Hambre de justicia - Alto al Hambre by World Vision Mexico

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AmĂŠrica Latina y el Caribe

ov oc ar c ita ed a m r pa

st ic ia :

2013

agradecimientos

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gradecemos a todas las personas que participaron en la elaboración de este libro de devocionales, en especial a los y las jóvenes latinoamericanos que aportaron con sus vivencias, pensamientos y visión de fe. Damos gracias también a los y las colegas de Visión Mundial que enriquecieron la reflexión desde su experiencia como agentes de desarrollo y seguidores de Jesús. Además de los autores de cada devocional, queremos resaltar el aporte de las siguientes personas: Harold Segura, a cargo de la Dirección del proyecto Daniel Oliva, a cargo de la Producción del libro de devocionales Ingrid Sanabria, Jenny Vargas y Natalia Campos, a cargo de la recopilación de los materiales Ismaela Vargas, a cargo de la edición Fernando Otarola, a cargo del diseño y diagramación

Por Una Fe QUe tenga sentido

a campaña «Alto al Hambre» nos invita a solidarizarnos con las personas que sufren situaciones de hambre, a sentirnos urgidos a trabajar en favor de un mundo más justo y a movilizarnos para desarrollar, junto con otros, acciones concretas en favor de las personas empobrecidas en América Latina y en África. Una invitación a la que debemos responder con conciencia cristiana y sensibilidad humana.

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Cuando nos referimos a conciencia cristiana hablamos de vivir en la práctica social aquello que profesamos creer: en un dios justo, solidario y amoroso que procura la vida plena para todas las personas.Y si creemos en un dios así, no nos queda otra alternativa que unirnos a él como colaboradores en la promoción de su Reino, que es Reino de paz, reconciliación y bienestar integral. Con el objetivo de alimentar una fe con conciencia social y con responsabilidad ciudadana, se escribieron estas treinta meditaciones. Una por día, para pensar, reflexionar, orar y actuar en buen orden con la enseñanza de la Biblia y el masaje cristiano. Jóvenes y adultos de diferentes países de América Latina y El Caribe las ecribieron. Cada meditación incluye un texto bíblico para leerse con actitud atenta; una breve meditación que se desprende del texto leído y, al final, un motivo para unirnos en oración. Preparados para leerse en pequeños grupos, en el hogar o en los lugares de estudio o trabajo. Otra opción de lectura es seguirlas de manera individual como práctica de oración personal. A las personas que escribieron estas páginas, muchas gracias por su esfuerzo. Gracias por externarnos sus pensamientos y ayudarnos a creer que la fe en Jesús goza de proyección práctica y cobra sentido para quienes sufren bajo las muchas injusticias de nuestro mundo.

Harold Segura Director regional de Relaciones Eclesiásticas e Identidad Cristiana Oficina Regional de Visión Mundial para América Latina y El Caribe (LACRO)

Presentación

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as reflexiones a continuación buscan proveer a jóvenes y adultos una perspectiva de fe ante la problemática del hambre y desnutrición en América Latina y el mundo. Se trata de treinta devocionales que contienen: una cita bíblica, una meditación y un motivo de oración. Para facilidad del lector, se ha clasificado los devocionales en tres secciones: A) Génesis - Creación, identidad y solidaridad: marcas del ser humano; B) Profetas - Pueblo de Dios, culto, buen trato: marcas del Shalom de Dios; C) Profetas - Pueblo de Dios, culto, buen trato: marcas del Shalom de Dios. La Sección A propone recorrer textos clave del libro de Génesis, a fin de rescatar la coherencia de la creación con el plan original de Dios. También consideraremos la aparición del pecado (resultado del egoísmo humano) y sus consecuencias en las relaciones interpersonales, y además la acción continua de Dios de convocar a las personas a unirse a un plan de solidaridad y defensa de la vida. Por su parte, la sección B, por su parte, hace un recorrido por textos de varios profetas, mayores y menores. Proponemos explorar la rebeldía que nos aleja de Dios y de los demás, la espiritualidad con sentido, la razón de ser del Shalom y su encarnación en Jesús, el hacer el bien como consecuencia de creer bien. Finalmente, la sección C propone, a partir del Evangelio Según Lucas, explorar textos que surgen del Sermón del Monte, con énfasis en la libertad que propone el Reino y en la necesidad de un firme seguimiento del camino que nos marca Jesús, tanto en creencias como en acciones.

secci贸n a Creaci贸n, identidad y solidaridad: marcas del ser humano

país: Bolivia texto bíblico:

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Génesis Génesis 1.26–31 Todo en su lugar, y bien coordinado

tema: «Al ver Dios tal belleza» La primera intención de los autores de estos textos es liberar a Dios de toda responsabilidad con respecto a la injusticia y a la presencia del mal que opera en el mundo. Guiados por el Espíritu, compusieron un relato poético para instruir a los creyentes en la idea de que, desde el principio, Dios creó todo insuperablemente bello y bueno. En la mente de Dios no interviene ningún propósito negativo. Este relato pinta una creación en perfecta armonía.Y en ella, el ser humano no es un accidente: es «imagen de Dios».

Texto: Génesis 1.26–31 (RVR1960) 26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. 28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. 29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. 30 Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer.Y fue así. 31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera.Y fue la tarde y la mañana el día sexto. Meditación: «Y dijo Dios: hagamos al ser humano a nuestra imagen, como semejanza nuestra». Qué hermoso comienzo el de este texto; el ser humano, es el centro de la creación de Dios. En ese preciso momento, Dios Padre y Creador lo coloca en medio de la comunidad perfecta unida por el amor, la Trinidad. Así nos muestra la naturaleza del hombre (varón y mujer) y su vocación: solo el amor. Cuán grande es ese amor, que Dios le entrega al ser humano toda su creación para que la domine. Esta dominación ha sido, por mucho tiempo, muy mal entendida. Con ella Dios nos invita a representarlo en la tierra, y a ser custodios de toda su creación. Jamás nos la entregó para explotarla o servirnos de ella. Más bien, para dirigirla con el mismo sentido que debería guiar al ser humano en todo: el amor. En lugar de mirar la creación y al ser humano como un fin en sí mismo, veámoslo como la imagen de Dios. Esa perspectiva nos permitirá apreciarla tal como el Creador la concibió: «y vio Dios que era bueno». Motivo de oración: Que el hombre no te obligue, Señor, a arrepentirte de haberle entregado un día las llaves de la tierra. Autor: Juan Carlos Gonzáles, coordinador de la Unidad de Compromiso Cristiano de Visión Mundial Bolivia.

país: Bolivia texto bíblico: Génesis Génesis 3.17 Peor que la cizaña: el egoísmo

tema: «Te costará mucho trabajo» (TLS). La creación quedó marcada por el egoísmo. Las relaciones armónicas entre los que somos de la creación (hombres y mujeres, la naturaleza, los animales… ¡todos nosotros!) resultaron marcadas por una decisión egoísta: la búsqueda del propio camino.

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Texto Génesis 3.17 (RVR1960) Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida. Meditación: La imagen que erróneamente nos formamos de Dios en este pasaje, tradicionalmente, es la de un dios castigador, implacable, inconmovible e irracional. Pero la realidad es que el ser humano, en su libertad, decide soltarse de la mano de Dios. Como afirmaría Karl Ranner, teólogo alemán, el pecado es un rechazo positivo. Es decir, el mismo ser humano libremente opta por alejarse de Dios y no escucharlo; antes que a su Creador prefiere escuchar a otros o a sí mismo. Este pecado consiste en creer que existe la posibilidad de vivir sin Dios, de seguir adelante en sus propias fuerzas. Este mismo pecado continúa cometiéndolo hoy la humanidad pues la gente sigue excluyendo a Dios de su vida. Por eso «la fatiga de conseguir el alimento con trabajo duro» no cesará hasta el día en que la persona decida abandonarse en la misericordia de Dios, y deje de pretender vivir como si Dios no existiera. Motivo de oración No me mueve, mi Dios tan querido, el cielo que me tienes prometido, ni me mueve el infierno tan temido, me mueve tu amor y tu misericordia, para saber que mi vida sin ti no vale nada. Autor: Juan Carlos Gonzáles, coordinador de la Unidad de Compromiso Cristiano de Visión Mundial Bolivia.

país: Brasil texto bíblico:

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Génesis Génesis 4.1–15 Si tú estás bien, yo estoy bien

tema: «¿Soy yo acaso guardián de mi hermano?» (LBLA). El relato nos muestra una costumbre muy antigua: al inicio de la cosecha, los agricultores ofrecían a sus divinidades sus mejores frutos. De esa manera agradecían lo que recibían. Otro tanto dedicaban los pastores con lo mejor de su ganado, en especial los primogénitos. Ambos buscaban el favor de Dios. El relato rechaza y maldice la tendencia humana a formar grupos que anteponen sus intereses «particulares» a los de los demás, y no les importa matar a sus propios hermanos. El egoísmo se ha incorporado a la naturaleza humana. No obstante, para Dios cada uno de nosotros cumple un papel clave en el bienestar de la otra persona. Somos guardianes, custodios, garantes, del bienestar de los demás. «Si tú estás bien, yo estoy bien» (Ubuntu, filosofía popular de Sudáfrica).

Texto Génesis 4.1–15 (RVR1960) Caín y Abel 1 Conoció Adán a su mujer Eva, la cual concibió y dio a luz a Caín, y dijo: Por voluntad de Jehová he adquirido varón. 2 Después dio a luz a su hermano Abel.Y Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra. 3 Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. 4 Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas.Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda; 5 pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya.Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante. 6 Entonces Jehová dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado, y por qué ha decaído tu semblante? 7 Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él. 8 Y dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos al campo.Y aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo mató. 9 Y Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano? 10 Y él le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra. 11 Ahora, pues, maldito seas tú de la tierra, que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano. 12 Cuando labres la tierra, no te volverá a dar su fuerza; errante y extranjero serás en la tierra. 13 Y dijo Caín a Jehová: Grande es mi castigo para ser soportado. 14 He aquí me echas hoy de la tierra, y de tu presencia me esconderé, y seré errante y extranjero en la tierra; y sucederá que cualquiera que me hallare, me matará. 15 Y le respondió Jehová: Ciertamente cualquiera que matare a Caín, siete veces será castigado. Entonces Jehová puso señal en Caín, para que no lo matase cualquiera que le hallara. Meditación El relato bíblico nos lleva al principio de la maldad humana. Es común hoy en día preguntarnos sobre el mal que nos rodea y pensarlo como nuevo. Sin embargo, este texto de Génesis nos sitúa antes del primer asesinato registrado en la historia, y, peor aún, el asesinato de alguien contra su hermano. El texto quizá nos asuste pues presenta la cara de ese mal gestado aun desde la primera familia. El diálogo de Dios con Caín procura cuidar de ella, al evitar que la ira y el odio venzan; el Señor ofrece su capacidad para dominar el mal, el cual siempre está a la puerta acechando para atacarnos. El capítulo repite siete veces la palabra hermano. Dios llama la atención a Caín sobre el cuidado que debe darle a su hermano, pero, por desdicha, Caín no escucha la voz de Dios y hace historia como el primer asesino. La violencia y el mal operan alrededor de nosotros, y Dios nos pregunta lo mismo que a Caín: «¿Dónde está tu hermano?» Ese hermano que depende de nosotros para escuchar la voz de Dios. El Señor conoce a nuestros hermanos que mueren de hambre y sufren violencia. Motivo de oración Señor Dios, gracias porque estás atento a nosotros, porque siempre insistes en hablarnos. Por favor, guíanos en el camino que debemos seguir. Ayúdanos a responsabilizarnos de la vida y destino de nuestros hermanos. Convéncenos de que solo en la felicidad del otro hallaremos la nuestra, pues, en tu Reino de amor y justicia, no existe la felicidad individual. Favorece nuestro esfuerzo de alcanzar a los que sufren. Danos hambre de justicia. Amén. Autor: Welinton Pereira asesor especializado de Relaciones Institucionales y coordinador de la Unidad de Compromiso Cristiano de Visión Mundial Brasil.

país: Brasil texto bíblico:

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Génesis Génesis 6.5–8 Cuando los derechos de algunos doblan la espalda de muchos

tema: «Vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra […] y se arrepintió Jehová de haber hecho al hombre en la tierra, y le dolió en su corazón [….] Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová». Este relato quizá refleje el recuerdo doloroso de las injusticias cometidas por la familia real. Al rey se le consideraba como el «hijo de Dios».Y resulta fácil suponer —la historia lo ha demostrado repetidas veces— que los reyes —y sus hijos— reclamaban excesivos privilegios, con lo que oprimían la vida del pueblo. Asistimos a otra gama de conductas contrarias al proyecto de Dios de justicia e igualdad. Las acciones de los seres humanos están marcadas por su egoísmo y maldad. No obstante, siempre queda un resto que halla gracia delante de Dios, uno que encarna un estilo de vida diferente. ¿Qué los distingue?

Texto Génesis 6.5–8 (RVR1960) 5 Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal. 6 Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón. 7 Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho. 8 Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová. Meditación En la versión tradicional portuguesa (Almeida Revisada y Actualizada), el capítulo recibe este título: «La corrupción de la humanidad». Vale notar que la corrupción se asocia con el mal que se habían multiplicado sobre toda la tierra en aquellos días. Además de dañar a las personas y a toda la creación, también Dios mismo resulta dolido. Por desdicha, nada ha cambiado hoy en día. Incluso, en medio de la riqueza y belleza de nuestro planeta, la injusticia y el egoísmo humanos causan sufrimiento a miles de millones de personas, animales y al medio ambiente. Otra observación relevante sobre el texto es que Noé, por ser justo y equitativo, halló gracia ante Dios (v. 8); y Dios lo utilizó como su instrumento para el sostenimiento de la vida. En esta historia advertimos la constante batalla entre la vida y la muerte, el bien y el mal. Sin embargo, ¡alcanza un final feliz! Los triunfos de la vida nos testifican que la integridad y la justicia preservan la vida y la vuelven agradable a los ojos de Dios. Motivo de oración Señor, llénanos de integridad y justicia, y conviértenos en instrumentos de buena noticia para todos los olvidados. Autor: Daniel Moreno de Souza, asesor de la Unidad de Compromiso Cristiano de Visión Mundial Brasil

país: Chile texto bíblico:

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Génesis Génesis 9.1–7 Toda vida es sagrada, aun la del diferente

tema: «Fructificad, multiplicaos y llenad la tierra […] A cada hombre demandaré la vida de su prójimo». Abandonar la justicia y la defensa de la vida trae, en consecuencia, verdaderas catástrofes. No obstante, Dios vuelve a bendecir la obra de sus manos y, en especial, a todos los seres vivientes. Decide confiar a Noé y a los suyos el cuidado y la administración del resto de la creación. Con todo, se enfatiza la responsabilidad con el hermano. El Señor deja en claro su posición con respecto a la violación del derecho a la vida de cada ser viviente, pero, en especial, la del hermano. La fe crece al ritmo que late la justicia y la defensa de la vida; por eso, posterior al mandato de multiplicarse, viene la orden de defender la vida del otro, aun la del diferente. Dios es el dios de las segundas oportunidades. Ofrece una nueva oportunidad, pero las reglas aún son las mismas: la vida humana es sagrada, y todos somos sus custodios.

Texto Génesis 9.1–7 (RVR1960) 1 Bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, y llenad la tierra. 2 El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos, en todo lo que se mueva sobre la tierra, y en todos los peces del mar; en vuestra mano son entregados. 3 Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he dado todo. 4 Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis. 5 Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre. 6 El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre. 7 Mas vosotros fructificad y multiplicaos; procread abundantemente en la tierra, y multiplicaos en ella. Meditación En la sociedad de hoy día todos corren. La rutina nos consume y marchamos por la vida sin importarnos lo que le pase al que está a nuestro lado.Ya llegó la hora de actuar. Muchos son los voluntarios que trabajan día a día por la justicia social, pero ¿qué pasa con el resto? La justicia social se alcanza solo al respetar la dignidad trascendente de cada persona. Sí, aquí lo que entra en juego es la dignidad de todos, cuya defensa nos la confió el Creador. Aunque la equidad y la justicia social sean nuestro fin, nuestra tarea se extiende más allá. La práctica de esta justicia social tiene que ver con la capacidad de reconocer esa dignidad que poseemos individualmente. Nadie es más que otra persona. Dios nos creó iguales. Esa es la razón por la que debemos luchar día a día para que nuestros hermanos, que en estos momentos padecen hambre, salgan de ese sufrimiento. El hambre no les permite vivir con dignidad ni en armonía. Motivo de oración Enséñanos, Señor, a amar a nuestro prójimo y a preocuparnos por su dignidad y bienestar. Padre, a aquellos que sufren hambre aliméntales la fe y la esperanza de que salir de esa opresión sí es posible. Mueve, también, a tu pueblo a asumir el compromiso de amar a su prójimo. Te rogamos, Señor. Autor: Manuel Chávez con el apoyo de Lucerina Vargas, jóvenes que colaboran como voluntarios en una de las comunidades en las que trabaja Visión Mundial Chile.

país: Chile texto bíblico:

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Génesis Génesis 11.1–9 Dios está junto a los débiles

tema: «Hagámonos un nombre […] Jehová descendió para ver la ciudad y la torre que edificaban […] así los esparció Jehová…» (RVR1995). Con la historia de la torre de Babel se completa el análisis crítico de la historia humana. Quedan a la vista varias claves que nos facilitan entender el pasado y la presencia del mal en él: el ser humano engendra todos los males cuando impone su egoísmo y su propio interés sobre el de los demás (v. 3); los ambiciosos forman grupos de poder para excluir, dominar y oprimir (v. 4); aun los escogidos de Dios traicionan su llamado a la defensa de la vida (vv. 6-9); los pueblos poderosos crecen a costa de los más débiles (v. 10). El relato de Babel expone a un único amo y señor que se enseñorea sobre todos los demás. Ante ese estado de injusticias, el Señor desciende desde el cielo; y no es para unirse al poder de los autores de la torre, es para destruirlo. Desciende para liberar a los pueblos oprimidos del sometimiento y de su servidumbre. No se trata, pues, de un castigo, sino de una acción liberadora de Dios.

Texto Génesis 11.1–9 (RVR1960) 1 Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. 2 Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí. 3 Y se dijeron unos a otros:Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego.Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla. 4 Y dijeron:Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra. 5 Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres. 6 Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos éstos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer. 7 Ahora, pues, descendamos, y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero. 8 Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad. 9 Por esto fue llamado el nombre de ella Babel, porque allí confundió Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra. Meditación La lectura nos indica que el objetivo de construir la torre de Babel era demostrar la superioridad del ser humano (sentirse dioses). Quedó a trasluz su egoísmo, por él despreciaron el propósito esencial que deben perseguir los moradores de la tierra, y desecharon el designio de Dios. En la actualidad se observan ambiciones similares: las personas se sienten autosuficientes, orgullosas de sus conocimientos y experiencias. Tal percepción de sí mismas las aleja de alcanzar el verdadero propósito de su existencia. No miran ni consideran las opiniones de las demás, ni siquiera las necesidades de las débiles, ni mucho menos la trascendencia de sus decisiones. En fin, podemos afirmar que todos pretenden un propósito, un para qué.Y, cuando se pierde el foco correcto, Dios, muchas veces, se verá obligado a tomar acciones drásticas, por amor al débil, al que nadie considera. Él actuará así como lo hizo en su momento para frenar a los opresores de Babel y para que el pueblo retomara su verdadero objetivo. Motivo de oración Señor, ayúdanos a emplear nuestras capacidades, habilidades y experiencias a fin de liberar a los oprimidos y dar buenas nuevas a los pobres. Despiértanos para considerar siempre a los que nos has llamado a servir: los niños. Inclina nuestro corazón a actuar en primer lugar por «el bienestar de los otros»; que nunca privilegiemos el nuestro. Autor: Manuel Chávez con el apoyo de Lucerina Vargas, jóvenes que colaboran como voluntarios en una de las comunidades en las que trabaja Visión Mundial Chile.

país: Colombia texto bíblico:

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Génesis Génesis 12.1–3 Cuando Dios nos mueve las estructuras

tema: «Vete de tu tierra, de tu parentela y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Haré de ti una nación grande, te bendeciré, engrandeceré tu nombre y serás bendición». Si nos mantenemos leyendo el texto bíblico en clave de justicia, confirmaremos que en este relato se evidencia algo común a todas las religiones: todo aquello que resulta bueno, positivo o conveniente para el grupo se considera deseo, voluntad o mandato de Dios. El Señor llama y ese llamado mueve a su elegido. En cierto modo, lo desestabiliza. Desde ahora, su vida (y la nuestra) adquiere una nueva dimensión. No vivimos solo para el logro de nuestros planes; existe algo más grande que nosotros en el horizonte. ¿Será la utopía de un mundo mejor la que nos mantiene en el camino?

Texto Génesis 12.1–3 (RVR1960) 1 Pero Jehová había dicho a Abram:Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 2 Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. Meditación La historia de este hijo de Dios despierta curiosidad. Aun cuando vive en una ciudad en la que se adoraban otros dioses, este valiente varón se formó con fe en un solo dios y demostró ser temeroso del mismo dios. A la edad aproximada de setenta años, siendo — simbólicamente— aún joven, aceptó sin reparo alguno el servicio que se le encomendó (marchar a donde Dios se lo pidió, dejando atrás todos sus logros en la ciudad de Ur). «Él no sabía adónde iría ni por qué le había pedido que abandonaran su patria. Aun así, obedeció». Muchas veces el Señor nos mueve las estructuras, y no siempre los cambios que llegan nos resultan fáciles de vivir. No obstante, ¿estamos dispuestos a responder al llamado de Dios? No olvidemos jamás que debemos desarrollar la vida en espiral, con la capacidad de responder al llamado y aceptar el cambio que opera Dios en nuestra vida. Sus grandes obras las construye él de pequeñas experiencias. Hoy, el llamado del creador es a que promovamos en cada una de nuestras naciones la justicia y la solidaridad para todos. Sencillamente estamos obligados a volvernos ese niño lleno de fe. Motivo de oración Señor Dios, te damos gracias y te pedimos sabiduría para entender y aceptar tu voluntad. Autor: Daniel Delgado Álvarez, joven que apoya desde Visión Mundial Colombia.

país: Colombia texto bíblico: Génesis Génesis 15.1, 4–7, 13–16 Dios toma la iniciativa

tema: «No temas […], yo soy tu escudo, y tu recompensa será muy grande […] un hijo tuyo será el que te herede […] Abram creyó a Jehová y le fue contado por justicia […] Ten por cierto que tu descendencia habitará en tierra ajena, será esclava allí y será oprimida cuatrocientos años. Pero también a la nación a la cual servirán juzgaré yo; y después de esto saldrán con gran riqueza» (RVR1995).

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Al igual que en el capítulo 12, en el inicio de esta misma historia, Dios, otra vez, toma la iniciativa. Se compromete con otra promesa: «no temas, yo soy tu escudo». El narrador quiere transmitir la profunda e íntima unión de Dios con su pueblo. Los lazos se estrechan de modo definitivo con la alianza que busca establecer la fraternidad entre todos, por medio de la paternidad del fundador del pueblo de Dios. Dios llama y a la vez se compromete a cuidar y a proveer a quien ha llamado. Aunque parezca que el proyecto divino ha fracaso, Dios sigue en control y no tolerará que la injusticia triunfe. Al final, su plan de vida plena para todos se cumplirá.

Lectura Génesis 15.1, 4–7 (RVR1960) 1 Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, Abram; yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande. 4 Luego vino a él palabra de Jehová, diciendo: No te heredará éste, sino un hijo tuyo será el que te heredará. 5 Y lo llevó fuera, y le dijo: Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar.Y le dijo: Así será tu descendencia. 6 Y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia. 7 Y le dijo:Yo soy Jehová, que te saqué de Ur de los caldeos, para darte a heredar esta tierra. Meditación La palabra de Dios llega hoy a todas las personas y a cada uno de nosotros directa o indirectamente; entonces, ¿en verdad escuchamos su llamado? Hubo un hombre que sí lo escuchó. Abraham tuvo una visión del dios verdadero y perfecto, y respondió con un corazón sensible a ese llamado. ¿Tenemos hoy la misma visión que Abraham acerca de Dios? ¿Estamos dispuestos a escuchar y cumplir la voluntad del Señor sin objeción alguna? Abraham tuvo fe en que Dios cumpliría cada una de sus promesas. No le importaba que la promesa se extendiera más allá de los límites humanos; por ejemplo, su descendencia. Aun cuando su esposa era estéril, creyó que sería tan numerosa como las estrellas del cielo. Él conocía el gran poder de Dios y confiaba en que él cumpliría su palabra. La vida no sería tan fácil para Abraham y sus descendientes; pasarían por muchas injusticias y serían oprimidos por la maldad de muchos. No obstante, todo este avasallamiento acabaría y ellos, por fin, heredarían la promesa. ¿Será posible que aún vivamos bajo tal promesa? ¿Qué tan grande es nuestra fe? ¿Injusticia, maldad, hambre… estarán presentes al finalizar todo? Motivo de Oración Señor, quiero ser tu instrumento para que los demás te conozcan, ¡úsame! Sensibiliza, entonces, mi corazón para escuchar tu voz y despertar ante las necesidades de los demás. Autor: Daniel Delgado Álvarez, joven que apoya a Visión Mundial Colombia

país: Costa Rica texto bíblico:

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Génesis Génesis 41.53–57 (56) ¿Cómo prevenimos la hambruna?

tema: «Cuando el hambre se extendió por todo el país, abrió José todos los graneros». (RVR1995) Este relato y, en especial, la noticia de que el hambre asolaba por todas partes preparan el arribo de los hermanos de José a Egipto. Dios actúa en la historia de la humanidad. Las hambrunas son una amenaza para todos los pueblos. El texto expone algunas acciones que es posible tomar para prevenir los estragos de muchos desastres «naturales»… ¿En cuáles otras acciones convendría que pensáramos hoy?

Texto Génesis 41.53–57 (RVR1960) 53 Así se cumplieron los siete años de abundancia que hubo en la tierra de Egipto. 54 Y comenzaron a venir los siete años del hambre, como José había dicho; y hubo hambre en todos los países, mas en toda la tierra de Egipto había pan. 55 Cuando se sintió el hambre en toda la tierra de Egipto, el pueblo clamó a Faraón por pan.Y dijo Faraón a todos los egipcios: Id a José, y haced lo que él os dijere. 56 Y el hambre estaba por toda la extensión del país. Entonces abrió José todo granero donde había, y vendía a los egipcios; porque había crecido el hambre en la tierra de Egipto [énfasis añadido]. 57 Y de toda la tierra venían a Egipto para comprar de José, porque por toda la tierra había crecido el hambre. Meditación La lectura de este pasaje nos permite ver cuál era la capacidad del liderazgo político de Egipto. Primero supo discernir cuán trascendente era prestar atención al mensaje de José.Y, segundo, actuó de inmediato para concretar políticas agrícolas, las cuales generaron una abundante cosecha de alimentos. Aprovecharon todos los recursos con los que contaban: tierra, agua, fuerza humana, y lograron un buen acopio de muchos otros recursos presentes, entre los cuales gozaron de la sabiduría de un hombre temeroso de Dios que practicaba su fe en él. Echaron a andar esa sabiduría para vencer el hambre no solo de los egipcios, sino también la del pueblo de José y de otros más. Ahora bien, preguntémonos qué enseñanza nos ofrece el texto que al aplicarla transforme nuestra propia realidad. ¿Qué inquietud de nuestro corazón deberíamos compartir en los sectores de decisión política? ¿Cuál debería ser nuestro aporte cuando vemos que el medio ambiente resulta seriamente afectado? ¿Cómo deberíamos intervenir cuando las políticas nacionales de producción dejan a los productores sin recursos para cultivar la tierra? ¿Qué plan estratégico aconsejaríamos cuando compañías transnacionales pagan los costos de producción sin criterio de justicia? ¿Cómo conseguir frenar ese tipo de políticas para que no dejen con más hambre a los más vulnerables de la sociedad? Identifiquemos una acción concreta que rompa los procesos que producen hambre, y comprometámonos con ella para alcanzar su meta. Motivo de oración Señor, gracias por tantos recursos que nos has dado; danos buen juicio y sentido común para saber cómo emplearlos contra todo lo que provoca el hambre. ¡Úsanos! Autor: Alberto Quiñonez, coordinador de la Unidad de Compromiso Cristiano de Visión Mundial Costa Rica.

10.

país: Costa Rica texto bíblico:

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Génesis Génesis 41.53–57 (57) ¿Mercado global o solidaridad global?

tema: «Y de todos los países venían para comprar grano […] porque en toda la tierra había crecido el hambre». (RVA1995) En un país tan privilegiado como Egipto, con el gran Nilo, siempre existía la posibilidad de prepararse contra las sequías y las hambrunas, resultaba sensato actuar según el aprovisionamiento propuesto por José. Pero ¡cuidado! Representaba asimismo la oportunidad de aumentar la dominación y la opresión sobre pueblos más débiles y menos favorecidos por la naturaleza. Una crisis global exige solidaridad global. La hambruna no solo afectó al país en que habitaba José, sino que también se extendió al resto del mundo conocido. Dios espera que el bienestar alcanzado se comparta con el que lo necesite. «Si tú estás bien, yo estoy bien» (Ubuntu, filosofía popular de Sudáfrica).

secci贸n B Pueblo de Dios, culto, buen trato: marcas del Shalom de Dios

11.

país: Ecuador texto bíblico:

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Profetas Isaías 1.2–9 La rebeldía nos aleja de Dios y de las demás personas

tema: «Oíd, cielos, y escucha tú, tierra; porque habla Jehová: Crié hijos y los engrandecí, pero ellos se rebelaron contra mí» (RVA1995) El profeta describe la condición de las relaciones del pueblo con Dios: tal parece que ignora que todos sus dolores y fracasos son fruto de haberse alejado de Dios. No obstante, no todo está perdido; Isaías 1.9 es una tímida confesión de fe y de esperanza: a pesar de todo, el Señor siempre se fija en el «pequeño resto», la pequeña semilla que está llamada a germinar, a crecer y a dar abundante fruto. La falta de justicia de algunos no pronuncia la última palabra; la vida justa de algunos genera esperanza.

Texto Isaías 1.2–9 (RVR1960) 2Oíd, cielos, y escucha tú, tierra; porque habla Jehová: Crié hijos, y los engrandecí, y ellos se rebelaron contra mí. 3 El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor; Israel no entiende, mi pueblo no tiene conocimiento. 4 ¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás. 5 ¿Por qué querréis ser castigados aún? ¿Todavía os rebelaréis? Toda cabeza está enferma, y todo corazón doliente. 6 Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite. 7 Vuestra tierra está destruida, vuestras ciudades puestas a fuego, vuestra tierra delante de vosotros comida por extranjeros, y asolada como asolamiento de extraños. 8 Y queda la hija de Sion como enramada en viña, y como cabaña en melonar, como ciudad asolada. 9 Si Jehová de los ejércitos no nos hubiese dejado un resto pequeño, como Sodoma fuéramos, y semejantes a Gomorra. Meditación En la vida enfrentamos a menudo situaciones que nos confunden, pero siempre les buscamos una solución… Dios quiere que seamos buenos como él lo es; que con un pan demos de comer a miles; que dejemos de dilapidar lo poco que poseemos. Él no pretende nada para sí mismo; pero sí espera que sus hijos, sus representantes en la tierra, compartan con el prójimo y sepan que, para darle algo a DIOS, solo basta con dárselo a un niño. Solo entonces, nos daremos cuenta de que en la inocencia de un niño se refleja Dios. La práctica de la verdadera justicia significa hacer el bien, reprender al opresor, defender al huérfano y abogar por la viuda; tales acciones contentan el corazón de Dios pues todo esto es bueno, agradable y perfecto. El mundo de ahora es particularmente igual que el de los tiempos bíblicos; solo se requiere contextualizar aquellas experiencias y aplicarlas a nuestra realidad. Hoy, igual que los de entonces, somos egoístas y todo lo queremos para nosotros; no velamos por las personas menos favorecidas y que precisan de una mano amiga. Ignoramos que habrá recompensa (Is 1.19). Persiste la incógnita: ¿qué esperamos? Motivo de oración Señor, mueve a arrepentimiento a las personas cuyo corazón es de piedra; acércalas a ti. A tus hijos, muévenos a expresar tu misericordia y justicia al defender a los niños que han perdido su inocencia por la maldad de muchos. A los que botan lo que otros necesitan enséñanos la austeridad y la solidaridad. A los que saben qué es lo justo pero temen actuar llénalos de amor, dominio propio y poder. Amén. Autora: Marlene Caín, fue patrocinada y participó en la red del proyecto «Aquí Estoy». Fue líder de la red de Participación de la Niñez. Asiste a la iglesia Alianza Cristiana en donde sirve como líder de jóvenes, y actualmente cursa el tercer año de la carrera de Derecho.

12.

país: Ecuador texto bíblico:

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Profetas Isaías 1.10–20 Cuidado con una religiosidad sin sentido

tema: «¿Para qué me sirve, dice Jehová, la multitud de vuestros sacrificios?[…] Lavaos y limpiaos, dejad de hacer lo malo, aprended a hacer el bien […], socorred al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda» (RVR1995). Un culto y una religión que no se basen en practicar la justicia con el pobre y con el oprimido resultan abominables al Señor. Dios no exige nada para sí; solo pide respetar la justicia y el derecho de los más despojados. La viuda y el huérfano son el símbolo de los más pobres entre los pobres, a los cuales la misma ley debía proteger: Ex 22.21; Dt 10.18; 14.29; 27.19). Por ellos oran los profetas (Jer 7.6). Son el tipo de esos pobres que siempre estarán con nosotros (Mc 14.7), cuya pobreza nos exige ser generosos para cambiar su vida (Dt 15.11). ¿Nuestras celebraciones reflejan este deseo de Dios?

Texto Isaías 1.10–20 (RVR1960) 10 Príncipes de Sodoma, oíd la palabra de Jehová; escuchad la ley de nuestro Dios, pueblo de Gomorra. 11 ¿Para qué me sirve, dice Jehová, la multitud de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos. 12 ¿Quién demanda esto de vuestras manos, cuando venís a presentaros delante de mí para hollar mis atrios? 13 No me traigáis más vana ofrenda; el incienso me es abominación; luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes. 14 Vuestras lunas nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene aborrecidas mi alma; me son gravosas; cansado estoy de soportarlas. 15 Cuando extendáis vuestras manos, yo esconderé de vosotros mis ojos; asimismo cuando multipliquéis la oración, yo no oiré; llenas están de sangre vuestras manos. 16 Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo; 17 aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda. 18 Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana. 19 Si quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra; 20 si no quisiereis y fuereis rebeldes, seréis consumidos a espada; porque la boca de Jehová lo ha dicho. Meditación A veces nos sentimos enfermos, cansados, desanimados, sin saber por qué. ¿Por qué será? Tal vez porque mi vida no la guía Dios, o quizás por no permitirle a Dios que moldee mi corazón. No significa que Dios se aleje de ti o de mí. Significa que yo y tú nos alejamos de él con cada decisión y actitud que tomamos día a día. Tal alejamiento también nos separa de los demás. De manera que animémonos a experimentar lo que significa vivir conforme a la voluntad de Dios. ¿Sabes?, su gracia es tan grande y su amor tan infinito que no posee fin. Muchos entienden que un milagro es ver a un cojo saltar; en mi opinión, un verdadero milagro es vivir un día más. Sin abrigar duda alguna, expresemos lo que fluye en mí, en ti, en todos; amor, respeto, solidaridad, pasión por ayudar. Ten presente que, si en lo poco has sido fiel, en lo mucho te pondrá el Señor, No nos alejemos de él; nuestra recompensa será grande. Motivo de oración Padre, gracias por tu amor, gracias por tu perdón. Si hemos cometido una injusticia y permanecemos ciegos a ella, no cierres tus oídos a nuestra oración, ni te alejes de nosotros; repréndenos, convéncenos de ese pecado, corrige nuestro paso y enséñanos a caminar en la justicia. Queremos caminar contigo, permanecer siempre a tu lado. reflejar lo que tú eres. Amén. Autor: Víctor Castillo Lizame, joven patrocinado en una de las comunidades en las que trabaja Visión Mundial Ecuador; además es representante de la red local de Campozano (parroquia) y líder de la red de Participación e Incidencia de Jóvenes.

13.

país: El Salvador texto bíblico:

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Profetas Isaías 9.1–7 La paz encarnada

tema: «No habrá siempre oscuridad para la que está ahora en angustia […] a los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos […] Porque todo calzado que lleva el guerrero en el tumulto de la batalla y todo manto revolcado en sangre, serán quemados, serán pasto del fuego. Porque un niño nos ha nacido» (RVR1995) En nuestro pesimismo y desesperación, tememos que las tristezas y los problemas nunca terminen. Pero nos consuela esta certeza: aunque Dios no nos saque de nuestros problemas, nos guiará a salvo a través de ellos si nos rendimos a su poder; solo él garantiza un orden justo en la humanidad. Adicionalmente, la promesa de paz de Dios (su Shalom instaurado en las relaciones humanas) se encarna en un niño; los cristianos veremos a Jesús como la plena encarnación de la paz de Dios.

Texto Isaías 9:1-7 (RVR1960) 1 Mas no habrá siempre oscuridad para la que está ahora en angustia, tal como la aflicción que le vino en el tiempo que livianamente tocaron la primera vez a la tierra de Zabulón y a la tierra de Neftalí; pues al fin llenará de gloria el camino del mar, de aquel lado del Jordán, en Galilea de los gentiles. 2 El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos. 3 Multiplicaste la gente, y aumentaste la alegría. Se alegrarán delante de ti como se alegran en la siega, como se gozan cuando reparten despojos. 4 Porque tú quebraste su pesado yugo, y la vara de su hombro, y el cetro de su opresor, como en el día de Madián. Porque todo calzado que lleva el guerrero en el tumulto de la batalla, y todo manto revolcado en sangre, serán quemados, pasto del fuego. 6 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. 7 Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto. Meditación El hambre provoca uno de los estados de desesperanza más crueles. La sensación de impotencia, debilidad y ansiedad expresan una de las condiciones que más cuestiona nuestra naturaleza humana. La foto de Kevin Carter, ganadora en 1994 del Premio Pulitzer, que atrapa la imagen de un niño que agoniza por la hambruna que azota África, y que a pocos metros de él acecha un buitre, es una de las evidencias más contundentes de la gravedad del hambre conocida en el mundo. La paradoja es que asistimos a una era en que a este flagelo que desnaturaliza la condición humana la acompaña otra vivida por miles de personas que padecen enfermedades asociadas con la obesidad. Sin embargo, al igual que al pueblo de Israel en el pasaje de Isaías, Dios ofrece una imagen que rebosa de esperanza: «un niño os es nacido». Esta expresión posee el matiz de una voz de júbilo que anuncia una esperanza. No queda duda: Dios pretende alimentar nuestra esperanza y amor. Motivo de oración Dios, en medio de las injusticias y el sufrimiento que ellas nos dejan, alimenta nuestra esperanza. Que ella geste en nosotros el amor que debemos compartir. Autor: Juan Carlos Cárcamo, coordinador de la Unidad de Compromiso Cristiano de Visión Mundial El Salvador

14.

país: El Salvador texto bíblico:

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Profetas Isaías 58.1–12 El verdadero ayuno se vive en la justicia

tema: «Ellos me buscan cada día y quieren saber mis caminos, como gente que hubiera hecho justicia y que no hubiera dejado el derecho de su Dios […] El ayuno que yo escogí, ¿no es más bien desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, dejar ir libres a los quebrantados y romper todo yugo?» [RVR1995] La justicia, que juega un papel determinante en el pensamiento de los profetas, nadie consigue ocultar, ni siquiera por las más extraordinarias prácticas religiosas. Los rituales llegan a volverse prácticas mecánicas y externas. Si las prácticas religiosas no nacen del corazón y resultan de una verdadera justicia, Dios las rechaza. Este tipo de mensajes nos sirven a los creyentes para animarnos a examinar la calidad de nuestra vida.

Texto Isaías 58.1–12 (RVR1960) 1 Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado. 2 Que me buscan cada día, y quieren saber mis caminos, como gente que hubiese hecho justicia, y que no hubiese dejado la ley de su Dios; me piden justos juicios, y quieren acercarse a Dios. 3 ¿Por qué, dicen, ayunamos, y no hiciste caso; humillamos nuestras almas, y no te diste por entendido? He aquí que en el día de vuestro ayuno buscáis vuestro propio gusto, y oprimís a todos vuestros trabajadores. 4 He aquí que para contiendas y debates ayunáis y para herir con el puño inicuamente; no ayunéis como hoy, para que vuestra voz sea oída en lo alto. 5 ¿Es tal el ayuno que yo escogí, que de día aflija el hombre su alma, que incline su cabeza como junco, y haga cama de cilicio y de ceniza? ¿Llamaréis esto ayuno, y día agradable a Jehová? 6 ¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo? 7 ¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano? 8 Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia. 9 Entonces invocarás, y te oirá Jehová; clamarás, y dirá él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el dedo amenazador, y el hablar vanidad; 10 y si dieres tu pan al hambriento, y saciares al alma afligida, en las tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad será como el mediodía. 11 Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan. 12 Y los tuyos edificarán las ruinas antiguas; los cimientos de generación y generación levantarás, y serás llamado reparador de portillos, restaurador de calzadas para habitar. Meditación El ayuno se ha considerado una práctica de espiritualidad aceptable. Sin embargo, se vuelve cuestionable cuando se impone por causas estructurales a grupos de personas cuya condición de vulnerabilidad es tal que les impide proveerse del derecho a la alimentación. Millones de personas en el mundo, niños en especial, se someten a un continuo ayuno, sin que tal práctica sea su elección. No es una condición que ellos hayan elegido, más bien es consecuencia de un orden social que les condena a semejante realidad. El texto bíblico le llama injusticia al sistema que provoca esa condición. Algunos escritores contemporáneos, como Ignacio Ellacuría, se han referido a él como el pecado social o pecado estructural. Las comunidades de fe han practicado el ayuno por siglos, y con todo, las condiciones sociales de injusticia prevalecen. Esta incongruencia la señala el texto bíblico al afirmar que los rituales corren el riesgo de volverse prácticas mecánicas y externas. Si las prácticas religiosas no nacen del corazón y resultan del ejercicio de una verdadera justicia, Dios las rechaza. Debemos esforzarnos por practicar de manera intencionada la justicia; esa es la voluntad de Dios para un mundo que necesita realizar cambios radicales en sus estructuras. Motivo de oración Dios, ilumínanos para examinar nuestra vida con honestidad y ver nuestras injusticias. Danos el poder para renunciar a ellas y la gracia para escoger deliberadamente la justicia. Autor: Juan Carlos Cárcamo, es coordinador de la Unidad de Compromiso Cristiano de Visión Mundial El Salvador

15.

país: Guatemala texto bíblico:

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Profetas Isaías 65.17–25 Ya, todavía no, seguro que sí

tema: «Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra […] No habrá más allí niño que muera de pocos días ni viejo que sus días no cumpla […] No edificarán para que otro habite ni plantarán para que otro coma […] No afligirán ni harán mal en todo mi santo monte» (RVA1995). Ante el caos de la sociedad, Dios decide intervenir. Dios intervendrá; Dios recreará… Pero, hasta que esto suceda, cada persona y la sociedad tienen que dar los primeros pasos. ¿Cómo volver realidad este mensaje para las miles de familias que han quedado despojadas y desplazadas de sus parcelas? ¿Cuál papel cumplirán los profetas actuales frente a los sistemas injustos? ¿Continuaremos esperando una intervención extraordinaria de Dios, o seguiremos lamentándonos porque no interviene? ¿O empezaremos a dar pasos hacia el cumplimiento pleno del sueño de Dios?

Texto Isaías 65.17–25 (RVR1960) 17 Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra; y de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento. 18 Mas os gozaréis y os alegraréis para siempre en las cosas que yo he creado; porque he aquí que yo traigo a Jerusalén alegría, y a su pueblo gozo. 19 Y me alegraré con Jerusalén, y me gozaré con mi pueblo; y nunca más se oirán en ella voz de lloro, ni voz de clamor. 20 No habrá más allí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de cien años, y el pecador de cien años será maldito. 21 Edificarán casas, y morarán en ellas; plantarán viñas, y comerán el fruto de ellas. 22 No edificarán para que otro habite, ni plantarán para que otro coma; porque según los días de los árboles serán los días de mi pueblo, y mis escogidos disfrutarán la obra de sus manos. 23 No trabajarán en vano, ni darán a luz para maldición; porque son linaje de los benditos de Jehová, y sus descendientes con ellos. 24 Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído. 25 El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá paja como el buey; y el polvo será el alimento de la serpiente. No afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dijo Jehová. Meditación El territorio guatemalteco es un regalo de Dios. Poseemos una tierra muy fértil en la que fluyen leche y miel. Por eso lo llaman «el país de la eterna primavera». Sin embargo, no todos disfrutan de esta riqueza. Somos uno de los países más desiguales de América Latina. Esto contraviene la idea original de Dios. Pese a las estadísticas que revelan tal desigualdad, la buena noticia para los guatemaltecos —y, en particular, para las familias que viven en extrema pobreza— es que Dios continúa su proceso de recreación de nuevos cielos y nueva tierra. Aunque avanzamos con lentitud en ese proceso de recreación, las comunidades pobres disfrutan la redención por el poder transformador de la esperanza. En esta nueva etapa de la historia, familias, comunidades, instituciones humanitarias e iglesias, trabajan conjuntamente para mejorar la calidad de la vida de los más vulnerables. Lo consiguen al promover la intimidad entre Dios y los seres humanos creados a su imagen y semejanza. Dios alterará el orden natural de violencia entre el lobo y el cordero, o entre el león y el buey, al abrir el camino a la paz. Abrigamos esperanza de que se corrijan las situaciones precarias y de que se cubrirán necesidades de las distintas comunidades de nuestro país. Como jóvenes asumimos el reto de convertirnos en instrumentos de denuncia de las desigualdades y de anuncio de la esperanza en el glorioso Reino de Dios, que ya está presente en cada pequeña acción que beneficia a los menos favorecidos. Motivo de oración Señor, transforma nuestro corazón, forma a Jesús en él, su misericordia, su justicia, su indignación frente a cualquier injusticia. Úsanos como instrumento de tu intervención; ayúdanos a crear acciones en las que seamos instrumentos de tu paz y también de tu denuncia. Amén. Autor: Pablo Ariel Marroquín Martínez, veintiún años, estudiante de Gerencia de Negocios, maestro de Inglés.

16.

país: Guatemala texto bíblico:

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Profetas Jeremías 9.11–25 (23– 24) El orgullo de hacer lo correcto es bueno

tema: «No debe el sabio vanagloriarse por ser sabio […] Quien se quiera vanagloriar, que se vanaglorie de entenderme y conocerme. Porque yo soy el Señor, que hago misericordia, imparto justicia y hago valer el derecho en la tierra, porque estas cosas me complacen» (RVC) ¿Por qué los grandes y poderosos se asocian para dominar y oprimir a los pequeños? ¿Por qué mejor no construir juntos una sociedad orientada por la justicia? El profeta lleva al pueblo a responder desde su fe, desde el conocimiento y práctica de la ley del Señor. Las injusticias se generan cuando la persona se aleja de Dios, cuando se vuelve autónoma de Dios y se olvida de la otra. Todo culto de estas personas es un culto a sí mismas, al poder y al tener. Cuidado con el culto del que ignora su compromiso con la justicia.

Texto Jeremías 9:11-25 (RVR1960) 11 Reduciré a Jerusalén a un montón de ruinas, morada de chacales; y convertiré las ciudades de Judá en desolación en que no quede morador. 12 ¿Quién es varón sabio que entienda esto? ¿y a quién habló la boca de Jehová, para que pueda declararlo? ¿Por qué causa la tierra ha perecido, ha sido asolada como desierto, hasta no haber quien pase? 13 Dijo Jehová: Porque dejaron mi ley, la cual di delante de ellos, y no obedecieron a mi voz, ni caminaron conforme a ella; 14 antes se fueron tras la imaginación de su corazón, y en pos de los baales, según les enseñaron sus padres. 15 Por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí que a este pueblo yo les daré a comer ajenjo, y les daré a beber aguas de hiel. 16 Y los esparciré entre naciones que ni ellos ni sus padres conocieron; y enviaré espada en pos de ellos, hasta que los acabe. 17 Así dice Jehová de los ejércitos: Considerad, y llamad plañideras que vengan; buscad a las hábiles en su oficio; 18 y dense prisa, y levanten llanto por nosotros, y desháganse nuestros ojos en lágrimas, y nuestros párpados se destilen en aguas. 19 Porque de Sion fue oída voz de endecha: ¡Cómo hemos sido destruidos! En gran manera hemos sido avergonzados, porque abandonamos la tierra, porque han destruido nuestras moradas. 20 Oíd, pues, oh mujeres, palabra de Jehová, y vuestro oído reciba la palabra de su boca: Enseñad endechas a vuestras hijas, y lamentación cada una a su amiga. 21 Porque la muerte ha subido por nuestras ventanas, ha entrado en nuestros palacios, para exterminar a los niños de las calles, a los jóvenes de las plazas. 22 Habla: Así ha dicho Jehová: Los cuerpos de los hombres muertos caerán como estiércol sobre la faz del campo, y como manojo tras el segador, que no hay quien lo recoja. 23 Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. 24 Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová. 25 He aquí que vienen días, dice Jehová, en que castigaré a todo circuncidado, y a todo incircunciso; Meditación ¿Te has preguntado alguna vez cómo es la vida más allá de la tuya? Nosotros, María José Portales, veintiún años, productora de radio, y César Mejía, veintiséis años, coordinador de logística, somos dos jóvenes que, con el paso del tiempo y de la mano de Dios, hemos ido encontrando el sendero para actuar correctamente en medio de un mundo indiferente a las huellas de la injusticia. Estamos seguros de que tú también encontrarás ese camino. Pronto verás que muchos son indiferentes ante problemas tan graves como la desnutrición, el no cubrir las necesidades básicas, el vacío físico, emocional y espiritual.Vivimos en un mundo lleno de modas que se esfuerza por aparentar que todo está bien y que todo es correcto, aunque la injusticia socave a los más vulnerables. No obstante, recuerda que como jóvenes debemos combatir la indiferencia de este mundo. Nosotros somos la herramienta para que el cambio se dé, pero con corazón humilde y sencillo. Somos voz, somos luz, el hilo que teje la red de la transformación en el amor de Dios. Somos juventud, somos vida, somos el amor revolucionario promotor de la justicia, la paz y la equidad. Sigamos el ejemplo de Jesús: hijo, hermano y amigo. Sintámonos orgullosos de hacer lo bueno, con acciones que cambien este mundo lleno de injusticias. Motivo de oración Incomódanos, Señor; abre nuestros ojos para que ya no seamos indiferentes al sufrimiento del cercano; ilumina nuestro camino con tu sabiduría y justicia, pues queremos que nos uses para transformar tu mundo. Amén. Autores: María José Portales, joven de veintiún años, productora de radio; y César Mejía, joven de veintiséis años, coordinador de logística.

17.

país: Honduras texto bíblico:

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Profetas Ezequiel 18.1–32 Solo morirá quien peque… quien no haga lo correcto

tema: «Ustedes en la tierra de Israel acostumbran repetir aquel refrán que dice: “Los padres se comieron las uvas agrias, y a los hijos les dio la dentera.” ¿En verdad lo creen? [...] Todos ustedes son míos. Lo mismo el padre que el hijo. Sólo morirá quien peque. Nadie más» (RVC). El proverbio del que reniega Ezequiel expresa una realidad: la generación de los exiliados paga por los errores y los pecados de las generaciones precedentes. Esa certeza justificaba un cierto fatalismo y la sensación de derrota ante la situación presente. Ezequiel habla de la justicia de Dios que toma en cuenta a las personas y da a cada uno lo que se merece. Afirma la posibilidad de convertirse y de obtener de Dios las bendiciones perdidas por la conducta anterior. La única intención de Dios es dar vida, con tal que vuelvan a su Alianza. Comprender esta verdad resulta decisivo para engendrar la esperanza y motivar a aquellos exiliados, cuyos hijos volverán un día a su país para reconstruir el pueblo de Dios sobre bases más firmes.

Texto Ezequiel 18.1–32 (RVR1960) 1 Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 2 ¿Qué pensáis vosotros, los que usáis este refrán sobre la tierra de Israel, que dice: Los padres comieron las uvas agrias, y los dientes de los hijos tienen la dentera? 3 Vivo yo, dice Jehová el Señor, que nunca más tendréis por qué usar este refrán en Israel. 4 He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, esa morirá. 5 Y el hombre que fuere justo, e hiciere según el derecho y la justicia; 6 que no comiere sobre los montes, ni alzare sus ojos a los ídolos de la casa de Israel, ni violare la mujer de su prójimo, ni se llegare a la mujer menstruosa, 7 ni oprimiere a ninguno; que al deudor devolviere su prenda, que no cometiere robo, y que diere de su pan al hambriento y cubriere al desnudo con vestido, 8 que no prestare a interés ni tomare usura; que de la maldad retrajere su mano, e hiciere juicio verdadero entre hombre y hombre, 9 en mis ordenanzas caminare, y guardare mis decretos para hacer rectamente, éste es justo; éste vivirá, dice Jehová el Señor. 10 Mas si engendrare hijo ladrón, derramador de sangre, o que haga alguna cosa de estas, 11y que no haga las otras, sino que comiere sobre los montes, o violare la mujer de su prójimo, 12al pobre y menesteroso oprimiere, cometiere robos, no devolviere la prenda, o alzare sus ojos a los ídolos e hiciere abominación, 13 prestare a interés y tomare usura; ¿vivirá éste? No vivirá. Todas estas abominaciones hizo; de cierto morirá, su sangre será sobre él. 14 Pero si éste engendrare hijo, el cual viere todos los pecados que su padre hizo, y viéndolos no hiciere según ellos; 15 no comiere sobre los montes, ni alzare sus ojos a los ídolos de la casa de Israel; la mujer de su prójimo no violare, 16 ni oprimiere a nadie, la prenda no retuviere, ni cometiere robos; al hambriento diere de su pan, y cubriere con vestido al desnudo; 17 apartare su mano del pobre, interés y usura no recibiere; guardare mis decretos y anduviere en mis ordenanzas; éste no morirá por la maldad de su padre; de cierto vivirá. 18 Su padre, por cuanto hizo agravio, despojó violentamente al hermano, e hizo en medio de su pueblo lo que no es bueno, he aquí que él morirá por su maldad. 19 Y si dijereis: ¿Por qué el hijo no llevará el pecado de su padre? Porque el hijo hizo según el derecho y la justicia, guardó todos mis estatutos y los cumplió, de cierto vivirá. 20 El alma que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo; la justicia del justo será sobre él, y la impiedad del impío será sobre él. Meditación El texto supone que los padres tomaron lo mejor y dieron lo que sobró a los hijos. Con la pregunta y el relato bíblico nos damos cuenta de que no siempre es así. La biblia afirma que las bendiciones que recibieron los padres visitarán las siguientes generaciones de sus hijos. Es importante darnos cuenta de que podemos bendecir a quienes padecen necesidades, tanto en lo físico, como en lo emocional y espiritual, pues según Ezequiel: «todos ustedes son míos», por lo tanto sostiene que todos somos de Dios, que somos iguales y que de las bendiciones que recibimos de Dios las compartamos con quien no tiene. Dios demanda que practiquemos la justicia, en especial con las personas más necesitadas, ya que si hacemos algo por ellas, su nivel de vida puede ser mejor. Según la Biblia, es más bienaventurado el dador que el que recibe. Por lo tanto te invito a salvar vidas siendo solidario con el que no tiene. ¿Te comprometes a compartir las bendiciones que has recibido de Dios con alguien más? Motivo de oración Señor, nos comprometemos a bendecir personas que sufren necesidades en lo físico y espiritual. Amén. Autor: Néstor Ramos, joven de doce años, integrante de una de las comunidades en las que trabaja Visión Mundial Honduras.

18.

país: Honduras texto bíblico:

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Profetas Ezequiel 37.1–6, 24–28 Hay esperanza para todos

tema: «La mano de Jehová vino sobre mí, me llevó en el espíritu de Jehová y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos […] Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? [...] Haré con ellos un pacto de paz; un pacto perpetuo será con ellos.Yo los estableceré y los multiplicaré, y pondré mi santuario entre ellos para siempre». Esta visión de los huesos secos ilustra la promesa del capítulo 36, una nueva vida y una nación restaurada, tanto física como espiritualmente. El exilio no es el final: Dios florecerá de nuevo la vida, como obra exclusiva de su Espíritu, quien es vida y que solo transmite vida. En la visión de los huesos revivificados está presente la idea de la resurrección del pueblo; pero no revivirá para continuar igual. La resurrección implica la reunificación del pueblo, regido ahora por una sola y única autoridad (37.24), y cumplirá las leyes de un dios justo (37.24), nuestro Dios, por lo que vivirán en un estado de paz plena (Shalom), los unos con los otros (37.26).

Texto Ezequiel 37.1–6 (RVR1960) 1 La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos. 2 Y me hizo pasar cerca de ellos por todo en derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre la faz del campo, y por cierto secos en gran manera. 3 Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes. 4 Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. 5 Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. 6 Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy Jehová. Ezequiel 37.24–28 24 Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; y andarán en mis preceptos, y mis estatutos guardarán, y los pondrán por obra. 25 Habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres; en ella habitarán ellos, sus hijos y los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo David será príncipe de ellos para siempre. 26 Y haré con ellos pacto de paz, pacto perpetuo será con ellos; y los estableceré y los multiplicaré, y pondré mi santuario entre ellos para siempre. 27 Estará en medio de ellos mi tabernáculo, y seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo. 28 Y sabrán las naciones que yo Jehová santifico a Israel, estando mi santuario en medio de ellos para siempre. Meditación Esta visión es un llamado de atención para quienes vivimos con esperanza. Hoy en día cantidades de personas mueren por diversas causas (infecciones, desnutrición, etc.). Así como profetizó Ezequiel sobre los huesos secos, nosotros no solo podemos profetizar sino que también actuar para restaurar vidas, en lo físico y en lo espiritual.Ya que Dios es vida en plenitud, en el poder del Espíritu Santo, que actúa en nosotros, podemos transmitir vida nueva. Si hemos de contribuir a restaurar la vida de las personas, que sea para que no vuelvan a sufrir igual que antes. La Biblia advierte que si no amamos a las personas que vemos, entonces no amamos a Dios. Tal advertencia también es una invitación a que amemos siendo solidarios con los que padecen hambre y sed de justicia. Por ello nos urge cumplir con la ley de Dios, que es justa, incluyente. Así seremos un modelo de convivencia pacífica y misericordiosa entre nosotros. Este es el mensaje de restauración y esperanza del profeta Ezequiel. Motivo de oración Dios, ayúdanos a generar esperanza en las personas que viven sin ella. Amen. Autora: Heilyn Figueroa, joven de diecisiete años, integrante de una de las comunidades en las que trabaja Visión Mundial Honduras.

19.

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Profetas Amós 5.7-17 Retos: dejar de hacer lo malo, amar lo bueno, vivir en la justicia — amando a Dios.

tema: «Ustedes, los que convierten el juicio en amargura y arrojan por el suelo la justicia, busquen al Creador […] Pero ustedes aborrecen a quienes los reprenden en las puertas de la ciudad; detestan a los que hablan con rectitud […] Busquen lo bueno, y no lo malo, y vivirán. Así el Señor, el Dios de los ejércitos, estará con ustedes, como dicen que está. Aborrezcan el mal; amen el bien. En los tribunales, impartan justicia» (RVC). El objeto de este «lamento» (se llaman así los textos que comienzan con el típico «¡Ay!». Se usaban para los funerales y/o los tiempos de crisis personal y comunitaria) es expresar que se ha torcido la justicia: la han convertido en amargura (el ajenjo, 5.7). Aun se ha llegado a odiar al justo y al que reclama rectitud (5.10ss), y muchos han conseguido enriquecerse por medio de la injusticia. Pero no todo se ha perdido: todavía queda tiempo para buscar el bien.

Texto Amós 5.7–17 (RVR1960) 7 Los que convertís en ajenjo el juicio, y la justicia la echáis por tierra, 8 buscad al que hace las Pléyades y el Orión, y vuelve las tinieblas en mañana, y hace oscurecer el día como noche; el que llama a las aguas del mar, y las derrama sobre la faz de la tierra; Jehová es su nombre; 9 que da esfuerzo al despojador sobre el fuerte, y hace que el despojador venga sobre la fortaleza. 10 Ellos aborrecieron al reprensor en la puerta de la ciudad, y al que hablaba lo recto abominaron. 11 Por tanto, puesto que vejáis al pobre y recibís de él carga de trigo, edificasteis casas de piedra labrada, mas no las habitaréis; plantasteis hermosas viñas, mas no beberéis el vino de ellas. 12 Porque yo sé de vuestras muchas rebeliones, y de vuestros grandes pecados; sé que afligís al justo, y recibís cohecho, y en los tribunales hacéis perder su causa a los pobres. 13 Por tanto, el prudente en tal tiempo calla, porque el tiempo es malo. 14 Buscad lo bueno, y no lo malo, para que viváis; porque así Jehová Dios de los ejércitos estará con vosotros, como decís. 15 Aborreced el mal, y amad el bien, y estableced la justicia en juicio; quizá Jehová Dios de los ejércitos tendrá piedad del remanente de José. 16 Por tanto, así ha dicho Jehová, Dios de los ejércitos: En todas las plazas habrá llanto, y en todas las calles dirán: ¡Ay! ¡Ay!, y al labrador llamarán a lloro, y a endecha a los que sepan endechar. 17 Y en todas las viñas habrá llanto; porque pasaré en medio de ti, dice Jehová. Meditación Aunque Amós reconoce el privilegio de Israel de ser el Pueblo escogido de Dios, presenta aquí una seria acusación contra los que entre ellos oprimen a los pobres, les niegan la justicia por codicia y egoísmo. Ellos alientan el mal obrar y desaniman la defensa de los justos, de modo que han terminado practicando una religión vacía y mezclando idolatría con la adoración al Señor. Así, la afirmación de que las injusticias sociales son pecado constituye el centro del mensaje del profeta. El capítulo 5 del libro critica, pues, de manera severa la religión que ellos practican. Por un lado expresa el lamento y por otro una exhortación. Se lamenta porque Israel fue una vez como una virgen (joven, pura, llena de vida y potencial), pero ahora ha muerto de manera trágica por su propia necedad.Y los exhorta a una reforma en tres niveles, que se destaca en todo el relato: la espiritual: «Buscadme» (4–6), la personal y social: «Busquen el bien […] establezcan la justicia» (14–15) y la religiosa: «corra el juicio como las aguas» (24). Lamentablemente, Israel no obedece y la llegada del juicio es inminente. Cuando la gracia transforma a una persona deja en la mira un aspecto fundamental de la vida: la creación de una sociedad en la que reine la justicia. Pero, sin dar prioridad a la búsqueda de Dios, esta justicia resultará superficial. Es decir, solo si nos esforzamos en mantener y profundizar el compañerismo con él, seremos capaces de luchar para que el bien prevalezca sobre el mal tanto en nuestra vida como en la de otros. Buscar a Dios y buscar el bien son dos dimensiones indivisibles de nuestra fe. Motivo de oración Padre bueno, danos la gracia para permanecer en ti; inclina nuestro corazón a buscarte cada día y a ser fieles reflejos de tu amor y gracia, por Jesús, amén. Autor: Mario Martínez Valencia, joven, trabaja en Compañerismo Estudiantil, y es obrero de la Comunidad Internacional de Estudiantes Evangélicos de México.

20.

país: México texto bíblico:

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Profetas Amós 6.1–7 Se busca personas que aflijan su corazón,, lo abran y extiendan sus manos

tema: «¡Ay de ustedes, los que viven tranquilos [...]! Ustedes duermen en camas de marfil, y reposan sobre sus divanes; se alimentan con los corderos del rebaño y con los novillos que sacan del engordadero; gorjean al son de la flauta y, como si fueran David, inventan instrumentos musicales; beben vino en grandes copas y se perfuman con las mejores fragancias, ¡pero nada les importa que José se halle en el desastre!» (RVC) El corazón que no se aflige ante el dolor del otro peca de falta de solidaridad. Tal indolencia no es posible pasarla por alto. Amós denuncia el estilo de vida lujoso de la clase alta del reino del Norte, con sus desmedidas expresiones de grandeza (sus palacios y sus borracheras, sus fiestas, sus refinadas comodidades…). Para el profeta la raíz es profunda: falta de solidaridad. La desgracia de muchos invita a la reflexión: los pocos (los ricos) deben corregir esa vida de lujo. Mientras los muchos (los pobres) se hallen en desgracia, Dios espera que los ricos aflijan su corazón ante tal infortunio, y se abran a la solidaridad.

Texto Amós 6.1–7 (RVR1960) 1 ¡Ay de los reposados en Sion, y de los confiados en el monte de Samaria, los notables y principales entre las naciones, a los cuales acude la casa de Israel! 2 Pasad a Calne, y mirad; y de allí id a la gran Hamat; descended luego a Gat de los filisteos; ved si son aquellos reinos mejores que estos reinos, si su extensión es mayor que la vuestra, 3 oh vosotros que dilatáis el día malo, y acercáis la silla de iniquidad. 4 Duermen en camas de marfil, y reposan sobre sus lechos; y comen los corderos del rebaño, y los novillos de en medio del engordadero; 5 gorjean al son de la flauta, e inventan instrumentos musicales, como David; 6 beben vino en tazones, y se ungen con los ungüentos más preciosos; y no se afligen por el quebrantamiento de José. 7 Por tanto, ahora irán a la cabeza de los que van a cautividad, y se acercará el duelo de los que se entregan a los placeres. Meditación Amós dirige su denuncia a personas que viven en opulencia, lujos, comodidades y grandes despilfarros, porque nada les importa la condición precaria de todo su pueblo. Para estas personas todo está bien, en tanto no resulte afectada su situación personal. Sin embargo, el profeta les anuncia un inminente y desastroso final. Les advierte cómo les irá si continúan en ese camino. Compartirán la misma suerte que sufrieron las otras naciones que pensaron igual. Para nosotros, un ejemplo de esperanza nos llega de un grupo de niños campesinos de Colombia. Ellos cuentan que, cuando la comunidad se reúne, celebran con la práctica de la «olla comunitaria»; cada familia aporta de acuerdo a sus posibilidades, y el resultado es una deliciosa comida que todos comparten. Nadie aporta más, ni menos, solo lo necesario. Nadie come solo de lo suyo, todos comen lo de todos. La utopía expresa: «que a nadie le sobre para que a nadie le falte». Pero, entre tanto, afirmamos que, para salvar a un pueblo, será imprescindible abrir el corazón para ver al necesitado y extenderle nuestras manos en solidaridad. Motivo de oración Señor, abre nuestro corazón para que pensemos en los otros y les extendamos nuestras manos para compartir con ellos nuestros bienes. Amén. Autor: David Hernández Tenorio, de la Iglesia pentecostal Nueva Jerusalén. Chimalhuacán, Estado de México; cursa la licenciatura en Teología en el Seminario Bautista de México.

21.

país: Nicaragua texto bíblico:

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Profetas Miqueas 6.6–8 Ya sabemos lo que debemos hacer… ¿Cierto?

tema: «¿Con qué me presentaré ante Jehová y adoraré al Dios altísimo [...]? Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, lo que pide Jehová de ti» Miqueas insiste en el pecado social. La denuncia del profeta expone que las cláusulas de la alianza no amparan la violación de la justicia en las relaciones interpersonales. Dios se duele por las traiciones de su pueblo (6.3).Y sus quejas buscan el arrepentimiento de los hombres. Pero ese arrepentimiento han de mostrarlo, más que en el culto, en un comportamiento moldeado por una ética correcta (6.8). ¿De qué le sirven al Señor los sacrificios y holocaustos, si la perversión del corazón sigue intacta? Todo lo que el Señor espera es la práctica de la justicia y la fidelidad a sus mandatos.Ya sabemos lo que debemos hacer. ¿Cómo vamos?

Texto Miqueas 6.6–8 (RVR1960) 6 ¿Con qué me presentaré ante Jehová, y adoraré al Dios Altísimo? ¿Me presentaré ante él con holocaustos, con becerros de un año? 7 ¿Se agradará Jehová de millares de carneros, o de diez mil arroyos de aceite? ¿Daré mi primogénito por mi rebelión, el fruto de mis entrañas por el pecado de mi alma? 8 Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios. Meditación El profeta confronta a su pueblo con preguntas que probablemente también nosotros nos las planteamos. Estos cuestionamientos se vinculan con la base de nuestra espiritualidad, es decir, nuestra relación con Dios.Vale señalar que esta relación no se entiende aislada de las relaciones interpersonales. Estas preguntas nos las formulamos todos: ¿Cuál es la mejor forma de presentarnos y acercarnos a Dios? ¿Cómo conseguimos agradar y complacerlo? ¿Será que lo único que lo alegra y lo complace es nuestra alabanza y adoración? ¿O será que nuestro culto debería ser la celebración de nuestros actos de servicio al prójimo que los presentamos como ofrendas? Ya sabemos lo que debemos hacer, ya sabemos lo que le agrada a él, pero, ¿por qué nos resulta tan difícil complacer a Dios y alegrar su corazón? ¿Por qué se nos dificulta practicar la justicia, actuar con misericordia y ser humildes? ¡Son siglos de injusticia! Tal injusticia la sostienen estructuras y sistemas políticos, sociales, económicos y religiosos que excluyen y deshumanizan al pueblo. Frente a este panorama, es sencillo caer en el pesimismo y fatalismo. Por ello la palabra profética resuena con especial pertinencia y urgencia:Ya sabemos lo que debemos hacer. ¿Cómo vamos? Motivo de oración Señor, enséñanos a hacer justicia, a ser misericordiosos y a humillarnos delante de ti. Que, al vernos actuar así, las personas que sufren injusticias por la falta de misericordia de otros se sientan alentadas a vivir con esperanza. Amén. Autora: Nurys Lillieth López Aráuz, joven, miembro de la Iglesia Presbiteriana de Nicaragua.

sección c El evangelio del Reino, libertad y seguimiento de Jesús: las marcas imborrables del discípulo de Jesús, el Hijo de Dios y Maestro

22.

país: Nicaragua texto bíblico:

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Evangelios Lucas 6.1–5 Compartir la comida cuando se tiene hambre

tema: «En cierto día de reposo, al pasar Jesús por los sembrados, sus discípulos iban arrancando espigas y desgranándolas con las manos, para comerse el grano» (RVC) Nada consigue contradecir la opción por la vida que Jesús demanda, ni siquiera porque lo opuesto se practique en nombre de Dios (como el sábado): Jesús es Señor sobre el sábado. Por eso actúa con plena libertad tanto en la sinagoga como en el sábado. Pero, ¡cuidado!: su libertad choca con la no libertad de las personas de su tiempo. El Reino confronta la parálisis del rigorismo religioso.

Texto Lucas 6:1-5 (RVR1960) 1 Aconteció en un día de reposo, que pasando Jesús por los sembrados, sus discípulos arrancaban espigas y comían, restregándolas con las manos. 2 Y algunos de los fariseos les dijeron: ¿Por qué hacéis lo que no es lícito hacer en los días de reposo? 3 Respondiendo Jesús, les dijo: ¿Ni aun esto habéis leído, lo que hizo David cuando tuvo hambre él, y los que con él estaban; 4 cómo entró en la casa de Dios, y tomó los panes de la proposición, de los cuales no es lícito comer sino sólo a los sacerdotes, y comió, y dio también a los que estaban con él? 5 Y les decía: El Hijo del Hombre es Señor aun del día de reposo. Meditación En el Evangelio Según Lucas, Jesús casi siempre se encuentra de camino. En esta ocasión camina con sus discípulos por los sembrados de trigo. Nuevamente se critica a Jesús y a sus discípulos por llevar a cabo algún tipo de actividad en el día de reposo (sábado): arrancar, desgranar y comer son las acciones de ellos que molestan a los legalistas fariseos. Lucas expone a Jesús defendiendo la vida por encima de cualquier observancia legalista de la Ley de Dios. ¡La vida es primero! Y con ella cubrir una de las necesidades elementales para la existencia: saciar el hambre. El cumplimiento de las leyes solo encuentra sentido cuando se enfoca en defender y promover la vida; una vida digna, plena y abundante para todas las personas. Es por eso que Jesús anuncia la llegada del Reino de Dios como una buena noticia, en primera instancia, para los pobres y oprimidos: «Felices ustedes los pobres, porque de ustedes es el Reino de Dios» (6.21). El evangelio es buena nueva para los marginados, afligidos, perseguidos, enfermos, pecadores y hambrientos. La Palabra de Jesús es alimento espiritual, y todos los que vivimos con hambre de Dios debemos compartir su Palabra, que nos insta a extender nuestro pan al hambriento. Motivo de oración Señor, aprémianos a compartir nuestro pan con los que no tienen nada que comer. Amén. Autor: Oscar Zamora,, joven, miembro de la iglesia Misión Cristiana, Nicaragua.

23.

país: Perú texto bíblico:

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Evangelios Lucas 6.6–10 Libertad de las ataduras religiosas

tema: «Otro día de reposo, Jesús entró en la sinagoga y comenzó a enseñar. Había allí un hombre que tenía la mano derecha atrofiada» (RVC). Jesús se enfrenta con la falta de movilidad integral… en lo físico, psíquico y espiritual. Los religiosos establecían treinta y nueve formas de hacer «lo correcto» en el día sábado, añadidas a los seiscientos trece mandamientos que resumen la ley de Moisés. ¡Nadie podía moverse con libertad! ¡A ese sistema se enfrenta Jesús! Él es Señor de la vida, y no espera nada para restaurar la vida de una persona. Todo debe devolverse a su orden, pues el Reino opera ya entre nosotros.

Texto Lucas 6.6–10 (RVR1960) 6 Aconteció también en otro día de reposo, que él entró en la sinagoga y enseñaba; y estaba allí un hombre que tenía seca la mano derecha. 7 Y le acechaban los escribas y los fariseos, para ver si en el día de reposo lo sanaría, a fin de hallar de qué acusarle. 8 Mas él conocía los pensamientos de ellos; y dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate, y ponte en medio.Y él, levantándose, se puso en pie. 9 Entonces Jesús les dijo: Os preguntaré una cosa: ¿Es lícito en día de reposo hacer bien, o hacer mal? ¿salvar la vida, o quitarla? 10 Y mirándolos a todos alrededor, dijo al hombre: Extiende tu mano.Y él lo hizo así, y su mano fue restaurada. Meditación En esta ocasión, Jesús predica en el día de reposo y dentro de la sinagoga. Aunque se trata de un sitio para adorar en comunidad a Dios y compartir su Palabra, algunos se comportan con gran hostilidad contra Jesús y una marcada desconfianza frente a sus acciones y palabras. ¿Recibimos ese tipo de hostilidad por nuestro esfuerzo en construir el Reino de Dios en la sociedad?, ¿cómo lidiar contra esa hostilidad? Jesús nos da aquí un ejemplo de cómo responder a ella. Él percibe la oposición, conoce los pensamientos de sus adversarios. Escribas y fariseos «lo acechan», se mantienen atentos contra todo aquello que mueva las bases de la interpretación tradicional y autorizada de la Ley. Ellos demandan: debe respetarse la letra, ¡en día de reposo no debe hacerse nada! Jesús opina lo contrario: debe respetarse la vida, ¡en día de reposo debe hacerse lo bueno! Ambos siguen interpretaciones distintas del sentir de Dios y de su Palabra. A diario, sea dentro de la comunidad de la iglesia o en la sociedad, aun dentro de nosotros mismos, escuchamos cantidad de voces distintas sobre lo que su Palabra nos indica de cómo debemos actuar, sobre lo que Dios quiere que hagamos. Jesús nos da una pauta para superar dilemas de este tipo: la interpretación correcta es la que considera a las personas, la que procura su bien, la que logra restaurar y generar vida. Ahora Jesús nos muestra su respuesta. Él llama a un hombre con una mano paralizada. Resulta curioso que, a diferencia de otras oportunidades, nadie ruega a Jesús en favor de este hombre, para que él lo sane. Ni siquiera el hombre pide por su propia sanidad, más bien, Jesús toma la iniciativa.Y la toma no solo porque considera su deber sanar a una persona, sino también porque anhela sanar a la comunidad. Por eso pide al hombre que se pare en medio de la estancia, por eso él mismo se pone de pie, para dirigirse a todos, para mirarlos a todos. Él sabe que lo malo, la «enfermedad», no es solo individual, sino colectiva; no es solo personal, sino estructural, y que sus acciones misericordiosas y justas deben tomar en cuenta esas dos dimensiones de la vida. Jesús pregunta y todos callan. La vida es más importante que la letra. El silencio de los adversarios demuestra que las verdades en juego son incuestionables por sí mismas. La mano, antes paralizada, se mueve ahora. Esa mano que en el lenguaje bíblico simboliza el poder creador y salvador de Dios, se encuentra ahora lista y libre para tocar, para sanar, para construir, para sentir, para crear… Motivo de oración Señor, enséñanos a seguir tu ejemplo en medio de la oposición; que, al servir a los más pequeñitos, con valentía y sabiduría, y al amparo de esa Palabra que otorga vida y libertad, nos llenes de tu poder para restaurar personas y comunidades. Amén. Autor: Alejandro Rivas, joven, miembro del Movimiento de Voluntarios Fe en Acción, que se formó a partir de la campaña anterior «Alto al Hambre» y el concierto Visión Fest.

24.

país: Perú texto bíblico:

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Evangelios Lucas 6.17_23 La dicha de actuar en sintonía con el Padre y Jesús

tema: «Bienaventurados ustedes los pobres, porque el reino de Dios les pertenece» (RVC). Para Jesús la pobreza delata aquí una situación contraria al querer de Dios, un estado de vida que es fruto de la injusticia. Cuando Jesús declara a estos pobres bienaventurados, no significa que ellos deban sentirse felices por su condición, sino porque esa pobreza que Dios rechaza debe desaparecer con el advenimiento del Reino de Dios, cuya concreción específica es la justicia. Estas palabras de Jesús, aparte de consolar a los pobres, son también un proyecto por realizar. La tarea del seguidor de Jesús consiste en lograr que ese reinado de Dios se convierta en una realidad capaz de producir gozo por la presencia de su justicia en todas sus categorías. La pobreza, o mejor dicho el empobrecimiento, trae varias consecuencias: hambre, lágrimas (símbolo del dolor). Jesús también llama dichosos a los que sufren persecución, pues es el precio de buscar y luchar por la justicia y la equidad. Los discípulos de Jesús actúan en sintonía con la preocupación del Padre y de su Hijo por la justicia.

Texto Lucas 6.17–23 (RVR1960) 17 Y descendió con ellos, y se detuvo en un lugar llano, en compañía de sus discípulos y de una gran multitud de gente de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón, que había venido para oírle, y para ser sanados de sus enfermedades; 18 y los que habían sido atormentados de espíritus inmundos eran sanados. 19 Y toda la gente procuraba tocarle, porque poder salía de él y sanaba a todos. 20 Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios. 21 Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis. 22 Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre. 23 Gozaos en aquel día, y alegraos, porque he aquí vuestro galardón es grande en los cielos; porque así hacían sus padres con los profetas. Meditación Pobreza, hambre, sufrimiento, persecución. ¡Qué palabras tan terribles! Y, sin embargo, estos términos los utiliza Jesús para caracterizar a sus seguidores y animarlos con una promesa de felicidad para ellos. Felicidad que resulta del sufrimiento. ¡Qué contradicción! Imaginemos un culto en una iglesia en el que, en pleno sermón, el predicador empieza a advertir a la audiencia que si pretenden congregarse allí deben estar dispuestos a ser pobres, a padecer hambre, a sufrir y a ser vituperados. ¿Cómo lo tomaría la congregación?, ¿qué tipo de gente estaría dispuesta a congregarse en esa iglesia? De seguro muchos se escandalizarían y dejarían de asistir. ¿Te unirías a una iglesia con ese perfil? Pero bien alcanzamos a intuir que el Maestro reservaba aún una enseñanza más profunda sobre el vínculo entre la felicidad y el sufrimiento. Allí se encuentra él, como siempre, en medio de una multitud que le demanda acciones, que le suplica ayuda, tal como acostumbramos la mayoría en nuestras congregaciones.Y, sin embargo, él alza sus ojos para fijarlos exclusivamente en sus seguidores, en aquellos que él estima como discípulos, para lanzarles una incomprensible promesa de felicidad para ellos. No se trata, entonces, de cualquier sufrimiento, sino del sufrimiento por ser discípulo. Tampoco se trata de cualquier felicidad, sino de la felicidad por ser seguidor, de quien ha entendido que debe conformar su vida a la de su maestro. ¿Por qué se dirige solo a estos?, ¿acaso porque solo a ellos consideraba capaces de comprender su lógica?, ¿o porque las multitudes que esperaban de él palabras reconfortantes, exorcismos y sanaciones no resistirían aquella palabra? Entonces debemos recordar la práctica y las enseñanzas de Jesús sobre lo que significa la vivencia del Reino. Los cristianos, no somos bienaventurados por padecer hambre, por llorar, por sufrir o por ser perseguidos. Somos bienaventurados porque, en nuestra lucha contra la pobreza, nos proponemos dejar de enriquecernos; porque, en nuestro afán por saciar al hambriento, olvidamos que teníamos hambre; porque, con el fin de hacer reír, hemos aprendido a llorar; porque, por nuestra denuncia profética de las injusticias de la sociedad y de nuestras instituciones religiosas, nos han perseguido. Es conveniente captar la diferencia de causas. ¿Y de dónde nace la felicidad del discípulo? ¿Somos felices porque en algún glorioso momento recibiremos de Dios consolación y la justa recompensa por nuestras obras? ¿O quizá porque también experimentamos la felicidad al sacrificarnos para ayudar y generar esperanza en los demás? Nuestra repuesta a estas preguntas quizá sea el mejor parámetro para medir si sintonizamos en verdad con el Padre y con Jesús. Motivo de oración ¡Oh Señor!, moldéame para convertirme en un discípulo digno de ti, en un verdadero obrero en la construcción de tu Reino, un discípulo capaz de experimentar la felicidad de servirte pese a las adversidades. Amén. Autor: Alejandro Rivas, miembro del Movimiento de Voluntarios «Fe en Acción», que se formó a partir de la campaña anterior «Alto al Hambre» y el concierto «Visión Fest».

25.

país: República Dominicana texto bíblico: Evangelios Lucas 6.24–26 El Reino actúa, y quienes se le oponen lo lamentarán

tema: «¡Ay de ustedes!» (RVC) Podríamos entender estos ayes como una lamentación de Jesús al estilo profético. Son una advertencia a los promotores y sostenedores de un orden social injusto. De ese orden resultan condiciones muy conocidas: empobrecimiento masivo, hambre, dolor y lágrimas. Jesús denuncia así a quienes se definen por lo que tienen, y se hartan consumiendo e ignorando a los indigentes. Son esas personas que gozan y la pasan bien a costa de los demás. ¿Qué sentido tiene una vida así?

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Texto Lucas 6.24–26 (RVR1960) 24 Mas ¡ay de vosotros, ricos! porque ya tenéis vuestro consuelo. 25 ¡Ay de vosotros, los que ahora estáis saciados! porque tendréis hambre. ¡Ay de vosotros, los que ahora reís! porque lamentaréis y lloraréis. 26 ¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas. Meditación «La vida es una moneda, quien la rebusca la tiene. ¡Ojo!, que hablo de monedas, y no de gruesos billetes». Así comienza «La vida es una moneda», canción de Fito Páez (me encanta la versión de Juan Carlos Baglietto: http://www.youtube.com/watch?v=EEPTqSUHWQI). La canción termina así: «Solo se trata de vivir, esa es la historia. Con un amor, sin un amor, con la inocencia y la ternura que florece a veces. A lo mejor resulta bien». Suspenso, sin mayores seguridades. Jesús expone que al final de los tiempos se experimentará una inversión total de las condiciones actual. Quienes hoy viven bien (comodidades, comida, alegría y halagos), en el futuro recibirán pesares. ¿Por qué? Por dejar que el egoísmo determine su estilo de vida. Jesús ilustra esos «ayes» con la historia del rico y Lázaro, el mendigo leproso (Lc 16.19–31): rico anónimo, mendigo nombrado; rico saciado, mendigo hambriento; rico en tormento, mendigo en shalom. ¡Inversiones tremendas! Los ricos de su tiempo (¿y de todos los tiempos?) cerraron sus ojos a las calamidades de los otros, y de esa manera los invisibilizaron. Tal indolencia es egoísmo, camino seguro a la condenación. Propongo que leamos las palabras de Jesús como una pintura del futuro con «final abierto»; no se sabe aún si se dibujará la condena. Lo que determina la imagen final de la obra es la decisión de convertirnos de un estilo de vida centrado en nosotros mismos a una vida centrada en Dios y en los demás. Jesús nos desafía a procurar el bienestar de la otra persona, como si fuera para nosotros mismos. Traigamos a este hoy el shalom del mañana. «A lo mejor resulta bien». Motivo de Oración Padre bueno, tú que acoges a los sufrientes en tu seno así como Abraham acogió a Lázaro, sacúdenos con tu Espíritu y tu Palabra de tal modo que dejemos de vivir para nosotros mismos y vivamos solo para ti y las demás personas. Úsanos para motivar a quienes hoy buscan su propio bienestar a convertirse a tu Reino. Sabemos que también para ellos has reservado un lugar. Danos hoy tu paz. En Jesús oramos. Amén. Autor: Daniel Oliva, coordinador del Centro de Aprendizaje de Movilización Juvenil (CdAMJ) de Visión Mundial Ecuador.

26.

país: Panamá texto bíblico: Evangelios Lucas 6.43–45 Santa insatisfacción

tema: «Ningún árbol bueno produce frutos malos, ni tampoco un árbol malo produce frutos buenos […] de la abundancia del corazón habla la boca» (RVC). El discípulo de Jesús ha sido llamado a vivir una vida radicalmente comprometida con la propuesta de su Maestro. Jesús deja claro a quienes pretenden seguirlo que la mediocridad y la falta de autocrítica constituyen el principal obstáculo para la construcción del Reino. ¿Cuán satisfechos nos sentimos con nosotros mismos? Que Dios nos permita vivir con una santa insatisfacción.

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Texto Lucas 6.43–45 (RVR1960) 43 No es buen árbol el que da malos frutos, ni árbol malo el que da buen fruto. 44 Porque cada árbol se conoce por su fruto; pues no se cosechan higos de los espinos, ni de las zarzas se vendimian uvas. 45 El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca. Meditación Poco antes de concluir su célebre sermón, Jesús confronta a sus oyentes con un tópico que los apremia a diagnosticar interna y externamente su vida: una mirada a su propio corazón y acciones. Los frutos de los que habla Jesús son aquellas acciones contraculturales que ha planteado en el sermón (amar a los enemigos, haced bien a los que os aborrecen, llorar por la injusticia, renunciar al halago por de acciones corruptas, dar sin condiciones ocultas o externas, etc.). Por lo tanto, los frutos buenos solo provienen de un árbol bueno. El fruto demuestra la naturaleza del árbol del cual nace, así como las acciones del Creador en la creación culminaron con la expresión que revelaba la naturaleza de lo creado («bueno en gran manera»). Los confronta al señalarles su incapacidad de producir estos frutos por sí mismos con la negación «no». No deja espacio a la mediocridad al contraponer lo bueno a lo malo, e invita a entender que el problema radica en la naturaleza del corazón. Solo es capaz de amar como Dios aquel cuyo corazón está lleno del amor de Dios. ¿Exhiben nuestras acciones un sistema de mediocridad? ¿Son nuestras acciones contraculturales? ¿Nuestras acciones revelan a Dios? Motivo de oración Dios, hoy nos humillamos ante ti, y confesamos nuestra necesidad de ti y de tu amor para amar, y de no conformarnos con lo que la corriente de este mundo propone. Transforma nuestro corazón para que produzcamos los frutos buenos, lo que promueven la extensión de tu Reino. Llena nuestro corazón con tu amor para que no encuentre espacio la mediocridad ni la apatía, y así logremos revelar con nuestras acciones tu bondad incondicional y tu misericordia. En el nombre de Jesús, amén. Autor: Todaalael Ceballos, obrero de la Comunidad de Estudiantes Cristianos, cursa una licenciatura en Química, miembro de la Iglesia de Dios de Panamá.

27.

país: Panamá texto bíblico: Evangelios Lucas 6.46–49 Un buen cimiento hace que una casa sea buena

tema: «¿Por qué me llaman ustedes “Señor, Señor”, y no hacen lo que les mando hacer?» (RVC). Hoy como ayer se proclama, muchas veces con gran facilidad, que Jesús es «Señor». Pero también muchas veces se le llama así sin adquirir ningún compromiso con sus exigencias. Pero, cuando llegan los conflictos sin haber cumplido las exigencias, la proclama enmudece… Se edificó la casa sobre la arena. Fe, entrega y compromiso son tres marcas de quien sigue a Jesús en el camino de la vida.

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Texto Lucas 6.46–49 (RVR1960) 46 ¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo? 47 Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicaré a quién es semejante. 48 Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca. 49 Mas el que oyó y no hizo, semejante es al hombre que edificó su casa sobre tierra, sin fundamento; contra la cual el río dio con ímpetu, y luego cayó, y fue grande la ruina de aquella casa. Meditación Según el sociólogo y filósofo polaco Zygmunt Bauman, vivimos la era de la modernidad líquida, en la que todo cambia y se transforma de manera constante y no se logra construir proyecto de vida duradero sobre ella. Esta parábola es el final del sermón, Jesús conoce bien a su auditorio, quienes no son tan distintos a sus padres, pues han escuchado a los profetas y no han obedecido. El antídoto es esta parábola. La propuesta de Jesús es realista; sabe que vendrán crisis, pero la forma en que las enfrentemos distinguirán a los que son de los que no son verdaderos discípulos; estos distintivos son: • La construcción de su proyecto de vida se fundamenta en la roca. Para establecerlo está obligado a cavar; una tarea que le implica esfuerzo, constancia y permanencia; lo contrario a lo líquido. • Escucha «sus Palabras» y promueve la esperanza, la justicia, el amor, la misericordia, entre otros. • Las crisis azotan su vida pero no le derrumban. Este sermón termina así: la «ruina» espera al que no lo sigue, pero a su discípulo le llama bienaventurado. La propuesta para una sociedad sufriente y líquida es «quiero llevarte de la ruina a la bienaventuranza». ¿En qué fundamentas tu vida, relaciones, ministerio, proyectos… en lo sólido o en lo líquido? Motivo de oración Señor, que en tu pueblo los proyectos y procesos sean construidos en la Roca. Conviértenos en promotores de esperanza al ser instrumentos de tu justicia, amor y misericordia entre los millones de personas que viven en este mundo quebrado. Fortalece a tus discípulos cuando se hallen en medio de crisis para que se afirmen más en tu justicia. Ten piedad de nosotros, Jesús. Autora: Jocabed Solano, obrera de la Comunidad de Estudiantes Cristianos, miembro de la iglesia Bautista Kuna Cristo Daniki; estudiante de Psicología.

28.

país: Argentina texto bíblico:

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Evangelios Lucas 7.11–17 El cortejo de la vida, la procesión de la muerte

tema: «Cuando se acercó a la puerta de la ciudad, vio que llevaban a enterrar al hijo único de una viuda» (RVC). Jesús no espera que la madre doliente le pida ayuda. Él actúa de manera natural y con rapidez; consuela y restituye la vida del muchacho.Y, con el muchacho, restituye el sentido de vida a la mujer. Jesús y su palabra restituyen la vida. Él espera que sus seguidores actuemos de la misma manera.

Texto Lucas 7.11–17 (RVR1960) 11 Aconteció después, que él iba a la ciudad que se llama Naín, e iban con él muchos de sus discípulos, y una gran multitud. 12 Cuando llegó cerca de la puerta de la ciudad, he aquí que llevaban a enterrar a un difunto, hijo único de su madre, la cual era viuda; y había con ella mucha gente de la ciudad. 13 Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella, y le dijo: No llores. 14 Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron.Y dijo: Joven, a ti te digo, levántate. 15 Entonces se incorporó el que había muerto, y comenzó a hablar.Y lo dio a su madre. 16 Y todos tuvieron miedo, y glorificaban a Dios, diciendo: Un gran profeta se ha levantado entre nosotros; y: Dios ha visitado a su pueblo. 17 Y se extendió la fama de él por toda Judea, y por toda la región de alrededor. Meditación Por un momento, trate de imaginar el cuadro que nos pinta Lucas con su relato. Jesús se abre paso entre la muchedumbre, envuelta en una atmósfera de llanto y dolor. Con su intervención milagrosa, el escenario cambia. El muchacho recobra su vida, y la viuda a su único hijo. En este episodio, vemos a Jesús detenerse en su camino al ver a una mujer en necesidad; él se compadece del que sufre, e interviene sin esperar que le pidan ayuda. No es la única vez que Jesús, al advertir a alguien en dolor, hace un alto en el camino. También lo detuvieron la mujer que padecía de flujo de sangre y Bartimeo, con su clamor. El ejemplo del Maestro debe movernos a vivir de la misma manera. El llamado de sus seguidores es a desarrollar una sensibilidad tal como la de él. Que interrumpamos nuestro peregrinaje ante nuestro prójimo que sufre; y que la compasión nos movilice a la acción que le provee esperanza. Reflexionemos: ¿Detengo mi paso ante mi prójimo que sufre? ¿Puedo identificar quiénes, entre los que me rodean, precisan una ministración personal? ¿Acompaño a otros en su dolor? Somos ministros de consolación todos los ciudadanos del Reino. Motivo de oración Señor, agradecemos tu socorro oportuno. Gracias porque tus ojos no se cierran cuando nuestras necesidades nos agobian. Amado Dios, danos tus ojos para ver a los que sufren alrededor de nosotros. Sensibiliza nuestro corazón cuando los abrumen sus necesidades. Danos un corazón compasivo. Oramos en el nombre de Jesús. Amén. Autora: Natalia Campos, joven teóloga pentecostal, reside en Buenos Aires.

29.

país: Argentina texto bíblico:

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Evangelios Lucas 7.18–23 El Reino pasa por los barrios bajos

tema: «¡Bienaventurado el que no tropieza por causa de mí!» Las señales que Jesús realiza delante de los mensajeros de Juan el Bautista son prueba de la llegada del Reino, el cual ya había anunciado Jesús en la sinagoga de Nazaret (4.16–30). Ese Reino se opone a los maestros de la Ley. Es un reino disponible para quienes no se cierran a la acción de Dios, que muchas veces pasa por los lugares menos recomendables en la historia: a los pobres se les anuncia la buena noticia de salvación. A quienes alcanzan comprender este accionar, Jesús los considera dichosos.

Texto Lucas 7:18-23 (RVR1960) 18 Los discípulos de Juan le dieron las nuevas de todas estas cosas.Y llamó Juan a dos de sus discípulos, 19 y los envió a Jesús, para preguntarle: ¿Eres tú el que había de venir, o esperaremos a otro? 20 Cuando, pues, los hombres vinieron a él, dijeron: Juan el Bautista nos ha enviado a ti, para preguntarte: ¿Eres tú el que había de venir, o esperaremos a otro? 21 En esa misma hora sanó a muchos de enfermedades y plagas, y de espíritus malos, y a muchos ciegos les dio la vista. 22 Y respondiendo Jesús, les dijo: Id, haced saber a Juan lo que habéis visto y oído: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es anunciado el evangelio; 23 y bienaventurado es aquel que no halle tropiezo en mí. Meditación ¿Jesús, un obstáculo? ¿Cuál es la postura frente a la vida de alguien que ve en Cristo un obstáculo? Se me ocurre que la respuesta se encuentra en el versículo 22. ¿Qué ocurre con aquellos que ven el mensaje del evangelio como un atentado contra sus propios intereses? Aquellos que prefieren que el pueblo permanezca ciego a sus intereses mezquinos ocultos, que ninguna luz los alumbre, que no se les permita decidir con inteligencia para no caer en la trampa de los que utilizan al otro tan solo para su propia satisfacción. Aquellos que esperan que la gente permanezca coja, para así llevarla a donde ellos quieren. Esos seres que construyen su autoestima a costa de que aparezca otro que se gane la etiqueta de inmundo… los que, guiados por intereses económicos, construyen las estrategias para que la enfermedad fluya a fin de que la industria farmacéutica asegure su rentabilidad. Aquellos que hablan bajo y disfrazan sus dichos para que sus planes egoístas cargados de mentiras prosperen. Los que de alguna manera, aprenden a despreciar la vida porque se convierten en socios de la muerte. El sistema que impera ve en la pobreza una variable favorable para su funcionamiento. Quienes viven procurando la prosperidad de este sistema tropiezan en Jesús. Motivo de oración Jesús: Inspira y moviliza a tu Iglesia para que denuncie la corrupción y la mezquindad. Danos la gracia para despreciar la opresión y abrazar tu plan de amor y rescate de la humanidad. Autor: Germán Ortiz, pastor de jóvenes de la iglesia Buenas Nuevas, Buenos Aires, Argentina.

30.

país: Argentina texto bíblico:

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Evangelios Lucas 7.18–23 El Reino pasa por los barrios bajos

Texto Lucas 7:18-23 (RVR1960) 18 Los discípulos de Juan le dieron las nuevas de todas estas cosas.Y llamó Juan a dos de sus discípulos, 19 y los envió a Jesús, para preguntarle: ¿Eres tú el que había de venir, o esperaremos a otro? 20 Cuando, pues, los hombres vinieron a él, dijeron: Juan el Bautista nos ha enviado a ti, para preguntarte: ¿Eres tú el que había de venir, o esperaremos a otro? 21 En esa misma hora sanó a muchos de enfermedades y plagas, y de espíritus malos, y a muchos ciegos les dio la vista. 22 Y respondiendo Jesús, les dijo: Id, haced saber a Juan lo que habéis visto y oído: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es anunciado el evangelio; 23 y bienaventurado es aquel que no halle tropiezo en mí. Meditación Los milagros que Jesús lleva a cabo frente a los dos discípulos de Juan son señal de la instauración del Reino de los Cielos en la tierra misma. Un reino que el mismo Jesús ya había anunciado en la sinagoga de Nazaret (Lucas 4.16–30). Las Escrituras eran para los pocos que las interpretaban, a quienes se les permitía enseñarlas. Jesús vino a romper con toda «discriminación», con toda desigualdad. Gracias a su sacrificio recibimos el libre acceso a la presencia de nuestro Padre, no necesitamos intermediarios que interpreten su voz. Él anhela cultivar una relación de intimidad y amor eterno con nosotros, sus hijos, su especial tesoro, la niña de sus ojos. El Reino de los Cielos es para todos aquellos dispuestos a dejar atrás lo que no se ajuste a sus mandamientos porque hemos dicho Sí al supremo llamamiento. Jesús nos enseña la importancia de extender las buenas noticias «hasta lo último de la tierra»; el cumplimiento de esa tarea comienza precisamente ahí donde te encuentras. No necesitamos ser grandes oradores, profetas, levitas o apóstoles. Dios utiliza a la persona cuyo corazón ha entregado y derramado delante de él. ¿Quieres semejante responsabilidad de conocer la salvación y no compartirla? Motivo de oración Dios, enséñanos a ver con tus ojos, a hablar con tu boca, a sentir con tu corazón. Deseamos extender tu reino hasta lo último de la tierra. Ayúdanos a entender dónde debemos comenzar y muéstranos cada lugar al que debemos llegar con las buenas nuevas de tu salvación. En el nombre de Jesús, amén. Autora: Paola Daniela Boada, joven de veinticuatro años, es miembro de la iglesia Manantial de Vida,Villa Tesei, Hurlingham, Buenos Aires, Argentina; encargada de la Escuela de Música del ministerio de Alabanza y Adoración; estudió Técnica Ministerial Musical en el Instituto CanZión, y cursa la licenciatura en Relaciones Públicas.

juLio 2013