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Iñaki Ábalos

Iñaki Ábalos, Belleza Termodinámica, 26 de septiembre de 2013. Fotografía: Anna Font. Archivo EAEU.

Belleza Termodinámica Iñaki Ábalos

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Una concepción termodinámica de la arquitectura pone en primer plano del proyecto el aire de la arquitectura. Proyectar el aire y no simplemente los materiales, las formas, o las iconografías conduce, en cierta medida, hacia una evanescencia de los sistemas espaciales, que a su vez trae consigo formas nuevas de experimentar la arquitectura. Proyectar el aire es dar protagonismo a la experiencia somática del sujeto, del individuo que se mueve y construye su experiencia del arte, de la ciudad, de la vida, movido por impulsos que no están regulados ni por el raciocinio ni por estímulos fenomenológicos, sino por un conjunto de instintos, pautas sociales y culturales, y por el deseo de expandir los límites de la propia experiencia en el dominio de la belleza termodinámica, tan cercana a la idea aristotélica de la buena vida.

Naturalidad

Es fundamental trabajar con materiales invisibles y ser capaces de controlarlos. Más que el confort, nos interesa la idea de una buena respiración del edificio. Que los lugares estén presentes en la arquitectura con cierta naturalidad, y que pertenezcan a ella cuando se materializa. Puede parecer contradictoria la idea de naturalidad respecto de contextos específicos, cuando las ideas pueden volar no solo de ciudad, sino de país y de continente. Pero pensamos que no hay contradicción, que es así, que siempre ha sido así, y que siempre será así.

Parti Gradual

Propusimos una nave industrial con el trazado de líneas de una partitura, de la ciudad rusa lineal a un parti o composición de habitaciones organizadas, de sur a norte, en un gradiente de actividades que demandan de más a menos calor. Es un sistema de patios y habitaciones que conforman usos en principio aleatorios, pero que tienen un principio termodinámico no explícito. Se evita cualquier jerarquía o condicionamiento. Unas habitaciones conducen a otras que conducen a otras. No hay un pasillo o un orden central.

Volumen de Aire

Siguiendo las tradiciones tipológicas más antiguas, el edificio tiene mucho volumen de aire, con cinco metros de altura libre, de forma que el aire se calienta durante el día, pero el calor no llega hasta el cuerpo humano. Por la noche se enfría y vuelve a empezar el proceso, ventilando a través de patios y ventilaciones cruzadas. Son técnicas de una simplicidad brutal. El proyecto tiene geotermia, con aguas freáticas a diez metros, dando temperaturas constantes. La principal fuente de equilibrio no meramente pasivo es la geotermia. Hay un estudio físico del edificio para que los elementos colaboren y trabajen conjuntamente.

Amalgama

Cambiamos el suelo y le devolvimos los tacos de madera, flexibles para las instalaciones temporales. Además, le dan sonido y temperatura a la sala. Es una sala hipóstila preciosa: un modelo completamente distinto de sistema expositivo. Antes tenía entrada de luz, pero ahora tiene también acceso por el patio, con lo cual la luz natural forma parte del sistema expositivo. La experiencia del edificio se ha modificado. Ahora no es lineal, no es dirigida, no hay esa diferenciación de servidor y servido. Es una especie de amalgama.

Doble Garabato

Este diagrama es el doble garabato de dos torres maravillosas que tiene (Francisco Javier) Sáenz de Oiza en Madrid. Una es compacta, la Torre de Bilbao, y la otra como una flor, las Torres Blancas. El dibujo arranca con un edificio como Torre de Bilbao que termina como Torres Blancas. Se va abriendo. Desde el punto de vista arquitectónico, la destrucción de la homogeneidad de una torre sujeta a viento permite cambiar el período de oscilación y hacer que se contrarresten. Por otra parte, quitar aristas, como la naturaleza nos enseña, evita áreas deprimidas y áreas sobre presionadas que afectan decisivamente el comportamiento estructural. Limar las aristas o hacer figuras que oponen menor resistencia al viento tiene un impacto enorme en estructuras donde un cincuenta por ciento del acero se gasta en temas estructurales. Por otra parte, no hay aceleración de la ventilación. Esta se produce suavemente sobre la superficie, y por lo tanto se pueden abrir ventanas mucho más fácilmente.

Alturas

El resto es muy sencillo. Es una construcción de cuatro núcleos y unos voladizos que se pliegan para funcionar tectónicamente, y a efectos de lograr ventilación y vistas. Estos paisajes industriales a tres metros de altura son miserables e insoportables, pero a doscientos metros de altura son sublimes. A trescientos metros de altura las autopistas pueden tener una belleza espléndida.

Huir del Pobrismo

Hemos intentado encontrar equilibrio entre las pequeñas terrazas y una fachada sencilla. Las transformaciones varían según sube la sección, generando un patrón de viviendas que llega a tener veintidós tipos distintos. Hay algunas graciosas, de un solo dormitorio de veinticinco metros de largo y terrazas en las dos orientaciones, o con dos dormitorios redondos como orejas de Mickey Mouse. Para una vivienda de promoción pública, tener vistas sobre el mar y un dormitorio de James Bond, con los costos que manejamos, es mucho más de lo que estamos acostumbrados. Queríamos huir de la imagen pobrista de la vivienda social.

Terrazas-Patio

En Valencia, el clima es húmedo y soleado, y la única forma pasiva de conseguir ventilación natural es que las viviendas tengan dos fachadas. Tienen pequeñas terrazas, muy profundas, que funcionan como patios. La capa ventilada y la pared de aluminio corrugado de la fachada permiten trabajar con calidad el trazado de las curvas y tener un buen comportamiento térmico. Simplemente cambiando la composición del vidrio por orientación conseguimos la máxima calificación medioambiental, lo cual subvenciona todavía más la vivienda. Y el vidrio cambia de color, es reflectante, y la temperatura se hace más o menos visible, desde puramente reflectante hasta mimetizarse con el cielo.

Masa

Tenemos unos trabajos más técnicos, que todavía no hemos conseguido materializar, basados en la materia, más que en la geometría. Utilizamos la masa del edificio como acondicionador térmico. La idea es hacer posible la unidad no diferenciando estructura y envolvente, sino ofreciendo todo en una especie de roca, de animal, o de entidad que acumula y reacciona.

Dosificación

La idea es utilizar toda la masa por su enorme inercia térmica. No construir ni un sólo pilar que no sea el núcleo o la envolvente. Definir la envolvente como un acuerdo entre la necesidad de iluminación natural y la de evitar las radiaciones. Todas las fachadas tienen un mismo sistema de hormigón, pero las dosis de huecos varían por fachada. Es imperceptible, pero pasa del noventa y seis por ciento en la fachada oeste, al cuarenta y cinco, al cincuenta, y luego al sesenta en la orientación norte. Esto permite un buen

balance entre iluminación y profundidad. ¿Cómo lo hacemos? Cambiando la dosificación del hormigón por fachada. Así tenemos nada más que la materia necesaria funcionando térmica y tectónicamente.

Mirador

El único invento termodinámico de la arquitectura madrileña es el mirador. Son dobles vidrios con sus rejerías ornamentales, lo cual permite trabajar con un patrón conocido pero hacer un edificio prácticamente de vidrio. Son cuatro viviendas que se escalonan y aterrazan. Sobre la medianera, junto a un palacio hacia el que no se pueden abrir ventanas, convertimos el ático en un pabellón y el cuerpo bajo con vidrios espejo, que crea la ilusión de profundidad y transparencia. Al ser la rejería de suelo a techo, todo cobra sentido.

Geotermia Gigante

La idea era que el edificio utilizase la infraestructura del metro como una geotermia gigante, y que la propia infraestructura alimentase al edificio con una combinación de usos mixtos. El invento es que el tubo del metro se enrosca generando conexión con la superficie mientras se le acopla un edificio con diferentes programas y formas. Esto genera un espacio de estación con luz natural, evocando la tradición del metro, pero introduciendo la configuración de las bóvedas y la presencia de rayos de luz. Saber si hace buen tiempo o malo desde el andén. La mezcla de usos permite equilibrar las ganancias térmicas internas con programas de veinticuatro horas, unos que necesitan disipar el calor acumulado, y otros que necesitan utilizarlo.

Colina

Al hacer las vías subterráneas, se establece un nuevo anillo verde. Y el área de separación entre norte y sur es un espacio público. Fuimos los únicos que planteamos simplemente una colina. No es un objeto ni un ícono. Es una expansión del jardín lineal con una topografía diferenciada, y torres y bloques que hacen el acuerdo con los tejidos. Albergamos una estación y, prácticamente por el mismo precio, un parque público en la ciudad.

Haz y Envés

Para salvar los trazados de las vías, resolvimos la irregularidad con la geometría triangular, que define la topografía, da este aspecto de gruta, y optimiza la estructura. La intención es utilizar el patrón triangular para generar un haz y un envés en que la cueva y el jardín se complementan y conforman una unidad. El sistema constructivo consiste en envolver, pero no cerrar completamente, la estructura y las tripas del edificio.

Extractos de la conferencia de Iñaki Ábalos, con introducción de Ciro Najle, organizada por el Centro de Estudios de Arquitectura Contemporánea, el 26 de septiembre de 2013.

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