BENEMERITA ESCUELA NORMAL MANUEL AVILA CAMACHO LICENCIATURA EN EDUCACION PREESCOLAR
OBSERVACION Y ANALISIS DE LA PRACTICA EDUCATIVA
DRA. CLAUDIA LISBETH SOTO CASILLAS
CRONICA ¨ ¿DONDE ESTAN LAS MAESTRAS? ¨
DANIELA DE LUNA AVILA
2 ¨A¨
A 10 DE ABRIL DEL 2019
ZACATECAS, ZAC.
¿DONDE ESTAN LAS MAESTRAS? Era 26 de marzo del 2019, dieron las 7:00 de la mañana y mi mama entro a mi cuarto para despertarme, me sentía descansada, había dormido bien, algo que no puedo hacer cuando voy a la escuela, sin embargo, no estaba plena, me sentía frustrada pues el primer día no fue muy de mi agrado. Mi tía paso por mí para llevarme al Jardín de niños Federico Froebel en Calera De Víctor Rosales en donde estaba llevando acabo mi jornada de observación, llegue antes de las 8:30 y no habían llegado las docentes, por lo que me quede con mis compañeras en el patio de la escuela. Cuando comenzaron a llegar los niños, nos dirigimos cada una a su respectivo salón de clases, cuando yo llegue a el aula de 2 C que fue el grupo que me asigno la maestra encargada, ya había varios niños en el salón, entre ellos Sandro, un pequeño muy inquieto que desde el día anterior me di cuenta que le hacia la vida imposible a la docente titular. Los niños andaban caminando en grupo por todo el salón detrás de Sandro, les pregunte qué era lo que estaban haciendo, una niña me dijo que andaban limpiando el salón, Sandro traía un rociador con fabuloso que la maestra utilizaba para aromatizar, enseguida pedí que me lo entregara ya que podría resultar peligroso si el niño se los llegara a rociar en los ojos a sus compañeros o si lo ingería, en ese tiempo estuvieron llegando más niños, a las 9:00 am muy puntual se dio el toque de entrada y cerraron la puerta del jardín. Me entro un miedo inmenso, en total en el salón estábamos 18 alumnos presentes y una practicante desesperada por que no llegaba la maestra. Los niños estaban corriendo por todo el salón, Sandro salía y entraba, por lo que opte por cerrar la puerta y pedirles a todos que se sentaran, atendieron a mi instrucción, lo que me sorprendió ya que el día anterior los niños se mostraron muy inquietos y no acataban ordenes de la maestra, les dije q ya no podíamos salir del salón porque ya habían dado el toque, una niña un poco confundida me pregunto por su maestra y les dije al grupo en general, ¨niños no ha llegado su maestra pero la vamos a esperar, en lo que llega que les parece si cantamos una canción¨, yo estaba muy nerviosa, temía que la maestra no asistiera ese día a clases, no me sentía lista para tener el control del grupo, Sandro se empezaba a desesperar, se paró y empezó a dar vueltas en el salón, les dije a los niños que cantaríamos la canción de la serpiente, en eso llamaron a la puerta, era una de las maestras del jardín de niños y nos pidió que pasáramos al patio central, yo no sabía para qué, pero, forme a los a los niños y todos los grupos nos situamos alrededor del patio, al cruzar miradas con mis compañeras pude darme cuenta de que no solo era mi maestra la que faltaba, si no que eran más de 5 docentes las que aún no se habían presentado y mis compañeras también se veían un poco nerviosas, en eso los niños de mi grupo a los que estaba intentando acomodar corrieron despavoridos hacia la puerta abierta del jardín, me asuste por un momento y casi se me sale el corazón, pero una inmensa paz volvió a mi cuando vi que la maestra titular del grupo acababa de llegar y los niños salían a
recibirla, sentí mucha tranquilidad y en mi cara se pintó una sonrisa. No me imaginaba yo sola con el grupo durante todo el día, en este salón hay varios niños con actitudes especiales que requieren de alguien con experiencia. La maestra se disculpó por la tardanza, explico que tuvieron un percance y les fue imposible llegar antes, me hizo saber que ella estaba tranquila porque sabía que había alguien con el grupo, menciono algo que me dio vueltas en la cabeza durante un rato, ella dijo ¨Es que Sandrito no puede estar solo y me preocupa, pero mi consuelo era que estaba usted con ellos¨ me dio las gracias por estar con el grupo mientras ella llegaba, me hizo sentir muy importante en su grupo. También menciono que la maestra encargada del jardín cuando la directora no estaba, había improvisado una pequeña activación física mientras llegaban ellas, por eso es que nos habían sacado de los salones pero que en lo personal ella lo consideraba innecesario pues estábamos nosotras apoyando. La actividad se canceló en cuanto llegaron las maestras y todos regresamos a los salones un poco más tranquilos para continuar con las clases normales.