Diario Versión Final

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Maracaibo, miércoles, 22 de octubre de 2008 FARÁNDULA VERSIÓN FINAL 29

Sindy Lazo conversó con VERSIÓN FINAL sobre su personaje y su vida

“Soy una mujer muy soñadora” Conversó sobre su papel en ¿Vieja yo? y habló sobre la experiencia que le deja ser la hija de una de las actrices más reconocidas de Venezuela. Andreína Gil (LUZ 2008) andreina@versionfinal.com.ve

L

a joven actriz interpreta a Milagritos en la novela estelar de Venevisión ¿Vieja yo? Es la hermana de la villana Estefanía, y carece de personalidad. En la vida real es una joven luchadora que no es nada parecida a sus personajes. Se describe como una muchacha tranquila que sueña con tener un hogar y una familia. Agradece a su madre haber tenido una infancia rodeada de grandes figuras artísticas y confiesa que quiere vivir de la actuación. −¿Cómo es el personaje que interpreta en ¿Vieja yo? −Milagritos es una muchacha que está muy sola y tiene carencia de cariño, aún no se ha encontrado y no ha descubierto qué es lo que quiere de la vida y cuál es su talento. Entonces cuando quiere algo lo que hace es copiar a la persona que lo tiene y deja de ser realmente ella. −¿Tienes algo en común con el personaje? −Puede ser que ambas somos inseguras, de repente es la inseguridad que tiene todo el mundo, pero pienso mucho las cosas, le doy vuelta y vuelta a la cabeza y cuando hago algo pienso si estará bien o mal. De resto no quiero parecerme mucho. −¿De qué forma ha influenciado en su vida ser la hija de Mimí Lazo? −Me ha favorecido en lo personal. Yo tuve una infancia muy bonita, estuve rodeada de gente que respeto y admiro muchísimo. Crecer al lado de César Miguel Rondón, Leonardo Padrón o José Ignacio Cabrujas es un privilegio. En lo profesional no me ha dado ni me ha quitado. Tuve la suerte de entrar a trabajar en televisión por un casting y por un productor maravilloso que se llama Alberto Giarroco que confió en mí y me dio un papelito pequeño y, poco a poco, se han dado las cosas. −Ya es la segunda novela en la que trabaja con su mamá. ¿Cómo es esa experiencia? −Por un lado es maravilloso porque a mi mamá yo la admiro muchísimo, como actriz y la respeto, pero claro es mi mamá ante todo y no deja de serlo nunca. Entonces por un lado está constantemente siendo mamá, como que no descansa. Sin embargo, para mí representa un placer trabajar a su lado.

−¿En que momento sintió la necesidad de ser actriz? −Yo siempre supe que iba a trabajar con algo que tuviera que ver con esto y pensé que me iría por el lado de la producción. Soy virgo y me gusta se organizada y estar todo el día anotando en una agenda. Siempre estuve ayudando a mi mamá. Luego me fui a los Estados Unidos a estudiar producción y conocí a una actriz colombiana que se llama Angie Cepeda, que estaba haciendo un curso allá, y un día decidí tomar clases con ella para probar como era la cosa. La primera vez que me monté en el escenario hice un monólogo pequeño, y el profesor me dijo: “A tí nadie te va a bajar de un escenario más nunca”. Yo me reí en ese entonces, pero pues, tenía razón, descubrí que eso era lo que quería hacer con mi vida, y bueno, aquí estoy, tratando. −¿Cómo es Sindy Lazo en la vida real? −Soy una mujer muy soñadora y me ilusiono muy fácilmente. Siempre he querido tener mi casa con mi esposo porque me gusta estar en casa, me gusta lavar y me gusta cocinar y hasta tengo un jardincito. Realmente no me parezco a los personajes que hago. Tengo momentos en los que soy habladora y amiga de todo el mundo, pero me gusta estar sola, en mi casa y tranquila. Soy muy estricta y maniática. Soy muy tranquila, cuando la gente me conoce se lleva una sorpresa y me da mucha risa porque no soy como la gente cree que soy. Yo no ando en una fiesta ni en una rumba todo el día, nada que ver. −¿A quién admira realmente en el mundo de la actuación? −Admiro mucho a Elba Escobar. De la gente joven a Danielita Alvarado, Marisa Román, Ámbar Díaz y Chantal Baudaux. Cada una tiene algo que me gusta. Chantal por ejemplo tiene una capacidad increíble para llorar. Cuando dicen acción y hace la escena uno se la cree y llora con ella. −¿Hasta dónde le gustaría llegar? −Quiero seguir trabajando y espero hacerlo toda mi vida. De verdad esto es lo que a mí me gusta hacer. También quiero hacer cine, aún no he hecho cine, hice una participación muy pequeña el año pasado en una película que aún no ha salido, pero eso me encantaría, quiero hacer más teatro, y por supuesto televisión. Es una cosa mágica de verdad. −¿Tiene planes o nuevos proyectos? -Hay un proyecto por allí para televisión con Roque Valero que quiero hacer, pero no quiero decir más nada. Vamos a ver. −¿Hay alguna caracterización que quiera hacer? −Hay una obra de teatro que se llama “A 2,50 la Cuba Libre”, que se hizo hace muchísimo tiempo y existe la posibilidad de

volverla a montar en teatro el año que viene. Eso me tiene súper emocionada y súper contenta. Ojalá se dé porque es algo totalmente distinto. Los personajes son cinco mujeres de la mala vida, cinco prostitutas, y hay posibilidad de hacerla con Carlota Sosa, y estoy muy ilusionada con eso. −¿Cuál es el sueño anhelado de Sindy Lazo? −Lo primero que se me viene a la cabeza es tener un bebé, pero no ahorita. Como te dije, siempre he querido tener mi casita con mi esposito y mis hijitos, pero ahorita estoy dedicada a mi trabajo y el sueño de estos momentos es seguir trabajando, y que la gente me siga dando la oportunidad de hacer esto porque es lo que quiero hacer y de lo que quiero vivir.

SOBRE SU TRABAJO Estudió producción en Los Ángeles y al poco tiempo se cambió a estudiar actuación en el colegio Eric Morris. Participó en las obras teatrales “Cenicienta”, “Amanecí con ganas de morirme” y “Secreto a voces”. Su primer trabajo en televisión fue en la serie “Con toda el alma” y luego interpretó a Cristinita en la novela “Voltea Pa que te enamores”. Hoy es Milagritos en ¿Vieja yo?


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