La Importancia de los Fundamentos

By: Ted Howard, Production Animal Consultation

“Esto es una pelota de fútbol americano.” La declaración que el legendario entrenador de fútbol americano Vince Lombardi le dijo a su equipo de fútbol de los Green Bay Packers el primer día de práctica de primavera en 1961. Habían perdido el Campeonato de la NFL ante los Philadelphia Eagles unos meses antes. El entrenador Lombardi no dio nada por sentado; comenzó desde cero asumiendo que los jugadores eran pizarras en blanco y comenzó de nuevo desde el principio. Su cobertura metódica de los fundamentos de bloqueo, tacleo, expectativas de libro de jugadas, y más llevo a sus Green Bay Packers al Campeonato de la NFL con una victoria de 37-0 sobre los New York Giants al final de la temporada.

Me costó encontrar un “nuevo” tema para discutir en nuestro artículo sobre equitación para esta edición de la revista. Después de pensar en la equitación, me di cuenta, al igual que el entrenador Lombardi, se trata de dominar los fundamentos que discutimos en estos artículos, así como también durante mis visitas. Cuando nos enfocamos en lo básico, tomamos pequeños pasos para avanzar en nuestras habilidades para alcanzar nuestras metas.

Encontrarse con su caballo cada mañana de manera positiva es muy importante. Esta mentalidad de asociación básica establece el resto de su día para tener éxito. Tratar a su caballo como un compañero y no como una herramienta asegura un día de trabajo en quipo y logro.

Cuando su caballo no da un paso para encontrarse con usted cada mañana, le está tratando de decirle algo. Es posible que tenga agotamiento o un dolor físico que necesita ser abordado. Puede mostrarse indeciso a ser montado debido a algunas malas experiencias previas. Por lo tanto, terminar su día con un aspecto positivo es muy importante. Dejar que su caballo se enfríe, lavarle el lodo de sus patas y cepillarlo son fundamentos básicos que ayudan a terminar el día de una buena manera.

Cuando considero los fundamentos, el entendimiento de las tres partes del caballo que debemos ser capazes de mover está entre las cosas que encabezan la lista. Nuestro caballo debe ser capaz de mover la parte delantera, el área de las costillas y los cuartos traseros con una ligera presión de nuestros pies. Trabajar desde nuestros pies mantiene nuestras manos suaves y menos presión en la boca del caballo.

El enfoque en nuestras manos y en la habilidad para liberar presión en la boca de nuestro caballo es un fundamento muy importante para dominar. La cabeza de nuestro caballo es crucial para el éxito de mover nuestro ganado de manera silenciosa. La cabeza baja de nuestro caballo indica la confianza y el confort de nuestro caballo, lo que establece confianza en nuestro ganado.

Un fundamento de ganadería que a veces es difícil de entender es que cuando disminuimos la velocidad de nuestro caballo, el ganado también disminuirá su velocidad. Es nuestro primer instinto de igualar la velocidad de nuestro caballo con la velocidad del ganado que estamos trabajando. Antes de darnos cuenta, todos nos estamos moviendo fuera de control. El ganado quiere verlo a usted y a su caballo, por lo que montar directamente detrás de ellos no es cómodo para el ganado. Montar a un lado de ellos en su línea de visión les ayuda a tomar dirección mas fácilmente.

Los fundamentos básicos son esenciales para el trabajo exitoso en corrales de engorda. Poder mover la parte delantera de nuestro caballo a la velocidad adecuada para la situación con la cabeza baja ayuda a sacar a un animal enfermo de su corral de manera sinlencionsa. Mover nuestro caballo hacia los lados a través de presion en las costillas ayuda a liberar o agregar presión suavemente al ganado. Poder mover la cadera de nuestro caballo cuando estamos trabajando con ganado en un callejón o en un Bud Box ayuda a controlar el flujo del ganado de una manera de bajo estrés.

Asi que, no importa si está trabajando en corrales de engorda o cocinando en la parrilla, dominar los fun damentos lo preparará a usted para tener éxito. Por lo tanto, no se ofenda la próxima vez que nos veamos si le digo, “Esto es un caballo!”