We are not good, until we all are good
Colección de formación familiar Año 4 - Número 14
www.alpamayo.edu.pe
Vacaciones, la gran oportunidad
Mg. Walter Espinoza Jock Director de Orientación y Familia
Y
llegó diciembre! Rapidísimo, imparable, con todo lo que implica el final del año. Momento de cierres, informes, regalos, planes, fiestas, reencuentros familiares, tiempo de balances tanto personales como institucionales. Pero para los padres de familia en general, se nos abre una vez más un periodo en el cual se nos da una nueva oportunidad de pasar más tiempo con nuestros hijos, y con ello, poder aprovechar ese espacio para encontrar en cada momento una oportunidad de formarlos y educarlos en los valores de la familia. Desaprovechar este corto tiempo para solamente descansar sin objetivos generará al final del mismo, una desagradable sensación de vacío por haber, prácticamente, perdido el tiempo. San Josemaría solía decir que descansar no significa no hacer nada, sino “cambiar de actividad”. Por eso es que las vacaciones se tornan como un oasis de cambio frente al devenir frenético de las actividades propias del día a día. Para evitar desperdiciarlas, recomendamos algunos temas a tener en cuenta para obtener el mayor beneficio de este periodo:
Siempre del lado de tu familia
1. PASAR MÁS TIEMPO EN FAMILIA. Aunque suene repetitivo, a veces los padres nos preocupamos por el “¿Y ahora qué haremos con los chicos en casa…?” El pasar tiempo juntos debe llevarnos a los padres a buscar fortalecer los vínculos con nuestros hijos; si bien cada uno es diferente, con sus propios gustos y preferencias, habrá que diferenciar en pasar tiempo juntos, es decir, toda la familia, y pasar tiempo papá o mamá con cada uno de los hijos. Es importante que los hijos sepan que con el papá se pueden hacer cosas entretenidas en casa, y es necesario entender que este proceso no debe significar necesariamente un
gasto. Aquí la imaginación debe ponerse en acción, ya que hay actividades que son “creativas y económicas”, visitar parques, centros de educación ambiental, centros culturales, teatros para niños o jóvenes, zoológicos, etc. Pero diversión deber ser entendida no solamente como sinónimo de “salir de casa”, ya que también allí podremos recrear buenos momentos para hacer manualidades, preparar pan o galletas, disfrutar una buena tarde con juegos de mesa, entre otras actividades. 2. APROVECHAR EL TIEMPO DE NAVIDAD. Si durante el año notamos que el tiempo se nos escurre como el aire, la época de Navidad nos invita a pensar más en los que menos tienen; no solo en quienes queremos o nos rodean, eso es fácil. Quizá más complicado sea salir del círculo íntimo e inmediato de familiares y seres queridos y recalar en las necesidades de los demás. Una buena idea consistirá en organizar junto con los hijos, el relevo de juguetes y vestimenta que ya no utilicen para donarlos a albergues de personas necesitadas, explicando el objetivo final de dicha actividad y participando del momento de la donación. 3. TERTULIAS EN FAMILIA. ¿Cómo puede ser posible que, actualmente si se les pregunta a los niños o jóvenes sobre temas referidos a juegos electrónicos, películas o modas, sean los primeros en responder con acierto, y sin embargo, si les consultamos datos sobre sus abuelos o padres, como en qué trabajan, dónde estudiaron, qué les gusta leer, etc. no tengan idea? Este nivel de desapego terminamos generándolo los padres al no proponer espacios de diálogo familiar, el cual nos permita dar a conocer diversos aspectos de nuestra historia familiar. De esas conversaciones, podremos poner en práctica costumbres y tradiciones que fortalecerán nuestros vínculos familiares, logrando un sentido de pertenencia de cada uno a su propia familia.