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LIBÉLULA
Sensaciones
Extiendo los brazos para abrazar la luz de tus ojos viento suave, pistilos recorrido tu piel.
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La noche abre paso a los sueños encendidos donde tú y yo reímos llenando nuestros vasos de deseo.
Quiero viajar entre los pétalos de tu pasión, subirme entre tus ramas, néctar, selva, piel, salvia, flor, en busca de tus labios.
–GUILLERMO MARTÍNEZ–

Alo largo de todo el tiempo que llevo colaborando con la revista dando tips de lugares que he visitado y que me gustaría que conocieran, pocas veces he hecho énfasis en la elaboración de un viaje en sí desde su idealización y conceptualización, hasta su materialización y por ende culminación.
Y es que sinceramente el planear un viaje que requerirá días o semanas requerirá de una buena planeación, pues aunque la improvisación siempre será parte del viaje como opción, lo ideal es preparar todo con la mayor exactitud y consideración posible.
Para empezar un viaje largo es un viaje complejo, pues se precisará definir fechas, medios de transporte primarios y secundarios, así como rutas, hospedaje y finamente comidas. Los viajes desde mi perspectiva se deben comenzar a gestar con el aterrizaje de las ideas en general, de modo que estas se vayan solidificando y tomando forma. Siempre se debe tener en cuenta la época y la duración del viaje aplicado al destino que se pretende conocer, pues cada destino, época y momento; conlleva distintas variantes tanto en precio como en disponibilidad. Por lo tanto todos ellos son factores que se deben tener en cuenta siempre sí o sí.

