Aproximación arqueológica a las cercas medievales de la ciudad de Salamanca Luis Serrano-Piedecasas Fernández y Miguel Ángel Muñoz García Laboratorio de Arqueología Medieval de la Universidad de Salamanca
Antes de comenzar nuestra disertación es obligado eñalar que lo referido en la presente comunicación debe ser entendido como provisional, pues el proceso de investigación de las murallas de Salamanca se encuentra todavía abierto, al no haberse completado la lectura de todos sus paramentos. Sin embargo, los resultados obtenidos hasta ahora ya son una llamada de atención a su significado. Aunque excede los propósitos de nuestro trabajo, reseñaremos que la "Helmantica" protohistórica de las fuentes clásicas, ya disponía de una muralla de 4,5 m. de ancho construida en piedra en seco. Sus restos aparecieron en W1a excavación de urgencia en la Calle del Silencio, asociados a niveles celtibéricos de los S. III Y II a.e. (ValIs, Benet y Macarro, 1989). Según estos autores, esta primera fortificación celtibérico-vaccea debía tener una extensión similar a la que tendrá siglos má tarde la denominada Cerca Vieja Salmantina. En este mismo año de 1999, se ha descubierto un importante tramo de esta muralla, que llega a levantar más de dos metros del suelo, en W1 solar localizado en la Cuesta Carvajal. La excavación ha sido dirigida por el arqueólogo salmantino Carlos Macarro Alcalde. Respecto a los recintos de época medieval, son dos las cercas conocidas: la ya aludida Cerca Vieja y la Cerca Nueva, lógicamente la primera más antigua (ver figura 1). La muralla vieja se rodeaba al núcleo conocido como Cerro de las Catedrales, mientras que la Nueva seguía casi exactamente la línea de la actual carretera de circunvalación del centro histó-
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La Cerca Vieja De este recinto se conservan buena parte de los lienzos que miran al Tormes. Excavaciones arqueológicas realizadas en la Cuesta de Oviedo descubrieron un tramo de la Cerca Vieja (Valls, Benet y Macarro, 1989). Este conectaría con Peña Celestina para después continuar el trazado paralelo a Rector Esperabe, y doblar W1poco antes del comienzo de la Calle San Pablo. Desde este punto subiría hacia la Cueva de Salamanca y la Calle del Tostado. El resto nos es conocido por referencias documentales no demasiado precisas. Según estas,
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