Al vuelo de la celebración de
Huyó lo que era firme, y solamente lo fugitivo permanece y dura. Q uevedo
Claudio Rodríguez
Ilustra, Daniela Cuéllar
And death shall have no dominión Dylan Thom as
Los poetas que vuelan alto se resisten naturalm ente al com entario, que con hum ildad y denuedo debe sin em bargo intentarse. A sí San Juan de la Cruz, Rilke o Eliot. Y el zam orano-m adrileño Claudio Rodríguez es pájaro de esos niveles, hun dido y elevado por esas ínsu las extrañas. O tras huellas profundas, y casi borradas por el viento rasante de las palabras propias del singular autor, serían las de Fray Luis de León, las de Ezra Pound y W ordsw orth, las de Juan Ram ón Jim énez, John Keats y Rim baud, Coleridge o Aleixandre. A lgunas constantes podrían rastrearse bajo esos nom bres dispares y otros tan sem ejantes.