del 23 al 29 de enero
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Actualidad La pluma y el clavel Antonio Criado
La raya de tiza. En el suelo de nuestra Utrera Leía yo días atrás una frase que me gustaba tal cual sonaba, si bien claro, el papel es tan dócil y el lápiz tan manejable que a veces, sólo a veces, no todo es como parece. Antonio Criado. Ando yo estos días bastante ajetreado de un sitio para otro y ya a uno le pesan los años y las preocupaciones. Esperanza me lo dice, ¡para Antonio, para que te va a dar algo! ¿Pero cómo parar, cómo acomodarse cerrando los ojos a la injusticia y a las cazicada despótica de gente que por agradar a sus jefes, a los que mandan y por ganar espacios, son capaces de todo, hasta de engañar a los que son sus compañeros de viaje? Sí, me refiero a esos que van contando y proponiendo cosas a los demás, que para nada se corresponden con lo que después hacen en su casa y en su día a día. En los pocos días que estoy por Utrera, la mañana del martes que acudo a la radio y las noches, que regreso más bien tarde. Más cuando puedo escaparme, salgo a tomarme un café y hablo con algunos amigos que me recuerdan que tengo un compromiso y que no valen excusas. “No, esta vez no, esta vez has de cumplir, pero como cumplir, si sé que yo no valgo, si yo no puedo tragarme cosas con las que no estoy de acuerdo, y el corazón me comienza a bombear sangre que me ahoga, se me nubla la vista y salto por los aires de Úbeda, arruinando los consejos que me da ese buen amigo y consejero que tengo a mi lado y que sólo quiere para mí lo mejor. Gracias amigo, no te enfades conmigo pero no puedo ser de otra manera, lo siento, o mejor ¡¡me alegro!!” Me llamaban esta semana para el cara a cara en la radio y el tema era la metedura de pata de la señora Nebreda, ésa que afi rmaba que el acento de los Andaluces es de chiste; que pudo rectificar y decir que el chiste era la gestión de la señora ministra Magdalena Álvarez, pero no, siguió insistiendo sobre tonos, acentos y demás tópicos al uso. Señora Nebreda, por favor, deje usted a lo Andaluz en paz y rebusque usted en la historia, que no le costará mucho el encontrar sobre la importancia de lo Andaluz en la cultura, no sólo en Andalucía, que también en España y el resto del Mundo. Mire usted, yo sólo les pido a los políticos el que sean buenos políticos, buenos gestores y honrados a carta cabal. Lo demás me la trae al pairo, si es feo habla mal o es morenito, ¡gestión señora, gestión!, y déjese usted de aplicar pandereta y faralaes recordando tiempos mejores, para usted claro está. Me hacían días atrás una pregunta maliciosa e interesada; me preguntaban sobre cuántos años estaría don Francisco Jiménez de Alcalde en Utrera, ¿Tú qué dices Antonio? Pues yo contesté: estoy seguro que Curro será fiel a su palabra y estará hasta el año 2011. Yo creo a las personas y a mí me lo dijo en cierta ocasión; después escuché como se lo decía otros, “yo estaré sólo dos mandatos”. Yo tengo a Curro por un hombre serio y soy de los que creen que cumplirá. La charla siguió animada e intercambiando datos, maldades y .esas cosas que se suelen decir cuando nadie te ve. Ahora después de meditar tranquilamente lo escuchado, yo si estoy de acuerdo en algo que se dijo ¿¿tras Curro qué?? ¿Hay partido, hay recambio? La aventura de liderar un partido Andaluz fuerte y creíble fracasó. Cuatro años sin estar en las instituciones les pasará factura y no podrán aguantar estructuralmente campaña alguna, al menos sin replantear antes una refundación ideológica y de alianzas. Para terminar no quiero pasar por alto la inmoralidad que para mi supone el distraer 600.000€ del dinero público, oséase de todos los ciudadanos, para enterrarlos en una plaza donde se torturarán animales. Quiero recordar que la inmensa mayoría de los ciudadanos no está por esa cruel afición, que respeto el que tenga sus adeptos, pero por favor, que se costeen ellos sus aficiones. Con esos 600.000€, una guardería pública, que eso si es dar servicio a los utreranos.
Detenida una banda especialista en robar fruta Se han recuperado 3.000 kilos de mandarinas UTRERAYA Agentes de la Guardia Civil han desmantelado una red que se dedicaba de forma “profesional y especializada” al robo de frutas. La Guardia Civil de Cantillana ante el frecuente hurto de naranjas que se venía produciendo en la comarca de la Vega, establece un dispositivo específico para evitar los estos robos. En uno de estos servicios los guardias observan a cuatro vehículos todo terrenos que podían estar dedicándose a esta actividad ilícita.
Cuando estas personas salen de la citada finca el primero de los vehículos se da a la fuga y el resto de vehículos de la caravana, que circulaban a distancia, huyen por caminos adyacentes. Uno de los vehículos es interceptado cerca de Brenes. Otro de los vehículos es interceptado a la entrada de El Vacie (Sevilla) por una patrulla del Cuerpo Nacional de Policía. Por último se detiene a otro de los vehículos con dos ocupantes en una urbanización de Carmona. Por estos hechos
se detiene a cuatro personas A.F.F., P.A.F.S., J.S.F y P.F.S. vecinos de la barriada de el Vacie (Sevilla) por un delito de hurto y son puestos a disposición judicial. La Guardia Civil continúa trabajando para esclarecer más robos en la zona en la que podía haber intervenido esta banda. MODUS OPERANDI La red estaba provista de vehículos todo terreno y realizaba los hurtos según temporada. Entraban en la finca al mediodía, cuando el personal se encuentra comiendo. Actuaban
de forma rápida, llenando los vehículos en una media hora. A la hora de salir un vehículo hacía de lanzadera, circulando a bastantes metros del resto, de modo que si era parado los otros podían escaparse por otros caminos. Un conocimiento exhaustivo de la zona en la que cometían los robos, hacía que su huida no fuera descubierta. La fruta la llevaban a sus domicilios y posteriormente era vendida de forma ambulante por la ciudad de Sevilla y poblaciones cercanas.
Cerrados 2 puntos de venta de droga en Cantillana Se desplazaban para la venta, bajo demanda UTRERAYA Agentes de la Guardia Civil del Puesto de Cantillana han detenido a cuatro individuos como supuestos autores de delitos contra la salud pública. El análisis de los datos que la Guardia Civil de Cantillana obtiene a raíz de los servicios prestados en su demarcación, levanta las sospechas de los agentes sobre la posible instalación de fuentes de suministro estables de cocaína en la zona, rutas o métodos tendentes a burlar la vigilancia de los agentes. En una zona de la localidad de Cantillana, se detecta un mo-
vimiento de personas y vehículos no residentes, y un aumento signifi cativo los fi nes de semana de dicha circulación que, dado el escaso interés turístico de la zona, que a criterio de los guardias civiles es sospechoso. Estas sospechas focalizadas en la zona a través de un dispositivo de vigilancia con patrullas uniformadas y, a veces, con apoyo de la Policía Local, variando lugares y horarios, permiten localizar el domicilio del supuesto vendedor, su identidad y el vehículo empleado. En un desplazamiento de este individuo que es controlado por
agentes se decide intervenir y se intercepta el vehículo entre Cantillana y Villaverde del Río, permitiendo a los agentes intervenir un total de 28 papelinas, motivo por el que es detenido B.M.P. de 31 años y vecino de Cantillana por un delito contra la salud pública, incautada y puesta a disposición judicial junto con el detenido, la droga, el dinero obtenido de la venta y el vehículo utilizado. Por este operativo, también se obtienen datos sobre posible venta de cocaína en bares de Cantillana que agentes de paisano investigan sobre el
terreno, resultando del mismo, no un domicilio sino la localización de tres individuos que se mueven juntos y en torno a la zona de movida. La Guardia Civil los controla a través de puntos de verifi cación cambiantes, siendo interceptados portando un paquete de cigarrillos vacío con 28 papelinas, motivo por los son detenidos B.M.P de 20 años, D.C.D de 24 años y vecinos de Cantillana y un tercero menor de edad por un delito contra la salud pública. En el domicilio de uno de ellos, además, escondían 20 gramos más de cocaína en roca.