En este libro se reúnen escritos dedicados a la obra de Rigoberto Lanz, realizados por distintos compañeros y compañeras de su viaje intelectual que, en la diversidad de interpretaciones, hacen emerger la poliédrica mirada de este pensador como la de un contemporáneo que no solo intervino con voz propia en los debates sino que solía cuestionar los términos en que los mismos se planteaban; de un pensador cuya voz seguirá siendo incómoda para quienes se niegan a comprender lo que acontece y nos acontece.