NÚMERO 12, 2022
www.vintae.com SI DEJÁRAMOS DE SOÑAR, NO SERÍAMOS VINTAE
ENTREVISTA RAUL ACHA
“Nunca en mi vida había visto la uva tan sana como este año” El 2022 ha sido un año en el que la sequía y las altas temperaturas han tenido a los viticultores en alerta. Finalmente, las cepas plantadas en buenos suelos aptos para su cultivo han sacado adelante una cosecha más corta de lo habitual, con una sanidad que roza la perfección, algo menos de acidez y la perspectiva de unos vinos equilibrados y cualitativos. Conocemos los detalles con Raul Acha, director técnico de Vintae. 1. ¿Cómo ha sido el ciclo vegetativo de la vid este año? El ciclo vegetativo ha sido difícil o atípico, en el sentido de que ha sido muy rápido, hemos tenido una primavera que casi no existió, pasamos de un abril invernal a un mayo veraniego. En mayo todo fue como un cohete para arriba, y el verano no ha parado. Mayo, junio, julio, agosto, septiembre… al final hemos tenido casi cinco meses de verano. Y desde luego ha faltado agua, ha llovido poco, pero no en todos los sitios por igual. Ha habido zonas en las que llovió más en noviembre y diciembre, y eso se ha notado, sobre todo en viñas plantadas en suelos frescos frente a las que están plantadas en suelos menos adecuados para el viñedo. En todas las zonas ha habido una integral térmica muy amplia, mucha más temperatura acumulada de lo normal, esto es una tónica común a todas nuestras zonas. Y otro dato común es que toda la precipitación acumulada desde final de abril hasta aquí ha sido muy escasa y esto ha redundado en que en todas nuestras zonas ha habido estrés hídrico y mucha sanidad vegetal, las enfermedades de hongos han brillado por su ausencia. 2. ¿Cómo nos ha afectado la sequía y el calor? En el año más catastrófico de la historia según todos los medios, con tanta sequía y calor… nuestras viñas han aguantado. Quizá es que tenemos suerte porque todos nuestros viñedos están en zonas altas. En Rioja, en el Alto Najerilla y la Sonsierra, en Ribera pasa lo mismo, la zona de Soria y la de Moradillo de Roa son altas y frescas. Y en Toro y Navarra también se escapan un poco a estos excesos, lo mismo pasa
con las Garnachas. Por tanto, hemos tenido suerte de haber escapado a ese azote del calor y la falta de agua que si que ha sido un hecho. 3. ¿Cómo se ha desarrollado la vendimia? La vendimia ha sido atípica, ha sido de las más tempranas de la historia, en algunos sitios la más temprana. Por ejemplo, en Cárdenas se terminó de vendimiar el 20 de septiembre, una barbaridad, más de 20 días de adelanto con respecto a años normales. Sin embargo, en zonas más cálidas, la viña llego un momento que estaba al sol y se tuvo que echar la siesta porque era imposible estar trabajando con ese calor. Ese descanso, de muchos días, provocó que la uva no madurase a la misma velocidad.
Y en cuanto a calidad, va a haber mucha irregularidad. Por un lado, va a haber viñedos de mucha calidad, en estas zonas frescas la uva ha madurado bien. En otras zonas más cálidas y tierras menos aptas para viña, por ser más duras, más arcillosas, yo creo que la uva no ha madurado tan bien, paró el ciclo vegetativo porque no podía seguir trabajando con temperaturas tan altas y tanta falta de agua, y quizá la maduración fenólica o de azúcar en esas viñas a lo mejor no fue tan buena.
Es decir, el gran adelanto se ha visto en las zonas tardías, en las zonas frescas, mientras que en las zonas más cálidas se ha visto reducido y se ha aproximado más a fechas habituales.
Sí que tenemos una tónica común, de nuevo desde Galicia hasta Cataluña, por todas las zonas en las que estamos, en las que la sanidad de la uva es perfecta. Yo nunca en mi vida había visto la uva tan sana. Podemos ir hoy, a final de octubre a una viña y ver las uvas totalmente sanas, ni siquiera un granito de botritis. Este tiempo tan seco desde mayo hasta septiembre ha hecho que la uva haya permanecido totalmente al margen del ataque de hongos y tenga una sanidad vegetal espectacular.
4. ¿Cómo valoras la campaña en cuanto a cantidad y calidad? En cantidad ha sido una añada escasa en general, es una tónica que va desde Galicia hasta Cataluña pasando por todas las viñas del norte y creo que en el sur también es así, hay una cosecha escasa. Puede haber algunas parcelas que han tenido una producción normal pero la media va a ser inferior a la de años anteriores, podemos hablar en general de una producción escasa, no extremadamente escasa, pero si menos de lo habitual.
5. ¿Cómo serán los vinos de la añada 2022? En nuestro caso, yo estoy muy contento con la añada, con las maduraciones, creo que vamos a tener unos vinos sanos, con matices limpios, claros, sin problemas de oxidaciones porque no ha existido la botritys. En algunos casos tendremos falta de acidez, pero como tenemos viñedos en zonas más altas y frescas y también hemos adelantado las fechas de vendimia, creo que hemos conseguido un balance casi perfecto también en acidez. En definitiva, tendremos unos vinos muy cualitativos.