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--36l op nc á lo prcccpf(l8 ,d a z(~ cana ltigieno ataca dir ctam nte la b lZeza: el Yeueno c1t1.e mata la salud, m t. l mi ·mo tiempo L hermosura. •l acrn, m·1s r comcndable para la cara, y qne no ne reconoze:1 ri\·al es la <¡lle usaba n las damas órte de tirios ll: hé · aq, uí s11. simpl e composi-
CAPITULO IX.
lO D.
T ' mese nn pedacito de croma benzoyn¡¡, y hiérY .::o n ~ píritn de vino l~a ta fo rmar una tintura: par, u are ba tará poner qniuccgotas de.cs.ta tintura en ·na Yn de ngna, y r· ~ul'taqí. UIJ a mistu ra d~ color de leche con un olor d.clic-ioso." '
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E·ta d· licada a;1ia_pircce qne tiene la propiedad atraer el pnrpúróo ·color de la sang re á las fibras · terna de la cara, y da {i las mecrillas un pr eioso tint i de carmín· i se·d q' seca¡· sobre d ·ros tro, le da al cúti uria gran' tran .. r encia y . aumenta co nsid erablemento. u blancni·a mientras q ue al mistno tiempo es un es ecífico admirable ·cvn t ra los barro¡;, man chas, y toda cl_!lse de ernpcion'es, cnando no tienen mucho tiempo. de. existencia. P.
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Hábitos que destruyen el colot· ,.,el rostro d 'c la. muger. ·
~a mayor parte de los desórdenes cutáneos de que jus~am ente s·~ lamenta la mnger, lo debe solo á .sn •cul paule _ig nora:ncia en aceptar ciertas .modas y costumbres que son mas tarde el veneno de su existencia . .La esposicion á los repentinos cambios de temperatu ra salicuclC> de un sitio calm·oso, y p'rese{ltando el cner· po á la influencia de una corriente de aire frio, snspetJdc r epentinamente l-as secreciones de la pi el, y de a hi la m~yor parte de esosei~lpalidecimienfos, man?h:ts, y ernpcwnes, qne lamenta J ns~a mente la mayor1a de las mugcr,cs. Mas noei vo que el cambio repentino de ten1peratura es mnchas veces la ~icga snmision á los caprichos de la moda, qne obliga á ]a muger :í. pre~entarse por doq ni era ,con la ca hez a casi dese u bicrta; refiérome á esos modernos ~ombreros de sonoras que solo· cubren el cstrcmo posterior, y al abandono en que va dejáudo~ se el velo protector: todas estas costum brcs: mod.ernas son en gran manera perj.nd · cútis. . ! N o es solo la consei rmosura la que