Andrés Ennen - Exposición Manufactura

AndrĂŠs Ennen

r u t c a f u man

a

MANUFACTURA

El término MANUFACTURA es aplicable a un proceso industrial de fabricación que implica alta calidad de mano de obra como factor primordial en la producción.

El énfasis está en el trabajo físico aunque deja un lugar a la intervención de la mano guiada por el criterio humano. Lo ‘manufacturado’ se diferencia de lo ‘hecho a mano’ que actualmente es conceptualizado como el modo de hacer asociado a la creación de un objeto de lujo cuidadosa y primorosamente trabajado, sin mecanización alguna, por una persona con conocimiento experto y exacto, y para fines suntuarios(1).

Andrés Ennen ha ‘amoldado’ sus prácticas artísticas a una estricta sucesión de acciones en el tiempo, que obedece a una interpretación personal de lo que es una manufactura. Ha intelectualizado un proceso que discurre entre márgenes pre-establecidos y diseña inflexiblemente el rimo de la fabricación hasta su culminación. Es una proeza individual que pone a la noción de genio artístico en jaque, y lo hace con un acento local de emprendimiento.

Para realizar a plenitud su propuesta el artista se ha sumido en complejidades que debe resolver optimizando su proceso. Tomó - nota y excéntricamente hizo coincidir las prácticas impersonales de la vanguardia histórica del siglo XX –en ellas la expresividad de la huella de un autor individual quedó cancelada-, con procedimientos que son técnicos, por un lado, y artesanales, por otro. Como punto de partida tomó el ‘montaje’ inventado por los miembros de Dadá en Berlín durante la Primera Guerra Mundial, cuyo legado es la lógica maquinal del fotomontaje, que fagocitaba a la prensa ilustrada de la época. La práctica consistió en ensamblar con imágenes impresas recortadas sobre papel como soporte. Luego de ensamblar, Ennen procedía a calcar pacientemente, como un buen dibujante técnico de fines del siglo XX, lo que había configurado y pegado en el papel; y esa era la obra. Ya en una etapa posterior de MANUFACTURA, sin embargo, convirtió el ‘cut and paste’ literal de los vanguardistas en una suave operación digital: toma imágenes disponibles en la Red, que recorta o mejor dicho, ‘siluetea’ digitalmente y guarda, para luego desplazar virtualmente hasta ubicar en la composición que va apareciendo en la pantalla de su computadora. Esta composición queda impresa por un proceso de inyección de tinta sobre un soporte de papel. Tras lo cual, sorprendentemente vuelve a calcar con paciencia y esmero, hasta dejar un dibujo que es una estructura completamente lineal.

A todo lo largo, Ennen deja bien claramente señalado el doble condimento de ironía y gratuidad que ha empleado. El taller del artista se ha convertido en escenario de actos realizados en cadena, que han tenido que ser cumplidos en una producción en la que no cesa el empeño y que, claro, no genera nada reconociblemente útil. Porque si hay algo que Ennen nos recuerda (en este giro post-conceptual que ha dado), es que el arte es inútil por definición. A lo que ha agregado la observación sagaz de que también puede dejar de ser libre –en el sentido que se da a la libertad comúnmente-, sin dejar de ser arte.

Jorge Villacorta Chávez

(1)En el mundo globalizado contemporáneo los objetos artesanales vernaculares están aparentemente en camino de ser descalificados como ‘hechos a mano’: son curiosidades coleccionables pero desechables porque portan el signo del precio bajo. .

Es fundamental el registro del proceso de producción en la obra. Ya que este refleja la cantidad de tiempo empleado para ejecutarlo, además de la cantidad de piezas insertadas en cada uno de los diseños.

La muestra así revela sin márgenes de error, la optimización de una producción.

A modo de que uno se podría preguntar en qué tanto se pueda alterar dicha optimización. Ya que el grado de relatividad se mediría en qué tanto trabajo humano “plástico” exista detrás de ello. Lo cual devela a modo de interrogación, algún tipo de límite crítico en cuestión con una producción artística y una manufactura o producción industrial.

2697 2掳 Impresi贸n digital intervenida

2585 1掳 C.C papel carb贸n iluminado

2585 1掳/ 36:39:10:55 Dibujo de tinta carb贸n sobre mdf

Detalles de las obras

“Lo que es genial de este país es que Estados Unidos ha iniciado una tradición en la que los consumidores más ricos compran esencialmente las mismas cosas que los más pobres. Puedes estar viendo la tele, ver un anuncio de Coca-Cola y sabes que el Presidente bebe Coca-Cola, Liz Taylor bebe Coca-Cola y piensas que tú también puedes beber Coca-Cola. Una cola es una cola, y ningún dinero del mundo puede hacer que encuentres una cola mejor que la que está bebiéndose el mendigo de la esquina. Todas las colas son la misma y todas las colas son buenas.

Liz Taylor lo sabe, el Presidente lo sabe, el mendigo lo sabe, y tú lo sabes.”

Andy Warhol

“210 COCA-COLA GUMMIES”

Es una reinterpretación de la obra de Andy Warhol: “210 Coca-Cola Bottles” La obra hace referencia al consumo en sí y a la idea de la trascendencia de una marca. (Convirtiéndose en un ícono de la cultura popular) En este caso concreto: La ridiculización de la obra, pretende esbozar y convertir la reinterpretación, no solo en un objeto para contemplar. Sino también en un objeto absolutamente consumible, comestible,ingerible,etc.

“210 COCA-COLA GUMMIES”

Es una reinterpretación de la obra de Andy Warhol: “210 Coca-Cola Bottles” La obra hace referencia al consumo en sí y a la idea de la trascendencia de una marca. (Convirtiéndose en un ícono de la cultura popular) En este caso concreto: La ridiculización de la obra, pretende esbozar y convertir la reinterpretación, no solo en un objeto para contemplar. Sino también en un objeto absolutamente consumible, comestible,ingerible,etc.

OBSOLESCENCIA Innovación: La palabra innovación nos remite su propio significado: Se trata de la creación o modificación de un producto, y su introducción en un mercado.

Lo cual podría connotar a la obra de arte en aquella acepción. Si es que esta tiene como único fin, el comercializarse...

Así como los objetos pertenecientes al grupo de la innovación tecnológica. Se les atribuye un valor de uso. A la obra de arte se les podría atribuir la misma cualidad.

Ya sea contemplativa o utilitaria. Determinándose así con la virtud de ser un objeto.

De tal forma, si hacemos un paralelo entre la virtud del ser objeto y ser producto de la obra de arte. Con nuestros bienes materiales cotidianos. Podríamos visualizar en ellas diversas similitudes: Un eje de creación, producción y comercialización.

Con objetivos, usos y fines concretos.

La pregunta que destaca la instalación exhibida “Obsolescencia” Refiere a dicho paralelo. Sometiendo a la obra de arte. A una cierta clase de “efimeridad” programada.

Usando la tecnología obsoleta (impresión térmica de fax) para generar imágenes capaces de “obsolescer”.

Es de esta manera que se afirma, la idea de “producto” en la obra-representación.

Teniendo las mismas cualidades que los objetos representados.

Registro de performance realizada el 07 de abril 2016 El registro de la acción realizada, nos muestra el proceso de eliminación de material original del artista.

Siendo , en este caso, representaciones en dibujo de obletos que fueron parte de la innovación tecnológica en su tiempo.

Ennen, copia en impresora térmica de fax dichos dibujos para luego destruir los originales. Logrando mediante dicha acción una obsolescencia predestinada.

Programando así una caducidad en cada copia. La acción nos invita a preguntarnos: ¿Sería posible encontrar una obra de arte con caducidad?, ¿La obra de arte caduca?

Si es que caducara... ¿En dónde se situaría la importancia de la misma?

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