LITERATURA
Estos dias DECOLORES Awilda Caez Y todos creamos e/ mundo desde nuestros versitos porque no hay otra forma de crear/o. Ann Wayszckuk
o vengo a los cementerios a traer flores a los parientes ni a tomar fotos de tumbas famosas. Estoy aqui para Jeer los papelitos. Escogi este sepulcro porque hay una caja de acrilico para que los visitantes depositen sus cartas, notas ... lo que se Jes ocurra. Me gusta porque tiene una h1pida marr6n de piedra y el resto es gris como el cemento sin pulir. La inscripci6n lee: "AI insigne poeta Antonio Machado". La gente coloca flores, cubre las tetras con banderas de Espafta y deja cientos de mensajes cada afto. Con disimulo me acerco, Jevanto Ia tapa de Ia caja y, cuando estoy segura de que nadie observa, saco los papeles para Jeerlos. No es por morbo ni curiosidad imptidica. Prepare Ia tesina Indicadores de comunicacion y conducta en e/ contexto emociona/ de los /ugares sin vigilancia para obtener mi Jicenciatura en sicologia. (.Que Je dicen a Machado? Siempre me ha llamado Ia atenci6n que las personas se tomen Ia molestia de escribir aunque sepan que este poeta espaftol enterrado en Francia nunca los va a Jeer. Es Ia necesidad de decir algo sin importar quien lo escuche. En
N
mi estudio argumento que se podrian dejar las notas en cualquier Iugar y cumplirian el mismo proposito. Llego al cementerio a las dos de Ia tarde y me siento en el borde de una tumba. Hay un joven a tres metros de distancia, frente al sepulcro que vengo a visitar. Esperare a que termine. Anda solo y sin camara; no parece uno de esos turistas que se retratan frente a las criptas de los famosos. Pienso que eso es patetico.(,Oividan que adentro hay un muerto? El joven deposita tambien su papelito dentro del cajon. Lo veo caminar cabizbajo bacia Ia salida del cementerio. Su paso es Iento, como si le pesaran las manes que tiene metidas en los bolsillos. Se detiene a conversar con el portero: un anciano flacucho vestido con uniforme verde. Da media vuelta y mira bacia donde me encuentro. No puedo sostener Ia mirada y bajo Ia cabeza. Me siento como el que acaba de romper un Lalique frente al duefto de Ia tienda. jBah! No debo preocuparme. Ni que fuera
J