CUENTOS SOLIDARIOS

Guadalupe Curiel Machado

En el 2º trimestre de este curso el alumnado de 5º de Primaria han participado en el tercer certamen de Cuentos Solidarios, concurso organizado por medicusmundi norte. Una alumna de nuestro Centro ha resultado ganadora con este relato. Esperamos que lo disfrutéis.

Álex y sus súper poderes

Álex es un niño de 8 años, es moreno con el pelo rubio y rizado y unos ojos azules muy grandes, es muy tímido y le cuesta hacer amigos por su vergüenza.

En casa Álex es un niño alegre y divertido, se siente contento y tranquilo. El problema es qu cuando Álex sale de casa se convierte en otra persona diferente, es tímido y tiene vergüenza de hablar con las personas de la calle y del cole, siente que todo el mundo lo mira e incluso piensa que se ríen de él.

Álex va a un colegio muy bonito en una ciudad muy grande donde tiene muchos compañeros, pero no tiene ningún amigo.

En el cole Álex se siente muy solo, y no se atreve a hablar con otros niños ni con sus profesores.

Álex se da cuenta de que todos se divierten y él no.

Sus padres notan que Álex siempre en la calle está rojo como un tomate y nunca quiere hablar con nadie, están preocupados y deciden hablar con él.

Esa tarde su mamá le preparó unas galletas muy ricas para merendar, cuando estaban todos en la mesa su papá le dice: “Álex, nos hemos dado cuenta que solo estas feliz en casa, queremos que en la calle seas igual”.

Álex le contesta: “me da mucha vergüenza, tengo miedo de que los demás se rían de mi”. Mamá dice: “Álex tu eres genial, tienes el súper poder de hacer a todo el mundo feliz con tu alegría y con tu ayuda, y no lo estás aprovechando”.

Álex se vio como un superhéroe y pensó: “mamá y papá siempre tienen razón”. Lo tengo que intentar para saber si funciona y puedo tener amigos.

A la mañana siguiente, Álex les preguntó a sus padres si podía celebrar una fiesta de disfraces en casa e invitar a sus compañeros de clase.

Sus padres estuvieron de acuerdo, y Álex preparó la fiesta.

Fue al cole y entregó las invitaciones con mucha vergüenza, todos los compañeros quedaron sorprendidos porque Álex nunca se había acercado a ellos. Pero todos contentos porque querían conocer a Álex. El día de la fiesta Álex se disfrazó de superhéroe y preparó muchas chuches para sus compañeros. Estaba un poco nervioso, pero decidió conocer a sus compañeros e intentar sentirse con ellos como en casa.

Llegó la hora de la fiesta y empezaron a llegar los niños, Álex les enseñó su casa y jugaron en el jardín todos juntos antes de merendar. Todos lo pasaron genial, Álex disfrazado se sentía más protegido y sin vergüenza con los demás. Ese día fue genial, sus compañeros también estaban contentos con lo divertido que era Álex.

Cuando acabó la fiesta Álex les dijo a sus padres que se sentía mejor.

Sus padres se pusieron muy contentos.

Al día siguiente todos sus compañeros hablaban de la fiesta de Álex el superhéroe. Álex estaba tan contento, que se animó a jugar al fútbol en el recreo con los que ahora eran sus amigos.

Bravo por súper Álex que logró vencer su vergüenza para siempre. Nunca hay que rendirse y siempre hay que ser feliz.

Guadalupe Curiel Machado. 5º A