De hecho, ¿cómo puede su ego soportar que un "nadie" pueda pretender enseñar, mientras están aquí, mejor que ellos? Todos deben arrodillarse e inclinarse ante estos reyes de las Artes Marciales. Porque sí, volvemos a una monarquía con estos reyes que quieren que todas las personas los admiren y se inclinen ante ellos. Es una especie de monarquía dictatorial: estas personas quieren ser reconocidas como los únicos reyes y como los únicos buenos Maestros en este mundo de incompetentes. Solo ellos, que se hacen llamar expertos, son lo suficientemente competentes y pueden entrenar
personas. Otros entrenadores son parásitos que deben eliminar y silenciar, simplemente porque no toleran ningún consejo ni crítica, para mejorar su alto nivel. Solo pueden tolerar a otros Maestros que los elogien, y que sean como ellos, con un ego sobredimensionado. Entonces, estos increíbles Maestros, con un tribunal y sirvientes, se reúnen con otros reyes, con su propia corte y sirvientes, en todo el mundo. Se felicitan mutuamente, desarrollan redes de felicitaciones para satisfacer su sed de adulación y el desarrollo de su ego. Atrae a practicantes crédulos, que no saben nada sobre Artes Marciales y el valor de los años de