VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DEL FORO “LOS SINDICATOS ANTE LOS DESAFÍOS DE LA TRANSPARENCIA”, CELEBRADO EL JUEVES 21 DE OCTUBRE DE 2010, EN LAS INSTALACIONES DEL INFODF. MESA 1
C. OSCAR GUERRA FORD.- Muy buenas tardes. Vamos a dar inicio al evento que tenemos programado hoy en nuestro Instituto de Acceso a la Información Pública del Distrito Federal, el evento que hemos denominado Foro “Los Sindicatos ante los Desafíos de la Transparencia”, que implica dos mesas, la que vamos a iniciar el día de hoy y otra la próxima semana, con el objeto de poder analizar, ver los diversos puntos de vista que hay sobre el asunto de la importancia de los sindicatos y cuáles son (…) que en términos de transparencia tienen estas organizaciones de la sociedad. Primero agradecerles a todos ustedes que hayan acudido a esta cita. Nos complace mucho que estén aquí en el INFODF (…) presentar a las personalidades que nos acompañan el día de hoy. En primer lugar me da mucho gusto recibir y saludar al Biólogo Raúl Pérez Ríos que actualmente es el Secretario General del Sindicato de la Unión de Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior; Raúl, sean muy bienvenido. También está con nosotros el Licenciado Arturo Alcalde Justiniani, quien es un experto laboral y ya nos ha acompañado en otros eventos aquí en el Instituto. Agradecemos su presencia. Está el Licenciado Justo Escobedo Miramontes, quien es el Director General de Administración y Desarrollo de Personal de la Oficialía Mayor del Gobierno del Distrito Federal; Licenciado, sea usted muy bienvenido. Nos acompaña también y quien ha sido el organizador y artífice de este evento, el Comisionado Jorge Bustillos, que es uno de los temas que siempre le ha apasionado y ha sido parte de la vida sindical de este país. El Comisionado Jorge Bustillos, a quien también le damos la bienvenida. Está confirmada la Diputada Lía Limón, nos acaba de mandar hace un rato un mensaje, que está por subir un punto de acuerdo a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal para llamar a que puedan comparecer los titulares de los fideicomisos del Distrito Federal pero dice que pasando el punto, que ella
considera que la sesión estará por terminar, se incorporará. Esperemos que pueda llegar a poder darnos a conocer esos puntos de vista. Vamos a iniciar, vamos a romper un poco la prestación como está. Platicábamos hace un rato con el Comisionado Jorge Bustillos, de que yo le pediría que él pudiera dar inicio a esta mesa con el objeto de que él nos pueda presentar un marco de cómo está la situación en términos de la transparencia de los sindicatos, cómo se maneja este aspecto en nuestra ley del Distrito Federal, en la ley de transparencia: cuál ha sido el ejercicio que ha habido, las solicitudes, cómo han sido estas solicitudes en términos de los sindicatos, qué categoría o cómo los concibe la ley y también algunas comparaciones a nivel de otros estados del país y de la propia federación y que con esto pueda ser el marco para que los demás expositores puedan verter sus puntos de vista sobre el particular. Si nos haces favor Jorge. C. JORGE BUSTILLOS ROQUEÑÍ.Gracias, muchas gracias por estar aquí compartiendo este tema que sí, personalmente a mí me tocó ser parte de una historia de un sindicato singular, el Sindicado Único de Trabajadores de la Industria Nuclear; un sindicato que rendía cuentas y era transparente desde que el tema de la transparenta nos asaltara en la ciudad y ahora desde esta trinchera del Instituto garante de la transparencia en el Distrito Federal, aquí nos ha interesado mucho, nos ha preocupado, las formas de incorporar esto al ámbito de ustedes, al ámbito laboral, al ámbito donde cotidianamente se encuentran. En términos generales podíamos decir que la ciudad de México ha registrado importantes avances en su construcción democrática y en el respeto a los derechos fundamentales de las personas, particularmente importantes son los avances que se han registrado en materia de transparencia. La Ciudad de México se ha colocado en esta materia en un primer lugar de una evaluación reciente que hizo el Centro de Investigaciones y Docencia Económicas; calificaron a la ciudad de México, al Distrito Federal como la entidad con mejores prácticas de transparencia del país. No obstante, no nos queda duda de que hay áreas en las que es necesario avanzar en esta vertiente y una de ellas, sin lugar a dudas, es la esfera laboral, misma que no puede quedar al margen de esta evolución. La ley de transparencia vigente en esta ciudad contiene unos primeros aportes en esa dirección, pues en ella ya se identifica a los sindicatos como sujetos obligados indirectos de la ley, al advertir que los entes públicos que les aportan recursos deben informar del uso y destino de los mismos: lo anterior es un primer paso de lo que la transparencia puede brindar en este campo.
En otros estados, por ejemplo, se han registrado otros avances importantes en materia de transparencia laboral. En algunas leyes locales de transparencia ya se considera como información pública de oficio, es decir, información que sin necesidad de que se les solicite a los entes públicos, deben de tenerla publicada en sus páginas, en sus portales de internet, los contratos colectivos, las condiciones generales de trabajo, la lista de miembros del sindicato; los montos por concepto de prestaciones económicas o en especie entregados a los sindicatos y los montos globales de cuotas entregadas a la representación sindical. En esa dirección es hacia donde debemos avanzar en el Distrito Federal. Esa es nuestra convicción. La experiencia en esos lugares nos indica que la transparencia propicia la participación y la toma de decisiones informadas por parte de los miembros de la organización sindical. La transparencia; lejos de ser un factor que atente contra su autonomía sindical, ha sido un factor que la fortalece y legitima. La transparencia gubernamental debe ser siempre un elemento respetuoso de la vida interna de los sindicatos Indirectamente, la transparencia se presenta como un elemento que puede contribuir a un sano desarrollo de la vida sindical; en algunos casos puede representar un gran reto y en otros la oportunidad que les permita estar a la vanguardia en los cambios que nuestros tiempos reclaman. La transparencia ha propiciado cambios en el comportamiento de las instancias gubernamentales. A nivel federal, por ejemplo, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje ya publica en su portal de internet los Contratos Colectivos de Trabajo, la última revisión contractual y salarial, los Reglamentos Interiores de Trabajo, los Convenios de Administración de Contratos-Ley y el número de trabajadores afiliados, pudiéndose acceder libremente a todos estos expedientes íntegros sin mayor problema. En su portal de transparencia focalizada, la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, hace público el registro de asociaciones, en el que se anexa el contenido de las tomas de nota de integrantes de Comité Ejecutivo, el padrón de afiliados y actualizaciones con nombres y apellidos, y modificaciones a los estatutos, pudiéndose acceder libremente a versiones públicas de los mismos. El Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, en su página de internet, publica un listado del Registro de Sindicatos, que contiene entre otra información, la denominación del sindicato, el número de registro, la fecha de registro, el secretario general o su equivalente, federación a la que pertenece. Pero solamente a ese listado se limita el acceso en línea.
En el Distrito Federal ha habido avances también, de hecho son las primeras expresiones de ventilar este tipo de información en internet; se dan en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, pero los avances han sido lentos. En su portal de internet sólo se puede ver el listado de contratos colectivos de trabajo, que contiene entre otros datos el número de expediente, el patrón al que corresponde, denominación del sindicato, nombre del secretario, entre otros datos. No se publica el contenido de esos documentos y para acceder a ellos la Junta solicita que los solicitantes o interesados demuestren interés jurídico para obtenerlos. Ahora bien, los entes públicos en el Distrito Federal han tenido un comportamiento diverso en la atención a solicitudes de información relacionadas con el tema sindical. De junio de 2008 a la fecha se han presentado un total de 484 solicitudes de información relativas al tema, destacando entre estos temas que se solicitan, información relativa a los Contratos Colectivos de Trabajo o las Condiciones Generales de Trabajo; integración de las Comisiones Mixtas, mecanismos de entrega de las cuotas sindicales, nombres de las personas que reciben los recursos públicos, prestaciones entregadas al personal sindicalizado, número de trabajadores sindicalizados, entre otros. De esas 484 solicitudes, han sido objetadas o recurridas o se han quejado de las respuestas en un total de 38 respuestas, lo que da un índice de recurrencia alto, a pesar de ser aparentemente pocas, el índice de queja es del 7.8, que es muy superior al que en promedio traemos en el Distrito Federal en este periodo de junio de 2008 a la fecha que oscila alrededor del 1.5 por ciento. De esos 38 casos en donde la gente se ha quejado con nosotros porque aquí se interponen los recursos de revisión, esto es las quejas sobre una información mal entregada, el INFODF, nuestro Instituto, ha formulado resoluciones en donde ha dejando en claro que cualquier ciudadano tiene derecho a acceder, sin condiciones, sin necesidad de acreditar interés jurídico, a los documentos e información pública que obran en los archivos oficiales, tanto en el ámbito del registro de asociaciones y contratos colectivos, como en el ámbito de la administración de las relaciones laborales en todos los entes públicos. Es importante señalar que actualmente en el Distrito Federal se está gestando una nueva reforma a la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Distrito Federal, en la cual se aborda el tema de la transparencia sindical.
Mediante esta iniciativa que hoy se encuentra en discusión en Comisiones, se busca incorporar a la transparencia como un elemento fundamental para el desarrollo democrático de la vida de estas organizaciones y dar a conocer los instrumentos jurídicos que dan vida. Los elementos específicos de la iniciativa se refieren a la necesidad de convertir en información de oficio a los Contratos Colectivos, al número de registro de los mismos; a las Condiciones Generales de Trabajo; la relación de los nombres de las personas sindicalizadas; montos otorgados por los entes públicos a los sindicatos, derivados de acuerdos y convenios que se celebren. Los documentos probatorios del uso y destino de los recursos públicos entregados al sindicato; uso y destino de los recursos públicos recibidos por los sindicatos; no cuotas sindicales; no se pide información sobre el uso de las cuotas sindicales. Información de la mesa directiva del sindicato, en específico el nombre y cargo de sus dirigentes, así como el periodo de su gestión; documentos oficiales que acrediten su registro oficial. Sin embargo, nosotros a esta iniciativa que conocemos porque no la han hecho conocer los diputados que están promoviéndola, consideramos que podría agregársele todavía que sea pública de oficio la información relacionada con la toma de nota, los estatutos, la relación de los nombres de las personas que se encuentran asignadas a las Comisiones Mixtas; la relación de los nombres del personal comisionado a una actividad o función dentro del sindicato, ya sea de tiempo completo o parcial. El nombre de las personas que integran la representación con la que se establecen la relación laboral; el monto global de las cuotas sindicales que son aportadas por el ente público; las percepciones adicionales que son pagadas por el ente público al personal que se encuentre en comisiones o que se desempeñen sus funciones dentro de los sindicatos. Finalmente, tratándose toda esta información de información en donde están involucrados recursos públicos únicamente, nada que tenga que ver con la vida interna del sindicato, exclusivamente; y finalmente subrayaríamos que si bien transparencia se identifica con normas, con obligaciones, con instituciones, con herramientas electrónicas para el acceso, lo más importante es entender a la transparencia como una forma de ser, como una actitud ante la vida, que debemos adoptar, particularmente en el servicio público y en todas las relaciones sociales, laborales y gremiales que envuelven a este, para construir con solidez la ética pública que reclama la población en el trabajo que desempeñamos.
Por ello, queremos invitar a los sindicatos a que hagan de la transparencia una práctica cotidiana, para que la transparencia se convierta en una forma regular de ser, como un acto de salud democrática en su seno. Y a los sindicalistas los queremos invitar a que hagan uso del derecho a la información, primeramente para tener la oportunidad de participar mejor informados en las decisiones de sus organizaciones, y en segundo término, pero no menos importante, para saber del quehacer de todas las instancias gubernamentales y de los partidos políticos en el Distrito Federal, todos ellos sujetos obligados de la Ley de Transparencia y ser parte de una nueva ciudadanía informada en construcción, la ciudadanía de la transparencia. Muchas gracias. C. OSCAR GUERRA FORD.-
Muchas gracias Comisionado Jorge Bustillos.
También saludo a la Comisionada Areli Cano que se encuentra ya con nosotros y también se ha incorporado ya a la mesa la Secretaria General del Sindicato de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Georgina Pacheco Montes, muy bienvenida Georgina. Vamos a pasar ahora con nuestros invitados. Les proponemos que podamos tener una intervención inicial de 15 minutos para escuchar a todos nuestros ponentes y después les daríamos unos tres minutos para alguna réplica de las cuestiones que se hayan mencionado por los otros panelistas y ver si hay alguien del público que quisiera realizar alguna pregunta o algún comentario sobre sus exposiciones. Voy a dar, en primer lugar, la palabra al Biólogo Raúl Pérez Ríos, que como ya lo dije, es Biólogo de la Facultad de Estudios Superiores de Iztacala de la UNAM y tiene una maestría en Pensamiento y Cultura en América Latina por la Universidad Autónoma de la Ciudad de México. Ha prestado servicios profesionales en el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica del Estado de México; ha sido asesor, investigador del Colegio Superior de Educación Integral Intercultural de Oaxaca y también ha sido capacitador electoral desde el año 2000. Ha dictado varias ponencias en materia de globalización, capitalismo y protección al ambiente. Es docente, tutor e investigador en el Instituto de Educación Media Superior del Distrito Federal, y como ya, a la hora de presentarlo es el Secretario del Sindicato de la Unión de Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior del Distrito Federal.
Biólogo Raúl Pérez, está en uso de la palabra. C. RAÚL PÉREZ RÍOS.- Muchas gracias, buenas tardes a todos. Agradecemos este espacio que se abre con este tema que para nosotros resulta muy relevante y voy a iniciar esta ponencia que hemos titulado “La transparencia como herramienta de lucha de los trabajadores del IEMS” Como bien dice Néstor de Buen Lozano: “Los trabajadores se incorporan a los sindicatos por necesidad y no por devoción”. Si no existiera la lucha de clases, si no hubiera la necesidad de defender los derechos laborales ni de mejorar las condiciones de trabajo, seguramente tampoco existirían los sindicatos. Pero, desgraciadamente, a ese mundo ideal todavía no hemos arribado. En ese sentido, como dice Mario de la Cueva, lo que “busca el movimiento sindical son las mejores condiciones de prestación de los servicios y quiere un régimen de igualdad para los trabajadores, a través del contra colectivo”. El contrato colectivo de trabajo, retomando nuevamente a Mario de la Cueva, “es el pacto que fija las condiciones de trabajo de las empresas, con la mira de elevar el nivel de vida de los trabajadores”. Sin embargo, dicho objetivo puede verse tergiversado cuando existen sindicatos que no representan verdaderamente a los trabajadores, que no defienden sus derechos laborales y que se dedican a respaldar los intereses de los patrones en aras del beneficio económico personal de los dirigentes en turno. Por ello, Svenja Blanke, representante de la Fundación Friedrich Ebert, menciona que la recuperación de la mayoría de los sindicatos como órganos representativos y defensores de los derechos de los trabajadores, es un tema pendiente y vital para la democracia mexicana. En nuestro país, la mayoría de los contratos colectivos de trabajo son pactados, como dice esta analista, “a puerta cerrada entre un patrón, un pseudo dirigente y un abogado laboralista y sirve exclusivamente a los intereses del patrón ya que evitan que un sindicato auténtico exija la representación de los derechos de los trabajadores”. A dichos contratos se les conoce como contratos colectivos de protección patronal y en la mayoría de los casos ni siquiera son conocidos por los trabajadores a los que se les aplica, lo cual no resulta nada raro si consideramos que los trabajadores que se encuentran en dicha situación tampoco conocen el nombre ni los estatutos del sindicato que supuestamente los representa y por el que les descuentan quincenalmente una cuota sindical de su salario, y nunca han visto a sus "representantes''' sindicales.
Es aquí donde el tema de la transparencia resulta importante, ya que puede constituir una herramienta de lucha para los trabajadores en contra de los contratos colectivos de protección patronal y de las familias que administran dichos contratos para intereses propios. Aunque en el Instituto de Educación Media Superior del Distrito Federal no llegamos al extremo de contar con un sindicato y un Contrato Colectivo de Trabajo, desconocido para los trabajadores, sí contamos con un contrato colectivo que hasta el momento no consigna la voluntad colectiva de la mayoría de los trabajadores al servicio del Instituto y por dicha razón podríamos considerarlo como un contrato colectivo de protección patronal. El contrato colectivo de trabajo que regula las relaciones laborales entre el IEMS y sus trabajadores se celebró el último día de labores del 2007, es decir, el viernes 14 de diciembre, con el Sindicato Independiente de Trabajadores del IEMS, un sindicato conformado formalmente por trabajadores administrativos del Instituto exclusivamente, mientras que los más de mil trabajadores académicos del IEMS luchábamos por nuestro reconocimiento laboral, ya que habíamos sido contratados bajo el régimen de honorarios desde que se creó el Instituto, por lo que no podíamos estar sujetos a las condiciones que se pactaron en ese contrato, pues ni siquiera éramos considerados como trabajadores del IEMS. Los trabajadores académicos del IEMS obtuvimos nuestro reconocimiento laboral hasta el 1 de enero del 2008, con la creación de la plaza de Docente-TutorInvestigador y la firma de un Contrato Individual de Trabajo por Tiempo Indeterminado por parte de cada uno de los trabajadores académicos que hasta el 31 de diciembre del 2007, es decir, 17 días después de la firma del contrato colectivo de trabajo, fuimos considerados como prestadores de servicios profesionales por parte de las autoridades del Instituto. Dos meses antes de que se firmara dicho contrato, el Director General del IEMS, Juventino Rodríguez Ramos, afirmó en un oficio fechado el 31 de octubre de 2007, que el Instituto estaba revisando la propuesta del contrato colectivo de trabajo del SITIEMS, exclusivamente para trabajadores administrativos. Sin embargo, cuál sería la sorpresa de los trabajadores académicos del IEMS cuando nos enteramos de que en el tabulador que los representantes del SITIEMS y las autoridades del Instituto agregaron, como Adendum al contrato colectivo de trabajo, el 20 de febrero de 2008, con el nivel, puesto y salario de los trabajadores cuyas condiciones laborales quedaron establecidas en dicho contrato también nos encontrábamos incluidos los trabajadores académicos del Instituto sin haber sido consultados y con la agravante de que la afirmación que había hecho por escrito el Director General del IEMS en aquel momento era mentira, ya que el contrato
colectivo de trabajo que firmó el SITIEMS no fue exclusivamente para trabajadores administrativos. Posteriormente nos enteraríamos de que esa no era la única mentira que había dicho el Director General del IEMS, ya que el miércoles 23 de septiembre del 2009 tuvo que presentar públicamente la renuncia a su cargo, ante la serie de irregularidades que dio a conocer el periódico La Crónica de Hoy, sobre su trayectoria académica, entre las que se encuentra la falta de sustento legal del título de Licenciatura en Historia que ostentó ante la comunidad del Instituto por más de dos años, a pesar de que únicamente cursó el primer semestre de la carrera en la Escuela Nacional de Antropología e Historia. Pero volviendo al tema de la lucha de los trabajadores del IEMS por contar con un sindicato verdaderamente representativo y defensor de los derechos de los trabajadores, el martes 03 de febrero del 2009 se llevó a cabo un recuento en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal, con la finalidad de que los trabajadores del IEMS pudiéramos definir cual de los dos sindicatos que existen actualmente en el Instituto representa a la mayoría de los trabajadores del mismo. En el recuento participaron mil 56 trabajadores al servicio del IEMS, obteniendo como resultado 699 votos a favor del SUTIEMS, el Sindicato de la Unión de Trabajadores del Instituto; 356 votos a favor del SITIEMS y un voto nulo. Con dichos resultados, el viernes 06 de marzo, las autoridades de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal emitieron un laudo en el que se declaró al SUTIEMS como titular y administrador del contrato colectivo de trabajo que rige las relaciones obrero-patronales en el IEMS. En dicho laudo también se declaró que el SITIEMS perdió el interés profesional a que se refiere el Artículo 389 de la Ley Federal del Trabajo, por lo que se le condenó a la pérdida de la titularidad y administración del contrato colectivo de trabajo a favor del SUTIEMS, y también se condenó al Instituto a reconocer al SUTIEMS como titular y administrador de su contrato colectivo de trabajo, con las consecuencias legales inherentes a partir de la fecha de notificación del laudo. Después de haberse emitido el laudo, los representantes del SITIEMS intentaron desconocer el resultado del recuento y los resolutivos del laudo a través de un amparo directo, atentando con ello contra la voluntad de la mayoría de los trabajadores del IEMS. El Presidente de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, el Licenciado Jesús Campos Linas, concedió la suspensión provisional del laudo el jueves 19 de marzo de 2009, lo cual les permitió a las autoridades del IEMS realizar la revisión salarial y contractual de ese año con los representantes del SITIEMS, la cual culminó el
lunes 30 de marzo de 2009, a pesar de que en el recuento quedó demostrado que dicho sindicato no representaba, ni representa, a la mayoría de los trabajadores del Instituto. Según José Alfonso Bouzas Ortiz y sus colaboradores, cuando los patrones escogen al sindicato que ofrece más ventajas y “paz laboral” y los convenios laborales son acordados, firmados y revisados al margen de los trabajadores, se puede decir que estamos ante un contrato colectivo de protección patronal, y eso es precisamente lo que la mayoría de los trabajadores padecimos el año pasado en el IEMS. Con el amparo provisional, el SITIEMS volvió a detentar la titularidad del contrato colectivo de trabajo del Instituto, a pesar de que no fue electo democráticamente en el recuento por la mayoría de los trabajadores del Instituto a los que supuestamente representaba. Fue hasta el día jueves 11 de junio de 2009 que el Primer Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Primer Circuito, resolvió por unanimidad, no amparar ni proteger al SITIEMS en contra del laudo anteriormente mencionado, gracias a lo cual el SUTIEMS asumió la titularidad del contrato colectivo de trabajo que existe en el Instituto. La Secretaria General del SITIEMS, Martha García Montiel, junto con otros secretarios del Comité Ejecutivo de dicho sindicato, renunciaron anticipadamente a sus cargos una semana antes de que se emitiera el resolutivo del Tribunal y desde ese momento a la fecha, los integrantes del SUTIEMS hemos realizado nuestra primera revisión salarial en mayo del presente año y ahora nos estamos preparando para realizar la revisión salarial y contractual del próximo año, con la que pretendemos que quede consignada, por primera vez, la voluntad colectiva de la mayoría de los trabajadores del Instituto en el contrato colectivo de trabajo. En el SUTIEMS sabemos muy bien que la información, la transparencia y la rendición de cuentas, así como la participación continua de los agremiados en la toma de decisiones, son elementos fundamentales para el fortalecimiento de nuestra, organización como auténtica representante de los trabajadores del Instituto. En ese sentido, los integrantes del SUTIEMS hemos establecido una estructura horizontal y representativa de todos los centros de trabajo, es decir, los planteles y área central del IEMS, tanto en el Comité Ejecutivo, como en el Consejo General de Representantes, con el agregado de que en este último órgano de gobierno del sindicato la representación se da también a nivel sectorial, es decir, existe un representante del sector de trabajadores administrativos y otro del sector de trabajadores académicos por cada centro de trabajo.
Dicha estructura es la que nos permite incorporar y promover la participación de nuestros agremiados en la toma de decisiones, así como informar, consultar, conocer y solucionar las problemáticas laborales que se presentan en los centros de trabajo. Otra de las herramientas que nos permiten informar nuestras actividades, posicionamientos, comunicados, acuerdos, convenios, así como los documentos básicos del sindicato, es decir principios y estatutos, además de los tradicionales volantes, carteles, desplegados, notas periodísticas y boletines, son las que nos brindan las redes sociales como el hi5, Facebook, twitter, el correo electrónico, YouTube y las páginas electrónicas. Hemos comenzado a incursionar en esos ámbitos para informar, no solamente a nuestros afiliados, sino también a la población en general y es indudable que todavía existe mucho camino por recorrer en aras de transparentar la vida de los sindicatos, pero sin duda, el tema de la transparencia debe plantearse como una necesidad e inclusive como una obligación que beneficiará directamente a los trabajadores sindicalizados. Eso es todo de nuestra parte, muchas gracias. C. OSCAR GUERRA FORD.- Agradecemos al Biólogo Raúl Pérez esta exposición que nos narra un poco lo que ha sido la evolución del sindicato en los últimos años y al final nos hace una referencia a un poco cual sería el posicionamiento del sindicato para transparentar información. Yo le pediría que en una segunda ronda pudieran comentar un poco la iniciativa, un poco como está la ley del Distrito Federal en términos de que son sujetos obligados indirectos, que todo recurso público que se entrega por parte de los diversos órganos de gobierno del Distrito Federal, el Ejecutivo, el Legislativo o Judicial, los órganos autónomos, tienen que rendirse cuentas a todos los ciudadanos de esa entrega de recursos. Que esa entrega es muy válida, hay que decirlo también muy claramente porque no se tiene que satanizar. Estas cuestiones están pactadas en los contratos colectivos de trabajo y simplemente es darlas a conocer a la población, y también un poco sobre estas ideas que delineaba el Comisionado Jorge Bustillos, de alguna información que pudiese publicarse en los portales. Eso todavía está en discusión y obviamente creo que en esa discusión es muy importante escuchar la opinión de los sindicatos sobre si los contratos colectivos, las tomas de nota, los afiliados, deben ser información pública el total de las cuotas. El total, en esto hay que ser muy claro, de las cuotas y que obviamente en
esa iniciativa no hay ninguna pretensión ni mucho menos, hay un respeto a la autonomía sindical, que los recursos que son generados por los agremiados es una información que es propia del sindicato y que el sindicato tiene sus mecanismos, según nos acaban de informar, de tener al tanto a sus agremiados, pero le pediría en una segunda ronda una opinión sobre estas cuestiones que suceden y las proyecciones o las iniciativas que hay sobre la misma. Voy a dar ahora la palabra a Georgina, Secretaria General de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, como les había dicho y nos gustaría escuchar su opinión, aparte es la líder de los trabajadores de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, de la fábrica de las leyes, la Ley de Transparencia ahí se fabricó y estas iniciativas que hay, me imagino que de alguna forma ya conoce y sería muy valioso su comentario, pues ellos trabajan cotidianamente con los diputados y con toda la gente que está en la Asamblea. Si nos hace favor. C. GEORGINA PACHECO MONTES.- Muchas gracias, bienvenidos todos. Es un tema bastante polémico por ser nuevo, todo lo que es nuevo siempre causa bastante discrepancia, polémica y eso es lo interesante del caso, es lo rico de estos temas. Nosotros de ninguna manera, al ser invitados a este foro de ninguna manera nos damos por aludidos, por el contrario es muy importante y es una postura de esta organización sindical que representa a los trabajadores de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Es una postura muy clara de nosotros ser partícipes de esta ley que, por supuesto, se gesta en la Asamblea Legislativa, que se le da seguimiento a través de sus órganos e instituciones y por supuesto, estamos en favor de la claridad y la rendición de cuentas. Tiene todavía esto sus bemoles, tiene algunas posturas encontradas por muchos sindicatos, que dicho sea de paso, no estamos muy bien posicionados hay una crítica severa no sólo a los sindicatos, incluso a los Diputados, a los Legisladores. Nosotros lo vemos constantemente ahí en nuestro lugar de trabajo donde obviamente siempre se percibe lo malo, siempre las cámaras enfocan hacia los Diputados cuando están emitiendo algún bostezo, no sé y siempre se saca la mala nota de los sindicatos también. Pero me parece muy relevante y muy importante que se abran estos foros y que de paso nosotros como líderes sindicales, que ahora lo somos; quienes lo van a ser a futuro también lo hagan para esta rendición de cuentas que nos parece de entrada muy interesante, tiene muchas cosas todavía que regular y por supuesto
lo va a hacer a través de nosotros mismos, los que pongamos una solicitud ante el INFODF y los que podamos servir de algo para este asunto. Vamos a emitir una propuesta, un punto de vista de todo esto y esperamos le sirva tanto al INFODF como a los que están asistiendo a este evento. En ese sentido, antes de comenzar a hablar sobre la transparencia sindical y la rendición de cuentas es menester precisar qué es y para qué se constituye un sindicato. No vamos a dar aquí una cátedra, la mayoría estamos involucrados en esto, es una pequeña reseña. Sin dar una definición jurídica entendamos por sindicato a aquella organización conformada por trabajadores que comparten ciertos criterios, tales como libertad de asociación sindical, libertad laboral, respeto entre trabajadores y patrón, respeto entre trabajadores, y desde luego, existe una comunión de ideologías. A esto se le conoce como libertad de asociación. Situación que pudo lograrse si no hasta a finales del siglo XIX y fue entonces cuando surge el derecho sindical. Esto es sólo un dato informativo, en Inglaterra 1824. Por otra parte, el objetivo por el cual se constituye un sindicato es la defensa de los intereses comunes y generales de los trabajadores, mismos que deciden unirse o agremiarse en busca del respeto y mejoras en sus condiciones laborales. En ese sentido los sindicatos representan a sus miembros en la defensa de los derechos individuales y colectivos que le correspondan. Dicho lo anterior que es muy breve, y considerando que los sindicatos se constituyen para la defensa y representación de los intereses laborales, sociales, económicos y profesionales tanto colectivos como individuales de los trabajadores. En consecuencia la rendición de cuentas sindical se ha venido convirtiendo en un factor del cual, ya sean los patrones o personas con intereses personales, llamémosle así a los sindicatos minoritarios, pretenden denostar y estigmatizar los trabajos realizados por las organizaciones sindicales. Dicho de otra forma, al no encontrar elementos jurídicos que debiliten las actuaciones de los representantes, digamos Comités Ejecutivos de los sindicatos, buscan que por medio de solicitudes de información pública -es ahí donde discrepamos un poco- incurran en contradicciones para poder ser atacados y en su momento limitar las facultades frente a los patrones.
Sindicatos minoritarios o algunas otras organizaciones para ganar terreno en la búsqueda de un poder que sólo lo otorga la mayoría de los trabajadores agremiados en una empresa o institución. Es algo a lo que se refería el biólogo. El hecho es que siempre ante una situación la última palabra la vamos a tener los propios trabajadores de base. Estamos en contra por supuesto que se imponga a un sindicato para beneficio de los patrones o las instituciones. Es importante señalar que en cuanto a la rendición de cuentas de los sindicatos, recientemente la Suprema Corte de Justicia de la Nación se ha manifestado en el sentido de que las cuotas sindicales no son ni pueden ser auditables. Es decir, que les asiste la razón y el derecho a los sindicatos de no difundir la forma de ejercer dichas cuotas. Y hago referencia en este factor ya que las solicitudes de información pública que se presentan, por lo menos ahí en la Asamblea Legislativa únicamente pretenden menoscabar las actividades realizadas por los representantes de los sindicatos pero nunca en base a la forma de ocupar los recursos provenientes, por supuesto, de las cuotas sindicales. Pero nunca se manifiestan o se preocupan por los trabajos que en representación de los propios trabajadores se realizan. Tal es el caso de las mejoras en las condiciones generales de trabajo que nosotros tenemos ese régimen y que recientemente hemos revisado. Para quien guste tener este documento, citamos la publicación y la jurisprudencia que hace la Suprema Corte de Justicia con respecto a este punto. Es importante mencionarlo, no quiere decir que por esa situación estemos en contra de la claridad y la rendición de cuentas. Si bien es cierto que les asiste el derecho a cualquier persona de obtener información pública referente a los sindicatos, también es cierto que la información que verdaderamente es importante y que se hace pública, son precisamente las actividades que en representación de los trabajadores se realizan. Lo cual no es tema de interés de los supuestos solicitantes de esta información puesto que desde que se establecen las mesas de negociación, en nuestro caso, de las condiciones generales de trabajo entre autoridades y la representación
sindical estas se hacen públicas, por lo menos en nuestra institución. Entre el patrón y el sindicato. Luego entonces la supuesta transparencia sindical, la apertura de archivos y sobre todo la rendición de cuentas no es otra cosa más que, para estos individuos que estoy comentando, de saber cuánto y cómo se ejercen los recursos económicos derivado de las aportaciones sindicales para pretender poner en evidencia los supuestos malos manejos del sindicato. Nada más es una reflexión, ojalá les interesara todo. Veo a muchos compañeros que pertenecen a alguna organización sindical y que es bastante desgastante el empeño el ahínco con el que trabajamos muchos de los que pertenecemos a un Comité y que se vea denostado únicamente por intereses bastantes banales de ciertas personas. Hay quienes manejan en su discurso que la opacidad en la información es un elemento clave para mantener un sistema de control y corrupción. Sin embargo tal situación es una farsa para simular que tienen interés de ayudar a los otros trabajadores. Lo que en verdad pretenden es salir a la luz pública como defensores sociales para ganar adeptos que en determinado momento se traduzcan, por supuesto, en votos. Pero nunca se preocupan de saber si los representantes sindicales actúan en beneficio de las relaciones laborales, de ver que se cumplan las condiciones generales de trabajo tal como se pactaron en su momento, es decir velar por que las autoridades cumplan sus compromisos en beneficio de los trabajadores sin que se entrometan en la vida interna sindical. Lo cual aparte de representar violaciones a los ordenamientos internos sindicales, el estatuto, representan afectaciones en las relaciones entre trabajador y sindicato. Si tuviéramos un verdadero estado democrático se estaría en que la transparencia no sería un fin sino un medio para ejercer de manera objetiva la toma de decisiones y no para prestarse a criterios y beneficios propios en perjuicio de la mayoría de los trabajadores. De manera reciente el Presidente del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, el licenciado Farid Barquet Rodríguez dijo que la información de las cuestiones registrales es indispensable, sobre todo para los trabajadores, precisando que no tiene justificación que se les nieguen datos sobre de quien los representa, durante cuánto tiempo, cuáles normas regulan la vida de su organización a qué sindicato
pertenecen y ese instrumento fundamental en las relaciones de trabajo que es el contrato colectivo. Aquí, igual tomo la referencia el compañero que me antecedió en donde de ninguna manera estamos en contra de que se publiquen estatutos, condiciones generales, acuerdos, si los hay y todo lo que se vaya gestando en torno a los trabajadores. Es una postura muy clara, repito, de parte de esta organización sindical en que todo esto sea la luz pública y por supuesto que seamos cuestionados en su momento si es necesario. Agradezco su amable atención y reitero nuestro compromiso como organización sindical, como dirigente sindical, a otorgar de manera profesional y seria la información pública que tienda a garantizar el proceso de democratización sindical en el que los trabajadores puedan y se comprometan a ejercer sus derechos de manera libre y sin presiones. Únicamente como comentario también, esta organización sindical tenemos una antigüedad de apenas 12 años, hemos crecido a pasos agigantados. A muchos compañeros les consta, a muchas organizaciones sindicales, cómo hemos enriquecido nuestras primeras condiciones generales de trabajo que por supuesto tuvieron su mérito y la osadía de gestar un sindicato. Recientemente, nada más como dato también, la negociación salarial que tuvimos en el mes de enero de este año, obtuvimos un incremento del siete 7.5 directo al salario. Acabamos de firmar hace 15 días las condiciones generales de trabajo que es un evento distinto de cada dos años, con un incremento aproximado de 14 por ciento a lo que ya teníamos. Esto se revisa cada dos años y en este sentido también logramos un importante avance para nuestros adultos mayores que tienen la característica de que entraron ya grandes a la institución que tiene apenas 20 años de antigüedad, también la Asamblea Legislativa, antes Asamblea de Representantes, entran con una edad adulta y por supuesto no tienen ninguna oportunidad para la jubilación ni por antigüedad ni por edad. Ahí logramos un importante acuerdo con las autoridades para renivelarlos y que tuvieran una oportunidad de retirarse decorosamente de la institución, por supuesto cuando ellos lo decidan. Esto es lo que nosotros recientemente hemos logrado y por supuesto, por estar en la casa en donde se hacen las leyes estamos de acuerdo, contamos con nuestra página web para los compañeros sindicalistas o para quien desee entrar a estos
temas de las condiciones generales de trabajo y estatutos de los trabajadores de la Asamblea Legislativa, les vamos a proporcionar el correo a quien pueda tener interés y por supuesto licenciado nos pronunciamos por la transparencia. C. OSCAR GUERRA FORD.- Agradecemos a Georgina por esta exposición y por este compromiso de hacer la información pública. Yo vuelvo a separar una parte de lo que son sus agremiados, de lo que es la vida interna. La otra de poner los contratos colectivos, las condiciones de trabajo a disposición de todos a través de un correo electrónico. Aquí lo que hemos considerado más fácil, que en vez de que se pongan solicitados por un correo electrónico que puedan estar en el propio portal de la Asamblea con el objeto de que cualquier persona interesada del público en general pueda conocer estas cuestiones que son de índole pública, no aquellas, vuelvo a repetir, que tienen que ver con la vida interna del sindicato. Pero de verdad agradecemos y apreciamos mucho este compromiso de los compañeros sindicalistas de la Asamblea con el tema de la transparencia. Ahora voy a dar la palabra al Licenciado Arturo Alcalde Justiniano quien es asesor laboral, como ya les decía, de distintas organizaciones del sector público y privado. Es autor de publicaciones en materia laboral y sindical, articulista del periódico La Jornada y titular del Despacho Asesoría Jurídica Laboral, que es un grupo de abogados dedicados a la asesoría laboral, organizativa y educativa de los sindicatos y trabajadores de base. Quiero aprovechar también para agradecer la presencia en esta sesión de diversos sindicatos, me han dicho que esta el sindicato de La Jornada, bueno representantes del sindicato de La Jornada; de otros más que no encuentro por aquí. Si no, le doy la palabra al señor Arturo Alcalde mientras lo encuentro y le damos la bienvenida a los otros compañeros sindicalistas. C. ARTURO ALCALDE JUSTINIANI.- Quiero en primer lugar felicitar al INFODF por esta convocatoria que habla de una convicción, de un interés poco común en nuestro país porque lo tradicional es que el tema laboral se le tiene horror, se le tiene miedo, se le deja fuera de las agendas. Hay una reflexión que precisamente hace la diputada Lía Limón en una iniciativa de ley, que no da tiempo de reproducirla pero que es muy valiosa, donde da cuenta de cuál es el grado de resistencia que existe en nuestro país para que el tema laboral sea tratado.
Esto sería impensable, este escenario que estamos viendo, impensable en un estado de la República que no fuera el Distrito Federal y yo diría, a nivel federal sí hay avances, pero si quitamos lo federal, el ámbito federal y el ámbito de la ciudad de México, en ningún estado de la República se toca el tema de la transparencia sindical, es tabú. Así que pueden estar ustedes muy orgullosos de estar aquí, muy orgulloso el INFODF en tocar un tema que yo diría que es un modelo para armar, y las intervenciones que hemos escuchado dan cuenta de ello. Se trata, yo diría en primer lugar, de reconocer que el tema laboral, el mundo del trabajo es esencial en nuestro país, tiene que ver con nuestra vida cotidiana, con nuestro único patrimonio que tenemos para vivir, para poder dar a nuestros hijos un futuro cierto, tiene que ver con nuestra integridad, tiene que ver con todo nuestro quehacer cotidiano. La chamba es precisamente nuestro punto de referencia en donde no solamente pasamos la mayor parte de las horas del día sino que en él trascendemos, nos frustramos o tenemos un futuro de una manera o de otra. Entonces el trabajo es importante, y el sindicalismo es un instrumento reconocido por todos los organismos internacionales, valiosísimo, como un medio de equidad, como un medio de justicia, y yo diría como un medio de concertación y la concertación, entiéndase esta condición en señales de trabajo o contrato colectivo, es el medio mediante el cual los trabajadores pueden mejorar sus condiciones de trabajo y de vida y también es un instrumento privilegiado para el diseño de las políticas públicas. Así sucede en países más desarrollados o incluso menos desarrollados que el nuestro. Lo que sucede es que, en nuestro país, el tema laboral está vinculado, en efecto, a una vieja cultura corporativa, a una vieja cultura de simulación que tendría que verse al menos en tres dimensiones: una dimensión frente al Estado, otra dimensión en el seno de los sindicatos, los líderes frente a los afiliados; y otra dimensión frente a nuestros empleadores, frente a los patrones. Creo que el tema de la transparencia es un tema fundamental, no suficiente para que tengamos sindicalismo real, sindicalismo democrático, contratación colectiva auténtica, eficaz, responsabilidad en el mundo laboral, pero sí una condición sin la cual no es posible que transitemos y avancemos en la vida democrática.
Así que el tema de la transparencia es súper estratégico y por ello tendríamos que apoyar, ver con optimismo, ver con aliento cualquier iniciativa que transite en ese sentido. El punto de partida es caótico. Uno de cada 100 trabajadores en este país está en un sindicato democrático; alrededor del 95 por ciento de los contratos colectivos son de protección; tenemos una tasa se sindicalización que se reduce a la baja a grado tal que ahora andamos entre 12, 15 por ciento, dependiendo de qué entendamos por el 100 por ciento. Yo diría que un primer esfuerzo para no enredarnos demasiado es distinguir lo público de lo privado porque una cosa son los sindicatos del sector público, otros son los del sector privado. La convocatoria, nos habla un poco en términos genéricos, aunque no cabe duda de que hay un cierto énfasis en el sector público por la propia presencia que aquí nos convoca. En lo que se refiere al sector público, en efecto, hay una lista de temas en los que tenemos que irnos entendiendo. Yo diría que esta referencia a la legislación local en materia de transparencia, particularmente al artículo 30, que nos señala de la ley local, que me parece muy valioso, que señala que toda persona moral, organización de la sociedad civil, sindicatos o cualquier otra análoga que reciban recursos públicos por cualquier concepto, exceptuando las cuotas sindicales, deberán proporcionar a los entes públicos de los que reciban la información relativa al uso, destino y actividades que realicen con tales recursos. Me parece un tema casi elemental. Que los sindicatos den información de los dineros que reciben de la población, ¿y qué información? Bueno, en primer lugar que se sepa cuánto reciben y que se sepa el destino, esto es si fue otorgado para un determinado fin, que en efecto coincida la utilización de esos recursos para ese fin, que no haya un desvío. Eso es, yo diría, elemental en términos de una rendición de cuentas frente a la población, y yo insistiría mucho a los sindicatos que tenemos que verlo con buenos ojos. Entiendo que en cada coyuntura del sindicato a veces el hecho de que si se trata de un grupo, que si es la oposición, que si se maneja de una manera o de otra, eso es absolutamente normal en un proceso como el que se está viviendo en México, donde estamos aprendiendo apenas a ser transparentes, estamos aprendiendo a establecer una metodología adecuada. Los entes están aprendiendo a brindar información y hay muchas resistencias, pero no nos podemos quedar entrampados en eso.
Yo he confirmado, por ejemplo, me decían en uno de los entes públicos, cómo una sola persona ha ocupado el mayor número de las solicitudes de información, o sea, hay abusos sin duda en el mundo de la transparencia, pero no podemos poner el mundo en manos de la gente que abusa sino que tenemos que levantar los ojos y ver que estamos ahora en un proceso, yo diría, de transición. A nivel sindical, sin duda, hay compañeros que utilizan esto para pegarle al sindicato, para llevar el agua a su molino y eso tendríamos que verlo en esa coyuntura. Pero el valor de la transparencia que es el valor finalmente del cual va a depender en buena medida la democracia y del cual va a depender la mejora de las condiciones de trabajo y de vida, lo tenemos que preservar, lo tenemos que defender, lo tenemos que fortalecer y tenemos que ir lidiando, transitando con este proceso difícil que nos obliga a identificar un conjunto de límites, y yo diría de espacios de la transparencia. Un tema que ha ocupado en el pasado una buena parte de la reflexión alrededor de la transparencia es cuál debe ser la actitud de las autoridades públicas que cuentan con información pública en sus archivos, me refiero particularmente por ejemplo a la Junta Local de Conciliación y Arbitraje frente a los contratos colectivos, el registro de asociaciones. A mí me parece que ahí debe haber una línea de transparencia prácticamente absoluta, salvo el límite de aquello que pertenezca al ámbito de lo privado, aquellas cuestiones que puedan afectar aspectos de orden particular. Contratos colectivos, absolutamente. Yo diría integralmente deberíamos exigir un acceso. Hoy en el Distrito Federal se tiene información, yo diría con índices, algunos elementos, no de toda la contratación colectiva, tenemos que dar un salto, no simplemente congratularnos con los avances importantísimos sin duda que hay en el DF pero que nos llevan de la mano a retos adicionales. Necesitamos tener contratos colectivos completos, necesitamos tener información sobre registro de asociaciones que no se tiene todavía. Hay resistencia. Cuando alguien llega a pedir información, recordemos que los funcionarios por una vieja tradición, por toda una cultura obviamente se resisten, hay muchos mecanismos para resistirse, desde un dato, desde una equivocación, desde pedirle identificación a la persona que solicite, sale corriendo, se inhibe, tiene miedo, el patrón lo puede correr, en fin. Se trata de un tema que tiene muchas aristas pero que tenemos que ir, como decíamos, armando este, yo diría maravilloso modelo de la transparencia porque los trabajadores somos los que vamos a resultar más beneficiados, los trabajadores de buena fe, los que realmente creemos en que el sindicalismo hay que fortalecerlo y sacarlo de esa condición de desprestigio y de esa ratonera a que
nos ha llevado el sistema político, que nos han llevado los empleadores, sobre todo mucho más en el sector privado porque el sector público se cuece aparte. Yo no conozco el sindicato del sector público que escondan las condiciones generales de trabajo, cuando en el sector privado lo primero es esconder el contrato colectivo, entonces no generalicemos. Mal hacemos cuando hablamos de todos los sindicatos como si todos fueran iguales y eso nos daña mucho porque entonces hay resistencia a los sindicatos y hay muchas confusiones como sucedió con la jurisprudencia a la que se hacía referencia, la jurisprudencia de la Corte relacionada con el tema de las cuotas sindicales. Lo que nos dijo la Corte y ya nos lo había dicho el INFODF desde antes, ya nos lo había dicho la ley local y este artículo del 30, claramente lo acota, salvo las cuotas sindicales. Las cuotas sindicales, es obvio, que se trata de un elemento que es distinto a los recursos que se reciben por parte del (…) se trata de recursos propios de los trabajadores. No quiere decir de manera alguna que los dirigentes no tengan obligación de rendir cuentas de las cuotas, tienen toda la obligación y la ley así lo señala. Dice no es una obligación dispensable el que la directivas deban rendir cuenta detallada de todo el patrimonio sindical que incluye las cuotas sindicales, pero la diferencia es que su obligación es frente a los afiliados, y la otra es una obligación frente a la población, propietaria de los recursos públicos que ha aportado. Yo diría que en esa línea tenemos que irnos informando para presionar una tarea que me parece fundamental, es que en los estados de la República el tema de la transparencia se empiece a airear. A mí me angustia particularmente, incluso, aquellos estados que son gobernados por partidos progresistas o de izquierda que están tan atrasados como los partidos tradicionales. Distingo DF, distingo lo federal porque también a nivel del gobierno federal ha habido avances importantes gracias a la presión y a un conjunto de criterios del IFAI que ha sido en su entorno también pionero gracias a personajes que entendieron claramente el problema desde el principio. ¿Cuáles son los factores que inhiben? Uno, yo diría el interés de preservar el control. Ese es el miedo. El miedo de un dirigente sindical cuando dice no, que no se de información es porque la magia de su control de los mecanismos que tiene para reelegirse, que es lo que está de moda, ahora que está de moda ampliar el ejercicio social.
El otro día veía que todos, yo no encontraba ni uno de los sindicatos que no hubiera ampliado el ejercicio social, que es una manera de reelegirse simuladamente. Pues tienen mucho miedo de perder el control, de perder el puesto ¿por qué? Pues porque tienen miedo de regresar a la chamba porque es muy difícil volver al lugar de origen y a esto nos tenemos que ir acostumbrando, que este control está en nuestra propia cultura, en nuestra propia mente y la opacidad es precisamente la llave para evitar que se pierda este control. El contratismo de protección patronal que señalábamos, que se da en el (…) no se da en el sector público, cuando menos (…) idénticos porque hay otra lógica, otra dinámica, otros límites que es el propio presupuesto, yo diría el temor al superior jerárquico. Cuando hablamos de tema de transparencia lo vemos muy claro en los funcionarios: la línea que opera es no muevas el agua. Yo me acuerdo, lo he visto con muchos, es que no queremos moverle el agua porque el jefe, la tendencia es que el jefe nos dice que dejemos las cosas como están. Hay mucho temor a que los trabajadores ejerzan su libertad en nuestro país. Consideran que no tenemos la capacidad para ejercer con responsabilidad, aunque habría que decir entre paréntesis que también a veces damos fundamento a esa preocupación; que no tenemos la capacidad para ejercer con libertad y responsabilidad nuestros derechos laborales. Hay problemas presupuestales. Yo diría que es muy importante que apoyemos el que existan los recursos presupuestales adecuados para que se pueda contender con todas las obligaciones en esa materia. Hay mucha falta de formación técnica, hay todavía mucha desinformación y creo que en eso el INFODF está haciendo un trabajo realmente ejemplar de estar picando piedra, como la reunión de hoy y lo hace en muchos terrenos para ir habilitando. Yo he conocido de algunos oficios de “en qué te apoyamos” no en una actitud de andar pescando a los infractores sino de ir acompañando a las entidades para que habiliten instrumentos, archivos, mecanismos, presentaciones, resúmenes; es una cosa muy compleja. Es realmente una tarea titánica el ir construyendo la información en un escenario donde existen tremendas limitaciones presupuestales, donde no hay la computadora, no hay el personal, no hay la habilitación y sobre todo existe el abuso de aquellos que dicen “yo quiero que me des mil cosas y copias de todo”, un poco por fregar o yo no sé, o por ver que (…) pero eso, bueno, ni modo, con eso hay que lidiar. Hay una, decíamos, resistencia cultural que tenemos que ir abatiendo, que tenemos que ir transformando, pero lo que diría para concluir es que los
argumentos que comúnmente se esgrimen para oponerse a la transparencia sindical, cualquier análisis serio lo destruyen. Que no debe haber transparencia porque afecta la autonomía; que no debe haber información porque se lesiona el convenio 87; que la OIT, que el Comité Expertos; nosotros hemos tenido la oportunidad de dar un cierto seguimiento en el tema y hemos confirmado que no hay ningún argumento en contra de la transparencia sindical; de ninguna manera se violenta la autonomía cuando se le pide información de los trabajadores a sus dirigentes, cuando se trata de cuotas sindicales y de las entidades del sector público a los sindicatos cuando reciben recurso públicos, estén en el contrato colectivo o no estén. Eso no me parece a mí que marque la diferencia. No nos conviene jugar con formalismos. Yo diría una cosa: en caso de duda los sindicalistas tenemos que ver las cuestiones en perspectiva. Si nosotros nos peleamos ahora con las entidades o ponemos resistencias por cosas menores, porque la oposición, porque no me gusta, porque tengo miedo, lo que estamos haciendo es sacrificando la posibilidad de que la democracia sindical avance y entonces lo que nos sucede es que los pocos sindicatos democráticos que existen somos mal vistos porque estamos sufriendo una competencia desleal. Estamos compitiendo con sindicatos blancos, con sindicatos charros, con sindicatos controlados que venden la fuerza de trabajo baratísima y que frente a nosotros parecemos caros porque cobramos un salario medio digno y entonces comparado con uno que no cobra nada parecemos caros, parecemos rígidos y parecemos que somos unos abusones porque nos comparan con aquél que no tiene absolutamente nada. Tendremos pues que convertir a la transparencia en un aliado. Tenemos que ser promotores de la transparencia si es que queremos que el sindicalismo se recupere, si es que queremos realmente que los hombres y mujeres que trabajan, que son la mayoría de este país podamos en serio y no como dicen los slogans “vivir mejor”. Muchas gracias. C. OSCAR GUERRA FORD.- Agradecemos la interesante intervención y los diversos conceptos que han sido utilizados y que estarán muy bien para el análisis y el debate y en su momento poder mejorar la legislación en términos de la transparencia sindical. Quiero agradecer la presencia de diversos compañeros de diversos sindicatos. Está el Sindicato de Servidores Públicos de la ciudad de México, está la Alianza Tranvial
de México; del Sindicato de PEMEX; bueno no es sindicato pero también hay gente del IFAI; del sindicato al cual yo pertenezco al APAUNAM, gracias por estar acá. También el sindicato de Notimex; del sindicato de Radio Educación; de la UAM Xochimilco; de la Facultad de Economía, aunque no hay sindicato, un consejero universitario, gracias por estar aquí. Del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, el SITRAJOR también y principalmente son los compañeros. De verdad muchas, muchas gracias por estar presentes en este primera sesión sobre sindicatos y transparencia. Voy a dar la palabra a nuestro último ponente porque nos han avisado hace un rato a que la Diputada Lía Limón le va a ser imposible llegar a esta sesión. Ojalá nos pueda acompañar en la próxima de la siguiente semana para estar aquí presentes. Le voy a dar la palabra a quien ya habíamos presentado, el Licenciado Justo Escobedo Miramontes. Él es Licenciado en Derecho por la Universidad La Salle y tiene un diplomado en Gobierno y Administración Metropolitana y Regional por el Instituto Nacional de Administración Pública. Dentro del gobierno del Distrito Federal ha desempeñado los cargos de Director General para el mejoramiento Integral del Centro Histórico, también ha estado en la Secretaría de Seguridad Pública; ha sido dos veces Director General Jurídico y Gobierno de la delegación Miguel Hidalgo; ha sido Subdelegado de Desarrollo Urbano y Subdelegado Jurídico del gobierno de la delegación Iztacalco. En el gobierno federal también ha colaborado en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de Trabajadores del Estado, el ISSSTE, como Subdelegado de la zona norte de administración y en la Contraloría Interna de la entonces Secretaría de Energía, Minas e Industria Paraestatal como Subdirector de Industria Paraestatal y Transformación. Y actualmente como ya lo presentamos, es el Director General de Administración y Desarrollo del Personal de la Oficialía Mayor del gobierno del Distrito Federal. Licenciado Escobedo tiene usted la palabra. C. JUSTO ESCOBEDO MIRAMONTES.- Muchas gracias. Buenas tardes a todos ustedes. A nombre de Adrián Michel Espino, Oficial Mayor del gobierno del Distrito Federal, agradezco la invitación del Instituto de Acceso a la Información Pública del Distrito Federal para compartir con ustedes este espacio en el foro denominado “Los sindicatos ante los desafíos de la transparencia”.
Aprovecho también para felicitar a los compañeros panelistas que me han antecedido en el uso de la palabra por sus exposiciones, que creo que son muy enriquecedoras, y doy inicio a esta breve exposición resaltando la acertada labor que ha emprendido este Instituto desde su creación, en la promoción, capacitación y en su ejercicio cotidiano de garantizar la transparencia en el manejo de la información y en el ejercicio de los recursos públicos por parte de los entes sujetos a las disposiciones de la ley de la materia. Para efectos del tema que nos reúne el día de hoy, entendamos la transparencia como un sistema integral que permite a los ciudadanos conocer las actividades que realizan los entes públicos así como el destino de los recursos públicos que tienen asignados, sin mayores requisitos que los que establece la propia ley. Es importante considerar que, en la medida en que esta información esté a disposición de la ciudadanía, los entes públicos estarán comprometidos a eficientar su actuación, por lo tanto, gozarán de mayor credibilidad, sobre todo en estos tiempos en que la población exige que las instituciones llevar a cabo los fines para los cuales fueron creadas y que lo hagan bien. Históricamente, es innegable el papel fundamental que han jugado los sindicatos en los momentos cruciales del desarrollo de México. A manera de ejemplo se pueden citar los conflictos ocurridos en Cananea y Río Blanco en los inicios del siglo pasado, y que fueron eventos trascendentes para detonar la Revolución de 1910, cuyo centenario estamos próximos a celebrar. Durante este periodo, los sindicatos fueron protagonistas de muchos cambios en la vida nacional, y cuya participación se vio reflejada en la Constitución de 1917, que fue la primera a nivel mundial que garantizó derechos sociales, entre ellos el de libre asociación de los trabajadores para defensa de sus intereses laborales. Más adelante, durante la reconstrucción del país, se consolidó la formación de sindicatos, lo que permitió que las organizaciones de trabajadores coadyuvaran para el fortalecimiento de las instituciones, así como en el desarrollo y la modernización de nuestra nación. En la actualidad, la percepción ciudadana respecto de la actuación de las autoridades en términos generales, así como de las organizaciones públicas y privadas, es que todas se mueven dentro de un círculo de opacidad. Basta echar un vistazo, como bien decía nuestra compañera Georgina Pacheco al inicio de su intervención, basta echar un vistazo a los encabezados de los medios de comunicación para darnos cuenta de la opinión pública poco favorable. Las organizaciones sindicales obviamente no escapan a esta crítica, por lo que, al igual que todas las instituciones, necesitan sumarse a un proceso de reflexión
autocrítica para fortalecer su vida interna, bajo nuevos esquemas de desarrollo que contemplen la transparencia de sus acciones y poder revertir la percepción adversa, recuperando así la credibilidad en la misión que tienen como auténticos defensores de los legítimos intereses de los trabajadores, sobre todo en estos momentos de crisis globalizada que requiere de un esfuerzo general para el mantenimiento y la creación de fuentes de empleo. En el caso concreto de los sindicatos vinculados con la administración pública del Distrito Federal, el Artículo 4° Fracción V de la Ley de Transparencia local, los considera como entes públicos, y por consecuencia, están obligados a dar cumplimiento a sus disposiciones. Cabe señalar que el artículo 30 de la propia ley, es el único precepto que establece una obligación para los sindicatos y que se traduce en que deben rendir informe a los entes de los que reciben recursos públicos, relativo al uso, destino y actividades que se realicen con dichos recursos. Por otra parte, el Artículo 93 de la Ley de Transparencia, contempla lo que se debe considerar como infracciones a la ley en comento, y que éstas serán sancionadas en los términos de la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos. Hasta aquí, todos son los preceptos que la ley de los que hacen referencia a los sindicatos. Como podemos observar, son pocas las alusiones que el texto de la ley hace respecto de los sindicatos, y aunque pareciera que son suficientes para dejar claro cuales son sus obligaciones, en la práctica se presenta una evidente dificultad para que se cumplan, ya que existe contradicción con otras disposiciones legales de la más diversa jerarquía y que a continuación voy a enunciar. Uno: el Articulo 6 Constitucional no contempla como pública la información que se encuentre en posesión de los sindicatos. Efectivamente, la Fracción I de este Artículo Constitucional, determina como pública la información que se encuentre en posesión de cualquier autoridad, entidad, órgano u organismo, federal, estatal o municipal, y es contundente que los sindicatos no son autoridades, entidades ni organismos públicos federales, estatales o municipales. Dos, el Convenio 87, al que hacía referencia nuestro compañero Arturo Alcalde, de la Organización Internacional del Trabajo sobre la libertad sindical y el derecho de sindicación, firmado por el Presidente de la República y ratificado por el Senado en su momento, el cual entró en vigor el 7 de abril de 1950, y que continúa vigente, establece en su artículo 3, entre otras cosas, el derecho de los sindicatos para
organizar su administración y sus actividades, además de protegerlos de cualquier intromisión de las autoridades administrativas, que tienda a limitar sus derechos o a entorpecer su ejercicio. Tres, tanto la Ley Federal del Trabajo, como la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado, que emanan del Artículo 123 Constitucional, establecen, entre otras cosas, en sus Artículos 359 y 72, respectivamente, que los sindicatos tienen derecho a organizar su administración y sus actividades. Cuatro, la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido diversas jurisprudencias y criterios, en los cuales ha determinado que los convenios internacionales debidamente firmados por el Presidente de la República y ratificados por el Senado, tienen una jerarquía inmediata inferior a la Constitución y superior a las leyes federales y, por consecuencia, de las leyes locales. A manera de ejemplo cito dos tesis jurisprudenciales, que son la número: P.LXXVII/99.A., emitida en noviembre de 1999, cuyo rubro es Tratados Internacionales. Se ubican jerárquicamente por encima de las leyes federales y en un segundo plano respecto de la constitución federal. La siguiente tesis que es la P.IX/2007, emitida en el mes de abril de 2007, cuyo rubro es Tratados Internacionales. Son parte integrante de la Ley Suprema de la Unión y se ubican jerárquicamente por encima de las leyes generales, tanto federales como locales y esta es una interpretación del Artículo 133 Constitucional. Ante esta situación, es factible considerar que el ejercicio de la transparencia en los sindicatos presenta algunas disyuntivas y dificulta a los entes públicos dar cabal cumplimiento a las disposiciones de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Distrito Federal. Parece ser que se está convirtiendo en una práctica cada vez más frecuente, el que algunos sindicatos, refiero, algunos sindicatos vinculados con la administración pública, tanto federal como local, promuevan juicios de amparo en contra de las resoluciones emitidas por los Institutos de Acceso a la Información, en las que se obliga al ente público a proporcionar información que obra en posesión de las organizaciones sindicales y más cuando se trata de información de carácter financiero. La mecánica que nosotros hemos observado es la siguiente: Se dicta una resolución del instituto garante de la transparencia, me refiero a cualquier instituto, puede ser este, el federal o cualquiera de los locales, repito, se dicta una resolución en donde se requiere a un ente público, al que sea, que realice las gestiones necesarias para obtener información que obra en poder del sindicato respectivo.
El ente público, a fin de dar cumplimiento al requerimiento, solicita la información a dicho sindicato; al recibir la solicitud, el sindicato se hace conocedor de la existencia de una resolución que afecta su esfera de administración y promueve un juicio de amparo, señalando como actos reclamados la solicitud en comento, así como la existencia de una resolución que lo obliga a dar información de su patrimonio o algún otro rubro de su administración. Los argumentos que comúnmente se hacen valer en estos juicios de amparo son los siguientes: que de acuerdo al Artículo 6° Fracción I de la Constitución, su información interna no es pública; que el Convenio 87 de la OIT le garantiza el derecho a decidir libremente, entre otras cosas, su forma de administración, y que lo protege de alguna intromisión en su vida interna por parte de cualquier autoridad administrativa, invocando la jerarquía jurídica que ya ha sido comentada respecto a este tratado internacional ampliamente. Que la resolución violenta los derechos sindicales estipulados por los Artículos 359 de la Ley Federal del Trabajo ó 72 de la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado, dependiendo si el sindicato se encuentra dentro del apartado “A” ó del apartado “B” del Artículo 123 Constitucional. Que, generalmente no son emplazados a los procedimientos de recursos de revisión por el instituto garante de la información, por lo que se viola su garantía de audiencia; en caso de información relativa a recursos económicos, el sindicato argumenta adicionalmente que, si bien recibió recursos del ente público, desde el momento en que los recibe la organización sindical, pasan a formar parte de su patrimonio y que por ende, dejan de ser públicos. Es importante mencionar que va en aumento el número de casos en que los sindicatos obtienen sentencias favorables. En conclusión, todo lo que he manifestado en esta breve exposición, nos lleva a reflexionar sobre la pertinencia de revisar el marco jurídico vigente del sistema de transparencia para adecuar las normas que sean necesarias y hacerlas congruentes para que se pueda lograr el objetivo primordial de que la población acceda a la información pública y de esta manera fortalecer la vida democrática nacional, correspondiendo esta tarea al Poder Legislativo, ya que de permanecer así las cosas, seguirá siendo el Poder Judicial quien resuelva este tipo de problemas. Para cerrar, podemos resumir todo en tres planteamientos: Primero, la existencia o por lo menos lo que argumentan algunos sindicatos, de contradicción de leyes; segundo, la existencia de derechos a los cuales se están acogiendo los sindicatos haciéndolos valer por la vía del amparo; y tercero, la falta de sanciones para las
organizaciones sindicales cuando no cumplen los requerimientos de información, ya que como se mencionó en un principio, el Artículo 93 de la Ley de Transparencia nos remite a la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos, y el dilema está en si podemos o no considerar a los sindicatos sujetos a dicha ley y más aún si podemos o no considerar a sus miembros, en el ejercicio de sus actividades sindicales, como servidores públicos para efectos de sanciones, independientemente de que los miembros de un sindicato sean empleados públicos. Hasta ahí mi intervención, les agradezco su atención. Muchas gracias.