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salud saje son maravillosos. La persona se sentirá mucho más fuerte y relajada”, dice. “El masaje es un todo, trabaja el aspecto físico, mental y emocional. Además, ayuda en la relajación y la activación circulatoria y linfática”. “A diferencia del masaje antiestrés, el masaje deportivo es más fuerte, más dinámico y con mayor actividad, mientras que el otro es más pasivo y sutil y mas bien busca un cierto nivel de sedación”, comenta Fisher.
Momentos precisos Específicamente, al hablar del masaje deportivo, se mencionan el previo a la competencia, el de entrenamiento, de recuperación y el de rehabilitación. El preparador físico, Marcelo Betancourt, explica que el masaje deportivo es de especial importancia antes y después del evento. “Antes, se trata de una preparación para el esfuerzo a realizar”, explica Betancourt. “Es un masaje de tonificación y de irrigación sanguínea a los músculos para que estén listos para la competencia”. Con el masaje se abren las membranas y se facilita el intercambio de fluidos y la eliminación de desechos musculares –como el ácido láctico-, que se forman en los músculos durante e inmediatamente después de ejercicios intensos. El preparador físico agrega que el masaje posterior es uno de recuperación. “Es más para relajar, mantener la lineabilidad muscular en buena posición y se busca vaciar el ácido láctico para recuperar el músculo y poder continuar con el entrenamiento”. Devuelve la calma al cuerpo, facilita una rápida y total recuperación del esfuerzo realizado, libera los espasmos musculares y descongestiona los puntos especialmente fatigados. Antes de las competencias, el masaje busca estimular los músculos, facilitar el calentamiento muscular y articular, estimular el sistema nervioso y permite, además, retrasar la aparición de la fatiga A lo largo del período de entrenamiento, además de aumentar la fuerza muscular y mejorar
El masaje es vital previo a la competición, durante, después, como parte del entrenamiento y como rehabilitación.
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el sistema nervioso, también cumple una función preventiva. En caso de lesión, el masaje de rehabilitación disminuye la sensibilidad de los nervios cercanos al daño y aumenta el flujo sanguíneo a la zona lastimada. Aunque varía según el deporte, es usual que a menudo se realicen numerosas repeticiones de un gesto deportivo, especialmente durante los entrenamientos. Esto puede llegar a generar sobrecargas que lastimen los tejidos. El masaje puede ser una alternativa de tratamiento muy valiosa en estos casos.
Gran apoyo En el 2004, el British Journal of Sports Medicine publicó un artículo del Dr. S.D.R. Galloway titulado “Massage Provision by Physiotherapists at Major Athletics Events Between 1987 and 1998”. Ahí se demostró que el 45% de los tratamientos que reciben los atletas en competencia a nivel internacional es terapia de masaje. En el 2008, el Journal of Medicine & Science in Sports and Exercise, publicó el artículo “Cyclic Compressive Loading Facilitates Recovery After Eccentric Exercise”, de Timothy A. Butterfield y otros autores, en el que se demostraron los amplios beneficios de la terapia de masaje en el deporte. En ese caso, se le atribuyó a esta práctica la disminución de los niveles de inflamación y aumentar los niveles de fuerza muscular durante períodos de ejercicio intenso. En ese mismo estudio, se encontró que el masaje disminuyó la cantidad de energía que el cuerpo debe gastar para curar grupos de músculos dañados. Así como atletas profesionales utilizan la terapia de masaje como complemento de su entrenamiento, todos aquellos en distintos niveles pueden aprovechar las ventajas que esta práctica brinda.
Beneficios del masaje en atletas • Mejora la circulación, lo que permite respirar con mayor facilidad y moverse más suavemente. Además, aumenta los niveles de desempeño. • Levanta el sistema inmune. • Alivia la sensibilidad muscular, en caso de que un atleta sienta dolor debido a una lesión, y así se reduce el impacto sobre el desempeño. También acelera la sanación. • Aumenta la flexibilidad, ya que la terapia de masaje estira las fibras musculares. • Reduce el estrés y aumenta los niveles de relajación. • Promueve mejores patrones de sueño y mejora la cantidad y la calidad de las horas de sueño. Al estar más descansado, permite practicar el deporte al nivel óptimo.
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