De Tu Lado - Diciembre 2015

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EDITORIAL ÍNDICE 15 AÑOS ............................................ p.3 Mucho ruido para pocas....................p.4 Formen un partido..............................p.6 El otro legado k ..................................p.8 En Azulado, hace años.....................p.10 Yo voto, tú eliges, nosotros...............p.11 Una vieja herida................................p.14 La educación: ¿fin de una era?.........p.16 Hacer el recorrido.............................p.18 Un mundo sin sueños.......................p.20

15 años De Construcción Colectiva

Nuestra historia está anclada en los vaivenes de la realidad argentina. Contarla es contar la historia situada en el conurbano, en este rincón de Latinoamérica, donde no se vive sin problemas. País tercermundista y dependiente, el más europeizado de la región. No había utopías locas, ni guerrilleros, ni posibilidades de nada. El mundo de los sueños se había derrumbado y no había más destino que sucumbir frente a la fatalidad del capitalismo. Se acentuaba la explotación de los trabaja-

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dores con algo que los especialistas llamaban flexibilización laboral y los pobres seguían existiendo a pesar de consumir drogas. El mundo globalizado nos traía containers de pelotudeces, de muy mala calidad, del otro extremo del mundo. Era tiempo de desocupación, de tener reuniones y actividades por la mañana porque nadie laburaba. El Estado se extinguía. No era la utopía del socialismo de terminar con la explotación del hombre por el hombre. El Estado no

dejaba de existir producto de la desaparición de las clases, lo que pasaba era exactamente lo contrario, se acentuaban las diferencias sociales. En esos contextos, finales de los ´90 y principios del 2000, es cuando comenzamos a organizarnos para la lucha. Veníamos de los años del peronismo privatizador, años en que los 24 de marzo no eran feriados y donde se veían solo banderas rojas en las marchas. Años en donde los peronistas manejaban el territorio en el conurbano, tal cual como pasa hoy


Política (parece que hay cosas que no cambian). Años locos donde la UCD dejó de existir y donde muchos que hoy estatizan ayer privatizaban. Participamos de todas las luchas de la época, los desocupados y los cortes de ruta, las fábricas recuperadas, las huelgas docentes contra los recortes, las asambleas barriales, los casos de gatillo fácil, las luchas ambientales, las luchas estudiantiles contra los recortes, etc, etc, etc… En esa época nuestras actividades tenían que contar con una merienda o algún refuerzo en la comida porque muchos no comían. Las nuevas corrientes políticas de la época repudiaban y se enfrentaban al Estado como antiguamente hacían los anarquistas. Había que desarrollar el poder dual, el doble poder, el poder popular, crear Estados paralelos, escuelas alternativas, micro emprendimientos para crear fuentes de trabajo pero bajo relaciones sociales no capita-

listas. Muchos movimientos financiaban sus actividades cortando calles y arrancándole planes sociales al gobierno. En nuestro caso creíamos que no había que pedirle plata al Estado, que teníamos que ser verdaderamente autónomos y no depender de nadie. Tal vez eso explique lo que vino después, aunque no es la única variable. Sin que ningún analista lo prevea llegaron las jornadas históricas de diciembre. Los saqueos, organizados por el PJ primero, el Estado de sitio después y la espontaneidad de las clases medias. Algunos le adjudican esa movilización al corralito pero esa medida había sido tomada unos días antes. Por supuesto que hubo ahorristas, pero muchas fueron las variables que provocaron la movilización espontánea más importante de nuestra vida democrática, entre ellas el hartazgo de esta clase política expresada en el “que se vayan

todos”. No hay dudas de que la gota que rebalsó el vaso fue la declaración del estado de sitio, ahí es cuando el pueblo, sin que nadie lo convoque, sale con cacerolas a las calles. Llega la represión y al otro día, tras unas jornadas históricas de lucha, el pueblo movilizado derroca al gobierno impopular, con un costo de decenas de compatriotas muertos. Los nuevos vientos hablaban de derechos humanos y de la presencia del Estado. Y así empezaron los años en los que desde el Estado nos decían que “le hacíamos el juego a la derecha”. Resistimos las tentaciones del poder, nos mantuvimos autónomos del PJ y estamos listos para esta nueva etapa que, aparte de resistirla, aspiramos a confluir con otros, en la construcción de nuevas alternativas de poder que nos permitan salir del callejón sin salida que tuvimos como pueblo en las últimas elecciones. A eso te invitamos, ¡a que te sumes!

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Política

Mucho Ruido Para Pocas Nueces En este fin de ciclo un debate encendido respecto a cómo el kirchnerismo cohesionó internamente y construyó legitimidad por más de una década. Perspectivas en un escenario contradictorio. La derecha argentina fue siempre marginal en nuestra historia, influenciando a través de las presiones del lobby empresarial y los ministros de economía. La única manera que tuvo de gobernar fue a través de golpes de estado. Cuenta por primera

posible freno hubiese evitado que el PRO se nacionalice y hoy estemos tan asustados, preparándonos para lo peor. Es necesario señalar a los responsables, ya que muchas veces ellos nos han planteado que le hacíamos el juego a la derecha, aunque los hechos demostraron quienes realA no ser que hubieran mente terminaron haciénhecho la reforma agraria, dolo. no hacía falta remover En estos años, cuando tanto el avispero crecían fuerzas por izquierda del kirchnerismo, apenas savez con un partido. Y si caban la cabeza, se ocupaban bien llega gracias al aparato enérgicamente de destruirradical, el control del Estalas. Forzando la idea de que do nacional le permitirá la a la izquierda del gobierno construcción de un aparato había una pared. propio. Levantando banderas de Todo esto extrañamente se causas profundas y sensidesarrolló en la década gana- bilizando a porciones imda. Recordemos que Macri portantes de la población llega al poder en la ciudad se autoproclamaron como de Buenos Aires en el 2007, la generación de los ´70, junto a Cristina. hablaron de la fraudulenta ¿Acaso no hubo oportudeuda externa y se presennidad de frenar ese avance? taron como la antítesis del Sí, en varios momentos el neoliberalismo, de la dictakirchnerismo le pudo poner dura militar y de los golpes límites a esta derecha, pero le de Estado, combatiendo fue funcional al PRO. Como desde lo discursivo a grupos no podían ganar, imposibili- mediáticos reaccionarios. taban que otros le ganen. Ese Todo eso solo para cobrar re4

tenciones al campo y poner la asignación familiar. A no ser que hubieran hecho la reforma agraria, no hacía falta remover tanto el avispero ni hacer tanto dramatismo. Fue exagerado el discurso para lo que terminaron haciendo. En este sentido son muy aleccionadoras las palabras del diputado socialista Rivas, que frente a la pregunta de Tenembaum sobre qué era lo que más le gustaba del kirchnerismo, contestó “sus enemigos”. Macri era el enemigo ideal,

Cuando crecían fuerzas por izquierda del kirchnerismo se ocupaban enérgicamente de destruirlas. Forzando la idea de que a la izquierda del gobierno había una pared una estrategia de acumulación peligrosa; Clarín; el campo; la dictadura; el neoliberalismo. Con estos enemigos, hasta el más obsecuente socialista duda en sostener un planteo de independencia del PJ, pero recordemos que


Política habían impulsado el desarrollo de una fuerza independiente de este partido cuando Néstor hablaba de la transversalidad. Si con todo esto no alcanzaba, la billetera mató a muchos galanes. Sobre el final hubo muchos que capitularon frente al símbolo macrista y se convirtieron en kirchneristas tardíos. Macri logró lo que Cristina y Néstor no habían logrado, con una porción importantes de progresistas que terminaron eufóricos haciendo campaña por Scioli. Los resultados son diversos. En el área de los derechos humanos del pasado solo hay un preso por campo de concentración, y todo el esfuerzo se vio nublado por el nombramiento de Milani a cargo del ejército. En su enfrentamiento con la “oligarquía”, hubo discursos muy acalorados, pero las ganancias de la gran renta quedó concentrada en los pooles de siembra. Respecto a la deuda, fue el gobierno que más deuda externa pagó y todo esto increíblemente en nombre

de la soberanía. Lo que no conocen las nuevas camaradas de militantes es que hubo un movimiento muy grande por la investigación de la fraudulenta deuda externa, bautizando a uno de sus referentes (Zamora) como “el loco de la deuda”. Pagar la deuda externa no es ser revolucionario, es más bien lo contrario. Toda esta sensación de guerra, de combate y de

miento de sus militantes y de los que conformaron esa corriente de opinión a favor del gobierno. Destacamos cómo su discurso se reprodujo en las calles, con personas que defendían las ideas oficialistas. Durante todos estos años tratamos de meter una cuña en un público que considerábamos afín a nuestras ideas, advirtiendo que la política oficial nos llevaba a un callejón sin salida. Llamamos a romper con el PJ que es el partido - estado, que organiza el delito, el narcotráfico, las barras bravas, los punteros, los intendentes, los gobernadores feudales, etc. Controlan el territorio y es con los que habitualmente nos enfrentamos, cada vez que hacemos un mural en una pared, confrontación fue inútil, solo cada vez que entramos al bales permitió mantener el rrio y cada vez que peleamos poder y cohesionar política- por una conquista a favor del mente a un sector grande de pueblo. la sociedad que hasta el día Es necesario reagruparnos de hoy no solo no se hace au- después de la dispersión y las tocríticas sino que ni siquie- divisiones que han provocara cuestiona a los dirigentes do en las fuerzas de izquierque frustraron, nuevamente, da y de la centroizquierda no las expectativas del pueblo pejotista. Vemos con optiargentino. mismo que estas fuerzas se Otro rasgo característico vean liberadas de las estrucde este ciclo es el disciplina- turas tradicionales. 5


Política

Formen un partido y ganen las elecciones El comportamiento del electorado, la construccion de una derecha a nivel nacional y las posibilidades de construir un cambio que beneficie a los de abajo. Queremos charlar de esta derecha sin prejuicios. Hacemos esta aclaración para aquellas cabezas encapsuladas en la racionalidad oficial, ya que es necesario, para comprender esta nota, salir de ahí por un ratito, al menos hasta terminar estas líneas. Intentaremos ver diversos aspectos de los últimos hechos electorales para comprender al electorado y no odiarlo. Tampoco queremos arrogarnos la interpretación del electorado, solo intentaremos acercar algunas ideas. En primer lugar, el pueblo no vota una política popular cuando nos vota a nosotros y vota a reaccionarios cuando vota a otros. Parece bastante lógico pero hay que hacer estas aclaraciones, porque estos son los niveles de argumentación en estos días. El pueblo no votó para que vuelva Menem, tampoco lo hizo por Cavallo, los argentinos no quieren volver a los ´90 ni al neoliberalismo ni a políticas de austeridad. Es más, creemos que la gran mayoría del pueblo no sabe que significan estas cosas. Los votantes de Macri planteaban que querían cambiar, que estaban hartos de los mismos de siempre. Este argumento, por más sencillo que parezca, es bastante profundo en términos democráticos y nos habla de la necesidad de la alternancia en el poder, creemos que es un principio de la democracia. De estos últimos 32 años de democracia 22 los gobernó el PJ, los 10 que quedan lo hizo el radicalismo, que no logró terminar ninguno de sus dos mandatos. Es decir, que solo gobernó aproximadamente 8 años, esos dos años restantes, lo hizo el PJ. Otro argumento que escuchamos era contra la corrupción. Si bien podemos señalar casos de corrupción en la gestión de Macri, hay que decir que en este aspecto el PJ le lleva muchos cuerpos de ventaja. En este punto no hay

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mucho para desarrollar ya que no es un caso de corrupción, creemos que es una mirada de la gestión, por eso, 678 se ocupó de justificar en muchas oportunidades la corrupción. Los manejos discrecionales de los planes sociales, las cooperadoras de las escuelas, las obras públicas, todo, absolutamente todo, se maneja de forma oscura. Las cuentas y los presupuestos no están ahí para que todos podamos verlos, no son públicos. El hartazgo en la forma, las cadenas nacionales, el doble discurso entre hablar de los pobres y tener todos dirigentes millonarios que se enriquecieron en la gestión pública. Viven en puerto madero y tienen vidas de lujo. Muchos de ellos multiplicaron sus patrimonios de forma espectacular. No decimos que sea ilegal sino inmoral por el tipo de discurso. Otra razón más concreta es que la mitad de los trabajadores están precarizados o en negro. No están sindicalizados, no participan de paritarias, trabajan largas jornadas por sueldos que van entre los 4.000 y 10.000 pesos, sumado a la inflación que se come los sueldos. Además del cobro de ganancias a los trabajadores que tienen un mejor salario. Hemos esgrimido algunas razones, todas ellas consideramos que son atendibles, explican el por qué de un cambio. Hasta ahora no aparecieron razones para votar a Macri. Algunos votaron porque les gusta cómo está la capital y la comparan con la provincia, otros porque le fue bien en Boca y los restantes por una razón más sencilla: estaba ahí, era lo que había, se tenía que elegir entre uno u otro. No acordamos con la caracterización del kirchnerismo respecto a esta derecha, no es la UCD. Si bien sus economistas son referentes de esas ideas económicas, hay que ver que la gestión del PRO en capital es una gestión de


Política tipo populista, con punteros y política social en las villas. Con lo cual, no creemos que haya que asustarse tanto. Por qué ahora nos alarmamos cuando ponen a un ministro en la provincia de Buenos Aires vinculado a Monsanto y no cuando durante toda la década kirchnerista trabajaron codo a codo con la multinacional contaminante. Incluso la gestión Macri ya eligió al ministro de ciencia y técnica porque es un hombre asociado a la agroindustria y, de esa manera, se le transmite confianza al sector, de que muchos recursos del Estado seguirán volcados al agronegocio. Es importante señalar esto para abrirle los ojos a algunos progres que tienen una mirada condescendiente con la investigación científica de la era k. Estos hechos y muchos otros nos hablan de que no son tan distintos, gobernando y votando leyes juntos en innumerables oportunidades durante 8 años. Por eso, muchos analistas planteaban que Scioli y Macri se parecían, incluso, tanto a Grobocopatel como al presidente de Fiat les daba lo mismo gane quien gane. Sin embargo hay diferencias que hay que marcar. En general los partidos políticos en regímenes democráticos son gerentes de los negocios capitalistas. Eso fue así durante estos 30 años de democracia. El triunfo de Macri es de hecho un cambio, representa la llegada al poder, el control directo de las clases dominantes, sin intermediarios, sin gerentes. Esta fuerza logró algo muy difícil que se da por primera vez en nuestra historia: que una tercera fuerza gane una elección. Por delante tienen el desafío de la gobernabilidad y ver qué consensos generan para llevar adelante sus ideas al conjunto de la sociedad. Tienen la desventaja de tener minorías parlamentarias y la ventaja de contar con los ejecutivos de la provincia de Buenos Aires, la Capital Federal y el gobierno nacional. De este lado, es necesario organizarnos no solo para resistir como plantea el kirchnerismo sino para construir de una vez por todas una fuerza que rompa con las viejas estructuras de poder, generando un cambio que sea a favor de los trabajadores y no de los mismos de siempre.

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Política

El otro legado kirchnerista: la ley antiterrorista

El gobierno macrista contará con una herramienta fundamental para criminalizar a la protesta que surja frente al ajuste. Cambio de época. Con la elección de Macri como presidente, a partir del 10 de diciembre se iniciará una nueva etapa en nuestro país. Tal como fue expresado durante la campaña y confirmado luego de ganar las elecciones, las principales medidas representarán un claro ajuste en los ingresos de los sectores populares, devaluación del peso con unificación del tipo de cambio, reducción del gasto público, revisión de subsidios, ordenamiento de la protesta, etc. Sin duda continuará la ampliación del aparato policial y el control del espacio público. Las policías de la Ciudad de Buenos Aires, la provincia y la nación serán manejadas y coordinadas en su accionar represivo por el mismo color político. En este escenario que traerá sin lugar a duda lucha y resistencia cabe preguntarnos: ¿cuál será la principal arma que tendrá el gobierno de Macri

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para controlar las organizaciones sociales y populares que saldrán a la calle a resistir el ajuste? La respuesta es simple: La ley antiterrorista (Ley Nº 26.734). Esta ley aprobada en el congreso y promulgada por la presidente Cristina Kirchner en 2011, incorpora como agravante de todos los delitos

Las principales medidas representaran un claro ajuste en los ingresos de los sectores populares del Código Penal su comisión con la finalidad de aterrorizar a la población u obligar a las autoridades públicas nacionales a realizar un acto o abstenerse de hacerlo. Lo peor de esta ley es la amplitud de la misma, permitiéndole al poder judicial no tener casi límites en cuanto a su ámbito de aplicación. No especifica casos concretos sino que si el juez considera, por

ejemplo, que cortar una calle atenta contra los “intereses de la nación” este pasará a ser un acto terrorista. Durante una toma de tierras por parte de pueblos aborígenes en Chubut la justicia provincial quiso pasar el caso a la justicia federal, considerando que este acto tenía características de terrorismo según esta ley. El juzgado provincial argumentaba que cortar un alambrado permitiendo que las vacas salgan e invadan la ruta buscaba generar peligro y pánico en la población. En este caso puntual la justicia federal rechazó el pedido de la justicia provincial, estimando que esto no podía ser considerado como un acto terrorista. La mayoría de los ocupantes eran mujeres y niños y las únicas armas encontradas a los supuestos terroristas eran gomeras insignificantes. Nos queda en claro que la interpretación del juez fue y es


Política determinante, y que solo bastarán jueces nacionales en connivencia con el poder político para aplicar la ley en el caso de que el gobierno necesite frenar cualquier intento de resistencia ante medidas antipopulares. Pero por suerte nos quedamos tranquilos, ya que el poder judicial es “totalmente independiente”.

Según la ley antiterrorista el juez es el que considera si cortar una calle atenta contra los “intereses de la nación” y es un acto terrorista Por otra parte esta ley permite el congelamiento de activos, es decir, de bienes materiales por parte del poder ejecutivo,

con el único requisito de comunicárselo a la justicia. Cualquier organización considerada terrorista podrá ser intervenida también económicamente. Lo paradójico de esto es que una de las principales herramientas que tendrá el gobierno macrista para perseguir y criminalizar la protesta surge de un gobierno que siempre se jactó de no reprimir ni avalar la represión, cosa que sabemos no fue más que un discurso ya que podríamos citar numerosos ejemplos donde estuvo directa o indirectamente involucrado en prácticas represivas (el gendarme carancho en LEAR, el asesinato de Mariano Ferreyra, la persecución de los QOM en Formosa, etc.) Muchos sectores kirchneristas decidieron mirar para otro lado cuando hace cuatro

años se sancionaba esta ley. El momento para exigir su derogación ya pasó. Nada podemos

Una de las principales herramientas que tendrá el gobierno macrista para perseguir y criminalizar la protesta surge de un gobierno que siempre se jacto de no reprimir ni avalar la represión esperar del kirchnerismo duro que fue su principal promotor y que está más preocupado en tener una transición armónica y ordenada. Cuando todos nosotros tengamos que salir a resistir en las calles, nos acordaremos de este otro legado que nos dejó Cristina, pero del cual no se habla.

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Lo que hacemos

En Azulado, hace años… En estos 15 años de Azulado nuestro taller de alfabetización ha ido modificándose, adaptándose a las necesidades de los alfabetizandos y al medio que nos rodea. Desde un comienzo, conseguir que la gente se acercara al taller no fue tarea fácil, aún hoy sigue siendo difícil. En las últimas décadas, la alfabetización ha sido desatendida en las agendas nacionales para la educación, basta con prestar atención a las recientes campañas presidenciales donde no se menciona siquiera la palabra “alfabetización”. A pesar de todos estos inconvenientes seguimos funcionando, porque se ha creado una relación, un vínculo entre alfabetizandos y alfabetizadores basado en la confianza y el respeto mutuo. En la actualidad, las personas que vienen a la casa, a pesar de su edad, realizan un gran esfuerzo para venir, contentas porque saben que ese día algo vamos a aprender. A la tarea alfabetizadora le sumamos un aprendizaje significativo y de utilidad para la vida cotidiana. Nos demuestran su confianza consultándonos acerca de temas personales, como trámites bancarios, de salud, situaciones

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problemáticas con sus familias, etc. En este año 2015 nos sumamos a la campaña contra la violencia, el maltrato y la subestimación en la educación de la mujer. No queremos volver a escuchar: “A mi hermano lo mandaron al colegio y a mi ¡no! ¿Por qué no me mandaron? ¿Porque soy mujer?” o “No puedo ayudar a mi hijo con los deberes”. Una sociedad que quiere crecer debería tener en cuenta que la educación de la mujer está asociada a una mejor calidad de vida tanto para ella como para los que la rodean. Alfabetizarse significa poder recuperar la dignidad. El corazón y la mente de un alfabetizador se juntan con la convicción que desde el amor, los cambios comienzan de verdad.


Política

Yo voto, tú eliges, nosotros miramos… ellos deciden Las elecciones como fin en sí mismo o como herramienta transformadora. La derrota del kirchnerismo en las urnas. El “proyecto”, ¿fue transformador? Una semana atrás, el 22 de noviembre, hemos asistido al último acto de la institución democrática fetiche de nuestro país: las elecciones. Representantes políticos de todos los colores, involucrados o no en la contienda, una vez concluído

Cuando se rompe el pacto entre gobierno y gobernados, la acción política se multiplica y corre como reguero de pólvora el ballotage comentaron lo valioso de esta nueva “fiesta de la democracia”. Los medios, todos, desde el más oficialista hasta el más ferviente opositor, acompañaron este discurso. Nosotros, por el contrario, pensamos que las elecciones no deben pensarse como un fin en sí mismo, sino

como una herramienta de transformación. Ya lo hemos dicho antes. La democracia en sí es un valor que debemos defender, pero ya va quedando corto. ¿Nos sentimos realmente representados por nuestros representantes? Cuando la política y los políticos fueron señalados por gran parte de la sociedad como culpables de la crisis económica, se dio paso a la movilización, que fue respondida con represión y muerte. Los sucesos de diciembre del 2001, el “que se vayan todos”, las asambleas, los piquetes y cacerolazos, nos dieron a entender que cuando se rompe el pacto entre gobierno y gobernados, la acción política se multiplica y corre como reguero de pólvora. Sin embargo, se quiere hacer pasar esa etapa como parte de un pasado al que no se debe volver. Una de las consignas anti Macri fue “Si gana Macri

volvemos al 2001”, buscando generar una asociación con el caos y no con la resistencia. Es coherente esta estrategia con el discurso kirchnerista del “retorno a la normalidad”, de volver a generar identificación con la política y restaurar la confianza en las elecciones. La base de este

“El pueblo con Cristina” parecía ser una frase verdadera. Pero ese mismo “pueblo” no estuvo con Scioli argumento estaba sólida: tras el triunfo de Néstor Kirchner (que, como podemos recordar, no fue tal, ya que Menem lo derrotó en primera vuelta, bajándose luego del ballotage), las elecciones que dieron ganadora a Cristina Fernández (2007 y 2011) mostraron tanto una buena concurrencia a las urnas (cerca del 80%) como amplios márgenes de victoria: 45% contra 20% de Carrió en 2007 y 54% contra 16% de Binner en 2011. “El pueblo con Cristina” parecía ser una frase verdadera, que sirvió como justificación para casi todo, desde represiones hasta lanzamientos de satélites al espacio. Pero ese mismo “pueblo”, no estuvo con Scioli. O tal vez si, pero no lo

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Política suficiente como para permitirle derrotar a Macri, el flamante presidente. Lo que nos lleva al siguiente punto. ¿Por qué siempre llegamos a las elecciones teniendo que elegir un mal menor? Por primera vez en 12 años dos candidatos a presidente llegaban con posibilidades de ganar. Tres, si incluimos a Massa, pero que tras las P.A.S.O quedó en evidencia que la disputa iba a ser entre Macri y Scioli. El resultado de la primera vuelta electoral (37% Scioli, 34% Macri) activó una disputa cabeza a cabeza entre ambos candidatos, resuelta en un ballotage que dio vencedor a Cambiemos por apenas una diferencia menor al 3% y que dejó algunas cuestiones para analizar. En primer lugar, pensamos que hay simplificaciones discursivas que llegan a ser alarmantes. En su momento, la Alianza se

Los nombres de su gabinete nos permiten intuir hacia donde irán las decisiones del macrismo. Pero lo importante para ellos es que ya lograron su objetivo: ganar las elecciones. presentó y ganó como alternativa al menemismo encarnado en Duhalde. En todos los aspectos clave (económico, político y social) el gobierno de De la Rúa marcó continuidades e incluso profundizó el desastre de la

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década menemista. Hoy cuando Macri, flamante presidente, se plantea como el “cambio” nada dice en concreto respecto a su plan de gobierno. Con figuras como Prat Gay, Marcos Peña y Patricia Bullrich a la cabeza del gabinete, podemos intuir hacia donde irán las decisiones del macrismo. Pero lo importante para ellos es que ya lograron su objetivo: ganar las elecciones. Además, la última gran hazaña política de la militancia de base del kirchnerismo pasó por llamar a votar a Scioli, intentando culpabilizar a quienes tratamos de ser coherentes con nuestras posiciones políticas, y no votamos al “mal menor”. Incluso ahora algunas voces derrotadas insisten en responsabilizar y repartir culpas al Frente de Izquierda y otras agrupaciones por haber propuesto votar en blanco. Si bien nosotros como organización no coincidimos con esa línea, también descartamos sumarnos a las iniciativas de espacios “no kirchneristas” de proponer el voto “contra Macri”. Siempre lo dijimos: criticamos las propuestas de ambos espacios por igual. El Frente para la Victoria y el Pro han demostrado en sobradas ocasiones su negativa a discutir cuestiones estructurales, tanto económicas como políticas. El modelo productivo basado en el ingreso de divisas originadas por la exportación de materias primas no es cuestionado. El tipo de democracia que tenemos, tampoco es puesto en debate.

Por otro lado, el reciclado de las estructuras políticas tradicionales y los aparatos electorales parece no tener fin. La caída del gobierno de Fernando De la Rúa fue interpretada por muchos como el fin del radicalismo. La sucesión de presidentes en las semanas finales de 2001 y la posterior elección de Eduardo Duhalde como Jefe de Estado hasta 2003, parecían confirmar esto. Años después y tras aliarse con candidatos como De Narváez, Carrió o Binner, la UCR terminó confluyendo con Macri, imponiéndose en las elecciones del domingo pasado. Si bien no han logrado ocupar puestos de notoria visibilidad, sí consiguieron lo que buscaban: intendencias, gobernaciones y cientos de bancas legislativas, suficientes para garantizar la existencia material del partido. La reciente renuncia de Sanz a ocupar cualquier cargo, no hace


Política más que confirmar este planteo. El Peronismo, el Partido Justicialista, actor protagónico de la última década (tanto en lo discursivo como en lo concreto) se encuentra en un proceso de reconfiguración bastante importante, que podría llevar tanto a profundizar su actual fragmentación (kirchnerismo, massismo, peronismos variados del interior como el de Rodríguez Saa, etc) como a su reunificación. Massa dio un discurso apenas terminado el ballotage planteándose como alternativa y como “oposición seria” a Macri. ¿Con qué estructura podría llegar a serlo? Con la del PJ, claro está. Cristina deja de ser presidenta y no ocupa cargos. ¿Es una señal de que piensa ocupar un rol de referencia hacia el interior del peronismo? ¿O se alejará de la política? En síntesis, el Pro logró derrotar al kirchnerismo en las urnas. Desde 1983 que un partido político no lograba controlar al mismo tiempo y por la vía electoral el poder ejecutivo nacional, bonaerense y porteño. ¿Cómo

La última gran hazaña política de la militancia de base del kirchnerismo pasó por culpabilizar a quienes no votamos ni llamamos a votar al “mal menor” se pasó de la mayoría del 54% a la derrota en el ballotage? Los motivos de los votantes siempre son múltiples, las encuestas

generadas por las consultoras nunca son del todo confiables. Tras una campaña vacía de contenido, cuyo máximo exponente fue el chato debate televisivo previo al 22 de noviembre, se impuso el concepto del “cambio” por encima de la continuidad propuesta por el oficialismo. La intensificación de la campaña militante del kirchnerismo en el mes que pasó entre la primera vuelta y el ballotage demostró no ser suficiente para revertir la tendencia impuesta por la campaña de tono “amable” de Macri. Se abre entonces el interrogante: ¿fue el kirchnerismo un proyecto político transformador? Desde lo discursivo así se presentó y así fue defendido, por propios e incluso, últimamente, por ajenos. Pero en lo concreto, una vez que apareció un candidato que planteó una disputa acertada (en gran medida, de nuevo, desde lo discursivo) y cuando el candidato “del proyecto” no estuvo a la altura, el mismo fue derrotado. Insistimos: un 3% de diferencia no permite sacar conclusiones de ningún tipo. Nadie sabía a ciencia cierta cuánto iba a durar Kirchner cuando asumió en 2003 hasta que en 2005 Cristina

derrotó a Chiche Duhalde en la provincia de Buenos Aires y el kirchnerismo ganó el aparato del PJ. Las miras están puestas entonces a las legislativas de 2017, en las que Macri buscará consolidar un poder legislativo que hoy se le presenta esquivo, sin mayorías e incluso con el kirchnerismo con mayoría en el Senado. En las que también sabremos si Cristina buscará regresar a la escena política y veremos en qué lugar queda Massa. Elecciones a las que, y esta es nuestra apuesta, intentaremos llegar en el proceso de construcción de una alternativa política que exprese y lleve a la arena electoral los problemas de fondo que afectan a nuestra sociedad y que hoy no se encuentran en los programas políticos. Elecciones que sean algo más que solo eso. Que sean de una vez, una herramienta y no un fin en sí mismo.

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Género

Una vieja herida, con sangre joven En una sociedad sostenida por la violencia de la explotación del hombre por el hombre, ejercida por una pequeña minoría propietaria, la violencia contra las mujeres parece natural e inevitable, apareciendo como un objeto que se posee, al punto tal de pensar que tanto los varones como el mismo estado pueden ser dueños de sus cuerpos y de sus vidas. Durante estos últimos doce años, el gobierno kirchnerista tomó la bandera de los derechos humanos pero, a pesar de esto, las vulneraciones de los mismos continuaron. La ausencia del aborto legal, seguro y gratuito es un ejemplo paradigmático del difícil avance en la cuestión de género. El desarrollo de un pueblo requiere niveles educativos distribuidos homogéneamente entre géneros y estratos sociales, por eso es importante instrumentar, con sentido práctico y sin hipocresías, políticas de familia y maternidad, para lo cual creemos que es fundamental legalizar el aborto. Podemos ver que el embarazo adolescente aparece fundamentalmente en los hogares con bajos recursos. A pesar de que el 53% de estas mujeres no planeó tener un hijo y que el 60% abandona

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sus estudios (según datos de la UNFPA), ese niño es uno de los proyectos de vida más tangible que pueden tener, obteniendo, de esta manera, una pequeña visibilización en esta sociedad que las deja de lado. El debate sobre el aborto lleva más de cuarenta años, pero has-

ta el día de hoy no se sancionó el proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo hasta las doce semanas de gestación, el cual fue presentado por primera vez en 2007 y nunca se discutió en el congreso.

Esta ley busca despenalizarlo y legalizarlo, como derecho a la autonomía de las mujeres sobre sus propios cuerpos, para que puedan tomar decisiones sobre su vida y su maternidad, reduciendo el índice de mortalidad de las gestantes. En nuestro país, la interrupción voluntaria del embarazo o el aborto inducido es un delito, aunque se realizan entre 450.000 y 500.000 abortos clandestinos al año, según datos de La Nación en 2011. Nuestro Código Penal establece el aborto no punible solo en dos ocasiones, siempre que sea practicado por un médico diplomado y tenga el consentimiento de la mujer encinta: 1) Si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la madre y si este peligro no puede ser evitado por otros medios (aborto terapéutico). 2) Si el embarazo proviene de una violación o de un atentado al pudor cometido sobre una mujer idiota o demente (sí, está escrito de esta manera en el


Género Código). En este caso se habla de aborto eugenésico. Este Código vigente, lejos está de contemplar el riesgo para la salud integral, ya que cuando el aborto es voluntario y no punible, los hospitales deben atender a la mujer demandante y no

La ausencia del aborto legal, seguro y gratuito es un ejemplo paradigmático del difícil avance en la cuestión de género trabar la solicitud remitiéndola a un proceso judicial, pero muchas veces se gestiona esta intervención. La judicialización innecesaria de esta práctica pone una barrera inconstitucional al acceso a la salud, induciendo a las mujeres que tienen derecho a practicar una interrupción legal de su embarazo a hacerlo en condiciones de clandestinidad e inseguridad. De esta manera, vemos cómo la violencia institucional, tanto del sistema judicial como del sistema de salud cada vez que una mujer decide realizarse un aborto no punible, queda imperceptible la mayoría de las veces. A esta violación de los derechos, se le suma un discurso científico genetista y católico (con Papa argentino y todo) que invisibiliza a las mujeres, en favor de la protección de la familia. Detengámonos a pensar un segundo. Cuando una mujer decide exponer su cuerpo a una práctica abortiva clandestina,

impuesta por la penalización del aborto, está expresando que la continuidad de su embarazo es más peligrosa que el aborto en sí mismo. Los embarazos forzados, que terminan en maternidades forzadas, ponen en riesgo la salud psicofísica tanto de las mujeres como de sus hijos, limita su libertad y su dignidad, su derecho a decidir y su integridad como persona. Por todo esto, creemos que durante varios años tuvimos gobiernos hipócritas, que legitimaron decretos de emergencia en materia de la violencia de género, sin presupuestar los programas para prevenir la misma. En la Ciudad de Buenos Aires se cerraron centros de atención a las víctimas de violencia sexual para priorizar los gastos de campaña. El Estado, a través de sus fuerzas represivas y sus funcionarios políticos y judiciales, le da impunidad a las redes de trata y explotación sexual que

Cuando una mujer decide exponer su cuerpo a una práctica abortiva clandestina está expresando que la continuidad de su embarazo es más peligrosa que el aborto en sí mismo operan a lo largo y a lo ancho de nuestro país, negándose a legalizar el derecho de las mujeres a disponer de sus propios cuerpos. La Iglesia, promulga mensa-

jes de paz mientras redobla sus mandatos misóginos, culpabilizando a las mujeres que luchan por la equidad en una sociedad donde son discriminadas. El 3 de Junio de este año, se realizó una convocatoria masiva al grito de “Ni Una Menos”, la cual fue anunciada en todos los medios y difundida por miles de personas. El 25 de Noviembre se llamó a marchar

Durante varios años tuvimos gobiernos hipócritas, sin presupuestar los programas para prevenir la violencia de género y cerrando centros de atención a las víctimas de violencia sexual por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia hacia la Mujer, para seguir el reclamo colectivo, pero esta vez los medios de comunicación no estuvieron acompañando la difusión de la misma manera que lo hicieron en la primera. Hoy la preocupación es el gabinete de Macri, y está muy bien que así lo sea, pero no nos olvidemos que las mujeres siguen muriendo, y que el próximo gobierno lejos está de darle una solución a esta problemática. Hay que seguir exigiendo nuestros derechos con uñas y dientes, para transformar esta sociedad que nos oprime. Porque vivas nos queremos... ¡Si tocan a una, nos organizamos miles!

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Educación

La educación: ¿fin de una era?

El ciclo lectivo 2016 nos encontrará con nuevo presidente. Cómo será el modelo educativo y la gestión de la escuela pública es una incógnita. Ya hay precedentes que nos permiten imaginar el camino que hará el macrismo. El balance de esta etapa es necesario para saber con qué contamos para garantizar derechos y educación de calidad. Esta pregunta sabemos que puede ser capciosa. Para algunos la respuesta será algo positivo, y para otros, algo negativo. A riesgo de parecer ridículos, nosotros preferimos hablar de continuidad. Es cierto que un gobierno nada tendrá que ver con el otro en el plano de lo simbólico. Ya lo observamos cuando, a pocos días de ganado el balotaje, Macri dio a conocer su gabinete. No hay duda de que cada uno de los puestos será ocupado por un representante fiel del empresariado moderno. Hasta aquí, todos estamos de acuerdo. Lo que resulta más engorroso dilucidar es en qué medida hablamos de

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continuidades en lo educativo. Entre paréntesis, si hacemos esa caracterización en el plano de lo educativo y simbólico, como buenos analistas marxistas, el plano de lo productivo evidentemente también tendría continuidad. Por empezar, el Pro gobernó los últimos 8 años el distrito más rico de la Argentina. Eso permitió que disponga de una caja capaz de solventar un salario docente superior al de la provincia, lo que delimitó al gremio docente que se vio imposibilitado de hacerle un paro. No porque los sueldos sean muy altos, sino porque la burocracia no para de dejar

los salarios por debajo de la inflación, la Ciudad de Buenos Aires comenzó las clases normalmente en los últimos años de gobierno. Algunos dirán que, para julio del 2015, Macri tuvo que sufrir un fuerte paro docente con movilización, a raíz de la separación del cargo de la maestra y la directora por mal desempeño en el caso del niño asesinado por su padrastro, es totalmente cierto. Si bien por un lado las clases empezaron en tiempo y forma, el macrismo nunca en ningún momento dio señales de querer reconocer la labor docente no solo a través del salario, sino principalmente a la hora de no estigmatizarlos. Culpar a la escuela de los problemas sociales a los que se ve sometida, es poner el carro delante del caballo. Eso ameritaba una marcha grandísima, con la cual el sindicato se sentía “en su zona de confort” para llevarla adelante.


Educación Sin haberle hecho un paro, y garantizando de esa forma que sea el ejemplo frente a los votantes, UTE mantiene la firme postura de que es opositor. Del otro lado del riachuelo, la escuela deja muchísimo que desear aun. Uno de los distritos con mayor cantidad de estudiantes no logró garantizar los 180 días de clases en todos estos años, no solo por los paros docentes (que le hace el gremio claramente oficialista) sino por la falta de agua, las inundaciones contantes, la poca inversión en infraestructura y especialmente en garantizar condiciones de trabajo saludables. De hecho, la frustrada primera dama Karina Rabolini señalaba como positivo que en la provincia de buenos aires a diferencia de CABA, el docente podía trabajar dos cargos frente a alumnos para garantizar un salario digno

pero claramente en condiciones paupérrimas de laburo (sólo un docente puede entender de lo que hablamos). Es decir, la cosa está así. Por un lado mucho discurso progresista sobre la inclusión y poco sobre calidad, que sorprendentemente es reproducido por sectores del nuevo oficialismo. Ningún país

El mismo desafío: un sindicato autónomo de los gobiernos de turno capitalista, que quiera parecer próspero, supondría que la educación es un gasto. Sin embargo, mientras que el futuro ministro de educación de la Nación, Esteban Bullrich nada tiene que ver con la rama, en la provincia de Buenos Aires hemos padecido los últimos años a una enquistada marketing woman, Nora de Lucia, que tampoco tenía nada que ver

con la especialidad. En el mientras tanto algunos ya patalean. A pesar de estar manchados por el vaciamiento de los fondos de IOMA, los gordos sindicalistas sin guardapolvo pretenden hacernos creer que son la resistencia al ajuste que se viene. Si no se levantaron cuando cristina dijo que trabajamos 4 horas, ¿por qué lo harían ahora? Todas las cosas que vemos buenas, por nombrar una la Educación Sexual Integral, serán defendidas por los verdaderos preocupados y ocupados verdaderamente por la educación. Quienes continuamos con el mismo desafío: un sindicato autónomo de los gobiernos de turno, capaz de conquistar aquello que tanto anhelamos, el reconocimiento pleno de la sociedad frente a la más noble tarea a la que puede aspirar una persona: ser maestros y maestras.

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Lo que hacemos

Hacer el recorrido Cuando uno tiene que poner en palabra las tarea que desarrolla todos los dias tiende a caer en las rutinas. Pero en realidad en este espacio de la revista queremos contarles cómo fuimos trabajando estos 15 años, y construyendo una forma propia de enseñanaza. Obviamente que muchos espacios como el nuestro se deben sentir identificados, porque la verdad es que no creamos nada nuevo. Lo que sí logramos fue hacer el recorrido, y de eso se trata. La educación popular tiene para nosotros dos significados fundamentales. Por un lado es el marco teórico que explica la tarea diaria, y por el otro es una identidad. Es imposible encontrar un recetario, un manual, un di-

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seño curricular que diga qué hay que hacer para aplicar modelos educativos de este tipo, porque, como lo dice el

titulo de esta nota se trata de caminar, de desandar y andar nuevamente, hasta hallar la

educación que necesita el pueblo para alcanzar la igualdad y la libertad. Es cierto que frases así suenan como hechas, pero la verdad es que la práctica nos ha demostrado que en cada espacio, en cada encuentro, se produce algo original que permite cristalizar lo que estamos hablando. El recorrido no es sencillo, e incluso sería necesario que los nuevos sujetos tanto individuales como colectivos que pretendan transitarlo lo hagan desde el principio. En nuestro caso el principio fue el apoyo escolar y la copa de leche. Hacer la tareas que la escuela mandaba ha sido casi siempre el origen de las grandes cosas. Aprobar materias, cumplir con las obligaciones. Recién para el 2002 fue necesario abrir un espacio sistemático donde comer “algo” porque


Lo que hacemos casi nada abundaba por es sencillo de verlo, porque aquellos años en las mesas de a partir de buscar respuestas nuestros niñxs. Pero como fue modificándose nuestra forma de vida. La verdad es que no A partir de allí, es que creamos nada nuevo. Lo decidimos transformar que sí logramos fue hacer nuestras prácticas, revisar el recorrido, y de eso se y discutirlas hasta el día de trata hoy. Eso quiere decir que no es un acabado, y que a intuíamos que la merienda cada paso hay tropezones, sola no alcanzaba se empeza- y a cada incógnita nuevos ron a desarrollar talleres que desafíos. propusieran algo más que la Para dar un ejemplo, lograr leche. que los talleres no sean De esa manera, lo que era guiados por un “sabelotodo” un asistencialismo empieza no fue tarea sencilla, ya que a germinar. Preguntas como todos de alguna manera u ¿pero se van a sus casas y otra traemos incorporados la qué pasa? Sólo los vemos 4 estructura clásica del dictado o 5 horas ¿eso alcanza? ¿qué de clases. Ese es por ejemplo cambiamos haciendo esto? un contenido, que más que Estas preguntas transenseñar a no tener un “jefe” formaron a todos, y como enseña a no delegar nuestros siempre decimos, más a no- aprendizajes en otros sino a sotros que a los chicos. Eso construirlos.

Hoy estamos acá con el camino casi transitado, lo cual

Ese es por ejemplo un contenido, que más que enseñar a no tener un “jefe” enseña a no delegar nuestros aprendizajes en otros sino a construirlos significa que ya superamos el punto de retorno. Y eso es tan positivo para el mundo como para cada uno de nosotros, porque demuestra que todo es posible si creemos seriamente en nuestro sueño, nos fijamos atentamente en la vida, comparamos nuestras observaciones con nuestros castillos en el aire, y en general trabajamos escrupulosamente en la realización de sus fantasías.

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Resistencia

Un mundo sin sueños En la época de las grandes contradicciones y necesidades de cambios, la humanidad transita entre el escepticismo y la naturalización de las cosas, debido a la crisis de una dirección revolucionaria y el final de los grandes relatos. No obstante, las resistencias se multiplican por todas partes. Reconstruir el sueño de que otro mundo posible, es la tarea del momento. Si algo caracteriza el espíritu de un período histórico, son las obras de sus principales pensadores y artistas. Basta con leer los relatos decimonónicos de Julio Verne, para observar cómo en los inicios del capitalismo, el futuro parecía ser una escalera infinita que llevaba al hombre hacia cumbres inimaginables. Nada parecía ser un obstáculo en la naciente civilización, que conquistaba hasta los más recónditos lugares del planeta para llevar las bondades del progreso. La fe en la técnica y en la ciencia, no admitía detractores. Ni siquiera, entre los más acérrimos críticos del joven sistema. Sin ir más lejos, Marx y Engels, planteaban un socialismo imbuido de aquella fe. Un socialismo que, a fin de cuentas, era la máxima consecución de dicho progreso. La garantía de un mundo que traspase del reino de la necesidad al de la abundancia, y por ende a la libertad más absoluta. Pero… ¡Qué distintos son estos tiempos! 20

Ya casi nadie cree en un futuro semejante. Las visiones de lo que vendrá están plagadas de imágenes desesperantes. Los monstruos parecen hacerse reales, y se manifiestan en películas y libros apocalípticos. Son los tiempos del cine catástrofe, del miedo y la desesperanza. De los ataques terroristas “irracionales”, del regreso a la religión como explicación del mundo. El capitalismo senil, envejece las relaciones sociales. El recuerdo del fracaso de los socialismos “reales” del

de semejante alienación. En la demanda de una seguridad que ancle tanta incertidumbre. Cultura de la senilidad, al fin y al cabo. Miedo a un futuro que no se muestra muy alentador. Y no lo es, realmente. Hoy el mundo es mucho más desigual que nunca. Las cifras de desnutridos avanza velozmente, en la era en que existen las tecnologías suficientes para garantizar que nadie pase hambre. Al mismo tiempo, en el puñado de países dominantes, grandes contingentes humanos sufren de obesidad mórbida. Las 85 personas más Las 85 personas más ricas del mundo poseen las misricas del mundo poseen las mismas riquezas que mas riquezas que la mitad más pobre del planeta. El la mitad más pobre del 10% del de la población planeta mundial concentra el 86 % de los recursos (Informe pasado siglo lo garantiza. Oxfam, en Huffington Post Los sujetos crecen temero20/01/2014) sos unos de otros, aislados y La financiarización de la escépticos. Viven sin proeconomía, proceso que se yección, sin sueños, optando inició a principios de los por aquello que más a mano ‘70, profundizado con las tienen. Viven en lo inmedia- ventajas de la revolución to, en el consumo desafora- de las comunicaciones, ha do que calma las angustias fomentado la especulación


Resistencia económica, en detrimento de la producción. Casi todos los Estados del planeta poseen deudas siderales con el capital financiero, que hacen pagar a sus sectores populares, poniendo de rodillas países enteros. La obtención de dinero rápido y en grandes cantidades, va de la mano de la especulación y los negocios ilegales. Esto se traduce en crisis cada vez más violentas y duraderas. Crisis que, probablemente, sean resueltas a través de guerras, que el sistema alimenta cada vez más como medio de superación. Este capitalismo de rapiña, trae además aparejado, la destrucción sistemática del medio ambiente. La irracionalidad propia de un sistema que es anárquico en su propia naturaleza, carente de planificación, lleva a que en pos de la obtención de ganancias, se destruyan bosques en cuestión de meses, se contaminen ríos,

se destruyan cultivos que garantizan la seguridad alimentaria de la población, se obstaculice la utilización de energías renovables y limpias, en favor de las muy rentables contaminantes, entre muchas otras cosas. Todo este cuadro, hace urgente, la necesidad de un cambio radical. Ya no sólo se juega la “utopía” de un mundo mejor, hoy la crisis del sistema pone en riesgo la supervivencia de las futuras generaciones humanas. Los monstruos que el sistema

Las visiones de lo que vendrá están plagadas de imágenes desesperantes. Los monstruos parecen hacerse reales ha generado cobran cada vez mayor vigor, y avanzan sobre una humanidad que los observa cada vez más atemorizada, cada vez más refugiada en sus miedos, en

su impotencia. Sin embargo, en todas partes, hay resistencias. En todos lados, hay gente dispuesta a enfrentar a los monstruos; desde trabajadores luchando contra las corporaciones más poderosas, hasta ambientalistas defendiendo los recursos naturales; desde oprimidos resistiendo a sus invasores, hasta mujeres cuestionando el patriarcado. Todos luchando contra el mismo enemigo. Todos en pos de los mismos intereses. Por eso, es necesaria una dirección política para cambiar las cosas de raíz. Una dirección que devuelva la fe en que otro mundo es posible. Una dirección que le devuelva a la humanidad los sueños de una vida mejor. Y aunque a nosotros mismos nos parezca imposible, no podemos dejar de intentarlo. Es nuestra obligación poner nuestro granito de arena en eso.

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Lo que hacemos

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