Nuestra pequeña protagonista vive en el GRAN MANZANO. Allí crecen, al calor del sol, las mejores manzanas de la sidra. Son godas, rojas y brillantes, muy diferentes a nuestra manzanita, que es pequeña, flacucha y de color pardusco. Eso la hace estar triste, porque quiere ser como las demás. Pero pronto entenderá que su diferencia la hace muy especial.