Messi: el valor de la perseverancia
Lionel Messi es sinónimo de perseverancia. La constancia sumada al talento innato lo definen. La “Pulga” es un jugador veloz, ágil, que desafía las marcas. Esa genialidad tan propia para esquivar rivales y no despegar la mirada de la pelota. Leo superó todo tipo de barreras para llegar a donde está hoy, en lo más alto de la historia del fútbol mundial.
A lo largo de su carrera tuvo que aguantar miles de recriminaciones de un sector de la hinchada argentina y del periodismo que ante cada derrota trató de responsabilizarlo. Que ganara todo con el Barcelona pero no así con la Selección Argentina era algo totalmente inaceptable para la crítica detractora. Cada cuatro años, el Mundial es el evento futbolístico que mayor fervor e ilusión genera. Queremos demostrar que podemos ser campeones y por eso la exigencia hacia los jugadores. Hacia Messi. A él siempre le exigimos más. Incluso, cuando lo que ofrece es de por sí mucho. ¿Cuál es la explicación a este fenómeno? Un poco porque

como argentinos ansiábamos que Leo repitiera los títulos que consiguió con el Barça. Obnubilados por el deseo de ganar, proyectamos una presión desmedida e insana hacia un sólo jugador.
“Muchas veces el fracaso es parte del camino y del aprendizaje y sin las decepciones es imposible que lleguen los éxitos” – Lionel Messi
Cegados por el exitismo no somos capaces de disfrutar de todo el fútbol que Leo despliega dentro del campo de juego y, que a fuerza de frustraciones y golpes recibidos, seguirá vistiendo la camiseta argentina. Siguiendo a Eduardo Sacheri en uno de sus libros titulado El fútbol, de la mano: "A los jugadores de la Selección les exigimos que brillen, que ganen, que goleen. No aceptamos nada excepto el absoluto triunfo. (…) a la Selección no le perdonamos el menor renuncio. Claro, como juegan lejos, ganan fortunas incalculables y salen en las tapas de los diarios del mundo todas las semanas, esperamos que sean infalibles. Con gesto adusto, impaciente, nos ponemos a mover el piecito mientras esperamos que vengan a dejar acá un poco de toda esa maravilla”.
El fútbol siempre da revancha
Messi logró 42 títulos en su trayectoria deportiva. 35 de ellos con el Barcelona donde desarrolló la mayor parte de su carrera. Desde su llegada al París Saint-Germain en el 2021, alcanzó dos títulos. Además, fue galardonado con el Balón de Oro hasta en siete oportunidades. Con la albiceleste salió campeón en el Mundial Sub-20 de 2005 y fue parte del equipo que conquistó el oro olímpico en Pekín 2008. Llegó a cuatro finales: Copa América 2007, Copa del Mundo 2014, Copa América 2015 y Copa América Centenario 2016 sin poder conseguir el campeonato. Sin embargo, la revancha del fútbol comienza con la obtención de la Copa América 2021 que permitió cortar una racha de 28 años sin alcanzar títulos. Messi y la Selección Argentina tuvieron su momento de gloria. Contra Brasil y en el Maracaná. Un año después llegó la Finalissima contra Italia en Wembley, otro título oficial.
El fútbol le debía un Mundial a Leo. En Qatar 2022 llegó la recompensa más deseada. 36 años después Argentina logró su tercer título mundial tras vencer a Francia en una final impresionante que se definió por penales luego de un 3 a 3 en los 90 minutos y en los 30’ del tiempo extra. ¿Y ahora qué dirán? Sólo queda agradecerle por todo su fútbol. Por toda su entrega. Por no rendirse jamás porque tuvo que intentarlo cinco veces hasta conseguirlo. Messi, sin dudas, reafirma el valor de la perseverancia para superar las adversidades, las dificultades y las frustraciones que también forman parte del deporte.
“Siempre tuve el sueño de ser Campeón del Mundo y no quería dejar de intentarlo, aún sabiendo que quizá nunca se daría” – Lionel Messi

“Que de la mano de Leo Messi, todos la vuelta vamos a dar”