Dr. Eder Ruiz León Edrule9@hotmail.com Línea: Defender el interés superior de la niñez y la juventud. Educación superior obligatoria para un México nuevo. Resumen: Los tiempos demandan acciones congruentes y eficientes para rescatar al país del atraso que se observa a nivel internacional. La historia respalda la necesidad de evolucionar en la temática abordada. Las acciones deben surgir y aterrizar mucho más allá de un discurso, se deben transformar en hechos que permitan a las nuevas generaciones gozar de condiciones de vida más elevadas con sus obligaciones que conlleva. La democracia es una consecuencia inevitable y una exigencia que se atañe con la preparación del pueblo. Los estándares internacionales son claros y precisos, el educar a un pueblo implica nuevas situaciones que no se han considerado del todo, pero que inevitablemente darán paso a nuevas cuestiones a atender, algo que pudiera influir en la decisión del estado a absorber esta responsabilidad. Una breve remembranza de las reformas que ha pasado el artículo 3 o constitucional hasta los tiempos actuales. La educación superior permite un desarrollo, igualdad, equidad y justicia social. Es bien sabido que no garantiza el acceso al mercado de trabajo de una forma inmediata, pero los tiempos marcados por la economía del conocimiento lo notan como un requisito indispensable para el desarrollo del país. Si bien es loable e indispensable que el Estado garantice este nivel educativo en la constitución, implica muchísimas consideraciones que todavía no son previstas, si no por el paso del tiempo. Desde la constitución de 1917 cuando se estableció en el artículo 3 o la impartición gratuita de la enseñanza primaria; durante el sexenio de Lázaro Cárdenas del Rio sufre su modificación, la educación primaria se suma la obligatoriedad. En esta década se crean instituciones de educación media y superior por parte del Estado, como: escuela nacional de antropología e historia, escuela de enseñanza doméstica y trabajo social, Chapingo, normales rurales, entre otras. En 1946 por instancias de Vicente Lombardo toledano, Narciso Bassols y Jaime torres Bodet, establecen la séptima fracción del 3o: la educación que el Estado imparta será gratuita. Educación 1