TELEVISIÓN Pero los contratos de streaA pesar de su ming no se quegran tecnología dan en el balompié. De hecho, en –similar a la de una negociación que sorprendió Netflix-, a Amazon a toda la indusaún le queda tria, Amazon le arrebató a Sky mucho camino las emisiones de los torneos de por recorrer, tenis de la ATP al desembolsar especialmente al 11,2 millones de dar a conocer su euros. Eso incluye las competiciones plataforma Prime de la gira mundial en cuatro torneos. Video entre los Wimbledon, Roland Garros, el suscriptores Prime Abierto de Estade su tienda. dos y el Abierto de Australia. Además, la empresa de Jeff Bezos había adquirido los derechos de retransmisión de un partido semanal de la NFL –cada jueves-, una negociación por la que tuvo que desembolsar 50 millones de dólares. En materia deportiva, Facebook tampoco se queda atrás: su plataforma Watch ya ofrece la Liga Americana de Béisbol, así como el Campeonato Mundial de Surf y algunos partidos de la Champions League europea para sus usuarios en Estados Unidos. Es más, Facebook desembolsó 610 millones de dólares para quedarse con los derechos de retransmisión de los próximos 5 años, de liga India de críquet, la más importante del mundo y uno de los deportes con más seguidores en Inglaterra. DESCARGA AL MÓVIL Con más de 300 millones de usuarios a nivel mundial, Netflix es de lejos el servicio de streaming más popular. De ellos, solo 104 millones paga por una cuenta, el resto la comparte. Esto significa que alrededor de 196 millones de usuarios (el 66%) utiliza las cuentas familiares y de amigos para acceder a los contenidos. Esta puede ser la razón por la cual el ‘gigante del streaming’ anunció a finales de 2017 que aumentará en forma gradual el costo del servicio en todos los países. Mientras sus competidores andan buscando la forma de arrebatarle una porción del mercado, Netlix también ha emprendido varias iniciativas. La más elogiada es la posibilidad de descargar todas las series y películas en el 24
IT Manager
dispositivo móvil, para poder verlas en cualquier lugar sin estar conectado a internet. IMPUESTO AL STREAMING Mientras esto sucede, varios países buscan regular con impuestos a las plataformas de streaming al equipararlas con la televisión tradicional. Es así como la Unión Europea obligará a estas empresas a pagar una contribución al cine europeo, una tasa similar a la que tienen las cadenas de televisión para promocionar y financiar la industria. Aplicable a partir de 2020, esta tasa pretende además proteger a los menores, al hacer que los proveedores de VOD ajusten sus contenidos a las normas horarias de protección de la infancia y tomen las precauciones contra contenidos que inciten al odio y a la violencia. La TV tradicional ha cambiado. Mientras en el siglo XX los televidentes se limitaban a consumir el contenido en un horario preciso haciendo zapping entre canales, la nueva televisión en streaming permite consumir contenidos de forma continua en cualquier momento y desde cualquier lugar. Y aunque la publicidad continúa sustentando ambos modelos, lo cierto es que las marcas se inclinan cada vez más en los espacios online y los servicios por demanda. No en vano la inversión publicitaria en internet ha superado con creces a la radio y a los medios impresos. Es aquí donde los servicios en streaming siguen reinventándose –con Netflix a la cabeza-, hasta abarcar nuevos formatos y escenarios para nutrir a una audiencia mundial que crece como la espuma. Los próximos dos años serán cruciales para las aspiraciones de las nuevas plataformas que quieren destronar a Netflix como líder absoluto. Y también serán decisivos para la misma Netflix, que debe tapar el enorme agujero dejado por Disney y enfrentar la inconformidad de sus usuarios por la subida de tarifas. Sea cual fuere el resultado, Facebook, Amazon y HBO estarán en la puja por proveer servicios online más interactivos y con eventos deportivos transmitidos en directo que harán madurar rápidamente el mercado VOD.