Plegarias y credos Sergio GarcĂa
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Plegarias y credos Sergio GarcĂa
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Daguerrotipo
Hay muertos que posan con los ojos abiertos, bien maquillados, y no están solos. A veces hasta cuesta descubrir quién es el vivo de la fotografía.
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Plegaria Que la esperanza no me abandone (sino que siempre ofrezca montones de frutos) y colme mi mesa de robustos vinos dulces. Que no me dañen los perezosos fríos de la noche invernal que nada hiera este esfuerzo.
En esta era de escaso suelo, que nada evite la salida de las constelaciones bajo mis sombras. Qué acepten mis ofrendas, (los dioses, todos) mis viejas vasijas sin ormamento.
Qué no tema al blanco acero de los custodios ni al graznido de las aves. Qué pueda oír el clamor de los ríos de aguas estivales. Qué no me afanen las habladurías Cuando contentos ríen de nuestras desgracias. 6
En esta era de ásperos vientos Qué pueda soportar las tristes lluvias la nostalgia del rumor del océano. Que no sean tus sentimientos duro hierro que me encadena ante las puertas. . Qué pueda contento vivir con poco, siempre entregado al largo camino, aunque en el encuentre las viejas piedras tiradas.
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Verlassenheit Soledad de tres centímetros de uña de diez afeitadas de veinte desayunos Soledad de valijas revueltas de andenes infinitos de voces extrañas Soledad que espera la nieve que ve pasar el tranvía que mira el whatsapp Soledad bajo cero impecable puntual. Solitaria.
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Weinachten A veces está bueno darse un baño de muerte, ver a la distancia, escuchar a través del silencio. Romper un plato contra el suelo y que nada cambie. Perderse en una ciudad desconocida para encontrarse con uno mismo. Sorprenderse con lenguas remotas saborear lo extraño e impronunciable. Desafiar la frontera del lenguaje romperse el corazón con un te extraño. Otras veces está mejor darse un baño de vida. Soñar el reencuentro hacer las valijas esperar los trenes ansiar el abrazo llorar hasta los tobillos. y mirarte a los ojos y verme en ellos hasta el infinito de una vez y para siempre. 9
Aprendiz en Canterville Así me volví fantasma. Me llamé a silencio Me senté en la última fila Me corrí a ver pasar el tiempo.
Así me volví fantasma. Asumí que me sonrieran con ternura Entendí que dejaran de mencionarme Disfrute no tener que quedarme para el brindis.
Así me volví fantasma Sin cadenas, lamentos ni harapos Sin espanto, terror, dolor Sin ayeres ni hoyes ni esperar mañana.
Así me volví fantasma Ya nada más pesa. en cuanto quiera me iré sin pensar en volver. 10
Gerardo Ayer leímos tus textos, recordamos anécdotas, evocamos lo aprendido (en un conjuro) y, por qué no, hubo nudos en las gargantas y lágrimas tramposas.
Nos acompañamos Nos agradecimos profundamente por haber estado.
No fue un homenaje, simplemente hacer saber al cosmos que seguís presente (en pensamiento y en emoción). Aunque nada sea igual, aunque todo siga siendo.
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20 minutos Te vi mujer con luces, sombras compleja, inaudita. ExplotĂł el tiempo y la edad se deshizo entre las manos. Hubo risas, se soltaron los aplausos los ojos te devoraron. Supe que te enhebrabas (en tus sueĂąos) y el adiĂłs fue dulce y silencioso.
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Hormigas
Las hormigas, tan gentiles desfilan por el obsecado patio. ÂżVan o vienen? ÂżImporta acaso? Urgencia de mediodĂa preanuncio de aguacero. Poco a poco Pacientes tan gentiles, las hormigas desfilan en el poema.
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Brindis
Brindar, brindar con las copas llenas de esperanzas con el corazĂłn. Brindar con vino, con cerveza, con champagne, de parado, de sentado, en cuclillas. Brindar a los gritos en silencio, murmurando. Brindar pataleando, a los brincos, haciendo equilibrio de tanto brindar. Brindar, con los ojos cerrados, mirando de reojo un reloj, mirĂĄndote con ojos nuevos, viejos, desolados. Brindar,pidiendo deseos, temiendo pedir deseos. Brindar hasta el amanecer, hasta el atardecer, hasta el anochecer. Brindar, de blanco, de azul, de amarillo, pero nunca de negro. Brindar, como si en ello nos fuera la vida, como si asĂ se espantara la muerte. 14
Brindar, brindarme, brindarte, brindarse brindarnos, brindarles, que la copa llena no es poca cosa.
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Intento de Poesía
No sos esas cenizas, ese polvo Esos fragmentos que ya se hacen tierra la foto quieta que observo mañana la voz electrónica que repite palabras huecas, que ayer presagiaban encuentros.
No sos este silencio inmutable el saco vacío que cuelga, flota, el reloj sin hora de manos mudas el misterio, la pregunta, la duda que invade la tarde en que viajaras.
No soy vos, en tu voz. Tu recuerdo. Agujas con las tintas del dolor, como escarcha en la piel, me tatúan la hipérbole de tu risa, tu abrazo que no llegará y se desase.
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Si al menos quedara el ritmo para evocarte en tono de elegía, quizá me sentiría menos huérfano. Si tuviera la rima, la metáfora, dolería menos el desamparo.
Pero sólo hay lugar para el duelo, para los pésames e intentos vanos de mentirnos, de decir que es mejor así Ambos sabemos que no es cierto, nos consolamos, pero no es cierto.
Ahora sabrás algunas respuestas que buscabas Ahora, tengo preguntas que no pretendía. Ahora, sólo podemos estar juntos en la primera del plural, en el pronombre, en un enjambre de palabras intento de poesía.
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Mate amargo (Cholita) Cómo poemar el dolor Cómo lirar el vacío Cómo decir la falta que me haría un mate de tus manos
Te escribiría un poema para que te llegue en el viento, susurrado, en la noche.
Te escribiría un poema porque no me resigno a tu ausencia
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Día de la bandera Seis tricotas raídas custodian las banderas Tienen los ojos fijos las bocas fruncidas: rictus solemne. El himno recorre el salón desnudo, empanadas fritas de feria sahúman los estómagos. Ahora, hablan zapatos gastados, zapatillas desflecadas. ¿Alguien escucha los discursos? Emoción infantil en corazones adultos. Los próceres no se inmutan en su cárcel de piedra. Una marcha militar anuncia el fin. los dedos hurgan monedas de pasta frola. Afuera espera el invierno, la calle desnuda sin sueños de grandeza. 19
El viaje La tarde te deglutió como un reptil voraz, sin pausa. No dejaste ni un brillo último en los ojos, Ni un aliento profético, Ni una pista en donde buscarte.
Te fuiste, te llevó la tarde.
No fue como en los libros No hubo, noche, ni tormenta, Ni viento que ulula en las ventanas. Poco después eras polvo Historia, mito, palabras evocadas.
Te fuiste, te robó la tarde.
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Sin aviso quisiste saber la gran respuesta, ya no estabas. No vi tu lengua retraída en penumbra No hubo exhalación final Ni un último apretón de manos.
Te fuiste, te arrancó la tarde.
No hubo señales Ni dolor en tus ojos Ni consuelo en los nuestros. Soñando el viaje imposible Partiste al más largo.
Te fuiste, es tarde.
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Lucas XXV En el camino hablábamos. Discutíamos, un blablabla… palabra, sobre la palabra se apilaba y no pudimos saber. Pasó junto a nosotros, los desconcertados, los extraviados en el dónde, cuándo, cómo.
Duros de entendimiento sin posibilidades de ver.
Encerrados en la gloria del sufrimiento de lo ayes, del ayer fugaz, no entendimos la señal. El día se acabó partimos el pan, servimos el vino 22
y el silencio reinó mudo y atroz en los suspiros
Duros de entendimiento sin posibilidades de creer.
Fugaz, traspasó nuestras redes buscamos en nuestras pupilas la huella del milagro en vano, en los vanos y recovecos. Somos testigos sin fuerzas Apóstoles sin fe. ¡Ay! Tan duros de entendimiento… sin posibilidad de comprender.
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Nuevo Credo
Creo en el hombre, en el poder creador de la palabra, creadora de la memoria, de todo lo visible y lo invisible. Creo en el hombre que nunca es uno solo, hijo del hombre, del otro, nacido del amor, heredero del misterio. Creo en el hombre, en la luz del pensamiento, hombre verdadero de verdaderos hombres , engendrados, no creados, de la misma naturaleza de la tierra, quien todo lo hizo; no por nosotros, los hombres, no por nuestra salvación bajó del cielo. Creo en el hombre que por obra del esfuerzo creador se encarnó en el fuego, en el aire, en el agua y se hizo al camino y anduvo entre los hombres y fue por esta causa vilipendiado. Creo en el hombre que, desde tiempos sin tiempos, padeció y fue sepultado, y soñó que resucitaba 24
y soñó que subía al cielo y soñó con un Dios Padre. Creo en el hombre que cree que llegará la gloria en la justicia de y para los vivos y los muertos y los desaparecidos. Creo en el hombre sin reinos. Creo en su espíritu inquieto. Hombre y dador de vida, que procede del Hombre yserá hombre, anónimo,sin adoración ni gloria, ni profecías, artesano de su destino. Creo en la unión del hombre, que es una, pura, sincera e indestructible. Confieso que hay un solo hombre,que no hay perdón para las traiciones. Creo en el hombre que se reinventa y reinventa la vida y el mundo futuro. Todavía, pese a todo, creo. Amén.
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Noche de San Juan Qué nadie me pregunte, "¿a dónde vas?" Qué nadie se entristezca, es mejor así. Todo está decidido es mejor así.
Quizás algún día vuelva, entonces me verán un poco sí, un poco no. Y todo lo que fue tristeza será alegría porque solo me verán los que lo desean.
Ese día, habremos vencido al mundo.
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