"Trabajmos para potenciar nuestro modelo de desarrollo y producción local"

Localidades

Dr. Manuel Calderón Ramírez *Alcalde Local de La Candelaria

PyME: Uno de los aspectos más relevantes en la gestión de las administraciones es el tema empresarial. ¿Cuál es el diagnóstico empresarial de la Localidad de La Candelaria? Manuel Calderón Martínez (MCM): La localidad de La Candelaria es la más pequeña territorial y poblacionalmente del Distrito Capital: tiene una extensión de aproximadamente 206 hectáreas, en la que viven 24.200 personas. Su composición es netamente urbana, y su configuración arquitectónica hace que gran parte de las actividades económicas que tienen lugar en los predios sean de tipo urbano.

Desde el punto de vista de su desarrollo económico, esta es una localidad que cuenta con importantes nodos turísticos y culturales, y este es tal vez su principal atractivo y ventaja. Esto hace que gran parte de sus comercios y emprendimientos, tengan que ver con temas turísticos, culturales, y de servicios.

Sin embargo, también tenemos otra actividad muy importante que es la orfebrería, que se constituye en un estandarte de la localidad y se refiere a la elaboración de artesanías ligadas a la joyería, en las que resaltan las esmeraldas. En la producción, manufactura y comercio de joyas podemos contar entre 250 y 300 establecimientos.

Frente al primer tema, nosotros queremos consolidarnos como un área que se dedique a potenciar la creatividad y la innovación. Cada vez más el emprendimiento está ligado con el entretenimiento, la cultura y las industrias creativas, aumentando su participación en el PIB del país, es todo lo que se conoce como la economía naranja. Nuestro Plan de Desarrollo Local plantea la posibilidad de fortalecer ese nicho de servicios orientado a la creatividad y la innovación.

Por otro lado, queremos robustecer la joyería a través de un clúster, y esto implica que los comerciantes y fabricantes puedan asociarse en una cadena productiva que tenga la finalidad de identificar diferentes pasos de creación de valor agregado en estos productos. Así mismo, estos no sólo tendrán una condición para el mercado local, sino también para la exportación.

Alcaldía Local de La Candelaria. Archivo Acopi Bogotá-Cundinamarca

Este diagnóstico también incluye un componente muy importante de empleo. Nosotros tenemos una gran dificultad a nivel local y es que casi un 50% del empleo es de naturaleza informal: no es estable, es por temporadas, no garantiza prestaciones sociales, genera mucha vulnerabilidad, y condiciones débiles de calidad y bienestar de vida de algunos hogares. Eso lo dice la encuesta multipropósito de calidad de vida que hace cada año Planeación Distrital con apoyo del DANE, y ese es el gran reto que tenemos: cómo garantizar que, a pesar de tener industrias, algunas con recorrido y otras nacientes, la población candelaria se incorpore en esas dinámicas.

Aquí sucede algo paradójico y es que la mano de obra local no es la más utilizada en los emprendimientos y empresas locales. Probablemente nos falta mucho más en preparación de talento humano, fortalecimiento de la educación superior, profesionalización de empleo, y por supuesto, mayor capacitación de jóvenes, quienes son los más vulnerables y expuestos al desempleo. Queremos impulsar que ellos no sólo sean empleados sino también puedan crear empresas.

PyME: ¿De qué manera la Alcaldía Local está impulsando la economía candelaria, aprovechando su localización estratégica dentro de la ciudad? MCM:En medio de estas ventajas y dificultades, la Alcaldía Local de La Candelaria trabaja de la mano con la Secretaría Distrital de Desarrollo Económico –SDDE- para garantizar la posibilidad de potenciar nuestro modelo de desarrollo y producción local, y para esto hemos creado cuatro ejes de trabajo.

El primero tiene que ver con una mayor articulación y coordinación con la Secretaría Distrital de Desarrollo Económico, dado que nosotros en las Alcaldías Locales no tenemos todas las competencias o responsabilidades exclusivas para potenciar el desarrollo económico. Para esto hemos realizado numerosas citas con la SDDE, y de hecho ya hicimos dos recorridos con profesionales de la Secretaría para conocer el emprendimiento local, los productos propios que tienen vocación de surgir y de tener un mayor impacto en los mercados urbanos, y también para establecer procesos de mejoramiento de las cadenas productivas.

Hay un segundo eje que se encamina a la profesionalización y mejoramiento de las condiciones para que las personas puedan encontrar empleo. Aquí es importante fortalecer la capacidad que los ciudadanos tengan para formarse en artes y oficios que puedan generarles ingresos. Ya estamos próximos a suscribir un convenio con el SENA regional Bogotá, con el fin de brindar algunos cursos en diferentes artes y oficios, para que la población pueda acceder a diferentes sectores económicos.

El tercer eje es el proyecto denominado “Fortalecimiento de la autonomía económica”, enfocado a ciertas poblaciones tradicionalmente excluidas de las dinámicas económicas, como por ejemplo las mujeres, que son las más golpeadas por el desempleo y la informalidad. La idea es continuar con el proyecto que terminó hace poco, y con el que se identificaron cincuenta emprendimientos liderados por mujeres en diferentes áreas: artesanías, confecciones, comestibles, procesamiento de alimentos, y otras manufacturas. Lo mismo se hará con comunidades afros, LGTBI, e indígenas.

En este sentido la idea es terminar el proyecto en el que se identificaron cinco emprendimientos por cada comunidad, y que están ligados a la esencia de sus culturas y tradiciones. Por ejemplo, con los indígenas se realizó con artesanías, con la comunidad afro se hizo con gastronomía y tradiciones orales y musicales. Esto se realizó también con la intención de impactar positivamente en el mantenimiento de estas tradiciones.

El cuarto eje de trabajo gira en torno a la articulación de la educación media y básica con la educación superior, no solo profesional, sino también técnica y tecnológica. Acá tenemos dos colegios distritales y uno de ellos es una escuela dedicada a los temas de comercio – la Escuela Nacional de Comercio- que dentro de sus posibilidades de formación y titulación tiene la opción de que los estudiantes puedan pasar de una vez al SENA a concluir sus ciclos de tecnología en auxiliar contable, financiero o administrativo. Esa articulación entre educación media, básica, media vocacional, y superior es clave para que haya una ruta de trabajo útil a los estudiantes cuando ya estén terminando su secundaria, porque eso permite mayor profesionalización del talento humano.

Estos son los cuatro ejes de trabajo básicos que estamos ejecutando para el desarrollo económico. También tenemos un eje transversal que se basa en el fortalecimiento de las industrias creativas, o la denominada industria naranja. Como nuestra principal vocación económica es el turismo, queremos fortalecer todos los emprendimientos turísticos o de servicios ligados al sector. No pretendemos que todos los ciudadanos monten un hostal o un hotel, pero sí emprendimientos que tengan como núcleo el turismo e incursionen en temas como gastronomía, guías y rutas turísticas, servicios adicionales que puedan tener valor agregado y un criterio de denominación de origen, es decir, que los turistas solo puedan encontrar en La Candelaria. Ese es nuestro proyecto estratégico.

Dr. Manuel Calderón Ramírez, Alcalde Local de La Candelaria, en la sede de la administración local. Archivo Acopi Bogotá-Cundinamarca

PyME: En vista de que el turismo es la principal actividad económica de la localidad ¿cómo se aprovechará el centro histórico de la ciudad para ese fin? MCM: Es importante reconocer que existe una visión del más alto nivel en cabeza del Alcalde Mayor, el Dr. Enrique Peñalosa, quien quiere que el centro histórico sea un destino turístico sostenible y priorizado. Desde esa visión distrital se han dado lineamientos e instrucciones para múltiples entidades dedicadas al fomento y promoción del turismo. Es así como coincidimos con la Secretaría Distrital de Desarrollo Económico, el Instituto Distrital de Turismo, y el Instituto Distrital de Patrimonio para que La Candelaria sea un destino turístico.

En ese orden de ideas, hay varios esfuerzos que también hay que promover y salvaguardar. El primero de ellos es que actualmente en el Concejo de Bogotá cursan diferentes proyectos de acuerdo para posicionar a La Candelaria como una zona priorizada a nivel turístico, lo cual tendría algunas ventajas en cuanto a creación de empresa o formalización de empleo. La segunda iniciativa es de carácter nacional, ya que hay un proyecto de ley en la Cámara de Representantes que busca crear un fondo especial para la recuperación del centro histórico de Bogotá. Este proyecto ya pasó el primer debate en Cámara y va para el segundo, y es una iniciativa que de ser aprobada le daría recursos importantes a la Nación y al Distrito para fortalecer los procesos de recuperación turística.

También estamos desarrollando, de la mano del Viceministerio de Turismo, el Fondo Nacional de Turismo y la Universidad Externado, un proyecto para que La Candelaria sea certificada como destino turístico sostenible. El 2017 es el Año Internacional de Turismo Sostenible, declarado por Naciones Unidas, y la sostenibilidad no sólo tiene un componente ambiental, sino también implica la apropiación social de territorio, que las comunidades puedan sentirse parte de la cadena turística, puedan hacer parte de los diferentes eslabones de esa cadena. La sostenibilidad también significa tener unos códigos de ética muy fuertes para prevenir cualquier delito social al turismo, como la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes o el microtráfico.

Ese es el enfoque que estamos desarrollando en este momento y esperamos tener la certificación en junio de 2018. Ésta nos permitirá posicionarnos como destino turístico de talla mundial. Actualmente en Colombia esa certificación la tiene Cartagena de Indias, Puerto Nariño en Amazonas, y Guadalajara de Buga en el Valle del Cauca. La idea es que nosotros seamos el cuarto destino turístico sostenible, que nos permitirá mercadear la localidad mucho mejor a nivel internacional y tener una mayor figuración en los planes, destinos y paquetes de los operadores turísticos internacionales.

PyME: Los empresarios tienen inquietudes sobre el POT que está por presentarse ¿de qué manera se verán afectados? MCM: La construcción del POT ha sido un proceso altamente participativo. De hecho, Planeación Distrital que es la entidad que ha realizado la tarea, se ha encargado de hacer visitas a cada localidad para realizar unos diagnósticos de uso de suelo, porque precisamente lo que se ha visto es que la ciudad del año 2000 a la fecha ha cambiado significativamente en cuanto a norma y uso. Una cosa es la norma estipulada en decretos y diferentes mecanismos de gestión del suelo definidos en el POT, y otra muy diferente lo que ha sucedido en estos 17 años. Hay una distancia muy grande entre la norma y la realidad.

La primera cosa a resaltar de la construcción del nuevo POT es la participación ciudadana, el proceso ha contado con una alta dosis de incidencia y deliberación de las comunidades. Nosotros el 5 de junio tuvimos nuestra jornada de planeación con la comunidad, en la que las personas identificaron tendencias y desafíos relacionados con la actividad económica y el uso del espacio urbano.

En La Candelaria existe el reto de planificar en una sola Unidad de Planificación Zonal –UPZ- que es la 94, la mezcla del uso de suelo, es decir, que podamos tener en un mismo espacio actividades económicas como talleres, lugares de comercio, formación y aprendizaje, y espacios de entretenimiento y esparcimiento dada nuestra naturaleza turística, así como también uso residencial.

Garantizar la convergencia de esa mezcla de usos en el territorio histórico tiene como fin que el centro tenga vida. En algún momento había un temor de que este no fuera residencial, pero la gran apuesta de esta administración está en generar un centro vivo, dinámico, competitivo y que esté a la vanguardia de los centros históricos en el mundo.

Entonces, hay un parte de tranquilidad para el tejido empresarial familiar, pequeño y mediano, porque la mezcla de usos de suelo está relacionada con la posibilidad de que el centro tenga muchos factores de competitividad, como servicios públicos adecuados, seguridad y convivencia, y profesionalización del talento humano. Por eso es importante reconocer que estamos en un punto decisivo en el que es clave la participación de la gente, ya que Planeación Distrital tiene abiertas sus puertas recibiendo comentarios y sugerencias para el nuevo POT.

Con esa fase de diagnóstico terminada, Planeación tiene unos elementos para empezar a construir una propuesta que irá a las localidades y a los diferentes sectores económicos, con el fin de ser validada. La administración piensa en una ciudad incluyente, integrada y competitiva, que garantice la convivencia y la tranquilidad de las personas en todos los espacios urbanos.