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CALIDOSCOPIO
calidoscopio ADALBERTO ÁLVAREZ EL SON ERES TÚ
Por/By: Yurien Heredia Figueras. Musicóloga Fotos/Photos: Archivo
Cuenta la historia que en la isla de la música, la mayor de las Antillas, el día 22 de noviembre de 1948 vio la luz, bajo la protección de Santa Cecilia patrona de los músicos, Adalberto Cecilio Álvarez Zayas. En la orquesta que fue su vida tuvo dos regentes fundamentales: su música y su religión yoruba. Bajo la guía de su padre se convierte desde muy pequeño en sonero y aprendió las esencias de lo popular. Participó en ensayos y tertulias donde el tema principal era el abordaje del son y otras esencias de lo cubano. Su madre Rosa Zayas le dio a conocer el canto a dos voces y, sobretodo, fue la que le enseñó a tener la intuición necesaria a la hora de emprender sus distintos proyectos musicales y sugería en el repertorio los temas que luego se convertirían en himnos para los adalsoneros y público en general. Adalberto sembró su semilla en tres de las más importantes ciudades cubanas: La Habana, Camagüey y Santiago de Cuba. Su padre Nené Álvarez fue el director de la agrupación camagüeyana Soneros de Camacho y la mayoría de sus hermanos son también reconocidos músicos como Román Álvarez (contrabajista y profesor) y Enrique Álvarez (violinista y director de orquesta). Años más tarde, Adalberto crearía su propia familia musical pues la mayoría de sus hijos también son músicos: Dorgeris, Yaritza, Jennifer y Brayan Álvarez. Heredero de grandes soneros como Miguel Matamoros, Ignacio Piñeiro y Arsenio Rodríguez, su estilo actualizó el son de siempre. Entre 1966 y 1972 cursó estudios de nivel medio en la Escuela Nacional de Artes (ENA), en la especialidad de fagot. Allí comienza su incursión en la composición y los arreglos y entrega un número musical al conjunto Rumbavana titulado Con un besito mi amor que se convirtió en un tema muy popular a inicios de la década del 70. En 1978, a petición del Presidente de la UNEAC santiaguera, el compositor Rodulfo Vaillant, le llega la primera oportunidad importante a Adalberto Álvarez. En este momento, se traslada a Santiago de Cuba donde forma el conjunto Son 14. Surgen, así, nuevas composiciones como A Bayamo en coche y El son de la madrugada, que ponen de manifiesto su gran talento no solo en la composición sino también en los arreglos y la orquestación.

The Son is you
It is said that on the Island of Music, the largest of the Antilles, on November 22nd, 1948, was born under the protection of Saint Cecilia, patroness of musicians, Adalberto Cecilio Álvarez Zayas. In the orchestra that was his life he had two fundamental regents: his music and his Yoruba religion. Under the guidance of his father, he became a sonero at a very young age and learned the essence of popular music. He participated in rehearsals and gatherings where the main theme was the approach to Son and other essences of the Cuban identity. His mother, Rosa Zayas, introduced him to two-part singing and, above all, was the one who taught him to have the necessary intuition when undertaking different musical projects, to determine in the repertoire the songs that would later become anthems for his fans, the adalsoneros, and for the public in general. He sowed his seed in three of the most important Cuban cities: Havana, Camagüey and Santiago de Cuba. He is heir to a musical and family patriarchy. His father Nené Álvarez was the director of the group Soneros de Camacho from Camagüey; and most of his brothers are also renowned musicians such as Román Álvarez (double bass player and professor) and Enrique Álvarez (violinist and orchestra conductor). Years later he created his own dynasty, most of his children are also musicians: Dorgeris, Yaritza, Jennifer and Brayan Álvarez. Heir to great soneros such as Miguel Matamoros, Ignacio Piñeiro, Arsenio Rodríguez, his style updated the Son of always. Between 1966 and 1972 he studied at the National School of Arts (ENA), specializing in bassoon. There he began composing and orchestrating and wrote the song Con un besito mi amor for the group Rumbavana, which became very popular in the early 1970s. His first major opportunity came in 1978 when, at the request of composer Rodulfo Vaillant, president of UNEAC, he moved to Santiago de Cuba, where he founded the group Son 14 and new compositions such as A bayamo en coche and El son de la madrugada emerged, demonstrating his great talent not only in composition, but also in arrangements and orchestration.

Luego se traslada a La Habana y funda en 1984 Adalberto Álvarez y su Son y se convierte en referente obligado para los músicos cubanos e internacionales, transformándose en uno de los compositores más versionados de la música popular cubana dentro y fuera de la isla. Fue proclamado El caballero del Son, por ser un genuino representante del sentir de su pueblo con un lenguaje popular y elegante a la vez. El Maestro fue digno de reverenciar por su verbo correcto, despertando así el sentir de los bailadores. Su música es la mezcla de elegancia y picarezca, con tino y justa medida. Adalberto Álvarez, El caballero del son, hombre de profundas cualidades humanas, sencillo, humilde, defensor de la familia, camagüeyano de pura cepa, ese ser cubanísimo, se unió al olimpo sonero el pasado 1ro de septiembre. Hoy y siempre celebramos su vida y obra en defensa de la música y el baile sonero. Por su guía y empuje tenemos el Día del Son Cubano, que celebramos cada 8 de mayo. Su actualización del estilo y sonidos de los conjuntos musicales Rumbavana, Son 14 y Adalberto Álvarez y su Son aglutinó a músicos y bailadores de varias generaciones. Grandes artistas internacionales como Juan Luis Guerra, Gilberto Santa Rosa, Óscar D'León, Papo Lucca, Rubén Blades y Andy Montañez han interpretado temas de su autoría por todo el mundo. De su puño y letra salieron obras como Son para un sonero, Para bailar casino y El fiel trovador. Gracias a él siempre cantaremos al Son de la madrugada, iremos A Bayamo en coche y diremos...Y ¿qué tú quieres que te den? El son fue su cuna, abrigo, compañero de mil batallas, carta de presentación y triunfo de Cuba y pal mundo entero. Adalberto Álvarez, Cuba se quita el sombrero ante ti y, bailando al ritmo de tu música, con el permiso de todos los grandes asegura que el son eres tú.
Then he moved to Havana and founded in 1984 Adalberto Álvarez y su Son, where he became an obligatory reference for Cuban and foreign musicians, establishing himself as one of the most referenced composers of Cuban popular music inside and outside the island. He was proclaimed The Gentleman of the Son, for being a genuine representative of the sentiment of his people with a popular and elegant language at the same time. He was always worthy of reverence for his correct speech, awakening the emotions of all dancers. His music is a mixture of elegance and playfulness, with tact and the right balance. Adalberto Álvarez, The gentleman of the Son, a man of deep human values, simple, humble, defender of the family, a genuine Camagüeyano. That very Cuban being, joined the sonero Olympus last September 1st. Today and always, we celebrate his life and work in defense of Son music and dance. For his guidance and drive we have the Day of the Cuban Son, which we celebrate every May 8th. His renewal of the style and sounds of the musical groups (Rumbavana, Son 14, Adalberto Álvarez y su son) has brought together musicians and dancers of several generations. Great international artists such as Juan Luis Guerra, Gilberto Santa Rosa, Oscar D'León, Papo Lucca, Rubén Blades, Andy Montañez, among others, have performed his songs all over the world. From his pen came songs such as Son para un sonero, Para bailar casino and El fiel trovador. Thanks to him we will always sing to the Son de la madrugada, we will go to Bayamo en coche and we will always say: ¿Y qué tú quieres que te den? The Son was his cradle, shelter, companion of a thousand battles, presentation and trump card of Cuba and for the whole world. Adalberto Álvarez, Cuba takes it's hat off to you gentleman and dancing to the rhythm of your music, ask permission to all of the great musicians and say, without a doubt, that the Son is you.
