PREGóN DE LA VIRGEN DE LA CAPILLA 2.006 AñO JUBILAR A mis padres
No me guía la razón Sino el más puro sentimiento Para decide lo que yo siento Cuando te habla mi corazón. Dame Madre la ocasión, Para que mi alma entera se abra, Sin verso, prosa ni palabra, Con los rezos de mi pregón. Que no hay voz tan vigorosa que sepa clamar la hermosura Que nace de tu ternura Y de tu faz poderosa. Que no hay mayor desconsuelo Que no sentir tus miradas En alma y mente clavadas Con alfileres del cielo.
El Descenso
Solo el brillo de tus ojos Fue capaz de desterrar En aire, tierra y mar El pecado y sus despojos Para nombrarte, Más de mil nombres habría Pero a todos bastaría Poder llamarte con dos, Uno María, El otro.... Madre de Dios.
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Escuchaste presta el alarido De unas gargantas quebradas Por la angustia y sangre derramada De todo un pueblo dolorido.
Bastaron los oropeles De los pliegues de tu manto Para calmar el quebranto De tantas guerras crueles. Tu sola presencia destellante En aquel Descenso Sagrado A este pueblo desolado Trajo la paz al instante. En ese antiguo arrabal Muchas almas temblaron Cuando a lo lejos divisaron Tu luz de pureza virginal. Y en aquella noche dorada De tibios fulgores relucientes Y se entrego Jaén de madrugada A su Madre para siempre. Y tus hijos agradecidos Te llamaron Reina y Senora Y bendijeron por siempre la hora En que esa eterna Maravilla Del más Alto Cielo bajara para que todo el pueblo llamara La Virgen de la Capilla.
Como perlas de un rosario Mil amores te levantan En Tu Gloria, Virgen Santa El más bello Santuario. Rico tesoro de amor, Manantial eterno de infinito bien, Desde el principio hasta el fin, En la calle o en tu Camarín, Juro quererte, por siempre, tu Jaén.