ARTE
LECTURA
La lengua nuestra de cada día
Redacción Escenario Weekend
Making Rounds With Oscar Dr. David Dosa Aunque Oscar parecía un gato normal, la realidad es que detrás de su mirada se escondía una habilidad casi sobrenatural para "oler" la muerte de los pacientes de demencia del Steere House Nursing and Rehabilitation Center en Providence, Rhode Island. Este felino, que llegó a esta institución luego de la muerte del gato que utilizaban para dar terapias, identificaba sin fallar a pacientes próximos a morir y permanecía con ellos hasta su deceso. La teoría es que con su poderoso olfato detecta el aliento de estas personas, que contiene un compuesto llamado ketone, el cual se altera particularmente en ese momento. El libro en inglés está basado en un ensayo del Dr. Dosa, publicado en el New England Journal of Medicine en 2007, y narra experiencias de pacientes y sus familias, y el impacto positivo de Oscar en sus vidas y en el complicado proceso de la muerte.
Una maestra en Katmandú Vicki Subirana La historia inacabada de esta autora arranca con el relato de las ilusiones de una joven maestra solidaria con una misión y culmina con la consolidación de un proyecto educativo universal para los más pobres y marginados de Nepal. Para ellos ha conseguido la enseñanza que cualquiera desearía para sus hijos. En su empeño por llevar a cabo sus ideales, tuvo que lidiar con dificultades de todo tipo, y para evitar que la deportaran de Nepal, aceptó incluso un matrimonio de conveniencia con un sherpa, que terminó convirtiéndose en un gran amor. Este libro también denuncia lo que considera una mal entendida solidaridad por parte de algunas ONG occidentales que, según ella, confunden la solidaridad con la limosna. La educadora Victòria Subirana o Madam Vicky, como la llaman los nepalíes, construyó durante 12 años dos escuelas infantiles y dos para adultos, que atienden actualmente a 1,200 alumnos.
Capá Prieto Yvonne Denis - Rosario Este libro ganó del V Premio Internacional de Periodismo sobre Puerto Rico José Ramón Piñero León, en Madrid, España. Y es que Capá Prieto impresiona, según el Dr. Silvio Torres-Saillant (de la Universidad de Syracuse, Nueva York) "por la fluidez de una imaginación histórica en la que cabe desde una rebelión de negros en el Puerto Rico colonial para 1797, hasta el drama de un historiador de la Universidad de Sevilla que 210 años después, en archivos españoles, se encuentra accidentalmente con papeles que documentan dicho acontecimiento". La autora puertorriqueña "presenta una colección de relatos que nos ayuda a conocer mejor la rica y compleja realidad puertorriqueña. Además, muestra una fascinante galería de personajes memorables incidiendo en la negritud: uno de los aspectos definitorios de nuestra cultura" (Dra. Marithelma Costa, Hunter College, New York). Obtén información de este y otros libros en http://www.sinonimopr.com.
P6 / ESCENARIO WEEKEND / DOMINGO, 27 DE MAYO DE 2012
“Es normal aquello que carece de excepción, y, si la tiene, se nota que lo es”. –Fernando Lázaro Carreter
Tierra de los valientes señores
Aida Vergne
Si le dijera que la etimología Borinquen se deriva o viene de Puerto Rico, ¿me creería?... Pues mire, hace muy bien en no creerme. Nada más absurdo, ¿verdad? Puerto Rico y Borinquen nada tienen que ver etimológicamente hablando. Pero sucede que leyendo aquí y allá uno se tropieza con las peripecias (casi siempre bien intencionadas) de algunos filólogos, que para hacer que las cosas encajen, lo desencajan todo. La etimología es una disciplina relacionada, entre otras, con la lingüística histórica, que estudia el origen de las palabras investigando su significación original, su forma y los posibles cambios sufridos a lo largo del tiempo. De ahí que cuando usted consulta el diccionario de la Real Academia Española (RAE), este, antes de ofrecer la definición de la palabra, le presenta su etimología u origen. Por ejemplo, si usted busca la palabra isla, lo primero que encontrará es (del lat. insula), que quiere decir que isla nos llega originalmente del latín y que su forma primera era insula, antes de iniciar su paso o transformación hacia lo que es hoy en español. Hasta aquí estamos claros. En ocasiones los lexicógrafos (investigadores que se dedican a recoger los vocablos que han de entrar en un léxico o a un diccionario), tienen que recurrir a métodos de lingüística comparativa para reconstruir información de palabras muy antiguas y que no ofrecen una fuente directa como la escritura. Esto se hace analizando otras lenguas relacionadas y estableciendo inferencias. Pero y entonces, ¿cómo es eso de que Borinquen nos llega de Puerto Rico? Pues le cuento que, leyendo, me tropecé con lo que Washington Llorens llamó una “novedad” etimológica del uruguayo Baltasar Luis de Mezzera, que en una increíble peripecia de fonética histórica, explica la siguiente derivación que deja chiquito a Harry Potter: “p/bor (t) (o) rik-en/eño” Lo anterior sugiere que la /p/ de porto pasa a bor, de Borinquen. La /t/ y la /o/ finales y entre paréntesis de por-to son hipotéticas pues obviamente no se puede dar cuenta de ellas. Mezzera nos dice que el rik-en de Bo-ri-(n)-quen es una transformación de Rico, y del sufijo -eño. Para Mezzera, Borinquen no era una una palabra indígena sino la alteración de Porto Rico por criollos que compartían la dicha de vivir en un “puerto rico”. Reseña W. Llorens que Mezzera, “orgulloso de su trampolín etimológico”, dijo: “Quedan rebatidas, por lo tanto, los supuestos significados indígenas de Borinquén: “tierra de los valientes señores” o “patria de los hombres valientes”, que trae Luis Llorens Torres (...)”. Ahora veamos el otro lado de la moneda. Llorens Torres decía que la isla se llamaba Borinquen y que la raíz inicial bo- expresaba la idea de hombre, como en bo-hí-o (casa del señor), o en Bo-ro-ioan (el señor que destruye las casas). La raíz ri- se refiere al concepto de valor, de fuerza, como resultado Bori (valiente señor). La n intercalada luego de bori-n remite a tierra, y la -n final de palabra funciona como un marcador de plural. De ahí que la palabra Borinquen signifique “Tierra de los valientes señores” o “Tierra de los fuertes señores”. ¿No le parece más sensata la explicación anterior? En efecto, con ella coinciden Malaret, y Aurelio Tío, quien afirmó que Puerto Rico es un nombre castizo y “bajo ningún malabarismo dialéctico se puede presumir que Borinquen fuera la alteración de Porto Rico por criollos de distintas procedencias”, como afirmaba Mezzera. Y como hoy es domingo, le cuento además que Mezzera entendía que barbecue venía del francés, barbe cuite (barba cocida o pelo quemado). ¿Pues sabe qué? Nada que ver, pues esta palabrita inglesa de mediados del siglo 17 se deriva del español barbacoa, que a su vez nos llega del Arawak barbacoa y que significa marco de madera para almacenar carnes y secar pescados. ¡Buen domingo! La autora es lingüista y profesora adjunta de fonética y fonología del español en el Programa Graduado de Lingüística de la UPR y el Departamento de Inglés de Humanidades, de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. Puede escribirle a: consultas.sobre.lengua@gmail.com.