A Saúde de Galicia – Nº 59 – Revista oficial del Colegio Médico de A Coruña

REVISTA OFICIAL DEL COLEGIO MÉDICO SEPTIEMBRE DE 2020 ✖ NÚMERO 59

DE A CORUÑA

Entrevista con el presidente del TSXG

El futuro de los MIR, objeto de una webinar colegial

El vicepresidente del Colegio, Enrique Castellón, compareció en la Comisión por la Reconstrucción

HOMENAJE DE LOS 31 COLEGIOS PROFESIONALES SANITARIOS DE GALICIA A LAS VÍCTIMAS DE LA COVID-19

Sumario

editorial

#3. EDITORIAL #4. COVID-19. Homenaje de los colegios profesionales sanitarios de Galicia

a las víctimas de la pandemia #11. Los colegios opinan #21. Iniciativas del Ayuntamiento

de A Coruña para hacer frente al SARS-CoV-2 #22. La pandemia por covid-19, una ventana de oportunidad, por Enrique Castellón #26. Webinar sobre los efectos del coronavirus en el sistema inmune #28. La gripe de 1918 versus la covid 2019, por Rosendo Bugarín #35.

El Colegio ante el brote de covid-19 causado por el C.F. Fuenlabrada #36. Prestaciones

extraordinarias de la Fundación para la Protección Social #37. El Colegio contra los

negacionistas #38. ENTREVISTA. José María Gómez y Díaz-Castroverde, presidente del TSXG:

“Las agresiones al personal sanitario no pueden justificarse, y tienen una respuesta judicial adecuada” #43. BREVES #44. RECONOCIMIENTOS #47. DEONTOLOGÍA. Nueva

Comisión de Ética y Deontología del Colegio #48. INNOVACIÓN. Ayudas para proyectos de generación de conocimiento #50. Encuento digital sobre el futuro de los MIR #53. CULTURA #56. El Servicio de URGENCIAS del Chuac apuesta por la trazabilidad y la humanización

O

UN ACTO HISTÓRICO

28 de xullo, no Pazo de Fonseca do reitorado da Universidade de Santiago de Compostela, celebrouse un acto sen precedentes: por primeira vez na súa historia os 31 colexios profesionais sanitarios de Galicia, que representan a 17 profesións e a 40.000 traballadores, reuníronse para homenaxear ás vítimas da covid-19. A iniciativa partiu do Consello Galego de Colexios Médicos e nela volcouse a nosa institución colexial. Un feito que pode marcar un antes e un despois nas relacións entre os profesionais da saúde da nosa comunidade.

Nesta edición tamén temos a satisfacción de contar coa colaboración do novo presidente do Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, José María Gómez y Díaz Castroverde na que pasamos revista a asuntos de tanto interese como o impacto da pandemia na Administración de Xustiza, a duración da investigación penal nos casos nos que están implicados médicos, a inhabilitación profesional, a medicina defensiva, as agresións ó persoal sanitario, as incompatibilidades, a mediación extraxudicial e a privacidade e as TIC. Sen dúbida, unha entrevista de moi recomendable lectura.

A iniciativa foi moi ben acollida por todos e o consenso acadado foi total. Desde esa feliz experiencia, somos moitos os que pensamos que pode ser o principio doutras accións a desenvolver en común no futuro. A unión das profesións sanitarias redundaría en beneficio non só delas mesmas senón, tamén, dos doentes. A súa forza é indubidable.

Por outro lado, informamos da suspensión da XIII edición do Encontro Médico. Como é sabido, inicialmente estaba previsto celebralo o pasado 6 de xuño e despois o vindeiro 17 de outubro, pero as condicións sanitarias e a prudencia aconsellan deixalo en suspenso.

Nas seguintes páxinas publicamos 20 artigos doutros tantos Colexios sanitarios nos que se reflexiona sobre o SARS-CoV-2.

Tamén recollemos a intervención do noso vicepresidente terceiro, Enrique Castellón, na comisión constituída no seo do Parlamento español para a Reconstrución Social e Económica trala pandemia. E sobre este asunto versa un interesante traballo do médico de familia Rosendo Bugarín, que fai unha análise comparado entre a Gripe do 18 e a covid-19.

Algunhas coincidencias son sorprendentes, máis de cen anos despois.

Rematamos facendo referencia ós cambios producidos na Consellería de Sanidade.

Abandona o cargo Jesús Almuíña, co que sempre mantivemos unha relación cordial e colaborativa. Sorte para el na súa nova etapa vital e profesional, e sorte tamén para o seu substituto Julio García Comesaña, que, desde o minuto un, conta coa nosa leal colaboración e a do Colexio Oficial de Médicos da Provincia da Coruña.

Xunta directiva do COMC: Luciano Vidán, Javier de Toro, Enriqueta Rivas, Enrique Castellón, Ana María Álvarez, Marta Vidal, Ramón Calviño, Cristina Tejera, Azucena Prieto, Manuel Bustamante, Guillermo Debén, Carlos Díaz, Maria Luisa Marín, Félix Paredes, Bernardo Seoane, Rosaura Leis e Patricia Conde.

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de Galicia EDITA:

Colegio Oficial de Médicos de A Coruña

DIRECTOR:

Francisco Docampo

REDACCIÓN:

Daniel Viña, Pilar G. Pérez y Víctor Porto

FOTOGRAFÍA:

Daniel Viña

MAQUETACIÓN:

Marta Álvarez

PRODUCCIÓN:

aguamarinacomunicacion.es

IMPRENTA:

Mundo

D.L. C- 183 - 2009

COVID-19

Posado en la plaza del Obradoiro

Homenaje de los colegios sanitarios de Galicia a las víctimas de la covid-19 En el acto participaron 31 instituciones colegiales, que aglutinan a 17 profesiones y a más de 40.000 trabajadores del Servizo Galego de Saúde Por Daniel Viña El pasado 28 de julio, en el Salón Noble del Pazo de Fonseca de la Universidad de Santiago de Compostela, los 31 colegios profesionales sanitarios de Galicia, que aglutinan a 17 profesiones y a 40.000 trabajadores del Servizo Galego de Saúde, rindieron un homenaje a las víctimas de la covid-19 y de reconocimiento a los profesionales de la salud.

Por primera vez en su historia, todas las instituciones colegiales de la comunidad se unieron por un fin común.

La iniciativa partió del Consello Galego de Colexios Médicos, y resultó ágil -duró 35 minutos-, sobria -debido a su objetivo- y solemne -por el

escenario elegido-. El acto, en el que se dieron cita alrededor de un centenar de personas y que estuvo conducido por el periodista de la TVG Eduardo Herrero, se dividió en dos partes. En la primera, un representante de cada colegio leyó, por orden alfabético, un párrafo de un manifiesto conjunto en el que se recordó a las víctimas y la repercusión de la pandemia en los profesionales y la sociedad. En la segunda, la soprano Laura Alonso y el pianista Javier Ares interpretaron varias piezas musicales.

A fecha de 28 de julio, 11.460 personas se habían contagiado con el coronavirus en Galicia -de las que 232 eran casos ac-

tivos-, y 619 fallecieron por esta causa. Muchas de ellas, como aseguró el presentador del homenaje, murieron “sen o consolo de verse acompañadas por algún ser querido. Por iso, agora que as apertas físicas tiveron que quedar aparcadas

Por primera vez en su historia, todas las instituciones colegiales de la comunidad se unieron por un fin común

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-agardemos que só durante un tempo- este acto tamén quere servir de aperta agarimosa ás familias das vítimas. Porque, non o esquezamos nunca, cada falecido era pai, nai, filla ou irmá de alguén que tampouco se puido despedir desa persoa como querería”. Además, “cómpre engadir que a ameaza do virus segue aí. E a proba máis visible son as máscaras coas que temos que desenvolver o 90 por cento da nosa actividade diaria”.

Tras la introducción, los representantes colegiales leyeron, uno por uno, el manifiesto, que se reproduce, de forma íntegra, a continuación: “Hoy, 28 de julio de 2020, en el marco solemne del Paraninfo de la Universidad de Santiago de Compostela, los Colegios Profesionales Sanitarios de Galicia unimos nuestra voz en un acto de homenaje a las víctimas de la covid-19 y de reconocimiento a los profesionales de la salud”.

“Un acto necesario. Por los que desgraciadamente nos han dejado, por sus familias, por sus amigos, por los que

COVID-19 Un representante de cada colegio leyó un párrafo de un manifiesto conjunto en el que se recordó a las víctimas y la repercusión de la pandemia

El presentador, Eduardo Herrero, en el inicio del acto han superado la enfermedad y por los que aún hoy la sufren.

También por nosotros mismos: necesitamos su recuerdo para hacer comprensible la pesadilla que nos ha tocado vivir”.

“Un acto histórico. Nunca antes en Galicia la totalidad de las profesiones sanitarias colegiadas se agruparon en una actuación colectiva de este tipo. Sin dudarlo un momento.

Para dar hoy a las víctimas y a los afectados por la pandemia, todos juntos, el abrazo más fuerte del que seamos capaces”.

“Lo hacemos en representación de nuestros compañeros colegiados. Y también de todos los profesionales que han trabajado a nuestro lado, tan imprescindibles como los que aquí estamos: auxiliares, celadores, técnicos superiores sanitarios, administrativos, personal de servicios esenciales, de servicios generales, de gestión, de mantenimiento, limpieza, ambulancias…”.

“Ese gran equipo humano que luchó por vosotros, con miedo, sí; con incertidumbre, también; pero con la generosidad y el compromiso que confiere el profundo convencimiento del inmenso valor que cada vida humana tiene”.

“Durante días, semanas y meses, los profesionales sanitarios y sociosanitarios hemos intentado que nuestra mirada os infundiera ánimo, tranquilidad y confianza en el tenebroso agujero negro al que el virus nos empujó. Que nuestra palabra sustituyera, en el aislamiento, a la de vuestros seres queridos,

para trasladaros el amor y el cariño que ellos necesitaban haceros llegar”.

“Y que los interminables días y las temidas noches tuvieran el calor de la cercanía y el consuelo de la esperanza en las respuestas a vuestras preguntas.

Pronunciamos vuestros nombres al entrar en la habitación, al llamaros por teléfono, al resolveros una duda, al acercaros las medicinas…, como si fuerais parte de nuestra familia. Así os sentimos. Fue nuestra forma de llenar de humanidad la tragedia”.

“En los primeros días, los más difíciles, nos autoorganizamos desde el poco conocimiento disponible, sin apenas directrices claras, desde el sentido común y la demostrada capacidad de cooperación entre

“Moitas vítimas faleceron sen o consolo de verse acompañadas por algún ser querido”

EDUARDO HERRERO

“Durante días, semanas y meses, los profesionales sanitarios y sociosanitarios hemos intentado que nuestra mirada infundiera ánimo, tranquilidad y confianza”

Aspecto que presentaba el Salón Noble de Fonseca

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las diversas profesiones sanitarias, cuando el objetivo –cuidar, atender, salvar vidas- nos une”.

“Por ello aunamos esfuerzos e ideas, reformulamos la estructura y capacidad de las urgencias, las unidades de hospitalización, las UCIs, las consultas, las oficinas de farmacia… Toda la sanidad pública y toda la sanidad privada en Galicia estuvieron a disposición de los enfermos, arrimando el hombro solidaria y responsablemente”.

“Los sanitarios gallegos pusimos lo mejor de nosotros mismos, cumpliendo nuestro mandato deontológico, anteponiendo el interés del paciente ante ninguna otra consideración. Cada cual desde su puesto: unos en la vanguardia, otros dándoles cobertura, otros tranquilizando desde el teléfono…”.

“Os hemos cuidado lo mejor que hemos podido, con la impotencia que produce la falta de evidencias científicas en esta enfermedad nueva, y con la falta de medios y protección que, al principio, sufrimos. Escondiendo nuestro propio miedo a enfermar y a contagiar a nuestros seres queridos. Con la rabia y el dolor de perderos y la inmensa alegría de asistir a vuestra curación”.

COVID-19

José Pelayo Míguez Baños Decano Colegio Oficial de Biólogos de Galicia

Adriana Sanz Marchena Presidenta Colegio Oficial de Dentistas de Pontevedra y Ourense

Inés López Carral Presidenta Colegio Oficial de Enfermería de A Coruña

Lourdes Bermello López Presidenta Colegio Oficial de Enfermería de Lugo

Santiago Leyes Vence Presidente Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Provincia de Ourense

Alba Soutelo Soliño Presidenta Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Provincia de Pontevedra

Gustavo Paseiro Ares Presidente Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Galicia

Andrea Pardo Rivera Presidenta Colegio Profesional de Higienistas Dentales de Galicia

Isidro José Lago Barreiro Presidente Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de Pontevedra

José María Suárez Quintanilla Presidente Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de A Coruña

María Núñez Otero Presidenta Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de Lugo

Eduardo Eiroa Mene Presidente Colegio de ÓpticosOptometristas de Galicia

Belén Núñez Rey Vocal Colegio Oficial de Terapeutas Ocupacionales de Galicia

Miriam Rodríguez Sierra Presidenta Colegio Oficial de Trabajo Social de Galicia

Francisco Javier Balado Amado Presidente Colegio Oficial de Veterinarios de A Coruña

Juan José Gómez Fernández Presidente Colegio Oficial de Veterinarios de Ourense

“Estos difíciles días nos han mostrado también el valor de la sociedad gallega, de personas y colectivos diversos, que incansablemente han dado señales de compasión, de solidaridad y de entrega por los demás”.

“Hombres y mujeres que han llevado comida, recados a nuestros mayores solos y confinados, que han enhebrado iniciativas diversas para hacer más llevadero este tiempo de dolor y miedo. Tampoco debemos olvidar nunca ese caudal

“Pusimos lo mejor de nosotros, cumpliendo nuestro mandato deontológico y anteponiendo el interés del paciente ante ninguna otra consideración”

de valor intangible del que disponemos”.

“Han sido 619 corazones los que nos han dejado en Galicia por la covid-19: jóvenes, mayores, hombres y mujeres.

619 vidas que nos duelen en lo más profundo. Nombres que nos gustaría repasar uno a uno.

619 familias que no pudieron, demasiadas veces, acompañar, acariciar y dar el último beso”.

“Entre ellos, compañeros nuestros han perdido su vida en esta pandemia. Recibid,

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queridos hermanos, el merecido reconocimiento y gratitud por vuestra trayectoria profesional y personal. Sois un ejemplo inolvidable para nosotros. Los sanitarios lo hemos pasado mal, ya lo sabéis, por eso llenabais de aplausos las tardes de cada día. Estad seguros de que nos han confortado y animado en los peores momentos. ¡Gracias, mil gracias!”.

“Pero tenemos que deciros que no somos héroes, solo pro-

COVID-19

Ascensión Pérez Sampayo Presidenta Colegio Oficial de Enfermería de Ourense

Carlos Fernández Gómez Presidente Colegio Oficial de Enfermería de Pontevedra

Héctor Castro Bernardino Presidente Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Provincia de A Coruña

Alejandro María Sánchez Pérez-Mel Presidente Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Provincia de Lugo

Francisco Javier Bueno Herrera Secretario Colegio Profesional de Logopedas de Galicia

Luciano Vidán Martínez Presidente Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de A Coruña

Manuel Boquete París Presidente Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de Lugo

José Luis Jiménez Martínez Presidente Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de Ourense

Juan Dios Tomé Presidente Colegio Oficial de Podólogos de Galicia

Avelino José Sanmartín Caamaño Presidente Colegio Oficial de Protésicos Dentales de Galicia

María Rosa Álvarez Prada Decana Colegio Oficial de Psicología de Galicia

Manuel Rodríguez Méndez Decano Colegio Oficial de Químicos de Galicia

María Magariños Cantero Vicesecretaria Colegio Oficial de Veterinarios de Pontevedra

fesionales que se ocupan del mayor bien que todos tenemos: la salud. Que cumplimos con nuestra obligación y nuestro código ético. Estábamos ahí antes de esta pesadilla y seguiremos cuando acabe. Por eso, ahora os pedimos comprensión cuando cometamos errores, y vuestra ayuda y apoyo para que nuestra labor pueda desarrollarse en las mejores condiciones”.

“Y, en primer lugar, tenemos que recordar que el virus no se

Los asistentes puestos en pie durante la interpretación del Himno de Galicia

“Han sido 619 corazones los que nos han dejado en Galicia por la covid-19: jóvenes, mayores, hombres y mujeres. 619 vidas que nos duelen en lo más profundo” ha ido, sigue entre nosotros. No es aceptable que los ciudadanos de Galicia, jóvenes o mayores, olviden o relajen las medi-

das imprescindibles para evitar nuevas oleadas epidémicas o rebrotes: la distancia individual de al menos 1,5 metros, el uso

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de mascarilla y la higiene de manos. Podemos hacerlo a la vez que recuperamos la necesaria actividad económica, comercial, cultural…”.

“Pero no debemos olvidar que la covid-19 se trasmite con mucha facilidad y genera, en algunos casos, enfermedad grave y muerte. Un infectado

COVID-19 asintomático puede ser el comienzo de una cadena de transmisión, con nuestros seres queridos incluidos en ella.

La responsabilidad individual es por ello, también, una responsabilidad colectiva”.

“Los profesionales sanitarios estamos demasiado cansados para soportar otro embate asistencial de la envergadura que hemos soportado. Entre todos, otra vez, podemos y debemos evitarlo. Ha habido demasiado dolor, demasiado miedo y demasiada soledad en estos duros meses de pandemia como para pasar página sin más. En memoria de las víctimas debemos demostrar que hemos aprendido algo, que esto no puede volver a pasar”.

“No estábamos preparados, es cierto. Nadie en el mundo lo estaba. Pero hoy sabemos que podemos adelantarnos y tomar rápidas medidas ante nuevas alertas epidemiológicas. Para ello tenemos que contar con una Agencia de Salud Pública, interconectada con Atención Primaria, y reforzar la prevención y la vigilancia epidemiológicas”.

“También es prioritario proteger más y mejor a nuestros mayores y contar con dispositivos asistenciales integrados para la asistencia a las residencias sociosanitarias, en el contexto de una nueva y contundente estrategia de aten-

“En los primeros días, nos autoorganizamos desde el poco conocimiento disponible, el sentido común y la demostrada capacidad de cooperación” Algunos de los asistentes ante la escultura de Alonso de Fonseca

“No somos héroes, solo profesionales que se ocupan del mayor bien que todos tenemos: la salud”

en su cartera de servicios de las profesiones sanitarias hoy subrepresentadas, solvente, equitativa y universal. Como un derecho individual de la ciudadanía, que no puede aceptar excepciones de ningún tipo que pongan en riesgo su esencia y la salud pública de la comunidad”.

“No aceptaremos volver a trabajar en las condiciones de riesgo en que lo hemos hecho.

Es inaudito que en nuestro país no se produzca el material esencial para nuestra protección. Es inconcebible que tengamos que depender de lo que se fabrica en los países asiáticos”.

“El compromiso con el conocimiento, la investigación y la innovación tecnológica -tan interconectados entre sídebe ser una exigencia para un país como el nuestro, que se encuentra entre las primeras economías del mundo”.

“Para las autoridades debería ser obligado contar siempre con todas las profesiones sanitarias, incluyendo aquellas que hoy tienen poca, insuficiente o nula presencia en la sanidad pública, buscando líneas de colaboración estables y participación y consenso en las decisiones de política sanitaria. Sin ellas, trabajando en equipos multidisciplinares con una vi-

ción a la cronicidad. Pedimos, por tanto, un nuevo modelo sociosanitario para Galicia, consensuado entre todos los agentes implicados”.

“Reclamamos hoy aquí, con la credibilidad que nos da el trabajo diario y el doloroso sobreesfuerzo de la pandemia, un gran acuerdo de todos los agentes políticos, sindicales y profesionales para reforzar la Sanidad, con la financiación suficiente, en un escenario de reconstrucción social y económica”.

“Una Sanidad entendida en sentido amplio, con inclusión

Javier Ares Laura Alonso

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sión integral dentro del sistema autonómico de salud, éste carecerá de calidad, equidad y sostenibilidad a corto y medio plazo”.

“Los aplausos de la sociedad gallega deben marcar el final de la precariedad en los contratos de nuestros profesionales sanitarios jóvenes. Ellos han luchado en primera línea con una generosidad y un compromiso emocionantes, algunos incluso han enfermado en la batalla. Merecen su rápida estabilización en el sistema público. Son el presente y el futuro de nuestra Sanidad”.

“Hay nada menos que 619 motivos inolvidables contra el olvido. Este acto de homenaje no puede quedar solo en un manifiesto. A ellos se lo debemos. Y “A modo de esperanza”, como el gran poeta ourensano José Ángel Valente nos iluminó en uno de sus primeros libros, acabaremos este Manifiesto con su profundo mensaje:”

“El virus no se ha ido. No es aceptable que los ciudadanos de Galicia olviden o relajen las medidas imprescindibles para evitar nuevos rebrotes”

COVID-19 “Hay una luz remota, sin embargo, / y sé que no estoy solo; / aunque después de tanto y tanto no haya/ ni un solo pensamiento / capaz contra la muerte, no estoy solo”.

“Gracias, muchas gracias al Rectorado de la Universidad de Santiago de Compostela, por acogernos en el lugar que nos une a todos los que estamos

“Los profesionales estamos demasiado cansados para aguantar otro embate asistencial de la envergadura que hemos soportado. Podemos y debemos evitarlo”

Isidro Lago, presidente del Consello Galego de Colexios Médicos hoy aquí, la casa de la ciencia y el conocimiento, el faro más seguro en los tiempos oscuros.

Gracias a todos. Buenos días”.

Una vez terminada la lectura, Laura Alonso y Javier Ares despidieron el homenaje con una triple actuación musical.

Luis Núñez, secretario de la Fundación A.M.A. En primer lugar, interpretaron Negra sombra -con letra de Rosalía de Castro y música de Juan Montes-, a continuación, el fado Ay qué linda moça -una de las seis canciones portuguesas que Ernesto Halfter compuso en su exilio en el país luso

“Tenemos que contar con una Agencia de Salud Pública, interconectada con Atención Primaria, y reforzar la prevención y la vigilancia” Mesa presidencial. Luciano Vidán, Antonio López, Isidro Lago, Rosa Arroyo, Luis Núñez y Gustavo Paseiro

durante la Guerra Civil española-, y cerraron el acto con el Himno de Galicia, con todos los asistentes puestos en pie.

En el homenaje participaron el Colegio Oficial de Biólogos de Galicia, el Colegio Oficial de Dentistas de Pontevedra y Ourense, el Colegio Oficial de Enfermería de A Coruña, el Colegio Oficial de Enfermería de Lugo, el Colegio Oficial de Enfermería de Ourense, el Colegio Oficial de Enfermería de Pontevedra, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña, el Colegio Oficial de Farmacéu-

“Los pilares de la Fundación A.M.A. son las becas de formación, los premios y convocatorias científicos y las ayudas sociales” LUIS NÚÑEZ

Plano parcial del salón en el que se celebró la comida, patrocinada por A.M.A.

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ticos de Lugo, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Ourense, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Pontevedra, el Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Galicia, el Colegio Profesional de Higienistas Dentales de Galicia, el Colegio Profesional de Logopedas de Galicia, el Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de A Coruña, el Colegio Oficial de Médi-

COVID-19 cos de la Provincia de Lugo, el Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de Ourense, el Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de Pontevedra, el Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de A Coruña, el Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de Lugo, el Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia, el Colegio Oficial de Podólogos de Galicia, el Colegio Oficial de Protésicos Dentales de Galicia, el Colegio Oficial de Psicología de Galicia, el Colegio Oficial de Químicos de Galicia, el Colegio Oficial de Terapeutas Ocupacionales de Galicia, el Colegio Oficial de Trabajo Social de Galicia, el Colegio Oficial de Veterinarios de A Coruña, el Colegio Oficial de Veterinarios de Ourense y el Colegio Oficial de Veterinarios de Pontevedra. Además, aunque no pudieron estar presen-

“Os sanitarios foron os que máis loitaron, para facerlle fronte á pandemia, ata mesmo dar a vida” ANTONIO LÓPEZ

Antonio López, rector de la USC telana, Antonio López. En representación de A.M.A. asistió el secretario de su Fundación, Luis Núñez Desiré. Antes de comenzar el almuerzo, pronunciaron unas breves palabras el presidente del Consello Galego de Colexios Médicos, Isidro Lago, el señor Núñez y el rector de la USC. El doctor Lago agradeció a todos los colegios su adhesión a la iniciativa y, al rector de la Universidad, la cesión de las instalaciones. También se mostró “orgulloso por la unión demostrada a la hora de celebrar este homenaje. Seguramente, de forma individual llegaríamos antes, pero como colectivo llegaremos más lejos”, aseguró.

El presidente del Consello Galego de Colexios Médicos,

además, recordó a facultativo y militar Juan Rey Naya, “originario de A Coruña, que contrajo la covid-19 durante su quehacer diario”. La enfermedad hizo que necesitara “ser ingresado en el hospital” y, a pesar de que su estado también requería el uso un respirador, “se negó a emplearlo porque había personas más jóvenes que lo necesitaban más que “Es necesario un él. Falleció un mes después gran acuerdo de de ingresar. Es un ejemplo de todos los agentes dedicación y entrega”. políticos, sindicales Isidro Lago agradeció el pay profesionales para trocinio por parte de la Agrupación Mutual Aseguradora y reforzar la Sanidad, personalizó su gratitud en la con la financiación figura de dos expresidentes del suficiente” Colegio Médico de Pontevedra: Luis Campos, actual presidente de la mutua, y Diego Murillo, presidente de la Funtes en el acto, también dación A.M.A. “y mi colaboraron el Colegio mentor durante 33 Oficial de Dietistas-Nuaños”, recordó. tricionistas de Galicia A continuación, y el Colegio Oficial de Veterinarios de Lugo. tomó la palabra Luis Finalizado el evento, Núñez Desiré, que los asistentes posaron se refirió al colectivo para una foto de fami“más vulnerable ante la pandemia: las perlia en las escaleras de sonas mayores”. A la plaza del Obradoiro, ellos, “la generación con la Catedral de Sande nuestros padres, la tiago de fondo, y, desque realmente estaba pués, se celebró una comida de confrateren riesgo, le debemos todo lo que tenemos nidad patrocinada por la Agrupación Mutual hoy gracias a su esAseguradora (A.M.A.). fuerzo”. También A ella acudieron 59 habló sobre los tres personas, y estuvo prepilares en los que se sidida por el rector de basa la Fundación Litografía del pintor gallego José María Barreiro, la Universidad composA.M.A.: “las becas de regalo de A.M.A. a los colegios

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formación, los premios y convocatorias científicos y las ayudas sociales, que conforman una parte muy importante. Ya llevamos más de mil proyectos financiados, y cada día nuestra ilusión crece”.

El turno de intervenciones se cerró con Antonio López, que mostró su agradecimiento “polo xesto que hoxe tiveron coas vítimas da pandemia. Os sanitarios foron os que máis loitaron, en primeira liña, para facerlle fronte. Todos estamos colaborando para tratar de saír desta desgraza”, pero los profesionales de la salud “están absolutamente implicados, ata mesmo dar a vida, para intentar que non haxa máis falecidos”.

El rector agradeció “a elección da nosa universidade para celebrar o acto”, y recordó que la USC “e as profesións sanitarias están directamente relacionadas. Non podíamos estar máis orgullosos de acoller aos participantes nunha homenaxe como esta”.

Dirigiéndose directamente a los asistentes, aseguró que “merecen toda a nosa admiración. Vostedes están facendo e aportando máis que ninguén.

Nós tratamos de axudarlles para que sigan realizando o seu traballo diario, porque son os que nos sacarán desta pandemia”. De esta última, afirmó, “sairemos, aínda que sexa con dificultades, grazas á disposición e ao xesto xeneroso de todos vostedes”.

COVID-19

La emoción tras la pandemia Por José María Suárez Quintanilla* Todos tenemos la sensación de que hemos vivido un sueño, aunque será necesario que pase mucho tiempo, para que ese recuerdo, forme parte del pasado.

Por esta razón, debemos ser conscientes de que nos encontramos ante una crisis sanitaria y global, que afecta a todos por igual y no distingue entre nacionalidades, etnias, patrimonios o creencias.

Por ello en los próximos años, además de planificar un sistema sanitario más previsible e

José María Suárez Quintanilla

incrementar, al mismo tiempo, las medidas de protección individual, debemos aprovechar y desarrollar las oportunidades que nos ofrecerá, en el futuro inmediato, esta crisis mundial.

Oportunidad para reflexionar sobre nuestros auténticos afectos e intereses, revisando con claridad emocional nuestra escala de valores.

A pesar de que algunos no aprenderán absolutamente nada, aprovechemos esta oportunidad para poner encima de nuestra conciencia, conceptos tan importantes en nuestra profesión, como la solidaridad, la compasión e impulsemos la necesaria transformación de los derechos individuales hacia los derechos colectivos.

Ahora más que nunca, no podemos negar el hecho de que vivimos y dependemos de la

Non hai saúde sen saúde mental Por María Rosa Álvarez Prada* Este mes de maio, cando o planeta estaba inmerso na batalla contra a covid-19, a Organización Mundial da Saúde lanzou un chamamento a “aumentar substancialmente os investimentos para evitar unha crise de saúde mental”, na presentación do Informe de políticas sobre a covid-19 en materia de saúde mental, mentres reclamaba empregar esta oportunidade para compensar a clamorosa falta de investimento nos servizos de saúde mental, e así garantir que todas as persoas poidan acceder ao apoio psicolóxico.

Se de algo tomamos conciencia a raíz desta pandemia, é que a vulnerabilidade que sentimos neste tempo só ten como factor protector unha sanidade pública forte, no marco dun conxunto de

servizos públicos consolidados.

Lamentablemente, non chegamos ben preparados a esta emerxencia sanitaria e as primeiras persoas que puideron comprobalo foron as nosas sanitarias e sanitarios que, ata a extenuación e sen medios, deron a batalla -e

continúan a dar- contra o coronavirus.

O impacto psicolóxico que supuxo o vivido desde marzo é innegable, a súa dimensión é inédita e demostra a necesidade de garantir a accesibilidade á atención psicolóxica de toda a cidadanía. Urxe descentralizar e

comunidad, y, por eso, aunque existe una lógica obsesión por eliminar al virus, la actual realidad exige el desarrollo de políticas que nos permitan convivir con él, afrontando cuanto antes los cambios que nuestra sociedad tiene que introducir, para garantizar su propia supervivencia.

La covid ha modificado y modificará muchas cosas que eran innecesarias y habituales en nuestras vidas, pero nunca debe controlar a través del miedo, los sentimientos de esperanza y confianza, que son los únicos que nos transforman, de una manera definitiva, en seres humanos. *José María Suárez Quintanilla es presidente del Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de A Coruña

achegar a asistencia psicolóxica á cidadanía instaurando a psicoloxía nos centros de Atención Primaria, especialmente para as persoas que se viron máis afectadas pola pandemia (persoas maiores, nenos, nenas e adolescentes, vítimas de violencia de xénero, vítimas de abusos, profesionais expostos/as, superviventes á covid-19 etc.).

E debemos asegurar que a accesibilidade estea tamén a través doutros servizos públicos, como sinala a OMS, tales como os servizos sociais comunitarios, ou tamén os equipos de orientación dos centros educativos. Así teceremos unha rede de proximidade que permita coidar da saúde mental e do benestar psicolóxico da cidadanía, sobre todo das persoas máis vulnerables. Porque, desde logo, é impensable falar de saúde sen contemplar a saúde mental e o benestar psicolóxico; máis aínda en tempos de pandemias. * María Rosa Álvarez Prada é decana do Colexio Oficial de Psicoloxía de Galicia

María Rosa Álvarez Prada

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COVID-19

“A covid-19 está a causar unhas perdas indiscutibles” Por Juan Dios Tomé* Nos últimos meses a sociedade paralizouse por un inimigo invisible que está a causar unhas perdas humanas, físicas, psíquicas e económicas indiscutibles.

Neste contexto metaforicamente bélico, os colexios oficiais sanitarios de Galicia demos un gran exemplo de apoio, solidariedade e unión entre as profesións sanitarias e, por primeira vez na nosa historia, realizouse un encontro cuxa finalidade foi a de manifestar publicamente o noso sentimento de solidariedade por mor dos pasamentos como consecuencia da covid-19 e mostrar o noso apoio a todos

os seus amigos e familiares, mais tamén para poñer en valor e lembrar o fundamental e necesaria que é a labor de todos e cada un dos sanitarios galegos.

A covid-19 é unha contrincante, con devastadoras consecuencias na saúde da poboación e na estabilidade económica

das familias, coa que aínda continuamos a loitar; a día de hoxe estamos a atravesar un verán con reminiscencias ao pasado mes de marzo, cando as cifras comezaron a medrar sen descanso e cando os sanitarios non contamos co material de protección necesario nin para nós, nin para os nosos doentes.

Juan Dios Tomé

*Juan Dios Tomé é presidente do Colexio Oficial de Podólogos de Galicia.

Traballadores sociais: a covid-19 non é so unha crise sanitaria Pola Xunta Directiva do Colexio Oficial de Traballo Social de Galicia Tras as medidas adoptadas polas autoridades por mor da covid-19, o Colexio Oficial de Traballo Social de Galicia foi consciente da importancia de adoptar medidas urxentes e eficaces que paliaran as consecuencias derivadas da pandemia da covid-19 que afecta con especial gravidade á poboación máis vulnerable do país. Por isto, ademais da labor imprescindible que realizan e realizaron os servizos sanitarios, foi fundamental ofrecer unha pronta actuación no eido social co fin de afrontar as necesidades xeradas ante esta situación de crise socio-sanitaria e económica.

Neste senso, como profesionais de referencia do so-

Galicia xa superou a barreira dos 13.000 positivos e conta a día de hoxe con 634 falecidos, pero a cidadanía é cada vez máis consciente de que a chave para evitar que os números sigan empeorando son a responsabilidade individual e a solidariedade colectiva.

A covid-19 está sendo un billete de non retorno a unha nova vida. Estase a conformar unha nova sociedade na que prima o esforzo colectivo e na que todos comezamos a observar o mundo con outros ollos.

Unha nova vida que nos fai valorar, aínda máis, a sanidade e que está significando a posta en valor de todas e cada unha das profesións sanitarias xa que somos nós, cada un no seu ámbito de actuación, os que velamos pola saúde de todos.

cial e recoñecidas/os como persoal esencial na Orde SND/295/2020, as e os traballadores sociais enfocaron o seu obxectivo principal en evitar o aumento da fenda social e o grave impacto da crise entre as persoas e colectivos máis vulnerables, así como dar cobertura ás nece-

sidades máis primarias derivadas da pandemia.

A consecuencia da crise da covid-19 os colectivos especialmente vulnerables (persoas en situación de risco social, desemprego sobrevido, persoas soas e/ou enfermas sen apoios, mulleres vítimas de explotación sexual, mulleres

Xunta Directiva do Colexio de Traballo Social de Galicia

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a saúde de galicia

vítimas de violencia de xénero, menores en situación de vulnerabilidade, etc.) atopáronse en risco de entrar en situacións de extrema necesidade precisando dunha atención social urxente e inmediata.

Neste senso, as e os profesionais do traballo social, durante a pandemia, proporcionaron apoio individualizado e personalizado, acompañamento, información, asesoramento, cobertura de necesidades básicas así como facilitar o acceso a outros recursos e derivación das persoas usuarias - e afectadas pola pandemia- a programas, servizos ou recursos específicos. Ademais, son a canle de coordinación directa co servizo público de saúde, co Equipo de Menores da Xunta de Galicia, Servizos Sociais e Xustiza, tendo coñecemento e dominio de recursos para paliar os efectos e consecuencias nos casos de positivos covid nas persoas máis vulnerables.

Elas/eles inician o camiño, e nós acompañámolas/os.

COVID-19

El estado de la profesión médica Por José Luis Jiménez* Después de un duro verano en el que la segunda ola de la pandemia llegó con las plantillas inmersas en el periodo vacacional, la profesión sigue con los mismos problemas estructurales que los colegios médicos, los sindicatos, las sociedades científicas… habíamos señalado como de urgente abordaje y sobre los que hemos propuesto mil y una soluciones.

La realidad es que después de incontables reuniones, comisiones diversas, grupos de trabajo, promesas incumplidas, documentos de expertos…,

nada de lo sustancial ha mejorado. No hay medidas sólidas para reducir la sobrecarga asistencial y la excesiva frecuentación en la primaria, pediatría y en los hospitales, los médicos jóvenes siguen en contratos precarios, la imprescindible estrategia para la cronicidad ni siquiera se ha diseñado, el desarrollo de los roles de las diferentes profesiones sanitarias tan señalado como solución para disminuir las cargas de trabajo de los médicos en primaria, está en vía muerta...

Los aplausos de las ocho se han convertido en demasiados

casos en exigencias. El enorme reconocimiento social que los médicos y el resto de profesiones sanitarias recibimos, no se ha traducido en Galicia en ninguna mejora de nuestras condiciones laborales.

Esta dura realidad, sumado a la dificilísima adaptación del modelo de trabajo y la incertidumbre ante la impredecible pandemia, es lo que coloca a los médicos gallegos en una

José Luis Jiménez

Enseñanzas covid Por Inés López Carral* Si una profesión vivió y vive en primera línea la atención a los enfermos de covid-19 es, sin lugar a dudas, la enfermería. Siempre a pie de cama. Siempre al lado del ser humano que sufre y lucha por ganarle la partida a la muerte.

Somos la mano amiga, la caricia tranquilizadora, la voz que acompaña, los que evitamos el fin de la vida en soledad. En estos meses de pandemia, las enfermeras hemos sido testigos de mucho dolor, de mucho sufrimiento y de demasiados éxitus. Pero, también, de mucha ilusión, de mucha esperanza y de muchos finales felices. Y esa ha sido nuestra gran recompensa.

Porque, ¿hay mayor recompensa que ver la mirada de esos pacientes que encuentran en nosotros paz y consuelo? ¿De esas manos que se aferran a las nuestras en la procura de

Inés López Carral

seguridad y ayuda? Les puedo asegurar que no.

Por eso, nos resulta imposible comprender a aquellas personas que no usan mascarilla o lo hacen de forma deficiente, que no guardan la distancia física y que no se aplican en su higiene particular. Esos ciudadanos que no solo ponen en peligro su vida, sino la de todos, empezando por sus seres más próximos y queridos.

Hombres y mujeres que no han aprendido nada de estos meses difíciles y oscuros.

Los enfermeros y las enfermeras lo hemos dado todo, incluso nuestra vida y nuestra salud, para salvar las de los demás. Nos hemos adaptado a

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a saúde de galicia

situación de desesperanza y falta de perspectivas de futuro.

Con una peligrosa tentación de acogerse al “sálvese quien pueda”. De la que sólo nuestro compromiso ético y los valores del profesionalismo médico nos defienden.

El silencio de este verano, la desinformación a los Colegios Médicos -y al resto de entidades profesionales- sobre importantes decisiones ante la pandemia que nos atropella, la falta de respuesta a la demanda de estabilización de los médicos jóvenes, a los problemas de los médicos vinculados a instituciones penitenciarias… no son de recibo. ¡Que el otoño nos sea propicio! La esperanza y la disposición permanente al diálogo constructivo y realmente resolutivo, nunca la vamos a perder. * José Luis Jiménez Martínez es presidente del Colegio Médico de Ourense

trabajar en unas condiciones duras y asfixiantes. Por eso apostamos por la prevención.

Es la mejor, la única arma que tenemos en estos momentos para vencer al virus asesino.

Y al hilo de la actualidad, con la vuelta al cole, reclamamos, porque es justo y necesario, la puesta en marcha de la enfermera escolar. Una modalidad de la enfermería que, al margen del SARS-CoV-2, debe tener un lugar en la plantilla de personal de todos los centros educativos públicos y privados. Es por el bien de nuestros hijos y por el nuestro propio.

Contamos para ello con unos profesionales magníficamente formados que, como es bien sabido, gozan de un prestigio y de un reconocimiento que supera nuestras fronteras. * Inés López Carral es presidenta del Colegio Oficial de Enfermería de A Coruña

COVID-19

La Fisioterapia, referencia en la gestión de las secuelas de la covid-19 Por Gustavo Paseiro Ares* Reconocida su eficacia y eficiencia por la comunidad científico-sanitaria y por la propia sociedad, la Fisioterapia está llamada a convertirse en una profesión de referencia para gestionar tanto las secuelas derivadas de la covid-19, fundamentalmente respiratorias y neuromusculoesqueléticas, como las consecuencias sobre la salud por los períodos de confinamiento.

Durante la fase álgida de la pandemia, un insuficiente número de fisioterapeutas permanecimos en “primera línea”, constatando que el sistema sanitario no estaba preparado para afrontar retos de esta envergadura, al contar con un precario número de profesionales. Una mayor dotación de fisioterapeutas, especialmente en UCI, repercutirá en la optimi-

zación de los recursos sanitarios disponibles y en la reducción del impacto del virus sobre la salud comunitaria, al minimizar tiempos de recuperación y el deterioro de las capacidades funcionales de los pacientes.

También demostramos nuestro elevado nivel de responsabilidad, civismo y compromiso con la salud en el ámbito privado. Anteponiendo la seguridad común, procedimos a atender exclusivamente a aquellas personas que, de no hacerlo, sobrecargarían los CAP y hospitales, aplazando los tratamientos no urgentes por considerar que el desabastecimiento de EPI impedía desarrollar nuestras intervenciones con plenas garantías. No obstante, en un estricto cumplimiento de las normas deontológicas y criterios de normo praxis, mantuvimos

la asistencia a través de medios telemáticos, además de prestar apoyo a otros profesionales de la salud para paliar las secuelas derivadas de la sobrecarga de trabajo.

Actualmente nuestra labor se centra en dar respuesta a las necesidades de las diferentes tipologías de pacientes: los que presentan síntomas menores de la covid-19 y que deben permanecer aislados en sus domicilios, los dados de alta hospitalaria

Gustavo Paseiro

El compromiso ético de los higienistas dentales Por la Junta Directiva del Colexio Profesional de Hixienistas Dentais de Galicia ¿Una pandemia? Pero…eso suena como ancestral, ¿no? ¿Qué nos van a confinar? ¿Un estado de alarma…? ¿Eso... no era para cuando hay guerras? ¿Un virus? ¿En China?, bueno, bueno, bueno hay que ser prudentes que los chinos son un poco exagerados con esto de los contagios, las mascarillas, …

Siete meses después: 846.000 fallecidos, 25,2 millones de casos confirmados y 16,4 millones de personas curadas.

El 14 de marzo de 2020 cambia nuestras vidas; la ex-

pectación y la preocupación se instalan en toda la sociedad y en todos los profesionales sanitarios, incluidos los higienistas dentales; un extraño virus llamado SARS-CoV-2 ha

infectado a millones de personas por todo el mundo.

Su mecanismo de transmisión, a través de las secreciones de personas infectadas, principalmente por contacto directo con gotas respiratorias o fómites contaminados, expone potencialmente a los higienistas dentales al contagio. Sus tratamientos generan los temidos “aerosoles” y la distancia de seguridad se reduce a pocos centímetros.

El compromiso ético y la responsabilidad que conlleva ser

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tras superar la fase crítica de la infección, los que presentan alteraciones de salud debidas al confinamiento y los que no recibieron atención debido a la reducción de la actividad asistencial presencial.

Es por ello que desde el Colexio Oficial de Fisioterapeutas de Galicia consideramos indispensable una reordenación de la actividad de la fisioterapia, con especialidades en todos sus ámbitos de actuación, implementando un mayor número de fisioterapeutas en todos los niveles asistenciales, tanto dentro de los equipos de atención hospitalaria a pacientes críticos como en todos los PAC y centros de salud; y facilitando una adecuada asistencia sociosanitaria a personas mayores, dependientes y con diversidad funcional.

Los y las fisioterapeutas continuamos demostrando que conformamos un colectivo comprometido con la salud: #EsteVirusLoParamosUnidos. *Gustavo Paseiro Ares es presidente del Colexio Oficial de Fisioterapeutas de Galicia (CoFiGa)

un profesional sanitario no nos ha dejado indiferentes: unos, en primera línea, atendiendo a los pacientes y otros desde el ERTE llenando las redes sociales con consejos e informaciones para preservar la salud bucal durante la pandemia y evitar la transmisión del virus por malas prácticas en el cuidado e higienización de la boca.

En espera de una futura vacuna o tratamiento efectivo, los higienistas dentales , como colectivo sanitario, nos unimos a las reivindicaciones que conlleven medidas claras, efectivas y reales para luchar contra este enemigo invisible tan destructor que en estos momentos nos toca combatir y vencer.

“La historia continua, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo hasta luego” (Eduardo Galeano).

COVID-19

La unión de los profesionales sanitarios Por Eduardo Eiroa* El pasado 28 de julio hemos tenido el honor de participar en el acto de homenaje a las víctimas de la covid en nuestra comunidad autónoma, organizado por el Consello de Colexios de Médicos de Galicia. Además, el evento fue también un reconocimiento a la labor de todos los trabajadores y trabajadoras de la atención sanitaria relacionada con esta pandemia durante los meses que tuvo mayor incidencia y letalidad.

Fue un homenaje de reconocimiento a las víctimas y a las personas que han tenido un comportamiento profesional y humano ejemplares, ante una emergencia sanitaria inédita

Eduardo Eiroa en España para la que no se estaba preparado, ni en medios de protección ante el contagio, ni en conocimientos sobre los tratamientos adecuados para afrontar la enfermedad provo-

Defendamos as nosas certezas

podemos esquecer a enorme frustración que supoñen as vítimas, sexan pacientes ou persoal sanitario e traballadores en xeral, particularmente ameazados por esta caprichosa enfermidade.

Por Avelino Sanmartín* Temos aínda moi preto o alento daqueles que marcharon por culpa dunha pandemia por completo inesperada. Demasiados. Para nós, cuxa profesión nos leva a coidar das persoas, segue sendo unha ferida difícil de pechar.

O perigo segue latente e é entón cando se impón unha reflexión: Que facer, máis aló de atender e sandar, para impedir que se repitan os apesarados momentos? Que facer cando para nosa sorpresa unha parte da sociedade non ve o que vimos todos e negan o evidente?

O sector sanitario, aínda despois da descomunal resposta

cada por el virus. Sin embargo, eso no fue impedimento para que muchos profesionales realizaran su labor sanitaria sin descanso para salvar vidas, siendo a menudo contagiados y a veces con consecuencias fatales.

Pero no solo fue una labor estrictamente profesional en la atención de la salud de las víctimas de la covid sino también humanitaria, proporcionando a los pacientes el afecto y el ánimo que en esos momentos no podían recibir de sus seres queridos, y a sus familiares la información y la comunicación con los enfermos que no podían mantener presencialmente, por el aislamiento impuesto.

dada para atallar o dano da covid, ten que enfrontarse agora a unha perigosa negación: a da existencia do virus e as súas terribles consecuencias para as persoas. Negalo pon en risco o noso sistema de saúde e a vida das persoas.

Necesitamos volver á bioloxía, á certeza, á razón. Ás referencias compartidas que nos permiten avanzar, como sociedade, con paso firme.

O encontro de todos os gremios sanitarios de Galicia é unha oportunidade para ser fortes ao redor da defensa da saúde, a ciencia e do exercicio das nosas profesións. Non

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a saúde de galicia

Avelino Sanmartín

Todos hemos sido testigos del reconocimiento público de muchos pacientes a esta labor humanitaria, al ser dados de alta.

El esfuerzo de estos profesionales ha sido físico y mental, dejando profundas secuelas psicológicas que tardarán tiempo en superar, al haber sufrido la frustración de la pérdida de muchos pacientes, a pesar de haber hecho todo lo que estaba en sus manos por evitarla.

Este acto de homenaje ha evidenciado la unión de todos los profesionales sanitarios de Galicia en un objetivo común, que no es otro que el cuidado de la salud, y que tiene que sustanciarse en un incremento de las relaciones entre los diferentes colectivos de profesionales sanitarios, porque es un objetivo que nos une mucho más que lo que nos pueda distanciar. *Eduardo Eiroa es presidente del Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia

Unha das angueiras que vemos necesario sumar neste proceso de atallar o problema, é a defensa do rigor no exercicio da saúde.

Durante o tempo da emerxencia, os protésicos dentais achegamos as nosas capacidades para contribuír solidariamente coa elaboración de dispositivos de protección para residencias e hospitais e, estaremos mellor preparados para facelo se se volve a presentar unha situación crítica.

Polo demais, estamos dispostos a brindar o noso apoio en todas as accións que sexan necesarias para defender a dignidade das profesións sanitarias como alicerces estratéxicos do país. Esta crise non deixou dúbidas. *Avelino Sanmartín é presidente do Colexio Oficial de Protésicos Dentais de Galicia

COVID-19

La terapia ocupacional, una vía al bienestar Por la Junta Directiva del Colegio Oficial de Terapeutas Ocupacionales de Galicia La Federación Mundial de Terapeutas Ocupacionales (WFOT) define la terapia ocupacional como una profesión que se ocupa de la promoción de la salud y el bienestar a través de la ocupación, cuyo principal objetivo es capacitar a las personas para participar en las Actividades de la Vida Diaria (AVD).

Como se refleja en la Guía de Intervención de Terapia Ocupacional en Pacientes con COVID 19, la aparición de la covid-19 ha supuesto una brusca interrupción de las ocupaciones, rutinas y formas de relación interpersonal, poniendo a la sociedad en la necesidad de iniciar un proceso de adaptación y aprendizaje para mini-

mizar el impacto del virus en la salud pública e individual.

Lo extraordinario de la situación actual, radica en la alteración del equilibrio ocupacional de toda la sociedad, sobre todo de las personas afectadas por la enfermedad,

ya que impacta sobre la parte clínica y sobre su vida diaria y autonomía.

Por ello, disciplinas que se centran en la ocupación humana son hoy una parte importante dentro de las intervenciones con las personas con covid-19

Junta Directiva del Colegio Oficial de Terapeutas Ocupacionales de Galicia

David y Goliat Por Manuel Rodríguez Méndez* La situación generada por la covid-19 ha cogido a toda la sociedad mundial con el paso cambiado. Esta sociedad del siglo XXI, que se creía la más avanzada porque era capaz de lanzar naves espaciales más allá del sistema solar, se ha encontrado con la presencia de un ser minúsculo, tan minúsculo que ha sido necesario utilizar un microscopio (aparato ideado en 1590, siglo XVI). ¡Qué decepción!

La covid-19 está agitando nuestro planeta y colocando las cosas en su justo lugar, haciéndonos re-valorar cosas, personas y profesiones que antes no teníamos en consideración: cuántas personas

buscando amigos en redes sociales y hemos descubierto el valor de los que siempre están al lado, de la familia; formas de trabajar diferentes y a hacer reuniones desde tu ordenador; valorar las cosas que tenemos cerca sin necesidad de largos trayectos para disfrutar de las vacaciones. La covid-19 nos ha hecho ver todo lo hermoso que tenemos al alcance de la mano.

Nos hemos creído grandes, pero al igual que David con Goliat, ha venido un ser minúsculo, imperceptible y nos ha puesto en el lugar que nos corresponde. La covid-19 nos ha venido a recordar

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que son las cosas sencillas las que necesitamos y son las que vale la pena conservar y por las que luchar.

La lucha que se está librando contra la covid-19 se resuel-

a saúde de galicia

ofreciendo desde una perspectiva holística, la calidad profesional necesaria dentro de los diferentes escenarios en los que impacta el virus.

UCI: reducir el impacto de una inmovilización prolongada. Hospitalización: intervenir para recuperar su autonomía en las AVD para facilitar su alta hospitalaria. Intervención ambulatoria: vuelta al domicilio, valorar sus nuevas necesidades y guiar la reinserción hacia sus roles. Intervención domiciliaria: garantizar la continuidad de los cuidados y adaptar las recomendaciones socio-sanitarias del momento.

La terapia ocupacional está especializada en la intervención de las ocupaciones de las personas, tan seriamente alteradas desde la explosión de esta pandemia. En cada uno de los recursos anteriores, resulta de gran apoyo y utilidad esta disciplina para la prevención de complicaciones hospitalarias, y la rehabilitación de las funciones alteradas por la enfermedad.

ve con trabajo, no desde una única rama de la ciencia, sino desde todas, trabajando juntas (medicina, química, biología y sus especialidades, etc.) y todos los profesionales juntos, ya que se necesita aunar conocimientos y experiencias.

La esperada vacuna no debe ser propiedad de nadie. Debe serlo de todos y para todos.

Mientras una persona tenga la covid-19, la humanidad seguirá en peligro.

Como decano del Colegio de Químicos de Galicia, me siento muy orgulloso de la labor de los profesionales de la química que trabajan para ayudar a la sociedad contribuyendo a encontrar la vacuna y a erradicar la covid-19. *Manuel Rodríguez Méndez es decano del Colegio de Químicos de Galicia

COVID-19

Biólogos y covid-19

sión y esfuerzo pasado por tejer una infraestructura investigadora que, ahora, nos permitiera competir en la investigación actual. Reconozcámoslo: son nuestros biólogos, cuya formación sufragamos con nuestro dinero, los que ahora investigan para otros. Aunque lo más dramático es que no estamos haciendo nada para cambiarlo en el futuro.

Sin embargo, no se piensa en biólogos cuando de práctica sanitaria se habla, desconocimiento que se extiende a los propios profesionales sanitarios. Ya desde el principio de la pandemia hubo, todavía hay, la necesidad urgente de encontrar parámetros que ayuden a predecir la evolución de un paciente y su idoneidad a una determinada terapia.

En esos duros momentos, desde los laboratorios asistenciales, los analistas clínicos nos afanamos en recabar información para decidir qué

parámetros implementar y hacerlo a la mayor brevedad posible. Fueron momentos convulsos: falta de información y desinformación; pero sabedores de la precaria situación de los pacientes y del estrés de los clínicos, trabajamos con denuedo para ofrecer parámetros que aportaran valor a nuestros informes y ayudaran en la toma de decisiones.

Al final, tras llevar a cabo, en la medida de lo posible, esa implementación, aún preguntaban: “y tú, ¿eres médico?” A lo que yo respondía: “No, soy biólogo”.

Logopedia y covid-19

mediante ejercicios basados en los mecanismos de neuroplasticidad.

Los logopedas participan también en el manejo de otras dificultades, como la decanulación de los pacientes con traqueostomía o los trastornos de voz, muy habituales tras las intubaciones prolongadas.

Todo ello sin olvidar que, tal y como establece la OMS, las alteraciones en el habla también son síntomas propios de la covid-19.

Poner nuestros conocimientos al servicio de la lucha contra la covid-19 y sus secuelas y trabajar en la recuperación funcional de estos pacientes es la labor que estamos llamados a realizar durante esta pandemia.

Por José M. Martínez Yriarte* Cuando me propusieron redactar un escrito sobre la repercusión de la covid-19 en la profesión de biólogo lo primero que acudió a mi pensamiento fue la investigación; no en vano es la actividad en la que el mundo fía sus esperanzas para acabar con el SARSCoV-2: descubrir una vacuna.

Ciertamente, si bien son muchas las profesiones sanitarias con una faceta investigadora, cuando se habla de investigación científica y, por ende, sanitaria, ¿quién no piensa en un biólogo? Son muchos los colegas que siguen investigando con ahínco, derrochando esfuerzos, para alcanzar esa

vacuna y ese tratamiento tan deseados.

En este punto no puedo dejar de lamentar la falta de previ-

José M. Martínez Yriarte

Por Francisco Javier Bueno Herrera* Aunque la logopedia es una profesión sanitaria joven y su presencia es muy desigual en los distintos sistemas sanitarios, las funciones de valoración e intervención de las dificultades del lenguaje, habla, voz, audición y deglución que desarrollamos pueden ser de gran utilidad en el manejo de los pacientes con covid-19.

Uno de los problemas que se presenta con frecuencia en estos enfermos es la disfagia, que puede afectar a más del 50% de los pacientes hospitalizados y está provocada por diversas causas: alteraciones neurológicas, distrés respiratorio, intubaciones prolongadas, pérdida de masa muscular...

La disfagia conlleva una mayor probabilidad de desarrollar neumonías bacterianas y se relaciona con el elevado riesgo nutricional en estos pacientes.

Es por ello que la ESPEN ha resaltado la necesidad de valorar la disfagia orofaríngea en todos los enfermos con covid-19. Los procedimientos de valoración de la deglución, que pueden ser considerados como generadores de aerosoles, deben ser realizados de forma cuidadosamente planificada por profesionales especializados en este ámbito, entre los que se incluyen los logopedas.

Además, la participación de los logopedas permite deter-

minar cuáles son las adaptaciones y apoyos que pueden facilitar el acceso al alimento en los pacientes con covid-19 y ayuda a restablecer los mecanismos deglutorios alterados

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Francisco Javier Bueno Herrera

a saúde de galicia

*El doctor José M. Martínez Yriarte es vocal del Colegio de Biólogos de Galicia, miembro de la Comisión de Sanidad del Consejo General de Colegios Oficiales de Biólogos y facultativo especialista de Área del Laboratorio de Respuesta Hospitalaria del Hospital Álvaro Cunqueriro, Área Sanitaria de Vigo

*Francisco Javier Bueno Herrera es secretario del Colegio Profesional de Logopedas de Galicia y logopeda en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo

COVID-19

La profesión veterinaria en la salud pública Por Francisco Javier Balado Amado* La participación de mascotas, animales de producción y alimentos en la trasmisión del SARS-CoV-2 ha sido un asunto que ha generado muchas consultas, y, como otros muchos aspectos de esta pandemia, todavía está por determinar.

Se sabe que el SARS-CoV-2 es de origen animal, aunque se desconoce qué especies actúan como reservorios. Se ha demostrado capaz de infectar y producir enfermedad a varias especies: perros, gatos y otros felinos, hurones y visones.

Hay muy pocos casos descritos de posible transmisión desde los animales a las personas, por lo que no parece que la

enfermedad en animales tenga una gran contribución en la epidemia.

Francisco Javier Balado Amado

Esta pandemia nos ha hecho reivindicar la función de la profesión veterinaria en la salud pública. Hemos seguido trabajando en su defensa garantizando la trazabilidad de la cadena alimentaria y la sanidad y bienestar animal. El lema de nuestra profesión Higia pecoris salus populi (La higiene de los animales es la salud del pueblo) guía nuestro trabajo diario, y encaja en el enfoque Una sola Salud / One Health de OMS, FAO y OIE. La salud humana y la sanidad animal son interdependientes y están vinculadas a los ecosistemas en los cuales coexisten. Para nosotros no

Agradezamos á covid a revelación da realidade do Sistema de Saúde Por Isidoro Rodríguez Pérez* Por que grazas a el se viron as carencias e as dificultades coas que traballan de cote os sanitarios. No caso da enfermaría moi por baixo dos “ratios” por habitante, mal retribuídos, ou pouco tempo de descanso, esperando e contando os recursos funxibles para que duren ate que chegue o seguinte pedido (recortado).

Durante a pandemia promesas e bos desexos de todos. Pero pasado o día pasou a romaría e volvemos as mesmas escasezas, aos mesmos problemas vellos e mailos novos. “Grazas por estar aí, por atendernos por

coidarnos, por non deixar aos nosos morrer sos”, iso forma parte do pasado ou iso cremos (vai ti ver). Novamente a enfermaría, os sanitarios, volven a estar sos, diante das persoas que necesitan deles, volven facer milagres a costa da súa saúde, da súa familia, dos seus amigos. En definitiva, volven a ser pobres das portas, mendigando unha sanidade publica e universal polo ben da comunidade. Debemos de tomar conciencia por partida tripla: os profesionais, exercendo con profesionalidade, esixencia aos xestores e responsables

políticos; os cidadáns, sendo respectuosos e considerados con quen os coida; os políticos, non facendo unha política

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a saúde de galicia

Isidoro Rodríguez Pérez

hay duda, en todas las zoonosis nuestra participación es imprescindible, o acaso ¿estamos dispuestos a consumir o convivir con animales enfermos de rabia, brucelosis, tuberculosis, encefalopatía espongiforme bovina, virus del Nilo, F.H.Crimea-Congo....o covid-19?

Por ello, también hemos reivindicado la presencia de veterinarios en aquellos foros y equipos multidisciplinares donde puedan aportar su experiencia profesional después de décadas combatiendo a los coronavirus en las diferentes especies animales. En una pandemia como esta, la sociedad debe beneficiarse de los conocimientos y experiencia de los mejores profesionales disponibles sea cual sea su profesión. *Francisco Javier Balado Amado es presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de la Provincia de A Coruña

mercantilista, se non inversora en saúde, por que é unha inversión rendible, defendendo a quen depositou a confianza neles .Trátase de inverter en persoas sas, útiles, produtivas para a comunidade. Agradecemos aplausos, parabéns, recoñecementos, homenaxes.

Queremos traballar sen por en risco as nosas vidas nin as dos nosos; que se atendan as nosas demandas e necesidades profesionais; que se conte con nós no momento de planificar e artellar o traballo en prol da saúde nos distintos eidos.

Queremos sumar todos xuntos con compañeiros doutras disciplinas e profesións, usuarios e políticos. As enfermeiras ofrecemos as nosas mans a aqueles que as precisen. *O doutor Isidoro Rodríguez Pérez é vogal do Colexio de Enfermaría de Lugo e académico de número da Academia de Enfermaría de Galicia

COVID-19

La realidad es que perdimos Adrián Acuña Ferradanes* Recordar los días de confinamiento resulta un ejercicio amargo. Recordamos las ciudades vacías, los comercios cerrados, los parques infantiles precintados…

Durante los meses más duros, los diferentes profesionales sanitarios hemos tratado de contener el miedo, ayudando, cada uno desde su posición, dando información, llamando a la calma y a la responsabilidad, tanto individual como colectiva. Esperábamos que ese largo y agotador partido terminase y pudiésemos decir que habíamos salido victoriosos. Pero no es así. “La

realidad es que perdimos”.

Desde las farmacias hemos visto a mucha gente sufrir de diferentes maneras. Pero, sin duda, la más llamativa fue la soledad. La soledad de personas mayores que no pueden ver a sus hijos y nietos durante semanas; la soledad de hijos que no pueden visitar a sus padres; la soledad de quién se confinó separado de su familia para protegerla; la soledad de quién cayó enfermo y estuvo solo; la soledad de quién vio partir a un ser querido y no pudo despedirse de la forma adecuada.

Como sociedad hemos hecho un esfuerzo difícil de explicar,

Veterinarios y covid Luis Núñez Desiré * Los coronavirus son viejos conocidos en veterinaria: en mamíferos (bovino, porcino y perros) son virus de tipo digestivo (género alfacoronavirus) y en las aves (gammacoronavirus), al igual que el virus covid -19 (betacoronavirus), son de tipo respiratorio, con gran capacidad de propagación y alto riesgo de contagio al conjunto de la población.

Por tanto, la enfermedad debe ser combatida desde una perspectiva epidemiológica, primando la detección precoz, la elaboración de planes de contingencia, actuaciones sanitarias específicas en en-

Luis Núñez Desiré

Adrián Acuña Ferradanes

bir en cualquier texto. Y todo para perder. Porque ganar era imposible.

Y ahora los farmacéuticos seguimos pensando en ayudar a las personas a las que atendemos. Dar información veraz, solucionar sus pequeños problemas del día a día; prestar el oído para darles consejos de salud e indicarles tratamientos para sus dolencias menores; derivar a otros profesionales cuando es necesario; pero sobre todo acompañarles mientras toman su medicación y tratan de cuidarse. Somos el profesional sanitario más cercano al ciudadano, cada día atendemos cientos de miles de peticiones y nuestro compromiso es cada vez mayor, porque sabemos lo importante que es que todo ciudadano tenga un profesional sanitario cerca, dispuesto a ayudarle.

cuyas consecuencias no se pueden medir y que van más allá de lo que se puede escri-

*Adrián Acuña Ferradanes.

Colegios de Farmacéuticos de Galicia

fermos y portadores, pautas generales con la población global y medidas proporcionadas de bioseguridad, según la situación sanitaria de la zona geográfica, teniendo en cuenta el factor económico a corto, medio y largo plazo.

Aspectos todos ellos en los que la profesión veterinaria es un referente por su experiencia en la lucha contra patologías de colectividades. Una experiencia desaprovechada por las autoridades sanitarias.

En la Ley General de Sanidad se establece que la Veterinaria de Salud Pública es una actividad básica del sistema sanitario, correspondiéndole el control de la higiene, la tecnología y la investigación alimentarias y la prevención y lucha contra las zoonosis.

Pero, pese a esas atribuciones, la veterinaria sigue siendo la gran olvidada al ser la única profesión sanitaria que no tiene regulada por la Adminis-

tración una formación especializada a través de la figura del VIR (Veterinario Interno Residente).

Si a todo este le añadimos que el 60 % de las infecciones en humanos y el 75% de las enfermedades emergentes son de origen zoonótico, no podemos llegar a otra conclusión que la covid-19 debería haberse abordado en clave interdisciplinar, con la presencia de la profesión veterinaria. A corto plazo los esfuerzos se volcaron en la medicina asistencial, pero a medio y largo, las vacunas, la formación básica de la población y unas medidas sanitarias equilibradas serán las que permitan una vuelta a la normalidad, debiéndose aprovechar la experiencia y conocimientos de los veterinarios.

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a saúde de galicia

*Luis Núñez Desiré es presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Pontevedra

COVID-19

Una oportunidad para ser mejores Por María Núñez Otero* Y cuando más poderosos nos creíamos, el universo nos pone a prueba. Y nos coloca al borde de un abismo de incertidumbre, de impotencia, nos desborda. Sin precedentes, a nivel mundial, a unos niveles para los que no estábamos preparados. Estamos ante un gran desafío que tiene como principal objetivo salvar vidas.

Y este es el momento, desde la situación de cada uno de nosotros, de aportar solidaridad, unidad y positividad, solo así podremos vencer conjuntamente esta pandemia.

Es el momento de apoyar y estar al lado de todos los que están trabajando directa o indi-

rectamente en esta lucha contra el virus, del Gobierno central y de todas las instituciones públicas y privadas. Principalmente de todo el personal sanitario por la gran labor que están rea-

lizando. Increíble labor la de miles de investigadores que, a contrarreloj, luchan por encontrar una vacuna, tan necesarios ahora y no siempre valorados.

Y es de agradecer igualmente la actitud ejemplar y colaboradora de la mayoría de los ciudadanos que estuvimos confinados en nuestras casas, y que seguimos manteniendo una actitud cívica y responsable ante los rebrotes.

Debemos reflexionar en positivo, de forma constructiva y solidaria. Estar al lado de nuestras familias y vecinos, apoyándonos. Esta es la mejor contribución que debemos aportar para el beneficio de to-

María Núñez Otero

Por la enfermera escolar Por Carlos Fernández Gómez* El inminente regreso a las aulas podría suponer el mejor de los caldos de cultivo para nuevos rebrotes. Desde hace años, los colegios de Enfermería reclamamos el reconocimiento de la enfermera escolar, cuyas tareas de prevención y cuidados vendrían a cubrir cuatro importantes funciones: asistencial, docente, investigadora y gestora.

En el marco de la actual situación desatada por covid-19, la función de la enfermera escolar podría marcar la diferencia.

El pasado 20 de agosto, los Colegios de Enfermería de Galicia, junto a las asociaciones nacionales AMECE y ACEESE de enfermería escolar, solicitamos a las consellerías de Sanidade y Educación, la coo-

Carlos Fernández

peración para la implantación de esta figura en los centros educativos de Galicia.

El inicio del curso en la actual situación obliga a garantizar un entorno escolar saludable y seguro, que disponga de medidas de especial protección, exigiendo una planificación profunda y rigurosa del mismo en la que prevalezca la prevención y control de los posibles brotes.

El protocolo estipulado por la Xunta responsabiliza a directores y docentes de las escuelas en la función coordinadora de covid mediante un Plan de adaptación individualizado para cada centro. Es poco acertado que estas tareas recaigan en el profesorado, carecen de

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a saúde de galicia

dos para vencer esta epidemia.

Este virus nos iguala, no hay razas ni fronteras, es voraz y destructor, ataca a enfermos y mayores de una forma demoledora. Somos una sociedad vulnerable, no lo olvidemos.

Nos ha demostrado lo peor y lo mejor del ser humano. Ha llenado balcones de aplausos, de música, ha despertado el ingenio y nos ha hecho reinventarnos. Pero hemos echado de menos a nuestros amigos, rutinas, las pequeñas cosas de la vida, en definitiva, las más grandes. ¿Somos mejores? ¿A qué coste?

Quizá este virus nos esté contando muchas cosas de la humanidad que hemos creado y nos esté dando una oportunidad. Una oportunidad para hacerlo mejor. * María Núñez Otero es presidenta del Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Lugo

los conocimientos necesarios sin dudar de su gran profesionalidad. El plan de formación al profesorado que se está ofertando no suple la necesidad de la presencia de una enfermera profesional en el centro. Además, declina en los docentes toda la responsabilidad de las tareas de prevención.

La presencia de enfermeras en los centros educativos de Galicia es hoy ínfima, limitándose a unos pocos centros privados, concertados y de educación especial. Inexistente en los centros públicos.

Es necesario aunar esfuerzos y recursos para que los niños vuelvan al colegio de forma segura, que los profesores dispongan de los recursos necesarios para desempeñar su labor docente. Es necesaria la enfermera escolar. *Carlos Fernández Gómez es presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Pontevedra

COVID-19

Atención social para los más vulnerables En A Coruña se crearon albergues para personas sin hogar, ayudas para adquirir alimentos y protocolos para víctimas de violencia de género Por Daniel Viña Desde el Ayuntamiento de A Coruña, a lo largo de los últimos meses, se han puesto en marcha múltiples iniciativas para ayudar a los más vulnerables a afrontar los efectos socioeconómicos de la pandemia. Yoya Neira, concejala de Igualdad, Bienestar Social y Participación del consistorio, asegura que su departamento “se puso a trabajar en varios escenarios desde comienzos del mes de marzo para estudiar las acciones a llevar a cabo en caso de que se decretara el confinamiento”.

Una de las primeras decisiones tras la declaración del estado de alarma consistió en “poner en marcha un programa de voluntariado para ayudar a personas mayores y a familias en cuarentena -que se ha vuel-

Yoya Neira

to a activar a finales de agosto- para evitar que tuvieran que salir a la calle para hacer la compra o acudir a la farmacia”. Los voluntarios también se encargaron, por ejemplo, “de recoger los menús de las becas comedor -con 700 niños dados de alta- o de los comedo-

“El programa de voluntariado ayudó a evitar que personas mayores y familias en cuarentena tuvieran que salir a la calle a hacer la compra o acudir a la farmacia”

res sociales”. La convocatoria se cerró en menos de 24 horas, “después de que se inscribieran más de 530 voluntarios, lo que demuestra el carácter solidario de nuestra ciudad”.

El Ayuntamiento coruñés también diseñó “un dispositivo de emergencia para personas sin hogar” con un albergue en el pabellón de deportes y en las pistas polideportivas de Riazor. Una iniciativa que, asegura la concejala, “resultó un éxito gracias al esfuerzo de las trabajadoras sociales”. En este apartado “también contamos con la colaboración del Sergas para realizar triajes y aislar a las personas con síntomas”. En total, se beneficiaron del dispositivo “120 usuarios, y con todos ellos hemos realizado un trabajo de intervención social muy importante. Algunos incluso han conseguido trabajo”.

Por otra parte, los equipos de atención social de los centros cívicos gestionaron “casi 13.000 peticiones de emergencia durante el estado de alarma, una labor que debemos agradecer”. Se trataba, sobre todo, “de ayudas para conseguir alimentos de primera necesidad, en las que, además del Ayuntamiento, colaboraron la Fundación Emalcsa, Cáritas, Cruz Roja y Vegalsa”. Los equipos municipales también acudieron “a los asentamientos chabolistas para facilitar alimentos y productos de higiene y hacer un control del seguimiento escolar de los niños y niñas”.

En materia de igualdad, “se desarrolló un protocolo de

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atención para violencia de género con pautas para que las mujeres pudieran identificar conductas que deben ser atajadas y se estableció una residencia alternativa para las víctimas y alojamientos para hombres con órdenes de alejamiento que no tuvieran la posibilidad de afrontar un alquiler”.

El departamento que dirige Yoya Neira, además, estableció “la línea Acompáñote de atención telefónica contra la soledad, para que las personas que lo necesitaran, sobre todo las mayores, tuvieran a alguien con quien hablar y sentirse acompañadas durante el confinamiento”. Otro de los servicios que se puso en marcha “fue el de mediación de conflictos, en el que 20 profesionales voluntarios del Círculo de Mediación de Galicia atendieron 98 solicitudes en cuestiones vecinales y familiares”.

El programa Ninguén atrás, por su parte, se encargó de atender las necesidades de

“Ciento veinte usuarios se beneficiaron del dispositivo para personas sin hogar, y con todos ellos hemos realizado trabajos de intervención social” YOYA NEIRA

“alumnos de primaria y, sobre todo, de ESO y bachillerato, relacionadas con el acceso a internet en sus casas. La pandemia ha puesto de manifiesto una cuestión muy importante en la que las administraciones públicas tal vez no hemos estado demasiado pendientes: la brecha digital, que normalmente se suplía con las clases presenciales o el acceso a las bibliotecas para hacer los deberes”.

COVID-19

La pandemia por covid-19, una ventana de oportunidad

Comparecencia de Enrique Castellón, vicepresidente tercero de nuestro Colegio, en el Congreso de los Diputados ante la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica Por Enrique Castellón Leal Esta intervención consta de un conjunto de consideraciones y unas cuantas propuestas.

Obviamente he partido de una circunstancia muy concreta, que es la pandemia covid-19.

Pero no me he detenido en ella.

Más bien la he considerado como una ventana de oportunidad para revisar el funcionamiento del SNS. Y ello porque esta crisis sanitaria ha impactado con fuerza en una sanidad que arrastra deficiencias desde hace años. No se puede aceptar la idea de que la situación ha sido tan excepcional que habría desbordado cualquier dique sanitario. No es así, y esa forma de pensamiento “mágico”, en el que las aguas vuelven naturalmente a su cauce, sólo sirve para mantener intocables unas estructuras que hace tiempo que muestran grietas.

La pandemia no era impensable. Era previsible y, de hecho, muchos expertos venían tiempo alertando. Impresiona ver declaraciones realizadas en los últimos años que parece que estuvieran describiendo la situación actual en tiempo real. ¿Cómo es esto posible? La explicación más verosímil es el exceso de confianza, derivada de un sesgo cognitivo que se produce cuando un problema serio desaparece. Una vez superados anteriores brotes epidémicos, vino la relajación.

Un virólogo norteamericano, Dennis Carroll, lo ha definido muy expresivamente como un “déficit de atención a escala global”. De cara al futuro inmediato puede suceder lo mismo,

cuando es bien sabido que esta pandemia no ha desparecido y que otras vendrán con toda seguridad. Esto es importante reconocerlo porque si se acepta que la amenaza es permanente, también se aceptará la necesidad de permanencia del sistema -y su financiación regular y no esporádica- para prevenirla. Lo que significa que hay que blindar una serie de medidas contra el olvido. Ya señalaba Camus en La Peste que la gente siempre olvidaba y luego se sorprendía.

La pandemia ha evidenciado las debilidades del sistema sanitario. Como si algunos de sus principios inspiradores (universalidad y acceso en condiciones de igualdad efectiva) hiciesen ociosos otros, como la priorización de la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad, o la referencia a que su organización y funcionamiento se atuvieran a los principios de eficacia y flexibilidad. Nuestro sistema sanitario se ha sostenido en la autocomplacencia. Y así, como suele suceder cuando resulta cómodo estar convencido de que todo está bien, no se hace nada.

La realidad es que la sanidad española se ha ido poco a poco desajustando de la propia evolución de la medicina y de los cambios en la sociedad. La medicina está prestando más atención al componente comunitario, pero, al tiempo, ha devenido, gracias a la tecnología, más personalizada como explicaré más adelante. Más comunitaria en la medida en que se interesa por el entorno

Enrique Castellón

Nuestro sistema sanitario se ha sostenido en la autocomplacencia.

Y así, como resulta cómodo estar convencido de que todo está bien, no se hace nada Existe un desajuste entre las necesidades reales de las personas y los recursos disponibles del Sistema social de los pacientes, en particular del de los colectivos más desprotegidos y vulnerables, y por los determinantes de la salud. Al mismo tiempo, hay una orientación a la preservación de la salud en vez de poner todo el foco en tratar la enfermedad. Existe, por otra parte, un desajuste entre las necesidades reales de las personas (en parte por el envejecimiento, pero

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no sólo) y la estructura y los recursos disponibles del Sistema. Por ejemplo, pacientes ancianos y frágiles, que deberían ser tratados en su entorno en la medida de lo posible, acaban con frecuencia hospitalizados y sometidos a riesgos innecesarios. Hay enormes territorios asistenciales a los que se dedica escasa atención. Entre ellos, la depresión, muchas veces asociada a la soledad, un problema de nuestro tiempo. O la demencia, una auténtica pandemia que no para de crecer según envejece la población.

Apenas hay continuidad asistencial: la atención primaria, los hospitales y todo el ecosistema sociosanitario son mundos aparte. La atención primaria, en particular, carece de las capacidades para afrontar la importante misión que se supone tiene asignada. Los servicios hospitalarios, salvo excepciones, no ofrecen la permeabilidad entre especialidades que requeriría una atención centrada en el paciente. La organización, por otra parte, está diseñada para casos agudos cuando el mayor problema lo generan los pacientes crónicos con múltiples enfermedades, que sufren una atención fragmentada y por tanto poco efectiva.

Los datos indican, además, una elevada variación de la práctica clínica. Junto al uso excesivo de algunos recursos, los servicios de urgencia atienden casos de muy baja complejidad y con demasiada frecuencia se abusa de la tecnología en el final de la vida. Muchas hospitalizaciones son perfectamente evitables, y podrían de hecho evitarse si no fuera por la escasez de servicios comunitarios para la fragilidad y la cronicidad compleja.

Todos estos problemas se han magnificado con la pandemia.

Habría hecho falta, desde el principio, una flexibilidad de la que la organización sanitaria no disponía. Y la situación aún se puede deteriorar porque ahora se empezarán a sufrir sus con-

COVID-19 secuencias: las propias secuelas de la enfermedad, los pacientes en espera que no han sido atendidos por la concentración de la atención en la covid-19, los pacientes crónicos que previsiblemente habrán empeorado y el impacto cierto sobre la salud de la crisis económica.

La situación excepcionalmente dura que hemos vivido habría exigido aprovechar todo el potencial del país, de sus ciudadanos, de sus organizaciones e instituciones, públicas y privadas. No ha sido así. Se ha dado la circunstancia de personas e instituciones que han querido aportar en la medida de sus posibilidades sólo para ver sus intentos frustrados por la burocracia. Refiriéndose a servidores públicos inicialmente motivados (pero aplicable también a quienes desde fuera de las administraciones se preocupan por el bien común) un reciente artículo de opinión señalaba que estos quedaban “anestesiados por una deficiente cultura política excesivamente intrusiva y por unas lógicas administrativas caóticas y caducas que adormecen al más entusiasta”. Es una sensación que hemos sentido muchos que lo hemos intentado por distintas vías. Una buena coordinación y, sobre todo, la comprensión del hecho de que el interés general no sólo reside en la administración pública, habría permitido sacar partido mucho más rápidamente a la gran reserva de conocimiento y capacidades tecnológicas y de producción de

que disponemos. Sucede, como decía más arriba, que, si esta imprescindible cooperación entre sociedad civil y administraciones públicas no funciona en condiciones normales, o la relación está presidida por la desconfianza, es difícil que se ponga en marcha con rapidez en situaciones excepcionales.

La I+D española está abandonada (tanto por los gobiernos como por la sociedad) y, sin embargo, tiene un potencial muy útil para la reconstrucción. Y para defendernos de futuras amenazas. La pandemia también puede causar estragos en países con una sólida estructura científica y tecnológica. Es evidente y hemos sido testigos de ello. Pero la vulnerabilidad de esos países es menor, y su recuperación será probablemente más rápida. No hay respuesta fácil a la pregunta de por qué se ha abandonado la ciencia, porque, paradójicamente, no es ese el tenor de los discursos oficiales, que resaltan su importancia. Lo que, por otro lado, es una obviedad: todo el mundo sabe que la I+D crea riqueza y hace competitivo a un país. Pero una cosa es proponerse teóricamente algo y otra distinta hacer que suceda. Las razones por las que las intenciones no se han traducido en acciones concretas, y mucho menos en resultados, tienen que ver con la ausencia de directrices claras, de cooperación intra e inter- administraciones, de incentivos adecuados y de una colaboración públicoprivada eficaz.

Apenas hay continuidad asistencial: la atención primaria, los hospitales y todo el ecosistema sociosanitario son mundos aparte La I+D española está abandonada y, sin embargo, tiene un potencial muy útil para la reconstrucción Apenas hay evaluación de los resultados que se obtienen y la rendición de cuentas es inexistente Resulta obvio que la política de I+D ha de ser transversal y esto se compadece mal con el hecho de que cada departamento de la Administración tiene su propia agenda y su cuenta de resultados particular. Así, lo que para unos es importante, para otros resulta intrascendente. Quedan muchos problemas por resolver relacionados con la falta de colaboración en las administraciones. El sistema sanitario, por ejemplo, puede hacer mucho por generar innovación y nuevo conocimiento asociándose sistema de ciencia y tecnología. Y también puede

utilizar esas nuevas tecnologías en la práctica médica, revirtiendo recursos para financiar más investigación y desarrollo.

La sanidad está excesivamente burocratizada, inserta en una jerarquía político-administrativa que la aleja de la sociedad.

Todas las instituciones asistenciales deberían funcionar con autonomía, lo que les conferiría capacidad de innovación y mayor flexibilidad para adaptarse a situaciones rápidamente cambiantes. Su gestión debe ser transparente, profesional y responsable ante órganos colegiados que representen efectivamente a la ciudadanía. El liderazgo de una organización, especialmente una basada en el conocimiento, no tendría que residir solo en su cúspide, y a nuestro sistema le falta liderazgo en los niveles clínico y de gestión. Cuando se ha ejercido por necesidad, como en la situación que estamos viviendo, se ha comprobado su verdadera importancia.

La prevención tiene, por desgracia, muy poco predicamento.

Ello se debe a su escasa y tardía visibilidad, inversamente proporcional a su bajo coste y alta efectividad. Por esa razón fiamos, prácticamente en exclusiva, la sostenibilidad del sistema sanitario a la obtención de más recursos con los que tratar enfermedades y apenas a su prevención. El gasto en salud pública -incluyendo compra de vacunas- es el 1% del gasto sanitario. La debilidad de las funciones de salud pública está en

COVID-19 la base de muchos problemas.

Quizá se considera que, como en muchos casos se trata de problemas de salud global, siempre habrá otros que vengan a resolverlos. Sin embargo, invertir en infraestructura básica de salud pública siempre es más barato que atender una emergencia de salud pública.

La medicina se está haciendo personal. Ya Marañón decía que no hay enfermedades sino enfermos (se refería fundamentalmente a sus particulares circunstancias, a la vivencia personal de estar enfermo). Se ha dado un paso más, la espectacular reducción de costes de la secuenciación nos ha llevado a un nuevo nivel de individualidad. Ahora ya no hay enfermos, sino una persona enferma: un individuo con su secuencia genética y sus mutaciones (lo que no implica soslayar sus valores y las preferencias). Con estos datos, los médicos pueden personalizar su intervención. Pero no sólo. También cuentan con información molecular cada vez más precisa, historias médicas electrónicas, datos digitales procedentes de sensores e inteligencia artificial.

La investigación, sin embargo, se ha encarecido al tiempo que los pacientes se han individualizado. El sistema tiene que incorporar las nuevas tecnologías personalizadas, de lo contrario no respondería a su razón de ser. Sólo lo puede hacer de dos maneras: retribuyendo las nuevas tecnologías por el valor que crean y revisando lo que ofrece en estos momentos y que no crea valor.

También la atención sociosanitaria, que por su naturaleza es multidisciplinar, se individualiza. Aquí de nuevo hemos de corregir la fragmentación en beneficio de la continuidad.

La relación con los hospitales exige acuerdos para gestionar trayectorias sin perder la continuidad asistencial. Es el caso del ictus o la rehabilitación post-quirúrgica, por poner dos ejemplos concretos. Y lo mismo

Los servicios sociosanitarios han de estar incorporados en la cadena de continuidad asistencial Una Agencia Nacional de Evaluación es indispensable sucede con atención primaria para cuidados paliativos domiciliarios. Cada caso hay que evaluarlo integral e individualmente para ajustar el tratamiento a la necesidad, primando que el paciente siga viviendo en su casa. La institucionalización de un paciente frágil debe ser un recurso excepcional, no el fracaso de un modelo asistencial mal planteado.

Apenas hay evaluación de los resultados que se obtienen y la rendición de cuentas es inexistente. Y esto no es posible si no se produce otro tipo de información y se hace pública con transparencia. Lo que hay que medir es el valor que se crea.

Ahora, simplemente, se describe y mide la cantidad de actividad asistencial. La medición del valor debe dirigirse a comparar lo que se consigue en relación con lo que se necesita, un dato que debe incluir las preferencias de los pacientes. El sistema sanitario tiene que cambiar definitivamente su foco: llevarlo del mero recuento de la actividad al valor creado.

Con frecuencia el acto médico se devalúa por las condiciones en las que se produce. Médicos sin tiempo y que atienden un volumen excesivo de consultas, muchas de ellas inapropiadas o innecesarias. Esta situación es más evidente en atención primaria, donde muchos profesionales viven al límite del colapso, si es que no lo han traspasado.

La pandemia ha exacerbado, si cabe, esta situación. La experiencia actual de muchos mé-

dicos se define por la falta de tiempo y la presión asistencial.

A pesar de todo, mantienen su capacidad resolutiva pero su frustración por no hacer su trabajo como desearían es enorme.

Una derivada de esta medicina que tiende a deshumanizarse es la falta de sintonía con los pacientes, lo que tiene implicaciones prácticas concretas, como la falta de adherencia a los tratamientos. Los médicos deben disponer del tiempo y los medios con que responder a las necesidades reales de sus pacientes con la mejor evidencia posible, teniendo en cuenta sus circunstancias individuales y sus valores. Garantizar la calidad del acto médico es garantizar la calidad de la atención sanitaria.

Ninguna de estas consideraciones es nueva. Tampoco son recientes. Han estado circulando durante muchos años, y, si no se hace nada, seguirán dando vueltas. Sufriremos otras pandemias sólo para confirmar que los problemas siguen ahí.

Lo que fallan no son las ideas, sino la manera de traducirlas en realidades. En definitiva, se trata de hacer que las cosas sucedan. Es cuestión de conocimiento, voluntad y, por supuesto, espíritu innovador. La dramática experiencia que se está viviendo puede y debe contribuir a activar estas palancas.

Formulo a continuación unas propuestas con esa intención.

1. El actual Centro de Alertas no puede ser un simple nodo que recoge información con escasos medios y sin capacidad operativa. Para gestionar un sistema de información sólido y robusto, debería formar parte de una estructura independiente y muy potente -Agencia Nacional de Salud Pública- encargada no solo de la vigilancia epidemiológica sino también de la prevención. Su función fundamental sería evaluar cualquier riesgo para la salud pública y diseñar planes de preparación y respuesta. Para ello ha de contar con el personal y los recursos

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materiales adecuados, así como los sistemas más avanzados de información. Lógicamente, esta sería la institución que se coordinaría con sus equivalentes a nivel global. Por otro lado, tan importante como su creación e independencia, es la garantía legal de respetar de manera permanente su financiación y estructura. Un reto a tener en cuenta en nuestro país es conjugar la necesidad de esta estructura con el reparto competencial. Un diseño en red podría contribuir a superar esta dificultad. Hay en el mundo un buen ejemplo donde inspirarse: el CDC norteamericano.

2. Hay equilibrios rotos y otros que nunca se han alcanzado. Puesto que las circunstancias han cambiado, el sistema sanitario debe lograr un mejor ajuste con las necesidades reales. Faltan, por ejemplo, servicios comunitarios imprescindibles para la atención a la cronicidad compleja y la fragilidad, al tiempo que hay una utilización excesiva e inapropiada de otros recursos. Nunca se ha alcanzado, por otra parte, el necesario equilibrio entre accesibilidad (entendida como proximidad) y calidad. Esta es una ecuación que hay que resolver evitando las interferencias políticas.

El sistema tiene que reconstruirse y reformarse al tiempo que debe seguir haciendo frente a la covid-19, sus secuelas y a toda la actividad que ha sido diferida como consecuencia de la pandemia. Esta es una tarea muy compleja que sin duda va a requerir una mayor financiación. Pero si no se acompaña de los cambios necesarios en la propia concepción del sistema, así como en su estructura, organización y procesos, el valor de esos recursos extraordinarios será muy limitado. Debe establecerse una hoja de ruta (quizá en formato de Libro Blanco) que establezca hitos y procedimientos de manera precisa y coherente con los objetivos que se persiguen. Obviamente no se

COVID-19 trata de crear nuevas normas y añadir burocracia, sino de liberar las capacidades del sistema, fijar los objetivos y medir, pensando en crear valor, de otra manera.

3. Es indispensable sumar.

La sociedad española tiene un potencial que, en condiciones normales, apenas se utiliza para el interés general. Lógicamente, los posibles canales de colaboración no están preparados cuando se dan circunstancias excepcionales. Y, sin embargo, ello permitiría multiplicar el impacto de las actuaciones del sector público. Se debería disponer -y actualizar periódicamente- de una red de instituciones y organizaciones privadas en condiciones de apoyar a las administraciones, y hacerlo con rapidez, en situaciones como las que estamos viviendo. El país desplegaría todo su potencial si la Administración se abriese a coproducir servicios con los ciudadanos.

4. El impulso público a la I+D pierde fundamentalmente toda su eficacia (aparte, por supuesto, del bajo nivel de gasto) por dos razones. La primera es la falta de transversalidad, que impide el alineamiento de los diferentes departamentos implicados, al punto de neutralizarse unos a otros. La segunda es la falta de estímulos a la participación y a la inversión privada. Como otros países han resuelto hace tiempo estas disfunciones, revisar sus estrategias sería un buen punto de partida. En cualquier caso, es fundamental asignar en algún

nivel (alto) de la estructura de gobierno la responsabilidad de garantizar la coherencia de las políticas de I+D. 5. Sobre gobernanza y liderazgo profesional. Los servicios de salud deberían seriamente considerar la posibilidad de permitir una verdadera autonomía de gestión a sus instituciones asistenciales. De esta manera pueden establecerse en cada una de ellas, y en las relaciones entre distintos niveles, los acuerdos necesarios que garanticen la centralidad del paciente y una continuidad eficaz de la asistencia. Dado el desequilibrio actual, condición de partida necesaria es el incremento de la capacidad resolutiva y la financiación de la atención primaria, así como la ampliación de los servicios comunitarios.

6. La transformación de un sistema de enfermedad en un sistema de salud exige ampliar el perímetro tradicional de la asistencia sanitaria, incluso el de la salud pública. Es necesario dar estructura orgánica a una nueva transversalidad que garantice la protección y promoción de la salud en cualquier política que pueda impactar sobre los determinantes – de cualquier nivel- de la salud.

7. El cambio tecnológico que permite aplicar una medicina personalizada obliga a un nuevo tipo de formación médica, que los servicios de salud -que integran asistencia, formación e investigación- deben contribuir a ofrecer. Una medicina personalizada puede, no obstante, ser

El Centro de Alertas no puede ser un simple nodo que recoge información.

Debería formar parte de una estructura independiente y potente: una Agencia Nacional de Salud Pública lesiva para el paciente. Ha de sujetarse, como toda la praxis médica, al principio básico de “primero, no causar daño”. En este caso el daño tiene que ver fundamentalmente con la privacidad, por lo que es importante desarrollar en el plazo más breve posible los instrumentos legales que faciliten la nueva práctica y protejan a médicos y pacientes.

8. Los servicios sociosanitarios han de estar plenamente incorporados en la cadena de continuidad asistencial y esta debería ser una tarea prioritaria para los servicios de salud. Por otra parte, la dramática situación vivida en las residencias de mayores obliga a encontrar una solución inmediata a su vulnerabilidad. No se pueden convertir en pequeños hospitales, pero si establecer unos criterios de seguridad y calidad asistencial muy elevados (que no pueden quedar infrafinanciados). El problema, como casi siempre, es la falta de control periódico sobre el cumplimiento de esos criterios por falta de medios. No se

puede esperar a que se produzcan situaciones irreversibles. La solución es obvia: establecer por parte de los servicios de salud un dispositivo de supervisión suficientemente dotado y garantizar su permanencia.

9. No es solo que haya que evaluar todo lo evaluable, es que todo debería ser evaluable.

Una Agencia Nacional de Evaluación es indispensable. Hay buenos ejemplos en el mundo que pueden servir como referencia. Contribuiría a establecer nuevas métricas relacionadas con lo que verdaderamente importa y crea valor en el mantenimiento de la salud, en la calidad de los procesos y en los resultados de la asistencia médica. Identificaría lo innecesario o inadecuado. También señalaría necesidades y áreas de interés para la investigación clínica.

10. No hay una receta única para facilitar la calidad del acto médico. Pero sí cambios concretos que los servicios de salud deben tomar en consideración.

Como permitir la máxima autonomía de los profesionales en la organización de su propio trabajo. Como liberar a los médicos de tareas administrativas que distraen y restan tiempo al paciente. Como acabar con la precariedad y dar una estabilidad en el puesto que garantice la continuidad de la atención.

O como impulsar una formación en nuevas tecnologías de manejo de datos que al tiempo que mejore la práctica no la deshumanice.

COVID-19

Inmunología ante el SARS-CoV-2 La profesora África González habló sobre el funcionamiento del sistema inmune y los posibles tratamientos para el coronavirus durante un webinar Por Víctor Porto El ciclo de videoconferencias Enfermedad por nuevo coronavirus del Colegio se retomó el pasado 16 de junio de la mano de África González, catedrática de Inmunología de la Universidad de Vigo. Durante la ponencia, titulada Es la hora de la inmunología, la doctora repasó el funcionamiento del sistema inmune y analizó los efectos que el SARS-CoV-2 produce en él.

Comenzó afirmando que el nervioso y el inmunitario “son los dos sistemas más complejos que existen, con miles de genes, y también los únicos que poseen memoria”. Al principio, “se creía que la inmunidad se generaba frente a patógenos”, pero la investigadora Polly Matzinger “identificó que, en realidad, el sistema se pone en marcha con una combinación de patógenos y señales de peligro”. Hay que pensar que también “se tienen que eliminar de forma diaria células muertas, dañadas o envejecidas, que no deben inducir una respuesta inmunitaria”.

El sistema “puede estar sometido al ataque de distintos patógenos. En este sentido, una cuestión muy importante es que debe desarrollar una respuesta adecuada” a cada uno.

De lo contrario, “ante bacterias intracelulares podrían desarrollarse muchos anticuerpos que no van a resultar efectivos, por ejemplo”.

Desde el punto de vista académico, “la inmunidad se divide en dos tipos: la innata y la específica”. En la primera de ellas “hay muchos componen-

tes, como fagocitos, anticuerpos naturales, complemento y células dendríticas y NK”.

Numerosos patógenos, aseguró, “poseen mecanismos de resistencia” a este tipo de inmunidad. La específica, propia de los animales vertebrados, “tiene una respuesta más tardía que se desarrolla durante días o semanas, y en la que se produce una expansión clonal con proliferación de células”.

De esta forma, “a partir de linfocitos B y T, se obtienen un conjunto de células capaces de reconocer elementos” a través de “anticuerpos o células efectoras”. La ventaja de esta respuesta “es que resulta mucho más potente y, además, puede generar memoria”.

A continuación, se refirió al inicio de la reacción innata frente a un virus, que tiene varios componentes. Por una parte, “las células infectadas envían señales a las vecinas a través de factores llamados interferones de tipo I”. Estos últimos “inhiben la síntesis proteica y, como el virus requiere del metabolismo celular, la replicación vírica se frena”.

También existen “otros conjuntos de células, los fagocitos -entre los que se encuentran los polimorfonucleares, los

“Es muy importante que el sistema inmune desarrolle una respuesta adecuada a cada tipo de patógeno”

macrófagos o las células dendríticas-, que tienen la función de destruir el virus”. En cuanto a los linfocitos NK, son los encargados de “matar células infectadas o tumorales”.

Según explicó, “la respuesta del interferón tipo I debe ser muy temprana. Esto hace que la replicación del virus disminuya mucho”, al igual que “la carga viral, porque el número de células potencialmente infectables es menor”. Por lo tanto, de esta forma “se producirá una inflamación regulada y una enfermedad leve”. En el caso de que la reacción sea “más tardía, puede producirse una respuesta desregulada y patología pulmonar como consecuencia de la inflamación”.

Los macrófagos, por su parte, “son células capaces de adaptarse a distintos estímulos. Ante el lipopolisacárido o determinadas citoquinas, por ejemplo, pueden diferenciarse en macrófagos proinflamatorios”. Sin embargo, en los procesos de “reparación o antiinflamación se desarrollan otros diferentes”. África González se centró en el primer tipo, porque “están implicados en uno de los mecanismos que aparecen en los pacientes moderados y graves” de covid-19, que presentan “niveles incrementados, sobre todo, de interleuquina-6”. En los casos severos “llega a ser tan elevado que se conoce como tormenta de citoquinas”. Ante este problema se ha planteado la posibilidad de emplear “inmunoterapia con anticuerpos monoclonales que puedan bloquear el receptor

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a saúde de galicia

de interleuquina-6, la propia citoquina o, incluso, la interleuquina-1”. Este tratamiento “está dando buenos resultados, y muchas personas han salido de la tormenta de citoquinas gracias a él”.

Con respecto a los linfocitos NK, “su función en las respuestas antivirales se conoce porque, cuando una célula está sana, manda señales para que la NK no la mate”. Esta última “necesita un receptor activador, pero también hay otro, de carácter inhibidor”, que evita que se ponga en marcha. “Si la célula diana está infectada por un virus, a veces se altera la expresión de las moléculas de histocompatibilidad, lo que hace que la célula NK mande sus gránulos líticos”.

En los pacientes graves con covid-19 “se ha observado un menor número de linfocitos CD8 y de células T y NK” y,

“La inmunidad específica produce una respuesta mucho más potente que la innata y, además, puede generar memoria” además, las que hay “están exhaustas”. Esto se sabe porque “tienen menor capacidad para producir citoquinas, interferón, interleuquina-2 y granzimas”.

La ponente también habló sobre “un concepto muy reciente: la inmunidad entrenada, que se ha descrito tanto para los linfocitos NK como para los macrófagos, aunque con un mecanismo distinto” en cada uno. Básicamente consiste en que, “si después de una primera infección con una respuesta inicial baja”, el paciente sufre un segundo contagio “en un tiempo relativamente corto, la respuesta obtenida es mayor. Esto es algo diferente a la memoria clásica”. En las células NK, “la inmunidad entrenada se debe a una expansión

COVID-19 de células que reconocen a un virus determinado”, mientras que, en el caso de los macrófagos, “está asociado a cambios epigenéticos”.

En la respuesta inmune específica, “contamos con linfocitos CD4, CD8 y B. Los dos primeros requieren que se les presente el antígeno para poder activarse, porque no pueden hacerlo directamente”. Ante la entrada de un virus -por vía mucosa o rompiendo la piel, por ejemplo-, “las células dendríticas inmaduras, tras internalizar los patógenos, adquieren una morfología muy parecida a las dendritas de las neuronas y capacidad migratoria”. Es entonces cuando se desplazan a “los ganglios linfáticos cercanos, donde presentan el péptido a las células T helper, que se activan y producen citoquinas”.

Tras convertirse “en citotóxicas, son capaces de migrar al tejido para matar a las células infectadas”, pero solo lo harán con aquellas “que presenten péptidos víricos”. Además, “hay cooperación entre las células B y T”, lo que da como resultado la producción de “anticuerpos solubles y circulantes para neutralizar el virus”. La respuesta específica, por lo tanto, “suele ser compleja, con la participación de muchos tipos celulares y una estrecha interacción entre células dendríticas y linfocitos”. África González también analizó cómo se desarrolla la memoria inmunológica. “Por una parte, podríamos dejar pasar la infección y, por otra, si contamos con una vacuna, intentar engañar al sistema inmunitario empleando un patógeno muerto o atenuado, subunidades, toxinas, ADN, ARN o péptidos. La idea es que el sistema inmunitario produzca una respuesta lo más parecida posible” a la que se generaría frente a la enfermedad. Además, “sabemos que las células T y B de memoria normalmente alcanzan su máximo en un mes, y que pueden mantener-

“Ha habido muchos resultados contradictorios en los estudios sobre SARS-CoV-2 debido a la gran variedad de test y a la reacción cruzada con otros coronavirus” se durante largos períodos de tiempo”.

Los anticuerpos solubles, “si son neutralizantes, tienen la capacidad de impedir la entrada del virus en el interior de las células, y también pueden formar inmunocomplejos, que favorecen la fagocitosis”. Por su parte, las inmunoglobulinas G y M “activan complemento, que es uno de los mecanismos más importantes para la eliminación de bacterias extracelulares”, y las células NK poseen un sistema de muerte “llamado citotoxicidad dependiente de anticuerpo, con el que este último indica a dónde se deben dirigir los gránulos líticos”.

No obstante, los anticuerpos “también pueden generar problemas”. Uno de ellos es que “el receptor para Fc, al unir anticuerpos que están reconociendo el virus, puede dar lugar a un incremento de la infección y la carga viral”.

Además, “cuando tenemos an-

África González

ticuerpos circulantes que reconocen al antígeno, se envían señales inhibidoras al interior de la célula B virgen para que no se active, por lo que queda inhibida”.

En el caso del SARS-CoV-2, a través de un estudio con 338 personas publicado en mayo, se observa “que todos los pacientes con enfermedad moderada, severa o crítica producen anticuerpos, sobre todo inmunoglobulinas G y, en menor medida, M”. Los resultados de otro análisis sobre 160 miembros de personal hospitalario mostraron que “el 98% desarrollaron anticuerpos neutralizantes entre 28 y 41 días después de comenzar los síntomas”. Sin embargo, en el caso de un estudio realizado en 149 pacientes convalecientes tras 39 días, “los datos son muy distintos”. Se descubrió que “no había anticuerpos en el 33% de los casos, y que solo el 1% de ellos presentaba títulos altos”.

“Necesitaríamos que entre el 60 y el 70% de la población estuviera protegida con una vacuna para poder controlar la pandemia” En su opinión, “ha habido muchos resultados contradictorios” en este sentido, debido a “la gran variedad de test -y a la baja sensibilidad de algunos-, la reacción cruzada con otros coronavirus y los distintos antígenos y tiempos”. Por todo ello, abogó por emplear “kits de tipo Elisa o de bioluminiscencia, que tienen una sensibilidad mucho mayor”.

Con respecto a las vacunas, la mejor reacción inmune “se obtiene con un patógeno atenuado, que proporciona respuestas humorales -anticuerpos y memoria de células B- y celulares -linfocitos T helper y memoria tanto de estas célu-

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las como de las T citotóxicas”-.

También se refirió a los adyuvantes, que son “sustancias que incrementan la respuesta.

Algunos, simplemente, hacen que el antígeno se deposite en una zona durante más tiempo para que puedan llegar los macrófagos y las células dendríticas al lugar”. Otros “activan a las células presentadoras de antígenos o a la inflamasoma -que media la liberación de interleuquina-1- y mejoran la presentación antigénica”.

En el caso de una vacuna contra el SARS-CoV-2, “tenemos que estudiar qué tipo de antígeno utilizar y qué respuesta inmunitaria buscar”. La mayoría de las que se están desarrollando “emplean la proteína S, pero un artículo publicado en la revista Cell planteaba la posibilidad de utilizar otros componentes, porque se ha visto que los linfocitos CD4 y CD8 son capaces de reconocer estructuras del virus”. África González, además, hizo hincapié en la importancia de conocer qué tipo de péptidos pueden asociarse con moléculas HLA de clase I y de la activación de la memoria entrenada y clásica”.

Ante la expansión de la covid-19 también surgió la posibilidad de utilizar inmunoterapia, “empleando diferentes elementos para modular y modificar el sistema inmunitario”. Uno de los primeros estuvo vinculado “a la detección precoz de citoquinas elevadas.

Esto puede ayudar a saber que la persona está entrando en un estadio grave” y, de esta forma, “iniciar una terapia de anticuerpos”. Otra de las ideas que surgieron fue “emplear plasma de convalecientes o suero hiperinmune”, así como “desarrollar anticuerpos monoclonales dirigidos, fundamentalmente, a bloquear la zona neutralizante del virus”. Con respecto a las vacunas, aseguró, “necesitaríamos que entre el 60 y el 70% de la población estuviera protegida con una para poder controlar la pandemia”.

COVID-19

La gripe de 1918 versus la covid 2019 Además de la Guerra del Rif, los otros grandes problemas de la España de 1918, al igual que ahora, eran el paro y el nacionalismo catalán Por Rosendo Bugarín González * Han pasado algo más de 100 años entre la gripe de 1918 y la covid-19. La vida cambia mucho en un siglo y, sin embargo, cuando se profundiza en la epidemia gripal de 1918 llama la atención la multitud de paralelismos de ambos acontecimientos y resulta sobrecogedor que hayamos repetido algunos de los errores. Es como si no hubiésemos aprendido de la experiencia.

Indudablemente, el contexto histórico era totalmente diferente. Cuando apareció la mal llamada Gripe Española aún no había finalizado la Primera Guerra Mundial. La contienda trajo a Europa, además de muertes y discapacidades, caos y pobreza. Ello se tradujo en hacinamiento, niños sin hogar y escasez de alimentos. La gran movilización de soldados era también un caldo de cultivo para la aparición de epidemias como tifus exantemático, sarampión, varicela o tosferina.

Oficialmente, el primer caso de gripe se detectó el 4 de marzo de 1918. Se trataba de Gilbert Mitchell, un cocinero del campamento de Fort Riley, Kansas España se mantuvo neutral, eso le permitió permanecer al margen y experimentar cierta mejora económica al incrementar sus exportaciones. Al igual que ahora, nuestro régimen consistía en una monar-

en China, lo cierto es que oficialmente se considera que el primer caso aconteció el 4 de marzo de 1918, se trataba de Gilbert Mitchell, un cocinero del campamento militar de Fort Riley, Kansas. A las pocas horas ya había más de cien contagiados en la enfermería.

Un mes después llega a Europa, de Francia, a través del intenso tráfico ferroviario de emigrantes españoles y portugueses, pasa a la Península. En España al no haber censura de prensa, los periódicos hacen re-

Fig. 1. Autorretrato de Edward Munch quía parlamentaria. Cuando comienza la epidemia, reinaba Alfonso XIII y gobernaba el conservador Antonio Maura con un gabinete de concentración, no había “Estado de las autonomías” sino que nuestra gobernanza estaba centralizada. Además de la Guerra del Rif ¿saben cuáles eran los dos grandes problemas, por aquel entonces, de nuestro país? Pues dos viejos conocidos: el paro y el nacionalismo catalán.

Si bien existe la teoría de que los primeros casos de la gripe se produjeron a finales de 1917

En Galicia, los primeros casos aparecen en A Coruña. El 19 de septiembre fallece por neumonía gripal Herminia López Iglesias, de 25 años

ferencia a la nueva enfermedad; no ocurría así con los países que estaban en guerra, no podían admitir que tenían a sus

ejércitos diezmados y sus servicios de inteligencia difunden una fake new: la existencia de una epidemia en nuestro territorio. Así, es como se crea el mito de la gripe española.

La epidemia tuvo una difusión mundial. Se calcula que pudo producir entre 50 y 100 millones de fallecimientos de los que medio millón correspondieron a Estados Unidos.

Hay disputas de si los países con más víctimas fueron la India o China. En algunas aldeas de inuit, los esquimales de Alaska y Canadá, casi murieron el 100% de sus habitantes.

En Galicia, los primeros casos aparecen en A Coruña. El 19 de septiembre fallece por neumonía gripal Herminia López Iglesias de 25 años; el 27, Santiago Piñón Fontiche de Mugardos (43 años) que murió al entrar al puerto en el vapor Reina María Cristina procedente de La Habana; y el 28, el soldado José Varela Pose, de 22 años, al que seguirían más compañeros de su regimiento.

Se calcula que en la provincia pudieron fallecer en torno a 10.000 personas.

Indudablemente, también se produjo una guerra de cifras, si ahora es difícil unificar estadísticas imagínense hace 100 años. El diagnóstico de la causa de la muerte era exclusivamente clínico, de sospecha, y, por otra parte, la nomenclatura no estaba estandarizada, al acceder a las estadísticas de los registros civiles se encuentran múltiples causas de muerte relacionadas con la gripe como

Al igual que la covid, la gripe afectó a todas las clases sociales. Enfermaron Franklin Delano Roosevelt, Gandhi, Alfonso XIII y Picadillo Fig. 2. Manuel Puga “Picadillo“

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Fig. 3. Gráfica de la pandemia de 1918

Fig. 5. Diferentes oleadas de la pandemia por covid-19

Si en la epidemia actual el drama se produjo en las residencias de personas mayores, en la de principios del siglo XX la tragedia estaba en los cuarteles por ejemplo fiebre gripal, gripe, neumonía gripal, bronconeumonía gripal o gripe del SNC. Como no podría ser de otra manera, al igual que la COVID, la gripe afectó a todas las clases sociales. A modo de ejemplo, enfermaron Franklin Delano Roosevelt, Gandhi y nuestro rey Alfonso XIII. También personajes del mundo de la cultura como Edwart Munch, el que más tarde pintaría un cuadro autorretrato convaleciente de gripe (figura 1). El mundo de la medicina lloró, entre otros a William Osler que enfermó y falleció, meses más tarde, como consecuencia de las secuelas provocadas. En Galicia se llevó al popular cocinero Manuel Puga “Picadillo” (figura 2).

En lo que respecta a la cronología, la gripe de 1918 se produjo en tres oleadas (figura 3). La primera acontece en la primavera de 1918. En España los primeros casos se producen en Madrid. Se presenta como una enfermedad leve pero extraordinariamente contagiosa, aún no se sabe que se trata de gripe. De ahí que los medios de comunicación la denominen de forma imprecisa como «la epidemia reinante» o «la fiebre de los tres días». En aquel momento se estrenaba la zarzuela La canción del olvido cuya pieza más popular se titulaba Soldado de Nápoles.

Durante este período, la enfermedad no fue tomada en serio y llegó a denominarse como

la canción ya que ambas eran muy “pegadizas”.

Tras una tregua estival, llegó en otoño la segunda oleada.

Fue la más devastadora, algo pasó en verano que convirtió al virus en un eficaz agente mortífero. De “la dama española” se pasó a “la muerte púrpura” haciendo referencia al color que adquirían los enfermos cuando se presagiaba su final (figura 4).

En la primavera del año siguiente apareció una tercera oleada en la que se produjeron el 20-30% de las muertes y, poco a poco, al cabo de los meses fue desapareciendo.

No sabemos cómo va a evolucionar la pandemia actual.

Varios estudios epidemiológicos concluyen que también habrá más oleadas. Más aun, parece claro que, en los próximos meses, en lo relativo a la salud, tendremos que enfrentarnos a otro tipo de oleadas como son la atención de los pacientes urgentes no-COVID demorados por la restricción de recursos, el impacto sobre la interrupción de la atención en enfermedades crónicas así como los problemas derivados del estrés postraumático, la enfermedad mental y la crisis económica (figura 5).

En lo relativo a la etiología, en ambos casos se trata de virus RNA de tropismo respiratorio. Determinar el origen de la epidemia actual no ha sido difícil, se consiguió en los pri-

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Fig. 6. Portada del periódico El Sol del 5 de junio de 1918

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Fig. 4. La muerte púrpura meros meses, no había sido así en 1918. Hay que tener en cuenta que, por aquel entonces, aun no se había descubierto el agente causal de la gripe, ni se sabía que era un virus. Se sospechaba que la producía la bacteria, descubierta en 1892 por Richard Pfeiffer, denominada hameophillus influenzae ya que estaba presente en los exudados de algunos enfermos.

Por lo tanto, en ese momento el diagnóstico de gripe era exclusivamente clínico, sin confirmación microbiológica. ¡Ahora nos quejamos de la falta de fiabilidad de muchos test!

Las opiniones estaban divididas. Durante los primeros meses se dudaba que fuera influenza por su benignidad. Es a principios de junio, cuando los periódicos madrileños comienzan a asegurar que la epidemia reinante es en realidad una gripe (figura 6). Posteriormente, en la segunda oleada, vuelve a cuestionarse dicha etiología por todo lo contrario, no encajaba en una enfermedad de tanta gravedad.

El virus de la gripe aun tardó bastantes años en descubrirse, fue en 1933 cuando se logró aislar en hurones y se publicó en la revista Lancet. Muy recientemente, en el año 2005, varios investigadores consiguieron aislar el virus que provocó la pandemia a partir de muestras muy bien conservadas que obtuvieron de una paciente fallecida por dicha infección en el pueblecito esquimal de Brevig (Alaska), en

COVID-19 En Santiago, los médicos, entre ellos Novo Campelo, Gil, Barcia, Alsina, Novoa Santiso y Sánchez Guisande, se distribuyeron las calles para atender a los enfermos Fig. 7. Hospital Real de Santiago de Compostela, actual Hostal de los Reyes Católicos dicha aldea fallecieron 72 de sus 80 habitantes.

La forma de transmisión y, posiblemente también la fisiopatología, tienen mecanismos similares en ambas epidemias, incluso la temida “tormenta de citoquinas” se producía en la gripe de 1918. El periodo de incubación es algo mayor en la COVID. La sintomatología probablemente sea similar. Consiste en un cuadro respiratorio, de gravedad variable, que se complica con una neumonía gripal y sobreinfecciones bacterianas y en ocasiones desencadena un distrés respiratorio.

En ambos casos son posibles la sintomatología y complicaciones extrarrespiratorias.

En la epidemia de 1918 había formas fulminantes, pacientes que empezaban a toser por la mañana, se tornaban cianóticos por la tarde y fallecían por la noche. En la epidemia actual la evolución sombría es, en general, más predecible. Eso permitió, en muchos casos, hacer un seguimiento domiciliario telefónico.

La gripe se cebó en los niños y en los adultos jóvenes, un gran porcentaje de los fallecidos se hallaban entre los 20 y los 40 años. No se sabe por qué los pacientes ancianos evolucionaban mejor, se piensa que estaban potencialmente protegidos por haber padecido una gripe parecida años atrás. Si en la epidemia actual el drama se produjo fundamentalmente en las residencias de personas ma-

Fig. 8. Hospital de San Antonio de Padua en Betanzos yores, en la de principios del siglo XX, la tragedia estaba en los cuarteles.

En cuanto a la asistencia sanitaria de la época de la gripe, existía cierto optimismo en

la clase médica ya que en el último siglo se habían ganado las primeras batallas a los microorganismos, de hecho, las enfermedades infecciosas empezaban a denominarse

enfermedades evitables. Nadie se podía imaginar lo que iba a ocurrir.

Nuestro país tenía unas importantes insuficiencias legislativas en materia sanitaria, carecía, entre otras cosas, de Ministerio de Sanidad. Los asuntos relacionados con la salud dependían del Ministerio de Gobernación de, ahí que la crisis en las provincias estuviese coordinada por los gobernadores civiles. La infraestructura asistencial, tanto ambulatoria como hospitalaria, era insuficiente y obsoleta.

Además, existía un importante atraso científico.

Hay que tener en cuenta que en el año 1918 no existía la Seguridad Social tal como la conocemos ahora. En las grandes ciudades había hospitales municipales, de beneficencia, menos frecuentemente hospitales privados y en muchos pueblos “hospitalillos” (figuras 7 y 8).

En cualquier caso, todos ellos tenían muy poca capacidad en camas, sus recursos eran muy precarios y su personal muy escaso (figura 9). Durante la epidemia, en algunos lugares se habilitaron pabellones y hospitales de campaña. Así, por ejemplo, en Santiago se acondicionó el Pazo do Hórreo para atender a los enfermos del

Fig. 9. Personal administrativo y sanitario del hospitalillo de la Diputación de Ourense

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Fig. 10. Pazo do Hórreo, Santiago de Compostela, actual sede del Parlamento de Galicia Ejército (figura 10). También hay que tener en cuenta que por aquella época la gente “pudiente” no ingresaba en los hospitales públicos. En muchas ocasiones, se rechazaba el ingreso por miedo a los contagios nosocomiales.

A medida que iban pasando los días, los médicos comenzaban a enfermar y algunos fallecían. En los periódicos aparecían con frecuencia esquelas de galenos muertos como consecuencia de la epidemia (figura 11). Los profesionales escaseaban a pesar de que todos, independientemente de su especialidad, se dedicaban al control de los afectados. Los gobernadores civiles redistribuían los recursos humanos por los diferentes pueblos y ciudades en función de las necesidades del momento y se buscaban fórmulas organizativas para optimizar la asistencia. Así, por ejemplo, tal como recoge una noticia de La Voz de Galicia: “en Santiago los médicos, entre ellos Novo Campelo, Gil, Barcia, Alsina, Novoa Santiso y Sánchez Guisande, se distribuyeron las calles para una rápida atención de los atacados”.

En ambas crisis sanitarias, el personal médico es el colectivo de mayor riesgo de contagio.

Con frecuencia aparecían, en los medios de comunicación,

Fig. 12. Placa de homenaje a los médicos fallecidos por la gripe de 1918, en la Facultad de Medicina de la USC noticias relativas a colegas enfermos o fallecidos: “fallece, con solo 30 años, el médico titular de Neda Ricardo Rodríguez”; “ha fallecido Francisco Cebreiro, médico de Narón”; “ha muerto Juan Rodríguez Martínez, médico de Santa María de Oza”; “ha muerto el médico de Valdoviño”; “falleció Leonardo Rosado Punín, médico de Pontedeume”. También murieron varios profesores de la facultad de Medicina de Santiago, Narciso Carrero, catedrático de Medicina Legal; Eduardo del Río, catedrático de Histología, y Matías Fernández Íñiguez, catedrático de Higiene. El Ayuntamiento de Santiago encargó, al escultor Asorey, una placa de homenaje que aun

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hoy en día está expuesta es una pared del centro docente donde ejercían con la siguiente leyenda (figura 12): “Homenaje de gratitud y admiración a los médicos que durante la epidemia gripal de 1918 prestaron

Fig. 13. El político y médico Martiño Noriega

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Fig. 11. Esquelas de médicos fallecidos por la gripe de 1918 abnegado servicio en la ciudad compostelana”.

El escritor y político Castelao, se volvió a poner la bata, reincorporándose a la asistencia en su villa natal, Rianxo.

De forma análoga, en la actualidad, políticos como, por ejemplo, el anterior alcalde de Santiago, Martiño Noriega (figura 13), volvieron a utilizar su fonendoscopio.

Una de las grandes reivindicaciones del Colegio Médico era, por aquel entonces, que el gobierno llevara a cabo la declaración oficial de epidemias ya que según la ley vigente era requisito sine qua non para reclamar una pensión para la viuda o los hijos de los médicos fallecidos como consecuencia del contagio. La buena noticia no se produjo hasta el 26 de noviembre cuando mediante una Real Orden “se reconoce el derecho a pensión a viudas y huérfanos, los varones hasta los 20 años y las hembras hasta que se casen o hagan profesión religiosa”. En la actualidad seguimos con problemas parecidos, el objetivo es conseguir que la COVID se declare como enfermedad profesional para los sanitarios.

Las medidas para evitar la transmisión del virus, como es natural, fueron en ambas

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Fig. 14. Barbero con mascarilla

epidemias completamente superponibles. Así, los medios de comunicación de la época hacían referencia, como recomendaciones, a la higiene especial de la boca, narices y manos, a huir de las aglomeraciones de gentes, a reducir los viajes a los puramente precisos, a la intensificación de la vida familiar y a la “tranquilidad de espíritu”.

El Boletín Oficial de la Provincia de Burgos del 4 de octubre de 1918 exhortaba a “desoír a los ignorantes que os invitan a consumir tabaco como remedio preventivo por ser sus efectos más nocivos que nunca”. Increíblemente, cien años más tarde, se volvió a sugerir que la nicotina podría tener algún grado de protección para el coronavirus.

Se comenzaron a realizar desinfecciones masivas de los espacios públicos y en muchos lugares del mundo proliferó, como mecanismo protector, el uso de mascarilllas (figuras 14, 15 y 16), si bien en España esta medida no tuvo mucha aceptación. Algo parecido pasa en la actualidad, por lo menos en lo que respeta a la escasa destreza de uso por parte de nuestros políticos.

Durante las primeras semanas, apenas se le dio importancia a la epidemia por lo que no se tomaron medidas restrictivas en el ámbito comunitario.

Los deportes de masas y las corridas de toros continuaron celebrándose ¿no les parece un deja vu? En este contexto, se mantuvieron las fiestas como

Fig. 15. Cartero con protección

Fig. 16. Personal de limpieza protegido

Tanto en el 18 como en la actualidad, la gran reivindicación de nuestro Colegio era que la pandemia fuera reconocida como enfermedad profesional San Isidro en Madrid o los sanfermines en Navarra.

En la segunda oleada sí que se prohibieron los actos multitudinarios como ferias, cines, teatros y fiestas; también se suspendieron los juicios, los cortejos fúnebres y todo tipo de actividad docente. Incluso cerró la universidad de Santiago.

En otros países las clases universitarias se celebraban al aire libre (figura 17). Una medida muy impopular en Galicia fue el cierre de los mataderos. Los gobernadores hacían cumplir las órdenes con mano firme, imponiendo cuantiosas multas, incluso a las autoridades

locales, simplemente por criticar públicamente su decisión.

En esta situación, en Lugo se suspendieron las fiestas de San Froilán y se prohibió la instalación de las clásicas barracas del pulpo; en Mondoñedo se suspendieron los actos festivos en honor a San Lucas.

Naturalmente, hubo excepciones. Veamos esta noticia de principios de octubre: “En Santiago después de una religiosa rogativa multitudinaria, se celebró una fiesta taurina con cuatro toretes estoqueados.

Ahora bien, la plaza estaba impregnada en zotal y hasta se desinfectaron los toretes para evitar que alguno de los improvisados toreros sufriese con las astas de los bichos los efectos de la gripe”. Esta otra, publicada en La Voz de Galicia tampoco tiene desperdicio: “El joven de 18 años Francisco Ramos Moris se sintió ayer tarde gravemente enfermo de gripe al pasar cerca de la plaza de toros”.

Por supuesto, el fútbol no podía faltar. A pesar de que la Comisión de Sanidad había prohibido los espectáculos, Joan Gamper, presidente y jugador del Barcelona, junto con Boix, jugador del Español, acordaron en octubre que se disputara el Campeonato de Cataluña.

Como ya comenté, durante la primera oleada apenas se tomaron medidas relacionadas con la salud pública, si bien, algo que sí se hizo de forma rápida y diligente fueron los controles y cierre de fronteras

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con Portugal (figura 18). En muchas ciudades, no solo en las fronterizas, había estaciones, lazaretos, de desinfección.

En A Coruña había una instalación de este tipo ubicada en el espigón del muelle del Este. En ella estuvieron en cuarentena los enfermos desalojados del transatlántico Alfonso XIII. Las noticias trataban de dar una imagen sana y avanzada de nuestro país frente a la enferma y atrasada del país vecino, intentando legitimar nuestra postura neutral en la guerra frente a la belicosidad de Portugal. Así, veremos aparecer fake news transmitiendo subliminalmente esta idea: “Recrudecimiento del tifus exantemático en Portugal”.

“De Badajoz comunican que en Portugal la epidemia produce grandes estragos”. “En Creciente llegaron obreros portugueses procedentes de las minas de Asturias, todos fallecieron al cruzar el Miño”. “En Villagarcía ha sido desinfectado un barco que tuvo que hacer una arribada forzosa en Portugal”.

Es muy gráfica esta, relativa a una parroquia del concello de Teo: “En la parroquia de Calo falleció ayer, víctima de la gripe, el joven coadjutor D. Andrés Nimo País, adquirió la enfermedad confesando a un obrero portugués”.

Como todos sabemos, en lo relativo a las medidas terapéuticas no hubo ninguna específica que fuera eficaz, se ensayaron múltiples recursos farmacológicos sin éxito. La práctica consistía en ensayo y error con una gran influencia de los profesionales de reconocido prestigio de la época, de tal manera que “cada maestrillo tenía su librillo”. Algo que, de alguna manera, también está pasando en el día de hoy.

Así, recientemente, el periódico El País recogía la siguiente advertencia: “el uso de fármacos a la desesperada contra el coronavirus se deberá racionalizar, abunda el trabajo redundante y ensayos de calidad dudosa”.

COVID-19 Empezaron a aparecer en los medios de comunicación múltiples publicidades de diversos fármacos que prometían curaciones casi milagrosas (figura 19). Por supuesto, proliferó la picaresca y la especulación.

Un grupo formado por prestigiosos médicos españoles, entre ellos Marañón, Pittaluga y Ruiz Falcó, se trasladó a París para intercambiar impresiones y unificar criterios de actuación. A su regreso, publicaron un documento de consenso en la revista España Médica en la que su director, el pediatra José Ignacio Eleizegui, invitó también a comunicar su experiencia al médico gallego de Tui Álvarez Limeses. El documento (figura 20) nos da muchas pistas de las medidas y ensayos que se realizaron.

Así, describe los beneficios de la quinina, (figura 21) un antipalúdico con propiedades analgésicas y antipiréticas; en la actualidad se está utilizando la hidroxicloroquina. La aspirina (figura 22) se utilizaba a dosis muy superiores a las actuales ya que se llegaba incluso a prescribir 20 gramos al día, se piensa que algunos pacientes debieron fallecer intoxicados por dicho fármaco. El aceite alcanforado se empleaba de forma tópica para los dolores musculares y articulares y se llegó a ensayar por vía intravenosa. También se probó el sublimado, un derivado mercurial que en aquel momento se utilizaba para las infecciones graves como la fiebre puerperal, el tifus o la endocarditis.

El suero antidiftérico (figura 23) generó grandes expectativas y se manejó masivamente hasta que se vio que era ineficaz, originó un gran debate en la Real Academia de Medicina.

Su obtención era extraordinariamente difícil, uno de los argumentos que se utilizó en la discusión es que había que ser cautos al manifestar su eficacia ya que no había suero para toda la población y podían originarse conflictos sociales. Al

Fig. 17. Clase de física al aire libre en la Universidad de Montana, Estados Unidos final se concluyó que “era útil pero no específico y podría ser sustituido por otras alternativas”. De forma análoga, en la actualidad también ensayamos derivados hematológicos como el plasma de pacientes recuperados. Por último, se diseñaron vacunas que no dieron resultado (figura 24).

Las conclusiones del grupo de París fueron desoladoras: “Por desgracia se trata de una enfermedad con la que apenas es posible luchar desde el punto de vista epidemiológico.

Deben acogerse, por lo tanto, con serenidad y con respeto las aparentes faltas de eficacia en la acción sanitaria del Estado, siendo de todo punto injusto y revelador de un penoso grado de incultura el hacer responsable de cosas biológicamente irremediables a los organismos y personalidades encargados de la defensa sanitaria de la nación”.

“Se reunió el Colegio Médico para tomar medidas contra la terrible epidemia, acordando recomendar las suculentas meriendas que sirve el bar Modelo” (La Voz de Galicia)

La desesperación daba lugar a situaciones rocambolescas ya que cualquier ocurrencia representaba un hilo de esperanza. Así, en plena crisis, todos los periódicos gallegos publican una propuesta atribuida al catedrático Miguel Gil Casares: “Dado que la puerta de entrada es el aparato respiratorio, pensé en buscar una substancia de efecto antiséptico persistente y que constantemen-

Fig. 18. Cierrre de la frontera con Portugal en Tui

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te se eliminara por la mucosa respiratoria, así me fijé en la creosota, desinfectante enérgico del pulmón: creosota de brea de haya 3 g, alcohol de vino 100 id, jarabe de azúcar 100. Disuélvase y añádase jerez o vino blanco 300 g”. Los médicos gallegos comenzaron a prescribir la pócima inmediatamente de forma masiva, hubo farmacias que en una sola jornada vendieron más de 50 preparados. Al día siguiente se comprobó que era una fake.

No se trataba del catedrático sino de un presunto médico asturiano llamado Miguel Gil. En cuanto a las medidas dietéticas, veamos esta simpática propuesta, difundida en La Voz de Galicia: “se reunió el Colegio Médico de esta capital para tomar medidas contra la terrible epidemia, acordando recomendar a sanos, enfermos y convalecientes, las suculentas meriendas de 80 céntimos que sirve el bar Modelo. Platos del día: callos y lenguados en salsa verde”. Tal vez parezca una noticia un poco frívola, pero era habitual que los libros de medicina de la época incluyeran, dentro de las medidas terapéuticas, no solo recetas magistrales de medicamentos, sino también recetas de cocina para contribuir al restablecimiento de la salud.

Así, por ejemplo, un libro muy popular de la época, sobre la gripe, editado en A Coruña, cuyo autor firmaba con el seu-

COVID-19

Fig. 19. Publicidad de un jarabe contra la gripe

Fig. 20. Artículos sobre la gripe

dónimo de Médico Rodríguez, incluía entre otras las siguientes recetas alimentarias recomendadas para convalecientes: vino caliente con azúcar y canela, ponche aux dames, sopa de zanahorias de Moro, caldo Carlota, ponche de Torino, dule pot au feu (cocido francés), sopa de cebolla, chantilly, natillas o leche asada. Más aun, recomendaba las fanecas y las robalizas, especialmente cocidas con una cebolla y patatas.

En cuanto a la gestión de la epidemia, en aquel momento, las críticas recayeron fundamentalmente en los políticos incluidos los locales, exigiéndoles más celo en las medidas de higiene y desinfección de sus pueblos y ciudades. Pero, ojo, al recrudecerse y prolongarse en el tiempo la epidemia, tampoco se salvaron los médicos. La incertidumbre, al igual que ahora, generaba mucho desasosiego y desacuerdos en la propuesta de soluciones por parte de los diferentes expertos. Veamos, como ejemplo, algunos extractos del artículo de Ruiz Albeniz, titulado Moral Médica. Las epidemias sin nombre, publicado en La Voz de Galicia: “Aunque lo dudes, lector amigo, todavía no sabemos a qué atenernos […] ¡Qué si el bacilo de Pfeiffer, que si el estrepitococo, que si Malta, que si catarros pulmonares, ridículo, lamentablemente ridículo! […].

Entre la dilatada familia médica no existe nunca posibilidad de avenencia ni aun de respeto mutuo. Basta que el pseudosa-

Fig. 21. Quinina

Fig. 23. Suero antidiftérico

Fig. 22.

Aspirina

bio Fulanito diga blanco para que Perenganito se pronuncie por lo negro. No hay forma de llegar nunca a un acuerdo y lo peor que estas cosas se llevan a la palestra pública sin el menor recato y pudor […] ¡Qué falta nos está haciendo a los médicos españoles un cursito sobre Moral profesional!”. No descartemos, por tanto, que si esto se pro-

longa acabemos siendo otra de las dianas de las críticas, si bien, hay que decir que, aunque aisladas ya hemos escuchado algunas, como que “muchos médicos nos hemos contagiado viajando”.

También se han visto, aunque por supuesto de forma anecdótica, manifestaciones de rechazo en las comunida-

Fig. 24. El doctor Chicote vacunándose de la gripe

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des por miedo de determinados vecinos a contagiarse.

Lógicamente, el drama no solo fueron los fallecimientos, se produjo, además, un impacto brutal sobre el empobrecimiento de la sociedad en general.

Cerraron muchas fábricas y negocios por lo que se paralizó gran parte de la actividad económica y se produjo un marcado descenso de la oferta de trabajo. No nos olvidemos, pobreza y mala salud están íntimamente relacionadas.

La sociedad, en este sentido, reaccionó de forma extraordinariamente solidaria, en todas las ciudades se organizaron colectas populares para ayudar a los desfavorecidos, se llevaron a cabo donaciones de alimentos y de ropa, los dentistas prestaban sus servicios gratuitamente, los dueños de los escasos automóviles existentes se los cedían a los médicos para agilizar las visitas domiciliarias, se abrieron nuevas instalaciones sociosanitarias y un sinfín de otras actividades benéficas.

También se recurrió a la fe, se organizaron todo tipo de manifestaciones religiosas para suplicar el fin de la epidemia.

En Santiago se emprendió una rogativa con las cruces procesionales de las diez parroquias y la del Hospital Real; en A Coruña, se celebró la procesión de la Virgen de los Dolores en la iglesia parroquial de San Nicolás y en muchas villas de la provincia se realizaron plegarias a San Roque, santo muy venerado como intercesor ante las epidemias.

Al llegar el verano de 1919, los casos comenzaron a disminuir paulatinamente hasta que acabaron desapareciendo.

No podemos ser soberbios, nunca venceremos definitivamente a los microorganismos.

Seguirá habiendo epidemias, solo es cuestión de tiempo. Por eso, no podemos improvisar, tenemos que estar preparados. *Rosendo Bugarín González es médico de familia

COVID-19

Comunicado del Colegio ante el brote de covid-19 causado por la expedición del C.F. Fuenlabrada a A Coruña En la nota se afirma que “no parece, supuestamente, que se haya procedido según lo recomendado por las autoridades sanitarias” Por Pilar Pérez El pasado 20 de julio, varios integrantes del Club de Fútbol Fuenlabrada se desplazaron a A Coruña, infectados con covid-19, para disputar el partido de la última jornada de segunda división de la liga de fútbol contra el Deportivo. El encuentro se suspendió después de saberse que seis jugadores y dos trabajadores del club madrileño habían dado positivo en las pruebas por coronavirus, y el equipo quedó confinado en el hotel Finisterre, donde se activó el protocolo de seguridad.

Ante esta situación, nuestro Colegio, movido por sus obligaciones éticas y deontológicas, hizo público un comunicado que se reproduce a continuación de forma íntegra: 1.- De acuerdo con las órdenes y protocolos ministeriales dictados por el Gobierno de España, cualquier médico en el ejercicio de su profesión tiene la obligación de comunicar a la autoridad sanitaria de su comunidad autónoma los casos positivos de covid-19 de los que tenga conocimiento.

Se entiende por tales aquellos que presentan síntomas de sospecha de infección por SARS-CoV-2 y con PCR positiva o persona asintomática con PCR positiva, con IgG negativa o no realizada.

2.- Los casos confirmados con infección activa son de declaración obligatoria y urgente.

3.-La información de los brotes que se detectan ha de

enviarse al Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias y al Centro Nacional de Epidemiología. A efectos de notificación, se considera brote cualquier agrupación de tres o más casos con infección activa.

4.-El estudio y seguimiento de los contactos estrechos tiene como objetivo realizar un diagnóstico temprano para evitar la transmisión en período asintomático o al inicio de los síntomas.

5.- Se entiende como contacto estrecho cualquier persona que haya proporcionado cuidados a un infectado o que haya estado en el mismo lugar que un caso a una distancia de menos de dos metros y durante más de quince minutos.

También se considera contacto estrecho en un avión, tren o transporte de largo recorrido a cualquier persona situada en un radio de dos asientos alrededor de un infectado y a la tripulación o personal equivalente.

6.- El período a considerar para el estudio de los contactos es de dos días, antes del inicio de los síntomas del infectado, hasta el momento en que el caso es aislado.

7.-Ante cualquier caso sospechoso o persona con sospecha de infección por SARSCoV-2, está indicado realizar la identificación y control de sus contactos, en el período an-

tes señalado, recomendándoles evitar salidas de su domicilio.

8.- Las actuaciones sobre los contactos estrechos son: vigilancia y cuarentena durante

“Los médicos del Fuenlabrada deberían pedir el amparo a la Organización Médica Colegial para evitar sospechas infundadas sobre su proceder”

“La salud pública y el interés general están por encima de cualesquiera otros intereses”

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los 14 días posteriores a un contacto con un caso confirmado. En el supuesto que el contacto estrecho tenga PCR negativa se continuará la cuarentena hasta el día 14. De forma adicional y con el objetivo de poder reducir la citada cuarentena, se puede realizar una PCR, transcurridos diez días del último contacto con un infectado, pudiendo suspenderse el confinamiento si el resultado es negativo. Además, se le indicará al paciente que, durante la cuarentena, debe permanecer en su domicilio, preferentemente en una habitación individual, y que restrinja al máximo sus salidas de la misma, que siempre deberá hacer con mascarilla quirúrgica.

9.-A la luz de la información que tenemos y lo dispuesto en las órdenes y protocolos dictados por el Ministerio de Sanidad, no parece, supuestamente, que, en el caso que nos ocupa, se haya procedido según lo recomendado por las autoridades sanitarias.

10.-El Colegio no tiene la más mínima duda de que los profesionales sanitarios del Fuenlabrada han actuado de a acuerdo a la lex artis y el Código Deontológico. Por eso, consideramos que, ellos mismos, deberían pedir el amparo a la Organización Médica Colegial para evitar sospechas infundadas sobre su proceder.

11.- El Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de A Coruña manifiesta su conformidad y apoyo a las actuaciones que al respecto está desarrollando el Servizo Galego de Saúde y la Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia. Además, recuerda que la salud pública y el interés general están por encima de cualesquiera otros intereses que, por otra parte, se ven afectados muy gravemente por conductas como esta, como hemos visto a lo largo de la pandemia.

COVID-19

Prestaciones extraordinarias de la Fundación para la Protección Social Tienen como objeto la conciliación y el apoyo familiar en el hogar y están dirigidas a los médicos afectados por la crisis sanitaria provocada por la covid-19 La Fundación para la Protección Social de la Organización Médica Colegial (FPSOMC), entidad que representa la acción solidaria de todo el colectivo médico a nivel estatal, ha puesto en marcha una serie de prestaciones extraordinarias de ayuda a la conciliación y de apoyo familiar en el hogar. Están dirigidas fundamentalmente a los médicos que, en este momento, están afrontando situaciones imprevistas durante su jornada laboral debido a la covid-19.

Desde la solidaridad que ha marcado siempre la actuación de esta Fundación centenaria, la FPSOMC extiende, con carácter extraordinario, la cobertura de algunas de las ayudas recogidas en el Catálogo de Prestaciones 2020, mientras se prolongue la crisis sanitaria y el estado de alarma decretado por las autoridades.

“El personal médico, junto con el resto de profesiones sanitarias, es uno de los colectivos más movilizados y afectados por esta pandemia y que actualmente se someten a largas jornadas laborales con unas condiciones que, en muchos casos, están produciendo un desgaste físico y emocional importante en ellos”, señala el doctor Serafín Romero, presidente de la FPSOMC.

Por este motivo, y para cumplir la misión que persigue la Fundación de proteger a los médicos y sus familias cuando lo necesiten, se han ampliado las ayudas de prestaciones por conciliación. En concreto, se han extendido las referidas al apoyo familiar en el hogar y a la teleasistencia domiciliaria para padres.

De esta forma, desde la FPSOMC se atenderán las demandas puntuales de aquellos médicos socios protectores que, con hijos menores a su cargo, necesiten suplir su acompañamiento o cuidado, incompatible con las obligaciones laborales actuales.

Esta ayuda, que tiene como objetivo facilitar la conciliación personal, familiar y profesional, cubrirá también las tareas de apoyo prestado por otros familiares que, por ser personas de riesgo de contagio de coronavirus, no puedan seguir desempeñando labores de acompañamiento y cuidado de los menores.

Por otro lado, para prevenir el aislamiento y la soledad de

La Fundación atenderá las demandas puntuales de los médicos socios protectores que, con hijos menores a su cargo, necesiten suplir su acompañamiento o cuidado También podrán beneficiarse de ayudas para la adquisición de un servicio activo las 24 horas, los 365 días del año, para poder mantener el contacto con padres mayores

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a saúde de galicia

los padres mayores de médicos en activo y dotarles de herramientas de comunicación programada ante cualquier necesidad o emergencia, la Fundación ha puesto en marcha también la ayuda de teleasistencia.

A través de esta prestación, los socios protectores podrán beneficiarse de ayudas para la adquisición de un servicio activo de 24 horas, los 365 días del año, para poder mantener el contacto con los progenitores de más edad, especialmente vulnerables en estas circunstancias. Este servicio de teleasistencia busca también promover la permanencia de los padres en el domicilio y dar respuesta a cualquier necesidad que pudiese acontecer.

Estas ayudas se suman a las que viene ofreciendo habitualmente la Fundación a la conciliación personal, familiar y profesional.

Toda la información sobre ellas está disponible en la web, https://www.fpsomc.es/ sites/default/files/ampliacionpretaciones-catalogo-2020.pdf La Fundación es una entidad privada de ámbito nacional, de carácter social y sin ánimo de lucro. Su origen se remonta a 1917 con la creación del Colegio de Huérfanos. Tiene como misión principal atender y dar respuesta, complementariamente al sistema público, a las necesidades más inmediatas y básicas de los miembros de la profesión médica y a sus familias, ya sean de carácter asistencial, dependencia o discapacidad, de conciliación de la vida personal, familiar o laboral, de prevención, promoción y protección de la salud o de protección para el ejercicio profesional. Todo ello a través de prestaciones, programas y servicios que les permitan afrontar de manera integral los posibles riesgos en materia social.

La Fundación destina anualmente doce millones de euros en ayudas para más de 3.000 beneficiarios.

COVID-19

El Colegio contra los negacionistas del coronavirus Ante las recomendaciones efectuadas por algunos médicos que niegan la existencia de la covid-19 y de la validez de los test PCR, que se oponen a las medidas adoptadas por las autoridades sanitarias como el uso de mascarillas, el confinamiento y la distancia física, y que rechazan el desarrollo de las vacunas para combatir la pandemia, la Junta Directiva de nuestro Colegio hizo público un comunicado cuyos puntos se recogen a continuación: 1.- La actitud de estos médicos negacionistas constituye una grave irresponsabilidad y supone un grave peligro para la salud pública.

2.- La difusión de estos mensajes, contrarios a la buena

práctica médica y a la evidencia científica, crea una intolerable alarma social, en un contexto agravado por la situación de emergencia y excepcionalidad en la que nos encontramos.

3.- Estas conductas violan las normas deontológicas de la

profesión médica y, por tanto, son merecedoras de la correspondiente sanción.

4.- Los Colegios Profesionales son corporaciones de derecho público, amparadas por la ley y reconocidas por el Estado, con personalidad jurídica pro-

Algunos miembros de la Junta Directiva del Colegio

pia y plena capacidad para el cumplimiento de sus fines.

5.- Por ello, al amparo de lo dispuesto en el artículo 1 de la Ley 2/1974 de 13 de febrero sobre Colegios Profesionales, y en el artículo 10 de la Ley 11/2001 de 18 de septiembre de Colegios Profesionales de la Comunidad Autónoma de Galicia, el Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de A Coruña advierte que procederá a la apertura de información previa contra los colegiados que incurran en tales acciones, y en su caso, a la posterior incoación de expediente disciplinario por presuntas infracciones del Código de Deontología Médica.

6.- Todo ello, sin perjuicio de las posibles responsabilidades penales en que pudieran incurrir dichos colegiados con tales actuaciones, que se pondrían, en su caso, en conocimiento de la Fiscalía para que valore la presunta comisión de delitos contra la salud pública o cualesquiera otros.

A.M.A., Premaat y AXA, las aseguradoras más transparentes Fundación Compromiso y Transparencia presentó su informe Transparencia e independencia del auditor externo de las empresas del Ibex 35 y del sector asegurador, tras analizar 56 aseguradoras, 42 sociedades anónimas y 14 mutuas y mutualidades, en el que se pone en evidencia los déficits de transparencia en este ámbito.

Con tal motivo, la propia Fundación ha remitido un escrito a la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones del Gobierno de España en el que demanda“una mayor supervisión de los comités de auditoría de las aseguradoras

y una mayor independencia del auditor externo”. También reclama “una mayor transparencia” con el objeto de “promover la competencia”, en clave de “la calidad del servicio y no del precio”.

Según el informe, desde la publicación de la Ley de auditorías de cuentas de 2015, se ha reforzado la concentración en cuatro grandes empresas auditoras. Y señala: “las compañías no hacen público en sus informes anuales un verdadero desglose detallado de los servicios que prestan las au-

ditoras de cuentas, y mucho menos los correspondientes honorarios que perciben por su realización”.

En el documento, en el que se miden el nivel de riesgo y la falta de transparencia e independencia, califica a las sociedades de riesgo bajo, medio y alto. En este último apartado,

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no ha introducido a ninguna aseguradora. En el de riesgo medio las mejores puntuaciones corresponden a AXA, Nationale Nederlanden, Línea Directa, BBVA Seguros y Helvetia. En cuanto a las mutuas, las mejor valoradas son A.M.A., Premaat, hna, Mutua General de Catalunya y Mutua Madrileña.

En el extremo opuesto, Agrupació AMCI, Ocaso y Zurich son las sociedades con peores resultados, y Fiatc, Mutua de Propietarios y Pelayo las mutualidades con la puntuación más baja.

entrevista José María

Gómez y Díaz-Castroverde

“Las agresiones al personal sanitario no pueden justificarse, y tienen una respuesta judicial adecuada” “Parece razonable pensar que, o bien se prohíbe completamente compaginar la actividad pública y privada o, de lo contrario, tiene que facilitarse que se ejerza en los términos adecuados” José María Gómez y Díaz-Castroverde (Ponferrada, 1956) ingresó en la carrera judicial hace cuatro décadas y, desde al año pasado, es presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Con anterioridad presidió la Sala de lo Contencioso Administrativo de ese mismo Tribunal. Fue miembro del Consello Consultivo de nuestra comunidad y pertenece a la Real Academia Gallega de Jurisprudencia y Legislación. Nos recibe en su despacho a principios de septiembre. Con él analizamos las cuestiones jurídicas que más preocupan a los profesionales de la medicina. Por Paco Docampo 38

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¿Cuál es su opinión de la profesión médica?

Es una de las profesiones más maravillosas que se pueden ejercer, porque ayuda a la sociedad, salva a personas y favorece que haya entornos con mayor calidad de vida. Es una de las profesiones a las que una persona puede dedicarse con toda la intensidad. Los jueces aportamos mucho a la sociedad, pero el personal médico lo hace de forma incalculable. Todos deberíamos tener interiorizados los aplausos que recibieron a lo largo del estado de alarma. Me parece muy justo y razonable que se les premiara con la Medalla de Galicia. ¿Cuál es su actitud como paciente?

Como paciente, soy bastante respetuoso con lo que me indica el médico.

Tengo que reconocer que soy bastante hipocondríaco, aunque lo he sido más en el pasado. Sin embargo, no pertenez-

entrevista co al grupo de los que lo resuelven todo yendo a ver al facultativo, sino al de los que hacen todo lo contrario: refugiarse en el síntoma y acudir al médico lo menos posible. ¿Por qué presentó su candidatura a la presidencia del TSXG? Yo había sido presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo durante una década y, cuando me presenté a ese cargo, anuncié que el período máximo que yo quería permanecer en él era de diez años.

Coincidió que, al terminar ese período, la presidencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia estaba vacante, y consideré que los conocimientos adquiridos en la Sala de Gobierno me permitirían hacer una buena labor en esta casa. Eso fue lo que me animó a presentar mi candidatura.

“LA MEDICINA ES UNA DE LAS PROFESIONES MÁS MARAVILLOSAS QUE SE PUEDEN EJERCER PORQUE AYUDA A LA SOCIEDAD Y SALVA A PERSONAS“ ¿Cómo valora estos primeros meses al frente del Tribunal?

De forma muy positiva. Creo que he tenido la fortuna de contar con una Sala de Gobierno que tiene una enorme dedicación al trabajo y un equipo de colaboradores fantástico. También he sufrido la misma mala suerte que el resto de la sociedad española, al tener que afrontar la pandemia.

No obstante, esto nos ha hecho más fuertes a todos y nos ha permitido comprobar que, cuando se intenta mejorar la Justicia y trabajar -incluso en las situaciones más dramáticas-, hay buenas personas dispuestas a colaborar y es posible realizar cosas positivas. ¿Qué impacto está teniendo la pandemia en la Administración de Justicia?

Creo que de la pandemia tenemos que hablar con una visión actual y otra prospectiva. En el primer caso, lo cierto es que el número de asuntos que se están incoando en los juzgados de Galicia en estos momentos es menor que el del año pasado en estas mismas fechas. Sin embargo, el número de asuntos que se resuelven es mayor desde que se levantó el estado de alarma: las tasas de resolución

“COMO PACIENTE, SOY BASTANTE RESPETUOSO CON LO QUE ME INDICA EL MÉDICO. TENGO QUE RECONOCER QUE SOY BASTANTE HIPOCONDRÍACO” de los meses de junio, julio y septiembre, comparadas con las de 2019, son más altas. Esto me produce una sensación muy positiva desde una doble perspectiva. La primera es que creo que los jueces y juezas de Galicia están cumpliendo con su labor hasta el límite de su esfuerzo máximo. En segundo lugar, me parece que las decisiones que tomó la Sala de Gobierno, y que la comisión de seguimiento adoptó en su momento, eran las adecuadas para crear un entorno apropiado. ¿Y desde el punto de vista prospectivo?

Creemos que puede haber un gran aumento de asuntos en materia mercantil y social. Seguramente será así, pero esa valoración la tendremos que hacer dentro de unos meses, para comprobar cuál ha sido el impacto de la pandemia.

A los médicos y sus abogados les preocupa la duración de la investigación penal en la que están implicados los facultativos, aunque, finalmente, el asunto no llegue a juicio. Estamos hablando de esperas de entre tres y cuatro años. Y en algunos casos de 10. ¿Cuál es su respuesta a esta preocupación?

En la implicación del personal médico en actuaciones judiciales hay que distinguir según las jurisdicciones: la penal, la civil y la contencioso-administrativa. En mi opinión, la larga duración de las actuaciones judiciales daña la imagen de la Justicia, y esto es algo que he afirmado en muchas ocasiones. Sin embargo, hay que tener en cuenta que algunas están llamadas a ser largas por naturaleza. En concreto, todas aquellas en las que esté incluido el personal médico, debido a la complejidad y duración de las pruebas periciales. Es cierto que muchas de estas actuaciones se alargan y, al final, no llegan a juicio.

Soy capaz de empatizar y ponerme en el lugar de una persona que es objeto de una de estas causas, y que tiene que seguir entrando en su consulta o en el quirófano todos los días con esa carga psicológica,

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pero también debo pedir que se entienda que la garantía de las actuaciones judiciales implica que se puedan desarrollar con las pruebas adecuadas. Estas últimas, cuando son periciales, resultan complejas e incrementan la duración.

En los asuntos penales, a las sentencias condenatorias de los médicos se suma su inhabilitación. ¿Estamos ante un castigo adicional? ¿Cree que está justificado?

Creo que no hay un castigo adicional a los médicos en una sentencia condenatoria.

Al margen de que se trata de muy pocos casos, es importante tener claro que no es algo diferente a lo que ocurre con los magistrados, los notarios, los abogados u otros profesionales. ¿La presión judicial en la vía penal no puede ser contraproducente y llevar a la medicina defensiva?

Es cierto que la medicina defensiva existe y está presente desde hace muchos años, pero yo no la achacaría a la presión judicial. Existen otros elementos que tienen más importancia en este ámbito, como el acceso a contenidos sobre medicina a través de internet por parte del paciente o sus exigencias y actitud ante el personal facultativo. Todo ello influye más en la medicina defensiva que la presión judicial.

Las agresiones a los profesionales sanitarios, en general, y a los médicos, en particular, van en aumento. ¿En clave judicial, se puede hacer algo más de lo que se está haciendo?

Las agresiones al personal sanitario son un efecto completamente indeseado en la actividad sanitaria. No pueden justificarse de ninguna manera y, si acaso, tal vez es posible explicarlas debido al exceso de esperanza que muchas personas depositan en la actuación del médico, porque tendemos a relativizar la enfermedad y a pensar que todo tiene cura o se soluciona a través de la cirugía. Hay que saber canalizar la frustración en lugar de caer en las agresiones. No obstante, creo que, en

“LOS JUECES Y JUEZAS DE GALICIA ESTÁN CUMPLIENDO CON SU LABOR HASTA EL LÍMITE DE SU ESFUERZO MÁXIMO”

entrevista estos supuestos, que se están llevando a través del delito de atentado, existe una respuesta judicial adecuada. No podemos pensar que los jueces van a eliminar las agresiones, sino que debemos trabajar para crear unas condiciones apropiadas y que este tipo de presiones sobre el personal sanitario desaparezcan.

El uso del Turno de Oficio con letrados de libre designación para la presentación de demandas contra los médicos. ¿Estamos ante una práctica irregular en tanto en cuanto el demandante no asume ningún riesgo?

En primer lugar, me cuesta creer que la abogacía, otra de las maravillosas profesiones que existen, se preste a actividades que ponen de manifiesto un fraude. Entiendo que, cuando se accede a la prestación de los servicios de un abogado o abogada con carácter gratuito, existe un doble filtro.

Primero, que tiene que ser acordado como tal, y segundo, que la viabilidad o prosperidad de la acción va a ser examinada por el letrado. El hecho de que el ejercicio de la denuncia quede impune “económicamente” también forma parte, de alguna manera, de la grandeza de la profesión. En realidad, para denunciar a un médico o a muchos otros profesionales no hace falta nada más que escribir un papel y ponerlo en la mesa del juez. Ni siquiera sería necesario contar con los servicios de un abogado.

“EN LOS PRÓXIMOS MESES, PUEDE HABER UN GRAN AUMENTO DE ASUNTOS EN MATERIA MERCANTIL Y SOCIAL” “ALGUNAS ACTUACIONES JUDICIALES ESTÁN LLAMADAS A SER LARGAS POR NATURALEZA. EN CONCRETO, TODAS AQUELLAS EN LAS QUE ESTÉ INCLUIDO EL PERSONAL MÉDICO” “ES CIERTO QUE LA MEDICINA DEFENSIVA EXISTE Y ESTÁ PRESENTE DESDE HACE MUCHOS AÑOS, PERO YO NO LA ACHACARÍA A LA PRESIÓN JUDICIAL”

No obstante, esas prácticas son denunciadas por algunos letrados que defienden a médicos Insisto en que me cuesta creer que existan conductas de ese tipo, porque conozco bien la profesión de la abogacía y su grandeza. En todo caso, tengo que señalar que cuando se produce una irregularidad en este sentido, son los colegios de abogados los que tienen que actuar, incluso antes de que los jueces puedan poner de relieve la situación.

Los médicos y sus representantes legales vienen reclamando, desde hace años, un baremo específico de indemnizaciones en materia sanitaria. ¿Cuál es su opinión?

Los que nos hemos dedicado a la actividad jurisdiccional, incluyendo el ámbito sanitario, siempre hemos defendido la conveniencia de que hubiera legislaciones de valoración única, con carácter general, para muchas cosas. Por ejemplo, para que los bienes inmuebles se valoren igual a efectos de un impuesto y de otro. Y también, por

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supuesto, para que las lesiones corporales y morales no tengan una valoración diferente en función de si se ha producido en un accidente de tráfico, en un quirófano o en una refriega en la calle. Lo cierto es que ese baremo único no ha cuajado, pero también hay que entender que los jueces no podemos estar sujetos a la estricta condición de un baremo. El juez tiene la obligación de resolver lo que conoce con amplitud y de forma razonada y fundada.

Por lo tanto, debe tener herramientas en la mano con las que poder fijar criterios de indemnización según lo que ha ocurrido en cada caso.

Hablemos de incompatibilidades y de las sanciones a médicos que prestan sus servicios en el sector público y en el privado. ¿Treinta años después, la Ley gallega se adapta a los tiempos o cree que necesita ser modificada?

Como presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, debo ser muy prudente en esta materia, porque estamos hablando de asuntos que, en muchos casos, todavía están sujetos a conocimiento de los jueces. Por lo tanto, no sería correcto que yo planteara un criterio abierto sobre estas resoluciones. No obstante, parece razonable pensar que, o bien se prohíbe completamente compaginar la actividad

entrevista “LOS JUECES NO PODEMOS ESTAR SUJETOS A LA ESTRICTA CONDICIÓN DE UN BAREMO. TENEMOS LA OBLIGACIÓN DE RESOLVER LO QUE CONOCEMOS DE FORMA RAZONADA Y FUNDADA” pública y privada o, de lo contrario, tiene que facilitarse que se ejerza en los términos adecuados. Con respecto a que exista una sanción en esta materia, creo que bastaría con prohibir el ejercicio de una de las dos actividades, salvo en los supuestos de ocultación, de actividad por personas o sociedades interpuestas o de mala fe.

Excepto en estos casos, me parece que una sanción es una consecuencia indeseada.

La mediación no funciona en el Derecho Sanitario, ¿por qué?

En este momento, la mediación está creciendo, y se ha empezado a aplicar en muchas actividades de la vida, especialmente en el Derecho de Familia. Creo que la mediación en el ámbito sanitario tiene un amplísimo recorrido. En mi opinión, el conflicto que nace entre el personal y el paciente parte de un presupuesto: la falta de información y de diálogo. Rara vez existe un problema cuando entre el médico y el paciente -o su entorno- ha habido conocimiento, información y proceso dialógico correcto. Por lo tanto, en estos casos, la mediación puede generar soluciones y evitar la judicialización de conductas. En el caso de que llegue a judicializarse, la mediación intrajudicial también está dando buenos resultados. En A Coruña, concretamente, tenemos varios ejemplos que lo dejan patente.

Al hilo de la actualidad, le pido una reflexión sobre las decisiones judiciales que desautorizan algunas medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo contra la pandemia por covid-19.

Yo no hablaría de desautorizar. El juez, ante un asunto, se enfrenta a él con plenitud de conocimiento. En mi opinión, pensar que cualquier resolución administrativa debe escapar al control jurisdiccional por-

“CREO QUE LA MEDIACIÓN EN EL ÁMBITO SANITARIO TIENE UN AMPLÍSIMO RECORRIDO” “PENSAR QUE CUALQUIER RESOLUCIÓN ADMINISTRATIVA DEBE ESCAPAR AL CONTROL JURISDICCIONAL POR MOR DE UNA PANDEMIA NOS LLEVARÍA A OTRA PANDEMIA TODAVÍA MAYOR” que estamos viviendo una pandemia nos llevaría a otra pandemia todavía mayor.

Significaría perder de vista instituciones del Estado de derecho que nos ha costado muchísimo conquistar, y que tal vez hoy no valoramos porque las tenemos a nuestra disposición todos los días. Debemos entender, en primer lugar, que quien conoce perfectamente la situación sanitaria de una comunidad autónoma o de un país son las autoridades sanitarias. Pero también que estas últimas dictan disposiciones administrativas que, como cualquier otra, deben estar sujetas al control judicial. Vuelvo a insistir en que no creo que se trate de desautorizar, porque en los casos más conocidos han sido cuestiones de matiz. También es cierto que, una vez que el juez ha resuelto, debe mantener una posición de tacto y discreción, dejando que

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esa resolución quede a la interpretación o recurso de las partes y no dedicarse a explicarla en otros entornos.

Las aplicaciones informáticas que localizan a las personas infectadas por la covid-19. ¿En qué medida son seguras y no agreden la confidencialidad de las personas?

Desconozco la parte que tiene que ver con la seguridad de las aplicaciones dirigidas a establecer las posibilidades de contagio de la covid-19, pero creo en su utilidad. Estas herramientas permiten realizar muchas de las actividades de la vida diaria que, de otra forma, sería imposible hacer.

Si estuviésemos confinados en nuestras casas durante meses no necesitaríamos aplicaciones informáticas ni ninguna otra herramienta. Si existen es, precisamente, para facilitar que podamos desarrollar una actividad que sea lo más normal posible.

En mi opinión, el uso de las aplicaciones se mantiene bajo las condiciones adecuadas de secreto y confidencialidad, por lo que no creo que tengamos que rechazarlas en base a ello. Además, en el caso de que se produjeran quiebras en la confidencialidad, el Derecho cuenta con los instrumentos adecuados para responder.

Sigo con este asunto. A muchos nos preocupa el uso masivo de las TIC y su confidencialidad en la relación médico paciente: consultas telefónicas, acceso a la historia clínica electrónica. ¿Cuál es su opinión?

Cuando pensamos en la confidencialidad de la relación médico-paciente y las utilidades de las que disponemos actualmente -como la atención telefónica, la historia clínica, que todos podemos llevar en nuestro teléfono móvil, o muchas otras aplicaciones-, no debemos olvidar que,

entrevista “EN MATERIA JUDICIAL OCURRE LO MISMO QUE EN LA MEDICINA: DIFÍCILMENTE SE PUEDE PREDECIR LO QUE VA A OCURRIR SIN VER AL PACIENTE”

“EN MI OPINIÓN, EL USO DE LAS APLICACIONES INFORMÁTICAS (PARA LUCHAR CONTRA LA COVID-19) SE MANTIENE BAJO LAS CONDICIONES ADECUADAS DE SECRETO Y CONFIDENCIALIDAD” hasta hace poco tiempo, íbamos al hospital y veíamos carros llenos de historias con nombres a la vista o con tarjetas rojas de pacientes con VIH. También se hacían llamamientos a personas con su nombre y apellidos en consultas donde su presencia podría resultar peculiar. Todo el mundo veía estas cuestiones como algo normal.

Es verdad que, en la actualidad, a través de una consulta telefónica, cualquiera puede hacer una llamada haciéndose pasar por otra persona y que el médico, de buena fe, le cuente su problemática. Sin embargo, el sistema cuenta con ciertas garantías. Por ejemplo, es el paciente el que tiene que facilitar un teléfono y darlo de alta en el sistema para que el médico le llame después. También es posible que alguien que tenga acceso a la clave de nuestro teléfono y de la aplicación É-Saúde pueda acceder a al historial, pero tenemos que pensar que eso es justamente lo mismo que sucede con las aplicaciones de banca electrónica para teléfonos móviles, y todos creemos que son útiles. Creo que las tecnologías de la información y la comunicación mejoran nuestra calidad de vida y nuestras posibilidades.

Si una persona se ha hecho una analítica y simplemente quiere comprobar con el médico que todo está bien, me parece mucho mejor que lo haga a través del teléfono en lugar de acudir a un centro de salud y tener que esperar. Insisto: cualquier aberración o quiebra del sistema tiene respuesta, por lo que en mi opinión es favorable.

“NEGAR LA PANDEMIA SE QUEDA FUERA DE LOS ELEMENTOS QUE ESTÁN A DISPOSICIÓN DE TODAS LAS SOCIEDADES CIENTÍFICAS, LA OMS Y LOS SERVICIOS SANITARIOS” El Colegio Médico de A Coruña ha advertido seriamente a los facultativos negacionistas de la pandemia y ha anunciado “que procederá a la apertura de información previa contra los colegiados que incurran en tales acciones, y en su caso, a la posterior incoación de expediente disciplinario por presuntas infracciones del Código de Deontología Médica”. ¿Qué recorrido judicial pueden tener las denuncias que se presenten contra ellos?

La negación de la pandemia responde a un derecho fundamental: la libertad de expresión, que permite que cada uno exprese su opinión. Sin embargo, cuando estamos hablando de cuestiones científicas, hay ciertos elementos que son preponderantes: la formación y la información, que son muy diferentes a la opinión. Yo

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no puedo tener la misma opinión sobre cómo hacer un trasplante cardíaco que un cirujano de esa especialidad. Si yo discuto con él en esa materia, la cuestión no puede resolverse, simplemente, diciendo que cada uno tiene su propia opinión. Él tiene la formación y la información y, por lo tanto, su criterio está muy por encima del mío. Aunque yo no soy médico, creo que negar la pandemia en este momento se queda fuera de los elementos que están a disposición de todas las sociedades científicas, la Organización Mundial de la Salud y los servicios sanitarios. Se genera un daño innecesario y unas expectativas altamente peligrosas en la población que puede recibir ese tipo de noticias. El hecho de que la negación se haga por parte del personal médico puede suponer la consecuencia que el Colegio ha advertido, pero la respuesta judicial es la misma que tendría, por ejemplo, un expediente disciplinario o una sanción: un proceso administrativo contradictorio y un recurso contenciosoadministrativo posterior en el que la resolución colegial sería analizada.

Algunos no solo niegan la pandemia, sino que predican que no se deben aceptar las medidas dictadas por las autoridades gubernativas o se oponen a las vacunas. Si eso llegara a los tribunales, ¿serian conductas reprochables?

Creo que no es posible plantear en abstracto el recorrido que va a tener una denuncia de ese tipo en un tribunal o fiscalía, porque faltan datos que son esenciales. Por ejemplo, ¿la vacuna contra la covid-19 va a ser obligatoria o voluntaria? En el caso de que fuera voluntaria, no habría recorrido judicial posible. Por lo tanto, en esta materia habrá que esperar a ver la proyección concreta de cada caso y, luego, resolver. En materia judicial ocurre lo mismo que en la medicina: difícilmente se puede predecir lo que va a ocurrir sin ver al paciente. De la misma forma, aquí hay que ver el caso concreto que se pone delante del juez para conocer la respuesta que va a tener.

Breves

José Cuenca, nuevo director médico del Hospital San Rafael El doctor José Cuenca Castillo (Almansa, Albacete, 1962) es el nuevo director médico del Hospital San Rafael, cargo en el que sustituyó, tras su jubilación, a Antolín Rodríguez. El doctor Cuenca es una autoridad en el ámbito de la cirugía cardíaca, en la que lleva trabajando 32 años. De ellos, 27 lo hizo en el Chuac, donde fue jefe de sección y coordinador de trasplantes y, en los últimos 12 años, jefe de servicio.

José Cuenca conoce muy bien su nueva casa con la que venía colaborando los tres últimos lustros y donde montó el Servicio de Cirugía Cardíaca. Llega, según declara, “con la ilusión de afrontar nuevos retos profesionales”.

Una de sus metas es “captar a los mejores profesionales”. Y ello sin relegar su gran pasión: la cirugía. “Ahora –apunta- le voy a dedicar más tiempo en el San Rafael. Aquí estoy más relajado y veo a mis pacientes tres veces al día”. Desde mayo,

tras el confinamiento, ha realizado diez intervenciones.

Su nueva responsabilidad le exige una nueva visión de la medicina, una visión global de las diferentes especialidades médicas. Una exigencia que califica de “enriquecedora”.

José Cuenca

Aplazado el XIII Encuentro Médico La Junta Directiva de nuestro Colegio acordó, en su reunión del pasado 8 de septiembre, aplazar hasta nueva fecha los actos que tenía programados debido a la alerta sanitaria provocada por el SARS-CoV-2.

La decisión afecta a la decimotercera edición del Encuentro Médico, que estaba previsto que se desarrollara en el paraninfo de la Universidad de A Coruña. El programa tam-

bién incluía una misa previa en recuerdo de los colegiados fallecidos en la iglesia conventual de los Padres Dominicos y, tras el acto central, un almuerzo de confraternidad en el Hotel Finisterre.

El evento iba a celebrarse, inicialmente, el pasado 6 de junio, pero tuvo que posponerse debido a las restricciones impuestas por el estado de alarma para hacer frente a la pandemia. La cita se trasladó

al 17 de octubre, pero los rebrotes de las últimas semanas llevaron a la directiva colegial a aplazarla de nuevo hasta que se den las condiciones adecuadas para que el acto pueda celebrarse de forma segura.

En esta edición, la Junta Directiva había decidido, por unanimidad y a propuesta de la Comisión de Honores y Premios, galardonar con la Medalla de Oro y Brillantes del Colegio a la doctora Mari-

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El nuevo directivo del Instituto Médico Quirúrgico San Rafael es un aventajado discípulo de Alberto Juffé, a quien conoció en la Clínica Puerta de Hierro de Madrid, que lo fichó para el entonces Hospital Juan Canalejo. Allí también coincidió con Gonzalo Pradas y con Alfonso Castro Veiras.

Los cuatro, junto al magnífico equipo del área del corazón del Chuac, convirtieron a A Coruña en una referencia mundial.

Según informan desde el propio centro, en 2019, el San Rafael inició “la redacción de un nuevo Plan Director para diseñar el hospital del siglo XXI”, con el objetivo de adaptarlo “a las nuevas recomendaciones de seguridad y confort para pacientes y profesionales”. Además, apuesta por la “incorporación de las nuevas tecnologías” y por “un nuevo concepto de la medicina”, aplicado por equipos multidisciplinares, “basado en la prevención y protección de la salud y en las terapias personalizadas”.

sa Crespo. Según la Comisión, la premiada, al margen de sus indudables méritos científicos y clínicos, “destaca por sus cualidades humanas y su entrega y dedicación a los pacientes. Su contribución a la mejora de la organización de la asistencia de la insuficiencia cardíaca es indiscutible, tanto en Galicia como en el resto de España”.

Además, como es tradicional, también estaba previsto entregar los títulos de colegiados de honor a los facultativos más veteranos -a los que dedicamos las siguientes páginasy de colegiados honoríficos a aquellos que se han jubilado en el último año.

Reconocimientos Benigno Vega: “He dedicado toda mi vida a la familia y a los enfermos” Benigno Vega Noverola es el colegiado más veterano de los que este año recibirán el título de colegiado de honor y la medalla de oro colegial. Nació en 1928 en Coatzacoalcos, en el estado mexicano de Veracruz.

Vino a Galicia con ocho años, y estudió Medicina en las universidades de Santiago y Madrid.

En la capital de España completó el último curso de la carrera, de carácter práctico, por consejo de su entorno, “con el objetivo de analizar en dónde haría la especialidad” de cirugía general y traumatología tras licenciarse.

Sus inicios fueron en el Hospital de la Princesa, aunque

rápidamente decidió cambiar e integrarse en el Hospital de la Cruz Roja San José y Santa Adela, donde trabajó durante una década. Primero, lo hizo “como miembro del equipo de cirugía y, después, como médico de guardia”.

Más tarde, se trasladó a A Coruña para crear su propia consulta privada y, además, ejerció “en la Seguridad Social, en el Centro Oncológico de Galicia, en el sanatorio Modelo y en Mutua Gallega”. Se jubiló en 1999, después de sufrir un ictus.

En el ámbito oncológico, el doctor Vega fue testigo del “flo-

José Suárez Camino: “El médico y el enfermo se ven poco cara a cara” José Suárez Camino (Santiago de Compostela, 1932) nació en el seno de una familia de agricultores con ocho hijos, y estudió Medicina en la USC. Tras licenciarse, “el destino de muchos médicos, por aquel entonces, era ejercer como médico de cabecera en el ámbito rural”, y él comenzó “haciendo una sustitución en Dumbría”.

Sin embargo, se enteró de que “se convocaban plazas de médico residente en el Instituto de Investigaciones Clínicas y Médicas de la clínica de La Con-

José Suárez Camino cepción, en Madrid, que tenía un gran prestigio. Yo envié mi expediente como quien juega a la lotería, porque acceder era muy difícil, pero tuve la suerte

recimiento de las radiaciones por bomba de cobalto y de la quimioterapia, que empezamos a utilizar en la década de los años 70”. La Medicina, en general, “ha experimentado un cambio radical”, asegura.

“Hoy contamos con numero-

Benigno Vega

de que me aceptaron como residente de medicina interna”.

Regresó a Santiago tres años y medio después, en 1964, “para crear mi clínica privada”.

En ese momento llegó también “un nuevo catedrático, Garrido Peralta, al que le propuse crear una sección de aparato respiratorio en el hospital. Para ello, adquirimos material que no había en Galicia, como un espirómetro, un gasómetro y respiradores con capacidad de ventilación asistida”. El doctor Suárez Camino fue nombrado “jefe de la sección, que se enmarcaba dentro de Medicina Interna”. Después, solicitó la excedencia en el hospital y se integró en el centro de salud Concepción Arenal -donde tenía una plaza como médico de Asistencia Pública Domiciliaria- hasta su jubilación, en el 2002.

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a saúde de galicia

sas técnicas y medicamentos de los que antes carecíamos.

Recuerdo cuando se empezó a tratar a los enfermos con cisplatino, que era una bomba. Un paciente con cáncer decidió no continuar con el tratamiento debido a las terribles molestias que le producía”.

En cuanto a la relación médicopaciente, “en nuestros tiempos era directa y personal. El enfermo se convertía en un amigo, porque nos volcábamos en ayudarlo a pesar de estar muy limitados en los productos con los que contábamos”.

Benigno Vega se muestra “muy agradecido con la Junta Directiva y con su presidente” por la concesión del título de colegiado de honor, “que creo no merecer, porque no he sido científico. He dedicado toda mi vida a la familia y a los enfermos”.

Al margen de la medicina asistencial, otro de los frentes a los que dedicó su vida fue “la lucha contra el tabaco”, y fue fundador “de la sección de tabaquismo de la Sociedad Española de Patología Respiratoria”.

José Suárez Camino echa de menos, en la Medicina actual, “hablar más con el enfermo. No se da valor a lo que pueden decir los pacientes, a los que les gusta ser escuchados”. Antes, la atención se basaba “en la historia e inspección clínica, que era algo fundamental, y la relación era casi familiar. Hoy en día, por desgracia, el médico y el enfermo se ven poco cara a cara” debido, en parte, “a la aparición de técnicas de imagen como el TAC, la resonancia magnética, el PET o las ecografías. El doctor atiende al ordenador, y apenas mira al paciente a los ojos”.

reconocimientos

Antonio Concheiro: “Es necesario un poco más de humanidad y dedicar tiempo al enfermo” Antonio Concheiro Carro (Ordes, 1936) es hijo de médico, y su sueño “siempre fue trabajar como cirujano en el sanatorio fundado por mi padre”. Se licenció en la universidad compostelana y conoció de cerca la medicina rural, aunque pronto se fue a la Fundación Jiménez Díaz. “Allí me encontré con una cirugía de guerra en la que, como mucho, utilizábamos raquianestesia”, afirma.

En la capital de España también se presentó a las oposiciones de Beneficencia Municipal, lo que le valió para ejercer en el

Hospital Labaca de A Coruña.

Más tarde, en esas instalaciones se creó el Centro Oncológico Regional de Galicia, “del que yo fui uno de los fundadores y en el que me nombraron jefe del Servicio de Cirugía”.

Después, se trasladó al Hospital Provincial de Santiago, “donde pasé 50 años de mi vida en los que hice mucha cirugía”. Desde su regreso a Galicia, siempre compaginó la actividad en los centros hospitalarios con la atención en el sanatorio de Ordes, en el que, a día de hoy, sigue pasando consulta. En su opinión, “tener

Antonio Concheiro actividad es fundamental. De lo contrario, estaría muerto”.

En la era de la Medicina tecnificada, “en la que todo son ordenadores”, profesionales

como el doctor Concheiro Carro quedaron “desplazados”, porque con las operaciones laparoscópicas “en muchas ocasiones ya no es necesario abrir”. No obstante, “sigo sentándome con los enfermos, escuchándolos y viéndolos, que es lo más importante. Cada vez que voy al hospital, me llevan los demonios cuando veo que el médico está mirando al ordenador en lugar de al paciente”.

En las últimas décadas, “hemos avanzado mucho en todo lo que respecta a los medios de diagnóstico, pero también hay que reconsiderar ciertas cosas.

Es necesario un poco más de humanidad, dedicar tiempo al enfermo y hablar con él”.

Recibir la medalla de oro del Colegio, asegura, “es un orgullo. Todavía recuerdo cuando entré en sus instalaciones para colegiarme”, y el hecho de que ahora le entreguen la insignia “supone un honor enorme”.

reconocimientos

Ramón Barca: “Estoy muy ilusionado por recibir el título de colegiado de honor” Ramón Barca Blanco nació en Santiago en 1931. Se licenció en Salamanca, donde también se especializó en otorrinolaringología con el doctor Cañizo. Después, se marchó a Buenos Aires durante un año para continuar aprendiendo en la escuela del doctor Tato -uno de los mejores del mundo- y, a continuación, regresó a Compostela.

Cuando se estableció en Santiago, en 1962, el doctor Barca modernizó la otorrinolaringología que se hacía en la ciudad con los conocimientos que había adquirido en el exterior. En su consulta “hacía todo lo que era posible en aquel entonces, como la laringectomía supraglótica, con la que se conservan las cuerdas vocales”. Gracias a

ello, “en unos meses me abrí camino”. Además, compaginó su actividad privada, que llevaba a cabo por las tardes, con el ejercicio en el Hospital Xeral de Galicia, hasta que se clausuró para trasladar toda su actividad al Clínico, momento que coincidió con su jubilación.

Desde su punto de vista, la otorrinolaringología “ha vivido una evolución increíble: ahora se hacen muchas cosas que en el pasado resultaban imposibles”. Las broncoscopias y esofagoscopias, por ejemplo, “se realizan con aparatos totalmente diferen-

Ramón Barca

Francisco González: “Lo más importante es que continuamos vivos tras la pandemia” Francisco González Ruiz es natural de Lorca (Murcia), donde nació en 1933. Completó los tres primeros cursos de Medicina en Madrid, antes de trasladarse a Santiago de Compostela para terminar la carrera. Durante su etapa universitaria fue alumno residente de Farmacología y, tras licenciarse con sobresaliente, ganó una plaza por oposición en el Hospital de la Santa Cruz y San Pablo de Barcelona, donde trabajó dos años.

Después, regresó a Santiago para crear su propia clínica, una actividad que compaginó

con el ejercicio en el Hospital General de Galicia, en el que llegó a ser jefe del Servicio de Anestesia y Reanimación. En 1970 estuvo durante seis meses en el Nuffield Orthopaedic Centre de Oxford para aprender anestesia epidural y, en 1977, otros tantos en el Hospital Karolinska de Estocolmo.

Más tarde, obtuvo una plaza de profesor titular de Farmacología con perfil de anestesiología y fue el primer profesor de Anestesia y Reanimación en Galicia. Dirigió cuatro tesis doctorales y alrededor de 15 tesinas, además de publicar

Francisco González decenas de trabajos, impartir varios cursos de doctorado y participar en numerosos congresos nacionales e interna-

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a saúde de galicia

tes. Antes, para introducirlos, casi había que anestesiar al paciente, pero hoy en día eso no es necesario porque son mucho más flexibles”. En la actualidad “también es posible meterse en el cráneo a través de los senos frontales”. Otro de los aspectos que destaca de la atención médica actual es el historial clínico digital, “con el que toda la información está disponible desde el ordenador”.

El anuncio de que recibiría la insignia de oro colegial “me ha sentado de maravilla”, afirma. “Estoy muy ilusionado por recibir el título de colegiado de honor. Por fin se acuerdan de mí”. En su opinión, “esta es una iniciativa fabulosa del Colegio Médico”.

cionales. Se jubiló en el 2001.

Echando la vista atrás, el doctor González Ruiz recuerda que, en sus comienzos profesionales, “todavía quedaban algunos practicantes que realizaban anestesias”, aunque esa labor fue asumida, cada vez más, por los especialistas.

“Aparecieron una serie de fármacos, como los barbitúricos o los curarizantes -relajantes musculares que permiten abrir un abdomen, por ejemplo, sin que las tripas salgan-”, que requerían “conocimientos farmacológicos, de los que carecían los practicantes”.

Ante la concesión del título de colegiado de honor, el facultativo asegura que el mayor mérito de quienes van a recibir el homenaje “es que, con más de 80 años cumplidos, el coronavirus no nos ha llevado por delante. Lo más importante es que continuamos vivos tras la pandemia”.

Deontología Nueva Comisión de Deontología y Ética Médica Se incorporarán a su seno Rosendo Bugarín, Miguel Ángel Cadenas, Leticia Hermida, Sonia Marcos, Alexandra Regueiro y Felipe Trillo Por Víctor Porto El próximo 29 de septiembre, la Comisión de Deontología y Ética Médica de nuestro Colegio renovará su composición con la incorporación de seis nuevos miembros. El organismo acogerá en su seno, por primera vez, a Rosendo Bugarín -médico de familia-, Miguel Ángel Cadenas -expresidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia-, María Leticia Hermida -médica de familia-, Sonia Marcos y Alexandra Regueiro -pediatras- y Felipe Trillo -médico de familia-.

Además, siguen formando parte de la Comisión el teólogo José Ramón Amor Pan, el ginecólogo Roque Devesa, el bioquímico clínico Fernando Domínguez, la oncóloga Begoña Graña, el ginecólogo jubilado Javier Martínez Pérez-Mendaña, el neumólogo

Jesús Moreno, la psiquiatra Luisa Fernanda Peleteiro y el otorrinolaringólogo Juan Carlos Vázquez Barro. En total, la Comisión contará con catorce integrantes, y tras la toma de posesión se elegirá a su presidente, vicepresidente y secretario.

En el próximo número de A Saúde de Galicia informaremos pormenorizadamente de estos nombramientos.

Han causado baja los doctores Barón, Diz-Lois, Fernández Pretel, Márquez, Molíns y Palacios, y el magistrado jubilado Carlos López Keller

Carlos López Keller

Fernando Márquez

Francisco Barón

Carmen Fernández Pretel

En la nueva composición ya no estarán presentes los doctores Francisco Barón, Fernando Diz-Lois, Carmen Fernández Pretel, Luis Fernando Márquez, Nieves Molíns y Margarita Palacios, y tampoco el magistrado jubilado Carlos López Keller. El Colegio agradece a todos ellos su labor de velar por la calidad de la práctica profesional de los médicos de nuestra provincia.

La Comisión de Deontología y Ética Médica, que se reúne una vez al mes, es la esencia de cualquier institución colegial.

Los colegios surgieron para acreditar ante la ciudadanía que los profesionales que están adscritos a ellos reúnen las condiciones necesarias para ejercer, y velan por el cumplimiento de las normas deontológicas. Esta labor se lleva a cabo a través de la Comisión, que se dedica a evaluar

actuaciones de profesionales que pueden haber ido en contra del Código Deontológico.

La Comisión es un organismo plenamente autónomo.

Mantiene una relación muy fluida con el Colegio, pero este último no puede intervenir en las decisiones que adopta. La Junta Directiva debe tomar la decisión final para sancionar a los colegiados en el caso de que se produzca una falta deontológica, pero es la Comisión la que emite la propuesta de sanción.

Por eso es tan importante que sea independiente, para evitar injerencias.

Continúan J. R. Amor Pan, R. Devesa, F. Domínguez, B. Graña, J. Martínez Pérez-Mendaña, J. Moreno, L. F. Peleteiro y J. C. Vázquez Barro Con la llegada de la pandemia por covid-19, probablemente las cuestiones más acuciantes tengan que ver con el final de la vida y la asignación de recursos, dos temas de máxima actualidad. Los médicos deben plantease cómo gestionar recursos limitados de forma justa y sin discriminar a personas o colectivos. Otra cuestión importante será estudiar cómo compatibilizar el interés general con el principio de autonomía del paciente.

Fernando Diz-Lois

Margarita Palacios

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a saúde de galicia

Nieves Molíns

Innovación

Apuesta por el conocimiento A finales de junio se celebró la segunda sesión de presentación de iniciativas que favorezcan el proceso asistencial durante la pandemia Por Daniel Viña Nuestro Colegio continuó con el desarrollo de su programa de ayudas para la generación de conocimiento en torno a la covid-19, que se puso en marcha a comienzos del pasado mes de junio para favorecer el proceso asistencial. El 29 de ese mismo mes se celebró la segunda sesión de presentación de proyectos que optaban a recibir financiación, en la que participaron cuatro grupos.

La primera en exponer su propuesta fue Mercedes Castaño, recién graduada en Medicina.

La idea para su iniciativa -que también le sirvió para elaborar su trabajo de fin de grado- surgió durante su período de rotación en el servicio de Reumatología del Chuac, y consiste en “buscar alternativas para mejorar la movilidad de los pacientes con problemas del aparato musculoesquelético y evitar la necesidad de asistir a los centros sanitarios debido a los problemas ocasionados por la pandemia”. Además, entre sus metas también está “ofrecer información segura y fiable sobre la realización de ejercicios físicos para mejorar el bienestar de la comunidad”.

Para conseguirlo, su planteamiento consiste en rentabilizar los recursos que ya están disponibles en los parques de la ciudades y pueblos. El objetivo es “facilitar recursos didácticos

que permitan el conocimiento, acceso y correcta utilización de parques biosaludables”, empezando por los de A Coruña.

Estos espacios verdes “están formados por diferentes aparatos con los que desarrollar las capacidades motoras, y son reconocidos por la población como un elemento que genera salud”.

Según explicó, “para poder utilizar estos activos es imprescindible conocer dónde se encuentran, por lo que se realizó un mapeo de todos los disponibles en la ciudad herculina para que, desde la consulta, se pueda recomendar el más adecuado”.

Otro aspecto importante “es saber cómo utilizarlos correctamente, por lo que se elaborará una guía en vídeo con los ejercicios básicos que se pueden practicar en los parques”. La primera fase se corresponde con el calentamiento, después, se pasa al ejercicio con los aparatos y, por último, se termina con el enfriamiento y estiramiento.

El proyecto también contempla “la creación de una página web abierta a la población, donde se incluirá toda la información recogida para animar a que los visitantes mejoren su estado físico”. Además, “sería pertinente facilitar el acceso a la página y a los vídeos a través de códigos QR, que se podrían colocar en los aparatos para consultar, a

Emiliano Fernández Obanza

“Necesitamos crear una estructura informática que, además, podría emplearse para otras aplicaciones y proyectos formativos futuros”

EMILIANO FERNÁNDEZ-OBANZA través del teléfono móvil, cómo debe utilizarse cada uno”.

A continuación, tomó la palabra Emiliano Fernández-Obanza, cardiólogo del Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol, que propuso el desarrollo de un curso de electrografía básica online. Para poder hacerlo, aseguró, “necesitamos que un experto cree una estructura informática que, además, podría emplearse para otras aplicaciones y proyectos formativos futuros, poniéndolo a disposición de todo el que lo necesite”.

La plataforma “cuenta con

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a saúde de galicia

vídeos explicativos, documentos con la información y, al final de cada tema, un test de autoevaluación con preguntas seleccionadas para reforzar los conocimientos adquiridos”.

Después de contestar a las cuestiones, “las respuestas pueden revisarse a través de comentarios en texto e imágenes”. De esta forma, “pretendemos que el proceso sea más interactivo para ayudar a que los usuarios aprendan, que es nuestro objetivo principal”. En total, “el curso cuenta con alrededor de dos horas de vídeo grabadas” y, al terminarlo por completo, se accede a una evaluación final con 27 preguntas.

La fisioterapeuta Estíbaliz Díaz fue la siguiente en tomar la palabra en representación de Carlos Peña, cardiólogo del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago. Su iniciativa consiste “en una adaptación semidigital de un programa de rehabilitación cardíaca para pacientes con cáncer de mama bajo quimioterapia cardiotóxica”, denominado Oncore, que lleva en funcionamiento desde mediados de 2018.

Debido a la pandemia por SARS-CoV-2, “nos hemos visto forzados a adaptar los procedimientos asistenciales y los recursos, y también a cancelar las sesiones presenciales”. Por esa razón, su equipo decidió desarrollar un programa semidigital que las pacientes puedan continuar ejercitándose de forma segura, y así evitar que a los efectos del tratamiento se sume la inactividad física y el aislamiento social.

Para conseguir su objetivo, en primer lugar, plantearon la creación de material educativo específico impreso y en formato digital en el que se incluya “una guía con recomendaciones

Innovación “Proponemos la adaptación semidigital de un programa de rehabilitación cardíaca para pacientes con cáncer de mama bajo quimioterapia cardiotóxica” ESTÍBALIZ DÍAZ

y pautas de ejercicio físico para mujeres con cáncer de mama y otros condicionantes específicos que requieren de un abordaje adaptado a sus necesidades”.

También tienen previsto crear “elementos multimedia educativos para ilustrar y apoyar la guía”, además de incluir “recomendaciones para un estilo de vida saludable”.

Otro de sus propósitos consiste en crear material gráfico para el seguimiento y control del programa, con una “agenda de registro del ejercicio físico para favorecer la adherencia a la intervención y tener la posibilidad de monitorizar su cumplimiento, con propuestas de ejercicio cardiovascular, de

Mercedes Castaño

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Estíbaliz Díaz fortalecimiento muscular y de flexibilización y relajación”. Por último, la difusión del proyecto pasa por “crear material gráfico y multimedia”, con “infografías, posters, trípticos y diverso material”. Con ellos se dará a conocer el programa “tanto entre los pacientes como entre los profesionales sanitarios implicados en su cuidado”.

La última en intervenir fue Violeta González, también facultativa del Servicio de Cardiología del Chus, que se refirió a un proyecto de “creación de herramientas de soporte didáctico para pacientes con enfermedad valvular cardíaca”. Según explicó, “la crisis sanitaria desencadenada por la covid-19 ha propiciado un cambio en los modelos asistenciales, con fórmulas semipresenciales, uso de herramientas tecnológicas y

“Buscamos alternativas para mejorar la movilidad de los pacientes con problemas musculoesqueléticos y evitar la asistencia a centros sanitarios” MERCEDES CASTAÑO

promoción de la autogestión de la salud”. Todo ello requiere “de una dotación suficiente de recursos que sirvan de apoyo” para profesionales y enfermos.

En este sentido, “los pacientes con enfermedad valvular cardíaca constituyen un grupo muy vulnerable, porque son crónicos y, habitualmente, de edad avanzada, con comorbilidades y con riesgo de descompensación”. Para llegar a esta población, es necesario contar con un “soporte educativo suficiente y adoptar una perspectiva global en su manejo. Es muy importante que sean conscien-

Violeta González tes de los síntomas de alarma y de los cuidados específicos para prevenir complicaciones propias de su edad”.

El objetivo de su equipo consiste en “desarrollar un conjunto de herramientas que sirvan para aumentar el conocimiento de la enfermedad por parte de facultativos y pacientes y afrontar, de forma óptima, la preparación integral y la rehabilitación en caso de ser intervenidos”. Para ello, su propuesta se basa en dos pilares.

El primero consiste en “crear material educativo para que los

pacientes puedan reconocer y actuar adecuadamente ante síntomas de alarma específicos de su patología” a través de “un cuaderno del paciente con enfermedad valvular, tanto impreso como en formato online”. En él se incluirían “cuidados específicos, explicaciones sobre la patología, cómo actuar ante la presencia de síntomas de alarma y qué pueden hacer los pacientes para minimizar los síntomas y llegar en las mejores condiciones posibles a la intervención”.

El segundo eje de la propuesta gira en torno al desarrollo de

“Es importante que los pacientes con enfermedad valvular cardíaca conozcan los síntomas de alarma y los cuidados específicos para prevenir complicaciones” VIOLETA GONZÁLEZ

“recursos formativos que guíen a los pacientes en la preparación para llegar a la operación -y a la recuperación posterior- en las mejores condiciones posibles de salud y función física”. En este apartado se contempla la “creación de trípticos y fichas impresas y de vídeos demostrativos con los que favorecer la prehabilitación y la rehabilitación no presencial”.

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MIR El futuro de los médicos internos residentes En una sesión virtual se abordó el nuevo sistema telemático de elección de plazas, los cambios en la formación y la necesidad de internacionalizarse Por Daniel Viña Nuestro Colegio continuó, en los últimos meses, con su apuesta por los webinars, que comenzaron durante la crisis sanitaria producida por la pandemia de covid-19. El 10 de junio, el encuentro digital se tituló El MIR del siglo XXI. Visión actual y de futuro, y en su transcurso se abordaron la nueva metodología telemática empleada este año para la selección de plazas MIR, la formación médica especializada, el posicionamiento de la Organización Médica Colegial sobre las especialidades y la internacionalización de la formación.

La sesión fue presentada por el presidente del Colegio, Luciano Vidán, y la introducción corrió a cargo del vicepresidente, Javier de Toro. Como ponente intervino Tomás Cobo, vicepresidente primero del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España, y en el coloquio -moderado por Patricia Conde, vocal del colegio coruñés, y Rosa Arroyo, vicesecretaria general del CGCOM-, participaron Francesc Feliu, representante nacional de Médicos Tutores y Docen-

tes y Antonio Pujol de Castro, presidente del Consejo General de Estudiantes de Medicina.

El doctor Vidán afirmó que “desde nuestro Colegio y desde el Consello Galego de Colexios Médicos siempre hemos dado una gran prioridad a todo lo que tiene que ver con el programa MIR, tanto con respecto a los tutores como con lo relacionado con el sistema de formación”. Por esa razón, “cada cierto tiempo organizamos jornadas en las que abordamos este tipo de cuestiones.

También es una materia recu-

rrente dentro de la Organización Médica Colegial, donde tenemos numerosos debates al respecto”. El objetivo de las sesiones es que, “desde la propia profesión, podamos trasladar a

“Desde el Colegio Médico de A Coruña y el Consello Galego siempre hemos dado una gran prioridad a todo lo que tiene que ver con el programa MIR” DR. VIDÁN

“En el siglo XXI, la atención tiene que ser multidisciplinar, pero el liderazgo clínico debe recaer sobre el médico” TOMÁS COBO

“Las especialidades deberían durar entre cinco y seis años. El conocimiento se ha ampliado mucho y el tiempo de formación se ha reducido” TOMÁS COBO

Tomás Cobo

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a saúde de galicia

Luciano Vidán las autoridades competentes las mejoras y necesidades que consideramos que deben incorporarse a la formación de los médicos internos residentes”.

A continuación, Javier de Toro hizo un breve repaso a la historia del programa MIR. Empezó hablando de José López Muñiz, presidente de la Diputación de Oviedo entre 1957 y 1970. En la década de los años 60, “además de trasladar el hospital provincial de ubicación, tuvo la idea de transformarlo, para lo que contactó con Carlos Soler, del Hospital de Infecciosos de Barcelona, que se había doctorado en Salud Pública y Dirección de Hospitales en Estados Unidos”. Soler aplicó once directrices para cambiar el hospital, entre las que se encontraban la “selección exigente de profesionales y administrativos con capacidad y experiencia demostrada, dedicación exclusiva a tiempo completo, un reglamento e instrucciones permanentes para cada parcela, control social de la actividad y coincidencia en los objetivos por parte de todos”. También abogaba por “poner al paciente como eje central de la asistencia, hacer una descripción rigurosa de todos los puestos de trabajo -utilizando revisiones comparativas con centros de referencia-, enseñar todo lo que se supiera hacer bien, valorar permanentemente el sentir de los usuarios y realizar un uso económico de los recursos”.

MIR Francesc Feliu

En 1963 se quiso replicar lo que se hacía en Estados Unidos, por lo que “se creó la primera comisión de MIR, a la que se presentaron licenciados de las once facultades de Medicina que había en España en aquel momento”. El objetivo era formar a los nuevos facultativos “de manera que aprendieran de una forma progresiva, con supervisión decreciente y supervisada por expertos competentes y con tiempo para realizar esta labor”. Así “fue la génesis del sistema MIR que conocemos”.

Al año siguiente, José María Segovia de Arana, catedrático de Patología Médica de la Universidad de Santiago de Compostela, tomó la dirección del hospital Clínico de Madrid.

Con el tiempo, se convirtió en otra de las personas clave para el desarrollo del MIR porque, siendo decano de la Facultad de Medicina de la capital de España, firmó un concierto con todos los hospitales públicos de Madrid y desarrolló la parte práctica para el médico interno residente”. Más tarde, en 1968, nueve centros sanitarios del todo el país constituyeron “el seminario de hospitales”, que defendía la formación de residentes con un programa específico y en centros con médicos expertos y acreditados”. Cada hospital “hacía su convocatoria. En 1972, el Ministerio decidió hacer la suya y, en 1978, nació la oferta pública que todos conocemos”.

El vicepresidente primero del Colegio animó a los residentes a salir al extranjero para conocer otras formas de hacer las cosas. “Como vemos, hace muchos años, unos compañeros que habían estado fuera quisieron emular en nuestro país los aspectos positivos de la formación sanitaria que habían conocido en Estados Unidos”.

También aseguró que el tipo de examen para acceder a la residencia, “que es muy teórico, condiciona los estudios de pregrado, por lo que habría

“Estoy totalmente en contra de que las áreas de competencia específica se encuadren dentro del período MIR” FRANCESC FELIU

que reflexionar sobre esta cuestión”.

Además, “los profesionales se adaptan al entorno en el que se encuentran, por lo que es necesario crear uno favorable para que puedan copiar las virtudes” de buenos modelos.

“Es necesario que las unidades docentes cuenten con referentes sólidos para la formación y una cartera de servicios robusta. La excelencia clínica, formativa e investigadora es una base fundamental para que los residentes se formen de manera adecuada”. También se refirió a los tutores, “con los que tenemos una gran deuda, porque son una figura fundamental. Gracias a su generosidad y entrega, el sistema sigue funcionando”.

Por otra parte, el doctor De Toro habló sobre las “estrategias de prevención. Tenemos que enseñar a no quemarnos, y en todas las unidades docentes debe haber políticas activas para desarrollar hábitos que permitan encontrar satisfacción en el desarrollo profesional y plantear programas de promoción de la salud, como el control del estrés y la gestión óptima del tiempo en el entorno médico”.

En un mundo digitalizado, “todo cambia muy rápido”, aseguró. La inteligencia artificial, por ejemplo, “facilita, en ocasiones, unos diagnósticos más eficaces que los de los propios médicos. Tal vez dentro de poco los pacientes prefieran obtener una valoración a través de un robot”. Los patrones de las enfermedades también varían, y el facultativo se pre-

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guntó si “estamos formando el perfil profesional que necesita nuestra sociedad”, que pasa por “trabajar de forma multidisciplinar, priorizar la seguridad del paciente y poseer competencias dinámicas”.

Tomás Cobo tomó la palabra para explicar a los recién graduados el funcionamiento del nuevo sistema de adjudicación MIR y reflexionó sobre el futuro de la medicina. “En el siglo XXI, la atención tiene que ser multidisciplinar, pero el liderazgo clínico debe recaer sobre el médico. Estas son dos de las claves de la nueva formación especializada”, apuntó.

“Es necesario que las unidades docentes cuenten con referentes sólidos para la formación y una cartera de servicios robusta” JAVIER DE TORO

Javier de Toro

a saúde de galicia

Este año, el procedimiento para asignar las plazas pasó a realizarse de forma telemática como consecuencia de la pandemia. “Esto no es algo nuevo”, aseguró, “sino que ya se hacía en el caso de compañeros extracomunitarios y de otras profesiones sanitarias”. Además, el ponente apuntó que los candidatos “pueden hacer varias veces el proceso, y tienen la posibilidad de cambiarlo hasta el último instante, siempre que se haga hasta un máximo de doce horas antes del período en el que le corresponde la selección de la plaza”.

Al nuevo sistema se le recriminó que “se hizo muy rápido y sin contar con los agentes pertinentes”. La explicación del Ministerio sobre este asunto, “que tiene cierto sentido, es que la pandemia obligó a tomar decisiones veloces”. Además, entre los miedos que despierta el método telemático está, por ejemplo, “qué hacer si se cae la conexión y se pierde la información”. Desde su punto de vista, “este problema queda bastante mitigado con el número de horas disponibles para elegir. Desde el momento en el que termina el proceso de selección de plaza de los compañeros anteriores, hay un período de entre ocho y diez horas para los siguientes, un espacio que considero suficiente”.

En este sentido, “el Colegio Médico de A Coruña ha propuesto una idea muy interesante, que consiste en que las instituciones colegiales ofrezcan su red inalámbrica y soporte tecnológico” para ayudar a los candidatos. El Ministerio tam-

MIR bién puso a disposición de los interesados “un servicio de soporte disponible los siete días de la semana durante 14 horas diarias”.

Otro de los problemas, afirmó, es que el método telemático “tampoco permite esperar para conseguir que dos personas -por ejemplo, una parejahagan la residencia juntas”.

Esto “supondría complicar mucho la seguridad del procedimiento y las combinaciones que la tecnología tendría que ser capaz de hacer”, lo que dificultaría “que el sistema estuviera disponible en tiempo y forma”. El proceso tampoco puede llevarse a cabo en tiempo real, de nuevo, “debido a una cuestión de seguridad, porque el desarrollo tecnológico para poder hacer algo así sería mucho más largo”. No obstante, “sí es posible comprobar en tiempo real lo que sucede con las plazas que ya se han elegido”.

La incorporación de los MIR, aseguró, “se producirá entre el 21 y el 25 de septiembre.

Desde el Ministerio aseguran que se podría haber hecho en agosto, pero como en período vacacional es posible que las unidades estén más desmembradas, el acuerdo general al que se llegó con las comunidades autónomas -porque la incorporación debe realizarse al mismo tiempo- consistió en trasladarla a septiembre”. Con respecto a las unidades docentes, “no se ha producido ningún cambio. En cada una de ellas se seleccionará la posición” de los residentes “en función de los criterios de la comunidad autónoma”.

A continuación, el doctor Cobo se refirió a la formación de los MIR en el siglo XXI. “En este sentido, se aprobó un Real Decreto -el 639/2014- sobre troncalidad y áreas de capacitación específica, que fue tumbado por el Tribunal Supremo en 2016”. Después de eso, “se quedó en punto muerto como consecuencia de los avatares políticos y la inestabilidad gu-

bernamental”. Sin embargo, en septiembre del año pasado, “se presentó un procedimiento de borrador de Real Decreto que, tras filtrarse, se encontró con la oposición directa de la comunidad médica, incluyendo a la Organización Médica Colegial y la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas”.

En el documento “se engloban dentro de la formación MIR las áreas de capacitación específica, algo que no tiene ninguna base desde el punto de vista clínico”.

Además, tampoco se incluye “la especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias”, por lo que “queda desencajada con respecto a la realidad europea e internacional”.

Según explicó, el Consejo General de Colegios Oficiales

“Combinar un sistema de elección de plazas MIR telemático con otro presencial daría más seguridad” ANTONIO PUJOL

Antonio Pujol

de Médicos de España “ha elaborado un informe sobre lo que pensamos que debe ser la formación especializada”. La clave está en “la adquisición de competencias y, en este sentido, es importante quién las va a evaluar y dónde y cómo se obtendrán”. En su opinión, “todas las especialidades deberían durar entre cinco y seis años, porque el conocimiento que hay que conseguir se ha ampliado mucho y, además, el tiempo de la formación especializada en el hospital se ha reducido debido a la conciliación”.

En cuanto a la internacionalización de la formación médica, Tomás Cobo recalcó la importancia de que los residentes se formen en el extranjero, para lo que abogó por “establecer una especie de programa Erasmus para MIR y fomentar el intercambio entre diferentes regiones de España”. También se refirió la posibilidad de obtener diplomas europeos de especialidad, y animó a los futuros residentes a participar en programas de cooperación y desarrollo, que “ayudan a entender la forma de trabajar en otros lugares y a entrar en contacto con la parte humana de la profesión”.

Durante el coloquio, Francesc Feliu se mostró “totalmente en contra de que las áreas de competencia específica se encuadren dentro del período MIR, y espero que se abandone la idea. Si ya se hace corta una residencia de cinco años para un cirujano general, por ejemplo, me parece imposible que, además, se pueda hacer una superespecialización en un área concreta” en ese mismo tiempo. “Para conseguir ciertas habilidades son necesarios años, y la residencia es solo el pistoletazo de salida”.

En lo relacionado con la evaluación continuada por competencias, el doctor Feliu

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a saúde de galicia

afirmó que, aunque “el MIR es un programa de éxito que no tenemos que reinventar, sí debe adaptarse a la nueva sociedad”. Hay que pensar que “ya tiene 40 años y, si no se renueva, puede morir”. Una de las posibles “adaptaciones consiste en un examen de evaluación final, con el que yo estoy completamente de acuerdo”.

Después de superar la prueba de acceso, “el residente no puede dormirse”. Por esa razón, “creo que, de una forma u otra, tendrá que establecerse un examen al final de cada año en el que demuestre lo que ha aprendido en los últimos meses, y que podría realizarse a través de un tribunal compuesto por dos o tres personas”.

Por otro lado, Antonio Pujol planteó las preocupaciones de los estudiantes con respecto a que el proceso de elección sea totalmente electrónico. “Esta decisión tenía sentido en un momento en el que la pandemia por covid-19 nos impedía salir de casa”, pero en julio el estado de alarma ya había finalizado. En su opinión, “combinar lo telemático con lo presencial daría más seguridad”.

El Consejo General de Estudiantes de Medicina presentó ante el Ministerio un documento en el que se recogían tres posibilidades: “elección presencial en el Ministerio de Sanidad -combinado con la opción de hacerlo de forma telemática-, elección presencial en las delegaciones del Gobierno de cada provincia y, por último, un sistema telemático en tiempo real”. La respuesta de la institución fue que “ya habían tomado una decisión, pero creo que deberían haber tenido más en cuenta la opinión de la profesión”. A pesar de todo, la sesión organizada por el Colegio “ha servido para resolver muchas dudas y quedarnos más tranquilos. Habrá que ver cómo funciona el sistema y esperamos aprender cosas que se puedan aplicar en los próximos años”.

Cultura Teresa Muinelo

Retratos de ausencia A través de fotografías y textos, Teresa Muinelo recordó la figura de su padre en una exposición celebrada en el Colegio Por Pilar Pérez

L

a muestra Papá, de Teresa Muinelo (A Coruña, 1982), llevó a la sala de exposiciones de la sede colegial de Riego de Agua 26 fotografías y 8 textos con los que la artista abordó la ausencia de su padre, fallecido hace un par de años. La exposición se inauguró el pasado 4 de septiembre, y permaneció abierta hasta el día 20 del

En el momento de la muerte de su padre, Teresa Muinelo estaba “realizando un proyecto sobre mis raíces y mi familia y, sin pensar, me vi haciendo fotos de lo que había quedado después de que falleciera.

Fue algo que surgió de forma instintiva”. En las imágenes se aprecian “muchas capas”, con las que se expresan los

sentimientos de la artista y las dificultades en la relación con su progenitor, en las que se ahonda a través de los textos, con una gran carga emocional.

“Mi intención es que, al verlo junto, todo cobre un sentido completo”.

Las obras de la muestra siguen una secuencia, que comienza con una instantánea “en la que se ven dos árboles y una línea de teléfono”, un reflejo del “intento para comunicarnos y de las complicaciones al respecto”. A continuación, las fotografías componen “una especie de retrato de mi padre a través de sus pertenencias y de cómo las tenía colocadas: la silla en la que solía sentarse, objetos que hacía con palos o su teléfono móvil”. También se aprecia “una fase un poco decadente -cuando su vida, prácticamente se paralizó- representada por imágenes en las que se ven manzanas tiradas en el suelo de la finca sin recoger o telarañas en sus herramientas”.

“Su trabajo como agente comercial era muy importante para él”, afirma. “Por esa razón, también se muestra una fotografía de su despacho en los momentos finales de su vida, y otra del carné de la empresa”.

La última instantánea “es la única en la que se le ve a él de

El aforo de la sala se limitó a diez personas debido a la covid-19 mismo mes. Debido a la pandemia por covid-19, y siguiendo las normas establecidas por la autoridad sanitaria para evitar contagios, el aforo de la sala se limitó a diez personas al mismo tiempo.

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a saúde de galicia

mayor”. Aparece “sentado bajo varios marcos con fotos de la familia, como si estuviera esperando”. A esa imagen “le tengo un cariño especial porque me cambió la vida: tras tomarla decidí que quería acercarme más a mi padre y la relación entre nosotros cambió”.

Teresa Muinelo, que estudió Derecho y trabaja en un juzgado, se ha sentido atraída por el arte “desde que era muy pequeña. Siempre me ha gus-

En las imágenes se aprecian “muchas capas”, con las que se expresan los sentimientos de la artista y las dificultades en la relación con su progenitor tado mucho bailar y escribir”.

Cuando retomó su faceta artística, ya de adulta, comenzó con la literatura, “aunque con las palabras notaba que las cosas no terminaban de fluir”. Hace aproximadamente una década “comencé a hacer fotos” y, unos cinco años más tarde, “decidí que quería tomármelo mucho más en serio”. En aquel momento residía en Madrid, “donde estudié fotografía en tres escuelas”. Regresó a A Coruña hace un año y medio y, ahora, acaba de comenzar la carrera de Bellas Artes a distancia.

La música “también posee peso, porque tiene un papel muy importante en mi vida y en mis proyectos”. En este caso, la inauguración contó con un recital de viola de Jeffrey Carl Johnson, que interpretó la Elegía, de Stravinsky, y un movimiento de las Suites de Bach”.

Cultura he desarrollado mi actividad como médico durante 40 años, hasta mi jubilación. Por cierto, durante un siglo, los facultativos rurales que ejercimos en mi pueblo éramos todos originarios de la comarca.

El museo está organizado en diez salas temáticas en las que se expone material médico original desde principios del siglo pasado hasta nuestros días

El Museo del Médico Rural de Maceda, un sueño hecho realidad

Su creador, el doctor José Manuel Lage, antiguo miembro de nuestro Colegio, relata en el siguiente artículo el nacimiento y desarrollo de un espacio museístico único en España Por José Manuel Lage Pariente* El objetivo de la creación del primer Museo del Médico Rural Gallego no es otro que resaltar su figura, que forma parte del patrimonio cultural de nuestra tierra y es una de las más apreciadas en este ámbito.

El médico era un vecino, amigo, confesor y psicólogo. Estaba siempre disponible, desde el nacimiento hasta el fallecimiento. Se trasladaba a caballo al domicilio del paciente por caminos a veces inhóspitos. Su

labor era silenciosa, heroica y solitaria. Disponía de muy escasos medios. Su ojo clínico era la baza más importante con la que contaba para solventar la mayoría de las patologías de sus pacientes.

Estos profesionales eran auténticos artesanos de su oficio.

Trabajaban las veinticuatro ho-

ras del día, los 365 días del año.

Su salario era muy discreto. Vivían por y para sus pacientes.

Abandonados, en gran medida, por la Administración.

Sin duda, argumentos suficientes para dedicarles un museo, y hacer gozosa realidad un proyecto que nace en Maceda, mi tierra madre y donde

El médico rural era un vecino, amigo, confesor y psicólogo.

Estaba siempre disponible, desde el nacimiento hasta el fallecimiento 54

a saúde de galicia

Para llevar a buen puerto mi idea, durante muchos años recorrí distintos puntos de nuestra geografía para recabar información y objetos de estos compañeros. Fue una experiencia muy fructífera y enriquecedora. Andando por Galicia adelante pude comprobar el cariño y el aprecio de sus pacientes. Eran “los médicos de los pobres”. Su labor era “sumamente humanitaria”.

No acudían a sus consultas o a los domicilios de los enfermos con leyes ni dogmas, sino con cultura y ciencia.

Sus herramientas eran la observación, la experiencia y el libre razonamiento. Virtudes que, cuando pasé a engrosar la lista de clases pasivas, consideré que debían plasmarse en un museo.

Una iniciativa que contó con el respaldo de los distintos alcaldes y de la corporación local, que no dudaron en ofrecerme la planta baja de la Casa Consistorial para su ubicación.

Durante años, he trabajado en el diseño museístico, pero no estuve solo. Conté con la colaboración, además del Ayuntamiento, de la Diputación Provincial, Cosaga, Grupo Academia Postal, Museo Olería de Batán y del Complejo Hospitalario Universitario de Ourense. Y de destacados pintores y

cultura

artistas como Baldomero Moreiras, Leandro Sánchez, Maite Vázquez, Paco Ascón, Armando González y María do Ceo. Y de muchas familias de médicos rurales que nos cedieron los elementos que conforman el espacio museístico.

El museo está organizado en diez salas temáticas en las que se expone material médico original desde principios del siglo pasado hasta nuestros días.

Tenemos una consulta médica de los años 50 del pasado siglo (en la que destaca una orla de la promoción de la Facultad de Medicina de Santiago de 1927 al 1933, el juramento Hipocrático y un título de esa facultad). También disponemos de una sala de exploraciones con camillas de principios y mediados de siglo, tallímetros,

Mi deseo es que el museo sea dinámico y divulgativo, y que Maceda sea una referencia en el ámbito de la medicina rural básculas pesabebés, lavativas, portasueros, mesillas para curas, mascarillas metálicas, espejos de Clark y bombona de oxígeno.

La sala de radiología cuenta con aparatos de radioscopia de los años 60, rayos X portátil del 70, rayos X dental del 80, aparato de radiografía de los 90 y

Nuestra próxima meta es constituir la Fundación del Museo del Médico Rural de Galicia, para lo que tratamos de implicar a distintas instituciones los pesados mandiles y guantes de plomo que se usaban como protección.

Además, exponemos diversos negatoscopios para visualizar las radiografías, y disponemos de una sala de revelado, otra de electrología (con lámpara de luz ultravioleta, aparatos de onda corta, láser y tens); un laboratorio (con una recopilación de los distintos materiales para realizar analíticas de sangre y orina); una zona de esterilización con varios modelos de esterilizadores de calor seco y de vapor, y una sala de instrumental, que acoge los tres elementos pioneros en la provincia: un aparato de rayos X transportable de 1930, cuyas placas se revelaban en el interior de un coche Fiat Balilla; un electrocardiógrafo de la década de los 60, en caja de madera y de gran peso, y un ecógrafo de los años 80 que hoy nos sorprende por su gran volumen.

El museo cuenta con trece vitrinas en las que el visitante puede encontrar termómetros de mercurio, jeringas metálicas y de vidrio, materiales para su-

turas (pinzas, bisturís, tijeras, grapadoras, catgut, sedas y diversas cajas de esterilización); utensilios para la exploración de oídos, nariz, garganta, ojos, sistema nervioso y pulmón; un maletín con todo el instrumental que llevaba el médico a las visitas domiciliarias; tarros y multitud de frascos que aún contienen sus principios activos; básculas de precisión, morteros y libros de farmacia, instrumental de laboratorio utilizado por los boticarios, cajas de medicamentos de la primera mitad del siglo XX y un expositor dedicado al farmacéutico oriundo de Maceda, Juan Vidal, que fue un referente a nivel español y patentó varios productos que se difundieron por Europa, América, y Asia.

En nuestras instalaciones se muestra, además, material utilizado por los practicantes rurales, instrumental de ginecología (fórceps, pelvímetros, espéculos, dilatadores y ventosas obstétricas), instrumental de los dentistas, fonendos, aparatos para medir la tensión, oscilómetros, doppler, electrocar-

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a saúde de galicia

diógrafos, lupas y microscopios y una colección de maletines médicos. También contamos con una biblioteca y hacemos referencia a la creación de los centros de salud.

Mi deseo es que el museo sea dinámico y divulgativo, y que Maceda sea una referencia en el ámbito de la medicina rural.

Por eso, he pronunciado charlas en colegios, centros sociales y de salud, y, durante el confinamiento por la covid-19, pusimos en marcha una emisora de radio para informar de la pandemia. Los medios de comunicación fueron nuestros grandes aliados para su promoción.

Nuestra próxima meta es constituir la Fundación del Museo del Médico Rural de Galicia, para lo que tratamos de implicar a distintas instituciones.

También pretendemos cambiar la actual ubicación para

Pretendemos cambiar la actual ubicación para contar con mayor espacio expositivo y promover un premio relacionado con la medicina rural contar con mayor espacio expositivo y nos proponemos promover un premio relacionado con la medicina rural.

Como complemento a todo esto, acabo de finalizar un libro sobre la vida de estos admirados compañeros en el que narro, también, mi trayectoria profesional. Una trayectoria que me llevó, en su momento, a trabajar en el actual Chuac y a formar parte de la nómina de colegiados del Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de A Coruña.

Os espero en Maceda. *José Manuel Lage es el promotor, director y alma mater del Museo del Médico Rural de Maceda.

Urgencias

José Manuel Fandiño, Belén Rodríguez Hermida, María de la Cámara, Manuel Ferreiro y Amadeo Seco

El Servicio de Urgencias del Chuac apuesta por la trazabilidad y la humanización Ha implantado sistemas de seguimiento de los pacientes y de prescripción electrónica, además de mejorar la formación y la calidad Por Daniel Viña El Servicio de Urgencias del Chuac ha puesto en marcha varias iniciativas con el objetivo de modernizarse y mejorar los cuidados que reciben los enfermos. “Tenemos que diferenciarnos y dar la mejor atención posible a nuestros pacientes, que son el centro de toda la actividad que desarrollamos, tanto ahora como en el futuro”, asegura el jefe del Servicio, José Manuel Fandiño. Para ello, la apuesta se basa en cinco pilares: un novedoso sistema de trazabilidad, la prescripción electrónica asistida, la formación continuada, la humanización de la asistencia y la búsqueda continua de la calidad. “Todas ellas son demandas históricas a nivel nacional que se están desarrollando en A Coruña”.

Para mejorar la trazabilidad se desarrolló una aplicación, denominada U-Max, en colaboración con el área de informática del hospital. Según la doctora María de la Cámara, una de las responsables del proyecto, “ha supuesto un gran avance en la gestión integral del paciente urgente, tanto desde el punto de vista de la calidad como de

“No era lógico que a estas alturas del siglo XXI tuviéramos que coger un papel para saber dónde podía estar un paciente” JOSÉ MANUEL FANDIÑO

la seguridad”. Al principio, el programa se centró “en organizar el flujo de entrada de los enfermos en Urgencias, que se realiza a través del triaje Manchester, con el que cada uno era asignado de forma aleatoria a los facultativos que estaban de turno”.

Sin embargo, “necesitábamos dar un paso más”. En primer lugar, se añadió la posibilidad de “gestionar los equipos de trabajo, asignando cada profesional a un box y a una consulta”. También se incluyó el seguimiento de los enfermos “desde que ponen un pie en Urgencias hasta que se van de alta o ingresan en el hospital”.

De esta forma, “no solo sabemos la ubicación del paciente en el Servicio, que mide 4.000 metros cuadrados, sino que tenemos la trazabilidad del pro-

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a saúde de galicia

ceso urgente en tiempo real.

Conocemos, en todo momento, qué se le ha hecho, de qué está pendiente, si su analítica está en el laboratorio o si se ha informado su radiografía de tórax. Lo sabemos todo”.

Esta herramienta también “es muy importante desde el punto de vista de la gestión y la dirección médica”. Cuenta con un plano en el que es posible, “con un simple golpe de vista, conocer la situación del Servicio” en directo, desde los mapas de camas hasta el triaje.

“No es necesario esperar, como sucede en otros hospitales, a determinadas horas para recibir una especie de parte. Nosotros lo tenemos disponible en todo momento con solo abrir el sistema”.

Mediante el software, además, “podemos enviar órdenes que llegan directamente a los teléfonos móviles de los celadores. Nosotros les indicamos a dónde deben trasladar al paciente, y eso se refleja inmediatamente en su dispositivo con una alerta”.

Toda esa información en tiempo real también se le ofrece al enfermo y a su familia, si así lo desea. Esta idea se implantó durante la crisis sanitaria provocada por el covid-19, en la que se limitó la posibilidad de acompañamiento por parte de familiares. Cuando el enfermo llega a Urgencias, recibe unas pegatinas con un código numérico y otro QR que puede escanear con su smartphone.

Gracias a esto se ha avanzado en materia de confidencialidad, porque “las llamadas ya no se hacen diciendo el nombre por megafonía, sino a través de un aviso que llega al teléfono y de las pantallas que están situadas en las salas de espera

Urgencias y de llegada a triaje”, explica la doctora De la Cámara. Los acompañantes, si tienen autorización, “también pueden escanear el código y saber en todo momento, a través del móvil, dónde se encuentra su familiar, si se le ha hecho una placa o si ya ha terminado la interconsulta con el cirujano, por ejemplo”.

José Manuel Fandiño destaca que “este sistema es único en España y ha despertado mucho interés en consejerías de salud de diferentes comunidades autónomas”. Por el momento, los únicos que operan con él son los profesionales del hospital coruñés que trabajan en atención urgente, aunque el resto del centro “está abriendo los ojos y se están empezando a dar pasos. No era lógico que a estas alturas del siglo XXI tuviéramos que coger un papel para saber dónde podía estar un paciente o tener que buscarlo por las instalaciones”.

María de la Cámara

“U-Max permite el seguimiento de los pacientes desde que ponen un pie en Urgencias hasta que se van de alta o ingresan en el hospital” MARÍA DE LA CÁMARA

“Buscamos la acreditación EFQM para que una entidad externa corrobore que hacemos las cosas bien” BELÉN RODRÍGUEZ HERMIDA

Belén Rodríguez Hermida Según explica, “en Urgencias trabajamos 60 profesionales médicos y, en total, somo más de 400 personas entre personal sanitario y no sanitario. Somos más grandes que un hospital comarcal, lo que aumenta la complejidad de implantar un sistema de este tipo”. Además, “hay que pensar que el año pasado pasaron por aquí más de 130.000 pacientes, y que entre el 70 y el 80% de los que ingresan en el hospital lo hacen a través de nuestro Servicio”.

Con U-Max, “Urgencias se ha entroncado todavía más en el hospital”.

Dentro del proceso de modernización, asegura el doctor Amadeo Seco, “se pensó que la parte de observación del hospital también se podía mejorar”.

Lo primero, “centrándonos en la seguridad del paciente, fue la prescripción electrónica. Se acabó el tener que leer en un papel la letra de médico, que era un suplicio, y se incluyeron alertas de alergias, tratamientos o reacciones cruzadas. Es una maravilla que ofrece seguridad, eficiencia y trazabilidad”.

Además, el equipo se esforzó para que “todos, ante la misma enfermedad, actuemos de la misma forma y con el mismo tratamiento”. Para ello, “se crearon una serie de protocolos que se implementaron tiempo después gracias a la colaboración del Servicio de Farmacia”. Por otra parte, “se está trabajando en crear un listado de patologías que son las que pueden pasar a la unidad de observación, que no

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Manuel Ferreiro

“La formación en paciente crítico en Urgencias supone un paso más para conseguir una forma de trabajar que sea lo más uniforme posible” MANUEL FERREIRO

es un lugar en el que podamos dejar a los enfermos sin ton ni son”. Los profesionales también avanzan, con la mirada puesta en el medio plazo, en la creación de un sistema de codificación de diagnósticos “con el que saber el número de personas que ingresan con determinadas patologías para realizar un registro adecuado y orientar nuestro trabajo”.

Manuel Ferreiro ahonda en la “apuesta por la formación acreditada que se ha hecho desde nuestro Servicio”. En este ámbito han desarrollado “un programa de formación en paciente crítico en Urgencias, que realizamos en el Centro Experimental del Chuac y que ya va por su segunda edición, aunque a causa del covid-19 tuvimos que suspender las sesiones presenciales”. El curso, de 37 créditos, “incluye módulos de reanimación cardiopulmonar, de vía aérea difícil, de pacientes politraumatizados o de ecografía clínica, entre otros, y todo ello sin necesidad de desplazarse fuera del hospital”.

La primera edición del programa se dirigió exclusivamente a médicos, pero en la segunda también se sumó el personal de enfermería. “Ha tenido una acogida muy buena y un nivel de participación alto, y supone un paso más de cara a conseguir una forma de trabajar que sea lo más excelente y uniforme posible”. Esto es “algo que no tiene ningún otro Servicio de Urgencias en Gali-

“Con la prescripción electrónica se acabó el tener que leer la letra de médico, y se incluyeron alertas de alergias o reacciones cruzadas” AMADEO SECO

Amadeo Seco

a saúde de galicia

urgencias cia, y casi me atrevería a decir que en España”. Además, “desde hace mucho tiempo contamos con sesiones acreditadas de actualización que ofrece el hospital, en las que referentes de diferentes ámbitos comparten su conocimiento”.

Según el doctor Fandiño, “al carecer de especialidad de Urgencias, nos centramos en la formación continuada y en la simulación in situ para ser excelentes en la atención crítica y en patologías tiempo-dependientes. Tenemos que practicar lo máximo posible con nuestro equipo y en nuestro lugar de trabajo para ser metódicos y que no exista variabilidad entre unos y otros”.

En este sentido, Manuel Ferreiro destaca que “es todo un mérito que no hayamos parado la simulación durante la pandemia, porque hemos seguido practicando para saber cómo atender al paciente crítico por covid en nuestro entorno. Continuar haciéndolo a pesar de los niveles de estrés e incertidumbre a los que estuvimos sometidos demuestra nuestro compromiso con la formación y con una demanda que nos tienen que conceder cuanto antes: la especialidad”.

Desde la dirección de Urgencias también se realizó un esfuerzo por “seguir humanizando”, afirma José Manuel Fandiño. “Se hicieron cambios para mejorar la observación y el acompañamiento y aumentar el confort, se habilitó una biblioteca para fomentar la lectura e incluso se hicieron modificaciones con respecto a la alimentación de los pacientes”.

Todos los apartados anteriores redundan en la mejora de la calidad global, “por lo que vamos a registrarlo y a buscar una acreditación para que no solo seamos nosotros los que pensemos que hacemos las cosas bien, sino que haya una entidad externa que lo corrobore”, afirma Belén Rodríguez Hermida. Para ello, “estamos en proceso de solicitar una

José Manuel Fandiño, Manuel Ferreiro, Belén Rodríguez Hermida, María de la Cámara y Amadeo Seco

acreditación EFQM, que abarca más aspectos que la ISO 9000, la más habitual en los hospitales”. Además, “la hemos elegido porque tiene al paciente en el centro”.

El proceso de solicitud de la acreditación “se paralizó por la pandemia, pero hemos seguido trabajando a distintos niveles.

Se ha creado un grupo de trabajo para mejorar las dinámicas del área de críticos, otro de calidad percibida y otro para tratar de agilizar los tiempos en los circuitos verdes y amarillos, además de intentar optimizar los espacios y disminuir la estancia de los pacientes en el box”.

Según la doctora Rodríguez Hermida, “es importante contar con líderes que encabecen las propuestas y acciones que hacemos, así como tener una estrategia. En nuestro caso, esta última pasa por la humanización y la trazabilidad y seguridad”. Además, lo están haciendo “teniendo en cuenta a todos los trabajadores, que están muy implicados en las iniciativas que se han puesto en marcha.

Como consecuencia, confiamos en que nuestros pacientes y los familiares acudan a Urgencias con seguridad”.

En opinión de la facultativa, “tenemos que informar a los enfermos de lo que hacemos”. Por eso, “en la etapa de

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“Al carecer de especialidad de Urgencias, nos centramos en la formación continuada y en la simulación para ser excelentes en la atención” JOSÉ MANUEL FANDIÑO

José Manuel Fandiño

a saúde de galicia

la covid-19, creamos carteles para explicarles que el Servicio estaba dividido en dos zonas, cómo se llevaba a cabo la atención urgente y la otra indicando el uso de los códigos QR”. También “se ha preparado un tríptico para que puedan tener toda la información sobre cómo funciona Urgencias”.

Por otro lado, “no solo es importante hacer bien las cosas, sino saber cómo nos perciben”.

Para lograrlo, “realizamos una encuesta -que repetiremos cada año- para que los pacientes puedan valorarnos en diferentes aspectos”. A pesar de que la consulta se realizó “en Navidad, con una gran presión asistencial, dificultades espaciales y saturación, la atención ha sido muy bien valorada”. En sus planes, además, está “encuestar al personal para que puedan aportar nuevas ideas”.

El pasado mes de febrero también se organizó la jornada Cuidar(te) con inteligencia emocional, “en la que participamos 200 miembros del Servicio y en la que unos coaches nos enseñaron técnicas para mejorar la comunicación entre nosotros y con el paciente. Además, sirvió como punto de encuentro para los profesionales, porque nuestro objetivo es estar cada vez más cohesionados y que todos rememos en la misma dirección”.

Gracias al fondo de 2 millones de euros para ayudas a la COVID-19 de Mutual Médica hemos podido asistir a más de 9.000 médicos.

Hoyes, mtaáms osqueanutunclaad, o

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Somos médicos cuidando de médicos.

Por eso, cuidamos de ti.

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