La Campaña Colombiana Contra Minas (CCCM) es una organización humanitaria no gubernamental fundada en 1999 como una iniciativa ciudadana, voluntaria e independiente. A partir de ese año es miembro de la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas Antipersonal (ICBL, por su sigla en inglés), una red global de organizaciones que trabaja para eliminar el uso de las minas antipersonal desde 1991.
En el año 2000, la CCCM se constituyó como una organización no gubernamental (ONG) y un año después integró a su campo de acción los temas de desarme humanitario y las iniciativas que lo promueven, impulsando los valores de Seguridad Humana y Desarrollo. Esto es posible mediante el fortalecimiento de políticas nacionales, estándares internacionales, asistencia a las víctimas y mitigación del impacto por el empleo, almacenamiento, producción, transferencia y destrucción de armas y artefactos explosivos, regulados o prohibidos por el Derecho Internacional Humanitario (DIH).
La CCCM está integrada por organizaciones de la sociedad civil y trabaja de la mano de instituciones, organizaciones nacionales y locales, además de varias asociaciones departamentales de sobrevivientes.
También forma parte de la Mesa Nacional de Educación en el Riesgo de Minas, encargada de la coordinación y acompañamiento de las acciones de educación para prevenir accidentes causados por minas.
En la Acción Contra Minas la CCCM trabaja en alianza con organizaciones y socios internacionales, nacionales y locales, asociaciones nacionales de sobrevivientes y forma parte de las instancias nacionales de Acción Contra Minas en Colombia.
De igual forma, hace parte de campañas internacionales de Desarme Humanitario como la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas (ICBL), la Coalición contra las Municiones en Racimo (CMC), la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares (ICAN), la Campaña para Detener los Robots Asesinos (Stop Killer Robots), Armas Bajo Control (Control Arms), la Red Internacional contra las Armas Explosivas (INEW) y la Red de Seguridad Humana en Latinoamérica y el Caribe (SEHLAC), que trabajan en la concientización sobre los riesgos para la población civil de este tipo de armas, así como para promover tratados de prohibición que prevengan sus efectos sociales y medio ambientales. Adicional a esto la CCCM forma parte ECOSOC y grupos de trabajo internacionales de Genero y Diversidad y ambientales.
La CCCM tiene oficinas a nivel nacional e internacional y ha realizado actividades de Accion Integral Contra Minas Antipersonal en 20 municipios del territorio nacional y tiene una red de coordinadores/as y voluntarios/as en 22 de los 31 departamentos afectados por la presencia de Artefactos Explosivos Colombia.
La Asociación Campaña Colombiana Contra Minas, fomenta el desarrollo integral de las comunidades a partir de la promoción del Desarme Humanitario y la Seguridad Humana. Implementa los pilares de la acción integral contra minas antipersonal, e incide para el establecimiento de normas y acciones que prevengan y remedien el sufrimiento humano y los daños medioambientales causados por las armas indiscriminadas y los conflictos armados, aplicando los enfoques diferenciales, de derechos y de acción sin daño.
Desde la CCCM el objetivo es garantizar que los sobrevivientes tengan su propia voz y que sean los voceros de sus propios desarrollos.
En el reconocimiento que son los Estados quienes deben garantizar la atención integral a las víctimas de minas antipersonal y otros artefactos explosivos y facilitar todos los procesos y mecanismos para su atención y reparación; así como, atender los retos para el acceso a esto, desde hace más de 20 años la CCCM ha contribuido al fortalecimiento de los procesos asociativos de 11 organizaciones de sobrevivientes a nivel Nacional. Esto ha permitido que las Asociaciones tengan la posibilidad y las herramientas de participar en espacios de escucha y toma de decisiones tales como las Mesas de Participación efectiva de Víctimas donde sus necesidades y realidades son puestas en consideración de cara a las iniciativas gubernamentales y del sector.
De manera adicional, reconociendo el valioso trabajo que adelantan las organizaciones de base por la exigencia de los derechos de las y los sobrevivientes, la CCCM creó el “Premio Camina” en conjunto con la Embajada de Bélgica, Canadá y la Empresa Gran Tierra Energy. El objetivo es visibilizar el problema de las minas por medio del premio que realiza su sexta versión, mientras se brinda apoyo económico y técnico a los procesos de asociatividad de organizaciones de sobrevivientes.
La CCCM hace los esfuerzos razonables para brindar apoyo complementario de manera continua a las personas sobrevivientes. Entendiendo que el impacto de un accidente va más allá del mismo y de la persona involucrada, afectando también a su familia y a su comunidad, desde las actividades de Asistencia Integral a las Víctimas, la CCCM identifica necesidades inmediatas tales como apoyo para asistir a citas médicas, viáticos para acompañantes, apoyos técnicos, apoyo psicosocial, terapias, otras. De igual manera reconociendo la importancia de su reintegración socioeconómica y su proyecto de vida, contribuye a identificar, de la mano de los/as sobrevivientes, posibles habilidades personales para replantear alternativas que les permitan a los sobrevivientes desarrollarse de acuerdo con sus intereses individuales, ya sea en el ámbito educativo, laboral, empresarial u otros.
La CCCM se ha destacado por adelantar esfuerzos de incidencia en los niveles gubernamentales nacionales e internacionales, en el sector de la Acción Integral Contra Minas y con organizaciones de sobrevivientes, para que se generen políticas, planes y estrategias que reparen de forma diferenciada e integral a las víctimas de minas antipersonal, al igual que a sus familias y comunidades.
Impacto de la liberación de tierras
Artefactos Explosivos destruidos: 566
Municipios libres de sospecha de contaminación por la presencia de Artefactos Explosivos: 4
Áreas marcadas: 211
Áreas despejadas: 66
Áreas Entregadas como libres de sospecha de contaminación por la presencia de Artefactos Explosivos: 277
Sectores entregados a la comunidad libres de sospecha de contaminación por la presencia de Artefactos 284
Personas Beneficiaras Directas
Total de beneficiarias:personas20,441
Familias: 5,225
Mujeres: 6,272
Hombres: 6,911
Niños: 3,754
Niñas: 3,498
Personas Beneficiaras Indirectas
Total de personas beneficiarias: 69,537
Familias: 22655
Mujeres: 22,433
Hombres: 25,777
Niños: 10,769
Niñas: 10,548
Con el objetivo de contribuir a fomentar una cultura de comportamientos seguros para prevenir accidentes ante la presencia de Artefactos Explosivos en zonas afectadas por el conflicto armado, la CCCM ha realizado más de 3.800 talleres de Educación en el Riesgo en todo el territorio nacional.
En el reconocimiento de la diversidad y los retos que esta supone en el acceso a la información, la CCCM trabaja desde los enfoques diferenciales para asegurar que la información sea accesible para todas las personas en todas las comunidades. Adapta sus actividades a los roles y normas de género comunitarias, crea material de difusión pública pensado desde los enfoques diferenciales y la interseccionalidad, realizando los esfuerzos para alcanzar a todos los grupos poblacionales en el tiempo, espacio y herramienta que más se adapte a sus identidades, necesidades y capacidades.
A septiembre de 2023 desde la Campaña Colombiana Contra Minas hemos realizado la educación en el riesgo de artefactos explosivos, sensibilizando a la población sobre el peligro que representan. Para lograr el autocuidado de las comunidades. beneficiando a 557.957 personas de los cuales han participado 10.226 que se reconocen como población Afros descendiente y 17.312 son de los pueblos indígenas.
La CCCM reconoce que los conflictos armados tienen impactos desproporcionales en las personas con identidades y características diferenciales, pero también identifica en la acción contra minas y el desarme humanitario espacios para trabajar acciones transformativas en relación al género y diversidad, la prevención de la Violencia Basada en Género (VBG) y la inclusión socioeconómica de comunidades históricamente marginalizadas, entendiendo el desarme y la acción humanitaria como generadores de transformación social y construcción de paz. En su experiencia la CCCM ha incluido la prevención de la VBG, transversalización del enfoque de Género y Diversidad, la capacitación e innovación en temas de Género y Diversidad, aportando a la implementación integral de las actividades de Acción Contra Minas sin dejar a nadie atrás, contrarrestando la desigualdad y contribuyendo a la garantía de los derechos humanos y aportando a los objetivos de desarrollo sostenible.
Para lograr esto la CCCM implementa cuatro líneas de trabajo pensadas desde la interseccionalidad, el enfoque territorial y la creatividad.
Basada en Género para equipos, comunidad y familia.
Ruta de atención a casos de Violencia
Basada en Género.
Política de Prevención de la Explotación y el Abuso Sexual (PEAS)
Análisis de Territorio desde los enfoques diferenciales para adaptar nuestras intervenciones con las realidades diferenciales de los territorios.
Generación de una herramienta de diagnóstico organizacional con la que se diseñan estrategias específicas de género y diversidad para cada área de la organización.
Promoción de mujeres a puestos de liderazgo y/o con roles no tradicionales.
Capacitación y Promoción
Basada en Género en comunidad indígena declarada libre de artefactos explosivos. Calle por la no violencia de Género.
Proyectos productivos con mujeres de comunidades étnicas para contribuir al aprovechamiento productivo, en equidad, de tierras declaradas libres de sospecha de contaminación por Artefactos Explosivos.
Encuesta de caracterización del personal para medir impacto de la contratación de mujeres en términos de desarrollo.
Equipos locales de Puntos Focales de Género y Diversidad.
En el año 2001, la CCCM integró a su campo de acción los temas de desarme humanitario y las iniciativas que lo promueven, impulsando los valores de Seguridad Humana y Desarrollo. De tal manera, la CCCM ha hecho parte activa de procesos de negociación y concertación de tratados y mecanismos internacionales que promuevan el control, prohibición y regulación de armas para mitigar el impacto de estas armas en la población civil, en la seguridad humana y en el medio ambiente, como son:
01 02 03 04
Negociación del Tratado de Ottawa sobre la prohibición de minas antipersonal en 1997 y la Convención de Municiones en Racimo.
Promoción y universalización del Tratado sobre el Comercio de Armas (TCA) en alianza con Control Arms, con quienes desarrollan temas de control y comercio de armas cortas y ligeras.
Trabajo por la prohibición total del desarrollo, producción y utilización de Armas Nucleares de la mano de la Campaña Internacional para Abolir Armas Nucleares (International Campaign to Abolish Nuclear Weapons, ICAN).
Promoción de una Declaración Política de protección de civiles frente a las armas explosivas en zonas pobladas, en alianza con la Red Internacional sobre Armas Explosivas (International Network on Explosives Weapons, INEW).
Promoción del liderazgo de los jóvenes en los espacios de desarme a través del programa Mine Action Fellows de la organización canadiense Mines Action Canada (MAC) en los espacios de la Coalición de Municiones en Racimo (Cluster Munition Coalition) y la Campaña Internacional para Prohibir las Minas Antipersonal (ICBL).
Concienciación, promoción y difusión de los efectos humanitarios que podrían causar las Armas Autónomas, en conjunto con la Campaña para Prohibir los Robots Asesinos (Campaign to Stop Killer Robots).
Concienciación y sensibilización en la sociedad civil frente a las implicaciones y efectos humanitarios del desarrollo, producción, despliegue y uso de los diferentes tipos de armas indiscriminadas mencionadas anteriormente, de manera regional, de la mano de la Red de Seguridad Humana en América Latina y el Caribe (SEHLAC) y con los Scouts región Interamericana.
Colombia tiene el potencial de convertirse en un referente en construcción de Paz, acción humanitaria y desarrollo a nivel global y quiere aportar con sus capacidades a hacerlo posible, contribuyendo al objetivo de localización de la ayuda trazada durante el Gran Pacto Humanitario de 2016. La CCCM está lista para compartir sus experiencias y capacidades con organizaciones civiles y locales en otros países afectados por la presencia de artefactos explosivos y conflictos armados, a través de la capacitación a estas organizaciones para que puedan llevar a cabo las actividades de Acción Contra Minas en sus propios territorios.
Para lograr esto, la CCCM ha establecido alianzas con organizaciones locales en Suramérica, especialmente en los países que comparten fronteras con Colombia, y en el Medio Oriente, a las cuales brinda apoyo en la generación de capacidades locales con enfoques en los principales temas de seguridad humana, desarme internacional y construcción de paz. De esta manera, se espera que cada una de las organizaciones socias se pueda convertir en un actor central para la acción contra minas en sus zonas de influencia, aprovechando el conocimiento del contexto social y cultural en sus zonas de origen y sus comunidades para desarrollar intervenciones humanitarias más efectivas, costo-eficientes y con mayor impacto social.
Al trabajar bajo una estrategia sur-sur, la organización tiene como objetivo facilitar actividades de acción contra minas más eficiente y eficaces en países afectados dis minuyendo costos, planificando según necesidades específicas del contexto e implementando actividades con socios totalmente locales que permanecerá en los países como capacidad nacional.
El proceso actualmente se está desarrollando con un enfoque centrado en el triple nexo “acción humanitaria, desarrollo, paz” con el objetivo de expandir el alcance y promover la acción integral contra las minas en estas regiones. Adicionalmente, tiene como propósito contribuir a la seguridad y el bienestar de las comunidades afectadas por los peligros derivados de los artefactos explosivos y, mediante sus esfuerzos, mitigar los riesgos asociados con las minas, mejorar las condiciones de vida de las personas afectadas y, a la vez, contribuir así al desarrollo y construcción de paz.
Al promover que las organizaciones nacionales de la sociedad civil aborden la contaminación por artefactos explosivos en su territorio y se aumente la capacidad local, la CCCM busca promover escenarios construcción de Paz, acción humanitaria, desarrollo y seguridad Aumentando así el número de socios capaces de llevar a cabo los procesos de Liberación de Tierras, Educación en el Riesgo de Artefactos Explosivos y la Atención Integral a las Víctimas, adaptados
Desde su experiencia la CCCM ha podido reconocer en los procesos y espacios humanitarios, como la Acción Contra Minas, habilitadores para la construcción y la consolidación de la paz y el desarrollo de las comunidades. No solo durante la intervención en los territorios sino, también, posterior a los procesos y actividades de Acción Contra Minas.
Entendiendo que estas iniciativas buscan la transformación de territorios ha sidoposible identificar la posibilidad de constituir espacios de reconciliación, a través de la acción contra minas, por medio de la inclusión de grupos poblacionales diversos como excombatientes y víctimas del conflicto armado. Esto además de aportar a la liberación de tierras contribuye a la construcción de paz y las garantías de no repetición.
De igual manera, gracias a los esfuerzos e incidencia de la CCCM la Acción Contra Minas ha sido incluida como un pilar en las negociaciones de paz en Colombia, al igual que parte de los acuerdos finales de paz.
Algunos de los resultados y apoyos brindados por la CCCM son: Acompañamiento a proceso conjunto de Desminado Humanitario entre La FARC-EP y el gobierno durante el proceso de negociación. El entrenamiento de excombatientes en ERM, ENT y Despeje para fortalecer la capacidad de Humanicemos DH, organización de excombatientes de las FARC creada en los acuerdos de paz.
La incidencia nacional e internacional por adelantar los nuevos procesos de paz y aportar a las políticas de paz del gobierno nacional.
Organización encargada de ejecutar el primer piloto de Trabajos, Obras y Actividades con contenido Restaurador-Reparador (TOAR) en el marco de la justicia transicional para la paz, derivados del acuerdo de paz con las FARC -EP.
La Acción Contra Minas impacta directamente en la construcción y sostenimiento de la paz en la medida en la que facilita superar las consecuencias de la violencia armada mediante el desarme humanitario, genera espacios de integración y reconciliación a partir de la inclusión de grupos poblacionales diversos y contribuye al desarrollo de las comunidades desde la superación de inhabilitantes de desarrollo como la violencia armada, el conflicto y la desigualdad.
Teniendo en cuenta que la paz y el desarrollo de las comunidades tiene como necesidad resolver las consecuencias de la violencia armada, tales como la presencia de minas antipersonal u otros artefactos explosivos, así como las amenazas para la seguridad humana que supone la violencia armada y que el desarme humanitario aborda algunas de las consecuencias a través de distintas intervenciones como la Acción Contra Minas, la CCCM reconoce y promueve en estas actividades el potencial de contribuir al desarrollo y la construcción de paz.
De manera que si se generan espacios de reflexión y acción sobre el impacto del desarme humanitario con una metodología participativa, consultiva y que reconoce la diversidad, incluyendo a personas de las comunidades formalmente y socioeconómicamente en procesos que se desarrollan en su territorio, podrán entonces fortalecer el poder de decisión sobre sus proyectos de vida, tener herramientas y podrán convertirse en agentes de cambio como multiplicadores y defensores de la seguridad humana, el desarrollo y la construcción de paz en sus
Reino
