Diciembre 2023 - Antena Misionera

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Revista de los Misioneros de la Consolata

Nº 554 - AÑO 58 - DICIEMBRE 2023

www.antenamisionera.org

Terremoto en el olvido

Hace dos meses, Marruecos fue sacudida por un devastador terremoto que dejó tras de sí una estela de destrucción y dolor. Las imágenes de edificios derrumbados, calles llenas de escombros y personas desesperadas se han convertido en un sombrío recordatorio de...

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ESTAR CERCA DE LOS MÁS FRÁGILES

Queridos hermanos y hermanas: Ante nosotros está el mar, fuente de vida; pero este lugar evoca la tragedia de los naufragios, que provocan muerte. Estamos reunidos en memoria de aquellos que no sobrevivieron, que no fueron salvados. pág 28

BIENAVENTURADOS LOS COMPRENSIVOS

Según esta enseñanza del evangelio, aquellos que son capaces de ponerse en el lugar del otro y escuchar sus problemas, sin importar su pág 17 apariencia física o...

refugiados y migrantes

PRIORIDAD HUMANITARIA


Sumario

si quieres saber más

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Año 58 - N. 554 - DICIEMBRE 2023

EDITORIAL 3 - Cuando la Palabra dejó de ser sonido, para ser Vida

Director: P. Bernardo Baldeón Santiago bbaldeon@gmail.com Administración: P. José Martín Ruiz admesp@consolata.net Maquetación: Antonio Pareja Alonso Equipo de redacción: Loreto Areal, Antonio García, Antonio Pareja, María Teresa Simón, Beatriz Tostado.

Colaboradores: J. Altavista, Hna. María Dina, Inés M. Pousadela, Quique,

I nformación 4 - Terremoto en el olvido: La realidad tras el desastre de Marruecos 10 - Sueños bajo el cielo Mongol 21 - Libros y demás 22 - Gabón ¿El fin de una dictadura y el comienzo de otra? 28 - El drama de la migración infantil en América Latina 30 - La crisis de refugiados y el compromiso humanitario de la Iglesia

OPINIÓN Fotos: Archivo IMC, Agencias

Suscripciones: Anual De colaborador

20 € 25 €

Imprime:

8 - Estar cerca de los más frágiles

REFLEXIÓN 14 - Las extraordinarias aventuras de Hna. María Dina en Alabama 16 - Y la palabra se hizo pueblo 26 - Bajo la estrella de la esperanza

Con licencia eclesiástica Depósito legal: M-1944-1964 Franqueo Concertado Nº 01/433 Redacción y administración: Pablo Aranda, 18 - 28006 Madrid Tfno.: 91 563 58 03 91 563 58 04 630 465 779 E - Mail: antena@consolata.net secretariaam@consolata.net Se autoriza la reproducción de artículos de Antena Misionera citando su procedencia y enviando tres ejemplares a su redacción.

34 - Desconectados 36 - Los Derechos Humanos

FORMACIÓN 17 - Bienaventurados los que cuidan la tierra


E D I TO R IAL

Cuando la Palabra dejó de ser sonido, para ser Vida

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n la cercana Navidad nos intercambiaremos numerosas palabras llenas de buenos deseos y augurios de felicidad. No podemos cambiar la costumbre. Y como tantas veces, muchas de ellas serán palabras vacías simplemente para cumplir el expediente. A veces será un breve mensaje para no romper del todo el contacto con personas con las que nos comunicamos solo en estas fechas. ¡Cuánta palabra vacía! ¡Cuánta palabra que no toca nuestros sentimientos ni las fibras de nuestro ser! Son un signo de cómo hemos ido construyendo nuestra sociedad sobre la “vaciedad humana”, llenándola de cosas superficiales. Y cuando hablo de cosas superficiales no me refiero tanto a cosas materiales, sino a realidades tan profundamente humanas como la palabra. La palabra que está llamada a ser la forma de expresar mi interioridad, de entrar en contacto con los demás… pero ¡cuánta palabra hueca! Para muchos de los que siguen manteniendo un sentimiento religioso, la Navidad se identifica con un niño, nacido en Belén, hace muchos años y en un pesebre… Pero si vamos más allá de lo puramente externo y folklórico, Navidad tiene un sentido mucho más profundo. Los expresa Juan en su evangelio: “La Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios… En ella estaba la vida… Y la Palabra se hizo carne…”. En medio de tanta palabra vacía, que es mero sonido, Dios aparece como Palabra creadora que da vida. Y da vida porque la Palabra de

hace carne. Algo que se puede tocar. Algo que entra en contacto con las personas. Algo que es capaz de transformar a las personas y al mundo. Nos cuesta explicarlo. Pero todos intuimos la diferencia entre una palabra que no pasa de ser aire y una palabra que nos permite entrar en comunión con los demás y nos compromete a cambiar la realidad. Celebrar la Navidad es aceptar la invitación de Dios a transformar nuestra vida en “palabra que se hace carne”. Carne que se alegra con la alegría del otro. Carne que sufre con el sufrimiento del otro. Carne dispuesta a generar vida en un mundo marcado por la muerte. “Ésta es mi carne que se entrega por vosotros”, dirá Jesús en la última cena. Su muerte en la cruz es la plenitud de la Navidad. Como Iglesia estamos llamados a ser Palabra/Carne que se entrega para que el mundo, la humanidad entera tenga Vida y una Vida Plena. ¡Cuántas palabras descarnadas en nuestras comunidades cristianas! La Iglesia misionera quiere ser esa Palabra Viva, dispuesta a llegar a la muerte para que la Buena Noticia del Reino se haga presente en todos los rincones de la tierra. Como misioneros nos preguntamos permanentemente si somos fieles a esa tarea recibida. Con dolor reconocemos nuestros límites y pecados. Con esperanza seguimos buscando nuevos caminos en la construcción de un mundo nuevo, más justo y humano.

P. Bernardo Baldeón

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Brecha entre el Marruecos "Útil" y el "Inútil" La brecha entre el Marruecos "Útil" y el "Inútil" es una problemática que refleja la disparidad en el desarrollo y la atención gubernamental entre las zonas urbanas prósperas y las regiones rurales empobrecidas. Esta brecha se ha vuelto aún más evidente y preocupante en el contexto del terremoto que ha sacudido al país. Algunos de los aspectos clave de esta brecha: Desarrollo desigual: Durante años, el gobierno de Marruecos ha priorizado el desarrollo de las ciudades costeras y otras áreas que se consideran económicamente "útiles", como Kenitra – Rabat, Casablanca – Bouznika – Dar Bouaza, El Jadida – Azemour – Oualidia, Safi – Souira Redima y Essaouira. Estas zonas turísticas costeras a menudo han recibido una inversión significativa en infraestructura, educación, atención médica y otros servicios básicos, gracias a su importancia para la economía del país. Como resultado de esta atención preferencial, estas regiones han experimentado un crecimiento económico sostenido y una mejora en la calidad de vida de sus habitantes. Olvido de las regiones rurales: En contraste, vastas regiones del interior de Marruecos y las zonas montañosas han quedado en gran medida marginadas en términos de desarrollo. La falta de atención gubernamental en estas áreas se manifiesta en la ausencia de infraestructura adecuada, como carreteras y sistemas de agua potable, y en la falta de servicios esenciales como la atención médica y la educación de calidad. Impacto en las comunidades: Las comunidades que residen en estas regiones marginadas se enfrentan a una serie de desafíos. La falta de acceso a agua potable segura y atención médica de calidad pone en riesgo su salud y bienestar. Además, la carencia de oportunidades económicas significativas a menudo resulta en altos niveles de desempleo y pobreza. Vulnerabilidad en tiempos de crisis: Cuando ocurren desastres naturales como el terremoto reciente, estas disparidades se vuelven aún más evidentes y problemáticas. Las comunidades marginadas carecen de la infraestructura resistente y de la capacidad de respuesta gubernamental necesaria para hacer frente a tales situaciones de manera efectiva. Esto les deja en una posición pre-

caria, donde las consecuencias del desastre son más devastadoras y difíciles de superar. Necesidad de equidad y desarrollo inclusivo: El terremoto en Marruecos es un recordatorio crítico de la importancia de abordar la brecha entre el Marruecos "Útil" y el "Inútil". Para lograr un desarrollo sostenible y equitativo, es esencial que el gobierno invierta en el desarrollo de las regiones marginadas, mejorando la infraestructura, brindando acceso a servicios esenciales y fomentando oportunidades económicas. Esto no solo reducirá la vulnerabilidad en tiempos de crisis, sino que también contribuirá a un Marruecos más justo y próspero en su conjunto.

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s ... donde la pobreza y la falta de inversión son evidentes, luchando por reconstruir tras el devastador terremoto.

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Entre el terremoto y la desolación en el Atlas Marruecos se encuentra en una encrucijada de desafíos, desde el reciente terremoto que sacudió la región hasta la persistente crisis en la desolada región del Atlas, en el corazón del país. El majestuoso Atlas, que se extiende a lo largo de 2.400 kilómetros en el noreste de África, es una joya geográfica de Marruecos y una atracción turística de renombre. Sin embargo, esta cordillera no revela su verdadera historia a simple vista. En el corazón del Atlas, alejado de los destinos turísticos de renombre, reside una población que lucha por sobrevivir en condiciones que parecen ancladas en la Edad Media. El terremoto reciente ha agravado aún más la difícil situación en la región del Atlas. A las condiciones precarias de vida, la falta de desarrollo y la carestía de servicios básicos se suma ahora la destrucción causada por el sismo. Carreteras rudimentarias o inexistentes, escasez de hospitales y atención médica, ausencia de escuelas y servicios básicos como alcantarillado y electricidad son la norma en estas zonas olvidadas. La vida de quienes habitan en

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las áreas más desfavorecidas del Atlas es una batalla constante. Aquí, la subsistencia se basa en la cría de ganado y en una agricultura de supervivencia. El invierno, además de traer consigo temperaturas gélidas, trae nieve que bloquea los caminos durante semanas, aislando a las comunidades. En situaciones extremas, incluso bebés han perdido la vida por desnutrición, y una simple enfermedad puede convertirse en una sentencia de muerte debido a la falta de atención médica adecuada. Este Marruecos olvidado rara vez recibe atención en los medios internacionales o el interés de las agencias turísticas. La región del Atlas, que sirve como divisor natural entre las costas mediterráneas y atlánticas y el desierto del Sáhara, no es un destino apetecible para aquellos que buscan el confort de la vida moderna. Muchos europeos ni siquiera podrían imaginar vivir en estas condiciones. Cada invierno, algunos habitantes del Atlas se ven obligados a abandonar sus hogares en busca de refugio en lugares más amigables. Pero este año, el frío se ha intensificado, con fuertes nevadas que bloquearon carreteras y dejaron a numerosos pueblos aislados. La vida


económica y social en amplias zonas del Atlas se ha detenido por completo, y el costo de la madera, una fuente crucial de calor, ha aumentado considerablemente. La tragedia ha golpeado a los pastores, quienes han perdido sus rebaños en medio de la nieve y el frío. A pesar de que el fenómeno climático era predecible, las autoridades locales y nacionales parecen no haber tomado medidas preventivas. Mientras que en otros países, las catástrofes desencadenan una rápida movilización de recursos y ayuda, en Marruecos, esta respuesta se ha visto gravemente limitada. Esta situación resalta aún más la marginación que enfrentan las poblaciones amazighs en Marruecos. En un país que construye un moderno Tren de Alta Velocidad y se proyecta como un centro de desarrollo, es inaceptable que millones de marroquíes sigan viviendo en condiciones medievales y muriendo de frío en pleno siglo XXI. Mientras tanto, muchos marroquíes, especialmente jóvenes con aspiraciones y educación, podrían seguir buscando un futuro en el extranjero, en busca de un lugar donde sus esperanzas y necesidades sean atendidas. La situación en el Atlas es un recordatorio sombrío de que Marruecos enfrenta desafíos internos y externos que requieren una atención inmediata y eficaz.

Perspectivas de futuro El terremoto en Marruecos no es solo una tragedia natural, sino también un recordatorio doloroso de las profundas desigualdades que persisten en el país. Mientras las ciudades prosperan y atraen a turistas de todo el mundo, las comunidades rurales luchan por sobrevivir en condiciones precarias. Es imperativo que el gobierno marroquí y la comunidad internacional se comprometan a abordar estas disparidades y a proporcionar el apoyo necesario para reconstruir las áreas afectadas. La casa real marroquí también debe reconsiderar su papel en momentos de crisis. La respuesta a un desastre no debe limitarse a reuniones de emergencia en palacios, sino que debe llegar a las personas que más lo necesitan. La comunicación transparente y la empatía con la población son fundamentales para generar confianza y unidad en tiempos difíciles. En última instancia, el terremoto en Marruecos debe servir como un llamado a la reflexión sobre la importancia de abordar las desigualdades sistémicas en todo el mundo. Ninguna comunidad debe ser dejada atrás, y la solidaridad y la colaboración son fundamentales para superar los desafíos que enfrentamos como sociedad. El tiempo dirá si esta tragedia puede convertirse en un punto de inflexión para un Marruecos más justo y equitativo.

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Palabra de la Iglesia

al mundo de hoy

Estar cerca de los más frágiles Queridos hermanos y hermanas: Ante nosotros está el mar, fuente de vida; pero este lugar evoca la tragedia de los naufragios, que provocan muerte. Estamos reunidos en memoria de aquellos que no sobrevivieron, que no fueron salvados. No nos acostumbremos a considerar a los naufragios como noticias y a los muertos como cifras; no, son nombres y apellidos, son rostros e historias, son vidas truncadas y sueños destrozados. Pienso en los numerosos hermanos y hermanas ahogados en el miedo, junto con las esperanzas que llevaban en el corazón. Frente a semejante drama no sirven las palabras, sino los hechos. Pero antes de todo, hace falta humanidad, hace falta silencio, llanto, compasión y oración. Los invito ahora a un momento de silencio en memoria de estos hermanos y hermanas nuestros; dejémonos conmover por sus tragedias. Demasiadas personas, huyendo de los conflictos, la pobreza y las catástrofes naturales, encuentran entre las olas del Mediterráneo el rechazo definitivo a su búsqueda de un futuro mejor. Y así este espléndido mar se ha convertido en un enorme cementerio, donde muchos hermanos y hermanas se ven privados incluso del derecho

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de tener una sepultura, pero la única a ser sepultada es la dignidad humana. En el libro-testimonio "Hermanito", el protagonista, al final del turbulento viaje que lo condujo desde la República de Guinea hasta Europa, afirma: «Cuando te sientas sobre el mar estás en una encrucijada. A un lado está la vida, al otro la muerte. Allí no hay otras salidas». Amigos, ante nosotros también se abre una encrucijada: por una parte, la fraternidad, que fecunda de bien la comunidad humana; por otra, la indiferencia, que ensangrienta el Mediterráneo. Nos encontramos frente a una encrucijada de civilización. ¡O la cultura de la humanidad y de la fraternidad, o la cultura de la indiferencia: en la que cada uno se las arregle como pueda! No podemos resignarnos a ver seres humanos tratados como mercancía, aprisionados y torturados de manera atroz cuando los echamos, están destinados a ser torturados y encerrados, no podemos seguir presenciando los dramas de los naufragios, provocados por contrabandos repugnantes y el fanatismo de la indiferencia. La indiferencia se vuelve fanática. Deben ser socorridas las personas que, al ser abandonadas sobre las olas, corren el

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La complejidad y urgencia de la cuestión migratoria en Europa es un desafío humanitario que requiere una respuesta global y solidaria.

riesgo de ahogarse. Es un deber de humanidad, es un deber de civilización. El cielo nos bendecirá si en la tierra y en el mar sabremos cuidar de los más débiles, si sabemos superar la parálisis del miedo y el desinterés que condena a muerte con guantes de seda. En esto, nosotros, los representantes de las distintas religiones, estamos llamados a dar ejemplo. Dios, en efecto, bendijo al padre Abrahán. Él fue llamado a dejar su tierra de origen: «partió […] sin saber a dónde iba». Huésped y peregrino en tierra extranjera, recibió a los viajeros que pasaron cerca de su tienda, «exiliado de su patria, carente de morada, él mismo era anfitrión y patria de todos». Y «como recompensa de su hospitalidad recibió el don de una posteridad». En las raíces de los tres monoteísmos mediterráneos está por tanto la hospitalidad, el amor por el extranjero en nombre de Dios. Y esto es vital si, como nuestro padre Abraham, soñamos con un futuro próspero. No nos olvidemos del estribillo de la Biblia: "el huérfano, la viuda y el migrante, el extranjero". Huérfano, viuda y extranjero: estas son las personas a las que Dios nos ordena asistir. Nosotros los creyentes, por tanto, debemos ser ejemplares en la acogida recíproca y fraterna. A menudo las relaciones entre los grupos religiosos no son fáciles, pues la carcoma del extremismo y la peste ideológica del funda-

mentalismo corroen la vida real de las comunidades. Pero quisiera, a este respecto, hacerme eco de lo que escribió un hombre de Dios que vivió no lejos de aquí: «Que ninguno guarde en su corazón sentimientos de odio hacia su prójimo, sino de amor, porque el que tuviere odio, aunque sea a un solo hombre, no podrá estar tranquilo ante Dios. Dios no escucha su oración mientras guarde rencor en su alma». Hoy también Marsella, caracterizada por un variado pluralismo religioso, está frente a una encrucijada: encuentro o confrontación. Y yo les agradezco a todos ustedes, que se ponen en el camino del encuentro: gracias por su compromiso solidario y concreto en favor de la promoción humana y de la integración. Ustedes son la Marsella del futuro. Sigan adelante sin desanimarse, para que esta ciudad sea para Francia, para Europa y para el mundo un mosaico de esperanza. Como deseo, quisiera finalmente citar algunas palabras que David Sassoli pronunció en Bari, con ocasión de un encuentro precedente sobre el Mediterráneo: «En Bagdad, en la Casa de la Sabiduría del Califa Al Ma'mun, judíos, cristianos y musulmanes solían reunirse para leer los libros sagrados y a los filósofos griegos. Hoy todos, creyentes y laicos, sentimos la necesidad de reconstruir esa casa para continuar juntos a luchar contra los ídolos, derribar

muros, construir puentes y dar contenido a un nuevo humanismo. Mirar en profundidad nuestro tiempo y amarlo aún más cuando es difícil de amar, creo que es la semilla sembrada en estos días [de reflexión] tan comprometidos con nuestro destino. ¡Ya basta de tener miedo a los problemas que nos plantea el Mediterráneo! [...] Para la Unión Europea y para todos nosotros, nuestra supervivencia depende de ello». Estén cerca de todos, especialmente de los más frágiles y menos afortunados, y que no les falte nunca a los que sufren vuestra cercanía atenta y discreta. Así crecerán en ellos, pero también en ustedes, la fe que anima el presente, la esperanza que abre al futuro y la caridad que dura para siempre. Este es el primer movimiento: llevar a los hermanos la mirada de Jesús. Hermanos, hermanas, afrontemos unidos los problemas, no hagamos naufragar la esperanza, ¡formemos juntos un mosaico de paz! Me alegra ver aquí a muchos de ustedes que se hacen a la mar para salvar, para rescatar migrantes. Y muchas veces les impiden ir, porque ―dicen― que al barco le falta algo, le falta esto, esto otro... Son gestos de odio contra el hermano, disfrazados de "equilibrio". Gracias por todo lo que hacéis. Papa Francisco 22 de Septiembre de 2023

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ongolia, un vasto país enclavado entre la Siberia rusa y el norte de China, es conocido por sus extensas estepas y la legendaria figura del guerrero Genghis Khan. Sin embargo, detrás de esta imagen pintoresca y épica, se esconde una realidad preocupante para los niños de Mongolia. A medida que exploramos los desafíos que enfrentan estos jóvenes en un país marcado por la pobreza, la educación deficiente y la lucha por la supervivencia, surgen preguntas cruciales sobre sus derechos fundamentales y las soluciones necesarias para garantizarles un futuro más prometedor. Redacción

El desgarrador costo del estrés y la depresión en Mongolia En medio de las vastas estepas de Mongolia, donde el horizonte se extiende hasta donde alcanza la vista, existe un problema silencioso y desgarrador que afecta a sus habitantes más jóvenes: el estrés, la depresión y la adicción a tabaco y drogas. A medida que nos adentramos en las ciudades de Mongolia, especialmente entre las niñas, se hace evidente que el peso invisible de la salud mental se ha convertido en una carga insoportable para muchos. Mongolia, con su vasto paisaje y riquezas naturales, parece un lugar de promesas infinitas. Sin embargo, tras este escenario de belleza se oculta una paradoja cruel: una de las tasas

de suicidio más altas del mundo, afectando tanto a niños como a adultos. La transición hacia la democracia y la economía de mercado en la década de 1990 introdujo una creciente desigualdad económica, la privatización de tierras y recursos, y la disminución de servicios sociales. Esto llevó a la migración de familias rurales a las ciudades en busca de oportunidades, dejando a muchos jóvenes con un profundo sentido de incertidumbre y desesperanza. El sistema educativo altamente competitivo y la presión para cumplir con las expectativas académicas y familiares también son fuentes significativas de estrés para los jóvenes mongoles. El agotamiento físico y emocional

es una consecuencia común de esta búsqueda constante de éxito. La falta de recursos y oportunidades de desarrollo personal ha dado lugar a un aumento preocupante en la adicción al tabaco y las drogas entre los jóvenes mongoles, buscando un escape temporal de la realidad abrumadora. Sin embargo, la adicción solo agrava sus problemas de salud mental y los expone a riesgos graves para su salud física. En busca de la igualdad educativa Mongolia ha realizado avances significativos en la mejora de su sistema educativo, implementando programas gratuitos y obligatorios para todos los niños. No obstante, siguen surgiendo

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desafíos que amenazan con socavar la igualdad educativa en el país. La persistente desigualdad de género y la influencia de las tradiciones culturales han llevado al abandono temprano de la escuela en muchas regiones, especialmente en las comunidades nómadas. Además, la lamentable persistencia de castigos corporales en las aulas plantea interrogantes sobre la calidad de la educación y la seguridad de los estudiantes. En este contexto, muchos niños y niñas se encuentran en la difícil encrucijada de elegir entre su educación y el apoyo a las necesidades de sus familias. Tomemos el caso de Batbold y Saran, dos jóvenes mongoles de 11 años que pastorean cabras en las vastas llanuras de Mongolia. Saran, proveniente de una familia nómada en una región remota, se queda en casa de Batbold durante el año escolar y colabora en el cuidado de los animales después de la escuela. Sin embargo, a medida que Batbold crezca, enfrentará mayores presiones para abandonar la escuela y unirse a tiempo completo a las tareas de su familia. Esta tendencia se ha intensificado debido a recientes cambios gubernamentales en la propiedad del ganado. Batbold, al igual que muchos otros niños en su situación, anhela no tener que tomar la angustiante decisión entre la educación y su familia. Comprende que dedicarse exclusivamente al pastoreo podría limitar su conocimiento y oportunidades de futuro. Además de las tensiones familiares y las responsabilidades posteriores a la escuela, los estudiantes en las regiones rurales de Mongolia a menudo enfrentan condiciones escolares precarias, con instalaciones sanitarias deficientes y aulas sobrepobladas. Estos factores desalientan a los niños y niñas a continuar en la escuela y muchos optan por abandonarla prematuramente. A pesar de estos desafíos, se están llevando a cabo esfuerzos para mejorar las condiciones en las escuelas y las residencias de estudiantes en las comunidades nómadas. Además, se están implementando programas de educación no formal para aquellos que no pueden asistir a la escuela de manera regular. La capacitación de

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los maestros y la mejora de las instalaciones, incluyendo sistemas de agua potable y saneamiento, son parte de estos esfuerzos para adecuar las escuelas a las necesidades de las comunidades nómadas, asegurando que todos los niños y niñas tengan acceso a una educación de calidad. Estos cambios buscan allanar el camino para que jóvenes como Batbold y Saran puedan continuar sus estudios y forjar un futuro más prometedor.

"El estrés y la adicción afectan a jóvenes mongoles en un país con altas tasas de suicidio" La dura realidad de los niños subterráneos En el crudo invierno de Ulan Bator, Mongolia, un grupo de niños vive en las sombras de las bulliciosas calles de la ciudad. Obligados a vivir en la calle por la pobreza y el abandono, son las víctimas invisibles de una sociedad que los ha abandonado a su suerte. Las calles de Ulan Bator pueden ser implacables, con temperaturas que pueden descender hasta -40ºC, y estos niños se ven obligados a encontrar refugio donde puedan. Para algunos, eso significa refugiarse en las alcantarillas y tuberías subterráneas con calefacción de la ciudad, viviendo en un mundo de oscuridad y peligro. 2023

Estos niños son los rostros invisibles de los niños de la calle de Mongolia, un grupo que se estima en miles. Son las víctimas de una sociedad que no les ha proporcionado las necesidades básicas de la vida, como comida, cobijo y educación. Muchos han sido abandonados por sus familias, mientras que otros han huido de hogares abusivos o se han visto atrapados en el ciclo de pobreza y adicción que asola el país. A pesar de los retos a los que se enfrentan, estos niños son supervivientes, resistentes ante dificultades inimaginables. Se unen para protegerse, comparten recursos y se cuidan unos a otros en un mundo que les ha dado la espalda. Pero su resistencia sólo puede llevarles hasta cierto punto y, sin el apoyo de la sociedad, se ven abandonados a su suerte en un mundo a menudo cruel e implacable. En un mundo donde la información viaja rápidamente, las historias de los niños mongoles nos recuerdan la brecha que aún persiste entre los que tienen oportunidades y los que luchan por sobrevivir. La salud mental, la desigualdad educativa y la vida en las alcantarillas son realidades que no pueden atribuirse únicamente a Mongolia, sino que nos desafían a todos como sociedad global. ¿Cómo podemos, como habitantes de un mundo interconectado, contribuir a cerrar estas brechas y brindar un futuro mejor a todos los niños, sin importar su lugar de origen? La respuesta yace en nuestro compromiso colectivo para crear un mundo más justo y equitativo.


Con tus Manos

Presupuesto trimestral Compra y distribución de canastas de alimentos (arroz, aceite, leche, sardinas, salsa de tomate, queso, té, café, azúcar, mermelada, yogur) para migrantes no alojados en el centro de recepción

2.778.00 €

Alimentación de personas en acogida de urgencia

8.334,00 €

Compra y distribución de kits de higiene (mascarilla Covid-19, jabón, cepillo y pasta de dientes, toalla, ropa limpia)

5.556,00 €

Compra de medicamentos básicos para la atención de la salud

1.389,00 €

Indemnización al personal local: 1 mediador social, 2 médicos, 1 coordinador de acogida

3.889,20 €

Costos de mantenimiento del centro (luz, agua, gas, teléfono)

2.222,40 €

Si quieres colaborar puedes enviar tu aportación a nombre de: “Misioneros de la Consolata” Mediante giro postal o cheque bancario a c/ Pablo Aranda 18 – 28006 MADRID O mediante transferencia o ingreso en el Banco Santander en la cuenta

ES19 0075 7007 89 0603882903

Indicando siempre: “Proyecto Oujda”


En el corazón de una pequeña y humilde parroquia en Alabama, uno debe aprender a ser creativo para fomentar la integración, apoyar a los inmigrantes, ayudar a las mujeres embarazadas y enseñar inglés. Existe otra América, alejada de los rascacielos de Manhattan, una América formada por personas de escasos recursos pero también caracterizada por una solidaridad profunda y una generosidad que conmueve. Hna. María Dina Misionera de la Consolata

La realidad oculta de los Estados Unidos Cuando pensamos en Estados Unidos, es natural imaginar rascacielos imponentes y autopistas gigantescas con diez carriles. Pero la realidad para el 98% de los estadounidenses es bastante diferente. La mayoría trabaja arduamente para afrontar los gastos diarios. Durante mi prolongada estadía en los Estados Unidos, tuve la oportunidad de realizar mi misión en tres estados donde las Misioneras de la Consolata estamos presentes: Michigan, donde llegué como estudiante y me

quedé como maestra; Alabama, donde viví durante unos 20 años; y Arizona, en la Nación de los Pima, donde pasé 4 años. Un apostolado significativo en Michigan En Michigan, trabajé en el Catholic Center of Concern de Birmingham, una organización dedicada a ayudar a las personas más necesitadas, principalmente afroamericanas e hispanas, en su mayoría mexicanas y refugiadas en busca de oportunidades laborales en los Estados Unidos.

Después de seis años, se me encomendó la dirección de la escuela parroquial San Francisco, cerca de Birmingham. Era una escuela afroamericana, mayormente de familias con recursos limitados. La mayoría de los estudiantes asistían de manera gratuita, a pesar de ser una escuela privada. Esto presentaba desafíos para cubrir los costos de contratar docentes. Con un personal reducido, me esforzaba por abarcar diversas áreas no cubiertas y estar cerca de los estudiantes y sus familias, que enfrentaban numerosos problemas y preocupaciones.


Miembros del pueblo Pima de Arizona, una comunidad rica en tradiciones y cultura

Una experiencia desafiante en la periferia Uno de los momentos más desafiantes de mi misión fue servir como Administradora Pastoral de una parroquia en la periferia. En los Estados Unidos, como en muchas partes, la escasez de sacerdotes y religiosas es una realidad, y pocas personas aceptan cargos en comunidades pequeñas. Estas parroquias a menudo carecen de pastores. En ese momento, mientras finalizaba mi Maestría en Teología, el obispo de Birmingham me pidió que asumiera la guía de la última parroquia de la diócesis, ubicada en los límites con Montgomery. Esta comunidad estaba en expansión debido a la llegada de numerosos mexicanos. Después de aprender español en unos meses, asumí la dirección de la parroquia "de la Resurrección". Esta experiencia, llena de temores y dudas, se convirtió en un testimonio de caridad y unión. Conocí a todas las familias de la parroquia, cristianas y no cristianas.

su dedicación y amor han dejado una huella imborrable en la comunidad que sirvió durante años

Un inesperado campo de apostolado Sin previo aviso, surgió una nueva forma de servicio. Muchas familias jóvenes de origen mexicano buscaban ayuda para las visitas prenatales porque no hablaban inglés. Ante esta creciente necesidad, decidimos concentrar las visitas en un día de la semana y acompañar a las mujeres embarazadas a la sala de maternidad, que estaba a 60 km de distancia. A pesar de que no tenía experiencia en obstetricia, estuve presente en 126 nacimientos. Esto atrajo a muchas familias a la parroquia, y comenzamos a celebrar misas en español. Después de nueve años, con profunda tristeza, me pidieron que regresara a Michigan, esta vez en la diócesis de Saginaw. Seguí siendo Administradora Pastoral, pero esta vez en una parroquia mucho más grande, aunque con una comunidad de fieles diferente, pero con el mismo enfoque en la caridad y la unión. Aunque nunca tuve la oportunidad de poner un pie en África, como inicialmente deseaba al embarcarme en mi vocación misionera, el Señor me ha brindado una comunidad diversa y numerosa. Encontré la oportunidad de ser una pequeña semilla de consolación en la vida de aquellos con quienes tuve el privilegio de cruzar caminos. Mi gratitud va hacia Él por el regalo de la misión en la familia de la Consolata... JULIO - AGOSTO 2023

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Relaciones humanas, relaciones divinas. Pablo Cirujeda. San Pablo Ediciones 2023. 110 págs.

¿Cómo interviene la fe en el modo de relacionarnos con Dios, con nosotros mismos y con los otros? Pablo Cirujeda nos invita en este libro a repensar nuestras relaciones personales y con el Creador, a meditar sobre la vida contemplada, compartida, escuchada e iluminada por Jesús de Nazaret. Él es nuestro modelo de existencia, el referente con el que podemos confrontar nuestras propias vidas. Nuestra manera de acercarnos, dialogar y actuar con nosotros mismos, con los demás y con Dios.

El reparto de África: de la Conferencia de Berlín a los conflictos actuales. Roberto Ceamanos. Ed. Casa de Africa. 160 págs

Las fronteras africanas establecidas a finales del siglo XIX destacan no solo por ser “artificiales”, sino sobre todo porque su creación es anterior a la de los estados que delimitan. Las potencias coloniales europeas invadieron el continente y acordaron repartírselo en la Conferencia de Berlín (18841885), pero lo que no deja de sorprender es que aquellas fronteras que nada tenían que ver con las etnias africanas anteriores se mantuvieran tras la descolonización. La explotación de los recursos naturales (diamantes, oro, petróleo, coltán…) y los conflictos que alimenta también se han mantenido; son conocidas sus consecuencias en países como Angola, Liberia, Sierra Leona, Sudán del Sur, Nigeria o la República Democrática del Congo.

La hora de la comunidad. Una Iglesia realmente sinodal. Francisco A. Castro Pérez. San Pablo Ediciones 2023. 277 págs.

Pasó la hora de los clérigos y religiosos como actores casi exclusivos de la vida y misión de la Iglesia. Se anunció el tiempo del laicado y estamos aún inmersos en la marca de los múltiples caminos especializados. Ahora la nueva conciencia de la Iglesia sinodal reclama el protagonismo de todo el pueblo de Dios, en la responsabilidad compartida de pastores y laicos, y en la complementariedad de ministerios, servicios y carismas. Esto, de forma irrenunciable, nos remite hoy a la comunidad cristiana y, por ende, a la parroquia encarnada en la inagotable diversidad de entornos sociales y de situaciones personales y colectivas.

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En agosto pasado, Gabón vivió un momento histórico. Tras las controvertidas elecciones en las que el presidente Ali Bongo obtuvo un tercer mandato, los militares tomaron el poder en menos de una hora, poniendo fin a los 56 años de reinado de la familia Bongo. Aunque la población recibió a los militares con gratitud por liberarlos de un régimen autoritario, el camino hacia la verdadera democracia es incierto. Las implicaciones del golpe de estado en Gabón y las complejidades de la transición hacia la libertad democrática son temas cruciales a analizar. Inés M. Pousadela

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Autocracia depredadora Omar Bongo llegó al poder en 1967 y lo mantuvo durante más de 40 años. Solo empezó a permitir la competencia multipartidista en 1991, después de asegurarse de que su Partido Democrático Gabonés, con un nombre irónico, mantendría su control mediante una combinación de clientelismo y represión. Su hijo y sucesor conservó el poder de la dinastía con unas elecciones plagadas de irregularidades en 2009 y 2016. En ambos casos, la opinión generalizada fue que Bongo no era el verdadero ganador. La Constitución se modificó en repetidas ocasiones para facilitar nuevos mandatos y se manipularon sistemáticamente las normas y los calendarios electorales. En 2016, el flagrante fraude desencadenó violentas protestas que fueron reprimidas de forma aún más violenta. En 2018, Bongo sufrió un derrame cerebral que lo apartó de la escena pública durante casi un año, lo que alimentó la preocupación de que pudiera no estar en condiciones de gobernar. Pero un intento de golpe militar en 2019 fracasó y fue seguido de una represión mediática, detenciones de políticos de la oposición y un endurecimiento del Código Penal para criminalizar la disidencia. Bajo el reinado dinástico de los Bongos, la corrupción, el nepotismo y el comportamiento depredador de las élites fueron rampantes. Gabón, un pequeño país de 2,3 millones de habitantes situado en la costa atlántica de África central, posee vastas reservas de petróleo, que representan alrededor de 60 % de sus ingresos. En términos de producto interno bruto (PIB) por habitante, es uno de los países más ricos de África, pero un tercio de su población es pobre, en marcado contraste con la incalculable riqueza mal habida de la familia Bongo y su círculo íntimo.

¿Por qué ahora y ahora qué? El golpe se presentó como una reacción a unas elecciones indudablemente fraudulentas. Al tomar el poder, el autoproclamado «Comité para la Transición y la Restauración de las Instituciones» anunció la anulación de los comicios y la disolución de las instituciones ejecutivas, legislativas, judiciales y electorales. Bongo fue puesto bajo arresto domiciliario junto con su hijo mayor y su asesor antes de ser liberado y autorizado a aban-

En la parte superior: Ali Bongo, presidente depuesto de Gabón, tras el golpe de Estado que puso fin a su régimen. En la parte inferior: El general Brice Oligui Nguema, líder del golpe, desfila triunfalmente en un jeep por las calles de la capital tras tomar el poder.

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Manifestantes disidentes de Bongo expresan su apoyo a la democrácia

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donar el país por razones médicas. Varios altos cargos han sido detenidos acusados de traición, corrupción y diversos actos ilícitos, y al parecer se han incautado grandes cantidades de dinero en efectivo en sus domicilios. El general golpista Brice Oligui Nguema es ahora el jefe de la supuesta junta de transición en el poder. Asegura que la disolución de las instituciones es solo «temporal» y que éstas serán «más democráticas». Habrá elecciones, dice, pero no demasiado pronto. Primero habrá que redactar una nueva Constitución, un nuevo Código Penal y una nueva legislación electoral. DICIEMBRE 2023

Pero mientras las calles se llenaban de celebraciones, la condena internacional no se hizo esperar, empezando por el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres. La Unión Africana suspendió a Gabón hasta que se restablezca el orden constitucional, al igual que la Comunidad Económica de Estados de África Central. La condena provino de la Unión Europea y de varios de sus Estados miembros, así como de la Mancomunidad de Naciones (Commonwealth), a la que Gabón logró integrarse en junio de 2022 pese a no cumplir las normas mínimas de democracia y derechos humanos. El presidente de Nigeria, Bola Tinubu, expresó su preocupación por el «contagio autocrático» que se extiende por África. Tinubu lidera actualmente los esfuerzos de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental para revertir el golpe de Estado en Níger, el 26 de julio. Algunos observadores sostienen que este golpe es diferente a otros ocurridos en África Central y Occidental, ya que no se basó en cuestiones de seguridad, sino más bien en la ausencia de democracia, evidenciada en el fraude electoral, así como en la corrupción y la mala gestión que impidieron a las instituciones satisfacer las demandas básicas de la población. Esta es la postura que adoptan muchos miembros de la sociedad civil gabonesa, lo que les enfrenta a las instituciones internacionales, a las que acusan de haber tolerado a los Bongos durante demasiado tiempo.


derarse una continuación del régimen derrocado, sobre todo por los vínculos familiares entre los Bongó y el general Nguema, también feliz propietario de una fortuna de origen desconocido. Algunos de los nombramientos del nuevo gobierno parecen confirmar las sospechas de Ossa. Más allá de su composición, está la cuestión clave de cuánto tiempo pretende durar este gobierno. La pompa de la ceremonia de toma de posesión de Nguema desmiente su anunciado carácter temporal.

Se trata del octavo golpe militar con éxito en África Occidental y Central en los últimos cuatro años. En ningún lugar se han retirado los militares a los cuarteles tras aplicar lo que invariablemente se describen como medidas «correctivas» y «temporales». Al tomar el poder, los militares se han hecho no solo con el poder político, sino también con el control de la riqueza económica que sostenía la cleptocracia de Bongo. Es poco probable que se vayan de buena gana, y cuanto más tiempo permanezcan, más difícil será derrocarlos. El gobierno golpista ha mostrado hasta ahora una cara moderada, pero no hay garantías de que esta actitud perdure ante la insatisfacción popular. Si la gente que salió a la calle para celebrar el golpe vuelve a hacerlo para protestar por la falta de cambios reales, la represión no tardará en llegar. La comunidad internacional debe seguir instando a los militares a comprometerse firmemente con un plan de transición rápida hacia un gobierno plenamente democrático y responsable. De lo contrario, el pueblo gabonés corre el peligro de pasar de una dictadura a otra, y no quedará nada de aquel fugaz momento en que la libertad parecía estar al alcance de la mano. DICIEMBRE 2023

GABÓN: ¿EL FIN DE UNA DICTADURA?

Pero otros no están de acuerdo, aunque se alegren de la marcha de los Bongos. El candidato de la oposición, Albert Ondo Ossa, considerado el verdadero ganador de las elecciones, expresó su decepción por lo que describió como una «revolución palaciega» y un «asunto familiar». Ossa esperaba un nuevo recuento, que podría haberle colocado a la cabeza de un nuevo gobierno democrático. Pero en cambio, lo que vio fue un gobierno de transición que podría consi-

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uatro meses habían transcurrido desde el devastador terremoto que sacudió una pequeña ciudad de Marruecos cuyo nombre ahora no tiene importancia. La vida de Ahmedou y Laila, una pareja de inmigrantes irregulares provenientes de Mauritania, se volvía cada vez más difícil. Ahmedou, un albañil, luchaba por encontrar empleo constante, mientras que Laila esperaba con ansias la llegada de su primer hijo, al que planeaban llamar Karim. Un día, mientras Ahmedou trataba de reparar los daños causados por el terremoto en su humilde hogar, Laila lo llamó desde la puerta. "Ahmedou, mira esto", exclamó, señalando un comunicado gubernamental clavado en un poste cercano. El corazón de Ahmedou se aceleró mientras leía el aviso. El gobierno, sumido en la crisis que azotaba la región, había tomado medidas drásticas para deportar a los inmigrantes irregulares, incluyendo a aquellos que provenían de Mauritania. A medida que sus ojos se movían por las palabras impresas, su mente se llenaba de preguntas atemorizantes. ¿Qué les sucedería si eran deportados? ¿Cómo podría proteger a Laila y a su futuro hijo en un lugar desconocido? ¿Podrían mantenerse juntos como familia en medio de la incertidumbre y la adversidad? "Laila", murmuró con voz temblorosa, "no sé cómo afectará esto nuestras vidas. Estamos en situación irregular, y ahora la amenaza constante de deportación pende sobre nosotros. Además, estamos esperando a Karim". Laila lo miró con determinación. Tomó su mano y dijo con voz suave pero llena de esperanza: "Ahmedou, sé que es ate-

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rrador, pero debemos aferrarnos a la esperanza. En el pasado hemos enfrentado dificultades juntos antes y las superamos. Lo haremos de nuevo, por nuestro hijo y por nosotros". Así, la pareja se encaminó hacia el lugar de registro designado en medio de los escombros de la ciudad. Mientras esperaban en la fila, Ahmedou no podía evitar hacerse más preguntas dramáticas sobre el futuro incierto que les aguardaba. ¿Serían separados de su hijo antes de que naciera? ¿Encontrarían un lugar seguro para criar a Karim? Cada pregunta aumentaba su temor y su determinación de luchar por su familia. Finalmente, completaron el registro y a los pocos días se les informó que debían dirigirse a un albergue temporal en las afueras de la ciudad, ya que el gobierno había impuesto restricciones adicionales en el barrio donde vivían y la amenaza constante de deportación pendía sobre aquellos que no cumplieran con las nuevas regulaciones. A pesar de la incertidumbre y el temor, Ahmedou y Laila avanzaron juntos hacia el albergue con sus pertenencias limitadas, buscando un lugar seguro para su futuro hijo en un entorno cada vez más hostil. En el albergue, compartieron un pequeño espacio y pronto comenzaron a formar lazos más fuertes que nunca. La solidaridad floreció entre los residentes, compartiendo alimentos donados por vecinos compasivos y apoyo emocional. Comprendieron que, a pesar de sus diferentes orígenes, compartían el mismo temor y la misma esperanza de un futuro mejor.


rovocación Misioner

Una noche, mientras Ahmedou y Laila estaban en el albergue, Laila comenzó a sentir contracciones, y pronto quedó claro que el momento del parto se acercaba. A pesar de la incertidumbre y el miedo que pesaba sobre ellos debido a las amenazas de deportación, la comunidad de inmigrantes se unió en un gesto conmovedor de apoyo a la pareja en ese momento crucial. Mujeres y hombres de diferentes orígenes y nacionalidades, todos enfrentando un destino incierto, se reunieron alrededor de Laila, ofreciéndole palabras de aliento y apoyo, mientras Ahmedou intentaba mantener la calma. A medida que las contracciones se intensificaban, una de las mujeres presentes, Farida, que había tenido experiencia como partera en su Mauritania natal, se adelantó para ayudar a Laila. Con manos expertas y una calma reconfortante, guió a Laila a través del dolor del parto, recordándole que estaban rodea-

dos de amigos que se preocupaban profundamente por su bienestar. La noche en que Karim finalmente nació, una estrella brillante iluminó el cielo sobre la ciudad devastada por el terremoto. Su luz, intensa y luminosa, cortaba a través de la oscuridad que había envuelto la ciudad desde el desastre natural. La estrella parecía un regalo de esperanza, una señal de que incluso en los momentos más oscuros y desesperados, la vida seguía su curso inexorable, lleno de misterio y maravilla. Para Ahmedou y Laila, que sostenían a su recién nacido hijo en brazos, la aparición de esa estrella brillante fue más que un fenómeno astronómico; fue un símbolo de fortaleza y perseverancia. En ese momento tan significativo, su fe en un futuro mejor se fortaleció. A pesar de las amenazas constantes de deportación y el temor que habían experimentado, esa estrella les recordó que la esperanza nunca se extinguía.

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Causas y Dimensiones de la Crisis Migratoria “Cada vez hay más niños en movimiento, de edades cada vez más tempranas, a menudo solos y de diversos países de origen, incluso de lugares tan lejanos como África y Asia”, afirmó el director de Unicef para América Latina, Garry Conille. En todo el mundo, un 15 % de los migrantes son niños, niñas y adolescentes, pero en América Latina y el Caribe esa proporción llega al 25 %, y cada vez son más pequeños, pues la edad de 91 % de ellos en algunos puntos de tránsito clave no pasa de 11 años. Destaca Unicef que en 2022 cerca de 250.000 migrantes, de los cuales unos 40.000 eran niños, niñas y adolescentes, cruzaron la peligrosa selva del Darién, entre Colombia y Panamá. En los primeros seis meses de 2023 más de 196.000 migrantes la han cru-

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zado, entre ellos más de 40.000 niños, niñas y adolescentes. El aumento de la migración se concentra dentro y a través de América Central y México, el movimiento de haitianos desde Haití y entre otros países de la región, y el movimiento desde Venezuela, siendo niños, niñas y adolescentes 42 % de los migrantes venezolanos. La inestabilidad, pobreza y colapso de servicios esenciales, la violencia, y el cambio climático, son señalados por Unicef como principales causas del desplazamiento de niños en la región, en su estudio “La infancia en peligro. El rostro cambiante de la niñez migrante en América Latina y el Caribe”. Riesgos y Desafíos para los Niños Migrantes Las familias esgrimen como razones desde la falta de alimentos hasta el deseo de que sus hijos tengan un

mejor futuro; o escapar de la violencia doméstica, política, de género y relacionada con las bandas, y los desastres provocados por huracanes o terremotos, agravados por el impacto del cambio climático y la pandemia covid-19. Unicef destaca que los riesgos físicos a lo largo de las rutas migratorias irregulares son innumerables, especialmente para los niños, que a menudo atraviesan selvas, ríos, vías férreas y carreteras, arriesgando su integridad, al margen de que pueden convertirse en víctimas de violencia, explotación y otros atropellos graves. En 2022, al menos 92 niños, niñas y adolescentes migrantes perdieron la vida o desaparecieron mientras se desplazaban por la región, una cifra superior a la de cualquier otro año desde 2014. Millones de migrantes no pueden acceder a las vías de migración re-


gulares y seguras porque carecen de documentación oficial, no disponen de medios para pagar el alto costo de la migración regular o no tienen un patrocinador en el país de destino. Esto puede convertir sus viajes en una experiencia peligrosa a través de terrenos traicioneros plagados de traficantes y otros delincuentes. Las familias migrantes también pueden ser detenidas en tránsito o al llegar a su destino, y corren el peligro de que los devuelvan a sus países de origen o al último país de tránsito. “Incluso si logran llegar a su destino, su futuro suele seguir en riesgo”, observó Conille.

En 2022, al menos 92 niños, niñas y adolescentes migrantes perdieron la vida o desaparecieron mientras se desplazaban por la región Los niños, niñas y adolescentes refugiados y migrantes también afrontan obstáculos para acceder a los servicios esenciales en los países de tránsito y destino. Algunos grupos son particularmente vulnerables. Entre ellos se encuentran los niños, niñas y adoles-

centes con discapacidades y los que pertenecen a grupos indígenas. Esa realidad plantea desafíos a las políticas migratorias nacionales y a las respuestas humanitarias en los países de origen, tránsito y destino, destaca Unicef. Pero reconoce que no es fácil, puesto que los flujos migratorios de la región a menudo se cruzan de manera que la mayoría de los países son puntos de origen, tránsito, destino y retorno al mismo tiempo, haciendo de América Latina el escenario de una de las crisis de migración infantil más grandes y complejas del mundo.

Unicef plantea un enfoque regional integrado con cinco puntos, el primero de los cuales es movilizar la protección internacional y atender las causas fundamentales de la migración específica de los niños. Propone invertir en los países de origen para mejorar el acceso a los servicios, prevenir y responder a la violencia, y crear oportunidades de educación y medios de vida para niños, jóvenes y familias vulnerables, y apoyar a los niños que permanecen en el país de origen mientras sus padres han migrado. Además, ampliar las vías migratorias seguras y regulares para niños y familias, incluidos mecanismos de reunificación familiar, manteniendo el derecho al asilo. “Se debe permitir que los niños y las familias ingresen al territorio de un Estado para solicitar asilo y quedarse allí mientras dure el procedimiento”, según Unicef. También, fortalecer los procesos fronterizos y de recepción para que tengan en cuenta a los niños y para que sean dirigidos por las autoridades de protección infantil en la etapa más temprana posible, implementando salvaguardias específicas, preservando la unidad familiar y garantizando el acceso a servicios legales. Y, finalmente, invertir en sistemas nacionales sólidos de protección infantil para salvaguardar a todos los niños, incluidos los migrantes y refugiados, de la explotación y la violencia, garantizando procedimientos adecuados para determinar su interés superior y promoviendo el cruce fronterizo seguro, concluye el documento.

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a magnitud de la crisis de refugiados es realmente abrumadora y va más allá de las estadísticas frías que solemos escuchar. Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), a fines de 2020, más de 82 millones de personas en todo el mundo se encontraban desplazadas forzosamente. Para ponerlo en perspectiva, esto equivale aproximadamente a la población total de países como Alemania o Turquía. Además de estas cifras alarmantes, es importante tener en cuenta que la crisis de refugiados no es estática; está en constante evolución. Los desplazamientos forzados continúan ocurriendo debido a nuevos conflictos y crisis humanitarias en diferentes partes del mundo. Esto significa que la cifra de 82 millones es dinámica y puede aumentar con el tiempo si no se abordan las causas subyacentes de los desplazamientos. Pero detrás de estos números hay innumerables historias desgarradoras de personas que han tenido que huir de sus hogares debido a la violencia, la persecución, los conflictos armados y otras circunstancias devastadoras. Son familias enteras, mujeres, niños y jóvenes que han dejado todo atrás en busca de un lugar seguro para vivir. Algunos han perdido a seres queridos en el camino, mientras que otros han sido testigos de horrores inimaginables. Refugiados y migrantes: prioridad humanitaria En medio de esta crisis global, la Iglesia ha demostrado un compromiso con la causa de los refugiados. En primer lugar, ha alzado su voz para concienciar sobre la difícil situación de los refugiados, abogando por políticas más compasivas y generosas por parte de los gobiernos. El Papa Francisco, volvió a destacar su firme compromiso con los migrantes y refugiados durante la celebración de la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado. Su exhortación resonó fuertemente en un momento en que algunos países europeos están endureciendo sus políticas antiinmigración. En su regreso a

Roma, el Papa no dudó en denunciar lo que él describió como el "fanatismo de la indiferencia" frente a la crisis migratoria. El mensaje del Pontífice fue claro y directo: los migrantes merecen ser acogidos, acompañados, promovidos e integrados en la sociedad. En un mundo donde las barreras se levantan con de-

"Millones de niños niñas y adolescentes de América Latina y el Caribe, y sus familias, han abandonado escuelas, amigos y comunidades para conformar una de las mayores y más complejas crisis migratorias del mundo" masiada frecuencia, el Papa Francisco instó a no dejar a los migrantes en manos de traficantes de personas sin escrúpulos. Su llamada a la solidaridad y la humanidad resonó como un recordatorio de que, en el corazón de la Iglesia católica, se encuentra el compromiso con la dignidad humana, sin importar la nacionalidad o la procedencia. Sin embargo, las palabras del Papa chocaron con las políticas antiinmigración que se están implementando en algunos países europeos, como el aumento de patrullas en las fronteras y la negación de la acogida a los migrantes. A pesar de estos desafíos, el mensaje del Papa sigue siendo un faro de esperanza para aquellos que luchan por un mundo más compasivo y solidario, donde la

crisis migratoria se aborde con empatía y colaboración en lugar de indiferencia y hostilidad. La dignidad humana como faro ante la crisis de refugiados La dignidad humana es un faro brillante en medio de la oscuridad de la crisis de refugiados que enfrentamos en el mundo. Esta crisis no solo nos concierne a todos, sino que nos desafía a tomar medidas significativas y a recordar lo que realmente importa: el respeto por la humanidad en su forma más pura. La dignidad humana nos une como una fuerza impulsora para enfrentar esta crisis. No se trata solo de brindar ayuda material, sino de extender una mano amiga y reconocer la humanidad en aquellos que han tenido que abandonar sus hogares en busca de seguridad y una vida mejor. ¿Qué significa esto para nosotros? Significa que no debemos subestimar el impacto que nuestras acciones pueden tener. Somos una generación de agentes de cambio, y nuestras voces son poderosas. El Papa Francisco nos recuerda que la "indiferencia" no puede ser una opción cuando se trata de la crisis de refugiados. Es nuestro deber alzar la voz y actuar en solidaridad. La confianza es clave en este esfuerzo. Tenemos la capacidad de construir puentes entre las comunidades desplazadas y las autoridades. Podemos ser los defensores que ayuden a las personas a hacer oír sus preocupaciones y a luchar por sus derechos.

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ÁFRICA

- Abrir camino a la esperanza enero p.3 - Impacto del cambio climático en África empeorará en 2023 enero p.32 - Diálogo sobre el desarme en la región del Tigray enero p.32 - África no es una mina que explotar, ni una tierra que saquear marzo p.4 - Están en peligro 20 millones de niños en el cuerno de África marzo p.30 - La sequía en Etiopía alimenta la violencia de género y los matrimonios forzados marzo p.32 - Abuelas de Zimbabue ayudan a conservar los alimentos julio p.32 - Sudán del Sur: Llamado deesperado a comunidades religiosas julio p.32 - Agua, eduación y fortaleza en Etiopía septiembre p.30 - Niger y Sudán: Doble crisis humanitaria en auge septiembre p.32 - Terremoto en el olvido: La realidad tras el destastre de Marruecos diciembre p.4

AMÉRICA

- Bolivia retorna a la senda de la reducción de la pobreza extrema enero p.32 - Inaugurado el encuentro de participación sinoidal marzo p.32 - Brasil: minería en tierras indígenas amazónicas abril p.33 - ¿Qué es la "transición justa" y qué significa para América Latina? mayo p.4 - Marginación y discriminación sistemática en Guatemala mayo p.32 - Defender la amazonía colombiana julio p.4 - Proyecto de ley amenaza la demarcación de tierras indígenas en la amazonía julio p.32 - ONU alerta sobre creciente inseguridad alimentaria en América central de Haití julio p.33 - Desplazamientos: Desafíos en el Chocó septiembre p.32 - Colombia: Aumento del 445% en migración de menores a través del Darién septiembre p.33 - El drama de la migración infantil en América Latina diciembre p. 27

ASIA

- La red ferroviaria de India es un medio de tráfico infantil enero p.26 - Abominables "ejecuciones de adolescentes" destacan los horrores de la pena de muerte enero p.33 - El calvario de los refugiados afganos marzo p.10 - Siria: Al menos 45.000 personas desplazadas por enfrentamientos armados en la ciudad de Afrin mayo p.32 - China sigue siendo uno de los países con menos libertad de prensa y política del mundo mayo p.32 - La persistencia de la esclavitud moderna en Bangladesh mayo p.33 - Rohinyá: La importancia de un periodismo propio para un pueblo que busca sobrevivir julio p.10 - El desafío de ser Dalit y cristiano en India julio p.30 - Líbano: Lucha en crisis socioeconómica septiembre p.32 - Sueños bajo el cielo Mongol diciembre p.10

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VARIOS

- Decadencia y caída de la democracia en el mundo enero p.4 - La guerra es un mal inmenso. Todo lo que toca lo destruye enero p. 10 - Lucha contra el paludismo se mantiene a pesar del covid enero p.30 - Disminuye la identificación de víctimas de la trata de personas marzo p.28 - La incitación al odio: una creciente amenaza internacional marzo p.32 - Criminalizar la protesta: La amenaza a la libertad de expresión y reunión pacífica mayo p.10 - La lucha contra la desnutrición infantil en el tercer mundo: medidas y soluciones mayo p.28 - "Muertes en la frontera" mayo p.30 - ¿Armas en alquiler? Temporada de mercenarios septiembre p.4 - "Corazones fervientes, pies en camino" septiembre p.10 - El número de desplazados en el mundo llega a cifras record septiembre p.28 - La crisis de refugiados y el compromiso humanitario de la Iglesia diciembre p.28

EDITORIALES

- Abrir camino a la esperanza enero p.3 - Ser misionero hoy marzo p.3 - Evangelización y diálogo mayo p.3 - No perder el lado humano de la evangelización julio p.3 - Evangelización y pobreza septiembre p.3 - Cuando la Palabra dejó de ser sonido, para ser Vida diciembre p.3

ALTAVISTA

- Construir la Paz - De la marginación a la pobreza - Vivir de titulares - Niños esclavos - La verdad es la base de la paz - Estar cerca de los más frágiles

PALABRA DE LA IGLESIA

- Verdadera y falsa consolación - Jesús, modelo de anuncio - La igualdad en la Iglesia - Estar en salida - La pasión por la evangelización - Estar cerca de los más frágiles

TESTIMONIO MISIONERO

- Aprender nuevas palabras para la vida - Pastoral afro-americana en Brasil - Llegué a Liberia y descubrí... otro mundo - Ucrania: El bien que no hace ruido - Con la sabiduría Mzee kobe - Las extraordinarias aventuras de Hna. María Dina en Alabama

enero p.8 marzo p.8 mayo p.8 julio p.8 septiembre p.8 diciembre p.8

enero p.9 marzo p.9 mayo p.9 julio p.9 septiembre p.9 diciembre p.8

enero p.14 marzo p.14 mayo p.14 julio p.14 septiembre p.14 diciembre p.14


LA PALABRA SE HIZO PUEBLO - Esperanza - Soneto sobre la libertad humana - No te sientas ofendido - ¿Moriremos? - Pido la paz y la palabra - Dice las esperanza: Un día...

ESCUELA DE ANIMACIÓN

- Bienaventurados los que generen empleo - Bienaventurados los que busquen la verdad y la justicia - Bienaventurados los que entreguen su tiempo a los más necesitados - Bienaventurados los que limpien la mentira y la hipocresía de la sociedad - Bienaventurados los que cuidan la tierra - Bienaventurados los comprensivos

enero p.14 marzo p.14 mayo p.14 julio p.14 septiembre p.14 diciembre p.14

TICO

enero p.17 marzo p.17 mayo p.17 julio p.17 septiembre p.17 diciembre p.17

LIBROS

- ¡Amado hasta el extremo! enero p.21 - Madera de eucalipto quemado enero p.21 - Caminando hacia lo desconocido enero p.21 - Negreros. Españoles en el tráfico y en los capitales esclavistas marzo p.21 - Ética ambiental marzo p.21 - Historia de Somalia marzo p.21 - Bioética y suicidio en adolescentes mayo p.21 - Política de la Noviolencia mayo p.21 - El Padrenuestro, la oración de la liberación integral mayo p.21 - El beso de Dios julio p.21 - La lucha por el orden mundial julio p.21 - Despierta, ensayo para una vida lúcida julio p.21 - La guerra del silencio. Pío XII, el nazismo y los judíos septiembre p.21 - La promesa septiembre p.21 - Pedro ¿Me amas? La pregunta sigue en pie septiembre p.21 - Relaciones humanas, relaciones divinas diciembre p.21 - El reparto de África: de la conferencia de Berlín a los conflictos actuales diciembre p.21 - La hora de la comunidad: Una iglesia realmente sinodal diciembre p.21

EN DEFENSA DEL SER HUMANO

- Migración ilegal: una crisis mundial en aumento enero p.22 - Myanmar: un país sumido en una crisis de derechos humanos marzo p.22 - Etiopía: Refugiados en tierras lejanas mayo p.22 - El hambre aumenta por cuarto año consecutivo y azota ya a más de 250 millones de personas julio p.22 - Dia Mundial de los Oceanos septiembre p.22 - Gabón, ¿ El fin de una dictadura... y el comienzo de otra? diciembre p.22

PROVOCACIÓN MISIONERA

- Ante una espiritualidad sin Dios - La cultura del miedo - Misión ad gentes es un mundo cambiante - El arte de escuchar frente a la costumbre de hablarrrr - La misión: una vocación en salida - Bajo la estrella de la esperanza

Última Página

- La guerra de los colores - La isla de los sentimientos - La grandeza de lo simple - El valor de la ayuda desinteresada - La travesía de Alí - Desconectados

enero p.26 marzo p.26 mayo p.26 julio p.26 septiembre p.26 diciembre p.26 enero p.34 marzo p.34 mayo p.34 julio p.34 septiembre p.34 diciembre p.34 DICIEMBRE 2023

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DESCONECTADOS

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ra una tarde de sábado y un grupo de amigos se reunieron en el parque como solían hacerlo cada semana. Sin embargo, algo era diferente esta vez. En lugar de charlar y reír juntos, cada uno estaba inmerso en su teléfono móvil. Había poca interacción entre ellos y la atmósfera era tensa y aburrida. Juan, el más cercano al grupo, trató de entablar una conversación: "¿Qué tal todo, chicos? ¿Cómo va el colegio?". Pero las respuestas que recibió fueron breves y desinteresadas. Era como si estuvieran en mundos diferentes. Cada uno estaba atrapado en su propio mundo virtual, no se daban cuenta de lo que estaban perdiendo en el mundo real. Los pájaros cantaban, el sol brillaba y la brisa soplaba a través de los árboles, pero ellos no lo notaban. De repente, se escuchó un grito de dolor. Era Ana, la chica del grupo, que había tropezado y caí-

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do al suelo mientras caminaba distraída mirando su teléfono. Sus amigos se apresuraron a ayudarla, y fue entonces cuando se dieron cuenta de lo importante que era la comunicación y la atención en el mundo real. Después de asegurarse de que Ana estaba bien, comenzaron a hablar entre ellos y a disfrutar del hermoso día que tenían por delante. Se rieron juntos, compartieron historias e incluso jugaron algunos juegos en el parque. La falta de comunicación había sido superada y la amistad había sido reavivada. El grupo de amigos aprendió una valiosa lección esa tarde: la importancia de desconectar de vez en cuando y prestar atención al mundo que les rodea, y la necesidad de comunicarse y conectar con las personas en su vida. Después de todo, el mundo virtual nunca será tan emocionante como el mundo real y la verdadera felicidad se encuentra en las relaciones humanas y la comunicación auténtica.


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LOS DERECHOS HUMANOS

Artículo

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por Antena Misionera

Nada en esta Declaración podrá interpretarse en el sentido de que confiere derecho alguno al Estado, a un grupo o a una persona, para emprender y desarrollar actividades o realizar actos tendientes a la supresión de cualquiera de los derechos y libertades proclamados en esta Declaración.


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