboral. Si a todo eso se le suma el año

múltiples dimensiones de un fenómeno que

electoral y la incapacidad de las estructuras

comenzó como la presentación de un pro-

partidarias tradicionales, las posibilidades de

yecto ícono del gobierno provincial y rápida-

resolverlo son nulas.

mente se convirtió en una puja de intereses

Igualmente, excepto la posición de los tra-

donde, obviamente, estas dimensiones se

bajadores, que es entendible, todo lo demás

entremezclan. Si a eso le sumamos el año

ha sido una sucesión de lugares comunes

electoral, evidentemente es casi irresoluble

y frases hechas que no expresan ninguna

en términos de negociación política.

complejidad: “se gasta más en cultura y se

Evidentemente, en los últimos veinte años,

podrían comprar 300 gasas para un hospi-

Rosario se configuró en dos momentos,

tal”, o la trillada “el centro limpio y los barrios

una gestión estatal ligada a lo cultural

sucios”. Son simplismos que se corren del

comunitario, con Binner a la cabeza de la

problema principal, la hegemonía del poder

intendencia y en un contexto económico

privado que controla lo público e incide en

que ameritaba esa visión, y un segundo

cada paso y cada ladrillo que hace a la ciu-

momento claramente especulativo-financie-

dad. Hasta que no se tome una postura clara

ro inmobiliario, apoyado en la visión de la

frente al avance privado y las tramas que

articulación público-privado, donde Lifschitz

subyacen a cada emprendimiento de este

ha jugado un rol de mediador. Se combina,

calibre, es muy difícil dar una discusión.

entonces, la planificación y gestión estatal

Nunca nadie plantea que, por ejemplo, el 9%

con las estrategias de presión privada. Nadie

de la ciudad está en manos de un grupo eco-

duda que las gestiones de los gobiernos

nómico, y que uno de los hombres de ese

locales, provinciales y nacionales se apoyen

grupo es quien gestionó el puerto y lo dejo

en el mercado inmobiliario y en el dinero del

con una deuda millonaria. Son temas que

agro-negocio. Es su sustento principal, y eso

hacen al poder público, el de la información

tiene sus costos.

y el debate de la sociedad, y sin embargo no

Desde ya, como Movimiento, creemos que

hay agenda posible para eso. 149


OCTUBRE

150


151


OCTUBRE

FOTO carolina GRIMBLAT Recitales de artistas (Beatriz Vignoli), 7ª Semana del Arte Rosario 2011 La Macarena

De regreso a octubre (desde oktubre) Dardo Ceballos

En este rincón austral del mundo el déci-

intervenidos por diferentes artistas que ter-

mo mes del año es uno de los más lindos,

minan conformando una especie de serie.

pasada la euforia promo-primaveral de fines

La recoelectora se denominó esta acción

de septiembre el clima comienza a ofrecer

organizada por Diana Ivern y Marcelo

encantadores días de sol sin demasiado ca-

Massocco con la colaboración del Centro

lor y agradables noches frescas que invitan

Apertura Multicultural Pichincha (CAMP), que

al paseo.

consistió en entregar 28 urnas electorales

El octubre rosarino del año 2011 fue parti-

de Santa Fe, a un grupo de artistas plásticos,

cularmente intenso en materias diversas,

performáticos y escritores que las intervi-

incluidas las artes visuales, tema que como

nieron. Las cajas de cartón se exhibieron

usted bien imagina es central en este texto,

durante casi todo el mes en distintos lugares

siempre desde el caprichoso recorrido

con técnicas, motivos y significaciones

propuesto por el cronista, que durante sus

muy diversas, no podría destacar alguna

salidas a exposiciones varias no pudo dejar

particularmente por encima del resto, en la

de notar el contexto que condimenta este

generalidad podría leer más bien un mensaje

registro con elecciones presidenciales,

ligeramente anti-político que en la Argentina

nubes de ceniza y hasta golpizas nocturnas.

actual sigue siendo “políticamente correc-

Titulares con demasiada acción para lo que

to” en general, y mucho más desde el arte

debiera ser otra aburrida crónica sobre arte.

que prefiere mantenerse prudentemente al margen de la política concreta, evitando

Arte Político

en general meter las patas en el barro a

Antes de las elecciones nacionales de octu-

lo Jacoby en São Paulo. Lo más cercano a

bre, los rosarinos tuvimos dos instancias de

eso que nos ofreció este octubre fue una

elecciones municipales y provinciales con el

conferencia de Daniel Santoro en la Facultad

debut del sistema de boleta única, que dejó

de Humanidades y Artes sobre “Civilización y

entre otras cosas, unas urnas enormes que

Barbarie como eje identitario” que abordó el

fueron reaprovechadas (¡Gracias Duchamp

peronismo, los mitos, leyendas y habladurías

por aquel Urinario!) para montar una más de

que se generaron históricamente en torno

esas muestras itinerantes de objetos iguales

a él, y sobre los cuáles el artista desarrolló 152


153


en el Proyecto Aluvión. Y si de mitologías

Bernardino Rivadavia presentó “Miniprint

se trata también cabe destacar que algu-

Rosario 2011”, una muestra internacional

nos artistas rosarinos como Flor Balestra y

que reúne estampación y grabado en obras

Graciela Sacco firmaron una carta de apoyo

formato miniatura cuya medida máxima no

al candidato Hermes Binner que afirmaba en-

supera los 10 por 10 cm, y que con gran

tre otras cosas que “vuelve a cernirse sobre

convocatoria organizan las cátedras de Taller

nuestra vida política la tentación del pensa-

de Grabado I y II de la Escuela de Bellas

miento único convertido en doctrina estatal”.

Artes de la UNR. La inauguración fue de gran

Mitologías totalitarias aparte, festejemos la

concurrencia, acorde a una muestra que

diversidad.

reunió a 279 artistas de todo el mundo, y a un gentío de todas las edades que colmó las

La diversidad de lo moderno

salas más amplias del Rivadavia conversan-

Salgamos de la trampa del peronismo y

do animadamente, tomando fotos y gaseosa

anti-peronismo, pero quedémonos en la

en vasos de plástico en medio de un entrete-

década del 50 para meternos de lleno en el

nido bullicio. Esta muestra es diversidad en

arte rosarino de aquella época que presentó

estado puro que ofreció, sobre un montaje

la exquisita muestra curada por Guillermo

no muy agraciado, obras para todos los

Fantoni en el Espacio de Arte Fundación

gustos, donde se destacaron los premiados

OSDE bajo el título: “La diversidad de lo mo-

del año 2008 y los de esta edición: Cleo

derno”. Cada uno de los tres pisos que tiene

Wilkinson de Australia, María Suardi, Hugo

la galería presentó un núcleo conceptual,

Besard y Ana Melano, de Argentina, y el

“Asbtracciones y no figuraciones” en el cuar-

Premio Especial Latinoamericano que se

to, “Tensiones de la figuración” en el quinto,

llevó el cubano Orlando Montalbán Soler.

y “Geometría y síntesis” en el sexto, fueron

Cambio de escenario, otro espacio de ges-

la propuesta para adentrarnos en la historia

tión municipal, corazón del Parque Urquiza,

del famoso Grupo Litoral, el Grupo Síntesis

hall del Centro Audiovisual Rosario, inaugu-

y la Asociación de Grabadores, que dejaron

ración de “Las Otras”, una selección de foto-

una impresionante producción en cantidad y

grafías en blanco y negro cuya particularidad

calidad durante una época brillante del arte

es haber sido descartadas durante el proce-

santafesino que esta exposición recuperó

so de selección de La Carpeta Fotográfica,

ofreciendo al público, no sólo la posibili-

el taller más exigente de la especialidad que

dad de disfrutar de los Gambartes, Grela y

se dicta en la Escuela Municipal de Artes

Vanzo, sino también descubrir muchos otros

Plásticas Manuel Musto, que consiste en un

apellidos y obras que generalmente hoy per-

proyecto editorial que retoma la tradición de

tenecen a colecciones privadas familiares.

las carpetas gráficas producidas en la escue-

Sencillamente imperdible.

la, y que tiene por finalidad la publicación de portfolios con fotografías en blanco y

El presente en pequeño formato

negro impresas según el protocolo analógico

La producción contemporánea ofreció dos

tradicional. Aquí hay menos gente, música

inauguraciones el jueves 13. En el comienzo

suave, casi nadie escapa al rango etáreo

de una noche espléndida el Centro Cultural

20-40, algunos cumplen con todas las pautas 154


de vestuario para ser considerados poten-

Cenizas en El Cairo

ciales artistas contemporáneos, hay vino

Durante el atardecer del domingo 16 llegó

en copas, y “Las Otras” están colgadas de

a Rosario por primera vez la nube de ceniza

una pared blanca, conformando una trama

volcánica que acosó este año al sur de

irregular, donde las que más se destacan,

Argentina y Chile, y la ciudad lucía como

las más lindas, son aquellas que justamente

una escenografía ideal para una historia de

retratan algo que deviene una trama: árboles

Stephen King. Esa noche se presentó la

recortando un cielo gris, mesas de bar que

Séptima Semana del Arte Rosario en el Bar

conforman una cuadrícula sobre la Peatonal

El Cairo. Allí había dos mesas grandes que

Córdoba, luces del casino, y una enredade-

parecían un gran cumpleaños mirando a una

ra agarrándose a una pared casi como las

pantalla, la tradicional gente que un domingo

mismas fotos.

a la tarde elige tomar café en las mesas del bar y los tipos solos que toman vermut en

Naturaleza viva

las barras. En ese contexto, Roberto Echen

Desde hace varios días circulaba por el

presentó desde el recientemente creado

micromundo que significan mis redes

Departamento de Agenciamientos Artísticos

sociales un videoclip de Pol interpretando

del CEC el nuevo formato de la 7SAR/11

una versión un tanto más luminosa que la

–que este año también llegó a Rafaela,

original “Coconut” de la sueca Fever Ray.

Reconquista, Venado Tuerto y Santa Fe–, y

Este clip funcionó como una especie de vi-

la Fundación del Banco de Santa Fe anunció

deo-flyer y apertura de Arena en los bolsillos,

el relanzamiento de su galería virtual ArteFe.

una intervención de la dupla Pande Melón

Más allá de los discursos de protocolo, el

(Malena Cocca y Andrés Yeah) en la casa

catering y el anuncio de la agenda de acti-

de Ivan Rosado que inauguró el sábado 15

vidades, lo mejor de la noche fue encontrar

y que también había tomado la calle con un

allí la presentación del libro Residencia en

pasacalle que decía “Me voy”. Adentro de la

el mundo que compila la experiencia de los

hermosa casa que según me contaron esa

artistas que participaron del Programa de

misma noche será otra cosa para cuando

Residencias para Artistas de Santa Fe entre

este Anuario se edite, un grupo de obras

2008 y 2010, y cuatro DVD del programa

giraban en torno a la naturaleza: un cuadro

audiovisual del Castagnino+macro.

hecho con ramas secas, un nido de hornero colgado en la pared, una videoinstalación

La Fugaz

corriendo en un viejo tv 14’’ apenas soste-

Algo particularmente llamativo de Rosario

nido por una mesa apoyada sobre una silla

es que la efectiva y rápida construcción de

que tenía una pila de platos en una pata, una

una “escena” del arte contemporánea en la

maceta rota sobre una cajonera, una hermo-

ciudad no se lograba traducir en la prolifera-

sa foto enmarcada de un árbol del Boulevard

ción de una galería de arte acorde. Sostenida

Oroño donde alguien escribió “DIOS TE

principalmente por el diseño, pero abriendo

AMA”, y unos montículos de tierra en las

un espacio importante a la venta de obras,

esquinas que el gato de la casa desparramó

Darkhaus se afirma ocupando ese lugar

a mitad de la inauguración en una interven-

necesario. Fue una buena decisión haber

ción animal. 155


FOTOS PABLO TAVERNA La fugaz 7ª Semana del Arte Rosario 2011 Darkhaus

156


llevado La Fugaz allí este año y mejorar la

Lenardón, cantan lindas canciones en plan

articulación entre privados y Estado, y eso

Moldy Peaches, vestidos como texanos.

se reflejó en un récord de ventas histórico

Buen comienzo. Vuelve Puzzolo, el gran pre-

cercano a los 50 mil pesos.

sentador, el alma de la fiesta presenta a Gab

Casi toda la obra subastada se vendió, y una

Gabelich que deslumbra con su look arraba-

vez más, los objetos intervenidos en serie

lero enfundada en un vestido negro con una

fueron la vedette de la noche animada por

boa roja y canta Se dice de mí de la gran Tita

César Moreno. Esta vez se trató de billetes

Merello. Linda performance. Vuelve Norberto

de diez pesos, que intervinieron 10 artis-

para presentar a otra “muñeca brava”, apare-

tas: Luján Castellani, Daniel García, Fabián

ce Zitarrosa de fondo “si te vas, te vas sólo

Marcaccio, César Baracca, Cintia Romero,

una vez”, Lila Siegrist lee durante 3 minutos,

León Ferrari, Carlos Herrera, Graciela Sacco,

incómoda sobre un sillón de luces navide-

Adolfo Nigro y Julio Rayón. Destaco la in-

ñas con un libro autoiluminado, poesía pop

tervención magritteana de Daniel García y la

como “Poderosa, una torta glaseada fucsia y

simpleza de Lujan Castellani que solo cortó

violeta, videable, fotografiable, comestible”.

el contorno del Monumento a la Bandera y lo

Volvemos abajo, hay dos cantautores, Ariel

dobló de modo que está ausente de un lado

“Cachito” Costa, y el peruano Amadeo

y del otro se transformó en una especie de

González que además de cantar canciones

gran nariz para Manuel Belgrano. De todos

sobre extraterrestres está exponiendo Los

modos el mejor vendido fue el billete de

Únicos en Oficina 26 del pasaje PAM por

León Ferrari subastado en más de 400 veces

estos días. Se escucha poco, el sonido es

su valor, en una noche calurosa, donde

pésimo, los músicos se unen para tocar y se

valía hacer un recreo en la trastienda lejos

hacen llamar “los normales”, atinadamente

del gentío, tomar un Campari refrescante y

presentan al ventilador que ocupa buena

disfrutar de las coloridas obras de Aurelio

parte de la mezcla de sonido (aparte del

García que allí se exhibían para la venta.

bullicio in-crescendo) pero que si se apaga sería el fin del mundo, al menos para los que

Música de artistas

estamos ahí.

Dos días después de La Fugaz, espléndi-

Volvemos al escenario para un set electro de

do viernes, comienzo de veda electoral,

Matías Pepe, dos djs astronautas con pro-

noche de los museos y fiesta de cierre de

yecciones encima, nos regalan una especie

la 7SAR/11 en un lugar cerrado, oscuro y

de show de daft-punk-rosarinomasterizado.

caluroso, el ex cine porno Adán y Eva, hoy

Arengado por los beats de la electrónica,

un boliche llamado La Macarena.

Puzzolo se convierte en Aristarain y grita

Para este día un tal Harold Camping había

¡laputaquevalelapenaestarvivo! Apenas ter-

anunciado, nada más y nada menos que

minado ese show, en otra pantalla comienza

el fin del mundo, y allí aparece Norberto

la proyección de un video de la divertida

Puzzolo como presentador oficial de la

serie Amambay de Carlos Herrera, y apenas

noche anunciando que el mundo sigue

termina irrumpe un poeta ebrio vestido con

girando y que comienza la fiesta de cierre

guardapolvo que reclama en mic con eco

de la 7SAR/11. La fiesta inicia con el dúo

“despenalicen la moral”.

Escuche y Repita, Agustín González y Cecilia

En el escenario aparece Martín Jiménez, jun157


FOTO carolina GRIMBLAT

to a sus gruppies autodenominadas “tengo

el siempre arengador Te Quiero de Sergio

hipo” que con look grunge cantan covers

Denis, pero Dani Umpi ya hizo esto mejor,

como “tú y yo a la fiesta” de Fey, “ya no sos

mucho mejor. Dejemos las cosas en claro,

igual” de 2 minutos, y para el cierre se ganan

no cualquiera que se disfraza y desafina hits

el público con una bizarra versión de Mujer

latinos es un Performer, y mucho menos el

Amante de Rata Blanca. En medio de los

dúo que armaron Farina y Echen, a quienes

aplausos la Vj Nancy Red dispara un video

el arte contemporáneo de Rosario les debe

de Román Vitali sobre sus cabezas, y luego

mucho, pero no por eso debemos soportar

el videoplayback de Sálvame, de la muestra

que destruyan a puro grito algunas de las

“Tríada / Proyecto Linda Bler. Artista poseída”

mejores canciones del rock nacional. Es

de Mauro Guzmán.

una fiesta, muchos nos conocemos, pero

No hay respiro y volvemos al escenario,

no había necesidad de que arruinaran así

Beatriz Vignoli recita poemas apasionados

Ya despiértate nena ni Me gusta ese tajo,

sobre canciones de rock, es un momento

igual todos les piden otra como si fueran los

Morrison, hay peyotes y coyotes surcando

cumpleañeros y nos torturan con una fallida

el ambiente, y el público entra en clima y lo

versión a capela de La Balsa. Arte, arte, arte,

festeja. Luego más clips con el “Tráiler para

¿todo es arte? Se viene el pole dance o baile

amantes de Studio Brócoli” en el que Claudia

del caño, Virginia Negri hace figuras al ritmo

del Río hace de Celeste Carballo.

de Madonna, baila mucho mejor de lo que

Luego Puzzolo presenta el plato fuerte, lo

canta, su papel es más que aceptable como

presenta como una especie de Lomo al

aperitivo de un pole dancer profesional que

Champignon con Papas Españolas, se trata

vuela figuras alrededor del caño y deja inau-

de Adrián Villar Rojas (¿el artista rosarino del

gurada la sesión bailable oficialmente.

año?) que es un gran songwriter y canta muy

Minutos después Max Cachimba quiso ir al

bien –a pesar de que el sonido insiste con

baño, por error ingresó al que correspon-

arruinarlo todo– pero tras una breve interrup-

de a personas discapacitadas. Enseguida

ción Adrián demuestra que aun sin sonido

entró una persona de seguridad del boliche

es el que mejor toca y canta esta noche,

y no hubo diálogo posible, el artista recibió

su oído también está entre sus virtudes

golpes de puño, cabezazos, golpes en otro

musicales. Toca un cover de Erasure, pero su

baño, y fue expulsado de la fiesta del arte

canción “triste” es la más linda de la noche

rosarino por confundirse de baño. En la ve-

sin dudas.

reda la situación se aclaró, pero ya no había vuelta atrás. La 7SAR/11 tuvo un lamentable final por knock out.

Final por knock out Casi todo lo que pasó después estuvo de más. El trío Negri-González-Ascúa, interpre-

Un día después

tó un cover chillón de Shakira, indigerible

Al otro día de la fiesta llovió, había poca gen-

inmediatamente después de la belleza de las

te en la calle. Al anochecer fui a Tremenda

canciones de Adrián Villar Rojas, y después

Madma, una mini galería de pequeño for158


mato que en la planta alta de Balcarce 837

mesa repleta de stickers baratos con obras

trabaja la idea de arte para llevar a bajo costo

para llevar. El clima de este espacio es de

y ese día inauguraba “Un día antes” de Mati

lo más agradable. Conversando con desco-

Buscatus. En la escalera de ingreso, justo

nocidos conocí a Fernando de escritosenla-

antes de la curva había un cuadro que se

calle.com que había venido a “La Colectiva”

salía del marco por arriba en una explosión

(muestra que injustamente quedó fuera de

de papel que como una enredadera de pura

esta crónica) a dar un taller de fabricación de

psicodelia fluo tomaba todo el ingreso y

cámaras estenopeicas que llaman “cámaras

nos acompañaba hasta arriba. Allí, un gran

flasheras”, y luego con unos dibujantes, que

cuadro negro dominaba la pared del fondo

estaban preparando sus fanzines de dibujo

con la firma de “mati” y en el lateral una

para la FLIA (Feria del Libro Independiente y

colorida pintura sobre vidrio cuya técnica

Autogestiva) que se realizó en Plaza Libertad

consiste en marcar los contornos negros

el último fin de semana del mes. Luego,

por delante y luego pintar desde atrás con

todos nos sentamos en una ronda casi tribal

muchos colores consiguiendo un relieve

alrededor de un escenario demarcado en el

delimitado por el grueso del vidrio, que hacía

piso por luces navideñas para el acústico de

de ésta la más linda de las obras expuestas.

A Flying Dodó Society que desplegó su psi-

Había más obras con vidrio, en unas panta-

codelia burbujeante como broche perfecto

llas-espejos de viejos televisores dibujadas

a una velada deliciosa, como esas que sólo

con contornos de pintura negra que nos

nos puede regalar un octubre, que al otro día

permitían vernos a través o en medio de la

sería oktubre.

obra. Acorde a la política del espacio hay una 159


OCTUBRE

FOTO carolina GRIMBLAT Recitales de artistas (Virginia Negri), 7ª Semana del Arte Rosario 2011 La Macarena

Recitales de artistas Silvina Dezorzi

Ya se sabe: los fenómenos del juego y de

que excede en todo a esta crónica, apenas

la fiesta funcionan como soportes para la

destinada a documentar qué pasó la noche

experiencia antropológica del arte. Son ellos

del 21 de octubre de 2011, al término de un

los que sitúan esa experiencia en un tiempo

recorrido por los museos de Rosario y como

y en un lugar que rechazan el aislamiento

cierre de una nueva edición de la Semana

porque por definición, lo proclame o no, el

del Arte.

arte supone comunicación. Por eso, que la

Las autoras de la propuesta fueron Nancy

Semana del Arte concluya cada año con una

Rojas, Noelle Lieber y Noelia Ferretti, embar-

celebración no parece casual, ni accesorio.

cadas en un proyecto que aseguran nació

Esta vez la elección para cerrar la 7ª Semana

con aspiración de continuidad y que comen-

del Arte Rosario 2011 recayó, como antes

zó justamente como una “acción” para la

la subasta de obras La Fugaz, en un espacio

clausura de la Semana del Arte.

privado. La cita fue en un boliche céntrico,

Se trató, explica Rojas, de una “especie de

La Macarena Club (Sarmiento 1037), con una

concierto” en el que, siempre mediados por

promesa de fiesta abierta, al estilo de las

la música, un grupo de artistas visuales se

que años antes se celebraran en la explana-

“desplazó” de su producción habitual para

da del macro o en el CEC.

mostrar talentos performáticos ante un públi-

Sin embargo, gracias a una propuesta “per-

co presumiblemente amigable.

formática” y “experimental”, la convocatoria

La clave, entonces, pasó por intentar que

terminó funcionando mucho más como un

esos artistas se “expusieran” a sí mismos

convite entre amigos, de amigos avisados. Si

ante miradas empáticas. Que se entregaran

se quiere, un rasgo que no parece inquietar a

al humor, olvidaran cualquier atisbo de timi-

nadie en el mundo del arte contemporáneo,

dez, censura o autocrítica: que se animaran

al menos en Rosario: el de formar un circuito

hasta la bufonada.

con aires de endogamia.

“La idea era que se diera un corrimiento des-

¿Es eso un defecto? No tiene por qué, aun-

de ese espacio solitario en que suele crear

que pueda serlo. Pero se trata de un debate

el artista visual, si se quiere intimista, hacia 160


161


un evento performático y de cruces afecti-

tan obvio como decir: “De cerca nadie es

vos”, relata Rojas. Y entonces, sí, admite la

normal”.

investigadora, es posible que el evento “se

Pero el patovica no se mostró sensible a la

percibiera como una fiesta entre amigos”.

sutileza. O quizás no la entendió. Lo cierto es que de arranque zanjó su incomprensión con

Sobre las tablas

insultos y siguió con golpes. El anonadado

Fue así como, convocados de vez en vez

dibujante terminó en la vereda. Como en el

por un Norberto Puzzolo devenido show-

Far West. Sólo que más tarde presentó una

man, fueron subiendo al escenario, entre

demanda por “amenazas y lesiones” en un

otros, el dueto de Cecilia Lenardón y Agustín

juzgado correccional. “En vez de promover

González con Escuche y repita, Gabriela

una cultura pacífica para contener y dosi-

Gabelich con Se dice de mí, Lila Siegrist con

ficar el conflicto, estos tipos lo exacerban

su performance de Muñeca brava, Beatriz

y generan incomprensibles escaladas de

Vignoli con su poema “Morir, soñar, morir de

violencia”, sostuvo luego su abogado, Aníbal

algo que nombra”, y el último representante

Faccendini, de la Asamblea por los Derechos

argentino en la Bienal de Venecia, Adrián

Sociales.

Villar Rojas, abrazado a una guitarra.

Esta vez la agresión no fue una performance

No podían estar ausentes del escenario

en la que actuaba Max Cachimba. Apenas un

dos almas máter de la Semana del Arte:

episodio, pero capaz de visibilizar que no hay

Fernando Farina y el Turco Echen, que la em-

celebraciones ni arte ajenos a las tensiones

prendieron con temas de Pescado Rabioso,

que agitan la ciudad.

La balsa y La pachanga. El baile del caño también subió a escena y Virginia Negri y Paula Córdoba se animaron. Después, hasta la madrugada, sólo quedaba más tiempo para fiesta. O casi. Porque en La Macarena había, además de artistas, curadores, curiosos y amantes del arte contemporáneo con ganas de fiesta, los infaltables patovicas de cualquier disco. Violentos como suelen ser, según cuentan innumerables crónicas de fin de semana. Uno de ellos se cruzó mal con el ilustrador Max Cachimba –Juan Pablo González, ese es su nombre legal– cuando el artista entró, apurado, al baño de discapacitados. Recriminado por haber usado ese servicio, Cachimba apenas se justificó con el irónico argumento de que también él tenía alguna discapacidad, sólo que poco visible. Algo

162


OCTUBRE

La materialidad entre el arte, la ciencia y la cultura en los Virreinatos (siglos XVI-XVIII):

una mirada interdisciplinaria hacia la escritura de una nueva historia del arte colonial Agustina Rodríguez Romero y Gabriela Siracusano

Primer Encuentro del Seminario Internacional organizado por la Universidad Nacional de San Martín con el auspicio de The Getty Foundation. Buenos Aires-Rosario, 17 al 21 de octubre 2011.

otro lado, enfoques teóricos de la historia del arte tales como los estudios visuales, la historia cultural, la Bildantropologie y la Bildwissenschaft han introducido a la materialidad entre sus intereses. Dentro de los

El arte colonial hispanoamericano ha ganado

estudios de arte colonial andino, la hipótesis

un gran interés en las últimas décadas entre

de que la materia podría ser asumida como

los historiadores del arte. Desde los años 80,

un documento del pasado nos ha permitido

la escritura de su historia ha sido alentada

discutir determinadas categorías a partir de

desde diferentes puntos de vista, incluyen-

las cuales este arte había sido valorado y

do la iconografía, cuestiones de estilo, los

juzgado desde sus inicios, así como también

aspectos sociales y económicos, las impli-

nos ha permitido descubrir el mundo de las

caciones religiosas y políticas, la educación

prácticas culturales y sociales inserto en

artística, etc. Sin embargo, todavía hay un

el uso de materiales artísticos en América,

aspecto que, a pesar de que algunas publica-

usos que incluyen funciones religiosas y

ciones le han prestado atención, merecía ser

políticas, entre otras.

profundamente discutido: su materialidad.

Con el objetivo de discutir estos y otros

El mundo de los materiales artísticos que

temas, The Getty Foundation otorgó un

participan en la construcción de cualquier

subsidio a la Universidad Nacional de San

imagen es muy amplio y puede ser estudia-

Martín para la realización del Seminario

do a través de diversas técnicas y métodos

Internacional “La materialidad entre el arte,

científicos que provienen de los estudios

la ciencia y la cultura en los Virreinatos

químicos y físicos. Además, la investigación

(siglos XVI-XVIII): una mirada interdisciplina-

en conservación y restauración ha desarro-

ria hacia la escritura de una nueva historia

llado en los últimos años una gran cantidad

del arte colonial”. El proyecto, dirigido por

de publicaciones relativas a los materiales

Gabriela Siracusano y Agustina Rodríguez

y procesos de las técnicas artísticas. Por

Romero (CONICET-IIPC, UNSAM), reúne por 163


primera vez en el campo de la historia del

España-AECID, Rosario, donde fue posible

arte colonial a distinguidos historiadores del

generar un intenso intercambio a partir de

arte, restauradores, museólogos, químicos y

las diferentes intervenciones de los partici-

físicos, y talentosos jóvenes investigadores

pantes.

de América y Europa durante cuatro reunio-

Entre los temas discutidos se pueden

nes que tendrán la estructura de seminarios

mencionar los usos y manipulación de la

anuales de siete días cada uno. Cada semi-

materia pictórica como elemento significante

nario se centrará en problemas precisos y se

en ciertas prácticas vinculadas a la nobleza

espera que los especialistas pertenecientes

de la pintura, tal como lo presentaron Jaime

a universidades, centros de investigación y

Cuadriello, Elsa Arroyo, Sandra Zetina (IIE-

conservación, y museos presenten trabajos

UNAM, México), Manuel Espinosa (ININ,

que evidencien los últimos resultados y

México) y José Luis Ruvalcaba (IF-UNAM,

puntos de vista sobre cada tema con el obje-

México) o la relevancia de los análisis sobre

tivo de promover un profundo debate entre

la dimensión material en la comprensión de

las diferentes disciplinas. El objetivo de un

la fortuna de numerosas pinturas coloniales

intercambio intelectual sostenido que supere

destruidas o deterioradas, como se postuló

las fronteras no sólo nacionales y regionales

a partir del trabajo presentado por Héctor

sino también disciplinares, es la misión fun-

Schenone, Damasia Gallegos, Ana Morales,

damental de este proyecto. Asumimos que

Fernando Marte, Agustina Rodríguez

sólo a partir de una discusión libre y abierta

Romero, Gustavo Tudisco, Mariana Pinto

estas fronteras se abrirán y por lo tanto se

y Gabriela Siracusano (IIPC, UNSAM,

fortalecerán los vínculos entre las personas

Argentina). Asimismo, se debatió acerca de

que trabajan en la misma dirección, pero

la presencia de materiales no convenciona-

que todavía no han tenido la oportunidad de

les y sus usos prácticos y simbólicos a partir

estar conectados, o personas que pueden

de las propuestas de Alessandra Russo

compartir sus experiencias a los demás con

(Department of Latin American and Iberian

el fin de mejorar mutuamente su rendimien-

Cultures, Columbia University, EE.UU.) y

to en el estudio y escritura de la historia del

Pablo Amador (IIE, UNAM, México); la rela-

arte colonial.

ción entre museología y estudios científicos

El primero de estos cuatro encuentros in-

en la conservación de colecciones como

ternacionales, bajo el tema “La imagen y su

consecuencia de las presentaciones de

materialidad. Aspectos teóricos y metodo-

Pablo Montini (Museo Histórico Provincial

lógicos”, se llevó a cabo entre los días 17 y

Dr. Julio Marc, Argentina) y Gustavo Tudisco

21 de octubre de 2011 en las ciudades de

(Museo de Arte Hispanoamericano Isaac

Buenos Aires y Rosario. La apertura y cierre

Fernández Blanco, Argentina) y la necesidad

del encuentro, así como la primera sesión de

de una aproximación antropológica y de una

trabajo, fueron realizadas en la Universidad

interacción con las comunidades al desa-

de San Martín, en sus sedes de Campus

rrollar la conservación y estudios materiales

Miguelete e Instituto de Investigaciones

de imágenes milagrosas y devocionales

sobre el Patrimonio Cultural. Entre los días

producidas en los Virreinatos, tal como lo

18 y 21 de octubre los participantes fueron

puntualizaron las presentaciones de Carlos

recibidos en el Centro Cultural Parque de

Rúa Landa (Responsable de Patrimonio 164


Mueble, Ministerio de Culturas del Estado

Amador brindó la conferencia inaugural bajo

Plurinacional, Bolivia) y de Dolores González

el tema “Imaginería ligera novohispana: un

Pondal, Agustina Rodríguez Romero

recurso añejo para la evangelización. Nuevos

y Gabriela Siracusano (IIPC, UNSAM,

planteamientos desde lo formal y material”.

Argentina). Por último, fue posible dialo-

La primera sesión de trabajo, desarrollada

gar acerca de la relación entre técnicas y

en el Instituto de Investigaciones sobre el

representación artística luego de las pre-

Patrimonio Cultural, UNSAM, también contó

sentaciones de Alejandro Bustillo (UMSA,

con la participación de graduados, profe-

Argentina) y Leontina Etchelecu (Universidad

sores y conservadores. Otra instancia de

del Salvador, Argentina), la experiencia histó-

intercambio con estudiantes, historiadores,

rica de la interdisciplinariedad entre España

conservadores y museólogos la constituyó la

y América a partir de las exposiciones de

mesa redonda “Colecciones de arte colo-

Rocío Bruquetas (IPCE, España), Sandra

nial. Estrategias interdisciplinarias para su

Zetina y Elsa Arroyo, y la aplicación de

investigación y conservación” llevada a cabo

nuevas tecnologías y el desafío del trabajo

en el CCPE-AECID, con las intervenciones de

en equipo tal como lo propusieron Marta

Pablo Montini y Gustavo Tudisco y la coordi-

Maier (Departamento de Química Orgánica,

nación de Jaime Cuadriello.

Facultad de Ciencias Exactas y Naturales,

En la ciudad de Rosario, los participantes

UBA, Argentina), Antonio Sgamelotti

tuvieron la posibilidad de realizar distintas ac-

(CNR-ISTM, UdR PG-INSTM, Department

tividades vinculadas al tema del encuentro.

of Chemistry, University of Perugia, Italia),

En primer lugar, fueron invitados a visitar el

Néstor Barrio (IIPC-UNSAM, Argentina),

Museo Histórico Provincial “Dr. Julio Marc” y

José Luis Ruvalcaba y Fernando Marte. José

conocer las colecciones de pintura y escultu-

Emilio Burucúa (EH, UNSAM, Argentina) fue

ra colonial. La visita constituyó una excelente

el comentador del seminario quien, ade-

oportunidad para proseguir el diálogo sobre

más de intervenciones clave en todos los

los temas convocantes a partir de las obras

debates, realizó un cierre del encuentro en el

de la colección. Asimismo, a partir de la

cual presentó conclusiones que pusieron en

gestión del Museo Histórico y del Ministerio

diálogo los distintos trabajos presentados.

de Innovación y Cultura de la Provincia de

Todas las presentaciones habilitaron una

Santa Fe, fue posible visitar la Casa Fracassi,

discusión en torno a problemas teóricos y

edificio neocolonial construido por Ángel

metodológicos y destacaron la importancia

Guido y decorado con la pintura mural de

de los estudios interdisciplinarios.

temas andinos de Alfredo Guido.

Si bien la mayor parte de las sesiones de

Los resultados del primer seminario en

trabajo fueron cerradas con el objeto de

Buenos Aires y Rosario fueron óptimos. Los

crear un intenso clima de intercambio entre

participantes acordaron en la necesidad de

los participantes, el primer encuentro contó

continuar profundizando sobre los temas

con instancias abiertas al público como

discutidos y se mostraron entusiastas en

la ceremonia de apertura con las palabras

proseguir el diálogo entre los especialistas

de bienvenida del rector de la Universidad

de América y Europa. El próximo encuentro

Nacional de San Martín, Dr. Carlos Ruta, y

será realizado en 2012 en la ciudad de Los

de las directoras del encuentro. El Dr. Pablo

Ángeles, en The Getty Center. 165


OCTUBRE

La diversidad de lo moderno. Arte de Rosario en los años 50 Cristina Rossi

La exposición La diversidad de lo moderno.

formaciones en la educación artística desde

Arte de Rosario en los años 50 presentada

la creación de la Escuela Provincial de Artes

en el Espacio de Arte Fundación OSDE

Plásticas en 1942 al pasaje del Profesorado

de Rosario bajo la curaduría de Guillermo

de Dibujo al Instituto de Bellas Artes –anexo

Fantoni contó con más de un centenar

a la Facultad de Filosofía y Letras– en 1953;

de obras de cuidadosa selección. Con un

los cambios en los espacios de difusión

guión curatorial organizado a través de tres

desde Amigos del Arte a las galerías es-

núcleos, se pudieron apreciar los matices

pecíficamente modernistas como la Sala

interpretativos de la producción rosarina de

O; el surgimiento de lugares de reunión

la década del 50. Fueron ellos: “Tensiones de

como la Galería Rosario, el bar Mogambo

la figuración”, “Abstracciones y no figuracio-

y la Perfumería Suárez; la multiplicación de

nes” y “Geometría y Síntesis”.

salones, así como la gravitación de algunos

Desde el punto de vista temático el relato se

maestros e ideas que circularon a través de

presentó como una exploración de los diver-

las publicaciones de la época.

sos tratamientos plásticos que recibieron las

Las trayectorias de los artistas y la historia

problemáticas que atravesaron el período.

interna de los grupos artísticos en los que

En este sentido, el recorrido se detuvo en las

se gestó la modernidad rosarina muestra el

poéticas que anclaron su interpretación en

surgimiento de los caracteres propios de un

el paisaje o los bodegones, en el retrato o la

lenguaje plástico que se fue alejando de los

pintura de carácter social, en las expresiones

orígenes realistas y se fue particularizando:

de carácter intimista o universalistas, según

el caso del Grupo Litoral centró su progra-

hayan sido tratadas desde las variantes figu-

ma estético en el hombre y el paisaje del

rativas o desde el más franco lenguaje de la

Litoral, el Grupo Síntesis optó por reafirmar

abstracción constructiva o lírica.

la necesidad de volver a confrontarse con la

El campo artístico rosarino, tal como

realidad, mientras otros adhirieron temprana-

desarrolla el ensayo de Fantoni, había ido

mente a las manifestaciones de la abstrac-

registrando cambios significativos: las trans-

ción. 166


En este marco, el tránsito a través de la

ciones de Pirovano, ya que asesorado por

diversidad de expresiones que desplegó

Tomás Maldonado su colección fue trazando

la exposición inclinó la balanza hacia una

una línea evolutiva desde los vanguardis-

figuración moderna que, según expresó su

tas europeos hasta el concretismo local,

curador combinó “regionalismo, universali-

completada más tarde con los desarrollos

dad y autoridad de lo nuevo”. Por supuesto,

del arte generativo, cinético y algunas piezas

también estuvieron presentes muchos de los

informalistas. No se trata, por lo tanto, de

artistas que habían comenzado a cultivar la

acercar estas dos muestras desde una

abstracción; sin embargo, el predominio y la

perspectiva comparativa, ya que cada guión

originalidad de los artistas que trataron los

curatorial adoptó puntos de partida y objeti-

temas regionales se destacaban claramente

vos diferentes.

en la muestra.

Se trata, por el contrario, de hacer produc-

El azar ha querido que esta exposición sobre

tivas las conexiones. De hecho existieron

el arte rosarino de los años 50 coincidiera

muchas vinculaciones entre los artistas de

en las fechas de exhibición con Jóvenes y

ambas ciudades, entre las cuales Fantoni

modernos de los años 50, en diálogo con

no sólo señala los casos de los rosarinos

la Colección Ignacio Pirovano, presentada

que exhibieron en las galerías porteñas

en octubre de 2011 por el Museo de Arte

sino también la presencia de Mauro Kunst

Moderno de Buenos Aires. Ninguno de los

y Eduardo Serón en la Primera Reunión de

dos casos –según se aclaró expresamen-

Arte Contemporáneo realizada en 1957 en

te– pretendía constituirse en un panorama

Santa Fe. El acercamiento, entonces, no sólo

completo de la producción de los años 50;

es útil a la hora de valorar la diversidad del

inútil sería, por otra parte, imponer semejan-

arte rosarino presentado, sino también en

te exigencia a una exposición. Aprovechando

el momento de pensar la propia diversidad

esta coincidencia, consideramos que ensa-

que aporta para la escritura de la historia del

yar una aproximación entre ambas puede

arte argentino, aspecto con el cual desafía

abrir un espacio de reflexión para repensar

a los relatos que dieron preeminencia a una

las diferentes miradas que recibe una misma

secuencia progresiva y lineal.

época.

El otro rasgo epocal que se advierte en

En el ámbito porteño, la radicalidad de la

ambas muestras está dado por el espíritu

vanguardia concreta de los 40 había dado

colectivo que impulsó a los artistas de los

batalla para imponer una noción de lo

50 a organizarse en agrupaciones para

moderno ligada a la no figuración y, entre

lograr fines comunes. La diversidad de lo

fines de esa década y comienzos de los 50,

moderno destaca la acción grupal, especial-

muchos artistas se habían ido sumando a

mente del Grupo Litoral, el Grupo Síntesis, la

un amplio movimiento comprometido con

Agrupación de Grabadores de Rosario y las

la expansión y difusión de la tendencia no

formaciones que se nuclearon alrededor del

figurativa, sea dentro de las pautas concre-

arte abstracto y los intereses de la arquitec-

tas o desde diferentes variantes de lo que se

tura y el diseño, aunque más que ceñir el tra-

comprendía como una abstracción libre. Esta

bajo de los artistas a su pertenencia grupal

línea de ideas también marcó las adquisi-

el abordaje de Fantoni focaliza las afinidades 167


temáticas, que también contribuyen a reafirmar su hipótesis de expansión de lo moderno y la pulsión hacia lo nuevo que atravesó el accionar de todos aquellos artistas. Asimismo Jóvenes y modernos hizo foco en las asociaciones surgidas a partir del interés por difundir el arte nuevo que proponían, teniendo en cuenta los grupos organizados por los críticos o los que nacieron de la iniciativa de los artistas. Los diálogos entre las producciones que se establecen en el relato curatorial –y en algunos casos la misma acción de los artistas– muestra vasos comunicantes entre las diferentes agrupaciones que también pueden ser productivos para repensar las estrategias articuladas para desarrollar el arte moderno en diferentes contextos. En este sentido la aproximación entre ambas agiganta las particularidades. Tal como ha planteado Fantoni –y como pudo observarse en las salas– aun en las obras que plantean temas de carácter regional desde la figuración se percibe un proceso de transformación del lenguaje que, en mi opinión, le otorga riqueza y singularidad a la poética de los diferentes artistas. Proveniente del paciente trabajo de investigación de Fantoni, la selección de obras y el recorrido propuesto en La diversidad de lo moderno. Arte de Rosario en los años 50, así como el ensayo que acompañó la muestra, sin duda, serán una plataforma de partida para futuros trabajos sobre el tema. En resumen, recorrer la exposición y, hoy, contar con el testimonio del relato curatorial a través de su catálogo, constituyen una feliz oportunidad para apreciar las manifestaciones del arte moderno rosarino de los años 50, anclaje desde el cual este grupo de artistas ha logrado dar una nota original al arte argentino de esta década. 168


FOTO ANDREA OSTERA / LAURA GLUSMAN Jorge Vila Ortiz, s/t (1952-55)

169


NOVIEMBRE

170


171


NOVIEMBRE

FOTO GABRIELA MUZZIO Enzo Núñez, “Los retratos de Enzo Núñez” Ivan Rosado

Tres días de noviembre de 2011 Osvaldo Aguirre

4

paramilitares, tomados cuando asistían a la

En 1991 Jonathan Moller llegó a Nicaragua

oración de un ministro evangélico. Otra foto,

desde Boston, la ciudad donde se había gra-

sin cartela, exponía a una formación de sol-

duado en Bellas Artes. Estuvo en El Salvador

dados. La única foto de la muestra situada

y se quedó en Guatemala para fotografiar a

en un ámbito urbano. El resto de las fotogra-

comunidades desarraigadas por la guerra su-

fías fue tomado en la selva, en aldeas, en el

cia que dejó más de 200.000 civiles muertos

interior de casas que eran también capillas

y desaparecidos y borró del mapa a más de

ardientes.

450 pueblos. Una selección de ese trabajo

La muestra incluyó algunos textos, entre

(unas veinte reproducciones) pudieron verse

ellos un poema de Heather Dean sobre los

en la muestra Guatemala: cultura y resis-

soldados guatemaltecos, los ejecutores de

tencia, que se inauguró en el Museo de la

la masacre. El poema decía que los soldados

Memoria.

olvidaban los detalles: los detalles de las

Moller (Cambridge, Massachussetts, 1963)

personas a las que mataron, los detalles de

prefirió integrarse a una organización no

las casas que destruyeron. Un olvido fun-

gubernamental de ayuda a los desplazados

cional para las cosas que hacían. Y precisa-

por la guerra antes que hacer su maestría en

mente las fotos de Moller capturan mínimas

fotografía. Durante casi ocho años recorrió

informaciones: un adolescente con su radio,

Guatemala trabajando en ayuda humanitaria.

“una de las pocas posesiones no esenciales

Además, entre 2000 y 2001 fue miembro

de su familia”, árboles talados, una abuela de

de la Fundación de Antropología Forense

luto, un cementerio clandestino denunciado

de Guatemala, con cuyo equipo documentó

por una cruz, la infinita tristeza de una mujer

excavaciones en cementerios clandestinos.

que envejeció mientras su esposo quedó

La imagen que más me impresionó fue la

congelado en una foto. Pruebas de vida.

que mostraba a un grupo de hombres serios, circunspectos. Hombres con expresiones

9

de dolor. La primera vez que la vi no sabía

Enzo Núñez tiene 58 años, de los cuales

de qué se trataba. Pensé que eran familiares

pasó cincuenta internado en diversas insti-

de víctimas de la represión. Pero no, eran ex

tuciones, entre ellas la Colonia de Oliveros. 172


Artista plástico formado en el taller que

to –agregó– yo le ayudé a Enzo a armar un

coordina Fabiana Imola en el psiquiátrico, fue

taller en su casa y él empezó a tener una

externado en agosto de 2011 y comenzó a

pulsión mucho mayor que la que tenía en el

trabajar con mayor intensidad en sus obras.

hospital, donde por ahí sólo podía producir

Fue así como pudo preparar Retratos, su

en el momento del taller. En su casa se puso

primera muestra individual, que expuso Ivan

a dibujar todos los días, hizo diez obras en

Rosado.

dos meses. Fue sorprendente cómo pudo to-

“Esta muestra se organizó a partir de un

mar una herramienta que estaba dentro del

trabajo que Enzo viene haciendo en el taller,

hospital y desarrollarla afuera”.

donde participa desde hace unos ocho años,

La presencia de Van Gogh es visible en va-

con una vasta producción de su parte”,

rios de los retratos de Núñez e incluso en su

contó Fabiana Imola en la inauguración. La

elección de los colores. “Tiene una expresión

exposición incluyó además remeras pintadas

particular, porque él trabaja sobre la obra de

por Núñez y otros pacientes de Oliveros.

Van Gogh. Enzo produce a partir de una ima-

Imola destacó el “trabajo muy fuerte en el

gen que primero elige y después represen-

acompañamiento de la externación” del

ta, con una soltura muy especial en el uso

grupo conformado por la trabajadora social

del óleo pastel”, analizó Imola, que hizo la

Raquel Rubio, la psicóloga Pilar López, la

selección y el montaje de los retratos junto

psiquiatra Gabriela Pino y el equipo de enfer-

con Ana Wandzik y Maximiliano Masuelli, los

mería de la Colonia. “A partir de ese momen-

coordinadores de Ivan Rosado. 173


Imola subrayó además el sentido que tiene

y diagnósticos muy sentenciales, etiquetas

para la muestra el lugar donde se expone,

muy fuertes –agregó Rubio–. Todo eso se re-

“una galería que forma parte de los circuitos

virtió completamente y se pudieron restituir

culturales de la ciudad, donde muestran sus

derechos sociales, a partir de que él puede

obras otros artistas” y consideró que se trata

recomponer cuestiones que tienen que ver

de “externar la obra, que la obra circule y no

con lo económico, con una inclusión a partir

quede acotada al hospital”.

de beneficios que le corresponden por la

En ese sentido, Raquel Rubio planteó que

historia laboral de sus padres. Esa recompo-

“se trata de reconstruir espacios de creación

sición es también una recomposición de la

dentro del hospital, pero para que esto no

subjetividad como sujeto de derecho y como

quede en una lógica manicomial la instancia

sujeto ético”.

de la externación tiene que ver con un rencuentro, en otro espacio, de la obra con su

17

subjetividad”. Los retratos “forman parte de

Lo primero, dice Beatriz Vignoli, fue el título:

lo terapéutico en ese sentido, pero después

Es imposible pero podría mentirte. “Fue una

se dimensionan en lo artístico, donde el

frase que me dijeron. Tenía una importancia

autor ya no necesariamente se ubica como

personal para mí, pero más allá de eso me

paciente”.

resultaba seductora por lo paradójica. Debía

“Enzo estuvo institucionalizado desde pe-

hacer algo con esas palabras”, explica. Y lo

queño, con pocas posibilidades en el inicio

que hizo fue una instalación que se desplegó 174


FOTO GABRIELA MUZZIO Beatriz Vignoli, “Es imposible pero podría mentirte” El Cubo, Cultura Pasajera, Pasaje Pam

a través de una intensa producción en el

se presentará en junio de 2012 dentro de

espacio El Cubo, de Cultura Pasajera, en el

la colección La ciudad y la orilla, de Homo

pasaje Pam.

Sapiens. “Tiene que ver porque arranca de la

“Es imposible pero podría mentirte” era

misma experiencia, aunque va para un lugar

una vidriera que no era lo que parece: “un

completamente distinto. En la novela hay un

negocio de ropa masculina que se parece

narrador en primera persona que cuenta una

a un negocio de ropa como la caja Brillo de

búsqueda de un individuo desaparecido que

Warhol se parece a la caja Brillo”, según el

no aparece y las conjeturas sobre por qué

breve texto que acompañó la instalación.

pudo haber desaparecido. Algunos detalles

Vignoli comenzó a pensar en la obra hace un

remiten a detalles que pongo en la instala-

año. “Zé Cordeiro me decía que ‘podría men-

ción: cierta cosa fetichista con la elegancia

tirte’ abre el espacio de la ficción, es una

de los trajes, las corbatas, las camisas”.

frase teatral. Y lo primero que me surgió fue

Por muchas cosas que ofrezca, una vidriera

este espacio tridimensional donde en princi-

captura la mirada del público a través de

pio iba a mostrar maniquíes y fotos. Empecé

unos pocos elementos. En el caso de la que

a preguntarme qué gestos del lenguaje cor-

inventó Vignoli esa función se reparte entre

poral corresponderían a esa frase, empecé

un maniquí trajeado y dos fotos supuesta-

a imaginar posibles poses del maniquí y del

mente publicitarias de Gustavo Goñi, donde

modelo de las fotos”, cuenta.

otro fotógrafo, Martín Kaissa, posa retratan-

A la vez, “tomé la vidriera como si fuera un

do a Mauricio Cedaro, vestido con ropa de la

género artístico cuyas condiciones yo puedo

marca Domingo. Pero además hay una foto-

subvertir en cierta medida, no al punto de

novela muda de Goñi, un díptico de Aurelio

que deje de verse como tal. Una vidriera

García, cuatro sillas (una de ellas intervenida

no es un género artístico sino más bien un

por Virginia Negri), fotos de Kaissa, un

modo de decorar vinculado a lo comercial.

almohadón que aparece por cortesía de Juan

Lo que quería era hacer una vidriera que

Pablo González y varios guiños: una alusión a

fuera una obra de arte”.

Las sillas, la instalación de Norberto Puzzolo

La frase en cuestión parece difícil de en-

que inauguró el Ciclo de Arte Experimental

tender, pero Vignoli no dejaba de encontrar

en 1968, entre otras.

sentidos. “La extensión, el tono, me hacían

“Se trataba de la mirada, la postura, de cómo

pensar en los nombres de los locales de

dialogan los dos cuerpos, el del modelo y

ropa para mujeres: La culpa es mía, Vestite y

el del fotógrafo. Entre todos construimos

andate, Si supieras vida mía... Pequeñas fic-

un dispositivo donde uno de los fotógrafos,

ciones que disparan la imaginación. Los loca-

Kaissa, fue también modelo, como una

les de ropa para hombre tienen un apellido,

puesta en abismo. Jugamos con hacer fotos

una marca, ninguno se llama Es imposible

de un backstage que estaba completamente

pero podría mentirte o algo por el estilo”.

preparado, con recorrer ese borde confuso

Además, a lo largo del año, fue escribien-

para el público entre la ficción y la realidad”,

do una novela con el mismo título y que

dice Vignoli. 175


FOTO GABRIELA MUZZIO Jonathan Moller, “Guatemala: cultura y Resistencia” Museo de la Memoria

La transparencia de las vidrieras puede ser engañosa. No sólo porque a veces lo que se vende no coincide exactamente con lo que se ve (o con lo que uno imagina que ve), sino porque la disposición de los elementos puede inducir a espejismos. “Es el espacio que se dedica a olvidar que un montón de gente trabajó detrás de lo que se ofrece –define Vignoli–. Una vidriera es una invitación a soñar. Cada paso que di para conseguir una pieza me conectó con la producción, con el mundo del trabajo. Me metí en el Easy, en depósitos, en una zinguería, compré cosas en Mercado Libre, tuve que hacer presupuestos, manejarme con remitos, tomar en cuenta los impuestos: en cada acción caía el fetichismo de la mercancía, me encontraba con la producción”. 176


177


NOVIEMBRE

Un recorrido por lugares significativos en el panorama contemporáneo local

Arte y comunicación: los nuevos espacios alternativos Ulises Moset

En Rosario, el campo de las artes visuales

clásico, que a mediados de la década pasa-

parece funcionar a la inversa que el de las

da funcionó con alguna ebullición gracias a

artes escénicas. Mientras en el primero un

los primeros viernes –festivos– de cada mes:

“circuito oficial” marca la agenda, el segundo

Cultura Pasajera, ubicado en el Pasaje PAM,

vive y se sostiene de acuerdo a los movi-

Córdoba 954.

mientos del circuito independiente.

El Pasaje ya atravesó “la comezón del sépti-

Sin embargo, en el revés de la trama en

mo año” con mucha actividad, así que el kar-

ambos territorios se observan, por un lado,

ma fue gambeteado por el equipo, que este

algunas insinuaciones de proyectar un

año metió unos cuantos goles: a lo largo de

teatro oficial y, por el otro, la emergencia

2011 se hicieron seis muestras que duraron

de nuevos espacios independientes de arte

seis semanas cada una.

contemporáneo. Como una balanza que

También se largaron con una actividad

intenta equilibrar sus platillos.

novedosa: una residencia internacional para

Transitando por algunas inauguraciones de

veinte artistas, convocados a convivir en una

2011, podemos encontrar un cierto creci-

casa al estilo Gran Hermano durante dos se-

miento de algunos ámbitos independientes

manas. La experiencia se realizó en conjunto

en el campo de las artes visuales que co-

con un curador de arte independiente chile-

existe y a veces se articula con esa agenda

no y una investigadora cordobesa y consistió

oficial. En el año, se presentaron dos nuevos

en el análisis de la escena del arte rosarino.

espacios, se reformuló otro, reapareció uno

Con esta acción potente, Cultura Pasajera

más y otros se consolidaron. ¿Cómo hacen

incursionó en el campo de la investigación y

esos espacios para convocar a sus públicos?

la producción de pensamiento. En relación a la convocatoria del público,

Cultura Pasajera y Bou,

Gabriela Gabelich, una de las gestoras del

un solo corazón

espacio, cuenta que “cuando hacíamos inau-

En este recuento de lugares alternativos

guraciones más festivas los primeros viernes

debemos reconocer la permanencia de un

de cada mes ni siquiera avisábamos porque 178


ya estaba instalado, la gente venía sola. Dejó

Laorden, que participa también en el equipo

de hacerse porque implicaba mucho des-

de Cultura Pasajera.

gaste, un esfuerzo descomunal montar una

En Bou se prioriza el espacio académico,

muestra por mes para que se mantuviera un

los talleres y el intercambio: foto, serigrafía,

tiempo bastante corto. Pero también llegó

escritura, guión de cine, construcción de

un punto en el que la fiesta pasó a ser más

objetos y animación. Es muy amplio, no

importante que la muestra en sí, es decir

está pensado sólo para artistas visuales, hay

que todo ese trabajo descomunal quedaba

propuestas para el público general de todas

algo opacado”.

las edades.

Por eso, en los últimos años la estrategia

Para difundir el espacio, Laorden trabaja

de comunicación fue cambiando hacia las

con El puente, una agencia de publicidad de

nuevas tendencias: el sitio Web, Facebook,

Rafaela. De este modo, se destaca la valo-

Twitter y Flickr como banco visual. Además,

ración profesional que hace Bou del trabajo

la amplia base de datos y el espacio on-line

de difusión, una entidad en sí mismo. “No

Minilab, creado por la artista Inne Martino

queríamos cerrarlo en un solo círculo, no me

que no sólo se conecta con las actividades

animaba a darle un perfil determinado, des-

del Pasaje sino con otras experiencias del

pués sí se fue armando de una personalidad.

mundo.

Nos basamos en generar todo el tiempo

Siguiendo con la cuestión de los públicos,

actividades de impacto principalmente en

Gabelich dice que “un modo de hacernos

internet: vía mail y Facebook, hicimos flyers

cargo de esta típica falencia que tiene el arte

e impresiones para lugares específicos (la

contemporáneo en relación a su alcance

zona y en las facultades o escuelas espe-

y su sentido fue invitar a la gente a que se

cíficas y centros culturales) pero cuando

encuentre con el artista en un espacio que

hicimos el balance de cierre vimos el alto

denominamos Art Talk, un diálogo amable

impacto que se generó a través de las redes

que se hace a mitad de la muestra, un mo-

sociales, en las cuales fuimos descubriendo

mento de encuentro donde el público puede

toda una lógica: detectar horarios de mayor

preguntarle todo al artista”.

cantidad de gente conectada, no cansar con

El espacio funcionó muy bien durante 2011,

la información, cambiar estratégicamente la

y realizó algunas alianzas con otros empren-

foto de perfil, entre otras cosas”.

dimientos: “a mitad de año nos involucra-

Sin embargo, Laorden considera fundamen-

mos en algunas actividades en conjunto con

tal la alianza con otros espacios para atraer

Bou, un espacio nuevo, empezamos a hacer

público: “Trabajando en Cultura Pasajera

clínicas para artistas. Acá se produce y se

pensamos en una articulación en función

muestra, pero pocas veces nos sentamos a

de las necesidades de cada lugar, así surgió

reflexionar acerca de lo que hacemos, quié-

Grado 7: la actividad consistió en invitar a un

nes somos y hacia dónde vamos”.

artista una vez al mes. Este año estuvieron

Bou inauguró en abril en una casa ubica-

Paola Vega, Carlos Herrera y Roberto Echen,

da en Mitre 981 como un lugar dedicado

cada uno proponía una actividad distinta,

exclusivamente a la realización de talleres.

cada uno un modo: Paola hizo un taller de

Su cara visible es la joven pintora Florencia

pintura, Charly hizo clínica de obra”. 179


180


FOTO BÁRBARA SANDOZ Cultura Pasajera, Pasaje Pam

También, Bou se articuló con el colectivo

papel maché, papeles intervenidos, teñidos,

cultural La Herrmana Favorita, quienes

reciclados) y además el de arte para chicos

organizaron una clínica de obras con el

con herramientas del arte correo, la poesía

curador y escritor Rafael Cippolini. A fin de

visual, algo de cocina, siempre diferentes a

año, Laorden se unió con Claudia del Río de

las propuestas tradicionales para chicos”.

El Club del Dibujo para montar la muestra de

Otro de los talleres de Polirubro fue el de

fin de año de los talleres de pintura.

Arte y tecnología, dictado por Carlos Villa (ganador de uno de los premios “Joven y

Salir de la caverna

efímero” del Centro Cultural Parque España)

para abrirse al polirubro

que contó con una notable convocatoria.

Otro espacio de fuerte impronta de taller,

También resultó exitosa la muestra de Cuatro

pero también utilizado para el montaje es

gatos, un grupo de artistas visuales.

Polirubro Cultural, que hasta 2010 funcionó

“El modo de convocatoria fue con mailing y

con el nombre de La Caverna, ubicado en la

Facebook. Nos resulta de gran utilidad Flickr,

esquina de Catamarca y Entre Ríos.

pero todavía no contamos con página ni

Lo particular de Polirubro es que ofrece

blog. En gran medida, el público y el funcio-

talleres poco convencionales como graba-

namiento del espacio a través del tiempo (en

do, poesía visual y arte correo. Además el

su momento como La Caverna) son produc-

espacio le dedica tiempo a la investigación y

to del trabajo acumulado de Hugo. La gente

la clínica de obras.

que viene al espacio habitualmente colabora

El lugar se reinauguró como Polirubro en la

con los proyectos, asiste a los talleres, quie-

VI Semana del Arte (2010), incorporando a

re participar de las muestras.”

toda la impronta de investigación impulsada

Al igual que Bou, Polirubro considera fun-

por el profesor Hugo Masoero, la llegada

damental la alianza con otros colectivos:

de los talleres alternativos de la mano de

“Tratamos de hacer proyectos en conjunto

Carolina Montano. Así comienzan las pro-

con otros grupos, se concretó con Zona

puestas de fotografía experimental, el taller

Roja, un espacio de fotografía que queda

de hibridación entre foto y escultura, talleres

en Mendoza y Maipú, con ellos articulamos

de tango, de papel, de arte para chicos, de

acciones en relación al taller de fotografía

teatro.

experimental”.

“Está complicada la autogestión”, comenta

Pero la actividad académica de Masoero es

Carolina. “No recibimos subsidios, lo esta-

también un gran puente que articula accio-

mos manteniendo con los talleres, algunos

nes con la Universidad y otras instituciones,

anuales, otros mensuales. Las muestras

como fue el caso del Museo de la Memoria.

de este año fueron consecuencia de los

Otras actividades destacadas en la tempo-

talleres. Este año se montó ‘Índices’, como

rada 2011 de Polirubro fueron dos presenta-

consecuencia del taller de foto y escultura

ciones de libros. El de Juan Carlos Romero,

que dictó Hugo. Yo doy todos los talleres

un artista conceptual de gran compromiso

que tienen que ver con el papel (cartapesta,

político, se presentó a comienzos de julio 181


con la participación de Fernando Davis,

pando y que va a definir la mudanza hacia el

un reconocido artista y teórico de Buenos

nuevo espacio que se llamará Club Editorial

Aires, junto a Ana Longoni, investigadora del

Río Paraná, dejando la casona de calle Salta

Conicet, especialista en arte y política.

para instalarnos en el barrio Refinería, en

También se presentó el libro de la bonaeren-

Vélez Sarfield al 300”, cuenta Maximiliano.

se Hilda Paz, una artista correo que publica

En relación a la difusión de sus actividades,

junto a Romero en una revista de poesía vi-

Maxi y Ana reconocen que el fuerte de Ivan

sual. El evento contó con la presentación del

Rosado fue el boca en boca que repercutió

poeta visual Claudio Mangifesta y el escritor

en núcleos de amigos, de gente cercana que

Miguel Morelli.

se fue acercando a mostrar, a tocar la guitarra, a pasar un buen rato, a tomar cerveza.

El arte de publicar

No hubo una planificación detallada de sus

Este corrimiento hacia la producción editorial

estrategias de difusión, pero en la sumatoria

encuentra su expresión más acabada en el

de Facebook, mails, sitio Web y Flickr hicie-

espacio Ivan Rosado, gestionado por Ana

ron su propio y suficiente ruidito.

Wandzik y Maximiliano Masuelli. Esta casa matrimonial predispuesta al arte

Novedades con estilo

se despide de Salta 1859, tras funcionar al-

La galería Darkhaus es un espacio donde el

gunos años luego de nacer en la zona oeste

diseño, la ambientación y el equipamiento

de la ciudad.

conviven en una mirada artística, creada por

Comenta Masuelli: “Este año además de

el equipo profesional de Estudio Dark, ubica-

algunas muestras le dedicamos mucho a las

da en Corrientes 267.

presentaciones de libros y también a la músi-

Se trata de un espacio múltiple que se

ca en formato acústico para acompañar es-

propone funcionar como un polo de creación

tos eventos, pero ya más desplazados hacia

para artistas locales. Durante 2011 hubo cua-

la cuestión editorial. El Festival de Poesía nos

tro muestras de alta repercusión: el primer

dio un buen marco para algunas actividades

plato fue “Berni to Laren”, la muestra del

como presentaciones de libros de escrito-

artista nicoleño Benito Laren, que coincidió

res de Buenos Aires, charlas debate sobre

con la presentación de Anuario 10, a fines de

las cuestiones legales de la reproducción

marzo.

y la cultura libre. Durante este año hicimos

Silvia Cagnone, una de las creadoras de

muchas actividades en este sentido, más de

Darkhaus, sostiene que “las inauguraciones

20 encuentros”.

están pensadas para todo el mundo; no se

Por supuesto, los modos de convocatoria es-

cobra entrada y después se hace un trabajo

tuvieron centrados en Internet: el Facebook

más selectivo para los coleccionistas o los

con un perfil de difusión y la página con un

clientes que se interesan en el diseño del

sentido de registro. Allí pueden encontrar

arte”.

los materiales que componen la Biblioteca

“En trastienda tenemos varios artistas:

Ponti Lagarde y el sello editorial Ivan Rosado.

Benito Laren, Paulina Schiblin, Bárbara

“Estamos muy contentos con descubrir este

Sandoz, Aurelio García, Lila Siegrist, Carlos

mundo editorial que hoy nos termina ocu-

Aguirre, Gustavo Goñi, Georgina Ricci, 182


Gabriel Baggio, Fabiana Imola, Daniel

en medios que apuntan tanto al público

Andrino y Germán Rampo, entre otros.

general como a la prensa especializada.

Luego contamos con los diseñadores de ob-

Este año, Darkhaus continúa con sus

jetos (hay de Buenos Aires, del sur, de Santa

actividades y se ampliará participando en

Fe y Rosario) que trabajan piezas en distintos

Artur: “Es un programa que auspicia la

materiales”.

Municipalidad y el Fondo Nacional de las

“En general, Darkhaus tiene un público de

Artes en el que se organizan recorridos por

gente joven con mucha afición a lo estético,

diferentes talleres de artistas rosarinos. Está

jóvenes que quieren decorar su primer de-

pensado para funcionar los sábados para

partamento, también arquitectos que valoran

turistas y para público general, algo que nos

las piezas de diseño y, al mismo tiempo,

interesa mucho”, culmina Cagnone.

parejas de adultos con gusto refinado en relación al arte y al diseño, y por supuesto,

La gran trama virtual

los coleccionistas”.

A este surtido de espacios podemos incor-

El espacio está abierto de lunes a viernes

porarle otros dos, muy distintos entre sí: la

por la mañana y por la tarde y los sábados

reapertura de la clásica galería Krass, en su

por la mañana, es decir que funciona en

nuevo local de Urquiza 2030, y el espacio

horario comercial, distinto al de los museos.

cultural Bon Scott, un bar que funciona con

Las muestras a lo largo de 2011 fueron

proyecciones, recitales, ferias de ropa y

variadas: luego de Benito Laren, se presentó

muestras de arte ubicado en Ricchieri 131,

“Lebreles”, una muestra colectiva fotográ-

que capta a un público más joven.

fica de jóvenes artistas, y más adelante

En definitiva, estos espacios alternativos

llegó el turno de “¿Cuánto pesa el amor?”,

que coexisten con los museos del circuito

una exposición de objetos de cristal tallado

oficial tienen la misma fórmula que utiliza el

realizados por Carlos Herrera y Claudia del

teatro independiente: convocan fuertemente

Río, algo pocas veces visto por el trabajo en

a través de las redes sociales. Con soportes

el volumen de las piezas y por su montaje de

multimedia, a través de Facebook, Twitter y

mucho impacto escenográfico. Por último,

Youtube y con un gran sentido de registro

tuvo lugar La fugaz, una feria relámpago

permanente a través de las cuentas en ban-

organizada junto con el CEC que duró diez

cos de imágenes (Flickr es la más utilizada),

días y culminó en una subasta en la que se

páginas y blogs, estos nuevos espacios

vendió prácticamente toda la producción

alternativos tienen en común la posibilidad

de artistas locales. Este evento promovió el

de exprimir al máximo estas herramientas,

interés de la gente por la compra y venta de

además del boca en boca o la prensa tradi-

obras de arte.

cional.

Además de todas las herramientas que ofrece Internet como el sitio, las redes sociales y el envío de newsletters masivos a más de 30.000 contactos, Darkhaus hace mucho hincapié en la presencia en los medios masivos a través de eficaces estrategias de prensa, 183


NOVIEMBRE

FOTO GABRIELA MUZZIO Encuentro y Fiesta Nacional de las Colectividades

Volver y no haberse ido

comprar, por el mismo valor de una porción de torta en Austria, un reloj de procedencia dudosa en el stand de los africanos. Todo sin

Pablo Franza

visa ni Visa. Avanzo en mi recorrida y trato de no pensar en nada de lo que aquí relato. Me resulta imposible. En Rusia no puede hacer tanto calor en noviembre; la temperatura ambiente hace soplar las blusas, hay tierra seca que vuela y una nube de humo de carnes a la

Volví a la Feria de las Colectividades después

estaca, son el microclima de la Siberia litora-

de quince años. Está exactamente igual. No

leña en la que unos típicos rosarinos danzan

sólo a las primeras ediciones sino al mundo

vestidos con ropas típicas de otro lugar. Ahí

en el que vivimos. Si en La Plata la República

está, ese es el futuro, imagino un planeta

de los Niños es como una ciudad de adultos

Las Vegas y empiezo a entender.

pero a pequeña escala, aquí todo es presen-

Es mágico. La gente atiende el celular y

te pero mostrado como pasado. De todos

dice “estoy en Grecia, voy para Brasil y nos

modos, no hay fraude. Todo lo contrario,

encontramos en Siria”. Lo puedo oír y ver;

semejante mentira podría ser la gran verdad

somos nosotros, los humanos entretenidos.

de estos días.

Consumiendo sin parar, generando basura

En este nuevo orden global, en el que las

que rebalsa toda previsión, deambulando

Islas Malvinas están justo detrás de Calabria,

con miedo a que se pierda algún chico,

las papas fritas son algo así como el espe-

mirando sin demasiado interés nada o

ranto de la gastronomía. Sí, el mapa es algo

bailando; como en un festival de música

extraño y esta ubicación caprichosa que po-

electrónica, entre perros callejeros que revi-

dría junto a otras y ante semejante crisis eu-

san conos de cartón abandonados, personas

ropea, darle un nuevo impulso a la industria

disfrazadas de la comida que venden, niños

cartográfica mundial y todos sus derivados,

bailarines, bellas jóvenes que aspiran a ser

es sin embargo sólo otra mentira esceno-

reinas y carpas llenas de olor a pasto. Las

gráfica de las incontables que se ofrecen

mismas carpas de siempre con la misma

en esta feria masiva y tradicional. El nuevo

decoración de siempre y el mismo aroma del

mundo es vallado y es también bastante

año pasado. Ese es el corazón. Un verdade-

parecido al habitual. Las regiones de España

ro caos acomodado, en donde el centro es

están todas separadas pero juntas en el

civilizado y en donde los bordes ofrecen las

mismo sector, las italianas lo mismo y es

cosas que se buscan y se encuentran en las

muy notable que los inmigrantes africanos

fronteras.

están por fuera de la feria oficial, calle de por

El afecto y lo más auténtico está en el baile.

medio y sin cerco perimetral. Si se cruza una

Sin dudas el futuro lindo pasa por bailar,

calle y se atraviesa un alambrado se puede

se nota. La danza aquí no sólo mueve el 184


cuerpo sino que moviliza todo. Los abuelos

blos originarios que por suerte no guardan

están contentos, los familiares orgullosos

rencor en sus genes y que además ofrecen

y en cada lentejuela o metro de tafeta esas

unas artesanías que superan muchas clases

emociones se manifiestan. En el traje, en las

de teoría del color.

coreografías y en los ensayos veo dedica-

Salgo por el lado más pobre. Lo hago cami-

ción, disciplina y afecto. Está clarísimo, se

nando por otra feria circundante y fuera de

nota que ahí hay algo conjunto y que en todo

norma que está llena de puestos de venta

lo demás aún lleno de cosas hay muy poco.

de productos truchos y comida callejera. Ahí

Todo es muy parecido, no importa la nacio-

todo es más barato y llamativo; un póster de

nalidad. No digo que sean todos iguales,

Jesús tiene leds en la corona de espinas y el

pero la diversidad visible en semejante

choripán es la comida típica de una colecti-

oferta es cuestión de logotipos o escudo.

vidad inmensa que no necesita de carpas,

Como si uno pudiera encontrar muchas

trajes ni danza tradicional para vender la pro-

diferencias entre los boxes de la Fórmula 1 o

ducción china y el triste destino de nuestras

entre los locales de un patio de comidas de

vacas indefensas.

un aeropuerto.

Me fui. A los dos días volví. Quise ver cómo

Vi todo. Hasta vi jóvenes hipsters riendo ante

había quedado todo después de que una

las postales que se suceden a cada paso

tormenta feroz volara carpas y stands com-

como si ellos fuesen inmigrantes pero de

pletos. Ahí estaba, algo castigada, pero con

otro planeta. Me dieron pena y los rechacé

todo exactamente igual que hace dos días y

con la mirada. Sigo, me voy, me quedo con

que hace diez años. Todo atado con alam-

las imágenes lindas y me pierdo entre pue-

bres pero lleno de gente contenta. 185


DICIEMBRE

186


187


DICIEMBRE

FOTO MAXImiliano ROSSINI “Muestra Restrospectiva Espacio Wip” Centro de Expresiones Contemporáneas

ANUARIO diciembre 2011 María Laura Carrascal

No caben dudas que diciembre es un mes

perspectivas de abordaje que los artistas del

festivo. A las tradicionales celebraciones que

pasado y del presente han realizado de cada

combinan creencias religiosas actuales y

uno de sus imaginarios.

del pasado remoto, celebradas en un clima

Seleccionando del rico acervo que posee

abrasador propio de nuestras latitudes, se

el Museo Castagnino+macro, la curadora

sumaron muestras y eventos de diversa

explicitó su eje en el texto del catálogo al

índole. Algunos de ellos apelaron a expe-

plantear que el objetivo fue “establecer

riencias artísticas que citaron estrategias de

posibles interlocuciones entre las piezas,

los grupos de vanguardia. De esta manera,

consolidando un relato visual que, supe-

artistas, curadores e instituciones discurrie-

rando criterios estrictamente históricos,

ron en espacios tradicionales pero también

evidencia una potencialidad significativa,

salieron a la búsqueda de experiencias que

revelando múltiples sentidos y correlatos”.

los acercaran a un público no habituado a

Teniendo en cuenta el título elegido, se torna

lugares convencionales de exhibición. Como

evidente la presencia del surrealismo como

ningún otro, este mes suele estar poblado

ideología que impregnó fuertemente la

de muestras y actividades que se superpo-

cultura de occidente desde mediados de la

nen, provocando un ejercicio signado por la

década del 20, y el rasgo heterogéneo de lo

pulsión que incita a ver todo lo posible en

exhibido convalida las múltiples formas que

esta vorágine que cierra cada año.

encontró esta vanguardia para filtrarse en autores de diversas nacionalidades, incluida

Sobre la huella de las cosas

la Argentina.

Un diálogo entre autores consagrados y con-

“Atmósferas metafísicas”, “Ensoñaciones”,

temporáneos se produjo en la muestra “De

“Extrañeza y fascinación” y “Otras ficciones”

azares, sueños y ficciones”, curada por la do-

son los núcleos de sentido bajo los que

cente e investigadora María Elena Lucero y

se agruparon obras de diversas técnicas y

emplazada en el Museo Municipal de Bellas

soportes. La mayoría traslucía aspectos del

Artes “Juan B. Castagnino”. Allí se pudo ver

surrealismo y la metafísica enseñando su

un conjunto de obras que abarcaron un arco

aún persistente influencia a partir de climas

de tiempo iniciado en los años 20 para llegar

de extrañamiento, espacios improbables o

al presente dando cuenta de las múltiples

situaciones imposibles. La vigencia de estas 188


189


190


FOTO MAXImiliano ROSSINI Pequeño Brasil Rosarino Triple XXX Acción Mutante

producciones continúa en la medida que los

instancias de premiación destinadas a una

artistas dieron cuenta de las contradicciones

escena artística diversificada”. Frente a salo-

existenciales, resultantes de las paradojas

nes anteriores, se erigió una mirada un tanto

que sobrevolaron prolíficamente todo el

sesgada de lo contemporáneo donde las

siglo XX y que aún persisten con intensidad.

revisiones del conceptualismo no parecen

Tópicos comunes se percibían en gran parte

haber agotado sus endogámicas torsiones

de las producciones exhibidas: espacios

y donde el acento recayó sobre cómo debe

vacíos habitados por seres petrificados en

ser un Salón. El inconveniente fue priorizar

composiciones que aluden a bodegones

obras articulables entre sí en función del

o naturalezas muertas; mujeres acodadas

“guión curatorial”. Quizás este hecho no

remitiendo a la melancolía ante un mundo

haga más que decantar una situación en la

cada vez más hostil; personajes irreales e

que se visibiliza el implacable rol adquirido

inquietantes por su cercanía fisonómica con

por el mercado de arte, y su poder condicio-

lo humano.

nante, para dictar las tendencias de moda.

En “Onirokitsch [Glosa sobre el surrealis-

Resultó sorprendente, por ejemplo, la ausen-

mo]”, Walter Benjamin sostenía que el soñar

cia de jóvenes pintores o fotógrafos rosari-

participa de la historia y que “la estadística

nos que suelen ostentar obras de calidad a

de los sueños penetrará, más allá de la ame-

la altura de un concurso de estas caracterís-

nidad del paisaje anecdótico, en la aridez de

ticas. La mayoría de lo exhibido se circuns-

un campo de batalla”. Ese territorio en pugna

cribió en torno a la noción de lo procesual,

es donde los artistas dirimen sus guerras

esto es, aludir a experiencias desarrolladas,

y sus obras son las armas que dan cuenta

o en vías de hacerlo, y que dejan registros o

de su poderío al persistir con fuerza en el

protocolos de lo que fue o podría llegar a ser.

tiempo, no todas tienen la misma potencia

Entre las obras seleccionadas por Claudio

pero identificarlas es la placentera y suscita-

Iglesias, Javier Villa y Nancy Rojas pueden

dora tarea.

citarse algunos trabajos: remedando aspectos de la obra de Sophie Call, Marisa Rubio

La fuerza domesticadora

ganó el Primer Premio Adquisición Gobierno

de lo grande

de la Provincia de Santa Fe y Asociación

La figura del curador ha adquirido en los

Empresaria de Rosario a partir de la cons-

últimos tiempos un inusitado protagonis-

trucción de tres personajes de ficción que

mo. Esto pudo advertirse en el LXV Salón

se materializaron en fotos, textos y videos.

Nacional de Rosario 2011 que, a partir de

Funcionando como alter egos de la artis-

la modificación de su reglamento, ubicó el

ta, también se desdoblaban en sí mismos

concepto de curaduría en el centro de la es-

erigiendo un juego de roles que tornó lábiles

cena. La discutida decisión estuvo fundada

los límites entre realidad y simulacro. El

en la búsqueda de revisar estructuralmente

Segundo Premio Adquisición Municipalidad

este tipo de eventos y el resultado se dirigió

de Rosario y Fondo Nacional de las Artes fue

hacia un certamen donde la homogeneidad

para Mariana Telleria y su obra Cuando juntos

confrontó la idea original de “ofrecer nuevas

nos queda lejos. Dos artefactos/luminarias 191


FOTO MAXImiliano ROSSINI El club del dibujo + Ediciones Ivan Rosado Club Leña y Leña

que metaforizaban el encuentro entre opues-

segundo aniversario. Los grandes paneles

tos: un barco cubierto de caireles de cristal

apaisados que se fueron sucediendo desde

con luces incandescentes chocando con un

diciembre de 2009 en un sector de ese bar,

“témpano” de piezas móviles de hojalata

pendían del techo del CEC formando una

reciclada y luces fluorescentes. Una reunión

cuadrícula imaginaria que el espectador

con tintes surrealistas y de ampuloso y trági-

podía recorrer zigzagueante, confirmando

co título que, a partir de sus formas, podría

parte del texto que le daba la bienvenida:

citar en versión objetual la historia de amor

“midiendo los fuera de marco, los otros

frustrada del film Titanic. Finalmente, Nicolás

campos habitables en dicho espacio”. Estos

Mastracchio presentó dos fotografías color

campos expandidos entraron en diálogo

de espacios con una mínima selección de

cuando, por primera vez, se encontraron

objetos que remitían, por su paleta cromá-

todos juntos en el mismo lugar. Resultó

tica y estética austera, a la recuperación

interesante advertir cómo un mismo formato

pictórica de artistas como Pablo Suárez

brindó la posibilidad de improntas singulares

o Juan Pablo Renzi, protagonistas de esa

signadas, en la mayoría de los casos, por el

tendencia en el devenir de los años 70. Por

dibujo y la pintura sobre un soporte bidimen-

estas imágenes recibió el Premio Estímulo

sional. También puede destacarse el trabajo

Coleccionistas Rosarinos consistente en un

grupal que se vio en trabajos realizados por

pasaje de avión, ida y vuelta, a Berlín.

dos y hasta casi una veintena de autores o la

Gran parte de las producciones de los

presencia de otros soportes como el video

catorce artistas y de las diecisiete obras

que interactuaba con una de las obras.

participantes de la última edición del Salón

Este formato fue protagonista de la insta-

de Rosario, parece replicar lo que Jaques

lación de Mauro Guzmán, artista que viene

Rancière considera una opinión dominante:

trabajando este medio bajo la consigna pre-

“la gloriosa presencia sensible del arte devo-

meditada de exceso y mal gusto citando la

rado por un discurso sobre el arte que tiende

estética del cine gore. En este sentido, no es

a volverse su realidad misma”.

casual la elección de telas usadas y sucias colgando cual dosel de unos cables tensa-

Fuera de marco

dos sobre almohadones desperdigados en

“Retrospectiva Espacio WIP: 180 metros

el piso, formando un harén de estilo trash.

de arte rosarino” fue el título de la exhibi-

Participando de esta experiencia, aunque

ción que acogió el Centro de Expresiones

al igual que Guzmán no formando parte del

Contemporáneas, mostrando las obras

ciclo WIP, Javier Carricajo expuso una serie

proyectadas originalmente para el Café de

de dibujos de gran formato realizados en

la Flor. Esta idea, coordinada por Victoria

tiza pastel donde el desnudo masculino fue

Ciaffone, Julio César Quinteros y José Pablo

protagonista. Finalmente, además de estas

Buzzo, enlazó los proyectos de treinta artis-

pinturas, ilustraciones y videos, el día de la

tas que mostraron sus trabajos, convirtiendo

inauguración Virginia Negri presentó una per-

a la exhibición en una forma de festejar su

formance donde los gestos y las frases evi192


denciaron por un lado, una aparente ligereza

insertarse en el mercado laboral a partir de

pero, al mismo tiempo, una sensación que

una infraestructura que cuenta, tanto con

parecía enmascarar sentimientos profundos

personas especializadas en negocios, como

combinados en un clima de evidente osadía.

con lugar y maquinarias para trabajar. Las mismas bases explicitan este argumento:

Incubando diseño

“El CEDIC se plantea como una incubado-

La agobiante tarde del 7 de diciembre, varias

ra de diseño y un espacio compartido por

cuadras de la concurrida peatonal Córdoba

emprendedores dedicados al arte, el diseño

fueron invadidas por el asombro cuando

y la artesanía, que cuenta con un equipo de

varios jóvenes comenzaron a entremezclar-

gestión, infraestructuras, equipamientos

se con los ocasionales transeúntes. Estos

novedosos y servicios empresariales”.

admiraban impávidos el espectáculo impre-

Con el objetivo de proyectar el diseño rosari-

visto que se desplegaba ante su mirada:

no a nivel nacional, el desfile se enmarcó en

un grupo de modelos vestidos “estrafala-

la muestra organizada por el INTI “Las cosas

riamente”. Desafiar el gusto convencional

del Quehacer”, junto a las firmas locales

desde la indumentaria fue el resultado de la

Quier, Marina Gryciuk y Pequeños Trazos.

convocatoria Diseño Abierto presentada por

Sin curaduría ni selección previa los nuevos

el flamante Centro de Diseño e Industrias

diseñadores, muchos de ellos todavía en

Creativas, dependiente de la Municipalidad

su etapa de formación, presentaron dos

de Rosario. Este espacio coordinado por

conjuntos de prendas realizados en diversos

Mauro Guzmán pretende posicionarse en

materiales y tipologías. Con predominio

un área que hasta el momento, más allá de

de formas experimentales, los modelos

propuestas ocasionales, se hallaba huérfana

impactaron a los asombrados espectadores

de una estructura oficial. La ambiciosa idea

que sacaban sus teléfonos celulares para

es brindar a creadores y pequeños empren-

registrar el fugaz momento.

dedores los elementos necesarios para 193


DICIEMBRE

¿SE PUEDE HABLAR SOBRE SALONES DE ARTE HOY? Roberto Echen

Antes de que algún lector astuto y dispuesto

Lo que ocurre es que dicho esto, aparece

al chiste rápido –no digo chiste fácil porque

otro sentido para premio: lugar de reconoci-

en este caso es improbable que lo sea– lo

miento.

haga, respondo: poder se puede.

Lo cual supone al salón un espacio de reco-

De aquí en más, ¿qué?

nocimiento, de legitimación.

¿Qué se puede hablar sobre los salones de

(Entre paréntesis: seguro que a cada ele-

arte? ¿Desde dónde? Y sobre todo ¿a partir

mento de esta discriminación de deseos

de qué deseo?

posibles corresponde un número de artistas

¿Desde la posición de artista?

–de individuos– que se puede agrupar bajo

¿De cuál?

ese nomenclador: grupo necesito la plata,

Del que intentó participar en un salón y fue

grupo quiero el reconocimiento –aunque

rechazado, del ganador de un premio, del

este último sienta más vergüenza de de-

que no participa por convicción o ideología,

clararlo que el primero porque parece que

del que no se preocupa por los salones de

la necesidad es menos vergonzante que el

arte.

deseo, sobre todo si implica al ego.)

Reconozco: la enumeración anterior ya es

Ahora aparece claramente (creo) que lo que

un modo de hablar de los salones, en tanto

he dicho más arriba depende del momen-

caracteriza a los artistas de acuerdo a esa

to –del estadio– en el que se encuentre el

figura y su incidencia (la de ellos sobre ella y

artista.

la de ella sobre ellos).

La justificación histórica de los salones –des-

Pero.

de los primeros salones franceses hasta los

Sobre todo, ¿por qué un artista puede de-

salones de la modernidad argentina– ha sido

sear participar en un salón?

la de ser un estímulo para artistas en pleno

Por el premio, es una respuesta fácil y

crecimiento, en el comienzo de sus carreras

demasiado rápida e irreflexiva. No son pocos

o en un estadio posterior a la emergencia,

los artistas que han participado en salones

dependiendo –a su vez– de la ubicación del

en los que el premio no representaba algo

salón en la trama de las recompensas.

que pudiera ser de interés para su situación

Entonces.

económica.

Para hablar sobre salones de arte parecería 194


importante rastrear su historia, situar su

1920 y un salón que se convertiría en uno de

emergencia, captar el vínculo con el contex-

los más tradicionales del país en la primera

to, tanto artístico como extra-artístico.

mitad del siglo XX y que propiciaría el ingre-

Con seguridad, trazar esa historia no sería

so de obra a su colección.

vano, aunque tampoco un lugar de llegada

Esto suscita otros espacios de enunciación,

para alguna certidumbre. Ese trazo se diver-

quizás otros discursos, paralelamente al que

sifica enseguida, provoca desvíos, caminos

tendría a los artistas como sujetos. Porque

secundarios, retrazos, retrasos, más perti-

plantea el vínculo entre arte e instituciones

nentes para una arqueología (en el sentido

(públicas y privadas) que apoyarían, soporta-

foucaultiano del término) que para la historia.

rían y/o acompañarían la producción artística.

Prefiero situarme en un momento de un

Se puede pensar que en ese momento algu-

trayecto que remite más directamente a lo

nos sectores, a los que se podría denominar

que puede ser el resultado actual de ese

progresistas (en sentido estricto) tendían a

recorrido.

ubicarse en posiciones de gestión institucio-

El comienzo del siglo XX en Rosario, con

nal detentadoras de un “espíritu” moderno

una burguesía deseosa de situarse y dejar

sostenedor –por lo tanto– de un arte acorde,

impronta en el ámbito de la cultura, que,

arte que –en el torbellino de polémicas teóri-

al placer de coleccionar objetos de arte,

cas y políticas en relación a su práctica– era

une también el de generar colecciones

el que se estaba gestando en ese momento.

públicas de relevancia para la ciudad. En la

El salón, el viaje de estudio (los salones y

efervescencia de una ciudad que se piensa

las becas para viajes a Europa –único lugar

como pujante y en el entusiasmo del primer

de deseo si se pretendía llegar a hacer

centenario de la Revolución de Mayo, nace

arte– iban de la mano en tanto estímulo

el emblemático Salón de Otoño. Salón

para los artistas) eran lugares institucionales

que estimulará durante años la producción

indiscutibles que situaban políticas (tal vez

artística local y proveerá de piezas de gran

no del todo programáticas) en relación a la

importancia al patrimonio de la ciudad.

producción artística.

Leo:

Es un momento en que los salones se posi-

Luego de las celebraciones del Centenario

cionan en un lugar que no parece recordar

en 1910, el presidente Roque Sáenz Peña

(desde estas latitudes) lo que había ocurrido

visitó la ciudad y para la ocasión, Rubén Vila

en el país que le dio nacimiento cuando

Ortiz organizó la primera muestra de artistas

el jurado rechazó a una cantidad inusitada

rosarinos que dio origen al Salón de Otoño.

de aspirantes –impresionistas, muchos de

En 1917, se instituyó la Comisión Municipal

ellos– y provocó el mucho más recordado

de Bellas Artes con el objetivo de crear un

“Salon des refusés”.

museo, que recién abriría sus puertas en

Esto es un problema.

Sobre el coleccionismo en Rosario y sobre todo la formación de las colecciones públicas y las instituciones museísticas de la ciudad, remito a las investigaciones de Pablo Montini, entre ellas el excelente trabajo Anales del Museo Histórico Provincial de Rosario “Dr. Julio Marc” 1. Ángel Guido recientemente publicado por dicha institución.

Farina, Fernando y López Carvajal, María, “Antecedentes para una colección” en Colección de Arte Contemporáneo de Rosario, Ediciones Castagnino, Rosario, 2000.   Momento de auge y de euforia, para la ciudad (pero también a nivel nacional), que se propone como una localidad “pujante” económica, social y culturalmente.

195


Problema porque demanda atención. Por un

podría tener lugar en otro lugar –lo que le

lado, es un momento de auge para el arte

daría su propiedad?

local. Por otro, el arte local ¿cómo se sitúa en relación a ese otro, el arte “universal”?

Lo anterior –con su incertidumbre– ¿se vin-

Más aún: ¿se puede pensar en términos

cula a lo que llamamos hoy “salón de arte”?

de “local” frente a lo que se plantea como

Aquellos salones de la modernidad autóc-

“universal”?

tona, encuentro entre la institución arte, la

El arte local es en sí mismo una toma de

vanguardia y las instituciones públicas (pero

posición –sea lo que fuere que triunfe como

también privadas) que les dan nacimiento o

arte local– en un momento en que se trata

los apoyan, se colocan en un espacio de ten-

de definir lo que es “propio”, o lo que tiene

sión inevitable (si se piensa en los campos

que ser lo propio del arte.

que convergen en ellos) entre líneas teóricas

Lo anterior no es oposición, aunque proba-

y prácticas en relación al arte. Tensión que

blemente en ese momento puedan ser tér-

involucra el debate teórico y político, que in-

minos opositivos (en un sentido que puede

cumbe posicionamientos y determinaciones,

pensarse cercano a lo que Saussure plantea

y que el salón recoge para sí deviniendo una

como opositividad).

especie de condensador de esas diferencias,

Pero, el problema que plantea (no, no es EL

antagonismos y contradicciones.

problema, sino uno entre otros) es que el sa-

Pero ese trayecto va a llegar a su corrimiento

lón de acá, va a premiar o a aceptar, artistas

hacia el polo inercial y conservador que es la

que se sitúan en un lugar que se podría (no

marca de las instituciones culturales a partir

sin reparos) llamar de vanguardia.

del arribo del peronismo al poder.

(Paréntesis: ese es otro de los problemas

Esto plantea un hecho fundamental. La valo-

que plantea: cuál es la cronología de lo que

ración de las instituciones (sobre todo oficia-

se podía –legítimamente– llamar vanguardia

les) vinculadas a la cultura y –en particular–

en estas tierras y lo que ocurría en aque-

al arte, deviene negativa para los actores de

llas que habían dado nacimiento al salón, y

ese campo (sobre todo los artistas) que se

seguir pensando en términos de universali-

posicionan en la práctica y/o la defensa de

dad –término que atraviesa muchos de los

producciones que emergen en su contem-

discursos de esos momentos.)

poraneidad. Entre esas instituciones el salón

Entonces (sin pretensión de rigor sino como

es nuclear. Esta confrontación tiene (lo que

mera hipótesis): ¿Se puede suponer que el salón –en Rosario, Argentina– se situó algu-

Vuelvo al texto de Pablo Montini sobre Ángel Guido porque creo que plantea un problema que no deja de ser el nuestro.   Es necesario hacer notar que en ese momento la concepción es la de obtener una verdad trascendente y universal que –necesariamente– es excluyente, tanto desde el lado de los renovadores, los vanguardistas, como de los conservadores y tradicionalistas.   “(...) Pero una de las más graves [censuras] fue cuando en su lucha por la reivindicación de los movimientos artísticos más modernos [Vanzo] tuvo que enfrentarse a los grupos conservadores y nacionalistas, que comenzaron a tener peso hacia finales de los años 30 (con el avance del nazismo en Alemania y el fascismo en Italia) y se convirtieron en gobierno con el peronismo en Argentina. Vanzo fue echado del Castagnino en 1946”. Farina, Fernando, “Julio Vanzo” en Vanzo, Ediciones Castagnino, Rosario, 2001.

na vez como lugar de la avanzada del arte? Y sea ese el caso: ¿qué significaría esa avanzada?, ¿llegar con no mucho retraso a lo que ocurría en Europa? O, por el contrario, ¿postular una identidad nacional que no sería fácil definir? O, al fin ¿hacer emerger un lugar <entre> que se construiría desde un discurso que no 196


quizás sea) su ápice, en la década del 60.

completamente ajeno a lo que acontece en el campo artístico contemporáneo, sumido

Lo que sigue me involucra desde lo personal

cada vez más en un academicismo que no

Llego al arte en los años 80 entre la práctica

empieza a modificarse sino en las últimas

artística personal y la participación grupal e

ediciones (aunque muy tímidamente).

institucional, en una maraña ideólogica que

En el año 2001 una bienal Chandon reformu-

postula contradictoriamente la valoración de

lada hasta el nombre, que pasa a ser Cultural

las instituciones oficiales (herencia sesen-

Chandon, se transforma –con la curaduría

ta-setentista) –pensaba la Escuela Musto

de Fernando Farina– de bienal de pintura

(a la que pertenecía y había participado

en espacio sin disciplinas, y hace su irrup-

activamente en la creación de su nuevo plan

ción inaugural en el Museo Castagnino de

de estudios) como un espacio anómalo, en

Rosario.

cierto modo desterritorializado, dentro de lo

Poco después volvía, también transformado

que consideraba “instituciones oficiales”– y

por el propio Farina, director del Castagnino

el deseo de posicionar mi propia producción,

en ese momento, el tradicional Salón

la intención de generar espacios diferencia-

Nacional de Rosario, ahora abierto también a

les y la necesidad ávida de ver y conocer lo

todas las disciplinas.

que ocurre en el “mundo del arte”, cierto desprecio (moderno) por la mainstream y

Éste –creo– en su versión 2011, es el que

cierta fascinación (inconfesa) por lo que

convoca a la escritura de este texto, aunque

viene apareciendo como posmoderno.

lo que me interesa es la posibilidad (o no) de

En ese tironeo llego a los salones. Los salo-

pensar la figura del salón de arte hoy.

nes –en ese momento– también se debaten.

El nuevo formato se estableció con varios

Como artista siento (no estoy sólo en eso)

objetivos (tal vez cruzándose):

esa especie de ambigüedad entre el deseo

-como parte de un programa para volver a

y la satisfacción de obtener un premio y la

instalar al museo como contenedor y genera-

poco satisfactoria posición del salón en el

dor de arte contemporáneo,

mundo del arte del momento.

-para relevar y situar la producción contemporánea local y nacional,

¿ Y AHORA QUÉ?   Un acontecimiento de no poca significación ocurrió en esa edición. El primer premio de $10.000 (que todavía eran U$S 10.000) fue obtenido por un trabajo de Ernesto Ballesteros, “600 líneas formando una imagen doble”, que consistía, justamente, en esa cantidad de líneas hechas en grafito sobre la pared que se le había destinado, yendo y viniendo a ciegas. Obra que por sus características –a pesar de todos los intentos– fue imposible registrar fielmente en el catálogo pertinente (sólo se veía una superficie gris-blancuzca con una especie de ruido indefinible, hubo que hacer un detalle para tratar de reproducirla con mayor precisión) y no fue vista por algún jurado en su primera recorrida para decidir los premios y por muchos visitantes. Más aún, cuando terminó la muestra, la pared volvió a su color blanco impoluto (o tal vez no tanto) sin resto del paso del artista –lo cual estaba perfectamente establecido en el reglamento, que aceptaba trabajos efímeros. Lo que ocurrió fue que las autoridades del área cultural de la empresa lograron que la próxima edición tuviera un reglamento que constaba expresamente la no admisión de obra efímera y/o perecedera.

Esa irrupción de la zozobra que se denominó posmoderno, también atravesó el concepto y la figura del salón de arte. En la década de los 90 (no recuerdo bien en qué momento) Amigos del Arte intenta poner al día su salón con una (tal vez bastante ficticia o –en todo caso totalmente insuficiente) redefinición de las disciplinas para las que se convocaba. El Salón Anual de Santa Fe –que fuera uno de los más importantes del país en su momento– se muestra en los años 90 como 197


-como forma de adquisición de obra para

Nada que discutir.

incrementar el patrimonio del museo.

Las decisiones del salón nunca son injustas,

Este último junto al de ser estímulo y reco-

sólo podrían ser antirreglamentarias.

nocimiento para los artistas participantes, re-

Sí, debatir.

tomaba los objetivos iniciales de los salones

Con los jurados, con los artistas, con los

inaugurales –en especial el Salón de Otoño.

organizadores.

Por supuesto, todo formato formatea lo que

Debatir ¿qué?

contiene.

Qué significa un salón de arte hoy, cuál es su

El salón está muy lejos de ser la excepción.

lugar en la maraña de premios, becas, con-

Sobre todo, éste, marcado fuertemente por

cursos que apuntan al arte y, específicamen-

la necesidad de incorporar obra a la colec-

te, al arte contemporáneo. Qué posiciona un

ción del museo.

salón, en tanto institución legitimante. Cómo

Lo que varía, lo que no tiene estabilidad

se coloca hoy en relación a su propia histo-

de estructura, es la “línea”, la “estética”, o

ria. Y –seguramente– muchos otros ítems.

como quiera que se denomine, del salón. Sin

Entonces.

embargo, hay espacios que supuestamente

Lo primero –tal vez– sea pensar esto a la

tendrían que ser decisionales a la hora de

hora de enviar al salón. Porque el salón no se

organizar este salón, los que se vinculan a

construye y no logra posicionarse solamente

los objetivos citados, sobre todo (creo) el

con los artistas premiados y exhibidos. En

de relevar, sostener y reconocer la produc-

ese juego de estrategias de poder, el núme-

ción contemporánea. Por supuesto, esto es

ro de rechazados es –tal vez– tan importante

–también– opinable. Me refiero a lo que se

como el de aceptados.

considere –hoy– contemporáneo. Por mi parte, al recorrer el salón, siento que lo que se muestra pertenece a lo que se puede llamar contemporáneo, hoy. No tendría –no podría tener– lugar un “Salon des refusés” que fuera otra cosa, que mostrara algo, que no hubiera podido estar –en tanto lenguaje– en el salón. ¿Es exiguo? Puede ser. Desconozco la presentación, pero tiendo a creer –de acuerdo a mi experiencia en ese mismo salón, desde por lo menos un par de lugares distintos– que podría haber habido mayor cantidad de obras y de artistas expuestos. ¿Se puede discutir esto? No. El formato define. El salón está definido de cierta manera y el jurado actúa en consecuencia. Sobre todo los jurados externos. 198


DICIEMBRE · [SIC]

La mala del arte Mauro Guzmán (en diálogo con Linda Bler)

Exponer mi indignación y la de Linda Bler

La decisión es, en este momento, no enros-

frente a lo que leía en Facebook, donde

carnos en lo absurdo de la queja sino plan-

un grupo de queridas artistas rosarinas se

tear mi punto de vista, y el de Linda claro,

quejaba de la reducida selección de artistas

con respecto al Salón Nacional.

que habían sido aceptados en el Salón –los

En principio, para nosotros éste es uno de

números en concreto eran de unas 600

los mejores salones nacionales que el mu-

carpetas ingresadas para concursar, de las

seo Castagnino realizó en los últimos años, y

que se eligieron unos 17 proyectos (sólo 14

por varios motivos.

autores privilegiados)–, en este tramo del

En primer lugar, se aumentaron los premios

mes de enero me parece absurdo. Pero me

en cuanto a los montos y se focalizó en

comprometí a esta tarea con la editorial de

mejorar la oferta de oportunidades para

Anuario y Linda no me deja en paz.

los artistas participantes, siendo éstas las

Quizás lo absurdo no sea solamente el

propuestas de premiación que figuraban en

hecho de responder seriamente a comenta-

el reglamento: Primer Premio Adquisición

rios de Facebook ni traer acá nuestro enojo

de $ 30.000 (Gobierno de la Provincia

de esos días sino pensar en lo poco sólido y

de Santa Fe y Asociación Empresaria de

persistente de las quejas de esas encoleriza-

Rosario); Segundo Premio Adquisición

das productoras. Hablo en femenino porque

de $ 15.000 (Municipalidad de Rosario

en su mayoría fueron mujeres, y aclaro que

y Fondo Nacional de las Artes); Premio

no hay ninguna intención misógina en mi

Estímulo De La Fundación Castagnino

persona ni en la de Linda (incluso el artículo

Para Artistas Emergentes de $ 6.000,

iba a llamarse “De mujer a mujer” pero no

destinados a la realización de un proyecto

pudimos ponernos de acuerdo con mi alter

artístico a exhibirse en el macro (Museo

ego femenino). Así que voy a intentar ir

de Arte Contemporáneo de Rosario) en el

un poco más allá de las declaraciones que

año 2012; Premio Estímulo Coleccionistas

circulaban aprovechando que me dan la

Rosarinos consistente en un boleto de avión

posibilidad de escribir unas líneas.

Buenos Aires-Berlín-Buenos Aires para ser 199


utilizado durante el transcurso de 2012; y

posiciones más interesante que la Fundación

hasta Tres Menciones Honoríficas.

Castagnino en el presente respecto al

Con esta perspectiva, los envíos crecieron

arte contemporáneo. Esta es una opinión

con relación a otros años, lo cual habla muy

personal que comparto con Linda Bler.

bien de la gestión institucional.

Estas son las cuestiones que yo celebré del

Detrás de estas acciones, y con lo complica-

Salón Nacional del 2011 y por lo tanto me

do que resulta hoy en día conseguir fondos

indigné ante los comentarios de pasillo y

para empezar cualquier proyecto, siguieron

redes sociales, de gente que no se animó a

una serie de decisiones que lo que hicieron

trascender discusiones más serias por falta

fue, a mi entender y el de Linda, seguir po-

de argumentos. Ni hablar de la cobardía.

tenciando el Salón Nacional hacia la excelen-

Me siento satisfecho de ver 17 buenas

cia. Tener un jurado de selección joven, pero

obras y no 54 obras de amigos o conoci-

con mucha experiencia en salones y con-

dos que no son buenas, recordando que 2

cursos, con puntos de vista bien concretos

de los premios son adquisición y que esas

y nada condescendientes en cuanto al arte

piezas premiadas pasan a formar parte de

contemporáneo (estas últimas característi-

la colección Castagnino+macro. Para eso

cas son más importantes que el tema de la

están los talleres y los espacios culturales,

juventud tan sobrevaluada). Hablo de Javier

para la prueba, el ensayo, los errores… Creo

Villa, Claudio Iglesias y Nancy Rojas.

que una colección debe, ya a estas alturas,

Otro de los puntos es que este jurado deci-

trabajar más elevadamente.

diera incorporar sólo aquellas piezas que se

Pero… no entiendo aún el sentido de la que-

muestren potables y dignas de pertenecer a

ja, y vuelvo a enroscarme o sigo enroscado

una colección de arte argentino contempo-

ahora más allá de las compañeras artistas…

ráneo.

¿Qué onda con la queja? ¿De qué se quejan?

Para concluir y ser coherente en su accionar,

¿De que no entraron? ¿De que no entraron

el jurado propuso una buenísima curaduría

“Ellos/Ellas”? ¿Es una queja tardía? ¿Una

de las piezas, que se pudo ver en la plan-

necesidad de protesta contenida a través

ta alta del museo durante los meses de

de los años que estalla fallidamente en el

diciembre, enero y continuará en febrero.

momento y en el contexto equivocado? ¿O

“¡La discusión de la curaduría…!”, me re-

acaso la consigna “Plasmas para todos” se

cuerda Linda... “En todo caso es discutible”

trasladó a un Salón para todos? Pienso tan-

–le digo–, “pero siempre los salones son y

tas posibilidades a la vez y algunas cuestio-

fueron curados, al menos en el grado más

nes del presente no me cierran… Recuerdo

raso de una curaduría que es muy cercano y

cuando la gente que hacía talla en madera se

se confunde muchas veces con el diseño de

quejaba de los primeros salones contempo-

montaje”.

ráneos que habilitaban a nuevas categorías,

Siguiendo, a este joven y controversial

y me pregunto si este tipo de queja es por la

jurado se sumaron Gachi Hasper y otros

no pertenencia e incluso si no están ocul-

miembros que representaban a la Fundación

tando lo innombrable… La posibilidad de

Castagnino, por un lado, y a un grupo de

que muchos de estos artistas que se quejan

coleccionistas por el otro. Este último, con

(hablo en masculino porque ya el tema se 200


amplifica como se amplificaron las quejas)

caso el número es menor por lo que es en-

sean los mismos “malos artistas de siem-

tendible que sea menor el porcentaje en un

pre”. Y me pregunto: ¿Son los malos artistas

Salón Nacional ¿no? Sobre todo, suponiendo

contemporáneos la traslación de la talla en

que en los salones están los buenos artistas,

madera y la mala pintura de los 80, 90?...

cosa que pocas veces sucede como pasó en

Prometí no enroscarme, pero es inevitable…

esta oportunidad, porque entre tanto puterío

¡Linda te dije que me frenes!

¡nadie habló de las obras!

Prefiero un salón para que todos aprecie-

Linda me apunta: “¡Que se ponga la energía

mos y discutamos problemáticas del arte,

en la producción, a ver si llegamos con obra

que presente escenas de la producción

al próximo salón!”. Y en el medio de algunos

contemporánea, no necesariamente todas

comentarios atroces sobre el tema me dijo:

al mismo tiempo, que nos enriquezca como

“prefiero ser la mala del arte antes que una

artistas y espectadores, a cada uno, con los

mala artista… ¡que se pongan a trabajar!”.

niveles de comprensión a los que pueda

Me hizo reír… pero me devolvió a la realidad.

acceder. Porque no me cierran los discursos

Pensar en el Salón como el culebrón artístico

antielitismo de parte de los mismos artistas

de diciembre, relajarme, recordarme que es

que después pretenden banquetes y fiestas

enero y pensar que el buen arte es eso que

privadas en los contextos elitistas del arte:

sucede cuando no lo esperamos, que no nos

ferias, cenas con coleccionistas, celebracio-

sucede a todos ni todo el tiempo por des-

nes de galerías, etc. ¡Y encima quieren que

gracia y que generalmente sucede mientras

sus obras se vendan en dólares! Of course.

trabajamos.

No celebro un salón en donde todos ex-

Y por último, me dijo Linda: “Ojalá que des-

pongan cualquier cosa por el sólo hecho de

pués de tanto quilombo el museo continúe

pertenecer a una comunidad artística, a un

con la misma postura el año que viene,

grupo de amigos, a una zona o región. El

aunque no todos la comprendan como pasa

“Salón” es un Salón Nacional, no de rosari-

con el buen arte”.

nos. Legitima a los artistas más allá de la escena local, o al menos debería hacerlo. Y si bien gran parte de la escena que se presentó es de origen porteño me parece que esto es un buen índice para ver qué pasa con el arte en la ciudad, muy pocos “buenos artistas” o muy pocas “buenas obras” de verdad. ¿Cuántas buenas obras se producen al año? A la industria cultural esto no le importa, finalmente no es la calidad sino la cantidad lo que aparece en las estadísticas. ¿Cuántos buenos artistas hay en Rosario? Me imagino que la respuesta podría ser similar si a la pregunta le cambiamos Rosario por Buenos Aires, pero lógicamente en el primer 201


DICIEMBRE · [SIC]

Los salones que pasan y las instituciones que quedan Gabriela Gabelich, Aurelio García, Inne Martino

Breves apuntes sobre el Salón Nacional, facebook, de qué hablamos cuando hablamos de una escena, una reunión que no fue y muchas preguntas.

convocatoria, a lo que la comunidad artística esperaba con la mansa normalidad de un Salón Nacional, en formato y sabor de clásico de fin de año: variado y multifrutal. La arista más visible, y el primer impacto para todo público, fue, en una mirada inicial, la decisión curatorial de quedarse con un

¿Cuál es la política para las artes visuales

número muy escaso de seleccionados,

2012? ¿Cuáles sus proyectos? Desde la

decisión en sí no muy cuestionable, pero

Secretaría de Cultura, ¿qué inversiones se

que pensada desde una lógica matemática

realizarán? ¿Cuál es el presupuesto asig-

de porcentajes, resultó tener para muchos

nado? Cuando se encarga una obra o una

un sabor amargo, a mezquina representación

intervención para un espacio específico,

de la variedad, cantidad y procedencia de

¿con qué criterio es decidido? ¿Por qué no

las diferentes tendencias de la producción

es concursado y remunerado? ¿Quiénes

artística nacional.

seleccionan o nombran los jurados para los

Algunos entendieron que, entre la inabarca-

salones nacionales?

ble lógica del bazar y el circuito cerrado de las becas de moda (Becas Kuitca y Di Tella,

Ante todo, algo que no debe confundirse: el

más precisamente), existe un panorama

malestar que hizo combustión instantánea

amplio y diverso que merece tener represen-

y sensible el pasado diciembre de 2011 en

tación y visibilidad en el Salón Nacional de

las redes sociales no fue la simple indigna-

Rosario, en razón de su implicancia. Otros

ción del ego resentido del rechazado, tanto

entendieron que esa actitud fue además

como la consecuencia deseada o no, pero

una forma de sobreactuación curatorial, que

previsible, de una suerte de “provocación”

el guión escrito para la ocasión estaba por

institucional practicada sin previo aviso ni

encima de todo. Sospechan que los cura-

adelanto en la formalidad de las bases de la

dores, antes que jurados, estuvieron más 202


pendientes de subrayar su protagonismo

justificar desde lo formal una convocatoria

que de molestarse en entender e interpretar

amplia que luego sería drásticamente ignora-

la compleja multiplicidad que comprende

da dando paso únicamente a quienes hayan

una convocatoria de tamaña envergadura. En

sido legitimados previamente por el circuito

un punto es entendible el exceso porque en

porteño, que es a fin de cuentas, evaluando

cierta forma la tarea de selección estaba re-

al menos este caso, lo que parece medir que

suelta de antemano y sólo quedaba poner en

una adquisición de obra sea válida (o no).

escena la obra maestra, ajustar los diálogos

Simplificar el malestar producido en la esce-

y acomodar las luces.

na local a una pelea de vedettes es el primer

Los jurados y sus criterios pasan, pero las

error de lectura –y de puesta en escena–,

instituciones quedan. Y hubo en los debates

y uno de los más dolorosos si intentamos,

y sus pliegues de facebook otras profundida-

justamente, hablar de una verdadera escena

des, mucho más sustentables, interesantes

profesional, que de existir como tal, estaría

y con cuestionamientos muy dignos de

en su pleno derecho de involucrarse y com-

atender, o al menos de revisar, por quienes

prometerse en lo que atañe a las decisiones

tengan el compromiso de planear y ejecutar

que conforman una política pública sobre la

políticas culturales estatales.

cultura.

Sin ir muy lejos, la pregunta sobre qué tan

Se trata también de pensar, analizando en

válido, deseable o necesario es transpolar

ese hilo de la queja local, qué es lo que

lógicas y criterios de selección provenientes

desteje y desnuda un panorama áspero de

de galerías y espacios privados, que de por

la situación precaria de espacios de exposi-

sí son inexistentes en esta ciudad –donde

ción, sin desmerecer con esto las valiosas

el mercado del arte como tal aparece con

iniciativas autogestivas, con las cuales

cuentagotas– a una institución y un evento

se construye el orgulloso discurso local

que se propone a nivel nacional y de carácter

de balance positivo de fin de año, que se

público, y que además no se atiene por

autoinventan con más voluntad que recursos

definición exclusiva a las lógicas y circuitos

–y con menor o mayor criterio curatorial– en

de lo contemporáneo, como es el Salón y el

un rincón de un bar, el living de una casa

Museo Castagnino.

particular o en diversos, y lamentablemente

Vale arriesgar como supuesto práctico

muy transitorios, espacios privados que nun-

también, si se tratara solamente de engrosar

ca llegan a solventar los gastos de tiempo

la cantidad y calidad de la colección, que se

y producción, ni de sus gestores ni de sus

podría despegar el asunto de la adquisición

artistas, mucho menos a asegurarles la obra,

de obra de la órbita de los Salones. ¿No

ofrecerles honorarios por su trabajo o habili-

sería un mecanismo mucho más sencillo y

tarles un ingreso al mercado del arte.

efectivo convocar directamente a un jurado

Se relega entonces, por la falta concreta de

con propuestas de adquisición predefinidas?

una escena de sustentabilidad económica

De esta manera se ahorraría el engorroso

necesaria para sostener una continuidad de

trámite que para todos implica movilizar más

la producción tanto gestora como artística

de 600 personas de todo el país enviando

en la ciudad, la práctica real a un ejercicio

carpetas que solo servirán, en suma, para

huérfano, y muy diverso, de profesio203


FOTO LUCÍA BARTOLINI Mariana Tellería, Cuando juntos nos queda lejos (2010) LXV Salón Nacional de Rosario 2011, Museo Castagnino

nalismo que suele ser requerido en los espacios de arte nacional e internacional o de “el nivel de mercado” que pretende la puesta arbitraria en “valor curatorial” de este “nuevo formato” de Salón, muy alejado de la realidad del valor de la producción local y su emergencia en un contexto que lejos está de ser un circuito comercial estilo Berlín (y que es muy revisable la pretensión de que lo fuese solo por emular el gesto snob pero sin mercado). Simplificar el malestar del Salón Nacional en términos de rabietas personales, o confrontaciones de pasión futbolera, entonces, es perder de vista la necesidad de pensar críticamente hacia dónde vamos, cómo, con quién, con qué objetivo, cómo nos valoramos (sub-valoramos, infra-valoramos), qué políticas culturales nos implican (o no) como actores, qué diálogos son posibles con las instituciones y sus funcionarios, cuál es nuestra identidad (si algo así existiese). Despertar de la obsecuencia y los halagos acríticos son necesarios para construir una escena que sume a la respetuosa construcción y formación de la ciudad como el referente que aspira a ser. Queda pendiente en el aire una promesa de diálogo abierto por parte de la dirección del museo, suspendida a fines de diciembre y varias libretas llenas de preguntas, dudas, ideas para aportar y ganas latentes. El Salón pasó, la agenda 2012 y lo que vendrá están en un horizonte próximo. Ojalá este texto pueda rematarse, entonces, con un feliz, y sobre todo vital, “continuará”. 204


205


DICIEMBRE · [SIC]

En los alocados 90 Rosario otra vez marcaría tendencia. Con la apertura a todas las dis-

Elogio del Bazar

ciplinas artísticas el Museo Castagnino (sin macro) puso de moda sus rompedores salones “sin disciplina” que tras el desconcierto

Aurelio García

inicial fueran luego imitados a lo largo y a lo ancho de la patria. Digo todo esto sin entrar en detalles y sin hacer demasiadas valoraciones, sabiendo que, como en todo, hemos tenido nuestros más y nuestros menos. Fiel a sus manías, Rosario quiere hacerlo otra vez. Habrá que ir por más. La polémica suscitada por los acontecimien-

Ahora el Museo Castagnino (con macro)

tos que rodearon al Salón Nacional 2011 es

pretende renovar los salones con una línea

muy esclarecedora respecto al pensamiento

cuanto menos curiosa. Los jurados son

que rige y aparentemente regirá la línea

mayormente curadores treintañeros que

estética de los próximos salones de Rosario

además de ufanarse de eso en la prensa,

amén de pretender que otros salones del

representan un cierto pensamiento estético.

país sigan su preclaro ejemplo.

Edades y posturas similares. No se cuentan

Son los nuevos tiempos que corren, en lo

entre ellas y ellos artistas de trayectoria, no

que parece ser una autopista que conduce

hay sabios ancianos de la tribu a quienes

hacia cierta forma de pensamiento único,

consultar, nada de gurús. Sólo cuenta la

una nueva forma de academia, el ideario

cosa del momento. Sólo esa pequeña cosa

de unos pocos impuesto a otros muchos.

encaramada en la inmediatez.

Parece que serán tiempos de extrema

En un reportaje aparecido en un diario rosa-

prolijidad, coherencia y unanimidad dictada

rino, una integrante del jurado en cuestión,

desde esa suerte de Mordor en que se está

entre otras cosas, destaca con orgullo que

convirtiendo el Museo Castagnino+macro.

las obras fueron elegidas por unanimidad,

Rosario ha sido famosa por sus afanes van-

como si eso fuera un ideal, como si desde

guardistas, por su inclinación hacia lo nuevo

la institución se aspirara al nirvana de lo

y la novedad en general y por una cierta

unidireccional. La disonancia, la disidencia

pulsión a querer marcar tendencia.

están proscritas y sólo cabe al jurado decidir

Casas más, casas menos, el manifiesto

sobre aquello que más se acerque al modelo

blanco salió de acá. En la segunda parte de

recomendado del momento.

los sesenta las movidas vanguardistas más

Es notable que hable más de las obras que

osadas y su consecuente ruptura con el po-

han sido rechazadas que de las que han se-

der estético, económico y político de aquel

leccionado. Encaramada en su conspicuo si-

entonces fueron una mecha que se encen-

tio de poder se permite cuestionar la calidad

dió con fuego rosarino. Quizás ésta sea la

de cientos de obras rechazadas, de decirnos

medalla más importante, y la más auténtica

que finalmente la causa de una selección tan

que el arte de Rosario pueda agitar.

drástica somos los artistas que no enviamos 206


obra a la altura de las expectativas de los

Únicamente artistas que hayan hecho los

–me permito el neologismo cacofónico– cu-

deberes, las becas y las clínicas de moda.

rajuradores.

Artistas amiguetes con los que interactuar,

El mensaje es bastante claro. Nada de

artistas que bailen con frescura y simpatía la

bazares, fuera gabinetes de maravillas. La

coreo del mes.

variedad es un cambalache, es una groncha-

En la práctica, sospecho que se elegirán

da y además es un lío que atenta contra el

obras que no paguen mucho seguro ni

empaque de un impecable guión curatorial.

costosos traslados, que no requieran engo-

Las obras deben repetir sin soplar su excelso

rrosos cuidados. Con este nuevo argumen-

libreto, respetando escrupulosamente el tex-

to curatorial, buena parte de los recursos

to, que para eso está escrito. Lo que habrá

asignados estarán disponibles para cubrir

para ver no es una selección de obras sino

otra clase de gastos. No digo que no puedan

una puesta en escena producida, escrita y di-

ni tengan derecho a hacerlo, digo que se les

rigida por el triunvirato curajuratorial o quien

ven algunas costuras. Se les ven algunos

esté por encima. El museo será una especie

hilos.

de Metro-Goldwyn-Mayer que se dedicará

Por eso es que yo en mi caso particular,

a producir salones limpios y coherentes.

como artista independiente, defiendo la idea

El salón pasará a ser una suerte de casting

de bazar como sinónimo de multiplicidad

con los actores que encajen en la trama.

y de azar. ¿O es que sólo una tendencia

Eso es lo que va a ver la gente, nadie va a

merece ser representada? ¿Hay tendencias

ver las obras por sí mismas, eso es cosa del

mejores que otras? ¿En dónde está escrito

pasado. Ahora lo que se va a ver y estimar

eso? ¿Hay algún André Breton secreto que

en los salones del futuro son guiones curato-

dicta lo que sí y lo que no y algunos no nos

riales, la narrativa que articula el jurado con

enteramos? ¿Es una política pública, el es-

las obras que se adecuen a ese fin superior.

tado necesita artistas que respondan a esa

Todo lo que no encaje en el mecanismo de-

tendencia? ¿Es el arte oficial y no nos han

jará de tener visibilidad. ¿De dónde sacamos

dicho nada?

a los artistas ya que guiones curatoriales sin

Aspiro a la diversidad, a que un salón con-

artistas todavía no nos atrevemos a hacer?

vocado y financiado por el poder público

De las diversas academias prestigiosas del

refleje en su selección lo que todo el arco de

momento. Sin un respaldo, sin un nombre

artistas pueda proponer. Que el Estado se

superior detrás, los artistas no son nada,

haga cargo de representar sin sectarismos

menos que erráticas hormigas carentes de

la actividad cultural que él mismo convoca.

hormiguero.

Que el jurado también sea un reflejo de esa

El curajurado de turno tras analizar sus

diversidad, que sus integrantes provengan

pedigrees procederá en acto solemne a

de diferentes campos, formaciones y trayec-

homologar artistas obedientes y a repartir

torias. Y que, como en muchas ocasiones, el

méritos y dineros… Acorde después de todo

público también se exprese.

con los tiempos que corren, parece ser que

Seamos realistas, pidamos lo imposible,

se apunta a obtener un monocultivo trans-

¿viste?…

génico, perfecto, encasillable, exportable. 207


DICIEMBRE

La Asamblea de los Huertos [24/09/11 - 10/12/11] Franco Ingrassia

El sábado 24 de septiembre de 2011, la ban-

un huerto suelen trabajar muchas familias,

da de rock Farolitos convocó a una asamblea

es una actividad cooperativa. Días después,

de artistas y comunicadores para discutir

leo en un escrito de Marcos, integrante de

la situación del arte popular a partir de las

Farolitos: “Cualquier territorio fértil puede ser

siguientes preguntas: ¿qué arte tenemos?,

un huerto si se cuida su suelo, si se aportan

¿qué arte queremos? Unas 400 personas se

nutrientes y se trabaja en el carpido, de lo

hicieron presentes, debatiendo durante más

contrario, se transforma en un manojo de

de dos horas y media. El segundo encuentro

malezas. Las malezas, y también las plagas,

de la Asamblea de los Huertos fue el 10 de

persiguen fines individuales; son las ame-

diciembre. Allí se continuaron debatiendo y

nazas a las que se expone nuestro huerto,

proyectando colectivamente nuevas pers-

podrían comerse entre ellas si pudieran. Es

pectivas para el arte y la cultura popular de

tanto el egoísmo y la ambición individual

nuestra ciudad.

que tienen, que terminan por arruinar todo

Unos días después del primer encuentro,

el terreno, dejándolo infértil. Es por eso que

me reúno con Fabio y Juan Manuel, que

el huerto necesita atención, necesita manos

participaron de las actividades previas de

despiertas para carpir el suelo, para elegir

convocatoria a la asamblea, para conocer

qué se deja y qué se saca de él”.

sus impresiones.

Conversamos también sobre el Proyecto

Lo primero que me cuentan es que “la asam-

de Ley de Puntos de Cultura, una iniciativa

blea fue militada”, hubo un trabajo anterior

sostenida desde un colectivo de organiza-

de contacto, conversación e invitación a una

ciones culturales comunitarias y del arte

gran cantidad de organizaciones culturales

autogestivo independiente llamado Pueblo

que realizan sus actividades en los barrios de

Hace Cultura. El proyecto implicaría destinar

la ciudad y que, de algún modo, se recono-

el 0,1% del presupuesto nacional al finan-

cen en la expresión “arte popular”.

ciamiento de más de 3000 organizaciones

Me explican también los múltiples senti-

culturales autogestivas.

dos de la metáfora del huerto: los huertos son los territorios, en un huerto nunca hay monocultivo sino que es algo múltiple, en

Para más información: http://pueblohacecultura.com.ar

208


En cierto momento de la charla, emerge una

problemáticas que se presentan en la expe-

imagen potente: “estas asambleas son un

riencia de las organizaciones presentes.

balbuceo”. Es decir, primeros intentos de

La falta de espacios, las dificultades para

articular un lenguaje colectivo. Un momento

lograr habilitaciones y permisos municipales

de ensayo y error para los estilos, los térmi-

para la realización de actividades, la lucha

nos, los modos de decir que constituyan,

contra elementos persistentes del proceso

polifónicamente, un punto convergente de

de neoliberalización intensivo de la déca-

enunciación.

da del 90 (como la concesión de distintos

Otra imagen de ese sábado genera más

espacios de los clubes barriales a iniciativas

resonancias. “Había un mapa de la ciudad,

privadas) se van desplegando en un proceso

y cada uno que hablaba dejaba señalado

de profundización del conocimiento mutuo

de dónde era su colectivo. Con el correr de

que a la vez va habilitando la proyección de

las intervenciones, se fue formando una

procesos de cooperación. Gradualmente,

medialuna alrededor del centro.” Arriesgo

el balbuceo abre el camino a la inteligencia

una hipótesis: ¿Qué surgiría del encuentro,

colectiva.

hibridación y/o contaminación entre estas

Entre las conclusiones del encuentro inicial,

experiencias barriales y las iniciativas cultura-

que fueron leídas al inicio de la segunda

les también autogestionarias que despliegan

reunión y circulaban en copias impresas, era

sus actividades en el “centro” de la ciudad?

posible encontrar la siguiente afirmación:

Las divergencias estéticas o formales,

“La importancia de la asamblea es poder

seguramente, no serían desdeñables. Pero

discutir políticas culturales que queremos

tal vez estas diferentes redes –más o menos

para la ciudad”.

difusas– puedan reconocerse mutuamente

En los cuerpos que sostenían allí ese enun-

en sus dinámicas organizativas y producti-

ciado podían sentirse los ecos y las insisten-

vas, situando zonas de intersección en las

cias de ese otro futuro que diez años atrás,

cuales establecer huertos comunes.

en otro diciembre, había tenido lugar.

El segundo encuentro de la Asamblea de Para contactarse con la Asamblea de los Huertos es posible escribir a esta dirección: asambleadeloshuertos@gmail.com

los Huertos, ya en diciembre, se abre con la propuesta de realizar un relevamiento de 209


DICIEMBRE

FOTO ARCHIVO Ivan Rosado (Pág. 204) FOTO LAURA ESCOBAR

Ivan Rosado, ¿lo recuerdan? Ana Wandzik y Maxi Masuelli

En nuestro futuro living hubo muestras

Recibimos la grata invitación para ocupar estas líneas con lo que quisiéramos decir sobre Ivan Rosado, su venidero cierre y su proyección para el año del fin del mundo. ¡Gracias Anuario11! Esta es la conversación que pudimos entablar entre nuestros pensamientos y deseos.

de Pauline Fondevila y Ariel Costa, Coti Alberione, la Galería Jardín Oculto, Hernán Camoletto, Claudia del Río, Yamandu Rodríguez, Feli y el Pibe Efervescente, Guille Madoz, Mariana Sissia, Aid Herrera

Lo han llamado galería, espacio de arte, cen-

y Silvita Lenardón, Santiago Minturn Zerva,

tro cultural, un poco librería y un poco bar,

Vodkamiel, Joaquín Boz, Lino Divas y

pero no amigos, esto no es más que nuestra

Federico Claudio, Carla Colombo, Noëlle

casa, nos gusta la cerveza, la música, algu-

Lieber, Gastón Herrera, Maxi Rossini, Caro

nas cosas del arte y trabajar desde el arte;

Grimblat y Juan Hernández, Guille Ueno, Lola

por eso nos tomamos esto como un trabajo

Goldstein, Agustín Rodríguez y Fernando

y mandamos mails, limpiamos el patio,

Mariani, Enzo Núñez, Lucas Mercado,

llenamos la heladera, enfriamos las bebidas

Fernanda Laguna, Eva Cipriani, Maga Piano

y bajamos a abrir la puerta bastante seguido

y Pepe Klatt, Boga, Cecilia Lenardón, Samuel

en estos últimos dos años.

Labadie, Daniel García, Powerpaola, Pande

Somos una pareja que arma cosas en su

Melón y Vir Negri.

casa y todo lo que tenga que ver con estra-

También se presentaron varios libros y

tegias de acción y legitimación en la escena

editoriales que trajeron de la mano lecturas

rosarina nos importa bastante poco. Sin ob-

de Irina Garbatzky, Leonor Silvestri, Beatriz

jetivos concretos a cumplir, ni mucho menos

Vignoli, Ana Longoni, Nico Domínguez

planes de inserción en el medio, fueron más

Bedini, Marina Gersberg, Osvaldo Aguirre,

bien ideas para la convivencia dentro de la

Primoz Cucnik, Alojz Ihan, Miguel Petrecca,

casa los motores que nos motivaron. Y es

Gerardo Jorge, Alfredo Jaramillo, Francisco

en este sentido de la convivencia, que nunca

Bitar, Diego de Aduriz, Julia Enriquez, Vir

tuvimos ganas de hacer una convocatoria

Negri, Flor Monfort, Damián Ríos, Fernanda

abierta de proyectos y todo lo que sucedió

Laguna, C. Monti, Marina Yuszczuk, Lalo

acá adentro fue por invitación a gente que

Barrubia, Paula Soruco, Carlos Gradín,

nos cabe lo que hace.

Francisco Garamona, Alejandra Benz, 210


211


Manuela Suárez, Enzo Campos Córdoba y

con el que trabajábamos. Pensamos al mate-

Pilar Almagro Paz.

rial editado como un sello distintivo de nues-

También tocaron la guitarra y cantaron Pol,

tras actividades, y como un plus tangible que

Nerdciego, Lucila Inés, Afelio, el Berna, Ariel

nos queda del encuentro con el otro.

Costa, Pablo Read y Alejandra, Juani, Diego

Así que Ivan Rosado queda como sello

Rabella, Luko, Andrés Mantello, Agustín

editor con una colección de papeles abro-

González, Un Rosa Oscuro y el dúo Escuche

chados que nos da orgullo y felicidad, y con

y Repita. E hicieron un poco más de ruido

planes de trabajo editorial más organizado y

Los Especialistas, Modern Love Experience,

sostenido. Precisamos hacer arreglos en la

Nacho y el Robot, Sistema de Sonido

casa y un cuarto para nuestro hija, así que en

Descontrol, Rollex, Juan Valente, Emi Arias y

el año 2012 nos vemos por barrio Refinería

Mario Caporali, y la banda sin nombre y sin

en el Club Editorial Río Paraná, un saloncito

vergüenza.

en la calle Vélez Sarsfield 395 que nucleará

Y además nos dimos el gusto de presentar

distintas facetas de lo editorial. Funcionarán

nuestros propios proyectos: T.R.I.P.A. (Maxi)

allí nuestro taller de producción de edicio-

y Zine-Zelt y Amor Fotocopia (Ana).

nes, una librería especializada en materiales

Durante estos años estuvimos muy enamo-

de pequeñas editoriales nacionales y la

rados de la idea de darle un carácter editorial

Biblioteca Popular D.G. Ponti Lagarde, que

a Ivan Rosado, con la publicación de nume-

lleva el nombre de un genio pilar del punk

rosos fanzines y ediciones que en muchos

nacional de los 90 y que cuenta actualmente

casos partían de la premisa de localizar lo

con 25 socios que sacan libros a domicilio

editable en cada muestra, o en cada artista

con regularidad. 212


Un poco cursi para terminar pero nos

de Claudia del Río.

gustaría dejar el mensaje de que se puede

• Más pinturas sobre empapelados y flores.

hacer cualquier cosa en tu casa o en la de tu

Carla Colombo.

amigo, que alentamos a full la apertura de

• Demasiado Gin. Maxi Masuelli.

livings, patios, terrazas y garages eventuales,

• A capite ad calcem. Daniel García.

donde se pueda ver algo, habitaciones con

• T.R.I.P.A. = Trabajo de Registro e

más libre albedrío que agenda cultural, y que

Investigación sobre Paisajes Argentinos. Maxi

si hay cerveza fría funciona posta.

Masuelli.

Salud amigos, buen comienzo de año!

• Mi primer novia porno. Feli el Punch. • El mundo es un buen lugar. Maximiliano Rossini.

Ediciones Ivan Rosado

Ref.: misc., foto, música, registro

2009/2011

• Yamandu zine. Yamandu Rodríguez. Ref.: Histórico y local

• Escuche y repita. Agustín González y

• Espacio de arte Josefina Merienda. Una

Cecilia Lenardón. Cancionero + canción

experiencia fuera del centro. Con texto de

He estado en varios lugares a la vez. 5

Sabina Florio.

canciones de Lobo suelto cordero atado. Pol

• Diálogo de artistas. Schiavoni - Musto

Nada. Ep.

- Schiavoni. Con texto de Sabina Florio.

• Leña y Leña. Carolina Grimblat y Juan

• Juan Pablo Renzi. Revisión de la pintura

Hernández.

realista. Con texto de Carla Colombo.

• Alt+3. Pilar Almagro Paz, Alejandra Benz,

• Santiago Minturn Zerva. La noche no ha

Enzo Campos Córdoba, Evangelina Cipriani,

llegado aún. Con textos de Daniel García,

Andrea Fernández, Irina Garbatzky, Daniela

Emilio Ghilioni y Mónica Castagnotto.

Klatt, Laura Klatt, Inne Martino, Magalí Piano, Maximiliano Rossini, Cecilia Sabatini y

Ref.: Dibujo y pintura. Local y

Manuela Suárez.

contemporáneo

• Arena en los bolsillos. Pande Melón.

• Pinturas 2006-2008. Carla Colombo.

• Señora de la templanza. Una edición de

Combo 1. Póster.

fans para María Laura Schiavoni.

• La invasión de la inquietud. Pauline Fondevila y Ariel Costa. Minipóster autoad-

Ref.: poesía

hesivo.

• Río Colorado. Dibujo y texto de Lucas

• Lara de cuco. Constanza Alberione.

Mercado.

• Casa Brown. Constanza Alberione.

• Fuego de noche. Virginia Negri .

• Hacia el fin de la noche. Hernán Camoletto.

Próximamente

• Otro yo mujer. Basado en hechos reales.

Colección brillo de poesía joven

Feli el Punch.

• Torta alemana. Alejandra Benz.

• Los mutantes. Guille Madoz.

• Nuevas pesadillas. Julia Enriquez.

• Donde termina el bosque comienza el bos-

• Poesía vs. Poema. Agustín González.

que. Aid Herrera y Silvia Lenardón. Con texto

• Desnudo total y escándalo. Virginia Negri. 213


MAX CACHIMBA Libertad, anarqu铆a y revoluci贸n

214


215


Libros

216


El intrincado recorrido de los objetos

En los últimos años se han desarrollado en Rosario importantes iniciativas en pos del estudio de la historia de sus museos y colecciones. En 2008, la Fundación Espigas en conjunción con el CEHIPE publicó un volumen colectivo con sólidos ensayos que reconstruyen el coleccionismo privado y público practicado en la ciudad entre fines del siglo XIX y 1970. En 2010, el Museo Castagnino y el Museo Histórico alojaron la exposición “Entre Centenarios” cuyo objetivo fue recuperar los proyectos institucionales y artísticos que se gestaron entre 1910 y 1925. En 2011 ­–y nuevamente en el contexto del Museo Histórico– se publica el primer volumen de sus Anales, buscando zanjar una “deuda histórica” que contaba con más de setenta años. Como señala Pablo Montini en la apertura del volumen, fue el propio Julio Marc, primer director de la institución, quien a poco de su inauguración en 1939 hizo explícito el proyecto de publicar los Anales del Museo Histórico Provincial del Rosario con el fin de informar de las novedades del Museo así como de dar a conocer y estudiar sus colecciones. El emprendimiento estaba en consonancia con otros de índole similar, que entonces se llevaban adelante en museos argentinos, como por ejemplo el Boletín del Museo Nacional de Bellas Artes con sus varias ediciones entre 1928 y 1942 y el Boletín del Museo Nacional de Arte Decorativo publicado en forma regular entre 1946 y 1952. Sin embargo, la aspiración de Marc no llegó a concretarse y quedó como un propósito trunco que se diluyó a lo largo de las distintas administraciones del Museo Histórico Provincial (MHP) durante las cuales tampoco llegaron a editarse otras publicaciones o catálogos basados en sus colecciones. Este primer volumen de los Anales que incluye un extenso ensayo de Pablo Montini, un análisis de obras de Gabriela Siracusano y apéndices visuales y documentales, se ocupa precisamente a la colección inaugural de pintura colonial del MHP. Rastrea su historia desde el dominio privado en casa del colec-

La publicación de los Anales del Museo Histórico Provincial de Rosario “Dr. Julio Marc” María Isabel Baldasarre

Anales del Museo Histórico Provincial de Rosario Dr. Julio Marc. I. Ángel Guido ISBN: 978-987-27372-0-7 160 páginas

217


cionista e ideólogo Ángel Guido y analiza sus “ritos de pasaje” hasta su incorporación y exhibición en las salas del Museo. Este recorrido implicó, como bien lo analiza Montini, tanto callejones sin salida como desvíos: el fallido intento de Guido por ubicar la colección en el mercado norteamericano y su final ingreso al patrimonio público perpetuando no el nombre del coleccionista sino el de dos comerciantes –Ramón y Ángel García– que donaron los fondos para la adquisición de dicho lote de pinturas. El tema concilia intereses que Montini ya viene desarrollando desde hace tiempo: la historia del coleccionismo privado en Rosario en paralelo con la génesis de sus instituciones. A partir de este y otros trabajos podemos sostener que logra, aunque éste no haya sido su objetivo primero, poner en cuestión o al menos complejizar el mote de “ciudad fenicia” utilizado incansablemente para caracterizar a la próspera pero poco “civilizada” Rosario de comienzos del siglo pasado. En un marco más amplio, los años que se extienden entre 1930 y 1940 fueron un momento de transición entre las más intuitivas prácticas de acopio y coleccionismo del siglo XIX y una museología que se pretendía más racional y profesionalizada. En un contexto de fuerte nacionalismo, se asistió a una intensa reflexión sobre las funciones y destinos que debían tener los museos, preocupaciones que no fueron exclusivas de las instituciones históricas sino también de las artísticas. Éstas fueron décadas de frenética creación de museos y restructuración de otros existentes. Entre otras iniciativas podemos mencionar, el proyecto del escultor Luis Falcini para el Museo Municipal de Buenos Aires (actual Museo Sívori) por concebir una institución pedagógica y moderna que comenzara su relato con el arte aborigen previo a la conquista, las intervenciones de Enrique Udaondo (director del Museo de Luján) respecto de la función pedagógica de los museos modernos y la creación en

1938 de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos con el fin de legislar en materia de protección y conservación del patrimonio (temas estudiados por Élida Blasco) y la concepción del MNBA como un “museo moderno” –al servicio tanto del gran público como de los investigadores– ideada por Atilio Chiappori (primero secretario y luego director del MNBA), que terminaron por plasmarse en su libro Luz en el templo de 1942. Sin embargo, como sucedió en muchos casos entre los que el MHP no fue la excepción, esta voluntad de profesionalización debió a la vez convivir con un pragmatismo que caracterizó a la mayoría de los museos argentinos desde su creación. El perfil institucional se iría definiendo a partir del patrimonio que se iba incorporando y el cual a su vez obedecía a los designios y gustos de los particulares que lo cedían u ofrecían en venta. En este punto cobra todo su sentido la pregunta que inicia el ensayo de Anales: ¿Por qué a finales de la década de 1930 se erige en Rosario –ciudad desprovista de arquitectura y arte colonial– un Museo histórico en el que la sección de piezas coloniales hispanoamericanas tiene un lugar tan pregnante? En primer lugar, el proyecto institucional tenía mucho de personal, o mejor dicho de personalista. Es decir, giraba en torno a las voluntades y los deseos de quienes estuvieron detrás de su fundación (el propio Guido fue nombrado secretario en el decreto de creación de 1936). No es posible pasar por alto aquí la labor de los hermanos Guido en pos de la revalorización y consecuente contextualización del arte indígena, mestizo y colonial. Así, el arte colonial que coleccionó Ángel, y aquel que ingresaría al MHP, fue el producido en los Andes durante los siglos XVII y XVIII al tiempo que el patrimonio soslayaría legados coloniales mucho más “cercanos”, al menos geográficamente, como el que poseía la ciudad de Santa Fe. La gestación del museo rosarino se corres-

218


pondía con un modo de vida rodeado por objetos históricos o historicistas, un transcurrir burgués que, en sus ejemplos más completos, se llevaba adelante en residencias de estilo neo-colonial diseñadas y ornadas por los hermanos Guido. En esta línea, la innegable catalizadora de la filantropía de la elite en aquellos años, la asociación “El Círculo”, incluía entre sus actividades al arte colonial hispanoamericano y estimulaba su coleccionismo. El principal coleccionista de arte de la ciudad, Juan Bautista Castagnino, poseía mobiliario realizado según el “estilo colonial jesuítico”, además de platería, tallas y pintura colonial. Lo mismo que Marc cuyas posesiones incluían muebles, pintura, imaginería, platería y numismática del período virreinal. Así, y tal como muestra el rico apéndice de imágenes, el primer montaje del MHP presenta una semejanza palpable con los interiores de las “casas-museo” de la burguesía rosarina de entonces, al punto que podríamos revertir la ecuación y hablar de “museo-casa”. En este sentido, y agradeciendo aquí los comentarios de la especialista Agustina Rodríguez Romero, observamos cómo las piezas coloniales aparecían para sus propietarios como más factibles de ser intervenidas, más “manipulables” que las de arte europeo. El apéndice visual es elocuente al respecto en tanto la Cabeza de Cristo del siglo XVII es en realidad un fragmento de un San Juan Bautista que Guido readaptó para colgar en su residencia privada. Se trataba de objetos devocionales, todavía utilizados para el culto doméstico de las casas de la elite y muchas de las prácticas privadas se hacían extensivas a sus usos dentro del museo: principalmente a la hora de su exhibición. Por ejemplo, las exposiciones de arte religioso que Guido organizó en 1941 y 1950 operaron una clara distinción entre el arte europeo –colgado al modo tradicional de una galería de arte– y el americano exhibido en los period rooms (una tendencia que Guido tomaría a su vez de Udaondo), que buscaban

evocar la religiosidad tal como era vivida en la colonia e, indirectamente, emulaban las residencias de la elite rosarina. Esta consideración sobre el arte colonial todavía empapado por su funcionalidad religiosa se correspondió además con la poca relevancia otorgada al análisis iconográfico y documental de estas piezas, intención que el trabajo de Siracusano –centrado sobre dos pinturas de la colección– busca zanjar. En su artículo la historiadora del arte repone parte del análisis interdisciplinario llevado adelante en el CEIRCAB-Tarea para demostrar cómo a partir de un exhaustivo examen material es posible identificar condiciones de producción y circulación hasta ahora desconocidas. Deteniéndose en la iconografía y en la relación palabra e imagen en ambas telas, reconstruye además la importancia que los episodios de las postrimerías tuvieron para la catequización en América. Ante la riqueza y diversidad de las colecciones del Museo Histórico que incluyen material arqueológico, textiles e indumentaria, numismática, armas, pintura, escultura y objetos de uso cotidiano que cubren un amplio espectro temporal desde los tiempos prehispánicos hasta el siglo XX, no podemos dejar de manifestar el interés por los volúmenes que continúen al presente. La posibilidad de hacer circular estas investigaciones no sólo arrojará luz sobre los derroteros de la historia institucional y regional, sino también permitirá avanzar en el conocimiento del coleccionismo privado y público de objetos diversos. Si el acopio de obras de arte y de piezas históricas han sido los territorios hasta ahora más abordados, el análisis de otros corpus menos explorados contribuirá a reafirmar el lugar insoslayable que el análisis de la cultura material tiene para el conocimiento histórico.

219


Rosario es un lugar en la mente. Lo contemporáneo también. Echen, las dos cosas multiplicadas

2011 es el año en que el Macro publicó Recetas. Las mejores sugerencias para mirar arte contemporáneo. Una idea impecable, ya que no es sino otro modo de poner en escena un nuevo Quién es quién en la cultura de los últimos años. ¿Por qué nuevo? Porque la invitación a participar en esa experiencia que finalmente se transformó en libro (sintetizar en unas breves líneas el modo en que observamos una obra de arte) en realidad partía de una trampa. Recién cuando tuve el ejemplar en mis manos me di cuenta: no estuvimos escribiendo sobre nuestra relación con las obras, sino con nosotros mismos. Sobre qué tenemos para agregarle a la obra. La obra (cualquiera sea) está ahí y por la razón que fuera intentamos incrustarle nuestra experiencia. Es un libro sobre lo que tenemos para ofrecer. 2011 es también el año en el cual Roberto Echen publicó un volumen de recetas que venía acumulando desde hace rato. La biografía de todo eso que fue sumándole a cada pieza de arte con la que generó una relación. Una relación o varias. Es un libro sobre sus amores.

Sobre –es contemporáneo? Ars auro gemmisque prior de Roberto Echen Rafael Cippolini

“Postular un modo de arte como arte contemporáneo sería lo menos contemporáneo en relación al arte (un anacronismo con resabios modernos”. En un texto definitivamente clásico, Gombrich afirma esa perogrullada que siempre nos resonó como un satori: “arte es aquello que los artistas hacen”. El tiempo verbal es fundamental. Los artistas hacen. No “deberían hacer”. Presente y no condicional. En 1897, junto a Arturo Muscari, Julio Molina y Vedia y otros osados caballeros, Macedonio Fernández se instaló en una isla en Paraguay con la idea de fundar una colonia utópica. Hay muchas versiones, entre las más verosímiles la que argumenta que los mosquitos eran feroces. No pudo ser, la colonia no prosperó, pero el gesto imprime: las utopías no se enuncian, se intentan. Uno de los nombres del Macro es Roberto Echen y nada tiene de utopía.

Roberto Echen –es contemporáneo? Ars auro gemmisque prior Ediciones Castagnino+macro ISBN: 978-987-23363-9-4 98 páginas

220


“Creo que en el núcleo está la posibilidad de que todo objeto, todo acto puede devenir artístico. Esto significa que el arte no sería ya un problema de factura o de recurso tecnológico, sino un modo de vincularse con los objetos, con los sucesos y, por sobre todo, como el otro”. Queda claro que Echen no sólo festeja la dispersión, la “no existencia de una línea dominante”, sino la de los otros. Es lo que hacen las obras de arte: encuentran sus nutrientes en las miradas de los espectadores. Por supuesto, hay nutrientes y nutrientes.

sación, no idea) que me transmite el libro de Echen: el arte siempre fue la opción equivocada y precisamente por eso lo elegimos. Sabíamos que en la isla del Paraguay había muchos mosquitos y la colonia fracasaría, y aún así (más no sea en sueños) preferimos esa posibilidad por sobre cualquier otra. Y la elegimos mucho, tanto hasta que deja de ser una posibilidad y se convierte en esto que seguimos haciendo. Hoy lo ratifico: si sucede que reencarno, volveré a elegir el error. La lectura del libro de Echen acaba de confirmármelo.

Sin dudas es una pedantería repetir inmediatamente después de cada proposición “ya lo hice”. Alguien sugiere “sería bueno realizar tal cosa” y su interlocutor remata “ya lo hice”. El libro de Echen, contrario sensu, tiene buenos modales. Al volver a poner en escena todas esas intervenciones, al traerlas al presente –porque cualquier antología no sólo implica reunir sino presentizar– vuelve a poner en consideración aquello que no está cerrado, sino que sigue en marcha. “Curadurías internas se instala en un espacio no plenamente definido, un espacio en el borde de lo que sería el campo del arte, no como espacio de investigación, tampoco de rechazo de los valores, cánones y parámetros aceptados como pertinentes a ese campo, sino como mera posibilidad ni siquiera plenamente actualizada en su materialización. Como el Macro”. Estaba en tercer año de la secundaria cuando, en una librería de viejo, encontré un libro de Marcel Schwob que sólo ostentaba el subrayado de una frase: “sólo lo incierto está vivo”. Sin embargo, tardé en entender que la incertidumbre es una tarea ardua. Nos enamora, porque nos señala todos o muchos caminos, pero el vértigo a equivocarnos nos lleva a esquivarla rápidamente. Ahora bien: si muy convencidos elegimos la opción que sabemos equivocada ¿no estamos así embriagando a la incertidumbre? Es la primera sensación (atención, dije sen-

No es que me aburra tanto Arthur Danto. Estaría mintiendo si lo afirmara. Lo cierto es que me aburren más los que hace unos años lo adulaban y ahora se jactan de hartarse con él. De momento me agrada imaginarme que este filósofo festejaría esta cita echénica: “un comentario de los artistas iniciadores del pop-art estadounidense sobre su propio arte era que su conocimiento del arte europeo se había formado fundamentalmente a partir de reproducciones impresas. Para mí, que llegué al arte desde Rosario hace unas décadas, ese comentario se transformó en mi propia legitimación”. Este libro que intento reseñar –nunca fui un buen reseñista– no deja de provocarme ideas. Me doy cuenta que no es que me gusten tanto las reproducciones, menos aún que las acepte como una fatalidad. Sino que me encanta sentirme a mí mismo como una reproducción. Pero no dude el lector que también en esto estoy haciendo trampa: no es más que otra estrategia para librarme del odioso peso de la originalidad. Lo repito aunque canse: somos originarios del error. Posiblemente Echen no esté de acuerdo con ninguna de estas aseveraciones. Pues bien, sería otro error. Cuando elegimos el error ya no tiene sentido saber si estamos en lo cierto o no. Atención, jamás se confunda al error con la mentira.

221


Sería una torpeza del calibre de confundir a la ficción con la mentira.

la impresión que persiste cuando releo –es contemporáneo? justamente es la inversa: ¿será que, de algún modo u otro, la contemporaneidad es esa época en la cual todos los saberes están al servicio del arte? Posiblemente sea otro error, pero como apostamos una vez más por el error, silogística y quizá no tan paradójicamente estamos nuevamente en lo cierto. Es parte de su magnetismo: si muchos de los textos lo son en tanto aportes curatoriales, estos se proponen ante todo –según leemos– a condición de alcanzar un espacio que se quiere (o se sabe) anómalo. O sea, donde las normas se comportan de otro modo. “Esos pocos lugares van a estar participando de la misma situación que los que nunca fueron pensados para tal fin”.

A los que aún no tienen su ejemplar de la referida publicación les cuento: hasta el momento –es decir, hasta la mitad de este texto, hasta estas palabras que están leyendo en este mismo momento– no hice otra cosa que glosar y comentar tres de las categorías que Roberto Echen propone como contenedores de sus escritos. Un libro es por definición un orden –así como toda curaduría resulta por default una clasificación– y este trayecto fue demarcado en cuatro capítulos. Es otra coartada: de este modo nos obliga a descifrar por qué ubicó cada uno de sus textos en el sitio en que los puso y no en otro. “Porque la ciudad es el espacio del trabajo, de la convivencia, de la demanda, de los deseos y necesidades insatisfechas. Y por eso debería ser el lugar de la maravilla cotidiana. Esto ‘sería’ la muestra de que puede, debe serlo. Lugar de disfrute”. Otro ejemplo de la sabiduría de Echen. Señalarnos que la ciudad (¿acaso el Macro no es o era parte de la ciudad?) debe ser vista con los ojos de David Vincent (el protagonista de la serie Los invasores, que el autor cita desde el epígrafe del catálogo de la muestra “Macro extraterrestre”, incluido en el libro). De David Vicent, sí, pero dado vuelta.

Siguiendo estos razonamientos (insistamos, ¡qué bueno pensar que todo está al servicio del arte!) se impone entonces que –es contemporáneo? forme parte de la bibliografía obligatoria de currículas como la medicina, la ingeniería, la teología, la urbanística, la filosofía, la física y tantas otras. Por ejemplo, un bioquímico debería saber cómo nombrar a Emilio Disi en una muestra de arte, materia sobre la cual el libro instruye. “Cuando esa modernidad que supone los encuentros –y las búsquedas– (que deberían tener la intensidad de la revelación), ve caer sus pilares, lo que queda es un espacio vacío, o, en todo caso, zonas no unificables en un gran tema colectivo o en una razón universal que pudiera guiar las acciones, una topología en la que no hay nada afuera o adentro y que postula que todo es posible: anything goes”. Estas breves líneas, que forman parte de un catálogo titulado Lo imposible o lo que siempre estuvo ahí bien podría sintetizar todo un credo. Y de hecho lo hace. La visión, la temperatura de una época. O mejor, una ecología.

“Curatorialmente, nunca tuve prurito en aceptar cuánto postula de ‘obra’ una curaduría, lo que me permitió situarme en espacios anómalos que no proponen un pensamiento que trata de justificarse desde los lugares epistemológicamente establecidos, sino de retomar –repensándolo– lo que el arte ha aportado desde la diferencia al pensamiento epistemológico contemporáneo”. El arte es conocimiento, por supuesto. Pues bien ¿qué tipo de conocimiento? Durante mucho tiempo (pero mucho) estuvo al servicio de otros, incluso de su misma historia, más no sea para negarla. Incluso hoy hay quienes sólo pueden concebirlo a modo de un epifenómeno de lo político. Sin embargo,

Sean bienvenidos al ecosistema Echen.

222


Contratiempos Trayectos y tensiones en la fotografía argentina y latinoamericana contemporánea

el desafío de bucear en la especificidad del lenguaje fotográfico –suponiendo que tal especificidad existe– y de ensayar algunas conclusiones –aún precarias, teniendo en cuenta la naturaleza propia de la fotografía– atendiendo al análisis del corpus que habíamos seleccionado... o, al contrario, que nos había interpelado. Así, contratiempos alude –en principio y para nosotros– a la cuestión de la temporalidad como base de la singularidad fotográfica hecha, simultáneamente, de tiempo y luz. Sobre todo si hablamos de la fotografía tradicional, perspectiva que ocupa casi la totalidad del texto porque Martín Sansarricq explorará “El carácter indicial de la imagen fotográfica en la era posanalógica”. Este artículo, junto al de María Crosetti “Consideraciones sobre la fotografía en la prensa: sentido y credibilidad”, integra el apartado “Reflexiones” que pone en el tapete los tópicos centrales del actual debate conceptual centrado en dos aspectos convergentes: el cambio del soporte (de la imagen argéntica a la imagen numérica) y el régimen del sentido (verdad y verosímil en la imagen foto). Por otra parte, la consideración de la temporalidad como eje de nuestra investigación (en la base de esta publicación está el Proyecto: “Historias y Estéticas Fotográficas. Una mirada semiótica sobre trayectos y tensiones en la fotografía artística y documental argentina y latinoamericana contemporánea” radicado en la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad Nacional de Rosario) atraviesa de lado a lado todos los ensayos reunidos en este volumen que aparecen agrupados en diferentes secciones que ahora continuaremos comentando; salvo el prólogo y los reportajes, claro está, que guardan una relativa y respetuosa autonomía del resto de los escritos, protegidos como están por las reglas del género. La sección “Miradas” reúne los artículos de Mirtha Marengo, “La mirada femenina: subjetividad y género en la fotografía de Adriana Lestido”, y de Jorge Olivera “Construcción subjetiva de la imagen fotográfica. El Gigante

Elizabeth Martínez de Aguirre

Elizabeth Martinez de Aguirre (Comp). Contratiempos. Trayectos y tensiones en la fotografía argentina y latinoamericana contemporánea. UNR Editora ISBN: 978-950-673-930-0 164 páginas

Desde el misto título: Contratiempos, este libro ya plantea algo del orden de lo enigmático que, por otra parte, bien podría considerarse alineado con uno de los misterios fundantes y fundamentales de la fotografía porque, como bien se preguntaba Roland Barthes, ¿cuál sería –en suma– el “genio” fotográfico, el rasgo esencial que nos permitiría distinguir a la fotografía de la comunidad de las imágenes? De modo que comenzamos a preparar esta compilación afrontando 223


de Paruro: Martín Chambi”, que indagan en torno al posicionamiento de la mirada en la fotografía de autor… una mirada sociológica y otra etnológica, podríamos arriesgar. En cualquier caso, dos subjetividades diversas que marcan la contrariedad de los tiempos en los cuales estas imágenes fueron realizadas y de las historias que albergan como así también de las estéticas –igualmente históricas– que guiaron la configuración de cada una de ellas. Un capítulo aparte agrupa bajo la denominación “Relatos” aquellos trabajos que indagan sobre la capacidad narrativa de la fotografía documental; esto que John Berger ha denominado otra manera de contar. Estos estudios interrogan a las narrativas visuales y políticas que han surgido recientemente en nuestro país en el marco de los conflictos sociales: “La muestra días de furia: entre la comunicación y la estética un nuevo rol político para el foto reportero en la Argentina de 2002” de Paula Siganevich; “Esto ha sido. Observaciones sobre la foto política en la Argentina contemporánea” de Claudia Rivarola y “La dimensión testimonial de la foto de prensa, o por qué revindicar el relato de un tiempo vivido en común” de Cecilia Echecopar. Desde otra perspectiva temporal, los escritos reunidos en “Evidencias” ofrecen una interpretación de dos tramos cruciales de nuestra historia: el Terrorismo de Estado y la Guerra de la Triple Alianza a partir del análisis de la fotografía como expresión artística y testimonial de la memoria y de la historia. Los artículos: “Representar la desaparición. Una reflexión sobre el uso de la imagen fotográfica en la construcción del recuerdo” de Leticia Rigat; “Huellas de una ausencia. Aproximaciones a la obra de Gustavo Germano” de Lara Pellegrini y “Alianzas y desencuentros entre la pintura de caballete inspirada en las contiendas bélicas y la fotografía de guerra” de Carolina Cansino analizan las potencialidades de la imagen foto para interpretar los hechos del pasado y no solamente representarlos como una tábula rasa. Georges Didi-Huberman, al analizar aquellas fotos del Holocausto

advertía: “para entender hay que imaginar”. Con la economía simbólica que le es propia, la fotografía piensa el pasado y al hacerlo nos permite visualizar un nuevo tiempo, un porvenir basado en parámetros superadores de los que habilitaron o promovieron aquellas desgracias de nuestra historia que, por supuesto, no deben repetirse. Al fin, esta breve reseña se ha convertido, prácticamente, en un comentario del índice de un libro que –es nuestra esperanza– atraiga la atención de los lectores. Será por eso que sólo hablamos parcialmente de su contenido, para instalar alguna curiosidad, un cierto suspenso, que justifique su lectura. También es inquietante la fotografía de tapa cedida por Hersilia Álvarez para esta edición. Pero contratiempos tiene, también, otras resonancias: tiempos cruzados, dificultades encontradas, contrariedad y resistencia y otros significados que podrán surgir de las asociaciones posibles. Entre ellas, los contratiempos en términos de trayectos y tensiones que hemos avistado durante el transcurso de esta investigación en algunas de las prácticas fotográficas de nuestro país y Latinoamérica. Estos trayectos y tensiones agrupados justifican, también, el ordenamiento de los artículos en capítulos y expresan, indudablemente, el conjunto de hipótesis con las cuales trabajamos. ¿Quiénes? Es otro aspecto del libro sobre el cual no dijimos demasiado todavía: sólo los nombres propios de autores/investigadores. Docentes con diversas trayectorias y experiencias y egresados recientes de la carrera de Comunicación Social de la UNR hemos llevado adelante esta investigación cuyos resultados están parcialmente expresados en este libro. Si no aclaramos más es porque estamos convencidos de que el conocimiento habilita y es igualador y democrático como el sufragio. Todos iguales en la escritura, nos sentimos muy orgullosos de haber podido producir este material en el marco de la Universidad Pública y ya estamos preparando el segundo volumen, para el fin de este año. En tanto, recibiríamos con mucho agradecimiento las opiniones críticas de nuestros lectores. 224


Sobre la digestión del arte actual

Desde la creación del macro, esa expansión a lo contemporáneo del museo Castagnino, sus responsables asumieron el desafío de acortar la brecha entre el público y las producciones de sus contemporáneos; de dar visibilidad al arte actual –el cual en muchas ocasiones se antoja tan esquivo a la mirada–, al tiempo que ensayar estrategias para brindar a los visitantes herramientas que provoquen la activación de diversos sentidos sobre las obras exhibidas. Claro que no siempre han tenido éxito. No obstante, la insistencia en la apuesta por esa entelequia que es el arte contemporáneo sin dejar de exponer las dificultades que encarna –desde la propia definición de la noción respecto del arte moderno hasta la absoluta incomprensión y el consecuente desinterés de una comunicad por eso que el museo colecciona, pasando por la irritante estética del cinismo a la que algunos artistas adscriben y someten al público–, es decir, el hecho de que la institución no esquive el problema y dedique parte de sus actividades a experimentar formas de acercar el arte contemporáneo a la comunidad, es de por sí loable. Cabe recordar que, a fines de 2005, pasado un año de la apertura del macro, se publicó una edición sencilla pero elocuente de una selección de los comentarios escritos por la gente sobre el museo y las exposiciones en los cuadernos de visita. No se trataban precisamente de palabras condescendientes con lo que se veía. Había expresiones de todo tipo, halagos e insultos, sugerencias y denuncias. Sin embargo, aquella edición comprobaba la existencia de una toma de posición que incitaba a otras para erradicar la indiferencia y demostraba también cómo la institución tenía intención de trabajar sobre las respuestas de los visitantes. Estudiaba sus críticas en beneficio de pensar nuevos modos de exhibir arte y de continuar la construcción de un espacio público para la cultura. En otras palabras, a diferencia de otras tantas instituciones que solo ofrecen el libro de visitas por protocolo y al terminarse lo archivan, el macro lo

Reseña sobre RECETAS. Las mejores sugerencias para mirar arte contemporáneo Viviana Usubiaga

AA.VV. RECETAS. Las mejores sugerencias para mirar arte contemporáneo Ediciones Castagnino+macro ISBN: 978-987-26457-0-0 64 páginas

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utilizaba como una herramienta efectiva de autocrítica y comunicación. En 2010 el museo publicó otro pequeño y singular libro. Su tapa con estampado de mantel y su título desconciertan un poco y despiertan sospechas sobre lo que podría pretender ser un infructuoso manual de instrucciones para “mirar arte contemporáneo”. Pero al recorrer sus páginas el lector comprende claramente su objetivo. Como parte de un proyecto del área de Educación, la publicación compila una serie de recetas para apreciar el arte actual escritas por distintos actores del campo cultural que fueron convocados para “crear un ‘pequeño recetario’ o guía donde pudieran trasmitir su particular forma de mirar una obra, no como una fórmula a imitar –única y exacta–, sino como una posibilidad entre tantas”. Estas recetas estuvieron disponibles en cada muestra como hojas coleccionables desde noviembre de 2007 hasta el mismo mes de 2010. En su presentación se explica que la experiencia del trabajo diario y la observación de los visitantes les permitieron comprobar que “el público del museo, ante la complejidad de las producciones contemporáneas, muchas veces se encontraba en un estado de incertidumbre, disgusto o indiferencia”. Artistas en su mayoría, pero también críticos, una galerista, escritores, tres colectivos de artistas, un contador y pintor, un contador y director financiero de una empresa, dos actores payasos, una diseñadora de joyería y un conductor de televisión son los autores de las recetas. Junto a ellas se publican las notas introductorias: “¿Existe alguna receta para comprender arte contemporáneo?” de Marcela Römer, directora del Museo Castagnino+macro, quien explica el objetivo de ese juego pedagógico que plantea el libro como la reunión de opiniones de gente interesada por las producciones artísticas que ayudan a la comprensión constructiva del arte contemporáneo; “El arte de recibir”, de la artista culinaria Nilda Siemienczuk donde al repasar las reglas maestras de un anfitrión

casero, de alguna manera se proyecta al museo como una institución anfitriona que debe tender en cada actividad su mejor mesa para que el público invitado sienta que es siempre bienvenido y que todo lo que sucede allí es apetecible; “Arte contemporáneo. Cómo dejar de decir no entiendo”, de la artista Diana Aisenberg apunta algunas recomendaciones precisas para todo público comenzando por el no autoexcluirse y propiciando la curiosidad, la búsqueda en el bagaje personal y el reconocimiento de los códigos culturales de nuestra época; y “Esto, ¿con qué se come?” del por entonces subdirector artístico del museo, Roberto Echen, en el que haciendo pie en la idea culinaria de las recetas llega, por un lado, a cuestionar quiénes son las voces autorizadas, los “detentadores de saber”, que damos por sentado son los únicos capaces de enunciar cómo cocinar una muestra de arte contemporáneo, y por el otro, ubica esta iniciativa editorial en el lugar nuclear del “problema epistemológico que conlleva el hecho de pensar el arte hoy”. Al promediar su lectura, los prejuicios sobre la pedagogía en el arte logran diluirse al encontrar una serie de textos francos, que apelan tanto a la no subestimación del espectador como a la necesidad de su activa participación frente a la obra de arte. Entre tantas recetas, algunas poéticas, otras normativas, hay varios ingredientes que coinciden y todas de diferentes modos, invitan a adentrarse en esa fe que cada uno de los autores profesa por el arte. Ese lugar de excepción que nos propone otros mundos posibles, aunque cada vez de modos más complejos. Por eso ante una obra contemporánea los autores ensayan que son necesarios: humor, buena predisposición, amplitud mental y capacidad de disfrute (Paola Vega); escuchar, oler, mirar, buscar información, comunicarse o encontrarse con el artista (Carlos Herrera); atreverse a experimentar distintos territorios para reformatear la visión del mundo (Rafael Cippolini); seguir los pasos de un ejercicio ocioso que no tendrá

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consecuencias inmediatas en la vida práctica pero que puede también ayudar a comprender el funcionamiento del universo entero (Max Cachimba); desprenderse de lo “real” para dejarse absorber por el arte cuyo papel es cambiar el orden de las cosas y no contribuir a su continuidad (Laura Cogo); seguir algunos de los 500 consejos de Los pasteles rojos como proponerse como guardia de seguridad del museo para poder ver obras todos los días hasta agradecer al arte por hacer más linda la vida; relacionar la pieza que se ve con otras referencias formales y conceptuales (Julia Romano); generar preguntas para comprender eso que nos exige un esfuerzo mental y emocional (Luis González Palma); seguir las derivas del proceso creativo de José Luis Parodi; enterarte que desde el punto de vista de la macroeconomía, estos bienes únicos y escasos que son las obras de arte han sido la mejor inversión legal del mundo en las últimas siete décadas (Jorge Scosceria); relajarse y sentir que no se tiene la obligación de entender nada y felicitarse luego por haberse permitido disfrutar de una experiencia única (Leo Chiachio y Daniel Giannone); despertar al niño interior porque seguro tiene una proyección diferente a la de nuestro ser adulto (Tito y Pelusa); descubrir todos los elementos que presenta, sus relaciones internas y con otras imágenes, ponerse en el punto de vista del artista y su contexto (Rubén Lescano); dejar de lado el gusto personal y saber que muchas veces la significación de una obra está en la acción implicada más que en su apariencia (Alberto Goldenstein); comenzar a ver libros de arte desde antes de saber leer y luego dejarse llevar, no hay que ser experto, “toda ignorancia se convierte en felicidad” (Angélica Gorodischer); sentirse desorientado o perdido puede ser una buena plataforma de partida para abrirse a una percepción distinta (Cecilia Richard); no dejarse impresionar por lo consensuado, sacar conclusiones propias (Orly Benzacar); ejercitarse en la degustación del arte propuesta por Cultura Pasajera; se-

guir verso a verso la preparación de Beatriz Vignoli cuyos ingredientes son sensibilidad, desprejuicio e información; concebir al museo como un espacio experimental donde todas las leyes que rigen la ciudad se van apagando de a poco (Leopoldo Estol); descolgarse de todo lo que se hace habitualmente (Alberto J. Llorente); atender aunque poco importen a dos elementos fundamentales de la receta haiku de Rosa Chancho: los títulos y el año; tomarse tiempo en medio de la vida fast-food (Delia López Zamora); andar y elegir una obra para acercarse y alejarse varias veces de ella (Margarita García Faure); no interpretar una copa vacía sobre una base dejada luego de un vernissage como una obra, puede no serlo (Cristian Segura); estar dispuestos a un ejercicio de reaprendizaje, el mismo que hacemos cuando algo nuevo aparece ante nosotros (Gastón Pérsico); acercarse a una obra sin buscar semejanzas con la naturaleza, ni representaciones y estar sensible a los intentos de poetizar el mundo (Gyula Kosice); entrenar, educar la sensibilidad, formarla más allá de las emociones más primarias, tener referencias y saber que el “arte contemporáneo es un espacio donde todos caminamos medio a oscuras, tratando de contar con alguna imagen, la incertidumbre del presente” (Marcos López); no juzgar la obra exclusivamente desde la óptica retiniana y buscar en ella una clave para acceder a un nuevo tipo de conocimiento y de lenguaje (Pablo Reinoso); realizar anotaciones, diagramas o dibujos para evitar la adjetivación sobre lo que se ve (Claudia del Río); dedicar a la obra una observación lenta y reiterada (Eduardo Serón); repensar la posición del ser humano en el Cosmos y respecto del arte (Adrián Villar Rojas). Entre las intervenciones de este libro subyace el debate que opone una mentada autosuficiencia de la obra a la necesidad de información (textual) para poder disfrutar del arte contemporáneo. De alguna manera, el hecho de que esta publicación surgiera da una respuesta a esta encrucijada.

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Este libro es en sí mismo una muy buena noticia y cumple de forma admirable con la intención del Museo Castagnino+macro y del Ministerio de Innovación y Cultura de la Provincia de Santa Fe de otorgar visibilidad a las residencias. La presentación de Marcelo Romeu (Secretario General de dicho ministerio) habla de las residencias como una forma de explorar la provincia en mayor profundidad, mientras que la de Marcela Römer (directora de dicho museo) habla de la expansión y el intercambio y de ampliar las expectativas y perspectivas. A primera vista, podrían parecer metas opuestas, pero esa poderosa tensión de doble filo es justamente una característica fundamental de lo que genera un programa de residencia. Roberto Echen (Curador del Departamento de Agenciamientos Artísticos del CEC) articula la dinámica de esta práctica con más detalles, identificando el Programa de Residencias para Artistas en Industrias de la provincia de Santa Fe como contemporáneo, situándolo en relación a la modernidad y sus promesas. Presenta cuestiones muy pertinentes acerca de los programas de residencia y la formación artística, destacando la tendencia que ha tenido el segundo en distanciar las prácticas artísticas (hiperespecializadas en la confección manual) de la industrialización –y la producción en serie en particular– que tan profundamente ha permeado todos los demás aspectos de nuestra cultura. El aprendizaje de técnicas habitualmente excluidas de lo que se considera la caja de herramientas de un artista en un contexto industrial claramente genera un nuevo abanico de posibilidades para los artistas involucrados, pero también ejerce una influencia muy positiva para los sistemas de producción que están infiltrando. Echen sitúa el Programa de Residencias para Artistas en la provincia de Santa Fe en el contexto de la pulseada histórica entre ciudad y campo. En este caso, contrasta la costumbre de antaño de algunos artistas de alejarse de las urbes, con la práctica de hoy:

RESIDENCIA EN EL MUNDO Tamara Stuby

Residencia en el mundo Ediciones Castagnino+macro Edición bilingüe español - inglés ISBN: 978-987-26457-2-4 96 páginas

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una búsqueda de nuevos horizontes. Es aquí que se hace evidente que uno de los desafíos que enfrenta el arte no es únicamente el de recuperar el contacto con la industria, sino el de escapar del recinto estrecho que representan las industrias culturales, concentradas casi exclusivamente en los centros urbanos. Entonces, las residencias no representan una regresión a un estado idílico e idealizado, sino una liberación de los límites impuestos por su propio desarrollo autónomo. Los testimonios de los participantes son muy ricos en su diversidad y constatan sin lugar a dudas los múltiples beneficios de la experiencia. Demuestran las distintas ventajas inherentes en un programa que dirige en gran medida el tipo de producción (en el caso de Artistas e Industrias) comparado con otro que ofrece libertad total a sus participantes (el caso de las Residencias para Artistas). Entre texto e imagen, comunica la esencia de la experiencia de los participantes, y da una noción del potencial para el crecimiento que ofrece el programa. Finalmente, es muy notable encontrar instituciones cumpliendo un papel de liderazgo en este rubro, dominado hasta la fecha (en términos de cantidad, por lo menos) por iniciativas independientes luchando para sostener su propia existencia, y esa novedad es una muy buena razón para festejar.

Separata, año XI, n. 16 Lucio Piccoli

Separata, año XI, nº 16, octubre de 2011, CIAAL, UNR, ISSN 1853-3353, 47 páginas.

En el mes de octubre de 2011 se ha publicado el decimosexto número de la revista Separata, el órgano difusor del Centro de Investigaciones del Arte Argentino y Latinoamericano (CIAAL) con sede en la 229


Universidad Nacional de Rosario que, luego de diez años de labor ininterrumpida, ha llegado a convertirse en un punto de referencia obligado entre aquellas experiencias editoriales que se abocan específicamente a los problemas de historia del arte en nuestro país. La dirección del CIAAL, a cargo del historiador Guillermo Fantoni, ha integrado muy pertinentemente a lo largo de todos estos años no sólo el esfuerzo de numerosos investigadores locales, varios de ellos miembros del CIAAL, sino además el de muchos otros que, perteneciendo a otras universidades nacionales, han contribuido al desarrollo y discusión de los principales tópicos de la historia del arte argentino. En esta ocasión la revista lleva por título “Imágenes entre dos siglos: el artista, la naturaleza, la ciudad” y cuenta con la participación de Clementina Zablosky, María Isabel Baldasarre y Nicolás Boni. Aunque con objetos y espacios de análisis muy disímiles, los tres estudios oscilan sobre un horizonte temporal común que define una serie de problemas históricos muy precisos: el análisis de ciertos efectos culturales de los procesos de modernización acaecidos en Argentina durante fines del siglo XIX y principios del XX es, de hecho, una preocupación que comparten los tres artículos. En primer lugar, el estudio de Clementina Zablosky “Fragmentos para una historia del paisaje en Córdoba”, ensaya una interpretación acerca de cómo la transformación efectiva de la fisonomía del espacio cordobés –sobre todo a partir del fomento a la inmigración, el tendido de las redes ferroviarias y la construcción del sistema hídrico en el territorio provincial– contribuyó a forjar un determinado tipo de paisaje como símbolo local. Luego de establecer ciertas filiaciones teóricas con algunos trabajos clásicos de la sociología de la cultura, como es el caso de La ciudad y el campo o Marxismo y Literatura de Raymond Williams, la autora rastrea, por un lado, la manera en que Bialet Massé participa activamente durante el período de construcción del Dique San Roque (1886-1891) –obra infraestructural de gran

envergadura que transforma drásticamente la geografía cordobesa– para ponderar, años más tarde y con motivo de la confección del célebre Informe (1904), los rasgos más notables y pintorescos del nuevo paisaje serrano. La belleza del lugar, explica la autora, remite ya no sólo a los accidentes geográficos naturales, sino al lago San Roque que se ha formado como consecuencia del dique, a las numerosas quintas y chalets edificadas a lo largo de los arroyos, a los ranchos que se han convertido en hermosas casas y a los sanatorios y hoteles que engalanan la nueva topografía del valle y la sierra del oeste provincial. Por otro lado, Zablosky considera un óleo de Honorio Mossi y otro de Herminio Malvino que ilustran dos paisajes locales típicos en 1895 y permiten vislumbrar dos perspectivas diferentes del paisaje cordobés finisecular: Córdoba en 1895 es la obra pictórica de Mossi que construye una visión panorámica de la ciudad donde los rasgos urbanos típicos del siglo XIX conviven con los primeros resultados del proceso de modernización capitalista; en Arroyo Serrano Malvino confecciona detenida y minuciosamente una instantánea que representa de forma mimética los contornos de un curso de agua, la diversa coloratura de la vegetación y las distintas formaciones rocosas como algunos de los elementos naturales más característicos. Las obras de estos dos pintores italianos, cuyos itinerarios de formación y consagración en los incipientes círculos culturales cordobeses son detalladamente analizados por la autora, se conciben aquí como fundantes de una tradición pictórica del paisaje en el campo del arte local, que algunos discípulos de Mossi como Pedro Centenaro, Deodoro Roca, Octavio Pinto y Guillermo Butler se encargarán de desarrollar hasta bien entrado el siglo XX. De esta manera que atiende tanto a la forma resultante como a los procesos de formación de la dimensión espacial, Zablosky opera con una conceptualización compleja de la categoría “paisaje” que permite incorporar no sólo las dimensiones materiales y concretas del territorio, sino además las representaciones 230


propias de las estructuras de sentimiento y experiencia históricas que se constituyeron acerca del espacio cordobés de entre siglos. El estudio de María Isabel Baldasarre “Mujer/ artista: trayectorias y representaciones en la Argentina de comienzos del siglo XX” aborda el caso paradigmático de las representaciones sociales y culturales que tres célebres artistas nacionales –Lola Mora, Ana Weiss del Rossi y Emilia Bertolé– confeccionaron acerca de sí mismas. Desde un núcleo de preocupaciones relacionado con la problemática del género y a partir de analizar y confrontar los autorretratos y las fotografías que de estas tres mujeres se habían popularizado en aquel entonces, la autora indaga los diversos estereotipos a los que ellas pretendieron adscribir o refutar en vías de su consagración como artistas reconocidas. Sin dejar de prestar cuidadosa y puntual atención a los recorridos y trayectorias de formación, ámbitos de sociabilidad y mecanismos de instalación en los precarios circuitos comerciales artísticos, Baldasarre ilustra, de esta manera, cierto cariz de una experiencia de la “modernidad periférica”, a saber, los canales originales y particulares que supo encontrar en nuestro país el proceso de profesionalización de la disciplina artística. A diferencia de los rígidos estamentos que prestablecían gran parte de los discursos y prácticas en las sociedades europeas, los vertiginosos procesos finiseculares de modernización capitalista en Argentina, habían contribuido a definir unas mucho más laxas y permeables fronteras sociales, susceptibles de ser franqueadas por los más intrépidos. Las diversas estrategias de presentación social –Weiss y Bertolé más ligadas a los roles tradicionales de la maternidad y el hogar por un lado, y el de la seductora femme fatale, por el otro, mientras que Lola Mora ensayaba quizás la propuesta más audaz mostrándose, por momentos, con apariencia desalineada y en ropas de trabajo–, son revisitadas por Baldasarre para así señalar el modo en que estas tres protagonistas se posicionan no sólo como artistas plásticas en un campo cultural en formación, sino además como

“nuevas mujeres” en los albores del siglo XX argentino. Por último, en “Imágenes modernistas en Rosario en los inicios del siglo XX: vitrales, mayólicas y pinturas murales”, el reconocido escenógrafo e investigador miembro del CIAAL, Nicolás Boni, rastrea las tempranas manifestaciones estéticas del modernismo y las vicisitudes de los espacios de formación que significaron los talleres fundados por Buxadera y Fornells, los primeros maestros catalanes radicados en Rosario. Boni restituye magistralmente la historicidad de tres obras modernistas locales, a partir de la combinación de un extraordinario y minucioso análisis sobre los detalles más específicos de las composiciones decorativas en cuestión –los vitrales de la sede del Club Español, el tríptico de mayólicas de la fachada de la casa emplazada en calle Mitre entre Urquiza y Tucumán y las pinturas murales de Cayetano Gratti en el plafond del Círculo Italiano– con los resultados de un exhaustivo trabajo de archivo. De esta forma, el examen pormenorizado de las figuras antropomórficas y las escenas mitológicas –alegorías de la naturaleza representadas en las distintas composiciones– se desarrolla en concomitancia con un análisis las relaciones y coyunturas sociales implicadas en la concreción de cada obra. Mediante la pesquisa documental llevada a cabo por el autor se reconstruye, además, el itinerario de difusión y establecimiento de las técnicas e imágenes modernistas que definieron en Rosario una original constelación: allí, en los talleres artesanales de Salvador Buxadera y Eugenio Fornells, se formarían, en mayor o en menor medida, muchos de los primeros artistas de la ciudad como, por ejemplo, Enrique Munné, Durigon, Pedro Vicari, Nicolás Melfi y, quizás el más reconocido de todos, Antonio Berni. La decimosexta edición de Separata plasma, una vez más, la meritoria estrategia de investigación que el equipo del CIAAL pergeña, desde hace más de una década, en favor del desarrollo de la historia del arte argentino y latinoamericano. 231


ANUARIO

CRONISTAS Irina Garbatzky, Marcos López, Lucía Bartolini, Matías Sarlo, Willy Donzelli, Xil Buffone, Alicia Simeoni, Claudia del Río, Halim Badawi, Willy Donzelli, Fernando Romero De Toma, Alberto Carlos Gentilcore, Gastón Miranda, Irene Ocampo, Rafael Cippolini, Diana Fernádez Irusta, María Isabel Baldasarre, Ángel Mestres, Marc Caellas, Raúl D’Amelio, Nancy Rojas, Cecilia Lenardón, Maximiliano Rossini, Lucía Benetti, Ana Martínez Quijano, La Colectiva, Norberto Puzzolo, Beatriz Vignoli, Román Vitali, Laura Glusman, Pablo Makovsky, Lucrecia Palacios, BOGA / Galería de bolsillo, Luciano Ominetti, Paulina Scheitlin, Pablo Resoalve, María Laura Carrascal, Club del dibujo, Dardo Ceballos, Luis Vignoli, Juan Mascardi, Norberto Moretti, Franco Ingrassia, D. G. Helder, Andrea Ostera, Daniel García, Clara Garavelli, Mónica Bernabé, Sabina Florio, Francisco Tanzi, Gilda Di Crosta.

Eduardo Stupía

EDITORES Pablo Montini, Georgina Ricci, Lila Siegrist

Anuario. Registro de acciones artísticas, Rosario 2010 ISBN: 978-987-26626-0-8 168 páginas

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casi naturalmente de ser un mero territorio geográfico para proyectarse como espacio de acciones y debates sin fronteras físicas, lo cual equivale a decir que su manera de ser en el campo de las ideas no reconoce fronteras sino conflictos. Ese mismo carácter impregna este Anuario, y lo convierte en un vehículo activo que traslada el debate allí donde se lo lea, para confirmar el axioma que dice que el único territorio posible es el territorio de las ideas.

Un anuario podría parecerse a un house organ burocrático, o a una enumeración celebratoria de eventos, o a una mera acumulación de data acerca de sucesos cuya importancia parece sostenerse en el hecho de que estén allí mencionados. Por fortuna, nada de eso sucede con éste. Será porque viene de Rosario, un escenario cuya vitalidad creativa le ha generado suficientes anticuerpos como para ponerse a salvo, en muchas áreas, de cualquier adocenamiento institucional. Y también porque muchos de quienes lo hacen no sólo se han criado artística e intelectualmente en ese humus de estímulos audaces e invenciones invariablemente inquietas y controversiales, sino que han practicado sus disciplinas con una saludable, imprescindible contaminación entre lo estético y lo ideológico. Nada hay aquí meramente acomodado a la tranquilizadora certeza del almanaque. Aquí todo es tensión en teoría y práctica, hipótesis, discusión y ensayo en tiempo presente, el presente de la urgencia y la emergencia antes que del texto documental, el presente ardoroso que atraviesa la publicación y hace que se rebele y desmarque ante cualquier intento de catalogarla como mero balance de fin de año, porque quiere ocupar el lugar de las herramientas de trabajo antes que el escritorio. Y si bien todo esto ya se anticipa debidamente en el texto que acompaña la tapa misma, lo singular del caso es que, por una vez, las intenciones no son retóricas sino que se reflejan en las realidades palpables en texto e imagen, cuando no son superadas por ellas. Por otra parte, que en estas minuciosas páginas se exponga, discuta y examine lo generado en y por Rosario en el transcurso de un año excede largamente cualquier esbozo de autorreferencia endogámica no sólo por razones de decisión editorial o filosofía cultural, sino porque Rosario misma, más allá de su fuerte identidad localista, ha dejado

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Adrián Yodice administra desde el año 2000 un retro blog, como él mismo lo llama, dedicado exclusivamente a todos los aspectos que hacen e hicieron a los ómnibus y trolebuses de la ciudad. Técnico superior en electrónica digital, se define como busólogo, amante de los transportes públicos de pasajeros. Es un asiduo consultor de la Hemeroteca de la Biblioteca Argentina y del Museo Histórico Provincial y a quien puede verse por la Plaza Sarmiento o merodeando en bicicleta la Terminal con una cámara a mano sacando fotos furtivas. La captura fotográfica de un ómnibus estacionado o en marcha cuenta muchísimo, tanto para ilustrar una nota como en una discusión con otro amigo, en la que puede llegar a tener carácter probatorio. En su cuenta de Facebook, hace unos días, Yodice etiquetó un flyer de un colega misionero con el impecable lema FOTOGRAFIAR OMNIBUS NO ES LOCURA, ES CULTURA.

La muerte miró la escena por el rápido agujero D.G.Helder

Naturalmente, Yodice comprendió de inmediato todo lo que significa, para su consecuente afición, un libro con casi trescientas fotografías de los reporteros gráficos Joaquín Chiavazza y su discípulo, socio y amigo Blas Persia, que trabajaron en el vespertino La Tribuna entre 1950 y 1964. Un libro de gran formato que reprodujera en la tapa una vista de la Plaza Sarmiento, centro neurálgico del transporte urbano automotor e interurbano de corta distancia, no podía sino interpelarlo directamente. Para mejor, en un lugar destacado de la imagen, se observa el lateral derecho y la cola de un ómnibus gris con una franja más clara al medio, luneta trasera tripartita y abolladuras en los faldones como aporreados fuentones de zinc. Un pasajero tiene un brazo afuera de la ventanilla; dos hombres conversan abajo, cerca de la puerta abierta. Como muchas otras, esa línea de ómnibus debía empezar o terminar su recorrido en la Plaza Sarmiento, que todavía conservaba en su extremo norte el perímetro semicircular, las sendas diago-

Joaquín Chiavazza Joaquín Chiavazza y Blas Persia. Los años de La Tribuna 1950-1964 Editorial Municipal de Rosario ISBN: 978-987-9267-92-9 240 páginas

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nales, los canteros en forma de gajo y otros restos de la primera traza y las remodelaciones que le siguieron.

intenté dilucidar. Para mí son dos Leyland. Hubo dos series de estos ómnibus, una parte carrozada por Cametal y otra por Decaroli, las cuales nunca pude identificar y aquí en la parte trasera se ven las modificaciones”, como si la acción del fuego se justificara por haberle revelado un detalle.

El 8 de diciembre de 2011, a cinco días de la presentación del libro de Chiavazza y Persia en el jardín del Museo de la Ciudad –cuando se cortó la luz, dejó de funcionar el equipo de sonido y hubieron de arrimarse los oyentes al borde de la escalinata trasera para ver qué decían los presentadores en la verde y cálida penumbra del Parque Independencia–, Yodice publicó una amistosa reseña en la sección Noticias de Buses Rosarinos: “Estamos ante un libro imperdible para todo aquel que disfruta de las fotografías de Rosario en todas sus facetas: sociales, deportivas, políticas, urbanas, arquitectónicas, personajes. Los amantes de los transportes públicos de pasajeros encontramos aquí un material valiosísimo: tranvías, accidentes e incidentes, ómnibus urbanos e interurbanos, la Terminal y la Plaza Sarmiento. La época de los Leyland, una flamante chanchita Mercedes O321 y otras sorpresas”.

Días después, otro correo: “Confirmo que ambos coches son Leyland. Estuve tratando de rastrear algún acontecimiento que haya motivado la quema de estos coches. Para situarse, estos ómnibus entraron en acción en 1958 y estuvieron en la Empresa Municipal hasta 1960, en que se dieron a componentes. En octubre de 1958 hubo una serie de manifestaciones. Incluso prendieron fuego un ómnibus en zona Sur como consecuencia de disturbios por el acto del 17 de Octubre –pero no tengo fotos–. Ese mismo día es cuando La Tribuna rinde homenaje a Chiavazza por los 50 años”. Pero enseguida el ojo del experto corrigió al investigador obsesivo, por lo que éste debió buscar otra posible datación, siempre sobre la hipótesis de que la quema de los Leyland se debía a conflictos gremiales o políticos. Sin el más leve reproche al costado incendiario de la historia, escribe: “Viendo bien la foto, esos coches tienen pinta de estar baqueteados, o sea descarto 1958. El 22 de septiembre de 1959 se registra un paro de 48 hs en la ETR –no lo tengo relevado en La Tribuna– y el 6 de noviembre una huelga por tiempo indeterminado. En marzo de 1960 se paraliza el transporte y sólo funcionan las líneas concesionadas. Debe andar por esas fechas. Se ve en la pared una pintada política, leyendas de la ETR y la CGT. Vamos a seguir investigando”.

A propósito de los Leyland, hay que contar que en determinado momento del largo y, en buena medida, incierto proceso de datación de las fotografías, la Editorial Municipal recurrió a subir a la página de la Secretaría de Cultura y Educación algunas imágenes de las que no se tenía mucha información. Se pedía a quienes tuvieran conocimiento de algún dato que ayudara a datarlas y ubicarlas fehacientemente, que dejaran su comentario al pie. El primero en responder fue Adrián Yodice, motivado por la foto de dos ómnibus incendiados en un lugar desconocido y en fecha incierta. La imagen es ciertamente tétrica, pero Yodice no se detuvo en lamentos; pasó por alto el memento mori de las ruedas sin aire, las ventanillas sin vidrio, la carrocería incendiada verosímilmente con bombas molotov y fue directamente a lo que le faltaba: “Esta foto es reveladora porque muestra algo que durante mucho tiempo

Para su consuelo y regocijo de todos sus colegas, la selección de fotografías del último período profesional de Chiavazza y Persia incluye en su nutrido parque automotor de dos, cuatro y más ruedas la estampa de 235


Plaza Sarmiento San Luis casi Entre Ríos, hacia el oeste, ca. 1959 Museo de la Ciudad

de cemento, equidistante de las dos líneas del tranvía, parece pintada de blanco, pero se trata de un matiz muy claro en la escala de grises. El agente de tránsito, con bastón a la cintura, mira hacia fuera, una patente o posiblemente nada, piense en el motivo de su única verdadera afición, o siga enfrascado en los asuntos hogareños, como si estuviese en la casa. En profundidad de campo, por la vereda asoleada, un hombre casi tan alto que las puertas avanza a grandes pasos bajo una insulsa cornisa de los años 30. Se adivina la intención del fotógrafo para que el policía, el motociclista, el peatón, el chofer del 78 y el acompañante que viaja parado al lado de él no mueran jamás, como tipos ni arquetipos. Sin embargo, la datación de la imagen desmiente al fotógrafo y a todo el mundo. Muchos que ahora tienen cincuenta, en 1960 todavía no habían nacido. Los nonatos de entonces contemplan ahora a los que ya no están.

un Leyland Roger Tiger en estado impecable cruzando Av. Pellegrini por Corrientes, cerca de 1959. Se trata, según se ve, de un ómnibus con cara de gato al servicio de la línea 78, que venía del sur al centro por Corrientes, cruzando Pellegrini, donde lo interceptó el rápido agujero de la cámara. A un lado del ómnibus, otra máquina de dos ruedas, con partes cromadas, conducida por un particular de campera de cuero, anteojos negros y gorra, sin casco; del otro, tres cuartos de rueda de una bicicleta rodado 28, una mano, un pie y otro cuarto de rueda trasera. En el borde derecho, sobre Pellegrini, asoma otra rueda del mismo rodado. Ah, bicicletas de los años 50, bicicletas de antes y después… con un programa que transparente los planos grises que las ocultan se podría rescatar el cuadro entero, con las dos ruedas y la persona sentada, un pie en cada pedal, las manos sobre el manubrio, con la vista perdida en un punto lejano como si por fin anduviesen por la senda exclusiva de la ciudad ideal, para que la chillen y lloren eternamente los comerciantes de calle Salta.

En cuanto a la ubicación de la escena, el coleccionista Mario Ghione comentó que casi con seguridad la avenida fuese Pellegrini, una de las pocas que tenía los rieles del tranvía junto al cantero central. Luego, revisando el recorrido del 78 y reconociendo en otras fotos de la misma locación las cornisas, el toldo y el cartel de Cinzano, quedó confirmado Pellegrini y se estableció la transversal por la que avanza el ómnibus como Corrientes, que entonces era de doble mano. Volviendo a la foto de Plaza Sarmiento, puede decirse que fue tomada desde una terraza o un balcón de la calle San Luis casi Entre Ríos, esquina que actualmente ocupa la mercería integral Rosario Botón. Está orientada hacia el oeste, de modo que la perspectiva de San Luis se dilata hacia el ángulo superior derecho del cuadro, donde se forma un pelotón de autos, camionetas y ómnibus. En el borde derecho, la vereda comercial

En el centro de la avenida y del negativo cuadrado de 6 x 6 centímetros, que después se amplía en el papel o en la pantalla, una columna metálica se cruza con el ómnibus y más arriba con el cartel de Cinzano; la base 236


de San Luis se empina en un escorzo de planos yuxtapuestos como en una escritura vertical: letreros de neón (apagados), carteles, perfiles de toldos de lona, marquesinas, balcones, cornisas, cables y más carteles: BAR CERVECERÍA M. Cosio, 1000 ENTRE RÍOS 900, Amargo Obrero, AMERICAN, 9…8…7…6…5…, Ter, FARMA, TOME, HORA EXACT, CNAC, CAS, PINTURERIA MARTIN, COLORIN, HOTEL EUROPEO, “en el corazón de la ciudad” según el aviso publicitario de la Guía Turística de Rosario de 1961.

La foto no pudo ser encontrada, ni siquiera un detalle, en la colección de La Tribuna que se conserva en la Hemeroteca de la Biblioteca Argentina encuadernada en tomos de dos meses de diarios cada uno. Pero tiene que ser anterior a octubre de 1960, cuando se iniciaron trabajos de remodelación de la Plaza Sarmiento. Desde entonces aparecieron en La Tribuna numerosas notas gráficas sobre el avance de las obras; siendo vespertino, podían publicar fotos de los trabajos del mismo día. Una, por ejemplo, tomada a nivel de la calzada, muestra a una cuadrilla de peones que, sorprendidos en plena actividad mientras abrían un cráter a pico y pala, congelaron un segundo la pose para mirar a la cámara. Al pie se lee: “Una intensa labor desplegaron en la fecha los obreros que prestan servicio en las obras de remodelación de la Plaza Sarmiento. La nota gráfica fue tomada en la esquina de San Luis y Entre Ríos, donde se está construyendo una plataforma para automotores”.

En la vereda de enfrente, exenta de puestos comerciales, los árboles de la Plaza Sarmiento, plátanos, palmeras, cipreses, araucarias, cedros del Líbano y demás ejemplares de otras especies exóticas ya del todo naturalizadas para esa fecha, cuando todavía quedaban en pie de la primitiva plaza Santa Rosa algunos que sobrevivieron a las sucesivas remodelaciones y cambios de nombre. La masa arbórea de la imagen, mediana y alta, tapa la edificación continua de la vereda oeste de Corrientes entre San Luis y San Juan, por donde ya circulaba además del 78 la línea G de trolebuses. Dado el ángulo de la toma, no entró en cuadro el largo frente de la Escuela Normal Nº 1. Lo que se ve, en sendos huecos del follaje separados entre sí como dos calles paralelas, a izquierda, un momento clasicista, molduras italianizantes, la arcada de una pérgola, un techito de cuatro pendientes, una cubierta parabólica posiblemente de zinc, un barandal, una cornisa, un frontón y medio sobre un par de ventanas que no llegan a verse. Y a derecha, un momento constructivista, con un toque de discreto surrealismo: cajas murarias, estructuras de hormigón, escultóricos depósitos de agua que se elevan al cielo sobre pilotes, y bajando la vista, suspendida en el aire como la copa de los árboles, una bicicleta de carrera con la figura de un ciclista encorvado sobre el manubrio. Se trata del cartel de la Casa Biaghetti que vendía bicicletas, rodados para niños, cocinas, radios y heladeras; además de la casa central, que estaba en Salta 2974, tenía esa sucursal en Corrientes 1002, teléfono 67691.

Al dato busológico debe agregarse la vista casi frontal de la fachada continua de San Luis al 1300, con las puertas, ventanas, cornisas, los toldos, carteles, balcones y demás detalles que en la otra foto, la de la tapa del libro, cuyo motivo periodístico se ignora, se ven de refilón y yuxtapuestos sobre la margen derecha. Pudiera ser que la redacción de La Tribuna quisiera contar con una imagen de la plaza antes de que las inexorables obras de remodelación se pusieran en marcha, para cotejarla con otra foto de la misma, en lo posible desde el mismo ángulo, después de la inauguración. O el motivo podría haber sido la garita metálica del agente de tránsito, elevada sobre una columna pintada a rayas en un apéndice de la rotonda que hubo en el punto de intersección de Entre Ríos y San Luis, cuando el sentido de la circulación de las dos calles era el contrario del que tienen ahora, como si la ciudad de antes hubiera girado al revés. Otra opción es el pozo abierto en la rotonda, con sendos montículos de tierra y cascotes a los costados. Excavando aun sin la meti237


Ómnibus incendiados, lugar no identificado, fecha incierta Escuela Superior de Museología

y doble hilera perimetral de plátanos. Y por debajo de la plaza Santa Rosa, la laguna de Sánchez, que ocupaba el espacio de unas seis o siete cuadras, según las lluvias, y tenía forma vagamente arriñonada, aunque “nadie ha encontrado hasta ahora ilustración alguna de ella” (García Ortúzar y Berjman). Álvarez comenta que los pobladores de mediados del siglo XIX sacaban barro del fondo para hacer paredes, le arrojaban residuos domiciliarios, animales muertos y basura de corrales y caballerizas, por lo que el aire en verano se ponía irrespirable apenas salía el sol, sin que ello obstase para que los domingos fueran a cazar patos a la laguna. Carrasco en los Anales habla de un tigre que mataron en las inmediaciones, un siglo antes de la foto de Chiavazza y Persia, de la que pasaron a su vez cincuenta años.

culosidad de un arqueólogo, en los primeros metros se encontrarían vetas y vestigios de las remodelaciones anteriores, desde la primera traza y las primeras plantaciones de 1881 hasta fines de la década del 50, pasando por el diseño hipergeométrico que se adoptara para los festejos del Centenario según los planos de un paisajista francés que en todo momento se refiere a la Place San Luis: “Modification de la Place San Luis, prolongment de la rue S. Juan et instalation du Monument de Sarmiente”. Dichos planos fueron someramente respetados por los ejecutores locales, dos de las numerosas diagonales fueron borradas del sector sur, la interminable verja cóncava de la Escuela Normal de Mujeres en algún momento pasó a ser convexa, algunos árboles fueron talados, “pero podemos decir que la plaza –sostienen Raquel García Ortúzar y Sonia Berjman– en ese casi medio siglo que va de 1910 a 1950 guardó gran relación con el proyecto de Bouvard” (Reflexiones sobre Joseph Bouvard y el paisajismo de Rosario en 1910, UNR editora, 1998).

La laguna fue desagotada en la década de 1870 por medio de un canal provisorio que bajaba hasta el río por la calle Paraguay. Como en su trayecto hacia la barranca el canal se cruzaba con el tendido del FFCC Central, hubo que abrir un túnel por debajo de las vías. Las tierras del desmonte de la calle y de la excavación del acueducto sirvieron después para rellenar el lecho disecado, de manera que virtualmente la arqueología urbana que se practica hoy podría descubrir, en las paredes del pozo que se ve al centro de la fotografía de Chiavazza y Persia, además de huesos de aves y mamíferos, enseres de cocina, llaves, cucharas, botones y herramientas de los primeros obreros ferroviarios de la ciudad. Aparte de los ómnibus sobre calle San Luis que el busólogo, lupa en mano, debe haber contemplado y examinado durante largo rato, se observan unos cuantos vehículos particulares, autos, una estanciera, motos, motonetas, una bicicleta de reparto de café Onkel y un viejo camioncito mudancero con

Por debajo de la plaza Sarmiento, con San Juan abierta y la figura monumental del prócer sobre un alto pedestal rocoso que emerge de una isleta en mitad de la calzada, la plaza Santa Rosa, con su paseo redondo 238


estribos de carro que se mete en cuadro por la izquierda siguiendo la órbita de los rieles del tranvía que vienen por Entre Ríos y doblan en San Luis, una curva trazada a compás de manera que empalme perfectamente con la recta de los rieles que entran por abajo. Sin necesidad de agrandar la imagen, junto a la cruz de la farmacia asoma, por encima de los carteles, la parte superior de un tranvía que marcha hacia el oeste. Por San Luis al 1300 pasaban varias líneas de tranvías; la 18, por ejemplo, que salía de Av. San Martín y Uruguay (ex Ayolas), iba por Uruguay (que después cambió de mano y donde todavía pueden verse, como pentimenti a través de los baches de asfalto derretido, entre los adoquines subyacentes, fragmentos de rieles acanalados que brillan al sol como hace un siglo), doblaba en Entre Ríos hacia el centro, pasando por la zona de hospitales, un tramo recto de unas veinte cuadras hasta la Plaza Sarmiento, doblaba en San Luis, tres cuadras y otra vez en Pte. Roca, de ahí un tramo de diez cuadras hasta Wheelwright y después uno más largo hasta Rosario Norte por la arteria que costea la barranca y cambia de nombre ante cada corrección del rumbo. Pero el recorrido del 18 no terminaba en Sunchales sino que seguía de largo, doblaba hacia la derecha y se metía por la boca de un viaducto bajo el nivel de las vías (que sigue existiendo) para reaparecer en los barrios industriales y proletarios de la zona norte, pasando junto a los talleres ferroviarios, la refinería, la maltería, la planta purificadora de agua, los astilleros y terminando frente a la cancha de Central.

se destacan por ser los únicos rostros aún reconocibles del enjambre de ministros, secretarios, ediles, diputados, senadores, dirigentes de la UTA y funcionarios de menor rango que se perdieron para siempre entre los rostros anónimos de la multitud, sobre los que desciende perpetuamente un pálido rayo de sol otoñal. El ángulo de la toma lleva a preguntarse a dónde está subido el fotógrafo. Posiblemente al estribo de uno de los 21 trolebuses MAN modelo 53 que la Municipalidad de Rosario adquirió a la de Buenos Aires. Que un peritaje técnico pudiera descartar esta suposición no impide de todos modos que sea formulada. Por un instante, la atención de la multitud es desviada hacia un único punto. Como en la danza general de Giannuzzi, “la muerte miró la escena por el rápido agujero cuando ellos congelaron su estirpe de comediantes: un momento absolutamente sensorial bajo la luz de un presente instantáneo”. En efecto, un baño de luz blanca se derrama sobre las cabezas descubiertas o con sombrero, iluminando media cara y dejando el otro lado oscuro o más bien sombreado de un gris particular que realza los rasgos faciales, las muecas, las sonrisas, el candor. Sombras de cabezas, perfiles, alas de sombreros caen oblicuamente sobre los rostros que asoman a la derecha, produciendo un efecto dominó que sigue el orden de la escritura, de izquierda a derecha y de arriba abajo, hasta el punto final que representa el hombre de pelo blanco y bigotito en el ángulo inferior derecho, y sobre el que recae la sombra de la melena de la mujer joven que aparece al lado del Interventor municipal. Exultante de satisfacción, éste pareciera a punto de subirse al trole para realizar el primer viaje de la historia. Un paso atrás se ubica el gobernador, en los cristales de cuyos anteojos pueden adivinarse, como un reflejo de sus designios, las ventanillas de la carrocería alemana.

El domingo 24 de mayo de 1959, La Tribuna publicó dos fotos de la inauguración de la línea G de trolebuses, que había tenido lugar en la Plaza Sarmiento esa misma mañana. El reportero gráfico que fue a cubrir el acto, Chiavazza o Persia, lo resumió en un plano cerrado sobre un montón de personas mirando a la cámara. El gobernador Sylvetre Begnis, con la pipa infaltable en la boca, y el Comisionado Interventor de la Municipalidad Luis C. Carballo, sonriente en primer plano,

En 1960, para cubrir la necesidad de traslado de una población de 600 mil habitantes, 239


Pellegrini y Corrientes, hacia el sur, ca. 1959 Museo de la Ciudad

mimeografía de 1982 Tranvías, ómnibus y trolebuses de la ciudad de Rosario, enriquecida con hermosos dibujos técnicos del propio autor, vistas parciales, generales, delanteras, laterales, traseras e interiores de las carrocerías MAN, Fiat y Mercedes Benz que circularon por las grandes avenidas empedradas de la ciudad durante el cuarto de siglo que fue de 1959 a 1984. Construidos en Alemania Federal e Italia en los primeros años 50, llegaron al país en barco y a Rosario por ferrocarril, contribuyendo a reforzar con sus carrocerías “de muy fina terminación tanto exterior como interior” (Olivero) la imagen algo retro de la transformación urbana emprendida por el desarrollismo a principios de los 60. El sistema eléctrico de transporte debería haberse implementado con el peronismo, a fines de los 40, cuando los “rústicos pero rendidores troles estadounidenses Westram”, como dice Antenore, desembarcaron en número de ciento treinta en el puerto de Buenos Aires para tender la primera red eléctrica del país, compuesta de 16 líneas de recorridos. Más tarde llegó a Buenos Aires otra partida de trolebuses MAN y Mercedes Benz, pero no todos entraron en servicio. El transporte eléctrico estatal de Buenos Aires primero fue víctima de los bombardeos del 55; después, bajo la gestión privada, “fue agonizando hasta desaparecer por completo el 1º de Mayo de 1966” (Mariano César Antenore, Trolebuses Rosarinos, Asociación Rosarina Amigos del Riel, 2004).

funcionaban unas treinta líneas de ómnibus, veinte de tranvías y dos de trolebuses. El sistema tranviario, inaugurado con tracción a sangre en 1872 y electrificado en 1906, sería definitivamente retirado de las calles poco después. Es decir que durante casi cuatro años –de mayo del 59, que empezaron a circular los trolebuses, a febrero de 1963, cuando los últimos tranvías fueron reemplazados por los ómnibus Ford Wayne que le decían “cotorras”, los cuales según Yodice “eran ruidosos y duros en la suspensión, con una mecánica deficiente, presentando constantemente problemas en el sistema de frenos de tipo hidráulico, que luego fueron reemplazados en talleres de Buenos Aires por frenos a aire comprimido” (Historia del Transporte Público de Rosario, cap. 5, ETR-EMR-ISHIR, 2011)–, en Rosario convivieron tres sistemas de transporte colectivo de pasajeros: el tranvía, el ómnibus y el trolebús. “El trolebús es un vehículo de pasajeros que reúne las ventajas de la operatividad del tranvía y del ómnibus. Se destina al trasporte rápido de pasajeros en las grandes ciudades y puede llevar gran cantidad de los mismos. Por ello es que su tamaño suele ser grande y su utilización es aconsejable en las grandes avenidas” –sostiene el precursor de la busología rosarina, Osvaldo Olivero, en su

El tango existencialista “Desencuentro” es de esa época, música de Aníbal Troilo, letra de Cátulo Castillo: “Estás desorientado y no sabés/ qué trole hay que tomar para seguir/ en este desencuentro con la fe”. Los remanentes ociosos de la cuantiosa segunda partida de troles encargada por el peronismo a las mismas firmas alemanas 240


empezaron a circular por el interior del país: Tucumán (1955-62), Mendoza (desde 1958 con Mercedes Benz, reemplazados por los Toshiba en 1963, etc. hasta hoy), La Plata y Mar del Plata (hasta 1966), Córdoba (arrancó directamente con los soviéticos en 1989, salteándose la etapa anterior). Bahía Blanca, Santa Fe, San Juan, Paraná, Salta, Corrientes, Posadas son otras tantas ciudades en las que se pensó o intentó instalar alguna vez una red de transporte público de tracción eléctrica, cuyas ventajas comparativas son conocidas: respecto al ómnibus, el trole es más económico, espacioso y muchísimo más silencioso, aparte que no contamina el medio ambiente ni produce alteraciones topográficas irreversibles (al menos in situ); respecto al tranvía, no necesita romper la calzada para instalación de rieles y posee mayor versatilidad, pudiendo bandearse de cordón a cordón sin que la ranura de los cabezales que tienen las lanzas en la punta se desenganche del cable de cobre.

con asientos simples, dobles, tripes y el del fondo para cinco. Los asientos de tres, que eran muy cómodos para uno solo, estaban dispuestos en sentido perpendicular a los otros, de modo que no se tenía la misma visión frontal del chofer y de la mayoría de los pasajeros, sino la gran panorámica que ofrecían las ventanillas cuadradas de los laterales, por las que silenciosa y melancólicamente pasaban hacia atrás los bulevares y las avenidas como a lo largo de una serie de fotogramas de una tira de celuloide. Esto a determinadas horas y siempre que el trole no fuera lleno, de lo contrario el paisaje podía tornarse demasiado humano. Antenore, que cuenta en su historial de pasajero de transporte público más de dos mil viajes en trole, muchos de ellos gratuitos durante el período escolar, tiene muy buenos recuerdos de sus viajes infantiles del sur al centro sentado en los mullidos asientos de la M. Aunque se imponga “la suave saudade de lo que un claro día fue tocante, entrañable, de lo que hubo de hondo y bello entre tantas cosas”, como dijo un Tuñón sexagenario en su elogio de la nostalgia, Antenore, para quien los troles son también el futuro, no se olvida de los malos momentos: “choques de mediana magnitud, caídas de línea aérea en medio de múltiples cortocircuitos, recibir descargas eléctricas al subir o al bajar de un coche, o enterarme de la noticia de un pibe muerto al caer sobre su cráneo el cabezal captador de corriente de la lanza del trole”.

Al desaparecer los tranvías de Rosario en 1963, los trolebuses conocieron su edad dorada. Entre 1962 y 1965 funcionaron seis líneas: G, H, I, J, K y L. El sistema contaba con una flota de 21 MAN, 40 Fiat y 24 Mercedes Benz. Aunque para un ojo no experto los tres modelos eran muy parecidos, por cantidad, calidad y nobleza el Fiat fue y será históricamente el trole de Rosario. “Los trolebuses Fiat fueron sinónimo de fortaleza y seguridad –dice Antenore–, gozando de las preferencias del público usuario y convirtiéndose con el tiempo en un elemento identificado con la ciudad.” Techo plateado y laterales amarillo clarito con franjas verdes que se juntaban en la delantera formando un gran escote en V. A izquierda y derecha, pintada sobre la franja verde con letras amarillas, figuraba la inscripción Municipalidad de Rosario en lugar de ETR, como decían los primeros MAN.

En 1967 las líneas G y J se fusionaron, dando origen a la M, cuyo largo recorrido de 23,8 km unía el Apeadero Sur del FFCC Mitre (San Martín al 6100) con la Terminal de Ómnibus, “describiendo un vistoso loop para detenerse frente a la entrada principal de la estación” (Antenore). Al mismo tiempo la I y la L, que eran líneas de refuerzo de la H y la K respectivamente, fueron definitivamente levantadas, con lo cual quedaron tres líneas troncales, H, K y M, que confluían hacia el centro desde el norte, el oeste y el sur, de manera que sus cables se cruzaban en las inmediaciones de la Plaza Sarmiento. En

Tenían capacidad para 43 pasajeros sentados y 52 de pie, de hecho era muy común que transportara más de cien pasajeros entre sentados, parados y colgados. Contaban 241


Inauguración de la línea G de trolebuses Plaza Sarmiento, 24 de mayo de 1959 Escuela Superior de Museología

ferroviarias, 2 locomotoras, 20 vagones, 50 ómnibus y trolebuses, 100 garitas, retenes y barreras, 6 establecimientos industriales y varias sucursales bancarias. Sólo en el establecimiento SARGO S.A. fueron destruidos totalmente por el fuego 18 autos, 35 camiones, 10 camiones guinches, 14 semirremolques, 20 camionetas, 28 tractores, 7 ómnibus, 2 jeeps, 1 máquina de soldar, 2 topadoras, 1 grúa y 200 tanques de alquitrán. En el caso de la Siderúrgica CINDELMET S.A., fueron arrasadas las instalaciones, deterioradas las máquinas y destruida la administración y la documentación. El Rosariazo de septiembre tuvo como víctimas fatales a Paula M. de García (51 años), Rubén Ángel Barrios (12) y Juan Carlos Gigliodi (22)”.

marzo de 1969 la H alargó su recorrido hasta Necochea y Pellegrini, por lo que un chico que viviera cerca del Control o de la Plaza Alberdi podía viajar en trole al Politécnico o al Nacional Nº 1. La flota total era de 45 trolebuses, sumando 14 de la H, 14 la M y 17 de la K, que transportaban entre las tres más de quince millones de pasajeros por año.

Organizados por la CGT Rosario, las columnas de trabajadores avanzarían, desde sus sedes sindicales y lugares de trabajo, portando banderas y carteles con leyendas contrarias al régimen militar de Onganía, hacia la sede regional de calle Córdoba 2061, frente a la cual debían concentrarse masivamente a las 12 del mediodía. La Policía, Gendarmería y el Ejército impedirían la concentración en el centro, pero a costa de dejar desguarnecidos los barrios. Adhirieron al paro de 38 hs. los trabajadores ferroviarios y estatales, Luz y Fuerza, la Unión Obrera Metalúrgica, los de la Carne, del Vidrio, Portuarios, Bancarios, Telefónicos, Panaderos, Gráficos, Químicos, Textiles, Alimentación, Construcción, etc. pero no lo hicieron los de la Unión Tranviarios Automotor ni el personal de Trolebuses, por lo que el martes 16 las empresas privadas de colectivos y la Dirección General de Trolebuses sacaron sus flotas a la calle.

Pero el Rosariazo de septiembre de 1969 determinó el final de ese reinado. “Las ásperas jornadas del 16 y 17 de septiembre”, como las llama un editorial de La Tribuna días después, causaron tres muertes, veinticinco heridos y centenares de detenidos. González, Gigena y Shapiro consignan los daños materiales: “11 trolebuses incendiados, 14 más con roturas; ómnibus del servicio urbano e interurbano: 15 coches incendiados, otros 40 deteriorados; tres estaciones ferroviarias incendiadas; cabines y vagones destrozados; vidrieras rotas; algunos incendios de galpones de fábricas” (Los rosariazos de 1969, de mayo a septiembre, Homo Sapiens Ediciones, 2008). La lista del catálogo de la muestra Rosariazo: revueltas sociales en 1969 (Museo de la Ciudad, mayo a septiembre de 2009) es todavía más larga y detallada: “El saldo material del Rosariazo fue extraordinario: fueron incendiados y destrozados 20 autos particulares, 4 estaciones

A partir de las diez de la mañana, las columnas empezaron a formarse y a marchar ruidosamente. La columna sur por Av. San Martín, 27 de Febrero, Pellegrini, la columna 242


oeste por Córdoba y Mendoza y la norte por Bv. Rondeau, Av. Alberdi y calle Salta, convergiendo hacia el centro como las tres líneas de trolebuses por las mismas calles, bulevares y avenidas. Determinadas por la estructura vial de una planta urbana radiocéntrica, las columnas de manifestantes y las líneas de trolebuses no tardaron en encontrarse. A las 11, a una hora de iniciado el paro, incendiaron el primer trolebús, coche Nº 1 de la línea M, en Corrientes y Mendoza. Varias fotografías registraron el hecho: el trole Fiat envuelto en espesas nubes de humo gris, con las lanzas todavía enganchadas en las líneas aéreas, bajo una maraña de cables que se cruzan, segmentos de curva y cambios móviles; atrás, el gran cartel luminoso de Pomelo 12 colgando, blanco y rojo, sobre la puerta del Olimpo. En el Cruce Alberdi, donde se concentraron unos cinco mil trabajadores del riel, incendiaron un ómnibus de la línea 210 y dos trolebuses MAN de la H. En el sur prendieron otro Fiat de la M (San Martín al 3600) y otros dos de la K en Mendoza y Paraná, cerca de la estación Rosario Oeste del Ferrocarril Belgrano, que sería incendiada al día siguiente. “La Dirección General de Trolebuses informó que sumaba pérdidas por 70 millones de pesos –apunta Antenore–: ocho trolebuses Fiat y tres MAN incendiados y declarados irrecuperables; otras cuatro unidades con daños parciales y diez coches con daños menores; además del corte de la línea aérea en diversos sectores”.

con menos unidades y horario reducido. Más tarde, en 1981, la M absorbería la H: “H + M = M. ¡2 líneas en 1 para unir Norte y Sur! ¡Para que el verano y el deporte no estén lejos de nadie!” –decía un volante de la Empresa Martín Fierro, concesionaria del transporte eléctrico desde 1979. En un solo recorrido, la M unía La Florida y el Saladillo, la Terminal de Ómnibus y el Apeadero Sur, el Hospital Centenario, la Facultad de Medicina, Odontología, el Sanatorio Británico, la Facultad de Filosofía y Letras, la Plaza Sarmiento y los hospitales del barrio España, las canchas de Argentino, Central, NOB y Central Córdoba, Gendarmería Nacional y el Batallón 121, Tiro Suizo y el Hospital Roque Sáenz Peña. En 1981, entonces, todo el sistema de transporte eléctrico se redujo a dos grandes troncales: este-oeste, letra K, con un recorrido de 17,9 kilómetros, y norte-sur, letra M, con uno de 36,4. Los cruces aéreos a 90º sacaban chispas en las intersecciones de Corrientes y Mendoza, Corrientes y San Juan, San Juan y Paraguay, y Paraguay y Mendoza. Finalmente, en 1984, cuando apenas quedaban en servicio 24 unidades para las dos líneas, entre Fiat, MAN reconstruidos y los soviéticos adquiridos en 1980 por la Empresa Martín Fierro, los troles de la M fueron reemplazados por los ómnibus comunes de la línea 103, quedando desde entonces una sola línea residual de trolebuses, la K, que desde 1989 es operada por coches Volvo de origen brasilero.

En un artículo sobre la memoria urbana del Rosariazo, Luciana Seminara señala que “de la inestimable cantidad de imágenes captadas por las ocasionales cámaras fotográficas, un porcentaje no menor se detuvo en registrar los efectos de la combustión de los trolebuses y colectivos” (Historia del Transporte Público de Rosario). Fotos de troles incendiados en avenida San Martín, en Corrientes y Mendoza, en Salta y Crespo, en barrio Echesortu, en el Cruce Alberdi. La línea H dejó de circular por un año, y la K y la M reanudaron sus servicios

Además de ómnibus, autos, motos, motonetas, el detalle de un vagón de tranvía, árboles, postes, faroles, cableado eléctrico, adoquinado ondulante, parches de asfalto, bocas de tormenta, tapas de cámaras subterráneas, rieles, catenaria, toldos, letreros, carteles y fragmentos de edificios, la foto de la Plaza Sarmiento está animada por figuras humanas que representan conductores, pasajeros y peatones que andan por la 243


Estacion de servicio Perbel Corrientes 861, ca. 1960 Museo de la Ciudad

los brazos abiertos del policía de tránsito, las mujeres del brazo, un hombre sin cabeza con los brazos en jarra, el brazo afuera de la ventanilla del pasajero del ómnibus. Si por la vestimenta y el follaje del arbolado público pueden deducirse la moda y la estación del año, por el promedio de los ángulos de apertura de las piernas y los brazos se debiera poder tomar el pulso de la ciudad en ese momento en que, acelerado por el cambio de década, el tradicional paradigma cultural europeo cedía terreno al norteamericano. Faltan nada más los colores y los ruidos de fondo, continuos e intermitentes, la banda sonora que es dable imaginar habiendo en escena distintos vehículos con motores, ruedas, bocinas, caños de escape, frenos, partes destartaladas y gente con bocas, brazos, piernas, toldos que sacude la suave brisa de la primavera que mueve los árboles, los cables, música de transistores y parlantes, sonidos domiciliarios que bajan de las primeras líneas de balcones, el ladrido de un perro, el murmullo amortiguado de los interiores de bares y negocios, el paso de una avioneta propalando desde el cielo la interminable lista de atracciones de un circo internacional de gira por Sudamérica. Cuando la fonografía desarrolle un medio de grabar los sonidos del pasado a partir de una imagen documental, la foto de la Plaza Sarmiento va a ser rescatada de su mutismo sin depender de la imaginación literaria.

vereda, cruzan las calles por la esquina o por cualquier parte, como es consuetudinario. Mujeres, hombres y chicos de antes del jean y las zapatillas, llevan falda lisa o tableada, camisas de manga corta o remangadas, un chico de pantalones cortos con cinturón, medias claras y zapatos negros, hombres de saco y en mangas de camisa, uno con una chomba, otro con camisa a cuadros, otro con el saco doblado en el antebrazo, el joven repartidor de café con una chaqueta larga. Las hojas de los plátanos, que despuntan a fines de agosto y se empiezan a caer en abril, son otro indicio de la temporada primavera-verano 1959/60. Hombres y mujeres apuran el paso al cruzar la calle, pero los pasos se acortan a medida que se acercan al cordón de la vereda. Si el casi septuagenario de pelo blanco que avanza por el medio de la calzada con paso marcial fuera como parece Joaquín Chiavazza, decano de los reporteros gráficos de Rosario, la fotografía debería adjudicarse por lo tanto a Blas Persia, su discípulo, que entonces tenía cincuenta años. La pierna extendida de Chiavazza, las piernas flexionadas o estiradas de los motociclistas, la pierna recta del ciclista, los pies en vilo o apoyados brevemente en el piso, las piernas colgando de un chico sentado en un banco de la plaza,

La nostalgia de Yodice no tiene fin: “Yo extraño los ómnibus fileteados, los distintos cortes de pintura, las boleteras con 15 tipos de boletos, las luces negras, las banderitas, las corbatitas. Uno conocía a los choferes y los choferes publicaban parte de su vida en el ómnibus: la foto de las vacaciones, de la novia, de la familia” –dice en la entrevista que le hizo Mario Candioti en ocasión de los diez años del Grupo Busólogo Rosario (La 244


Capital, 09-10-2011). Ilustra la nota una foto frontal de cinco miembros de la agrupación sentados en la baranda del andén interno de la microterminal de la Plaza Sarmiento, donde están las dársenas de colectivos interurbanos de cercanías. Sonriente, cada busólogo sostiene entre las manos la maqueta de un ómnibus o de un trolebús, como si se tratara de un juguete. Yodice es el primero de la izquierda, cuyo medio perfil se recorta contra el frente del Nuevo Hotel Europeo de San Luis 1364. Tomada desde un ángulo lo suficientemente inclinado, le hubiera salido de fondo el frondoso y provecto palacete que el Arq. Guido proyectara en los años 20 para el Dr. Fracassi: el más emblemático edificio del estilo neocolonial en Rosario. Los colectivos 134 y 135, que bajan por Corrientes y cruzan San Luis después de pasar el Normal 1 y la plaza con sus veredas de plátanos y palos borrachos, permiten echar un vistazo a este hito arquitectónico. Sentado en cualquiera de los asientos dobles de la derecha, en lo posible del lado de la ventanilla, el busófilo (que a diferencia del busólogo suele ser retraído y entiende poco de la parte mecánica del ómnibus, pero disfruta del viaje y de la vista como el que más) se deja atraer sin preguntarse el motivo por esa marea ornamental y casuística de la ochava noreste de Carrientes y San Luis. Óculos de ocho elementos, hornacinas con estatuillas de sumos pontífices o nidos de palomas, aparatos de aire acondicionado en los retablos barrocos, persianas falseadas o con tablillas faltantes, los vidrios de la torre octogonal rotos posiblemente por el granizo de 2006, cornisas enarcadas con curvas y ángulos rectos, pináculos por todos lados, la obsesiva secuencia ondulante que forman los arcos de medio punto del segundo piso sobre una serie de pilastras planas o torneadas recamadas de arabescos, más otra serie de ménsulas de madera o que simulan el corte de la madera sosteniendo un voladizo de tejas rojas que trazan una línea de onda corta entre las mórbidas molduras que rematan los cuatro miradores.

Como una revancha del denostado espíritu fenicio que la restauración arqueológica del pasado hispánico colonial intentara paladinamente combatir erigiendo un monumento ecléctico y barroco en plena zona comercial, el edificio hoy es más conocido por el Palacio de la Oportunidad, gran bazar textil y de otros rubros que, junto a una perfumería y una panchería al paso, ocupa los locales de la planta baja, interfiriendo las esmeradas arcadas del basamento gris con marquesinas y carteles de vinilo de muchos colores que de noche se iluminan por dentro y producen un contraste todavía más estridente con el peso muerto de las plantas altas, donde pareciera refugiarse toda una familia de fantasmas. Por el contrario, el discreto racionalismo modernista del Nuevo Hotel Europeo, que resuelve como a desgano la cuestión ornamental con puras verticales y horizontales, se lleva mejor con el perfil del busólogo, que después de todo es un adorador de la máquina. “Cada uno de nosotros recordará en forma particular a los ómnibus de acuerdo al barrio donde vivía o la parada donde los veía pasar –escribe Yodice en una reciente entrada de su blog (13/01/12) bajo el título ‘Tributo al DIC Visión’, un ómnibus de carrocería rosarina de finales de los 70–. Particularmente, tengo el vivo recuerdo de los coches rojos de la línea 4 que cuando fueron incorporados 0 Km tenían un chirrido muy particular en sus frenos, muchas veces molesto al punto tal de convertirse en protagonista de comentarios radiales o carta de lectores en los diarios.” Según su propio testimonio, la enfermedad por los ómnibus le viene de chico, pero se agravó durante el secundario, cuando debía hacer cuatro viajes diarios entre su casa de Pichincha y el Politécnico; entonces la enfermedad tomó la forma de un romance adolescente: “Creo que ahí me volví un especialista. Me llamaba la atención todo, el tipo de vehículo, las carrocerías, cada empresa tenía sus colores, su forma de identificarse, la numeración, las frecuencias, lo que yo digo la matemática de la busología”. 245


Cruce Alberdi, diciembre de 1960 Escuela Superior de Museología

afables y gregarios. Los amigos del ómnibus son amigos de los amigos del tren, del tranvía y de los troles, con quienes comparten la afición al mundo del transporte colectivo de pasajeros. Forman parte a su vez de un fenómeno mucho más vasto que engloba a medias desordenada y coordinadamente a los coleccionistas de fotos y postales antiguas de la ciudad, los historiadores y cronistas barriales, los investigadores vocacionales o universitarios de temas municipales, las mesas de jubilados, los té de la memoria, las bibliotecas y hemerotecas, los museos reales y virtuales, estables e itinerantes, los puesteros del Mercado Retro que exponen y venden “objetos de uso cotidiano con una antigüedad superior a los 25 años”, las jornadas nacionales de historia barrial en los viejos cines de barrio, los fotógrafos y fonógrafos urbanos, todos con sus sitios de Internet subiendo documentos y materiales de todo tipo como en una cápsula del tiempo, por si llegara a darse en el futuro algún episodio de amnesia colectiva.

La definición de busólogo que ensaya Yodice en su blog da a entender que no existe ninguno en estado puro: “Además de su gusto por los urbanos o larga distancia, los busólogos presentan distintos perfiles. Coleccionistas: dedicados a la conservación de todo tipo de artículos tales como boletos, tarjetas, carteles, recortes periodísticos, fotos, etc. Modelistas: realizan maquetas reproduciendo los vehículos con sus detalles. Dibujantes: grafican y diseñan ómnibus recreando cortes de pintura reales o fantasía. Historiadores: investigan y recopilan la historia del transporte de pasajeros. Patentólogos: registran los ómnibus por su patente y empresa a la que pertenece”.

Algunas agrupaciones de amigos tienen temas explícitos de militancia. La Asociación Rosarina Amigos del Riel, fundada pioneramente en 1974, es una entidad civil sin fines de lucro dedicada a la difusión y defensa de medios de transporte por riel y de tracción eléctrica. ARAR atesora documentos y piezas ferroviarias en su parada o sedemuseo-archivo-biblioteca-depósito de la ex Estación Central Córdoba, Bv. 27 de Febrero 599, atención al público los sábados de 17.30 a 21 hs. En 2011, para el quincuagésimo aniversario de la instalación de la línea K, reflotaron con la ayuda del personal técnico de la SEMTUR un clásico trole Fiat/Alfa Romeo modelo Montevideo que había sido radiado en 1984. Antenore publicó en su blog Trolebuses Rosarinos una muy buena crónica de la restauración integral del vehículo (carrocería, chasis, parte mecánica, equipo

El Grupo Busólogos Rosario se formó el 29 de septiembre de 2001, cuando Mariano C. Antenore, Carlos Cueto, José Elena, Claudio Gazzera, Gustavo Satanovsky y Adrián Yodice se reunieron por primera vez en el bar Continental, que como no podía ser de otro modo quedaba frente a la Terminal de Ómnibus. Desde entonces se congregan en mesas de bares todos los últimos sábados de cada mes, organizan actividades de difusión, frecuentan las redes sociales o hacen excursiones en ómnibus de larga distancia para encontrarse con busólogos de otras partes del país. Son por regla general muy 246


eléctrico, pintura), recapitulando los avances parciales hasta la tarde del sábado 20 de agosto de 2011, cuando por fin lo sacaron de los talleres y lo engancharon a los cables del tendido actual de la K para que hiciera el recorrido desde la Siberia hasta el Mercado Concentrador de Fisherton. Entrañable museo rodante, su marcha no registró inconvenientes, para alegría inmensa de los elegidos a ocupar los asientos y asombro total de quienes lo vieron pasar silencioso y volátil como un fantasma de los 60, llenando transitoriamente de bien parecida y buena presencia el tránsito deprimido de un sábado invernal.

ondulado de las olas sin fin o la apariencia fluctuante del moaré, va siendo sepultado por una lisa y monótona carpeta asfáltica de cinco centímetros de espesor, como ya se hizo en el tramo de Av. San Martín comprendido entre los bulevares 27 Febrero y Seguí y se proyecta hacer en los tramos siguientes hasta su intersección con la avenida de Circunvalación. Para Olivero, justamente, el talón de Aquiles del trole estaba en los neumáticos, que requerían una reposición periódica, y en la suspensión, dado los problemas ocasionados en los amortiguadores por las vibraciones. Retirados de su lecho de arena, los adoquines de granito gris, labrados por los picapedreros de Olavarría o Tandil y pulidos por la marea constante del tráfico rodado de Rosario, fueron siendo amontonados por las topadoras a los costados de las obras de remodelación de la Av. San Martín, ejecutadas entre febrero y septiembre de 2011. Un vecino de la zona, llevándose un granitullo en la mochila para su museo doméstico, preguntó al jefe de una cuadrilla de la empresa constructora por el destino final de los mismos. No sabía bien, o si sabía prefirió expresarse de un modo conjetural: los llevarían a los rellenos sanitarios de Puente Gallego, a la vera del camino viejo a Soldini, que queda a la altura de Ovidio Lagos al 7500, en el límite sudoeste del municipio, donde intercalan sus componentes paisajísticos el fin de la zona urbana y los confines de la zona rural, a veces también llamados zona de quintas. Chiavazza y Persia tienen toda una serie de fotografías de ese paisaje productivo; en el libro se incluyen algunas: la del quintero de la localidad de Pérez hacia 1958, con su corona de apios gigantes; la de los recolectores de hortalizas inclinados entre los surcos de una huerta no identificada, en fecha incierta pero para la misma época de la anterior, y la de dos paisanos en un camino rural desconocido posando junto a un automóvil antiguo con patente de Santa Fe, uno con una guitarra y el otro con un canasto de mimbre y un lechón en brazos que

Para la ocasión sacaron de su retiro laboral al decano de los choferes de trolebuses de Rosario, el señor Hugo Muñoz, que condujo el coche, en palabras de Antenore, “con suma pericia y excelente predisposición, celebrando además el día de su cumpleaños”. Cabe preguntarse si Muñoz cumplía años casualmente ese día o si los amigos del riel, del ómnibus y del trole lo eligieron ex profeso para agasajarlo de ese modo, recordándole los muchos años que pasó al volante. Como dice Groppa en un poema sobre los ómnibus: “el chofer, el obrero del volante, es universal”. No debe extrañar que los busólogos en general se vistan parecidos a él, según se observa en las fotos que ilustran la crónica de ese día. Acorde con la nostalgia de Tuñón, que “no sólo es el pasado, tiene intención de futuro, adivina, espera aquello que mañana no afeará a la vida”, los amigos del trole, del ómnibus y del riel no se conforman con este viaje histórico en un Fiat/Alfa Romeo restaurado, sino que vienen militando desde hace años por la reinstalación de la línea M, objetivo que pareciera todavía más oportuno ahora que uno de los mayores inconvenientes de los trolebuses, a saber, las irregularidades del pavimento de adoquines rectangulares o cúbicos colocados en filas rectas o curvas de 22 piezas cada una repetidas a lo largo y a lo ancho de la calzada como el dibujo 247


El Rulero Av. Alberdi y José Ingenieros, diciembre de 1960 Escuela Superior de Museología

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también miró a la cámara en el momento del disparo.

Ragaglia recrea de paso las fachadas, el mobiliario urbano, los carteles, la publicidad, el parque automotor, la vestimenta y demás aspectos visuales de algunas calles rosarinas en la primera, segunda mitad de los 70 y primeros años 80. Por ejemplo, una escena ambientada en San Martín y Uruguay, donde la avenida corrige su rumbo: un trole Fiat y otro Mercedes Benz se cruzan en sentidos contrarios, uno hacia el sur y otro hacia el centro, con la silueta de la parroquia San Antonio de Padua al fondo y los carteles de Esso, 7up y rulemanes SKF. El montaje parece basado en una foto del Departamento Fotográfico de la Vigil, probablemente tomada por Rubén Naranjo e incluida en libro Santa Fe, el paisaje y los hombres, 1971.

Se calcula que entre 1995 y 2003 fueron volcados en los predios conocidos como Puente Gallego I, II y III aproximadamente dos millones de toneladas de residuos sólidos. Estos basurales a cielo abierto, con venteo de gases a los cuatro vientos por medio de tubos de PVC, forman discretas pero no menos notorias y hasta fotogénicas colinas de suaves contornos que se recortan a lo lejos en el chato horizonte de la llanura periurbana rosarina. Sea o no verdadera la versión del jefe de cuadrilla –contra la que conspira el hecho de que los rellenos sanitarios dejaron de funcionar hace nueve años, y por los cuales la Municipalidad fue obligada a indemnizar con $ 5.000 (más los intereses correspondientes de los últimos seis años) a diez vecinos de la zona por perjuicios atmosféricos o “exposición al olor de los gases producidos por la descomposición biológica de la basura depositada en los rellenos”, según reza el fallo judicial de julio de 2011–, lo cierto es que la imagen mental de las montañas de adoquines ya es irreversible, aunque menos clásica que la idea de un solo adoquín como símbolo o unidad mínima de urbanismo colocado sobre la tierra de un cementerio rural con la tácita placa donde figuran las fechas de nacimiento geológico y muerte histórica: Sierras de Tandilia, Precámbrico–Rosario, 26 de Septiembre de 2011, 18 hs., cuando el intendente de la ciudad y el gobernador de la provincia salientes, escoltados por sus candidatos a sucederlos, hoy en funciones, cortaron la cinta celeste y blanca en la intersección de San Martín y Uruguay, inaugurando oficialmente la amplia y moderna avenida.

Además de estas recreaciones históricas, Ragaglia tiene un álbum de fotografías de 2011 en el que, bajo el título “Lo que queda del tendido de la M”, documenta el mal estado del mismo a lo largo del tramo de Av. San Martín que va del 3600 al 5500. Antenore ya en noviembre de 2008 había escrito en su blog sobre el desmantelamiento de la catenaria de la línea M por parte de la Municipalidad, que adoptaba oficialmente esa medida para evitar los robos y actos de vandalismo perpetrados contra los diferentes componentes de la infraestructura del sistema eléctrico, soportes y material colgante, “tal como venía ocurriendo cíclicamente en veranos anteriores”. En realidad, las instalaciones fijas de la línea venían siendo objeto de robo desde 1984, cuando la M dejó de ser una línea de trolebús. Pero “tras la ola de saqueos registrada en el último verano (coincidentes con los anuncios de la posible importación de trolebuses para reactivar el corredor), los conductores de cobre y otros elementos subsistentes quedaron en precaria condición, con riesgo de caídas o de ser objetos de nuevos robos”.

Leonardo Ragaglia, uno de los más conspicuos amigos del trole, subió a su perfil de Facebook una serie de viñetas a lápiz con “paisajes trolebuseros” de los años 70 y 80. Envolviendo todo en una atmósfera coloreada de amarillo claro y verde, como la pintura de los Fiat del período clásico,

Ragaglia fotografía ménsulas (“me da tanta pena verlo…”, comenta Yari Farías; “todavía falta lo peor”, advierte Ragaglia; “qué sería lo peor?”, pregunta Farías; “ménsulas caídas”, 249


Desmonte del veredón de Bv. Rondeau, enero de 1960 Escuela Superior de Museología

amarre. También, a lo largo de este bulevar, se extrajeron columnas de los lugares en donde se han construido edificaciones o remodelado o abierto estaciones de servicio. Al remodelarse la avenida Alberdi, en el año 1993, se barrió con todo lo inherente al sistema (catenaria, ménsulas, columnas, etc.) para así poder instalar dársenas de estacionamiento. En donde antes estaban las columnas de hormigón o hierro, se colocó un nuevo sistema de iluminación, con columnas arqueadas para llegar hasta la mitad de cada carril. Un caso similar al de la avenida Alberdi ocurrió un año después al remodelarse la calle Corrientes desde San Luis hasta Urquiza, cambiando mosaicos, colocando alumbrado público nuevo y carteles indicadores de calles con la leyenda Corrientes Internacional…”

responde Ragaglia), líneas equipotenciales, la subestación rectificadora de San Martín al 4200, ménsulas con la morsetería aflojada, la marca que dejó en el cemento una abrazadera metálica, columnas parasitadas por conexiones de cables de televisión, una ménsula caída y ajustada a la columna con su propia rienda, una rienda que atraviesa de lado a lado la avenida con un par de pendolines de alambre galvanizado y aisladores de cerámica blanca ennegrecida por el smog, una argolla por la que pasaba un cruce oblicuo, columnas que sostenían las riendas que sostenían los segmentos de curva del desvío al hospital Sáenz Peña por Av. Ntra. Sra. del Rosario (ex Lucero), más columnas y riendas en Laprida y Regimiento 11 (ex Tupungato) por donde los troles volvían a la Av. San Martín antes, mucho antes de que cambiaran de mano, cuando casi todas las calles de Rosario circulaban en sentido contrario al actual, eran doble mano o tenían otro nombre.

Hace un cuarto de siglo que ningún trole, ni siquiera museificado, circula por las dos grandes arterias del norte, que en realidad son una sola, ni por la gran avenida del sur, que por lo menos son dos. Aunque queden muchos restos en señal de lo que fueran la G, la H, la I, la J y la M que las terminó absorbiendo a todas, falta lo más importante, el material rodante. A esta altura ni siquiera ayudaría que los estivales recolectores furtivos de cobre devolviesen los miles de metros enrollados y apilados en los desarmaderos clandestinos, porque de rehabilitarse la línea debería hacerse con materiales nuevos y tecnología al día, reutilizando a lo sumo las columnas de cemento que todavía quedan en pie e instalando otras nuevas donde sea necesario. En su artículo de 2008, sin embargo, Antenore no parecía hacerse ilusiones al respecto: “el desmantelamiento de lo que queda del tendido de la M es el certificado de defunción para la reactivación de los trolebuses del corredor Norte-Sur”.

En un artículo del mismo autor, mismo año, sobre el mismo tema, se repasa el estado de la red eléctrica desde la otra punta del recorrido: “Por bulevar Rondeau, a la altura de la bajada Puccio, cortaron literalmente la catenaria, sujetando los hilos cortados a las columnas adyacentes con una vueltita de

Hay algunas fotos de Chiavazza y Persia que 250


podrían inspirarle a Ragaglia toda una serie de paisajes con trolebuses MAN recorriendo la ciudad de 1960. Son fotografías de calle en las que aparecen las catenarias de la G y la H. Estas líneas salían de la Plaza Sarmiento, la primera hacia el sur por Corrientes, 27 de Febrero y San Martín hasta el 3400, y la segunda hacia el norte por Corrientes, Salta, Av. Alberdi y Bv. Rondeau hasta el Control de Granadero Baigorria. Alberdi y Rondeau son en realidad una sola larguísima arteria formada por dos rectas unidas en ángulo obtuso a la altura del arroyo Ludueña, que antes de ser entubado se cruzaba por un puente. Los hermanos Pusso tienen una fotografía de ese lugar hacia 1895: en primer plano, el cauce a cielo abierto del arroyo, con sus márgenes bajas cubiertas de vegetación; de un lado, un pilar de ladrillo perteneciente al puente, fuera de cuadro casi en su totalidad; del otro, una casilla de chapa y madera que funcionaba como bar y chopería; al medio, una perspectiva de la avenida de tierra por la que avanza, tirado por dos caballos sobre los rieles oscuros, un pesado tramway de la línea que iba de Rosario Norte a Pueblo Alberdi (Rosario entre dos siglos. 1890-1910, EMR, 2007).

Salta y una fila de autos de frente esperando que pase el tren de carga o de pasajeros que, a juzgar por la dirección en que mira con precaución el señor que camina sobre las vías del paso a nivel con un paquete bajo el brazo, vendría de Rosario Norte o de los puertos. De este lado, motonetas y peatones, un muchacho cruzando por abajo las barreras y otro en carrera de hacer lo mismo. Aviso de ceras líquidas y en pasta Cri-Cri. Y por encima de la escena vehicular y peatonal los vistosos segmentos de curva del tendido de la H yendo y viniendo por Salta y avenida Alberdi. Diez o doce cuadras más al norte, la foto del Rulero de Alberdi y José Ingenieros, en la que coexisten los rieles y la catenaria simple del tranvía con la doble del trole, además de postes del tendido eléctrico domiciliario, columnas metálicas y de cemento, plátanos, las molduras neoclásicas de la escuela primaria 9 de Julio, dos chicos en la vereda, autos antiguos y modernos, una moto y las infaltables motonetas. El dibujante tiene el escenario documental y la escena real servida por el fotógrafo, con los autos de la misma época que los frentes, los árboles, carteles, la ropa y los movimientos de la gente, la densidad del tránsito, la luz natural. No tiene más que proyectar un trole de 1960 al servicio de la H y acomodarlo entre el cascarudo negro y el Fiat 600 que puede haber sido celeste o rojo. Al colorear esta serie primitiva deberá tener en cuenta lo que dice su colega Antenore: las primeras 21 unidades MAN fueron pintadas con la librea original de la ETR: “Techo color aluminio, ventanillas en crema, frente, cola y laterales en verde con franja negra en el centro formando una V en el frente y luciendo la inscripción Empresa de Transporte de Rosario en los laterales. Años después, los MAN adoptarían la librea de los Fiat”.

Siguiendo el recorrido de la H desde el centro hasta el Control, Chiavazza y Persia tienen, para empezar, la foto de la escultórica estación de servicio Perbel de Corrientes 861, con las rígidas paralelas de la línea aérea de contacto cruzando el cielo nublado. Más adelante, la del cruce Alberdi con el edificio de Telecomunicaciones atrás y su torre retransmisora de los canales de Buenos Aires que a partir de 1960 pudieron verse en Rosario y su área de cobertura dentro de un radio de 70 kilómetros. Desde entonces y hasta prácticamente fin del milenio pasado extendieron su imperio sobre los techos de las casas y casillas de los barrios y las villas las frágiles antenas de aluminio. En la foto del Cruce Alberdi salen las barreras bajas, los andamios restantes de la base de la moderna torre de Entel, la parte trasera de un colectivo yendo hacia el río por calle

Y está, finalmente, la conmovedora foto del desmonte del antiguo bulevar Rondeau, que antes tenía sólo dos carriles separados por un ancho veredón lleno de árboles que los 251


Estación Terminal de Ómnibus plataformas sobre calle Santa Fe, mayo de 1956 Escuela Superior de Museología

la línea 25, con su lanza resbalando por la catenaria de un solo cable, se aleja hacia el norte envuelto en su propia nube de nostalgia, cuando ya se ven, entre las copas de los árboles, las ménsulas plateadas, los balancines y conductores de cobre del tendido de la H, la nueva línea de trolebuses que entraría en servicio en abril de ese año. El dibujante no podría recrear la escena interpolando un trole sin incurrir en un anacronismo de tres meses. “Antes y después” era una figura recurrente de la redacción de La Tribuna, que enviaba a sus fotógrafos a registrar cualquier tipo de obra pública en que se materializara el espíritu modernizador de los 60 asociado al intrépido intendente Carballo, “domador de gremios”. Los editores solían yuxtaponer dos fotos, produciendo un careo entre la imagen antigua y la moderna del mismo sitio, o entre el caos de los primeros avances de las obras y el orden futurista del resultado final, como hicieron con la Plaza Sarmiento y el Bv. Rondeau: antes, el agreste bulevar periférico con algunos de sus añosos árboles en pie y otros ya cortados; después, “la gran ruta de acceso por el norte, amplia y moderna” con su foto correspondiente, una perspectiva de la nueva autopista que vista ahora da la impresión de un páramo.

chicos de la época recuerdan como un bosque y los redactores de La Tribuna, para no ser menos, pintaban como una selva. Por un borde desarbolado de este paseo rodaban los tranvías en un sentido y en otro, los rieles hundidos en la tierra, sin empedrado, entre bordillos hirsutos de pasto cortado al ras. El cuadro encierra árboles talados y en pie, una casilla metálica, un raigón en un pozo, una losa de banco quebrada, un caballo tirando de un carro, tres mujeres, dos hombres, un niño y al fondo, como escabulléndose de la escena, un vagón de tranvía con dos hombres viajando parados en la parte de atrás. “Esta estampa urbana –créase o no– con sugestión de selva chaqueña ha sido obtenida por el reportero gráfico de La Tribuna en la zona de Alberdi, inmediaciones del barrio Sarmiento, donde se están realizando obras para el ensanche del bulevar Rondeau.”

En una nota sobre metroblogs, sitios con “textos, fotos, audios y videos que intentan captar el espíritu de la ciudad”, Pablo Makovsky inquiere al fotógrafo urbano Facundo A. Fernández por el origen de su afición. Como Yodice y tal vez todos, Fernández se remonta a la infancia: “Desde pequeño fui aficionado a la fotografía. Hasta la llegada de las cámaras digitales a un precio razonable, la fotografía química era un pasatiempo medio caro como para estar tomando cuarenta fotos diarias, que es mi promedio actual. Mis ganas de compartir esta pasión con otras

Al pavimentar los nuevos carriles, cuatro, separados por angostos canteros de tierra para futuras palmeras, se destruyó el bosque infantil y se extirparon los rieles del suelo. Las líneas 5 y 25 de tranvías dejaron de existir sin dejar rastro. Pero la foto está fechada en enero de 1960, ni bien comenzaron los trabajos de remodelación. Coexiste lo que está al borde de la desaparición con lo que todavía no aparece. El tranvía, interno 3 de 252


personas me llevó a alojar imágenes en un sitio fabuloso, Flickr.com, en donde millones de personas de todo el mundo pueden mostrar sus fotos e interactuar con otras” (El Ciudadano & la región, 16/19/06).

estilo tudor o normando para enmascarar de categoría el palier funcional de una torre de quince o veinte pisos dentro de la primera ronda de bulevares. En esos casos, Fernández o cualquiera de sus colaboradores no tienen más que sacar la foto del edificio actual, que en sí mismo conjuga lo viejo y lo nuevo en una mueca de banalidad profesional orientada a consumidores residenciales de altos ingresos.

En el blog Rosario… antes y después, Facundo A. Fernández publica fotos antiguas (de una década a un siglo atrás) que escanea de revistas, postales, libros y diarios viejos. Fotos antiguas de calles, esquinas, pasajes, fachadas, edificios públicos, plazas, fábricas, monumentos y vistas aéreas, a las que adosa al lado o abajo fotos actuales de los mismos lugares tomadas desde el mismo ángulo y la misma altura, incluso las vistas aéreas, para lo cual Fernández debió contratar varias veces un planeador (ver el álbum “Rosario desde el aire” de su cuenta de Flickr, con 459 vistas aéreas parciales y generales de la ciudad tomadas entre 2006 y 2009). Fachadas: la Bolsa de Comercio, la panadería La Europea, el Palacio Cabanellas, el edificios Bola de Nieve, la Plaza Pringles, el Normal Nº 2, la Facultad de Medicina, la Estación Central Córdoba, etc. Muchos edificios coinciden con las esquinas, como el Hotel Majestic con San Lorenzo y la Bajada Cabral, el Palacio Tiscornia con San Lorenzo y Paraguay, el ex Hotel Roma con Corrientes y Santa Fe, el Concejo Municipal con 1º de Mayo y Córdoba, el Teatro El Círculo con Laprida y Mendoza… Ah, esquinas, esquinas, bajo esos cielos grises, Córdoba y Corrientes, San Lorenzo y Sarmiento, Urquiza y Corrientes, Entre Ríos y Mendoza, Maipú y Córdoba, Buenos Aires y Santa Fe, Córdoba y Balcarce, Salta y Oroño, son muchísimas para registrarlas a todas, incluso limitándose a las del centro.

En cambio, las esquinas acústicas del banco de Sonidos de Rosario, que dirige Adolfo Corts, son mayoritariamente excéntricas y alejadas, esquinas de calles que suenan raras a los vecinos de las otras zonas: Almafuerte y Leguizamón, Ovidio Lagos y Fontezuela, Aurora y Cafferata, Rondeau y Circunvalación, Eva Perón y Magallanes, Uriburu y Flammarión, Campbell y Gálvez, Leiva y Cabildo, Plumerillo y Uspallata, Iriarte y Buchanan, Sánchez de Loria y las vías. Las esquinas por fuera de los primeros bulevares son infinitas, más aún si se quisiera copiar el sonido de todas a diferentes horas del día. La utopía fonográfica que inspira el proyecto de Corts sería una memoria auditiva absoluta registrando todo el tiempo los diferentes ambientes urbanos y periurbanos, los paisajes sonoros de la provincia y aun de lugares turísticos, con toda la gama de hechos sociales que tienen lugar en ellos, desde un encuentro casual de dos o más personas en una esquina a un evento multitudinario al aire libre, como el 50º Aniversario del Monumento a la Bandera, grabado el 20 de junio de 2007. Sonidos de Rosario almacena cientos de archivos mp3 catalogados según temática, lugar y fecha de grabación, “con el objeto de documentar la riqueza sonoro-cultural de la urbe y de preservarla para las generaciones futuras”. Fonogramas de distinta duración con registro directo del sonido de calles, esquinas, bares, bancos, balnearios, centros culturales, clubes, comercios, pensiones, manifestaciones, mercados y ferias, fútbol, clases, desfiles y más. Para busólogos hay varias pestañas de especial interés, como

Pero el recurso de juntar dos imágenes de lo mismo separadas por el tiempo es más viejo que el Photoshop. Makovsky en su nota lo compara con “las propagandas de adición capilar: un antes y un después que ostenta el peluquín del tiempo”. En ocasiones el reciclaje arquitectónico tardoposmodernista se anticipa patéticamente al montaje digital, aprovechando una fachada de albañilería 253


Máquinas, Transportes y sobre todo Terminal de Ómnibus, “desordenada catedral del viaje, templo incierto” como dice Groppa en su descripción lírica de la Terminal de Ómnibus de Jujuy en el último día del año 1971. Un día de lluvia, para más dato, que “había anidado en colas de boleterías, en ómnibus que partían a hora y quince, y en un apagado bullicio bajo los aleros metálicos de las plataformas. De vez en cuando la voz de una mujer oficiaba por el parlante. Una paloma escondida. Ella es la reina de la canción… sonaba en los transistores de un viajero. Bolsones, valijas, diarieros, mochilas”.

de la mañana. En Transporte hasta la fecha hay 22 archivos con segundos de viaje en las líneas 103 (ex M), 123, 129, 140, 143 negra, 148 (hinchas de NOB cantando), la K, un coche de la empresa Flecha-Bus cruzando el puente Rosario-Victoria, el tren de pasajeros del Nuevo Central Argentino saliendo de Rosario Norte, una lancha de la Fluvial hacia la isla Vladimir, taxis y remises. En Máquinas, por último, entre otros ruidos preservados para un futuro en que pudieran llegar a ser objetos de nostalgia o estudio, 23 segundos de un compresor de gomería registrado en agosto de 2004.

Acomodándose los grandes anteojos de búho, el vaso de vino sobre un mostrador de estaño, la libretita y un grabador de cinta disimulado en un sobre de papel madera, Groppa estaba ahí “cuando en los ómnibus llegaban las distancias, las calles de los pueblos de las rutas, y esos mudos y sentidos adioses rurales. Atracaban expresos con un enjambre de kilómetros y señales camineras en los motores sedientos. Traían el campo ensimismado y el rumor de otras ciudades. A un costado, en la loma, el paredón del neuropsiquiátrico. Y rostros desconocidos, en las sillas de la taciturna espera. Gente del Norte, de los Pericos, de Altos Hornos. Turistas. Corridas. Anteojos negros. Mujeres con pantalones y mini short. Confitería. Lustras. Revisteros. ‘Tiras’. Encomiendas. Changarines. Carteles con ‘terroristas subversivos buscados’. Olores a comida, a baños, a creolina, a gas-oil, humo negro. Entonces charlan entre sí los boleteros y los taxistas repasan sus coches con una franela amarilla. Luego, nuevamente, viene el gran adiós” (Anuarios del tiempo, volumen III, 1960-1995, Jujuy, 2001).

Chiavazza y Persia tienen varias fotos de la Terminal de Ómnibus de Rosario; en el libro se incluyen dos, una de su entrada principal, esquina de Santa Fe y Cafferata, con su torre y su porte academicista, y otra de atrás, una perspectiva de las dársenas desiertas que había sobre calle Santa Fe hasta hace algunos años, cuando fueron barridas por una ola de remodelación anterior a la ola en curso que está destruyendo la visera de cemento y reemplazándola por otra metálica mucho más larga. En la foto de mayo de 1956, las dársenas se ven vacías a causa de un paro de trabajadores del transporte interurbano de pasajeros. Suspendida sobre el andén, la visera se va reduciendo de tamaño, todavía sin paredes ni puertas de vidrio corredizas, sobre una serie de columnas menguantes cada una con un afiche publicitario de la marca Toddy, que estaba asociada con el diario La Tribuna en un programa de estímulo a la creatividad infantil, la buena conducta y el consumo de chocolatada tres veces al día. Tanto la diagramación usual de la época como el hecho de que en la tapa del vespertino se mezclasen noticias locales, nacionales e internacionales, pueden causar cierta confusión al lector de ahora que observa la foto abajo de un título que no le corresponde, como si las dársenas y andenes desiertos no ilustraran el paro del transporte interurbano sino las secuelas mortales de la nube radiactiva de la bomba H “que alumbró la noche con la intensidad de 500 soles”.

La pestaña Terminal de Ómnibus del banco de sonidos naturales, sociales y artificiales “organizados en más de treinta categorías” por Corts y colaboradores, incluye audios con sonido ambiente de las plataformas, anuncios de arribo y partida, el puesto de diarios y revistas del hall central y el baño de damas el 13 de febrero de 2007 a las 10 254


Agradecimientos Blanco sobre Blanco Club de Fun Diario La Capital Ñ Revista Cultura Museo Castagnino+macro Espacio Arte Fundación OSDE 255


LANAS Crear Destruir Rosario (2011)

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